MÓDULO 4- Procesos de selección: la entrevista personal ... · - por parte del entrevistador, una serie de habilidades y destrezas para obtener la información que necesita de acuerdo

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MÓDULO 4- Procesos de selección: la entrevista personal.

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Después de semanas buscando empleo llegará el día en que por fin recibas una

llamada telefónica citándote para una entrevista de trabajo. Entonces es cuando

pensarás que tantos C.V. enviados y haber hablado con tantas personas sobre ese

ansiado trabajo que estabas buscando, habrá merecido la pena. Te sentirás eufóric@.

Pero también es muy probable que tras colgar el teléfono aparezcan los

“temidos nervios” y las mil preguntas ¿Qué me van a preguntar’ ¿Qué le puedo

preguntar yo? ¿Qué puede hacer para gustar? …. Incluso puede que pienses ¿Cómo se

supone que debo ir vestid@?

El módulo que a continuación te presentamos te preparará para esa entrevista

de selección, que seguro llegará. Recuerda que cuanto más preparado estés, más fácil

te será superar la entrevista y más cómodo te sentirás. En este último módulo

encontrarás respuestas a muchos interrogantes.

Vamos a estructurarlo de la siguiente manera:

I- ¿Qué es la entrevista?

II- Tipos de entrevista

III- Fases de la entrevista

IV- Consejos prácticos y útiles para superar con éxito una entrevista de selección

¡Vamos a comenzar!







I -¿QUÉ ES UNA ENTREVISTA DE TRABAJO?

La Entrevista de Selección podemos definirla como un juego de intereses entre

dos partes y que requiere:

- por parte del entrevistador, una serie de habilidades y destrezas para obtener la

información que necesita de acuerdo con un sistema definido de trabajo

- por parte del entrevistado, la capacidad de transmitir (y persuadir) al entrevistador

de todas aquellas características personales que nos hacen un candidato idóneo

para el puesto al que optamos.

La entrevista es un paso más en

el proceso selectivo y se centra en un

mejor conocimiento del candidato. En

ella se produce un intercambio de

información, opinión, experiencia,

etc. entre dos personas

fundamentalmente por medio del

lenguaje, con un propósito definido.

Ojo con esta definición porque como

vamos a ver en este módulo el

lenguaje incluye no solo el verbal, sino todo el que es capaz de producir interacción

entre los interlocutores: silencios, posturas, gestos, y cualquier otra conducta

comunicativa.

Existen diversos escenarios en los que puede desarrollarse una entrevista, al

igual hay diferentes tipos de entrevistadores y variados métodos de entrevistar. Por

ello, las técnicas que tu tendrás que utilizar para triunfar en tu propósito variaran en

función de las condicionas que vas a ver. ¡No puedes comportarte igual siempre!

II. Tipos de entrevista:

Existen varios tipos de entrevistas, dependiendo de las circunstancias; la

finalidad; las cualidades del entrevistado (locuacidad, timidez, etc.) y del entrevistador







(experiencia, formación, etc.); los datos del entrevistado con que cuente el

entrevistador; los datos que necesite y/o desee explorar; etc. La práctica totalidad de

las veces, lo normal es que en las selecciones de personal, se combinen las técnicas de

las dos variantes de entrevista (interrogatorio y conversación).

Con iniciativa del entrevistador (interrogatorio): te harán todo tipo de

preguntas, claras y concisas. Es lo más parecido a un interrogatorio. Son preguntas de

las denominadas "cerradas", por ejemplo: "¿Cuántos años tiene?"; "¿cree que sus jefes

tienen una formación adecuada? El entrevistador demanda respuestas del mismo tipo,

por ello se recomienda no extenderse en la respuesta a este tipo de preguntas y por el

contrario ser explícitos, precisos, sinceros, veraces y seguros a la hora de responder, ya

que esta técnica es la que se utiliza cuando el entrevistador conoce suficientes datos del

entrevistado. Con un SI o un NO será más que suficiente.

Con iniciativa del entrevistado: El entrevistador le dejará que te expreses

libremente, por ello te hará muy pocas preguntas y de las del tipo que se denominan

"abiertas" o generales. Esta técnica es la que se utiliza únicamente con la finalidad de

conocer la personalidad del entrevistado. Para ello el entrevistador, utiliza técnicas

tales como repetir tus últimas palabras, realizar un pequeño resumen de tu exposición,

comunicación no verbal, tales como sonreír, afirmar con la cabeza, etc.; o el empleo de

expresiones que indiquen que está atento a tu exposición ("¿si?", "que interesante",

etc.). Puede también utilizar la técnica de mantenerse en silencio; no te sientas

presionado ni irritado por ello; todo lo contrario, sigue hablando, pues esa es la

intención del entrevistador.

