SHIFT Conferencia Nacional

30 Días de Oración

Guía de Oración

A través de los siglos, Dios regularmente ha traído renovación a individuos, iglesias y naciones enteras haciéndonos recordar Su gracia, poder y presencia. A veces, las oraciones de Su pueblo han dado lugar a movimientos como el Gran Despertar. Otras veces, las renovaciones han sido más sutiles y localizadas.

Mientras esperamos nuestra conferencia bienal (SHIFT) y celebramos nuestro 50avo aniversario como Iglesia Misionera, busquemos al Señor por un tiempo de renovación y refrescamiento del Espíritu Santo. Cuando el Espíritu Santo se mueve en nuestros corazones, siempre hay evidencia de su obra.

Así que mientras oramos en preparación para esta conferencia, podría ser que la evidencia de la obra del Espíritu incluya: anhelo por una intimidad más profunda con el Padre; un mayor sentido de dependencia de Él; un deseo más profundo de santidad; un mayor quebrantamiento por los perdidos; un compromiso más amplio para hacer discípulos; y un compromiso más profundo de hacer justicia, amar la misericordia y caminar humildemente con nuestro Dios (Miqueas 6:8).

Esta guía de oración está destinada a ayudarnos a enfocarnos en estos temas.

Usted puede usar esta guía de oración en diferentes maneras:

1. Ore por un tema cada día de lunes a sábado. Use las oraciones escritas como punto de referencia y permita que el Espíritu Santo le hable de otras oraciones relacionadas con los mismos temas.

2. Ore por un tema cada semana durante 6 semanas. Use una de las 5 oraciones escritas como referencia del día. Se busca que usted ore varias veces por cada uno de los temas presentados.

3. A partir del 8 de junio queremos comenzar los 30 días de oración 24/7. Durante esos 30 días, puede usar esta guía de oración como una referencia diaria, orando una oración por día hasta el primer día de la conferencia.

Un mensaje de nuestro Presidente...

Sue y yo estábamos en un ocupadísimo restaurante del centro cuando notamos un carro nuevo marca Mercedes que se paró y estacionó súbitamente justo afuera de la ventana del restaurante. Al principio, parecía que el conductor estaba teniendo problemas, porque se salió del carro e inmediatamente se dobló en el suelo.

Una mirada más atenta a través de las cortinas reveló que había tendido una manta sobre el asfalto, cuidadosamente la había dirigido hacia La Meca y se había arrodillado sobre ella para orar. Era el momento de la oración musulmana, y por eso se había salido de la carretera. Su esposa y su hijo adolescente permanecieron cerca hasta que él terminó, y cuando él se puso de pie, ambos se turnaron para arrodillarse y orar hacia La Meca. Después de que los 3 terminaron de orar, regresaron a su carro y se fueron.

Esto me hizo reflexionar sobre la naturaleza de la oración porque, para un musulmán, orar es un requisito que se hace por lo menos 5 veces al día. Pero su "oración" es en realidad un conjunto de afirmaciones memorizadas que son repetidas palabra por palabra cada vez. La creencia musulmana común es que, si no las hacen, su dios no contestará sus oraciones.

En contraste, nosotros como cristianos entendemos que Dios no requiere que repitamos el mismo guion memorizado varias veces al día. Nuestras oraciones se derivan del hecho de que se nos ha ofrecido una relación con Dios mismo. Él nos invita a una conversación interminable, llena de las cosas diarias que podemos compartir con Él, y también de escuchar su voluntad y sus deseos para nuestras vidas.

Orar es el gran privilegio de ser cristiano. Significa que podemos expresar las cosas del corazón a Dios en nuestras propias palabras. Él atiende nuestras peticiones, responde a nuestra necesidad de sabiduría y nos asegura su preocupación constante por nuestro bienestar.

Mientras usa esta guía de oración, recuerde que es solo un grupo de temas para comenzar una conversación. Tenga la expectativa de que Dios usará los puntos de referencia para comenzar un diálogo con usted y que durará todo el día. ¡Él cuida de usted y desea pasar tiempo con usted!

