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Los relojes de sol de la Catedral de Jaén
Dos visiones diferentes de un
mismo tiempo solar
Esteban Martínez Almirón
Reloj Andalusí
2
PAPELES DIGITALES SOMBRA SOLAR
Los relojes de sol de la Catedral de Jaén. Dos visiones diferentes de un mismo tiempo solar
© Textos: Esteban Martínez Almirón. Córdoba, 2014
Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial sin la debida autorización.
Edición no venal. Edición optimizada para su visualización en dispositivos móviles.
Ediciones Reloj Andalusí ISBN: En trámite. Depósito legal: En trámite
3
Los relojes de sol de la Catedral de Jaén
Dos visiones diferentes de un
mismo tiempo solar
Esteban Martínez Almirón
4
5
ÍNDICE SOBRE GNOMÓNICA ............................................ 7
Influencia y poder religioso .................................. 7
Renacimiento y desarrollo gnomónico en
Andalucía .......................................................... 17
Relojes de sol en ermitas, iglesias y
catedrales .......................................................... 21
LOS RELOJES DE SOL DE LA
CATEDRAL DE JAÉN........................................... 25
El reloj renacentista de la Carrera de
Jesús ................................................................. 29
El reloj horizontal de la Plaza de Santa
María ................................................................. 35
EPILOGO .............................................................. 47
6
7
SOBRE GNOMÓNICA
Influencia y poder religioso
La Gnomónica, o ciencia dedicada al estudio
y trazado de los relojes de sol, guarda desde sus
orígenes una estrecha relación con la Religión y el
Poder. Ya desde hace unos 4.000 años, los
sacerdotes y astrónomos de los pueblos que
habitaron en los valles del Tigris y el Eúfrates,
Mesopotamia, y del Nilo, Egipto, tras largas
observaciones de la bóveda celeste, lograron
dominar el arte de la medición del tiempo. No
obstante, La primera referencia escrita a un reloj
solar que se tiene viene referida en La Biblia,
concretamente en el Antiguo Testamento, Libro IV
8
de los Reyes, 20, 8-11 e Isaías 38, 5-8, cuando se
comenta que Yahvé hizo retroceder diez grados la
sombra en el reloj solar de Acaz, hecho que se
produjo como señal del cumplimiento de la palabra
divina y que fue comentada por Isaías a Ezequías.
Todos estos hechos se desarrollaron hacia el 750
AC.
Como se ve, en el cristianismo existe una
relación directa entre religión y conteo del tiempo
mediante relojes solares. Ya en el siglo VIII el
monje británico Beda el Venerable describió la
forma de hacer relojes de sol especialmente
pensados para su instalación en monasterios y
catedrales y en los que habitualmente el día no era
dividido en 12 horas, sino en 8, herencia quizás de
la tradición vikinga.
9
En la mitad norte peninsular es habitual la
existencia en los muros de iglesias y monasterios
de “relojes de misa” de limbo circular y de “relojes
canónicos” o de horas canónicas, de limbo
semicircular y de horas desiguales, grabados y
utilizados durante los siglos XI al XV. Con estos
relojes se determinaban las horas –prima, tercia,
sexta o meridies, nona y vísperas, así como el
momento del rezo de los Oficios y de la celebración
de la Misa.
Aunque se trata de relojes de sol que se
localizan habitualmente en el norte peninsular,
también en nuestra provincia, y que yo conozca, en
ninguna más andaluza, podemos encontrar algún
ejemplo de este tipo de cuadrante con origen
netamente religioso. Nos estamos refiriendo, en el
caso de un reloj “de misa” al de la Iglesia de la
10
Natividad de Villanueva de la Reina, descubierto
recientemente en los contrafuertes de un antiguo
templo gótico mudéjar con ocasión de picado de
paredes para atajar humedades y filtraciones.
