MEDINA - semanasantaenrioseco.com · presenciar el encuentro de Cristo en la cruz, Vivo y Muerto, con la Madre (La Dolorosa) en el atrio de la iglesia de Santiago de los Caballeros

EditaJUNTA LOCAL DE SEMANA SANTA

DirectorAndrés San José de la Fuente

CoordinadorJosé María Román Gutiérrez

TextosAndrés San José de la FuenteArtemio Domínguez GonzálezRicardo BlázquezCarlos Amigo VallejoJuan Carlos FraileJesús M.ª Parrado del OlmoEnrique GavilánLuis Miguel de DiosLuis Díaz VianaCarlos BlancoEsmeralda MarugánLuis JaramilloÁngel de Pablos Chapado (†)Aurelio García MacíasJuan Carlos Pérez de la FuenteMar DomínguezJosefa Eugenia Fernández ArufeCarlos AganzoAlejandro Menéndez MorenoJosé María Román GutiérrezÁngel M.ª de PablosFélix-Carmelo García MartínezElena Rodríguez CostillaSor María González PérezLuis Ángel Lobato ValdésPablo Toribio GilEugenio Jesús OterinoGonzalo Franco RevillaVirginia AsensioJesús María RegleroEduardo Franco FelipeFernando SordoM.ª Luz Pizarro PizarroJesús Vicente Brezmes

FotografíasArchivo Junta de Semana SantaDavid CarpinteroFernando Fradejas de CastroFoto BarriosJosé Carlos Lobo GarcíaJosé I. Santamaría MagdalenoLuis Anselmo Sánchez GutiérrezLuis Fernández Nanclares

Citas SeparadoresExtraídas del libro IMITACIÓN DE CRISTO,

de Tomás Kempis

Portada«Entierro». Fotografía: Alfredo José Luis Miguel Romero

ImprimeGráficas Gutiérrez MartínCobalto, 7. Valladolid

Depósito Legal: VA. 164.–2013

PATRONATO PROVINCIAL DE TURISMO

Junta Local de Semana Santa SE

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Ayuntamiento deMedina de Rioseco

MEDINA DE RIOSECO(VALLADOLID ~ SPAIN)

SEMANA SANTA 2013


PARROQUIA SANTA MARÍA Y SANTIAGOMedina de Rioseco (Valladolid)

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DECLARADA DE INTERES TURISTICO INTERNACIONAL Ayuntamiento deMedina de Rioseco

Junta Local de Semana SantaJunta Local de Semana Santa

www.semanasantaenrioseco.com

SEMANA SANTA 2013SEMANA SANTA 2013


MEDINA DE RIOSECO

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GÚIA y FUENTE para quienes nos confesamos católi-cos creyentes.

Desde el silencio recogido de un pequeño conven-to de monjas de clausura y, después de ocho años fruc-tíferos de magisterio y testimonio de fidelidad,habiendo ocupado tan importante dignidad como supo-ne ser PAPA, director espiritual de los creyentes enCristo, el día 28 de febrero, en silencio y sin pompa, seretirará a orar a su nuevo hogar. Desde él, acompaña-do por Cristo en su soledad, rezará por todos nosotros,por el mundo entero y seguirá escribiendo, para serpublicados y así podamos conocer directamente suspensamientos de fe en Cristo, Muerto y Resucitado

Esa renuncia la hace vísperas de que llegue elacontecimiento único, especial, el de mayor importan-cia de la vida del cristiano: SEMANA SANTA.Semana de conmemoración en que, nuevamente, unaño más, con la Entrada Triunfal de Cristo enJerusalén (La Borriquilla, el domingo de ramos), seinicia el peregrinar hacia la salvación del ser humano.

Comienza la Semana de Pasión riosecana y conella se volverán a revivir y celebrar los distintos, perogloriosos, episodios vividos hace siglos por CristoJesús, Nuestro Señor:

Como preparación a los días más importantes deesas fechas, en recuerdo a los hechos que vamos a revi-vir, el «Cristo de la Clemencia» , acompañado por quie-nes conforman su Cofradía titular, hará acto depresencia en las rúas riosecanas en la procesión de «LaClemencia» (Martes Santo). Continúa esa preparacióncon el VIA CRUCIX procesional (Miércoles Santo) enel que el pueblo llano sale a la calle para acompañar al«Cristo del Amparo», orar recogidamente y, en silencio,presenciar el encuentro de Cristo en la cruz, Vivo yMuerto, con la Madre (La Dolorosa) en el atrio de laiglesia de Santiago de los Caballeros

Comienza la conmemoración y el recuerdo delos memorables momentos de la Pasión, Muerte y

ste año anómalo, continuidad del que aca-bamos de abandonar, son muchos y muyimportantes los problemas que padecenuestra sociedad, entre los que hay quedestacar el amplio paro laboral; familiasenteras que necesitan de los demás parasu supervivencia; personas de carne y

hueso que, poco a poco, van asomándose a ese umbralde pobreza que nunca pensó en que llegarían a sufrir.

Por suerte (desde la impotencia) se ve como lleganlos días en que, mujeres y hombres riosecanos, las cosasanteriormente señaladas pasarán a un segundo planopara, desde la sencillez y el profundo sentimiento deAmor a la Semana Santa, revivir aquello que, año trasaño, celebramos con gran intensidad y hermandad ciuda-dana: SEMANA SANTA. Con ello y con ella, renace elrito ancestral y tradicional que caracteriza a Medina deRioseco y a sus habitantes más allá de nuestras fronteras.

Estamos en tiempos tan difíciles que, cada movi-miento, cada cosa que haces, cada ilusión que ponespara servicio a la Sociedad en la que vives y para bene-ficio de aquello en lo que crees, incomprensible e irra-cionalmente, en una parte importante de ello,encuentra como respuesta la envidia, la tozudez y male-dicencia de unos pocos que, desde la falsa «defensa alos demás», entorpecen el trabajo de ayuda a quienes,de manera voluntaria y altruista, desean SERVIR ybuscar el beneficio a lo Común, poniendo en ello volun-tad, ilusión y abandono a los tuyos. Pero ello no esóbice para que aparezca ese «poder» incomprensible eirracionalmente adquirido, que antepone su interés alde los demás y, a su vez, cuenta para ello con el apoyode quienes les gusta ser siervos, loadores del mentor.

El año 2013 será especial por un inesperado aconte-cimiento: nuestro Papa, Benedicto XVI, en un ejemplode sencillez, autoridad y responsabilidad, ha presentadola renuncia a la «Silla de Pedro» y con ello, pasa a unsegundo plano en la misión encomendada que ha tenido:

ED. ANDRÉS SAN JOSÉ DE LA FUENTE

VARA MAYOR.

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Mi conciencia tiene para mi más pesoque la opinión de todo el mundo.

MARCO TULIO CICERÓN

PRÓLOGO

TRADICIÓN, PATRIMONIO,SENTIMIENTOS:¡¡SEMANA SANTA!!

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PRÓLOGO: TRADICIÓN, PATRIMONIO, SENTIMIENTOS:¡¡SEMANA SANTA!!

estar presentes en esta, nuestra Semana Santa deMedina de Rioseco.

El Viernes Santo, en continuidad con lo contem-plado y celebrado el día anterior, durante la procesióndel Dolor y La Soledad, las Hermandades de las túni-cas blancas, junto a sus Mayordomos y cofrades peni-tentes, acompañando las grandiosas imágenesesculpidas por personas tan importantes como Tomásde Sierra; Díaz de Tudanca; Rodrigo de León, Juan deMuniategi, Antonio Martínez, Pedro Bolduque y otros,aparecerán en nuestras calles acompañando a sus«pasos» que, en un profundo sentir y con sublimeexpresión artística, recuerdan los últimos momentos elsentido ecuménico del sufrimiento de Cristo Jesúsquien, aceptando consciente y plenamente el Mandatodel Padre, nos hace revivir los sublimes y gloriososmomentos en que se apoya nuestra Fe.

En el Gólgota, ante una gran muchedumbre y entredos reos, es crucificado y su costado atravesado por unalanza (La Crucifixión, popularmente «El Longinos»).Muerto y en su majestad (Cristo de la Paz), Cristo estápresente para ser contemplado y que, quienes directa oindirectamente lo crucificaron, puedan/podamos ver lasinjusticia cometida con Él y sienta dolor y aflicción por loque se ha hecho (Cristo de los Afligidos), junto con Maríay Juan, su discípulo amado, a su lado en la cruz. Cristo esbajado de la cruz (El Descendimiento o «La Escalera»)ayudado por sus seguidores, José de Arimatea yNicodemus, ante la mirada perdida de la Virgen, suMadre, dolorida ante la «Vera Cruz» y Juan, su fiel discí-pulo. Su cuerpo muerto y ensangrentado la es entregado ala Madre (Virgen de la Piedad) quien lo sujeta en su rega-zo, lo limpia y acaricia. Posteriormente, una vez traslada-do por sus discípulos, ungido de aceites y líquidos olorosossu cuerpo, es colocado en el lugar preparado para ello(Santo Sepulcro), dentro de una cueva mortuoria, cerraday sellada por una gran roca. Y ante todo lo vivido y la indi-

ferencia de los que le juzgarony asesinaron, la Madre da testi-monio de dolor, resignación ycomprensión hacia su Hijo(Virgen de La Soledad). Dolorsentido, pero dulzura y amorde la madre que asume y com-prende el sacrificio hecho porsu hijo.

Sacrificio del que se veránsus frutos con su Resurrecciónen la noche del Domingo deGloria (Cristo Resucitado) yque se apreciará en el rostrolibre del negro velo de dolorque lo cubre (Virgen de la Ale-gría). ¡CRISTO HA MUERTOY HA RESUCITADO! ¡¡ALE-LUYA!!

Resurrección. Y lo hace recordando la espera de lo queva a acontecer más tarde, el momento de recogimientode Jesús el Nazareno junto a sus más fieles discípulos enel huerto de Getsemaní y el Mandato que recibe de DiosPadre (La Oración en el Huerto y su Prendimiento).

Comienza su Pasión: la tortura y el vilipendio (LaFlagelación y Jesús Atado a la Columna); laPresentación ante Pilatos y el pueblo que le condena(Ecce Homo); Jesús, el Nazareno que custodiado porsoldados y vilipendiado por la plebe, recorre las callesde Jerusalén (Nazareno de Santiago) y en su camino esatendido piadosamente por una mujer que limpia surostro ensangrentado (La Santa Verónica).Maltratado, injuriado y casi sin fuerzas, es ayudado aportar la cruz por Simón de Cirené (Nazareno deSanta Cruz) y, llegado al Monte llamado del Gólgota,ante quienes van a presenciar su Sacrificio, es despoja-do de sus ropas y preparado para crucificarle (LaDesnudez de Jesús). Desde ese lugar es llevado a la cruzy en ella se dirige al Padre para decirle «¡Padre, per-dónales porque no saben lo que hacen» (Cristo vivocrucificado: Cristo de la Pasión). Junto a la cruz, ator-mentada, llena de dolor, dulce dolor de Madre, seencuentra María (la Virgen Dolorosa).

Todos y cada uno de los momentos narrados secorresponden con maravillosas imágenes o gruposescultóricos que, Hermandades y Cofradías penitencia-les, acompañadas por su Vara mayor o Mayordomo,sacarán en silenciosa y solemne procesión a las viejas yvetustas calles riosecanas y las pasearan durante elJueves Santo, portadas sobre sus hombros por la RúaMayor, corros, plazas, plazuelas y calles de Medina deRioseco. Imágenes muchas ellas pertenecientes a laépoca del Barroco español, esculpidas por insignesescultores de la importancia de Gregorio Fernández,Juan de Muniategui, Vicente Tena o el grandioso Juande Juni, y de otros autores posteriores que quisieron

RECEPCIÓN DE AUTORIDADES. Foto Fernando Fradejas.

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Son estos los días que los cristianos, de maneramuy especial los católicos, consideramos de especialdevoción y fervor hacia los Misterios en que la iglesiade Cristo se fundamenta y que, con resignación y supli-cando el perdón, los fieles recordamos y conmemora-mos. Días de reunión y convivencia familiar, delreencuentro con amigos y conocidos ausentes de la ciu-dad la mayor parte del año. Días de profundo análisisde tu vida y de la manera de comportarte con el próji-mo y, como no, con la sociedad a la que perteneces.

Durante la Semana Santa, nuestras iglesias catedra-licias, capillas religiosas al igual que las calles, plazas yplazuelas de la Ciudad, presentan un aspecto diferente aldel resto del año. Medina de Rioseco y los riosecanossomos conscientes de lo que ello supone de cara a quie-nes nos visitan en estas fechas y queremos recibirloscomo son merecedores: amable y cordialmente les ense-ñaremos las riquezas patrimoniales, culturales y tradicio-nales que esta Ciudad atesora y que, todo ello,conjuntamente, supuso que en el año 2009 fuera declara-da la Semana Santa de Interés Turístico internacional.

Cristos y Dolorosas volverán a recorrer las calles deMedina de Rioseco recreando los momentos sufridos porCristo, en procesional representación de la historia, enuna escena inigualable como es el casco urbano de estaciudad, de calles estrechas, recogidas, viejas casas popu-lares castellanas que hacen recordar el caminourbano que Jesús realizó hasta llegar alCalvario, lugar de su anunciada inmolación:MUERTE EN LA CRUZ.

Estamos preparados para celebrar nuestraFIESTA MAYOR religiosa, de fuerte arraigoy tradición popular, consecuencias de que per-dure en los tiempos desde el siglo XVI. Fiestareligiosa en la que los «Pasos» salen de sus tem-plos para procesionarles por las calles y plazasde la ciudad, cual fervoroso CATECISMOVIVIENTE DE FE EN CRISTO, para dartestimonio de Fe cristiana. ¡Esto es y deben serlas celebraciones de Semana Santa! Esto y nootra cosa que, inconsciente e irresponsablemen-te, llegue a desvirtuarla y la haga desvanecer enlo superfluamente festivo, para transformarlaen anodina celebración laica, sin sentido y sinfuturo, por la desidia de unos pocos.

Para conmemorar estas fechas, como comple-mento, se han organizado distintos actos cultura-les: Conciertos de Bandas de Cornetas yTambores; XIII Ciclo de Conferencias «PATRI-MONIO Y TRADICIÓN», con la participaciónde importantes personalidades; VIII EXPO -SICIÓN: ARTESANOS Y FOTÓGRAFOSDE LA SEMANA SANTA RIOSECANA, conla Exposición de fotografías del riosecano,EDUARDO MARGARETO. Como acto espe-cial, organizado por la Parroquia de Santa María

y Santiago, con motivo de 2013-Año de la Fe, el día 19 demarzo, a las 19 horas, en el Corro de Santa María, se cele-brará un multitudinario VIA CRUCIX-PROCLA-MACIÓN DE FE en el que estarán presentes los «pasos»que conforman los desfiles procesionales de la semanasanta, acompañados por sus Hermandades titulares.

Para finalizar, si tienes previsto acercarte a estanoble Ciudad de los Almirantes durante esas fechas, teinvitamos a participar y compartir estos acontecimientosde Semana Santa junto a nuestras gentes. Hazlo desde elrespeto y en silencio. Silencio de quienes sienten y vivenla Semana Santa desde su íntima y profunda fe católica,como viene siendo tradicional.

Y quiero hacer, desde el respeto, con humildad,pero no menos contundencia, un llamamiento a todaslas personas que deseen estar entre nosotros en estasfechas y conocer nuestra cultura popular.

Viajera/o, amiga/o: este es el modo y manera devivir, profunda y tradicionalmente Semana Santa, laSemana Santa de Medina de Rioseco, por quienes ama-mos a nuestra Ciudad. Siempre con inmensa alegría yferviente sentimiento de amor a lo nuestro.

¡¡VEN Y VÍVELA CON NOSOTROS!!

ANDRÉS SAN JOSÉ DE LA FUENTE

Presidente de la Junta de Cofradías

DOLOROSA. Foto Fernando Fradejas.

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

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on estas sentidas palabras nuestroquerido Cardenal Fray Carlos Amigonos guía por el camino de la relaciónexistente entre esta ciudad castellanade Medina de Rioseco y la gran urbecosmopolita y moderna, aunque fiel a

sus antiguas y arraigadas tradiciones, que esla actual Sevilla.

En este largo camino de la historia, sonmuchas las ocasiones en las que han visto cru-

zarse sus destinos las ciudades de Sevilla yMedina de Rioseco, unas veces amparados ensu rico devenir histórico, como puede ser eldescubrimiento y colonización de América, osu fidelidad a la Corona en las Guerras deComunidades, o los más funestos sucesos dela Guerra de Independencia. Otras veces, elvínculo viene de la mano de importantísimospersonajes históricos, la familia de losEnríquez, Almirantes de Castilla y la designa-

ción por los Reyes Católicos dela Veinticuatría de Sevilla.Riosecanos que han ocupado elsillón arzobispal de la diócesisde Sevilla, entre los que desta-can Don Antonio Payno Osorio(1663-1669), y por supuestoFray Carlos Amigo Vallejo(1982-2009). Los HermanosPeralta Pineda, promotores delFestival Taurino de Medina deRioseco (1953-2003) a benefi-cio del Residencia de Ancianos.La familia de orfebres de losArfe, o Santa Teresa de Jesús,por citar sólo algunos de losilustres personajes que han cru-zado sus vidas y trabajos entorno a las dos ciudades.

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ESTACIÓN PENITENCIAL DEL VÍA CRUCIS DE LA CRUZ DEL CAMPO.CASA DE PILATOS. SEVILLA.

SEMANA SANTA ENSEVILLA Y MEDINA DE RIOSECO:DOS CIUDADES Y UN SENTIMIENTO

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«Al llegar la Semana Santa, en la plaza sevillana de San Lorenzo, alsalir el Gran Poder, me emociono igual que en Rioseco, en el corro de SantaMaría lloraba de emoción al ver salir «Longinos» y «La Escalera». Lacalle Sierpes me parece los Soportales, la Campana los Lienzos, y si medescuido un poco, no sé si llamé a mi Cristo Afligidos o Cachorro. Amparoo del Gran Poder. Ceomico o de los Gitanos. Pasión o de mi Buen Fin,Clemencia o del Baratillo, Paz o Cautivo, Nazareno de Santa Cruz oSantiago o Cristo de los Negritos. Y me confundo y le digo Macarena a laDolorosa, Esperanza de Triana a la que es Soledad, o Virgen de la Palmaa quien es Piedad y hasta algunas veces, junto a la que es patrona, ya nosé si llamarle de los Reyes o decirle Castilviejo»

FRAY CARLOS AMIGO VALLEJOS. E. R. Cardenal Arzobispo Emérito de Sevilla

Pregón de Semana Santa de Medina de Rioseco. 1987

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DON JAVIER LANDA Y DON ARTEMIO DOMÍNGUEZ BAJO EL

ESCUDO DE LA FAMILIA ENRÍQUEZ EN LOS REALES ALCÁZARES

DE SEVILLA.

Existen también otras razones y fundamen-tos que hermanan definitivamente Medina deRioseco y Sevilla. Son aquellos que tienen quever con un sentimiento, con una forma de ver lavida o participar de ella: más concretamente, ladevoción y la fidelidad a la tradición, trasmitidade generación en generación con la que los rio-secanos y los sevillanos viven su Semana Santa.Distintos escenarios, estilos artísticos, indu-mentarias, costumbres o ritos, y sin embargoarropados bajo una misma vivencia cristiana,procesionando bellos conjuntos escultóricospor las calles y plazas de nuestros cascos urba-nos, proclamando la Pasión, Muerte yResurrección de Ntro. Sr. Jesucristo.

Bajo el inestimable apadrinamiento deFray Carlos, tan querido para las dos comu-nidades, en los últimos tiempos hemos podidoentablar relaciones más personales. Destacanla participación de Medina de Rioseco enMUNARCO 2006 y el magnífico pregón deDon José Antonio Lobato del Val en losReales Alcázares de Sevilla, o, más reciente-mente, la visita de grupos de sevillanos aMedina de Rioseco queriendo conocer lalocalidad natal de su querido Cardenal.

Todas estas acciones han dado, como últi-mo resultado, la entrevista de trabajo quepude mantener el pasado mes de octubre conDon Francisco Javier Landa Bercebal, 1ªTeniente de Alcalde del Ayuntamiento deSevilla, para seguir estrechando los vínculosentre las dos ciudades.

Fruto de estas últimas visitas de sevillanos aMedina de Rioseco, tuve la oportunidad deconocer al economista Don Juan CarlosGuerrero García que, admirado del patrimoniohistórico artístico que Medina de Rioseco ate-sora y conocedor de los numerosos lazos queunen a Medina de Rioseco y a Sevilla, me tras-lada, de forma muy documentada y erudita,parte de la vida de Don Fadrique Enríquez dela Ribera (1476-1539).

Noble sevillano, emparentado en líneadirecta con los Señores de Medina de Rioseco(hijo de Don Pedro Enriquez de Quiñones,que a su vez es hijo de Don Fadrique Enríquezde Mendoza, II Señor de Medina de Rioseco yII Almirante de Castilla), después de realizarentre los años 1518 y 1519 la primera peregri-nación española a los Santos Lugares tras lasCruzadas, promueve el Vía Crucis de la Cruzdel Campo, admirado por la experiencia que lesupuso la visita a Tierra Santa.

Este Vía Crucis sevillano, se instauró en1520, situándose la primera estación de peni-tencia, la del Pretorio Romano, en el interiordel palacio de Don Fadrique, por lo que desdeentonces, y hasta el día de hoy, será conocidopopularmente como «Casa de Pilatos». Cuen-tan las crónicas de la época, que en 1529 eratanta la gente que participaba del mismo quehubo que empezar a celebrarlo en el exteriordel palacio, finalizando en el templete de laCruz del Campo, después de recorrer 997metros, lo que constituye, los 1.321 pasos queseparaban el Palacio de Poncio Pilatos y elMonte Gólgota en Jerusalén. Aún hoy se con-servan los azulejos que representan cada unade las estaciones y constituye, atendiendo a lasúltimas investigaciones históricas, el posiblegermen de la Semana Santa sevillana.

Este artículo no viene más que a ilustrar losevidentes vínculos históricos existentes entreMedina de Rioseco y Sevilla, entre ellos surelación con la Semana Santa y la posibleinfluencia que parece que la Familia Enríquez,Señores de Medina de Rioseco y Almirantesde Castilla, tuvieron en la promoción de actosde penitencia o de proclamación de la fe enestas dos importantes ciudades de principiosdel s. XVI, que a la postre constituyeron el ger-men de la Semana Santa, y un sentimiento queune y vincula a las dos comunidades.

ARTEMIO DOMÍNGUEZ GONZÁLEZ

Alcalde de Medina de Rioseco

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esús recibe en el Nuevo Testamentovarias decenas de nombres; unos sontítulos mesiánicos y otros símbolosque significan la dimensión salvíficade su vida, muerte y resurrección. Lacarta de San Pablo a los Efesiosdesigna a Jesús «nuestra Paz», ya que

derribó el muro que separaba a judíos y gen-tiles.

Ante el Cristo de la Paz, que recorre elViernes Santo las calles y plazas de Medinade Rioseco, formando parte de su incompara-ble Semana Santa, conocida merecidamenteen el mundo, hagamos algunas consideracio-nes sobre la paz adquirida por Jesús a travésde su muerte. Jesús está en la fuente de lapacificación más profunda de la humanidad.

a) Levantamos diariamente muros deseparación y de ruptura entre nosotros: Entrepersona y persona, en el matrimonio y lafamilia, entre los grupos sociales, entre losmismos cristianos, unos pueblos contra otros,bloques de la humanidad enfrentados y divi-didos. Durante decenios el llamado «muro deBerlín» dividió no sólo a la ciudad y aAlemania, sino también a Europa y se pro-yectó sobre la humanidad creando bloquescontrapuestos y años de «guerra fría». En lamisma ciudad de Jerusalén se levantó unmuro llamado de la vergüenza. Y otro muro,construido en los últimos años, de cientos dekilómetros separa el territorio de Israel delterritorio palestino; a la ciudad de Belén afec-ta este muro. Ha habido diversas formas deseparaciones y rupturas: «Apartheid» denegros y blancos, discriminación entre los dedentro y los de fuera, entre los nuestros y losotros, entre ricos y pobres, entre varones ymujeres. Llama la atención cómo, incluso ensituaciones graves, somos incapaces de con-certar voluntades y unir esfuerzos para res-ponder adecuadamente a los desafíos queamenazan a todos. ¿Cuál es la fuerza que ali-menta estas divisiones y levanta tantos murosentre los hombres? Ciertamente contribuye aello el miedo y la debilidad. San Pablo hablade la enemistad.

b) Jesús ha dado muerte al odio en lacruz, para reconciliar a través de su sangre atodos los hombres, a los judíos y gentiles, ensu cuerpo entregado y glorioso. Recordemoscómo Jesús pidió al Padre perdón para losque lo crucificaban e insultaban estando col-gado en la cruz: «Padre, perdónalos, porqueno saben lo que hacen». No devolvió insultopor insulto. Si la sangre de Abel reclamabavenganza al cielo, la sangre de Jesús, en cam-bio, habla mejor que la de Abel, ya que solici-ta perdón y misericordia. Es más excelenteofrecer perdón que exigir rigurosamente elcumplimiento de la ley del talión («ojo por ojoy diente por diente»); por este camino todosquedaríamos desdentados y tuertos o ciegos,es decir nos destruiríamos unos a otros.

Jesús ha realizado en el momento crucialde su vida lo que enseñó con una originali-dad sin precedentes: «Amad a vuestros ene-migos, haced bien a los que os odien,bendecid a los que os maldigan, rogad porlos que os difamen». Jesús enseña lo quevive y vive lo que enseña; y sus discípulosque habían escuchado la enseñanza delMaestro, que sabían cómo había muerto yque en la resurrección recibieron el sello dela paz, practicaron el perdón y lo anunciarona todos. Vencer el mal con el bien es lo con-trario de la espiral de violencia que aumentaindefinidamente el mal. Matando en el cora-zón el rencor con los buenos sentimientos,imitando con las palabras y las obras la bon-

MEDITACIÓN ANTEEL SANTO CRISTO DE LA PAZ

JREUNIÓN: MONS. RICARDO BLÁZQUEZ PÉREZ, DON JUAN

CARLOS FRAILE SAN MIGUEL Y DON GABRIEL PELLITERO

FERNÁNDEZ. Foto Archivo de la Junta.

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dad del Padre del cielo, notomando cuentas del mal, seconstruye la paz. Contra loque pensamos instintiva-mente, el perdón no es señalde poca personalidad nidebilita las relaciones huma-nas; al contrario, el perdónmanifiesta la grandeza delalma y abre las vías al fu-turo y a la esperanza; el per-dón abre a un nuevo co -mienzo. La cruz convertidapor Jesucristo en árbol desalvación, es revelación delamor de Dios, de la sabidu-ría evangélica, de la genuinalibertad y de la paz verda-dera.

c) ¿Qué impulso le -vanta muros de división en tre los hombresy mantiene las heridas emponzoñadas?Jesús mató en su corazón el odio, que es elgermen de la división. Perdonando haderribado el muro de separación que es laenemistad; aquí reside el centro de estepasaje de la carta de San Pablo. Jesús ense-ñó: «Lo que sale del hombre eso es lo quecontamina al hombre. Porque de dentro,del corazón de los hombres, salen las inten-ciones malas». Del corazón salen las rivali-dades, las divisiones, la envidia, la avaricia,los adulterios. De lo que hay en el corazónhablan los labios; la violencia se gesta y sefragua en la cabeza y en el corazón; no sedesarman las manos, si no se pacifica el cora-zón y no aclara la mente sus confusiones yengaños. Sólo con un «corazón nuevo», con«un corazón de carne», podemos ser auténti-camente pacificadores y creadores de unmundo nuevo y mejor. Si el Espíritu del Señorreúne a los dispersos y no derrama el amor ennuestros corazones no podemos amar comoJesús nos ha amado. ¡Qué el Espíritu delSeñor venza en nosotros el deseo de revan-cha, desoyendo el adagio tentador «el que mela hace me la paga»; nos libere del resenti-miento que es como veneno del alma; que des-truya el «nido de víboras» a que a veces separece nuestro corazón! Decir sí al otro esrestablecer la convivencia con él y mostrarlela disponibilidad a caminar juntos. El perdónune a los enemigos para construir en concor-dia el futuro.

d) Jesús es el «Mediador de una alian-za nueva». A través de la muerte pacificado-ra de Jesús, Dios ha sellado la alianza eternacon la humanidad. Jesús, en la última cenacon sus discípulos antes de morir, instituyó elmemorial de su muerte, aceptada librementepor nosotros. Al participar del pan que escomunión con el cuerpo del Señor entregadopor nosotros y al beber de la copa de la nuevaalianza, que contiene la sangre de Cristoentramos en comunión profunda de alianzade amor con el Señor y entre nosotros. Elsigno de la paz que intercambiamos en lacelebración eucarística es muy elocuente;Jesús presente en la Eucaristía nos da su paz;paz que compartimos los participantes a tra-vés de un signo expresivo (un apretón demanos, un abrazo, un beso, una inclinaciónde respeto); y lo celebrado nos emplaza a serpacificadores, allí donde transcurra nuestravida diaria y encontremos hermanos.

e) ¡Qué por la celebración de laSemana Santa aprendamos la lección de lapaz en la escuela que es la pasión del Señor!

MONS. RICARDO BLÁZQUEZ PÉREZ

Arzobispo de Valladolid

CRISTO DE LA PAZ. Foto José Carlos Lobo García.

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u Santidad el Papa BenedictoXVI ha convocado a toda laIglesia a celebrar un Año de lafe. El pasado mes de octubre serealizaba, en solemne celebra-ción, la apertura de este año

particular, que tendrá su término en la fiestade Cristo Rey en noviembre del 2013.

¿Por qué un año de la fe?No es para con-memorar una efeméride, sino porque haynecesidad de reavivar la fe. Quiere ser comouna peregrinación entre los desiertos delmundo contemporáneo, llevando consigosolamente lo que es esencial. Hacer una lec-tura de la realidad actual y sacar las conse-cuencias que suponen para nuestra fecristiana. Anunciar el mensaje de Jesucristocon nuevo entusiasmo y alegría y redescubrirel valor de la fe y cómo en el encuentro conCristo se transforma la vida.

Entre los objetivos del Año de la fe están losde poner a Cristo como centro de todo; reavivaren la Iglesia el anhelo de anunciar a Cristo alhombre contemporáneo; descubrir nuevamente

la alegría de creer, su importancia vital para laspersonas y el valor de lo que es esencial paravivir como cristianos en el mundo. Habrá queevitar el caer en los extremos de nostalgias ana-crónicas o de huidas hacia adelante y permitiracoger la novedad en la continuidad.

Tiempos recios, al decir de Santa Teresa,son los que tenemos que vivir. Unas palabrasde Benedicto XVI: «La actual crisis económi-ca global debe verse como un banco de prue-bas: ¿Estamos dispuestos a leerla, en sucomplejidad, como desafío para el futuro y nosólo como una emergencia a la que hay quedar respuestas de corto alcance? ¿Estamosdispuestos a hacer juntos una revisión pro-funda del modelo de desarrollo dominante,para corregirlo de forma concertada y clarivi-dente? En realidad, más aún que las dificulta-des financieras inmediatas, lo exigen el estadode salud ecológica del planeta y, sobre todo, lacrisis cultural y moral, cuyos síntomas sonevidentes desde hace tiempo en todo elmundo» (Benedicto XVI. Homilía en la JornadaMundial de la paz, 1-I-09).

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EL AÑO DE LA FEY LA SEMANA SANTA

CARDENAL FRAY CARLOS AMIGO VALLEJO.

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SEMANA SANTA2013

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Las crisis provocan situaciones de incerti-dumbre, de perplejidad, de unos comporta-mientos desorientados. Pone al descubiertoaspiraciones creadas artificialmente, modelosde éxito social, falsías convertidas en verda-des por su machacona difusión, olvido devalores importantes para la convivencia y elreconocimiento de derechos y obligaciones.

La falta de valores bien asentados arrastróconsigo las actitudes virtuosas que garantiza-ban la perseverancia en el bien obrar. La cri-sis puede ser momento para la recuperaciónde aquello que, por efecto de la indiferencia ode una conducta moral incoherente con losconvencimientos creyentes, ha caído en elolvido, en el mejor de los casos, o en la clau-dicación de principios religiosos que llevancomo consecuencia la pérdida de la fe. Puedeser que estemos en el punto de inflexión quemarque el momento providencial para recu-perar aquello que se había perdido o el debuscar sinceramene aquello que conviene auna personalidad consciente y responsable.

El olvido de Dios, solamente puede tenerremedio acudiendo a esa fuente inagotable dela vivencia de la fe. El manantial, no solamen-te no se ha extinguido, sino que cuanto más se

bebe en él, más ansias produce de querer lle-narse de un amor inconmensurable.

La Semana Santa se convierte, paramuchos, en un providente aliento de Dios quehace soplar las cenizas de olvidos y de indife-rencias, para dejar al descubierto un rescoldoque conserva el fuego y el calor de una fe y deunos sentimientos religiosos quizás un tantoolvidados. Esta Semana Santa del año de la fepuede ser el momento de Dios para rencon-trarse con lo mejor de nuestra condición decreyentes.

De nuevo, Benedicto XVI: «Vuestrasbeneméritas cofradías, arraigadas en el sólidofundamento de la fe en Cristo, con la singularmultiplicidad de carismas y la vitalidad ecle-sial que las distingue, han de seguir difun-diendo el mensaje de la salvación en mediodel pueblo, actuando en las múltiples fronte-ras de la nueva evangelización» (A las cofra-días de Italia. 10-XI-07).

CARLOS AMIGO VALLEJO

Cardenal Arzobispo Emérito de Sevilla

DOMINGO DE RESURRECCIÓN. Foto David Carpintero.

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SEMANA SANTA

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ción teatralizada y luego se plasmó en imagen es-tática.

Y la PALABRA de DIOS se hizo BELLEZAhumana en las hábiles manos de los imagineroscastellanos. Digo BELLEZA humana, pero po-dría decir «divina» pues a Dios nos lleva. ¡Cuán-tos a través de ellas no se habrán vuelto a encon-trar con la PALABRA!