Dios le bendiga,

Steve Jones

ORANDO POR INTIMIDAD PROFUNDA CON DIOS

Salmo 27:4

Una cosa he demandado a Jehová,

ésta buscaré;

Que esté yo en la casa de Jehová

todos los días de mi vida,

Para contemplar la hermosura de Jehová,

y para inquirir en su templo.

Una noche, después de decirle al Señor que quería más de Él en mi vida, el Señor me visitó con lo que yo llamé "un bautismo de Su presencia." Durante más de dos horas estuve inmerso en su amor mientras él derramaba su amor líquido sobre mí. Después de eso, Él fue mi deseo y nunca más pude volver a tener suficiente de Él en mi vida. El Salmo 27:4 habla de este deseo que yo tenía y que aún tengo de Dios cuando busco acercarme más y más a Él.

El enfoque principal de David en el Salmo 27:4 es esa "única cosa" que él deseaba. Estaba orientado solo en dirección al Señor y no a otra cosa. Su deseo por Dios era tan fuerte y tan enfocado que él sabía lo que quería y de tal forma que todas las demás cosas eran contadas como nada, excepto esa "única cosa."

Esta "única cosa" que David deseaba hacer era "ESTAR" en la casa de Dios. ¡Qué fantástico! ¡Qué aspiración! ¡Él no solo estaba deseando pasar un rato (aunque fuera inmensamente bueno), sino que quería estar donde Dios estaba! Él quería estar allí en la santa presencia de Dios, contemplando su belleza y hablando de las cosas espirituales. Nada satisfaría más el corazón de David que eso y solo eso, la “única cosa." ¡Amén! ¡Y amén! Ese es mi deseo también: estar continuamente en la santa presencia de Dios, vivir allí relacionándome con él, adolorándole y ser enseñado por él. Esta es la "única cosa" que deseo. Ruego que este sea también su deseo.

1. Salmo 27:4: Una cosa he demandado a JEHOVA, ésta buscaré; que esté yo en la casa de JEHOVA todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de JEHOVA, y para inquirir en su templo.

ORACIÓN: Señor Dios, solo “una cosa” es importante y es estar contigo Sin importar lo que pase. Esto implica que te busque, hable contigo y esté en tu presencia en adoración y oración. Es mi deseo estar cerca de ti, Señor, verte y caminar en tus caminos diariamente. Es mi deseo morar en tu casa, estar continuamente en tu presencia y disfrutar de nuestro tiempo juntos. Esto busco, en el nombre de Jesús, Amén.

2. Josué 24:14-15: Ahora, pues, temed a JEHOVA, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a JEHOVA. Y si mal os parece servir a JEHOVA, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a JEHOVA.

ORACIÓN: Dios Padre, nunca me has obligado a seguirte. Siempre ha sido mi elección. Y yo lo quiero hacer. La gente a mi alrededor muestra sus escogencias en todo momento. Veo personas que dicen que te eligen pero que aún adoran su pasado y la forma en que solían hacer las cosas. Veo a las personas que adoran todo lo que sucede hoy en día sin tener en cuenta si hay verdad en lo que está ocurriendo. Ellos están en esto por la emoción del momento. Pero como Josué, yo te elijo hoy. Como Josué, te elijo para mi familia. Tú eres el único y verdadero Dios. ¡No hay otro! Lo reconozco y lo proclamo como la verdad en el nombre de Jesús. Amén.

3. 2 Tesalonicenses 1:11: Por lo cual asimismo oramos siempre por vosotros, para que nuestro Dios os tenga por dignos de su llamamiento, y cumpla todo propósito de bondad y toda obra de fe con su poder.

ORACIÓN: Señor Dios, cada trabajo que hago como cristiano debe ser hecho en fe y a través de tu poder. Hago las obras que hago porque tú me llamaste hacerlas. Esto es lo que ser un cristiano significa. Deseo ser más fiel y obediente a tu llamado en mi vida. Que todo lo que haga se haga en tu poder y para tu gloria. Permíteme estar más en sintonía con cada faceta de tu bondad y del poder de tu Espíritu Santo. Deseo ser considerado digno de tu llamado en mi vida y que ese llamado sea cumplido en mí a través de Jesús mi Señor. Amén.

