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Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

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Page 1: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se
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EDITORIALSomos el ahora

PAÍS A PAÍSBulgaria

TÚ,¿QUÉ PIENSAS?Condenado por no romperel secreto de confesión

ESCAPARATENoelia Ramos y CarolineFinas, participantes en Taizé Madrid

ANÉCDOTAMagallanes y Elcano

EN RUTA HACIA...Mes MisioneroExtraordinario

DESDE LA MISIÓNJosé María Calderón, nuevodirector nacional de OMP

DESDE LA MISIÓNAntonio Martín de lasMulas, misionero y poeta

PÓSTER

PUERTAS ABIERTASJMJ PANAMÁ 2019

FIRMAS INVITADASIrene Pozo Hernández."Misioneros por el mundo"

ASÍ VA EL MUNDO

REPORTAJEVoces que se apagan

NOMBRES PROPIOS

JÓVENES MISIONEROSJóvenes de la ParroquiaSanta Paula en #VeranoMisióncon los Padres Blanco

CON NUESTROSMISIONEROSIsabel Robledo, en Manila

ESTE MUNDO

ESTÁ EN LOS LIBROS

RELATOMontaña abajo

PARTICIPARON

PIENSA Y JUEGA

LA LLAMADA

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Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

lo ha pedido el papa Francisco en la JMJ de

Panamá. Deben transformar el mundo. Y tienen

que hacerlo ya, porque los jóvenes "sois el

ahora de Dios". Para lograrlo, el camino es

enamorarse de Jesús y mantener vivo su sueño.

Un sueño por el que dio la vida. “Un amor que

no 'patotea' ni aplasta, un amor que no margi-

na ni calla, que no humilla ni avasalla... Que

tiende la mano en el servicio y la entrega, y que

no se pavonea”. ¿Aceptas el reto?

EDITAObras Misionales Pontificias

Director Nacional de OMPJosé María Calderón

DirecciónRosa Lanoix

Diseño y maquetaciónAntonio Aunés

ColaboradoresJusto Amado, Fuencisla del Amo,Alfonso Blas, Ana María Fernández, María Teresa Fernández del Vado, Javier López Lozano, Coro Marín,Alicia Muñoz, Concha Fernández,Quique, Dora Rivas, Paula Rivas,Joan Sanmartí, José Ignacio Rivarés,Francisco Solé, Juan Zabala

Fotografía:José Ramón Moreno, EFE, 123RF.comJMJ Panamá, Archivo de OMP y Cathopic

Depósito Legal:M. 7103-1991

Imprime: :ARIAS MONTANO, S.A.

Para ponerte en contactocon nosotros:SUPERGESTOC/ Fray Juan Gil, 528002 - MadridSi lo prefieres, llámanos alTef: 91 590 27 80También puedes hacernos llegar un e-mail: [email protected] nuestra página web: www.revistasupergesto.eswww.omp.es y www.domund.org

SuscripcionesRoberto Murga

[email protected]

AÑO XXVIII Nº139 MARZO - ABRIL 2019

39F

oto:

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J P

AN

AM

Á

Page 3: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

a expresión la solemos oír en

boca de quien, con el peso de

los años a sus espaldas y nostál-

gico de sus años de juventud, nos trata

de convencer de la suerte que tenemos

de ser "el futuro de la humanidad", de

que "el mañana nos pertenece". Desde

la perspectiva del que escucha, la frase

no siempre suena como un elogio ni se

recibe con satisfacción. Nos quedamos

muchas veces con la sensación de que

sutilmente se nos está diciendo que

no ha llegado todavía nuestro momen-

to, de que aún no estamos preparados,

de que nos falta crecer... ¡Hasta hoy!

Porque el papa Francisco nos acaba de

decir en la Jornada Mundial de la

Juventud celebrada en Panamá que

"ustedes, queridos jóvenes, no son el

futuro sino el ahora de Dios".

Bonito piropo y toda una muestra de

la confianza que tiene el Santo Padre

en nosotros, los jóvenes. Pero, como

todo elogio, conlleva su parte de com-

promiso, de obligación. Ahora ya no

podremos escudarnos en que nuestra

hora está por venir, en que eso son

cosas de nuestros mayores o en lo mal

que lo están haciendo estos. Se nos

está diciendo que ha llegado nuestro

hoy, que debemos estar "listos para ser

protagonistas y actuar". ¡Casi nada!

Y ¿qué se espera de nosotros? Pues

que respondamos con un "sí" a la lla-

mada de Dios, al igual que hizo la

Virgen María, para convertirnos en sus

influencer, en los "influencer del siglo

XXI". Esto supone, como dijo

Francisco, "abrazar la vida como viene

con toda su fragilidad y pequeñez, y

hasta muchas veces con sus contradic-

ciones". Porque lo importante es

"abrazar", "amar". "El amor sabe más

de levantadas que de caídas, de recon-

ciliación que de prohibición, de dar

nueva oportunidad que de condenar,

de futuro que de pasado. Es el amor

silencioso de la mano tendida en el

servicio y la entrega que no se pavo-

nea", como lo vienen sembrando y

demostrando, por los lugares más

recónditos y necesitados del planeta,

nuestros misioneros y misioneras.

Somos ya, desde el ahora, "testigos

del anuncio del Señor al servicio de

nuestros hermanos". Ello supone, y la

experiencia misionera así nos lo con-

firma, que, desde la perspectiva del

Evangelio, tendremos que responder

"a muchas situaciones escandalosas de

marginación, exclusión, descarte y

empobrecimiento", de falta de libertad

e injusticia. Sin embargo, es posible

otro mundo más acorde con el

Evangelio, con los deseos de Dios. Los

jóvenes lo sabemos y ahora se nos

invita, en boca del papa Francisco, "a

involucrarnos en su construcción,

para que los sueños no queden en

algo efímero o etéreo, para que impul-

sen un pacto social en el que todos

puedan tener la oportunidad de soñar

un mañana".

