Las Fronteras de J

7/22/2019 Las Fronteras de J

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Espacio Tiempo y Forma Serie III, H. Medieval t. 13,2000 pgs. 151-159

Las fronteras de Jorge Manrique N G E L A M A D R I D Y M E D I N A

RESUMEN ABSTRACTA partir de fuentes documentalesyliterarias el presente artculose aproxima a aspectos personales

de Jorge Man rique y ala fortalezade M ontizn, en la que puso tantointers, que pudo ser su refugio.

This article is an approachto some personal aspects relatedto Jorge Manrique and M ontizn sfortress, wich w as possibly his refuge,starting from documentaryand literary sources.

1. LA FRONTE RA PERSON ALA los estud ios de l profesor Anton io Ante lo de l i i s tor ia de la cu l tura c on -su l tados con f recuenc ia por sus a lumnos de la UNED no es a jeno de n in-guna manera e l tema de la poesa de canc ionero \Es verdad que a l dentro de la produccin l i te rar ia de Jorge Manr iquelo que le in teresa como a muchos no es tanto la poesa de cancioneros ino fundamenta lmente las Coplas por la muerte de su padre. Cuyas re fe -renc ias b iogr f i cas tampoco son desprec iab les como fuen te .No es competencia ma entrar en los va lores l i te rar ios de l comendadorde Mont izn asunto en e l que han profundizado los especia l is tas.

98UNED.Centro AsociadodeCiudad Real.AntonioANTELO IGLESIAS. La cultura enHistoria Generald eEspaa yAmrica V. Rialppp .129 188.

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ANGELA MADRID Y MEDINA

Nos interesa del poeta sobre todo un poema de cancionero, el msextenso, en versos de pie quebrado, su Castillo de amor. Como fuentehistrica.

De Castillo y literatura medieval se ha ocupado, por ejemplo, NicasioSalvador Miguel ^. Incluso, al analizar el castillo manriqueo, apunta la posibilidad de que estuviera pensando en el castillo santiagusta de Montizn.Como ya lo hiciera en su momento el gran bigrafo de Manrique ^.Por mi parte, hace algunos aos, pude confirmar en un breve trabajo '*,siguiendo una descripcin documental de dicha fortaleza, a la que luego

volveremos, que, sin duda, est hablando de la citada fortificacin.Que Manrique se limite a hacer un mero ejercicio literario, que la firmeza de sus sentimientos, no ajenos a la melancola de la famosa tristezade amor propia del cancionero, tenga relacin directa con sus vivenciaspersonales, que se vislumbre una vida conyugal no exenta de conflictos,es ms difcil de contrastar.Ni siquiera sabemos hasta qu punto son ciertas las acusaciones demalos tratos que doa Guiomar de Castaeda, siendo ya viuda del poeta,le hace para recuperar su dote y arras, bienes que su suegro y, a la vezcuado, el poderoso maestre don Rodrigo, hipotec y vendi (como hipotecara las arras de su tambin nuera Leonor de Acua) para luchar en elbando de los Reyes Catlicos ^.Es posible que Jorge Manrique en algn momento se debatiera entre elamor a su mujer, a la que parece que siempre fue fiel no se le conoceninguna otra {acordaos cmo soy vuestro/ sin jams haber pensado / serajeno;/ acordaos cmo no muestro/ el medio mal qu he passado/ por serbueno) y el deber y la lealtad a su padre. En una constante tambin

guerra y frontera personal.Es ms que probable, si tenemos en cuenta el realismo del Castillo deamor que otra serie de poemas respondan a sus propias vivencias: quecon tu venida espero (refirindose a la muerte)/ no tener guerra conmigo ;ass que no me dexis,/ seora, ni me queris .O bien: Yo calle males

2 En Medievalismo, n. 8, 1998, pp. 65-78 .^ Antonio SERRANO DE H AH O. Personalidad y Destino de Jorge M anrique. Madr id , 1966.Vid.Armas versus letras en la Orden de Santiago: el Castillo de Amore Jorge Man rique,en Congreso Internacional de Bartolomeu Das e a sua poca, IV. Porto, 1989.