4. Hebreos 4:12: Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

ORACIÓN: Padre, Tu Palabra no es solo un libro árido de 66 libros que no se relaciona para nada con nuestras vidas. ¡Es la palabra viva! ¡Está activa! ¡Es poderosa! ¡Tiene la capacidad de penetrar en mí vida y de discernir mi interior! Me permite saber cuáles son mis verdaderos pensamientos e intenciones. Me permite saber si estoy siguiendo o no mi propio camino o tu camino en mi vida. Me acerca a ti y a tus soluciones para los problemas de mi vida. Mientras leo y estudio Tu Palabra, permíteme que ella produzca Tu trabajo transformador en mí. Ayúdame a adaptar mi vida a esto en el nombre de Jesús. Amén.

5. Lucas 10:41-42: “Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.”

ORACIÓN: Señor Dios, estamos ansiosos y preocupados, no tratamos las cosas con eficacia. Nos hemos quedado atrapados en los detalles de solo hacer cosas. Estamos más ocupados de lo que quisiéramos, atrapados en el siguiente asunto de nuestra agenda. Por lo general, no tomamos tiempo para descansar, relajarnos, escuchar, reflexionar o buscarte. Señor, hoy te busco para tiempos de refrigerio. Te busco para tiempos de descanso. Te busco para que me ayudes a aminorar el paso y para ser más selectivo en mis actividades incluyendo el elegir la "única cosa necesaria" y esta cosa necesaria eres Tú y Tu presencia, en el nombre de Jesús. Amén.

ORAR POR UN MAYOR SENTIDO

DE DEPENDENCIA DE DIOS

Un querido amigo mío que viaja por el mundo como un evangelista itinerante visitó recientemente los Estados Unidos para su chequeo médico anual. Durante sus dos semanas de estadía, hizo un cuidadoso inventario de la cultura estadounidense, en particular la de la iglesia evangélica estadounidense. Cuando salió de los Estados Unidos para reanudar el ministerio internacional, me envió una nota de reflexión personal. "Estoy convencido de que la mayoría de los ‘cristianos’ occidentales son realmente humanistas con una delgada apariencia de prácticas cristianas. Lo más relevante de Dios para ellos es que sirva para sus necesidades y les lleve un día al cielo."

El salmista escribió: "Estos confían en sus carros de guerra, aquellos confían en sus corceles, pero nosotros confiamos en el nombre del Señor nuestro." (Salmo 20:7 NIV). Pero ¿realmente confiamos en Dios? ¿Realmente vivimos vidas que son totalmente dependientes de Dios? Viviendo dentro de toda la opulencia y las ventajas tecnológicas de la cultura occidental, ¿existe todavía la necesidad de depender de Dios?

Tras el ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001 en los EE. UU., la asistencia a la iglesia aumentó en Estados Unidos... brevemente. Durante ese período de tiempo, hubo un sentimiento generalizado de impotencia mientras los estadounidenses sentían una dependencia desesperada de Dios. El Salmo 20:7 se convirtió en una realidad... brevemente. Con el tiempo, nuestra sociedad volvió al modus operandi de la independencia de Dios. Solo cuando confiamos en el Señor con todo nuestro corazón, y no nos apoyamos en nuestra propia prudencia, podremos experimentar el poder soberano del Espíritu Santo trabajando en nuestras vidas y en nuestro país.

1. Isaías 40:31: pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán.

Isaías 41:10: Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios.

Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa.

ORACIÓN: Padre, perdónanos por los momentos en que hemos intentado vivir la vida rindiéndonos a nuestra propia carne defectuosa, a través de nuestras propias energías limitadas. Sabemos que eres la fuente de nuestra fortaleza, quien nos sostiene con su diestra victoriosa. Danos la paciencia necesaria para esperar en ti y tu clara dirección para nuestras vidas. Ponemos nuestra confianza y dependencia únicamente en ti.

2. Mateo 18:20: Porque donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.

Hebreos 10:25: No dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día se acerca.

