Nueva evidencia ha ligado el fluoruro y otros productos químicos a los trastornos cerebrales.

¿Qué otros efectos desconocidos podría tener este subproducto industrial en nuestro suministro de agua?

Un examen de la historia de la fluoración del agua sombríamente revela ramificaciones potencialmente perturbadoras para la conciencia humana.

Investigaciones recientes han llevado a la controvertida práctica de la fluoración del agua de nuevo al centro de atención, revelando los vínculos entre la fluoración del agua y los trastornos cerebrales, sobre todo en lo que respecta a su efecto en los niños.

Preocupantemente, el reporte encontró que los efectos secundarios no sólo provienen de la ingestión directa por los niños, sino también de los niveles más altos de sustancias químicas tales como el fluoruro en la sangre y en la orina de las mujeres embarazadas", lo que ha sido vinculado a trastornos cerebrales y coeficientes intelectuales más bajos en sus hijos.

En muchos casos, los cambios provocados pueden ser permanentes. Esta evidencia vuela en la cara de falsas afirmaciones por parte los escépticos de que la ingestión de fluoruro en bajas concentraciones tiene efectos nocivos sobre nuestra salud.

No es de extrañar entonces que sólo siete países en el mundo en realidad fluoran más del 50 por ciento de su suministro de agua. Aunque a menudo se retrata en los Estados Unidos como si cada país lo hace, esto está muy lejos de la verdad.

De hecho, los Estados Unidos es responsable de más del 50 por ciento de todos los bebedores de agua fluorada en el mundo, mientras que la gran mayoría de los países europeos, por ejemplo, a evitar esta práctica por completo.

Por lo tanto,

¿Qué es el fluoruro y por qué algunos países siguen infundiendo su agua potable pública con este controversial químico?

¿Qué consecuencias podrían tener sus efectos secundarios para el desarrollo humano?

Cómo llegó a ser la fluoración del agua

Aunque existe una aceptación generalizada de que el flúor es tóxico en dosis altas, una tendencia surgió en el siglo XX para añadir este producto químico al agua potable en dosis considerada "segura".

¿Dónde se originó esta tendencia?

Puede que te sorprenda escuchar que al parecer, la primera ocurrencia de poner a propósito el fluoruro de sodio en el agua potable se llevó a cabo en los ghetos alemanes de los años 30 y 40, y poco después en los campos de concentración nazis.

Es evidente que los nazis no estaban preocupados con la fuerza y la resistencia de los dientes de sus prisioneros; así que,

¿Cuál podría ser la razón real para fluorar el agua?

¿Qué efectos tiene en realidad tiene sobre nosotros?

¿Y por qué países como los Estados Unidos todavía lo está haciendo?

Ahora vamos a ver cómo comenzó la fluoración del agua en los Estados Unidos.

Un investigador industrial del Instituto Mellon financiado por la empresa Alcoa recomienda primero la fluoración del agua en Estados Unidos en 1939.

Viendo que Alcoa tenía residuos tóxicos, un sub-producto del aluminio conocido como fluoruro y quiso beneficiarse encontrando una manera de vender y deshacernos de el, ¿podría ser esto una coincidencia?

El reporte convenció a los dentistas y al público en general de que la fluoración del agua es buena para los dientes. Con esto, ya sea intencional o no, la industria ha ganado la manera de obtener los residuos tóxicos fuera de sus manos, y es más, incluso se les pagará para deshacerse de él – vendiéndolo para ser vertido en el suministro público de agua.

En 1946, se nombró a un abogado y ex consejero de Alcoa a la cabeza del Servicio de Salud Pública de Estados Unidos.

Poco después, él se aseguró de que el ‘experimento’ de la fluoración del agua pasara esencialmente sin desafíos y sin control por ningún estudio público real o investigación, y pronto se le dio un bono privado $ 750K de Alcoa.

En dólares de hoy, esto vale en entre $ 6.89 a $ 55.30 millones, dependiendo de cómo se cuenta la inflación.

