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Mensajero Año 5 No. 136 Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla Domingo 1° de septiembre de 2013 Donativo: $5.00 TLALNEPANTLA CUAUTITLÁN ECATEPEC TEOTIHUACÁN TEXCOCO NEZAHUALCÓYOTL VALLE DE CHALCO Pág. 7 Pág. 15 Pág. 5 Pág. 8 Voz del Pastor Pág. 2 Pág. 4 “Necesitamos que todos los fieles sean piedras vivas”: Mons. Carlos Aguiar Retes Inicio del Año Jubilar por el 50 Aniversario de la Arquidiócesis de Tlalnepantla ¿Qué sueñas, mexicano? Nueva estructura pastoral en Cuautitlán ¿Cómo Evangelizar? Familias y Bienestar en sociedades... Hay que educar y educarnos...

Mensajero 136

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Periódico Católico de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla.

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Page 1: Mensajero 136

MensajeroAño 5 No. 136 Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla Domingo 1° de septiembre de 2013 Donativo: $5.00

TLALNEPANTLA CUAUTITLÁN ECATEPEC TEOTIHUACÁN TEXCOCO NEZAHUALCÓYOTL VALLE DE CHALCO

Pág. 7

Pág. 15

Pág. 5

Pág. 8

Voz del Pastor

Pág. 2

Pág. 4

“Necesitamos que todos los fieles sean piedras vivas”:

Mons. Carlos Aguiar Retes

Inicio del Año Jubilar por el 50 Aniversario de la Arquidiócesis de Tlalnepantla

¿Qué sueñas, mexicano?

Nueva estructura pastoral en Cuautitlán

¿Cómo Evangelizar?

Familias y Bienestar en sociedades...

Hay que educar y educarnos...

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2 Mensajero

Todos tenemos derecho a soñar, también nosotros los mexi-canos. Cada uno lo hace en su idioma, en el contexto de su cultura. Algunos dicen que se trata de la proyección de la propia experiencia vivida. Otros clasifican los sueños. Otros hacen un trabajo sobre ellos, ayudando a la persona a descubrir su sentido para la misma persona.

Soñamos con crecer. Con ser como otros. Con tener más. Con tener lo que los otros tienen. Hay de todo en este senti-do. ¿Por qué algunos mexicanos ven como modelo lo que hacen otros países y, por eso, simplemente por eso, quieren que en México se viva de la misma manera? ¿Ejemplos? Uniones de hecho, ideología de género, uso libre de mari-guana y otros estupefacientes, asesinar a un hijo en el seno materno, asesinar a una persona en situación de enferme-dad grave…

Nuestra identidad va en otro sentido. Nuestra tendencia social, cultural va a favor de la vida, de la libertad, de la solidaridad. ¿por qué no nos damos cuenta de que está entrando como sentido de la vida precisamente la muerte? Llama la atención que algunas de estas posturas están apo-yadas por leyes de deshacen los derechos. Es decir, despe-nalizan, quitan la pena que infringe la ley a una falta en contra de la persona. ¿Qué hace falta para que esto suceda? Que la ley que despenaliza esté técnicamente, bien elabo-rada, que permite lo que está prohibido.

Aparece la distancia entre la ley y la ética. Puede una ley permitir lo que no es ético. Y como ahora es difícil hablar de ética, pues la ley se convierte en principio ético. Existen los derechos humanos, y todos tienen el mismo peso, la misma autoridad. Pero resulta que la ley técnicamente bien elaborada puede ir en contra de los derechos humanos. Por ejemplo, el derecho a la vida, el derecho del niño a tener una familia compuesta por el padre y la madre, el derecho a la salud. Todos estos derechos están siendo des-truidos por leyes bien hechas.

¿Cuál es nuestro sueño? ¿Cómo queremos ser los mexi-canos? ¿Qué quieren los adultos de hoy dejar a la niñez y la adolescencia actual? ¿Qué pueden buscar los jóvenes? Lo último que ha aparecido es la ley que despenalice el uso de la mariguana.

El uso de la mariguana tiene efectos en la persona: enro-jece los ojos, dificulta la concentración, produce somno-lencia, hace lenta la reacción mental de tal manera que dificulta la memoria, debilita la voluntad, estimula la ansiedad, puede llegar a la paranoia. De una sensación de bienestar a la pérdida de la conciencia y de la ubicación en la realidad. La mariguana no crea adicción bioquímica como el alcohol, crea la dependencia psicológica de quien busca huir de la realidad. ¿Cuántos jóvenes y adolescentes no quieren huir de su hogar?

¿Qué ganaríamos con el uso libre de la mariguana? Libertad de cultivo. Por cierto es una planta tan generosa que se cultiva hasta en un rincón de la azotea. Cada perso-na que lo quisiera tener lo podría hacer en su espacio indi-vidual. Los papás no se darían cuenta de que sus hijos la usan, sino cuando ya es tarde. Otra cosa que supuestamen-te ganaríamos, es que ya no habría tráfico ilegal, dejaría de haber asesinatos por eso. ¿Una persona bajo el influjo de la mariguana, no tendría la fuerza para asesinar aún a sus amigos y familiares, si está fuera de la realidad y su agresi-vidad está desbocada? ¿Desaparecerían las violaciones y los demás tipos de delitos contra personas, porque el uso de esta yerba está permitido?

Tengamos cuidado de seguir haciendo leyes que destru-yan nuestros valores, y vayan contra nuestra dignidad, dañando al ser humano. ¿Vale la pena que una persona, sólo una, padezca los efectos del uso de la mariguana, con tal de que se libere y se evite su tráfico ilegal? Mientras no haya un verdadero ambiente de comunicación y educación en la familia, seguirán apareciendo jóvenes y adolescentes que se van haciendo dependientes al uso de la mariguana. Mientras el uso de los medios de comunicación siga sien-do poco crítico, seguiremos dormidos soñando lo que no es verdad.

Se vale soñar, partiendo de la verdad, de lo posible. Para construir una sociedad humana, reconciliada, solidaria, viviendo la justicia y la paz, es necesario poner en relación la ley y la ética, mirar a la persona en su integralidad, saber el sentido de su trascendencia. Mirar a Dios en la defini-ción de nuestros esquemas de valores y de nuestras leyes.

DIRECTORIO

OBISPOS

Excmo. Sr. D. Carlos Aguiar Retes

Arzobispo de Tlalnepantla

Excmo. Sr. D. Ricardo Guízar Díaz

Arzobispo Emérito Tlalnepantla

Excmo. Sr. D. Guillermo Or�z Mondragón

Obispo de Cuau�tlán

Excmo. Sr. D. Oscar Roberto Domínguez

Cou�olenc, M.G

Obispo de Ecatepec

Excmo. Sr. D. Héctor Luis Morales Sánchez

Obispo de Nezahualcóyotl

Excmo. Sr. D. Guillermo Francisco Escobar

Galicia

Obispo de Teo�huacán

Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez

Obispo de Texcoco

Excmo. Sr. D. Víctor René Rodríguez Gómez

Obispo de Valle de Chalco

Excmo. Sr. D. Francisco Ramírez N.

Obispo Auxiliar de Tlalnepantla

Excmo. Sr. D. Efraín Mendoza Cruz

Obispo Auxiliar de Tlalnepantla

DIRECTOR GENERAL

Mons. Víctor René Rodríguez Gómez

Presidente de la Comisión Provincial para la

Pastoral de la Comunicación

DIRECTORA EN TURNO

Abril Villanueva

SUBDIRECTORMons. Luis Mar�nez Flores

CORRECCIÓN Y ESTILOMaricruz Reyes Lugo

DIAGRAMACIÓN Y DISEÑOSamuel Nájera

COLABORADORES

Equipo de la Pastoral de la Comunicación

de la Provincia Eclesiás�ca de Tlalnepantla.

Registro en trámite.

Mensajero Es una publicación catorcenal de la

Provincia Eclesiás�ca de Tlalnepantla. Se

distribuye en la Arquidiócesis de

Tlalnepantla, y en las Diócesis de

Cuau�tlán, Ecatepec, Texcoco, Teo�huacán,

Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.

[email protected]

Voz del Pastor

† Guillermo Ortiz MondragónObispo de Cuautitlán

¿Qué sueñas, mexicano?

Page 3: Mensajero 136

3Mensajero Editorial

El Índice Delictivo CIDAC 2012 mues-tra la percepción de inseguridad que los mexicanos tienen de los ocho prin-cipales delitos que sacuden la paz en México, muestran la fuerza del crimen organizado y la incapacidad del Estado Mexicano para cumplir con su primera y elemental tarea.

Los delitos considerados como prin-cipales, son aquellos que provocan mayor conmoción en la conducta de los mexicanos. Ellos son: secuestro, homicidio, lesión dolosa con arma blanca, extorsión, robo a transeúnte con y sin violencia y robo de vehículo con y sin violencia.

Hace pocos años, los medios de comunicación, sobre todo las televiso-ras que necesitan imágenes para docu-mentar su trabajo, se permitieron “re-

crear escenas” actuadas por la policía en el momento en que detenían a supuestos delincuentes. El proceder de las televisoras “contaminó” algunos de los casos y debilitó el trabajo de la PGR. La televisión convierte todo en espectáculo. Esa es su dinámica. El gobierno del ex presidente Calderón fue acusado de convertir a los delin-cuentes en modelos a imitar, pero es preciso sostener que las televisoras influyen con fuerza en las decisiones de comunicación de los gobiernos, de las empresas y de la misma Iglesia. A donde sea que lleguen los productores televisivos imponen las “reglas” de su negocio, sin miramientos y en ocasio-nes sin ningún respeto.

El cine y la televisión provocan efec-tos relacionados con la violencia.

Entre los principales efectos encontra-mos: la catarsis, en donde el especta-dor suple la violencia real por la vio-lencia vivida en los medios de infor-mación; la excitación, en donde los espectadores, sobre todo jóvenes y niños aumentan conductas violentas en relación a sus compañeros de convi-vencia; la desinhibición, en donde el espectador se siente más libre en rela-ción a conductas socialmente limita-das; imitación, sin medir las conse-cuencias, niños y jóvenes, repiten muchas de las escenas vistas en la pan-talla; insensibilización, miles de horas ante los medios, sin compañía de adul-tos formados, miles de escenas de violencia convierten a los espectado-res en insensibles ante los dramas más urgentes de la condición humana.

La violencia social y losmedios de comunicación

el Estado debe hacer frente, además, al desafío criminal que en muchas regio-nes del país tiene a los poderes del Esta-do sometidos y a la población viviendo en el terror. El país ha entrado en una desaceleración económica que hará más difícil la paz social.

En estos días la capital del País se ha visto secuestrada por una horda de “en-señantes”, pertenecientes a la CNTE que se oponen a cualquier forma de evaluación de los profesores. Las accio-nes violentas, vividas en total impuni-dad, fueron incluso recompensadas: los

diputados congelaron la Ley General del Servicio Profesional Docente, que es fundamental para hacer efectiva la reforma educativa.

Nadie está pidiendo acciones de represión, pero si el ejercicio de las leyes que aseguren la convivencia pací-fica de los ciudadanos; así mismo la ciudadanía espera acciones de mayor inteligencia para contener al crimen organizado. A un año de gobierno es momento para corregir errores y rectifi-car el rumbo de nuestra Nación, donde el Estado cumpla con las funciones

fundamentales: paz, justicia y desarro-llo social.

Por Rafael González Beltrán, ssp.Diócesis de Cuautitlán

Una mayoría de mexicanos llevó a la presidencia de la República a Enrique Peña Nieto. Los primeros meses de su gobierno recibieron el apoyo ciudada-no. Algunos lapsus fueron utilizados –exagerándolos- por sus enemigos polí-ticos para reforzar sus afirmaciones en el sentido de que el presidente era una construcción mediática, ideada por grupos poderosos.