Con iniciativa de ambos (conversación): Aquí se combinan los dos tipos de

entrevistas anteriores; predominando, sin embargo las preguntas de tipo "abiertas".

Con este tercer tipo de entrevistas se favorece una comunicación más fluida y una

situación mas relajada. Las respuestas deberán ser acordes con cada tipo de preguntas.

En las de tipo abierto, no sea demasiado locuaz; es mejor adoptar una posición

intermedia. Son las preguntas que suscitan un determinado comentario que a la vez

puede dar lugar a otra pregunta por parte del entrevistador. Aquí el mejor consejo es

no limitarse a responder de forma mecánica, sino por el contrario hacerlo con gran

interés por todo lo que se está planteando. Preguntas típicas de este tipo de entrevista:

"¿Cuál cree usted que son los aspectos más interesantes del puesto al que aspira?";

"¿qué relaciones ha tenido con sus anteriores compañeros de trabajo?"







Otro tipo de clasificación sería dependiendo del criterio que utilicemos.

Nosotras nos centraremos en tres criterios:

� Según el criterio de estructuración de la entrevista

Estructurada: se basa en una serie de preguntas determinadas previamente por el

entrevistador, configurando un proceso meramente mecánico. El entrevistador

desempeña un papel activo, mientras que el entrevistado se limita a responder. Nos

garantiza una cierta "objetividad", en el sentido de que se formularán las mismas

preguntas a todos los entrevistados. Por el contrario es un proceso tan encorsetado

que puede impedirnos expresar nuestros puntos fuertes, lo que posiblemente nos

diferencie del resto de los candidatos

No Estructurada: permite que el entrevistador formule preguntas no previstas

durante la conversación, los temas se van abordando a medida que surge el diálogo.

Es menos "objetivo" que el anterior método, pero posibilita un clima más distendido

donde el entrevistado puede expresarse con mayor facilidad. Su principal problema es

el papel activo que exige al entrevistado, todo lo que no surja de nosotros no

constará. Se puede utilizar para puestos que requieren una gran capacidad de

estructuración, iniciativa y facilidad de palabra del candidato.

Semi-estructurada: utiliza preguntas estructuradas y no estructuradas. El eje de la

entrevista es una serie de guión sobre temas a tratar. A raíz de esto, la entrevista se

adapta a cada candidato .Es el método más utilizado.

� Por el modo de llevarse a cabo

Normales: son entrevistas en las que se trata de

crear un clima que facilite la comunicación entre

ambas partes, pues su objetivo es la obtención de

la mayor cantidad posible de información del

entrevistado.







Tensionadas: son entrevistas en las que el

entrevistador adopta una postura hostil, pues el

objetivo de la misma es ver como el candidato

reacciona ante situaciones agresivas. En este

sentido podría considerarse más una prueba

situacional que una entrevista. Es difícil

reaccionar de modo adecuado ante estas

situaciones. Quizás lo más acertado sería no dejar que pisoteen nuestros derechos

pero sin adoptar la misma postura irrespetuosa que el entrevistador. Lo principal es

no caer en la trampa y ponerse agresivo o desmoronarse.

III. FASES DE LA ENTREVISTA:

Independientemente de las fases que confluyen dentro de una entrevista de

selección es importante estructurar la mente con la idea de que una entrevista tiene

un ANTES, un DURANTE y un DESPUES. Las tres etapas son importantes y tienen una

preparación y unas características propias

FASE 1- ANTES DE LA ENTREVISTA ( EL DIA ANTES)

Antes de acudir a una entrevista de trabajo,

es muy recomendable que te prepares bien.

Siempre hay que transmitir una sensación de

seguridad y de confianza, y para ello, lo mejor es

mantener la situación bajo control, estando seguro

de lo que se hace. La mejor y más eficaz técnicas

para mantener el control y transmitir seguridad es

ESTAR PRERPARADO.

