5

Click here to load reader

Los Muchachos Peronistas - Noemí Girbal Blacha

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Los Muchachos Peronistas -  Noemí Girbal Blacha

Interpretaciones. Revista de Historiografía Argentina. Número 1. Segundo semestre de 2006.

Los muchachos peronistas.

Reflexiones en torno al libro de REIN, Raanan: Juan Atilio Bramuglia. Bajo la sombra del Líder. La segunda línea de liderazgo peronista, Ediciones Lumiere S.A., Nuevas miradas a la Argentina del siglo XX, 2006.

Noemí M. Girbal-Blacha CONICET-UNQ

El Dr. Raanan Rein, Vicerrector de la Universidad de Tel Aviv y profesor de historia española y latinoamericana en ese ámbito académico, presenta en este libro una mirada distinta, heterogénea y compleja sobre el peronismo histórico. Se trata de una obra que es -en parte- continuidad de otras referidas al elenco peronista, que se editaran en 1998 y, con Rosalie Sitman, en 2005 y cuyas conclusiones centrales son reseñadas parcialmente en el primer capítulo de este libro. El trabajo se suma a los más de 3.300 registros (incluyendo documentos primarios) sobre Perón y el peronismo que contabiliza Laszlo Horvath en su recopilación publicada hace más de una década atrás. 1 En esta ocasión, el abordaje que realiza Raanan Rein a lo largo de 5 capítulos muy bien escritos y sustentados en una importante variedad de documentación inédita, se lleva adelante mediante una renovada presentación del género biográfico, aunque paradójicamente eludiendo la biografía como tal, en sus perfiles más tradicionales, para situar a este hijo de inmigrantes italianos -Juan Atilio Bramuglia- como parte de un grupo y, esencialmente, como personaje central del complejo escenario de la Argentina entre mediados de la década del ´40 y el primer lustro de los ´50. Una coyuntura nacional que se ha visto considerada de modo complejo y contrastante en no pocos trabajos, de reciente aparición, que ponderan aspectos diversos del peronismo histórico, como una forma de contribuir a pluralizar las miradas sobre el tema.2 En tiempos de estrecha relación entre micro y macrohistoria, el abordaje que despliega este libro se presenta por demás interesante.3 El archivo documental del personaje que es motivo principal de este estudio (ubicado en la Hoover Institution, Stanford University) es material sustantivo a la hora de abordar la acción y también los perfiles de esta figura, así como la realidad histórica que le sirve de escenario, para avanzar en este enfoque narrativo analítico que propone Raanan Rein. Puede decirse, tal como el autor de este libro lo expresa, que el propósito primordial de esta obra es emprender “el relato de oportunidades perdidas y sobre un líder y una visión política con un potencial que no llegó a consumarse” (p. 13) . La propuesta es -en sí misma- todo un desafío. Como el subtítulo del libro precisa, el objetivo es abordar un asunto soslayado por la historiografía argentina, esencialmente cuando trata la acción del peronismo histórico; es decir, dar a conocer y caracterizar a “la segunda línea” que acompaña a Juan D. Perón en el gobierno nacional entre 1946 y 1955. Un líder popular comprometido con un discurso de confrontación propio de los populismos y que -parcialmente- desde los hechos, procura distanciarse del sector hegemónico más tradicional de la política argentina, construyendo una nueva alianza intersectorial, para dar sustento a su poder y a sus múltiples políticas públicas. 4 Raanan Rein define a estos funcionarios como “intermediarios” del liderazgo peronista, pero aunque no lo exponga explícitamente, también los pondera como actores sustantivos cuando se trata de fortalecer “la doctrina nacional”, que desde 1948 recoge

Page 2: Los Muchachos Peronistas -  Noemí Girbal Blacha

Interpretaciones. Revista de Historiografía Argentina. Número 1. Segundo semestre de 2006.