Durante la alta Edad Media, mientras en
Europa se abría paso el oscurantismo y
languidecían las investigaciones científicas, los
sabios musulmanes enriquecieron el legado que en
materia de Astronomía y Gnomónica habían
recibido de los clásicos griegos, traduciéndolos al
árabe y transmitiéndolos a su vez a la Europa del
Renacimiento. Por ello, el tiempo transcurrido entre
los siglos VIII al XIV es conocido en estas materias
como el periodo islámico, pues la mayor parte de la
actividad tuvo lugar en Oriente Medio, el norte de
África y la Iberia musulmana.
11
Y es que el Islam establece determinados
preceptos y momentos de oración que se
encuentran asociados a exactos momentos del día
y de la noche, como los cinco rezos diarios
definidos por la situación del Sol, especialmente en
las horas centrales del día, o al conteo de los
periodos mensuales, con origen en la posición
lunar.
12
Reproducción en madera del cuadrante
autoorientable de Ibn al-Raqqam
Con tal fin se hizo necesaria la observación
de los cielos, el Sol, la Luna y las estrellas lo que
contribuyó al desarrollo de una ciencia astronómica
de fundamento religioso –miqat- a cuyo frente se
sitúan los muwaqqits o calculadores de la hora,
entre los que en el siglo XIII y XIV destacaron los
13
granadinos Ibn Bas al-Islami y de su hijo Ahmad ibn
Hasan.
Reproducción de una página del manuscríto árabe fechado en 1483 Risala fi’ilm al-Zilal, o Tratado de la Ciencia de la Sombra, obra de Muhammad ibn al-Raqqam al-Andalusi, y
fechado en 1483 que se conserva en la Biblioteca de El Escorial
14
Es habitual que en los relojes de sol
musulmanes sean incluidas las líneas de dos de las
cinco oraciones preceptuadas por el Islam, zuhr,
que comienza inmediatamente después de que el
Sol atraviese el meridiano (mediodía) y finaliza al
comienzo de la ultima oración, ‘asr, que finaliza con
el ocaso.
En el calco de unos de los cuadrantes
solares descubiertos en Madinat al-Zahra que se
reproduce a continuación, puede leerse:
• Inicio del momento de az-zuhr
• Primer momento de al-asr
• Segundo momento de al-asr
15
16
17
Renacimiento y desarrollo gnomónico en Andalucía
Durante los siglos XV y XVI, en las ciudades
del renacimiento, las campanadas ordenaban la
vida urbana y el tiempo se convirtió en una
mercancía tan valiosa como el oro, especialmente
para mercaderes y banqueros. Mientras tanto, en el
campo, el tiempo continuaba midiéndose por el sol,
por intervalos que dependen de factores subjetivos
o por las faenas agrícolas y la iglesia, de otro lado,
continuaba acomodando sus celebraciones
religiosas al movimiento de los astros y a la
sucesión anual de las estaciones.
Pero en medio de todo este revolutum, los
relojes de sol recogiendo el testigo de tiempos
antiguos, que el renacimiento a pesar de todo
18
impulsa, son dispuestos en ermitas, iglesias y
catedrales a modo de exponente del control social
que, también a través de la medición del tiempo, se
ejerce desde la institución eclesial. Asimismo y con
origen de esta nueva configuración del tiempo, se
va produciéndose un trasvase de su control desde
el poder religioso al civil, apareciendo los primeros
ingenios mecánicos ya en 1344, en Padua, y más
masivamente a comienzos del XVI en las grandes
ciudades. Ya no solamente sus iglesias y
catedrales disponen de máquinas de medir el
tiempo construidas por artistas de renombre. La
proliferación de relojes y su instalación en la vida
cotidiana se produce con la invención del muelle lo
que permitirá que en Núremberg se fabriquen los
primeros relojes portátiles, eliminando de esta
19
manera a la institución religiosa de la exclusividad
del control sobre el conteo del tiempo.
En Andalucía queremos destacar dos
poblaciones, ambas en la provincia jiennense, en
los que los relojes de sol son exponentes de la
eclosión gnomónica que acompañó el desarrollo de
esta nueva corriente filosófica y cultural
renacentista que más tarde enlazaría con el
barroco. Además del cuadrante de la fachada
meridional de la Catedral de Jaén, uno de los
objetos de estudio de este documento y que más
adelante expondremos con mayor detalle, nos
encontramos con los relojes de sol de la ciudad de
Úbeda, en la que a fecha actual, aún podemos
encontrar diseminados por iglesias y edificios
civiles, un total de ocho cuadrantes solares del siglo
20
XVII, construidos en las postrimerías de la Edad de
Oro renacentista.
