Los Templarios Los Druidas y El Iniciado

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Los Templarios Los Druidas y El Iniciado

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LOS TEMPLARIOS LOS DRUIDAS Y EL INICIADO

Tres eran las misiones que tenan encomendadas los templarios, las cuales fueron propuestas por San Bernardo:Encontrar el Arca de Moiss. Construir el Templo. Promover la Civilizacin Occidental.

Bayard nos habla en "El secreto de las catedrales" del secreto inicitico y su razn de ser, y de la sociedad inicitica y simblica, del simbolismo de la piedra y de la talla, de las herramientas y de la planta de las iglesias. Elementos como las linternas de los muertos, los laberintos y las criptas; el emplazamiento del templo, la consagracin de los cimientos, la orientacin y la luz...Templo de Salomn

Rafael Alarcn ,en "A la sombra de los templarios" nos dice que "los constructores intentarn, en la realizacin arquitectnica, la plasmacin de su ocultismo, por que en la Edad Media el edificio no era una simple estructura funcional, responda a una funcin, s, pero en otro sentido. Modelar la materia, trabajarla y proporcionarle una forma determinada, era algo ms profundo, iba ms all del trabajo tcnico, porque el fin de la materia no era representar o albergar a la divinidad para invocarla, sino que era realmente un medio por el que la divinidad se expresaba. Siendo pues una cualidad de la materia el albergar en su seno a la divinidad, a la Idea superior, trabajarla adecuadamente era hacerla expresiva permitiendo de este modo que lo divino superior pudiera comunicarse a travs de ella, dar un mensaje a los hombres".Por eso el aprendizaje del oficio no poda ser un vulgar acto de memorizacin tcnica, o meras prcticas de habilidad manual. Deba ser, por encima de todo un Conocer ntimamente la naturaleza del Cosmos, del Universo -en el sentido amplio del trmino-, del modo ms completo posible. El aprendiz, deba integrarse, hasta donde el poder de captacin lo permitiese, en la esencia de la Tierra, de la vida, por medio de la experiencia personal en el contacto con la materia. Deba "iniciarse".A la vez precisaba un perfecto conocimiento de los smbolos, su significado y sus interpretaciones, a fin de hacer posible el sincretismo que permitiera saltarse las normas ortodoxas imperantes con el mnimo peligro."Slo a travs de un esfuerzo continuado, a travs del trabajo personal, se puede penetrar la filosofa de una profesin, cuyos secretos son comunicados nicamente por los maestros ms experimentados."Se comunican mediante enigmas: el alumno debe realizar un esfuerzo de asimilacin, debe investigar. Estos conocimientos no se comunican a nadie del exterior ni a los seres perezosos. El sentido interior, esotrico, se vela bajo el manto de una oscuridad voluntaria que slo puede ser penetrada por los que poseen la primera letra. El lenguaje de la alquimia es alegrico.Los sacerdotes tienen una forma secreta de comunicarse; sus libros pueden leerse en tres sentidos y a menudo emplean una escritura jeroglfica que les permite comunicarse mediante smbolos. Los druidas prefirieron la enseanza oral, con lo que obligaban a la memoria a trabajar.El hombre vive en sociedad; con el juramento de guardar el secreto sobre el que se asienta su grupo, se forma la base de la sociedad inicitica. Es necesario "marcar" al nefito mediante una ceremonia apropiada y hacerle plenamente consciente de su investidura. Procedente del mundo exterior, profano, se integra as en una nueva vida. El poder de la inicicin le transfigura. Tras su muerte simblica, el paso a travs de la puerta estrecha es verdadero renacer. Para sealar este cambio de estado, este renacer, el individuo toma un nuevo nombre, como hace el rey al ser coronado, el papa al ser nombrado o las religiosas al hacer los votos; en las sociedades iniciticas, el individuo es "bautizado".Por elevacin de su pensamiento tradicional, esta sociedad no puede tener objetivos polticos o religiosos, ya que evita cualquier forma de dogmatismo. Es tolerante y slo tiene reivindicaciones espirituales. Los smbolos hablan y se transmiten segn el grado de desarrollo espiritual del individuo. Bajo la apariencia visible se penetra la esencia de los seres y de las cosas. La escultura arquitectnica llena todo el espacio que le est destinado sin preocuparse de las proporciones reales; los capiteles forman a menudo una serie y deben ser descifrados de norte a sur en el sentido de las agujas del reloj, pues estn ordenados de tal modo que su emplazamiento preciso juegue con la luz y las sombras.Toda religin ha velado sus enseanzas; Clemente de Alejandra deca que "los misterios no deben ser revelados ms que a un auditorio examinado de forma oral y no mediante escritos". Los druidas transmitan sus enseanzas por va oral; Jess se expresaba mediante parbolas y San Mateo dijo (VII, 6): "No arrojis vuestras palabras a los cerdos".De este modo, el smbolo, lenguaje mudo, define el edificio religioso, sometido a la ley de lo ternario. En realidad se trata de una compleja red de influencias, tradiciones y costumbres en la que el pasado se incorpora al presente y cada detalle tiene su importancia. Los signos se multiplican e invaden todo el espacio. El tringulo equiltero es el de la Divinidad, pues posee todas las perfecciones, pero tambin se trabaja con el escaleno y, sobre todo, con el de Pitgoras. Para subir al altar, hay tres escalones y para acceder al prtico hay tres, cinco o siete peldaos, siempre un nmero impar.El crculo participa en el trazado regulador; el rosetn -o la rosa- es circular. Esta forma, absoluta e inmutable, es la imagen de un inicio sin fin; significa la eternidad. Su centro es el principio generador.Aparte de las formas geomtricas simples, los siete metales se asocian a las doce casas astrolgicas... Sus atribuciones, retomadas por la Iglesia romana, se encuentran ya en las doctrinas del mitrasmo.El cristianismo tuvo muchas influencias de las religiones anteriores, particularmente del druidismo, que permaneci activo hasta el siglo VI de nuestra era. Ceremonias como la de la misa, las vestiduras sacerdotales o la forma de nuestros primeros templos se encuentran ya en el pasado pagano. La catedral se edifica en el emplazamiento de un templo idlatra o de un menhir. El mito de la serpiente o el culto a la diosa madre, ya existan en civilizaciones muy antiguas, en todos los continentes. La cripta es el templo mgico; al igual que la cueva situada bajo la montaa sagrada posea una cmara secreta.Los libros sagrados de todas las religiones muestran esta universalidad de los cultos; las misma actitudes religiosas se alimentan de los mismos smbolos atvicos. En este simbolismo, el claustro -lugar intermedio entre la iglesia y el monasterio- toma la forma de un cuadrado con una fuente central; los jardines, que representan el tercer recinto, dan paso a la Jerusaln celestial.El arquitecto debe sacar a la luz esta sabidura, debe inspirarse en el pensamiento tradicional para poderla transmitir, pues