3
UN POCO DE HISTORIA Durante la 2ª guerra mundial na- ció un nuevo concepto de vehícu- lo, el todoterreno. Los americanos sacaron a escena el Jeep Willys, que en su momento, fue conside- rado por el General Marshall co- mo “la mayor contribución de los EEUU a las operaciones de guerra modernas”. Un vehículo totalmen- te polivalente, que se utilizó para infinidad de menesteres. Con el desembarco de las tro- pas estadounidenses en Europa, llegó una notable cantidad de ve- hículos, pero el que destacó por su maniobrabilidad y multitud de usos fue precisamente el más pe- queño de los recién llegados. Ello no pasó inadvertido por los euro- peos, quedando tras el conflicto una buena cantidad de unidades a formar parte del parque automovi- lístico europeo. Una de esas unidades acabó en tierras galesas, en manos de los hermanos Wilks, directivos de la empresa Rover. Le tenían un ca- riño especial a su Jeep, ya que con él podían hacer innumerables excursiones con la familia y llegar con rapidez a los rincones más re- buscados de su isla, a pesar de que por las constantes averías y la escasez de piezas de recambio les impedía poder disfrutar más de su Jeep. Por ello, decidieron fabricar en tierras británicas su propia versión del vehículo, aun- que al estar en la postguerra, no era fácil conseguir los materiales y el apoyo para el proyecto, pero si podían demostrar que con la pro- ducción, venta y exportación de su todoterreno, podían entrar di- visas al país, la cosa sería mucho más sencilla de llevarse a cabo. Estamos ya en 1947, y se prepa- ra todo para poder enseñarlo en el Salón del Automóvil de Amsterdam de 1948, que es cuando se presen- tó un vehículo que revolucionaría el mundo de las cuatro ruedas, ha- bía nacido el Land Rover. Empezaron unas campañas pu- blicitarias por el Reino Unido Land Rover Serie I de El Palau del Tren (Slot Collection) PRESENTACIÓN Más Slot 0990 Más Slot 0991

land rover s1 guardia civil.pdf

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: land rover s1 guardia civil.pdf

Un poco de historiaDurante la 2ª guerra mundial na-ció un nuevo concepto de vehícu-lo, el todoterreno. Los americanos sacaron a escena el Jeep Willys, que en su momento, fue conside-rado por el General Marshall co-mo “la mayor contribución de los EEUU a las operaciones de guerra modernas”. Un vehículo totalmen-te polivalente, que se utilizó para infinidad de menesteres.

Con el desembarco de las tro-pas estadounidenses en Europa, llegó una notable cantidad de ve-hículos, pero el que destacó por su maniobrabilidad y multitud de usos fue precisamente el más pe-queño de los recién llegados. Ello no pasó inadvertido por los euro-peos, quedando tras el conflicto una buena cantidad de unidades a formar parte del parque automovi-lístico europeo.

Una de esas unidades acabó en tierras galesas, en manos de los hermanos Wilks, directivos de la empresa Rover. Le tenían un ca-

riño especial a su Jeep, ya que con él podían hacer innumerables excursiones con la familia y llegar con rapidez a los rincones más re-buscados de su isla, a pesar de que por las constantes averías y la escasez de piezas de recambio les impedía poder disfrutar más de su Jeep. Por ello, decidieron fabricar en tierras británicas su propia versión del vehículo, aun-que al estar en la postguerra, no era fácil conseguir los materiales y el apoyo para el proyecto, pero si podían demostrar que con la pro-ducción, venta y exportación de su todoterreno, podían entrar di-visas al país, la cosa sería mucho más sencilla de llevarse a cabo.

Estamos ya en 1947, y se prepa-ra todo para poder enseñarlo en el Salón del Automóvil de Amsterdam de 1948, que es cuando se presen-tó un vehículo que revolucionaría el mundo de las cuatro ruedas, ha-bía nacido el Land Rover.

Empezaron unas campañas pu-blicitarias por el Reino Unido

Land rover serie i de El Palau del Tren (Slot Collection)

presentaciÓn

Más Slot0990 Más Slot0991

Page 2: land rover s1 guardia civil.pdf

dando a conocer el vehículo, pre-sentándolo como el sustituto al caballo para los trabajos agríco-las, para el transporte de personas e infinidad de otros usos, llegando pedidos de todos los rincones del mundo, en especial de ejércitos y cuerpos de seguridad.