El gobierno del presidente Peña Nieto, con audacia política, ha impulsado algu-nas reformas estructurales necesarias para el crecimiento de la Nación. Están enmarcadas en la decisión de fortalecer al Estado y devolverle su lugar como principal responsable e impulsor de las políticas públicas que acaben con años de injusticia social.

Sin embargo, no todas las fuerzas polí-ticas admiten que las acciones del presi-dente son una cuestión de sobrevivencia para la clase política. En efecto, los polí-ticos en general no gozan de las simpa-tías de la mayoría de la población. Pero

¡Una nación necesitada de rumbo!

Por: José Luis Ramírez

En las últimas semanas hemos sido testigos de protestas, violencia, enfrentamientos sin razón y con razón, y nadie quiere poner paz, priva el egoísmo de “yo tengo razón” o peor aún, ”yo tengo el poder”. Los excesos de ambos bandos no han aparecido del todo, roguemos que ni aparezcan como diría el extinto político Jesús Reyes Heroles, el “México bronco”.

Se ha dicho, no sin razón, que los mexicanos no logramos avanzar por-que si algo tenemos es que no nos ayudamos nosotros mismos. Eso es verdad en cierta medida, porque hay muchos más factores que han impedi-do el desarrollo.

Ante un mundo, por momentos, tan caótico, ¿Qué hacer?

Las oraciones por la paz, han estado presentes en muchas de las sesiones de formación y de preparación de grupos como en la Escuela de Pastoral o en la Adoración Nocturna, por citar algunos, pero ¿Qué falta?

Sin duda la acción del presbiterio es de suma importancia, diríamos que vital en estas situaciones que vivimos.

El presbiterio de la Diócesis de Nezahualcóyotl realizó hace unos días un retiro espiritual y como bien diría quien dirigió la reunión: “ante un mundo lleno de violencia, pobreza, ante una realidad demandante, es necesario parar para renovar fuerzas”.

El padre jesuita David Noriega Cruz

estuvo al frente de esos ejercicios espirituales del presbiterio diocesano y ahí puso énfasis en el papel tan rele-vante que juegan el meditar sobre los misterios de Dios y luego transmitir-los a toda su comunidad.

El poseer un conocimiento de la naturaleza divina de Jesucristo obliga a transmitirlo, unos por su convicción, otros por obligación, pero todos los que se acercan a Dios y lo conocen, no tienen otro camino más que seguirlo y transmitirlo.

De esta naturaleza todos los bauti-zados estamos llamados a seguir a Dios, nuestro creador, los sacerdotes van adelante, ya saben cuál es su deber, los laicos vamos en el camino.

El papel del presbiterio

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4 MensajeroCaminar Diocesano

Por: Pastoral de la Comunicación Arquidiócesis de Tlalnepantla

La Arquidiócesis de Tlalnepantla ha iniciado un año lleno de bendiciones con la misa de apertura del Año Jubilar por el 50 Aniversario de su erección como Iglesia Particular.El pasado viernes 23 de agosto fue un día de júbilo en la Arquidiócesis; todo el clero diocesano, los religiosos y pueblo de Dios se congregaron en la Santa Igle-sia Catedral de Corpus Christi para conmemorar el 49 Aniversario de la dedicación de este templo como sede catedralicia por el Emmo. Sr. Cardenal Don Eugene Tisserant en 1964.

Al comienzo de la Celebración Euca-rística presidida por S.E.R. Don Carlos Aguiar Retes, el Pbro. Martín Castelán, canciller de la Arquidiócesis, leyó el Decreto en el que queda instaurado el Año Jubilar del 23 de agosto de 2013 al 23 de agosto de 2014 y en el que se invi-ta a quienes forman parte de esta Iglesia Particular a vivir con fe, esperanza y alegría este año, a fin de renovarse en la comunión y en la caridad, siguiendo las enseñanzas de Jesucristo, nuestro Señor y Maestro, como discípulos suyos, pre-parándose así a vivir el deseo de renova-ción a la que invita el Santo Padre Fran-cisco.

Durante la homilía Mons. Aguiar dijo que “tenemos que reconocer la dignidad de cada persona y descubrir en ella la presencia del Espíritu de Dios y desde allí, construir nuestra propia fraterni-dad, nuestra propia asociación como pueblo de Dios. Para este servicio, está constituido el servicio del sacerdocio ministerial. Nosotros somos, sacerdotes clérigos, somos servidores para cons-truir este templo espiritual. Pero necesi-tamos que todos los fieles sean piedras vivas”.

Esta es la misión de la Iglesia particu-lar. Por eso es una gracia ser constitui-dos en una diócesis, porque tenemos

esta cercanía de un sucesor de los Após-toles que acompaña, conduce, guía, alienta, motiva y pide a Dios su presen-cia para este trabajo de generar el pue-blo de Dios entre nosotros. Es indispen-sable el trabajo de todo el ministerio sacerdotal. Sin él no se puede organizar esta articulación de las piedras vivas. Pero el objetivo no somos nosotros, como tantas veces ya lo ha repetido en estos cinco meses el papa Francisco. La Iglesia no es para sí misma. La Iglesia es para servir a nuestros fieles y a la socie-dad en el mundo (…).”

“Hoy día en estos cincuenta años que vamos a vivir a partir de mañana, que comienza el cincuentenario de nuestros años de vida diocesana, tenemos un

contexto muy difícil, es verdad; una fractura cultural que está tocando inclu-so el corazón de la sociedad, que es la familia. Tenemos una relación social muy frágil; y autoridades que no alcan-zan a dar la respuesta necesaria para fortalecer el tejido social. Tenemos problemas serios que afectan grave-mente a cada una de las personas que constituimos nuestra sociedad. Por ello, más que nunca es necesaria la labor de la Iglesia; porque ella lleva al Espíritu de Dios, ella renueva el corazón del hombre, lo restaura, lo vuelve otra vez corazón de carne. Ella puede darle a la sociedad de hoy el rostro que Dios quie-re que tenga.

Hermanos, esta es la razón de nuestra

alegría, renovarnos en nuestra misión a partir de todos los frutos que hemos recogido en estos cincuenta años”, afir-mó Don Carlos Aguiar Retes.

Al concluir la Santa Misa, añadió: “Que el Señor nos siga bendiciendo, que el Señor nos siga consolidando. Y que estos cincuenta años, somos toda-vía en el nivel de Iglesia, una criatura, recién nacidos. Cincuenta años no sig-nifican una historia fuerte, sólida, sino que, tenemos en nuestro futuro una gran oportunidad de consolidar nuestra Igle-sia diocesana. Pidámosle al Señor, a Cristo, el Señor de la historia, que así nos ayude a realizarlo. Que así sea.”

“Necesitamos que todos los fieles sean piedras vivas”: Mons. Carlos Aguiar Retes

Por: CODIPACS Valle de Chalco

Durante la semana del 19 al 23 de agos-to, se llevó a cabo en las instalaciones de la Casa Lago Sede CEM, en Cuautitlán, estado de México, la primera etapa del Diplomado en Periodismo impartido por la Universidad Anáhuac México Norte.

El diplomado, organizado a iniciativa de la Comisión Episcopal para la Pasto-ral de la Comunicación (CEPCOM que )preside Mons. Luis Artemio Flores Calzada, obispo de Tepic, está enfocado

a fomentar la profesionalización de quienes colaboran en los medios de comunicación de las diversas dióce-sis de nuestro país, brindándoles las herramientas digitales, de diseño y estructura para su servicio en nuestra Iglesia.

Durante el diplomado los maestros de la Universidad Anáhuac México Norte, Sol Cerrillo Orozco, coordinadora de Comunicación Digital; Laura King Lozano, coordinadora de Dirección de Empresas Radiofónicas y Periodísticas, Radio Anáhuac en Universidad

Anáhuac y Jorge Alberto Hidalgo Tole-do, coordinador de la licenciatura en Comunicación, comunicólogo investi-gador, especialista en sinergias entre comunicadores católicos, y actual con-sultor de Catholic.net. enseñaron a los participantes cómo aprovechar al máxi-mo los recursos y las innovaciones tec-nológicas desarrolladas y ponerlas al

alcance de la evangelización digital.El planteamiento de este diplomado

contempla una segunda etapa, la cual se llevará a cabo el año siguiente, proba-blemente en el mes de junio, según ase-veró el Pbro. Antonio Camacho Muñoz, secretario ejecutivo de la CEPCOM, quien llevó a cabo el diseño y desarrollo de este evento.

Diplomado de periodismoen Casa Lago

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5Mensajero Caminar Diocesano

Por: CODIPACS Valle de Chalco

La Iglesia considera que los retiros o

ejercicios de carácter espiritual son un

camino eficaz muy recomendable para

el progreso espiritual de todos los fieles

cristianos (cf. Concilio Vaticano ll,

Decr. Apostolicam Actuositatem, nº

32).

Su contenido se estructura por medio

de meditaciones y charlas centradas en

las verdades eternas y en la considera-

ción de la vida cristiana en las circuns-

tancias cotidianas de la existencia. La

contemplación de la vida de nuestro

Señor Jesucristo es el fundamento sobre

el que se construyen las virtudes cristia-

nas, y a eso tienden, necesariamente, las

meditaciones de los Retiros.

Esta semana todos los presbíteros de

la Diócesis de Valle de Chalco, acudie-

ron al llamado de Mons. Víctor Rene

Rodríguez Gómez, en “El Salto”, para

vivir esta experiencia en comunión con

nuestro Obispo, en aras de fortalecer la

presencia del Espíritu Santo; afianzan-

do así la hermandad que debe existir

entre ellos, al ser partícipes y responsa-

bles de encargo, en esta porción del

Reino del Señor.

Estos ejercicios fomentan la disposi-

ción y guía de Dios, a través de su Espí-

ritu, para que las decisiones de nuestros

Sacerdotes se vean iluminadas. Es

como recargar la batería espiritual.

El Espíritu afianza la hermandad del presbiterio

Por: Leonardo Martínez de la Vega, comunicador parroquial

Texcoco, Méx. 15 de agosto 2013. En el marco de la solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen María, la dióce-sis de Texcoco se unió a la alegría de nuestros hermanos: Alberto Torres Pérez, Alejandro Flores Caballero, Dionisio Ramírez Cruz, Gerardo Basti-da Delgado, Jesús Zandor Arriaga Lemus, Jorge Damián Jiménez Rivera y Juan Miguel González Salas, quienes recibieron el sagrado Orden del Sacer-docio, por la imposición de manos del Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez, obispo diocesano de esta Igle-sia particular, acompañado por los alum-nos del seminario diocesano, el Presbi-terio de la Diócesis de Texcoco, y de algunos sacerdotes de las Diócesis de Teotihuacán y Valle de Chalco, así como de los familiares de quienes fue-ron ordenados sacerdotes y cientos de fieles.

La celebración Eucarística comenzó en punto de las 11:00 hrs., en la Santa Iglesia Catedral de Texcoco, donde Don Juan Manuel ofreció hermosas palabras a sus presbíteros, sobre ellos, nos dice el Catecismo de la Iglesia Católica: “Los presbíteros, instituidos por la ordena-ción en el orden del presbiterado, están unidos todos entre sí por la íntima fra-ternidad del sacramento. Forman un único presbiterio especialmente en la diócesis a cuyo servicio se dedican bajo la dirección de su obispo" (PO 8). La unidad del presbiterio encuentra una expresión litúrgica en la costumbre de que los presbíteros impongan sus manos en los ordenados, después del

obispo, durante el rito de la ordena-ción”.