su funcin es la de mensajero.El simbolismo de la piedra y de la tallaEn los tiempos ms remotos de los que tenemos noticia, observamos la veneracin de la que ha sido objeto la piedra por parte del hombre. Es considerada la morada de Dios e incluso su cuerpo.Los misteriosos menhires, la piedra de la religin drudica, la piedra negra de La Meca; en todo el mundo se venera la piedra. Los reyes ingleses, en su coronacin, se sientan sobre la Lia Fail o piedra del destino, piedra venida de Irlanda y que habra servido de soporte al Arca de la Alianza.El nombre de Dios sigue siendo una incgnita y, por lo tanto, es impronunciable. Si se conociese su verdadero nombre, gracias al poder del sonido y del ritmo, se podra forzar al Poder Divino que acudiera en nuestra ayuda. Slo conocemos nombres sustitutivos; pero en el sanctasanctrum, una vez al ao, el Sumo Sacerdote puede pronunciar el Nombre Divino con la entonacin precisa.A este respecto Almazn nos recuerda: "En cuanto al nombre hebreo de Dios, el tetragrnmaton JHVH (Yod-He-Vav-He), que es impronunciable al carecer de vocales, los ocultistas dicen que es la clave kabalstica de la llamada Palabra Perdida, que los masones identifican con el verdadero nombre de Dios, y que se revela ritualmente en la Masonera del Arco Real, de la Bveda Sagrada o del Cuarto Grado (la esencia suprema masnica). La Palabra Perdida de Hiram es la pronunciacin kabalstica correcta del tetragrnmaton".El arte de la talla influye en todo el conjunto de la construccin. Los ritos de los maestros talladores eran los ms estrictos; este oficio, junto con el de los carpinteros, es el que encierra el valor inicitico ms absoluto, rigurosamente transmitido."La piedra cuadrangular se orienta como la piedra del altar, hacia los cuatro puntos cardinales. Mahoma venera la piedra angular, segn las palabras de Isaas (XXVIII, 16-17):"He aqu que he puesto en Sin por fundamento una piedra, piedra probada, piedra angular y preciosa, slidamente asentada; el que en ella se apoye no tituber. Y del derecho har regla y de la justicia har nivel".La piedra angular se incorpora al edificio como parte superior de la bveda celeste, y tambin como la "piedra rechazada" por los constructores; se convierte en la "cabeza angular" de la Escritura. San Mateo reproduce as la palabra de Jess (XXI, 42): "La piedra que los edificadores haban rechazado, sa fue hecha piedra angular; del Seor viene esto, y es admirable a nuestros ojos".En un ritual de la masonera de Las Marcas, se dice: "La piedra que haban rechazado los constructores ha pasado a ser la piedra maestra angular". De hecho, la clave de la bveda debe ajustar con precisin absoluta en el resto de la cosntruccin y, en estos ritos de francmasonera, constituye la prueba de capacidad del candidato.La piedra angular se relaciona con la "finalizacin de la obra", ya sea en el sentido espiritual, alquimista o inicitico. "Es, propiamente, la piedra que "termina" o "corona" un edificio; y es tambin un capitel, que es el "coronamiento" de una columna".Esta piedra slo puede ser colocada desde las alturas, desde el exterior, lo que nos indica su carcter celeste. Por esta razn, el eje que atraviesa este orificio es el axis mundi, muy a menudo materializado en una plomada.Se podra pensar en una figuracin anloga en la estructura de madera, puesto que la cumbrera se forma por la reunin de tres piezas de madera, tambin llamada "pata de ganso". C. Kh. Iablokoff, en su estudio sobre el simbolismo de las Dames pdauques, lo relaciona con el rbol del Mundo de tres ramas, en cierto modo asimilable al tridente. Teniendo en cuenta que Jess era carpintero, este autor propone la idea de que la "realizacin de la Gran Obra est representada por la persona y la misin mesinica de Cristo, as como por su resurreccin".Segn Iablokoff, a los esclavos se los crucificaba en cruces con brazos en forma de V; relaciona as la cruz, el rbol de la Vida y la "pata de ganso".Otros acontecimientos se relacionan con la piedra angular y la clave de la bveda. En la pieza maestra se imprime la marca personal, la firma secreta que testimonia el poder creador del hombre. Estas marcas lapidarias son de la misma naturaleza que la famosa "piedra blanca". La piedra totmica, emanacin del poder subterrneo, simboliza la eternidad, la sabidura. Tallada a imagen del hombre, se convierte en estatua e incluso puede tener espritu. Este mismo tema es el que se esconde tras las leyendas de Don Juan, que se debate con la estatua del Comendador; es asimismo el de la estatua animada del misterioso Golem. Mitra nace de una piedra; Jacob erige la piedra que le ha servido de almohada y Moiss levanta doce piedras al pie del Sina. Todas son seales que corresponden a la poca de los megalitos.La piedra, antes de integrarse en las fastuosas catedrales, encierra en s misma grandes secretos: la riqueza y la fuerza de los tres reinos. Esta raiz de la humanidad, este ombligo de la tierra, es una fuerza nuclear; triunfa sobre todo, como en la operacin alquimista. Es el fruto de la unin entre el cielo y la tierra y representa la vida y lo sagrado, una realidad absoluta que hace vibrar los santuarios ms hermticos.El simbolismo de las herramientas"La forma simblica de la herramienta instaura un orden de fuerza, un poder mgico que hechiza. Las herramientas son veneradas: no slo se cuidan, sino que es preciso aprender a emplearlas con amor, en el respeto de la tradicin; la herramienta es el reflejo de la personalidad del que la ha creado.En los concursos destinados a ganar una plaza para trabajar en ella, el maestro, al entregar su obra, destrua todas las herraminetas que haba utilizado en el transcurso de su ejercicio. La herramienta, prolongacin de la mano, se respeta y se decora; el til es un talisman para quien lo posee. El principiante slo podr servirse de ellas tras un largo aprendizaje.El taller se convierte en un santuario; en l se trabaja al tiempo que se medita. De la repeticin de los mismos gestos nace una solidaridad entre los miembros de un mismo oficio, fraternidad que desemboca en un acto espiritual.Esta accin interior es lo que constituye la base de los rituales iniciticos, que tienen como objeto el perfeccionamiento del individuo mediante la unin del gesto y el pensamiento. Los tiles de la corporacin (escuadra y comps, a los que hay que aadir la herramienta distintiva de profesin, con lo que suman tres) quedan de este modo cargados de un simbolismo operativo de gran alcance".El simbolismo de la planta de las iglesiasEn cuanto a la planta de las iglesias, "se establece en funcin del culto, del simbolismo religioso y de la fe de los fieles. Antes de la poca medieval, el templo era concebido en forma de rectngulo, generalmente con tres recintos; despus se estableci la planta de cruz latina, por imitacin del Templo de Salomn".Planta de TemploLas baslicas antiguas pueden tener una planta rectangular o un sistema de cruces diversas, tal como se observa en Armenia. Hay ejemplos de formas hexagonales, octogonales, circulares, recintos