España no fue una excepción, y tanto el ejército como los cuerpos de seguridad del Estado se dieron cuenta de la infinidad de posibili-dades que les brindaba ese pecu-liar automóvil, así que no tardaron en hacer sus primeros pedidos.

En el caso de la Guardia Civil, las primeras unidades llegadas de Inglaterra se mantuvieron en el mismo color verde que salía de la fábrica, incorporando únicamente las insignias y matrículas para ser reconocidos como vehículos de la benemérita. Una revolución sobre ruedas para cumplir con las nume-rosas funciones del “cuerpo”.

Tras el éxito que tuvieron las primeras unidades llegadas, llegó la segunda remesa, pero, a dife-rencia de la primera, estos nuevos vehículos se pintaron especial-mente para la Guardia Civil con sus colores característicos (exis-tiendo varias tonalidades según su destino final).

La unidad reproducida por El Palau del Tren pertenece a di-cha remesa, la última de las que llegaron de más allá de nuestras fronteras.

Fue entonces cuando se negoció la posibilidad de que se fabricaran Land Rover en España, coincidien-do con la primera evolución de estos, así que llegó a la factoría “Metalúrgica de San-ta Ana” la posibilidad de fabricar el todoterreno.

Los ingleses insistieron en que se siguiera fabricando en España la primera serie del vehículo, que justo se había dejado de fabricar en tierras británicas, pero los res-ponsables del proyecto español lograron conseguir que finalmen-te fuese la versión más moderna (el denominado “Serie II”) el que abriese una fructífera producción en tierras andaluzas. Pero eso ya fue en 1958, diez años después del nacimiento del primer Land Rover.

La historia del Land Rover toda-vía se puede contar en presente a día de hoy, pues han sido numero-sas sus versiones, modificaciones, personalizaciones y, no di-gamos las anécdotas

que rodean los más de 60 años de un vehículo tan peculiar.

eL modeLo de sLotHace ya más de un año se empezó a gestar un proyecto entre la tien-da barcelonesa El Palau del Tren y Jordi Molist, a través de su marca “Hobbyproject”, y así nació una nueva: “El Palau del Tren - Slot Collection”.

La cosa ya empezaba a funcio-nar, y tras un montón de charlas se habló de numerosos modelos, unos más interesantes, otros no tanto, unos más complejos, otros más simples…

Cuando finalmente, se cayó en cuenta de que un vehículo tan co-nocido como era el Land Rover, estaba casi ausente del panorama del slot, así que ya había algo en lo que ponerse a trabajar en serio.

Se comenzaron a barajar versio-nes del clásico inglés, pero para empezar se optó por una versión conocida por todos, en la que se-guro que unos la mirarían con más simpatías, otros con… no tantas, pero que seguro que a todos les despertaría algún recuerdo y/o sentimiento. Así se decidió empe-zar a trabajar pensando en verde, más concretamente en el carac-terístico color de la Guardia Civil.

Como suele pasar siempre que se empieza a elaborar un modelo de slot, se comenzaron a buscar miniaturas para tener un punto de partida para el modelista, que si modelos a escala 1/43, que si 1:18… y durante esta búsque-da, salió un modelo del que años atrás, se habían vendido unos cuantos en la tienda…¡Y era 1:32!

Así que ya había una base só-lida en la que empezar a trabajar, pues los acabados eran realmente austeros, con la total aparien-cia de juguete, muy alejados del acabado que se buscaba para el modelo, pero un reto asequible en las manos adecuadas. Así que se empezó a trabajar en el molde.

Tras unos cuantos inventos, se logró conseguir el espacio sufi-ciente en el chasis para poder co-locar un compacto motor Mabuchi con mecánica “sidewinder”, ante

la imposibilidad de poder colocar en tan pequeño espacio un motor en línea y que, además, el mode-lo pudiera tener unos interiores completos.

Otro reto: ¿dónde, cómo y qué guía se podía colocar? Pues allí Jordi no tardó en encontrar la so-lución, ya que para alguno de sus modelos anteriores ya había tenido que lidiar con infinidad de diferen-tes guías, y teniendo en cuenta, que además era un modelo todo-terreno, lo más indicado era una guía con brazo basculante, así que se adecuó un chasis donde poder albergar dicho brazo y que la guía y sus cables no destacasen demasia-do por la parte delantera del coche.

Al levantar el modelo y mirar el chasis, además de poder observar

la mecánica del mismo, su guía basculante, su motor, su transmi-sión, sus ejes… podemos ver el detalle de que cada unidad está numerada con una placa metálica en la parte inferior trasera, con el número de unidad grabado, coin-cidiendo éste con el que hay en la etiqueta exterior de la caja, recor-dando el número de unidades máxi-mas que se fabricarán del modelo.