^ Reprod uzco la docum entac in en De la a l ta nob leza a las o l igarquas urbanas en laMancha sant iagusta, en Estudios in mem oriam del Prof. DereK W. Lomax. Madrid, 1995.^ Poema 28. Cancin.' Poem a 29. Esparza.

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Las fronteras de Jorge Manriquesufriendo/ y sufr penas callando,/...si ell esfuergo qu he tenido/para callarySufrir/tuviera para dezir ^.

Y de manera contundente: Call por mucho temor;/ temo por mucliocallar,/que la vida perder;/ ...Porque alguna vez habl,/hlleme dello tanmal,/que sin dubda ms valiera/callar;ms tan bien call/ y pen tan de-sigual,/ que, ms callando, muriera ^.Y, otra de sus constantes, la soledad que le aconnpa en su infancia,tras la prematura muerte de su madre. La lucha en solitario, sin que nadiele prestase socorro, que le cost la vida (no en lo mejor de la misma, quedicen algunos; sus casi cuarenta aos en el siglo xv no eran la plena ju

ventud). En esa soledad lo deja tambin su viuda.

2. LA FRONTERA MILITARLa frontera militar lleva a Jorge Manrique, en su calidad de caballero deSantiago y Trece de la Orden, al castillo y la encomienda de Montizn.A fines del siglo xv el Campo de Montiel estaba mal defendido y sus

fortificaciones (un total de ocho torres y seis castillo) se encontraban endecadencia, si seguimos los Libros de Visitas de la Orden de Santiago.Ninguno de los lugares del Campo tena barreras defensivas.En el oeste, frente al Campo de Calatrava, se hallaba el castillo deAlhambra. Con un extenso alfoz, haba sido dado en precario por EnriqueI a su tutor y regente de Castilla el conde Alvaro Nuez de Lara^ Prontopasara a la Orde n. En 1478 los visitadores se limitan a decir que se encuentra sobre una pea un poco apartada ^^Membrilla del Tocn conservaba el puente levadizo, dos barreras detapias y varias torres, de mampostera almenada la que hay sobre la puerta principal. En el interior, entre otras dependencias, la iglesia de NuestraSeora .

Poema 29. Esparza.' Poem a 32. Esparza.' Var ios son los autores que reproducen la car ta p lomada . Con todo, la vers in ms completa que hemos encont rado, ms que la de l Bularlo de Santiago ( fols. 100-10 2), es el v idimus de

1414 del archivo munic ipal de Alhambra. Sin catalogar' Utiliz o la visita de 1478 por las repet idas a lus iones a Jorge Manr ique. AHN OO.MM. L ibro1063C.'2 Ibldem, fol . 25 0.Ibldem, fo ls . 256-259.

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Se completaba esta lnea conel corti jo torreadode LaSolana, quetiene cuatro cubosdemad era, unodeellos inconc luso *. Pesea los reparos ordenados por los visitadores, dos aos ms tarde, ante los enfren-tamientos habidos entreelconcejoyel com enda dor, ordenan tirarlo ^ .

Lo mismo que hizoelcomend ador de Socullamos con To rrevejazate,frentealalfozdeAlcaraz,alperdersubarreraporabandon o, paraquenadie se hiciera fuerte en ella ^^ Haba sido entregadoa laOrden en 1256por AlfonsoX ^^.Enlaretaguardia del sistema defensivo de Segura delaSierra frenteal

reino de Granada, se conservaban Ruidera, bastante retrasada, Albaladejode los Freires, Vil lanueva de losInfantes, PuebladeMo ntiel, Gorgoj,Villanueva delaFuenteyT errinches.Los castillosdeAlcub illas ^ yFuen llana ^ fueron mandados derribarpor Alvaro de Luna en 1446 en sus luchas con Rodrigo Manrique, sibienenla actualidad todavaseconse rvan restosde la iglesia gtica delsegundo de ellos.En Montiel hubo dos fortalezas, laE strellay San Polo, donadaspor