En su homilía, el Sr. Obispo Juan Manuel comenzó diciendo: “Queridos hermanos, quiero dar gracias a Dios de corazón porque nos ha concedido a todos nosotros llegar a este hermoso día de la Ordenación Sacerdotal de estos queridos siete diáconos que la Iglesia de Texcoco ha preparado y que ahora ofre-ce a Dios como representantes verdade-ros, auténticos, de Cristo en medio de su Pueblo”.

Refiriéndose a la festividad de la Asunción de la Virgen María, Don Juan Manuel señaló que “escogimos precisa-mente esta fecha en que Ella sube a lo más alto de los cielos para que también a estos queridos hermanos nuestros y a toda la Iglesia diocesana, el poder amo-roso de la Santísima Virgen María, la pequeñísima Madre de Dios, siempre nos levante, nos eleve hacia Dios. Que estos queridos hermanos nuestros nunca vayan a experimentar el desierto del abandono, que nunca vayan a expe-rimentar el conflicto doloroso de la caída, sino que siempre tengan la pro-tección efectiva, delicada, de la Santísi-ma Virgen María. Queridos Jóvenes, a nombre de toda la Iglesia, consagrados a Cristo, también los consagro a la San-tísima Virgen María, para que inspira-dos en Ella y protegidos por Ella, uste-des caminen realizando su Ministerio Sacerdotal”.

Nuestro Obispo Juan Manuel imploró muy fuerte y muy alto al Espíritu Santo por todos sus sacerdotes, para que infunda su gracia por medio de su acción en su Ministerio en medio del Pueblo de Dios.

Tú eres sacerdote

Por: Pbro. Gustavo Santana PatiñoComisión de Comunicación

El pasado 22 de agosto, en el salón de conferencias de la Catedral de Cuautit-lán, en reunión ordinaria con su presbi-terio, nuestro Obispo Don Guillermo Ortiz Mondragón, habiendo hecho las debidas consultas para favorecer la edificación del Cuerpo de Cristo en la diócesis, al ver la conveniencia de avan-zar en la organización y estructura pas-toral diocesana, ha erigido cinco Vica-rías Episcopales Territoriales con el

título y la protección de San Buenaventura, San Isidro confesor, San Francisco de Asís, La Purísima Concepción y San Pedro Apóstol, dero-gando el uso de la cate-goría “Zona Pastoral”.

Al frente de cada Vica-ría Territorial, nuestro Obispo ha puesto a un presbítero a quien insti-tuyó con el oficio de Vicario Episcopal. A su vez, erigió la Vicaria Episcopal de Pastoral e instituyó a su Vicario

Episcopal de Pastoral. Como acto con-cluyente nombró a su Vicario Episco-pal para las relaciones Iglesia Estado y Apoderado Legal.

La atención prioritaria de nuestro Obis-po en esta nueva estructura, responde a la necesidad de apoyar a los sacerdotes en su vida y ministerio, de impulsar los distintos ministerios y carismas, las diversas vocaciones, procurando des-centralizar la atención a todo el Pueblo de Dios pero, al mismo tiempo, fortale-ciendo su unidad.

Nueva estructura pastoralen la Diócesis de Cuautitlán

*Lo más importante es la atención a los fieles

En un ambiente de trabajo, monseñor Guillermo, dio a conocer las caracterís-ticas de las Vicarías Episcopales Terri-toriales, de la Vicaría de Pastoral y de los respectivos vicarios episcopales, con la intención de que sea reflexionada

y asimilada esta nueva estructura de nuestra Iglesia de Cuautitlán.

*Para mayor informe sobre las Vica-rías Episcopales y sus respectivos vica-rios visita nuestra página web diocesa-na www.diocesisdecuautitlan.net

para siempre

Page 6: Mensajero 136

6 MensajeroIglesia Universal / Iglesia México

Un periodista preguntó a Antonio Fuen-tes (1869-1938) si al torear sentía mie-do, a lo que el diestro sevillano respon-dió: “¡Claro! Sin miedo no es posible torear; el que no tiene miedo acaba pren-dido en las astas del toro, mientras que el que lo tiene se cuida y ve lo que puede y debe hacer”. El “torero elegante” se refería a una virtud indispensable: la prudencia, que consiste en saber elegir el verdadero bien. En el ruedo de la vida hemos de lidiar con el “toro” de las diversas situaciones que se nos presen-tan cada día, ante las cuales es preciso tomar la decisión adecuada, para no terminar dominados por las circunstan-cias y fracasados para siempre, sino salir victoriosos y entrar en la gloria sin fin.

Para lograrlo necesitamos de Jesús, el camino, porque es la verdad que da vida plena y eterna. Él, cuyo amor es fuerte hacia nosotros, no duda en prevenirnos de los peligros para que nos corrijamos

a tiempo. Así, a quienes le interrogan si es verdad que son pocos los que se sal-van, les hace ver que el triunfo verdade-ro y definitivo se consigue pensando y actuando de manera responsable, obje-tiva, prudente y coherente. Cuando no nos tomamos en serio las cosas, tarde o temprano nos llevamos desagradables sorpresas: una nota reprobada por habernos confiado y no haber estudia-do; una ruptura afectiva por haber pen-sado que la pareja o las amistades soportarían siempre nuestros egoísmos. Entonces experimentamos con crudeza aquello que dice el refrán: “Nadie sabe el bien que tiene, hasta que lo ve perdi-do”.

Jesús, que no quiere que nos veamos en la inmutable tristeza de perder la vida eterna, nos previene de la “puerta ancha”, que, como señalaba Juan Pablo II, es inventarse cada uno su propio bien y su propio mal. Como quien dejándose influenciar por la propaganda, piensa

que se puede bajar de peso sin dieta, que se puede aprender sin estudiar, que se puede tener fe sin conocimiento, que se puede ser cristiano sin coherencia, que se puede amar sin fidelidad, que se puede triunfar sin trabajar.

El éxito exige esfuerzo, no nos enga-ñemos. Por eso Jesús nos dice: “Esfuér-cense por entrar por la puerta, que es angosta”. Esa puerta es el propio Jesús, que nos une a Dios, quien nos pide vivir amándolo a Él y al prójimo, siendo fie-les en el matrimonio y educando con el

ejemplo a los hijos. Respetando a los padres y hermanos. Siendo honestos, justos, responsables, solidarios y mise-ricordiosos en el noviazgo, la escuela, el trabajo y la sociedad. Ayudando a todos a ser familia de Dios. Así entraremos por la puerta que, como explica san Juan Crisóstomo, si bien es estrecha a la entrada, conduce a la mayor anchura: la felicidad plena y eterna.

† Eugenio Andrés Lira RugarcíaObispo Auxiliar de Puebla

Secretario General de la CEM

Esfuércense por entrar porla puerta, que es angosta

VATICANO, 25 Ago. 13 / 10:55 a.m., (ACI/EWTN Noticias). En sus palabras previas al rezo del Ángelus, en la Plaza de San Pedro, el papa Francisco aseguró que “Jesús ilumina nuestra vida con una luz que no se apaga jamás. No es un fuego artificial, un flash, no, es una luz tranquila, que dura siempre”.

La luz de Jesús, indicó, “nos da paz. Así es la luz que encontramos si entra-mos por la puerta de Jesús”.

El Evangelio de hoy, apuntó el Santo padre, “nos invita a reflexionar sobre el tema de la salvación”, pues al salir Jesús de Galilea alguien se le acerca y le pre-gunta “Señor, ¿son pocos los que se salvan?”.

“Jesús no responde directamente a la pregunta: no es importante saber cuán-tos se salvan, sino que más bien es importante saber cuál es el camino de la salvación”, dijo el Papa.

Francisco recordó que “la imagen de la puerta vuelve varias veces en el Evange-lio y se remonta a la de la casa, a la del hogar doméstico, donde encontramos seguridad, amor y calor. Jesús nos dice que hay una puerta que nos hace entrar en la familia de Dios, en el calor de la casa de Dios, de la comunión con Él”.

El Papa subrayó que “Jesús no excluye a nadie. Alguno de ustedes quizá podrá decirme, pero Padre, yo estoy excluido, porque soy un gran pecador. He hecho cosas feas. He hecho tantas en la vida. No, no estás excluido. Precisamente por esto eres el preferido”.

“En la actualidad pasamos ante tantas

puertas que invitan a entrar prometiendo una felicidad que después, nos damos cuenta de que duran un instante. Que se agota en sí misma y que no tiene futuro. Pero yo les pregunto: ¿Por cuál puerta queremos entrar? Y, ¿a quién queremos hacer entrar por la puerta de nuestra vida?”.

El Papa indicó que “ciertamente la de Jesús es una puerta estrecha, porque nos pide abrir nuestro corazón a Él, recono-cernos pecadores, necesitados de su salvación, de su perdón, de su amor, de tener la humildad de acoger su miseri-cordia y hacernos renovar por Él”.

“Por la puerta estrecha que es Cristo debe pasar toda nuestra vida”.

El Santo Padre señaló además que “Jesús en el Evangelio nos dice que el ser cristianos no es tener una 'etiqueta'”.

“A la Virgen María, Puerta del Cielo, le pedimos que nos ayude a pasar la puerta de la fe, a dejar que su Hijo transforme nuestra existencia como ha transforma-do la suya para llevar a todos la alegría del Evangelio”, concluyó.

Jesús no es un "flash" sino unaluz que dura siempre y nos salva

NEWS.VA 25 Ago. 13 / Después de rezar el ángelus, el Papa Francisco hizo un llamamiento por la paz en Siria, en el que pidió a la Comunidad Internacional que se muestre más sensible hacia esta trágica situación, y para que se empeñe a ayudar a esta querida Nación a encontrar una solución a una guerra que siembra destrucción y muerte:

Llamamiento del Papa:Con gran, con gran, sufrimiento y preo-

cupación sigo la situación en Siria. El aumento de la violencia en una guerra entre hermanos, con el multiplicarse de estragos y actos atroces, que todos hemos podido ver también en las terri-bles imágenes de estos días, me impulsa, una vez más, a alzar la voz para que se detenga el rumor de las armas.

El enfrentamiento no ofrece perspecti-vas de esperanza para resolver los pro-

blemas, sino la capacidad de encuentro y de diálogo.

Desde lo profundo de mi corazón, qui-siera manifestar mi cercanía con la ora-ción y la solidaridad a todas las víctimas de este conflicto, a todos aquellos que sufren, especialmente a los niños, e invi-tar a tener siempre encendida la esperan-za de paz.

Hago un llamamiento a la Comunidad Internacional para que se muestre más sensible hacia esta trágica situación y ponga todo su empeño para ayudar a la querida Nación Siria a encontrar una solución a una guerra que siembra des-trucción y muerte.

Todos juntos oremos, todos juntos oremos, a la Virgen Reina de la Paz: María, Reina de la paz ruega por noso-tros. Todos. María, Reina de la paz ruega por nosotros.

El Santo Padre Francisco nospide orar por Egipto y Siria

Page 7: Mensajero 136

7Mensajero Evangelización y Misión Continental

Por: CODIPACS ECATEPEC

Vivimos en un mundo convulso y cam-biante, que evoluciona a gran velocidad. La rapidez de los cambios provoca incertidumbre y miedo en la sociedad. Se dan grandes oportunidades para la mejora de la vida humana pero también existen grandes riesgos. Sin embargo, la naturaleza de las personas es la misma.. Las personas seguimos teniendo las mismas necesidades, los mismos anhe-los y la misma sed de plenitud que en los principios de la historia.

Hoy se da un importante descrédito de los católicos y de la Iglesia. Se critica constantemente a la Iglesia como insti-tución, la principal acusación es porque la sociedad no percibe coherencia entre su mensaje y el comportamiento de los creyentes. Por esto es clave nuestro testi-monio como personas comprometidas y responsables de nuestra fe.