Pero ¡hay de aquellos que atrapados por estabelleza se olvidan que tan solo es el reflejo de unanovedad más NUEVA!

Hoy ¿Hay alguna persona que sepa acompañaresta navegación hasta la primigenia idea? Hoy ¿haymiradas tan agudas que puedan encontrar esa chis-pa primera? ¿Este río impetuoso provoca en cuan-tos contemplan una proclamación nueva? ¿Estopodrá producir un encuentro soprendente, gozosoy vivo con la PALABRA PRIMERA?

Las procesiones buscaban avivar la FE delpueblo, llenarle de ESPERANZA, alentar la CA-RIDAD CRISTIANA. Hoy tenemos que pre-guntarnos qué hacer para que esta corriente vigo-rosa sea un torrente de Vida y no se convierta enun torrente devastador.

Cada cofradía tiene que buscar en sus tradicio-nes la PALABRA que reunió a sus antepasados yprovocó un movimiento hermoso. La Palabra origi-

naria, la PALABRADE DIOS PREDICA-DA y ESCUCHADAdebe volver a ser fuerzainspiradora de nuesraSEMANA SANTA.

¿Dónde se encon-trarán los nuevos «es-cuchas» de la Palabraque se la crean y la vi-van? ¿Estarán bajo lascaretas, o quizás entrelas varas o entre los vi-sitantes o detrás de lasventanas o unos porotros todos lo dejare-mos, incapaces de en-contrarlas?

JUAN CARLOS FRAILE

Párroco

SEMANA SANTAPARA LOS «ESCUCHAS»

DE LA PALABRAUn mar de cabezas recorre las calles deMedina de Rioseco. Es Semana Santa, y navegandoentre ellas los pasos sobre los tableros bellamente de-corados. Sobre los hombros de los portadores atra-viesa esa fragata de imágenes.

En ellas se clava la mirada, también los ojosde las cámaras, queriendo atrapar un instante deeste tropel de sentimientos en movimiento, enebullición.

Han atravesado los tiempos y las modas, ynuevas miradas expectantes despiertan para sus-tituir a otras que se han recostado y dormido paramirar desde otro lugar y con otra perspectiva.

La tradición se renueva con nueva sangre,con nuevas fuerzas. Nuevos corazones laten ypalpitan.

Pero ¿dónde recibe vida esta tradición? ¿dón-de encuentra fuerzas la novedad? Nuevas imáge-nes, nuevas representaciones, nuevos sones…

Las predicaciones vigorosas del Evangelioen los siglos XII y XIV provocaban la necesidadde representar vivamente para mover el senti-miento de cuantos escuchaban. No bastaba conoír, era necesario que también la mirada quedaraatrapada por la escena. Era necesario ver a aqueldel que se hablaba, había que seguirle paso a pa-so… y la PALABRA se hizo primero dramatiza-

JUEVES SANTO. Foto Fernando Fradejas.

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Fácilmente estará contentoy en paz el que tiene limpiala conciencia.

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PROCLAMA:

POR LOS HONORABLES REGIDORES DEL CONCEJO, SEÑORES DE JUSTICIA, CLÉRIGOS YHOMES BUENOS PRESIDIDOS POR LA VARA MAYOR DE LA SEMANA SANTA,MAYORDOMOS Y HERMANOS DE LAS COFRADÍAS PENITENCIALES, HAN ACORDADO,AYUNTADOS POR LA FE, LA ESPERANZA Y LA CARIDAD QUE HOY, SÁBADO DEDOLORES VEINTITRÉS DE MARZO, SANTO TORIBIO Y SANTA REBECA, SE HAGA LAPROCLAMA PÚBLICA Y PREGONERA EN EL TEMPLO DE SANTA MARÍA DE MEDIAVILLA,A LAS VEINTE Y TREINTA HORAS, Y ANTE LA IMAGEN PENITENCIAL DE «NUESTROPADRE JESÚS ATADO A LA COLUMNA», PARA QUE, ANTE TODOS ELLOS Y EL PUEBLO FIEL,SE ENALTEZCAN LOS VALORES DE LA PASIÓN Y MUERTE DE NUESTRO SEÑORJESUCRISTO.

SEPADES QUE ESTA PROCLAMA PREGONERA LA DIRÁ ELILMO. SR. DON JAVIER BURRIEZA SÁNCHEZ, DOCTOR YPROFESOR DE HISTORIA MODERNA POR LA UNIVERSIDADDE VALLADOLID. ACADÉMICO CORRESPONDIENTE DE LAREAL ACADEMIA DE DOCTORES DE ESPAÑA. INVESTIGA-DOR EN EL CONOCIMIENTO DE LAS MANIFESTACIONESRELIGIOSAS POPULARES Y TRADICIONALES. ESCRITOR.

COLABORADOR EN DIVERSOS MEDIOS DE COMUNICACIÓNSOCIAL.

LO FAGO POR MANDATO DEL SEÑOR PRESIDENTE DE LA JUNTA DECOFRADÍAS DE SEMANA SANTA, DON ANDRÉS SAN JOSÉ DE LA

FUENTE.

DADO EN LA CUARESMA DEL DÉCIMO TERCER AÑO DEL SIGLO XXI, BAJOEL REINADO DE JUAN CARLOS I: EL REY.

ÍTEM MÁS, DAMOS PÚBLICAS GRACIAS A DIOS PADRE, A DIOS HIJO Y ADIOS ESPÍRITU SANTO Y PEDIMOS ORACIONES PARA QUE SU SANTIDAD EL

PAPA, VICARIO DE CRISTO EN LA TIERRA, PASTOREE CON SINGULAR TINO LAIGLESIA CATÓLICA UNIVERSAL.

AÑO DE GRACIA TRIGÉSIMO OCTAVO DEL REINADO DE JUAN CARLOS I.

ARCHÍVESE EN EL LEGADOCORRESPONDIENTE FIRMADO Y SIGNADO PORDEL AÑO 2013 EL ESCRIBANO MAYOR

EN EL NOMEN DEL PADRE QUE FIZOEL CIELO Y LA TIERRA. Y EN EL DEL HIJO QUE NACIÓ

DE SANTA MARÍA LA GLORIOSA Y DEL ESPÍRITUSANTO, PARA SUFRIR LA PASIÓN Y MUERTE,

RESUCITANDO GLORIOSO… INVOCANDO A MARÍASEÑORA DE CASTILVIEJO, AL SANTO JUAN BAUTISTAY A SAN YAGO PEREGRINO, FAGO EL SERVICIO DE

PREGONAR Y PROCLAMAR POR RÚAS Y PLAZUELAS DEESTA NOBLE MEDINA DE RIOSECO QUE:

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DOMINGO DE RAMOS:PROCESIÓN DE LAS PALMAS• LA ENTRADA TRIUNFAL DEL SEÑOR

EN JERUSALÉNInocencio Cuesta, siglo XXCofradías Infantiles y el pueblo fiel

MARTES SANTO:PROCESIÓN DE LA CLEMENCIA• SANTO CRISTO DE LA CLEMENCIA

Pedro de Bolduque, siglo XVIMayordomo: Vicente Martín Díez (†)

MIÉRCOLES SANTO:VÍA CRUCIS PROCESIONAL• SANTÍSIMO CRISTO DEL AMPARO

Escuela Castellana, siglo XVI• VIRGEN DOLOROSA. Juan de Juni, siglo XVI

JUEVES SANTO:PROCESIÓN DEL MANDATO Y DEL DOLOR

• LA ORACIÓN DEL HUERTOEscuela Castellana, siglo XVIIMayordomo: Juan José Grimáu Alonso

• LA FLAGELACIÓNEscuela Castellana, siglo XVIIIMayordomo: Juan Carlos Gutiérrez Fernández

• JESÚS ATADO A LA COLUMNAGregorio Fernández, siglo XVIIMayordomo: Alejandro Abril Bastardo

• ECCE HOMOEscuela Castellana, siglo XVII y ClaudioTordera, siglo XIXMayordomo: Enrique Garcés Juarros

• JESÚS NAZARENO DE SANTIAGOGregorio Fernández, siglo XVIIMayordomo: Sebastián Abril Cimas

• LA SANTA VERÓNICAJosé Ajenjo Vega, siglo XXMayordomo: Sebastián Abril Cimas

• JESÚS NAZARENO DE SANTA CRUZJuan de Muniátegui, siglo XVIIMayordomo: Jesús Andrés Brézmes Pizarro

• LA DESNUDEZ DE JESÚSVicente Tena, siglo XXMayordomo: Rafael Valero Domíguez

• SANTO CRISTO DE LA PASIÓNJuan de Muniátegui, siglo XVIIMayordomo: Benito Juárez Bastardo

• VIRGEN DOLOROSAJuan de Juni, siglo XVIMayordomo: Ángel Álvarez Hernández

VIERNES SANTO:PROCESIÓN DE LA PASIÓN

• LA CRUCIFIXIÓN DEL SEÑORTomás de Sierra, siglo XVIIMayordomo: Pablo Toribio Prieto

• SANTO CRISTO DE LOS AFLIGIDOSEscuela Castellana, siglo XVIMayordomo: José Antonio Rodríguez San José

• SANTO CRISTO DE LA PAZAntonio Martínez, siglo XVIIMayordomo: José Antonio Rodríguez San José

• EL DESCENDIMIENTO DE LA CRUZFrancisco Díez de Tudanca, siglo XVIIMayordomo: Ángel Badás Rodríguez

• NUESTRA SEÑORA DE LA PIEDADRodrigo de León, siglo XVMayordomo: David Martín Martínez

• SANTO SEPULCROMateo Enríquez, siglo XVIIMayordomo: Óscar Morencia Castaño

• LA SOLEDADDionisio Pastor, siglo XIXMayordomo: Saúl Deza Blanco

DOMINGO DE RESURRECCIÓN:PROCESIÓN DEL SANTO ENCUENTRO

• JESÚS RESUCITADOEscuela Castellana, siglo XVIIMayordomo: Alejandro Alonso Martínez

• VIRGEN DE LA ALEGRÍAGregorio Fernández, siglo XVIIMayordomo: Alejandro Alonso Martínez

RELACIÓN DE PASOS Y MAYORDOMOSPARA EL AÑO 2013

MAYORDOMOS DEL VIERNES SANTO. 2012.

MAYORDOMOS DEL DOMINGO DE RESURRECCIÓN. 2012.

MAYORDOMOS DEL JUEVES SANTO. 2012.

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RELACIÓN DE COFRADESCENSADOS EN JUNTA GENERAL EXTRAORDINARIA CELEBRADA EL DÍA 1 DE FEBRERO DE 2013«La fe, unión, hermandad y solidaridad, son nuestra verdadera fuerza y razón de ser cristianos».

SANTO CRISTO DE LA CLEMENCIA – 56 60 81 97LA ORACIÓN DEL HUERTO 90 90 107 108 108LA FLAGELACIÓN 112 115 116 105 124JESÚS ATADO A LA COLUMNA 165 160 162 164 176ECCE-HOMO 70 75 117 116 116JESÚS NAZARENO DE SANTIAGO Y LA SANTA VERÓNICA 412 421 425 410 420JESÚS NAZARENO DE SANTA CRUZ 138 137 141 145 146LA DESNUDEZ DE JESÚS 137 140 142 142 145SANTO CRISTO DE LA PASIÓN 117 117 117 115 112VIRGEN DOLOROSA 110 107 233 237 245LA CRUCIFIXIÓN DEL SEÑOR 360 370 382 390 393SANTO CRISTO DE LA PAZ Y DE LOS AFLIGIDOS 356 362 363 363 369DESCENDIMIENTO DE LA CRUZ 420 425 458 465 460NUESTRA SEÑORA DE LA PIEDAD 98 94 92 95 97SANTO SEPULCRO 275 276 293 296 302LA SOLEDAD 138 141 145 148 145RESURRECCIÓN Y VIRGEN DE LA ALEGRÍA 60 60 65 65 67

TOTAL 3.058 3.146 3.418 3.445 3.522

H E R M A N D A D E S A Ñ O : 2009 2010 2011 2012 2013

MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTAJUNTA DE GOBIERNO

COMISIÓN PERMANENTEPresidente DON ANDRÉS SAN JOSÉ DE LA FUENTE

Vicepresidente ..................................................................................Secretaria provisional DOÑA MARÍA ANTONIA GARCÍA REY

Tesorero DON VICENTE MARTÍN DÍEZ (†)Vocal Responsable del Archivos y del Centro DON ANTONIO FERNÁNDEZ REDONDO

Vocal Relaciones con las Hermandades DON ANSELMO MATAS BRATOSParroquia de Santa María y Santiago RVDO. P. DON JUAN CARLOS FRAILE SAN MIGUEL

HERMANDADES PENITENCIALESHermandad «Santo Cristo de la Clemencia» DON ALBERTO CASTRILLO GONZÁLEZ

Hermandad de «La Oración del Huerto» DON ÁNGEL GÓMEZ RODRÍGUEZHermandad de «La Flagelación» DON ANTONIO SANTAMARÍA MARTÍN

Hermandad de «Jesús Atado a la Columna» DON JAVIER JUSTO REGLEROCofradía del «Ecce Homo» DON JULIÁN SÁNCHEZ MUÑOZ

Hermandad de «Jesús Nazareno de Santiago»y «La Santa Verónica» DON JOSÉ FERNÁNDEZ ABRIL

Hermandad de «Jesús Nazareno de Sta. Cruz» DON JESÚS MARTÍNEZ MARTÍNEZHermandad de «La Desnudez de Jesús» DON JOSÉ JAVIER ALONSO ESCARDA

Hermandad del «Santo Cristo de la Pasión» DON FRANCISCO GALLEGO MORÁNHermandad «Virgen Dolorosa» DON PEDRO LUIS GUTIÉRREZ HERNÁNDEZ

Hermandad de «La Crucifixión del Señor» DON JUAN CARLOS ESTEBÁN PÉREZHermandad del «Santo Cristo de la Paz y Afligidos» DON FERNANDO PARDO BLANCO

Hermandad de «El Descendimiento de la Cruz» DON JUAN CARLOS YENES MATEOHermandad de «Nuestra Señora de la Piedad» DON RAÚL MARTÍN GIL

Hermandad de «El Santo Sepulcro» DON JESÚS ALFONSO MARGARETOHermandad de «La Soledad» DON ÓSCAR ANTA CEA

Hermandad de «Jesús Resucitado» y«Virgen de la Alegría» DON EUGENIO PÉREZ MANRIQUE

ASESORESInformación, Cultura y Presidencia DON JESÚS MARÍA REGLERO GARCÍA

Coordinador de la Revista de Semana Santa DON JOSÉ MARÍA ROMÁN GUTIÉRREZActividades Benéfico-Sociales RVDO. P. DON GABRIEL PELLITERO FERNÁNDEZ

Asuntos jurídicos DOÑA MARÍA ANTONIA GARCÍA REYConservación y Restauración de Bienes Patrimoniales SERVICIO DE CONSERVACIÓN Y RESTAURACIÓN

DE LA JUNTA DE CASTILLA Y LEÓNArte Religioso, Archivos y Fondo Histórico DON JOSÉ IGNACIO HERNÁNDEZ NANCLARES

Archivo Fotográfico JUNTA LOCAL SEMANA SANTAFOTÓGRAFOS RIOSECANOS

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El que me sigue no anda en tinieblas.

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PROGRAMA

La Comisión Permanente de laJunta de Cofradías de SemanaSanta «LA SOLEDAD», elClero y las Hermandades de lamuy noble y leal ciudad deMEDINA DE RIOSECO, en elcuarto año de haber sidodeclarada Fiesta de InterésTurístico Internacional, con eldeseo de que los distintos actos ycultos se desarrollen con lamayor solemnidad, devoción ybrillantez, en las fechas, lugaresy dentro del horario programado,para la SEMANA SANTA2013, ha confeccionado elsiguiente PROGRAMA deACTOS y PROCESIONES:

ACTOS Y PROCESIONES

DÍA 9 DE FEBREROV Certamen Nacional «ACORDES DE PASIÓN». Organizado

por la Junta Local de Semana Santa y la Banda de CC y TT. «CRISTO DELA CLEMENCIA», perteneciente a aquella, contando con la participaciónde la Agrupación Musical «La EXPIRACIÓN» de Salamanca, la Bandade CC y TT. «NAZARENO y LA SOLEDAD» de Astorga (León) y laBanda titular de la Junta de Cofradías «Sto. CRISTO DE LA CLE-MENCIA»; pertenecientes a la Comunidad Autonómica de Castilla yLeón.

El concierto se celebrará el sábado 9 de Febrero, a partir de las 20,00horas, en el Teatro Principal Municipal, calle Doctrina nº 22.

MES DE MARZOConvocatoria XII Concurso FOTOGRÁFICO «TOMÁS DE SIERRA».

Concurso de fotografías, totalmente abierto a todo tipo de participantes quelo deseen, bajo el lema «La Semana Santa de Medina de Rioseco», cuyo fines el de premiar las fotografías que serán el Cartel Anunciador de SemanaSanta- 2014 y la portada de la Revista Ilustrada- 2014.

Las obras fotográficas que se presenten deben ajustarse a las basesestablecidas para dicho concurso, las cuales se proporcionan a cuantaspersonas deseen participar en él mediante folletos explicativos al respec-to, así como en distintos apartados de NOTICIAS en diferentes mediosde comunicación social, escrita, radio o TV, de ámbito regional, como son:«El Norte de Castilla»; Diario «El Mundo»; periódico «El Día»; La Marde Campos y el periódico palentino «Carrión», de difusión gratuita.

Así mismo, podrán encontrar cuanta información consideren al res-pecto en la página web de la Junta Local de Semana Santa, cuya direc-ción es: www.semanasantaenrioseco.com

MESES DE FEBRERO Y MARZOPresentación de la Semana Santa en Burgos, Oviedo y Segovia. En

la Ciudad, lugar y fechas indicadas, se procederá a la presentación oficialde la Semana Santa riosecana, en un acto en el que intervendrán el Sr. Al-calde de Medina de Rioseco, el Presidente de la Junta Local de SemanaSanta de Medina de Rioseco y el Presidente del C.I.T «Ajujar».

Finalizadas las intervenciones, se proyectará el audiovisual divulgativo«PASAN LOS PASOS», editado por el C.I.T «Ajujar», patrocinado por laJunta de Castilla y León- Consejería de Turismo y la colaboración del Iltre.Ayuntamiento y la Junta Local de Semana Santa de Medina de Rioseco.

En el mismo acto se pronunciará la conferencia «SEMANA SANTAEN MEDINA DE RIOSECO: UNA TRADICIÓN», por el profesor de laUniversidad de Valladolid, Ilmo. Sr. Don Ramón Pérez de Castro, con loque se dará por finalizado aquel.

– Día 20 de febrero: BURGOS, en el Monasterio de San Agustín.– Día 6 de marzo: OVIEDO, en el Auditorio «Príncipe de

Asturias».– Día 13 de marzo: SEGOVIA, en el salón de actos de la excma.

Diputación de Segovia.

DÍAS 1 Y 2 DE MARZOVI Jornadas «LA ESCALERA: HOY COMO AYER». Organiza-

das por la Hermandad de «El Descendimiento», en la Sala de Actos y Con-ferencias de Caja ESPAÑA- Caja DUERO- Obra Social, plaza de SantoDomingo nº 6, se llevarán a cabo los actos siguientes:

– Viernes, 1 de marzo: Conferencia- coloquio: «MIRADAS», a las20,00 horas.

– Sábado, 2 de marzo: Conferencia- Coloquio: COSTUMBRES»,a las 19,00 horas.

D. CARLOS AGANZO

PREGONERO DE SEMANA SANTA EN 2012.Foto Barrios.

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mana Santa, con la colaboración de la Junta de Castilla y León,Excma. Diputación de Valladolid, Iltre. Ayuntamiento de Me-dina de Rioseco y la entidad financiera Caja España-CajaDuero: Obra Social, dentro del Ciclo «Artesanos y Fotógra-fos de la Semana Santa Riosecana», se llevará la efecto la VIIIEXPOSICIÓN de FOTOGRAFIA «SEMANA SANTA: UNATRADICIÓN EN IMÁGENES, del fotógrafo riosecanoEDUARDO MARGARETO.

El Horario de la Exposición será de las 19,00 a las 21,00horas, en la Sala de Exposiciones de la Obra Social de Caja Es-paña-Caja Duero, plaza de Santo Domingo nº 6, de nuestraciudad.

DÍA 19 DE MARZOAÑO DE LA FE: VÍA CRUCIS HERMANDADES

RIOSECANAS. En el Corro de Santa María, a las 19,00 ho-ras, organizado por la Parroquia de Santa María y Santiago,con la colaboración de la Junta Local de Semana Santa y con-tando con la presencia de los distintos «pasos» de los que sontitulares las 17 Hermandades Penitenciales de la Semana Santariosecana, junto con «La Entrada triunfal de Jesús en Jeru-salén» (La Borriquilla), se celebrará el VÍA CRUCIX y PRO-CLAMACIÓN de FE, con motivo de la Celebración Mundialdel Año 2013- Año de la fe, declarado por S.S. BenedictoXVI y la Santa Sede.

VII EXPOSICIÓN DE FOTOGRAFÍA: «ARTESANOS Y FOTOGRÁFOS

DE LA SEMANA SANTA RIOSECANA». Foto David Carpintero.

DÍA 15 DE MARZOI JORNADAS NAZARENAS. En la Sala de Actos y

Conferencias de Caja ESPAÑA- Caja DUERO- Obra Social,a partir de las 20, 15 horas, organizadas por la Hermandad de«JESÚS NAZARENO DE SANTIAGO Y LA VERÓ-NICA», con la colaboración de la Junta Local de SemanaSanta, «I JORNADAS NAZARENAS», en las que partici-parán distintas Hermandades y Cofradías penitenciales Na-zarenas de la comunidad de Castilla y León.

DÍA 16 DE MARZOOBRA DE TEATRO RELIGIOSO: «PASIÓN». Grupo

de Teatro «CORSARIO» de Valladolid. A las 20,00 horas, enla Iglesia de Santiago de los Caballeros, organizado por el Il-tre. Ayuntamiento de Medina de Rioseco, con la colaboraciónde la Junta Local de Semana Santa y el patrocinio de la Con-sejería de Cultura de la Junta de Castilla y León, quienes pon-drán en escena la obra de teatro «PASIÓN».

DÍA 17 DE MARZOIII CONCIERTO «MÚSICA EN LAS PROCE-

SIONES». Concierto de la Banda Municipal de Músicade Medina de Rioseco, a las 20,00 horas, en el Teatro Principal.

DEL 18 DE MARZOAL 7 DE ABRIL

VIII EXPOSICIÓN DE FOTOGRAFÍA: «ARTESA-NOS Y FOTÓGRAFOS de la SEMANA SANTA RIOSE-CANA».Organizada por la Junta Local de Cofradías de Se-

III CONCIERTO «MÚSICA EN LAS PROCESIONES».Foto David Carpintero.

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DÍA 23 DE MARZO

SÁBADO.PREGÓN DE SEMANA SANTA 2013

El Ilmo. Sr. Don JAVIER BURRIEZA SÁNCHEZ, pronunciará dicho Pregón, a partir delas 20,30 horas, en la iglesia de Santa María de Mediavilla, bajo la presidencia de la VARA MAYORacompañada por las Varas y Mayordomos de las diecisiete Cofradías penitenciales de la Semana Santa

Riosecana. Doctor y profesor de Historia

Moderna en la Universidad deValladolid. Académico correspondientede la Real Academia de Doctores deEspaña - Sección Teología. Escritor eInvesti-gador de las manifestacionespopulares religiosas, como es el caso dela Semana Santa en nuestra provincia ycomunidad autónoma.

Colaborador habitual en distintosmedios de comunicación, prensa escrita,radio y TV, entre los que destacar, perió-dicos como «El Norte de Castilla»; laRevista «Ecclesia»; emisoras de radiocomo COPE y TV-Castilla y León; etc.

Pregonero en varias Cofradíaspenitenciales de Valladolid, al igual queen distintas localidades de la provinciade Valladolid: Alaejos, Nava del Rey;Tordesillas, etc.

DÍA 22 DE MARZOVIII Certamen Nacional de Bandas de Cornetas y

Tambores «SONES DE PAZ». Organizado por la Cofradíadel «Santo Cristo de la Paz y de los Afligidos» y la Banda deCC y TT de dicha Hermandad, con la colaboración de laJunta Local de Semana Santa, a beneficio de CRUZROJA, con el fin de obtener ayuda económica para las acti-vidades que desarrolla, intervendrá y actuará, la Banda deCC y TT. «Santo Cristo de la Paz y de los Afligidos».

El concierto se realizará en el Teatro PrincipalMunicipal, a las 20,30 horas.

XIII CICLO DE CONFERENCIAS: «SEMANA SANTA:PATRIMONIO Y TRADICIÓN». Foto David Carpintero.

DÍAS 20 Y 21 DE MARZOXIII Ciclo de Conferencias «SEMANA SANTA: PA-

TRIMONIO Y TRADICIÓN».XIII Ciclo de Conferencias-Coloquio «SEMANA

SANTA: PATRIMONIO Y TRADICIÓN», en el que par-ticipan distintas personalidades de nuestra ComunidadAutónoma.

Las conferencias comenzarán a las 20,15 horas, en laSala de Actos de Caja España, Plaza de Santo Domingo 6,durante los días y horas señaladas, contando con las inter-venciones siguientes:

– Miércoles 20 marzo: – Don MANUEL ARIAS MARTÍNEZ– Subdirector del Museo Nacional de Escultura de

Valladolid.– Jueves 21 marzo: Don LUIS AMO– Periodista el Día de Valladolid.El Ciclo de Conferencias se verá apoyado y reforzado

con audiovisuales relativos a cada una de las conferencias apronunciar, para finalizar con un coloquio en donde puedenparticipar las personas asistentes que lo deseen.

El día 21, finalizada la Conferencia, se procederá a laClausura Oficial del Ciclo por las Autoridades invitadas paradicho acto.

AUTORIDADES ASISTENTES AL PREGÓN DE SEMANA SANTA 2012.Foto Fernando Fradejas.

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DÍA 24 DE MARZODOMINGO. PROCESIÓN DE LAS PALMAS

10,00 h.–Misa Solemne de Hermandades yCofradías, en la iglesia de Santiago de los Caballeros.

12,00 h.–Procesión de las Palmas, desde laIglesia de Santiago de los Caballeros, con el Paso «LaEntrada Triunfal de Jesús en Jerusalén», popular-mente conocido como «La Borriquilla».

DÍAS 25, 26 Y 27 DE MARZO

LUNES, MARTES Y MIÉRCOLES SANTO19,30 h.–SOLEMNE TRIDUO al Santo Cristo

del Amparo, oficiado por el Rvdo. P. Don Juan CarlosFraile San Miguel, párroco de Santa María y Santiagoen Medina de Rioseco.

DÍA 26 DE MARZOMARTES SANTO.«PROCESIÓN DE LA CLEMENCIA»

22,00 h.–Desde la iglesia de Santiago de los Caballeros partirá la Procesión de laClemencia, en la que procesionará el paso del «Santo Cristo de la Clemencia» (Siglo XVI)obra del escultor riosecano Pedro de Bolduque, acompañado por los hermanos y hermanas per-tenecientes a su Cofradía, que visten túnica de lienzo blanco y careta de terciopelo morado.

Recorrido procesional: calle Los lienzos; Plaza Mayor; Román Martín; Rúa Mayor,Empedrada, Corro de San Miguel (acceso de la procesión al interior de la iglesia de Santa María,lugar en que se pronunciará una oración), posterior salida del templo al Corro de Santa María y,tras recorrer la calle Mediana, llegar al Corro de Santiago para en él, previo canto de la Salve, fina-lizar la procesión con el regreso del santo paso al inte-rior de la iglesia de Santiago de los Caballeros, sedeoficial de dicha imagen..

DÍA 27 DE MARZO

MIÉRCOLES SANTO. 19,30 h.–Desde la Iglesiade Santa María de Mediavilla partirá el Vía Crucis y laProcesión de «El Encuentro de Jesús camino delCalvario con su Madre la Virgen María», en la PlazaMayor. El recorrido procesional será el siguiente: callesMediana, Corro de San-tiago; Los Lienzos; Plaza Mayor;Román Mar-tín; Lázaro Alonso; Calle Santa María, pene-trando la imagen del Santo Cristo del Amparo en la igle-sia de Santa María de Mediavilla, para despedirle, previocanto de «La salve» por las gentes penitentes.

Desfilan los pasos: «Santo Cristo del Amparo»(S. XVI) y «Virgen Dolorosa» (S. XVI).

Al finalizar el Vía Crucis, en la Capilla de «Los PasosGrandes» (corro de Santa María), se llevará a cabo elActo Solemne de la colocación del Santo Sudario enel cuerpo de Cristo, muerto y desenclavado.

«LA ENTRADA TRIUNFAL DE JESÚS EN

JERUSALÉN». Foto Fernando Fradejas.

VIA CRUCIS. Foto Fernando Fradejas.

MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

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DÍA 28 DE MARZO

JUEVES SANTO«PROCESIÓN DEL MANDATO» Y«LA PASIÓN»

16,00 h.– RECOGIDA DE GREMIOS, ElPardal, acompañado de la Banda de CC. y TT. de laJunta Local de Semana Santa, procederá a la «Re-

cogida de gremios» pertenecientes a las distintas Hermandades que procesionan este Jueves Santo,para todas dirigirse a la Sede Oficial de la Junta de Cofradías y ser recibidas por la VARA MAYOR.

17,30 h.– DESFILE DE GREMIOS Y RECEPCIÓN OFICIAL, por las principales ca-lles de la Ciudad (Santa María, Rúa Mayor, Plaza Mayor). En la Casa Consistorial, recepción delas autoridades locales a la Vara Mayor, Varas y Estandartes de las Cofradías, portadas por susMayordomos entrantes y salientes, respectivamente.

18,30 h.– CELEBRACIÓN DE LA SANTA MISA, en la Iglesia de Santiago de los Caba-lleros. Finalizado dicho acto, acompañado de la vara Mayor, Varas y Banderines de las Cofradías,traslado del SANTÍSIMO a la Iglesia de Santa María de Mediavilla.

20,00 h.–PROCESIÓN DEL MANDATO y PASIÓN, que partirá en procesión de la Igle-sia de Santiago de los Caballeros para discurrir distintas calles y plazas de la ciudad. En ella des-filan las distintas Hermandades y Cofradías penitenciales con sus Pasos: «La Oración delHuerto» (Obra escultórica perteneciente a la Escuela Castellana).- «La Flagelación» (EscuelaCastellana, S. XVII, y dos Sayones obra de Mariano Nieto, año 1998).- «Jesús Atado a la Co-lumna» (Gregorio Fernández, S. XVI).- «Ecce-Homo o Jesús de la Caña» (Obra de Claudio Tor-dera, S. XVII).- «Jesús Nazareno de Santiago» (Santo Cristo obra de Gregorio Fernández, S.XVII).- «La Santa Verónica» (José Ajenjo, año 1999).- «Jesús Nazareno de Santa Cruz» (Juande Muniátegui, S. XVII).- «La Desnudez del Señor» (Vicente Tena, año1910) .-»Santo Cristode la Pasión» (Juan de Muniátegui, S. XVII).- «La Dolorosa» (Juan de Juni, S. XVI.).

Todos estos pasos son portados a hombros y sus cofrades visten túnicas negras de paño caste-llano o de terciopelo morado, de acuerdo con el origen de susCofradías (la Penitencial de la Pasión, de la Iglesia de Santa Cruz,con túnicas de paño castellano o terciopelo negro, o la Cofradía dela Vera Cruz, pertenecientes a la Iglesia de Santiago, con túnicas deterciopelo morado).

Dos momentos importantes de ésta procesión a tener encuenta: «La Rodillada», momento en el que los Pasos hacen unagenuflexión ante la Virgen de la Cruz o del Rosario, situada en lacapilla del Arco de Ajujar. El otro momento se corresponde conel Canto de la Salve en el Corro de Santiago de los Caballeroscon el que finalizan los actos procesionales de ese día.

Recorrido procesional: Desde la iglesia de Santiago de los Ca-balleros comienza la procesión en el Corro de Santiago discu-rriendo por la calle Mediana; Corro de San Miguel; calle PabloIglesias; Rúa Mayor; Román Martín; Plaza Mayor; calle San Bue-naventura, calle Antonio Martínez, Arco de Ajujar (acto de «re-verencia» a la Virgen de la Cruz), calle La Doctrina, para finali-zar la procesión en el Corro de Santiago, lugar en el que, previoel canto de la Salve popular, regresarán los distintos «pasos» y her-mandades al interior de la iglesia de Santiago de los Caballeros. «ECCE HOMO». Foto Fernando Fradejas.

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PROGRAMA

«ORACIÓN DEL HUERTO». Foto Fernando Fradejas.

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DÍA 29 DE MARZO

VIERNES SANTO, «PROCESIÓN DELDOLOR» Y «LA SOLEDAD»

16,00 h.–RECOGIDA DE GREMIOS,El Pardal, acompañado de la Banda deCornetas y Tambores de la Junta Local deSemana Santa, procederá a la «Recogida degremios» pertenecientes a las Hermandadesque procesionan este día, para concentrarsetodas ellas en la Sede Oficial de la Junta y serrecibidas por la VARA MAYOR.

17,30 h.–DESFILE DE GREMIOS Y RECEPCIÓN OFICIAL, Las Hermandadespenitenciales recorren rúas y plazas de la Ciudad para llegar al Ayuntamiento y ser recibida laVara Mayor junto Mayordomos, Varas y Estandartes, por las Autoridades locales.

18,30 h.–Celebración de la PASIÓN: SANTOS OFICIOS, en la Iglesia de Santa María.20,00 h.–PROCESIÓN DEL DOLOR y LA SOLEDAD, desde la iglesia de Santa María,

con los Pasos siguientes: «La Crucifixión» (Tomás de Sierra, siglo XVII). «Santo Cristo de losAfligidos» (Escuela Castellana, S. XVI, María y San Juan, S. XIX). «Santo Cristo de la Paz»(Antonio Martínez, S. XVII). «El Descendimiento» (Francisco Diez de Tudanca, S. XVII). «LaPiedad» (Rodrigo de León, S. XV). «Santo Sepulcro» (Mateo Enríquez, S. XVII). «La Soledad»(Dionisio Pastor, S. XIX).