parcialmente el Manual del Peronista. Algunos de los miembros de ese elenco de la llamada segunda línea, no tienen pertenencia política declarada que anteceda a la creación del Partido Peronista en 1947; pero otros sí. Así ocurre con el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto Juan A. Bramuglia, quien reconoce una procedencia activa en el socialismo. Un hombre de acción e inteligente, a quien Raanan Rein no duda en calificar -haciéndose eco de la opinión de los diplomáticos estadounidenses y británicos- como “el más eminente y talentoso de los ministros de la primera presidencia de Juan Perón” (p.12). Esas condiciones y el talento personal que lo destacan del conjunto de los colaboradores de Peón, son también los rasgos que lo obligan a emprender su alejamiento de la función pública en 1949; como ocurriera con otros hombres que inicialmente promovieran la candidatura de Perón desde el sindicalismo y el Partido Laborista (Luis Gay, Cipriano Reyes) o desde otras manifestaciones políticas, como sucediera con los jóvenes radicales de FORJA (Arturo Jauretche, Homero Manzi, Luis Dellepiane), que pronto resultaron desplazados del entorno del Presidente de la Nación Argentina, por el propio “coronel de los trabajadores”.5 El aporte ideológico y político de Bramuglia a la formación del peronismo embrionario, cuando inclusive fuera parte activa de la redacción del decreto que creara a fines de 1943 la Secretaría de Trabajo y Previsión, es objeto de estudio en el segundo capítulo de esta obra. En estas páginas queda clara la influencia política originaria del futuro Canciller de Juan Perón en el movimiento obrero, a través de su llegada directa a la poderosa Unión Ferroviaria; así como mediante su eficaz desempeño como interventor federal en la Provincia de Buenos Aires. Un distrito que puede calificarse como un baluarte político y electoral para asegurar el éxito de Perón en su trayecto hacia la Presidencia de la Nación. 6 La acción de Bramuglia no puede eludirse a la hora de hacer referencia a “la tercera posición”, como uno de los pilares de la política exterior desplegada por el peronismo histórico por lo menos hasta 1950, cuando el repliegue del líder de los trabajadores sobre esta forma de conducción de la política internacional argentina motive el alejamiento de los nacionalistas de cuño genuino; vale decir, de un elenco que respaldara a Juan Domingo Perón desde sus tempranos orígenes impulsando su carrera política.7 En el marco de la guerra fría, Bramuglia y Perón asimilaron de modo distinto esta política externa pendular, más que de no alineación como afirmaba el líder del peronismo. Es en el tercer capítulo donde el autor de este libro analiza la exitosa actuación del Canciller argentino para mediar entre los bloques del Este y el Oeste, marcando una sustantiva diferencia con el desempeño de quien habrá de sucederlo en el cargo: el joven Hipólito Jesús Paz. Tal vez por esa forma independiente de pensar y de actuar, al producirse la caída de Perón en 1955, fue Bramuglia en tanto representante de un “prisma histórico” (p.16), uno de los primeros en pensar -sin mucho éxito- la remodelación del peronismo; es decir, en auspiciar la posibilidad de establecer un “peronismo sin Perón” (como desde el Ejército lo propusiera tempranamente el General Eduardo Lonardi), a través de la creación y el accionar de la Unión Popular (1955-1962). Este asunto, que muestra otra faceta por demás interesante del ex Canciller, ocupa los dos últimos capítulos de la obra de Raanan Rein. Páginas que se destinan, especialmente, a explicar las causas posibles del fracaso político de la acción desplegada por Juan Atilio Bramuglia desde esta

Page 3: Los Muchachos Peronistas -  Noemí Girbal Blacha

Interpretaciones. Revista de Historiografía Argentina. Número 1. Segundo semestre de 2006.