triples con pasillos circulares, espirales y laberintos, pero ninguna planta ha sido impuesta por la liturgia.No obstante el santuario es tambin la gruta, el centro inicitico por excelencia. Tiene el poder mgico de la cueva. Es un lugar donde se recibe vida y donde el cuerpo es enterrado; todo nace en esta matriz y todo retorna a ella. Jess, Mitra, Zeus, Hermes, Lao-Tse y otros dioses nacen y son inhumados. Todos los que poseen una fe comn y son perseguidos se renen en cuevas, lo que hace decir al inquisidor Bernardo Gui (1263-1331): "Durante mucho tiempo, los herejes han permanecido rebeldes a la luz, ocultndose ora en las montaas, ora en grutas y cuevas, como hacen los bhos y los hijos de las tinieblas."El mundo del subsuelo, en el que el sistema nervioso del nefito entra en contacto con las fuerzas telricas, es el de la Gran Paz, el del recogimiento a salvo de los ruidos exteriores.En este aislamiento, el hombre puede concentrarse, meditar, orar; su pensamiento se regenera. El templo secreto es el lugar del equilibrio, el medio invariable. En ese punto se concilian y se resuelven todos los opuestos. Es el santo sepulcro. Debera tener forma circular, pues es un Centro del Mundo que irradia en todas direcciones sin que ninguna sea ms importante. Parece ser que la rotonda, reservada para los edificios de gran importancia y a la que se otorga un prestigio excepcional, dio nacimiento a otros santuarios de forma circular.Se cree que la planta octogonal es smbolo de las ocho bienaventuranzas. Igualmente, la planta hexagonal se relacionara con los seis das activos de la creacin, aparte de que el seis era el nmero de la armona.Otras iglesias se construyen segn una planta en forma de trbol, el signo de la trinidad; el trbol simboliza adems la resurreccin.Todas las formas, todas las plantas sagradas son as interpretadas segn la enseanza cristiana.Linternas de los muertosLas linternas (o cupulinos) de los muertos son pequeas construcciones emplazadas en los cementerios, generalmente aisladas o situadas sobre un edificio. Ms altas que anchas y abiertas por los lados, terminan en una lucernaria o un campanil calado, de forma piramidal o cnica, a menudo con una cruz o un florn de piedra. Estas construcciones, romnicas o gticas, aparecen a partir del siglo XII y desaparecen al final de la Edad Media. Estas linternas, proyectoras de las almas de muertos hacia la Divinidad, tienen una funcin de vigilancia; en ellas se mantiene una llama continuamente encendida, que es a la vez una oracin y un exorcismo: ahuyenta a los malos espritus. Esta luz preserva a los vivos, vela sobre los difuntos y obliga a tener presentes a los antepasados. Quizs sean las "lmparas inextinguibles".Los laberintos y las criptasEl laberinto de las catedrales, o laberinto de Salomn, es una figura cabalstica que se encuentra al principio de ciertos manuscritos alqumicos y que forma parte de las tradiciones mgicas atribuidas al nombre de Salomn. Es una serie de crculos concntricos, ininterrumpidos en ciertos puntos, de manera que forman una trayectoria chocante e inextricable. Los laberintos del interior de las catedrales, en forma de intrincada red de meandros, ya no son construidos en las profundidades de la tierra, sino a ras de suelo. Suelen ser de forma circular, pero algunos son octogonales e incluso cuadrados. El ms conocido es el de Chartres. El laberinto de Saint-Quentin, es tambin llamado "lengua de Jerusaln"; se dice que cuando los Santos Lugares se hicieron inaccesibles, el peregrinaje a Jerusaln fue reemplazado de forma simblica por el recorrido, de rodillas, de este complejo laberinto. Los laberintos, se pueden recorrer para encontrar la piedra filosofal, tienen en cuenta a los profanos y les incitan a descubrir lo que est detrs del espejo, les recuerdan la necesidad de coger su bastn de peregrino y emprender la bsqueda de la "Palabra Perdida" que revela el trazado del laberinto.Slo el arquitecto iniciado conoce el mapa de los mundos, que se remite al plano geomtrico de la Estrella Resplandeciente, que brilla desde el microcosmos hasta el macrocosmos. La masonera filosfica reemplaz el laberinto de los primeros tiempos por la escuadra, el comps y el libro del conocimiento. El laberinto simboliza el camino de la vida; es el viaje inicitico que conduce de lo efmero a lo eterno, de lo profano a lo sagrado.En cuanto a las criptas, no faltan estudiosos que insisten, y no sin razn, en que muchos monasterios y templos se levantaban sobre lugares de poder marcados por el cruce de corrientes energticas de la Tierra. En algunos casos, las columnas de ciertas criptas cumplan la funcin de agujas de una acupuntura terrestre, obrando, lo mismo que los menhires de la protohistoria, como conductores de las energas telricas, para que stas actuasen sobre quienes oraban o meditaban en aquellos antros especialmente sagrados, buscando absorber la fuerza espiritual que transmite la Madre Tierra a quienes saben buscarla y aprovecharla. Este aprovechamiento de las fuerzas telricas a travs de las criptas podemos encontrarlo frecuentemente en el Camino de Santiago, como por ejemplo en el monasterio navarro de Leyre.El emplazamiento del templo, la consagracin de los cimientos, la orientacin y la luzEl santuario es edificado en el emplazamiento exacto de un templo anterior. Es un hecho sorprendente y contrario al espritu del constructor, que prefiere un terreno en el que an no se haya edificado para asentar unos cimientos de cuya resistencia puede estar seguro. Construir sobre otro edificio significa encontrar restos de antiguas cimentaciones que pueden entorpecer las obras, en las que no se puede confiar y que deben, sin embargo, recibir nuevas cargas. Si se excava en un terreno virgen, se puede construir la cripta como se desee, para instalar en la penumbra las reliquias ms preciadas o la sorprendente estatuilla de la Virgen negra.Chartres, por ejemplo, se fund sobre una cueva que todava conserva vestigios del culto drudico. En Espaa, muchas iglesias y catedrales fueron erigidas sobre antiguos templos paganos, sobre castros celtas o romanos y hasta en antiguas ubicaciones o en las proximidades de altares megalticos."La iglesia que domina el pueblo se levanta sobre un cerro, al igual que los dlmenes dominaban las zonas circundantes; la palabra es revelada sobre la montaa sagrada; hay que subir los peldaos de una escalera para alcanzar el lugar santo. En lo alto de la colina suele haber una fuente. Por lo general, las iglesias poseen pozos y, muy curiosamente, cerca de ellos suele velar una Virgen negra".Para el emplazamiento original de la construccin no se buscara una fuente, un pozo? Para emprender la construccin de pozos muy profundos hay que disponer de excelentes zahores y no tener miedo a iniciar trabajos costosos y azarosos. No indica esto una obligacin litrgica? Todo esto me hace pensar en las aguas vivas del bautismo, en las corrientes telricas, en los campos de fuerza.La eleccin del emplazamiento del templo lleva a la determinacin del