Material Clases Iñaki Rivera Beiras La Memoria

7/24/2019 Material Clases Iñaki Rivera Beiras La Memoria

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LA MEMORIA

Categoría epistemológica para el abordaje de la historia

Iñaki Rivera Beiras

PRIMERA PARTE. El mal y la memoria e la iterpretació de la historia.Re!le"ioes e toro a las tesis sobre el cocepto de historia de #alter $ejami

%&'( cocepto acerca de la Historia) *%y c'+l e toro a la Memoria),

Hay un cuadro de Paul Klee que setitula “Angelus novus”. Se ve en él un

ángel, al parecer en el momento dealejarse de algo sore lo cual clava lamirada. !iene los ojos desoritados, laoca aierta y las alas tendidas. "l ángel de la #istoria dee tener eseaspecto. Su rostro está aierto #acia el

pasado. "n lo que para nosotrosaparece como una cadena deacontecimientos, él ve una catástro$e%nica, que arroja a sus pies ruina sore

ruina, amontonándolas sin cesar. "l ángel quisiera detenerse, despertar alos muertos y recomponer lo destruido.Pero un #uracán sopla desde el para&soy se arremolina en sus alas, y es tan$uerte que el ángel ya no puede

plegarlas. "ste #uracán lo arrastrairresistilemente #acia el $uturo, al cual vuelve las espaldas, mientras el c%mulode ruinas crece ante él #asta el cielo.

"ste #uracán es lo que nosotros llamamos progreso” '(alter )enjamin, !esis *+ sore el

concepto de #istoria.

Es importante ver cómo Benjamin distingue la mirada del ángel de la nuestra, el ángelestá guiado por el espanto y esa advertencia no deberíamos perderla de vista,embrujados tantas veces por supuestos avances y progresos.



restar atención a los !ragmentos, a lo malogrado, a lo "ue no !ue, a lo "ue "uedó en elcamino, a tantos episodios rotos. ara muc#a gente, las ruinas, los escombros ycadáveres son episódicos, son daños colaterales, son acontecimientos con los "ue se tejela #istoria. ara Benjamin y el ángel una manera tal de concebir la #istoria, de pensar a logrande supone triviali$ar el su!rimiento de "uienes pagan el precio de la #istoria, de eso

"ue llaman progreso

“-a tradicin de los oprimidos nos ense/a que el 0estado de e1cepcin2 en el que vivimoses la regla. 3eemos llegar a un concepto de #istoria que se corresponda con estasituacin. 4uestra tarea #istrica consistirá entonces en suscitar la venida del verdaderoestado de e1cepcin, mejorando as& nuestra posicin en la luc#a contra el $ascismo. "l que sus adversarios se en$renten a él en nomre del progreso, tomado éste por ley #istrica, no es precisamente la menor de las $ortunas del $ascismo. 4o tiene nada de$ilos$ico asomrarse de que las cosas que estamos viviendo sean 0todav&a2 posiles en

pleno siglo ++. "s un asomro que no nace de un conocimiento, conocimiento que deserlo tendr&a que ser éste5 la idea de #istoria que provoca ese asomro no se sostiene”

%Benjamin, &esis 'III(.

) #ay "uienes identi!ican la #istoria con lo "ue #a tenido lugar, como una suma deacontecimientos, obviamente contados por "uienes #an podido #acerlo.

) ero #ay otra manera de acercarse al pasado y esa es la "ue es propia de lamemoria. *istoria y +emoria, ambas se ocupan del pasado, pero la di!erenciapuede %y debe( ser radical la mirada #a de ampliarse no solo a lo sucedido, sinotambi-n a lo "ue no acabó pasando por"ue !ue derrotado, ani"uilado,menospreciado, #undido, a lo "ue !ue en de!initiva, malogrado.

) Benjamin propone una lectura de la #istoria "ue #alla en la +emoria el elementode constitución mirar la #istoria desde el prisma de los vencidos

) entonces, seguramente, la #istoria se escribiría de otro modo, tendría otro libreto,actuarían otros protagonistas, se describirían otros proyectos, se narrarían otrossueños, se pondría en de!initiva de mani!iesto "ue /#ubo otro0 rumbo.

) 1esde un punto de vista de la !iloso!ía del derec#o y de !iloso!ía política, claroestaba en esta mirada enjaminiana "ue para "ue el Estado de e2cepción!uncionase %y #ay "ue recordar de "u- -poca #istórica #ablamos y "u- empleos

tuvo una !igura semejante, pero podemos tambi-n pensar en el presente(, o sea,para poder dejar a una parte de la sociedad en un espacio sin ley, en una $ona deno3derec#o %v. 4osta 5678(, es siempre necesaria e imprescindible la presencia dela ley.