FernandoIIIen 1227 al Maestre Pedro Gonzlez ^ La segunda estuvo enpoder delm arqus de Vi l lena. Tras sertomada por el maestredonRodrigo, mand derribarla,sibien aprovechelma terial de derribo ^Los visitadodes son recibidos enlaprimera por el comendador GonzaloChacn,que haba realizado diversas obras de acondicionamientoyme jora.En la descripcin, una barrera con siete cubos de calycantoytorre del homenaje, que destacan como muy buena,al igual que la capilla dedicadaaSantiago. Corrales, bodega, palomaryvarias dependencias ms^^Montizn fue edificado porlaOrden de S antiag o e ntre los siglos xiiiyXIV 23yvenaasustituir al derruido Eznavejor. Se levan ta sobre una g ranrocayel ro Guadaln quelobordea, formando una hoz,lesirve de foso .

Ibidem f o l s . 251 y 252.'5 Pedro Andrs P O R R A S A L B O L E D A S . La Orden de Santiago en el siglo xv. M a d r i d , 1 9 9 7 , p. 249.5 A H N . L i b . 1 0 6 3 C , f o l .213 .

Vid. ngela M A D R I D M E D I N A . Alfonso X el Sabio y el Campo de M o n t i e l , en EspacioTiempo y Forma M a d r i d , 1 9 8 9 , pp. 2 0 5 - 2 1 8 .

P O R R A S , p. 250.' I b i d e m ,253.2 M A D R I D . AlfonsoX...21 AHN. Lib. 1063C fols. 224-229.22 Ibidem.23 Amador R U I B A L . Castillos de Ciudad Real. Len 1993 p. 66.

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Las fronteras de orge Man rique

Su situacin, en el sureste de Ciudad Real, el ms meridional de todos,le confiere un especial carcter defensivo. Lo que se manifiesta en lospropios materiales de construccin.

Jorge Manrique sinti una sincera preocupacin por la encomienda dela que fue titular y su castillo. Encomienda que mejor y fortaleza que enriqueci y embelleci. En 1478 los visitadores:Fallaron ende por alcayde que tiene la fortalesa por el seor don Gorge,comendador de la dicha encomienda, a Gongalo de Gontreras. E llegaron ala puerta pringipal del aluacara y fallaron buenas puertas con su cerradura dedentro e su sobrepuerta con su pretil y almenas de cal y canto. Y vieron la

dicha aluacara y a la mano derecha... est una cauallerisa fecha a colgadi-sos que va fasta dar en el atajo dello encaramado, en que podrn caber sesenta caballos. Est cubierto de retama y en esta dicha aluacara est unatajo que va desde un cubo de la masmorra fasta el adarue. Este atajo es detapias, de dos tapias en alto, con sus puertas de roble buenas y su gerradu-ra, en que ay dentro de este atajo a la entrada de la mano derecha unascasas en que ay un palagio encaramado y una cosyna con un establo y delante un portal fecho a colgadiso, todo cubierto de teja e madera y en medioesta fecho un palomar muy bueno con syete aues muy pobladas de palomas.Est cubierto de su teja e madera y con sus puertas e gerradura, todocual lo fiso el dicho com endador...E esta aluacara primera es de cal y canto, con su pretil y almenas y vadesde esta puerta primera fasta dar en la torre del omenaje y tiene el murobien ancho, est bien reparado e tiene una puerta falsa que sale del ro,tiene sus puertas buenas, quel dico comendador le puso, y ay en esta aluacara est una masmorra... enfrente de la puerta que se dice del Aluaysin.E luego est otra puerta que llega a otro gercuito que est antes de la fortalesa que llaman el Albaysin y tiene esta puerta sus puertas buenas de roble consu gerradura por de dentro, quel dicho comendador fiso este gercuito... rodeatoda la fortalesa,... tiene buen muro... bien ancho e en la una parte... est fechauna bueda para caballehsa, que podrn caber treinta o cuarenta caballos y alcubo desta bueda est otra n iasmorra y cabe esta bueda est otra buedapara cauallos. Todo este muro deste Albaysin est despretilado y desalmenadoe an dos cubos, que estn en este muro cabe la torre del omenaje e gerca deuna puerta falsa que se dise de la figuera... la quai puerta est buena... e estosdichos cubos estn derrotados un tergio dellos desde antes de la visytaginpasada y es menester que se pretilasen y almenallos todo el muro...E luego llegaron a las puertas pringipales de la dicha fortalesa las cualesson todas chapadas de hierro, asy las puertas como el postigo y tiene susgerraduras buenas e gerrojos... a la entrada de la dicha puerta est una casapuerta con su sobrepuerta y a la mano derecha desta entrada est fecha

