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En el presente trabajo, realizaremos un análisis acerca de “Todos Somos estrellas” película de Felipe de Gregori estrenada en 1993. A través de esta intentaremos probar nuestra hipótesis principal: la televisión produce una falsa imagen igualadora ante el espectador, vendiendo la idea de que para ella todos somos iguales y por lo tanto en algún momento podremos entrar en cámara. Esto conduce a la desrealización de las personas y su remplazo por un simulacro.
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BASAURI MATA, KAREN
UNMSM
LOS TELEVISIÓN Y FALSA LA IMAGEN IGUALADORA EN
“TODOS SOMOS ESTRELLAS”
1. La ilusión de verdad y el registro directo:
La televisión es un medio de masas, en el Perú un promedio del 69% de hogares
cuenta con televisión por cable en la capital y en provincias este número aunque se reduce
al 47% sigue siendo un número considerable, lo cual implica un mayor número de
posibilidades al momento de elegir que ver. Este medio de comunicación nos presenta una
amplia gama de productos y de estrellas, las cuales configura como modelos que más
adelante podrán marcar tendencias y nos servirán de modelos diciéndonos que usar, qué
comprar y en qué forma actuar. Pero si la televisión solo mostrará a este grupo de ídolos se
volvería distante y perdería una parte importante de su influencia, es por eso que una
estrategia es la ampliación igualadora, por medio de esta se nos vende la imagen de que
todos en algún momento podemos entrar en cámara. Pero ¿hasta qué punto todos somos
iguales para la televisión?, la realidad es que la creencia producida en los espectadores de
que todos podemos entrar en cámara en algún momento es falsa.
Todos somos estrellas (1993), película dirigida por Felipe Degregori, nos muestra de
forma clara la falsedad de la premisa vendida por la TV y es que a pesar del título y el
formato ofrecido por el programa de televisión, mediante el transcurrir de los hechos
notaremos el carácter contradictorio del medio. La película nos muestra que una cadena de
televisión transmite el programa “Todos somos estrellas”en el cual cada sábado una familia
es visitada en su hogar, para participar solo se debe mandar cartas al canal y de ese modo
cualquiera puede ganar. Por una confusión la familia Huanvachano es elegida, la cual es
diferente a las familias antes presentadas por lo que trataran de adaptarse
pero al final no llega a presentarse pues se descubre el error y se comprueba que no
califican dentro del modelo que la emisora buscaba.
2
El programa de televisión cuenta con una gran ventaja, su formato permite el registro
y transmisión, técnica utilizada por la Tv para darle mayor veracidad a aquello que
trasmite. Beatriz Sarlo en Escenas de la vida posmoderna hace referencia de la gran
ventaja que posee la Tv sobre el cine y es que el segundo por más que lo intente no puede
trasmitir en directo, debe pasar por un proceso de edición, por lo tanto puede ser
manipulado lo que genera desconfianza por parte del público, pero en el caso de la
televisión esto nos sucede y en “Todos somos estrellas” los hechos son trasmitidos en
tiempo real, lo que da veracidad a los hechos y refuerza la confianza del espectador en lo
que observa, pues lo que sucede en la cámara debe suceder también para los espectadores.
Pero claro, hay un el proceso de producción en el que se oculta del público todas la
intervenciones técnicas y estilísticas realizadas para llevar el producto a la pantalla, en todo
caso sí el espectador llega a ser consciente de estos procesos o intervenciones las pasa por
alto es así que “la institución televisiva refuerza su credibilidad en el borramiento de
cualquier deformación de lo sucedido”1. Así vemos que el formato elegido por “Todos
somos estrellas” no es casual sino que tiende a reforzar la idea de que todo lo transmitido
en cámara es real, se genera la ilusión de “ lo que veo es lo que es, en el mismo momento
en que lo veo… veo sin que nadie me indique cómo debo ver lo que veo, ya que las
imágenes de un registro directo transmitido en directo dan la impresión de que no fueron
editadas”2, en el caso del programa referido no encontramos edición pero si asistimos a una
suerte de manipulación, de puesta en escena la cual revisaremos más adelante. Es de este
modo que podemos empezar a notar la ilusión vendida por la cadena de Tv, se puede
suponer que el lente de la cámara debe captar lo real pues en medio de todo es solo un
lente, la gente asume que es neutral, sin reparar que hay una persona tras la cámara y es
ella quien dirige y elige que es lo que entra en escena y que queda fuera, por lo tanto solo
se nos vende la ilusión de verdad.