“"l #istoricismo culmina con todo derec#o en la #istoria universal. 3e ella se separaqui6á la #istoriogra$&a materialista, en lo tocante a metodolog&a, más que de ningunaotra. "sa #istoria universal no tiene ning%n arma6n terico. Su método es aditivo5utili6a la masa de datos para llenar el tiempo vac&o y #omogéneo. -a #istoriogra$&amaterialista, por su parte, se asa en un principio constructivo. Propio del pensar es

no solo el movimiento de las ideas, sino tamién su suspensin. 7uando el pensamiento se detiene de repente en una constelacin saturada de tensiones, provoca aquél en ésta una sacudida en virtud de la cual la constelacin cristali6a enmnada. "l materialista #istrico se acerca a un ojeto #istrico solo y %nicamentecuando éste se le en$renta como una mnada. "n esa estructura él reconoce el signode una suspensin mesiánica del acontecer, o dic#o de otra manera, de unaoportunidad revolucionaria en la luc#a por el pasado oprimido. "l materialista captaesa oportunidad con el $in de #acer saltar una determinada época del curso#omogéneo de la #istoria8 una determinada vida, de una época8 y una determinadaora, de entre toda la actividad laoral de una vida. -a ventaja de este procedimientoconsiste en que la actividad laoral de toda una vida está guardada y conservada en

la ora8 y toda una época, en la vida8 y el decurso completo de la #istoria, en la época."l $ruto nutritivo de lo que se puede comprender #istricamente tiene en su interior,cual semilla preciosa aunque carente de saor, al tiempo” %Benjamin, &esis 9'II(

) :o "ue se ventila en esta tesis es la relacin y la di$erencia entre #istoria y memoria %así ;arlo <==> Bolívar Ec#everría <==?(. :a !inal imagen de la tesispretende aclarar la posición el conocimiento "ue pretende la memoria no tiene"ue ver con un objeto "ue está allí %y "ue #abría sido ya señalado por la #istoria, omejor, por el #istoricismo(, sino con una semilla. /En la semilla están latentes

posibilidades "ue el tiempo permitirá conocer. El pasado de la memoria es así,preñado de posibilidades0 %+ate, op.cit <>@(.

El imperati-o aam(tico y el problema del mal.

) 4omo +ate #a podido señalar al respecto, /la memoria es, en el !ondo, una#ermen-utica del pasado "ue, sin ella, no merece atención alguna %A(. ;eentenderá a#ora por "u- usc#Cit$ es tan importante para la memoria. l ser,sobre todo, un proyecto de olvido, no podemos apro2imarnos a -l sin poner en

juego la sustancia anamn-tica. 4onocer usc#Cit$ Dsabiendo "ue comprenderloes imposible3 es movili$ar todo el contenido epist-mico de la recordación0 %op.cit8>(. osiblemente, ese camino, el de la memoria, sea el "ue proceda seguir parael abordaje de una de las categorías de la #istoria tan olvidadas, al mismo tiempo"ue centrales la del mal.



) or a#ora digamos "ue en la mirada de Benjamin y rendt cabe considerar una/relación0 %sea bilateral o más, multilateral( entre "uien causa y "uien su!re el mal,-ste puede ser mirado de otro lado %del espejo( del lado del su!riente.

) decididamente, es la e1periencia del mal la Fnica "ue verdaderamente le #acepresente y es a esa a la "ue me re!iero, la cual solo se inscribe en la dimensiónbio3grá!ica.

;emprFn lo #a contado en torno a su propia e2periencia en el campo de Buc#enCald

“9-o esencial: 7reo saerlo, s&. 7reo que empie6o a saerlo. -o esencial es conseguir superar la evidencia del #orror para tratar de alcan6ar la ra&6 del ;al radical, das radi<al )=se. "l #orror no era el ;al, no era su esencia, por lo menos. 4o era más que el envoltorio, el adere6o, la pompa. -a apariencia en de$initiva. 7ar&a pasarse #orastestimoniando acerca del #orror cotidiano sin llegar a ro6ar lo esencial de la e1periencia

del campo. *ncluso si se #uiera testimoniado con una precisin asoluta, con unaojetividad omnipresente, incluso en ese caso podr&a no acertar en lo esencial. Podr&aconsultarse un d&a cualquiera, empe6ando por el despertar a las cuatro y media de lamadrugada, #asta la #ora del toque de queda5 el traajo agoiante, el #amre perpetua,la $alta permanente de sue/o, las vejaciones de los Kapos, las $aenas en las letrinas, el #umo del crematorio, las ejecuciones p%licas '>, sin por ello llegar a ro6ar lo esencial ni desvelar el misterio glacial de esta e1periencia, su oscura verdad radiante '>. -oesencial ?digo al teniente @osen$eld es la e1periencia del ;al. 7iertamente estae1periencia puede tenerse en todas partes> 4o #acen $alta los campos de concentracin

para conocer el ;al. Pero aqu& esta e1periencia #ará sido crucial, y masiva, lo #aráinvadido todo, lo #ará devorado todo> "s la e1periencia del ;al radical '>. "n la

pestilencia del loque BC, el de los inválidos, es donde deer&a #aer empe6ado esterelato, le digo al teniente americano. "n la pestilencia so$ocante y $raterna de losdomingos, alrededor de HalDac#s y ;aspero “'EFFG5 FIFJ.