Existe un decálogo de cuestiones que es necesario hacer antes de la entrevista

de selección. Algunas solo puedes prepararlas el día anterior, pero el resto puedes y

debes hacerlos desde este preciso instante ya que se repetirán en casi todas las

entrevistas a las que asistas.







No olvides que preparando la entrevista se evitan errores y se mejoran los

resultados.

Puntos clave

1- Manejo de la ansiedad anticipatoria.

Las entrevistas de trabajo siempre producen cierto nerviosismo ya sea porque

se aspira a un mejora laboral o porque se puede

cambiar la situación de desempleado, además de

por la incertidumbre de cómo va a ser y que

ocurrirá durante y después de la misma.

Por eso para controlar los nervios te

recomendamos que DOMINES EL PENSAMIENTO.

Es normal anticiparse al fracaso, y puedes pensar

cosas como: ¿y si lo hago mal? ¿y si me quedo en

blanco? ¿y si…? Es importante que cambies estos

pensamientos por pensamientos positivos como

voy a lograrlo, tengo cosas que ofrecer…

Además, antes de acostarte el día anterior y antes de la entrevista, practica

ejercicios de relajación. Controla tu respiración. Esto ayudará a reducir tu ansiedad.

Si no conoces ningún ejercicio para relajarte o no sabes bien cómo respirar para

calmarte no dudes en contactar con nosotras, te proporcionaremos algunos.

2- Realiza un Balance personal. Conoce tus puntos fuertes y tus puntos débiles.

En el primer módulo has dedicado mucho tiempo a autoanalizarte y saber qué

puntos fuertes y que áreas de mejora tienes. Ahora es el momento de que adaptes ese

autoanálisis al puesto de trabajo al que te presentas.

3- Prepara la Venta de ti mismo.

Realiza un argumentarlo, basado en la comunicación persuasiva. Debes prever las

preguntas difíciles. Ten preparados buenos argumentos ya que te preguntarán el







porqué de casi todo. El motivo de que dejases un año en blanco, de que fueses de

Erasmus a determinado país y no a otro, que escogieses seguir formándote, que dejases

un trabajo... Siempre que te pregunten por otras empresas en las que has trabajado,

trata de argumentar tus salidas sin hacer comentarios negativos.

Como te hemos dicho, al comenzar este

módulo, es conveniente que todos estos

argumentos los ensayes antes para parecer aún

más convincente.

4- Estudia tu C.V.

Debes aprender tu CV de memoria porque

muchos entrevistadores lo utilizan para hacerte caer en contradicciones

5- Es necesario obtener información de los empleadores.

Siempre es fundamental un poco de investigación, para ello puedes utilizar los

buscadores de internet. Infórmate sobre su actividad, sus productos, los servicios, etc.

Si puedes investiga qué estilo de gente buscan. Todo lo que puedas saber te ayuda en la

batalla para salir vencedor.

6- Cuida tu imagen.

Tu manera de vestir y tu atuendo debe ser pulcro, formal y sobrio. Intenta vestir

siempre en la entrevista como vestirías para ese trabajo. Si es más informal, viste con

ropa de oficina informal, pero evita la ropa deportiva (zapatillas sudaderas…etc)

Siempre decántate por colores no estridentes, azules, grises, negros… Evita colores o

estampados que llamen la atención y distraigan de lo que de verdad importa en este

momento.

7- Documentación relevante y acreditaciones.

Lleva todo lo que creas que puede ser necesario en la entrevista, copia de CV.

recomendaciones de anteriores empresas o si aún no tienes experiencia laboral,

pueden ser recomendaciones de profesores o gente que puede acreditar tu forma de

ser o presentar trabajos. No olvides llevar un bolígrafo.







FASE 2 . DESARROLLO DE LA ENTREVISTA

Ya he llegado el día y ya estás en la empresa que quizá te contrate. La entrevista

se va a producir.

Es importante que sepas que a partir de ahora también hay tres fases. Es difícil

hablar de una entrevista típica pero aunque nunca se puede generalizar, en gran parte

de las entrevistas el esquema típico es el que vamos a comentar:

ETAPA INTRODUCTORIA:

Antes de la entrevista alguien, probablemente una secretaria, te recibirá y te

indicara que esperes. En tu comportamiento en ese momento debe primar la

PUNTUALIDAD, y eso quiere decir no llegar tarde pero tampoco llegar 15 minutos

antes.