2. La puesta en escena:
Empieza el programa, se nos muestra un primer plano de Mery la conductora de
“Todos somos estrellas” luego la cámara se aleja y aparece en escena la familia Miranda,
todos muy bien vestidos, sentados alrededor de una mesa elegante y bien presentada. 1 SARLO, Beatriz. Escenas de la vida posmoderna. Buenos Aires: Seix Barral, 2004. Pag. 75.2Ibid.
3
Posterior mente se muestra una sala, igual de elegante y arreglada, en la cual todos están
reunidos y se le informa al público que la hija de esta familia ha ganada dos concursos de
piano y que el niño prefiere coleccionar estampillas que un viaje a Disney. ¿Se puede
pensar que la serie de sucesos son casuales? ¿Han surgido de manera espontánea? La
respuesta es no, antes de gravar el programa en directo un equipo de producción ha ido a la
casa, le ha indicado a la familia que es lo que debe decir, como actuar y se ha informado de
los méritos de cada uno de los miembros.
Claro que los preparativos técnicos realizados no se muestran en esta primera escena,
sino más adelante cuando aparece la familia Huanvachano como ganadores del concurso y
estrellas de la semana.Umberto Eco en La estrategia de la ilusión nos dice que en la
transmisión aunque sea en directo, esta se ve afectada por una serie de fenómenos:
a)El hecho de saber que el acontecimiento será transmitido influye en su preparación: este
es el punto al cual hacíamos referencia, cuando los Huanvachanos son elegidos ganadores
Mery y su asistente van a su hogar y la segunda procede a explicarles que es lo que deben
hacer, así mismo fija reglas que deben ser seguidas para aparecer esa noche en televisión.
Uno de los requisitos principales es la presencia del padre de familia lo cual es imposible
en el caso de las estrellas de esa semana pues el padre abandonó el hogar hace mucho,
cuando la hija Rita ve en peligro la oportunidad de aparecer en Tv inventa una excusa y
promete que su papá estará en casa. Además a esto se le agrega el aliciente económico, ya
que el programa ofrece 2500 dólares que serán entregados al finalizar la grabación aparte
de los premios entregados, podríamos suponer que este es un medio por el cual la
producción se asegura de que la familia se comporte de la forma esperada.
Es así que en el proceso de preparación observamos que la asistente les indica los
cambios que deben hacerse en la casa, podría decirse que empieza a montarse el escenario
en el cual se grabará en la noche. Por medio de una serie de reparaciones, arreglos y
esconder cosas, la sala de los Huanvachano termina viéndose como la de las familias que
normalmente son presentadas en el programa, el lugar de grabación ideal queda listo.
Otro proceso de preparación es el de los miembros de la familia especialmente Alicia y
Rita, de este modo la película nos muestra una serie de escenas en que se observa a ambas
chicas a Alicia regresando de la peluquería con un nuevo peinado, hecho especialmente
para aparecer en la TV, y otra escena en que se observa a Rita probándose una serie de
trajes y posteriormente ensayando una escena teatral para mostrar ante cámaras. Entonces,
4
podría decirse que se nos muestra primero el armado del escenario y luego la elección del
vestuario como si se fuera a montar una escena.