Los «pasos» son portados a hombros por cofrades que visten túnicas de lienzo blanco. La«Crucifixión» y «El Descendimiento» son los más voluminosos y pesados de los que desfilan enla Semana Santa Riosecana, exigiendo unatécnica especial para su salida y entrada de laCapilla en la que se guardan. Se debe tener encuenta: «La Rodillada», momento en el quelos Pasos hacen una genuflexión ante laVirgen de la Cruz o del Rosario, situada en lacapilla del Arco de Ajujar. Al finalizar laProcesión se canta la Salve a la Virgen de LaSoledad en el corro de Santa María.

Recorrido procesional: Salida de los «pa-sos» desde la Iglesia de Santa María de Me-diavilla y la Capilla de «Los Pasos Grandes»para, desde el Corro de Santa María, recorrerla Calle Mediana: Corro de San Miguel; callePablo Iglesias; Rúa Mayor; Plaza Mayor; calleSan Buenaventura, Antonio Martínez, Arcode Ajújar, La Doctrina, Corro de Santiago;calle Mediana, Corro de Santa María, desde elcual, previo el canto de «La Salve» a la Virgende La Soledad, finalizará la procesión con el re-greso de las imágenes al interior de la Iglesia deSanta María y a la Capilla de «Los Pasos Gran-des» (momento este de especial relevancia yatención).

TÚNICAS BLANCAS. VIERNES SANTO. Foto José Carlos Lobo García.

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

PIEDAD. Foto José Carlos Lobo García.

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DÍA 30DE MARZO

SÁBADO SANTO,«VIGILIA PASCUAL»

23,30 h.–Celebraciónde la La Vigilia Pascual, enla Iglesia de Santa María deMediavilla.

DÍA 31DE MARZO

DOMINGODE RESURRECCIÓN

12,00 h.–PROCESIÓN DE CRISTO RESUCITADO Y EL SANTO ENCUENTRO,que partirá de la Iglesia de Santa María de Mediavilla, con el Paso de «Cristo Resucitado» (Es-cuela Castellana) para llegar hasta el atrio de la Iglesia-Museo de Santa Cruz (calle Rúa Ma-yor), lugar en el que se realizará el encuentro de Cristo resucitado con su Madre, «Nuestra Se-ñora la Virgen de la Alegría» (Gregorio Fernández, S.XVII).

Una vez realizado dicho acto, ambas imágenes reiniciarán juntas el desfile procesional por lacalle Rúa Mayor; plaza Mayor; c/ Román Martín; c/ Lázaro Alonso; c/ Santa María para finalizaren el Corro, haciendo su entrada en la Iglesia de Santa María, lugar en el que se celebrará la SAN-TA MISA, al término de la misma concluirá la mencionada procesión.

DÍA 7 DE ABRIL: MISA DE DIFUNTOS

10,00 h.–En la iglesia de Santa María de Mediavilla SANTA MISA en recuerdo de las her-manas y hermanos difuntos que pertenecieron a las Hermandades o Cofradías que procesionanel Viernes Santo.

11,00 h.–En la iglesia de Santiago de los Caballeros, SANTA MISA, en recuerdo por lashermanas y hermanos difuntos que pertenecieron en algún momento a las Hermandades y Co-fradías penitenciales que procesionan el Jueves Santo.

NOTA: Finalizadas las Misas programadas para este día, se realizará el traslado de los dis-tintos «pasos» con sede en cada una de las dos iglesias mencionadas hasta la iglesia-Museo deSanta Cruz, portados a hombros por sus hermanos cofrades, recorriendo distintas calles de laciudad.

DEL 15 DE JULIO AL 4 DE AGOSTO: XII EXPOSICIÓN DE FOTOGRAFÍAS «TOMÁS DE SIERRA»Exposición de las fotografías presentadas al XII Premio Fotográfico «TOMÁS DE SIE-

RRA», en la Sala de Exposiciones de Caja España-Caja Duero: Obra social de nuestra ciudad,plaza de Santo Domingo, 6.

El viernes, 2 de agosto, se procederá a la clausura de la exposición, con la proyección del audio-visual «SEMANA SANTA RIOSECANA 2013», y la entrega de premios y diplomas alos diferentes concursantes que participen en ella.

PROCESIÓN DEL «SANTO ENCUENTRO», CRISTO RESUCITADO Y

VIRGEN DE LA ALEGRÍA. DOMINGO DE RESURRECCIÓN.Foto José I. Santamaría Magdaleno.

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PROGRAMASEMANA SANTA2013

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Porque al someterse a la Cruz, todo el pesode la tribulación se le va convirtiendo en

experimentar los divinos consuelos.

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SEMANA SANTA2013

l Barroco crea un arte destina-do a convencer a las masas deprincipios dogmáticos que seconsideraban en el siglo XVII

con un valor absoluto. La fórmula ide-ada fue crear un arte dotado de empa-tía, en el que se buscaba que elespectador se identificara con lo repre-sentado, y por lo tanto convencerlevisualmente de su existencia real. Estose hace a través de un arte naturalista,que disponía las escenas en una accióncaptada de la manera más verosímilposible. Por eso, es el momento cum-bre del arte de la escenografía, lo quellevó a utilizar frecuentemente a perso-najes tomados de la realidad contin-gente para reforzar esa identificacióncon el mensaje ideológico, a través delemocionalismo.

Los pasos de Semana Santa, fue-ron los que llevaron al mayor atrevi-miento esa intención narrativaapropiadora de los sentimientos reli-giosos, como se puede advertir espe-cialmente en los Pasos Gandes de laSemana Santa riosecana, inspirados enpasos vallisoletanos del gran GregorioFernández. Desde que a finales delsiglo XVI se rastrea la intención dehacer figuras de tamaño natural y enmadera, frente a las de papelón habi-tuales hasta entonces, la técnica de losescultores consiguió hacer unas esce-nas dotadas de la retórica suficiente,con distintos puntos de vista y diversasacciones dentro de la misma escena, enorden a salvar el difícil problema decrear escenas de contenido plausible enmedio de las calles, al aire libre. Ya no era necesarioentrar en los templos para recibir el mensaje religio-so, sino que éste salía a buscar a los fieles al exteriorpara el conocimiento del dogma y la meditaciónsobre el mismo. Así se logró un gran poder persuasi-

LOS ANTECEDENTESESCENOGRÁFICOS DEL PASO

PROCESIONAL DESEMANA SANTA

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NICCOLO DELL’ARCA.

SANTO ENTIERRO DE CHAOURCE.

vo, en orden a que el espectador urbano tomaraparte en la misma acción.

Pero para llegar a este triunfo de la escenografíareligiosa barroca, hubo un camino anterior a lo largode los siglos XV y XVI, que iniciaron el interés porla representación verosímil de los temas religiosos,que no sólo se orientaron a temas de Pasión, sino

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

Bolonia o Módena. Destacan los Entierros de Cristode Santa María della Vita de Bolonia, de Nicollodell´Arca, o los de Guido Mazzoni, en Módena. Lalínea expresionista de esta escuela es continuada porAntonio Begarelli, autor de un impactanteDescendimiento de la Cruz en San Francisco de lamisma ciudad.

Pero la puesta en escena secuencial de la Vida deCristo se da de un modo más teatral en el Piamontey la Lombardía, con la creación de nueveSacromontes, de los que el más antiguo es el deVarallo, cuya fundación se remonta a 1491. Se sitú-an capillas en la subida, en las que en cada una deellas se narra un episodio sagrado desde el Génesishasta la Asunción de la Virgen.

En la zona del Imperio Alemán, a partir de lasegunda mitad del siglo XV se detectan escultoresretablistas que tienden a dar protagonismo a unaescena central, que frecuentemente se dedica atemas de la Virgen. Michael Pacher o Veit Stossvan a dar un paso significativo en esta tendencia amonumentalizar las escenas en un retablo. En lamisma línea, pero incluso más efectista, es TilmanRiemenschneider, activo en la ciudad deWürzburg. Son el antecedente del retablo escena-rio español. En estos retablos se recurre a unapuesta en escena auténticamente teatral, en los que

MANUEL ÁLVAREZ Y OTROS.RETABLO DE ARRABAL DE PORTILLO.

FRANCISCO GIRALTE.RETABLO DE SAN PEDRO DE CISNEROS.

también a la Infancia de Jesús o episodios de la vidade la Virgen.

Desde el punto de vista ideológico, esta bús-queda de la realidad empática tiene su origen enunas formas peculiares de piedad. El auge de la«devotio» moderna, auspiciada en gran parte por lasórdenes religiosas, y en especial por los francisca-nos, que triunfa en los siglos XV y XVI. Durante elsiglo XV, en Borgoña trabaja el holandés ClausSluter, con una gran capacidad para representar demodo convincente la realidad, y con el suficientesentido pintoresco como para describir a los perso-najes con rasgos similares a los de los personajescontemporáneos. Uno de los temas que utilizaronseguidores suyos fue el del Entierro de Cristo, quepaulatinamente aparece también en otras regionesfrancesas. La dramatización solemne de este temapatético se hace con figuras de tamaño natural, ves-tidas a la usanza del siglo XV. Uno de los más logra-dos es el de Chaource, de 1515: Una capilla baja, amodo de la cripta del sepulcro, acoge a los persona-jes que proceden al enterramiento. Dos soldados ais-lados vigilan la escena. La impresión desoladora dela escena se une a una ambientación lóbrega, en laque se palpa la idea de la muerte. En el mismo sigloXV se hacen grupos similares, con mayor gesticula-ción si cabe, en algunas zonas italianas, como

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SEMANA SANTA2013

acontecimiento. Juni vuelve a interpretar entre 1565y 1571 el mismo tema en la capilla del maestromayor Juan Rodríguez, de la catedral de Segovia,esta vez en altorrelieve, lo que implica una menorempatía de la escena. Los dos soldados situados a loslados cumplen una importante función explicativatanto desde el punto de vista simbólico como desdeel planteamiento puramente visual.

El tema del Descendimiento apareció tambiénen el retablo escenario, como el de la capilla delcanónigo Diego González Quintero de Piña deCampos (Palencia), hoy en el Museo Diocesano dePalencia, atribuido a Manuel Álvarez, o el que huboen la iglesia de San Miguel de Medina del Campo,del que sólo subsiste el grupo central dedicado alDescendimiento, en el Museo Diocesano deValladolid, obra de Juan Picardo. Isidro deVilloldo, realiza el de la Capilla de San Bernabé,hoy sacristía, de la Catedral de Ávila, entre 1549 y1553, que tiene como grupo central individualizadoel tema de la Flagelación, con figuras de bulto redon-do. En algunos casos, la escenificación pasa a losretablos convencionales, como el mayor de la iglesiade San Pedro de Cisneros (Palencia), de FranciscoGiralte, o el de la iglesia de Arrabal de Portillo,puesto en relación con varios escultores palentinos,en torno a Manuel Álvarez, que llevan un especta-cular y dominante Descendimiento en la calle cen-tral.

JESÚS Mª PARRADO DEL OLMO

Universidad de Valladolid

LOS ANTECEDENTES ESCENOGRÁFICOS DEL PASO PROCESIONALDE SEMANA SANTA

JUAN DE JUNI.ENTIERRO DE CRISTO.

suele ser habitual su ejecución por parte de artistasde procedencia nórdica, y en algún caso tambiéninfluidos por la escultura del norte de Italia. FelipeVigarny, Miguel Perrin, Roque Balduque, LosBeaugrant, el Maestro de Sobrado y, sobre todo,Juan de Juni. Suelen ir en muchos casos vincula-dos a capillas particulares de personajes que sevinculan con una devoción franciscana. Mayorgesticulación y sentimientos humanos aparecen enlos retablos de tipo escenario de un solo cuerpo, delos que existe una amplia nómina a lo largo de todala geografía española. En Castilla destacan los deSan Cebrián de Campos, fechado a finales delsiglo; los del llamado Maestro de San Pablo de laMoraleja, dedicados al Llanto sobre CristoMuerto, como el del Museo Diocesano deValladolid o Nava del Rey; el de la capilla delDeán Zapata en San Pablo de Palencia, de auto-ría problemática, y fechable hacia 1516.

Pero quien logra los mayores efectos teatrales esJuan de Juni. Nadie como él logra la impresión devida palpitante con una sucesión de sentimientos yacciones en función de la intención expresiva gene-ral. Ya aparece esta capacidad de envolvimientovisual de su puesta en escena en los grupos en barrococido de San Jerónimo y del Martirio de SanSebastián en San Francisco de Medina de Rioseco.Aunque no son de Pasión, las dos obras muestran sucapacidad de comunicación directa del tema con elespectador. Pudo actuar de una manera más inde-pendiente en su obra más significativa: El SantoEntierro de la desaparecida capilla de FrayAntonio de Guevara en San Francisco deValladolid, contratado (1540-1544). El grupo seintegraba en un retablo de yesería, quizá de losCorral de Villalpando, y en el ambiente de la propiacapilla. El grupo de figuras gesticulantes situado aun nivel bajo, cercano al espectador, componía unaescena dotada de una retórica factible, puesta enfunción de hacer patente la realidad presente del

ISIDRO DE VILLOLDO. RETABLO DE SAN BERNABÉ.

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manifestación y desvanecimiento, entre sudespliegue público como redentor en la cruzy su desaparición en el sepulcro. En esemomento José de Arimatea y Nicodemopresentan el cadáver a la madre, para queésta lo tome en sus brazos, antes de trasla-darlo a la tumba, donde quedará ocultodurante cuarenta horas, tres jornadas,según el cálculo judío. En el estudio citado,Amy Powell interpreta esta proliferaciónbajomedieval de descendimientos como unaalegoría que anticipa la próxima desapari-ción de las imágenes –o su drástica reduc-ción– en buena parte de Europa, a raíz de laReforma protestante: el fulgor último delcuerpo, antes de desvanecerse.

Pero esa interpretación alegórica podríamirar en la dirección opuesta, atender a lo

que iba a ocurrir en lospaíses católicos, comoEspaña. Aquí la Con -trarreforma respondió ala iconofobia protestan-te, no con la discretaretirada de imá genes,sino con su glorificaciónmáxima. A la afirma-ción luterana de la inte-rioridad se contra-pondría la exterioridadde los pasos, con suacentuado realismo y suteatralidad explosiva.Las procesiones en lacalle, con el desplieguede cofradías, represen-tan la forma más exalta-da de proclamar el valorreligioso de la imagen.

En los Ejercicios espirituales, Ignacio deLoyola explicaba la trascendencia de lasimágenes del Calvario. La Salvación no essólo un hecho interior, es también, y deforma esencial, un drama que debe ser con-templado. Desde esa teología de lo visualque caracteriza los Ejercicios ignacianos, elsacrificio deviene espectáculo y el fiel seconvierte en espectador de su propia reden-ción. Roland Barthes subraya la excepcio-nal importancia de esa exaltación ignacianade la imagen, que supone un cambio decisi-

or su tamaño, su belleza, su drama-tismo, por el espectáculo que en símismo es, el paso delDescendimiento es uno de losemblemas más característicos de laSemana Santa riosecana, un sím-

bolo que, justamente por su semejanza con elde Valladolid, permite entender mejor la dis-tancia que une y separa estas dos formas tancercanas y a las vez tan remotas, de represen-tar en la calle la pasión de Cristo.

Dejando de lado otras diferencias, elmodo de desplazarlos –una plataforma conruedas, o los hombros de los cofrades– dotaa los pasos de un simbolismo diverso. Sobretodo, en dos de los momentos esenciales dela Semana Santa: la entrada y salida de laEscalera, maniobra imposible para un pasode tales dimensiones,que, sostenido a pulso,debe atravesar un por-tón apenas más altoque las esculturas.

Aunque aludido enlos evangelios, el des-cendimiento, un episo-dio menos importantedesde el punto de vistalitúrgico que la crucifi-xión o la resurrección,empezó a representarsetarde en el arte cristiano.Al principio la escenaincluía sólo al crucifica-do y a los dos encarga-dos de la tarea, José deArimatea y Nicodemo.Después, el número sefue ampliando hastaincluir a los personajes que aparecen en el pasoriosecano. El interés que despertaba el episo-dio fue creciendo y a fines de la Edad Media,era una de las estampas más representadas dela Pasión. En un libro recientísimo (Depositions.Scenes from the Late Medieval Church and theModern Museum, Nueva York, Zone, 2012),Amy Knight Powell propone una hipótesis fas-cinante para explicar la frecuencia casi obsesi-va con la que entonces se repetía la escena.

El Descendimiento presenta al crucifi-cado en un momento de transición, entre

EL BRAZODE NICODEMO

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VIERNES SANTO. DETALLE BRAZO DE NICODEMO

«EL DESCENDIMIENTO».Foto José Carlos Lobo García.

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vo en la sensibilidad europea, el dominio dela vista, tal como se manifiesta, por ejemplo,en la estética de las procesiones. Desde otroángulo, Lacan señalará cómo el barrocoprovoca un cambio que implica la regula-ción del alma a través de la mirada.

El papel simbólico que en la SemanaSanta riosecana juega el Descendimiento,parece afirmar con rotundidad ese papel de laimagen como vehículo de la piedad, y lo hacecon más intensidad precisamente en esa esce-na fronteriza en la que el icono –de acuerdocon la tesis de Powell– se situaba al borde desu desaparición. Es algo más que una casua-lidad que la Escalera despierte la máximaexpectación, y provoque las emociones másintensas, en otra transición, la salida y entra-da en la capilla donde se guarda, y que estosmomentos constituyan quizás el punto máscaracterístico de las procesiones de Rioseco.

Esta resonancia se acentúa aún másaquí, por la peculiar «vitalidad» que, a dife-rencia de su homólogo en Valladolid, tieneese Descendimiento: el movimiento, las«rodilladas», la energía que circula entre loscofrades, y entre estos y los espectadores.En ningún momento esa energía se hace tanintensa como en los difíciles instantes enque, a los sones de «La lágrima», el pasoatraviesa el portón de su capilla, culmina-ción de la fiesta, símbolo de un final que

conecta con otros finales, un pasado que seextiende mucho más allá de las memoriasindividuales que se apiñan en el Corro deSanta María, y que constituye esa cosaindefinible, pero esencial, que los románti-cos llamaban «el alma del lugar».

En el paso destacan las dos figuras que,desde lo alto, sostienen el cadáver:Nicodemo y José de Arimatea. Marcan elpunto más elevado del conjunto, y por tantola dificultad máxima para atravesar el por-tón. Su protagonismo resulta aún más lla-mativo por el significado esotérico deambos personajes. Nicodemo es el autor deun evangelio apócrifo que narra, entre otrascosas, el episodio secreto que ocurre entremuerte y resurrección: el descenso a losinfiernos, cuya onda expansiva se extiendedesde el credo niceno al teatro medieval,pasando por la ingenua iconografía en laque el crucificado quiebra las puertas delHades para rescatar a los justos que desdeAdán penaban en poder del demonio. ElEvangelio de Nicodemo narra también la histo-ria de su compañero –y superior– en lo altode la cruz, José de Arimatea. Andando lossiglos, el rico judío que cedió su tumba aJesucristo se convertiría en un personajeesencial de la literatura medieval. Fue élquien trasladó a Occidente el Grial, el cálizde la última cena, en el que, tras la crucifi-xión, se vertió la sangre de Cristo, y entorno al que se iba a articular la ficcióncaballeresca a partir del siglo XII.

Que ese momento de esfuerzo y emocióncompartida que se produce cada año en elCorro de Santamaría se represente a travésde la escena que, tal como subraya Powell,marca la transición decisiva en la historiaeuropea, y, sobre todo que se haga a través deesas dos figuras que encarnan dos de sus tra-diciones secretas, ofrece una hermosa imagenque vincula la historia del lugar a la historiade Europa. Nicodemo, que casi flota en loalto de la escalera, como bailando en el aire,extiende el brazo en la noche, para marcar elpunto secreto del tiempo y el espacio dondeacaba todo y, a la vez, empieza de nuevo.

ENRIQUE GAVILÁN

Profesor de Historia Medieval, Universidad de Valladolid

«EL DESCENDIMIENTO». Foto José Carlos Lobo García.

EL BRAZO DE NICODEMO

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

ualquiera que haya contemplado y segui-do la Semana Santa de Medina deRioseco, sea creyente o no, ha quedadoatrapado por un escalofrío, por un aurainvisible que le hace mirar hacia sus aden-tros, por un relámpago de reflexión y hon-dura, por un latigazo sereno y vibrante en

el alma. ¿Por qué? A mi juicio, ni la religiosidadpopular, ni la historia, ni la tradición lo explicantodo, aunque sean el núcleo básico. Tampoco labelleza de los pasos, ni la majestuosidad del reco-rrido, ni las piedras centenarias, ni el revivir unasensación secular heredada e impresa a fuego eter-no en los genes de los riosecanos. Hay algo más. Yeso lo aprecia enseguida el laico que se aproxima alas procesiones con el escepticismo del agnóstico,con la distancia de quien busca más arte que devo-ción, más cultura que fervor. Ahí, casi sin querer,mientras dispara su máquina de fotos y escudriñarostros, andares, luces, sonidos y silencios, notaalgo que le es tremendamente familiar aunque pro-ceda de lejos y presuma de descreído. Ahí, en eseambiente de hechizo y grandeza, de recuerdo yesperanza, de dolor y fuerza, existe desde la nochede los tiempos una comunión telúrica entre el hom-bre y la tierra, entre el hombre y el cielo, entre latierra y el cielo. También la naturaleza, el culto a lanaturaleza, aporta un enorme caudal místico a laSemana Santa, a todas las semanas santas, peroespecialmente a aquellas que, como la riosecana, sehan alejado de masificaciones y oropeles para pre-servas raíces y esencias.

No es casual que la Semana Santa caiga enprimavera, cuando el hombre de estos pagos miraalternativamente al cielo y a la tierra esperandoque de arriba llegue lo que abajo tanto se anhela.Época en que los campos estallan en verde, perodemandan lluvia. Tiempo de soñar con cosechas,de asegurar futuros, de implorar ayudas a las divi-nidades, de consagrar sacrificios para que losdeseos se cumplan. Días, en suma, de vínculos conlas Alturas, de cercanía entre los mortales y laInmortalidad, entre la finitud y lo Eterno, entre lalimitación y la Omnipotencia. Y así ha sido desdeel principio del mundo. Ceremonias y fiestas entorno al equinoccio de primavera están presentesen todas las grandes civilizaciones, desdeMesopotamia a Roma, desde Egipto a Grecia. Sus

huellas también afloran en ritos celtas y celtibéri-cos, irlandeses y bretones. Muchos de ellos hanllegado hasta nosotros, como bien revela el soria-no Antonio Ruiz Vega en su inquietante obra «Loshijos de Túbal», subtitulada «Mitología hispánica:Dioses y héroes de la España Antigua».

Ese vínculo ancestral Hombre-Tierra-Cielo,esa ligazón perpetua entre lo humano y lo sobre-natural, no nos ha abandonado nunca, ni siquie-ra cuando lo hemos dado por muerto en aras delprogreso, la modernidad y otras modas o creen-cias. Ha permanecido siempre como un venerooculto pero vivo que se ha filtrado en nuestraidiosincrasia hasta formar parte de nuestroADN individual y colectivo. La religiosidad, elfervor y la devoción se han impuesto a él y, portanto, marcan la pauta de todo lo relacionadocon la Semana Santa. Estos tres factores domi-nan, se imponen, pero como indicaba antes, nolo explican todo. Y cuando hablamos de tradi-ción e historia, solemos referirnos a la SemanaSanta tal y como la conocemos ahora, es decir dehace cuatro siglos para acá. Es verdad, pero hayuna pregunta obligada: ¿Y antes, qué ocurríaantes? Es más: ¿Qué sucedía antes de que elCristianismo llegara a estas tierras y adquirieratoda su potencia y esplendor? Son muchos losindicios y testimonios que aluden o dejan entre-ver ceremonias y rituales de primavera, súplicasa los dioses, oraciones y ofrendas para el creci-miento y granazón de las cosechas, para la ferti-lidad del ganado, para la llegada de las lluvias.Todo eso continúa ahí, aunque cueste identifi-carlo. Todo eso, el abrazo Hombre-Tierra-Cielo,también es tradición y también es historia.

Por ello, en mi opinión, entra tan fácil y tanpronto en el espíritu de los no religiosos o de losno católicos la Semana Santa de Medina deRioseco. Es tan divinamente humana, tan mila-grosamente natural que solo un torrente de viday siglos puede explicarla. Religiosidad popular,sí; fervor, sí; devoción, sí; cultura y arte, sí, peroyo, cuando he estado en ella, me he sentido máshombre y más de esta tierra. Y he sentido que latradición y la historia también buscaban el cielo.

LUIS MIGUEL DE DIOS

Periodista

HOMBRE,TIERRA, CIELO

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SEMANA SANTA2013 LA SEMANA SANTA

EN MEDINA DE RIOSECO:UN RITUAL PERFECTO

ablar –sin caer en lo tópico– deuna de las semanas santas másantiguas de España y que,como la de Medina de Rioseco,ha mantenido ininterrumpida-mente buena parte de sus tra-

diciones procesionales desde el siglo XVIno puede resultar fácil. Si, para empezar,decimos que –como toda Semana Santa–constituye inequívocamente un ritual nohabremos de descubrir –tampoco– nadanuevo. Y, sin embargo, al hacerlo, creoque situamos el tema en su marco másadecuado para el entendimiento y expli-cación de lo que es o significa. Un rito.Un ritual. Pero no por su carácter en apa-riencia sagrado o religioso solamente. LaSemana Santa de Medina de Rioseco es,en muchos aspectos, un ritual perfecto.Más allá de su antigüedad e independien-temente de lo que representa o de la belleza escultórica desus pasos, en él se expresa toda una comunidad desde los vie-jos a los niños, pasando por los adultos y mozos. Llevar lospasos como se llevan aquí, en andas y sin más ayuda que elpuro esfuerzo, es una fe, un arte y una técnica que se apren-de en la infancia, por mera mímesis, jugando a hacer proce-siones. Mientras, la música continuada del Pardal y losTapetanes, año tras año, contribuye a anudar los tiempos deuna generación con las siguientes.

El presente apenas existe. Es lo que tarda en pasaruna procesión. Es lo que las generaciones invierten endejar su pálida huella en la historia. Sólo hay pasado yfuturo. Entre ellos, únicamente cabe el ritual, bamboleán-dose como los pesados pasos de la Pasión a hombros de loscofrades, arrastrándose detrás de la trompeta que loanuncia y luchando, al ritmo guerrero de los atabales,contra el correr inevitable del tiempo. Una generación, yotra, y otra, llevarán la carga de sus propios errores acuestas hasta el día del Juicio Final.

Alegoría del orden pero también de la continuidad, laSemana Santa cumple aquí en Rioseco todos los requisi-tos del ritual que los antropólogos atribuyen a éste: setrata de un conjunto de actos simbólicos, altamente pau-tados, repetitivos en concordancia con ciertas circunstan-cias y de cuya ejecución se derivan consecuencias que,total o parcialmente, son también de orden simbólico.Pero nos equivocaríamos si pensáramos que lo simbólicono repercute en la esfera de la realidad. Sin sus ritualeslos pueblos, las comunidades, las naciones, no seguiríansiendo lo que son. El ritual conforma las sociedades tantocomo nos habla de ellas; e invita y ayuda a seguir siendolo que se es o lo que se fue.

Por eso, el meollo del mismo no está en el acto en sí ymenos en lo que se dice que representa. Su verdadera sus-tancia es el acto en el tiempo. La repetición de ese acto.Cuando un cofrade se viste para salir en procesión con latúnica negra, blanca o morada que son costumbre en estelugar, y se coloca bajo el paso, o realiza la reverencia de laRodillada ante la Virgen de la Cruz, hace idéntico gesto al desus padres y sus abuelos. Se convierte, en cierto modo, enellos o participa de lo que fueron. Así que, al caminar a tra-vés de los capuchones y la gente en medio de procesionescomo ésta, uno puede tener la sensación de que está avan-zando entre miradas de fantasmas. Rostros a la luz de loscirios. Siluetas con ojos pero sin rostros. Olor a cera eincienso. Humo en el aire. Aire que es todo y es nada.

Miguel de Unamuno acertó plenamente al percibir–viendo esta procesión– el tiempo del ritual como untiempo distinto, un tiempo que pasa sin pasar, que pareceque no acaba:

«Era la misma procesión de antaño. El anciano cree verlo que vio de niño, y el niño, aun sin darse de ello cuenta,espera ver la misma cuando llegue a ser anciano, si llega... Yno ha pasado más: ni monarquía, ni dictadura, ni revuelta,ni república. Pasan los pasos. Y los llevan los mozos».

Es el tiempo del mito y el rito. El único real. Un terri-torio bordeado de símbolos que atravesamos fugaces connuestras cruces de dolor, amor y arrepentimiento. Losúnicos sentimientos que, al final, habrán de redimirnos.

LUIS DÍAZ VIANA

Antrópologo y escritor.Profesor de Investigación del CSIC

HMIÉRCOLES SANTO.

Foto Fernando Fradejas.

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

ay una gran circunstancia que lo explica todo. Conuna población en torno a los 5.000 habitantes,Medina de Rioseco, cuenta con tres mil cofra-des repartidos entre sus cofradías y herman-dades. Un dato apabullante que muestracomo ningún otro hasta qué punto los rio-

secanos tienen interiorizada su Semana Santa.No deberá parecer chocante, por tanto, quemuchos niños «jueguen a los pasos»; ni que imi-ten a los mayores en el trance de procesionar.Todo un contraste con el resto de las celebra-ciones populares de Castilla y León, cuando elcalendario festivo determina, por San Antón ySanta Águeda, un tiempo de carnaval quemuere al llegar la cuaresma. En Rioseco, en cam-bio, siguen su propio ciclo. Encalan las fachadasy comienza a oler a Semana Santa. Un aroma quealcanza hasta San Juan, tiempo de frescas enrama-das de chopo en el interior de las peñas.

Mientras en otras partes de España los niños elegíanesos días a los «Obispillos», un rito de inversión caracterís-tico del Carnaval. Los chicos de Rioseco, en otro claro rito perode imitación, levantaban pasos semanasanteros con puertas viejasque pesaban más que ellos, para cargar con cruces y figuras que represen-taban personajes de la Pasión. No se trataba de hacer ningún tipo de penitencia, sino de emular a los mayores.Miguel de Unamuno reparó en ello y escribió en 1932, en el periódico madrileño El Sol, que para un riosecano sacarun paso era un elemento indicador de la mayoría de edad. Seguramente, el viejo rector, fue testigo de estas proce-siones infantiles de invierno y le vino a la cabeza el recuerdo de pervivencias de antiguos ritos de iniciación.

Desde la noche de los tiempos se cree que si se imitan los actos y sucesos que se desea producir se ayudaráa producirlos. Una creencia que, más allá de sus evocaciones mágicas, guarda su lógica. Si en la noche de SanJuan, al encender una hoguera, se pretende auxiliar a la luz del sol, los pequeños, al descubrir cosas de mayores,se convertirán en mayores. Los riosecanos, desde que tienen uso de razón, han visto a sus padres o hermanoslevantar los pasos con esfuerzo, sacarlos de los templos de una forma determinada y portarles a hombros con unalevedad milagrosa. Los niños, naturalmente fascinados, sienten la necesidad de repetirlo.

La infancia era para los simbolistas, el estado previo a la obtención del conocimiento. Y son críos de unos10 años los que en Rioseco cargan en andas los pasos hechos para ellos. En las cuatro esquinas se encuen-tran los que llevan las varas con horquilla para descansar la plataforma, coronada generalmente por una cruzde madera. Es de suponer que se repartan las responsabilidades de ser «cadena», «contrapalo» o «bispalo».Y es seguro que no se le escapa un gallo a aquel de entre ellos que grite el imperativo ¡Oído!

Hasta no hace mucho los pasos que procesionaban los chavales no eran tan elaborados como los deahora. Entonces, con cuatro maderas lo solucionaban. Y eran perfectamente reconocibles. Probablemente, elmás sencillo de evocar fuera «El huerto de los Olivos». Con unas ramas frondosas y unas piedras lo teníanhecho. A veces, también subían a los más pequeños para que representaran personajes. A los porteadores lesgustaba que el paso tuviera peso. Cuanto más peso soportaban, más mayores serían a los ojos de los demás.

Son las propias cofradías y hermandades quienes determinan en sus reglas internas la edad en que loscofrades pueden sacar el paso. Y es el Domingo de Ramos el día que se celebra el tallaje de los cofrades yhermanos inscritos para levantarlos en andas. Hay una gran ilusión. La falta de altura se remedia con unostacos que igualan a todos. La carroza debe procesionarse con una horizontalidad fuera de toda duda.

Para los chicos de Rioseco, transitar sus propios pasos no era un juego, al contrario, constituía algo muyserio. Un rito de paso similar en su esencia al que tenían que atravesar en la antigüedad los jóvenes romanos.Entonces, y ahora, eran Días Sagrados en los que se ingresaba en el territorio de los mayores con todo mere-cimiento y responsabilidad.

CARLOS BLANCO

Periodista de radio y TV

UN RITO DE PASO

H

NIÑOS IMITANDO EL LEVANTAMIENTO

DE PASOS SEMANASANTEROS. Foto David Carpintero.

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a tierra para quienes somos signo de aire es refe-rencia, posiblemente porque nuestra virtud sehace defecto, y buscamos el complemento.

Para mí, es el lugar de vuelta, el cobijo paralos tiempos fríos, la paz en los convulsos, y la compañía parasiempre. Es la seguridad en cada final del día, cuando me alejodel dolor de las mordidas inevitables de la vida. Es en el len-guaje castellano la capacidad clara y del todo de «reinventar-me». Ya que cuanto más distancia tengo de mis piedras, y mí«antes», más del todo me nace mi cuna castellana.