MEME y AAME/I/

) +ate construye alrededor de usc#Cit$ el paradigma de la memoria para combatir a"uel programa amnésico. /:a memoria es la categoría "ue surge del abismo "uee2iste entre conocimiento e %in(comprensión de usc#Cit$0 %<==@ 5G5(. partir de

allí, el concepto de ra6n anamnética es por -l e2plicitado en diversos planos. Enprimer t-rmino, en un plano moral, como ra$ón práctica al recordar con dorno elnuevo imperativo categórico "ue convoca a luc#ar, es decir, a actuar anamn-ticamente. En segundo t-rmino, esa ra$ón posee una dimensión políticapor"ue escoge un pasado concreto. :as siguientes palabras pueden contribuir ae2plicitar mejor este concepto



) “ui6á #ar&a que distinguir entre memoria ' mnemne y rememoracin' anamnesis , la primera especiali6ada en el pasado recordado y la segunda en el

pasado olvidado” %+ate %<==@ 5G@(.

MEMORIA 0 1EREC2O

) H;obre cuánta y sobre cuál violencia se !unda el presente Hsobre cuánta y sobrecuál violencia se !unda el 1erec#o, el orden jurídico político actual Huede lamemoria, entendida como #a sido señalada, desempeñar un papel amamn-tico"ue desvele los parámetros sobre los "ue se construyó el presente

) ues bien, Hse puede pretender la construcción de un paradigma de conocimientobasado en la #ermen-utica de la memoria "ue sea Ftil y válido, tambi-n, para elcampo digamos de las ciencias penales

/E341A PARTE5 La memoria como categoría epistemológica para las cieciaspeales.

Alg'as *etre tatas otras, -ictimi6acioes o cosideradas por el sistema i lossaberes peales7 peológicos7 crimiológicos.

) En el ámbito migratorio

"l EI de aril de EFFG un cayuco con CF jvenes a ordo 6arpaa de ladesemocadura del r&o 7asamance, al sur de Senegal, con destino a las *slas 7anarias.Sin emargo, esta emarcacin nunca lleg. "l rastro de sus ocupantes se perdi parasiempre en medio del océano en la peor tragedia de la inmigracin clandestina rumo a"spa/a que, Paradjicamente, pas desaperciida para la opinin p%lica. !odos los

jvenes $allecidos proced&an de la misma regin de Kolda 'Senegal, un rincn de L$ricadesangrado por la pore6a y por la guerra olvidada de la 7asamance. 9Alguien se

acuerda de ello:

"l C de $erero de EFJ mor&an B inmigrantes en la playa de "l !arajal $ruto del a#ogamiento seguido a los disparos y la intimidacin de la polic&a espa/ola y marroqu&.

en los %ltimos EF a/os alrededor de EB.FFF personas #an muerto en su intento por llegar a la Mortale6a "uropea5 9#ay alg%n responsale de tantas miles de muertes:

) En el ámbito de la violencia institucional



“Se puede concluir que en la %ltima década se #an producido al menos C.CEdenuncias por torturas en "spa/a, pudiéndose estimar que las denuncias superen lasG.FFF, lo que dar&a una media estimada de GFF denuncias anuales” %datos de la 41&<=58(.

“Amnist&a *nternacional considera que las persistentes denuncias de malos tratoscometidos por $uncionarios encargados de #acer cumplir la ley tienen su origen en losm%ltiples incumplimientos por parte de las autoridades espa/olas de sus oligacioneslegales internacionales, que les e1igen la adopcin de diversas medidas legislativas,

judiciales y administrativas para prevenir los malos tratos, poner a los responsales adisposicin de la justicia y garanti6ar que las v&ctimas recien reparacin. Aunque

Amnist&a *nternacional no considera que los malos tratos por parte de los $uncionariosencargados de #acer cumplir la ley espa/oles constituyan un #ec#o rutinario, a partir desus investigaciones la organi6acin re$uta la idea de que sean un #ec#o e1cepcional y que la responsailidad de que se produ6can recaiga e1clusivamente en un pu/ado deagentes de polic&a delictivos” %mnistía Internacional, Sal en la #erida. -a impunidad

e$ectiva de agentes de Polic&a en casos de tortura y otros malos tratos, <==7(.

) En el ámbito internacional

-os #ec#os del de septiemre de EFF son qui6ás uno de los más $uertesejemplos de indi$erencia moral. "se d&a el mundo occidental se a$ligi colectivamente por la pérdida de I.FJB personas en los ataques al (orld !rade 7enter y al Pentágono en(as#ington. 4o ostante, no #ay duda de que pocas de esas lágrimas $ueron vertidas por las v&ctimas de la 0econom&a gloal2, que murieron ese mismo d&a5 EJ.FFF personas quemurieron de #amre8 C.FEF ni/os que murieron de diarrea8 o E.GFF ni/os que murieron desarampin %;imon emberton <==8 >7(.

) ara entender la selectividad con "ue #a operado una criminología tradicional,puede recientemente acudirse a la obra de Jayne +orrison, 7riminology,7ivilisation and t#e 4eD (orld Nrder . ;i bien la tesis central de la obra es elestudio del genocidio, categoría precisamente olvidada por los saberescriminológicos tradicionales, el citado autor plantea la necesidad de una4riminología global en un mundo globali$ado a trav-s de un pro!undo cambio deparadigma en el estudio.

