MENSAe! DIRIGIDO PO}l

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, EN LA APERTijRADE StlS TERCERAS SESIOHES

EL DIA 25 DIt NOVIEiVlBRE DE 1858.

Senores Representantes.

E felicito cordialmente a1 veros reunidos para dar principio a las presentes sesiones ordinarias, y es para mi sumamente grato que al emprender vUes­tros trabajos anuales; encontreis a nucstra patria gozando de los beneficios de la paz.

En efeeto, Senores; vuestros esfuerzos y los mlOs para asegurar a los pueblos que nos han encomendado sus des .. tinos, el 6rden, la tranquilidad y el bienestar; comienzan a dar re­sultados que todos sienten con satisfaction. La confianza, que pasadas turbulencias y discordias habian alejado; se ha ido testableciendo gra dualmente a favor de Ius prudentes y sabios principios de estabilidad y de justicia que han guiado las resoluciones y aetos de esta Camara, y que son observados inalterablemente por el Gobierno.

N uestras buenas relaciones con los paises estrangeros Se mantie~ nen felizmente sin alteracion, y por m! parte nada omito para que se conserven, estrechen y aumenten. Recienternente he ajllstado y con­c1uido un tratado de paz y amistad entre Ia Republica y S. M. el Rey de los · Paises Bajos, basado en los misrnos principios de los que se han celebrado con otras potencias. No habiendo sido posible alla­nar del todo las dificultades que se presentaron, segun infol'm~ a la Camara e) ano pr6.xilJlo ant~ri01', para la celebracion de Un tratado

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con .. Ia Espaua. y ha.I,ienJoso milnifestudo qucel Gobicrno oc S. M. C. descaba se trasladase la negociacion a Madrid, di orden it nues­tro Repl'esentante en aqllella corte. para que.la _.prosiga, y . te.rig,o esperanza de que mi constante deseo de ' ver terminado este negocio, sera aI fin satisfecho.

Piled0 asegurar a esta respetabIc Camara que en ninguna epoca, despues de Ja independencia, ha reinado mejor inteligencia y mflS cordial fraternidad que la que ahora existe, y se procura cuidaoosamente mantener, entre Guatemala y los otros Estados de Centro-Am~rica.

La terrible ]eccion que recibi6 NicaraQ'ua en medio de sus disc(lrdias, y el conflicto que ]a invasion dp. los fil ibustel'os ('n aqueI Estado pro­dujo en todD el pais y que en todns partes ocasion6 talltos males y desastres, parecen haber sldo, sin embargo, lecciones saludables; pues poniendo a] descubierto el peligro y el abismo a donde nos conducian Ia inesperiencia y la discordia, han hecho vo]ver los ojos bacia los verqaderos y bien entendidos intereses pllblicos, abandonflndose las cuestiones abstractas, esterilcs y muchns veces pUHiles que nos divi­dian. Estingllidas al mismo tiempo. las malaB pasiones que se f'ngcn­dran en las guerl'as civiles, parece sel' hoy general el sentimiento de mantener a toda costa la paz, que pOl' todas partes derrama a ma­nos Henas la abundancia y la prosp8ridad, y que se hacc tanto mas amab]e cuanto mas odioso es el recuerdo de los males que S'3 han sufrido. E] respeto a la autoridad constituicia, que es la salva guardia y . Ia defensa .de las sociedades, y el ardiente deseo de verla afianzada y estable, es lin sentimiento natural en pueblos que han esperimen­tado las fatal es consecuencias de ]a anarqllia; 6 los de la continua convulsion que ocasiona]a exagprada movilidad del Gobierno. Debemos, pues, congratul<lTllos de la favorabl e situllcion en que se encuentra todo el pais, ybendecir la mana del Ornnipotente, que si nos ha he­cho pasar pOl' duras pruebas, permite que hoy pod amos fundal' una esperanza halagilelia para el porvenir.