Por ello en fechas como las que nos acontecen, éstas enlas que el almanaque nos da la bienvenida a la tradición, y elamor por los nuestros nos permite juntarnos, yo me quedocon «La Resurrección», y la esperanza para que todas las gen-tes de buena voluntad tengan sudomingo en paz, y en pascua.

Agradecida a la revista de «Lasemana Santa Riosecana» por soli-citar, y dar cobijo a mis letras enfechas tan históricas como llenasde futuro, y no sólo, aunque tam-bién, por ser de Interés TurísticoInternacional, y por El Blasón deTurismo.

Va con nuestro carácter no serdemasiado dados a reconocer nues-tras virtudes, es un aprendizaje pen-diente que sin duda tendremos queno olvidar, para evitar que tengamosque seguir abandonando nuestrolugar de partida por la ausencia dereconocimiento, y acogida de lospropios. Es por ello por lo que dejola falsa modestia en lo que nos ocupaen particular, e insisto en recordarque tendríamos que valorarnos,también en todo lo demás, y empie-zo reconociendo como lo que es:

La Semana Santa de Medinade Rioseco:

Una única, por su antes, su durante, y su después...Todo lo que se ha sabido conservar de su origen, ahora

más que nunca de imprescindible ayuda a los desfavorecidos.Aquellos primeros fundadores cofrades, los artesanos que sindejar de mirar al cielo se esforzaron por dar en la tierra, y hoyes, una forma de ser y de sentir. Junto al arte de cada paso,cultura imprescindible para ser libres, ya sea de recocidosnombres los de aquellos hombres que han dejado en la histo-ria de España su imaginería con alma propia, o los anónimosque en cada procesión engrandecen el espíritu de sus gentes.Las que con túnicas de terciopelo morado o negro, de pañocolor azabache, o las de color blanco que representan el vivirde cada cofrade. Es la entrega de una esencia tan individual,que necesita de los otros, para ser un todo.

En el nombre del Padre, y del Hijo, coincidiendo losabuelos en sentirse como antaño, mientras que quedará enlos nietos para cuando les toque a ellos dar el relevo. Son lafilosofía de una existencia y de una común bandera.

El sonido peculiar de los caminantes, acompañados enmuchos instantes por el de los tambores y las trompetas,

LSANTOS PROPÓSITOS: VOLVER

que fueron inspiración de D. Miguel de Unamuno y de D.José María Castilviejo. Hay momentos en los que laspalabras fotografían los gestos, y otros en los que se hacenletras los trazados y las miradas... No es posible dejar demencionar, y al hacerlo dejarme llevar por el sonido de LaLágrima –La marcha fúnebre para el General O’Donnell–,y entender el porqué no es sólo música.

A la belleza del lugar, al interés turístico de El Canalde Castilla, a la gastronomía que convierte mi paladar en eldeseo de degustar los dulces más singulares, y saludables.Aquellos que en mis amanecidas radiofónicas encontraban,entre las cremas y los hojaldres, la poesía necesaria como elcandeal de cada día, y tienen nombre propio: los Pastelesde Marina, sin olvidarme de saborear los bollos en aceite,

las pastas de almendra, los abisi-nios, las rosquillas de palo, y todoslos manjares salados que noshacen a quienes estamos distancia-dos en kilómetros, desear el reen-cuentro con cada calle, cada vueltade esquina, en aquella plaza, y esemismo lugar en el que la vida nosregaló un tiempo...

Un tiempo tan hermoso queme ha hecho fuerte para desearcontinuar, con todo el sentido y lasensibilidad con la que creer quesigue siendo posible amar, en cadaempezar. Y es mi herencia a la niñade mis ojos, a ellos dos. Porque sonlos tres los que me hacen escuchara mi manera, las palabras del cielo.

Y es el vivir de sus gentes lamayor ofrenda, en ocasiones muyhacia adentro, y puede que inclusomanejando mejor los silencios quelos abrazos, pero cuando se dan nose rompen, y nos queda la tregua deuna excusa tan privada, particular

y de cada cual como el nombre de Dios, y su pasión de hom-bre, llevada al mayor de los extremos y demostrando la gene-rosidad sin limites, dando la vida por todos los otros.

Llamémosle con todos los nombres de todas las muje-res y de todos hombres, en ese deseo desesperado de que semuera muerte y se muera para siempre.

Mis mejores deseos para la ciudad de Los Almirantes«MEDINA DE RIOSECO», paradójicamente tan llena deafectos de los buenos...

En este nuevo año 2013, y en esta época tan especialdel mismo, en la que la vida nos permite el reencuentro connuestra esencia, y adquieren las pequeñas cosas toda lagrandeza del alma, capaz de poner la otra mejilla, desde lasolidaridad y la generosidad de ver en los otros, a ese Jesúsde todos.

Mi abrazo grande, y sí es cierto, también nostálgico ylleno de deseo de seguir en la memoria de quienes soy misgentes, y mi verdad.

ESMERALDA MARUGÁN

CRISTO DE LA DESNUDEZ. Foto José Carlos Lobo García.

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SEMANA SANTA

dadanos sólo somos capacesde hablar de crisis en nues-tras conversaciones y dondeintroducimos vocablos eco-nómicos que hasta hace bienpoco eran patrimonio detécnicos y entendidos. Hoyel egoísmo se nos escapa delas manos por esa misma cri-sis, pero anhelamos la espe-ranza de superarlaintentado saber de todo. Lascircunstancias nos estáncambiando y, en buenamedida, nos están poniendoen nuestro sitio. Pero, cuan-do hablamos de crisis,¿hablamos sólo de econo-mía? No. La respuesta estajante. Tenemos tambiénuna crisis de valores quehace que hoy seamos másinfelices si no tenemos, noya los recursos básicos, sinolas comodidades que untanto artificialmente noshabíamos fabricado. Los

hechos son tozudos y talvez, eso sea lo que nos hagainteriorizar que existe algoen nuestras vidas, que no essólo el dinero, que nos tieneque ayudar a superar losmalos tiempos. Y algunasluces asoman, porque lasolidaridad es mayor, lasayudas y los apoyos másfuertes. Es una accióncomún en la que se hanimplicado muchas cofradíasde Semana Santa y tambiénotros colectivos, para ayu-dar a los más necesitados.Es curioso, la crisis ha servi-do para que cofradías y her-mandades recuperen laesencia de su razón de ser.

La Semana Santa en2013 tiene sentido. ¡Vaya sitiene sentido! Pero hemosde ser nosotros, los cofra-des, los que nos implique-mos definitivamente en ello.Sé que generalizar es injus-

an pasado 2013 años,al menos eso es lo que deci-mos popularmente, y nosdisponemos un año más arecordar la Pasión, Muertey Resurrección de Cristo.Como cristianos nos prepa-ramos para la Pascua, por-que la Cuaresma y laSemana Santa son el tiempode preparación para laPascua, que es la que dasentido a todo. La muerte esuna más, pues estamos aquípara morir desde un puntode vista carnal, pero si algohay verdaderamente impor-tante, es la resurrección quenos llega de la mano de laFe, de la enseñanza delMaestro que entró triunfal alomos de una borriquilla ypocos días después fuemuerto como un ladrón. ElEvangelio nos narra unahistoria de injusticia, comotantas que vivimos en nues-tras vidas. Nos muestra lalección de unos y las cobar-días de otros. Y nos aportala victoria de la vida sobre lamuerte, la puerta abierta ala esperanza, el camino parasaber que el lugar donde nosencontramos es sólo untránsito. ¡Qué gran lecciónde humildad y de renunciala del Padre, al ofrecer a suHijo para mostrar el caminoa la humanidad!, ¡Qué granlección de generosidad en elamor!, contraste con elmundo actual donde lo pri-mero es lo personal y apenasqueda espacio para lahumildad y la generosidad.

Vivimos tiempos muydifíciles, en los que los ciu- VIERNES SANTO. CORRO DE SANTA MARÍA Y CANTO DE LA SALVE. Foto José Carlos Lobo García.

HPOR SEMANA SANTA,UN AÑO MÁS

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que nos revela cómo nues-tros antepasados entendíanque debían conmemorar laPasión. Al cabo de los años,celebraciones que careceríanhoy de sentido se han trans-formado en auténticos autossacramentales capaces deinvitarnos y llevarnos hastala oración, hasta el recogi-miento interior, hasta lameditación sobre lo quesomos, a dónde vamos y cuá-les son los motivos reales denuestras vidas. Han surgidoa la vez movimientos de jóve-nes que se han sumado a lascelebraciones del ayer o quehan creado nuevas cofradíasy hermandades que surgencon fuerza, con vigor, conuna inmensa capacidad detrabajo y con decidida voca-ción de apuntalar las cele-braciones de estos días.

La riqueza de Castilla yLeón en Semana Santa esmuy difícil de igualar.Posiblemente no sea lamejor, pero es la nuestra. Esla herencia recibida de nues-tros mayores, que queremos

conservar para futurasgeneraciones. Nos enorgu-llece ser herederos, tomar eltestigo de las cofradías, delas procesiones, vestir elhábito que un día llevaronnuestros padres o nuestrosabuelos y verlos un día ennuestros hijos. Si un día anosotros nos llevaron de lamano a la procesión, ansia-mos poder hacer lo mismocon nuestros hijos.

La Semana Santa tienemucho de vivencias persona-les, las que cada uno guarda-mos en nuestro corazón y ennuestra memoria y que noshacen tener en la mente imá-genes, sonidos, incluso olo-res y sabores. Se agolpan ennuestra mente enseñanzasdespués vividas, aquel deseode ser mayores para salir enla procesión, la mirada delabuelo o del padre con elgesto adecuado para guardarsilencio… Los años van for-jando nuestras realidades ytal vez por ello nos aferramosmás a lo que mejor sabor nosdeja, a aquellos tiempos enlos que las preocupacioneseran las menos y sentíamosque todo en la vida eraaprender. Y aprendimosjunto a los nuestros, rezamosa nuestras advocaciones ycolocamos en las agendas denuestras vidas estas celebra-ciones en un lugar priorita-rio. Por eso en el calendariono falta la cita con la SemanaSanta. Da igual que sea unpequeño pueblo o la granciudad, porque la procesiónva a estar en la calle. Un añomás, calles y plazas serán elgran templo popular, el lugarpara rezar; y se reza demuchas formas: en silencio,con el sonido de un tambor,

to, pero es una realidad quelos enfrentamientos y laspolémicas internas dominanmuchas de nuestras celebra-ciones, tal vez por el pruritopersonal de un protagonis-mo que contrasta con elanonimato que deben depracticar los cofrades queasumen la Cuaresma comoun tiempo de penitencia.

Hoy, la crisis de laSemana Santa de los años60 del pasado siglo es histo-ria y los jóvenes se hansumado a nuestras celebra-ciones aportando el vigor yla fuerza que los años seencargan de suavizar. Esajuventud es el futuro y tieneque ser capaz de entender elvalor real de nuestras cele-braciones, quedándose conlo mejor de nuestra historiay aportando la necesariarenovación para no morir.

Castilla y León es untesoro, un verdadero tesoropara las celebraciones querecuerdan la Pasión, Muertey Resurrección de Cristo.Sin menospreciar a nadie,porque cada lugar tiene suesencia y sus costumbres,Castilla y León aporta realis-mo, austeridad (un valor a lahora de hablar de celebracio-nes penitenciales) y un granpatrimonio. Patrimonio enimágenes, que se recoge enobras de escultores iniguala-bles capaces de crear su pro-pia escuela, y patrimonio envalores culturales y religio-sos, con textos, músicas ycostumbres que sería unauténtico pecado perder.Hemos recibido un legadode nuestros mayores queestamos obligados a conser-var y transmitir a nuestroshijos. Un legado centenario

CRISTO DE LA PASIÓN.Foto José I. Santamaría Magdaleno.

POR SEMANA SANTA, UNA AÑO MÁS

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luz. Nos satisface exhibirnuestro patrimonio personaly colectivo. Nos gusta llevarel paso, sentir sobre nues-tros hombros el peso de lamadera que es nuestra cruzdel sacrificio. Nos evocanlas notas de las marchas deSemana Santa, de LaLágrima, de Chopín, delDolor de una Madre o deThalberg. Nos impresiona elsonido de una carraca, elredoble profundo del tam-bor o el chillido agudo de lastrompetas.

Llegan los días de lasprocesiones, de las Crucesde Guía que las abren, de lasbanderas y las pendonetasque las identifican, de lasgotas de cera que quedaránen el pavimento de nuestrascalles, del olor a incienso delos pebeteros, de los toquesde corneta o de la armoníade las marchas fúnebres.Vuelve la orden del jefe depaso: «un, dos, tres...¡arri-

ba!», las almendras garrapi-ñadas que se entregan en lamano de un niño que,inquieto, ve la procesióndesde la acera. Se toman lassopas de ajo, se matan judí-os o se degustan las torrijaso las aceitadas. Son las reu-niones de amigos que sólo seven una vez al año, en la lla-mada de la Semana Santa...

El Jueves Santo, cuan-do miremos al cielo, seguroque una luna llena inmensa,gloriosa, la primera de laprimavera, nos iluminará atodos el camino. Es la lunade Nisan, aquella en cuyaplenitud Cristo muere. Perosólo tres días más tarde,resucitará triunfante paranuestro bien. Nos daremoscuenta de que hemos rezadopara preparar la Pascua,para dar paso a la primave-ra, que es la estación de lavida. Y el sol será más lumi-noso, y la vida de los cre-yentes será más plena.Habremos iniciado el cami-no a las romerías y al tiempode la luz. Es el camino delSalvador que nos enseñaronde niños y que otra vez,siempre por estas fechas,vuelve. Y volverá el añopróximo, y al siguiente... Yasí hasta que nos llame elPadre y podamos entoncestomar el hábito de nuestraprocesión en la tierra parapresentarnos con él en elcielo. Será nuestra últimaprocesión. O posiblementela primera, porque es la quenos adentra en la Gloria,junto al Padre.

LUIS JARAMILLO

Director Regional de COPE-radio

el de una matraca, el de unmerlú o el del Pardal. Se rezadescalzo, con las sandalias,con el hachón o el rosario enla mano. Se reza en la fila dela procesión o en la aceracomo espectador, o cargandoel paso. Se reza planchandola túnica o colocando elpañuelo al cuello. Se reza enla intimidad del caperuz, enla celebración colectiva delos oficios o en la procesión.Hacemos profesión públicade nuestra creencia y lohacemos sin complejo, reco-nociendo en nuestras imáge-nes a Dios, que hechohombre es capaz de morirpor nosotros. Y lo hacemoscon lo mejor que tenemos,con nuestra devoción y nues-tro fervor. Sacamos a la callelo mejor de la imaginería cas-tellana, pasos ejemplares quenos narran las secuencias dela Pasión y que no sólo sonun patrimonio de incalcula-ble valor y esencia de laEscuela Castellana, sinotambién expresión de senti-mientos. Miradas imploran-tes de una Madre que vecomo se le escapa la vida delHijo. Mirada de resignacióny de dolor de un Hombresufriente. Rostros marcadospor el odio y la saña quemarcan la sed de venganza.Secuencias emotivas, degran valor, orientadas amover las conciencias y aadmirar al espectador.

No quisiera caer en lostópicos al afirmar que nossentimos orgullosos de lonuestro, de nuestras proce-siones, de nuestras imáge-nes. Nos jactamos de serausteros, aunque en algunospuntos nos dejemos embau-car demasiado por lo anda-

VIRGEN DE LA SOLEDAD.Foto José I. Santamaría Magdaleno.

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Sólo Dios es eterno e inmenso;sólo Él lo llena todo,

siendo solaz para el alma yverdadera alegría del corazón.

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A LA TORREDE

SANTA MARÍA

Torre de Santa María, clavada en el infinitocomo una lanza de piedra,saeta blanca, cuchilloque desgarra –seda y oro-los horizontes dormidos...

Flor y gala de Medina,reina de las torres, cirioen el altar de los camposperennemente encendido.Faro que vas con tu luziluminando caminos,para que lleguen a puertotodos los blancos navíosde las almas viajeraspor un piélago de trigos...

Torre de Santa María, custodia de Arfe en tu estilo,te haces oración, plegaria,columna de incienso, lirio,lágrima petrificadade un dolor a lo divino.

Yo me enamoré de tial verte surgir al filo de un atardecer sin nubesminiada en el infinito y, desde entonces, te llevo–saeta, lanza, cuchillo, oración, lágrima y faro–en el joyel de un suspiro,torre de Santa María, por los siglos de los siglos.

ÁNGEL DE PABLOS CHAPADO

Escritor y Poeta

MEDINA DE RIOSECO

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En segundo lugar, destacaría la belleza de las imá-genes. ¡Cuántos literatos y pregoneros han cantado enpalabras la majestuosidad de estas tallas! Yo simplemen-te contemplaba los rostros de la Virgen, la descomunalanatomía de los Crucificados, la expresividad de lossayones… Muchos turistas nos visitan en estos días bus-cando simplemente el arte escondido de nuestros tem-plos. Se contentan con ser meros observadores externosde una manifestación cultural o folklórica popular.

Yo contemplaba el espíritu de las imágenes, los sen-timientos que transmitían, gracias a la gubia orante delescultor. Las imágenes me ayudaban a entrar en los sen-timientos de Cristo, y de su Madre, la Santísima VirgenMaría, y de los apóstoles… Me sentía observador inter-no de un misterio presente, de unas personas reales, deuna pasión actual. Los pasos pasaban ante mí; y me hací-an contemporáneo de aquellos acontecimientos ocurri-dos en Jerusalén hace casi dos mil años. Y reconozcopúblicamente que al mirar cada una de las tallas y de losrostros… me puse a orar.

No quiero dejar de señalar, en tercer lugar, el climaque percibí en las procesiones. Observé algunas perso-

LA DOLOROSA. Foto José I. Santamaría Magdaleno.

SEMANA SANTAEN MEDINA DE RIOSECO

HHace años, cuando era párroco de Villalba de losAlcores y de La Mudarra, tuve la suerte de poder pre-senciar algunas procesiones de la Semana Santa rioseca-na. No era fácil poder encontrar un poco de tiempo, enmedio de las incrementadas tareas pastorales de estosdías, para poder desplazarme a esta cercana Ciudad delos Almirantes; pero ante la insistencia de numerososfeligreses, ante el despliegue publicitario oficial de aque-llos días y el reclamo de algunos amigos vecinos de estaciudad, pude asistir a algunos actos representativos deesta famosa Semana Santa castellana.

Lo primero que me llamó la atención fue el ambien-te monumental de templos y calles en aquellos días.Había recorrido esos lugares infinidad de veces, pero enaquellos días se transformaban en algo especial. Elmismo espacio de siempre parecía diferente; habitadopor la misma gente de siempre, pero de manera distinta.Medina de Rioseco se había transformado en unaJerusalén castellana. Los hábitos multicolores, las largashileras de cofrades y pasos, el contraste entre las casas yla silueta elevada de las iglesias y de sus torres… ¡Unambiente monumental para un misterio excepcional!

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nas asomadas a los balcones, me fijé en algún cofradeconcreto, vi familias del lugar y de fuera, también algúnenfermo emocionado… y admiré los momentos de silen-cio, la austeridad en el decoro y el acompañamiento de lagente arremolinada junto a sus pasos. Pensaba en bajo:es el pueblo, la mayoría del pueblo cristiano acompa-ñando al Señor por sus calles. ¡Qué hermosa estampa!El pueblo entero… en torno al Señor. Unos contentos,otros tristes; unos jóvenes, otros ancianos; unos cofra-des, otros no… pero todos allí. ¡Qué importante es paraun pueblo congregarse en torno al misterio que celebra-mos en estos días!

Y alguno se preguntará: «Y ¿qué celebramos?».Todo cristiano sabe que la respuesta es muy clara: lapasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Este es elmisterio que se celebra en los tres días santos denomina-dos Triduo Pascual, que es el culmen de la Gran SemanaSanta, que da comienzo con el Domingo en la Pasión delSeñor (o Domingo de Ramos) y finaliza el Domingo deResurrección.

A veces me encuentro con algunos niños y jóvenesescolares que no saben por qué tienen vacaciones enestos días. También me encuentro con intelectuales detodas las ideologías que desconocen e ignoran el por quéde estos días. Incluso algunos de nosotros, católicos detoda la vida, podemos infravalorar el sentido que tienepara un cristiano estas fiestas. Por eso, me vais a permi-tir que, de una forma sencilla y sintética, recuerde atodos tres celebraciones importantes de estos tres díaspara todo el que sea cristiano y quiera vivir en cristiano.

En primer lugar, el Jueves Santo es el pórtico delSanto Triduo Pascual. En este día recordamos a «Cristoentregado», al Cristo que, obediente a la voluntad de DiosPadre, se entrega por nosotros, para salvar a la humani-dad. La celebración vespertina de la Misa «en la Cenadel Señor» recuerda la institución de la eucaristía («Estoes mi Cuerpo… Esta es mi Sangre»), el sacerdocio de losapóstoles («Haced esto en conmemoración mía») y el manda-to de la caridad («Amaos unos a otros como yo os he amado»).La adoración prolongada ante el pan eucarístico, reser-vado para comulgar al día siguiente en lo que llamamos«monumento», es una forma espléndida de meditar en elmisterio de la eucaristía.

En segundo lugar, el Viernes Santo celebra la pasióny muerte de Jesucristo, al «Cristo muerto» en la cruz. Losevangelios relatan que Jesús murió hacia la hora nona,es decir, hacia las tres de la tarde. Por eso, pasado elmediodía el pueblo cristiano se congrega para participaren la Celebración de la Pasión del Señor. Allí se procla-ma el emotivo texto de la pasión, se elevan oraciones portodo el mundo y se adora a la Santa Cruz. El clima oran-te de esta celebración nos ayuda a entrar en el misteriode la muerte en Cruz de Jesucristo que, posteriormenteprolongaremos en las procesiones por las calles.

En tercer lugar, el Domingo de Resurrección quecelebra a Cristo Resucitado. Durante el Sábado Santo todala Iglesia está expectante, orando ante el sepulcro deJesucristo, junto con su Madre María, en espera de suresurrección. En la medianoche, se celebra la Vigilia pas-cual, que, como decía San Agustín es la madre de todaslas vigilias y celebraciones del año litúrgico. Es la cele-bración más importante del año para un cristiano, por-que celebra el triunfo de Jesucristo Resucitado sobre lamuerte y la victoria de Dios sobre el pecado. Es la grannoche sacramental en la que los antiguos cristianos reci-bían y también ahora reciben los sacramentos de la ini-ciación cristiana: bautismo, confirmación y eucaristía.La bendición del Cirio pascual, que simboliza la luz deCristo Resucitado; las lecturas, que resumen la historiade la salvación; la bendición del agua, que será usada enlos bautismos; y la participación en la eucaristía hacen deesta noche una noche santa, que se prolonga durantecincuenta días cantando el Aleluya, la gran aclamaciónpascual del pueblo por la victoria de Cristo Resucitado.

Como ha dicho algún teólogo moderno, el pueblocristiano vive en estos días el gran drama de la historiade la salvación. Las celebraciones litúrgicas celebran elmisterio que posteriormente es prolongado por medio delas procesiones en nuestras calles. Tanto la piedad popu-lar como la liturgia de estos días nos introducen en elmismo misterio de Jesucristo.

¡Animo a todos los riosecanos a vivir y armonizar elesplendor de sus procesiones populares con la belleza delas celebraciones litúrgicas de estos santos días!

AURELIO GARCÍA MACÍAS

Rector del Seminario Metropolitano de Valladolidy Delegado Diocesano de Liturgia

EL SANTO SEPULCRO. Foto José I. Santamaría Magdaleno.

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SEMANA SANTA2013 SEMANA SANTA…

EN FAMILIA

Empiezo a escribir estas líneas al pocode cerrar el tiempo navideño, yasaben, días de transmitir grandesdeseos, de encuentros y reencuentrosfamiliares, días también de consumoexcesivo que, por decirlo de alguna

manera, nos aleja de lo esencial, lo que nos reúne,lo que nos hace ser un poco más tolerantes y más«buena gente», la presencia entre nosotros de Dioshecho hombre y que a través de María se nos da almundo. Que gran momento para los que nos lla-mamos cristianos.

Como también lo es la Pasión, Muerte yResurrección de Nuestro Señor, punto culmen denuestra fe que igualmente vivimos en familia, aun-que mediáticamente no venda tanto el pro-clamarlo.

Quiero detenerme en ello porquesucede en muchos rincones, pueblosy ciudades donde las celebracionescentenarias alrededor de laSemana Santa reviven cada añotradiciones y ritos ancestralesque se guardan celosamente, setransmiten de generación engeneración para, una vez al año,con la llegada de la primera lunade primavera, darles forma.

Y aunque hay quien piensaque son momentos de meditaciónindividual, que también, lo ciertoes que familias enteras se conviertenen actores principales de las muestrasde fe que se repiten en tiempo de pasión.

Y así en cualquier rincón podemos encon-trar, ya al inicio del tiempo de Cuaresma, a todoslos miembros de la familia preparándose para ello.En mayor medida en localidades o ciudades peque-ñas donde prácticamente desde que uno nace seintegra en el seno de una cofradía, por tradiciónfamiliar y el preparar túnicas, hábitos, capirotes ydemás elementos para procesionar juntos se con-vierte igualmente en un rito obligado cada año.

Al final la sensación que se transmite por cadauna de las hermandades con todos y cada uno desus miembros cofrades es el de una gran familia alo largo de estos días Santos.

Cualquier representación requiere de actoresy espectadores. Y no solo se viven intensamente

estas celebraciones desde dentro de las cofradíassino que el fenómeno se da igualmente entre lasfamilias que, también por tradición, forman partede ellas.

Todos preparan sus mejores galas para partici-par desde el Domingo de Ramos hasta el de Pascuade todos los actos litúrgicos y procesiones que tomanliteralmente las calles de pueblos y ciudades. Así, esnormal verlos acudir a la bendición de la palmas yacompañando a Jesús en su entrada triunfal enJerusalem. Acuden con recogimiento a práctica-mente todas las procesiones y al llegar el JuevesSanto cumplen la tradición cursando visita alSantisimo hasta en siete iglesias… y mas procesio-nes, y así hasta la llegada del Domingo de Gloria.

No es ajena la Ciudad de los Almirantesa estas apreciaciones aunque aquí son

más los actores. Rara es la familia queno forma parte de alguna de las

diceséis cofradías que enriquecencon sus actos a unas celebracio-nes renombradas internacional-mente. Y es que dos de cadatres riosecanos pertenece aalguna de las hermandades. Ycomo una gran familia con elprimer toque del Pardal y losTapetanes los riosecanos elevan

su espíritu y al unísono se dispo-nen a vivir y sentir los días veni-

deros. El irlandés padre Peyton, cono-

cido como «el Padre del Rosario» hizopopular aquello de «Familia que reza

unida, permanece unida». Y si nos fijamos unpoco la Semana Santa no es una celebración indi-vidual sino familiar al igual que sucede en tiemponavideño. Porque además también la SemanaSanta tiene ese componente «boomerang» quehace que muchos vuelvan a casa para unirse a lossuyos, familia y cofradía, para conmemorar laPasion, Muerte y Resurrección de Jesús.

Hoy mas que nunca se hace necesario, pues,detenernos en esta idea. ¿Navidad en familia?… sí.Semana Santa… también.

JUAN CARLOS PÉREZ DE LA FUENTE

Periodista

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

Las palabras se quedan cortascuando afloran las emociones.Sólo así puede explicarse la tur-bación interior que experimentaquien se acerca a la Semana dePasión de Medina de Rioseco.

Cómo explicar que en una villa de 5.000 habi-tantes, en la que impera la diversidad de cre-dos y convicciones, 3.500 formen parte de suscofradías. El sentimiento religioso que presi-de esta manifestación cristiana no es suficien-te para desentrañar el fervor popular quedespierta en los riosecanos su Semana Santa.Como apuntara en una ocasión AurelioGarcía, rector del Seminario Diocesano, elpueblo ha sabido conjugar la celebración dela liturgia típica con las formas de devociónpopular propias. En aquella alocución,García reflexionaba acerca de que la ciudada-nía expresa la fe de una determinada manera.«Nosotros, en Castilla, con nuestro genio par-ticular, diferente a como lo hacen en Sevilla».Pero, con permiso del rector, las vivencias enRioseco trascienden las fronteras de lo caste-llano, dotando a este pueblo de un perfil quesobrepasa esas señas de identidad tan exten-didas en el conjunto de la Comunidad.

Es una tarea extraordinariamente arduaconseguir aunar tantas percepciones sobrela identidad, complejas y contrapuestas, enfavor de un plan común, del logro memora-ble que se ha instalado en Medina deRioseco. En este emplazamiento histórico,el fervor semanasantero ha sido capaz deconcitar la sensibilidad de la fe con la ausen-cia de creencias, que han sido transfigura-das en un hermanamiento trascendente,insólito e impresionante. Los riosecanosmuestran su orgullo por el patrimonio artís-tico que preside la estética colosal de estamanifestación religiosa. Poco importa sucondición: «Lo nuestro es lo que defende-mos, porque es lo mejor», me espetó unvecino de la villa, y así nos encontramos conque el orgullo por lo propio ha conducido aesa convergencia de sensibilidades tan dife-rentes. Las personas se han despojado dealgunos de sus prejuicios, y transidos, fer-

vientes o descreídos acomodan sus concien-cias a la exaltación de la belleza, los recuer-dos de la infancia y la herencia ancestral.Durante la celebración de esos días declara-dos santos, el recogimiento convive con elbrío irrefrenable que exhiben los más jóve-nes. Pero la legitimidad del carácter seatempera ante la brillantez de la imagineríay la liturgia. El discurso de las procesionesriosecanas a través de sus calles cargadas dehistoria recrea una rica armonía escultural acosta de sus tallas perfiladas sobre las facha-das antiguas. La iluminación deliberada setorna involuntaria cuando se compone eldesfile. En una suerte de claroscuros capri-chosos, el tránsito y las paradas procesiona-les muestran una riqueza de cromatismosque recuerda al tenebrismo de Caravaggio oel de José de Ribera. Estos adornos lumíni-

LA CONJURA DEUN PUEBLO

CRISTO DE LA FLAGELACIÓN.Foto José Carlos Lobo García.

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cos insospechados visten de una magiaornamental a figuras ya de por sí hermosas,creando una plasticidad asombrosa en elconjunto procesional.

Aun siendo ya suficientemente apabu-llante contemplar el discurso de los gruposescultóricos constreñidos entre sus estre-chas travesías, la estética visual se muestra,cuando debe, acompañada por la universali-dad de la música. Nos encontramos con quelo tangible de las tallas irradia sensacionesque nada tienen que vercon lo evanescente de lossonidos de un grupo deinstrumentos acompa-ñándolas. La imagineríase muestra como algofísico, permanente yrepetible, mientras quelas notas de una partitu-ra nunca suenan delmismo modo y se esfu-man en un suspiro. Estaparticularidad hace quecada Semana Santa seadiferente también en esteaspecto. La música apor-ta más rotundidad a laexpresión religiosa queexudan los grupos escul-tóricos, siempre y cuan-do se logre administrarcuándo y en qué instan-tes debe ser motivo deexhibición. Al dramatis-mo de la Pasión yMuerte del Hijo de Dios,se añade el calor de lasnotas que han sido abi-garradas hábilmente, para no generar unadorno postizo y extemporáneo. Este aspec-to constituye asimismo otro de los aciertosen las procesiones de la Semana Santa rio-secana, pues se ha logrado un ‘aggiorna-mento’ musical moderno y moderado,aunque siempre al servicio de lo que es ver-daderamente esencial. No podría entender-se que esta celebrada Semana porte el títulode Interés Turístico Internacional sin la con-vergencia de todos estos principios. Peroesta celebración religiosa y popular no sería

redonda sin la existencia imponente de lostemplos de Santa María, Santiago Apóstol oel de Santa Cruz, ni la de artistas comoJuan de Juni, quienes a golpe de gubiadejaron su sello sobre la impactante imagi-nería que se muestra durante los desfiles.

No puedo negar el embeleso que experi-menté la primera vez que accedí a la Capillade los Benavente. La exuberancia de eseespacio me dejó absorta. Envuelta ante tantabelleza, cualquiera puede entender la paráli-

sis que provoca la fuer-za que emana desemejante soberbiaartística. El magnetismoque atrae a quien se pos-tre en aquella oquedadde Santa María resumeel porqué de la notorie-dad y universalidad deMedina de Rioseco.Esta conjura, fraguada alo largo de los siglos,atrae a creyentes o aquienes sólo profesan elcrecimiento de su rique-za interior.

El Canal de Castillate arrastra irremisible-mente hacia la Ciudadde los Almirantes.Durante la celebraciónde la Semana Santa, ofuera de ella, la MuyNoble y Leal Medina deRioseco ostenta ese títu-lo porque sus gentescontinúan siendo acree-doras de él. Acercarse a

esta villa es reencontrarse con la esencia deuno mismo, con la espiritualidad propia ocompartida, entendida desde una infranque-able barrera interior que no entiende de len-guas, percepciones o sentimientos inducidos.El envoltorio con el que somos reconocidosno debe ser una excusa para eludir el escruti-nio al que todos nos sometemos alguna vez.Poco importa quién seas o tu procedencia.Sólo ven, y verás.

MAR DOMÍNGUEZ

LA CONJURA DE UN PUEBLO

NAZARENO DE LA SANTA CRUZ.Foto José Carlos Lobo García.

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un diálogo impertinente. Podemos decir que han tenidouna convivencia de encuentros y desencuentros. ADAMSMITH en su célebre obra «Investigación acerca de la natu-raleza y causas de la riqueza de las naciones» con la que nacela Ciencia Económica, nos dice que las profesiones dedica-das al arte, la cultura y el esparcimiento no contribuíana la riqueza de las naciones ya que eran exponentes deactividades no productivas. Su influencia en el pensa-miento económico ha sido considerable.

