Luis Rosales - Poemas

7/25/2019 Luis Rosales - Poemas

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Luis Rosales

Poemas

A M ME GUSTA TU TOS

En la corriente alterna del jardn y el recuerdosiempre que pienso en ti la ausencia me deslumbra,

es como un resplandor que se impone a mis ojos:

si los cierro me engaan, si los abro me angustian.Ayer por la maana vi la luna en el cielo

como dentro del agua, pareca una preguntahecha desde muy lejos; el jardn me recuerda

que vienes, con su asombro de musgo en la penumbra,su sol pestaeando entre las ramas altas,

y en las ramas centrales su prohibicin de ruta

corporal y latiendo bajo las hojas: escierto que estoy oyendo la silenciosa m!sicade tu cuerpo al andar y las magnolias dicen

que s, que antes de ser redondas ueron tuyas."uelvo a ver tu mirada como un p#jaro ciego

que tiembla mientras vuela; tus manos son de juncia,temo a veces pisarlas y tu cuerpo

es un ro de amapolas andando si me quieres.

$ hay unasombra de hojas que caen y crujen lentamenteen tu vo% al hablar como un terrn de A&'(A)

(*A+(A -E/)A+ +E 01EA; y res como tosiendo,un poco, nada m#s que un poco: a m me gusta

tu tos, es lo m#s tuyo, y me parece ahoramismo que he vuelto a or en la alameda !ltima,igual que un trapo atado se rasga con el viento

su estrangulada y ronca iniciacin de lluvia.


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23 de agosto de 2456

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ALGO QUEDA EN EL AIRE

(uando estoy junto a ti,siento la misteriosa sacralidad del cuerpo emenino

que al e9tenderse llena el mundo.

Es importante, desde luego,sin embargo no basta;hay que acercarse un poco, un poco nada m#s, para verte

mejor,y as comien%o a ver la implantacin de tu cabe%a sobre el

hombro,la rente todava recibiendo el bautismo,

los ojos empe%ados y terminantes,la boca tempransima,

las orejas que tiemblan si te acercas a ellas,es tan #cil temblar

la piel premeditada por el sol,el cabello y sus p#jaros.

$ me inclino a pensar que nada es tan in!til como esta descripcin,

pormenori%ada,pues la belle%a pertenece al conjunto y el atractivo es personal,

los rasgos siempre son provisionales,ya que se inluyen entre s como las notas de un acorde.

(uando estoy junto a ti s< que no eres un sueoy puedo recordar algunos gestos tuyos, pues los gestos son

m#s estables que los rasgos.


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As recuerdo por ejemplola descarnada prontitud de tus manos que siempre dicen la

verdad,

la manera de pintarte los ojos puntu#ndolos,la sombra de tu cuerpo que se ha ido haciendo tan pequea que ya no puede acompaarte,

y el gesto de perdn,ese sobreseimiento que aparece en tus labios y empie%a a

hacerlos sonreren ese instante e9terminador en que basta callar para acabar

con todo.

=ero, esc!chalo bien,lo que preiero, sobre todas las cosas,es ese empiece,

esa espontaneidad que es lo mejor que tienes y hace que vivas lastim#ndote.

*e podido observar que hay un momento en que lanoche se pone de tu parte,y yo no s< si te das cuenta

de que estando contigo suelo quedarme lelo,suelo quedarme ensimismado,

y esa !nica respuesta a tus palabras acaso es la bondad ha llegado a mi vida un poco tarde,

como al cortarse un tronco surge la desnude% de la madera,sus capas temporales demuestran en la veta su unidad,

y ves su reciedumbre reducida a un olor,un olor que se entrega hasta desvanecerse, pues en elloconsiste su programa vital,

por lo que t! m#s quieras no lo olvides.

Es #cil comprender que un olor es igual que un recuerdo,algo deja en nosotros,

y ahora estoy preguntando >cu#nto puede durar un olor en

el aire?


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+us horas, sus minutos, sus segundos no pueden calcularse, pero su duracin es evidente;

y un olor en el aire dura toda su vida.

$ esto me viene a recordarque


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mortal, casi vibrante,queda el !ltimo sol. @a tierra huele,

comien%a a oler, no cabe

ya dentro de s misma y se levanta:ahora hay tierra en la tierra y en el aire.$ hay un bardal con sol; hasta


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(ON UN TEM!LOR DE NIE$E EN LA DUL)URA

(on un temblor de nieve en la dul%urade la sombra morena y sonrosada,en tu p#lida carne lastimada

ceida est# la lu% por la blancura.

@u% sola desde el llanto a la tersura,a%ucenas de nieve desvelada,

y el aroma del mar en tu mirada

de claveles y arc#ngeles clausura.

/e hace el amor severa la triste%a,la mano el agua y el laurel el ruego

que en su dorada pereccin te inmola.

@a intensidad mantiene la pobre%a,y en la mansa ribera del sosiego

todo est# en ti, que permaneces sola.

EL ANDAMIO

/e he dicho innumerables veces que nosotros no somos !nicosni mucho menos,

por diversas ra%ones, entre otrasporque nunca quisimos disra%arnos de amantes,

y adem#s no tenemos esos ojos que se asemejan a una pantalla,

en la cual

todos cuantos se miran sienten su conversin;


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quiero decir,que por el hecho de mirarnos

se convierten sin m#s ni m#s en televidentes,

y empie%an a vivir,paralticos y necros#ndose,en la televisin de la mirada.

o es eso, por supuesto,y nadie va a pedirnos cuentas de nuestra alegre podredumbre,

ya que no nos ha sido necesario llevar un tren en el bolsillo,ni queremos que todas las semanas llegue la primavera,

ni hemos ju%gado a nadie,

y cuando hablamos con amigos nunca estamos inquietoscomo anguilas escurridi%asesperando la menor ocasin para hacer la del humo.

uchas cosas nos hacen dierentes,es cierto,

pero no somos !nicosni nos hemos sentido culpables,

ni siquiera llevamos una escaandra sobre el se9opara hacer el amor sin ahogos;

y por si todos estos ra%onamientos ueran in!tiles,que lo son,

puesto que hay que contar con la inutilidad de casi todo lo que hacemos,

uer%a es reconocerque no tenemos lepra ministerial,

ni hemos sido tan ordenadosque pudi


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y contamos los aos por latidos y somoslaminaciones de estupor,

ceni%a indivisible y volandera

pero qu< importa estoqu< nos importa lo que pueda venir si la mentira es una prrroga,

y nosotros no queremos mentir,no nos queremos prorrogar,

no lo necesitamos para ser contumaces como dos seres que se aman,

como dos tartamudos que se apoyan para encontrar su

identiicacin en una sola slaba,en una sola huellao en una sola l#grima

que se va despla%ando entre nosotros hasta que se convierte en una l#grima dialogada,

mientras se juntan nuestros labioscon esa lenta espontaneidad con que se van uniendo los

bordes de una herida,y nuestros cora%ones suben una ve% m#s,

con esuer%o testarudo y discpulo,un amor

o un andamio,un andamio de huesos que nos lleva a esa altura donde la

mesa se hace pany todo queda vinculado,

mientras sigues subiendo como puedes,un amor compartidoo un andamio,

ese andamio de juntura y perdn en que consiste la alegra.

