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Mitos y realidades de la verdadera situación de las Mypes Textiles de Lima Metropolitana, Peru
Periodo 2007-2010
Un graduando me solicito asesoramiento para su tesis de Maestría sobre las
Mypes Textiles de Lima Metropolitana; después de un año de indagaciones
quede bastante confundido sobre su real situación en la economía de nuestro
país.
El resultado de la investigación nos lleva a una serie de cuestionamientos
respecto al verdadero rol que desempeñan las Mypes en el Peru, sobre todo, en
términos generales.
Esto es tan cierto que, a la fecha la inexistencia de estudios sobre la
problemática real de las Mypes, donde se debe incluir a las formales e
informales, impide sopesar la real dimensión social y económica de este
mayoritario sector empresarial.
Tal es así que el único trabajo analítico, respecto a la formalidad e informalidad
de las Mypes, se encontró gracias a un estudio del Departamento de Economía
de la Pontificia Universidad Católica del Perú, de Febrero del 2011 de
responsabilidad del Sr. Mario D. Tello, sobre: indicadores del sector Mype
informal en el Perú, valor agregado, potencial exportador, capacidad para
formalizarse y requerimientos de normas técnicas peruanas de sus productos,
contenidos en el “DOCUMENTO DE TRABAJO 310”
Este trabajo presenta además, un conjunto de indicadores de ciencia, tecnología,
innovación (CTeI), Basado en la Encuesta Nacional de Hogares del 2008
(INEI-ENAHO, 2009), donde se estima una serie de información estadística de
las microempresas informales en el Perú que, por un lado, muestran la
importancia de este sector en términos de su generación de empleo y de su
potencial contribución al producto doméstico y exportable de la economía. Por
otro lado, describen las características productivas, las barreras de entrada a la
formalización y la composición de la oferta de productos que requieren uso de
normas técnicas para la posibilidad de exportar. El análisis de estos indicadores
sugiere que políticas de formalización no son suficientes para el desarrollo e
inclusión de las microempresas al aparato productivo formal de la economía.
Este análisis deja corto las estimaciones anteriores que se han venido
manejando respeto a la informalidad y formalidad de las mypes. Señalando que,
de 7’226,917 Mypes son informales 6’242,078, lo que solo deja 984,839
formales, que representan el 13.67% contra el 86.33% de informalidad.
En lo que respecta al sector de fabricación textil y de prendas de vestir la
informalidad alcanza como sigue:
Cuadro N° 30
FORMALIDAD E INFORMALIDAD DEL SECTOR TEXTIL 2008 A NIVEL PAÍS
Sector Formalidad % Informalidad %Total
Mypes%
Textil 7,741 4.18 177,863 95.82 185,604 100Prendas de vestir
16,439 15.36 90,561 98.64 107,000 100
TOTALES 24,180 8.26 268,424 91.64 292,604 100
Es por ese motivo que, los cálculos que se han manejado sobre las Mypes, en
esta investigación, se basan también en las siguientes fuentes: "The Perú
Report”, Perú The Top Publication, Nemesio Espinoza Herrera, Juan Infante, ex
presidente de la coordinadora de empresarios de Gamarra y ex director de
Prompyme, Diario El Comercio, (14/10/10). (Porque las fuentes oficiales sobre
las Mypes provenientes del INEI o Sunat solo incluyen a las empresas
formales).
En términos generales, hasta antes del 2008, se estimaba que en el país existían
3.5 millones de Pymes. Por tales consideraciones se afirma que en el Perú el
99.72% del sector empresarial peruano estaba constituido por las Mypes donde
se incluía las informales y apenas el 0.28% por las otras clases de empresas
juntas (empresas transnacionales, grandes y medianas). De los cuales deben
haber, por lo menos 10 000 empresas entre transnacionales, grandes y medianas
empresas.
Además estos referente cuestionan de que si en la realidad las Mypes son
económicamente y socialmente los grandes impulsores empresariales, porque
saben que a lo largo de su historia siempre fueron consideradas como un asunto
de cuarta o quinta categoría no sólo por el Estado sino por la sociedad misma y,
cual paria, las Mypes han venido desarrollándose en el desamparo hasta
alcanzar la trascendencia en la vida nacional que hoy tiene gracias a la
capacidad y talento de millones de pequeños y microempresarios peruanos
anónimos y no necesariamente gracias a una política nacional de promoción y
fomento que, por lo general le dan las espaldas a las microempresas y
pequeñas empresas.