Así pues, no tengamos miedo. Ha lle-

gado nuestro momento. Sg

NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019 SUPERGESTO 3

L

Page 4: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

ulgaria es uno de esos "países-encrucijada" que, a caballo dedos mundos, viven siempre en

una búsqueda permanente de identi-dad. Una tierra fascinante y desco-nocida que en la antigüedad fue pa-tria de los tracios (asentados tam-bién en la actual Rumanía y norte deGrecia) antes de ser conquistada lue-go por los macedonios (por Filipo II,el padre de Alejandro Magno), los ro-manos, los búlgaros -procedentes de

Anatolia- y los turcos... La ocupaciónotomana se prolongaría durante casicinco siglos, llegando la "liberación"de manos de los rusos, que en 1877acudieron en ayuda de los alzados enarmas contra el sultán. Ya en el sigloXX, el país fue comunista y uno delos Estados satélites de la Unión So-viética en el Pacto de Varsovia. Trasla caída del muro de Berlín en 1989,y el posterior desmembramiento dela Unión de Repúblicas Socialistas

Soviéticas (URSS), abrazó la econo-mía de mercado e ingresó en la OTAN(2004) y en la Unión Europea (2007).Y en esas estamos ahora...

La República de Bulgaria, su nom-bre oficial, tiene 110.993 kilómetroscuadrados y una población de pocomás de 7,2 millones de habitantes.Rigen sus destinos un presidente (elsocialista Rumen Radev), un primerministro (Boyko Borissov) y un Parla-mento de una sola Cámara (240 dipu-tados) que se renueva cada cuatroaños. Hasta hace poco, el país estabaestructurado en 28 regiones adminis-trativas, pero, tras el ingreso en laUE, estas se redujeron a seis (Noroes-te, Norte-central, Noreste, Sureste,Suroeste y Sur-central) para podergestionar mejor los fondos de ayudaeuropeos. Desde 2007, año de laadhesión, a 2013, se ha beneficiadode 9.362 millones de euros proce-

Supergesto regresa hoy al Viejo Continente para visitar Bulgaria,un país fascinante y lleno de contrastes y sorpresas. La que en laantigüedad fuera patria de los tracios es hoy una nación de pocomás de siete millones de habitantes que trata de progresar en elseno de la Unión Europea, de la que forma parte desde 2007. Si osgusta el arte, el deporte, la naturaleza, las rosas... y el mejor yo-gur del mundo, este es vuestro lugar. El papa Francisco la visitaeste mes de mayo. Abrochaos bien los cinturones, que despegamos.

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B

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dentes de los fondos estructu-rales y de cohesión.

El país se halla en el extre-mo oriental de Europa, encimade Grecia. Además de con es-ta, comparte fronteras con otrascuatro naciones: Rumanía, al norte,a lo largo de 609 kilómetros; Tur-quía, al sur (259 km); y Serbia (341km) y la antigua República Yugosla-va de Macedonia (165 km), al oeste.Las relaciones con los vecinos es aveces tensa, debido siempre a dispu-tas territoriales o étnicas (Bulgaria,por ejemplo, apoyó la independen-cia de Kosovo, lo que la enfrentó aSerbia. Y como entiende que la Anti-gua República Yugoslavia de Mace-

donia no debería ser un país inde-pendiente, sino parte de su territo-rio nacional, tampoco hace buenasmigas con esta).

Geográficamente hablando, esta-mos en un país montañoso, hasta elpunto de ser conocida por algunoscomo "la Suiza del Este". Lascordilleras más importan-tes son la Stara Planina(Balcanes) y las montañasRódope (en la fronteracon Grecia) y Rila.

Bulgaria es el país de los búlgaros. Estos

fueron un pueblo de origen turco que se

asentó en esas tierras en el siglo VII d.C., en

lo que entonces formaba parte del Imperio Bi-

zantino. Sin embargo, más de un milenio an-

tes, Bulgaria fue el hogar de otro pueblo: el

tracio. De los tracios se sabe poco, pues no

tenían escritura. Las primeras noticias escritas

sobre ellos nos las da el historiador griego

Herodoto, que nos dice, junto a autores poste-

riores, que eran un pueblo de guerreros fuer-

tes, ágiles y excelentes jinetes. El tracio más fa-

moso de la historia fue Espartaco, el esclavo

que lideró la revuelta de esclavos que hizo

temblar a Roma en el siglo I a.C., cuya historia

fue inmortalizada por Stanley Kubrick en la pe-

lícula del mismo nombre. Espartaco era gladia-

dor. Y los gladiadores tracios luchaban única-

mente con una espada curva y un pequeño es-

cudo circular. Los búlgaros más célebres hoy

proceden del mundo del deporte y del cine.

En el fútbol destacan los ex jugadores Hristo

Stoichkov (Barcelona) y Luboslav Penev (Va-

lencia, Atlético de Madrid), mientras

que en el tenis sobresale Grigor Di-

mitrov, el Nadal de aquel país. Orí-

genes búlgaros tienen también

la actriz Nina Dobrev (Cróni-

cas vampíricas) y el actor

Stanislav Ianevski, Víctor

Krum en las películas

de Harry Potter.

Page 6: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

En estas últimas encontramos lamayor altura del país: el Musala, de2.925 metros. Las laderas de estacumbre cuentan con una estación deesquí, un deporte practicable en Bul-garia de diciembre a mayo y que es-tá en el origen de una floreciente in-dustria turística invernal. La ofertaveraniega, por el contrario, tiene pordestino los complejos hoteleros delMar Negro, cuyas aguas bañan lasarenas doradas de la costa a lo lar-go de 387 kilómetros. En este mardesemboca también, después deatravesar una decena de países, elDanubio, el gran río que delimita lafrontera norte con Rumanía. En Bul-garia encontramos parques natura-les, fértiles llanuras, frondosos bos-ques… y una variadísima flora y fau-na en la que no faltan lobos, osos,muflones, alimoches y águilas.