Cuando te hagan pasar al despacho lo mas probable es que el entrevistador se

levantará o acudirá a saludarte. Quizá te diga su nombre y mencione su puesto. Debes

grabar esa información a fuego en tu memoria. Y recuerda el puesto para ser si hablas

con un técnico, con tu futuro jefe o con el dueño de la empresa.

En esta fase se plantea un primer problema ¿DEBO TRATAR DE USTED? La

norma es que en principio siempre de usted aunque él te tutee. Más vale que te pida

que los tutees o que tu preguntes si puedes hacerlo antes de que te de un corte porque

te has tomado demasiadas confianzas.

No olvides que en esta etapa introductoria ya te están evaluando y cómo

saludes, cómo entres y cómo te sientes también es un hecho a considerar.

ETAPA CENTRAL:

Es la etapa más importante, empezaran las preguntas y la obtención de

información. Por norma general tu interlocutor empezara con preguntas fáciles y poco

a poco irá hacia preguntas más difíciles y comprometidas. Lo más común es que el

entrevistador tome nota de todo lo que va ocurriendo







En las páginas posteriores tienes consejos para realizarlo con éxito.

ETAPA FINAL:

Cuando el entrevistador ha reunido información suficiente da por terminada la

entrevista. En este momento te preguntará por tu disponibilidad para otra entrevista o

cuando podrías incorporarte en caso de ser seleccionado….. Es probable que también te

preguntará si tú tienes alguna pregunta que hacer. Puedes aprovechar esta ocasión

para llevar las cosas a tu terreno y volver a hablar de tus puntos fuertes y sobre todo

para manifestar tu MOTIVACION E INTERES.

FASE. DESPUES DE LA ENTREVISTA

Poco puedes hacer en esta fase ya que poco sabes de lo que ha ocurrido, aun así

hay cosas que puedes hacer. La primera es hacer un resumen de la entrevista, te será

de mucha ayuda si te vuelven a llamar, te servirá para saber que dijiste y que te dijeron.

Además es un ejercicio excelente para analizar los fallos y que no te vuelvan a pasar.

La segunda cosa que puedes hacer es dirigir una carta o un email a tu

entrevistador agradeciendo el trato y la cordialidad. Es una cosa que poco hacen y

hará que tu candidatura no pase desapercibida.

Te hemos explicado las fases de la entrevista, ahora

queremos centrarnos en cómo puedes hacer para tener éxito en

la entrevista y como decimos en INVICA, brillar con luz propia.

APRENDER A BRILLAR EN EL DESARROLLO

En una entrevista de selección se pueden tratar muchos temas, tanto personales

como profesionales, y, dependiendo del tipo de entrevista que nos realicen, ésas

preguntas serán más o menos numerosas, extensas y profundas.







Durante el desarrollo de la prueba el entrevistador/a te realizará preguntas de

diverso tipo para analizarte centrándose fundamentalmente en tu historial personal,

formativo y profesional, así como en y posible experiencia en el puesto, tu motivación,

intereses, relaciones, personalidad y apariencia, etc. que serán estudiados por el

entrevistador/a en relación con las exigencias del puesto vacante.

A continuación te mostramos todos los temas que se suelen tratar en las

entrevistas de trabajo y sobre los que es necesario reflexionar previamente para tener

preparadas las posibles respuestas que demos sobre ellas:

DATOS PERSONALES Y FAMILIARES

DATOS SOBRE PERSONALIDAD

Lo normal, es comenzar una entrevista preguntando por tu personalidad. Con

eso se consigue generar un clima de confianza y más distendido. Se abordan temas

más personales o de valoración / motivación / percepción personal del candidato/a.

En general, hay que tener una visión optimista y positiva en las respuestas que

se ofrezcan, aunque sin parecer excesivamente auto-confiados, e intentar mostrar

como nuestros defectos o puntos débiles aspectos que, en realidad, pueden ser

positivos.

Por ejemplo, si nos preguntan que cuál es uno de nuestros mayores defectos

podemos contestar que “no podemos parar hasta que acabamos una cosa y que eso, a

veces, requiere que nos quedemos hasta muy tarde en el trabajo porque no podemos

dejar una cosa a medias”.

Aunque lo estemos comentando como un punto débil, en realidad se trata de

un aspecto positivo, ya que con ello reflejamos que tenemos capacidad de entrega,

constancia en el trabajo y responsabilidad con lo que hacemos.