* de agosto de 19+


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EL DES$I$IR DEL (ORA),N

i soledad termina en tu latido.

/! eres mi compaero;mi relj de morir que late solo;mi cora%n de Bios dentro del pecho.>)ecuerdas? $o contaba tus latidos

como un llanto de ciego,como un corte en el chacia dnde

me llevaba tu mano, compaerode la esperan%a nuestra, que desvives

llor#ndola volviendohacia la sed del mar, que ya la cubre

de sal y de silencio?

C@a ronda estremecida, bajo el aguase quiebra; un viento quieto

va gastando en las hojas la hermosuraque a!n era alegre ayer; los troncos viejos,

innumerablemente sucesivos,

se doblan bajo el lentomovimiento mortal del agua viva7del pie que al caminar borra el sendero7,

y se borran mis huellas en el almallev#ndolas volviendo

siempre hacia atr#s, hasta dejar soado,y en la mano de Bios cuanto ue nuestro.D

(ontigo siempre +, pero >hacia dnde


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me llevar# tu mano, compaero?+obre el mar slo queda la esperan%a;

debajo de ella el tiempo,

el retrasado cora%n que buscaen su propia ceni%a el undamentode mi vivir; las olas

van y vienen y van; dime, >no es ciertoque no vives mi vida, que no vives

la vida que me das?; > dime latiendosi me has de acompaar cuando mi muertetenga la edad de Bios sobre el sendero?;

dime, >qu< voluntad mueve la tuya?;dime, >volver# el tiempoa dividir las aguas que ahora cubren

madera, cima y cielodel bosque agoni%ando donde nunca

se pierde un nio, ni se olvida un sueo?;dime, > cu#ndo sabr< que hemos vivido

la misma vida, cora%n, si ciegosiempre, pierdes el tino

cuando la lu% deslumbra tu silencio,y quiebras en mis ojos la mirada

con un desprendimiento,con un temblor de tierra interno y loco

que me arrastra contigo sangre adentro,contigo y hacia ti, que desvaras

conundiendo hoja y mar, camino y cielo?

EL ESPE&O

El tiempo es un espejo con distintas im#genesque brillan en su ondo como una procesin de uegos atuos

hasta que el humo las dispersa,


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y entoncessiempre ocurre lo mismo:

aparece tu rostro,

y s< que para verte tengo que hacer un gran viaje desde mis ojos a los tuyos,y desvivir distancias, advertencias y deunciones,

pues slo puedo verte traspasando un espejoy se astilla el cristal cuando paso por


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de tal modoque me sangran los ojos al mirarte como si todo lo que nos

une uese una despedida.

EL PE(ADO

A =edro @oren%o

(uando te desentierras en el sueo todo est# siendo lo que es,y al despertar todo se hace impreciso,

pues ya sabes

que el recuerdo es un tacto,y el tacto tiene a veces una orma adivinatoriaque permite palpar la oscuridad

como las manos se adelantan cuando caminas en la sombra.Esta maana al despertarme

la penumbra del cuarto ormaba una pantalla,y

alumbrando lo oscuro igual que brilla una luci


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la pupila,y aquel vaco llenaba el mundo y era el centro del ojo,y en el centro del ojo, como se mueven unas cortinas,

ueron apareciendo unas iguras,unas sombras que iban en busca de su cuerpo,y

ponanen mis ojos

como un sello,el mundo de tu inancia,

el t!nel de tu inancia triste y emborronada.

@o que piensas, sucede,y

por eso,cuando estoy a tu lado preiero recordarte como se cuelga

un cuadro a tientas,un cuadro que se clava en las paredes del cora%n

para que no cambie de sitio,ni haya en tu cuerpo o en tus ojos

alguna variante;y no va a haberla,

amiga ma,porque en tu rostro slo ha quedado impreso al contralu%,

algo que no se sabe bien si es una huella,o una s!plica,

o una perseverancia de procesin de pueblo en donde slo habitan nios;y recuerdo que el pueblo se llamaba =ilatos,

y los nios marchaban en hileras,y cada hilera desilaba por uno de tus ojos,y los nios llevaban la inocencia en la mano

y andaban con los pies entristeci


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y el pueblo aquel,>no lo recuerdas?

tena esa angustia de cal h!meda que hay en las casas donde

han encarcelado a un inocente,y haba junto a la era un po%o secoy una lu% en el cielo de mirada acab#ndose,

y a las mujeres no les serva el acento circunlejo para nada o para casi nada,

y las calles se barran !nicamente con las olas,y el pueblo por la noche se lavaba las manos en el mar .

>o recuerdas que a veces encontramos una personacuya inancia podemos reconstruirpor una sola huella que queda en su mejilla

igual que un esqueleto puede reconstruirse por slo un hueso suyo?pues bien,

del mismo modo,cuando estoy junto a ti recuerdo o adivino

que alguna ve% te he visto en el paseo,hace ya muchos aos,

y andabas en la pla%a igual que si bajaras una escaleraporque mientras vivimos hay siempre una escalera en nuestra

sangre,y es preciso bajarla,

y algunas veces los escalones se terminan,

y a pesar de ello hay que seguir bajando.$ luego te recuerdo cuando eras nia a!ny empie%o a comprender que ya entonces queras perseverar

en algo,en algo tan humilde como olvidar las letras de tu nombre,

los aos de tu vida,las campanas,

y olvidar,

sobre todo,


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la incomunicacin de aquellas casas sin paredes,de aquellas casas hechas con papel de peridico,

de aquellas casas perentorias

que sucesivamente uiste habitando en tu nie%.Esto es lo que subsiste

en esa huella de perseveracin arrinconada que tienes en los ojos

y me hace que al mirartete siga viendo a!n en aquel pueblo,

desnudita y cubierta con un vestido hu


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@os hombres necesitan la inocencia para vivir a costa de ellay yo te sigo viendo

con una nube en cada hombro y una ta%a de caldo cada da,y estabas desclav#ndote,y las palabras que no podas decir,

que no podas decir a nadie en aquel pueblo te iban atando a una columna

y all seguas atada al da siguiente,una ve%y otra,

y otraporque la inancia es una puerta que camina,es una puerta abierta que camina y camina en la noche

hasta que llega ese momento en que hay que deenderse por s mismo,

hasta que llega ese momento en que es preciso echar a andar, sea como sea

tienes que recordarlo,amiga ma,

tienes que recordar que, al in, dentro de ti se astill algoy deseaste ser culpable para no seguir sola.