El segundo fenómeno que señala Eco es: b) la presencia de las cámaras de televisión
influye en el desarrollo del acontecimiento. Esto quiere decir para el caso de “Todos somos
estrellas” que si las cámaras no hubieran estado involucradas los eventos no se hubieran
desarrollado tal y como lo hicieron, en este caso la acción no se habría desarrolla pues es la
posibilidad de salir en cámara lo que inició el cambio en la familia Huanvachano, fue a
partir de este evento que la familia empezó el proceso de adaptación a la imagen de familia
que busca la cadena de televisión. Además queda claro que la familia protagonista está
lejos de mantener una relación armónica y estable, por el contrario como un buen número
tienen problemas de integración ya que pelean constantemente, los hijos no son hijos
modelo sino que le causan problemas constantes a la madre que a decir verdad posee un
carácter bastante débil, de ahí su incapacidad para poder imponer disciplina a sus hijos.
Pero llegado el momento, y esto solo lo podemos intuir, habrían tenido que comportase y
adoptar las maneras de la familia ideal que busca mostrar la cadena de televisión a sus
espectadores, tal como dice Umberto Eco respecto a un evento pero que puede aplicarse
perfectamente a nuestro caso:
“toda la construcción simbólica estaba “predeterminada” en la puesta en
escena previa, todo el acontecimiento…, había sido preparado como un
discurso de base, sobre el que el ojo de la cámara, en su obligado recorrido
debería fijarse reduciendo al mínimo los riesgos de una interpretación
televisiva. Es decir que la interpretación, la manipulación y la preparación
para la televisión precedían a la actividad de las cámaras”3
De esta forma se pasa por un proceso de preparación previa en que la televisión
prepara un producto para venderle al espectador, el programa por medio de una producción
crea una imagen que busca mostrar al público y difundir como verdaderas. En el caso de la
película analizada se busca difundir una imagen de familia ideal muy diferente a la realidad
3 ECO, Umberto.”La estrategia de la ilusión”. Buenos Aires: Lumen de la flor, 1987. En: Obra abierta, pág. 11.
5
del país, que cuenta con una amplia gama de familias con características diferentes y que
en su mayoría no podrán cumplir con limitaciones impuestas por el programa.
2.1 La imagen de familia:
Ya que es la imagen de familia la que es explotada por el programa “Todos somos
estrellas” nos referiremos de manera breve al tipo que difunde. El esquema familiar nos
recuerda mucho al que los intelectuales del siglo XIX, en pleno proceso de la formación de
la identidad nacional, buscaban difundir; en el libro el Abanico y la Cigarrera Francesca
Denegri nos dice: “la élite modernizadora imaginaba al Perú contemporáneo como un
territorio inscrito dentro de las esferas de las naciones europeas blancas, cristianas y
capitalistas”4. Es decir los intelectuales buscaban revalorar la imagen de familia ideal,
buscando consolidar un nuevo imaginario social y familiar en sus obras; al realizar un
paralelo entre las obras narrativas de esa época y la imagen que busca proyectar “Todos
somos estrellas” encontraremos más de una similitud.
Analicemos las características principales presentadas en la película acerca del tema:
La primera característica es que son familias ideales o que se presentan como ideales ante
cámaras, en segundo lugar son familias completas, es decir están formado por ambos padre
e hijos5. Además las familias presentadas por la cadena cuentan con una posición
económica acomodada, esto se refleja en la ubicación de su residencia pues cuando se
anuncia a los ganadores que debían aparecer en un lugar de los Huanvachano estos viven
en Miraflores. Con respecto a los hijos podemos decir que son modelos de buen
comportamiento, en la primera escena los Miranda tienes una hija, que ha ganado dos
concursos de piano y gusta de la música clásica, y un hijo que colecciona estampitas y las
prefiere sobre el viaje a Disney. Por estas razones es que al final la familia de Rita queda
descartada del programa ya que no cuenta con los requisitos establecidos por la emisora.
En conclusión al comparar a las tres familias presentadas: los Miranda, los Huanvachano y
los Cárdenas podemos establecer que en la televisión se vende la imagen de la familia
blanca, instruida, económicamente estable y dotada de valores dejando fuera del formato a
4 DENEGRI, Francesca. El Abanico y la Cigarrera. Lima: IEP,2004, p.97.5 Recordemos que en un primer momento se pone en peligro la aparición de la familia Huanvachano debido a la ausencia del padre, este factor impone una primera restricción a un gran número de familias que no podrán adaptarse al modelo impuesto por la cadena.