No obstante, su conexión en la actualidad ha adqui-rido importancia como lo demuestran las publicacionesque salen al mercado y las investigaciones que se realizan.De todos modos, hemos de admitir que la doctrina econó-mica presenta serias dificultades para su aplicación en estecampo de análisis que, además, tiene aspectos multidisci-plinares. Preguntas como: ¿Cuál es la rentabilidad de lasinversiones que se realizan? o ¿Qué rentas se generan?Conducen a respuestas, a veces, con aspectos insalvablesy difíciles de asumir para el ser humano, que se ve inmer-so en manifestaciones colectivas cuyos signos de identidady significado van mucho más allá de lo tangible.

Medina de Rioseco, la Ciudad de los Almirantes deCastilla, cabecera de la comarca de la Tierra de Camposvallisoletana, que fue señorío de la familia de losEnríquez, Almirantes de Castilla y miembros de la altanobleza del Reino, o la India Chica. Ciudad de trazadomedieval con un legado histórico trascendente. Situada enel trayecto por donde Castilla buscaba el mar. Sus calles,sus plazas, sus monumentos, sus gentes; todo nos habla,nos sitúa y nos conduce a un pasado importante. Susgrandiosos templos: Santa María de Mediavilla, donde seubica la capilla de los Benavente con retablo de Juan deJuni y el retablo mayor renacentista que se debe a las fir-mas de Juan Becerra, Juan de Juni y Esteban Jordán, ola Iglesia de Santiago Apóstol, donde causa asombro con-templar el impresionante retablo mayor que fue diseñadopor Joaquín de Churriguera. Cuatro templos mayores,contando la Iglesia de Santa Cruz y la de San Francisco.No podemos dejar de mencionar sus conventos y las trespuertas que se conservan de las ocho con que contaba sumuralla medieval: la Puerta de Ajújar, la Puerta deZamora y la Puerta de San Sebastián. Tampoco podemosdejar de citar la Fábrica de Harinas San Antonio, hoymuseo de aquel pasado de molienda de trigo.

El siglo XVI fue de esplendor ya que sus ferias eranlugar de transacciones mercantiles que originaban cam-

EL VALOR DE LA CULTURA Y LAS TRADICIONES:SEMANA SANTA ENMEDINA DE RIOSECO

CRISTO ATADO A LA COLUMNA.Foto Fernando Fradejas.

l campo de conocimiento en el que desa-rrollo mi actividad profesional es laEconomía por lo que no puede resultarextraño que las líneas que siguen a conti-nuación, en algunos momentos, tengan unsesgo hacia lo económico.

Las generaciones y los individuos que las integranviven en sociedad y se interrelacionan entre ellos en lo queconstituye sus formas de convivencia. En los comporta-mientos de los seres humanos la tradición desempeña unlugar destacado. Entendemos por tradición todo aquelloque tiene vigencia y se recibe de las generaciones anterio-res. El conjunto de los patrones culturales recogidos, gene-ralmente, se modifica o se adapta a los tiempos nuevos, yasí, constituye, en cierto sentido, su forma de perdurar.

La tradición es parte de la cultura que configura laforma de ser y determina la individualidad de los pue-blos. El patrimonio cultural heredado incluye elementosfísicos y tangibles como pueden ser los edificios, museos,parques, obras de arte,… Pero también están los intan-gibles como son las tradiciones. Así pues, forman partede la cultura: las creencias, las ideas y las manifestacionesde los sentimientos internos.

Economía y cultura se han relacionado de forma tar-día. Valorar la belleza y las emociones, en general, pare-ce que contamina de mercantilismo las sensacionesprofundas del ser humano y es entrar, cuando menos, en

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bios, giros y asientos contables. Las relaciones financie-ras con plazas importantes de Flandes o la ciudad deGénova manifiestan que, en aquellos tiempos, la globali-zación era un hecho. El volumen de los intercambioscomerciales determina la importancia económica de laciudad. Así, artistas, constructores, mercaderes (comoÁlvaro de Benavente que manda construir la Capilla delos Benavente en el año 1544) y banqueros que transita-ban por sus calles son expresión del alto nivel económi-co que existía. Las dimensiones que alcanzó el elevadotráfico mercantil motivaron que autores, como TOMÁSDE MERCADO, trataran de buscar excepciones a laprohibición general y aceptaran, para determinadoscasos, el interés del dinero. Sin duda, consideraronimprescindible introducir la legitimidad del rédito parano paralizar el elevado número de operaciones mercan-tiles que tenían lugar en las ferias de Castilla.

La Semana Santa en Medina de Rioseco es una tra-dición mantenida desde el siglo XVI. Acontecimientoreligioso, cultural, artístico y turístico que fue declarado,en 1985, Fiesta de Interés Turístico Nacional y, en 2009,Fiesta de Interés Turístico Internacional. Sus poderosos gre-mios, sus hermandades y sus cofradías han originadouna manifestación de tal belleza que es imposible descri-birla. Que osadía podría parecer el valorarla económica-mente y tratar de determinar conceptos y variableseconómicas como: precios, rentas, ganancias, inversio-nes y costes de reposición, entre otras. Es algo así comooír y sentir cuestiones contradictorias. No obstante, esun reto para la Ciencia Económica valorar lo inmaterial.

De los momentos inenarrables, ya que han de servividos, está el Viernes Santo cuando en el Corro de

Santa María salen los magníficos conjuntos procesiona-les de la Crucifixión y el Descendimiento que para todos, ytambién para siempre, son denominados como Longinos yLa Escalera. Dos pasos de pura escenografía barroca.Parece que no pueden dejar su templo y suena la marchafúnebre del General O’Donell conocida como LaLágrima. Escucharemos música de siglos que perdura: elPardal y los Tapetanes. Por su calle principal, la RuaMayor, porticada con soportales de madera y adobe,veremos la expresión profunda de la Pasión. Quinientosaños nos contemplan. Son los mismos rituales: repletosde emociones y recios como la tierra castellana.

Con seguridad participar en el disfrute de los bienesculturales permite combinar el deleite personal y com-partido. Se mezclan, así, los sentimientos íntimos y par-ticulares de cada uno con el clima colectivo que se creaal participar en el gozo de lo que es una seña de identi-dad no solo individual sino como grupo.

Las actuaciones en cultura y patrimonio histórico estáncada vez más consideradas como agentes del desarrolloeconómico y reclamo de las corrientes turísticas, siendoobjeto de análisis como fuente de riqueza y atracción denuevas actividades y residentes. Forman parte de la basede lo que se ha denominado desarrollo endógeno, o anivel más desagregado, desarrollo local. Además, elpatrimonio histórico está localizado por lo que es difícil sumovilidad, lo que origina ponerlo en relación con lasdemandas turísticas.

Entre los principales efectos de las medidas sobre elpatrimonio histórico y las industrias culturales en eldesarrollo económico, debemos citar: efectos económicosdirectos, principalmente sobre la creación de empleosinmediatos; efectos económicos inducidos, en un número ele-vado de actividades y empleos con alto componente tec-nológico y de innovación; efectos de atracción de actividadeseconómicas y de residentes. Los ciudadanos son cada vezmás conscientes de lo que representan las imágenes desus lugares, conocido como el marketing de los lugares, nosolo en lo que significa para la habitabilidad sino comoproyección exterior que sirve de origen para la atracciónde actividades productivas con repercusiones sobre elcrecimiento económico.

Merece la pena, y es una obligación, que cada gene-ración conserve el patrimonio histórico cultural, tangible eintangible, que recibe para poder transmitir a las veni-deras un legado que vive en el tiempo. Si alguien pudie-ra volver a estas tierras de Medina de Rioseco, alcontemplarlas observaría que muchas cosas han cambia-do pero otras perduran. Podría decir: no me he equivo-cado y estoy en casa.

JOSEFA EUGENIA FERNÁNDEZ ARUFE

Catedrática de Economía AplicadaProfesora Emérita de la Universidad de Valladolid

CRISTO RESUCITADO.Foto Fernando Fradejas.

EL VALOR DE LA CULTURA Y LAS TRADICIONES:SEMANA SANTA EN MEDINA DE RIOSECO

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

Pocas emociones tan intensas he tenido la opor-tunidad de experimentar a lo largo de mi vidacomo la de ser pregonero de la Semana Santade Rioseco. Los ojos y las manos de los riose-canos, la palabra resonando en las piedras y las

maderas de Santa María de Mediavilla, las varas, el par-dal, los tapetanes, los amigos… La imagen de la Dolorosa,con sus siete cuchillos lacerantes, acompañando la vozquebrada del pregonero… Sin duda la Semana Santa deRioseco tiene algo; y lo tiene desde este pregón primero,que se vive en la ciudad con toda la fuerza, con toda laintensidad, con toda la verdad de un pórtico que abrepaso hacia un espacio y un lugar que se han quedado mila-grosamente detenidos en el corazón del tiempo.

Decir que la Semana Santa de Rioseco es una semanade Pasión de Interés Turístico Internacional es poco decir.Para saber lo que significa de verdad esta fiesta hay quevivirla desde su interior, desde los ojos y las manos de laspersonas, desde la fuerza telúrica de los pasos que pisan latierra y el temblor sutil de los sentimientos que sobrevue-lan iglesias, calles, corros y plazas de la ciudad de los almi-rantes. No digamos ya si uno tiene el privilegio, inédito yespontáneo, de que le cedan el derecho de cargar con laMadre de Dios para regresar con ella, calle abajo desdeSanta María, a su casa de Santiago. Sentir en la propiacarne el peso de la historia, del arte, de la tradición de unpueblo que ha sabido seguir siendo fiel a sí mismo a pesarde los mil avatares vividos a lo largo de los siglos… «Era lamisma procesión de antaño. / El anciano cree ver la que viode niño, / y el niño, aún sin darse de ello cuenta, / esperaver la misma cuando llegue a anciano». Uno no se cansanunca de seguir los pasos de don Miguel de Unamuno portierras de Castilla: «Y no ha pasado más; / ni monarquía, nidictadura, ni revuelta, ni república».

Decir que la Semana Santa de Rioseco es una sema-na de Pasión de Interés Turístico Internacional es decirmuy poco. Sin duda el sonido ácido del pardal es el másviejo y legendario del mundo. Sin duda los compases de‘La lágrima’, a los que se acomodan la Vara Mayor y lasvaras de las diferentes hermandades, portadas por sus

mayordomos, son los más tristes y luctuosos de la historia.Sin duda la Borriquilla, los cristos de la Clemencia, delAmparo, de la Pasión, de los Faroles, de la Paz o de losAfligidos; Jesús Nazareno de Santiago o de Santa Cruz;la Dolorosa, la Soledad o la Virgen de la Alegría; laOración del Huerto, la Flagelación, el Ceomico, Pilatos, laVerónica, Longinos, la Escalera, la Piedad, el SantoSepulcro y el Bailarín forman la santa compañía de teatroque con más autenticidad, con más corazón, con más emo-ción serena y arraigada representa cada año, llegando aestas fechas, la historia más repetida de todos los tiempos:la de la pasión, muerte y resurrección de Jesús deNazaret. Sin duda el redoble de los tapetanes, seco comoun terrón de adobe forjado en el corazón de Tierra deCampos, es el sonido del mundo que con mayor fidelidadnos transporta a ese momento en el que el cielo y la tierra,el alfa y la omega, el ayer, el ahora y el mañana se fundenen la ancestral conmemoración de los cristianos.

Decir que la Semana Santa de Rioseco es una semanade Pasión de Interés Turístico Internacional es no decirprácticamente nada. Porque Rioseco está fundado comociudad bien compacta, y cuando llega la Semana Santa seviste con aromas de hace dos mil años, y vuelve a conver-tirse, como ocurre siempre por estas fechas, en un catecis-mo vivo. Desde las escenas de la Creación del Mundo y delJuicio Final de la Capilla de los Benavente hasta la peque-ña historia dramática que encierra cada uno de los pasosque salen en la procesión del Mandato y la Pasión, o en ladel Dolor y la Soledad. Desde las grandes sedes de pro-porciones catedralicias de Santa María y Santiago hastalos humildes caminos de sirga del Canal de Castilla que seadentran en el corazón de Tierra de Campos… DesdeRioseco hasta Jerusalén. Y mucho más allá.

CARLOS AGANZO

Director de El Norte de Castilla

VIRGEN DOLOROSA. Foto Fernando Fradejas.

RIOSECO OEL CORAZÓN DEL TIEMPO

MARTES SANTO. PROCESIÓN DE LA CLEMENCIA.Foto David Carpintero.

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SEMANA SANTA2013 MI SEMANA SANTA

nos contaban de los ingleses); y que después sellamó y sigue llamándose «fin de semana». Eldescanso semanal se hacía solamente la tardede los jueves, de manera que las vacaciones deSemana Santa suponían un gran alivio despuésde un casi siempre prolongado y duro trimes-tre escolar.

Pero la singularidad de estas vacaciones, elverdadero acontecimiento provenía para losvallisoletanos, y sobre todo para aquellos niñosperplejos de entonces, de la implicación popu-lar en las celebraciones religiosas, que eranfundamentalmente tres: los oficios religiosos;

las visitas del Jueves Santoa las siete iglesias; y lasprocesiones, y de maneramuy especial la general dela Pasión de Cristo.

Será difícil que olvidelo que representaba paramí y para mis amigos asistira la procesión del ViernesSanto, aunque naturalmen-te aquellas lejanas emocio-nes de entonces no son yafácilmente repetibles. Unbuen número de vecinos dela Acera de Recoletos y delas casas de ferroviariospróximas a la estación,donde yo vivía, acercabanlas sillas y bancos de suscasas a la Plaza de Zorrilla,a la calle Santiago y a lacalle Miguel Iscar paracontemplar «cómodamen-te» el transcurrir de la ini-gualable procesión. Y parapoder hacerlo –como des-pués, durante muchosaños, les sucediera a losno menos fieles aficiona-dos a la SEMINCI–, paraconseguir un «buen sitio»debían salir de sus casas yocupar las aceras alcomenzar el día (esto es,casi al comenzar la no-che), y naturalmente ha-cer guardia a lo largo detoda esa noche y duranteel resto del día. Resultainolvidable aquella estam-pa de sillas y bancos corri-dos al borde las aceras, en

L a Semana Santa era todo unacontecimiento para los niños ypreadolescentes de finales de losaños cincuenta y primeros de lossesenta del pasado siglo. Es ver-dad que no había entonces

muchos otros eventos para casi nadie, peroeste lo era, sin duda, y por diferentes motivos.

Los niños de entonces teníamos colegiotodos los días de la semana. No había lo que enaquella época se conocía como «semana ingle-sa» (que era, por cierto, de lo poco bueno que

VIRGEN DOLOROSA. Foto Fernando Fradejas.

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

varias filas, por riguroso orden de llegada a lolargo de la noche anterior.

En mi casa no hacíamos nada de eso, por-que en mi casa no solíamos hacer ninguna«estridencia». Y esta de pasarse toda la nocheen la calle guardando el preciado sitio, con-quistado a costa de soportar durante tantashoras una temperatura casi siempre fríacuando no lluviosa y por demás desapacible,desde luego que era una esforzada estriden-cia. Sobre todo teniendo en cuenta que sien-do yo el único hijo de la familia, había muypocas posibilidades de turnarse en la vigilan-cia del sitio y las pertenencias, lo que hacíaagotador repartirse casi las veinticuatrohoras del día entre los tres escasos miembrosintegrantes de mi familia más próxima.

Pero la suerte para mí era que, por miedad y mi estatura de entonces, no tenía pro-blemas para, sin necesidad de haber perma-necido en vela las largas horas precedentes,conseguía un sitio en la primera fila. Porquea los niños nos dejaban amablemente (carita-tivamente, podríamos decir, a tono con elacontecimiento) situarnos adelante. Así quemi única preocupación –reflejo de un sentirmuy propio y perenne en mí, propenso asufrir por todo lo malo que me pueda llegar asuceder, aunque no sepa a ciencia cierta queme haya de pasar– era que con el transcursode los años no podría disfrutar de semejanteprivilegio. Por eso, mi mayor deseo entoncesera, a la manera del protagonista de «El tam-bor de hojalata» (la conocida novela deGünter Grass), no crecer nunca lo suficientepara que, en los años sucesivos me permitie-ran, sin necesidad de pasar toda la noche envela, conseguir un sitio privilegiado para verla procesión del Viernes Santo.

Las procesiones, y en general la Semanade Santa de Valladolid, siguen siendo para míun acontecimiento admirable por varias razo-nes: por la implicación de los numerososcofrades, la inigualable calidad de las iglesiasy especialmente de las tallas que ocupandurante esos días nuestras calles. Así que nopierdo por ello ocasión de recomendársela amis amigos y conocidos. Como lo hago tam-bién con la espléndida y ferviente SemanaSanta riosecana, a la que asisto puntual y rei-teradamente gracias a quien me la dio a cono-cer, su alcalde y entrañable amigo eincansable embajador de su querida Ciudadde los Almirantes, Artemio Domínguez. Allí

y con él dedico mi tiempo en la búsquedaproustiana de las lejanas vivencias de mipasado; en repensar o, mejor, en «resentir»mi religiosidad; y en volver a plantearme elindeleble papel que ha cumplido y cumple enmí la religión, o tal vez mejor, mi religión.

Porque el mensaje evangélico me siguepareciendo maravilloso y único. La grandezaética de sus historias, sus parábolas o sus pro-puestas, tanto en el plano individual como enel social, no tienen parangón para mí. Y cons-cientemente ahora, e intuitiva y taimadamen-te entonces, me parece un deber reconocerlo.Como me lo parece significar que, en mi opi-nión, ni las autoridades eclesiásticas ni susmás allegados fieles le dan siempre a esadimensión universal e irrefutable toda ladifusión y el valor que merecen. Porque noconozco mejor propuesta ética en su formu-lación y contenido que la de «amarás al pró-jimo como a tí mismo».

ALEJANDRO MENÉNDEZ MORENO

Catedrático de Derecho Financiero y TributarioUniversidad de Valladolid

CRISTO ATADO A LA COLUMNA. Foto Fernando Fradejas.

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El que hace caso omiso delas alabanzas y de los

vituperios se mantiene enuna gran serenidad de

corazón.

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JAVIER BURRIEZA SÁNCHEZ«EL HISTORIADOR-COFRADE»NUESTRO PREGONERO 2013

Javier Burrieza (Valladolid, 1974) es historiador, doctor en esta disciplina y profesor-investigador en laUniversidad de Valladolid. Nacido en una familia de cofrades por generaciones, discípulo del maestro de his-toriadores Teófanes Egido López, director éste de su tesis doctoral sobre un detallado y pormenorizado estu-

dio sobre la Compañía de Jesús en el ámbito geográfico de Valladolid en la Edad Moderna. Desde entonces, escontemplado como prestigioso especialista de la trayectoria de esta orden religiosa. Colaborador de la «RevistaIlustrada de la Semana Santa de Medina de Rioseco», donde inició una serie de artículos sobre «Iconografía yTeología en la Pasión de Castilla». Habitual partícipe de los medios de comunicación, en El Norte de Castilla –deca-no de la prensa española–, en las revistas «Iglesia en Valladolid» o «Ecclesia», así como en las ondas de la COPE,con numerosos programas sobre la Semana Santa castellana. Precisamente, Burrieza es autor de interesantes yvariadas monografías sobre este tema como «Cinco Siglos de Cofradías y Procesiones. Historia de la Semana Santaen Valladolid» (2004) o «La Semana Santa en Castilla y León» (2011).

Su producción histórico-literaria es profusa y abundante. Autor de dieciocho libros, coautor de otros tantos, destacando «Jesuitas en Indias: entre la utopía y el con-flicto» (2007), «Virgen de San Lorenzo, patrona de la ciudad» (2007), o «Guía misteriosa de Valladolid» (2009), un auténtico best-seller. Javier Burrieza ya fue pregonerode Semana Santa en Alaejos, Nava del Rey, la Asociación Valladolid-Cofrade, la Cofradía de Jesús de la capital o Tordesillas. De igual manera, ha actuado de comisario ennueve exposiciones, siendo la más reciente la que se llevó a efecto en 2009 en la sala de exposiciones del Teatro Calderón, con motivo de la Coronación Canónica de laVirgen de las Angustias. Fue premio de Investigación «Provincia de Valladolid» en 2005, nombrado académico correspondiente de la Real Academia de Doctores de España(RADE), en la sección de Teología. Nuestro pregonero, gran amante de Medina de Rioseco, donde le gusta pasear y recorrer sus calles, atento a su Semana Santa desdeque la contempló por vez primera en 1986. Es el escritor castellano que ama a su tierra, que pone su labor intelectual al conocimiento de nuestras procesiones, que guiadopor sus investigaciones y lecturas, nos va mostrando y descubriendo las sempiternas excelencias, los nuevos y recónditos saberes y emociones que van aflorando en su tareaescudriñadora. Este año el pregonero de Medina de Rioseco de Semana Santa es un historiador-cofrade.

– Ante todo Sr. Burrieza, aunque sea la pregunta tópica, mi sincera enhorabuena por su nombramiento como pregonero de2013. Estoy seguro que será para usted todo un honor tal nominación y un lujo contar los riosecanos con su Pregón ¿Cuáles van aser las «claves de bóveda», sobre qué andamiaje va a sustentar su disertación?

Para mí es un gran honor pregonar la Semana Santa de Medina de Rioseco. Siempre me ha fascinado la Ciudad de los Almirantes,la conozco desde muy pequeño porque tengo lazos familiares en la misma. La primera vez que contemplé una de sus procesiones fueen 1986, con doce años. Mi pregón no va a ser una lección de historia, aunque esta disciplina me sirva para cantar lo grande que esesta Semana Santa y su tradición, dentro de una ciudad imprescindible en Castilla. Un pregón debe entusiasmar a los que conocen larealidad de la que se habla y así amarla más, pero también para animar a los que la ignoran a que vengan a descubrirla. Estoy volcan-do muchos de mis sentimientos en esta pieza, cargada de afecto.

– ¿Qué o cuál es, según su criterio, el hecho diferencial, la «marca Rioseco» de su Semana Santa?Pues es muy singular. Rioseco es un escenario único, en el que se vive y se habla de Semana Santa permanentemente, donde la

familia vuelve para encontrarse en ella en ese momento. Incluso en tiempos de decadencia, las procesiones han gozado de una nota-bilísima importancia, saliendo a las calles en circunstancias hostiles. Eso indica que la Semana Santa se lleva muy dentro por gene-raciones. Hemos hablado del lugar y de las personas y todavía no hemos mencionado su magnífica imaginería. Unos pasos que nopueden extrañar cuando se conoce Rioseco y sus iglesias.

– ¿Qué es lo que más le gusta o atrae, y en contrapartida lo que menos le agrada o comparte de la Semana Santa Riosecana y susprocesiones?

Suelo tener una visión positiva de las tradiciones y pensar que todos los que participan en las mismas lo hacen de manera sin-cera. Esta no es una representación teatral, sino una manera de vivir la fe dentro de una cofradía, de una familia y en confrater-nización. Me interesa mucho cómo se enseña a amar y a jugar a la Semana Santa desde pequeño. También encuentro encantadorcómo se manifiestan los sentimientos en medio de las procesiones. El corazón de los riosecanos no puede más y estalla.

– Usted que es profesor y doctor en Historia y que escribe desde hace siete años en nuestra Revista, ¿qué aspecto o motivo icono-gráfico definitorio destacaría como singular de la Pasión Riosecana?

Ya sabe que el pregonero tiene la potestad de elegir la imagen que presidirá el acto y la verdad es que me ha costado muchísimohacerlo. Tenía muchas posibilidades. Mis artículos en vuestra-nuestra Revista (única en la realidad de la Semana Santa) están tratan-do sobre la relación entre la imagen y la teología popular y académica que la sustenta. Algunas de estas tallas han participado en expo-siciones dirigidas por mí, con una experiencia muy personal hacia ellas. Me ocurrió con la Dolorosa. Al final he elegido ese bellísimoCristo atado a la columna que sigue el modelo de Gregorio Fernández, sólo, sin sayones, atormentado, sencillo, pequeñito, «ceomico».

– El triángulo que dibujan las esplendorosas Semanas Santas vallisoletana, zamorana y riosecana, ¿habría que potenciarlasaún más desde las instituciones políticas y desde la propia Iglesia Católica?

Todo es poco. Vivimos en un espacio único de Pasión dentro de nuestra provincia, con Valladolid, Rioseco, Medina,Tordesillas, Peñafiel, Villavicencio, Nava del Rey, Alaejos, con un reconocimiento y prestigio excepcional. A todo ello se une todolo que nos rodea en Castilla y León. El año pasado, en vuestro interesante ciclo de conferencias, indiqué que valdría la pena decla-rar toda Castilla y León como tierra de interés turístico internacional (también espiritual) en Semana Santa. Es bueno, que no sólonos miremos al ombligo de nuestra ciudad sino que valoremos todo lo que se encuentra alrededor, incluso en los pueblos máspequeños. La pena, si me permite esta broma, es que todas las Semana Santas sean al mismo tiempo y nosotros no tengamos enese momento el don de la ubicuidad.

– Está, en su opinión, ¿suficientemente estudiada, analizada y publicada la historia e intrahistoria de nuestra Semana Mayoro quedan aún muchas averiguaciones por hacer?

Bueno, no conozco ningún tema de la historia donde hayamos concluido todos los análisis. La de Rioseco cuenta con los estudios yartículos de los clásicos –las magníficas publicaciones de los años veinte–, el entusiasmo de aquellos maestros que fueron Juan Agapito yRevilla y Esteban García Chico y las revisiones y profundizaciones que se han hecho en los últimos años, desde la escuela que encabezóen la Universidad de Valladolid Juan José Martín González y del que es heredero desde la historia del arte mi compañero Ramón Pérezde Castro. El anuario-revista también es una plataforma para este estudio. Es magnífica, en Valladolid por ejemplo no la tenemos.

JAVIER BURRIEZA.

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– En todas las procesiones en general, ¿conviene ser escrupulosos en la tradición –«todo lo que no estradición es plagio según Eugenio D´Ors– huyendo de toda innovación al más puro estilo misoneísta, o espreciso en algún aspecto concreto borrar esa pátina obsoleta y anacrónica que pudieran tener?

La definición de la tradición es muy complicada ¿Quién es el guardián purista que tiene que velar porcada gesto? Naturalmente, se debe mantener la «marca Rioseco», pero siempre han existido incorporacio-nes foráneas en los comportamientos de todas las Semana Santas. Recordemos que las procesiones sonexpresión del pueblo frente a una liturgia oficial que no se comprendía. Hoy podemos relacionar liturgia yprocesión pues son dos etapas de una vivencia espiritual en torno a los misterios de la fe. Por eso, sin dejarde velar por nuestro «modo de proceder», cada tiempo irá sumando comportamientos.

– ¿En los orígenes de la Semana de Pasión, el sentido prístino de las Cofradías era puramente gremial y sólo las Penitencialesdisponían del contenido estrictamente procesional?

Si hoy las cofradías están muy dentro de los comportamientos de los riosecanos, antes eran indispensables para las segurida-des que eran menester. Seguridad para el desarrollo del trabajo, ante las constantes crisis de subsistencias, ante la preocupaciónpor la salvación del alma… todo ello en una sociedad sacralizada. La procesión era un acto esencial pero no el único, a lo largo deuna vida que se desarrollaba todos los días del año. De ahí, la presencia de hospitales, de unas «estrategias» asistenciales e inclu-so de corrales de comedias, un todo dentro del vivir gozoso y doloroso de las mujeres y hombres de los siglos XVI, XVII o XVIII.

– ¿A qué momento, instante o situación de la Semana Santa Riosecana le sacaría fotocopia para enmarcar y por qué razón o razones?Es necesario insistir entre lo más espectacular y conocido, siempre espléndido, como la salida de los pasos grandes –esas esce-

nas magníficas teatrales del Siglo de Oro–; los momentos musicales únicos que hay en Rioseco; la intimidad de los cofrades en lasiglesias; pero también las más cotidianas y familiares que se viven preparando el hábito procesional, el sentimiento íntimo de unriosecano arrodillado ante su paso e incluso, el de satisfacción de un mayordomo por servir a sus hermanos y a su cofradía.

– Cuando lee u oye comentarios como el que la religión sólo sirve como anestésico o consuelo de los débiles de carácter, habrántenido que claudicar ante el impresionante amparo que, por ejemplo, hace en la actualidad Cáritas Diocesana, ¿no lo cree?

Resulta cobarde, ignorante e inaceptable la mofa que algunos realizan de todo lo religioso y más concretamente de la Iglesiacatólica. Ahí encontramos también a algunos medios de comunicación que basan parte de su mensaje en esta ridiculización. Esimposible entender la cultura de España sin saber las contribuciones que ha realizado la Iglesia al ámbito educativo, del patrimo-nio, del saber, con sus errores y limitaciones también. Pero hoy debemos recalcar cómo la Iglesia está actuando con los más nece-sitados en este tiempo de crisis.

– ¿Por qué causa o causas cree D. Javier Burrieza que en diversos sectores de la sociedad, la Iglesia, a priori, suscita prejuiciosadversos y cierto rechazo en general?

La falta de conocimientos identifica a la Iglesia con Inquisición y casos de pederastia. Análisis no sólo sesgados sino limitados. ElVaticano II de hace cincuenta años dijo claramente quién era la Iglesia y ahí se encuentra el magnífico trabajo de muchos sacerdotes,religiosos, educadores, padres y madres de familia, ONGs. Para opinar es necesario conocer. Le aseguro que las limitaciones de laIglesia también me hacen sufrir. Por eso, es necesario tener una buena política de comunicación, profesional, por parte de los que labo-ran en la Iglesia. Lo que haga la mano izquierda que no se entere la derecha, pero en Castilla decimos también que el buen paño en elarca no se vende. Y lo que hay que pregonar es la Buena Noticia.

– Materialismo versus espiritualidad, pragmatismo versus soñadores y buscadores de utopías... el «carpe diem» llevado a sumáximo exponente, ¿no genera sólo egoísmo e insolidaridad?

La espiritualidad enriquece al hombre. Esto no imposibilita trabajar por el aquí y el ahora. Vivir en la creencia de que elmundo, nuestro pequeño mundo de cada día, lo podemos mejorar, es una causa de felicidad. Basar ésta en evadirnos de los pro-blemas pues sí, es egoísta e insolidario. Los cofrades de antaño y los de ahora, como tales, debían estar presididos por un espíritude apertura, generosidad y solidaridad.

– El final del poema «Lo Fatal» de Rubén Darío que reza... «y no saber adónde vamos / ni de dónde venimos...» ¿cree honesta-mente que sigue inquietando y azorando a los propios católicos?

Intelectuales tan esclarecedores como Rubén Darío vivieron en un tiempo en que parte de la Iglesia no supo tratar con clari-dad el debate fe y razón. Hoy, los que nos dedicamos a la actividad intelectual podemos sentirnos cómodos en la Iglesia, debién-dose siempre posibilitar el debate sobre la mayoría de las cuestiones, aquellas que no son esenciales. Los creyentes actuales,llamados a formarse como tales en un mundo que exige una fe madura, creo que sabemos de dónde venimos y adónde vamos.

– Leí recientemente a Antonio Gala y decía que antiguamente se adoraba al «becerro de oro», y que hogaño se venera «al orodel becerro» (Benedicto XVI acaba de manifestar lo mismo aludiendo al capitalismo incontrolado, el egoísmo y el individualismo)¿Comparte esta apreciación?

Benedicto XVI, que es un papa intelectual y de gran lucidez que muchos hemos ido descubriendo, ha denunciado ese relativismo.Tanto en el ámbito espiritual, intelectual, familiar (para ser esposos y padres), vocacional (en la profesión o en el estado de vida) nece-sitamos personas maduras, que sepan también utilizar su propia conciencia y no someterse a la norma por la norma… No es cuestiónde defender un sistema económico u otro, se trata de construir un mundo más justo, solidario, educado, culto, tolerante, donde los dere-chos formulados no sean papel mojado (derecho al trabajo, a una vivienda digna), derecho a la expresión de las creencias de cada uno,derecho a la vida desde el mismo momento de su concepción.

– Sr. Burrieza, Jesucristo entre otras muchas frases lapidarias suyas que sustentan y apuntalan el Cristianismo, dijo. «Otromundo es posible». ¿Cree que es viable y factible en este mundo actual que nos ha tocado en suerte vivir?

El mensaje de Cristo es maravillosamente actual. La «Buena Nueva» que es el Evangelio consiste en anunciar que los hijosde Dios podemos vivir de acuerdo a un mandamiento de cuatro letras: el amor. Se trata de proclamar lo que creemos sin ver-güenza, ser testigos. Testigos lo somos por las calles cada Semana Santa pero también en la forma de educar a nuestros hijos y detransmitirles la belleza de la fe comunicada, de unos a otros, en la cadena de la vida a través de la familia.

JOSÉ MARÍA ROMÁN GUTIÉRREZCoordinador de la Revista

ENTREVISTA: JAVIER BURRIEZA SÁNCHEZ «EL HISTORIADOR-COFRADE»

NUESTRO PREGONERO 2013

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ORACIÓN ALCRISTO DE LADESNUDEZ

¡Qué alegre y qué suelto camina al trote!¡Qué airoso se muestra con su jinete!¡Qué orgulloso cuida de su derrote y qué humilde luce su gallardete!

Burrillo de alma blanca y ruin capote,borriquillo de crines cenicientasavezado a la carga y al azote,acostumbrado al palo y las afrentas...

Bien sabe que no es montura de razani es alazán de ricas vestimentasy no es corcel de peto y de corazani es montura de regias osamentas...

Pero el Hijo de Dios hoy le ha elegido,Dios mismo en su trote se solazay, al ritmo de su trote sostenido,el odio se convierte en devoción,en risa se transforma el alarido,en fe ciega se vuelve la traición,

los rosales se quedan sin espinasy el dolor no es dolor, que es ramilletede palmas y vuelo de golondrinas...

ELEGÍAA LABURRIQUILLA

DIÁLOGODESDE

Te arrancaron de un golpe aquella sayaque el dolor sujetaba entre la piely de tu cuerpo brotó, como azagaya,la sangre redentora de un clavel.