No obstante, el accidente geográ-fico más conocido del país es, pro-bablemente, un valle: el llamado"valle de las rosas". Los cultivos deesta flor para la elaboración deaceite de rosa han dado a ese sitio(en realidad, varios valles) y a su in-dustria cosmética un renombremundial. No en vano, en sus vastasplantaciones se produce el 85% delaceite de rosas del mundo.

El otro producto búlgaro por ex-celencia es el yogur, único y sin pa-rangón en el mundo gracias a labacteria lactobacillus bulgaricus. Seelabora desde hace 6.000 años y,según algunos expertos, es el prin-cipal "culpable" de los altos índicesde longevidad de algunas zonas delpaís. Los búlgaros viven, como me-dia, 76,4 años, cinco menos que losespañoles. La población del país,

sin embargo, disminuye año trasaño debido a la baja tasa de natali-dad y a la emigración. Entre 1989,año de la caída del comunismo, y2005, salieron de Bulgaria unas800.000 personas, la mayoría jóve-nes bien formados que se marcha-ron a otros países en busca de me-jores oportunidades de vida. Solocrece la minoría gitana, calculadaentre 350.000 y 500.000 personas, yno muy integrada en la sociedad.Un fenómeno nuevo en los últimosaños es la llegada de inmigrantesque, procedentes sobre todo de Si-ria, cruzan la frontera con Turquíapara tratar de alcanzar Europa delnorte, más rica.

Sofía, con 1,2 millones de habitan-tes, es la ciudad más importante, ade-más de su capital desde 1879. Es laantigua Serdika de los griegos y ro-

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Bulgaria es un Estado

aconfesional, pero

el cristianismo es la religión

mayoritaria, profesada por

el 76% de la población.

Neófito, Patriarca

de la Iglesia ortodoxa

búlgara.

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manos. La segunda ciudad del país esPlovdiv, la Philippopolis de la anti-güedad, de 340.000 almas. Otras ur-bes a destacar son Varna (la capitalestival, en la costa, 335.000 personas),Burgas (200.000) y Ruse (150.000).

Un país cristiano

Hemos dicho que Bulgaria formóparte del Imperio Otomano durantemás de cuatro siglos. Pero antes deello, mucho antes, fue cristiana, aligual que hoy. De hecho, fue una delas primeras naciones de Europaoriental en abrazar la fe en Jesús, afinales del siglo IX. Fue durante elreinado del kan (o zar) Boris I, quefue bautizado en el año 865. Su con-versión la hicieron posible Clementey Naum, discípulos de los misionerosgriegos Cirilo y Metodio. A San Cle-mente se le atribuye la hagiografíade sus dos maestros, y hasta la in-vención del alfabeto cirílico, utiliza-do para evangelizar a los pueblos es-lavos y que siguen usando hoy búl-garos, rusos, serbios, bosnios, bielo-rrusos, chechenos, kazajos, macedo-nios, ucranianos, uzbekos, kirguises,y muchos otros pueblos más.

Bulgaria es hoy un Estado aconfen-sional, según la Constitución de 1991.El cristianismo es, no obstante, la re-ligión mayoritaria, profesada -al me-nos nominalmente- por el 76% de lapoblación, mientras que el islam es

practicado por un 9%. Se trata de uncristianismo ortodoxo. La Iglesia or-todoxa búlgara, como otras en la or-todoxia, cuenta con un patriarca pro-pio (actualmente, y desde 2013, Neó-fito), y tiene su sede es la catedral deSan Alexander Nevski de Sofía. En lacapital se localiza también la magní-fica iglesia de Boyana, decorada dearriba abajo con magníficos frescosdel siglo XIII declarados por la UNES-CO patrimonio de la Humanidad. Lasiglesias y los monasterios fueron ba-luartes en la preservación de la len-gua, cultura y fe búlgaras durante laetapa otomana, y el país es rico enellos. En el sur destacan el de Bach-kovo (del siglo X, también patrimoniode la Humanidad), y el de Rila, el ma-yor de la nación, de la misma época,aunque muy reconstruido.

Los católicos en Bulgaria son muypocos: apenas 73.000. En mayo, sinembargo, están de enhorabuena. Elpapa Francisco visita Bulgaria y Ma-cedonia del 5 al 7 de ese mes. En Ma-cedonia acude a Skopje, la capital, laciudad que vio nacer, allá por 1910, ala universal Madre Teresa de Calcuta,hoy santa de la Iglesia. Y en Bulgariavisita Sofía y Rakovski, localidad estaúltima de solo 16.000 habitantes si-tuada a unos 160 kilómetros de la ca-pital. Juan Pablo II visitó tambiénBulgaria. Lo hizo en 2002.

JOSÉ IGNACIO RIVARÉS

NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019 SUPERGESTO 7

Una de las cosas más sorprendentesde Bulgaria es la manera en que susgentes dicen "sí" y "no" mediante ges-tos: al revés que todo el mundo. Enefecto, cuando quieren decir "sí", me-nean la cabeza de derecha a izquierda,como cuando aquí negamos; y, por elcontrario, cuando quieren decir "no",asienten con la cabeza, como cuandonosotros afirmamos. ¿A qué se debe es-te ir contracorriente? Se dice que estapráctica nació en los siglos de domina-ción turca. Bulgaria era, como hemosvisto, desde el siglo IX un país cristiano,y los otomanos, a su llegada, quisieronconvertirlos al islam. Les conminaban acambiar de fe a punta de cuchillo, desuerte que, con el filo en la garganta,preguntaban al forzoso postulante siabrazaba el nuevo culto. Para salvar lavida y no renegar de sus verdaderascreencias, los cristianos búlgaros habríaninvertido los términos. Probablementesea un leyenda pero, como dicen los ita-lianos, se non è vero, è ben trovato.