6
una gran mayoría. La imagen que se busca difundir no es la real sino una idealización que
termina imponiéndose a la verdadera.
Realizando el análisis de la imagen de familia vendida durante el siglo XIX y la
vendida en el programa de televisión observamos los factores en común: familia ideal,
blanca y burguesa. Amabas versiones sustituyen o deciden ignorar la realidad social del
país y difunden un estereotipo reducido, que excluye al menos al 90% de la población; se
van creando espacios cerrados y exclusivos a los cuales solo algunos pueden ingresar.
Entonces el esquema de familia que se buscaba difundir en el siglo XIX y el que se difunde
en el siglo XX es casi el mismo, el único rol que cambia es el de la mujer que para el caso
del siglo XX y en el programa se presenta como una contribuyente a la economía del hogar
ya que trabajan, mientras que en el siglo XIX la mujer se dedicaba exclusivamente al
cuidado del hogar y los hijos. Por último quisiéramos señalar un paralelo entre estas dos
épocas, en ambas etapas en que se busca difundir la idea de familia ideal el país sale de una
etapa conflictiva, de las guerras civiles (siglo XIX) y en el caso del siglo XX de un proceso
de guerras internas, es decir del terrorismo, esto podría explicar porque se quiere
sobreponer una imagen más armónica de familia que una imagen, que aunque real, es
conflictiva y cargada de contradicciones.
2.2 El papel del presentador:
Pierre Bourdieu en el libro Sobre la televisión realiza una serie de reflexiones acerca
de los debates políticos que según él pueden ser verdaderamente falsos o falsamente
verdaderos, entre los diversos puntos tratados realiza un análisis de las diversas formas de
censura y que creemos son aplicables también en el caso de la película analizada.
Mary Balboa, interpretada por MariellaBalbi, es la conductora del popular programa
e interactúa de manera directa con las familias. En las primeras escenas de la película se
nos muestra la imagen de una conductora carismática, que se relaciona de manera empática
con sus invitados asiéndolos sentir cómodos pero a medida que avanza el filme nos damos
cuenta que la Mary que se presenta ante las cámaras no es la misma que en la vida real. Por
el contrario, tal parece que fuercen dos personas completamente distintas, pues una vez que
se apaga la cámara el personaje se muestra como una mujer impaciente y de mal carácter
que no duda en expresar su desagrado por la familia Huanvachano y llegar a hacer
comentarios discriminatorios.
7
Entonces podemos observar que la presentadora ingresa en el juego de la puesta en
escena y al igual que una actriz entra en su personaje al momento de iniciar la grabación,
es así que podemos escucharla difundir dos discursos totalmente opuestos durante la
película.
El primer discurso es el dicho ante cámaras (discurso falsamente igualador) el que
escuchamos durante la transmisión del programa, en este caso el discurso del conductor
representa también al de la cadena de Tv. Si revisamos la película podemos encontrar dos
momentos clave para ver la formulación del discurso: la primera y la última escena las
cuales corresponde justamente a la emisión de “Todos somos estrellas”.
En los dos programas que se nos muestran a la conductora repitiendo la misma frase:
“Realmente da gusto comprobar, como en nuestro querido y sufrido Perú hay mucha,
muchísima gente valiosa, que al margen de las diferencias raciales, sociales, económicas;
siempre en cualquier lugar, por más grande o chiquito que este sea puede estar brillando
una estrella”. Desde este eslogan se nos vende la imagen de que todos somos iguales y que
las familias presentadas son representantes de la familia peruana, esto queda reforzado si
escuchamos con atención la canción que se transmite durante la presentación del programa:
las frases “compartir con la familia peruana” y “la estrella eres tú”; nosotros somos las
estrellas y como tales en algún momento seremos incluidos. Además el hecho de que sea
utilizada la frase “familia peruana” nos hace suponer que las personas participantes
representan a una gran mayoría, postulado que como iremos observando durante el
desarrollo de la película es falso.