Algunas de las preguntas que nos pueden formular en esta fase son:

1º. Defínete a ti mismo con 5 adjetivos calificativos. Justifícalos.

2º. Describe una anécdota en la que resolvieras con éxito una situación problemática.







3º. Si invertimos los papeles, tu entrevistador y yo candidato, ¿qué cualidades desearías

que yo reuniera relevantes al puesto?

4º. ¿Qué gana la empresa al contratarte a ti en lugar de a otro candidato?

5º. Si tuvieras que compararte con un animal, ¿con cuál lo harías y por qué?

6º. Si todos los trabajos tuvieran la misma remuneración y la misma consideración

social ¿Qué es en lo que realmente te gustaría trabajar?

7º. Piensa en una persona determinada; si yo le preguntara cómo eres tú ¿cuál crees

que sería su respuesta?

8º. ¿Qué tipo de personas te sacan de quicio?

9º. Cuéntame un chiste.

10º. ¿Qué impresión crees que he sacado de ti tras esta entrevista?

DATOS ACADÉMICOS

Posteriormente, el entrevistador/a entrará a conocer su historial formativo,

realizándole preguntas sobre tu:

• Historial, centros de estudios, cambios de centros.

• Rendimiento obtenido en los estudios: éxitos, fracasos.

• Carencias en la formación, proyectos de estudios futuros.

• Motivaciones, intereses y objetivos académicos que se marcó o se marcará en

un futuro.

• Problemas encontrados, valoración general.

• Actividades paralelas desarrolladas. Estudios y trabajo al mismo tiempo.







Así, algunas de las preguntas que nos podemos encontrar en esta fase son

1º. ¿Por qué decidiste estudiar...?

2º .¿Quién influyó más en ti a la hora de decidir tu formación?

3º. ¿Qué asignaturas te gustaban más y menos y en cuales sacabas mejores y peores

notas?

4º. ¿En qué medida tus calificaciones se deben a tu esfuerzo personal y en cual a tu

inteligencia?

5º. ¿Cómo estudiabas, qué sistema seguías?

6º ¿Por qué abandonaste los estudios?

7º. Si hubieras podido, ¿qué hubieras modificado de tu plan de estudios?

8º. ¿Cuál fue tu experiencia más gratificante de tu vida de estudiante? ¿Qué cambiarías

y por qué?

9º. ¿Tuviste algún puesto representativo en tu vida de estudiante?

10º. Prefieres el trabajo en equipo o individual y por qué.

Es imposible dar sugerencias generales sobre las respuestas adecuadas para

cada una de estas u otras preguntas, ya que éstas dependerán de cada persona y de su

situación en esos momentos. No obstante, como indicación general, es recomendable

adoptar una actitud positiva respecto a estas preguntas, dejando entrever que las

experiencias formativas fueron positivas en todo o en algún aspecto y que, si en alguna

cuestión hubo algo negativo y queremos comentarlo, sería recomendable

contrarrestarlo con una visión optimista de los resultados.

DA

EXPERIENCIA PROFESIONAL

A continuación, la entrevista se dirigirá hacia su/s experiencia/s profesional/es

anterior/es y/o actual, en su caso. Aquí mostramos todos los temas que se suelen tratar

respecto de esta cuestión y sobre los que le preguntarán. No obstante, dependerá del







entrevistador/a, realizar todas estas preguntas o el profundizar más o menos en todos

los aspectos planteados:

• Empresas por las que ha pasado, el acceso a ellas, tipo, volumen, características.

• Puestos ocupados, responsabilidades y funciones, nivel de autonomía en el trabajo,

dependencias.

• Logros, éxitos alcanzados.16

• Dificultades, conflictos.

• Motivos de cambio de una empresa a otra.

• Desarrollo de la trayectoria profesional.

• Concepto que el candidato/a tenga del trabajo, de la empresa y de sus funciones.

• Objetivos profesionales a medio – largo plazo.

• Tipo y nivel de retribución / salario.

A modo de orientación, ofrecemos algunas preguntas frecuentes sobre la

experiencia profesional que suelen surgir en las entrevistas:

1º Háblame de tus actividades

2º. Siendo estudiante, ¿desempeñaste algún trabajo? ¿Qué aprendiste de el? ¿Cómo lo

conseguiste?

3º. ¿Qué funciones has desempeñado en tus anteriores trabajos?

4º. ¿Has desempeñado algún puesto de responsabilidad? ¿Cómo te las arreglaste?