centro, del punto en el que se levanta el altar. Todo empieza en este ncleo del edificio y todo regresa a l. En el confluyen las fuerzas de atraccin y emanacin. Todo el edificio se ordena alrededor de este eje, un centro ms del mundo.En este sentido, la ciudad y el templo son un "mandala", una configuracin simblica del camino que lleva a los iniciados a identificarse con la divinidad. El mandala tradicional hind es una imagen del mundo y, para el que contempla y medita sobre esta forma que asocia el crculo y el cuadrado, significa acceder a un estado secundario, a una iluminacin.Como veremos a partir del trazado regulador del edificio, todos estos crculos trazados con el tringulo y el cuadrado inscritos no corresponden a la emocin del arquitecto que, al contemplar la obra, llega a un estado espiritual de desdoblamiento? En la superacin de su conciencia el creador se impregna de formas que le conducen a la bsqueda de la unidad divina. El emplazamiento, vinculado a las fuerzas terrestres, depende tambin de las fuerzas csmicas. El lugar est relacionado con las constelaciones. Basndose en la astrologa, Jean Richer traz una serie de mapas en los que las influencias de unas ciudades sobre otras se explican a partir de las constelaciones.Encontrar el emplazamiento justo no es tarea fcil y, sin embargo, las elecciones de los antiguos parecen muy acertadas: rigurosos anlisis y los aparatos de deteccin confirman que estos puntos estn determinados por radiaciones y corrientes. Los fieles se renen en un lugar sometido a las emanaciones de una poderosa fuerza csmica, a una irradiacin saludable. El lugar sagrado no es escogido por el hombre, es descubierto por l.Por otro lado, todo nos hace pensar que los primeros lugares de culto fueron parajes naturales. Los bosques, las rocas, las fuentes y las cuevas eran la morada de las divinidades. Las pinturas rupestres, con su empleo del ocre rojo, hacen pensar en un culto basado en el sacrificio y en el valor de la sangre; la piedra misma es la morada de un dios y, de una manera general, un espritu -como el de la muerte- puede introducirse mgicamente en la piedra. El edificio se beneficia de la presencia de espritus que ayudan a los humanos".El simbolismo de la cabeza cortada se observa en los ritos de construccin. Tarquino el Soberbio, sptimo y ltimo rey de Roma, hizo edificar un templo dedicado a Jpiter; durante el asentamiento de los cimientos encuentra la cabeza an ensangrentada de un hombre y a partir de entonces este edificio se llama "Capitolio". En muchos cuentos, las cabezas de los muertos hablan y aconsejan a los vivos, tal es el caso de las leyendas bretonas. Al pie de los megalitos se han encontrado numerosos huesos rotos y sabemos que los celtas golpeaban el crneo del muerto con la ayuda de un "martillo bendito". El entierro de una cabeza santa, aun sin el cuerpo, santificaba el lugar.Los cimientos del edificio religioso son as bendecidos mediante un rito mgico que con frecuencia se basa en la colocacinb de una cabeza, receptculo de todos los misterios, sede de la iluminacin interior. La cabeza del muerto emana una energa csmica; el muerto, que ha conocido nuestro mundo, se encuentra ahora en otro medio y, de este modo, puede aconsejarnos.Para propiciar la fuerza benvola de los espritus invisibles, particularmente el de las divinidades subterrneas, es necesario sacrificar a un hombre: la sangre que riega la tierra es una verdadera ofrenda, muy del agrado de los dioses. Al verter su sangre, Jess redimi nuestros pecados. Se sacrifica a los siervos, pero tambin sirven las cabezas de los enemigos muertos en combate, pues stos, vencidos, se convierten en amigos y protectores, como lo son los fieles sirvientes. Este sacrificio, un rito corriente, no puede ser considerado un suplicio: la vctima, orgullosa de convertirse en un espritu guardin, acepta entrar en el espritu de la construccin, donde su doble espiritual proteger a sus compaeros.La inmolacin de seres humanos y animales (caballos, toros, ovejas) est presente en todas las civilizaciones arcaicas. Se puede enterrar a un hombre bajo los cimientos -los llamados "pilares humanos" -, pero tambin se puede mezclar su sangre en la tierra o en el agua que despus servir para fabricar ladrillos o tejas.La prctica del sacrificio humano ha sido demostrada por los arquelogos. La Biblia slo habla de ella por boca de Josu (VI, 26) y en el Libro I de los Reyes (XVI, 34), pero es indudable la existencia de reminiscencias de estos ritos en las inmolaciones de gallinas y corderos. La Biblia menciona con cierta frecuencia los sacrificios de toros y ovejas, como cuando David instala en el monte Sin el arca de Yahv o cuando Salomn inaugura el Templo.Las construcciones e inauguraciones de los templos han estado rodeadas de ritos muy complejos destinados a sacralizar el lugar. Estando ya exorcizado, ese lugar concreto donde se debe reconstruir el nuevo templo que sucede al anterior y que se beneficia de las purificaciones antiguas, pues la magia sigue activa.Vitruvio menciona que la edificacin del templo empieza por su implantacin y que los trabajos de orientacin se inican al medioda. En el centro del recinto sagrado se planta una estaca, el axis mundi. A partir de este eje se describe un gran crculo y en el momento en que la sombra proyectada por el eje es ms corta, se determina la direccin norte-sur. De este modo, se puede determinar el lugar por donde sale el sol en relacin a dos columnas, especialmente durante los solsticios y los equinoccios y tambin la latitud del lugar.La salida y la puesta del sol influyen en la vida vegetal y animal, marcan un ritmo. Tras las horas estn las estaciones; se determinan las direcciones primordiales, pues el cuatro, smbolo del mundo material, es la base de la cruz y el cuadrado, cuyo centro es el omfalo, el ombligo del mundo. Sobre la piedra del altar cbico se encuentran las cinco cruces consagradas, que recuerdan que Dios se manifest en la piedra de Jacob.La Iglesia catlica y romana orienta sus iglesias sobre el eje que va de levante a poniente; el templo toma, a menudo, la forma de cruz latina; el coro se sita hacia oriente, mientras que el prtico se abre hacia occidente.En Egipto, la entrada se situaba en los primeros tiempos hacia oriente; es el caso de Hierpolis, en Menfis (Herodoto: Libro II, cap.CXXXVI). Por la puerta comn, los rayos de sol penetraban en el santuario, los fieles miraban hacia el oeste durante la oracin y el sacerdote estaba frente a ellos. En la poca de Augusto se decidi abrir la puerta hacia occidente para as mirar a oriente durante la oracin y los sacrificios; el sacerdote miraba siempre al punto por el que se levantaba el sol, como indica Vitruvio, por lo que daba la espalda, a los fieles.Todas las iglesias antiguas se abren hacia poniente, mientras que el coro est orientado hacia el punto por donde sale el sol en el da del aniversario del santo (o la santa) a quien est dedicado el santuario. Todas las iglesias dedicadas a la Virgen estn orientadas hacia