El segundo discurso es el que Mary promueve una vez apagada la cámara, ya
hemos dicho que el personaje que se presenta en el programa es totalmente diferente al real
pues Mery es en realidad una persona bastante irritable, que trata mal a su asistente y que
no duda en sacar a los Huanvachano. La frase que puede representar de manera precisa este
segundo discurso se presenta casi al final de la película, cuando Mary se da cuenta del
error en la elección de familia y Julia le propone que sigan y presenten a los Huanvachano:
“¡no quiero oír más esa estupidez Julia, ¿qué tienes en la cabeza? El programa chicha es el
de las cinco de la tarde, acá no le hacemos la fiesta a los pobres ni regalamos cocinas a
querosene, entiéndelo! Este fragmento de la película resulta fundamental porque revela de
manera clara y concisa el verdadero trasfondo del programa, a pesar de que se venda una
imagen el verdadero discurso es otro y se encuentra camuflado. Además podemos plantear
que no todos los espacios de la televisión están cerrados a familias como los Huanvachano,
Mery nos da esa pista cuando dice “el programa chicha es el de la cinco de la tarde”
8
dando a entender que ese programa sería más apropiado para la presentación de familias
como la de Rita. Entonces vemos que no se prohíbe la entrada absoluta al espacio
televisivo, lo que se hace es limitar la entrada, creando espacios en los cuales a cada
persona se le asigna un lugar, lugar otorgado bajo la influencia de prejuicios y estereotipos
que se buscan reforzar. Y el papel de la presentadora cumple un rol fundamental en la
implantación de estas imágenes, pues al ser mediadora del público tiene la capacidad para
influir en ellos.
Bourdieu nos dice que el presentador realiza intervenciones que coaccionan,
actuando como un medio de censura, pues es él quien impone el tema y la problemática.
En el caso de Mery podemos observar que ella tiene cierta influencia en la elección de las
familias pues no hay ningún problema en remplazar a una con otra cuando estas no se
adaptan a al programa, la conductora participa de los prejuicios que tiene la cadena de
televisión.
Aunque pareciese que el presentador no ejerciera una influencia directa en la forma
en cómo son configuradas las familias y en el concepto que el público terminará
formándose de ellas, Bourdieu nos dice: “el propio presentador interviene de modo
inconsciente por medio de su lenguaje, de su manera de plantear las preguntas de su
entonación”6. Apliquemos lo planteado por Bourdieu a las primeras escenas, en estas Mary
se encuentra con la familia Cárdenas y durante su presentación va a ir utilizando adjetivos
positivos como que “bella familia” “que linda”, “si cada familia peruana fuera un poquito
como ustedes que distinto sería nuestro país”, “es tan lindo ver como se quieren, como se
respetan, que lindo, que lindo”. Pero todas estas atribuciones son complementadas por la
entonación que Mery le da a cada frase, mediante la modulación de voz la presentadora le
da a cada frase un sentido de dulzura y admiración lo que influirá en la opinión que el
público se forme de los Cárdenas, después de todo si un personaje reconocido y popular de
la Tv los admira ¿por qué las personas comunes no?
El espectador es influenciado de esta forma por el presentador que lo guía de manera
consciente o inconsciente hacia una conclusión, mediante el discurso de Mery la cadena
construye la imagen de familia que desean vender: “todas estas cosas se manifiestan
mediante levísimos matices de entonación”7, lo que explica las contantes muestras de
admiración y la caracterización positiva de los Cárdenas pero recordemos que todo es una
puesta en escena que ha sido preparada con anterioridad. Otra de las estrategias a las que
6BOURDIEU, Pierre. Sobre la televisión. Barcelona: Editorial Anagrama, 1997. Pág. 44.7Ibíd.
