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LECCION DE DESPEDIDA 1 Es un honor que acepto simultáneamente con humildad y orgullo -dentro de la más legítima tradición de la llamada "lógica paradójica"-, el haber sido invitado por las directivas de EAFIT a impartir esta última LECCION DE DESPEDIDA. La vida de aprendizaje de todos ustedes no termina hoy, tampoco hoy empieza, simplemente hoy todos cambian de nivel. En este nuevo estadio con más énfasis en la práctica que en la teoría, no como dicotomías existenciales, sino como caras de una misma moneda necesaria y complementaria la una con la otra. Van a sufrir tantos cambios internos y externos que difícilmente se reconocerán dentro de veinte años en la persona que hoy se gradúa. Evolucionarán siendo más y en ese que hoy les parece lejano futuro, no cambiarán la sabiduría de las primeras canas por el entusiasmo de los años jóvenes. Quisiera hoy, día de su grado, que reflexionáramos sobre algunos paradigmas de la sociedad occidental contemporánea en los que inconscientemente han sido educados, paradigmas que probablemente cambiarán durante el ejercicio de su vida profesional. Ese cambio puede llegar más rápido de lo que piensan, porque el proceso de modificación ya se ha iniciado. La historia nos muestra que los cambios radicales representan la ruptura de una tendencia y que no es sensato proyectar el futuro simplemente extrapolando las tendencias del presente. En ese sentido lo que deseo poner a su consideración en esta LECCION DE DESPEDIDA representa un quebrantamiento de la tendencia actual, una posible evolución de los paradigmas que determinan la mayor parte del contenido y la forma de la educación occidental contemporánea. 1 Discurso del Administrador Alberto Merlano A. En la ceremonia de grado de la Universidad EAFIT en Octubre 93 1

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LECCION DE DESPEDIDA

Es un honor que acepto simultneamente con humildad y orgullo -dentro de la ms legtima tradicin de la llamada "lgica paradjica"-, el haber sido invitado por las directivas de EAFIT a impartir esta ltima LECCION DE DESPEDIDA.

La vida de aprendizaje de todos ustedes no termina hoy, tampoco hoy empieza, simplemente hoy todos cambian de nivel. En este nuevo estadio con ms nfasis en la prctica que en la teora, no como dicotomas existenciales, sino como caras de una misma moneda necesaria y complementaria la una con la otra. Van a sufrir tantos cambios internos y externos que difcilmente se reconocern dentro de veinte aos en la persona que hoy se grada. Evolucionarn siendo ms y en ese que hoy les parece lejano futuro, no cambiarn la sabidura de las primeras canas por el entusiasmo de los aos jvenes.

Quisiera hoy, da de su grado, que reflexionramos sobre algunos paradigmas de la sociedad occidental contempornea en los que inconscientemente han sido educados, paradigmas que probablemente cambiarn durante el ejercicio de su vida profesional. Ese cambio puede llegar ms rpido de lo que piensan, porque el proceso de modificacin ya se ha iniciado. La historia nos muestra que los cambios radicales representan la ruptura de una tendencia y que no es sensato proyectar el futuro simplemente extrapolando las tendencias del presente.

En ese sentido lo que deseo poner a su consideracin en esta LECCION DE DESPEDIDA representa un quebrantamiento de la tendencia actual, una posible evolucin de los paradigmas que determinan la mayor parte del contenido y la forma de la educacin occidental contempornea.

