TEST DE MACHOVER

Lo que comenzó siendo un test infantil, ideado por Goodenouch (1926), se convertiría posteriormente, debido a la labor de Machover, en un test de innegable valor para adultos.

Se le entrega al sujeto un lápiz de mediana dureza y una cuartilla de papel totalmente en blanco; seguidamente se le sugiere que dibuje una persona. Es posible que entonces el sujeto, y en especial si es tímido y se inhibe con frecuencia, explique que no sabe dibujar y que va a ser absurda la prueba; el experimentador replicará amistosamente que no es necesario saber nada de dibujo y que lo haga como pueda.

Es importante no influir en nada al sujeto; sus posibles preguntas de si debe dibujar un hombre o una mujer y si debe ser de perfil o de frente, deben ser eludidas con tacto. "Haga lo que crea conveniente", se le puede muy bien decir.

Después de que el sujeto haya representado la primera figura, se le entrega otra cuartilla en blanco y se le pide que haga ahora el dibujo de una persona de sexo opuesto a la que llevó al papel.

INTERPRETACIÓN:

En la interpretación se parte de un supuesto que en muchos casos estimamos puede ser falso: el primer dibujo, si resulta del mismo sexo que el sujeto, se toma como un autorretrato del mismo; el segundo como una persona muy allegada, el padre, la madre, la esposa o esposo. Sin embargo, el experimentador no debe ser estricto en sus principios y debe tomar en cuenta la personalidad del sujeto por otros rasgos de las siluetas por él dibujadas.

Mostramos muy someramente unas normas de interpretación:

A) Nivel artístico: Se trata de valorar el dibujo desde un punto dé vista artístico, sin que esto quiera decir nada en contra de aquellos que no saben dibujar. Contemplando el dibujo artísticamente, en conjunto, puede vislumbrarse si el examinado es más o menos inteligente o si está condicionado por enfermedades psíquicas o de otro tipo.

B) Proporciones de la figura: El tamaño del' dibujo tiene bastante importancia en un análisis de esta clase. Figuras muy grandes denotan tendencias maniaco-expansivas; por el contrario, pequeñas, indican complejo de inferioridad.

C) Posición de la figura: Si la figura está de frente expresa que el sujeto es de naturaleza extrovertida; de perfil, introvertido, y de espaldas (caso muy poco corriente), demuestra resentimiento, agresividad, carencia de contacto con el sexo opuesto.

D) Conexión de la figura: ¿Qué relación existe entre la figura y la realidad? Según la haya más o menos, denota que el sujeto se encuentra más o menos equilibrado. También hay que observar la posible conexión entre todas las partes del dibujo. Una figura incoherente quiere decir que el sujeto no mantiene un buen contacto consigo mismo ni con el medio ambiente; se encuentra un tanto desorientado, perdido.

E) Colocación: La colocación también sirve para indicar si el sujeto es introvertido, acomplejado, inhibido (cuando la figura está situada en los bordes o esquinas) o, por el contrario, confiado y extrovertido (situada en el centro).

F) Errores: Mediante los errores cometidos por el sujeto puede saberse con bastante seguridad su comportamiento, su forma de desenvolverse y su estado anímico.

G) La expresión: También la expresión de la cara de la figura debe ser considerada. Una expresión triste es señal de un sujeto melancólico, pesimista; una expresión alegre, jovial, expresa que el sujeto tiene confianza en sí mismo y vive conforme.

H) Las partes del cuerpo: En un dibujo todo debe ser tomado en cuenta, hasta el que pudiera presentarse como el más insignificante de los detalles.

1) La cabeza amplia demuestra confianza en uno mismo (si es muy grande, tampoco debe tomarse por normal al sujeto); una cabeza pequeña presupone complejo de inferioridad, inhibiciones. También es necesario acompañar este carácter con el de si la persona representada tiene alta o baja la cabeza.

2) Los cabellos significan energía, seguridad, vitalidad y también sexo. Así pues, una cabeza calva anuncia una persona con temores sexuales e inhibiciones y, a veces, gran agresividad.

3) La carencia de ojos advierte que el sujeto vive totalmente fuera de la realidad.

4) Nariz grande: confianza en uno mismo, carácter autoritario y enérgico; nariz pequeña: temores, complejo de inferioridad.

5) Las manos: Unas manos sin dedos denotan que el sujeto tiene en parte perdido el contacto con la realidad, con el mundo circundante. Los dedos son como antenas hacia el exterior; si éstos faltan, es que el sujeto no está bien comunicado.

6) Las piernas: según estén dibujadas las piernas, se podrá saber si el sujeto es estable o inestable, preocupado o despreocupado, equilibrado o desequilibrado.

Además de las partes expuestas, es necesario estudiar profundamente las otras: pies, labios, brazos, etc., etc.; incluso cejas y pestañas.