) 1e acuerdo al pro!esor neo$eland-s, el mundo se divide entre dos grandesespacios el civili$ado y el no civili$ado. 4itando a *obbes, recuerda "ue la guerra

es la racionalidad constitutiva en la actual geopolítica mundial. sí puedeentenderse "ue los acontecimientos del 553;, en realidad, no transmiten tanto laperpetración de un crimen #orrendo por el nFmero de víctimas cuanto por"ue elespacio civili$ado !ue invadido por el incivili$ado.

) 1e tal modo, los muertos "ue son /normales0 en el espacio no civili$ado delplaneta, no pueden serlo en el de la civili$ación, eso es lo intolerable, no loprimero.



1E &4ETELET A A4/C2#IT8

) +orrison dedica el libro a entender cómo se gestó un saber criminológico "ue !uecimentando un corpus teórico para el ani"uilamiento de ciertas poblaciones y

áreas del planeta. El capítulo titulado "stad&stica criminal, soeran&a y control de lamuerte5 de uetelet a Ausc#Dit6 , es elocuente.

) 1e allí en más, con otras contribuciones positivistas, el #omre delincuente erauna especie de sub3#umano susceptible de ser eliminado si es necesario ynumerosas poblaciones de otras etnias !ueron asimiladas por la teoría racistadecimonónica a categorías in!eriores a nuestra normalidad y objeto de e2terminiosdiversos.

LA 94/TICIA 1E LO/ :ECE1ORE/) 4omo puede leerse con Kolo en -a justicia de los vencedores, el !in de la segunda

Luerra +undial introdujo la novedad en el sistema jurídico internacional de ju$gar a individuos por los #ec#os cometidos durante la contienda %#asta entonces, se

ju$gaba a los Estados(.

) Esa novedad produjo los tribunales de Muremberg y &okio, donde jerarcasalemanes y japoneses !ueron condenados. /ero dejó otra enseñan$a no #ubo enel ban"uillo de los acusados ningFn general o político "ue perteneciera a lospaíses vencedores. or ejemplo nadie !ue acusado por las bombas atómicas de*iros#ima o Magasaki nadie !ue acusado por el criminal bombardeo a la ciudad de1resde, donde en una sola noc#e murieron al menos 5==.=== civiles.

) 1esde entonces y #asta #oy, cada ve$ "ue un tribunal internacional ju$gacrímenes de guerra, invariablemente se repite el mismo procedimiento sonmiembros de los países derrotados "uienes se sientan en el ban"uillo de losacusados. Esto #a creado un sistema jur&dico dual , donde la victoria brinda elderec#o de la impunidad y la derrota garanti$a una nueva derrota ante la ley0%<==>(.

APART2EI1 CRIMIOL;3ICO

) Ntra ve$ los interrogantes enjaminianos H"ui-n escribe la *istoria Es decir,H"ui-n trabaja la +emoria Hpueden escribir y ad"uirir visibilidad los vencidos:levando estas #erramientas al campo de las ciencias penales y criminológicas,Ka!!aroni recuerda %al e2aminar el trabajo de +orrison( "ue la criminología esconstrucción de un sector del planeta y tiene por tanto una locali$ación geográ!icaprecisa %el /occidente de la civili$ación0(.



) &ambi-n "ue los Estados de ese ámbito geográ!ico se construyeron sobre la basede violencia y genocidio y no debemos olvidar "ue el triun!o de unas pocas etniassobre otras llevó a la destrucción de los vencidos y la #istoria la escribieron losvencedores, mostrando a la civili$ación como un camino de progreso #acia lapaci!icación de la vida cotidiana.

) El apart#eid criminolgico se construyó así puesto "ue /las ci!ras de criminalidadregistrada "ue se reportan Despecialmente de los países adonde #a #abidogenocidios3 no incluyen los cientos de miles y a veces millones de muertos por esecrimen. ara la estadística criminal no e2isten, son negados sólo cuentan los#omicidios normales0 %op. cit 8(.

La adopció de la Memoria como categoría epistemológica.

) ensar en el llamamiento de autores como Jayne +orrison %<==>(, RaFl Ka!!aroni

%<==7( o 'incen$o Ruggiero %<==6(, por citar algunos relevantes de distintoscontinentes %algunos ya citados en páginas anteriores(, por una disciplina "ue seabo"ue al estudio los crímenes de Estado, de los genocidios, de la violenciainstitucional, del terrorismo de Estado y de la guerra.

) ;emejantes atrocidades Dal menos si se repasan los ejemplos de las barbaries delsiglo 99 "ue +orrison recuerda3 #an causado la mayor victimi$ación jamásconocida. , pese a ello, %casi( nunca #an !ormado parte de las preocupacionescientí!icas de la 4riminología tradicional.