el punto en que el sol se levanta el 15 de agosto. En el siglo XIII, esta regla todava se mantiene y Guillermo Durand hace de ella una regla ineludible.Ya las hileras de los dlmenes estaban perfectamente orientadas; los cuerpos reposaban en direccin este-oeste dentro de los sepulcros: los pies hacia levante, la cabeza hacia el oeste, presumiblemente para que pudieran ponerse en pie mirando hacia el sol naciente el da de la resurreccin. Los monumentos que albergan estos cuerpos tienen, naturalmente, la misma orientacin.El norte es la regin del fro y de las tinieblas, donde reinan las fuerzas del mal. Sin embargo, segn la tradicin, Thule es el centro nrdico por excelencia; la nueva religin que ahora se implanta lucha contra la mitologa que venera esta regin del polo y que podemos asimilar al Antiguo Testamento; por el contrario, la nueva revelacin se efecta a la luz del Nuevo Testamento y se sita en el sur, donde el sol alcanza su apogeo.. El baptisterio se coloca as en el lado norte, a la entrada de la iglesia; aquel que quiere acceder a las vas de la religin cristiana, aquel que viene del mundo tenebroso -el norte- debe ser bautizado, purificado, antes de conocer el abrazo de la luz. La fachada oeste, por la que pasan los fieles, mira hacia el mundo de los muertos, hacia el lugar por donde se oculta el sol; esta fachada se decora con las escenas del Juicio Final, un lugar donde puede reposar la cabeza del que ha dejado este mundo.Esta orientacin ha sido observada desde la ms remota antigedad por todos los pueblos de la tierra. Los cristianos, para su liturgia, han seguido escrupulosamente la misma ley.Todas las iglesias tienen el bside orientado hacia el sudeste; la fachada, hacia el noroeste, y el crucero, que forma los brazos de la cruz, de nordeste a sudoeste. Es una orientacin invariable, establecida a fin de que fieles y profanos, al entrar en el templo por Occidente y dirigirse en derechura al santuario, miren hacia donde sale el sol, hacia Oriente, hacia Palestina, cuna del cristianismo. Salen de las tinieblas y se encaminan a la luz.En cuanto a la luz, "simboliza la naturaleza misma de la divinidad. Todas las doctrinas, todos los misterios, todas las iniciaciones, reflejan esta bsqueda de la Luz. Buda es el Rey de las Cien Luces, Juan rinde culto a la Luz, los francmasones son los "Hijos de la Luz", lo mismo que los esenios. Esta luz indefectible, citada tanto en el Zohar como en el Corn, el Bhagavad Gita, ha dado origen a esas lmparas inextinguibles que encontramos en las leyendas romnicas, pero tambin en el viaje de San Brendan y en la tumba de Christian Rosenkreutz. La llama brilla continuamente sobre el altar cristiano; es el ritmo primitivo que crea una vibracin etrea".La luz que brilla en las tinieblas representa el Espritu, la Vida, la transmisin del pensamiento. La luz se eleva por oriente y se pone por occidente; el astro, al renacer, produce la iluminacin. El sol, en su recorrido, pasa por el sur, por la plenitud de la vida, y desciende y muere por el oeste, la tierra de los muertos. As, existe el da y la noche, la luz y las tinieblas, con las transiciones de la aurora y del crepsculo.No es necesario buscar la orientacin nicamente en el plano horizontal, sino tambin en el vertical, en esta luminosidad constante que viene del norte; la dimensin vertical establece la unin tierra-cielo e indica el camino ascensional que debemos emprender.As como la aguja de la iglesia penetra este polo celeste en la verticalidad del hombre primordial, la orientacin geogrfica se somete tambin a la ley de la latitud; orientndose a partir del polo, se redescubre la luz terrestre, la que nace en oriente.La orientacin de un edificio sagrado adquiere la mayor importancia metafsica si se considera que esta luz inicitica ilumina nuestro ser, que, en su evolucin, pasa de las tinieblas a la adquisicin de conciencia. El templo, orientado, comunica esta fuerza invisible al fiel que se somete a todos estos influjos: el hombre se libera en la luz.Las religiones y las sociedades secretas insisten en el resplandor de la luz que atraviesa la opacidad del alma humana, como seala la paloma que desciende del cielo en el bautismo de Jess.Esta luz est simbolizada por el cirio, la llama. Sera demasiado extenso tratar aqu el culto al fuego que figura en todas las civilizaciones.Simbologa de la alquimiaLa catedral, Biblia oculta de macizas hojas de piedra, en la ciencia alquimista, investigadora de las transformaciones de la sustancia original, de la Materia elemental, donde la Virgen Mara, despojada de su velo simblico, no es sino la personificacin de la sustancia primitiva de la que se sirvi, para realizar sus designios, el Principio creador de todo lo que existe".La rosa es la rosa hermtica de los sabios, smbolo de la piedra virginal."Edificadas por los Frimasons medievales para asegurar la transmisin de los smbolos y de la doctrina hermticos, nuestras grandes catedrales ejercieron, desde su aparicin, considerables influencias sobre gran nmero de muestras ms modestas de la arquitectura civil o religiosa".Los alquimistas asignaron nombres muy particulares a las coloraciones variadas que marcaron sus investigaciones y que reencontramos en los monumentos. El fuego sagrado -agente de la transmutacin- acta sobre la mezcla contenida en el huevo de cristal, el atanor: la materia se vuelve negra al cabo de cuarenta das; es el estadio de la Cabeza de cuervo o del Caos. La materia toma despus una coloracin blanca, que significa que la vida ha vencido a la muerte; el blanco seala la unin de lo fijo con lo voltil. A continuacin, aparecen colores variados en relacin ascendente dentro del espectro luminoso, del violeta al rojo prpura, coloracin definitiva de la obra".Las tres tonalidades alqumicas son, pues, el negro, el blanco y el rojo (colores del estandarte templario). Estos son tambin los tres colores del fuego de Agni, custodiado por los sacerdotes vdicos, que sostienen un cuerno negro en la mano. Entre el blanco y el rojo, hay diversos colores, tales como el del pavo real, el fnix o la paloma. Estos ritmos de transformacin de la materia apuntan a la redencin y a la reintegracin del hombre en el centro primordial.Aunque San Juan Bautista fuera vestido simblicamente de violeta, hay que tomar en consideracin el negro, que no es el smbolo de la muerte, de la desesperacin ni del caos. Osiris fue un dios negro, que tomaba esa coloracin slo cuando ejerca de juez supremo; Krisna es azul muy oscuro y en la catedral de Saint-Flour existe un Cristo negro, sin duda a imagen de las Vrgenes negras, descendientes de las diosas de la fecundidad.En la piedra negra de La Meca, el negro simboliza el bautismo superior; con frecuencia asociado al verde, se manifiesta como sustancia eterna y creadora. Simboliza la divinidad que regenera al hombre en las entraas de la tierra y le comunica una nueva visin. La vida procede de la muerte, de la muerte brota la vida.Explicando la disposicin y peculiaridades de iluminacin y dimensiones de los