En el interior de nuestra Republica influye natural y benefica­mente esta sitnacion. La administracion, aun cuando no dejan de sen­tirse aquellas dificultades que son consigui r ntes a la falta de medios ~n un pais nuevo y que comienza a funoar sus instituciones y SIl Go­bierno, marcha, sin embargo, con Ia posiblc regularidad; y puedo ase­gurar a ]a Camara que mi ar,diente deseo y mis continuos esfuerzos tienen por objeto que todo se mejore y perfeccione, .como que ell el Gobiel'llo es donde mas se pal pan y se sienten los males de cualquiera abuso 6 irregularidad , principalmente en la administracion de justicia, en el Gobierno interjor de los pupblos, en el regimen municipal, en elarreglo del ejercito y de ]a milicia, y en Ia recaudacion de las contribuciones. Todo necesita de · mejorarse y el Gobierno se desvcla por quesedesnr.raiglJen apusos, y se ,restablezcapor todas partes la mor.a-

-3-')~datl i ' la jusli'cia ' que tant0 se relajal'on en las ppocas de. turbuleneia y- e'nla conmoeion causadaporlas medidas de alistamientoque en" los ultimos ai'ios exiji6 la defensa de Nicaragua.

, No ohstante e8tos obsHiculos que se oponen frecuentemente a las mi­ras del Gobierno y que hacen lenta y dificil la obra de regeneracion que tonos deseamos vel' adelantarse, nuestro pueblo por su propio impulso mejora y prospera notable mente, tanto en su condicion moral como en ' su aspf!cto material. EI Gobierno observa complacido este movi­mipnto, 10 secunda y favorece de cuantos modos alcanza, y cuenta siempre para dade mayor celeridad con la ayuda y apoyo de los Re­pr~sentant(>s, :mimados, como no puedo dudar que 10 estan, por el bien publico y el amor a la patria.

La condicion moral y religiosa, Rsi como la educacion y la en­senanza, han mejorado visiblemente. EI establecimiento en nuestra Re­publica de preceptores y misioneros ejemplares e incansables en pro­mover la propagacion de la doctrina y la moral cristiana, )a mejora de las costumbrf's publicas, y al mismo tiempo la ensenanza y la ins- ' truccion en Iris ' artes :y ciencias, da. frut08 abundantes, haciendose cada vp-z mas perceptible la modificacion que recibe la indole de nuestro pup-blo, su bienestar moral y su cultura .. EI Gobierno proteje y favo­rece estos establp.cimientos, reconociendo que son medios concedidos pOl' ,Ia Oivina Providencia, cuando todo parecia agotado yextinguido, para mejorar nuestra condicion como pu eblo cristiano y adelantar nuestra civilizacion que hahia lIegado a un lamentable atraso.

No es mfnor el adelanto que se observa en el aspecto material de las poblnciones que comenzando por la Capital crecen y se her­mOSf'an de un ,modo notable. EI comercio se aumenta. l __ a agricultura eipecialnwnte, que tanto iavorecc al comercio y que es nuestra verda-dera , fupute de riqueza y prosperidad, toma de ano en ano incremen­t.o, presentnndo nuevos objetos de explotacion y nuevos frutos para ]a exportacion. Las considerables plantaciones de cafe y caua de a­,zucar que se han hecho y se continuan estendiendo, impulsadas por las disposiciones protectoras que acord6 la Camara en favor de estos ramos, comenzaran este ano it dar alguna cosecha que sera lIe­vada a los mercados estranjeros. Se ha dado pr;ncipio tambien a Ja explotacion de algunos de los abundantes minerales de plata que se en­cuentran en varios Departamentos, ramo que he visto con especial predileccion, considerandolo de suma importancia para uar actividad a todos los demas. • I, ,Este satisfactorio aspecto de la Repul;]ica, y el bienestar general de un pueblo entregado a ' sus utiles ocupaciones y gozando cuanto es dable de los bienes sociales, dp.be ser para sus Representantes so­bre manera grato, y ('s para .mi Ja mas dulce satisfaccion, pues que todos hemos · ti'abajado con const(!ncia·, durante veinte anos, en medlo

-4-de trastornos y terribles conftictos, para estableccr ' los sanos princi­pios de religiosidad, de justicia, honor y probidad, (inicos fundamentos en que pueden descansar s61idamentc los gobiernos y los pueblos .