Esto era lo que el mundo esperaba de ti,y apenas lo empe%aste a desear,

apenas comen%aste a sentir ese cambio como si uera una

liberacin,tus manos ueron destrab#ndose,y tu cuerpo reuni sus migajas,

y tus piernas corrieron ligersimas comen%ando a sentir la irme%a del suelo.

Entonces conseguiste llegar hasta la playay all,

junto a lo libre,

para que todo acabara de una ve%,


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para no seguir siendo una nia distinta,una nia lacrada,

te hincaste de rodillas en la linde de la marea,

y te baaste poco a poco,y te baaste lustralmente,para lavar entre las olas

ese pecado que es m#s viejo que el mundo,ese pecado que nunca echa races,

ese pecado virgen que consiste en no ser culpable y nadie quiere perdonar.

1- . 1+ de agosto de 19+EL TRIGO LIMPIO A LA SA),N (ORTADO

El trigo limpio a la sa%n cortado.Bame tu mano, amor, cor%a en olvido."ida y dul%ura en el silencio erguido

por ausencias de mar enajenado.

>En qu< playa de cielo abandonado,toda c#ntico y mar restablecido,

con ternura de a%#ndar has sentido,violado el cielo y con ra%n violado?

Aroma de temblor mi terca rentetu limpio abril en el espacio abierto.

+lo un esuer%o y su misterio cierto

me ordenar# en el ruego, dulcemente,remeros de la sombra en la corrientecien su lago en el candor del puerto.

A/0il de 19*-


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EN D,NDE EMPIE)A NUESTRA SOM!RA

+abes que llega un da en que el suelo que pisas se

convierte en pared,


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+i el sol andando a pie viene en mi ayuda,a!n le alta su lu% a la maana,

no puedo verte y la memoria es vana,no puedo hablarte y la palabra es muda.

@a ausencia tiritante y aleadase acorta convirti


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>En la lluvia mis manos reconoces?tal ve% nos est# uniendo en sus e9tremos,

yen este mismo instante ya tenemosun solo cora%n que habla a dos voces.

o puedo m#s, no puedo m#s, la citaque hace girar al cielo ya no ceja,y vienes con la lu% como se dejauna palabra en el papel escrita.

El tiempo laador y transitivova dejando en el aire tu traslado;ya nos empie%a a unir y ya ha empe%ado

la e9traa gloria de sentirme vivo.

@a ausencia es una lu% interrumpida,el cielo palidece y a%ulea,

y el sol que nos alumbra, nos recrea;la espera termin; llega la vida.

22 de agosto de 19

ESTA LENTA ES(ISI,N DE LA (ARNE # EL (UERPO

o es la vida, es la carne lo que siento,la carne silenciosa y sucedida

que me empie%a a dictar su propia viday me ha legado el cuerpo en testamento.

3 de agosto de 194


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GUARDO LUTO POR ALGUIEN A QUIEN NO 5E (ONO(IDO

(omo la ausencia es un cristal que no se empaaestoy viendo tus ojos cuando cierro los mos."ienen desde el dolor

y contin!an mir#ndome igual que siempre me miraron:desde lo abierto de la herida,

y tienen un color de tabaco quem#ndose,de tabaco con miedo,

y ahora estoy recordando que los v de repente como se abre

una grieta en la tierra.=arecan una sala de hospital,una sala vaca,

y me miraban ya con ese mandamiento que es igual que una esponja,

una esponja que ha enjugado el dolor muchas veces,deletre#ndolo,

para que sus distintos elementos no vuelvan a reunirsey ya nada en la vida nos pueda doler junto.

$ recuerdo tambi


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la muerte junta y grande que llenaba dos cuartos separadospor un tabique de rasilla,

y se ha quedado quieta entre nosotros,

de una ve% para siempre y para nunca.Algo evadido nos una:

era el olor que inundaba los cuartos,los pasillos,

las paredes blancas y reractarias,un olor #cido y adhesivo como un esparadrapo

que se pegaba a nuestros labios y haca de cuando en cuando

titilar nuestros ojos,at#ndonos las manos y los aoscon su lengua caliente

y su estertor.

ada en la vida es gratuito;lo que no se recuerda se acaba,

y para no acabarmete voy a recordar que est#bamos entonces en el +anatorio

=uerta de *ierro,en la planta primera a la derecha,viviendo cada cual una postrimera

en las habitaciones encristaladas que dan junto al jardn.$o velaba a un poeta,

un amigo indeleble que nunca haba podido sostenerse a s

mismo,que nunca tuvo manos,y ya entonces, en mar%o, slo tena un mun de palabras

agnicas:

7o s< como es igual lo dierente pero todo es lo mismo.@a poesa tiene c#ncer. *ay palomas vividas

y no es eso, no es eso. @os hijos se disipan en la niebla.

+lo quiero decirte que no me gusta despertar


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y ya no voy a hacerlo. >e comprendes?Estoy siempre cayendo y el despertar hace m#s brusca la

cada.

Ay!dame a morir un poco. 1n poco nada m#s. asta con que me oigas.+lo me queda Bios,

es como un perro que me lame y me limpia la vida y las palabras.

(uando me calle puedes decir am


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mi huella medianera,mi memoria nocturna,

y como lo que no se ve crece continuamente hasta

maniestarse,hoy es la punta de un taladroque ha terminado por socavar mi cora%n y el muro.

Esa muerte contigua que nos acompaaba sin conocernosha sido el arcoiris del dolor,y me ha hecho guardar luto,

tienes que recordarlo,

tienes que recordar que yo he guardado un luto tuyo como si me vistiera con tu piel,que yo he guardado luto queriendo acompaarte,

durante mucho tiempo,durante mucha vida,

por un hombre que amabas y slo he conocido mir#ndote a los ojos,

y viendo esa manera de esperar que me duele como una llaga,como una llaga jovencsima y compartida

que hemos vivido juntos,que hemos llevado entre los dos

y que qui%#s por ello,amiga ma,

puedas seguirme encristalando el dolor de vivir.