ORACIÓN: Señor, con demasiada frecuencia intentamos "hacer la iglesia" estrictamente a través de programas humanos. Perdónanos por no buscarte a ti y tu dirección. Que podamos acercarnos a la reunión de los creyentes como si fuese una oportunidad de participar en la oración corporativa, prodigando tu trono de misericordia con oraciones de alabanza, adoración e intercesión.

3. Mateo 6:25: Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su cuerpo, cómo se vestirán. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa?

Juan 15:7: Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran, y se les concederá.

Oración: Señor, me preocupo muchas veces. Me doy cuenta de que dependo de mi propia sabiduría y comprensión para responder a los desafíos de la vida. Enséñame a depender de ti y dejar mis preocupaciones al pie de la cruz.

4. Proverbios 3:5: Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia.

Juan 14:13-14: Cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, yo la haré; así será glorificado el Padre en el Hijo. Lo que pidan en mi nombre, yo lo haré.

ORACIÓN: Padre, perdónanos cuando nos apresuramos a tomar decisiones sin traerlas delante de ti antes. A menudo actuamos con un sentido de independencia, como si nuestro juicio fuera adecuado y nuestra experiencia de vida fuera suficiente para tomar cada una de las decisiones de la vida. Enséñanos a acercarnos a ti, buscando tu guía divina en lugar de apoyarnos en nuestro propio entendimiento.

5. Efesios 6:18: Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos—

ORACIÓN: Señor, estoy cansado de orar por lo mismo durante años. Mi cansancio se deriva a que parece que no tengo respuesta tuya. Enséñame a orar en el Espíritu, a orar sin cesar, a confiar plenamente en ti y en tu amor por mí.

ORAR POR MAYOR PASIÓN POR LA SANTIDAD

Mi difunto suegro, Robert (Bob) Chenoweth, tenía pasión por la santidad. Aunque era un hombre de negocios muy exitoso, vivió una vida que atrajo a la gente a Jesús. La gran cruz que estaba pegada en el anuncio de sus negocios hizo que la gente pensara que “La Constructora Chenoweth” era una iglesia. Tengo muchos recuerdos de Bob sentado en la mesa con lágrimas en los ojos y con los puños cerrados, compartiendo breves instantes apasionadamente cuando guiaba a un hombre a Jesús en su propia oficina. En 1991, Bob murió trágicamente con otros cuatro hombres cuando se estrelló el pequeño avión que piloteaba. Más de 1000 personas acudieron a su funeral y la familia escuchó muchas historias no contadas de Bob guiando a la gente a Cristo o ayudándoles a volver al camino del Señor. Bob Chenoweth mantuvo una vida llena del Espíritu siendo obediente a la Palabra de Dios y atrayendo así a la gente a Jesús; vivió una vida apasionada por la santidad. Su Biblia marcada (con un lapicero de color rojo) está en nuestra casa.

El mundo y Satanás quizá traten de engañar a los creyentes para que piensen que la santidad ofende a las personas, que solo se trata de reglas, y con ello hacer que las personas no sean atraídas al cristianismo; pero la Palabra de Dios es verdad y nos enseña que vivir en santidad atraerá a las personas a Jesús (2 Timoteo 2:24-26; 1 Pedro 2:9-12; 2 Pedro 3:10-15). La santidad atrae la presencia manifiesta de Dios y la presencia de Dios cambia la atmósfera y a las personas (Efesios 5:8-9; 14-15; Hechos 1:1-41).

Si la santidad es lo que atrae a la gente a Jesús, ¿por qué los creyentes no desean buscar la santidad con pasión? Eso es lo que distingue a los discípulos de Jesús.

1. Efesios 4:23: Y renovaos en el espíritu de vuestra mente,

ORACIÓN: Padre celestial, ayúdanos a permitir que el Espíritu Santo renueve nuestros pensamientos y actitudes y cambie nuestro comportamiento de tal forma que sea agradable a ti.

2. 2 Pedro 1:5-8: Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.