. . Pcro si estos principios fundarrtentaJes han despertado el espiritu p6blico, restablecido la . confianza, animado al trabajo y 'estiplUlado el natural instinto de los guatemaltecos para huscar y asegurar SI1 pro­pio bienestar y e1 bien corrtun, ellos no pueden instantaneamente re­·mover grandes obstaculos naturales, ni repamren un dia las perdi­das que en 10 moral y material se han sufrido durante muchos alios. La reIiiocion de aquellos obstaculos y la reparacion de estas perdidas, es ' ]a · obrll que noS esta encomendada, y que exije de nuestra parte el celo mas activo y la mas entera dedicacion a1 serviciopdblico, pOl' 10 mismo que es ardua y dificil. . ,

N uestta escasa poblacion es insuficiente par;'!. explotar las rique­zas que se encierran en nuestro extenso territorio. Despues ·de inuti­le? tentativas para atraer . pobIadores, debemosconvencernos cada vez mas de que una conductaregular y ' prudente,que estable'Zca bien nuestro credito e inspire confianza en el exterior, asegurando al mis­rna tiempo el bien€star de nue~tras poblaciones, sera 10 que las aumen­te y Harne emigrantes a un pais que comienza a ser conocido y ofre­ce grandes ventajas naturales. Nuestro deber y nuestro interes sera entonces acojerlos, favorecer sU ingreso, profejer su establecimiento, y sobre todd, asegurarles el goce tranquilo de los bienes que vienen a husear a el; sin 10 cual ningun atractivo pueden tener nuestro fertil suelo y nuestro benigno clima. La introduccion de jorll'1leros libres, prdpios para trabajai- en nuestras vas tas y ardientes lhmuras de la .cos{a del Sur" es un objeto de grande importancia, de que la necesi­dad obliga ya a ocuparse a los agdcultores. El Gobi,erno ha manda­dorecojer lnformes sabre este punta, y si fllese necesaria alguua me­dida ]ejislativa para proporcionar este recurso t y auxiliar las . empre­sas de los particulares, se preparara pOI' el Gobierno.

Despues de la esca:sez de brazos, el obstaculo mayor que se pre­senta a1 espiritu de empresa y a ]a ind.ustria; es la ' falta de vial:' fa­dIes: de ,comunitadon. Nuestro pais ' cerrado hasta ahora pocos af'ios~ y sin rir.ngUll cQfttacto con el exterior, no tenia caminos. EI instinto y las' ·necesidades del trafico, favorecidas pOI' el Gobierno, han comenzado ~ abtir .algunos htieia los puntos ,mas importantes; pero mucho ~nos que­oa ,que ibacer~ Aunque mel}dr~das,.').as vias interiores en los (iltimos a~ nos, todavia no pueden satisfacer a las necesidades de Ia.s .poblacio-+ nes. BI --Gobierno bpsca los medios de adelantat est.e irnportante ra­mo, para .ped!r Ja . coo:peracionque pueqa nece5itar de la Camara. En .. tretanto ,ningun .gasto ni eoneesion ha omitido para asegurar n'ues .. tr::;. comunieadon 'pot el Pacifico con los, otros E~tados, y con Pa., nama, punto centricoe importantisimo de contacto con el antiguo y nue~

vo .continente. Otro ,6bstaculo para Iaexpol'tacion de nuestros frutos es 01 mal

estado del embarcadero en nuestl'OS puertos del PaCifico: EI Gobierno , ha aeoruado Ia construccion de dos muelles en elIos, confiandola Ii una empresa particular, mediante ' las concesiones mas liberales .

. De algun tiempo a esta parte, sea pOl' el desarrollo y mUltiplica­cion de los negocios, 6 ' porque la abundancia del '01'0 ha dado lu­gar a· que se ' estraiga alguna moneda de plata, el trafico esperimen­ta embarazos que cada dia se han aumentado por faltade numera ... rio para el cambio. El Gobierno se ha ocupado hace tiempo de los medios de prevenir este confiicto, y Ii mas de arreglar el precio de lasmonedas estrangeras, que circulan en la Republica, reorganiza nues­tra antigua casa de moneda, abandonada durante largos ailos, y se hacen los ensayos neces arios, a fin de tener los datos convenientes para disponer 10 que parezca mas uti 1 en tan inlportante materia.