agrupación partidaria y su frustración al momento de pretender inaugurar una carrera política propia. De las cinco explicaciones propuestas por el autor para considerar este proceso, dos de ellas hacen referencia directa a la lucha sistemática liderada por Perón desde el exilio, que finalmente anulará el surgimiento de un partido político independiente como lo proponía la Unión Popular. Rein pondera, además, la suspicacia de la dirigencia argentina -incapaz de reconstruir la hegemonía perdida y superar “el empate” político-8 a la hora de admitir cualquier expresión política orgánica defensora de las conquistas o reformas sociales, a las cuales indefectiblemente asocia con el socialismo revolucionario. Paradójicamente -como bien sostiene el autor de este libro- negando esa posibilidad se consolidaba el liderazgo a distancia del General Perón. Una acción que también podría rastrearse en el comportamiento de gran parte de los gestores de la llamada “Revolución Libertadora”.9 Más allá de las dudas que expresa Raanan Rein acerca del fracaso político de este abogado sindical avenido a Canciller, es el propio autor quien da la respuesta a esa duda. Lo hace al sostener que “en un país como la Argentina, que ha oscilado entre la inconsistencia ideológica y el dogmatismo más cerrado, hace falta rescatar la trayectoria de dirigentes políticos como Bramuglia” (p.304). Podría decirse que desde esta amplia perspectiva de interpretación, éste no es el único ejemplo de desplazamiento o fracaso. En otros rangos es pertinente consignar casos como el de Domingo Mercante10 (distante de Juan Perón a poco de que éste ocupara la primera magistratura), de varios miembros de “la vieja guardia sindical” y aun de algunos dirigentes gremiales como Augusto Timoteo Vandor, quienes fueron derrotados en sus emprendimientos por el carisma y el liderazgo de Perón, en tiempos y coyunturas diversas. Precisamente, ese es el centro de la cuestión. La historiografía argentina no ha puesto demasiada atención fuera de quienes son los primeros actores en el escenario de cada momento pretérito -como si la oposición no existiera o los funcionarios de segunda línea o los técnicos poco tuvieran que ver con el ejercicio del poder de turno- y este rasgo se hace mucho más notorio en los estudios que abordan el peronismo histórico, cuando es imposible desconocer que se producen mutaciones y reemplazos importantes en el elenco de “los que mandan”.11 El antiperonismo acérrimo encarnado por los hombres de la “Revolución Libertadora”, es un factor que el autor ubica en un segundo plano al momento de explicar “el fracaso” de Bramuglia y con él la posibilidad que el peronismo perdía de convertirse en un partido político reformista, “con rasgos socialdemócratas”, como afirma Rein. De todos modos, si bien ciertamente el aparato partidario peronista funciona como un movimiento, casi como una agencia paramilitar con múltiples controles internos y no como un partido político moderno, no es menos cierto -y habría que destacarlo de modo superlativo- que el antiperonismo post ´55 no fue suficiente tampoco para resolver el tema de: qué hacer con el peronismo en tiempos en que su expresión como partido político era la proscripción y cuando su líder estada físicamente ausente del país, pero reclamando como propio un electorado que cree pertenecerle. Si Bramuglia no resultó un piloto de tormentas eficiente a la hora de conducir un “neoperonismo temprano” (p. 307), tampoco los hombres de la Libertadora lograron convertirse en una alternativa

Page 4: Los Muchachos Peronistas -  Noemí Girbal Blacha

Interpretaciones. Revista de Historiografía Argentina. Número 1. Segundo semestre de 2006.

posible y duradera, al punto de tener que admitir la firma del Pacto Perón-Frondizi en febrero de 1958.12 En síntesis, el libro que presenta Raanan Rein en esta oportunidad es un valioso aporte para comprender los matices y la heterogeneidad del peronismo, que su doctrinaria imagen monolítica y verticalista oculta con insistencia, pero que actualmente están siendo revisados por la historiografía. La trama más o menos solapada que hace posible la acción del líder del peronismo, con su estilo y su estrategia singulares, está en esta segunda línea de funcionarios que aquí se rescata con énfasis, al punto de convertirse en el hallazgo más valioso de la propuesta del autor y del tema abordado. 1 HORVATH, Laszlo (comp.): A half century of peronism, 1943-1993. An international

bibliography, Stanford, Hoover Institution-Stanford University, 1993. 2 SIDICARO, Ricardo: Los tres peronismos. Estado y poder económico, 1946-55/1973-76/1989-