Relojes de sol del Ayuntamiento Viejo (1604) y de la Capilla
del Salvador (1662) de Úbeda
21
Relojes de sol en ermitas, iglesias y catedrales
En Andalucía aproximadamente una cuarta
parte de los más de 400 relojes de sol existentes se
encuentran ubicados en edificios religiosos:
Cementerios, ermitas, conventos, monasterios,
iglesias o catedrales. Pero queremos destacar en
razón a esta última tipología de edificio religioso
que los alberga, las catedrales, que como en el
caso de la de Jaén, existen un total de seis relojes
de sol en otros edificios catedralicios andaluces.
En Málaga se encuentra un reloj vertical en
el antiguamente conocido como patio de las
abluciones, hoy jardines del Sagrario.
22
Catedral de Málaga. Foto: Carlos Esteve
En Sevilla pueden verse cinco relojes de sol
en su catedral, tres en la Giralda, dos situados en la
Terraza de las Azucenas, apoyados en las caras
norte y sur del cuerpo de torre situado en el
segundo piso superior al de campanas y un tercero,
23
de los conocidos como relojes-testigo
probablemente utilizado para poner en hora el reloj
mecánico. Existe una cuarta pieza observable
desde el patio de los naranjos y un quinto, de
pequeño formato, situado en el muro exterior de la
capilla real visible desde la plaza del Triunfo.
Catedral de Sevilla, Muro exterior de la capilla real
24
Por último en el interior de la Mezquita
Córdoba se expone verticalmente un reloj de sol
horizontal que probablemente fue utilizado como
reloj-testigo que sirviera de ayuda para el tañir de
las campanas en sus precisos momentos.
Cuadrante horizontal expuesto en la Mezquita de Córdoba
25
LOS RELOJES DE SOL DE LA CATEDRAL DE JAÉN
La catedral de Jaén fue edificada en el
mismo lugar en el que se encontraba la Mezquita
mayor de Jaén y fue consagrada al culto cristiano
tras la conquista de la ciudad en 1246 por Fernando
III de Castilla.
Se encuentra situada frente a la Plaza de
Santa María, en la que tradicionalmente se han
encontrado el poder civil y el religioso ya que
además de la Catedral podemos ver a su alrededor
los edificios que albergan el Palacio Municipal y el
Palacio Episcopal.
En el interior catedralicio encontramos, entre
otras dependencias, la sala capitular y la sacristía,
26
obra cumbre renacentista de Andrés de Vandelvira.
El edificio actual sustituyó en el siglo XVI el anterior
templo gótico construido en el XV, y fue completado
con su actual fachada barroca en 1660.
En la lonja sur de su fachada, se encuentra
un reloj de sol grabado directamente sobre sus
muros y, aprovechando la sombra proyectada por
una de las cornisas de la esquina de la torre
meridional sobre la propia plaza de Santa María, se
han trazado las líneas horarias y estacionales de un
gran reloj solar monumental. A continuación
exponemos detalladamente las características de
cada una de estas dos exclusivas piezas
gnomónicas.
Debido a la escasa distancia que se
encuentran los gnómones de uno y otros reloj solar,
y a efectos de la consideración de cálculos y
27
ubicación, estableceremos que ambos se
encuentran en el mismo punto geográfico a unos
583 metros sobre el nivel del mar, y situados en las
siguientes coordenadas: 37º 45’ 53” Norte 3º 47’
24” Oeste.
28
29
El reloj renacentista de la Carrera de Jesús
Reloj confeccionado en piedra durante la
actuación de Juan de Aranda y Salazar (1605-
1654) como maestro mayor de las obras
catedralicias, que se encuentra situado en la
fachada situada junto a la Sacristía, que mira a la
Carrera de Jesús, bajo el balcón central,
aproximadamente a la altura del tercer piso.