) , !rente a la o!ensiva securitaria y b-lica "ue #oy nos asola, el desarrollo de una

criminolog&a “del alto el $uego” %c!r. Ruggiero <==6( nos vuelve a despertar delletargo y nos convoca a una tarea "ue algunos ya cali!ican como de una /nueva0%otra ve$ las necesarias comillas( disciplina crítica gloal , propia de una -poca "uetambi-n presenta nuevos contornos en este terreno.

MEMORIA *1EL PRE/ETE,

) Es evidente, y #ay muc#as pruebas, "ue el discurso de la memoria molesta puesle da la vuelta, pone del revés, la interpretación de la realidad %pasada y presente(.4omo se vio en el campo penalístico, la misma lleva a todo un replanteamientomuy serio de a"uellas disciplinas y muc#os tambalearían en consecuencia. En unadimensión aFn más amplia, la memoria %de las víctimas(, como indica Olore$+iguel %<==?(, provoca desa$ón en los #istoriadores e intran"uilidad en lospolíticos, sobre todo, por"ue desautori$a las certe$as. /El sujeto "ue es capa$ decontemplar ese pasado olvidado será capa$ tambi-n de contemplar en el presentelo "ue está en riesgo de ser e2cluido, es decir, la totalidad del presente0 %op. cit.(.



) El problema es "ue, a medida "ue se conoce la verdad sobre un pasado "ue#abía sido ocultado y negado, la justicia empie$a a ser reclamada. 4omo indicaOlore$ +iguel, si la verdad "ueda establecida, como consecuencia de los trabajosde la memoria, y si esta verdad es una verdad terrible, una verdad de crímenesatroces, una verdad de culpas enormes, la !alta de justicia "ueda aFn más visible y

más sentida.

) /or eso la memoria de las víctimas, además de una política sin e2clusiones,reclama justicia, o sea, una respuesta al impulso -tico0 %op.cit.(.

) ero entonces, trabajar como /avisador del !uego0 implica peligros de!initivos.Puien entienda "ue la capacidad liberadora de la memoria no se nutre de los/nietos liberados0 sino de los /abuelos esclavi$ados0 %+ate, op. cit.( #abráemprendido a"uel camino.

) H;upone ello una nueva epistemología para los !ines "ue se #an descripto en estetrabajo "uí solo se deja modestamente planteado. &al ve$, sea un terreno !-rtil

para seguir trabajando.

%P'ede haber 'a teoría de la 94/TICIA basada e la MEMORIA)

;eñala OERRQN:I /como indican Rivera y otros, HPu- tiene "ue decir la criminología!rente a las catástro!es terribles del #ambre, la sed, las en!ermedades, la devastaciónambiental causados por el actual anarco3capitalismo y el mercado !inanciero sin reglas*oy, más de ?== millones de personas su!ren de #ambre y de sed y < mil millones notienen acceso a los medicamentos esenciales "ue salvan vidas, con el resultado de "ue

cada año mueren cerca de ? millones de personas 3<8.=== por día3 la mayoría de ellosniños, por la !alta de agua y alimentos básicos, y más de 5= millones por la !alta demedicamentos "ue salvan vidas, víctimas más del mercado "ue de la en!ermedad, debidoa "ue los medicamentos están patentados o no son producidos por !alta de demanda,relativa a en!ermedades in!ecciosas 3in!ecciones respiratorias, tuberculosis, ;I1, malariay similares3 erradicadas yo desaparecidas en los países occidentales. l mismo tiempo,el actual desarrollo insostenible del capitalismo sin reglas, #a producido una alteraciónirreversible de la naturale$a "ue, si no se detiene, pone en riesgo, en un tiempo no muylargo, la #abitabilidad misma del planeta. El cambio climático producido por la emisión degases contaminantes, en particular, #a causado ya estragos en las poblaciones máspobres del mundo, aun"ue están casi enteramente causados por los países ricos. :as

se"uías, inundaciones, desli$amientos de tierra, #uracanes y ciclones tropicales a!ectanparticularmente a los países más pobres, cuyos #abitantes viven de la agricultura, conmenos de un dólar al día, causando una reducción de sus recursos #ídricos y de susalimentos, la destrucción de los barrios pobres y comprometiendo su capacidadproductiva y las oportunidades mismas de desarrollo. estos !lagelos "ue a!ectan a lospaíses pobres de la peri!eria del mundo, se #an añadido en los Fltimos años, en el interior de llamado Sespacio civili$adoS de nuestros países, los ata"ues a los derec#os sociales y



los derec#os de los trabajadores, por parte de las políticas neoliberales impuestas anuestros gobiernos por los mercados !inancieros políticas "ue además son !allidas,incluidas las económicas, y "ue #an llevado al crecimiento del desempleo masivo y alaumento e2ponencial de la pobre$a de la mayoría de la población, al mismo tiempo "ue#an aumentado e2ponencialmente la ri"ue$a de unas pocas decenas de miles de

especuladores.

La memoria COLECTIVA *o <histórica=,

) Recuperar la tradición del paradigma de la violencia estructural resultaimprescindible para abordar la dañosidad social del presente. Esa es una de las#erramientas !undamentales con las "ue trabajar.