Sg

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Recordamos hoy a Luis Ruiz Suá-rez, misionero jesuita conocidocomo "LukNgai", cuyo significa-

do en chino es "el padre de los pobres". Luis Ruiz nace en Gijón (Asturias), el

21 de septiembre de 1913. Ingresa en losjesuitas de Salamanca en 1930. Dosaños después, al disolver la RepúblicaEspañola la Compañía de Jesús, es ex-pulsado del país. Termina su noviciadoen Marneffe (Bélgica), donde tambiéncursa estudios de Humanidades y Filo-sofía. Tras realizar sus primeros votos,es enviado como profesor a Cuba, don-de imparte clases en el colegio jesuitaBelén, de Santiago de Cuba. Allí tienecomo alumno al futuro líder revolucio-nario Fidel Castro, que cursa el bachi-llerato en esa época.

En 1941, en plena II Guerra Mundial,parte como misionero a China, destinoque había deseado desde el inicio de sulabor apostólica. Estudia chino manda-rín en Pekín y Filosofía y Teología enShanghái. En esta ciudad vive la guerra

en el Pacífico, sufriendo los bombarde-os de los aviones americanos a las ba-ses japonesas.

En 1945 se ordena sacerdote y, dosaños más tarde, comienza su labor mi-sionera visitando los centros de la dióce-sis de Anking, donde también imparteclases de inglés. Recorría a pie entre 60y 70 km al día. "Eran tiempos peligrosos,pues las guerrillas comunistas ya anda-ban por los alrededores", recordaba el

14 SUPERGESTO NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019

Ya os lo dijimos en el número anterior.El próximo octubre se celebra un granacontecimiento misionero: el Mes Mi-

sionero Extraordinario, convocado porel papa Francisco, para conmemorar el

centenario de la carta apostólica Maxi-mum illud. Francisco quiere que esta

celebración sirva para fortalecer nues-tra fe y nuestra pasión por las misiones.Ha pedido, por este motivo, que camine-mos hacia este Mes Misionero Extraor-dinario, apoyándonos en cuatro ejes: la

oración, para que cada cristiano re-fuerce su encuentro personal con Cris-

to; la caridad, que debemos practicartodos, porque ¡son tantas las injusticiasy las necesidades que viven las personasdesfavorecidas!; el redescubrimiento delos santos y mártires de la misión, cu-yas vidas tienen un gran valor, y pue-

den enseñarnos mucho; y la formacióny la reflexión misionera, que nos permi-

te adentremos en el conocimiento dela misión y sus fundamentos. ¿Seguimos,pues, caminando juntos hacia este Mes

Misionero Extraordinario?

"Muchos misioneros, en el desempeño de su apostolado, han llegado, aejemplo de los apóstoles, al más alto grado de perfección en el ejerciciode las virtudes; y no son pocos los que han confirmado con su sangre lafe y coronado con el martirio sus trabajos apostólicos". Maximum illud.

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NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019 SUPERGESTO 15

padre Luis. En 1949 nace la República Po-pular China y, ese año, las tropas comu-nistas llegan a Anking. Junto con los res-ponsables de la misión y el obispo –tam-bién jesuita–, es arrestado, encarceladobrevemente y, finalmente, expulsado delpaís. Mientras está en prisión, el padreLuis enferma gravemente de fiebre tifoi-dea. Careciendo de cualquier atenciónmédica y no contando con medicinas,son los cuidados del hermano enfermerolos únicos que le ayudan a salvar la vida.

En 1951, sus superiores lo envían aMacao –una colonia portuguesa situadaa lo largo de la costa del sur de China–para restablecerse de su enfermedad.Sin embargo, una estancia que en unprincipio iba a ser temporal termina du-rando 60 años. Cuando llega, la ciudadestá llena de refugiados que huyen delrégimen comunista chino. La mayoríavienen muertos de hambre, sin dinero ycon dificultades de comunicación por eldesconocimiento del cantonés. El padreLuis olvida su enfermedad y se vuelcaen ayudarlos. La residencia oficial de losjesuitas en Macao, llamada Casa Ricci,les sirve como refugio temporal. El cen-tro les proporciona alojamiento, educa-ción, documentación y empleo. Este fueel principio de lo que hoy es "Caritas"Macao, para la que Luis Ruiz abrió, pos-teriormente, cinco centros más quebrindan en la actualidad servicios a losdiscapacitados mentales.

Más tarde, el padre Ruiz funda tambiénen Macao el primer centro para albergara ancianos y, con el fin de aliviar la po-breza familiar y el trabajo infantil, ex-tiende los servicios al norte de la penín-sula y a la isla de Taipa. Por su entrega-

da labor, empiezan a llamarle "LukNgai",cuyo significado es "padre de los pobres".Este será el nombre chino que adoptaráa partir de entonces.

En 1986, con ocasión del gran terre-moto que asola la provincia de Yunnan,el padre Luis vuelve a entrar en China.Habían transcurrido 35 años desde quefuera expulsado. Al pasar por la provin-cia de Guangdong se encuentra con unsanto y celoso sacerdote, el padre LinoWong. El sacerdote le habla del mundoolvidado de los leprosos y le invita a vi-sitar la leprosería de TaiKam, situada enla isla de Dajin, donde se encuentranexiliados 200 leprosos. La visita es tanimpactante que Luis Ruiz decide impli-carse de lleno en mejorar las condicio-nes de vida de estos enfermos.

A pesar de las dificultades económi-cas y los pocos medios con los que losmisioneros contaban, estos hacían ver-daderas proezas asistenciales y evange-lizadoras. El propio Luis Ruiz decía: "Aldinero en Macao se le llama 'agua'.Nuestro Buen Padre, que es también elde todos los leprosos, hace llover todoslos días, unas veces muy fino y otras ve-ces lluvias torrenciales. Con esa 'agua' ymucha dedicación se ayuda directamen-te a 145 leproserías en toda China".

