Monasticismo 9

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    XXXI. La muerte del rey arriano Teodorico

    GREGORIO: Despus de que has llegado trabajosamente a creer, pienso que vale lapena contarte lo que me han referido ciertos hombres dignos de fe

    !uliano, el segundo abogado defensor de esta Iglesia de Roma a la que sirvo por

    voluntad de Dios, " que muri# hace casi siete a$os, me visitaba frecuentemente cuando"o estaba todav%a en el monasterio &uestras conversaciones versaban regularmentesobre lo que es bueno para alma

    ' (n d%a, l me cont#: )En el tiempo del re" *eodorico, el padre de mi suegro despusde haber recaudado el impuesto en +icilia, regresaba a Italia +u nave abord# la isla de%pari, donde viv%a un anacoreta que se destacaba por su gran virtud -ientras que losmarineros reparaban los aparejos de la nave, se le ocurri# al padre de mi suegro ir a veral hombre de Dios para encomendarse a sus oraciones.

    / 0El hombre del +e$or, cuando los vio, les dijo entre otras cosas: )1+aben que el re"*eodorico ha muerto2. Ellos le contestaron de inmediato: )En absoluto &osotros lodejamos vivo, " hasta este momento no nos hemos enterado de semejante cosa. Elservidor de Dios precis#: )Efectivamente, ha muerto 3"er a las tres de la tarde fueconducido entre el papa !uan " el patricio +%mmaco, sin cintur#n, descal4o " con lasmanos atadas, al cr5ter del volc5n vecino " arrojado dentro.6

    7 )3l escuchar esto, anotaron diligentemente el d%a, " una ve4 en Italia, se enteraron deque el re" *eodorico hab%a muerto el mismo d%a en que el servidor de Dios hab%a sidoavisado acerca de su muerte " suplicio.

    8 porque hab%a causado la muerte del papa !uan hacindolo sufrir en una prisi#n, "degollado a espada al patricio +%mmaco, con justicia apareci# siendo echado al fuego

    por aquellos a quienes injustamente hab%a ju4gado en esta vidaXXXII. La muerte de Reparatus

    Durante el tiempo de mis primeros anhelos de vida mon5stica, un anciano honorable denombre Deusdedit, mu" vinculado con la noble4a de esta ciudad, era un %ntimo amigom%o

    ' 9e aqu% lo que me cont#: )En los tiempos de los Godos, un hombre mu" distinguido,de nombre Reparatus, iba a morir Desde hac%a mucho tiempo "ac%a mudo " r%gido "

    parec%a que "a hab%a ehalado el ;ltimo soplo de vida " que su cuerpo estaba e5nime

    -ientras todos los que hab%an acudido lo lloraban, junto con su familia, como se llora aun muerto, de repente volvi# en s%, " las l5grimas de todos los que se lamentaban, setransformaron en estupor.

    / 0Despus de haber vuelto en s%, dijo: )Env%en lo antes posible un criado a la iglesiadel m5rtir san oren4o, la que es llamada con el nombre de su fundador D5maso, paraque vea lo que pasa con el sacerdote *iburcio " me lo comunique en seguida. +ecomentaba en aquel entonces que *iburcio se hallaba sometido a los deseos carnales

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    de *iburcio: )+e hab%a preparado una hoguera inmensa El presb%tero *iburcio fuellevado " colocado encima de ella uego prendieron fuego debajo de l " lo quemaron3dem5s estaba preparada otra hoguera que parec%a al4arse desde la tierra hasta lo m5salto del cielo (na vo4 grit# que estaba destinada para. 8 dicho esto, Reparatusmuri# El criado que hab%a sido enviado a *iburcio, lo encontr# "a muerto6

    = Evidentemente, Reparatus hab%a sido llevado al lugar de los castigos >l vio, volvi#,cont# " muri# ?on esto se muestra claramente que no vio estas cosas para s%, sino paranosotros a los que todav%a se nos concede la vida, e incluso enmendarnos de las malasacciones

    Reparatus vio que se dispon%a una hoguera, no porque en el infierno sea necesarioquemar le$a para hacer fuego, sino que para ense$an4a de los vivientes, vio emplearseen la combusti#n de los malvados, ese combustible con el que los vivientes alimentan

    habitualmente el fuego material 3s% gracias a las cosas ordinarias que o"en, puedenaprender a temer las que son etraordinarias

    XXXIII. Muerte de un curial cuyo sepulcro se incendi

    El venerable -aimiano, obispo de +iracusa " antes, durante mucho tiempo, superior demi monasterio aqu% en Roma, sol%a contar un hecho terrible que hab%a acontecido en eldistrito de @aleria

    Dec%a: )3ll% un curial recibi#, el s5bado santo, por ahijada en el bautismo a una joven,hija de cierto feligrs @uelto a su casa despus del a"uno, se embriag# " pidi# que sequedara con l esa ahijada su"a, " en esa misma noche Aes monstruoso decirloA fuecausa de la prdida de la jovencita.