9 . 16 de agosto de 19+

LA A!SOLU(I,N

G+i t! me lo pidierasH,si t! me lo pidieras cuando llegue esa hora

en que la vida empie%a a hacer preguntas sin respuesta,


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como se hace un raspado de matri%o se pone en las venas una inyeccin de aire,

y despu


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si t! me lo pidieras,si t! me lo pidieras aunque ya uese al despedirte,

si

yo pudiese orlo,aunque uera una sola ve%,

tal ve% sera posible que la carne agrietada se volviera a juntar como se juntan en el labio unas palabras de

perdn,y la vida ya no sera un gurruo,

y el cuerpo que a!n me queda sonara,

comen%ara a recuperarse como un ro se evapora,y se convierte en un temblor dialogado y conc


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3 de agosto de 19+

LA ES(AR(5A MUTUA

>o piensas t! que todo ha sido un sueo,pues no es posible que sea real esta ventura ininitiva

que nosotros tenemos,y llena nuestras vidas igual que el aire llena una habitacin,

sin dejar un vaco,ni una sombra de nieve en nuestros labios?>o piensas t! que las im#genes del sueo son migajas de

ayer,humo que se desle de unas sombras

que hemos vivido en otro tiempo,y tal ve%

con distintos amantes que van superponio piensas t! que los amores que tuvimos,los amores que hemos ido enterrando al largo del vivir,

se interieren entrela%#ndosey a veces son lianas de apretura y verdor

y a veces son de escarcha mutua?

(uando te veo rer hay ocasiones en que no s< por qu< te res,por qui


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tengo que compartirte7lo s< muy bien sabido7,

tengo que compartirte con distintas personas,

tus padres, tus amigos, tus amantes,y suroy no me importa

porque tengo que hacerlo,es necesario,

amiga ma,lo mismo que al entrar por ve% primera en una casa donde

vas a vivir,

los ojos agolpados se quedan hu


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incomunicadas,pues recuerdo,

y nunca dejo de recordar ,

que nosotros hemos estado muy quietecitos y muchas vecesen una casa ajena y con jardines que era una prohibicin,una casa con discos en las sillas y cartas de navegar en las

paredes,y en ella era imposible nauragar,

y nunca nauragamos,ni podamos hacerlo puesto que en el div#n ligeramente

verde

siempre est#bamos salud#ndonos como los barcos se saludan en la lejana,y t! me hablabas a todas horas del mismo tema

pues el dolor es igual que el invierno,y las palabras se iban quedando quietas en tu boca,

quietas y diluy


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porque durante mucho tiempo, amiga ma, uimos los bra%os de una cru%.As tena que ser

ya que lo verdadero es como un roy el agua va tomando la orma de su cauce;as deba de ser

ya que lo verdadero es como un moldeque da su orma a todo lo e9istente

y hay tantas cosas en la vida que se viven as desde unhueco anterior que las sit!ay les da su lugar en la tierra

y hay tantas cosas nuestras que nacieron de un hueco,y no s< si han pasado, no lo s


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igual que se hace un torniquete sobre el bra%o para evitar la p


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igual que el agua ra se bebe sorbo a sorbo,o

tambino has observado que al sentarte en el cine te inmovili%as y tardas mucho tiempo en atreverte a mirar hacia tus

compaeros de butaca por temor a encontrarlos

desnudos?


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y desnudos est#n,conigur#ndose,

en la antesala del vivir,

y si entonces les tocaras los ojos tocaras la esperan%a.Esto pudiera sucederme

ahora,si no salgo a la calle para desplacentarme,

7tengo que hacerlo pronto7y al salir estoy viendo que los polticos de i%quierdas hablan

siempre del pueblo,

y los polticos de derechas hablan siempre de Espaa,es tan #cil mentirtodava no, mi amor, espera un poco, hay que alargar este

paseo,y t! estar#s ahora con el cuerpo dormido bajo el sol,

mientras las casas convecinas,las casas que tantas veces vimos juntos,

contin!an acerc#ndose y estrechando la calle,estrechando la calle para hacerla m#s ntima y m#s tuya

igual que las paredes de la alcoba,cuando llega la noche,

se empie%an a abra%ar para darnos acilidades.

As llego hasta el bar que est# vaco,pero lleno de huellas,

como queda la tierra coceada donde hubo una estampida,ayer qui%# ue da de iesta,y el inmenso saln me recuerda una playa

en cuyo e9tremo hay un so# de terciopelo rojo,y en el e9tremo del so# est# sentada una pareja

que ha venido al ca< para esperar,y ambos se esperan aunque est#n mir#ndose,

pues algo de ellos no ha llegado a!n,

y ambos tienen una misma desolacin


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que les est# neutrali%andocomo si se tuvieran que suicidar ahora para hacer el amor

a la salida.

C*ay personas as, que tienen el amor despavoridoy el miedo no les da nunca cesanta.D

$ yo ui acostumbr#ndote a estar en este baren donde veo dos gatos que se est#n generali%ando

7la caetera lagrimeante, el anaquel, la torti-la diunta7y una mujer muy rubia que como no tiene nada que hacer

deposita su rostro en el espejo,

y otra mujer muy cierta que entra ahora, se sienta junto am y est# moreneando,mientras que los amantes venideros,

los amantes que deshabitan el so# se empie%an a tocar de una manera e9#nime,

y siento que el reloj es un goteo de sangre en la mueca,y el tiempo se hace un grito,

y me bebo de un sorbo el ca< solo,y la sangre se mueve por mis venas con ese miedo lquido

de la elicidadcuando salgo a la calle

todava no, mi amor, espera un poco, hay que alargar este paseo

y siento ya bajo la lengua la miel anticipadacomo un interruptor que apaga el mundo

todava no, mi amor, espera un poco

y comien%a a entreabrirse una puerta,

todava no, mi vida,


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y t! est#s encuadrada en el dintel,

espera un poco

y yo puedo mirarte para seguir creyendo en lo que veo.

- . + de agosto de 19+

LA LU) INTERRUMPIDA*omenaje a Iuan )amn

unca pero contigo, aunque la vida seala lu% de esa maana que nunca viviremos,

un tren que no esperabas y ha llegado, una horaque empie%a siendo alondra y acaba siendo espejo.

(u#ntas veces he visto un columpio en tus ojosmirando y sin mirar un ayer venidero,

viviendo y sin vivir algo que nunca llegay a uer%a de esperarlo se va haciendo m#s nuestro.

iradas con recuerdos por hacer que a!n se doran

>en qu< sol amarillo o en qu< tarde de invierno?soles que ya estuvieron ardiendo en otra bocay luego al enriarse se convierten en besos.

anos que poco a poco se han ido haciendo sombrasy alucinadamente te acarician durmiendo,

ceni%as >de qu< luto?, despertar >en qu< vida?,y esta mnima y lenta procesin de los huesos,


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y este temblor de a%!car bajo la lengua cuandote toco y no s< cmo despiertas y te veo

y tu cuerpo es un ro que pasa ante mis ojos

y el amor vuelve a darnos su desmemoriamiento,y esto qui%#s no vuelva a suceder, qui%#s

no vuelva a despertarme con los ojos abiertos,ni sepa en qu< momento de lu% interrumpida

la nieve vendr# a verme cuando estemos naciendo

juntos y para siempre, >en qu< maana? >cu#ndo

ser< slo una lluvia de ceni%a en tu cuerpoy a!n querr< estar contigo y vivir una vida,de despuunca has pensado, amiga ma, que el cuerpo al desnudarse est# m#s junto?