Jesús predica con autoridad, claridad y verdad, porque habla de aquello que vive y lleva dentro. Lo primero que tene-mos que hacer es digerir el Evangelio y aplicarlo a nuestra vida. A través de la palabra y la Eucaristía estamos alimen-

tados y fortalecidos para convertirnos en discípulos misioneros, dar a conocer la buena nueva. Si la gente no cree quizás sea porque nosotros no hemos sido capa-ces de sembrar la semilla del amor de Dios; necesitamos tiempo de oración diaria. La oración nos dará caridad con las personas y firmeza para ser conse-cuentes con el mensaje de Jesús. Esta-mos llamados a peregrinar fuera de nues-tras parroquias y territorio, de ser ejem-plo de Jesús buen Pastor.

Nunca hemos de obligar a nadie a creer, la predicación más eficaz es el propio ejemplo, fieles a aquello que creemos y somos, debemos proceder siempre con delicadeza, las personas están faltadas de ternura, necesitan com-prensión y afecto; hay que transmitir la palabra con alegría, optimismo, espe-ranza y siempre con amabilidad, sin temor a ser criticados, rechazados o insultados por nuestras creencias; debe-mos confiar siempre en Dios y poner el máximo empeño y dedicación de nues-tra parte, a ejemplo de San Pablo: “evan-gelizar a tiempo y a destiempo” y será Dios quien haga fructificar nuestros esfuerzos.

Por: SEDEC, Valle de Chalco

Con fe y con amor Como si estuvieras oyendo a Dios mis-mo, o leyendo una carta que Él te ha mandado. Ten la seguridad de que la Palabra de Dios bien recibida, te irá limpiando por dentro y te podrá salvar. Jesús dijo a sus discípulos: “Ustedes están limpios por la Palabra que han oído” (Jn 15,3). Y el apóstol Santiago: “Reciban la Palabra de Dios plantada en ustedes. Ella es poderosa para sal-var sus almas” (1, 21).

Con respeto y veneración Los personajes del Antiguo Testa-

mento oían la divina Palabra descalzos y rostro en tierra (cf. Éxodo 3, 5-6). Si el valor de un cuadro o de un libro se apre-cia por la firma de su autor, ¿qué estima-ción no ha de tener el cristiano de la Biblia, sabiendo que su autor es el mismo Dios? Los primeros cristianos tenían una gran veneración a la Biblia. Por eso, copiaban capítulos enteros de su puño y letra, y los llevaban consigo y al morir, los familiares los depositaban sobre su pecho. En muchas parroquias y en hogares cristianos la Biblia está entronizada en un lugar importante y destacado. Y antes de salir de casa, la besan. Y al volver a casa, vuelven a besarla.

Con espíritu de humildad Hay que acercarse a la Palabra de

Dios con humildad y sumisión a la Igle-sia, pues fue ella la que recibió este

sagrado depósito. “Yo te glorifico, Padre, porque has ocultado estas cosas a sabios y grandes y se las has revelado a los sencillos” (Mt 11, 25). Y es la Igle-sia la que nos interpreta la Biblia, con la iluminación del Espíritu Santo, que guía a la Iglesia.

Con espíritu de oración El Concilio Vaticano II nos dice: “Re-

cuerden que a la lectura de la Biblia deben acompañar la oración para que se realice el diálogo de Dios con el hom-bre, pues a Dios hablamos cuando ora-mos, a Dios escuchamos cuando lee-mos sus Palabras” (Dei Verbum, 25). Pídele al Espíritu Santo que te ayude a entender y aceptar la Palabra del Señor: “Espíritu Santo, ilumina con tu luz mi cabeza y enciende mi corazón para que la Palabra de Dios pueda entrar y que-darse siempre en mí”.

La Iglesia nos va educando para que entendamos mejor la Biblia. Y lo hace a través de la liturgia o acciones sagradas donde se celebran los misterios de nues-tra fe. Por eso, la liturgia nos llevará a la Biblia. Prácticamente todos los símbo-los que emplea la Iglesia los toma de la Biblia: el fuego, el agua, el pan. Conoz-camos la Biblia para vivir mejor la Liturgia.

Señor, aquí tienes mi corazón abierto, dispuesto a escuchar tu palabra con corazón sencillo y con la voluntad deci-dida para obedecerte. En Ti está la luz y la salvación. Amén.

¿Cómo Evangelizar? La Biblia es para leerlay vivirla

Año Jubilar23 agosto 2013 - 23 agosto 2014

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8 MensajeroIglesia y Actualidad

Por: CODIPACS ECATEPEC

Pablo Bedolla López, tiene la Maestría en Ciencias Políticas de la UNAM, ha sido diputado Local y Federal llegando a ser coordinador del Grupo Parlamen-tario del PRI en el estado de México. Ha tenido además diversas responsabilida-des en el gobierno y actualmente es Presidente Municipal de Ecatepec.

¿Cómo ha sido su gestión al frente del Gobierno Municipal?

Hemos estado trabajando arduamente de la mano con la gente, con el apoyo del Señor Gobernador, Eruviel Ávila Ville-gas y del presidente Enrique Peña Nieto, hemos hecho un buen equipo en favor de la sociedad.

¿Cómo es la relación Iglesia-Estado en el Municipio más poblado de Méxi-co?

Tenemos una muy buena coordina-ción, respetuosa de los ámbitos de traba-

jo, pero sabemos que requerimos de buena coordinación, esfuerzo, ya que todos somos corresponsables de la sociedad y podemos aportar nuestro “granito de arena”. Se debe lograr una sociedad más fraterna y más feliz. El Señor Obispo Oscar Roberto Domín-guez Couttolenc, es una persona muy comprometida con Ecatepec y nuestro gobierno también.

La inseguridad es una preocupa-ción de la población, ¿qué se hace desde el gobierno municipal ante este problema?

El problema de la inseguridad, por desgracia es un asunto mundial, nacio-nal, estatal y municipal. Hemos puesto más énfasis en la “prevención del deli-to”, se combate el delito en sí, con las acciones propias de la seguridad públi-ca; pero se destinan recursos en la pre-vención, en la generación de empleos, creación de proyectos productivos,

recuperación de espacios públicos, pláticas con los jóvenes para prevención del delito. Muy importante rescatar los valores familiares, los valores cultura-les, los valores transmitidos por nues-tros adultos mayores. Los padres de familia tienen un papel muy importante. Los “primo delincuentes” son muy jóve-nes, por ello, la solidaridad familiar, la convivencia, el escuchar la Palabra de Dios y el acompañamiento de nuestros hijos: a donde van, que hacen, cuáles son sus amistades, eso es lo más valioso.

¿Unas palabras para nuestros lecto-res de “Mensajero”?

Pido a los lectores que colaboremos todos, ya que somos corresponsables en todas las problemáticas, no solo el gobierno, ni la sociedad; se requiere la participación de todos, como los padres de familia al estar más al pendiente de sus hijos.

Lograr una sociedad más fraterna y más feliz es corresponsabilidad de todos: Presidente Municipal de Ecatepec

Por: Abril Villanueva

Huexotla, Texcoco, Méx. 24 de agosto 2013. La Diócesis de Texcoco contó con la distinguida participación del Dr. Fernando Pliego Carrasco, investigador del Instituto de Investigaciones Socia-les de la UNAM, quien impartió la con-ferencia "Familias y Bienestar en socie-dades democráticas".

El claustro de la Parroquia de San Luis Obispo fue sede del segundo tema den-tro del ciclo de conferencias “Ser y

quehacer del político en México”, orga-nizado por la Dimensión de Fe y Políti-ca de la Comisión Diocesana de Pasto-ral Social - Cáritas Texcoco.

El Dr. Fernando, autor de varias publi-caciones, afirma que más de 13 estudios a nivel mundial revelan que la estructu-ra familiar que garantiza el mayor bie-nestar de la población y la protección de sus derechos humanos es la conformada por matrimonios estables donde el padre y la madre biológicos cuidan de sus hijos.

En su estudio Fernando Pliego analiza las tenden-cias generales de bienestar en donde se encontró que el tipo de matrimonio que es facilitador del bienestar en la sociedades democrá-ticas actuales es aquel donde se prevalece la esta-bilidad de la pareja con la característica de que los hombres y las mujeres se relacionan de una manera más equitativa y adquie-ren nuevas habilidades emocionales y educativas para atender en conjunto a sus hijos en los nuevos contextos de problemas y necesidades sociales.

Declaró que de acuerdo con información de censos y encuestas nacionales de 1995 en algunos países democráticos como son

Australia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, España, Estados Unidos de América, Holanda, Japón, México, Noruega, Perú y Reino Unido., se advierte que en las familias donde los hijos cuentan con la presencia de sus dos padres biológicos, hay menos vio-lencia contra mujeres y niños.

Además, los indicadores de salud físi-ca son mejores; los problemas de salud mental disminuyen; los ingresos son mayores; hay mejores condiciones de

vivienda; hay más cooperación en las relaciones de pareja; los vínculos entre padres e hijos son más positivos; dismi-nuye el consumo de drogas, alcohol y tabaco; la conducta social de los hijos es más cooperativa; hay menos índices de delincuencia y el desempeño escolar es mejor.

Citó que en los países donde se analizó violencia y estructuras de familias, se encontró de manera sistemática que hay mayor riesgo de violencia cuando los adultos viven en unión libre.

En el caso de México, el estudio elabo-rado por el Instituto Nacional de las Mujeres a través de la UNAM en más de 83 mil casos, revela que en todo tipo de parejas hay violencia contra la mujer, pero en las mujeres casadas civil o reli-giosamente había violencia física en 7.9 por ciento de los casos en el último año analizado, en tanto que en las que coha-bitaban en unión libre los niveles de violencia llegaron a 14.5 por ciento, es decir 80 % más.

Estas conferencias pretenden propor-cionar los elementos de reflexión-acción sobre diversas temáticas y políti-cas públicas que afectan la vida de las personas, contribuir en la generación de una cultura política democrática y de respeto a los derechos humanos; com-partir prácticas cotidianas en las formas de vivir una ciudadanía responsable, realizar acciones orientadas al bien común y rescatar el sentido ético del ejercicio político.

Familias y Bienestar en sociedades democráticas

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9Mensajero Celebremos la Fe

Leer las lecturas no es una tarea del presidente de la celebración, sino de otro ministro: el lector.

Hacer de lector es una tarea importan-te dentro de la asamblea. Los que la realizan deben ser conscientes de ello, y vivir el gozo y a la vez la responsabili-dad de ser los que harán posible que la asamblea reciba y celebre aquella Pala-bra con la cual Dios habla a sus fieles, aquellos textos que son como los textos constituyentes de la fe. El ministerio del lector corresponde, en primer lugar, a quienes oficialmente han sido "institui-dos" como tales: no significa que éstos tengan que leer siempre, sino que con-viene que lo hagan en las ocasiones más relevantes y que se preocupen de que la Palabra de Dios sea bien proclamada y recibida por la asamblea.

ONCE CONSEJOS PARA EL BUEN LECTOR

1. Leerse la lectura antes. Si puede ser, en voz alta y un par de veces. Leerla para entender bien su sentido, y para ver qué entonación hay que dar a cada frase, cuáles son las frases que hay que resal-tar, dónde están los puntos y las comas, con qué palabras puede uno tropezar, etc.

2. Estar a punto y acercarse al ambón

en el momento oportuno, es decir, no cuando se está diciendo o cantando otra cosa. Y procurar que no se tenga que venir desde un lugar apartado de la igle-sia: si es necesario, acercarse discreta-mente antes del momento de subir.

3. Cuando se está ante el ambón, vigi-lar la posición del cuerpo. No se trata de adoptar posturas rígidas, pero tampoco será bueno leer con las manos en los bolsillos o con las piernas cruzadas.