ORACIÓN: Padre celestial, ayúdanos a responder a tu Palabra con el poder del Espíritu Santo. A medida que crezcamos en la excelencia moral, conocimiento, autocontrol, paciencia, piedad, afecto fraternal y amor por todos, seremos más productivos y útiles en la edificación de Tu Reino.

3. 2 Corintios 7:1: Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.

ORACIÓN: Padre celestial, ayúdanos a limpiarnos de todo lo que pueda manchar nuestro cuerpo y espíritu. Déjanos trabajar en dirección de una santidad completa basados en el temor a ti.

4. 1 Pedro 2:9: Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable.

ORACIÓN: Padre celestial, ayúdanos a vivir nuestra identidad la cual la encontramos en ti, de tal forma que podamos mostrar a otros tu bondad. Ayúdanos a vivir a la altura de lo que es ser TU pueblo escogido, TUS sacerdotes reales; ¡TU propia posesión!

5. Salmo 139:23-24: Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno.

ORACIÓN: Padre celestial, examina y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos ansiosos. Señálame las cosas en mí que te ofenden y guíame por el camino de la vida eterna.

ORE POR MAYOR QUEBRANTAMIENTO EN LAS PERSONAS PERDIDAS

Solo por un tiempo, y solo hasta un punto. Una pequeña dosis de culpa y convicción generalmente provocará una respuesta ... pero solo por un tiempo, y solo hasta cierto punto. El efecto no es duradero. Tal motivación sirve como una solución rápida a corto plazo, pero nunca es algo que perdure.

Sin embargo, completamente diferente es cuando Dios despierta una necesidad apasionada, profunda y abrasadora en el corazón de Sus siervos. Corazones que arden de esta manera no dejan de parecerse al corazón de Jeremías de quien se dice que tenía un “fuego ardiente en sus huesos” que no podía ser apagado. Tal fuego impulsa la misión implacable y motiva a la gente para no detenerse por nada.

La culpa le guiará a través de un tiempo de necesidad. Pero son las cargas profundas las que producen movimientos. El apóstol Pablo fue guiado por una profunda sensación de las necesidades de aquellos que no habían escuchado el evangelio. Jesús miró a las multitudes y se sintió profundamente conmovido en compasión: esto hablaba de lo más profundo de sus sensaciones. La palabra en Mateo 9:36 que se traduce como "compasión" proviene de una palabra que literalmente significa "intestinos," que son las partes más internas. Es un término que connota una fuerte respuesta emocional.

Jesús no estaba simplemente "preocupado" por la situación de los perdidos. ¡Estaba profundamente conmovido! Vislumbramos el corazón de Dios allí, un corazón que impulsa su misión. Cuando oramos para ser más semejantes a Cristo, ¿Vamos a querer tener también tener esta clase de corazón? Que este llamado a la oración sea un llamado para un mayor quebrantamiento por los perdidos.

1. Mateo 9:36-38: Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, más los obreros pocos.

ORACIÓN: Perseguir implacablemente a Dios me permite ver a los que me rodean a través de los ojos de Jesús. Muéveme desde las partes más profundas de mi vida por una desesperada compasión por los perdidos. Quebranta mi corazón con aquello que quebranta el corazón del mismo Cristo.

2. Hechos 16:9-10: Y se le mostró a Pablo una visión de noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos. Cuando vio la visión, en seguida procuramos partir para Macedonia, dando por cierto que Dios nos llamaba para que les anunciásemos el evangelio.

ORACIÓN: Guianza llena de la gracia del Señor, trae visiones -literales o figuradas- de aquellos que necesitan escuchar el mensaje del evangelio que da vida. Permíteme escuchar los llamados de sus corazones e incita mi corazón con el deseo listo de responder "de una vez" a cualquier camino que me dirijas.

3. Hechos 20:22,24: “Ahora, he aquí, ligado yo en espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que allá me ha de acontecer... Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.

ORACIÓN: Dios de la misión, tú has puesto delante de nosotros el llamado de compartir las buenas nuevas de Jesús en un mundo que desesperadamente necesita escuchar este mensaje. Espíritu, oblígame a dejar de lado aun la vida misma para alcanzar a aquellos cuya vida eterna está en juego. Cataliza nuestra iglesia con el celo que te impulsó a lanzar esta misión redentiva al principio -un amor profundamente costoso y sacrificial. Que podamos amar como tu amas.