y luego,

en el momento en que lo miras,


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cobra su e9actitud porque el mirar lo va conigurando./odo consiste en la transmigracin,

y hoy al verte he sabido

que el tacto es el recuerdo m#s antiguo que tiene el hombre,y a veces puede aterrori%arnoscon su temblor de miel

lenta y originaria y envolvente.El tacto es como el mar

y el cuerpo amado es de agua despacsima que no se muevesino hacia adentro,

desnaci


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LAS ALAS (IEGAS0uien no sure se quema,

y yo recuerdo que la primera ve% que hablamosme mirabas con tal intensidad

que te quedabas aadida a mis ojos.As ha pasado el tiempo desde entonces

y las cosas que he vivido contigo se convirtieron en

necesidadesy la vida que no vivimos juntos es una casa sin ventanas.@as alas llevan a la nie%,

pero t! me mirabas de tal modo,me mirabas doliendo de tal modo,

que a partir de aquel da no he logrado sabersi hay que vivir o hay que morir lo que se ama

pues cuanto no se muere m#s de una ve% en nuestra vidano llega a madurar: es gratuito.

orir es un aprendi%aje>no recuerdas que los amigos que m#s queremos

se nos ueron haciendo indispensables,poco a poco,

y hoy los vemos andar como son#mbulos en el sueo de Bios,

y su rostro al mirarlo se desdibuja,nos parece movidocomo

cayendo a bien morir?El temblor es un muro que separa la sangre en dos orillas,

y ahora quiero decirte,amiga ma,

que aquel di#logo primeri%o no ha terminado a!n,

no puede terminar


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ya que Gla muerte no interrumpe nadaHy esto no son palabras, son latidos

y distienden la sangre como se alargan las palabras cuando

haces el amor.0uien no sure se quema,

y yo quiero decirte,quiero aadir a!n,

que hay ocasiones en que la certidumbre de vivir se hace tan dirimente

que ya no puedes sostenerte ni sostenerla.

o lo olvides,amiga ma,hay personas que no saben que suren y hay personas que

no saben surircomo hay lugares en el mundo donde nunca ha volado una

paloma,y t! sabes muy bien que cuando estoy a tu lado nunca te

dejo de mirar porque temo perderte,no s< cmo,

no sno recuerdas su l#stima cayendo?>no recuerdas tambi


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y la sonrisa verane#ndote en la boca,pues cuando est#s a la deensivala indecisin te agrieta un poco,

te va agrietando lentamentecomo la carne se cae del cuerpo con la lepra.

@as alas llevan a la nie%,esto est# claro, pero ahora,

para que nunca vuelvas a surir,voy a inventarte una alegra,

voy a e9traer,

de donde est


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sin m#s,sin otra cosa,

hasta que muy de maanita te lavabas de chapu%n,

y subas #l dormitorio de tus padres para besarlos sin chistar,y como entonces no tenas en el mundo m#s amiga que el ama,

te marchabas al colegio con ellay en el momento en que llegabais juntas a la calle,

todo se haca domingo porque os necesitabais mutuamentey ella reuna su desamparo con el tuyo,

y te miraba para vivir,

y te hablaba despacio y tiritando las palabrascon la vo% agachada mientras marchabais apretuj#ndoosya que a ti te gustaba pisar seguido, muy seguido y sin

salirte del bordillo;y no s< cmo podais llevar el mismo paso

porque t! andabas como saltando y ella andaba como re%ando.

$ yo he visto en la calle muchos aos despu


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cuando vuelvo a mirarme en tus ojos de nia para tratar de devolverte algo,una migaja de alegra,

siguiendo el vuelo de las alas ciegas.11 . 12 de agosto de 19

@A '@/-A @1&

Eres de cielo hacia la tarde, tienesya dorada la lu% en las pupilas,

como un poco de nieve atardeciendoque sabe que atardece,

y yo querracegar del cora%n, cegar de verte

cayendo hacia ti misma,cayendo hacia avan%ar, como la nocheciega de amor el bosque en que camina

de copa en copa, cada ve% m#s alta,hasta la rama islea, sonreda

por la postrera lu%,

y s< que avan%asporque avan%a la noche, y que iluminastres hojas solas en el bosque,

y piensoque la sombra te har# clara y distinta,

que todo el sol del mundo en ti descansaen ti, la retrasada, la encendida

rama del cora%n en la que a!n tiembla

la lu%, sin sol, donde se cumple el da


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Rimas 19*719-1

LO QUE NO QUIERAS OR NO LO PREGUNTES

adie puede reunir las hojas de un otooy sera in!til intentarlo

puesto que no se juntan los labios de un amen,ni cabe en la mirada

esa noche del mundo que llena e9actamente la mitad de latierra.@o que no quieras or no lo preguntes,

no lo preguntes nunca,ya que es innecesario que nos enseen lo que llevamos en el

tu


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y administrativa,y pueden ver suicidios, ciudades y mujeres,

como ahora te estoy viendo,

como ahora te estoy viendo con tu peril que es tan e9acto como un n!mero,tus labios casi de limosna,

y tus huesudas manos testamentarias.>o recuerdas,

amiga ma,que yo a veces te miro sosteni


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nada m#s que un empr


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y a pesar de ello- no la puedo perder porque t! eres

el cora%n que me he olvidado de cerrar,

mi sed,mi sangre aparte,mi empujn en la noche,

y qui%#s ya est#s siendo mi tren para morir;y s< muy claramente que no importa,

que nada importa sino pedirte que convivas este desasimiento,

esta alegra,

esta emocin p#vida y terminal de ver tu rostro a todas horas en el espejo de un vaco.

19 de agosto de 19+

LO QUE TU LLAMAS 8QUIREME8

usca un sitio en mi piel que no haya sidoescrito por tu mano, y que no tenga

alg!n temblor, algunalu% de tu carne en su memoria ciega;

busca un sitio en mis ojosque no haya sido espejo y que no sienta

cristali%ar esa sonrisa tuyaque est# aprendiendo a andar sobre la tierra:lo que t! llamas JnioJ

ya en tus manos se quiebra y se a%ucena,lo que t! llamas Jqui


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de m que la esperan%a, algo que vivede mi propio vivir, algo que cesa

contigo, amor, y que me har# imposible,

la misma vida que me das entera.

NADIE ES PRO"ETA EN SU ESPE&O

Bime, >sientes a!n la antigua heridacuando el amor te baa en su oleaje

y el beso es lu% como el amor es trajey el labio es sed como la noche es vida?

Bime que s, que s, como me dicesque no con la triste%a arrinconada

cuando ya el beso se convierte en nadaen los m#rtires labios aprendices.