rosetones en los templos, Fulcanelli nos dice: "De esta manera se suceden, en las fachadas de las catedrales gticas, los colores de la Obra, segn una evolucin circular que va desde las tinieblas -representadas por la ausencia de luz y el color negro- a la perfeccin de la luz rubicunda, pasando por el color blanco, considerado como "intermedio entre el negro y el rojo"."En la Edad Media -contina diciendo Fulcanelli-, el rosetn central se llamaba Rota, la rueda. Ahora bien, la rueda es el jeroglfico alqumico del tiempo necesario para la coccin de la materia filosofal y, por ende, de la propia coccin. El fuego mantenido, constante e igual, que el artista alimenta noche y da en el curso de esta operacin, se llama, por esta razn, fuego de rueda. Sin embargo, adems del calor necesario para la licuefaccin de la piedra de los filsofos, se necesita un segundo agente, llamado fuego secreto o filosfico. Es este ltimo fuego, excitado por el calor vulgar, lo que hace girar la rueda y provoca los diversos fenmenos que el artista observa en su redoma:Ve por este camino, no por otro, te advierto; observa solamente las huellas de mi rueda. Y para dar a todo una calor igual, no subas ni desciendas al cielo y a la tierra. Si demasiado subes, el cielo quemars; si bajas demasiado, destruirs la tierra. En cambio, si mantienes en medio tu carrera, el avance es seguido y la ruta ms segura.( De Nuysement, Pome philosophic de la Vrit de la Phisique Mineralle).El rosetn representa, pues, por s solo, la accin del fuego y su duracin. Por esto los decoradores medievales trataron de reflejar, en sus rosetones, los movimientos de la materia excitada por el fuego elemental... En la arquitectura de los siglos XIV y XV, la preponderancia del smbolo geno, que caracteriza claramente el ltimo perodo del arte medieval, hizo que se diera al estilo de esta poca el nombre de Gtico flamgero.Ciertos rosetones, emblemticos del compuesto, tienen un sentido particular que subraya todava ms las propiedades de esta sustancia que el Creador sell con su propia mano. Este sello mgico le dice al artista que ha seguido el buen camino y que la mixtura ha sido preparada segn los cnones. Es una figura radiada, de seis puntas (digamma), llamada Estrella de los Magos, que resplandece en la superficie del compuesto, es decir, encima del pesebre en que descansa Jess, el Nio-Rey.Sobre dos de las figuras del bestiario medieval ms recurridas, cuyas cualidades y simbologa se asocian en ocasiones a determinados componentes del santoral, Almazn nos recuerda que "el toro y el len son smbolos de los elementos tierra y fuego de la alquimia". Fulcanelli agrega que el len, como fuego secreto, es el Disolvente Universal. En cuanto al toro, desvela que como signo zodiacal Tauro (el len simboliza a Leo) es el segundo mes de las operaciones preparatorias de la primera fase alquimista, la nigredo, a la par que representa al llamado azufre de la alquimia.En cuanto a las formas, Fulcanelli nos dice que "con raras excepciones, el plano de las iglesias gticas -catedrales, abadas o colegiatas- adopta la forma de un cruz latina tendida en el suelo". Ahora bien, la cruz es el jeroglfico alqumico del crisol ... Segn Ducange, en el latn de la decadencia, crucibulum, crisol, tena por raz, crux, crucis, cruz.Efectivamente, es en el crisol donde la materia prima, como el propio Cristo, sufre su Pasin; es en el crisol donde muere para resucitar despus, purificada, espiritualizada, transformada. Por otra parte, acaso el pueblo, fiel guardin de las tradiciones orales, no expresa la prueba terrenal humana mediante parbolas religiosas y smiles hermticos? - Llevar su cruz, subir al Calvario, pasar por el crisol de la existencia, son otras tantas alocuciones corrientes donde encontramos idntico sentido bajo un mismo simbolismo.No olvidemos que, alrededor de la cruz luminosa vista en sueos por Constantino, aparecieron estas palabras profticas que hizo pintar en su labarum: In hoc signo vinces; vencers por este signo. Recordad tambin, hermanos alquimistas, que la cruz tiene la huella de los tres clavos que se emplearon para inmolar al Cristo-materia, imagen de las tres purificaciones por el hierro y por el fuego. Meditad igualmente sobre este claro pasaje de San Agustn en su Dilogo con Trifn (Dialogus cum Tryphone, 40): "El misterio del cordero que Dios haba ordenado inmolar en Pascua -dice- era la figura del Cristo, con la que los creyentes pintan sus moradas, es decir, a ellos mismos, por la fe que tienen en l. Ahora bien, este cordero que la ley ordenaba que fuera asado entero era el smbolo de la cruz que el Cristo deba padecer. Pues el cordero, para ser asado, es colocado de manera que parece una cruz: una de las ramas lo atraviesa de parte a parte, desde la extremidad inferior hasta la cabeza; la otra le atraviesa las espaldillas, y se atan a ella las patas anteriores del cordero (el griego dice: las manos).La cruz es un smbolo muy antiguo, empleado desde siempre, en todas las religiones, en todos los pueblos, y errara quien la considerase como un emblema especial del cristianismo. Diremos incluso que el plano de los grandes edificios religiosos de la Edad Media, con su adicin de un bside semicircular o elptico soldado al coro, adopta la forma del signo hiertico egipcio de la cruz ansada, que se lee ank y designa la vida universal oculta en las cosas. Por otra parte, el equivalente hermtico del signo ank es el emblema de Venus o Ciprina (en griego la impura), el cobre vulgar que algunos, para velar todava ms su sentido, han traducido por bronce y latn. "Blanquea el latn y quema tus libros", nos repiten todos los buenos autores, impura, en griego, es la misma palabra que azufre el cual, en este caso, tiene la significacin de estiercol, fiemo, excremento, basura. "El sabio encontrar nuestra piedra hasta en el estiercol -escribe el Cosmopolita, - mientras que el ignorante no podr creer que se encuentre en el oro".Y es as como el plano del edificio cristiano nos revela las cualidades de la materia prima, y su preparacin, por el signo de la Cruz; lo cual, para los alquimistas, tiene por resultado la obtencin de la Primera piedra, piedra angular de la Gran Obra filosofal. Sobre esta piedra edific Jess su Iglesia; y los francmasones medievales siguieron simblicamente el ejemplo divino. Pero, antes de ser tallada para servir de base a la obra gtica, y tambin a la obra de arte filosfica, dbase a menudo a la piedra bruta, impura, material y grosera, la imagen del diablo.... Ahora bien, esta figura, destinada a representar la materia inicial de la Obra, humanizada bajo el aspecto de Lucifer (portador de luz, la estrella de la maana), era el smbolo de nuestra piedra angular, la piedra del rincn>, la piedra maestra del rinconcito. "La piedra que los constructores rechazaron -escribe Amyraut - ha sido convertida en la piedra maestra del ngulo, sobre la que descansa toda la estructura del edificio; pero es tambin escollo y piedra de escndalo, contra la cual tropiezan para su desgracia".Sera