Tu cuerpo, venerada eucaristíay al mismo tiempo florido vergel,que no es el camino hacia la agoníasino puerta a la vida en cascabel…

Tu cuerpo desnudo es la profecíaque nos regalaste en aquella cenaque no fue última… Tu sabiduríanos manifestó, en tal hora buenay de otro modo, que era la primera,solo la primera noche serenade una eterna y tranquila primavera…

Que comiendo tu cuerpo inmaculadopodríamos sentarnos a tu veraen el celestial banquete anunciado…

Por ello, Cristo de la Desnudez,déjame abrazar tu cuerpo desnudopara, así, vestir mi alma otra vez.

Apoya en la Cruz esa escaleray aguanta su cuerpo en el sudariopara bajarle así, de esa manera,hasta la tierra hostil de este Calvario.

Arráncale la corona de espinos…No añadas un dolor innecesarioa quien, muerto por tantos desatinos,es del suplicio aún depositario.

¡Despacio!... ¡Sujetad sus pies divinos!...¡Y cuidado!... Tratadle con respetoque Cristo es el Señor de los destinos,Dios y hombre en su misterio inconcreto…

Colocad su cuerpo junto a Maríaporque no existe un dolor más repletode amor, que el que provoca la agoníade tener en brazos al Hijo muerto…Sus lágrimas, ante tal villanía,preñarían la arena del desierto…

¡No quites la escalera de la Cruz!...Este roble será la lanzaderaque me suba hasta el cielo de la Luz…

ÁNGEL M. DE PABLOS

Presidente del Ateneo de Valladolid

LA ESCALERA

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SEMANA SANTA2013

Cuando se acerca la última semana deltiempo litúrgico de la Cuaresma, Me-dina de Rioseco, está hermosamentepreparada y se vuelve a fundir su re-ligiosidad popular, que toma formaen las tradiciones de sus vivencias,

con una capacidad estética sin par para conmemorarla auténtica pasión de Cristo, procesionando con inu-sitado fervor la riqueza y esplendor de las magníficasobras de arte que atesora de su bien conservado pa-trimonio artístico.

Día a día de su Semana Santa, van a mostrarse lamagnificencia de las imágenes, salidas de las gubias delos grandes maestros imagineros que trabajaron enestas tierras castellanas, desde los siglos XVI a nues-tros días (Rodrigo de León, Gregorio Fernández,Juan de Juni, Mateo Enríquez, Juan de Maniátegui,Tomás de Sierra, etc.), llevadas en sencillas carrozaspor cientos de cofrades y revelando, como bien hansabido conjugar a lo largo de muchos años, la gran-diosidad y la elegancia, con la armonía y buen gusto,uniendo sensibilidad piadosa con la austeridad y lasinceridad del carácter castellano.

Estos días semanasanteros, son días auténticos derecogimiento, de meditar lo que solamente en el silen-cio y en la pausa de las horas puede acercarse a Dios.Son fechas sumamente rememorativas, donde todos,habitantes de la localidad y cuantos por aquí se acer-can, a su manera, sienten y reviven de diversas formasel gran drama que Cristo padeció desde que le sen-

tenciaron a muerte hasta el trágico momento de sucrucifixión en el Gólgota. En estas fechas se salta delsímbolo a la realidad. No se habla de símbolos, sinomás bien, de realidades.

La Semana Santa Riosecana es proceso históricoy social configurado en el tiempo para administrar lafortaleza estética, iconográfica, artística y devocionalde un pueblo entregado a una actividad, muy queriday llena de detalles. Se está ante una importante mani-festación de fe, ante el desfile sencillo, pero al mismotiempo magnífico, de las tallas presentadas, muy elo-cuente en el mensaje, que se concibe cada año comorespuesta de Hermandades y Cofradías Penitenciales,feligreses y visitantes en general a una comunidadávida de experiencias que alimenta y que se esfuerza,en todo momento, por mejorarse.

La Junta Local de las Cofradías de Medina deRioseco, tiene programa de actos perfectamente estu-diado, con lo cual, efectúa previstos recorridos por lassinuosas y estrechas calles con la generosidad encomia-ble de aquellos que, en todo momento, se desviven pormantener activas las tradiciones y con la participaciónde una ciudadanía que atiende, respetuosa y agradeci-da, lo preparado y convenido con anterioridad, conrenovado esplendor de la sobriedad castellana.

La Semana Santa Riosecana, con el paso de losaños, gana inusitado interés en el sentir de la ciudad,consciente de la necesidad de alimentar y estimularcon sus quehaceres, a un evento contrastado en elcalendario festivo y religioso.

Hermandades, Cofradías, Bandas de música,devotos, penitentes, amantes del arte y de las tradi-ciones, visitantes, pequeños y mayores, todos refuer-zan una idea, un proyecto que se mejoracontinuamente, una experiencia única y mística queexige voluntad, sensibilidad y gran generosidad.Todos son responsables de que los actos posean elalma de las mejores citas y la fuerza sobrenatural deun mensaje universal y eterno.

La Semana Santa Riosecana tiene aroma especialy una belleza singular. Se trata de un compendio demanifestaciones religiosas de valor artístico y turísti-co, un arte para emocionar, una tradición heredada depadres a hijos y debe ser visita obligada para el queaún no la conoce.

Los que en estos días tan señalados y siempre, seacerquen a la Ciudad de los Almirantes de Castilla,Medina de Rioseco, atraídos por el espectáculo de lasprocesiones, los cultos religiosos, buscando la riquezacultural, o cualquier otro de los alicientes que se pue-den ofrecer, recibirán la mejor de las acogidas y com-probaran, fácilmente, el sentir del pueblo que con fe,ama profundamente sus viejas tradiciones.

FÉLIX-CARMELO GARCÍA MARTÍNEZ

LA FE DE UN PUEBLO

CRUCIFIXIÓN.Foto José Carlos Lobo García.

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

edina de Rioseco, ciudad de los Almirantes de Castilla, de cuatroiglesias catedrales que se elevan al cielo en medio de la planicie deTierra de Campos, ciudad de costumbres, de historia, de arte y de feque conjuga, a la perfección, con una de las profesiones más primi-tivas, la agricultura, «propia del sabio, la más adecuada al sencillo y

la ocupación más digna para todo hombre libre», decía Cicerón, hace más de dosmilenios. Ciudad a la que da belleza, no solo la tradición, sino también una de lasobras civiles más ambiciosas de la historia, el Canal de Castilla. Ciudad en la que seunen la tierra, el cielo y el agua. Ciudad que, como pocas, ha sabido valorar y man-tener la belleza y la historia de su arquitectura más tradicional, la piedra y el barro,calle con calle, pared con pared.

Ciudad de emociones estéticas, no hay nadie que no se sobrecoja ante la belle-za de los soportales centenarios de la Rúa, vistos una vez, o vistos mil, la luz los hacediferentes. Emociones estéticas que alcanzan su culmen en la Semana Santa, tradi-ciones que se mantienen desde hace más de cuatro siglos, tradiciones que hacen queel pardal en Rioseco no sea un pájaro, sino un hombre, que, con su trompeta, anun-cia el inicio de las procesiones. Cortejos a la luz de las velas de los cofrades, lucesque hacen vibrar las sombras y avivan los sentidos, luces temblorosas que dan vidaa los rostros cincelados hace siglos, luces que permiten compartir el dolor en las fac-ciones del Nazareno de Santa Cruz o de la Virgen Dolorosa.

El alegre cantar del acento riosecano se convierte, en Semana Santa, en reco-gimiento y pasión. Silencio y fe que se transforman en hileras de luz, que acom-pañan a cada paso. Tradición que pasa de generación en generación, bebés vestidos de Nazareno o minúsculasmantillas colocadas, artísticamente, en la cabeza de casi recién nacidas, comparten procesión con nonagenarios.Rioseco no celebra la Semana Santa, se convierte en Semana Santa.

Historia, arte y fe se funden, al vibrar de la luz de los faroles y el olor a cera en la Semana de Pasión riosecana.Historia, arte y fe en los corazones que laten, al ritmo que siguen los pasos, mecidos, bailando, al son de las marchasprocesionales. Orgullo de los hermanos que, sobre sus hombros, cargan con cuatro siglos de pasión.

Desde la Iglesia de Santiago de los Caballeros y desde la de Santa María de Mediavilla, salen las procesiones, laentrada triunfal en Jerusalén del Domingo de Ramos, se torna en clemencia el Martes Santo, en Vía Crucis un día des-pués, en Mandato el Jueves y en Dolor, el Viernes. La vigilia del Sábado culmina en la alegría del Domingo, las man-tillas negras se tornan blancas. Cristo ha resucitado y se encuentra con su Madre.

El Arco Ajújar, puerta antigua de una ciudad fortificada, la de los Almirantes de Castilla, es testigo solemne deuno de los momentos más sobrecogedores de la procesión, la Rodillada. Diez el jueves, siete el viernes, decenas de her-manos, cientos de kilos sobre sus hombros, los pasos genuflexionan, los ceños se arrugan del esfuerzo, rinden home-naje a la Virgen de la Cruz, que desde lo alto del arco, ve y bendice la tradición. El corazón se encoje y el alma seensancha. Tras la Rodillada, el paso vuelve a la horizontalidad, los fieles aplauden.

Hace más de medio siglo, en esta revista que hoy me cede dos de sus páginas, escribía mi abuelo, Cándido CostillaChico, agricultor, abogado y juez de profesión, el periodismo y la literatura eran su pasión. En este 2013, quiero queeste artículo sea también un poco suyo. Nunca le llegué a conocer, pero sé que haber hecho del periodismo mi profe-sión, es herencia suya. El mejor homenaje es recordar sus palabras, sus frases, sus versos, porque pocos como él handescrito la Semana Santa de Medina de Rioseco. En 1960, escribía «los pasos salen de las iglesias para formar cor-tejos procesionales. Van llevados a hombros de sus gremios y cofrades vestidos con túnicas de diferentes colores,según procesión, y presididos por clero y autoridades. La mujer católica presta su valioso concurso de rezos yletanías y los hombres elevan la voz en súplica de perdón. De lejos, la sinfonía de los tapetanes en remedo de tor-mento, cera que alumbra a Cristo en la sombra, detalles y misterios de luces que besan a la Virgen en su dolor yen su soledad, invitando a la meditación».

Historia, arte y fe se mantienen inalteradas, siglo tras siglo, «de hijos, a nietos y biznietos de vecinos a vecinos, a pesar deausencias, para testimoniar del modo mas solemne y público que si las generaciones pasan por la vida, sigue el mismo ambiente y lamisma sangre de los progenitores. Es el arte que pregona al viento (la radio), los motivos místicos y la alcurnia y señorío de una ciu-dad en la Meseta castellana».

En la Meseta, en Tierra de Campos, donde las tierras se peinan de diferentes colores, donde el viento convierte alos campos de trigo y cebada en mares de cereal, donde el cielo se une con la tierra, donde la escasez del Sequillo sesuple con la abundancia de agua del Canal de Castilla. Tierra, agua y cielo. Elementos materiales que cobijan lo inma-terial, la historia, el arte y la fe. La pasión de Semana Santa, la pasión riosecana.

ELENA RODRÍGUEZ COSTILLA

Periodista

M

NAZARENO DE LA SANTA CRUZ.Foto José I. Santamaría Magdaleno

HISTORIA, ARTE Y FE.TIERRA, AGUA Y CIELO

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Háblame de cualquier modo quesea para consuelo de mi alma yenmienda de mi vida… y queello ceda en tu alabanza, gloriay honor eternos…

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

niños miran a través de un cristal de soldadu-ra un eclipse soñado.

Las calles, el nivel inseguro de la nieve.Automóviles parados salpican la invisibleanchura de los arcenes. Algunos conductoresfuman y examinan sin ánimo las ruedas tapa-das. Otros se alejan murmurando, comoquien espera un peligro.

Luz dorada en los escapara-tes. Jirones de humedad

simulan viejos mapas ycurvan la visión de los

adornos. Nadie se detie-ne a descrifrar esavariada geografía.

El cine, sus lucesde neón anunciandoel refugio. Tras unbreve silencio, el río,los horizontes leja-nos. Detrás de unasmíticas colinas, el

valle que siempre seespera: los ámbitos de

las cosechas.Regresas solo a tu casa.

Las escasas voces que te seguí-an se han ido dispersando por

otras calles, hacia barrios de difícil acceso. Alabrir la puerta casi sellada por el frío mirashacia atrás: has creído escuchar tu nombre alotro lado de una esquina. Al instante, mientrassubes raudo la escalera, intentas suponer queha sido un extraño flujo de viento.

Te sientas en tu habitación, cuando yatodos duermen, y te preparas para leer. Peroantes, tu mirada recorre la estancia. No repa-ras en los grabados ni en las hojas desprendi-das de algunas macetas. Muy pronto hablaráde nuevo la tarima y tendrás que acostarte.

LUIS ÁNGEL LOBATO VALDÉS

Escritor

MEDINA DE RIOSECOEN LA MEMORIA:IMPRESIONES DE UN LEJANO DÍA

DE INVIERNO

s invierno: cuida el deterioro de lashojas, tu habitación de antiguos pai-

sajes grabados, la tarima que crece de prontoy te causa miedo en la noche.

El sueño: la dulcura de sus ojos ámbarque te miran, sus manos abiertas hacia elborde de tu asombro, la lentitud flotante deuna falsa caída.

El despertar: siempre piensas en un ani-llo verde que perdiste en el estanque, perorecuerdas que sus oscuras aguas estaránahora congeladas y de nada sirve imagi-nar peligrosos proyectos.

El ventanal cuando amanece: elvaho, la chimenea pertinaz de unafundición, la brújula oxidada delhumo, motas de hierro salpicandouna fina capa de nieve.

Te frotas los ojos todavía punza-dos y comienzas a escribir. El papelrefleja una luz ya demasiado brillantey te alejas de la ventana. En la otraestancia resulta insuficiente el filamen-to artificial, algo anaranjado, y te incor-poras: no sabes qué hacer.

Desde el curso del poema te incomo-dan los golpes de una puerta lejana.Sospechas que ha variado el sentido del vien-to y sales a comprobarlo.

Tu punto de mira: las tapias derrumba-das, la estrecha abertura del horizonte.

Adviertes una firme oscuridad en lasnubes que se acercan y cruzan el patio desdeel norte:bajará la temperatura: otra vez lanieve.

Aspiras la densidad de la tarde y acude elletargo: una larga inclinación de la memoriapermanece hasta que la claridad empieza aextinguirse.

Por un débil momento el sol, casi desva-necido. Una línea roja apunta a tus ojos sindañarte mientras estalla un recuerdo. Cierraslos párpados y ves una pradera. Allí, unos

E

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SEMANA SANTA2013 AÑO DE LA FE:

RETORNO A LAS FUENTES

CIÓ EL DERECHO A LA LIBERTAD RELIGIOSA, CON-DENÓ EL ANTISEMITISMO, IMPULSÓ LA NUEVA RES-PONSABILIDAD DE LOS LAICOS, DEFENDIÓ LARELIGIOSIDAD POPULAR…

El Papa Benedicto XVI con motivo del año dela FE dice: «hacer resplandecer las VERDADES Y LABELLEZA DE LA FE en nuestro tiempo, SIN SACRIFI-CARLA A LAS EXIGENCIAS DEL PRESENTE NI ENCA-DENARLA AL PASADO. «SE NECESITAN PERSONAS DEFE, QUE CON SU PROPIA VIDA INDIQUEN EL CAMINOHACIA LA TIERRA PROMETIDA Y DE ESTA FORMAMANTENGAN VIVA LA ESPERANZA», en un mundo enel que ha aumentado, al decir del Papa, «la deser-tificación espiritual», aunque la experiencia deeste «desierto» es el punto de partida desde el quepodemos descubrir nuevamente «LA ALEGRÍA DECREER, SU IMPORTANCIA VITAL PARA NOSOTROS».

El Papa también nos recuerda que la palabra«AGGIORNAMENTO» acuñada también en el ConcilioVaticano II por el Papa Juan XXIII, para la ocasión,no significa «RUPTURA CON LA TRADICIÓN SINO QUEEXPRESA SU VITALIDAD CONTÍNUA», llevar el «HOY»de nuestro tiempo al evento cristino, al «HOY» deDios.

Según estas palabras, la Semana Santa deMedina de Rioseco, como las de otros lugares delmundo, no tienen que ser COSTUMBRES REPETIDASUNA Y OTRA VEZ, SINO VIVENCIAS PROFUNDAS QUE

l año de la FE, que BenedictoXVI inauguró el jueves 11 deoctubre de 2012 en la plaza deSan Pedro del Vaticano, marcaun retorno a las FUENTES DELCRISTIANISMO, o en palabrasdel Papa, a la LETRA Y AL ESPÍ-RITU DEL CONCILIO VATICANOII, evento eclesial que abrió laspuertas de la Iglesia al mundo

moderno e insufló un aire fresco y renovador a supropia vida, hace medio siglo.

Por un año, la Iglesia en general, AsociacionesCatólicas y fieles «DETIENEN» de algún modo sureloj, y vuelven a preguntarse por su IDENTIDAD YSU MISIÓN. LAS COFRADÍAS DE MEDINA DE RIOSECOTAMBIÉN QUIEREN CONOCER CUÁL FUE SU ORIGEN,QUE DESEARON SUS ANTEPASADOS AL FORMARESTAS HERMANDADES, y dejando de apoyarse en suspropias fuerzas, CARGAR SUS PILAS tratando de sacarenergías de su único manantial posible: LA FE ENJESUCRISTO como centro del cosmos y de la histo-ria humana.

En este año de la FE, el Papa nos recuerda,que tenemos que volver a leer y a hacer nuestro elmensaje del Concilio Vaticano II.

EL CONCILIO QUE REVITALIZÓ LA LITURGÍA,IMPULSÓ EL CONOCIMIENTO DE LA BIBLIA, RECONO-

BENEDICTO XVI. AÑO DE LA FE.

ESEMANA SANTA

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

SE ACTUALIZAN CONTINUAMENTE; PORQUE VIVEN-CIA DE FE PROFUNDA FUE LA PRIMERA SEMANASANTA DE MEDINA DE RIOSECO.

La tradición estaría muerta si en ella no hubieramás que actos rutinarios que se van repitiendo oca-sionalmente. La tradición es un conjunto de valoresque se expresan con FIDELIDAD A UNOS ORÍGENESY QUE NOSOTROS HACEMOS VIDA ACTUALIZADA.

El arte religioso sin FE, no habla de los misteriosde Dios que representan. La Semana Santa deMedina de Rioseco, manifiesta la FE de un puebloque quiso dar lo mejor de sí mismo al Dios en quiéncreía y esperaba (Monseñor Carlos Amigo).

Este año de la FE, nosotros también queremosdar lo mejor de nuestras vidas. EL MISMO RECORRI-DO, PERO SIEMPRE DE UN MODO NUEVO, COMONUEVO ES EL MOMENTO DE LA VIDA EN QUE NOSENCONTRAMOS.

Los pasos de la Semana Santa de Medina deRioseco, son un desafío para los riosecanos que lesanima a responder con una FE ACTUALIZADA.El espíritu crítico, más agudizado en estos tiempos,exige una ADHESIÓN MÁS PERSONAL Y OPERANTEDE LA FE Y ASÍ ALCANZAR UN SENTIDO MÁS VIVODE LO DIVINO. Las personas y los grupos socialesestán sedientos de una vida plena y de una vidalibre, digna del hombre que solo se alcanza conesa FE personal y operante que nos lleva a laCARIDAD.

El fruto de la VIVENCIA de la SemanaSanta, debe ser el llenarnos plenamentedel amor de Dios y cumplir el QUINTOEVANGELIO el de las OBRAS, el que Jesúsquiso que escribiéramos con ellos, con lospobres que siempre estarían con noso-tros. (Mt. 25). La palabra sin caridad esHUECA, (cfr. 1 Cor. 13, 1-13) y la CELE-BRACIÓN que no implica el ejercicioPRACTICO DE LA CARIDAD es «fragmenta-ria», dice Benedicto XVI, y hasta «escan-dalosa» según San Pablo (1 Cor. 11, 21).

El fenómeno religioso, cultural yartístico de la Semana Santa, necesitareunir algunos ingredientes para llegar atener la FRESCURA Y ORIGINALIDAD de suPRINCIPIO.

La devoción a la Cruz y a la Pasión,Muerte y Resurrección de Jesús, hoy tie-nen unas connotaciones nuevas. Cadaépoca tiene una nueva forma de entenderla relación del hombre con Dios.Reflexionemos sobre nuestra FE,actualicémosla. Que nuestras Cofradíassean MEDIACIONES PARA LLEVAR A DIOS

A CUANTOS NOS CONTEMPLEN. Hermandad dehombres que bien organizados, velan por la saludespiritual de los suyos y de sus contemporáneos.Manifiesten deseos de PARTICIAR CADA VEZ MÁS YMEJOR EN LA LITURGÍA porque de lo contrario lospropios creyentes podemos tener parte no peque-ña de la INCREENCIA de muchos contemporáneos,por el descuido de la educación religiosa, o por laexposición inadecuada de la doctrina, o inclusocon los defectos de una vida religiosa, moral ysocial que han VELADO MÁS BIEN QUE REVELADO ELGENUINO ROSTRO DE DIOS.

Y después de Semana Santa ¿Qué?Os recuerdo la carta de San Pablo a los Efesios

(4, 32. 5, 1.6). Sed buenos, comprensivos, perdo-nándoos unos a otros, como Dios os perdonó enCristo. Sed imitadores de Dios, como hijos queri-dos, y vivir en el amor como Cristo os amó y seentregó por nosotros, como oblación y víctima desuave olor… antes erais tinieblas, pero ahora,como cristianos, sois LUZ. VIVID COMO GENTEHECHA A LA LUZ. Esta será la mejor manera de pre-pararse a la Semana Santa 2014.

SOR MARÍA GONZÁLEZ PÉREZ

Hija de la Caridad: Colegio «San Vicente de Paúl»

DOMINGO DE RESURRECCIÓN.ESTANDARTES DE HERMANDADES. Foto David Carpintero.

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L a intensa conmemoración de laSemana Santa en España ha conformado distintosrepertorios de música vocal (saetas, salves, etc.) e ins-trumental (marchas procesionales, tamboradas, etc.),además del empleo de una organología específica(carracas, matracas…). En Medina de Rioseco fueronoriginándose diversos matices sonoros que, con elpaso del tiempo, han quedado definidos en cancionesemblemáticas, como «La marcha fúnebre a la muertedel General O’Donnell», y en músicos peculiares coninstrumentos distintivos cuyas secuencias sonoras sonexclusivas de la localidad, como el tapetán o el pardal1.Estas singularidades nacidas bajo carácteres univer-sales, imprimen, desde un aspecto sonoro, un sello deidentidad en la ciudad riosecana que la distingue deotras semanas santas. Sin embargo, además de estaspeculiaridades instrumentales conservadas transgene-racionalmente, han existido otras sonoridades que, enla Ciudad de los Almirantes, han desaparecido con eltiempo. Por ejemplo, dentro del antiquísimo Oficio deTinieblas, en el que nos vamos a centrar, se entonabanlas Lamentaciones, que formaban parte del repertoriovocal específico de la Semana Santa, y se hacían sonarlas carracas, instrumento propio de estos días2. No esalgo exclusivamente riosecano, sino que lasLamentaciones sonaron en cada templo del país hastala última reforma litúrgica, incluso el sonido de lacarraca puede escucharse en muchas procesionesactuales, se trata de cantos y/o sonidos que han deja-do de emplearse desde hace unas décadas en Medinade Rioseco tras una larga tradición.

El Oficio de Tinieblas es el nombre otorgado alservicio de maitines y laúdes del Triduo Sacro, inicial-mente tenía lugar tras la media noche, pero a finales delsiglo XIV se traslada a la tarde del día anterior(Miércoles, Jueves y Viernes Santo). En el oficio se

entonaban distintos cantos fúnebres (responsorios,motetes, salmos, etc.) entre los que destacan las lamen-taciones. La lamentación es una forma musical especí-fica de la Semana Santa, consta de 3 lecciones del 1.ºnocturno de maitines del Triduo Sacro, es decir, 9 lec-turas en total, 3 para cada día; su texto se toma, princi-palmente, del profeta Jeremías. Las lamentaciones,desde el siglo VIII, pasaron a ser parte esencial de losOficios de Tinieblas de la Semana Santa, cobrando sumáxima importancia durante los siglos XVII y XVIII.Existen antiguos vestigios de este canto en algunasiglesias riosecanas, por ejemplo, en el Libro de Oficiosde la Semana Santa de Santa Cruz, que data de 1616,hallamos musicalizadas las lamentaciones en cantollano3.

En la programación de Semana Santa de los distin-tos semanarios riosecanos de los siglos XIX y XX des-cubrimos que el Oficio de Tinieblas, donde, como hemosseñalado, se incluían las lamentaciones, era celebrado enlas tres parroquias cada Miércoles Santo, después deanochecer, y cada Jueves Santo, una vez finalizada laprocesión4. El Oficio de Tinieblas, designado indistinta-mente como «tinieblas» o «maitines»5, pasó a realizarseúnicamente el Miércoles Santo a partir de 1899. En lasrevistas de Semana Santa locales esta celebración siem-pre aparece anunciada como «Maitines» y se celebrabaen las tres iglesias de la ciudad6 cada Miércoles Santo «alanochecer».

En 1956, el Oficio de Tinieblas –o Maitines– noaparece programado en ninguna publicación local, loque evidencia que dejó de realizarse por entonces.Cabe señalar una anécdota en Medina de Rioseco refe-rente a esta conmemoración: en 1947 hubo una contro-versia por el lugar de la exposición del monumentoentre las cofradías del Nazareno y de la Desnudez conel párroco de Santa Cruz, al no llegar a acuerdo algu-

LA MÚSICA EN LA SEMANA SANTADE MEDINA DE RIOSECO (I).

EL OFICIO DE TINIEBLASL

1 Sobre la música en la Semana Santa riosecana véanse: Asensio Martínez, V. / Pérez de Castro, R. «La Semana Santa en Medina deRioseco: jerarquía y ritos procesionales (siglos XV-XVIII)». Cultura y arte en tierra de campos: I Jornadas. Medina de Rioseco en su Historia. Pérezde Castro, R.; García Marbán, M. (Coords.). Diputación Provincial de Valladolid, 2001, pp. 537-553; Díaz, J. «Una teoría más acerca del<tapetán> riosecano». Revista de Semana Santa de Medina de Rioseco, 2012, p. 25; o Toribio Gil, P. «La música en la Semana Santa de Medinade Rioseco: organología, características, función y significado». Revista de Folklore, N.º 370, pp. 17-43.

2 «La carraca es un instrumento de madera que usa la Iglesia en el tiempo en que en la Semana Santa no toca campanas». Diccionariode Autoridades. Madrid. Ed. Gredos. Vol. II., p. 192.

3 La imagen muestra el inicio de la primera lamentación de Viernes Santo. Medina de Rioseco. Iglesia de Santa Cruz. OfficiumHebdomadae Sanctae, 1616, p. LXIV.

4 Lo que indica que ya por entonces, tras la procesión del Viernes Santo, no se celebraban los Maitines.5 El Oficio de Tinieblas es designado como «maitines» por La Crónica de Campos, mientras que el El Grito de Campos lo denomina «tinie-

blas».6 En el programa de 1955, último año en que aparecen los maitines en el programa de Semana Santa, se incluyen los oratorios ade-

más de las tres parroquias.

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no, intervino el obispo de Palencia; el párroco no con-forme con la decisión tomada por el prelado, no celebrólas tinieblas, «que siempre fueron cantadas»7.

Pero la sonoridad más recordada en Medina deRioseco de los maitines o tinieblas es el resonar de lascarracas tras el rito de apagar las velas. La ceremoniatranscurría del siguiente modo: en el interior del templo,con las luces apagadas, salvo las velas del tenebrario8, seiban cantando distintos salmos, al finalizar cada uno deellos se apagaba una vela, comenzando por la vela infe-rior del lado del Evangelio; seguidamente, se apagaba lainferior del lado de la Epístola, y así se iría aproximandoa la vela situada más alta y en el centro. Cuando única-mente quedaba por apagar ésta, los feligreses entonaban«Christus factus est», entonces el preste escondía la velaencendida tras el altar, y, tras rezar «Respice quaesmus»,con la iglesia a oscuras (en tinieblas), los fieles personifi-caban el temblor de tierra que aconteció cuando murió

Jesús9. La intervención consistía en un golpeteo de lospies en el suelo y haciendo girar matracas y carracashasta que el sacerdote mostraba la vela encendida y lavolvía a colocar en el tenebrario, entonces se encendíanlas lámparas del templo10.

Los niños riosecanos acudían un año tras otro a «lastinieblas» con su propia carraca, construida y guardadapara ese día. Según ellos, hoy personas mayores, el ruidode carracas y carracones, amplificado por la resonancia yreverberación del templo, era ensordecedor; algunos,amparados por el estruendo y la oscuridad, aprovecha-ban la confusión para gastar bromas como clavar losmanteos de las mujeres en la madera de los bancos11.

Esta práctica religiosa, colectiva y anual, metafóri-ca y explicativa, formó parte de la tradición ritual ysonora de la Semana Santa riosecana, y, a pesar deltiempo pasado, los lúgubres cantos de las lamentacio-nes y el sonido de la madera cuando el templo quedabaen tinieblas, sigue presente en la memoria de muchosriosecanos. El sonido de la carraca es lo más recordadode este oficio del Miércoles Santo12 por varios motivos:por anecdótico, porque el uso del instrumento daba sig-nificado al contexto que su propia intervención contri-buía a definir, y porque constituía el momento esencialalrededor de lo que se organizaba el despliegue cere-monial, la remembranza del preciso momento en quemurió Jesús.

PABLO TORIBIO GIL

Licenciado y Doctor en Historia y Ciencias de la Música

7 Archivo Histórico Municipal de Medina de Rioseco, caja 441, carp. 5609. Cit., en Asensio Martínez, V.; Pérez de Castro, R.; AlonsoPonga, J. L.; Asensio Martínez, V.; Duque Herrero, C.; Pérez de Castro, R. La Semana Santa en la Tierra de Campos Vallisoletana, Valladolid,Grupo Página, 2003, p. 301.

8 Candelabro triangular de 15 velas que representaba a los 12 apóstoles y las 3 Marías. La vela que ocupaba el vértice del ángulosuperior («Vela María») era de cera blanca, las otras 14, eran de cera amarilla. Vid. Alonso Ponga, J. L. «Rituales de la Semana Santa».La Semana Santa…, pp. 23-25.

9 El rito simboliza el abandono de los apóstoles al tiempo que Jesús era atormentado, por lo que la iglesia va perdiendo su luz. Lavela que nunca se apaga simboliza a la Virgen Madre, de ahí el nombre de «Vela María», que nunca abandona a su hijo. Otras teoríasapuntan a que la vela que no se apaga representa a Jesús.

10 Una descripción completa del rito puede verse en Jesús María, Fr. Francisco de. Ceremonial rural o de pequeñas iglesias. Burgos, S.de Villanueva, 1848, p. 36. Cit., en Sánchez del Barrio, A. Fiestas y ritos tradicionales. Valladolid. Castilla Ediciones, 1999, pp. 66-67.

11 Como un hecho habitual me lo han relatado algunos riosecanos. Incluso algún sacerdote, de otra localidad, me ha narrado estasmismas travesuras durante las tinieblas. En todo caso, muchos párrocos se alegraron de la desaparición del rito por los daños en bancos,reclinatorios y confesonarios. Vid. Sánchez del Barrio, A. Fiestas y ritos…, p. 68.

12 Cabe señalar que el Miércoles Santo también fue conocido, en distintos lugares y a lo largo de los siglos, como Miércoles de Tinieblas.13 Carraca empleada en los Oficios de Tinieblas de Santa Cruz por Antonio García Concellón en su niñez.

El Grito de Campos (30-IV-1896)

Revista de Semana Santade Medina de Rioseco, 1928

Carraca de Medina de Rioseco13

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ste año 2013 se cumple el quinto cen-tenario del descubrimiento en el 1513del territorio, que se llamaría Florida,por Juan Ponce de León (1460-1521), nacido en Santervás de

Campos (Valladolid); diversos actos se hancelebrado ya y otros se irán celebrando paraconmemorar tal efeméride, que marcó elnacimiento de los futuros Estados Unidos, acuyo sureste se encuentra.

Al escultor riosecano Miguel JiménezEscudero le han encargado tallar una réplicade la pila bautismal donde fue bautizado el des-cubridor; curiosamente la pila original estádesde los años sesenta del pasado siglo enCaparra (Puerto Rico), donada por el arzobis-po de Valladolid de entonces. Dicha réplica seubicará en la ciudad de San Agustín, la prime-ra ciudad de Estados Unidos fundada por losespañoles en 1565, donde probablemente fue eldesembarco de Juan Ponce de León.

Después de esta introducción ambienta-dora, viene la pregunta ¿por qué llamóFlorida a este territorio? En la EnciclopediaUniversal Ilustrada de ESPASA se afirmaque «Florida fue admitida en la Unión comoun Estado el 3 de marzo de 1845 y que fuedescubierta en 1513 por Juan Ponce deLeón, quien la llamó Florida porque desem-barcó en ella precisamente el día de PascuaFlorida, en un punto cercano a la actual SanAgustín». Por su parte en la GranEnciclopedia Rialp GER se lee que «el 27 demarzo [otros autores ponen el día 2 ó el 8 deabril] de 1513 Juan Ponce de León descu-brió, bautizó y tomó posesión en nombre deEspaña del territorio de Florida. Dándoleeste nombre, bien por la belleza de su tierra ala sazón rebosante de verdor y salpicada deflores o por la festividad de la Pascua Floridaque allí celebraron». El historiador EugenioRuidiaz y Caravia (1849-1896) afirma:

PASCUA FLORIDA

E

NAZARENO DE SANTIAGO. Foto José I. Santamaría Magdaleno.

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«Desembarcó el Domingo de Ramos, dichoPascua Florida y dio a todo el país el nombrede Florida».

El famoso liturgista español y monjebenedictino Manuel Garrido Bonaño –quiencita a los también célebres liturgistas italia-nos Mario Righetti y Aníbal Bugnini– escri-be: «El Domingo de Ramos aparece desde elsiglo VIII en los libros denominado de grandiversidad de nombres, entre otros... Paschaflorum o Pascha floridum o Dies floridus porque,además de palmas y ramos de olivos, otrosllevaban también flores. En España este díaha sido muy común, pues los españoles des-cubrieron el territorio que denominaronFlorida en el año 1513, lo hicieron así porquecoincidió con el Domingo de Ramos».