) ero, todavía, antes de abordar el tiempo contemporáneo, conviene seguir el #ilode otra #erramienta "ue tambi-n considero imprescindible para el abordaje global

"ue se propone la categoría de la memoria colecti-a.

:IOLECIA 0 MO1ERI1A1

) 4omo señala 4alveiro, a partir de los siglos 9' y 9'I, la +odernidad inició unproceso de e2traordinaria concentración del poder económico y político a escalaplanetaria, gestionado mediante una racionalidad instrumental y tecnológica. /Esteproceso comprendió el uso de un alto nivel de violencia para asegurar ladominación de grandes masas de la población. ;i bien para la peri!eria D"uepadeció los genocidios de la política colonial3 el componente letal de la+odernidad estuvo claro desde sus inicios, esto no !ue tan evidente para lasmentes europeas. Mo obstante, a !inales del siglo 9I9 y principios del 99, algunospensadores como Miet$sc#e, Rosen$Ceig o Benjamin lograron vislumbrar lasnuevas catástro!es a las "ue conduciría y "ue, de #ec#o, ya estaban a las puertasde Europa. ;eñalaron la naturale$a violenta del Estado, del derec#o y de lat-cnica advirtieron sobre los peligros de un #umanismo "ue invisibili$aba al#ombre concreto y el potencial totalitario en el cora$ón europeo del mundomoderno. &odo ello aparecía a la ve$, como perversin y como consumacin delproyecto moderno0 %<=5< 55(.

LO/ M>R3EE/ 1EL COTRATO /OCIAL *y las 6oas de o?derecho,

) :os saberes penales no prestaron atención a semejantes procesos. :a/civili$ación0 de la "ue #abló y trató el proyecto ilustrado no !ue la de la completa#umanidad, !ue la "ue sólo alcan$aría a unos sujetos %masculinos, blancos,adultos y propietarios( de la parte occidental del mundo %4osta, 5678(. sí see2cluyó del contrato a los opuestos mujeres, personas de otras ra$as, niñas y



desposeídas. :a teori$ación sobre la otredad , el racismo y los enemigosdespuntaron tambi-n en los albores de la +odernidad, no constituyen por tantocomo a veces se %mal( interpreta un acontecimiento solo del presente sino "ue lae2clusión social !ue diseñada en a"uel proyecto jurídico #egemónico ydiscriminatorio tan bien descrito por 4osta %op.cit.(.

:íctimas y paradigma aam(tico

) Resulta evidente, por tanto, "ue !ue la aludida dirección de la Oiloso!ía crítica la"ue puso el acento en algunas cuestiones !undamentales a partir de las cuales sepretendió romper los límites epistemológicos clásicos mirar la #istoria y el devenir de los procesos de desarrollo a trav-s de la consideración y la mirada de lose2cluidos del acto emplear la mirada de las víctimas. oner en acción de unave$ lo "ue Reyes +ate de!ine como una #erramienta y paradigma /anamn-tico0%+ate, <=5<(. 1esarrollar por tanto una disciplina, un corpus y una pra1is "ue

tenga a la memoria como principal campo de delimitación epistemológica%*albCac#s, T56<GU <==8(, #ará "ue a!loren otros escenarios "ue no #abían sidocontemplados.

MEMORIA E IMPERATI:O CATE3;RICO NEGATIVO

) dorno !ue tal ve$ "uien señaló más claramente cuál debería ser el #ori$onte detrabajo de las ciencias y de la pra2is político cultural tras el *olocausto en e!ecto,para dorno, tras la ;#oa#, el imperativo categórico kantiano se #a derrumbado.

osiblemente, Vant #aya sido uno de los más lFcidos !ilóso!os de la Ilustración y,como indica &a!alla uno de los "ue más podía permitirse ser optimista al a!irmar launiversalidad, la racionalidad, la autonomía y la #umanidad como pilares de lacivili$ación %v.<==@ G73>>(. El nuevo imperativo categórico de dorno D/orietar elpesamieto y la acció de modo @'e A'schit6 o se repita7 @'e o -'el-aa oc'rrir ada semejate03 tiene claras di!erencias con el !ormulado por Vant.&a!alla lo e2plica con claridad.

) En primer lugar, es negativo y ello implica al menos tres cuestiones a( no nos lodicta el conocimiento del bien sino la e2periencia del mal b( no nos lo dicta lara$ón sino la e2periencia %su -tica no comien$a con un ideal de #umanidad sino

con el descubrimiento de un genocidio( c( el nuevo imperativo categórico consisteen decir no, es decir, se !undamenta en el rec#a$o.

I.C. ES MATERIALISTA

) En segundo lugar, el imperativo categórico de dorno es materialista, se ocupa del#orror real y material "ue #an su!rido tantas víctimas, no es racional como el



<antiano, es solidario %y ese es, justamente, el concepto de ;imesis en los te2tosde dorno, el de !raterna solidaridad(.

I.C. /E 4TRE 1E MEMORIA

) Oinalmente, la tercera di!erencia es "ue el imperativo categórico adorniano está#ec#o de +emoria, esta es su sustancia, está situado dentro de la memoria mismay ella le alimenta.