una mesa de yeso para comer la gente y tiene alrededor sus poyos de piedrae yeso para sentar, que fiso el dicho comendador; de la qual casa puertasale una puerta frontera de la puerta pringipal de la de la fortalesa al cuerpode la fortalesa y sale otra puerta a mano esquierda a otra bueda, en la qualestn pajar e establo.

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E luego entrando de la d icha for ta lesa a mano esquierda est un bast i -mento viejo en el quai ay dos aues sus paredes de cal y canto y sus arcosde ladri l lo. . . y descubierto de teja e madera.. .En esta bveda de la capi l la est un apartamiento en que ay un algibe eun gepo y este apartamiento t iene sus puertas buenas con su gerradura eenlusyd o el arco con una venta na enrex ada del mism o yeso y en el dicho al-gibe estn dos brocales de yeso y dos cisternas e en la una ventanal y uncubo y dos pi las de yeso quel dicho comendador f iso.E delante desta bueda est un portal cubierto de teja e madera e juntocon esto est otro portal con su puerta de madera y sus paredes e est des-cubierto y junto con este portal est otra casa que no t iene syno las paredes

que disen que fue yglesia y sobre el dicho algibe est una casa.. . van iasaguas destas casas sobre el muro del adarue a caer en el algibe con unacisterna e su puerta de madera y en el muro al cubo de las dichas casasest una gari ta fecha priuada con su puerta y sobre la puerta de la higueraest una gari ta de yeso cubierta de teja e madera.. .E luego adelante desd e la dicha capi l la hasta donde se dise que fue ygle-sia ay un encasamiento fecho a colgadiso.. . en que ay un portal que est de-lantero de la puerta de la despensa y luego junto a un establo para quatro o5nco best ias y luego una cosyna con su chimenea e su puerta e una casacon un horno lo qual el dicho don Gorge hiso.E luego a mano derecha de la entrada de la fortalesa est una buedagrande quest por cosyna en que com e la gente en la qual est un mol ino demano y al cabo desta bueda est un apartamiento en que est una tahona.. .E engima desta bueda sube un escalera con sus v igas de madera a unasala grande.. . y la techumbre del la de buena madera blanca a9epi l lada y sute ja. Y antes de la entrada de la dicha sala ay un corredor con sus varandasde pino de la madera y el suelo desta tablason a sy mism o con su al farxia lasparedes enlusydas de yeso quel d icho comendador mand enlusyr e faser .A la mano derecha entrando por la puerta de la dicha sala ay otra c-mara con sus puerta buenas.. . que ataj el dicho comendador de la dichasala en la qual est una ventana.. . y en esta cmara aua otra recmara.. . yenlusydo con yeso quel comendador f iso.De esta cmara sube una escalera al adarue.. . sale esta escalera sobre lapuerta del hierro e al cubo del la fasya el adarue t iene otra puerta quel dichocomendador mand faser .E luego delante est ot ra recmara con sus puer tas y una ventana. . . quesale sobre el pat io de la dicha casa.. . aua una chimenea frangesa y aua enesta recmara hasta giento e cinquenta fanegas de tr igo.Todo esto hiso el dicho comendador e estn todas las paredes blanquea-das.. . y los entresuelos de yeso.. .En esta recmara aua una escalera de piedra e yeso que sube a doscmaras.. . aua fasta treynta fanegas de tr igo e genteno.E debaxo de un retrete cerca de la puerta del omeneje est un establopara tres o cuatro best ias. Y antes de la entrada de la.. . torre del omenaje