tambin esta "piedra de escndalo, contra la cual tropiezan para su desgracia" la que caus la cada en desgracia del Temple; sera este el significado oculto del enigmtico baphomet.Marcas de cantera o signos lapidarios"Sobre todas estas construcciones se observan marcas, seales que parecen misteriosas; interpretarlas suele excitar nuestra imaginacin. Estas marcas no son exclusivas de la construccin medieval; Jean-Flippe Lauer ha observado en el transcurso de las excavaciones que al pie de la pirmide de Keops, en los bloques haba numerosos signos, al igual que en la "Tumba de la Cristiana", en Argelia. Generalmente se trata de las marcas dejadas por los obreros que trabajaron a destajo, lo que permite determinar el nmero de obreros que trabajaron en la construccin. En los castillos y las fortalezas -entre ellas los Krak de Siria- tambin se ven estas inscripciones"."Tambin hay "marcas de posicin", que permiten indicar la posicin de la pieza tallada y situar las junturas del armazn, as como el asiento de las piedras. Gracias a este cdigo (nmeros, letras y signos) se pueden situar fcilmente las piezas en el lugar determinado.Por ltimo, existe una serie de marcas ms misteriosas que slo pueden comprenderse a partir de un estudio simblico. Estas marcas son particularmente numerosas en las lpidas sepulcrales".Signos LapidariosIdentidad entre los signos lapidarios de diferentes edficios templarios. Arriba, Eunate (Espaa) y Tomar (Portugal). Abajo, signos de la llamada torre de ajedrez o gorro del bufn, existentes en construcciones templarias espaolas de La Oliva, Berbegal, Tarragona y Montblanc (Tarragona). Rafael Alarcn Herrera, A la sombra de los templarios.Juan G. Atienza nos explica sobre las marcas de cantera lo siguiente:Segn ha pretendido demostrarnos la investigacin racionalista, los canteros medievales, con sus marcas sobre la piedra, trataban de establecer una especie de contabilidad para valorar el trabajo cotidiano y cobrar su soldada de acuerdo con la labor realizada. Afortunadamente, en los ltimos tiempos se ha ido olvidando esta especie de explicacin primaria y ya se celebran congresos y se realizan estudios llenos de seriedad cientifca donde se reconoce, cuando menos, que estas marcas de identificacin de los constructores medievales era algo ms que un simple recibo o un mero cmputo de trabajo. Sin embargo, la explicacin todava ms corriente entre los actuales estudiosos de estas marcas gliptogrficas es el reconocimiento de que se tratara de marcas gremiales, adoptadas por las distintas logias de constructores para dar cuenta y razn de su obra; algo parecido a los carteles grabados en piedra en algunos edificios, en los que el arquitecto pone su nombre para que se recuerde quin lo ha construido. El problema, a la hora de aceptar esta ltima explicacin autorizada, surge cuando se comprueba cmo muchas de estas marcas canteriles coinciden con esquemas plsticos que formaron parte de las preocupaciones del ser humano cuando el hecho de labrar la piedra era algo ms que un oficio y se converta en un acto trascendente, en un mensaje destinado a ser recordado mucho ms all de la vida de su autor. Los petroglifos protohistricos que se encuentran en las costas atnticas, atribuidos a los pueblos celtas, aunque seguramente en su mayora fueron realizados antes de su aparicin, son, tambin contra las explicaciones simplistas de la investigacin acadmica, empeada en identificarlos con simples relaciones de cabezas de ganado o con esquemas de cualquier artilugio de uso cotidiano, autnticos mensajes en los que algunos de nuestros ms remotos ancestros trataron de darnos cuenta de unos conocimientos que todava no hemos llegado a captar. Pudo tratarse de saberes astronmicos, de operaciones matemticas, de mensajes semnticos por los que se comunicaban ideas o incluso creencias, pero sera algo totalmente antinatural pensar seriamente que aquellos antepasados se hubieran dedicado a contar algo tan perecedero como vacas u ovejas valindose de una tcnica tan absolutamente perenne como es la piedra grabada por el buril. Del mismo modo cae la idea de las piedras de los canteros, supuestamente grabadas para dar cuenta del trabajo cotidiano de cada oficial, cuando habra sido infinitamente ms fcil y hasta til haber realizado aquellas marcas valindose de pintura o de carboncillos.Marcas de CanteriaMarcas de cantera de la ermita templaria de San Bartolom de Ucero, Soria. Alejandro Aylagas, La ermita templaria de Ucero.CriptografaLos templarios fueron grandes maestros en el arte de la criptografa, un alfabeto secreto que se supone que utilizaban en sus transacciones mercantiles y documentos secretos. Las letras de este alfabeto particular estaban representadas con arreglo a ngulos y puntos determinados por la cruz y podan ser leidos mediante un medalln que portaban algunos caballeros.En el templo de Jerusaln, donde instalaron su primera casa, encontraran el Arca de la Alianza y las Tablas de la Ley, donde se codificaban los conocimientos transmitidos por los egipcios a Moiss. Con este bagaje, los templarios pudieron ser los artfices secretos del renacimiento cultural que se observa en la Cristiandad del siglo XIII, los impulsores de las catedrales gticas por toda Europa, y los precolombinos descubridores de Amrica.Hay una teora por la cual el Gran Maestre de la Orden estaba "doblado" por un gran maestre oculto, un secreto gran maestre de la Orden, que no habra sido elegido sino designado testamentariamente por el gran maestre oculto precedente; este gran maestre sera el gran iniciado y el director real del Temple.El Bafometo El BafometoHablando con sinceridad, habria que decir que pese a las numerosas interpretaciones y etimologias que se han barajado para definir a este supuesto idolo de los Templarios, nadie ha llegado a saber realmente de donde procede ese nombre y mucho menos que significa.El Bafometo se utiliz como argumento para condenar a los templarios, pero no se sabe su significado con exactitud, ni su origen, ni su funcin ritual. El supuesto dolo era guardado en una alacena, y, de acuerdo con las descripciones que se ofrecen era diferente segn cada lugar.Al Bafometo, o tambien Bafomet, se le ha atribuido origen arabe, judo e incluso oriental, tambien mgico y los estudiosos han encontrado numerosas palabras de las que podria derivar su nombre originario. Pero seria inutil volver sobre ellas, ya que ninguna llega a satisfacer la curiosidad, ni a despejar la incognita.Se ignora realmente la funcion real que debi tener esa imagen, y en todos los sitios y publicaciones que se le encuentra su forma es diferente aunque siempre con algunas constantes. Se habla de una cabeza o busto que tendra la forma del andrgino, y al que veneraban los hermanos de la Orden. Para la mayor parte, se trataba del busto de un hombre barbudo, a veces bifronte y hasta trifronte, de madera o metal y con los ojos muy brillantes. Posiblemente el smbolo haca referencia al hermetismo alqumico, y representara la unin del azufre y el mercurio