Por principio, pareciera que desde sus inicios fue un nacimiento prematuro con
una serie de problemas estructurales, cuando tradicionalmente se les bautizo
con la sigla PYMES, el que siguen usando actualmente muchas entidades
relacionadas, y que con la dación de la última Ley (LEY N° 28015 de julio del
2003) siempre ha significado Pequeñas y Microempresas, y el cambio de la
sigla de PYMES por MYPES sigue significando Micro y Pequeña Empresa, da
la impresión que si al cambiar la sigla significara cambiar la situación caótica
de las pequeñas y microempresas. Es muy posible que esta nueva sigla cambie
con el tiempo, mas creemos que la situación actual de las PYMES y/o MYPES
como quiera llamárselas seguirá siempre igual.
Primero, respecto a sus lineamientos legales u organizacionales. Por cuanto es
muy difícil hablar de sus logros económicos, financieros de su contribución en
la PEA porque en la mayoría de los casos es empleo informal o de su
participación en el PBI 47% aproximadamente, cuando en la realidad la Micro
Empresa formal prácticamente no existe y la Pequeña Empresa se encuentra
muy lejos de ser ampliamente competitiva, sobre todo las que pertenecen al
sector industrial.
La información estadística no oficializada señala que, en el caso de la Micro
Empresa la informalidad alcanza niveles alarmantes, de 2’477,284 registradas
el 75% es informal es decir 1’855,075 lo que deja solo 622,209 empresas
formales. En lo que respecta a la Pequeña Empresa de 41,333 la informalidad
representa el 37% en cifras 15,395 y solo existen 25,938 formales.
Además, si las Mypes representan el 98,3% del total de las empresas existentes
en el país (94,4% micro y 3,9% pequeña). Sin embargo, el 74% de ellas opera
en la informalidad que, generan empleo de mala calidad (trabajadores
familiares, en muchos casos no remunerados) con ingresos inferiores a los
alcanzados en las empresas formales similares.
Si concentramos la atención en el desarrollo exportador del país, de las 6.656
empresas exportadoras, el 64% de ellas son MYPES. Sin embargo, si se
considera el valor total exportado por el país (este año, 2011, se estima en
aproximadamente US$ 27.800 millones), las MYPES solo representan el 3%.
Tal es así que, fuentes confiables de la Organización Mundial del Comercio
(entidad del FMI), en su informe del 2007 señaló: … que las Mypes en el Perú
no estaban preparadas para el comercio exterior. “… de las Mypes que
existen 502,076 sólo 1,814 realizaban actividades de exportación directa
representando:
- 0.36% del total de las Mypes que existen- 41.60% del total de las que empresas que exportan
El valor promedio de lo exportado fue $ 133 millones que solo significa
1.76% del total exportado por el Perú. Del total de las Mypes
manufactureras, es decir, 62,072 solo exportan directamente 622”
Como se puede resaltar no existen muchas diferencias entre los datos del 2007
con las del 2011.
Lo cierto es que, este sector, lo dice Alberto Silva Cotrina 15-03-2011, “La
MYPE, es un acróbata que aún no logra pasar la valla ¿Tiene las piernas
muy cortas o sufre de acrofobia? dinamiza la economía peruana
desempeñando funciones tan importantes como mitigar las fallas del
mercado, asegurar el suministro de bienes públicos y mantener condiciones
para la igualdad de oportunidades”. Sin embargo mantiene desde sus inicios
un alto índice de informalidad.
El motivo de ese índice alto de informalidad es complejo, porque es la suma
algebraica polinómica de una serie de problemas del orden estructural, legal-
organizacional, idiosincrático, socio-económico, administrativo-financiero,
administrativo-tributario y de la indiferencia gubernamental, como resultado de
una serie de factores que hacen el denominador común que van desde Leyes
Promocionales que no se ajustan a la realidad del concepto económico de lo qué
es realmente una micro empresa y pequeña empresa; creación de instituciones
pro Mypes que no cumplen el verdadero rol que les compete para su
crecimiento y desarrollo, un Sistema Financiero que tiene intereses prohibitivos
y Bancas de Fomento selectivos que además excluyen a las empresas
manufactureras.