El primero y ms respetable de ellos es el llamado PARADIGMA CIENTIFICO. Surgi en el siglo XVII como reaccin a lo que alguien denomin imperialismo teolgico. Tuvo con Galileo su iniciacin por el nfasis que ste hizo en la medicin. Descartes lo reforz con su Discurso del Mtodo. Destacar lo cuantitativo y considera como nico mtodo legtimo de adquisicin de conocimientos aquel que conduce a que las hiptesis puedan ser probadas mediante evidencias de carcter emprico-sensorial. Al mtodo cientfico le debemos los grandes avances que hemos tenido en los ltimos siglos, principalmente en el actual, en el campo de la ciencia y la tecnologa; pero as como en el pasado estuvimos en manos del imperialismo teolgico, en el presente parecemos haber cado en manos del imperialismo cientfico. Esto nos ha llevado a lo que se denomina cientifismo, en el cual lo que no puede ser probado cientficamente, simplemente no existe. Lo correcto sera decir que lo que no tiene prueba cientfica, no tiene prueba cientfica, sin descartar que haya otros medios distintos al emprico - sensorial de adquirir conocimiento vlido. La razn, por ejemplo, nos permite llegar a conclusiones valederas en el rea de las matemticas, consideradas tradicionalmente como ciencia. La intuicin es fundamental en cualquier arte. As si, como es probable, la mayor parte de ustedes administrar tarde o temprano, hay reconocimiento de que los resultados que obtengan como Gerentes sern consecuencia del empleo de estilos de pensamiento, ms de carcter intuitivo-racional que cientfico. El enfoque cientifista y reduccionista que predomina en nuestra educacin universitaria conduce a prestar poca atencin a lo intuitivo a pesar de que es la intuicin lo que ms van a necesitar para poder progresar, tanto desde el punto de vista profesional como desde el punto de vista humano. Creo que en un mediano plazo contemplarn un fortalecimiento del actual resurgimiento de la intuicin, una unin entre el arte y la ciencia, un desarrollo de los mtodos que permitan a las personas captar la realidad de las cosas en su ms ntima esencia a travs de ese atajo maravilloso que proviene de la capacidad humana de conectarse interiormente con la verdad, sin necesidad de usar la razn ni los rganos de los sentidos.

Tambin debemos a este enfoque cientfico llevado a un extremo, el abandono de la vida espiritual. Lo espiritual a pesar de no tener cabida en la mayor parte de las universidades no confesionales, lo tiene en la vida de cualquier ser humano normal. Todos experimentamos la necesidad de encontrarle una explicacin racional a los dilemas de la existencia humana. Un excesivo nfasis en lo cientfico nos priva del disfrute de todas las dimensiones de la vida. Tenemos que abrirnos a otras posibilidades de adquirir conocimiento y otorgarles la validez que ellas merecen. El mundo de lo espiritual y de lo creativo, en donde predomina la intuicin, es parte de nuestra herencia humana y debemos posesionarnos de ella, no permitiendo que el paradigma cientfico, propio de nuestra cultura occidental, nos impida penetrar en reas que siendo nuestras podemos creer, por la formacin que hemos recibido, que nos estn vedadas.

F. Schumacher humanista contemporneo, recientemente fallecido, ingeniero de profesin, promotor de tecnologas a escala humana denominadas intermedias, o blandas; sostena al final de su vida en una obra maestra pstuma "Gua para los perplejos", que lo haban educado mal, pues por causa del principio cartesiano de descartar todo aquello que ofreciese duda, no haba explorado durante esos aos maravillosos de la juventud dedicados al aprendizaje, temas que no ofrecan la certidumbre propia de la ciencia, pero que si daban en compensacin la posibilidad de experimentar el reto, el desafo, de lo que siendo real no es posible evidenciarlo con los rganos de los sentidos. Vivir como seres humanos nos exige usar la totalidad de las formas que tenemos de adquirir conocimiento y no solamente la sensorial, pues tenemos ojos y odos pero tambin razn e intuicin. Podramos decir con Saint D'Exupery, que lo esencial es invisible a los sentidos.

Un segundo PARADIGMA que me gustara examinar con ustedes, es el MECANICISTA. En este paradigma fortalecido por las concepciones de Descartes y Newton, tendemos a creer que podemos entender el funcionamiento del todo si lo dividimos en sus componentes, como sucede con los mecanismos de aquellos no tan viejos relojes mecnicos. Esto supone que el mundo funciona como lo hace el motor de un vehculo. Hoy el paradigma mecanicista est profundamente cuestionado por las concepciones holsticas. No solamente existen teoras en el campo de la fsica, de la biologa y de la neurofisiologa en ese sentido, sino que tambin en el campo de lo social empezamos a darnos cuenta de ello. Cada parte afecta todas las dems partes y es afectada por ellas, cada parte afecta el todo y el todo afecta cada parte. Esto funciona en una forma tan intrincada, que no nos es posible mediante modelos matemticos esquematizar el funcionamiento interdependiente de ningn sistema biolgico, menos de uno social.