/!, mi instantaneidad, mi !nicamente,la lluvia que vino a vivir conmigo,

trigo es mi vo% cuando te nombra, trigo,puente es mi cuerpo al abra%arte, puente.

/!, mi diaria eternidad primera,la noche que se junta con el da

cuando cruje en la carne la alegray a la puerta del cuarto el mar espera,

y el espejo es un agua tiritando,y el agua sube lentamente un montedonde tu cuerpo llena el hori%onte

y veo lo mismo en lo que estoy soando.

de agosto de 19+


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OLA EN (ALMA ES TU (UERPO$o siempre culpar< los ojos mos.

Kernando de *errera

Albos senos en p!beres jardines;se abre una puerta, el aire se apresura,

y brillan de la noche en la ola oscura

tus muslos como saltan los delines;tus ojos dan al mundo sus conines,juega el mar a la comba en tu cintura,

y la miel se convierte en atadura,y en tu mano se encienden los ja%mines,

y el sol nace en tu cuerpo, y se oye el cantodel amor como un puente entre dos ros,

tan humano el milagro, dulces bros,

dulce sueo de ti que acaba en llanto,porque (uba eres t! me dueles tanto;

yo siempre culpar< los ojos mos.

De: Poes;a 0eu


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qui%# una l#grima de incendio,y no puede vivir sino acab#ndose,

como la duracin de una palabra slo nos dice su verdad

cuando est# terminaday deja su memoria en el odo./al ve% tengo un cansancio dirimente

y he llegado hasta ti como el n#urago si le empujan las olas puede llegar hasta la playa,

y he comen%ado a andar con unos pasos tartamudoshasta quedar e9tenuado,

y esto es ya como ver la espalda al da,

esto ya no es amar sino caer,seguir cayendo sobre tu cuerpo como la noche cae en el mundo,

mientras siento crujir mis huesos y mis besos.

/al ve% es cierto y sin embargo es tristeque nuestro amor slo puede durar mientras que dure

un beso,pero al besarte el tiempo se establece,

y tu cuerpo comien%a a ser una pregunta,cada una de tus manos tiene su gesto propio,

y el mirar de tus ojos empie%a a conjugarse en vo% pasiva.As me voy llenando de m!sica y de tiempo,

y la m!sica es sed,y la sed es tan corta que tiene que nacer continuamente

como nacen mis ojos cuando el vestido empie%a a resbalarsobre tus caderasy aparecen tus hombros soleados,

tu moment#nea piel,y tu cuello de miel agoni%ante,

y tu cintura que es de agua,y recorro, una ve% y otra ve%, el corto territorio de tu

vientre,

con un mirar ininitesimal,


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con un encendimiento que cada ve% se hace mayory que al in se convierte en bautismo

sobre un pecho pequeo que cabe en un dedal

y unas rodillas uertes y despiertsimas que alguna ve% como las nubes tienden a separarse,y las manos te nacen de repente igual que brota un

manantial,y las caricias vienen del origen del mundo,

ya que cuando se amatodo el cuerpo termina siendo labio.

$ no puedo olvidar que esto es un premio,amiga ma,un premio que me han dado para identiicarme con la nieve,

mientras te miroy se borra poco a poco tu rostro como se empaan los

cristalespues estoy atendiendo a otro di#logo,

y este di#logo es una l#grima que tengo ya en el ojo,puesta a punto

y nunca acaba de caer,y se va convirtiendo en araa,

y siento tu temblor,su velludo temblor parpade#ndome,

y es un poco de miedoo una embolia

que toca con su hielo esta vida que es may la contabili%a, hora tras hora, como se cierra un inventario.$ esto no es doloroso,

amiga ma,esto es as,

como una mano que te agarra por dentropensando en que la carne se encienda sin arder,

y la demora se convierta en culpa

y el beso que te doy deje de ser una caricia


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y sea m#s bien una pregunta,esa pregunta destituyente

que no me atrevo a hacer sino en tu boca,

pues todo lo que soy depende de ella,depende de saber que nuestro amor pudo resucitarnos7


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y en un instante el beso se hace amargo;donde hay dos hay dolor y sin embargo

la vida slo empie%a donde hay dos.

Bebo tener los ojos tan abiertosque despierto insepulto, y es la vida

una disposicin entelerida:hay despertares que producen muertos.

Esta Espaa de lu%, mierda y aulaga,que muere de su misma obstinacin,

conunde la soberbia y la ambiciny duele siempre con la misma llaga.

$ este amontonamiento, este despieceque nos va arrinconando en el trastero;

la vida nunca es mutua, ya preieroque el tiempo acabe y el silencio empiece.

@a prensa con su ayer momiicadoque todo lo sujeta a su dominio;

las noticias de olsa y su e9terminio,el odio divisor y acelerado.

os basta hablar para pagar tributoy el rev


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y de mi propia entrega descono,qui%#s no he dado nunca nada mo,tiempo perdido y testamento doy.

+i el alba nos renueva el nacimiento,la noche nos conirma la agona,

y entre un s!bito olor de enermera,despierto, busco, suro, callo y siento

la herida hereditaria en que me hundo,y este sabor de sangre en el amor,

y ese largo deshielo de estuporque va llenando con su sombra el mundo.

1 de agosto de 19

PRIMA$ERA MORENA

/u abril siempre y ya logrado,oh maravilla sin huella

/rigo y agua de doncellay aurora de sol mojado,

naranjo en su lor celado,cristal de mimbre sin dueo

pulsador, >cu#ndo mi empeode luna al in modelada,primavera resbalada

desde el donaire hasta el sueo?

/an dulcemente morenatendida en risa liviana,

abril de carne temprana,

esbelta gracia serena,


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slo penumbra y arenatu lenta piel sin ayuda,siesta deleitosa y muda

est#tica madrugada,piadosa yerba segadaya para siempre desnuda.

(ircuncisin de mi celo,madre en j!bilo de rotu desamparado bro

estremecido de anhelo.

/oda la presencia en vuelopor el temblor obediente,misericordiosamente

doy gracias a tu alegra;>de qu< dolores ara,

sierva de lu% en mi rente?

A/0il de 19*-

RE(ORDANDO UN TEM!LOR EN EL !OSQUE DE LOSMUERTOS

+i el cora%n perdiera su cimiento,

y vibraran la tierra y la maderadel bosque de la sangre, y se pusieratoda tu carne en leve movimiento

total, como un alud que avan%a lentoborrando en cada paso una rontera,

y uese una lu% ija la ceguera,y entre el mirar y el ver quedara el viento,


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y ormasen los muertos que m#s amasun bosque ardiente bajo el mar desnudo7el bosque de la muerte en que deshoja

un sol, ya en otro cielo, su oro mudo7y volase un enjambre entre las ramasdonde puso el temblor la primer hoja...