30
El cuadrante se ha grabado sobre quince
bloques de piedra blanca situados en el muro
meridional de la catedral que en base a consulta
realizada a diversas webs geográficas (Sistema de
Información Geográfica Nacional de España-
SIGNA, Dirección General del Catastro, Sistema de
Información Geográfica de Identificación de
Parcelas Agrícolas-SIGPAC y Google Earth) hemos
comprobado que se encuentra declinado unos 22º
hacia levante, si bien según nuestros cálculos, el
trazado del cuadrante se ha realizado para una
declinación de 15º también a levante, con una
diferencia observable de unos 7 grados positivos
con la real.
31
Conserva el gnomon en perfecto estado,
estando compuesto de una varilla apoyada sobre
un pie que descansa en la línea subestilar. No
obstante se aprecia una mala colocación actual,
posiblemente debido a alguna recolocación por
posible desprendimiento, que no ha sido muy
afortunada ya que el pie del gnomon no se
encuentra en la subestilar, situada entre las 10 y las
11 horas, sino en el espacio situado entre las 9 y
32
las 10 horas de la mañana. En aquel espacio se
observa la propia línea subestilar, en el tramo que
va del centro del reloj hasta el primer semicírculo
horario, así como una reposición con materiales no
originales en el lugar que debió albergar
inicialmente el dispositivo señalador horario.
El limbo o superficie de lectura horaria tiene
forma semicircular con señalamiento de horas
enteras que marcan el horario solar real y con
numeración horaria en caracteres arábigos en la
33
parte superior del arco y en caracteres romanos en
la inferior.
En la parte superior e inferior
respectivamente del limbo aparecen las siguientes
leyendas:
EN TIBI DICO BREVI TRANSIBO
TEMPORE SIGNUM
SED PARCAE TRADITV BREVIO
REPOTES
que en la parte inferior, ya en castellano,
recuerda:
ATIENDE A TI TE DIGO MI CARERA
EN BREVE TIEMPO PASARE LIGERO
MAS PUEDE SER TU MUERTE MAS
LIGERA
34
La leyenda nos recuerda la brevedad de
nuestro paso terrenal.
Por último terminamos la descripción del
cuadrante indicando que a su alrededor se ha
dispuesto una moldura confeccionada asimismo en
piedra.
Dado el posicionamiento erróneo del estilete
de sombra, no vamos a ofrecer la forma de adaptar
la hora solar leída a la del reloj de pulsera, pues
aquélla no es la real, y en cualquier cálculo sería
imposible.
35
El reloj horizontal de la Plaza de Santa María
En marzo de 2011, tras seis meses de
trabajos, fueron concluidas las obras de
remodelación de la plaza de Santa María y su
entorno. Se trataba de una intervención con la que
se pretendía rehabilitar toda la zona y de esta
manera propiciar la consideración de la Catedral
por la UNESCO durante 2014 como Patrimonio de
la Humanidad.
Los trabajos fueron realizados bajo la
dirección del estudio de arquitectura de Salvador
Pérez Arroyo e incluyeron, entre otros elementos
arquitectónicos, un reloj de sol horizontal de
grandes dimensiones aunque parcialmente trazado,
debido a las características que definen la propia
36
plaza en relación con el edificio de la catedral, y al
sometimiento que la ciudad entera padece con
respecto a la sombra proyectada por el Cerro de
Santa Catalina (820 m) y por los cercanos montes
de Jabalcuz, con una altura de 1614 m.
El gnomon de este reloj de sol de grandes
dimensiones está constituido por una cornisa
situada a unos diez metros sobre el pavimento, que
se encuentra en la esquina de la torre meridional
37
del edificio catedralicio y cuya sombra es
proyectada sobre el zócalo de la plaza en la que se
han trazado, en bronce, determinadas líneas
horarias y estacionales con las características que a
continuación se describen.