La nica forma que tenemos de comprender lo multideterminado es hacernos uno con l. Los mtodos analticos all no funcionan. Es la sntesis producto de la intuicin la que produce el entendimiento. Esto privilegia mtodos que nos permitan la identidad de la conciencia, del yo, con aquello que trata de comprender, mirndolo no desde afuera sino desde adentro en una especie de observacin participante que hoy hasta la misma fsica admite como viable. Favorece igualmente el uso de mtodos no racionales como el de la meditacin estilo oriental. Dejarse penetrar por la realidad multideterminada para poder vivenciar desde adentro la esencia misma de aquello que separado no podemos comprender, es la esencia del conocimiento intuitivo. Algo as como abandonarse a la msica para entenderla vivindola, hacindose uno con ella, en lugar de buscarle sentido a travs del anlisis de la contribucin que al conjunto hace cada uno de los instrumentos.

Un tercer PARADIGMA de carcter social es el de la COMPETENCIA, basado en la aplicacin de la ley de la supervivencia de los ms aptos. Este paradigma nos sirve hoy en da como punto de referencia para construir nuestras teoras econmicas basadas en la competencia entre individuos, entre empresas, entre naciones, etc., llevndonos a descuidar la colaboracin. Sin embargo, es creencia de muchos, entre los que me incluyo, que el mundo camina hacia desarrollo de sistemas basados ms en la colaboracin que en la competencia. Hemos cometido en este punto el error de creer que si una cosa es buena en pequea dosis ser mejor en grandes dosis; as, si algo de competencia es bueno para el funcionamiento social mucha competencia suponemos que ser an mejor. Las cosas no operan de ese modo. La realidad es, como lo estn evidenciando muchos antroplogos, que la supervivencia de la especie humana se explica muchsimo mejor en funcin de colaboracin entre los miembros de la misma, producto de la interdependencia entre personas y grupos, que en trminos esencialmente competitivos.

Una consecuencia grave de este paradigma es el de fomentar el protagonismo, hacernos sentir que los resultados son casi siempre consecuencia de acciones de individuos, no de grupos, fomentar la lucha entre personas, estimular la agresin.

La vida nos ensea que a pesar de toda la prdica relacionada con el poder del individuo para afectar de una manera radical y definitiva una resultante social, la nuestra es una pequea contribucin, no importa lo grande que nos creamos, un vector que incide en la resultante, no la gran fuerza definitoria de todas las situaciones. Al entenderlo nos tornamos humildes y empezamos a valorar la participacin ms que el autoritarismo y aceptar esa realidad tan difcil de percibir cuando somos jvenes, de que lder es el que sirve a otros, que la autoridad nace en la base, que va de abajo hacia arriba, y que no tenemos ms poder que el que los dems nos conceden para que les ayudemos a conseguir sus propios objetivos.

Colaboracin es el lema del futuro. La competencia quedar reducida a su tamao, a la moderada cantidad que necesitamos para contrarrestar los efectos adversos de la colaboracin.