Asi, el Gobierno adoptahdo medidas para mejorar nuestra condi. cion, favoreciendo los establecimientosde educacion y ensenanza, cu­ya adelantada situacion, la debemos en gran parte Ii ese impulso poderoso qne solo pueden dar el celo porIa gloria de Dios y el a­mol' Ii lobueno: alentando Ii In beneficcncia que aparece entre no­sotros como signa de cultura y de verdadero progreso, empleada en conservar ymcjorar las casas de asilo para los desgraciados; y re­moviendo en cuanto es posible los obstaculos que encuentra el ' tra­bajo y el espiritu de emprcsa, prosigue sin descanso y sin desalen­tarse pOl' las dificultades la obra de reparacion y de espansion a que se di6 principio, pOI' el movimiento universal que me lIam6 Ii dirigir los negocios de nuestro pais. Cuento con la cooperacion de esta res­petable Camara para ' continual' con firmeza y constancia consagra­do Ii esta obra util, que de dia en ~ia va produciendo mas resulta­dos beneficos y palpables.

La hacienda publica continua en uIi pie satisfactorio, aun cuan­do se i'esienta todavia de las considerables erogaciones extraordinarias que ocasion6 la guerra de Nicaragua y sus consecuencias. Las ren-

. tas seaumentan naturalmente pOI' el 'desarrollo de la riqueza, y . sin nuevas imposiciones y gravamenes, bastarian pOI' si' solas para cu­brir los gastos oi'dinarios, que tambiense aumentan Ii medida que el pais 8iente nuevas necesidades, si no fuese preciso atender al reem­bolso de las anticipaciones que se obtuvier()n en los anos de 1856 y J 857 para a~quella guerra, y al, de intereses considerables que se han abonado pOI' elias. La estincion de 'esta deuda que hoy consume una parte de las entradas de la tesoreria, se efectua regular y rapidamente,

, siendo cada ano mayor su amortizacion que los adelantos que elGo­bierno tiene que solicitar.

Hace algunos auos era, muy penosa y diferente Ia situacion de Ia ha-

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cienda pClblica. Las rentas, reducidas entonces, respecto del monto qu~ hoy tieuen, se hallaban empenadas, y el Gobierno puede decirse que no tenia credito. Desde aquella epoca se inici6 el sistema que al fin ha venido a establecerse definitivamente, no sin graves dificultaues, y sin que las antiguas propensiones se hubiesen sobrepuesto a el en al­gunos periodos. Desde entonces se ha considerado que Ia probidad del Gobierno y las justas compensaciones del reembolso de los fondos, que se Ie suministran para las atenciones de la administracion, son el verdadero fundamento de su credito, mediante el cual encuentra sin dificultad los recursos que necesita. A Ia constancia con que se ha sostenido este principio, se debe sin duda el que entre nosotr08 hayan desaparecido felizme~te los odiosos ataques a las personas y propiedades, actos que hoy estan condenados como verdaderamente ile­gales y violentos. Establecido sobre tan s6lida base el credito del Go­bierno, ya no se sienten los embarazos e ineonvenientes que en otral epocas para ocurrir al servicio publico. Asi se ha podido haeer fren­te, durante los ultimos aoos, a todo genero de gastos yexigencias de Jas circunstancias. Espero que, afirmandose cada vez mas el credito del Gobierno que hoy es ilimitado en cuanto a su probidad y pun­tualidad, se aumentara tambien Ia confianza publica, 10 cual permiti­ra que cuando se necesiten anticipaciones, los intereses sean equitati­vos y los terminos del reeIl1bolso mas desahogados, a fin de que el Gobierno pueda mejorar muchos ramos del servicio.

Los Ministros del despacho daran a la Camara los informes nece­sarios sobre el curso de los negocios, presentaran las cuentas de la administracion y los datos convenientes para que pueda decretarse el nUtlvo presupuesto.

Entretanto, demos todos humildes gracias al Todo-Poderoso pOl' los beneficios queen el presente ano ha derramado con mana pr6-pia sobre nosotros, y pidamosle que nos de acierto, y nos conserve el bien ~nestimable de In paz.

La reunion regular y tranquila de estn Camara en la epoca desig­nada pOI' el Acta constitutiva es una prenda de esta paz, y de la uni­formidad de opinion en 10 que mira al comun in teres. Es pues un . motiv:o de jubilo publico, como 10 es para mi de grande satisfaccion y confianza estar rodeado d~ los Representantes de Ia NacicJD.

Palacio del Gobierno, Guatemala, Noviembre 25 de 1858.