5º. ¿Qué es lo que te ha gustado más y menos de tus trabajos previos?

6º. ¿Cómo es/era tu relación con tus compañeros, jefes, subordinados?







7º. ¿Cuál fue la situación más desagradable en la que te encontraste? ¿Cómo la

afrontaste?

8º. Describe el mejor y el peor jefe que hayas tenido.

9º. Describe cómo sería tu jefe ideal.

10º. Describe un día típico en tu anterior trabajo

Al igual que en el caso anterior, las respuestas correctas a estas preguntas

dependerán de cada caso y candidato/a, pero igualmente es valorable no mostrar una

actitud negativa o muy crítica hacia empresas, funciones o compañeros de trabajo

anteriores o actuales. Es mejor no hablar mucho sobre una empresa o experiencia que

hablar mal de ellas.

Respecto a la cuestión económica, la respuesta adecuada será diferente en cada

caso particular:

- si el Demandante de empleo está buscando un primer trabajo, sería

conveniente que contestase que “si bien el dinero es un factor importante

para mi, en estos momentos mi mayor motivación se centra en encontrar

un trabajo y adquirir experiencia en su campo profesional”, intentando no

hablar mucho de cifras económicas, dando así una imagen de gran interés

por el puesto y empresa.

- si el candidato/a ya tiene una cierta o amplia experiencia profesional, puede

comentar abiertamente su actual o última retribución, sin inflar mucho las

cifras ya que las empresas normalmente conocen lo que se paga en el sector,

y cifrar unas expectativas económicas por encima de esa cifra, aunque sin

disparar mucho la cantidad, ya que daría la sensación de ser excesivamente

ambicioso y puede ser que la empresa no tenga previsto llegar a una

cantidad tan alta y, por lo tanto, le descarte para el puesto por esta cuestión.

PREGUNTAS PERSONALES

PUESTO AL QUE SE POSTULA

Es muy común que se nos pregunte sobre el puesto al que nos estamos

presentando. El entrevistador va a querer saber cuál es tu opinión sobre ellos, sobre la







empresa, y van a valorar si sabes a que te enfrentas o si por el contrario acudes a la

entrevista “solo por ver”.

Como se ha dicho en apartado anteriores es fundamental que antes de acudir te

informes informarte bien de la empresa que oferta el puesto. Adapta tu respuesta a la

compañía y a lo que ésta espera de ti.

Las preguntas más comunes en este apartado son:

1º. ¿Qué sabes de nuestra empresa? ¿Cómo la conociste?

2º. ¿Qué es lo que te atrae de ella?

3º. ¿Qué ambiente de trabajo prefieres?

4º. ¿Qué relaciones crees que deben existir entre un jefe y sus subordinados?

5º. ¿Cuál fue tu mayor dificultad a la hora de pasar de la vida de estudiante a la de

trabajador?

6º. ¿Cuáles son tus puntos fuertes y débiles relevantes para este puesto?

7º. ¿Qué te ves haciendo dentro de 5 o 10 años? ¿Cómo lo puedes lograr?

8º. ¿Cómo te enteraste de la existencia de este puesto?

9º. ¿Por qué piensas que vas a tener éxito en este puesto?

10º. ¿Con qué tipo de jefe acabarías por chocar?

El mejor consejo que podemos darte para este tipo de preguntas es que en base

al conocimiento de la empresa y el puesto, argumentes por qué quieres conseguir este

trabajo. Aquí debemos mostrar interés por la empresa y el puesto a cubrir, pudiendo

contestar que nos interesa la magnitud, seriedad, el sector, posibilidades de progresión,

etc. que la empresa nos puede ofrecer.

A veces en este apartado el entrevistador/a puede formularnos alguna pregunta

sobre nuestros proyectos y aficiones, por si pudieran estar relacionados o influir en

alguna medida con el puesto en cuestión. Normalmente este tipo de preguntas sirve







simplemente para ampliar más información sobre el candidato/a, sin que sea muy

relevante de cara a la valoración para el puesto.

DATOS COM

VIDA PRIVADA

Estas preguntas están orientadas a conocer un poco más el ambiente personal y

familiar en el que el candidato/a ha crecido y vivido, como una dimensión más de su

personalidad, y poder así evaluar mejor su situación, cargas de familia, etc.

