Libertad y Autognosis

Una de las principales enseñanzas que el V.M.Samael, dejó grabadas con fuego, en el fondo de mi conciencia, fue la encarnar el espíritu de la libertad y el tener una libre manera de pensar.

La obra psicológica que el V.M. Samael construyó en mí, fue la de formarme un hombre libre, en el sentido más completo de la palabra. Por esta misma razón es que en todas partes del mundo me llaman “formador de hombres libres”.

El tener fuertes alas de libertad, constituye una de las principales herencias de sabiduría que me dejó el Maestro Samael. Y esta joya mental que quiero compartirla con aquellos que tengan en su psiquis los átomos libertadores, tan admirados y promulgados por Samael, que es la fuerza liberadora de Dios en acción.

A continuación voy a transcribir trechos de una magna obra, escrita por Samael. No voy a mencionar el título de la misma, ni el capítulo, a fin de motivar a leer y a investigar a los lectores de este artículo.

El V. M. Samael Aun Weor nos dice:

“La humanidad quiere poner un abismo entre lo humano y lo divino, y ahí está precisamente el error del hombre porque dentro de sí mismo esta lo divino, el Intimo –auto-gnosis— que quiere actualizarse mediante la Senda de la Vida Diaria. No en tanto, el hombre –y el estudiante gnóstico también— buscan escapatorias. Con todas sus creencias –la interpretación personal de la doctrina de Samael— lo que el hombre hace es alejarse de sí mismo.

El hombre que se afilia a escuelas materialistas o espiritualistas –hasta las mismas instituciones gnósticas— busca solamente escapatorias; quiere eludir el conflicto o sacarle el cuerpo. Siente miedo y pereza de conocerse a sí mismo para resolver sus propios conflictos. Las escuelas, creencias y filosofías son formas ficticias de consuelo. La verdad no consiste en ser materialista, ni ser espiritualista, mas en ser realista, o sea: realizarse a fondo, abordarse a sí mismo, enjuiciar su personalidad sin orgullo de virtudes (porque todo el mundo se siente virtuoso), sin hipocresías, sin poses falsas ni piedad fingida; sentando nuestra personalidad en el banco de los acusados, para juzgarla sin consideración alguna, severamente. Así, debe el hombre trazar una disciplina moral y ética para acabar con las raíces más íntimas de sus propios conflictos, porque estos son hijos de su propia ignorancia –falta de autognosis—. Estos conflictos individuales sumados redundan en los conflictos sociales –y de las instituciones gnósticas—.

Hoy, más que nunca es necesario que el hombre comience a pensar por sí mismo –la libre manera de pensar, que enseña el V.M. Samael en su libro Educación Fundamental—. Las personas no quieren usar su criterio, prefieren acomodarse a lo ajeno y opinan como piensan sus jefes. El problema de la masa es el problema del individuo. En cuanto éste no aprenda a resolver sus propios problemas, la humanidad estará llena de incertezas, sufrimientos y calamidades que en vano sus líderes políticos intentan solucionar, porque ellos mismos están llenos de problemas para intentar resolver los ajenos. Hoy, la masa decepcionada aspira a la catástrofe porque está martirizada. De este modo pretende salir rápidamente de su desesperación. Por eso diariamente oímos frases como esta: ¡Antes de estar colgado es mejor caer! Esto da una idea clara del desespero de las masas y de la magnitud de la catástrofe.

La mente del hombre tendrá que libertarse de las tinieblas del deseo, de las apetencias, de la vida fácil, de las ansias de acumulación, y del egoísmo, porque todo esto coacciona la mente incapacitándola para discernir entre lo real y lo ilusorio, lo mutable y lo permanente, lo útil de lo inútil –como es el caso concreto de los estudiantes gnósticos que caen en la redes de los falsos profetas—.

La mente del hombre actual es como un barco que va de puerto en puerto; y cada puerto es una escuela, una teoría, una creencia, una secta, un partido político, un concepto de bandera, una filosofía, una religión. En cuanto la mente se ancle en estos fondos mentales, entonces, se encierra dentro de ellos para accionar y reaccionar incesantemente, con sus preconceptos allí establecidos. Una mente así está incapacitada para comprender la vida libre en su movimiento. Una mente así es esclava del ego animal y de las energías estancadas de la vida, donde existen conflictos, luchas de clase, hambre y dolor.

La mente del hombre necesita libertarse del batallar de las antítesis que la dividen y la incapacitan como instrumento del Íntimo. El hombre racional, por medio de la elección mental, comete el error de dividirse a sí mismo. De esto resulta la acción equivocada y el esfuerzo inútil (donde surge el conflicto y la amargura). Si queremos resolver nuestros problemas individuales, tenemos que aprender el uso y el manejo de la mente. El pensamiento debe fluir integralmente, sin el proceso de la opción que divide a la mente en opiniones tan opuestas. La mente debe fluir serena, entera como el dulce fluir del pensamiento, guiada únicamente por la intuición, que es la voz del Íntimo y la flor de la inteligencia. De esto resulta la recta acción, el recto esfuerzo y la plenitud perfecta.

¡La llama evocadora de la Nueva Era es la Luz del Pensamiento! El hombre no vive el presente, mas en medio de la experiencias del pasado y de las preocupaciones del mañana. Ve el presente a través del colorido de las experiencias del pasado, por consiguiente, mira el presente desfigurado. Él no percibe la realidad presente, y obstinadamente se llama a sí mismo de hombre práctico

El Nuevo Mundo no será un mundo de conquistas militares, ni líneas fronterizas, mas sí de un nuevo estado de conciencia, que ya está naciendo al margen de todas las limitaciones. Las banderas están llenas de daños ancestrales y todo esto pertenece al pasado, a lo que ya dio su fruto. Ya pronto, resonarán las campanas de la Pascua de la Resurrección de Acuario. Cuando la Gran Llama del Entendimiento ilumine la Tierra, hará que todos los problemas del mundo desaparezcan y no habrá sino felicidad.

¡El Amor es la base de la vida y es conveniente hablar de amor a la luz de la ciencia oculta. Es necesario un conocimiento más profundo sobre la vivencia íntima del Amor!”JULIO MEDINA, PERO EL (BAÑOL) DICE QUE ES DEL MAESTRO. ESTA EN REVOLUCION DE BEL

CAPITULO LLAMADO: EN EL VESTÍBULO DEL SANTUARIO

Samael Aun Weor.

<<La doctrina del V.M. Samael Aun Weor, transciende las propias instituciones gnósticas creadas por Él>>

Nota: Los textos en azul son comentarios hechos por Fernando Salazar Bañol

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