REPRESENTA(I,N EN TRES PLANOS DE UNA MU&ER

-ABA) E+ /1 BEK--(-L

+i alguien me hiciera una preguntaslo podra decirle que a m me gusta verte andar,

y en ve% de contestarletrasladara mis ojos a los suyos para que recordara,

sin haberlo vivido,la convencida seriedad con que andas lo mismo que la lu%

se mueve haciendo testamento,pues tus pasos transmiten un orden instant#neo

como si t! llevaras al andar el movimiento de la tierra.

Bestrabada y solar vienes desde la sangre y tienes el oicio del verano,andar es tu deiniciny tu gracia es el orden,

y tu uer%a es el mpetu con que a veces te paras mientras hablas

igual que se repliegan las deensas de una ciudad para hacerla m#s uerte.


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Alguna ve% me has dicho:

7@as mujeres parecen gorriones que se mueven saltando7

y en eecto se les ve la premura,la entrega anticipada,

la premeditacin de ser mujeres que andan con los pies juntos

para quedarse pequeitas y repetidas en los ojos de alguien;pero la libertad tiene su propio ritmo y t! eres dierente,

pues tu modo de andar es un modo de hablar

que no pregunta nada,y hace tiempo he pensado que vives como andas,que vives con la misma propiedad con que andas porque la

calle es tu licenciatura.Es cierto, amiga ma, lo espont#neo libera,

y tu espontaneidad se nos acerca tantoque quien te vio una ve% te necesita,

sigue tus pasos en la tierra como la oruga procesionaria marcha en reata sobre el pino,

y yo te he visto andar de manera tan persuasivaque el aire tintinea

y las calles progresan al mirarte,y hay nubes que en el cielo van tomando tu orma,

y un solo paso tuyo puede atar mucha gente,atarla y desatarla,

pues est#s en la tierra,entre nosotros,y no hay nada en tu cuerpo que no na%ca al andar,

y no hay nada en el mundo que no lleve tu paso.

--@A =A@A)A +E (8"-E)/E E E+=A/8

+i alguien me hiciera una pregunta


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slo podra decirle que a m me gusta hablar contigo,que a m me gusta orte

cuando tu claridad se convierte en dure%a lo mismo que el

carbn cristali%a en diamante,porque lo justo es necesario y t! hablas con juste%a,con pronosticacin,

para mostrarme que no hay presentimientos sino jubilaciones,que el espanto no nace de vivir,

es anterior al hombrey quien quiere evitarlo agoni%a.@a claridad se mira y no se ve,

viene desde muy lejos,y a m slo me importa hablar contigo,hablar contigo ahora como el agua se coge entre las manossabiendo que slo puedes retenerla unos cuantos segundos:

unos segundos bastan,cuando el amor se acabe voy a seguirte oyendo:

7=or avor, no te duermas mientras hablo+i est#s cansado, vete. @a ternura se acaba en el deseo.

@uego el silencio se convierte en vaco,y las noches comien%an en el alba.

/e he dicho muchas veces que hay que aceptar la realidad:ni los sueos se viven, ni las alas se juntan,

por eso a veces no tenemos sino una sola mano y no es la nuestra.

@os muertos crecen record#ndolos y ya no vuelven a morir.Escucha. o te mueras. o te puedes morir. /e necesito.

Ahora me est#s hablando y s< que tu dure%a no tiene causaalguna,

viene desde tu origeny tus palabras nacen para doler,

pero llevan la sonrisa en la espalda

y cuando las recuerdo me liberan de esa proanacin que


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es siempre el miedo./engo una gran velocidad para surir

y cuando estoy contigo

siempre llega un momento en el que tus palabras se quedan sin hablary me aprietan lo mismo que una venda,

sosteniendo su abra%o,y me hacen comprender que lo que nunca dices me sostiene.

=ero tambi


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+i alguien me hiciera una pregunta,se lo agradecera

ya que podra decirle que me gusta mirarte como si regresara de viviry es porque veo tus ojos temiendo que se acaben.

@a alegra de mirarte crece con el temory si sigue creciendo de este modo puede llegar a hacerse

insostenible(omo una deuda p!blica que es preciso pagar durante varias

generaciones.

Empie%o a verte ahoray en tus ojos hay p#jaros que no regresan nunca,olas que se disgustan a echa ija,cicatrices que pueden despertar,

y algo tuyo, muy tuyo, que al declararse se convierte en misterio

igual que la dul%ura se convierte en pregunta./u mirada se e9tiende cuando llega la noche

y tiene esa bondad un poco intransigente de las personas a quienes se les nota que saben elegir,y ese color tostado de a%!car vagabunda,

y esa continua averiguacin que en tus ojos es igual que una grapa.

Bebo decir, amiga ma, que cuento tu mirada entre mis bienes gananciales,

y lo que nunca olvido es ese instanteen que el amor se interna hacia su origen,y tus ojos se quedan descielados,

y ya no miran, ceden, y caen, pero hacia atr#s,como una piedra entra lentamente en el agua.

y no hay nada en la vida,nada,nada,

que se pare%ca a esos segundos


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en que tus ojos vueltos miran dentro de ti,y slo quieren ya seguir cayendo,

cedientes,

desasidos,arrastrados,y yo no s< mirar pero los sigo

en esa internacin que nunca encuentra ondo en su cada,detr#s de ellos, amor, detr#s de todo,detr#s de todo, amor, pero sabiendo

que empe%ar# el recuerdo cuando la lu% acabe.

2N de agosto de 2455UN MOMENTO EN EL (IELO

El recuerdo camina en la vigilia y en el sueo,camina noche y da

para hacerse transparente al andar,y es un suelo de agua

o un espejo,y ahora el espejo tiembla

y me encuentro ante ti como si me hubiera cortado los p#rpados para verte mejor;

y el mirar es un no que nada puede detener,pues no s< si te veo,

si puedo ver tu rostro como se lee un peridico,ya que te quiero mucho,

>sabes?te quiero tanto que cuando sigo tu mirada puedo llegar hasta tu nie%,

pero tambi


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y ahora orma una linde con el cielo y la tierra.

*ay das en que las horas son lo mismo que las olas,

y todo lo que vives,hasta lo m#s pequeo y lo m#s raudo,deja su huella en nuestra sangre

como esa golondrina deja en los ojos que la ven la sombra de su vuelo.