El padre Luis Ruiz continúa estable-ciendo instituciones de caridad para an-cianos y discapacitados físicos y menta-les y formando a trabajadores socialesen gran parte de China. Al mismo tiem-po, Caritas Macao sigue creciendo, con-virtiéndose en 2014 en una de las orga-nizaciones no gubernamentales másgrandes de la ciudad.

En 2005, dado el éxito que habían te-

nido las iniciativas del padre Luis con losleprosos, el gobierno de la provincia deHunan le ofrece la posibilidad de crearun centro para los enfermos de sida, losnuevos leprosos de la sociedad china. Elcentro se establece en Hongjian.

Siendo ya un nonagenario, Luis Ruizllevaba una vida similar a la que pudie-ra llevar un hombre de sesenta años.Era muy activo y hasta pocos años an-tes de morir conducía su moto por lascalles de la ciudad. Falleció el 26 de ju-lio de 2011 a los 97 años de edad. El pre-sidente ejecutivo de Macao le describiócomo un gran filántropo digno de reco-nocimiento y respeto por parte de lasociedad y como un ejemplo de solida-ridad y dedicación a los demás. Fue en-terrado en el cementerio de San Miguelel 3 de agosto de 2011. Para los refugia-dos, los leprosos, los enfermos y todosaquellos que le conocieron y a los quecuidó, quedará siempre en el recuerdocomo el "ángel de Macao".

CONCHA FERNÁNDEZ y JUSTO AMADO

Sg

Page 10: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

Padre nuestro,

tu Hijo Unigénito Jesucristo

resucitado de entre los muertos

encomendó a sus discípulos el mandato de

"id y haced discípulos a todas las gentes".

Tú nos recuerdas que a través de nuestro bautismo

somos partícipes de la misión de la Iglesia.

Por los dones de tu Santo Espíritu,

concédenos la gracia

de ser testigos del Evangelio,

valientes y tenaces,

para que la misión encomendada a la Iglesia,

que aún está lejos de ser completada,

pueda encontrar manifestaciones nuevas y eficaces

que traigan vida y luz al mundo.

Ayúdanos a hacer que todos los pueblos

puedan experimentar el amor salvífico

y la misericordia de Jesucristo,

Él que es Dios y vive y reina contigo,

en la unidad del Espíritu Santo,

por los siglos de los siglos.

Amén

"Mientras los misio-neros del Evangeliose fatigan en el cul-

tivo de la viña delSeñor, todos losfieles cristianos

deben ayudarlescon sus oraciones".

Maximum illud.

"Cuantos contribuyan, en la medida de sus posibilidades, a llevar la luzde la fe, principalmente ayudando a la obra de los misioneros, habráncumplido su deber en cuestión tan importante y habrán agradecido a Diosde la manera más delicada el beneficio de la fe". Maximum illud.

16 SUPERGESTO NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019

solos y aterrados, buscando a sus fa-miliares. Y los hay que, por desgra-cia, no los han encontrado y hanquedado huérfanos.

Los misioneros está ahí, ayudándo-les. Porque, cuando sucede una des-gracia de este tipo, se movilizan mu-chas ONG y asociaciones, pero pron-to se van. Los misioneros, no. Ellos sequedan. No desean prestar una ayu-da momentánea, sino compartir su vi-da con los más pobres y desfavoreci-dos, haciéndose uno más entre ellos.Les llevan el mensaje de Jesús y, conello, la esperanza.

Si tú deseas ayudar a los misione-ros en su labor, en Indonesia y enotras muchas partes del mundo, pue-des hacerlo ofreciendo un donativoen www.omp.es/haz-un-donativo.

Con frecuencia vemos que lasgrandes tragedias se ceban en

los más necesitados: terremotos, tsu-namis, inundaciones... En Indonesia,por ejemplo, hemos visto cómo hacepoco tiempo, el pasado 28 de sep-tiembre, un terremoto y un posterior

tsunami terminaba con la vida de mi-les de personas y dejaba heridas acientos de miles, que han perdido sucasa, todo. Los niños, como siempre,son los más afectados. Muchos deellos han tenido que dormir en la ca-lle, conmocionados, traumatizados,

Page 11: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

Hola a todos. ¿Qué puede de-cir un misionero como yo alos jóvenes de hoy? Yo creo

que lo mejor es que os cuente bre-vemente lo que ha sido la historia demi vocación misionera, que empezómuy pronto. Soy un Hermano del Sa-grado Corazón (Corazonista) y mi vo-cación es la evangelización de los jó-venes por medio de la educación.Desde muy pequeño sentí ya la lla-mada del Señor a una vocación deIglesia que, en un principio, no esta-ba muy bien definida, pero que sefue precisando con el tiempo.

Mi vocación se la debo en granparte a mi madre, una mujer de unagran fe y de mucha oración que meenseñó a conocer y amar a Jesús. Es-ta inquietud, que llevaba siempre enmi corazón, se concretó a los 16 añoscuando le dije a mis padres que memarchaba al noviciado de los Herma-nos del Sagrado Corazón, con los quehabía estudiado en el colegio en Ma-drid. Un año más tarde, a los 17 años,hice mi profesión religiosa. En unprincipio, no había pasado por mi ca-beza ser misionero, pero, al año si-guiente, el superior provincial pidióvoluntarios para ir a las islas deOceanía y en mi corazón se encendióuna luz que yo creo firmemente quefue obra del Espíritu Santo y me dijecon Isaías: "Aquí estoy, mándame".

Así que a los 18 años me subí alavión para marcharme a los confi-

"Urge la necesidad de cubrir los huecos que abre la extremada falta de misioneros". Maximum illud.

NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019 SUPERGESTO 17

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18 SUPERGESTO NÚM. 139, MARZO-ABRIL DE 2019

nes de la tierra, a las islas más le-janas, a 17.000 km de España y ate-rricé en Nueva Caledonia donde em-pezó mi apostolado misionero. Hanpasado ya 42 años durante los cualeshe estado en tres misiones distintasde la Melanesia (Oceanía): Bourail(Nueva Caledonia), Ouvea (Islas Leal-tad) y Tanna (Vanuatu).