No obstante, hay determinadas entrevistas en las que no se entra en cuestiones

personales Hay que tener en cuenta que hay personas a las que no les gusta que le

pregunten por su vida personal / familiar. Normalmente el entrevistador/a, al comienzo

de la entrevista, nos preguntará si nos importa que nos haga algunas preguntas

personales. En este caso, lo correcto es contestar que no y si aún así creemos que el

entrevistador/a se está entrometiendo demasiado en nuestra vida privada, podemos

limitarnos a contestar lo justo a las cuestiones planteadas e intentar orientar la

conversación hacia el ámbito profesional.

Las preguntas mas comunes en esta etapa son.

1º. ¿Con quién vives?

2º. ¿Por qué decidiste salir del domicilio de tus padres?

3º. Háblame de tu vida como hijo de familia mientras viviste con tus padres.

4º. ¿Qué valoras más de tus mejores amigos?

5º. ¿Tienes novia/o? ¿Qué opina de este trabajo?

6º. ¿Qué haces en tu tiempo libre?

7º. ¿Cuáles son tus aficiones favoritas?

8º. ¿Cuál ha sido la última película que has visto?, resúmela. ¿Qué te pareció?







9º. ¿Cuál es el último libro que has leído? , ¿Qué te pareció?

10º. ¿Qué te aporta la práctica de ...(algún deporte)

Además de todo lo que se te ha dicho durante estas páginas

queremos recordarte que una entrevista es un cruce de

mensajes, el entrevistador emite mensajes tu los recibes y

también los transmites. Por lo que debes tener siempre en

mente estas cuestiones.

IV- Consejos:

I- Ten en cuenta que tu entrevistador es una persona como tú que también tiene

miedos: como que no sepas hacer el trabajo, que tengas ausencias prolongadas,

que tardes mucho en hacerte con el trabajo, que no encajes, que realices el mínimo

esfuerzo, que no tengas iniciativa…

II- Considera una entrevista como una primera cita, donde tanto tú como el

empleador, vais a decidir si queréis continuar con la relación.

Mientras tú te preguntas si quieres trabajar en esa empresa o no, el empleador

trata de responder a las siguientes: ¿quiero que trabaje con nosotros? ¿tiene las

aptitudes, conocimientos o experiencia que hace falta? ¿tiene la actitud que

buscamos? ¿cómo se llevará con el resto de compañeros?

III- Ten en cuenta la “regla del 50-50”. Deja hablar al entrevistador la mitad del

tiempo. Si hablas mucho puede significar que no tendrás en cuenta las necesidades

de la organización. Si hablas poco, puede significar que tienes algo que esconder.

IV- Cuando respondas a las preguntas del entrevistador, respeta la regla de los 20

segundos a 2 minutos. Es decir, intenta no hablar más de 2 minutos seguidos cada

vez cuando contestes a una pregunta, de hecho una buena respuesta a veces sólo

dura 20 segundos.







V- Que te vean parte de la solución, no del problema. Para ello ten en cuenta las

características que buscan en un empleado o qué cosas se consideran intolerables.

Para ello puedes entrevistarte con personas que trabajen para esa organización. Lo

que buscan son trabajadores que les hagan ganar más dinero de lo que les cuesta.

Así que busca tus competencias que pueden encajar en ese puesto para esa

empresa y da pruebas de ello si es posible.

Además de los consejos es importante no cometer errores. Dentro de los errores,

nosotras hecho un listado de “errores surrealistas” para que no los cometas jamás.

Ahora pasamos a presentarte una lista de los 10 errores más surrealistas y

llamativos en entrevistas de trabajo, basada en una encuesta a 3.061 personas

publicada en el portal de Internet CareerBuilder.com. Además de sonreír y abrir los

párpados ante el desconcierto, aprovecha para reflexionar sobre estas equivocaciones

que harían que pasases directamente a la carpeta de “descartados”.

1- El móvil.

Un demandante de empleo que abandonó la sala de entrevistas debido a que

su móvil sonaba y la charla era “privada”.

Estar hablando con cualquier persona y dejarla esperando por contestar a una

llamada de teléfono, cuando menos es incómodo y molesto. Pero si a esto añadimos

que el que espera es el entrevistador, se está evidenciando la falta de respeto y la

poca importancia que se le concede a la entrevista. En un descuido el móvil puede

sonar, pero de ahí a contestar o abandonar el despacho va la distancia suficiente como

para ganarse un “NO, ADIÓS “cuando se vuelve a entrar en la sala con el “¿bueno, por

dónde íbamos?”.