filosofal, considerados como los elementos macho y hembra en la cosecucin de la Gran Obra. Con toda seguridad es el "dolo" al cual cean el cordn, se utilizaba como cinturn en los hbitos de casi todas las ordenes monsticas y estaba relacionado con el voto de castidad, o por lo menos lo tocaban con l. En algunos grabados nos aparece una figura humana con cuernos, con pechos de mujer y genitales masculinos, otras veces sin cuernos, sentada y con pechos femeninos, asi que verdaderamente podemos decir que no se acaba de determinar verdaderamente como era esta imagen.En el portal de la iglesia de Saint-Mry, en el barrio templario de Pars, se ve un diablillo barbudo, con cuernos y alado, medio animal y medio mujer. De l dice la tradicin que es un bafomet, y ms en concreto el Bafometo de los templarios.Existe en el Santuario soriano de San Saturio, un lugar que segn cuentan las crnicas era aprovechado para realizar reuniones alli por el Siglo XVI, por una extraa cofradia que se habia abrogado el cuidado de la cueva-santuario que anteriormente habria formado parte de los dominios templarios de la Encomienda de San Polo. La tradicin ha permitido conservar, en esta especie de sala irregularmente circular, el famoso "banco corrido" que fue usado por los cofrades y probablemente antes por los Caballeros, bajo la advocacion del santo titular, que luce su imagen en un lugar destacado del anillo.Sin embargo este Santo Saturio, de dudosa procedencia, lleva en si aadida otra caracteristica que lo relaciona directamente con una tradicion que se atribuye a la Orden y que constituy uno de los principales motivos acusatorios del Proceso a los Caballeros Templarios, y es que significativamente, la practica totalidad de las imagenes que representan a San Saturio, no lo muestran de cuerpo entero, sino como el busto de un ancano, de larga barba y totalmente pintado de negro, lo que nos puede permitir situarlo en paralelo con la figura del Bafometo.Lo que si es cierto es que muchas de las "confesiones" de Caballeros templarios antes de su famoso juicio fueron obtenidas mediante la tortura, y en algunas de estas se habla concretamente del Bafometo. Concretamente en el libro del historiador Alejandro Vignati titulado "El Enigma de los Templarios" vemos los siguiente:"...En este momento nos enfrentamos a uno de los mayores misterios del Temple. prestaremos atencion a lo que fue capaz de provocar escalofrios de panico a tanta noble gente: Ese diablo llamado Bafomet. En efecto, en las actas de acusacion aparece en repetidas ocasiones el nombre de un idolo, que ofrecia el aspecto de una cabeza humana provista de largas barbas, a la que los Templarios veneraban en sus Capitulos. Precisamente en el articulo 47 se mencionaba claramente:Se postraban para adorar a un idolo que consideraban su Dios, el salvador que vendria a brindarles el descanso eterno, asegurando que esa cabeza era capaz de protegerlos de todo mal, que proporcionaria a la Orden los mayores tesoros y que podia conseguir que florecieran los arboles y que germinara el trigo en las tierras mas secas...""...Despues de infrahumanas torturas el hermano Jean Taillefer proveniente de la Diocesis de Langres, declar que nada mas ingresar en la Orden, se le habia forzado a postrarse ante ese Bafomet, que se hallaba en la parte central de un altar. Era un idolo con figura humana. Hugues de Bures, otro hermano borgoes, cont que se le habia mostrado una cabeza, la cual acababa de ser extraida de un armario que cumplia las funciones de Capilla. Esta cabeza parecia hecha de distintos metales: cobre, plata y oro. Ofrecia el aspecto de la cabeza de un hombre con barba larga de un color que podia ser blanco."Lo que si parece cierto es que los templarios no utilizaron jamas semejante figura como una advocacion magica o supuestamente hechiceril. Sin embargo algunos estudiosos del tema la consideran como una especie de objeto simbolico de contemplacin que tomo entre los Caballeros de la Orden una funcin semejante a la de los "Mantras" en las religiones orientales y cuya presencia habria presidido determinados actos de los Caballeros Templarios, inspirando su concentracin mental o su disposicion espiritual en determinados momentos en que presumiblemente se entregaban a la meditacin colectiva.Son tambien falsas las numerosas figuras consideradas como imagenes bafometicas que se han presentado a menudo como fieles representaciones del supuesto idolo templario, ya que si algo positivo puede decirse, -y mucho- en defensa del Temple es que sus caballeros jamas fueron y son idolatras, sino un colectivo plenamente consciente de su mision, tanto politica como religiosa, que utilizaron y utilizan el secreto y la maxima discrecion para alcanzar unos fines, que probablemente eran demasiado avanzados para las estructuras historicas de aquel tiempo.La AlquimiaDurante siglos circul la especie de que los templarios practicaban la alquimia y que haban descubierto la piedra filosofal. El ideal de la alquimia, que es una ciencia esencialmente religiosa, est muy por encima de la obtencin de unas onzas de oro. En Oriente los templarios slo pudieron adquirir aquella ciencia a travs de los sufes persas quienes a su vez parece que la haban adquirido de los documentos egipcios y, sin duda, de la famosa biblioteca de Alejandra antes de que Omar la incendiara.En numerosos detalles arquitectnicos y relieves se encuentran smbolos que indican prcticas alqumicas por parte de la Orden.Los Nmeros y la ArquitecturaLa tradicin esotrica ensea que el nmero est en el principio del Ser sobre el triple plan divino, natural y humano. El tres, el smbolo del misterio o la Trinidad, era el nmero templario, y el tringulo la figura geomtrica base de sus construcciones. El tres o el nueve est presente en rituales de iniciacin y en sus actuaciones cotidianas. Los nmeros simblicos se encuentran tambin en todas las construcciones templarias. Por ejemplo en la iglesia del templo en Pars, la casa central de la Orden. La rotonda bsica de la construccin se genera por tringulos equilteros de sentidos opuestos que forman una estrella de seis puntas que se relaciona con el sello de Salomn.Catedral de BurgosPara actuar sobre el pueblo, obra civilizadora, era necesario un instrumento nuevo. El gtico apareci al tiempo del regreso de los nueve primeros caballeros. Los templarios, alquimistas, levantaron la catedral "a mayor gloria de tu nombre, Seor". Los constructores, y con mayor razn los proyectistas, haban de poseer algn documento cientfico de una calidad excepcional; por lgica, aquel documento no poda ser otro que las tablas de la Ley tradas por los nueve caballeros del Temple.Ms que la transmutacin de los metales, lo que les importaba era la transmutacin humana que pretendan operar en el atanor que fue la catedral como lo haba sido el templo de Salomn.Tres eran las misiones que tenan encomendadas los templarios, las cuales fueron propuestas por San Bernardo:Encontrar el Arca de Moiss. Construir el Templo. Promover la Civilizacin Occidental.