La verdad es que me siento un pri-vilegiado, un enchufado de Dios. ¿Porqué se fijó en mí? ¿Por qué me llamótan joven? ¿Por qué se fió de mí y memandó a proclamar el Evangelio enlos confines de la tierra? Son pregun-tas a las que solo Él puede responder.Yo puedo decir que, en lo que a míme toca, aunque humanamente pu-diera parecer una imprudencia de ju-ventud, siempre le he dicho sí rápi-damente y sin pensármelo dos veces.Y puedo decir que nunca me ha de-cepcionado y que siempre me ha

acompañado en mi camino. "Sé dequién me he fiado y estoy firmemen-te convencido de que es capaz de lle-var hasta el final el encargo que meha encomendado" (2 Tim 1,12).

Y aquí estoy ahora, en la misióncatólica de Lowanatom, situada enuna pequeña isla del inmenso océa-no Pacífico llamada Tanna, pertene-ciente al archipiélago de Vanuatu. Milabor misionera la ejerzo con los jó-venes a los que, al mismo tiempo queles enseño francés, historia y cien-cias en un colegio, les ayudo a cono-cer a Jesús y a amar y servir a todos.Estos chicos y chicas son muy respe-tuosos con todo lo sagrado y muyabiertos a la Palabra de Dios aunquedetrás de ellos no tienen una largatradición cristiana porque el Evange-lio llegó a esta isla en los años 50 delsiglo pasado. Cada día, al empezar lajornada, leemos juntos la Palabra deDios, la explico, la aplicamos a nues-tra vida y rezamos con ella. Les gus-ta muchísimo este momento de ora-ción que luego es el motor del día.No descuido tampoco ninguna oca-sión durante mis clases para dar tes-

timonio de mi fe y de mi esperanza.La verdad es que es un gozo hablarde Jesús en Oceanía.

A los jóvenes que me leéis y quesentís una inquietud misionera, os di-ría que os dejéis guiar por Jesús, queno tengáis nunca miedo de respondercon generosidad a sus llamadas. Élsiempre os acompañará y os dará lafuerza y el ánimo para llevar adelanteel proyecto que os ha encomendado.Esta es mi experiencia personal. Perotambién os diría que se puede ser mi-sionero tanto en las tierras lejanas co-mo sin salir de su país. ¿Qué sería denosotros, los misioneros de la primeralínea, si en la retaguardia no hubieratantas personas que se desviven pornosotros y que son tanto o más misio-neros que nosotros mismos?

Y termino con dos citas que megustan mucho de dos papas: "No ten-gáis miedo, Jesús lo da todo y no qui-ta nada" (Benedicto XVI). "El que novive para servir, no sirve para vivir"(Papa Francisco).

ANTONIO LÓPEZ GARCÍA-NIETO, SCMisión de Lowanatom (Vanuatu)

Sg

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osé María Calderón Castro (1963) esde Madrid. Fue ordenado sacerdo-te en 1989 y ha ejercido su minis-

terio en diversas parroquias de la dió-cesis de Madrid. Se licenció en Teología–especialidad en Moral–, y ha sido, en-tre otras muchas tareas, consiliario dio-cesano de Acción Católica, consiliariodiocesano de Manos Unidas y desde2007 delegado episcopal de misiones ydirector diocesano de OMP de Madrid.

Muy vinculado al mundo misionero,desde 1995 ha colaborado estrecha-mente con las Misioneras de la Caridadcomo capellán y confesor. También esCoordinador en España del MovimientoCorpus Christi, asociación fundada porla Madre Teresa para los sacerdotes se-culares que quisieran vivir su sacerdo-cio con la espiritualidad propia de lasMisioneras de la Caridad.

El nuevo director de OMP siempre hapermanecido muy cerca de los jóvenes.Ha vivido numerosas experiencias mi-

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sioneras de verano con ellos en paísescomo Etiopía, Cuba, Sierra Leona y Re-pública Dominicana, entre otros. Y desu mano, nació, en 2007, Jóvenes parala Misión, asociación que trata de impli-car a todos los jóvenes en la tarea deanimación misionera de la diócesis, au-nando esfuerzo e ideas. Esta asociaciónse inició con reuniones una vez al mes,para rezar, formarse y compartir la fe yel entusiasmo misionero, pero prontofue creciendo y consolidándose. El 18 demarzo de 2011 fue erigida canónicamen-te como asociación pública de fieles enla archidiócesis de Madrid.

Tras conocer su nombramiento, JoséMaría Calderón ha manifestado: "Estoymuy contento de servir a la Iglesia parala que me ordené, y estoy muy conten-to de hacerlo a través de las misiones;creo que es una tarea preciosa y funda-mental, importantísima en la vida de laIglesia y en la vida de cada bautizado.Estoy muy contento de poder servir a laIglesia como la Iglesia me pide servirla".

"Es verdad que el reto es muy grande

–añade–, porque mi antecesor, don Anas-tasio Gil, ha dejado el listón muy alto y nopuedo contar en este nuevo cargo ni consu ayuda, ni con su sabiduría. Pero con lagracia de Dios y la ayuda de todas las per-sonas que trabajan en OMP, espero hacerlo que la Iglesia espera de mí y servir a laevangelización, que es lo más importanteque tiene la Iglesia ahora mismo".

José María Calderón asume en Españala dirección nacional de OMP, la institu-ción de la Santa Sede encargada de pro-mover entre las comunidades cristianas elespíritu misionero y de canalizar las apor-taciones de los fieles de todo el mundohacia los territorios de misión.

El anterior director de OMP, AnastasioGil, fallecido el 7 de septiembre de 2018,estuvo al frente de las OMP durante sieteaños (2011-2018). Siempre contó con la es-trecha colaboración de José María Calde-rón, como delegado episcopal de misionesde Madrid y, después, desde el 28 de di-ciembre de 2017, como subdirector deOMP. José María Calderón ha sido hasta lafecha el máximo responsable de OMP.