Por principio se ha podido establecer que hablar de micro empresa formal es
solo un término compuesto porque en la práctica casi no existen, por cuanto
sabemos a ciencia cierta que esta clase de empresa es producto de la necesidad
de la falta de un trabajo estable y las que existen generalmente están al borde de
la pequeña empresa es decir son producto del emprendimiento de muy pocas
personas que tienen un capital inicial no menor de S/. 20,000.00 soles y que
buscan la asociación participativa de otros familiares y/o amigos para formar
una pequeña empresa y compartir los costos iniciales.
Las investigaciones en el campo nos llevaron a Gamarra el Emporio Textil y
encontramos una empresa dentro de la organización Mype como pequeña
empresa que en la actualidad vende y exporta sus propios productos
confeccionados de prendas de vestir. Nos llamó la atención porque su Gerente,
una mujer, se notaba que tenía una formación educacional diferente frente a
otros gerentes o responsables de negocios similares. Le pedimos una entrevista
y nos la concedió con la condición de no revelar su identidad ni el nombre de su
negocio.
Nos revelo que era egresada de la Universidad del Pacifico en la especialidad
de Administración y cuando termino sus estudios, en el año 2005, su
bachillerato lo obtuvo a través de un trabajo en Gamarra para constituir un taller
de confecciones de prendas de vestir.
Este fue el motivo por el cual, en lugar de usar el préstamo para financiar su
título profesional, lo utilizo para crear su taller de confecciones con un capital
inicial de $ 20,000.00 dólares, con el que compro las maquinas textiles y el
pago del alquiler del local contando además con 10 personas para las
confecciones textiles. En la actualidad el local del taller es propio y cuenta
además con tres locales propios para vender sus productos en el mercado local
y para exportarlos, una parte, a Estados Unidos de Norteamérica y está
constituida como sociedad anónima abierta tanto industrialmente como
comercialmente.
Le preguntamos si utiliza el crédito bancario o de fomento como las Cajas
Municipales y nos manifestó que solo en los casos de exportación cuando ya
tiene el pedido confirmado y lo hacen a través de la banca mercantil del sistema
financiero, porque para financiar sus compras de materiales textiles para
manufacturas de prendas de vestir locales, prefieren hacerlo a través de los
proveedores, el crédito bancario es muy caro.
Si lo expuesto pareciera una historia novelesca, veamos otro caso en un lugar
diferente y que además nos dio permiso para identificar los datos obtenidos.
Milagros Recova, dejó sus estudios de Administración en una universidad
considerada de prestigio de la capital. Ella descubrió que le gustaba el diseño de
modas y busco trabajo en una firma textil, después de cinco años y con la
experiencia suficiente en la materia, renuncio y creó su propia marca
“Anemona”. Se asocio con su cuñada Yessenia Reyner y ambas abrieron una
tienda propia en Pueblo Libre.
Milagros se dedica al diseño, producción y trato con los proveedores, por
cuanto su experiencia le permite manejar esas funciones y Yessenia se encarga
del marketing y del material publicitario. Empezaron en su casa y ahora ya
cuentan con un local en la Av. José Leguía Meléndez 980, 12-A Pueblo Libre.
El Capital inicial fue de S/ 20,000.00 soles producto de su compensación
laboral por tiempo de servicios. Se le pregunto si ha hecho uso del crédito
bancario, manifestando que todavía no era sujeto de crédito porque no tiene
garantía hipotecaria y solo podrían prestarle hasta S/. 5,000.00 soles que,
además de tener que pagar intereses altos, no le sirve para nada y que prefiere
ser financiada por sus proveedores que le dan crédito hasta 60 días sin intereses
y con pagos renovables.