4. Situarse a distancia adecuada del micrófono para que se oiga bien. Ya que por culpa de la distancia muy a menudo se oye mal. No empezar, por lo tanto, hasta que el micrófono esté a la medida del lector (A un palmo de la boca suele ser la colocación adecuada). Y recordar que los golpes que se dan o los ruidos que se hacen ante el micrófono se amplifican.

5. No comenzar nunca sin que haya absoluto silencio y la gente esté real-mente atenta.

6. Leer despacio. El principal defecto de los lectores en este país de nervios y de nula educación para la actuación pública es precisamente éste: leer depri-sa. Si se lee deprisa, la gente quizá sí que con esfuerzo conseguirá entendernos, pero lo que leemos no entrará en su inte-

rior. Recordémoslo: éste acostumbra a ser nuestro principal defecto.

7. Además de leer despacio, hay que mantener un tono general de calma. Hay que desterrar el estilo de lector que sube aprisa, empieza la lectura sin mirar a la gente, y al acabar huye más aprisa todavía. Y no: se trata de llegar al ambón, respirar antes de empezar a leer, leer haciendo pausas en las comas y haciendo una respiración completa en cada punto, hacer una pausa al final antes de decir "Palabra de Dios", escu-char desde el ambón la respuesta del pueblo, y volver al asiento. Aprender a leer sin prisas, con aplomo y seguridad, ciertamente cuesta: por eso es impor-tante hacer cuantos ensayos y pruebas sean necesarios: ¡Es la única forma!

8. Vocalizar. Es decir, resaltar cada sílaba, mover los labios y la boca, no atropellarse. Sin afectación ni comedia, pero recordando que se está "actuando" en público, y que el público tiene que captarlo bien. Y una actuación es una conversación de calle.

9. No bajar el tono en los finales de frase. Las últimas sílabas de cada frase tienen que oírse igual de bien que todas las demás. Y, en cambio, resulta que a menudo en estas sílabas se baja el tono y

se hacen ininteligibles.10. Procurar leer con la cabeza alta. La

voz resulta más fácil de captar y el tono más alto. Si es necesario, coger el libro, levantándolo, para no tener que bajar la cabeza.

11. Antes de comenzar la lectura, mirar a la gente. Al final, decir "Palabra de Dios" mirando a la gente. Y a lo largo de la lectura, si sale natural, mirar tam-bién de vez en cuando. Estas miradas en medio de la lectura no tienen que impo-nerse como una obligación: si no sale natural, es mejor limitarse a mirar al principio y al final, y el resto del tiempo concentrarse en leer bien. Pero si nos resulta fácil, puede ser útil hacerlo, especialmente en las frases más rele-vantes: ayuda a resaltarlas, a crear clima comunicativo, y a leer más despacio.

Fuente: El lector y el animador. Colección Celebrar. Centre de Pastoral Litúrgica. Barcelona 1997.

El servicio de lector

Por: María del Rosario Saavedra Sánchez. Adoración Nocturna Mexi-cana, Diócesis de Ecatepec Pertenezco a la parroquia de los Doce Apóstoles, Diócesis de Ecatepec. Soy laica comprometida en Adoración Nocturna Mexicana; permítanme comentarles a cerca de este ministerio de oración y mi experiencia de partici-par en él.

La Adoración Nocturna nació en Roma en 1809 durante el Pontificado de Pio VII, la erección canónica como Cofradía en 1815 fue puesta bajo el Patrocinio de la Santísima Virgen María y de San Pascual Bailón, tenien-do por objeto hacer guardia y oración durante la noche a Jesús Sacramentado en reparación y desagravio de los ultra-jes que le prodiga la humanidad. En México la Adoración Nocturna se fundó el día 5 de febrero de 1900 en el Templo Expiatorio Nacional de San Felipe de Jesús en la Ciudad de México.

Sentí el llamado de Cristo la noche del Jueves Santo del año 2004, después de participar en los Oficios de este día; el Santísimo Sacramento fue trasladado al monumento para rendirle adoración, observé que un grupo de personas hacían oración ante Nuestro Señor real-mente presente en la Eucaristía, expuesto en la custodia; hubo un deseo inexplicable de quedarme oyendo

como estos hermanos hacían oraciones de alabanza, de agradecimiento, de petición y de intercesión. A partir de esta fecha como adoratriz junto con mis hermanos de la sección, cada tercer sábado de mes, nos retiramos del bulli-cio en las horas de la noche, haciendo vigilia con Jesús Sacramentado, pedi-mos perdón por nuestros pecados, pro-curamos satisfacerlo por los que no le piden perdón, por los que le ultrajan, por los que lo maldicen, por los que no creen. Oramos ante la Presencia Real de nuestro Señor.

¿Quién no se anima a consolar a Jesús? ¿Quién no se siente movido a acudir al llamado que nos hace perso-nalmente el divino Maestro? “Venid a Mi todos los que estáis trabajados y cargados que Yo os aliviare”. Cristo te invita de manera personal para acompa-ñarlo en la oración, abre tu corazón, acércate y conócelo.

Por: Pastoral de la Comunicación, Valle de ChalcoLa devoción a la Virgen de los Reme-dios se encuentra muy extendida. Nume-rosos pueblos de España y en buena parte de Latinoamérica veneran su nom-bre y su imagen. En todos estos lugares, el fervor devocional comienza hacia el siglo XVI y XVII, y su fiesta se celebra entre los meses de agosto, septiembre y octubre. En algunos lugares de América la celebran es el mes de febrero. Todos ellos, conservan una historia o leyenda que habla del origen del amor a la Vir-gen y de la forma en que se encontró la imagen original.

Finalizada la guerra civil española, se cuenta, que una señora de Serón, que vivía en Granada, conocida como Car-men "La soriana "encargó una imagen de la virgen al escultor granadino Espinosa Cuadro. Pagada por aportación popular fue expuesta mucho tiempo en un esca-parate de un centro comercial de Grana-da, en Puerta Real, y era la admiración de cuantos pasaban por allí. Fue bende-cida en la Iglesia de San Juan de Dios y llegó a Serón en agosto de 1939, siendo acogida por el pueblo con un inmenso júbilo y devoción. Pasado 26 años, con gran ceremonia, se llevó a cabo la Coro-nación Canónica de la Santísima Virgen de los Remedios en solemne acto oficia-do por el obispo de la Diócesis Rd. Ródenas García.

Según las crónicas de la época fue un instante inenarrable de estremecedora y contenida emoción el momento de colo-car sobre las sienes de la imagen la coro-na, costeada por el pueblo de Serón.

En diciembre de 1974 se constituyó la Hermandad de la Virgen de los Remedios. Desde sus inicios, esta her-mandad , con sede en la ermita de la Patrona, contempla , como objetivo principal cultivar la vida cristiana mediante la devoción y culto a su Patro-na, así como sufragar los gastos que conlleva el mantenimiento de la imagen , de su trono y de la ermita.

Orar ante la PresenciaReal de nuestro Señor

Nuestra Señora delos Remedios

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10 MensajeroFamilia

Por: Comisión de comunicaciónDiócesis de Teotihuacán

La familia parece a menudo incapaz de cumplir su propia función; y si las con-clusiones no son siempre dramáticas, sí son ampliamente insuficientes. No en vano, aunque equivocadamente, se ha hablado con frecuencia en estos años de fin o superación de la familia y de la pareja, sin indicar por otra parte alterna-tivas concretas y posibles. Queda en pie el hecho de que, dentro del núcleo fami-liar, sigue sin resolverse el problema de la comunicación, con el cual están liga-dos todos los demás. No sólo el lenguaje hace resaltar distancias insalvables entre padres e hijos, sino que entre los mismos padres los gestos y las palabras se convierten a menudo en signos de contradicción, huérfanos de los valores de los que debieran originarse. El padre y la madre no se hablan ya o lo hacen a duras penas; o, peor aún, el hablarse es fuente cotidiana de conflictos. Los hi-jos, según van creciendo, renuncian al diálogo sobre los temas más significati-vos de su experiencia. Es cierto que los estímulos que llegan de la sociedad son violentos y provocadores, pero la fami-lia, en vez de ser un filtro aclarador, se convierte en un espacio donde todo se estanca de modo casi sofocante. Los valores, aunque no estén ausentes ter-minan siendo más un refugio individual que un lugar de serena confrontación y de comunicación interpersonal.

Los problemas que angustian a la familia parece que no se muestran ya en

estos últimos años en la forma llamativa que los caracterizó antiguamente. Sin embargo, no se puede decir ciertamente que haya disminuido su intensidad y actualidad. Alguien sostiene que el pro-blema de los jóvenes y el de la libera-ción de la mujer (con todo lo que impli-ca para la vida de la familia) poseen la carga revolucionaria de los grandes

acontecimientos de la historia y que quedará como el hecho específico de nuestro siglo. Es posible que esta valo-ración sea exagerada, pero ciertamente no carece de fundamento en los hechos.

No es cuestión de establecer quién tiene razón o no; lo importante es no velar la realidad y, si es posible, discer-nir los motivos. Quizá habría que des-

pertar la conciencia de que la solución está en la realidad de cada uno, y que es ésta la que ha de tenerse en cuenta sobre todo cuando ese alguno son los demás. Asimismo debemos estar convencidos de que la realidad del individuo no se agota en su entidad visible, sino que comprende también su relación con Dios.

La vida en pareja y en familia

Hoy en día, hay muchos problemas en el mundo y creo que la mayoría de ellos comienzan en casa.

El mundo está sufriendo tanto porque no hay paz. Y no hay paz, porque no hay paz en la familia. Debemos hacer de nuestras casas centros de compasión y perdonar sin cesar, y así habrá paz.

Ustedes deben ser una familia; ser la presencia de Cristo el uno para el otro.

Sólo deja que la gente vea a Jesús en ti: que vea cómo rezas, que vea cómo lle-vas una vida pura, que vea cómo tratas a tu familia, que vea cuánta paz hay en tu familia.

¿Conoces primero a los pobres de tu propia casa? Tal vez en tu casa haya alguien que se siente solo, no muy aco-gido, no muy amado. Tal vez tu esposo o tu esposa o tu hijo se siente solo. ¿Sabes eso?

Hoy ni siquiera tenemos tiempo de mirarnos el uno al otro, de hablarnos, de divertirnos en la compañía de otros… Y así, cada vez estamos menos en contac-to el uno con el otro. El mundo está per-dido por falta de dulzura y amabilidad. La gente siente una gran hambre de amor porque todo el mundo tiene tanta prisa.

Sean felices... y dedíquense muy espe-cialmente a ser un signo de la felicidad de Dios. La alegría se refleja en los ojos; es evidente cuando uno habla y camina. No la podemos encerrar dentro de noso-tros mismos. La alegría es muy conta-giosa. Nunca sabremos todo el bien que una simple sonrisa puede causar.

Si introducimos la oración dentro de la familia, la familia quedará unida. Reú-nanse por sólo cinco minutos. Es de allí de donde vendrá su fuerza. El tiempo que pasamos teniendo nuestra audiencia

diaria con Dios es la parte más preciosa de todo el día.

Hagan de sus casas y de sus familias otro Nazaret, donde el amor, la paz, la alegría y la unidad reinen, porque el amor comienza en el hogar.

¡Que Dios los bendiga!

Beata Madre Teresa de Calcuta

La familia: Signo de lafelicidad de Dios

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11Mensajero @joven

Por. Leonardo Reyes Fonseca

Es cierto que a veces sentimos que la Iglesia nos exige demasiado cuando habla de dejar todo aquello que nos impide vivir en comunión con los demás; de una entrega radical para que unidos busquemos el Reino de Dios.

Conociendo esto, en varias ocasiones le decimos que NO, por miedo a dejar de ser nosotros mismos. Y cuando final-mente hemos decidido decir SÍ, se nos viene una serie de cuestionamientos que nos orillan a desertar de nuestro ideal de integración total, optando de esta manera por quedarnos como suje-tos pasivos dentro de ella.