J

La Santa Sede, a través del pre-

fecto de la Congregación para

la Evangelización de los Pue-

blos, cardenal Fernando Filo-

ni, ha nombrado a José María

Calderón Castro director na-

cional de Obras Misionales

Pontificias España (OMP), para

los próximos cinco años.

Page 14: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

Los reporteros del programa Misioneros por el mundo, que emi-

te cada semana TRECE TV, continúan trasladándose a distintas par-

tes del mundo para contarnos el día a día de los hombres y muje-

res que decidieron seguir el camino de Jesús y que predican en

las periferias del mundo. De la mano de Obras Misionales Pontifi-

cias, el programa nos descubre su labor evangelizadora y su mi-

sión más social. Proyectos educativos, sanitarios, a favor de la inclusión y

centrados en la prevención de la violencia y la atención a las víctimas de la

trata, la discriminación y la pobreza. Sin lugar a dudas, se trata de una cla-

ra apuesta de TRECE TV por los misioneros españoles, de lo cual nos habla

Irene Pozo Hernández, directora de contenidos de la cadena. Irene lleva 20

años dedicada a la información social, un sector que, según dice, le apasio-

na ya que le permite aprender, investigar y visibilizar lo que pasa en el

mundo a través de una comunicación más cercana y humana. Comenzó su an-

dadura profesional en 1999, en Medios de Comunicación Social del arzobispa-

do de Madrid. Después, pasó a formar

parte de la plantilla de Popular TV, y

más adelante de la de TRECE TV, donde

actualmente está al frente del Informa-

tivo Diocesano (premio 'Antena de Plata

2014') en su emisión en Madrid y del

espacio nacional Crónica de Roma, lo

que compagina con la dirección de con-

tenidos de TRECE TV. Durante estos

años ha colaborado en la producción

de varios spots y cortometrajes para

las campañas del Domund e Infancia Mi-

sionera de OMP. En 2017, recibió el pre-

mio Lolo de periodismo que otorga la

UCIPE (Unión Católica de Informadores y

Periodistas de España).

Alo largo de mis años de profesiónen comunicación social, he tenido

la suerte de entrevistar a un buen pu-ñado de misioneros. Hombres y muje-res, en ocasiones religiosos, tambiénlaicos y algún que otro joven en sus pri-meras experiencias misioneras. De to-dos ellos, he aprendido algo, y es quela misión cambia el corazón y la miradade quien la tiene cerca.

No conozco a un solo misionero quetras atender las distintas necesidades quese encuentran en aquellos lugares del

mundo donde llevan el Evangelio,haya deseado regresar a casa. Y esque la misión es hogar, es voca-ción y es entrega.

He de confesar que han sidomuchas las veces que me he que-dado con los dientes largos trasescuchar los testimonios de estaspersonas y he sentido la necesi-dad urgente de entregar mi vidacomo ellos. ¡Hay tanto por hacer!Pero con el tiempo, he aprendidoque también desde aquí, al otrolado, podemos convertirnos engrandes misioneros, mostrandono solo la labor que ellos realizanen los territorios de misión, sinosiendo nosotros mismos portado-res de esa Palabra, porque tam-bién aquí al lado, hay mucha gen-te que no conoce a Jesús.

Si algo he aprendido todo estetiempo es a mirar el mundo conotros ojos. Doy gracias por dedi-

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carme a la comunicación social cadadía, es como un instrumento dondeaportar mi granito de arena en laconstrucción de un mundo mejor.

Bien sabido es que lo que no se co-munica, no existe. Es por ello nues-tro empeño en dar a conocer la vidade aquellos que un día dejaron todopara dedicarse a los demás. Bueno,todo no, porque el amor y la alegríaque desbordan, creo que no la he co-nocido mayor nunca.

Misioneros por el Mundo (en TRE-CE, los domingos a las 13.50 h) nosmuestra cada semana la entrega ylabor que realizan los misioneros es-pañoles. Cuando viajamos a los paí-ses de misión para grabar cada unode los programas que vemos en latele, convivimos de manera directacon ellos. Abrir el corazón a la mi-sión, sin condiciones, compartir unplato de comida, la visita a un cole-gio o un momento de oración signi-fica para nosotros sembrar en cadalugar una pequeña semilla. Una se-milla que luego crece durante elmontaje del programa y que acabadando sus frutos cuando se emite en

la pequeñapantalla. Vi-

vir la misión y mostrarla al mundo. De esta manera, en TRECE nos

convertimos en cómplices misione-ros. Son miles de personas las quecada semana se asoman a Misione-ros por el Mundo. Miles de perso-nas que se contagian de la labor mi-sionera y que pueden contagiar alque tienen al lado.

Me contaba hace unos días uno denuestros redactores, Asell Sánchez,cómo había cambiado su escala devalores en la vida, cómo habíaaprendido a valorar realmente loque de verdad tiene importancia.Son muchos los que han tenido laoportunidad de viajar, en estos ochoaños que lleva el programa en ante-na, a los territorios de misión. Re-dactores y cámaras, personas quehan vivido desde dentro realidadesque nunca habían imaginado, y lashan traído para poder mostrarlas, ynos lo han contado. Sin duda, todoun regalo. Fran, Laura, Paola, Jesús,Sandra, Juan, Asell... me dejo a mu-chos en el camino. Cada uno deellos ha tenido la oportunidad deexperimentar de cerca la misión.

Ver para creer, vivir para contar.Falta decir que Misioneros por el

Mundo tuvo un padre en la tierra queahora nos cuida desde el cielo. Esteprograma fue su gran apuesta, la delinfatigable don Anastasio Gil, el has-ta hace unos meses director de OMP."Desde la debilidad apoyo tu proyec-to en TRECE", fueron las últimas pala-bras que pude cruzar con él, un pro-yecto que es de todos y para todos yque sin el apoyo de las Obras Misio-nales Pontificias no sería posible.