Otros autores sostienen que el Domingode Resurrección es la Pascua Florida, entreotras razones, por tocar en el principio de laprimavera. Sobre lo dicho anteriormente,hice una consulta al sacerdote claretiano–como quien firma este artículo– Juan MaríaCanals Casas, pues es el Secretario de laComisión de Liturgia de la ConferenciaEpiscopal Española, y me respondió que laPascua Florida es el Domingo deResurrección.

Otro apartado sobre el tema de este artí-culo lo constituyen los catecismos, me fijo enalgunos muy significativos. El «CatecismoRomano de San Pío V», publicado en el año

1566, habla de la obli-gación de recibir laEucaristía al me nosuna vez al año, enPascua. En los céle-bres catecismos de lossacerdotes jesuitasRipalda (1536-1618)y de Astete (1537-1601), que muchosaprendimos de pe-queños, nos enseñanque el tercer manda-miento de la SantaMadre Iglesia es co -mulgar por PascuaFlorida. José GarcíaMazo, magistral de lacatedral de Valla -dolid, comentando aambos en un libro su -yo, cuya décima im -presión del año 1851tuve en mis manos,

afirma que la PascuaFlorida es la Pascua de Resurrección. SanAntonio M.ª Claret (1807-1870), gran cate-quista –entre otras facetas de su apostolado–en su «Catecismo de la Doctrina Cristiana,explicado y adaptado a la capacidad de losniños y adornado con muchas estampas»recuerda el tercer mandamiento de la SantaMadre Iglesia: comulgar por Pascua Florida,por Pascua de Resurrección. El gran catequis-ta, obispo de Segovia durante veinticincoaños, y vallisoletano Daniel Llorente (1883-1971), en su «Catecismo explicado con grá-ficos y ejemplos», se pregunta ¿cuándo se hade comulgar? y responde: por PascuaFlorida o de Resurrección. La Santa Sedepublicaba en el año 1992 el «Catecismo de laIglesia Católica» y en el 2005 un «Compen -dio» del mismo; al referirse a los manda-mientos más generales de la Santa MadreIglesia, indica que el tercero es recibir almenos una vez al año la Eucaristía porPascua de Resurrección o, como dice enotro lugar, si es posible en tiempo pascual,los comentaristas dan una interpretaciónamplia al «tiempo pascual».

Desde el Domingo de Ramos al Domingode Resurrección vivamos con profundidadcristiana la Semana Santa.

EUGENIO JESÚS OTERINO

Misionero Claretiano

VIERNES SANTO: CRISTO DE LOS AFLIGIDOS. Foto José Carlos Lobo García.

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Es a comienzos de los años veinte del pa-sado siglo, cuando el investigador yerudito local Esteban García Chico,impulsa la publicación de las primeras

revistas de la Semana Santa riosecana, que van a ayudara promocionar y difundir el valor artístico, histórico yetnográfico de las procesiones de la localidad.

Rioseco vivía entonces una especie de «resaca» eco-nómica, demográfica y social después de lo que habíasupuesto de modernización económica la desamortiza-ción, el desarrollo del Canal de Castilla y el Ferrocarril afinales del siglo XIX, que tuvieron sus limitaciones y sufinal. Tampoco había sido ajena la ciudad a ese momen-to de euforia o de «burbuja» económica que estuvodetrás de la neutralidad de España en la I GuerraMundial y que supuso el aumento vertiginoso de lasexportaciones de todo tipo a los países en conflicto. Perotambién de los precios, desatando una espiral inflacio-nista que repercutió muy negativamente en la competiti-vidad de las empresas y en el nivel de vida de las clasesmás populares. Baste como ejemplo recogido por el pro-fesor Pedro Carasa que, como norma habitual un obreroagrícola recibía de jornal una media de 1,75 pesetassemanales, mientras que los gastos mínimos de subsis-tencia de una familia alcanzaban 1,89. En cuanto a laevolución de la población a comienzos del siglo XX, elnúmero de habitantes censados era en 1900 de 5.571, elmayor que ha tenido Rioseco en toda su historia, en elcenso de 1920, aparecían 5.198 y en el de 1930, 4.878. Elgran factor que va a explicar en gran parte este descen-so es el fenómeno migratorio, que toma auge desde ini-cios del siglo, como bien señalaba el Diario Regional del22 de mayo de 1908: «La emigración amenaza dejardesierta la Tierra de Campos. Raro es el día que no saleuna expedición de obreros con rumbo al Panamá o laArgentina. La estación de ferrocarril es casi todos losdías teatro de dolorosas despedidas. En la presentesemana han salido unos sesenta emigrantes deVillabrágima, Barcial, Castroverde, Villafrechós yRioseco». Otro testimonio lo recoge en Valladolid elboletín El Financiero Hispanoamericano: «Tiene Rioseco,no obstante, fábricas de harinas, tejidos, curtidos, cerá-mica, carruajes de lujo, garaje automovilístico, dos fun-diciones y seis almacenes de maquinaría agrícola,además de un buen comercio de ultramarinos, paños ybebidas». Era entonces, la ciudad, como en parte lo sigue

siendo ahora centro comercial de la comarca, a dondeacudían por los diversos medios a su alcance los habi-tantes de las poblaciones cercanas a suministrarse debienes y servicios».

La revista de Semana Santa que comienza a salirentonces (en marzo de 1926, se publicará el primernúmero, lo que podíamos considerar como primeraépoca de su lanzamiento) es una revista austera, comono podía ser menos, sin alardes tipográficos, ni grandesfotografías, ni en color. Evidentemente eran otros tiem-pos, pero va a contar con unos entusiastas colaboradoresbajo la dirección de García Chico, entre otros aparece-rán los nombres de: Juan Agapito y Revilla, BenitoValencia Castañeda, Narciso Alonso Cortés, MauriceLegendre, Jorge Guillén, etc. Y también con publicidad,con anuncios de comercios e industrias, no solo deMedina de Rioseco, si no también de pueblos cercanoscomo Barcial de La Loma, de Valladolid, de Palencia, deValderas en León e incluso de Madrid. Es una publici-dad muy elemental e ingenua en sus pretensiones, (esta-mos a comienzos del siglo XX), pero nos da una idea del

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SEMANA SANTA

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tipo de actividades económicas que se desarrollabanentonces en Rioseco, de quienes eran sus propietarios yde donde estaban localizadas, en que calles y demarca-ciones. Como el paisaje urbano de la ciudad cien añosdespués es muy diferente, pero las calles y su ubicaciónhan permanecido en muchos casos con igual denomina-ción, podíamos realizar un mapa de algunos de estoscomercios e industrias. Veamos una muestra con ejem-plos por sectores económicos, comenzando por talleres yvehículos: «Epifanio de la Fuente (Chapi). Automóvilesde alquiler. El más rápido, el más económico, el quegarantiza los viajes. Calle de la Cuesta».

«José García. Mecánico. Reparación y montaje demotores de gas, gasolina y aceites pesados. Reparaciónabsolutamente garantizada deautomóviles de cualquier marcay en casa de los propietarios delos mismos. Cuando tengannecesidad de reparación demecánica en general consultencon Pepe el del (sic) garage.Corro del Carmen». «Tallermecánico de Felipe Alonso.Construyen depósitos de hierropara líquido, aletas para auto-móviles y (lo que hoy llamaría-mos diversificación de acti-vidades) alambiques para fabri-car aguardiente. Reparación detoda clase de maquinaria agríco-la e industrial. Se reparan bom-bas y tuberías de hierro paracalefacciones. Calle D. AntonioMartínez, 2». Segui mos con elComercio: «Alma cén de Colo-niales y vinos. Exportación dequesos. Julián Silva. Calle SanJuan, 39». «Comercio de tejidosy novedades. Ventura Anciones.Gé-neros de punto, fantasía yartículos de temporada. La casa que más barato vende.Lázaro Alonso, 44». Algunos de los nombres que mencio-naré a continuación, a pesar del tiempo transcurrido nosserán familiares, por cuanto son de los escasos comerciossupervivientes hoy en día como: «La Espiga. Fábrica depan de todas las clases. Premiada con grandes premios encuantas exposiciones nacionales y extranjeras se ha pre-sentado. Especialidad en encargos para bodas y banque-tes. Fabricación esmerada para postres y bocadillos.Obdulio López Arranz. Lázaro Alonso, 50». También:«La Pura. Fábrica de harinas. Pedro Martín Sevillano.Sucesor de Juan Cid Sánchez. Dirección TelegráficaSevillano». Entre los comercios que se anuncian estála librería del que sería alcalde de la ciudad con la II

República y también cofrade de la Hermandad de LaDesnudez Bruno Merino. «Papelería Objetos deEscritorio. Gran surtido en estuches de papel paracartas, librería y plumas estilográfica. Almacén depapel de fumar, cordelería y ultramarinos.Especialidad en semillas de todas clases. Rúa, 29(frente al corro de la leña)».

Al final de algunos números de la revista, en loque sería un anexo aparecían por orden alfabético unarelación muy interesante de oficios, comercios y deaquellas personas que estaban al frente de esos nego-cios. Como en la relación simplificada que paso a rese-ñar. Carpinterías: Agustín Moras. Carbones: ÁngelSimal, Tomás Alonso y Teófilo Manso. Confiterías:

Hijos de León Marina,Modesto Ulloa, Urbano Ulloa.Farma céuticos en ejercicio:D. Luis Palencia, D. RicardoMora y D. Terencio Rodrí-guez. Fune rarias: D. ÁngelAlonso. D. Francisco Caste-llanos y D. Octavio Estebánezy Médi cos en ejercicio: JoséGarcía Chico, José Mª MarínGarrido, Pablo Gallo yVicente Garrido. Algunos conapellidos que siguen aportan-do descendientes en el padrónriosecano y vallisoletano.Incluso de oficios desapareci-dos en la época actual comoguarnicionero, tratantes de ganadomular, sombrereros y tambiéncon algunos nombres de des-cendientes vinculados con elmismo negocio o actividadhasta fechas recientes y enalgunos casos presentes:Relojería: Julio Sánchez. Profe-sores de música: Francisco Mo-

rros y Toribio Magdaleno. Pirotécnicos: León Ortega.Paños: Amable Fuentes.

Valga este somero repaso a esta selección de los anun-cios publicados en la revista de Semana Santa de 1926.Queda pendiente y fuera del alcance de este artículo unestudio más en profundidad de los propietarios, comerciose industrias de la época, curiosa muestra del pasadocomercial riosecano y del compromiso con la SemanaSanta, que hacía que sus propietarios aparecieran en larevista anunciándose y contribuyeran económicamentepara con ello ayudar a su divulgación y conocimiento.

GONZALO FRANCO REVILLA

Licenciado en Historia. Universidad de Valladolid

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De las tres grandes penitenciales históri-cas que existieron en la localidad (Vera Cruz, QuintaAngustia y Soledad y la Pasión) fue, como ya es sobrada-mente conocido, la Vera Cruz la primera en hacer su apa-rición en Medina de Rioseco. Aunque los datos sobre estacofradía son escasos, poco a poco y a grandes rasgos, se hapodido ir conociendo su historia.

Desgraciadamente, no se han encontrado datos sobresu fundación o regla y, salvo el conocimiento de que en losaños 20 del siglo XVI ya poseía diferentes inmuebles en elcasco histórico, de sus primeros años de vida poco se sabe.De ahí que, cualquier pequeño dato es importante parareconstruir el devenir de esta cofradía.

A comienzos de 1842, el Gobernador provincial solicitóa la corporación riosecana que presentase una relación detodas aquellas cofradías que, existentes en las diferentesparroquias, tenían autorización del Gobierno. Así, la alcaldíainstó a los respectivos párrocos a que aportasen cualquierdocumentación al respecto. En la parroquia de Santiagoresultaron estar inscritas las siguientes hermandades: SanCayetano, San José, Nuestra Señora de Gracia, SantísimoCristo de las Puertas, Cofradía de San Miguel y por último,Santa Cruz y Convalencencia. Los responsables de todasestas cofradías presentaron sus Reglas o Estatutos aprobadospor la autoridad eclesiástica1, salvo la de Nuestra Señora deGracia que no presentó ninguna documentación y la de laCruz que «solo ha presentado un Legajo que manifiesta los funda-dores y varios litigios que ha seguido como cofradía», si bien es cier-to que en ese mismo año se hizo una relación de las cofradíasque en ese momento existían en el municipio en la que se diceque la Vera Cruz tenía Ordenanzas y estaba ubicada en laiglesia de Santiago2 (recordemos la ruina de su sede en laCalle de la Doctrina a causa de las tropas napoleónicas, moti-vo por el que se trasladó a esta parroquia).

En el siglo XIX, tras la Real Orden de 6 de febrero de1822, restablecida en 1836 y especialmente en 1849, se cons-tituyeron en el reino las Juntas municipales de Beneficencia

que tuvieron como fin regir las diferentes insti-tuciones religiosas del reino que en ese momen-to pasaron a manos de los Ayuntamientos,confiriéndoles por tanto un carácter civil. LaVera Cruz se opuso a entregar sus bienes lo queprobablemente propició que el Gobernadorenviase una nueva petición al Ayuntamiento enfebrero de 1848 solicitando que fuese investiga-da la fecha en que se había creado esta cofradíay el Hospital de Convalecientes3.

Al parecer, al regimiento no le resultó muyfácil obtener información. Entre las referen-cias que se lograron reunir, se dijo que no setenía constancia de la fecha de fundación yque la más antigua recogida era la del 27 defebrero de 1552, momento en el que el Obispode Palencia Don Fernando Miguel de Pradoconcedió a la cofradía licencia para la ereccióny fundación del Hospital de Convalecencia

SOBRE ELHOSPITAL DE CONVALECENCIA

Y LA VERA CRUZ

D

1 AHMMdR, caja 173, carp 1883, 20-I-1842, «la Cofradía de San José me ha presentado una Regla o Estatuto aprobado por el SeñorGobernador de Palencia en 1676, la de San Cayetano presentó otro aprobado por el Provisor de la misma en 1775, la de San Blas presentó otro aprobado porel Reverendo Señor obispo de Palencia en 1704».

2 AHMMdR, caja 13, carp. 5048.3 AHMMdR, caja 174, carp 1889, 5-II-1848.

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SEMANA SANTA

«para que los cofrades pudiesen fabricar y hacer yverificado se tuviese por lugar pío, religioso y ecle-siástico, y gozase de todas las esenciones, comunida-des y privilegios que los concilios y cánones tienenconcedido a los hospitales fundados con consenti-miento y autoridad del prelado eclesiástico»4.

Sin embargo como sabemos, el Hospitaltodavía estaba en obras en 1592, momento enque también se levanta la Capilla. Su funciónera la de acoger a todos los pobres que al salirdel hospital general aún tenían que «convalecer losdías que señalan los facultativos». No pudo dejarnotar la corporación que aunque en ese momen-to el Hospital continuaba prestando un auxiliohumanitario, el número de enfermos era muyinsignificante dado el precario y decadente esta-do en que se encontraba el edificio y dependen-cias anexas, «como igualmente por la falta de lasropas necesarias para el aseo y limpieza de los enfer-mos, por efecto de la mala administración con que se hadirigido». Hay que tener en cuenta que desde labatalla librada contra los franceses en 1808 eledificio no se encontraba en buen estado. Porotro lado, los procesos desamortizadores habíanhecho mella en el patrimonio de la cofradía yademás durante unos años sus instalacioneshabían sido arrendadas para acuartelar a las tro-pas del regimiento de caballería5.

A través de las cuentas que se conservabandel Hospital, se comprobó que en 1585 se habíaacordado construir un corral de comedias paraque con sus productos, sumados a las limosnas,se pudiese sustentar dicho establecimiento6.Revisada pues la contabilidad, desde ese añohasta 1608, la corporación dijo advertir «que sucargo se reduce a limosnas y al producto de las diver-siones públicas y la data a gastos en la construcción dedicho establecimiento» resultando las de 1709 lasprimeras en las que figuran «gastos hechos con losmismos pobres». Igualmente se comprobó que elhospital había adquirido por mandas particula-res algunos censos y casas y que había construi-do a sus expensas dos pozos de nieve «los cualeshace pocos años enagenó a censo».

En Medina de Rioseco, estas fundaciones piadosaspasaron a formar parte de la Junta Municipal deBeneficencia a partir de 1847. Entre los primeros enhacerlo estuvieron el Hospital de Santa Ana y SanctiSpíritus (donde se atendía a todo tipo de enfermos) y laCongregación de Sacerdotes (para atender a los religio-sos, aunque luego se extendió a todos los necesitados).En 1856, se continuaban organizando estas institucionesen toda la provincia por lo que se remitió una nueva ins-tancia reclamando las fundaciones originales o copiastestimoniales de los estatutos, detalle de fincas, derechos,etc. del hospital de peregrinos (cerca de San Franciscopara dar cama a los transeúntes y los peregrinos), el deConvalecientes y el de niños expósitos (destinado a reco-ger a los recién nacidos abandonados e impartirles edu-cación)7. Así fueron los siguientes en sumarse a la JuntaMunicipal8. Le siguieron la fundación de Niños de laDoctrina que proporcionaba manutención y enseñanza aniños pobres y finalmente, las diferentes Obras Pías de lalocalidad. También tuvieron cabida en el municipio elhospital de Angustias y Soledad, destinado a socorrermujeres y proporcionar sepultura a los pobres y el hos-pital de San Lázaro, cercano a Santa Clara para socorrera leprosos.

VIRGINIA ASENSIO MARTÍNEZLicenciada en Historia del Arte.

Universidad de Valladolid

4 AHMMdR, caja 118, carp 851, 4-X-1848.5 AHMMdR, caja 116, carp. 834, 9-VIII-1824.6 Ya Benito Valencia Castañeda apuntó esta fecha como la de construcción del patio de comedias de la Vera Cruz en sus «Crónicas

de antaño tocantes a la Muy Noble y Muy Leal villa –ciudad después– de Medina de Rioseco...» Valladolid, 1981 (1915), pp. 196-198. El mismoValencia anotó como fecha en la que se obtuvo la licencia para erigir el hospital el año 1552, aunque no aporta más datos al respecto.

7 AHMMdR, caja 176, carp. 1897, 30-VI-1856.8 Carlos Izquierdo Amigo apunta que el Hospital de Convalecientes pasó a depender de la Junta de Beneficencia en 1849, en

«Beneficencia y Centros Hospitalarios en las cofradías riosecanas», Revista de Semana Santa 2003, pp. 36-38.

CAPILLA DE LA VERA CRUZ (Izda.) Y HOSPITAL DE CONVALECIENTES (Dcha.)(ACTUALMENTE TEATRO MUNICIPAL).

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JUNTA LOCAL DE SEMANA SANTA

Don Vicente V. Martín Díez 19-2-2013Tesorero Junta Local de Semana SantaHERMANO DE HONOR

HERMANDAD DEL SANTO CRISTO DE LA CLEMENCIA

Don Vicente V. Martín Díez 19-2-2013

HERMANDAD DE LA ORACIÓN DEL HUERTO

Don Vicente V. Martín Díez 19-2-2013

HERMANDAD DE ECCE HOMO

Doña Teresa Astorga Ramos 10-1-2013Don Julián Morán Reglero 29-1-2013

HERMANDAD DE JESÚS NAZARENO DE SANTIAGOY LA SANTA VERÓNICA

Doña María Pilar Antolín Rodríguez 3-5-2012Don Enrique González Miranda 21-9-2012Don José Agustín Moras Abril 6-1-2013Don Julián Morán Reglero 29-1-2013

HERMANDAD DE JESÚS NAZARENO DE SANTA CRUZ

Don Lorenzo Chico Ortiz 23-9-2012Don Jesús Miguel Rodríguez Morán 1-3-2013

HERMANDAD DE LA DESNUDEZ DE JESÚS

Doña Fe Badás Álvarez 13-7-2012Don Julián Gutiérrez Badás 15-7-2012

HERMANDAD DE LA VIRGEN DOLOROSA

Don Alberto Pizarro Valencia 5-4-2012

HERMANDAD DE LA CRUCIFIXIÓN DEL SEÑOR

Doña Victoria Rey Vegas 29-9-2012Doña Raquel Fernández Pérez 10-11-2012Don José Agustín Moras Abril 6-1-2013

HERMANDAD DEL DESCENDIMIENTO DE LA CRUZ

Don Luis Ángel Fernández San José 10-7-2012

HERMANDAD DE NUESTRA SEÑORA DE LA PIEDAD

Doña Josefa González Caballero 25-8-2012

HERMANDAD DE LA SOLEDAD

Don Enrique González Miranda 21-9-2012Don Jesús Rueda Ramos 17-7-2012

HERMANDAD DE JESÚS RESUCITADOY VIRGEN DE LA ALEGRÍA

Don Ezequiel Legido Pérez 22-6-2012

IN MEMÓRIAMAsí,

como una jornada bien empleadaproduce un dulce sueño.

Así,una vida bien usada

causa una dulce muerteLEONARDO DA VINCI

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Vanidad de vanidadesy todo vanidad, si no esamar y servir a Dios solamente.

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Tenías cruzado Torozos. Regresabas de la capi-tal, llevando entre los pliegues de tu sonrisa laalegría de la juventud.

Era un día como todos. Habías ayudado a tu padre enla complicada tarea de la contabilidadinformática. Y a tu madre, en esecotidiano quehacer que soportanlas amas de casa.

Era un día como el anterior, unviernes normal que preparabasllena de vida.

La luz de la mañana refrescabatu rostro, mientras disfrutabascon tus ex compañeros de institu-to, comentando las cosas másinsignificantes.

Iremos al cine. A Valladolid.Pero para regresar pronto…

Iba bien tu vida, Raquel, Ibabien tu vida.

Te quiero recordar, corriendo,cruzando la carretera, sin mirar,para abrazarme. Para poner tu corazón en cada beso.Espontánea. Con un brillo especial en tus ojos demujer…, de niña.

Quiero recordarte en las tardes de agosto, jugando yriendo con Fran y con Guillermo, mis nietos, protegién-doles, llenándolos de ilusión. Haciéndote como ellos,pequeña, manejable, cordial, sencilla…, inocente.

* * *

Era un viernes normal…Regresabais de Valladolid, con tu chico, alegres, con-

fiados, preparando el futuro.La bajada de «Coruñeses· te descubría la serena belleza

de la torre iluminada. La piedra blanca de la iglesia de SantaMaría, la tocabas con la mirada, mientras el coche se desli-zaba acercándote a Medina de Rioseco, tu ciudad, y tu vida.

Tu vida…, porque aquí estaban tus amigos, tus fanta-sías, tus familiares, tus proyectos, tu hermana, tus enor-mes deseos, tus padres.

Era un viernes normal…, pero era tu día.Ese día glorioso y fatal a la vez, en el que el cuerpo,

liberando el espíritu queda aquí abajo, mientras el almabusca lo interminable y llega a las puertas del Cielo.

El vehículo en el que viajabas, salto por los aires, antela embestida del coche que subía invadiendo vuestroespacio.

Tu tiempo se paró ante el tremendo error y la torreblanca se lleno de lutos. Mientras tu alma, pasaba lasestrellas, y volaba hacia la eternidad, en busca de laVirgen del pañuelo, por la que sentías una devoción infi-nita..

* * *

Tenía que ser un viernes. Estaba escrito en los astros.Guardado y resguardado el día en el corazón de Dios.

Pero no era tu viernes. No era elviernes de primavera, cuando lasprimeras amapolas llenan los cam-pos de esta tierra horizontal.

Ese día en el que los riosecanosse visten de blanco para llorar yrezar, con fe y devoción, ante lastallas procesionales.

Tu «Longinos», Raquel. Tu«paso» de La Crucifixión, tu her-mandad en donde, en sus libros,en sus páginas amarillas por eltiempo, figuran apellidos que tullevas.

No era ese viernes.–«No puede ser verdad…» gri-

taban tus padres.Pero lo fue. Y posiblemente ni

siquiera te enteraste.Me consuela saber que ahora libre de dolor y de

angustia, tendrás sobre tu pecho, la medalla plateada detu cofradía, y habrás ocupado ese lugar preferente que elSeñor te había reservado desde el principio de los siglos.Junto a los tuyos.

Tus padres y tu hermana rezan cada día. Y tus amigoslloran. Y hay un dolor unánime en esta bella ciudad delas iglesias. Y nadie te olvidará nunca, guapa niña.

Por una vez los Ángeles han dejado de tocar salmos yhan salido a recibirte vestidos de blanco, con faroles ymedallas de tu Hermandad, mientras en los altavoces delas nubes, la marcha del General O’Donell, «LaLágrima», pone melodías semana santeras que te acer-can hacia Dios

Adiós, Raquel, niña, joven, mujer, cofrade, amiga.

JESÚS MARÍA REGLERO

¿POR QUÉ…?

VIERNES SANTO. HERMANDAD DE LA CRUCIFIXIÓN.

A Jaime y Lourdes, y a Marta,que secan lágrimas cada anochecida,

y desgranan rezos cuando despunta el alba

DETALLE «LONGINOS».

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ste verano fallecía en el Hospital General de Astu-rias el Ex-Presidente del Congreso de los Diputa-dos, Catedrático, Ponente Constitucional, Funda-dor y Rector de la Universidad Carlos III deMadrid. Fallecía ocasionalmente en Asturias.

Gregorio fue pregonero de la Semana Santariosecana en el año 1994, últimos años deFernando del Olmo como presidente de la Junta.Yo me precio haber sido un buen amigo de

Fernando y sé que el lograr que Peces-Barba fuera pregonero, erauna de sus ilusiones y sé que, acaso, no fue antes por problemas,compromisos o controversias.

Gregorio era socialista y estamos en un error al pensar queser socialista es ser anticatólico. Hay socialistas más o menospracticantes e incluso indiferentes, agnósticos y ateos, pero todosson tolerantes y respetuosos y entre ellos estaba Gregorio. Ahoracon motivo de su muerte personalidades destacadas de la vidaespañola, hablan de él, de sus costumbres, de sus estudios, de suslogros y de sus frustraciones.

Yo, antes de entrar en el pregón en si, voy a escribir de ello,de sus testimonios y, también, de los míos, ya que yo fui un com-pañero, pero sobre todo, creo, fui un amigo. Le conocí aquí enRioseco en 1976, en el mitin que se dio en el Colegio CamposGóticos, posteriormente compartí tribuna y mesa con él enmuchos lugares de la provincia, hasta el punto que cuando toméposesión de la Alcaldía (1983) y siendo ya Presidente delCongreso de los Diputados (1982), con los Ayuntamientos deEspaña que tomaron posesión ese mismo día, estuviera en miinvestidura, y el otro día lo recordaba el portavoz, entonces, delPartido Popular, Francisco Blanco Nieto. Fuimos amigos, hastasu muerte, si bien desde que ambos dejamos la política activa,nuestros encuentros y partidas de dominó se hicieron menos habi-tuales. Me consta que agradeció el ser pregonero y poder dictarun testimonio de ética y moral católica.

Gregorio, como veremos era un niño grande, no había en elnada criticable, ni maldad alguna, era católico practicante, sinhacer alarde de ello, más que el necesario, pertenecía a ese grupode elite socialista que no pregonaba pero tampoco ocultaba suscreencias y prácticas religiosas. En el pregón de referencia, dice:«Acepté la invitación, porque no tengo inconveniente en definirme como cris-tiano erasmista en la feliz terminología que acuñó D. Fernando de losRíos», para seguir: «Me defino con una postura crítica sobre aspectos deldesenvolvimiento institucional en la historia del mensaje cristiano, pero conuna aceptación básica de la fe y también de las conmemoraciones que sim-bolizan la vida de Cristo, como la Semana Santa».

Con motivo del fallecimiento, todos los medios de comunica-ción se hicieron eco de ello así como el testimonio de sus amigosy compañeros.

Soledad Gallego dice en el País: «fue una Figura de la transi-ción, el quería hacer unas normas que sirvieran de guía para acabar con laarbitrariedad».

Pérez Rubalcaba, destaca que el momento más feliz de suvida, acaso, fue su nombramiento como Rector de la UniversidadCarlos III.

Juan Luis Cebrián, matiza que fue discípulo y ayudante deCátedra de Joaquín Ruiz Jiménez y fundador con Pedro Altaresde Cuadernos para el Diálogo (1963). Completaban este grupo deestudios junto con Cebrián, Camuñas, Julio RodríguezAramberri y Javier Rupérez, entre otros, todos congregistas deMaría Inmaculada. Tuvo siempre una intachable conducta ética,

comportándose como unsocialdemócrata tranqui-lo, fiel a su ideario delhumanismo cristiano quetanto marcó su juventud,finaliza con la reflexión«la democracia le debe más delo que le ha reconocido».

Roca, que compartiócon él la redacción de la Constitución, valora su amistad y lerecuerda como compañero en la defensa ante el Tribunal deOrden Público y Consejos de Guerra, destacando su tenacidad ypersistencia en la argumentación, así como su firmeza jurista.

Pérez Llorca, dice: El sufrimiento de su padre, condenado amuerte, después indultado, fue un acicate determinante, peronunca se dejó llevar por un afán justiciero fue un decidido y fer-viente partidario de la concordia. No le importó el dinero, vivíaespartanamente en Colmenarejo (Madrid).

Fernando del Olmo, en su presentación como pregonero,dijo que une a títulos el ser verdadero amigo de nuestra Ciudad.Agradeciendo que aceptara el encargo y manifestando que perso-nalmente se siente orgulloso de que Gregorio nos siga enseñandola filosofía de la convivencia, la moderación el equilibrio de lasleyes, igual que hace a través de sus artículos que con deleitacióny profundamente reflexionamos. Como aclaración diré queGregorio escribió en periódicos y revistas siendo habitual su artí-culo dominical de ABC.

Su pregón del que hago un pequeño resumen, comienza conun recuerdo a nuestros escultores y un agradecimiento «mi agra-decimiento y mi respeto».

A lo largo de su discurso «me inclino a glosar aspectos significati-vos de la muerte y resurrección de Cristo y de su repercusión para la sociedadde nuestro tiempo». «Como profesor de Filosofía del Derecho, me he planteadoel proceso de la muerte de Jesús y de los aspectos legales que le llevaron a laCrucifixión». Realzó más el sacrificio, porque Jesús fue condenadoinjustamente, sin respetar ni las leyes judías ni las romanas.

Hace un recorrido por los momentos de la pasión y las leyesvioladas, cita a autores como Rahner, glosando la Ascensión, PedroLaín, San Agustín; busca el paralelismo de la Constitución, elParlamento y los Derechos Fundamentales para recorrer el itinera-rio de la libertad, que con la redención por la gracia nos conduce ala libertad moral. Garandy o Munier son otros autores citados. Lameditación sobre el calvario y la resurrección, dice, que le llevan aimpulsar un esfuerzo por la paz y contra la violencia.

Hay un párrafo que no quiero omitir: Nuestra sociedad estásedienta de paz, el ejemplo de Cristo rechazando el recurso de laviolencia, prefiriendo morir a matar. Evitando como decíaRousseau «Que un hombre sea tan rico que pueda comprar a los demás otan pobre que tenga la necesidad de venderse».

Finaliza: venir a Rioseco ha sido una bendición y pronunciareste pregón un halago de la fortuna.

A todo aquel que tenga la paciencia de leer este artículo leinvito a que lea el pregón, que estuvo presidido a petición del pre-gonero por la imagen de la Dolorosa.

Vdes. saben que el pregón lo publica Caja España, pero en estecaso lo hizo la Junta de Semana Santa y lo distribuyó días después.

Como decía el poeta: «y aunque la vida murió, harto con-suelo nos dejo con su memoria».

EDUARDO FRANCO FELIPEEx-Alcalde y Hermano del «Santo Sepulcro»

GREGORIO PECES-BARBAPREGONEROSEMANA SANTA 1994

E D. GREGORIO PECES-BARBA.PREGONERO AÑO 1994.

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SEMANA SANTA2013

EL CUSTODIODE LA VIRGEN

Con entereza, enfrento custodia,mi corazón en un puño sabe de tu llanto,aliento esporádico calienta mi rostro,respiro al fin el aire de tu gloria.¡Oh, Virgen de mi esperanzaoh, Virgen de la Soledad!No abandones al custodio que te guarda.Clava en mi cuerpo el peso de tu altar,aceptaré sine qua non tu voluntad,compartir tu dolor como deidad,destino es que no puedo rechazar.¡Oh, Virgen de mi esperanzaoh, Virgen de la Soledad!No abandones al custodio que te guarda.Pues la muerte de tu hijo no es final,doce hermanos guían tu adiósmuestran a la ciudad la madre de Dios,la certeza de compasión celestial.¡Oh, Virgen de mi esperanzaoh, Virgen de la Soledad!No abandones al custodio que te guarda.

FERNANDO SORDOHermano de «La Soledad»

A JESÚS DE NAZARENOLlega la Semana Santay de luto nos vestimos,Jesús viene a redimirnosen forma de procesión.Ya está sonando el pardal,y mi corazón se encoge.La lágrima se me asomay ahí… estás Tú, mi Jesúscon tu túnica morada,con tu corona de espinas,y tu profunda mirada.

Los años pasan deprisa,pero todo sigue igual.El sentimiento no muere,y la emoción nos desbordade orgullo y felicidad,cuando recorres las callescargado sobre los hombrosde unos hombres que te quiereny que llenos de entereza,se inclinan ante tu imagencon devoción y nobleza.

Me viene de Tradicióny los suspiros se escapanal recordar mis abuelos, mi padre,mi marido, mis hijos.Todos a ti te siguieronesas tardes soleadasdonde la angustia oprimíatu sufrimiento mi alma.

Quiero ser tu cirineopara aplacar tu tortura.Me he encontrado con tus ojosque derrochaba ternura.Y esa mirada afligidame hizo tanto pensarQue… ¡Oh Señor!… ¡Oh mi Jesús!…¡Cuánto nos debes de amar!

M.ª LUZ PIZARRO PIZARROHermana de «Jesús Nazareno de la Santa Cruz»

NAZARENO DE SANTA CRUZ.