Todo lo relacionado con este paradigma parece estar en contrava con el mundo actual, un mundo en donde muerta la utopa del socialismo parece imperar la lgica de la competencia, la lucha de unos contra otros a todos los niveles y en donde desde uno y otro lado, se nos dice que slo sobrevivirn los ms fuertes. Incluso se llega a plantear el actual modelo capitalista como perfecto, el fin de la historia, necesario para poder tener libertad y democracia. Muchos no creemos en esto. Pensamos que un bienestar colectivo nacido del egosmo individual no puede ser sostenido a largo plazo y que tras la euforia que ha producido la derrota del modelo colectivista por inhumano e ineficiente, empezaremos poco a poco, a travs del inevitable proceso de evolucin de la conciencia social, a darnos cuenta de que es moralmente inadmisible que busquemos el bienestar de la colectividad persiguiendo cada uno solo el bienestar propio. El egosmo individual no puede convertirse en el eje alrededor del cual gire toda tica. Las leyes de mercado no son capaces de sustituir las que surgen de la moral propia de nuestra naturaleza que nos seala rumbos distintos al de la lucha de unos contra otros para obtener cada uno su propio bienestar de forma que, de manera misteriosa, se logre el bienestar colectivo. Tener en cuenta esto a nivel personal nos puede ayudar a manejar nuestra vida en una forma mucho ms equilibrada.

Independientemente del contexto social y econmico en el que nuestra vida est inmersa, los valores basados en la satisfaccin de la totalidad de las necesidades del hombre deben consolidarse y servirnos de gua en esta especie de guerra a la que nos hemos visto lanzados, para que a pesar de ella podamos encontrarle sentido trascendente a nuestra propia vida y a la vida de aquellos que amamos.

Un cuarto PARADIGMA de la sociedad contempornea que determina inconscientemente nuestras vidas, es el del BIENESTAR MATERIAL, concebido como el fin de la sociedad. El crecimiento econmico es la gran religin contempornea, con sacerdotes que bendicen la destruccin del planeta en los altares de la codicia y millones de fieles que buscan el sentido de sus vidas en el consumo. Las otras necesidades que los seres humanos tenemos, distintas a las econmicas, se menosprecian. La bsqueda del bienestar material conduce a una despreocupacin por el desarrollo humano integral.

Como hombres slo vivimos de pan cuando no tenemos pan, cuando lo hay otras preocupaciones empiezan a aparecer en nuestra conciencia. Buscamos amor, nos interesa la autoestima, darle sentido a la vida a travs de acciones creativas, tratamos de responder las preguntas fundamentales de la existencia: quines somos, de dnde venimos, hacia dnde vamos, etc. La satisfaccin de nuestras necesidades de carcter material es el prerrequisito para la satisfaccin de aquellas que podramos denominar necesidades sicolgicas. El darnos cuenta de esto puede llevarnos toda la vida, ojal sin embargo que no sea necesario tomarnos tanto tiempo y nos percatemos que lo importante es SER, no TENER. El tener es un medio para el ser, las cosas deben estar al servicio del hombre, lo inerte al servicio de lo vivo, no al revs. No debemos concebir nuestra vida principalmente en funcin de la adquisicin de bienes materiales. Ella est encaminada desde el punto de vista de la programacin de la especie a obtener el bienestar, maximizando las satisfacciones y minimizando los dolores. El dinero es un excelente esclavo, pero muy mal amo. Puede haber ms desarrollo en una vida carente de logros de tipo econmico, pero con plenitud de satisfacciones de las otras necesidades que como seres humanos experimentamos, que en aquellas en las que el bienestar econmico sea total pero sin opcin de satisfacer adecuadamente necesidades de ndole superior. Es posible como alguien dijo, que la mayor pobreza sea solo tener dinero.

Les propongo que el bienestar a travs de la autorrealizacin sea su meta. Tratar siempre de SER ms. Desde ese punto de vista el xito y el fracaso son un par de impostores; ellos simplemente son sus maestros. El objetivo es el crecimiento personal y el dinero, el bienestar material, apenas los medios que proporcionan la seguridad necesaria para que se desarrollen en otras reas de su existencia.