El A3EL 1E LA 2I/TORIA MIRA SIEMPRE HACIA ATRÁS

) 4omo indica Landler en su estudio sobre Benjamin, por esas ra$ones el Wngel dela *istoria mira #acia atrás. Es decir, primero, por"ue epistemolgicamente esinevitable mirar #acia atrás para entender el entorno. ;egundo, por"ueontolgicamente el !uturo no e2iste. tercero, por"ue pol&ticamente las luc#as se#acen por los vencidos de generaciones anteriores y no por promesas de !uturo%op.cit 8>387(.

%TEORBA 1E LA 94/TICIA O REACCI; COTRA LA I?94/TICIA)

) El punto de partida de la luc#a contra la injusticia no es una teoría de la justicia!ormalmente rigurosa. El punto de partida es la indignación contra la injusticia. Esareacción indignada es tan emocional como racional. Mo se nutre sólo de

argumentos. Es necesario "ue la persona "ue la siente #aya desarrollado unasensibilidad #acia la injusticia "ue le #aga rebelarse contra ella.

MEMORIA 1E LA/ :BCTIMA/

) el discurso de la memoria molesta pues le da la vuelta, pone del rev-s, /cepilla acotrapelo0 la interpretación de la realidad %la pasada pero tambi-n la presente(.

) Mosotros sabemos "ue en el campo penalístico, la memoria lleva a todo unreplanteamiento muy serio de a"uellas disciplinas y muc#os tambalearían en

consecuencia.

) En una dimensión aFn más amplia, la memoria %de las víctimas(, como indicaOlore$ +iguel %<==?(, provoca desa$ón en los #istoriadores e intran"uilidad en lospolíticos, sobre todo, por"ue desautori$a las certe$as.



La ecesaria *e imprescidible, mo-ili6ació social

) las mani!estaciones "ue #oy son presentadas como un conjunto de acciones "uese denominan e2presiones colectivas, plantes, desobediencia civil, /escrac#es0 ysimilares, no constituyen una novedad en absoluto sino "ue provienen de la Dantigua3 categoría del llamado /derec#o de resistencia0. uede ser oportuno, sinpretender a"uí reali$ar una teoría general sobre la misma, rastrear un poco parae!ectuar una mirada panorámica de diversas aportaciones y concepcionespolíticas y cientí!icas "ue se #an veri!icado en torno a dic#o tema.

1erecho de resistecia

) El tema de la resistencia a la opresión ocupó un importante lugar en la literaturapolítica, por ejemplo, de la Ilustración. En este sentido, es decisivo a"uí recordar con Oerrajoli "ue ya en la propia Costit'ció racesa de DFG se establecía

"ue Sen todo gobierno libre, los #ombres deben poseer un medio legal para resistir a la opresión y, cuando este medio sea impotente, la insurrección será el mássanto de los deberesS %566= 67@(.

Tres corrietes sobre el 1erecho a la resistecia

a( la representada por ;pencer, segFn la cual el Estado nacido en las sociedadesmilitares #abría perdido gran parte de sus !unciones a medida "ue #abía idocreciendo la sociedad industrial

b( la socialista mar2ista3engelsiana, "ue proclamaba la desaparición del Estado,previo paso por una dictadura del proletariado y

c( la libertaria, segFn la cual las instituciones políticas caracteri$adas por el uso de la!uer$a, no sólo no eran indispensables para salvar al #ombre de la barbarie delestado de naturale$a, sino "ue eran inFtiles y perjudiciales y podían,tran"uilamente, desaparecer sin dejar #uella.

4ada una de estas tres direcciones #a desarrollado importantes contribuciones en torno alderec#o de resistencia

Atig'as y Moderas cocepcioes sobre el 1erecho a la resistecia. 1i!erecias

a( la primera %y la "ue más interesa a"uí(, se re!iere a "ue el problema de laresistencia es visto #oy como un !enómeno de tipo colecti-o y ya no individual

b( la segunda, alude a "ue las antiguas teorías sobre la resistencia discutían en tornoa la licit'd o ilicit'd de la misma en sus distintas !ormas, es decir, situaban el



problema en t-rminos jurídicos #oy, en cambio, "uien discute acerca de laresistencia lo #ace en t-rminos políticos, es decir, sitFa el problema en t-rminos deoport'idad y e!icacia.

or eso, desde #ace muc#o tiempo, por ejemplo Bobbio señalaba "ue dic#o tema SsesitFa en la actualidad en íntima relación con el tema de los mo-imietos de resisteciaS

RE/I/TECIA y 1EMOCRACIA

) pese a la constante descali!icación "ue, por ejemplo en España, se lleva a cabodesde las instancias gubernamentales sobre las acciones colectivas de disidencia,protesta y desobediencia civil, una ve$ más #ay "ue señalar "ue las mismas ni sonnovedosas ni anti3democráticas. Recurrir a la memoria, una ve$ más, resultaimprescindible. or ejemplo, Lordillo nos recuerda cómo !ue reasumida por elpropio constitucionalismo alemán posterior a la segunda Luerra +undial, la

tradición ilustrada antes comentada. En e!ecto, el citado autor recuerda "ue el art.H de la Costit'ció de la RepJblica !ederal Alemaa señala "ue %A( /&odoalemán tendrá derec#o de resistencia cuando no e2ista otro remedio, contra"uien"uiera "ue se proponga eliminar el orden de re!erencia0.