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est una barrera de cal y canto, la cual no est acabada.. . t iene una portadade cal y canto de arco.. . es muy buena, quel dicho comendador f iso.E luego fueron a la torre del omenaje... y luego est un patio, en que estun algibe.. . e luego est una casa que se dise la casa de las armas.. .Una bueda... aua en ella dos atajos de troxes para pan y ginco tinajas...de vino.. . otra bueda ques bodega.. . en la qual estn quarenta t inajas, gincollenas de vino... y dos cueros para vino y una sera de pes... En el cuerpodesta torre del omenaje est un patio... e enmedio... un algibe... y sube destepatio una escalera a lo alto de la dicha torre e luego... una bueda grande queanda las dos partes de la torre al derredor, en que el dicho comendador afecho el aposentamiento siguiente:. . .Una sala pequea e a la mano esquerda.. . una escalera que abaxa auna cosyna con su ch imenea. . . una ventana con dos miraderos que sa lesobre una huerta. . . ay un entresuelo y una sobrecmara que sale al pat io;est todo enlusydo.. . y sus suelos de yeso, que f iso el dicho comendador.Hay en este entresuelo, ques donde duerme el alcayde, una campani l la conque desde su cama despiertan las velas.A la mano derecha.. . ay un troxe grande para pan. . . dos saleros... y ga-ruangos... fasta tres fanegas de sal y una fanega de garuangos... seys toginos.. . .Una escalera de madera que sube engima de las dichas buedas, elsuelo de las quales est todo enladr i l lado.. . ay una cubierta de bueda en

que duermen las velas.. . En el dicho adarve ay otra gar i ta. . . Ay de ancho enlo al to desta dicha torre del omenaje gient pies.Este cast i l lo todo est sentado sobre pea ta jada, cerca de l r oGuada ln . . . y las torres del y adarues an menester algunos reparos en a lgunas partes, de se almenar e preti lar... ^ .

El armamento cuenta ya con armas de fuego. En el casti l lo de laEstrella de Montiel encontramos nueve espingardas, junto a varias ballestas, picas, corazas, arneses, paveses. En Montizn haba:Dies y seis pares de coragas, catorce capagetes con sus bales, una ge-lada y un bal, dose capagetes de gualteras con sus avenfal las, seys bal lestas de asero de pie con sus poleas y otras seys poleas demasyadas, una garrucha de armar, dos ballestas de palo fuertes, una ballesta fuerte de hueso,dose paueses nueuos con sus langas, ginco espingardas con una barrera ydos atacadores, una bar joleta con pelotas y pluora, un trueno de mano, unmolde de pelotas, un arca con quinse dosenas de pasadores viscaynos, dostornos de madera para las bal lestas fuertes, un paus de Pontevedra, unagruesa de madexas de bramante, un cntaro de pluora y otro de salitre y untrueno con carretn... lo qual.. . don Gorge.. . las dona a la dicha Orden.. . ^^.

AHN OO.WIM. Lib. 1063C, fols. 269-276.Ibidem fol. 274.