9
recurre el presentador es la de erigirse como portavoz del público. El que Mery sea un
personaje de aceptación popular la instaura como representante del espectador, es así que
la admiración expresada por ella puede considerarse también como la admiración del
público general y esto los lleve a desear ingresar al mundo de “Todos somos estrellas”;
hemos explicado que este programa vende una falsa imagen de igualdad por lo que se
asume que cualquiera puede ingresar y ser una estrella, pero internamente somos testigos
de un proceso de selección y discriminación de todos aquellos que no cumplen con las
características de la familia ideal.
Se asume que el conductor debe incentivar al invitado, para el caso de la película los
Huanvachano, le tiene que interesar qué es lo que tiene que decir y ayudarlo a expresarse.
Pero no lo hacen y realmente no les importa escucharlos: “no solo no ayudan a los
desposeídos, sino que, por así decirlo, los hunden. De mil maneras: no dándoles la palabra
en el momento adecuado, dándosela cuando ya no la esperan, manifestando impaciencia,
etcétera”8. Mary se muestra impaciente, irritada y molesta en compañía de la familia
Huanvachano, es más no tiene reparo en sacarlos del programa cuando se descubre el error
de su elección “hay todo un trabajo de selección previa: hay personas a las que a uno ni se
le ocurriría invitar”9, así les quita la oportunidad de expresarse y simbólicamente no solo
elimina a esta familias, sino a todas las familias que como ellos no encajan dentro de los
esquemas planteados por la cadena de Tv.
3. La desrealización de la familia: el triunfo del simulacro
En la primera parte hemos analizado como es que la televisión va construyendo su
credibilidad a través del registro y la transmisión en directo, además de como partiendo de
esta ventaja puede empezar a vender una falsa imagen igualadora al público. En la segunda
parte hemos ahondado en el tema, mediante el análisis de la puesta en escena aplicándola a
la película “Todos somos estrellas” así como la revisión de la importancia del presentador
en la construcción del discurso televisivo, debido a la influencia que puede tener sobre el
público.
Una vez establecido el programa “Todos somos estrellas” vende un falso discurso,
debemos analizar cuáles son las consecuencias de la propagación de dicho discurso; la
respuesta es que se ha generado una desrealización de la imagen de la familia peruana. Tal
8Ibíd., pág. 469Ibíd.
10
como indica Mario Perniola “en todos los aspectos de la realidad social la imagen parece
prevalecer sobre la realidad, hasta el punto de disolverla”10, esto respecto a las
transformaciones acarreadas por los medios de comunicación y la nueva publicidad. En el
caso del programa de televisión presentado en la película las consecuencias son las
mismas, la cadena de televisión busca implantar una imagen, una idea de la familia
que si bien puede ser no real es la que ellos desean vender y la que finalmente prevalecerá
al final de la historia.
Cuando hablamos de desrealización nos referimos a que se nos está mostrando una
imagen demasiado ideal y que por lo tanto difícilmente podrá ser encontrada en la
sociedad, no negamos sin embargo que familias como los Cárdenas o los Miranda puedan
ser realmente encontradas, sino que el modelo familiar difundido corresponde a una
minoría y que por lo tanto un grupo amplio de familias la mayoría, no encajará dentro del
esquema impuesto. Por lo tanto se produce a la desrealización de la familia, mostrando en
su lugar a un grupo selecto y difundiéndolo como si fueran parte mayoritaria.
Al inicio de la película se nos muestra una primera imagen que se desea difundir, la
de la familia Miranda como representantes de la familia peruana; posteriormente vemos
que ingresa al programa la familia Huanvachano, que si bien no cumple con los estándares
de la emisora se constituyen como representantes más reales de la familia peruana
tal vez no sean modelos ideales pero muchos de los espectadores se habrían identificado
con ellos, sin embargo finalmente no logran aparecer en televisión porque son
reemplazados por otra imagen: la de los Cárdenas, familia que al igual que la primera
encajan mejor con lo que busca transmitir la emisora.