Ese espíritu misionero que teníadon Anastasio, ese gran legado quedeja, es lo que ahora recogemos paracontinuar en la misión a la que todosestamos llamados. Una misión que ca-da día nos recuerda que no se es másfeliz por tener más cosas materiales.Eso nos lo enseñan a diario cada unade las sonrisas eternas de nuestrosmisioneros, enviados en nombre de laIglesia, con el corazón abierto, sincondiciones, como hizo Jesús.

Este es nuestro compromiso enTRECE. Aprendamos a mirar con el co-razón y contagiemos al que tenemosal lado. ¡La misión nos espera!

IRENE POZO HERNÁNDEZ

Sg

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Lidia tiene 19 años y es-tudia Bellas Artes y Di-seño. Su grupo de la

parroquia llevaba años in-tentando organizar el Ca-mino de Santiago, por eso,cuando a principios de2018 le ofrecieron la posi-bilidad de pasar unos díascon los niños en riesgo deexclusión social del barriode "Las 200 viviendas", suprimer pensamiento fue:"Llevamos años hablandode hacer el Camino de San-

tiago y este proyecto nostira abajo la idea". Pero seencontró con una sorpresamayúscula, una "especie dellamada de atención" quele permitió darse cuenta dela necesidad de su presen-cia en ese lugar.

Por las mañanas, juga-ban con los niños en uncampamento urbano y porlas tardes enseñaba espa-ñol a jóvenes migrantes queacudían a clase después dehaber estado durante horastrabajando bajo el sol. Es-tos jóvenes sabían lo quesignificaba el sacrificio (lamayoría había atravesadomedia África para llegar aEuropa a fin de conseguiruna vida más digna paraellos y sus familias). De to-dos sus "alumnos", a Lidia lellamó la atención Amadú,

un joven que todos losdías llegaba a clase con laspalabras que no había en-tendido al ver el teledia-rio, apuntadas cuidadosa-mente en su libreta.

Alejandro tiene 16 añosy es estudiante de primerode bachillerato. Para él nohubo tanta sorpresa comopara Lidia, la misión fuecomo se la imaginaba. Loque más le llamó la aten-ción fue comprobar queestamos tan cerca de si-

Los Padres Blancos hablaron con el párroco de Santa Pau-la (Canillas, Madrid), de la posibilidad de que algunos jóve-nes de la parroquia participaran en el campamento urbanocon niños migrantes del barrio "Las 200 viviendas", en Ro-quetas de Mar. El padre blanco Óscar Arturo García es elresponsable del proyecto. Para este sacerdote, volcado enel tema de la misión entre África y Europa, Roquetas es unlugar importante por la gran concentración de migrantesque acuden a trabajar a los invernaderos de Almería, cono-cidos como el "mar de plástico". En "Las 200 viviendas", losniños pasan solos la mayor parte del día.

Page 17: Los jóvenes cristianos tienen una misión. Así se

tuaciones muy difíciles delas que no nos informan, oque ignoramos. Una niñale contó que "solo podía iral baño una vez al día por-que en su casa no habíabaño y la de su abuelaquedaba lejos"; esta anéc-dota refleja la precariedaden la que viven los niñosde "Las 200 viviendas".

Los jóvenes de #Verano-Misión compartían lo queiban viviendo y lo llevabana la oración. De allí saca-ban fuerzas para enfren-tarse a esa "realidad so-cial" tan dura. Como diceAlejandro, "mi fe ha sidodeterminante, yo no hagolas cosas para conseguiralgo, sino por amor a losdemás". Como lo hacen losmisioneros, que, para estejoven, "llevan la santidaden las manos y en los pies,al ayudar al prójimo".

Veinticinco jóvenes co-mo Lidia y Alejandro parti-ciparon el verano pasadode esta experiencia conlos padres blancos. Eva Se-rrano, una de las respon-

sables del grupo de jóve-nes, afirma que este fue elmejor modo de explicar alos jóvenes de la parro-quia que "todos somosIglesia", y añade: "Nuestraintención era invitarles avivir una experiencia defe, de entrega y serviciohacia los demás, sobre to-do, a los que más lo nece-sitan". Laura Tejedor, otrade las responsables, desta-ca el recibimiento de lospadres blancos, que "nosacogieron con los brazosabiertos". Según Laura, losmisioneros "necesitan mu-cha ayuda" y los jóvenesnecesitamos "salir denuestra zona de confort eimpregnarnos de otra cul-tura que no está tan lejosde nosotros como podría-mos imaginar". Tanto Evacomo Laura creen que esimportante la preparaciónque los jóvenes recibieronvarios meses antes de via-jar, en temas como habili-dades sociales, resoluciónde conflictos, intercultura-lidad, sensibilización sobre

inmigración,prostitución,trabajo pre-cario, etc.

A la vuel-ta, Alejan-dro sintióque "esto setenía quecontar": suespíritu mi-sionero no lellevaba a "fardar", pero sia concienciar y a contagiara muchas personas paraque hagan un voluntariadode este tipo. Lidia da "gra-cias a Dios por esta expe-riencia" e invita a que ca-da uno participe de "formaactiva en su propia misión,sea cual sea". Para esta es-tudiante de Bellas Artes,"el objetivo de todo serhumano en la vida es serfeliz, y en eso ha consisti-do mi verano: en ayudar aotras personas a ser feli-ces" y "ha sido precioso".

La misión continúa des-pués de Roquetas. SegúnEva, la mayoría de los jó-venes sigue colaborando

ahora en las actividadesde la parroquia y conti-núan en contacto con laanimación misionera de suzona (de su vicaría), "abier-tos a nuevas propuestas yexperiencias edificantesque ayuden a construir elReino de Dios en el mun-do, ayudando a los quemás lo necesiten".

ANA FERNÁNDEZ DORA RIVAS

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Parroquia Santa Paula

Carretera de Canillas 115 B,28043 Madrid

+34 91 381 12 [email protected]

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