Sólo han sido trazadas tres líneas horarias,
las correspondientes a las horas 7 8 y 9 de la
mañana, con las siguientes particularidades: La de
las 7 horas sólo es constatable durante poco más
de dos meses y medio al año, el tiempo situado
alrededor del solsticio de verano. La línea horaria
38
de las 8 horas de la mañana puede observarse
durante todo el año excepto desde el comienzo de
la tercera decena de octubre hasta el 25 de febrero
aproximadamente. Por último la línea de las 9 horas
es la única que puede verse completa durante todo
el año.
39
El resto de horas no es observable ya que o
bien la sombra proyectada no alcanza la bandeja
de la plaza, o bien el sol ha atravesado la línea
imaginaria proyectada hasta el infinito de la fachada
catedralicia, dejando de proyectar sombra alguna
desde ese momento.
Las líneas horarias han sido trazadas
adaptadas por corrección horaria al meridiano local
en horario de invierno, es decir que no marcan el
horario solar real, sino la hora solar del meridiano
de referencia, es decir teniendo en cuenta la
corrección por la longitud. Como la catedral se
encuentra situada 3º 47’ 24” al oeste del meridiano
de Greenwich, la hora solar real sufre un adelanto
con respecto a la oficial de 15 minutos y 9,6
segundos. En cambio no se ha tenido en cuenta el
denominado horario legal, por lo que a la hora leída
40
habría que añadirle una hora, en horario de
invierno, o dos, si es de verano.
Asimismo no se han trazado con forma de
línea recta, lo que vendría a representar la sombra
de un sol medio ficticio, sin tener en cuenta la
ecuación del tiempo, sino que se ha representado
mediante el analema o lemniscata horaria, figura en
forma de ocho con el que se pretende la adaptación
horaria solar a la hora leída en un reloj
convencional o de tiempo solar medio, teniendo en
cuenta los adelantos y retrasos del tiempo solar
aparente producidos por la diferente velocidad del
movimiento de traslación y de la inclinación del eje
de rotación terrestre con respecto al plano de la
órbita alrededor del Sol.
En definitiva, como la ecuación del tiempo ya
se encuentra implícita en el analema y como el
41
trazado de las líneas horarias se ha adaptado a la
longitud geográfica, el tiempo universal es igual a la
hora solar, por lo que para obtener la hora oficial en
el reloj de la Plaza de Santa María sólo es
necesario añadir a la hora leída la hora de adelanto
legal, una en invierno, o dos si está vigente el
horario de verano.
Queremos destacar que nos ha producido
una cierta perplejidad el trazado de las lemniscatas
horarias, especialmente en relación a las lecturas
correspondientes a los meses centrales del año,
fechas anteriores y posteriores al 21 de junio,
debido a la extraña forma que la figura adquiere en
estos puntos. Y es que no hemos encontrado
explicación lógica a la deformación que dicha figura
adquiere para esos días dado que no es posible
una regresión del trazado que no estuviera
42
motivado por una deformidad en el zócalo,
inexistente por otra parte.
Analemas de las 8 y las 9 horas respectivamente en los que
se aprecia la deformidad en el trazado, que no en el zócalo de la plaza.
Los analemas horarios descritos se
acompañan de las líneas de entrada del Sol en los
diferentes signos zodiacales que se encuentran en
una posición más perpendicular con respecto a la
fachada de templo. En la parte más meridional se
encuentran las relativas a los momentos de entrada
del sol en las constelaciones de Cáncer, en el
43
extremo, y de Géminis y Leo, y de Tauro y Virgo en
los escalones superiores. En el otro extremo, se
observan las líneas correspondientes a Capricornio,
que va a desembocar prácticamente en la esquina
noroccidental de la plaza, y en la parte inferior a
ésta, las correspondientes a Sagitario y Acuario y
Escorpio y Piscis.
La línea estacional central, correspondiente a
los equinoccios de primavera y otoño, y que
partiendo del extremo meridional de la escalinata
de acceso a la Catedral se dirige hacia la calle
Obispo González, define el eje este-oeste de la
plaza.
Dada una cierta complejidad en la lectura
horaria, se echa en falta un panel explicativo sobre
las características y funcionalidad del reloj solar.