En ese sentido creemos que, si se habla de Leyes Promocionales para impulsar
una actividad económica que pueda servir como un puente entre la necesidad de
la población que no goza de un trabajo estable, éstas tienen que ser más
realistas con los factores del entorno que involucran a quienes se les considera
un mico empresario incluso pequeño empresario, porque existen diferencias
diametrales en su naturaleza. Concretamente en el sector textil porque es difícil
creer que un micro empresario pueda contar con S/. 20,000.00 soles para iniciar
un negocio y mucho menos $ 20,000.00 dólares americanos; como es difícil
creer que una sola persona, tal como dice la ley Mype, pueda formar una
empresa textil y los que existen son informales y se dedican a los arreglos y o
confecciones personales porque solo tienen una máquina de coser.
Para formar una empresa textil en el régimen Mype, no lo puede hacer una sola
persona y necesitaría por lo menos una cortadora de telas, tres maquinas de
coser semi-industriales, una maquina recubridora, una máquina remalladora.
Todo esto implica una inversión de:
- Cortadora telas S/. 1,500.00
- Máquina de coser P/U S/. 1,899.00 x 3 5,697.00
- Maquina recubridora 1,199.00
- Maquina remalladora 1,099.00
Total S/. 9,495.00
(Referencia: Maquinas “Janome” semi industriales, precios según el mercado actual.)
A esta suma se le debe agregar los materiales textiles, dependiendo de qué se va
confeccionar, el pago de por lo menos dos personas aparte del gestor, los gastos
generales luz, agua y desagüe, arbitrios, y si no se tiene local propio el pago de
alquileres. Consecuentemente no es posible que exista una Mype del sector
textil de una sola persona, como no es posible que la banca en general pueda
dar un crédito de por lo menos S/. 20,000.00 para financiar esas compras y
gastos, a una persona natural con negocio sino cuenta con la garantía suficiente
para ese fin, incluso en una tienda comercial es difícil que se otorgue un crédito
de esa naturaleza peor aun si es desempleado.
Como también es casi imposible que una persona natural que quiera iniciar un
negocio de esta naturaleza se formalice legalmente dentro de la Ley de
Sociedades lo más que hará será inscribirse en la Sunat para obtener su RUC.
En esas condiciones el factor financiamiento es crucial para una persona dentro
del régimen Mype y las limitaciones para su acceso a la banca formal y de costo
si es que pueden acceder a una línea de financiamiento con las tasas de 35% y
40%, hacen imposible utilizar ese crédito.
Por otro lado a la dificultad de acceder al crédito bancario, también se debe
considerar la Presión Tributaria. Es decir la carga tributaria alta, eso explica de
alguna manera, en parte, el poco interés de muchas MYPES informales en el
Perú de pasar a la formalidad. La MYPE es informal simplemente porque no
cree en las ventajas de formalizarse o porque no le es rentable formalizarse.
Lo expuesto y la contrastación de las hipótesis así como el resultado de las
encuestas y entrevistas nos dan como resultado que, efectivamente la banca
comercial y de fomento del Sistema Financiero y Cajas Municipales tienen altas
tasas de intereses para las Mypes, además de lo complicado de sus trámites y
requisitos para poder acceder a un préstamo.
Del mismo modo las condiciones legales y tributarias respecto a las leyes
promocionales Mypes no se ajustan a la realidad socio-económico mayoritario
de las personas que creen que puede iniciar un negocio bajo ese régimen, al no
contar con un capital inicial significativo, salvo que lo haga en asociación
participativa y tenga además un producto que de algún modo sea rentable.
En el caso de una empresa textil Mype no es factible que exista con un solo
ente, salvo que recurra a servicios de terceros lo que encarece su producto final
y se convierte más en un comerciante.
Sin embargo se debe ser claro respecto a los resultados, si bien es cierto que la
idea es buscar la forma de flexibilizar los créditos para las Mypes por parte de
la banca formal y de fomento para ayudarlos en su crecimiento y desarrollo,
esto no significa que se obligue a estos entes financieros a otorgar créditos a
todos aquellos que formen una Mype cuando existe un alto riesgo para su
devolución como resultado de un proyecto que no ha sido evaluado
adecuadamente. Es en esta parte donde el Estado tiene que intervenir a través de
una Ley que contemple el estudio de la factibilidad del proyecto, incluso
creemos que la creación de un ente que se dedique a revisar y promover
proyectos sobre oportunidades de negocios factibles y rentables dentro del
rango de las Mypes es necesario. De ese modo se minimiza el riesgo del
préstamo y contaría con el aval de esa entidad ante los entes financieros.