As te llega el turno de vivir cuando menos lo esperas,una imagen se ahnca y empie%as a sentir su clava%n,

y ahora te vuelvo a ver cuando acabas de llegar de un viaje

y est#s con un pauelo, campesino y domno recuerdas que al volver de un viaje nos hacemos m#s

jvenes?y yo estoy trascordado,y no niego a saber si lo que estoy mirando es un recuerdo,

pues el tiempo se ha puesto de tu partey slo s< que est#s conmigo

con un balde apoyado en la escalera y una esponja en las

manos,


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haciendo la limpie%a de la casa7ya sabes queja casa es el bautismo de cada da7

lavando las cortinas, los cristales y la lu% de la tarde

para que todo lo que nos rodea participe de la resurreccin,y las paredes, para darte alegra, desentierran el humode las celebraciones con amigos que dan calor humano y dan

trabajo,y escuchamos las sonatas de ach para violn y clave,

porque la m!sica es de agua,y recuerdo muy bien

que t! lavabas las estanteras

d#ndole a cada libro su vigilia,y en cada balda que limpi#bamoste saltaba el jabn desde el agua a las manos igual que saltan

los delines,y la limpie%a daba a la casa un acento m#s ntimo,

era como tu vo%,y t! mirabas de cuando en cuando la labor concluida con los

ojos certiicados para mayor seguridad,y la esponja ya sabes que se apasiona mucho con el agua,

la toalla pareca desvivirse,la escalera de mano haba adquirido cierto ervor itinerante

pues nosotros, aquella tarde, dimos tantos paseos que llegamos al =araso /errenal,

y no hemos regresado todava.

Esto pas como lo estoy contandoy me ense a vivir con los ojos abiertos;ahora s< que la casa es tu investidura,

tu nie%y tu cordn umbilical,

pues nunca me he sentido tan sirviente y tan tuyo,y s< que para siempre est#s casada,

y no voy a olvidarlo

ya que la puesta en orden de la casa ha ido poniendo en


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orden nuestra vida,y ue un momento slo,

y ue slo un momento pero deinitivo

igual que si estuvi


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que no puede vivirporque la carne se le queda cada da m#s pequea;tan pequea que ha llegado a sentirse impedida,

y ya no podr# nunca llegar hasta su casa,y ya slo recuerda que viva en un colegio,y ya slo recuerda que viva dentro del dormitorio de un colegio,

donde todas las noches despertabaviendo pasar un tren por el pasillo atnito,

viendo pasar todas las noches el mismo trenpor el mismo pasillo titilante de camas sucesivas,

de camas con guirnaldas de muchachas que duermen

sin salir del espejo,sin ver pasar el trenque a ella, todas las noches, va despert#ndola un poco m#s,

a uer%a de seguirlo,a uer%a de seguirlo cuando pasa y se pierde en la sombra,

y la desclava de su cuerpo igual que se desclava con la humedadun cuadro en la pared,

y la deja tronchada en las vassobre las cuales pasa el tren donde ella misma va sonriendo en

todas las ventanas.

$ERTE= QUE $ISI,N TAN (LARA

"erte, qu< visin tan clara."ivir es seguirte viendo.=ermanecer en la viva

sensacin de tu recuerdo.

"erte. @a distancia nace.El cielo suprime al cielo.

@a vida se multiplica

por el n!mero de puertos.


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/odo colmado por ti.o ser m#s que el ojo abierto,

y eterni%ar el m#s leveescor%o de tu silencio.

"erte para amarlo todo.(laustro en tranquilo destierro.

Bul%or de caa lunada.@u% en rbita de sueo.

ortal lmite de ti.(ielo adolescente y tierno.!bil paciencia de playa."ivir es seguirte viendo.

"erte, abril, verte tan slo/ranquilsimo desierto.=ena misericordiosa.

+osegado advenimiento.

"erte: qu< oracin tan pura,islas, nubes, mares, vientos,las cinco partes del mundoen las yemas de los dedos.

$I$IR PARA $ER

/odo era alegre en el claroresplandor de la maana

y al mirarte sent el llantoborr#ndome la mirada.

@lorar y ver son virtudes


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que un mismo sentido enla%acomo acompaa en la nieve

el silencio a la pisada.

/odo era alegre y sentacon la visin, la distancia;le di descanso a mis ojos:de slo mirar lloraban

# ES(RI!IR TU SILEN(IO SO!RE EL AGUAJslo lorece el agua que est# queda.

1namuno

A aria Esteban "alera.

o s< si es sombra en el cristal, si es slocalor que empaa un brillo. adie sabesi es de vuelo este p#jaro o de llanto,

nadie le oprime con su mano, nuncale he sentido latir, y est# cayendo

como sombra de lluvia dentro y dulcedel bosque de la sangre, hasta dejarla

casi acuada y vegetal, tranquila.o s


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$ yo al entrar lo estoy mirando todosin poderlo entender,

y s< que no es posible y, sin embargo, es triste,

y s< que no es posible y, sin embargo, es verdadero.+, sabed, son las aguas reunidas,son las aguas reunidas en la e9tensin del mar lo que estoy

viendo,las d#rsenas sacramentales donde las naves se restauran,

las mercancas que han descubierto por s mismas que la tierraes redonda,

los malecones como alian%as que contribuyen a una seguridad que

nadie tiene,y los muelles,y los muelles desiertos y vacos como un beso deshabitado que

nadie espera,que nadie vive y sabe a llanto

entre dos labios mec#nicos y unidos;y el mar que muere ya,

y un barco avan%a entre la niebla;7s, sabed que la lluvia, esta insistencia de la lluvia,

da intimidad al mar,y le hace m#s balbuceante

y m#s pequeo;sigue lloviendo7

sigue avan%ando un barco entre la niebla que borra, al in, suarboladura,

y recoge su adis como un pauelo,mientras sigue lloviendo,mientras sigue lloviendo y en la escalera que se hunde,

en la escalera que es como el vientre l#ccido del muelle,en la escalera ciega que baja hasta las aguas,

est# esperando una mujer,una mujer sentada y !ltima a la que llega el agua alas rodillas,

una mujer que tambi


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que tambi


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pero no encajany mis dedos se lastiman al or%arlas

mi cora%on no sabe, no quiere o no debe

>o es mi alma que ya no puede?me gustas, >te lo he dicho?,

pero tengo miedo,primero, porque me rechaces,

segundo, por no esta a la altura,y tercero, si sale bien, tener que morirme

e9perta gata de ailadas uascon un ormidable poder que todos aceptamospero en el ondo es una ilusion,juega con el temeroso raton

que solo tiene valory se bloquea pensando en luchar y morir o uir

si luchara veria que la gata solo es un decorado.

*ablando se entiende la gente,pero , si es con uno mismo, y aun asi........

>solo?>, yo no estoy solo,mi cabe%a es un barullo de gente

que habla sin parar, que me recuerda,me repite, a veces se alegra sin saber porque,

canta, baila, se enada, se deprime,me tira de la chaqueta, >solo?,millones de enanos rebotando en mi craneo

cada uno con su version,d s s s hil s d l s

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Luis Rosales - Poemas