Los jóvenes queremos experimentar el vivir como hijos de Dios con una libertad que nos permita desarrollarnos plenamente; por eso la invitación de la Iglesia puede ser atractiva siempre y cuando la conozcamos a profundidad sabiendo que para ello necesitamos estar en diálogo continuo con Cristo y su Evangelio.

Entre nosotros mismos, los católicos, el desconocimiento de la verdad sobre Jesucristo y de las verdades fundamen-tales de la fe es un hecho muy frecuente y, en algunos casos, esa ignorancia va unida a una pérdida del sentido del peca-do.

Es importante que aprendamos a dis-tinguir los elementos divinos y huma-nos de la Iglesia. Sobre todo, que la parte humana ha reconocido con humil-

dad sus errores y pecados a través de la historia, y que día con día sigue su cami-nar hacia la santidad.

Hay líneas de acción, dentro de la Igle-sia, que requieren de nuestra participa-ción, en las cuales podemos encontrar plenamente el sentido de pertenencia real que necesitamos tener la mayoría de los jóvenes. Solo se requiere tener dispuesto el corazón.

Sabemos que no estamos solos, que Jesucristo nos acompaña, que el Padre nos ama, y que el Espíritu Santo nos da la fuerza necesaria para seguir adelante. Hay también jóvenes que vibran por el descubrimiento de Cristo y que viven intensamente su fe en el compromiso con el prójimo, particularmente con el pobre.

Olvidamos que al igual que los Após-toles requerimos de estar en constante espera, oración y perseverancia para que el Espíritu Santo venga a nosotros, y nos indique el camino que ha planea-do Dios Padre para la Iglesia de Cristo.

Sexualidad juvenil

Por: Abril Villanueva

La juventud, tema "digno del máximo interés y de grandísima actualidad", constituye hoy no sólo el grupo más numeroso de la sociedad latinoamerica-na, sino también una gran fuerza nueva de presión.

De acuerdo al último reporte del Pro-grama de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), con datos del año 2012, los jóvenes representan el con-junto de la población de entre 15 y 24 años de edad, es decir, un 18% del total de la población mundial, lo que repre-senta a 1200 millones de personas. Sus inquietudes, necesidades y preocupa-ciones principales están dirigidas a la protección, trabajo y salud,

El informe señala que los jóvenes son un factor determinante en el cambio social, el desarrollo económico y el progreso técnico. Afirma que su imagi-nación, sus ideales, sus perspectivas y su energía resultan imprescindibles para el desarrollo de las sociedades en las que viven, y que por ello, es impor-tante multiplicar los esfuerzos encami-nados a crear y desarrollar políticas y

programas que estén específicamente destinados a los jóvenes.

Por su parte, la Iglesia ve en la juven-tud la constante renovación de la vida de la humanidad y descubre en ella un signo de sí misma. Ve, en efecto, en la juventud el renovado comienzo y la persistencia de la vida, o sea, una forma de superación de la muerte.

Esto no tiene sólo un sentido biológi-co, sino también socio-cultural, sicoló-gico y espiritual.

En efecto, frente a las culturas que muestran signos de vejez y caducidad, la juventud está llamada a aportar una revitalización; a mantener una "fe en la vida", a conservar su "facultad de ale-

grarse con lo que comienza". Ella tiene la tarea de reintroducir permanente-mente el "sentido de la vida".

Renovar las culturas y el espíritu, significa aportar y mantener vivos nuevos sentidos de la existencia. La juventud está, pues, llamada a ser como una perenne "reactualización de la vida" [Mensaje del Concilio a los Jóve-nes].

En la juventud así entendida, descu-bre también la Iglesia un signo de su fe. La fe, anuncio del nuevo sentido de las cosas, es la renovación y rejuveneci-

miento de la humanidad. Desde esta perspectiva, la Iglesia invita a los jóve-nes "a sumergirse en las claridades de la fe" y de este modo a introducir la fe en el mundo para vencer las formas espiri-tuales de muerte, es decir, "las filosofías del egoísmo, del placer, de la desespe-ranza y de la nada", filosofías que implantan en la cultura formas viejas y caducas.

Es la juventud un símbolo de la Igle-sia, llamada a una constante renovación de sí misma, o sea, a un incesante reju-venecimiento.

Juventud: Un símbolo de la Iglesia

Al menos 250 jóvenes se reunieron el pasado 18 de agosto en el Seminario de Tlalnepantla para participar en el Encuentro Juvenil Diocesano.

La Celebración Eucarística fue presi-dida por Mons. Carlos Alberto Cardo-na, vicario de Pastoral, quien invitó a los jóvenes a ser profetas teniendo en cuenta que un profeta no ve el futuro, sino el presente con los ojos de Dios; un profeta siempre es incómodo, es fuente de conflicto porque siempre introduce una utopía que propone algo distinto y mejor y, como decía Chesterton, un profeta cristiano está condenado a tres cosas: debe ser valiente, tiene prometi-do ser absurdamente feliz y estará cons-tantemente en problemas. “Cuando tú tomas en serio a Jesús para seguirlo, lo que hay para ti es la cruz”, dijo.

Para concluir la homilía Monseñor comentó que el arzobispo, Don Carlos Aguiar Retes le pidió que se compro-metiera con los jóvenes ese día ya que comenzará en el mes de septiembre la visita pastoral a todas las parroquias de la arquidiócesis para conocer el trabajo que se hace en ellas y a los miembros de todas las dimensiones. Solicitó además, explicó, que haya un representante de la Pastoral Juvenil en el consejo porque ningún consejo de pastoral está comple-to si no están los jóvenes presentes.

Al término de la Celebración Eucarís-tica Mons. Cardona pidió a todos los

jóvenes juntarse para tomarles una foto-grafía y presumirlos en Facebook, lo cual hizo que el ambiente se hiciera más festivo durante el encuentro.

En el evento los jóvenes participaron después en distintos talleres que los motivaron a seguir formándose como verdaderos católicos y dar testimonio con su vida de lo que creen.

Hubo momentos muy emotivos ya que fueron invitados los sacerdotes Salvador Herrera y Gabriel Ramírez junto con los miembros, que ahora son ya padres de familia y trabajan en otros campos pastorales, que iniciaron con el proyecto de la Pastoral Juvenil en nues-tra Arquidiócesis hace algunos años.

Otro momento muy importante que se vivió durante el encuentro fue un pequeño homenaje que se le hizo al seminarista José Santos Hernández Calderón, quien fue llamado a la casa del padre el pasado 24 de junio, pero que ha dejado huella en los jóvenes que lo conocieron y es por eso que sus fami-liares y seres queridos han pintado su huella en una manta que tiene como propósito motivar a los jóvenes a dejar su huella en el mundo con su testimo-nio.

El Encuentro Juvenil Diocesano con-cluyó con una Hora Santa y un alegre momento de alabanza al Santísimo Sacramento.

Un profeta no ve el futuro,sino el presente con los ojosde Dios Por: Jesús Emmanuel Orozco Paredes

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12 MensajeroDios te llama

El Sínodo ha dado particular importan-cia al papel decisivo de la palabra de Dios en la vida espiritual de los candi-datos al sacerdocio ministerial: “Los candidatos al sacerdocio deben apren-der a amar la palabra de Dios. Por tanto, la Escritura ha de ser el alma de su for-mación teológica, subrayando la indis-pensable circularidad entre exegesis, teología, espiritualidad y misión”.

Los aspirantes al sacerdocio ministe-rial están llamados a una profunda rela-ción personal con la palabra de Dios, especialmente, en la Lectio Divina, porque de dicha relación se alimenta la propia vocación: con la luz y la fuerza de la palabra de Dios, la propia voca-ción puede descubrirse, entenderse,

amarse, seguirse, así como cumplir la propia misión, guardando en el corazón el designio de Dios, de modo que la fe, como respuesta a la palabra, se convier-ta en el nuevo criterio de juicio y apre-ciación de los hombres y las cosas, de los acontecimientos y los problemas.

Esta atención a la lectura orante de la Escritura en modo alguno debe signifi-car una dicotomía respecto al estudio exegético requerido en el tiempo de la formación. El sínodo ha encomendado que se ayude concretamente a los semi-naristas a ver la Relación entre el estu-dio bíblico y el orar con la Escritura. El estudio de las Escrituras les ha de hacer más conscientes del misterio de la reve-lación divina, alimentando una actitud

de respuesta orante a Dios que habla. Por tanto, se deberá poner el máximo cuidado para que en la vida de los semi-naristas se cultive esta reciprocidad entre estudio y oración. Para esto, hace falta a que se oriente a los candidatos a

un estudio de la Sagrada Escritura mediante métodos que fortalezcan este enfoque integral.Fuente: Tomado de la exhortación apos-tolica Postsinodal, Verdum Domini, del Santo Padre Benedicto XVI.

Por: CODIPACS ECATEPEC

Celebrar los 25 años de vida sacerdotal, “es volver a experimentar lo impresio-nante que es el sacramento del orden: la pobreza del ser humano para algo tan sublime. Es un don, un regalo que hace feliz al hombre porque lo que llena el corazón del Sacerdote es el mismo Cris-to. La disponibilidad es algo muy importante para el servicio de Dios en la Iglesia”. Estas y otras palabras son las que el Padre Esteban Alcocer González comparte para “Mensajero”

El padre Esteban pertenece a la Con-fraternidad de los Padres Operarios del Reino de Cristo. Nació en El Roque Guanajuato, hijo de +José Alcocer Nolasco y de María Dolores González. Su vocación como don y misterio, se manifestó desde muy pequeño: a los seis años. La imagen del párroco de su pueblo fue una motivación en su voca-ción. Siendo joven, estando en un curso

propedéutico para Ingeniería Química, se encontró con la invitación a conocer e ingresar a la Confraternidad. Muchos profesores del seminario marcaron la vida del padre Esteban con su testimo-nio sacerdotal.

El cardenal Marcelo González Martín, quien tuvo un corazón eclesial extraor-dinario, le enseñó a trabajar por la Igle-sia Universal y el padre Enrique Amez-cua Medina, fundador de los Padres Operarios de Reino de Cristo, le dejó huella por su entrega y generosidad para formar la confraternidad que apoya a las Diócesis más necesitadas.

Un hermoso caminar ha tenido el padre Esteban en su sacerdocio: Direc-tor espiritual en el Seminario Menor en Toledo, España; Rector del Curso de Espiritualidad durante seis años. Párro-co en la Diócesis de Querétaro durante tres años. Estudió en Roma la Licencia-tura en Espiritualidad en la Universidad Gregoriana y en 2002 durante la Asam-blea General de los Padres Operarios fue elegido Superior General, cargo que ejerció durante dos periodos hasta el 2012. Actualmente es Párroco de Cristo Rey y Santa María de Guadalupe en Tulpetlac, y Vicario de la Vida Consa-grada de la Diócesis de Ecatepec.

“Ser sacerdote según el Corazón de Cristo”, es la enseñanza que le transmi-tió el padre Amezcua Medina, y que hoy el padre Esteban la comparte con todos nosotros. A los jóvenes les envía este mensaje: “La viña es muy amplia, y todos pueden trabajar para el Señor”.

Por: Sem. Jairo Teco Frías

Con una Misa de apertura, presidida por el arzobispo, Carlos Aguiar Retes, el Seminario de Tlalnepantla inició el nuevo curso de formación.

En su Homilía, el Sr. Arzobispo invitó a los seminaristas a ser generosos en todo, especialmente en querer respon-der a Dios, cumpliendo lo que Él pide. Retomó las palabras de la Primera Lec-tura: “Advierte bien lo que el Señor te pide: que temas al Señor…, que cum-plas su voluntad… y lo ames; que sir-vas al Señor…, que cumplas los pre-ceptos y mandamientos… para tu bien” (Dt. 10, 12-22).