99, Buenos Aires, Siglo XXI Editores, 2002. MACOR, Darío y TCACH, César (editores): La invención del peronismo en el interior del país, Santa Fe, Universidad Nacional del Litoral, 2003. GIRBAL-BLACHA, Noemí: Mitos, paradojas y realidades en la Argentina peronista (1946-1955). Una interpretación histórica de sus decisiones político-económicas, Buenos Aires, Editorial de la Universidad Nacional de Quilmes, 2003. -----: Discursos confrontados. Realidades en tensión. El cooperativismo agrario y la política económica del Estado peronista (1946-1955), en OLIVERA, Gabriela (compiladora): Cooperativismo agrario: Instituciones, políticas públicas y procesos históricos, Córdoba, Ferreyra Editor, 2006, pp.21-57. ANDREACCI, Luciano; FALAPPA, Fernando y LVOVICH, Daniel: Acerca del Estado de Bienestar en el Peronismo Clásico (1943-1955), en BERTRANOU, Julián; PALCIO, Juan Manuel y SERRANO, Gerardo M. (compiladores): En el país del no me acuerdo. (Des)memoria institucional e historia de la política social en la Argentina, Buenos Aires, Prometeo Libros, 2004, pp. 83-116. GARCIA SEBASTIANI, Marcela (editora): Fascismo y antifascismo. Peronismo y antiperonismo. Conflictos políticos e ideológicos en la Argentina (1930-1955), Madrid, Iberoamericana-Vervuert, 2006. COSSE, Isabella: Estigmas de nacimiento. Peronismo y orden familiar 1946-1955, Buenos Aires, FCE-Universidad de San Andrés, 2006.

3 REVEL, Jacques: Un momento historiográfico. Trece ensayos de Historia Social, Buenos Aires, Manantial, 2005.BRAGONI, Beatriz (editora): Microanálisis. Ensayos de historiografía argentina, Buenos Aires, Prometeo Libros, 2004, pp. 17 a 30 y 103 a 117.

4 DE IPOLA, Emilio: Ideología y discurso populista, Buenos Aires, Folios, 1983. TORRES BALLESTEROS, S.: “El populismo: un concepto escurridizo”, en ALVAREZ JUNCO, José (comp.): Populismo, caudillaje y discurso demagógico, Madrid, Centro de Investigaciones Sociológicas, 1987.LACLAU, Ernesto: “Populismo y transformación del imaginario político en América Latina”, en Cuadernos de la Realidad Nacional 3, Quito, CIRE, 1988. BAIROCH, Paul: Mithes et paradoxes de l´histoire économique, París, Ëditions La Découverte, 1995.BOURDIEU, Pierre: Campo de poder, campo intelectual, Buenos Aires, Editorial Montressor, 2002.

5 GIRBAL-BLACHA, Noemí: Mitos, paradojas y realidades en la Argentina peronista (1946-1955) ... op. cit. PLOTKIN, Mariano: Mañana es San Perón. Propaganda, rituales políticos y educación en el régimen peronista (1946-1955), Buenos Aires, Ariel, 1993.

6 DEL CAMPO, Hugo: Sindicalismo y peronismo. Los comienzos de un vínculo perdurable, Buenos Aires, CLACSO, 1983. TORRE, Juan Carlos: La vieja guardia sindical y Perón: sobre los orígenes del peronismo, Buenos Aires, Editorial Sudamericana, 1990. JAMES, Daniel: Resistencia e integración. El peronismo y la clase trabajadora argentina 1946-1976, Buenos Aires, Editorial Sudamericana, 1990.

7 RAPOPORT, Mario: Gran Bretaña, Estados Unidos y las clases dirigentes argentinas, 1940-1945, Buenos Aires, Editorial de Belgrano, 1980.

Page 5: Los Muchachos Peronistas -  Noemí Girbal Blacha

Interpretaciones. Revista de Historiografía Argentina. Número 1. Segundo semestre de 2006.

8 PORTANTIERO, Juan Carlos: “Economía y política en la crisis argentina (1958-1973)”, en

ANSALDI, Waldo y MORENO, José Luis: Estado y sociedad en el pensamiento nacional, Buenos Aires, Ediciones Cántaro, 1989, pp. 301-346.

9 SPINELLI, María Estela: Los vencedores vencidos. El antiperonismo y la “Revolución Libertadora”, Buenos Aires, Biblos, 2005.

10 MATEO, Graciela: “El gobierno de Domingo Mercante: expresión singular del peronismo clásico, en REIN, Raanan y SITMAN, Rosalie (Compiladores): El primer peronismo. De regreso a los comienzos, Buenos Aires, Lumiere, 2005, pp. 211-248.

11 DE IMAZ, José Luis: Los que mandan, Buenos Aires, EUDEBA, 1964. 12 MENOTTI, Emilia: Arturo Frondizi. Biografía, Buenos Aires, Planeta, 1998.