RESUMIENDO, pienso que la sociedad en la que nos ha tocado vivir y la educacin que recibimos, coherente, consistente con esa sociedad, enfatiza implcitamente valores que en este momento se encuentran en crisis, existiendo grandes posibilidades de que se transformen a mediano plazo. Un cientifismo que valida solamente lo que tiene posibilidad de ser medido, contra una forma de percibir la realidad basada en modelos racional-intuitivos con la consiguiente rehabilitacin de lo espiritual. Un mecanicismo que privilegia el anlisis sobre la sntesis y que al hacerlo as nos dificulta comprender totalidades y el uso de aproximaciones vlidas de carcter no cientfico. Un sentido competitivo exagerado, que promueve la lucha entre todos los componentes de la sociedad bajo la presuncin de que la confrontacin genera bienestar colectivo, que debe ser sustituida como criterio por el de la colaboracin. Por ltimo, un fin para la sociedad excesivamente relacionado con el bienestar material que acta como freno de una preocupacin por el desarrollo humano integral.

En todas estas reas se notan avances notorios hacia una administracin de la sociedad ms centrada en el hombre. En todas ellas hay una evolucin que en un momento dado producir una ruptura paradigmtica para la que debemos estar preparados; una ruptura que afectar nuestros valores personales y la forma en que concebimos la vida.

Nuestra educacin universitaria nos capacita principalmente para resolver problemas, pero ms importante que ello es aprender a descubrirlos y ms importante an convertirlos en oportunidades. Infortunadamente no es fcil para una institucin de educacin superior ensear lo ltimo. Esto lo debemos hacer por nosotros mismos. El aprovechamiento de oportunidades y el descubrimiento de problemas en gran medida est determinado por nuestros conceptos sobre cmo debe ser el mundo. Lo que he presentado puede proporcionarnos una base para desarrollar una comprensin distinta de la realidad.

Quiero por ltimo referirme al proceso de crecimiento que normalmente se da como consecuencia de la experiencia. Estamos rehabilitando el viejo concepto de la conversin personal. Esta idea de origen religioso implica la posibilidad de transformarnos, literalmente hablando, de la noche a la maana, en la direccin en la que queramos hacerlo. Nuestra obligacin una vez convertidos, es la de ser coherentes, la de dar testimonio con nuestra vida, con nuestras acciones cotidianas, de aquello en lo que creemos. Manfred Max-Neef, un economista chileno, hablando de este tema menciona a un personaje pobre, de color, perdido en un rincn del mundo, que sin ser, dice l, Rotario ni Len, ni tampoco Masn, simplemente siendo coherente consigo mismo, practicando aquello que predicaba logr la transformacin de todo lo que toc. Se refera a Mahatma Gandhi, y a su gran triunfo moral, al gran proceso de transformacin que lider exitosamente tanto en Sudfrica como en la India.

La coherencia es revolucionaria. No hay que aadir a ella ni siquiera el deseo de transformar a otros, basta con que nosotros nos transformemos y demos testimonio de ello con nuestra propia vida, haciendo de ella nuestro mensaje.

La vida que les espera es una vida llena de desafos y oportunidades. No hay forma en que los desafos sean buenos o malos. Los desafos son simplemente desafos, alimentos para el crecimiento del espritu. La educacin recibida en EAFIT los ha formado en muchos sentidos, y como comprendern en la medida en que el tiempo pase, educacin es aquello que queda cuando lo que nos han enseado se nos ha olvidado. De aqu en adelante la responsabilidad por su propia educacin recae principalmente sobre cada uno de ustedes. No es necesariamente cierto que esa educacin hacia el futuro se refiera solamente a la capacitacin profesional que cada uno de ustedes pueda continuar recibiendo, sino que fundamentalmente est vinculada al desarrollo que como individuos pueden tener. Toca con aspectos profesionales, pero tambin con aspectos personales, con su desempeo como ciudadanos, esposos y padres, no solo como trabajadores. Ello implica concebir la existencia en una forma amplia, con una multiplicidad de objetivos a obtener. Mi exhortacin en esta LECCION DE DESPEDIDA, es que traten en la medida de lo posible de actualizar todo su potencial humano llegando a ser los hombres y mujeres nicos e irrepetibles, que potencialmente son.

MUCHAS GRACIAS

Discurso del Administrador Alberto Merlano A. En la ceremonia de grado de la Universidad EAFIT en Octubre 93