Exhortó a los jóvenes a ser servidores alegres y generosos, capaces de superar la tentación e insistió en el peregrinar de su vida que los conduce hacia Dios, viviendo en unión con Cristo, quien les da la fortaleza necesaria para saber afrontar las adversidades y la paz que necesitan porque una nueva etapa es una nueva oportunidad que Dios les regala para dar cuentas de su respuesta

vocacional.Invitó a los seminaristas a orar por

sus formadores para que el Espíritu Santo les conceda la sabiduría necesa-ria para seguir formando a los futuros sacerdotes.

Al término de la Homilía, los padres formadores y profesores presentes, pasaron al frente a hacer su profesión de fe, aceptando la gran responsabili-dad de contribuir en la formación del Seminario. Lo hicieron ante los santos evangelios, contenido y pilar de la ense-ñanza que Jesucristo vino a dejarnos. “Que así, Dios me ayude y estos santos evangelios que toco con mis manos”, fue lo expresado en su profesión para cumplir su responsabilidad.

Al concluir la Santa Misa, el Sr. Arzo-bispo bendijo cada uno de los nuevos salones, utilizados para la enseñanza académica, en donde el profesor y el alumno comparten la vida, así como los conocimientos.

Para cerrar la noche, los seminaristas tuvieron una convivencia con los miem-bros del Encuentro de Matrimonios,

Lo que llena el corazón del Sacerdote es el mismo Cristo

Palabra de Dios y

Verdum Dominicandidatos al orden sagrado

De regreso al seminario“Advierte bien lo que el

Señor te pide”

quienes los animaron a seguir adelante, a dejarse guiar por el Espíritu Santo.

Los seminaristas estamos llamados a ser pastores alegres y generosos, que se desvivan por sus comunidades, que

sepamos vivir en la Cruz de Cristo, porque Él espera de nosotros una res-puesta basada en el amor. Y con este ánimo, damos inicio a nuestro curso.

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1Mensajero 3Iglesia y Cultura

Por: Samuel Nájera

La Diócesis de Texcoco y el Centro de Estudios Históricos y Sociales de Tex-coco "Lorenzo Boturini Benaduci", organizaron la exposición documental "Tesoros del Convento de Texcoco" y el I Coloquio de Historia Eclesiástica de Texcoco "In Uno Novo Initio", con motivo del 490 aniversario de la llega-da de fray Pedro de Gante a América.

Este bello y magistral encuentro, celebrado el viernes 16 de agosto de 2013 en el recinto de la Santa Iglesia Catedral de Texcoco, fue presidido por Mons. Juan Manuel Mancilla Sánchez, Obispo de Texcoco, y contó con la des-tacada participación de personalidades del mundo académico, histórico y cul-tural de México:

Dr. Miguel León-Portilla, antropólo-go e historiador.

Lic. Javier Eduardo Ramírez López, Centro de Estudios Históricos y Socia-les de Texcoco.

Dra. Dorothy Tanck de Estrada, histo-riadora, Colegio de México.

Dra. Ascensión Hernández de León-Portilla, Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM.

Dra. Rosa de Lourdes Camelo Arre-dondo, Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM.

Mtro. Alfonso Sandoval Álvarez, Centro Cultural Mexiquense Bicente-nario.

Dr. Francisco Iván Escamilla, Institu-to de Investigaciones Históricas de la UNAM

Lic. Cecilia González Carrasco, Cen-tro de Estudios Históricos y Sociales de Texcoco.

R.P. Dr. Fr. Francisco Morales Valerio O.F.M., Ministro Provincial del Santo Evangelio de México.

El coloquio fue coordinado por el Lic. Javier Eduardo Ramírez López, Direc-tor del Centro de Estudios Históricos y Sociales de Texcoco "Lorenzo Boturini Benaduci".

En su mensaje de bienvenida, Mons. Juan Manuel expresó que “hace 490 años Dios nos regaló a este yoyotzin del

amor, de la educación y de la cultura para estas tierras. Texcoco y su gente nueva se sienten felices y muy honra-dos con la presencia y palabra de todos ustedes que también han sabido llevar en su alma el patrimonio del espíritu”.

Posteriormente, agradeció al Centro de Estudios Históricos Texcocanos por el profesionalismo empeño y sacrificio que hicieron para que personalidades de la historia, la cultura y de la educa-ción en México pudieran estar en el coloquio.

En su mensaje de clausura, Don Juan Manuel pidió a Dios “que esta semilla

que ha quedado en el corazón de tantos jóvenes que también tienen como ideal ser como Fray Pedro de Gante y hacer de Texcoco la Casa de las Flores, de la sabiduría, del amor, de la comunión logre hacerse una realidad. Somos una casa chiquita, pero en una casa chiquita hay una paz infinita...

…Que se acabe el tormento, que se acabe la basura, que se acabe la margi-nación en que estas comunidades han vivido por años y que renazcan de nuevo la esperanza del amor y de la sabiduría".

Coloquio de Historia Eclesiástica de Texcoco "In Uno Novo Initio"

Por : P. Gustavo Santana PatiñoDiócesis de Cuautitlán

Cada época en la historia va creando ciertas divinidades a quienes les atribu-ye capacidades o poderes que, conforme pasa el tiempo, van aumentando en can-tidad y por consecuencia en calidad y esto, poco a poco, va modificando, o lo que es menos agradable, va complican-do las relaciones humanas.

Cada vez que reflexionamos en torno a nuestra persona, emerge a nuestra mente aquella serie de preguntas válidas para todos los tiempos y en todos los momen-tos ¿Qué soy?, ¿Quién soy?, ¿de dónde vengo?, ¿a dónde voy?. Esto ha sido una constante ante la cual, la cultura respon-de con elementos indisolubles, divinos, en cualquier época incluyendo la pre-sente, y esto es, toda nuestra vida.

Por lo tanto la cultura tiene que ver con dios y sus avatares, con imágenes y pro-puestas para la vida humana. Los símbo-los de lo divino van custodiando al amor, a la guerra, a la muerte, a la tristeza, a la felicidad, al lamento, al festejo, en fin, a la suma de toda nuestra manifestación cultural en cada tiempo y en cada espa-cio.

Si entendemos por cultura, la diversi-dad de estilos y protocolos con los que el

ser humano ha respondido, y responde-rá, al reto de vivir, podemos concluir que el hombre ha respondido constru-yendo sus representaciones de lo que consideraba divino en cada época, de lo que consideraba superior en cada tiem-po, de lo que consideraba sublime en cada instante, pero al final de cuentas solo es vana ilusión, pues todo ello se desmorona si no hay cimientos que sean capaces de soportar cada época, cada tiempo y cada instante.

Al responder a estas preguntas, tan antiguas como el ser humano mismo, puedo decir que el Dios que me muestra de dónde vengo y a dónde voy, que me descubre quién soy, que se revela en tres Personas Divinas; Padre, Hijo y Espíritu Santo viviendo entrelazadas en una comunión perfecta es el Dios en quien creo, inclusive, a quien sirvo.

¿Hablamos de Dios?Leandro Medina CabreraValle de Chalco

Los orígenes de Amecameca se recuer-dan como tierra de agricultores y comer-ciantes; también por haber sido de las pocas comunidades en sublevarse y correr a los españoles. Tras la coloniza-ción, aquí se creó la escuela politécnica de la que salieron sacerdotes, relojeros, pintores, impresores y encuadernado-res; en la Parroquia de la Asunción se instauró la primera imprenta católica que unía a la institución católica y cultu-ral. El 14 de noviembre de 1861, el gobierno del Estado de México le otorgó el título de villa aunque no fuera cabece-ra de distrito, pero su importancia comercial, política y cultural le valieron el nuevo nombramiento.

El templo fue fundado por la orden de los dominicos, su construcción se reali-zó entre los años 1554 a 1562; es de esti-lo manierista de gran sencillez hecho de cantera rosa. En su fachada destaca la escultura de la Virgen de la Asunción, alrededor de sus pies se ubican rostros de ángeles, en la cornisa de la ventana resalta por su decoración en forma de gotas. En el interior de la iglesia es atrac-tivo su retablo de estilo neoclásico con la imagen de la virgen de Guadalupe, de lado derecho se ve interesante un retablo barroco con imágenes bíblicas enmarca-da por columnas tipo salomónicas.

En el sagrario se muestran dos intere-santes obras: un retablo barroco de las

mismas características del anterior y otro más que guarda a un Cristo hecho de pasta de caña de maíz. El claustro, junto al templo, es de dos niveles ambos con una arquería compuesta por arcos rebajados y labrados en piedra. Aún pueden observarse restos de pinturas al fresco decorando con imágenes vegeta-les el capitel de las columnas. Reciente-mente se instaló un nuevo reloj, que da sonidos en diferentes e insignes horas del día.

Amecameca es un agradable lugar para pasar un fin de semana, cuenta con atractivos que ofrecen al visitante un agradable paseo; aunque el centro no

Los Templos y su Historia: Parroquiade la Asunción, Amecameca

deja de tener la algarabía de una pequeña ciudad los alrededores ofrecen paz, natu-raleza y diversión, escoltados por los colosos volcanes Popocatépetl e Iztac-

cíhuatl. Este lugar que en náhuatl signi-fica “Que tiene vestido de amate” o “el lugar donde los papeles señalan o indi-can”.

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MARCATEXTOS

DICCIONARIO

SACAPUNTAS

CUADERNO

LONCHERA

PLUMONES

CARPETA

ESTUCHE

MOCHILA

LIBRETA

UTILES

COMPAS

REGLA

PLUMA

LAPIZ

1 Mensajero4 Sección InfantilOración por los hijos que

van a la escuela

Divino Salvador, que te sentaste junto con los

maestros de la ley, te confiamos a nuestros hijos

mientras están en la escuela.

Infunde en ellos el Espíritu de sabiduría; abre

sus inteligencias, a fin de que te conozcan cada

día más y aprendan los conocimientos que

necesitan para su vida terrena y eterna.

Concédeles las virtudes de la obediencia y la

diligencia. Que aprecien y amen a sus maestros y

compañeros. Y que día tras día crezcan como tú

en edad, sabiduría y gracia ante Dios y ante los

hombres. Amén.

Encuentra las palabras en la sopa de letras

Feliz regresoa clases

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Por: Comisión de ComunicaciónDiócesis de Teotihuacán

En estos momentos difíciles que vive actualmente la educación de los docen-tes en nuestro país, debemos tener muy presentes estos principios que algunos hemos olvidado. “La educación consis-te en que el hombre llegue a ser más hombre, que pueda ser más y no sólo que pueda tener más, y que, en conse-cuencia, a través de todo lo que tiene, todo lo que posee, sepa ser más plena-mente hombre.”, dijo Juan Pablo II.

La educación es una responsabilidad que todas las personas compartimos. El ser humano está llamado a desarrollarse para afianzar su identidad y alcanzar su plenitud, lo cual no se puede lograr sino en la mutua relación, pues fuimos crea-dos para vivir y crecer con los demás y para los demás. Por la Encarnación, Dios vino a nuestra historia, asumiendo

Él mismo todo lo humano y descubrién-donos que su Persona es “camino, ver-dad y vida”. En este contexto, la Iglesia continúa la misión de su fundador acom-pañando a los creyentes y prestando un servicio a toda la sociedad en este pro-ceso permanente de búsqueda y con-quista de su realización, conforme a las exigencias de su dignidad y a las opor-tunidades de cada época y situación cultural.