VIRGEN DE LA SOLEDAD.

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RecuerdosdelAyer

Revista deSemana Santa

Año 1927

LA DOLOROSA.Admirableescultura de Juni(Cliché E. García Chico)

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NOTICIAS RIOSECO COFRADEPor José M.ª Román Gutiérrez

El 26 de marzo del año 1663 la penitencial de la Quinta An-gustia y La Soledad, de Medina de Rioseco, encarga me-diante contrato la realización del paso de El Descendi-

miento al escultor vallisoletano Francisco Díez de Tudanca.Por esas mismas fechas se inicia la construcción de la capilla

que habría de albergar el paso, y así un año después, el ViernesSanto de 1664, salía por vez primera a las calles de Riosecodurante la procesión que la penitencial celebraba, junto a lospasos de El Sepulcro y de La Soledad, también pertenecientes aLa Quinta Angustia.

Pocos años más tarde, La Quinta Angustia completa su pro-cesión con el paso de La Crucifixión, que se ubicaría en la capillajunto al Descendimiento.

La hermandad de El Descendimiento surge como tal, ya desapa-recidas las antiguas penitenciales, en una fecha imprecisa de la pri-mera mitad del siglo XIX. Según D. Luis Luna Moreno, historiadorde arte y exdirector del Museo Nacional de Escultura Policromadade Valladolid, la de Rioseco es la primera hermandad documentadacon este nombre en España, y el paso de El Descendimiento, juntoal original de Gregorio Fernández de Valla-dolid, uno de los pocoscon esa advocación que se realizarían durante el siglo XVII.

Sirva esta breve reflexión histórica para introducir y motivar lapublicación del presente artículo, es decir, la celebración, en 2014,del 350 aniversario de la ejecución del paso de El Descendimiento–«La Escalera»– y, por añadidura, de la capilla que lo alberga y desu primera procesión.

El evento nos ha parecido lo suficientemente importante comopara confeccionar un variado programa de actos que se desarro-llarán a lo largo de todo un año, con la pretensión de rendir unsincero testimonio de agradecimiento a todos aquellos hermanosque nos precedieron; a todas esas personas –hombres y mujeres–anónimas en su mayoría, que desde entonces han sabido conser-var para nosotros este maravilloso legado.

Y no me refiero sólo a un paso, o a cuatro pasos, ni a unacapilla… Están los pasos, sí, extraordinarias tallas de la imagi-nería castellana. Y está la capilla. Pero más allá de los bienesmateriales, en el ámbito de lo intangible, es donde se encuentra,

350 ANIVERSARIO DE LA EJECUCIÓN DEL «PASO»«EL DESCENDIMIENTO DE LA CRUZ»

a mi entender, lo realmente valioso de la herencia recibida.Hablo de tradiciones, de fe, de ritos, de emociones y sentimien-tos. De la esencia de una hermandad, la nuestra o cualquierotra, y de la esencia de una Semana Santa. Porque una her-mandad, o la propia Semana Santa de Medina de Rioseco, seresume en un sentimiento. Un sentimiento compartido. Un sen-timiento que nace y va creciendo en cada riosecano como algoconsustancial a su existencia. Un sentimiento que marca elcarácter de toda una Ciudad.

Así pues, con el bagaje de nuestros mayores presidiendo cadaacto, hemos querido que la celebración del centenario tuviera uncarácter especial. Y, aunque la ocasión coincide con los 350 años denuestro paso, nos gustaría que todas las cofradías se unieran anosotros en la celebración. Desde aquí, en nombre de la herman-dad de El Descendimiento, invito a todos los riosecanos y a todosaquellos que lo deseen, a participar en los actos que tenemos pro-gramados y que muy pronto daremos a conocer. Ya adelanto que laintención es realizar algún tipo de evento cada mes, empezando enmayo de este año, para finalizar en mayo o junio de 2014.Intentaremos que los actos respondan siempre a alguna de las fina-lidades principales que tuvieron en su día las penitenciales rioseca-nas y que aún hoy mantienen las cofradías en mayor o menormedida: religiosos, culturales y asistenciales (hoy solidarios).

También quiero aprovechar estas líneas para realizar un agra-decimiento público a todas las personas e instituciones que de unau otra manera han participado para poder llevar a cabo este pro-yecto:

En primer lugar, a las cofradías riosecanas, por el interés y labuena disposición con la que acogieron nuestra propuesta cuando laplanteamos en la Junta Local de Semana Santa. Especialmente, alas cofradías de La Crucifixión, de El Sepulcro y de La Soledad,provenientes como nosotros de la penitencial de La QuintaAngustia, y que en base a ello participarán directamente en la orga-nización de varios actos.

A las instituciones que, desde el principio, nos animaron yofrecieron su apoyo y colaboración, sin las cuales nada de estosería posible: Ayuntamiento de Medina de Rioseco, Junta Local

de Semana Santa, Parroquia de Santa María y Santigo,CIT Ajújar, Asociación Pro-Templos y DiputaciónProvincial de Valladolid.

Por adelantado, a las demás personas, empresas e ins-tituciones que, sin duda, a lo largo de este año se iránsumando a la celebración implicándose de diversas for-mas.

A los hermanos y hermanas de El Descendimiento,por el entusiasmo y la ilusión con que acogieron la idea.Por su apoyo incondicional y su entrega siempre desinte-resada.

Tenemos confianza en que, con la ayuda de todos, lacelebración pueda cumplir con el objetivo marcado, y queel homenaje que con humildad pero con el orgullo de sen-tirnos sus sucesores queremos rendir a nuestros mayores,esté mínimamente a la altura de la dignidad que ellos seganaron.

Que Dios guarde a nuestra Hermandad y a nuestraSemana Santa muchos años.

JESÚS VICENTE BREZMESPresidente de la Hermandad de «El Descendimiento»

«GALLETA» DEL BANDERÍN DE LA HERMANDAD

«EL DESCENDIMIENTO» (S. XVIII) RESTAURADA.

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

Los días 27, 28 y 29 de marzo de 2012, la Junta de Cofradíasde Semana Santa, como ya viene siendo habitual, organizódistintas Conferencias-coloquio sobre nuestro diverso y

rico Patrimonio y la singular Tradición que atesora la SemanaSanta riosecana y otros aspectos afines a ella que se desarrollanen distintos lugares de nuestra geografía hispana.

Para ello se contó con importantes especialistas en los distin-tos temas a desarrollar, ponentes que de forma altruista, conapoyo de audiovisuales o sin ellos, supieron llegar al numerosopúblico asistente a dichos actos, realizados en los salones de laObra Cultural de Caja España-Caja Duero de Medina deRioseco, para hacerles llegar y transmitirles su mensaje de mane-ra sencilla y comprensible.

Abrió el ciclo, el día 27 de marzo, el profesor y doctor enHistoria Moderna de la universidad de Valladolid, el Ilmo. Sr.Don JAVIER BURRIEZA SÁNCHEZ, investigador y escritor que,bajo el título de «Castilla y León: un espacio internacional de laSemana Santa», narró y mostró en imágenes las peculiaridades ytradiciones más representativas de diversas semanas santas, susprocesiones y personajes, que definen su amplia panoplia sema-nasantera de nuestra vasta y amplia Comunidad Autónoma:Castilla y León. Comunidad que, a partir de ese año 2012, cuen-ta con siete ciudades en las que sus desfiles procesionales y la pro-pia Semana Santa han sido distinguidas con el «marchamo» deFiesta de Interés Turístico Internacional, entre las que última-mente, junto a la nuestra 8 entre otras) ha sido considerada comotal la de Palencia.

El día 28 de marzo, miércoles, se contó en dicho evento con lapresencia del Rvdo. Padre Don ÓSCAR ROBLEDO MERINO,sacerdote y Delegado diocesano de Patrimonio del Obispado deÁvila que fuera adalid del gran éxito obtenido por la Exposiciónde las Edades del Hombre «PASSIO», celebrada durante el año2011 en las ciudades de Medina del Campo y Medina de Rioseco,a la par, exposición de la que fue su Comisario y, por tanto, elmáximo responsable en su realización y desarrollo.

En su conferencia se analizó y mostró con apoyo audiovisual,todas las facetas y acepciones más significativas del contenidoreligioso del Jesús- Hombre en la Cruz, base primigenia y «clavede bóveda» de la Fe cristiana. Hizo un detallado y pormenoriza-do análisis de todos los «crucificados» que estuvieron presentesen la señalada exposición, en la sede de la iglesia de Santiago de

XII CICLO DE CONFERENCIAS: «SEMANA SANTA. PATRIMONIO Y TRADICIÓN»

los Caballeros, durante los meses en que estuvo abierta al públi-co tan magna e interesante exposición, muestra viva de la Pasióny nuestra fe en Cristo, muerto y resucitado. ¡Gran Exposición lade las Edades del Hombre, que ha marcado un hito en la historiade Medina de Rioseco!

Por último, el 29 de marzo, como epílogo final del Ciclo (deci-mosegundo en esta ocasión) tomó el estrado, y con él la palabra,el Ilmo. Sr. Don JAVIER RAMÍREZ UTRILLA, Director general deturismo de la Consejería de Cultura y turismo de la junta deCastilla y León. Bajo el epígrafe de «Valor Turístico y Cultural dela Semana Santa» fue desgranando y exponiendo su parecersobre el actual valor turístico de estas fechas, valor que definiócomo vital y trascendental para toda la Comunidad castellano-leonesa, dada la importancia de atracción turística y el grannúmero de personas-turistas que genera este tipo de manifesta-ciones religiosas y tradicionales, que suponen un importanteapoyo económico a diversos sectores y riqueza para la economíade las ciudades que sirven de atracción para ello. Todo ello sinobviar su cariz cultural, al ser Castilla-León una gran potenciapatrimonial, con numerosos conjuntos histórico-artísticos en dis-tintas ciudades, más aún cuando se refiere a la extraordinariaescultura religiosa que atesoran, con tallas o imágenes procesio-nales de que dispone, obras de insignes escultores de distintasépocas, entre ellos: Gregorio Fernández, Juan de Juni, Tomás deSierra; Pedro de Bolduque, etc.

Indicó que la Junta de Castilla y León, a través de laConsejería y la Dirección General de Turismo, a pesar de laactual y dura crisis que se padece, «siempre apoyará y potenciará unade las manifestaciones culturales de primera magnitud, como es la SemanaSanta», tanto en sus aspectos turístico, económico, cultural ysocial.

En ese último día, finalizada la conferencia-coloquio, se pro-cedió a la Clausura Oficial del interesante y ameno XII Ciclo deConferencias «PATRIMONIO y TRADICIÓN», brindandopor su desarrollo y felicitando de que esto pueda hacerse graciasal principal valedor del mismo, don Andrés San José de laFuente, Presidente de la Junta Local de Semana Santa de la ciu-dad de Los Almirantes quien en unas breves palabras agradecióla asistencia tenida y les convocó, al público asistente, para elXIII Ciclo, a celebrar durante el mes de marzo de 2013, en lasfechas que en su día se decidan.

De izquierda a derecha: Óscar Robledo Merino, Javier Burrieza Sánchez, Javier Ramírez Utrilla y Andrés San José de la Fuente.

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SEMANA SANTA

2013

En el mes de marzo, por distintos medios propios y de comu-nicación social, se hizo la convocatoria pública para que,todos aquellos que así lo quisiera, pudieran conocer y, en

su día, poder presentarse al ya veterano Concursode fotografía «Tomás de Sierra», el cual alcanzasu duodécima edición y que convoca la juntaLocal de cofradías de Semana Santa, con el fin depoder distinguir y premiar aquellas fotografíasque pudieran ser elegidas para poder ser Cartelde Semana Santa-2013, así como para la porta-da principal de la Revista Ilustrada-2013, queanualmente edita la Junta Local y que, en estacaso, cumplirá su vigésima quinta edición.

Como consta en los folletos informativos edi-tados para tal convocatoria, las fotografías pre-sentadas deberán ajustarse a unas basespreviamente establecidas, preferentemente referi-das a: Tema, inédito y no editado con anteriori-dad; Tamaño del trabajo presentado (para serexpuesto); Diseño en vertical; etc. Se permitenlos fotomontajes.

El pasado año, los premiados de dicho con-curso fueron los siguientes: Premio a la fotogra-

fía para Cartel anunciador de Semana Santa 2013, a la titula-da «CLEMENCIA», cuyo autor es el fotógrafo y cofrade rio-secano, Óscar Anta Cea. El premio a la fotografía para la

portada de la Revista Ilustrada 2013 de Sema-na santa le fue concedido al trabajo foto-gráfico titulado «ENTIERRO», del que es suautor el vallisoletano Alfredo José MiguelRomero.

Del mismo modo, considerando la calidad delos trabajos presentados, fueron concedidos dosaccésit a los trabajos fotográficos titulados«HERIDO» y «BAJO BÓVEDAS», cuyos autoresson Luis Fernández Nanclares y José IgnacioSantamaría, hermanos de la cofradía del «SantoCristo de la Paz y de los Afligidos» y la de «ElDescendimiento», respectivamente. Este últimopresentó una Exposición variada de sus trabajosen este campo semanasantero, lo cual se puedever en la página web de la Junta (www.semanas-antaenrioseco.com), momentos en que quedaplasmados el sentir y la pasión de aquello que,intrínsicamente, es valor permanente de la PasiónRiosecana.

CONVOCATORIA DEL XII CONCURSO FOTOGRÁFICO «TOMÁS DE SIERRA»

Gran acontecimiento, estrenado y realizado el mes de marzo de2012, en la iglesia de Santiago de los Caballeros. Obra musi-cal del músico riosecano Pablo Toribio Gil, cofrade de «La

Crucifixión», que aúna su cariño hacia la Semana Santa con el estu-dio y trabajo bien hecho a fin de buscar ideas nuevas y caminos aseguir dentro del rico acervo cultural y patrimonial que ello conlleva.

Dicho acontecimiento contó con la estrecha colaboración del Iltre.Ayuntamiento, la Junta Local de Semana Santa y la Parroquia deSanta María y Santiago, siendo muy importante en el devenir y éxitode dicha obra, la participación desinteresada y altruista de las Bandasde cornetas y tambores de la Junta Local de Semana santa (Sto.Cristo de la Clemencia); de la Hermandad del Santo Cristo de la Pazy de los afligidos (banda del mismo nombre que su Cofradía), laBanda de CC y TT «Jesús Nazareno y la Santa Verónica», pertene-ciente a la Hermandad de «Nuestro padre Jesús Nazareno de San-tiago y la Santa Verónica»; Banda de Música Municipal, así como loscoros Universitario de Salamanca; el infantil del Colegio de San

Vicente de Paúl, El Pardal, tapetanes, barraqueros y otras personasintervinientes en el acto, el cual tuvo una concurrida asistencia quellenó totalmente la iglesia deSantiago.

Por decisión de su organiza-dor y compositor de la obraestrenada, los beneficios econó-micos conseguidos por ello fue-ron destinados, íntegramente, afines de interés social e índolehumanitaria: Caritas Diocesana,Cruz Roja; Asociación españolacontra el cáncer; ayudas indivi-duales a personas necesitadas.Fines plausibles y recomenda-bles, más aún considerando losdifíciles tiempos por los quepasamos en nuestra sociedad.

CONCIERTO- HOMENAJE A LA MÚSICA EN SEMANA SANTA:«ECCE HOMO»

La hermandad de «JESÚS NAZARENO DE SANTIAGO y LA SANTA VERÓNICA», el pasa-do mes de octubre, nombró HERMANO DE HONOR de dicha Cofradía a VALERIANOMARTÍN, actual nº 1 en su lista de cofrade y persona que ha dedicado una importantísima parte

de su vida al servicio de su Hermandad.El los años treinta, en plena guerra civil, Valeriano decidió ser hermano de dicha Cofradía y, desde

entonces hasta estos días, continúa siéndolo, dando ejemplo de tesón y dedicación a ella, tal como le fuereconocido por la actual Junta directiva de la Hermandad, proclamado en las palabras de su presidente,José Fernández Abril, durante el acto organizado para tal evento y que se desarrolló en el Salón de actosde CAJAMAR en la fecha ya indicada.

Su paso por la Hermandad lo fue ocupando distintos y variados puestos, de menos o más responsabi-lidad, pero todos ello de gran importancia par él: «tapetán», portador del paso, Mayordomo; Secretariodurante muchos años, vocal de la Junta directiva y en la actualidad, un referente y ejemplo a seguir paraquienes forman parte de tan querida Hermandad. En nombre de todas las Hermandades penitencialesriosecana y en el de la Junta de Cofradías: ¡¡FELICIDADES!!

NOTICIA EN LA HERMANDAD DEL «NAZARENO DE SANTIAGO Y LA VERÓNICA»

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MEDINA DE RIOSECO

SEMANA SANTA

Los días 10 de noviembre de 2012 y 6 de enero de 2013, serádos fechas a considerar por sus repentinas, inesperadas,trágicas y amargas condiciones en que sucedieron y que

supuso que dos hermanos de distintas Cofradías de nuestraSemana Mayor, en la juventud de su vida, nos dejaran para ir areunirse en el MÁS ALLÁ con otros hermanos y hermanas que,en algún momento de nuestra historia cofrade, formaron parte deesta amada Semana Santa riosecana.

RAQUEL: hermana de «La Crucifixión» de la popular cofradíade «El Longinos», que con solo veintiún años, en plena juventud,por destino inexplicable e inesperado, nos dejó el 10 de noviem-bre de 2012 como consecuencia de un desgraciado y aparatosoaccidente de tráfico.

JOSE (nombre por el que se le conocía normalmente): cofrade de«Nuestro Padre, Jesús Nazareno de Santiago y la Santa Verónica»,y la popular Hermandad de «La Crucifixión o El Longinos», amigo

de muchísimos riosecanos, cofrades o no, quien a sus 52 años, por elfatal destino de la vida, el día 6 de enero (¡que fecha tan especial!),fue llamado por el SEÑOR para que compartiera a su lado, junto aÉl y los seres más queridos, la VIDA ETERNA.

Momentos gozosos de esa eternidad a la que estamos convo-cados todos y que, imparablemente, sin discusión alguna, nos lle-gará con el tiempo.

Allí estará trazando futuros tableros, escogiendo la mejormadera a emplear, siempre con su exquisitez y amor por su pro-fesión y, sobre todo, su Semana Santa: («¡lo mejor, para ella!»,solía decir). Como testimonio de ello, en su sencilla pero extraor-dinaria belleza, podemos contemplar tu trabajo en el nuevo table-ro para el «Cristo de la Clemencia», realizado conjuntamente conJuan Carlos Salan y Jesús Cano, valorado y admirado por losriosecanos. ¡Cuántos arreglos y restauraciones de tableros depasos realizadas! ¡Cuántas horquillas hechas para los pasos!Cuántos y cuántos favores y trabajos llevados a cabo a la manerade un fino ebanista de entonces, algunos realizados de formaaltruista. Eras así: sencillo, callado, cumplidor, amante de tu pro-fesión, amigo de todos los que quisieran serlo y, principalmente,un riosecano que disfrutaba y presumía de serlo.

¡Cuántas y cuántas cosas más y buenas se podrían decir de ti!Eso y mucho más era JOSE: el cofrade, el amigo, el CARPIN-TERO, maestro en su profesión.

Nos consuela saber que todos tus conocimientos los has pues-to a disposición de los Santos y Ángeles, en la Carpintería Divinay Celestial de Jesús de Nazaret, hijo de Dios Padre.

Queridos y recordados AMIGOS y COFRADES:Descansad en Paz y que disfrutéis de la Gloria Eterna junto aCristo, nuestro Padre y Salvador.

Desde hace unos años, las negras previsiones que vaticina-ban distintos medios de comunicación escrita, radio o TV,e incluso el Servicio Meteorológico de la Comunidad, se

fueron cumpliendo, inexpugnablemente y la lluvia u otro tipo deinclemencia, hicieron imposible el normal desarrollo de actos y,de manera principal, de las distintas procesiones programadaspara esas fechas.

Si bien en años anteriores hubo aparecido algún inconvenienteal respecto, fue en el año 2012 (año importante para medina deRioseco, por desarrollarse en ese año la Exposición «PASSIO» delas Edades del Hombre), en el que empezó a producirse lo peor quepuede ocurrir para el desarrollo natural y normal de las procesionesde Semana Santa: aparecieron la fuertes lluvias que originaron lassuspensión de las principales procesiones: la del Jueves Santo (sus-pendida totalmente) y Viernes Santo (suspendida parcialmente) y,como no iba a ser menos, a la mitad del recorrido de la nueva pro-cesión del martes santo, la de «La Clemencia», esta hubo de hacer-se de manera acelerada y precipitadamente para que el agua nopudiera producir daños importantes en la imagen del «Cristo de laClemencia» y su nuevo tablero sobre el que se asienta.

Los mayordomos de las distintas hermandades que vieron lle-gar el día deseado de ostentar tal cargo, hubieron de resignarse y,con responsabilidad y un gran talante en su penar, aceptar aque-llo que nada ni nadie podía parar: la lluvia, y con ello, ver comose suspendían el desfile de sus «pasos» en procesión, momentostradicionales, culturales y de profundo sentimiento cristiano quesupone un «catecismo vivo» de fe en las calles de Rioseco.

Como no iba a ser menos, esto volvió a ocurrir en el pasadoaño 2012. Las procesiones del jueves y viernes Santo tuvieronque ser suspendidas y los cofrades que ese año debían ser porta-

dores de su paso, con total resignación y no menos enfado en suinterior, vieron como sus ilusiones se esparcían y finalizabantodas aquellas «cosas» que tenían pensada realizar en ello, alpoder ser «cadena», «palote» o el ocupar cualquiera otro puestoque le permitiera «SACAR SU PASO».

Pero como la esperanza es lo último que debe perderse, esteaño 2013, deseamos y esperamos que las cosas vuelvan a su caucenatural, regresen los gélidos fríos mesetarios de Castilla el frío(¡no nos importa!) y nuestros desfiles procesionales, nuestrospasos, regresen a las viejas calles riosecanas para el disfrute ygozo de los riosecanos y quienes vengan a acompañarnos duran-te esa fechas. Es tan grande e importante nuestra Semana Santaque debe ser «paseada» y proclamada en los inigualables espaciosurbanos que conforman nuestra histórica y rica en su patrimonioartístico, cual es el caso de esta ciudad: MEDINA DE RIOSE-CO, tan estrechamente unida a su SEMANA SANTA.

MAL «FARIO» METEREOLÓGICO DE LOS ÚLTIMOS AÑOS

FALLECIMIENTO DE LOS HERMANOS:RAQUEL FERNÁNDEZ PÉREZ Y JOSÉ A. MORAS ABRIL

VIRGEN DEL PAÑUELO: «EL LONGINOS».

VIA CRUCIX. MIÉRCOLES SANTO.

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SEMANA SANTA

2013

Debido al lamentable estado de deterioro y desensambla-do de distintas partes de dicha escultura o talla religio-sa que, tradicionalmente, abre la popular procesión del

Via Crucix del miércoles santo, tan querida y reconocida por lamultitudinaria asistencia de riosecanas y riosecanos a ella, apetición de la Junta Local de Semana santa, con la autorizaciónde la Parroquia de Santa María y Santiago, representando a laDiócesis Arzobispal, propietaria de dicha talla, se iniciaron loscontactos necesarios ante la Consejería de Cultura y Turismo dela Junta de Castilla y León, a fin de que pudiera ser debida-mente restaurada, dentro del Programa-Convenio deRestauración, vigente, establecido en su día entre la Junta deCastilla y León-Consejería de Cultura y la Junta Local deSemana Santa.

Como resultado de ello, en la actualidad y en base al Convenioeconómico suscrito entre ambas Instituciones, se está procedien-do a realizar dicha resta de Don Juan Carlos Martín García,miembro de la Comisión y Restaurador del departamento dePintura y Escultura del Centro de Conservación y Restauraciónde Bienes Culturales de Castilla y León. Dicha restauración esta-rá finalizada a mediados del mes de marzo para poder regresar aMedina de Rioseco con la antelación suficiente para ser presen-tada su restauración ante las personas que deseen, en una parti-cular exposición a desarrollar en la iglesia de Santa María deMediavilla, días antes a sacarla en procesión en el Via Crucix delmiércoles santo.

Este Crucificado vivo esuna pieza de tamaño «acadé-mico», de 56 × 54 × 11 cm. dedimensiones para la imagende Cristo, datada a principiosdel Siglo XVII que represen-ta a Cristo crucificado en elmomento previo a expirar,con la cabeza erguida y lamirada dirigida al vacío,hacia el Cielo, a Dios Padre.

La cruz en la que está cla-vado Cristo es de madera,con forma de tronco deramas del «árbol de la vida»,pintada en tonos verdosos yde 92 × 70 × 16 cm. de dimen-siones. En su momento, hacemuchos años, quizás siglos,fue repolicromado, y en él se pueden apreciar restos de su anteriorpolicromía ¿la original?, la cual presenta grandes depósitos de sucie-dad y concreciones en las partes más deprimidas del relieve y sumodelado, como consecuencia del paso de los tiempos y falta demantenimiento, así como la falta de conservación de su talla.Presenta leves golpes y arañazos derivados de su inadecuada mani-pulación y a su uso a lo largo del tiempo.

RESTAURACIÓN DEL CRUCIFICADO VIVO DE LA PROCESIÓN DEL VIA CRUCIX

En el mes de mayo del año en curso, del día 2 al 6, la Junta Local de Semana Santa, conla colaboración de la Parroquia de Santa María y Santiago, ha programado y organi-zado un viaje a Roma, a la Ciudad del Vaticano, con el fin de estar presente en la JOR-

NADA MUNDIAL DE COFRADÍAS que, desde el día 3 al 5 de mayo, se ha organizadooficialmente por quienes corresponde (Comisión de los Encuentros Nacionales deCofradías), dentro de los actos programados para conmemorar el Año de la Fe, año que S.S. el Papa, Benedicto XVI, ha querido que tuviera lugar con unos actos especialmente diri-gidos a la Cofradías y Hermandades del Orbe católico, realizando una peregrinación a latumba de San Pedro.

El motivo o lema principal de este viaje-peregrinación, es: «Por los caminos del mundo:Testimonio de Fe, con las Cofradías en peregrinación a la Tumba de San Pedro, para unaNueva Evangelización». Junto a esta peregrinación al sepulcro de San Pedro está previstoen el programa de actos, diversos encuentros, eucaristías con su Santidad y visitas guiadas ala incomparable Ciudad Santa, el Vaticano y distintos lugares de la hermosa ciudad que esRoma.

Obviamente, la Junta Local de Cofradías, junto con la Parroquia de Santa María ySantiago y cuantas personas quieran acompañarnos en este acontecimiento histórico, en eldeseo de estar presente en ello, ha programado dicho viaje, para realizar en las fechas seña-ladas en un principio. Con esto se pretende que, teniendo como elemento principal a lasCofradías, a través de ellas y de la Semana Santa, nuestra ciudad de los Almirantes deCastilla, de raigambre y singular tradición, reconocida en todo el territorio nacional, se veareconocida internacionalmente y tenga la posibilidad de ser un polo de atracción del turismohacia ella.

ROMA: JORNADA MUNDIAL DE LAS COFRADÍAS Y LA PIEDAD POPULAR

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Más información y noticias actualizadas en nuestra página web:

www.semanasantaenrioseco.com

VIA CRUCIX. CRISTO VIVO.

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ÍNDICE

Prólogo. Tradición, patrimonio, sentimientos: ¡¡Semana Santa!!. Andrés San José de la Fuente 3Semana Santa en Sevilla y Medina de Rioseco: dos ciudades y un sentimiento. Artemio Domínguez González 6

Meditación ante el Santo Cristo de la Paz. Ricardo Blázquez 8El año de la fe y la Semana Santa. Carlos Amigo Vallejo 10

Semana Santa para los «escuchas» de la palabra. Juan Carlos Fraile 12Proclama 14

Relación de Pasos y Mayordomos para el año 2013 15Junta de Gobierno; Relación de Cofrades 16

Programa 18Los antecedentes escenográficos del paso procesional de Semana Santa. Jesús M.ª Parrado del Olmo 26

El brazo de Nicodemo. Enrique Gavilán 29Hombre, tierra, cielo. Luis Miguel de Dios 31

La Semana Santa en Medina de Rioseco: un ritual perfecto. Luis Díaz Viana 32Un rito de paso. Carlos Blanco 33

Santos propósitos: volver. Esmeralda Marugán 34Por Semana Santa, un año más. Luis Jaramillo 35

A la Torre de Santa María Ángel de Pablos Chapado 39Semana Santa en Medina de Rioseco. Aurelio García Macías 40

Semana Santa… en familia. Juan Carlos Pérez de la Fuente 42La conjura de un pueblo. Mar Domínguez 43El valor de la cultura y las tradiciones:

Semana Santa en Medina de Rioseco. Josefa Eugenia Fernández Arufe 45Rioseco o el corazón del tiempo. Carlos Aganzo 47

Mi Semana Santa. Alejandro Menéndez Moreno 48Entrevista. Javier Burrieza Sánchez. «El historiador-cofrade».

Nuestro pregonero 2013. José María Román Gutiérrez 51Elegía a la Burriquilla.

Oración al Cristo de la Desnudez. Diálogo desde la escalera.

Ángel M.ª de Pablos 53La fe de un pueblo. Félix-Carmelo García Martínez 54

Historia, arte y fe. Tierra, agua y cielo. Elena Rodríguez Costilla 55Medina de Rioseco en la memoria: impresiones de

un lejano día de invierno. Luis Ángel Lobato Valdés 57Año de la fe: retorno a las fuentes. Sor María González Pérez 58La Música en la Semana Santa de Medina de Rioseco (I).

El oficio de tinieblas. Pablo Toribio Gil 60Pascua Florida. Eugenio Jesús Oterino 62

Anuncios comerciales en la Revista de Semana Santa.Gonzalo Franco Revilla 64

Sobre el Hospital de Convalecencia y la Vera Cruz. Virginia Asensio 66In Memóriam 68

¿Por qué…? Jesús M.ª Reglero 70Gregorio Peces-Barba. Pregonero Semana Santa 1994.

Eduardo Franco Felipe 71El custodio de la virgen. Fernando SordoJesús Nazareno. M.ª Luz Pizarro Pizarro 72

Recuerdos del Ayer 73Noticias Rioseco Cofrade. José M.ª Román Gutiérrez 74

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… ES CON EL ESPLENDOR DEL ILUSTRADO CANAL DE CASTILLA, EN UNA IMAGEN UNIVERSAL, CUANDO MEDINA DE RIOSECO

ADQUIERE LA MÁXIMA GRANDEZA, SIENDO CONOCIDA POR «EL RICO LUGAR DONDE DICEN QUE HAY MÁS DE

1.000 HOMBRES A CUENTO DE HACIENDA».

… A PARTIR DE ENTONCES COMIENZA LA ÉPOCA VERDADERAMENTE SUBLIME DE SU APOGEO ARTÍSTICO, QUE LLEGA A

ALCANZAR UNA RELEVANTE Y GRAN IMPORTANCIA AL CABO DE LOS AÑOS.

… CON LOS MERCADERES (S. XVI-XVII) LLEGAN A LA VILLA DE LOS ALMIRANTES UN GRUPO DE IMPORTANTES ARTISTAS

TALES COMO RODRIGO DE LEÓN, MIGUEL DE ESPINOSA, JUAN DE JUNI, CRISTÓBAL DE ANDINO, ANTONIO DE ARFE,GREGORIO FERNÁNDEZ Y, MÁS TARDE, TOMÁS DE SIERRA Y SU FAMILIA…, QUE VAN PLASMANDO MARAVILLOSAS

OBRAS INSPIRADAS EN EL ARTE ANTIGUO QUE VENÍA DE ITALIA Y QUE AQUÍ COMENZABA A QUEBRAR ALBORES…

ESTEBAN GARCÍA CHICO.

De su Catálogo Monumental de la provincia de Valladolid.MEDINA DE RIOSECO

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EditaJUNTA LOCAL DE SEMANA SANTA

DirectorAndrés San José de la Fuente

CoordinadorJosé María Román Gutiérrez

TextosAndrés San José de la FuenteArtemio Domínguez GonzálezRicardo BlázquezCarlos Amigo VallejoJuan Carlos FraileJesús M.ª Parrado del OlmoEnrique GavilánLuis Miguel de DiosLuis Díaz VianaCarlos BlancoEsmeralda MarugánLuis JaramilloÁngel de Pablos Chapado (†)Aurelio García MacíasJuan Carlos Pérez de la FuenteMar DomínguezJosefa Eugenia Fernández ArufeCarlos AganzoAlejandro Menéndez MorenoJosé María Román GutiérrezÁngel M.ª de PablosFélix-Carmelo García MartínezElena Rodríguez CostillaSor María González PérezLuis Ángel Lobato ValdésPablo Toribio GilEugenio Jesús OterinoGonzalo Franco RevillaVirginia AsensioJesús María RegleroEduardo Franco FelipeFernando SordoM.ª Luz Pizarro PizarroJesús Vicente Brezmes

FotografíasArchivo Junta de Semana SantaDavid CarpinteroFernando Fradejas de CastroFoto BarriosJosé Carlos Lobo GarcíaJosé I. Santamaría MagdalenoLuis Anselmo Sánchez GutiérrezLuis Fernández Nanclares

Citas SeparadoresExtraídas del libro IMITACIÓN DE CRISTO,

de Tomás Kempis

Portada«Entierro». Fotografía: Alfredo José Luis Miguel Romero

ImprimeGráficas Gutiérrez MartínCobalto, 7. Valladolid

Depósito Legal: VA. 164.–2013

PATRONATO PROVINCIAL DE TURISMO

Junta Local de Semana Santa SE

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Ayuntamiento deMedina de Rioseco


SEMANA SANTA 2013


PARROQUIA SANTA MARÍA Y SANTIAGOMedina de Rioseco (Valladolid)

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MEDINA - semanasantaenrioseco.com · presenciar el encuentro de Cristo en la cruz, Vivo y Muerto, con la Madre (La Dolorosa) en el atrio de la iglesia de Santiago de los Caballeros