4. Lucas 15:4: “¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?”

ORACIÓN: Buen Pastor, agita mi corazón con la búsqueda inquebrantable de la oveja perdida. Crea dentro de mí la clase de corazón que el buen pastor tiene por la oveja errante. Reordena mis preocupaciones. Moviliza gracia dentro de mí. Oblígame a buscar a los perdidos con el mismo tipo de mentalidad con que me buscaste a mí.

5. Lucas 19:10: “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido."

ORACIÓN: Jesús, viniste a buscar y salvar a los perdidos. Viniste a buscar y a salvarme a mí. Que la idea de los perdidos nos incomode. Que no nos contentemos solo con haber sido hallados. Que estemos tan singularmente enfocados en tu misión como lo estuvo el Hijo del Hombre. Danos tu corazón, movido por compasión por aquellos que aún no han sido encontrados.

ORE POR UN DESEO MÁS AMPLIO DE COMPROMETERSE EN RELACIONES QUE FORMAN DISCÍPULOS

En Mateo 28:18-20 encontramos la Gran Comisión: “Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado.” A menudo, este pasaje se considera un pasaje de proclamación del evangelismo, un llamado a hacer conversos. Y eso es. Pero es mucho más. Nuestro Señor nos llama a enseñar a aquellos que alcanzamos a obedecerle en todos sus mandamientos. Llegar a ser un verdadero converso al cristianismo, un verdadero seguidor de Jesús, es ser uno que hace lo que Jesús dice. La gran proclamación de la Gran Comisión no es una mera conversión, sino una obediencia radical y discipulado a Jesucristo.

1. ORACIÓN: Padre celestial, gracias por la invitación a participar en la Gran Comisión de hacer discípulos para y por tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo. Haznos instrumentos de las buenas nuevas, que tanto en palabra como en hechos proclamemos a Cristo resucitado y su salvación. Ayúdanos en nuestro propio discipulado, nuestra propia obediencia, y guíanos en hacer discípulos de todas las naciones.

2. Lucas 6:40: El discípulo no es superior a su maestro; mas todo el que fuere perfeccionado, será como su maestro.

ORACIÓN: Señor Jesús, estamos lejos de tu semejanza. Necesitamos desesperadamente ser más como tú eres en nuestros pensamientos y hechos. Ayúdanos a ser seguidores que están totalmente comprometidos contigo, nuestro Maestro Enseñador.

3. Hechos 1:8: “Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra."

ORACIÓN: Gracias, Señor Dios, por enviar al Espíritu Santo para empoderar a tus discípulos, tanto en los tiempos antiguos como en el tiempo actual, haciendo discípulos en todo el mundo. Danos sabiduría y eficacia al dar testimonio de la obra que has hecho y estás haciendo a través de Jesucristo.

4. II Timoteo 2:2: Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros.

ORACIÓN: Oh Padre Celestial, muéstranos, a tu pueblo, lo que significa estar calificado para instruir a otros con el evangelio y la vida cristiana. Conviértenos en tus servidores disponibles, tus maestros confiables y tus cristianos increíblemente contagiosos.

5. Mateo 24:14: Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

ORACIÓN: Dios misericordioso, gracias por darnos las buenas nuevas del reino. Nos has instruido para predicar este evangelio en todo el mundo. ¡Qué poderosa invitación! Reconocemos que no podemos hacer esto por nuestra propia fuerza. Danos sabiduría, conocimiento y poder para llevar a cabo esta gran tarea de predicar el evangelio del reino en todo el mundo, para tu mayor gloria. Amén.

COMPROMISO RENOVADO PARA HACER JUSTICIA

 

Vivimos en un mundo quebrantado y herido. Las familias se están desintegrando y las personas están solas y aisladas en el caos del activismo. El llanto resuena desde un pasado quebrantado e hiriente que forma las realidades presentes y futuras de muchos. Fácilmente cualquiera puede desanimarse, sin embargo, como seguidores de Cristo, nuestro llamado es a renovar nuestro compromiso con la justicia/Integridad.