Se optó por hacer la lona del modelo practicable, para poder acceder a los interiores del vehí-culo, en los que se incorporaron dos asientos posteriores y tres delanteros, así como que se tuvo que variar la posición del volante, pues los vehículos que cubrieron las funciones de la Guardia Civil, montaban el volante a la izquier-

da, y no a la derecha como sus primos in-gleses. Viene pintada en color arena y con una pátina que le da una apariencia más real, remarcándose la parte posterior enrollada, que al en-contrarse recogida, permite ver los interiores de la parte posterior sin tener que des-montarla. Otro detalle que hay en el interior del vehículo son los “re-lojes” del salpicadero, en forma de calca, de fondo negro y con detalles en blanco.

En el frontal, se trabajó a fondo con aluminio fotograbado, dando un toque muy realista a la parri-lla, juntamente con dos espejos y

dos limpiaparabrisas de idéntico material. Para los faros se optó por una pieza cromada, haciendo las funciones de fondo y aro para una “lentilla” de plástico transpa-rente, que junto con unos bonitos intermitentes y una calca con el logotipo de Land Rover dan un acabado magnífico rematado por una de las típicas matrículas de la benemérita.

PRESENTACIÓN Land rover serie i dE El PAlAu dEl TREN (SloT CollECTIoN)

Más Slot0992 Más Slot0993

Page 3: land rover s1 guardia civil.pdf

La pintura tiene un acabado totalmente de “recién fabricado”, pues la mayoría recuerdan estos vehículos después de haber su-frido miles de kilómetros y horas bajo el sol y lluvias, pero cuando salieron de sus cabinas de pintu-ra, su color era exactamente el de la miniatura de slot, ya que para darle el mayor realismo posible, se ha utilizado el verde del Panto-ne exacto que se utilizó para sus hermanos 1:1 de la Guardia Civil.

La pintura se ha rematado con los marcos de ventanas y molduras en color plata, resaltando los nu-merosos detalles de la carrocería. Tampoco faltan las calcas de las insignias, tanto de Land Rover co-mo de la Guardia Civil, las primeras en la parte delantera y trasera y las segundas en las puertas laterales.

Para las ruedas, se optó por fabricar una llanta especial en aluminio, ya que ninguna de las llantas que existían en el merca-do eran adecuadas para un chasis tan alto y estrecho, sujetándo-se estas mediante un prisionero allen al eje. El minúsculo prisio-nero se encuentra ubicado en el lateral del cilindro, siendo cubier-to por un neumático estrecho y estriado como lo eran los del ve-hículo real. Los tapacubos están realizados en resina y pintados del característico color amarillen-to, una de las dos versiones de color que montaban los vehículos de la Guardia Civil de la época (la otra versión era menos vistosa, ya que eran de color verde y no destacaban del resto).

Pero quizás, el detalle más vis-toso lo encontraremos justo al abrir la caja, pues apostado justo al lado del vehículo, como si lo estuviera vigilando, sobre una base de cartón adoquinada, hay un personaje ataviado con todos los detalles necesarios para reco-nocer a todo un mito de nuestras carreteras de antaño, ese tricor-nio, ese capote y ese caracterís-tico bigote, con su muesca de seriedad y esa imagen de tenerlo todo controlado, el compañero perfecto para el conductor, otro agente de la benemérita, con su tricornio reposando en el asiento del acompañante, con manos al volante y a la palanca del cam-bio, preparado para salir presto a la misión que le sea encomenda-da por el mando.

Todo ello presentado en una elegante caja de cartón de color verde, con el logo de la nueva marca, “El Palau Del Tren - Slot Collection”, grabado en color pla-ta en la tapa de ésta, con una imagen de la clásica casa cuartel de antaño, que bien podría ser la de nuestro pueblo, la de la pobla-ción donde pasábamos los vera-nos, etc. Evocándonos recuerdos de tiempos pasados, los tiempos del blanco y negro.

Con este modelo se abre la co-lección del Palau del Tren, que con la intención de hacer un mo-delo exclusivo y diferente cada año, por el momento nos han de-leitado con este “regreso al pasa-do” a bordo de un Land Rover de la Guardia Civil.

DETALLES

PRESENTACIÓN Land rover serie i dE El PAlAu dEl TREN (SloT CollECTIoN)

Más Slot0994