No hay que mostrar una actitud servil, ni mostrarse reiterativo con excesivas

reverencias o alabanzas hacia el entrevistador, pero sí es fundamental adoptar un estilo

humilde y atento.







2- La cercanía

Una persona que aprovechó la entrevista para pedirle al seleccionador que lo

acercara a su casa al final de la misma.

Por mucha cercanía y amabilidad que demuestre el seleccionador, hay que

seguir manteniendo las formas, tanto en las posturas corporales como en el lenguaje,

procurando no abusar de la confianza que nos conceden. Si el entrevistador nos tutea,

es un permiso implícito para que nosotros lo hagamos, pero no antes.

No olvides que no puedes perder las formas nunca: Un aspirante a un puesto de

trabajo que tiró de la cadena del wáter durante una conversación telefónica con el

entrevistador.

3- La temporalidad

Un candidato que aseguró al entrevistador que no se quedaría mucho tiempo

en el puesto de trabajo, ya que esperaba recibir una herencia de su tío, quien “no

tenía buena pinta”.

No se puede presentar una candidatura haciendo énfasis en la temporalidad y

finitud de la misma. Frases como “hasta que encuentre algo mejor, mientras me sale

otra cosa, hasta que mi amigo y yo montemos la empresa, etc.”, dan una imagen de

persona con poca motivación, que va a abandonar el puesto en cualquier momento, y

que representará más costes que beneficios a la empresa, pues se irá en cuanto haya

sido formado.

Una cosa es ser sincero y honesto, y otra muy distinta dar a entender que la

compañía es tan sólo un pañuelo de usar y tirar, en el que no se tiene especial interés.

4- La Higiene

Un aspirante que olió sus axilas cuando iba a sentarse para ser entrevistado. Y

Una persona que sacó un cepillo y comenzó a peinarse durante la reunión.







La higiene y el cuidado en la ropa se valoran en gran medida, con lo que un

exceso de maquillaje, uñas sucias, barba de dos días y la camisa por fuera (por muy de

marca y de moda que esté) suele limitar el acceso a un puesto.

Por otro lado y aunque no tiene nada que ver con la higiene, en ocasiones y

según la empresa, un piercing, un tatuaje o el peinado pueden cerrarte puertas si el

puesto se desempeña cara al público.

5- La honestidad

Un aspirante que dijo haber sido despedido de su último trabajo por haber

golpeado a su último jefe.

Un candidato que rechazó la oferta de comida después de la entrevista debido

a que no quería llenar su estómago de grasa antes de salir a beber.

Pese a que se valora la franqueza y no hinchar el currículum, la honestidad no

significa dar detalles gratuitamente situaciones que puedan perjudicarnos. No obstante,

los entrevistadores tienen práctica en detectar mentiras y suelen ponerse en contacto

con los contratadores previos, por lo que no es recomendable decir que en el empleo

anterior se ganaba más si no es así, ocultar razones de despido, etc.

6- Información

Una persona que se presentaba a un puesto de contable aseguró ser una

persona fuerte en “relaciones sociales” y no en “números”.

Es imprescindible ir asesorado no sólo acerca de la empresa y el sector, sino del

puesto en concreto. Es bueno ser espontáneo y no llevar las mil y una frases hechas

que suenan a ensayo, pero hay que cuidar las respuestas, tomarse un tiempo para

responder, tolerar los silencios y no hablar por hablar, porque se puede terminar

diciendo auténticas tonterías o dar una imagen incoherente.







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En este tema, hemos pretendido darte a conocer este proceso de selección al

que tantas personas le tienen cierto “pánico” que es la entrevista de selección. Este

conocimiento hará que te enfrentes a ellas de una manera más natural. Recuerda que

cuanto más preparado vayas, más conocimiento tengas sobre ti mismo y sobre la

empresa a la que vas y más hayas ensayado tus respuestas, más natural y tranquilo

estarás, lo que sin duda jugará en tu favor.

No olvides tener en cuenta todos los consejos que te hemos dado en este tema!

Pueden suponer la diferencia entre ser un candidato ideal, o quedarte en el camino.

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MÓDULO 4- Procesos de selección: la entrevista personal ... · - por parte del entrevistador, una serie de habilidades y destrezas para obtener la información que necesita de acuerdo