En el Salmo 85, el salmista culmina su escritura con el versículo 10 que dice: “La misericordia y la verdad se encontraron; la justicia y la paz se besaron.” La culminación de este bello verso se puede encontrar en la encarnación de Cristo. En Jesús, el amor, la fidelidad, la justicia (integridad) y la paz se unen plenamente. El cumplimiento de este acto se ve cuando Jesús es clavado en la cruz ... su cruz, su amor y su fidelidad se reúnen; su justicia (integridad) y paz se besan.

Jesús modeló una vida de servicio humilde ... conociendo a las personas en donde estaban, yendo con ellos hacia donde la justicia y la paz se besaron… ¿Estamos dispuestos a ser las manos y los pies de Jesús ... para abrazar al que sufre y al oprimido... mostrarse y ser mal entendidos... estar hasta el cuello por nuestra dejadez... creer que el Padre sana mientras nos usa ceñidos al herido?

Es hora de que el mundo vuelva a presenciar LA IGLESIA ... nosotros que voluntariamente permitimos que la Palabra de Dios impregne y dirija nuestras vidas ... nosotros que prestamos atención a la Palabra de Dios en cada área de la vida. Ven, déjanos ser el cuerpo de Cristo mientras servimos, encarnando donde el amor y la fidelidad se unen, y la justicia y paz se besan.

1. Miqueas 6:8: Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide JEHOVA de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.

ORACIÓN: ¡Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre! Nos has mostrado lo que debemos hacer; quienes debemos ser. Ahora, danos el coraje de ser obedientes para que nuestro testimonio lleve a las personas hacia ti, el autor y consumador de nuestra fe. Danos la fuerza de la humildad y el poder de tu Espíritu Santo.

2. Salmo 10:17-18: El deseo de los humildes oíste, oh Jehová; tú dispones su corazón, y Haces atento tu oído, para juzgar al huérfano y al oprimido, a fin de que no vuelva más a hacer violencia el hombre de la tierra.

ORACIÓN: Señor, en tu omnisciencia y soberanía, llévanos a aquellos que necesitan ver Tu Palabra vivida ante ellos. Cuando preguntaste: "¿Quién irá por nosotros?," que nuestra respuesta sea la misma que Isaías: "Heme aquí. ¡Envíame a mí!"

3. Deuteronomio 10:19: Amaréis, pues, al extranjero; porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto.

ORACIÓN: Padre, Tu corazón siempre ha estado a favor de todos. Dame Tu corazón, ayúdame a ver a los que me rodean y que son extranjeros en una tierra que no es de ellos. Dame un espíritu que reciba, abrace, anime y camine a la par de manera que “otros” lleguen a ser “nosotros.”

4. Lucas 4:17-21: Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito:

“El Espíritu del Señor está sobre mí,

Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;

Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;

A pregonar libertad a los cautivos,

Y vista a los ciegos;

A poner en libertad a los oprimidos;

A predicar el año agradable del Señor.”

Y enrollando el libro, lo dio al ministro, y se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él. Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros.

ORACIÓN: Señor Jesús, así como proclamaste que el corazón de tu ministerio sería aquel que perfectamente reflejaba el corazón del Padre, de esa forma te pedimos hoy que el corazón de nuestra vida y ministerio refleje tu corazón. Concédeme, concédenos, un corazón para el pobre... para el dejado de lado y para el que sufren en mi/nuestra comunidad.

5. Santiago 1:27: La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.

ORACIÓN: Padre y Señor, hay muchas personas solitarias y marginadas en nuestras comunidades: los pobres, las viudas, las madres solteras, los huérfanos, los mendigo. Abre nuestros ojos y muéstranos la mejor manera de vivir tu amor a favor de cada uno de estos.

GRACIAS ESPECIALES A LOS SIGUIENTES AUTORES

Dr. Allen Tyndall

Dr. Dennis Engbrecht

Tammy Chenoweth

Keith Koteskey

Dr. Chad Meister

Dr. Kent Eby