44
Quizás de esta forma se habrían evitado
algunos comentarios como los expuestos por
alguna de las fuerzas vivas de la ciudad, que en
absoluto compartimos, las cuales con motivo de la
inauguración de la plaza en la que se encuentra el
reloj de sol manifestaron lo siguiente “hoy es un día
45
triste para la Catedral, puesto que certifica el
abandono al templo, en beneficio de un capricho y
un modelo, el de la nueva Plaza de Santa María,
que rompe con el estilo renacentista de la joya
arquitectónica”. Pensamos que en toda
intervención arquitectónica, el pasado y el presente
deben conjugarse de manera que respetando los
tiempos, se permita la inclusión de elementos y
símbolos que, apoyándose en los existentes,
proyecten la obra creativa hacia nuevos caminos
interpretativos del espacio en que se encuentran
máxime si en ella se produce la inclusión de
antiguos elementos como son los relojes solares,
denostados por una visión mecanicista del mundo y
recuperados hoy por la unión que suponen con el
cosmos y con anteriores épocas que nos sitúan en
la nuestra.
46
Trazado propio superpuesto sobre el original, en el que se aprecian algunas diferencias, especialmente en los
puntos cercanos a los solsticios.
47
EPILOGO
Más allá del interés arquitectónico, cultural y
de otra índole que encierra el conocimiento del
trazado y construcción de los relojes solares
descritos, con sus errores y sus aciertos, nos
queremos detener en las componentes didáctica y
cósmica que nos ofrecen pues en ellos se
representa el movimiento del astro rey sobre la
bóveda celeste que, a través de la proyección de la
sombra de sus respectivos gnómones, se traslada a
sendas superficies planas en las que describen
toda una suerte de danza diaria y que nos permite
reflexionar sobre nuestro pasado, presente y
futuro… si las nubes y el whatsapp nos lo permiten.
Con esta visión crítica de los relojes de sol
de la Catedral de Jaén, hemos pretendido dar a
conocer alguno de los fundamentos básicos de la
48
Gnomónica y traslucir que analizados desde una
perspectiva simbólica del Poder -religioso, ayer,
civil, hoy- no por serlos están exentos de errores -
cálculo sobre la declinación del muro, reposición
incorrecta del gnomon y trazado del analema
horario- pues al fin y al cabo, ambos poderes
provienen y son muestra de la debilidad humana.
No creemos necesario que para saber la
hora en Jaén haya que acudir a su catedral para,
con determinadas –ciertamente muchas-
limitaciones (durante las primeras horas del día y
con cielos descubiertos) y con las adaptaciones
horarias correspondientes, poder obtener la hora
leída en alguno de los relojes solares existentes.
Lo que sí esperamos es que con estas líneas
hayamos contribuido a reflexionar acerca de las
distintas influencias que la dimensión “tiempo” han
49
proyectado sobre nuestras vidas y ciudades, no
desde una perspectiva tan exacta y perfeccionista
como la observable en nuestro reloj de pulsera o
smartphone, y desde un punto de vista más sereno
y pausado, fomentar el debate no sólo sobre
nuestro pasado cultural sino, sin olvidarlo, sobre
nuestra proyección de futuro urbano en la que los
diferentes puntos de vista enriquezcan el
patrimonio, como modestamente lo han hecho los
dos cuadrantes existentes en el entorno de la
Catedral.
Esteban Martínez Almirón
http://www.relojandalusi.org
50
51
FUENTES: • ANDALUCIA INFORMACIÓN, diario digital de
fechas 27/3/2011 y 29/6/2011
http://andaluciainformacion.es/portada/?a=184707&i=35 http://andaluciainformacion.es/portada/?a=171223&i=35
• LOPEZ ARANDIA, Mª Amparo. “Cuatro relojes.
Cuatro tiempos.”, en Revista Palabra, nº 19, I.E.S. Santa Catalina de Alejandría. Jaén, 2000-2001.
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Los relojes de sol de la Catedral de Jaén.
Dos visiones diferentes de un mismo tiempo
solar
Esteban Martínez Almirón
Edición actualizada al lunes, 07 de abril de 2014
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PAPELES DIGITALES SOMBRA SOLAR