RE/I/TECIA 0 1EREC2O/ 24MAO/

) El tema de la resistencia, "ue antiguamente guardaba relación con un Sderec#oS"ue podía ser ejercitado individualmente, #a ido trans!ormándose oensanc#ándose #asta el punto de entenderlo como una mani!estación más de laacción colectiva. Est-ve$ raujo y en especial Largarella, destacan claramente"ue el sometimiento a privaciones severas es una !orma de tiranía y ello puededarse, tambi-n, dentro de un r-gimen !ormalmente democrático %Est-ve$ raujo<=5@ 5? Largarella <==7 @G6(. Este Fltimo reconoce así un derecho deresistecia !rete a la pri-ació e"trema, resistencia "ue podrá ser pasiva perotambi-n activa como en numerosos países %por ejemplo de m-rica latina y de

W!rica( #an promovido importantes cambios en las Fltimas dos d-cadas. Es "ue,en Fltima instancia, la resistecia represeta la m+s importate!'dametació sociológica de los derechos h'maos. Ejemplos

) Hrealmente, los ordenamientos jurídicos, #ubiesen reconocidos los derec#ossociales al trabajo, educación y salud, sino #ubiese surgido un mo-imietoobrero "ue luc#ase por la con"uista de los mismos

) Hpodría #aberse reconocido el derec#o al voto !emenino, primero, y al aborto,despu-s, sino se #ubiera ido consolidando un mo-imieto !emiista "ue losreivindicase



) Hse #ubiera reconocido el derec#o a la objeción de conciencia, de no #aber e2istido un mo-imieto atimilitarista "ue luc#ase por ello

) H"u- se podría decir acerca de los mo-imietos ecológicos y de las e2igenciasde una mayor protección de la naturale$a

) 1ic#o claramente #an sido los sujetos sociales portadores de reclamos "uienes#an luc#ado por %y logrado el( reconocimiento de mayores cuotas de derec#os!undamentales.

) esos sujetos sociales portadores de reclamos, no son otros "ue los movimientossociales #e a#í la aut-ntica raí$ social de los derec#os #umanos.

1EREC2O/ y 1E$ERE/...

) ero ese establecimiento de los derec#os como consecuencia de luc#ascolectivas %y no de graciosas concesiones de los poderes políticos( tambi-nenseña /la otra cara0 cuando esa luc#a decae, esos derec#os pueden perderse yes lo "ue #a venido pasando en las Fltimas d-cadas y como consecuencia de losprocesos "ue se envuelven en la llamada globali$ación %privati$ación,desregulación....(, esos derec#os se #an visto seriamente mermados sin "ue unaoposición y movili$ación e!ectivas #ayan podido ser impuestas.

) los derec#os valen lo "ue valen sus garantías o dic#o de otro modo, el derec#o deuno supone deberes para la otra parte.

:IOLECIA E/TR4CT4RAL y C4LT4RA 1E LA RE/I/TECIA

) si esa otra parte, !undamentalmente representada por el Estado y lascorporaciones transnacionales #an "uebrantado !lagrantemente sus deberes, loscorrelativos derec#os, ganados en las luc#as mencionadas, o están seriamenteamena$ados o están en gran parte perdidos. ;ólo una verdadera /cultura de laresistencia0 puede actuar en de!ensa legítima de los derec#os !undamentales. así, !rente a la situación de violencia estructural "ue padecemos, esabsolutamente legítimo "ue %re( surja un derec#o a la resistencia "ue, utili$andolos propios cauces legales y constitucionales de a"uel Estado, canalice la

bFs"ueda de una e!ectiva tutela jurídica de sus derec#os !undamentales ypromueva vías reales y e!icaces encaminadas #acia a"uella promoción.

) si, de verdad, se "uiere revaluar el sistema democrático de aut-ntica soberaníapopular y tomarse en serio el imperativo categórico adorniano antes e2aminadoponiendo en marc#a el accionar de la memoria 3tambi-n para el presenteorientando nuestro pensamiento y accin para evitar la repeticin de la ararie 3,antes o despu-s la resistencia será opuesta %ya está si-ndolo( !rente a las



atrocidades de los crímenes de los Estado y de los +ercados. ;emejantespolíticas, aut-nticamente criminales, acabarán c#ocando irreversiblemente contrapoblaciones enteras.

PARA *o, ACA$AR...

) 4EI::R : *I;&NRI 4NM&RE:N...

) 4N+REM1ER : &ENRX 4RI&I4 1E : *I;&NRI

) &N+R;E EM ;ERIN E: R1IL+ 1E : +E+NRI

) NRLMIKR E: E;I+I;+N...

) ntes "ue el !uego venga nuevamente a devorarlo todo.

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