Lo ideal sería que quien quiera formar una Mype elabore un proyecto o un plan
es decir es decir, primero tiene que pensar a qué actividad empresarial se va
dedicar y cómo lo va hacer. En los tiempos actuales nadie debe iniciar un
negocio o una empresa sin antes pensar bien el qué y el cómo hacer y plasmarlo
en un documento denominado Plan de negocio o Proyecto Empresarial o Plan
de Inversión. Este proyecto, reiteramos, debe ser evaluado por un ente
regulador del estado para su respectiva aprobación si es factible e incluso
debería haber previamente una capacitación respecto a tópicos sobre lo que
todo pequeño empresario debe saber para que enfoque la dirección de su
negocio con criterio empresarial.
Al respecto se debe tener en consideración que, por lo general quienes quieren
formar un negocio de esta categoría, lo embarga el deseo de tener un ingreso
para cubrir sus necesidades elementales y no tiene la claridad de qué negocio
establecer. En los tiempos actuales no se debe iniciar una actividad empresarial
de manera improvisada o intuitiva. Ahora, en un contexto globalizado,
turbulento y altamente competitivo, ninguna persona puede aventurarse a crear
una empresa Mype sin previa planificación. Esto quiere decir que quien decide
crear un negocio tiene que elaborar rigurosamente un proyecto empresarial.
Es ahí, reiteramos, donde el Estado a través de un ente promotor de Mypes
debe orientar al interesado en el mercado donde se pueden desarrollar a través
de una gama de proyectos que son factibles de realización o de lo contrario
promover la participación asociativa para la formación de la empresa y
compartan conocimiento y Capital.
La problemática de las Mypes no se soluciona con dar leyes que indiquen
cualitativamente y cuantitativamente cuándo es una Micro Empresa o Pequeña
Empresa, eso es muy relativo. El problema se debe solucionar facilitando el
acceso a su formación como verdaderas Mypes que han sido totalmente
evaluadas y garantizadas para el financiamiento de su Capital y con la
seguridad de que sus gestores tengan la capacitación y/o formación empresarial.
Asimismo se tiene que crear una tributación de acuerdo a su realidad
económica-financiera con la que empieza. Estamos seguros que las propuestas
planteadas deben de ser mejoradas por los especialistas en la materia y debe
conllevar a la formalización de mucha Mypes que tienen ese rango y que están
en la informalidad. Si es cierto de lo que representan en la actualidad las
formales en nuestra economía, imaginemos que pasaría si se dan los correctivos
necesarios y por lo menos el 30% de las Mypes informales pasarían a la
formalidad.
En síntesis, quien quiera crear una empresa Mype debe ser obligado a que
presente un Proyecto Empresarial simple y si no lo sabe elaborar se le debe
asesorar para que describa las características del negocio que quiere formar,
sustentando la factibilidad, viabilidad y la rentabilidad de sus ideas para iniciar
su actividad empresarial, incluso toda esta información es también un
instrumento necesario que le puede servir para buscar socios y/o inversionistas.
Todas estas consideraciones deben ser tomadas con bastante seriedad, sobre
todo en un proceso de Globalización de la Economía y más aun con la crisis
mundial del que todavía Estados Unidos de Norteamérica y Europa no puede
salir. La consecuencia un mercado donde los competidores se encuentran en
cualquier parte del mundo, y la actualidad el Comercio Mundial se expande a
una velocidad que empequeñece a casi todos los demás parámetros del
crecimiento; no obstante, la forma en que éste se realicen en el futuro es un
tema de gran preocupación en el presente y de oportunidades sin precedente
para las Mypes. Las Mypes, quiérase o no, constituyen un segmento clave para
la reactivación económica y productiva de nuestro país por su dinamismo,
capacidad de absorción de mano de obra y generación diaria de ingresos; sobre
todo es una alternativa para el alivio y reducción de los niveles de pobreza.