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3. LA FRONTERA CULTURALJorge Manrique haba sido preparado para la guerra, unas guerras sinel eco heroico de las de la Reconquista. Enfrentamientos en los que, sinembargo, poda estar presente el elemento caballeresco ^^.En el comendador lo estuvo. No importa que para l no pasaran dedevaneos los torneos y las justas ^^. Su valor ilimitado, su esfuerzo individual, que frente al castillo de Garc Muoz lo llev a la muerte, entroncacon esa mentalidad.Quiz podamos encontrar este mismo sentido en su trofeo de la famosasea con cruz dorada de espigas, ganada al maestre Rodrigo Tllez Girnen Ciudad Real y que situ, como vemos ms abajo, en lugar destacado dela capilla de Mon tizn ^^.Tampoco es Manrique un cortesano a la manera de Garcilaso de laVega, pero tiene gestos prerrenacentistas. Su actividad literaria, su deseode alcanzar la fama , el desarrollo de un pequeo me cenazgo, dotando deun retablo bueno a la cercana erm ita de San ta Mara de la Vega ^^ .Osuafn por embellecer el castillo de Montizn y por dotar a su capilla.

Una capi l la muy deuota de Nuestra Seora Santa Mara e t iene un a l tary engima de fecho una red de yeso labrado de masonera e un retablo deNuestra Seora con una sea y un frontal y un al tar de purf io guarnecida enmadera dorada, un cal ige de pal ta con su patena que pesa marco y medio,un misal , una casul la de damasco pardi l lo con una crus colorada delante eotra detrs con sus v isetes colorados y con todo su aparejo para desi rmisa , dos candeleros de agotar , un por taps de palo, una caxa pequeaenter rada de carmesy , unas anpo l las de v id r io , una ymajen de Nuest roSeor con su diadema en la cabega, un frontal de engo pintado con unaymajen de Nuestro Seor y a los pies del al tar una alhombra, un retablo enl iengo de la Pasyn de Nuestro Seor y d[el ]ante un velo de seda negro yuna caxa en que est la ymajen de Nuestro Seor y engima de la capi l laest la Ver nica y una sena sic) con una crus dora da de espig as que ga ne l d icho comendador don Gorge a l maest re de Ca la t raua don Rodr igoTl les e Girn en Qibdad Real , una lmpara de agotar con sus cadenas

^ '^ Puede verse FernandoCASTILLO CCERES.La caballera y la idea de la guerra en el siglo xv:el marqus de Santillana y la batalla de To rote, enMedievalismo,n. 8, 1988, pp. 79-108.Sobre estos temas puede verse Jos Luis MARTINy LuisSEHRANO-PIEDECASAS.Tratados decaballera. Desafos, justas, torneos, en Espacio,Tiempo y Forma.Serie III, 4. Madrid, 1991,pp. 161 -242. Asi como Martn de RIQUER. aballeros medievalesy susarmas.Madrid, 1991.^ Se ha ocupado de este enfrentamiento Eloy BENITO RUANO. Un episodio blico y un autgrafo) de Jorge Manrique, en En laEspaaMedieval IV. Madrid, 1984, pp. 139-145.'^ MADRID. El Campo de Montiel. La ermita de Santa Mara de la Vega, en Devocin ma-rianaysociedadmedieval.Ciudad Real, 1988, p. 355.

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con su lmp ara de v idr io un agua ma ni l va lengiano con un ata jo fecho dered de yeso con sus puertas de red de palo e todo enlusydo de yeso consus poyos a lderedo r y enc im a de la puer ta est un Crugif ixo estn de lantela rexa un estrado de Nuestro Seor. Esta capi l la t iene sus puertas nueuasenrex adas quel d icho comend ador f iso .Y junto a la arquitectura m ilitar acaso con la pretensin de dotar a unpaisaje de frontera ya de por s bello de un locus amoenus lo humaniz.

Ay Qerca del ro par del dicho casti l lo una huerta gercada de tapias y ba-randa poblada de ortal isa y rbole s con una alberca al cabo del la de agu anatural y un pedago de cortinas gercado para alcager gerca de la dicha huer-ta lo qual todo lo f iso el dicho comendador.

Auya en la dicha fortalesa veynte pauos y gient gal l inas y dose gatos ^\

AHN. Lib. 1063C fols. 270 y 271 .Ibidem fol. 276.

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