Efectos de esta emergencia educativa se manifiestan en un sinnúmero de realidades sociales, económicas, políti-cas, culturales y, también, religiosas que estamos padeciendo. Es nuestra obligación, como sucesores de los após-toles, dirigir palabras de verdad a un pueblo que vive horas aciagas y que, al no encontrar salida, corre peligro de perder sus valores de identidad, profun-damente cristianos. El tema es la emer-gencia educativa y las consecuencias de

transmitir la fe y los valores a las nuevas generaciones. En la compleja realidad social que vive nuestro país, los signos positivos de esperanza y de vida se entrelazan con las manifestaciones y acontecimientos sembradores de vio-lencia, de frustración y de muerte que afectan a todos los ciudadanos y en particular a los cristianos. Al asumir Jesucristo la condición humana, no solo le dio un nuevo sentido a la historia de los hombres, sino que sembró en ella, mediante su Resurrección y la acción vivificante del Espíritu Santo, el ger-men de la esperanza, de la felicidad y de la inmortalidad.

El testimonio de su vida, su Evangelio y su Espíritu, nos obligan a leer los acon-tecimientos, por más dolorosos que sean, como “signos de los tiempos”; es decir, hechos significativos y esperan-zadores que nos interpelan para vencer el mal con el bien. Lo cual no impide

que nuestra responsabilidad y compro-miso sea con el aquí y el ahora. La cultu-ra, por naturaleza se comunica, se crea y se recrea a través de la educación. El cambio cultural que experimentamos ya, exigirá su correspondencia en el campo educativo.

Fragmento tomado del libro: “Educar para una nueva sociedad”

1Mensajero 5La Sal y Luz del mundoHay que educar y educarnos para una mejor sociedad

Por: Pbro. Yair Ortega Martínez

La era digital está lejos de ser una moda pasajera. Internet empezó como un experimento en 1969 y comenzó a conectar a los ciudadanos civiles a par-tir de 1990. Le bastó cuatro años para llegar al hito de los 50 millones de usua-rios. Algo que a la prensa le costó cuatro siglos, al teléfono 74 años, a la radio 38 y a la televisión 13. Pero si de récords se trata, la red social Facebook cosechó 100 millones de usuarios en apenas nueve meses.

Según la “Internet World Stats” (Estadísticas Mundiales de Internet), la penetración de Internet en México asciende al 36.9%, es decir, que ya son más de 42 millones de usuarios que se conectan al ciberespacio día a día y la cifra va en aumento. Principalmente son los jóvenes quienes se caracterizan por vivir siempre conectados. Se piensa que en dos años el 93% de los adoles-centes entre 12 y 17 años vivirán “on-line” todo el tiempo, conectados princi-palmente a sus redes sociales y blogs de internet.

Las redes sociales como Facebook, Twitter, Youtube, o Tumblr, están cam-biando a gran velocidad el estilo y mo-do de relacionarse de las nuevas genera-ciones. Los jóvenes de hoy encuentran en las redes sociales y en los mensajes de texto telefónicos su fuente primaria de socialización; han pasado de relacio-narse “cara a cara” a relacionarse a tra-vés del ciberespacio.

Para los católicos comprometidos, el campo de misión no es ya el mismo. La palabra de Dios debe llegar a todo el mundo pero este ya no está delimitado a las clásicas fronteras que los humanos hemos creado y que delimitaban el campo de evangelización. Un nuevo continente ha surgido, un “Continente

Digital” que nos llama a conquistarlo para la causa del Evangelio.

Para el católico, Internet, la Web, las redes sociales, hoy por hoy, no son solo el futuro sino el presente de las comuni-caciones sociales y, por tanto, un gran medio para llevar la Buena Nueva de salvación; sería una grave irresponsabi-lidad no usarlas con un sentido evange-lizador.

El papa Benedicto XVI dijo: «si la Buena Noticia no se da a conocer tam-bién en el ambiente digital, podría que-dar fuera del ámbito de la experiencia de muchas personas para las que este espacio existencial es importante. El ambiente digital no es un mundo parale-lo o puramente virtual, sino que forma parte de la realidad cotidiana de mu-chos, especialmente de los más jóve-nes».

¿Y cómo evangelizar a través de Internet y principalmente de las redes sociales? Compartir la fe consiste, no sólo en la expresión explícita de ella, sino también en el testimonio, es decir, «en el modo de comunicar preferencias, opciones y juicios que sean profunda-mente concordes con el Evangelio, incluso cuando no se hable explícita-mente de Él. Fotografías, videos, tex-tos, etc., son las herramientas que tene-mos a la mano. Somos iMisioneros de la verdad que Jesucristo trajo al mundo para salvarnos.

Misioneros DigitalesA todos los Abuelos de México yA todos los hombres y mujeres de buena voluntad

Queridos hermanos y hermanas que comparten el gozo de ser abuelos, me dirijo a ustedes para felicitarles en este “Día del Abuelo”, conocido también como el día internacional de las perso-nas de la tercera edad.

Hoy la Iglesia, recuerda con cariño y veneración a dos grandes abuelos; San Joaquín y Santa Ana, que son parte de una larga cadena que han pasado en la fe y en el amor a Dios, así mismo son ejem-plos perfectos de vida interior, a quie-nes Dios eligió para enriquecer al mun-do con la Gran Madre de Dios, María Santísima.

La familia de Jesús de Nazaret, acogió la gracia divina para transmitir la fe, para comunicar el patrimonio de la hu-manidad y lo valioso que es el encuen-tro y el diálogo entre generaciones.

“El acontecimiento de la presenta-ción en el templo (cf. Lc 2, 41-50) nos pone ante el encuentro de generacio-nes: …Niños y ancianos construyen el futuro de los pueblos. Los niños porque llevarán adelante la historia, los ancia-nos porque transmiten la experiencia y la sabiduría de sus vidas” (DA 447).

En días pasados, el papa Francisco, expresó su preocupación por las perso-nas de la tercera edad en su visita a Río de Janeiro: “Creo que cometemos una injusticia con los ancianos, estamos acostumbrados a la cultura de la des-cartes: con los ancianos se hace a menu-do. No deben ser aislados. Tenemos que enfocarnos a la cultura de la inclusión, la cultura del encuentro, debemos hacer un esfuerzo para incluir a todos en la sociedad” (JMJ 2013, 26 de julio).

Es en los abuelos, donde debemos de-positar una autoridad moral respetable en nuestra sociedad y en cada una de nuestras familias.

Con motivo de esta celebración recor-damos también lo que los Obispos de América Latina, reunidos en aparecida dijeron: “El respeto y gratitud de los ancianos debe ser testimoniado en pri-mer lugar por su propia familia. La Palabra de Dios nos interpela de mu-chas maneras a respetar y valorar a nuestros mayores y ancianos. Incluso nos invita a aprender de ellos con grati-tud, y a acompañarlos en su soledad y fragilidad. Sin embargo, a menudo son olvidados o descuidados por la socie-dad y hasta por sus propios familiares.

La Iglesia se siente comprometida a procurar la atención humana integral de todas las personas mayores, también ayudándoles a vivir el seguimiento de Cristo en su actual condición, e incor-porándolos lo más posible a la misión evangelizadora” (DA 448 - 450).

De esta manera las familias crecerán en un ambiente cálido y acogedor, en donde la juventud se vea arropada por la sabiduría de los abuelos y ellos se sien-tan queridos y motivados por sus des-cendientes.

Por tal motivo, queridos hijos, eleva-mos nuestras oraciones a Dios Padre, por todos los abuelos de México y del mundo entero para que les acompañe y llene de recompensas en su caminar y con la protección de nuestra Santísima Madre, María de Guadalupe, para que les guíe ahora y siempre. ¡Muchas Feli-cidades en este día y les bendigo en nombre de Dios!

† Francisco Javier Chavolla Ramos Obispo de Toluca

Dimensión Episcopal de Familia

Felicitación a los Abuelos de México“La corona de los ancianos son los hijos de sus hijos” (Prov. 17, 6)

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16 MensajeroAño de la Fe

Por: Sesgo.

La Basílica de Nuestra Señora de Gua-dalupe en este "Año de la Fe" ha convo-cado a varios sectores eclesiales como: obispos, presbíteros, consagradas y en esta ocasión los seminaristas del país de los principales seminarios de nuestro territorio, asistieron principalmente, a los aspirantes al sacerdocio del centro del país.

Esta iniciativa dentro del "Año de la Fe" -que ha sido muy significativo- y que culminará este mes de octubre pro-clamado por el Papa Benedicto XVI ha tenido como iniciativa primordial; para unos aumentar, para otros encontrar y para muchos más conservar la fe en todo el mundo, a través de acciones, de convivencias, testimonios, estudios y sobre todo visitar lugares santos, en este caso, como la Insigne y Nacional Basí-lica de Guadalupe.

Ahora, estas actividades les toco a los jóvenes seminaristas que vinieron, prin-cipalmente de Toluca, Nezahualcóyotl, Morelos, Atlacomulco, Puebla, Acapul-co, Cd. Altamirano, Cuautitlán, Ecate-pec, Texcoco, Tlalnepantla, Tulancin-go, Tula, Tenancingo, y los tres semina-rios de la Arquidiócesis de México.

Alrededor de 600 seminaristas mani-festaron su afecto, fraternidad, y amor a sus hermanos en el seguimiento de Cris-to, a través, de ponencias y testimonios dieron cuenta de sus experiencias en el camino del seguimiento de Cristo Sumo

y Eterno Sacerdote.Comentaron sus experiencias sobre:

cómo han tenido obstáculos que sortear para llegar a donde están, en el camino de la consagración, con vistas al futuro, además externaron lo que les espera,

retos y alegrías por su convencida fe.Además, invitaron a los jóvenes de no

tener miedo de seguir el camino de Cris-to, apoyados por sus familiares y ami-gos. Finalmente han dejado con esta actividad, la inquietud a m

uchos jóvenes más, que quieran seguir este camino para la salvación de las almas.

Los seminaristas en el"Año de la Fe"

Por: Pastoral Profética Arquidiócesis de Tlalnepantla

La fe es un acto absolutamente personal, es la respuesta libre del hombre a la iniciativa de Dios que se revela. Pero para poder dar esta respuesta necesi-tamos, una comunidad. La fe no me la doy yo a mí mismo, sino que la recibo de Dios a través de alguien. El creyente que ha recibido la fe tiene la responsa-bilidad de transmitirla a otro. Éste es el sentido de la predica-ción evangélica, éste es el senti-do de la Iglesia.

"Creo" (Símbolo de los Após-toles): Es la fe de la Iglesia pro-fesada personalmente por cada creyente, principalmente en su bautismo. "Creemos" (Símbolo

de Nicea-Constantinopla, en el original griego): Es la fe de la Iglesia confesada por los obis-pos reunidos en Concilio o, más generalmente, por la asamblea litúrgica de los creyentes. "Creo", es también la Iglesia, nuestra Madre, que responde a Dios por su fe y que nos enseña a decir: "creo", "creemos".

La Iglesia es la primera que cree, y así conduce, alimenta y sostiene mi fe. La Iglesia es la primera que, en todas partes, confiesa al Señor ("Te per orbem terrarum sancta confite-tur Ecclesia", cantamos en el Te Deum), y con ella y en ella somos impulsados y llevados a confesar también: "creo", "creemos". Por medio de la Iglesia recibimos la fe y la vida

nueva en Cristo por el bautis-mo. En el Ritual

Romanum, el ministro del bautismo pregunta al catecú-meno: "¿Qué pides a la Iglesia de Dios?" Y la respuesta es: "La fe". "¿Qué te da la fe?" "La vida eterna".

La salvación viene solo de Dios; pero puesto que recibi-mos la vida de la fe a través de la Iglesia, ésta es nuestra madre: "Creemos en la Iglesia como la madre de nuestro nuevo naci-miento, y no en la Iglesia como si ella fuese el autor de nuestra salvación" (Fausto de Riez, Spir. 1,2). Porque es nuestra madre, es también la educadora de nuestra fe.

"Mira Señor, la fe de tu Iglesia"