Pero algunas personas han identificado una agenda más siniestra detrás de la fluoración del agua que va más allá de la codicia y la aparente conveniencia. Al final de la Segunda Guerra Mundial,

Charles Elliot Perkins, un investigador en química, bioquímica, fisiología y patología, fue enviado a Alemania para hacerse cargo de sus plantas químicas.

Más tarde escribió en respuesta a lo que había visto y oído mientras estuvo allí:

"El verdadero propósito detrás de la fluoración del agua es reducir la resistencia de las masas a la dominación y el control y la pérdida de la libertad...

Las dosis repetidas de cantidades infinitesimales de flúor con el tiempo reducirá gradualmente el poder del individuo para resistir la dominación, envenenándolo lentamente y narco-apetizando esta área del tejido cerebral, y hacerlo sumiso a la voluntad de los que quieren gobernarlo. "

Cómo Fluoruro Suprime la Conciencia

Pero, ¿cómo un sub-producto químico tirado en el suministro de agua en realidad funciona en aquellos que lo ingieren a través del tiempo?

Hay muchas formas de consumo de fluoruro de sodio afectando nuestro cuerpo, pero uno de los aspectos en el que nos centraremos en este artículo es que el fluoruro de sodio calcifica la glándula pineal.

La científico británico Jennifer Lucas publicó un estudio que encontró que los depósitos de fluoruro tienden a acumularse en la glándula pineal y calcificarla.

Además, una revisión de 450 páginas sobre la toxicidad de fluoruro publicada por el Consejo Nacional de Investigación en 2006 informó que el flúor produce una serie de efectos secundarios negativos, incluyendo,

"Disminución de la producción de melatonina" y "otros efectos sobre la función pineal normal, que a su vez podrían contribuir a una variedad de efectos en seres humanos."

No sólo los científicos, sino también los místicos han explorado los efectos de la glándula pineal dentro de nosotros (desde diferentes ángulos):

físicamente, juega un papel importante en la regulación de los patrones del sueño y el desarrollo sexual

De cualquier manera, cuando la glándula pineal se calcifica por el fluoruro de sodio, es obvio que puede no funcionar correctamente.

Esto podría tener efectos graves para la humanidad.

Cuando un asiento importante de la conciencia tal como la glándula pineal no puede funcionar correctamente, por extensión lógica, la conciencia misma puede no funcionar correctamente dentro de nosotros, ya que los medios físicos con los que actúa en el mundo han sido dañados.

Por lo tanto, no es sólo que el consumo de fluoruro tiene efectos adversos para la salud y, según dicen hace a las personas más fáciles de controlar (como creían los nazis), pero la muy esencia espiritual de quienes somos, nuestra conciencia, puede ser obstaculizada de manifestarse en nuestras vidas.

Dentro de nuestra conciencia están todos los sentimientos espirituales como el amor, la paz, la felicidad y la libertad, así como las experiencias místicas y facultades psíquicas. La conciencia nos da la capacidad de estar "aquí", "despiertos", y presentes psicológicamente.

Hay siniestros agentes en el mundo y más allá que desean ver la conciencia reprimida.

Parece que hay un mal detrás de la fluoración del agua que va más allá de la mera conveniencia, y las implicaciones que van más allá de los renombrados efectos del fluoruro de hacer un pueblo obediente que de otra manera cuestionaría las cosas cuestionables (tal como la fluoración del agua – a pesar de la ironía).

En el nivel más profundo, se trata de la capacidad individual de una persona para despertar la conciencia y la experiencia de todo su potencial.

Observaciones finales

Hace más de diez años ya, en noviembre de 2003, Estados Unidos aprobó la Ley de Aguas, que hizo imposible que las compañías de agua se sometieran a audiencias civiles o penales, como resultado de la adición de fluoruro a los suministros públicos de agua.

Se vuelve más y más difícil afectar el cambio en una escala masiva a prácticas tales como la fluoración del agua cuando los que tienen el control político, militar, y el control legal promulgan este tipo de medidas.

Afortunadamente, todavía está dentro de la capacidad de las personas tomar medidas para evitar el fluoruro y hablar, y hacer personalmente todo lo posible para preservar, hacer ejercicio, y despertar su propia conciencia.