Al ser remplazados los Huanvachano por los Cárdenas, asistimos al triunfo del
simulacro sobre lo real, cuando hablamos de la puesta en escena plantemos que todos los
sucesos familiares transmitidos habían pasado por un proceso de pre-producción, es decir
las familias son visitadas con antelación por miembros de equipo de la cadena. Esto no
solo supone una puesta en escena sino, además resta credibilidad al programa pues no
sabemos si las familias presentadas se comportan normalmente de ese modo o si es una
conducta adoptada especialmente para el programa. Este es un primer punto, el segundo es,
como ya hemos repetido antes, las familias presentadas con excepción de los Huanvachano
representan a una minoría; en este punto es en el cual hablamos del triunfo del simulacro.
Al haber remplazado a los Huanvachano por los Cárdenas, simbólicamente se remplaza
una imagen original (representación más real de la situación familiar) por una ideal, pero
10 PERNIOLA, Mario. La sociedad de los simulacros. Buenos Aires: Amorrortu editores,2011, p.16.
11
que responde mejor a los fines de la cadena. Entonces triunfa en simulacro, adoptando la
definición que da Perniola sobre este: “el simulacro no es una imagen pictórica que
reproduce un prototipo exterior, sino una imagen efectiva que disuelve el original”11.
Al igual que la imagen efectiva disuelve el original, los Cárdenas desplazan a los
Huanvachano, sin embargo tal como señalamos anteriormente no se les restringe
completamente la entrada al mundo televisivo, sino solo aun sector; tal como Mery balboa
insinúa los Huanvachano no pueden estar en “Todos somos estrellas” porque ellos no son
el tipo de estrellas que el formato busca, pero si pueden encajar en el programa chicha de
las cinco de la tarde en el cual tienen cabida “los pobres”.
Entonces concluimos que la televisión sumados a los demás medios de comunicación
buscan proyectar la imagen de que todos somos iguales para ellos, de este modo van
construyendo su confiabilidad pero realmente vemos que es otro discurso el que va
camuflado. Esto puede derivar en la modificación de las identidades, tal como sucede con
la familia Huanvachano que empieza a cambiar para adaptase al esquema que impone la
cadena, cada uno persiguiendo una finalidad diferente: el deseo de ser famosa o la
ganancia de dinero, pero el punto es que de una u otra forma los personajes empiezan a
cambiar, a adaptarse para aparecer en televisión.
La influencia de los mass media ha crecido indefinidamente en los últimos años, las
cadenas de televisión imponen modelos de comportamiento, sus mega estrellas que marcan
pautas sobre cómo vestir, qué usar y en qué forma comportarnos, poco a poco se van
penetrando en nuestro subconsciente las imágenes difundidas por los medios de
comunicación. Actualmente podemos constatar que las personalidades se están
modificando, que la juventud acepta con mayor facilidad los tipos dados por las cadenas
televisivas y han empezado a adoptar los modos y comportamientos de sus ídolos ya que
como todos somos iguales podemos llegar a ser como ellos, un proceso al cual debemos
estar atentos, no sea que al igual que en “Todos somos estrellas” el simulacro venza a la
realidad.
Bibliografía11Ibíd., p.31.
12
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abierta.
DEGREGORI, Felipe. “Todos Somos estrellas”. 1993, 26 mayo de 2015, 20:30 h.
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GARCÍA Canclini, Néstor. Consumidores y ciudadanos. México D.F: Grijalbo, 1995.
NUÑEZ; Trinidad. “Arrinconando estereotipos en la televisión .Un análisis transnacional.
En: https://idus.us.es/xmlui/bitstream/handle/11441/23743/arrinconando.pdf?sequence=1,
20 mayo de 2015, 16:00 h.
----------------------“Influencia Social de los Medios de Comunicación: de la Información a
la persuasión”. En: https://kurtlewin.files.wordpress.com/2008/04/syllabus-media.pdf, 25
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2011.
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SARTORI, Giovanni. Homo videns. La sociedad teledirigida. Buenos Aires: Taurus, 1998.
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