    ' )3l levantarse a la ma$ana, el culpable pens# que ir%a a los ba$os, como si el agua delba$o pudiera lavar la mancha del pecado

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    7 )3l permitir esto, Dios omnipotente mostr# lo que tuvo que soportar, ocultamente, elalma de aquel cu"o cuerpo era consumido por la llama a la vista de los hombres De estemodo, Dios se dign# darnos, tambin a nosotros que estamos escuchando, un ejemploaterrador, para que de aqu% dedu4camos lo que el alma viviente " sensible sufre por su

    culpa, cuando hasta huesos insensibles son quemados totalmente por tal suplicio defuego.

    = EDRO: -e gustar%a saber si los buenos se reconocen mutuamente en el reino, " losmalos en el suplicio

    XXXIV. Si los buenos se reconocen mutuamente en el reino,

    y los malos en el suplicio.

    GREGORIO: a soluci#n de este problema se halla presentada, con ma"or claridad quela lu4, en las palabras del +e$or que "a hemos citado m5s arriba En ellas se dice:Habaun hombre rico que se vesta de prpura y lino finsimo y cada da haca esplndidos

    banquetes. A su puerta, cubierto de llagas, yaca un pobre llamado Laro, que ansiaba

    saciarse con lo que caa de la mesa del rico! y hasta los perros iban a lamer sus llagas

    FLcH, ssJ 8 en seguida:"l pobre muri# y fue llevado por los ngeles al seno deAbraham. "l rico tambin muri# y fue sepultadoFLcH, ''J

    ' "n la morada de los muertos, en medio de los tormentos, levant# los o$os y vio dele$os a Abraham, y a Laro $unto a l. "ntonces e%clam#& '(adre Abraham, ten piedad

    de m y enva a Laro para que mo$e la punta de su dedo en el agua y refresque mi

    lengua, porque estas llamas me atormentan). 'Hi$o mo *respondi# Abraham*,

    recuerda que has recibido tus bienes en vida y Laro, en cambio, recibi# males) FLcH, '/ssJ El rico, desesperado de su propia salvaci#n, se pone a pedir la salvaci#n delos su"os " dice: +e ruego entonces, (adre, que enves a Laro a la casa de mi padre,

    porque tengo cinco hermanos& que l los prevenga, no sea que ellos tambin caigan en

    este lugar de tormento FLcH, 'KsJ.

    / Estas palabras muestran claramente que los buenos reconocen a los buenos " losmalos a los malos En efecto, si 3braham no hubiera reconocido a 54aro, nuncahubiera hablado al rico, en medio de sus tormentos, de las aflicciones sufridas por54aro, al decir que ste hab%a recibido males en vida 8 si los malos no reconocieran alos malos, nunca el rico en medio de sus tormentos, se hubiera acordado de sushermanos ausentes 1?#mo pues no podr%a reconocer a los presentes, quien se

    preocupaba de suplicar por los ausentes2

    7 Este hecho aclara adem5s otro problema que t; no has planteado, o sea, que losbuenos conocen tambin a los malos " los malos a los buenos orque el rico es

    reconocido por 3braham, "a que ste le dice:ecibiste bienes en tu vidaFLc H, '=J, "54aro, el elegido, es reconocido por el rico rprobo que lo menciona nominalmente al

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    pedir que sea enviado:"nva a Laro para que mo$e la punta de su dedo en el agua yrefresque mi lenguaFLc H, '7J

    Este conocimiento acrecienta el c;mulo de la recompensa en una " otra parte, de modo

    que los buenos eperimentan una alegr%a m5s grande al ver alegrarse junto con ellos alos que han amado, mientras que los malos, al ser castigados junto con los que hanamado en este mundo despreciando a Dios, son consumidos no s#lo por su propia pena,sino tambin por la de aqullos

    = ero para los elegidos acontece algo a;n m5s admirable, porque no s#lo reconocen alos que han conocido en este mundo, sino que reconocen como "a vistos " conocidos alos buenos que nunca han visto orque cuando vean a los antiguos padres en laherencia eterna, stos no les ser5n desconocidos a la vista, "a que siempre los hanconocido en sus obras 3ll% todos ven a Dios en una claridad com;n 1Lu podr5nignorar all% donde conocen 3quel que lo conoce todo2

    XXXV. Un hombre piadoso que al morir io a los pro!etas

    (n romano piadoso de una vida mu" digna de alaban4a, que muri# hace unos cuatroa$os, vio a la hora de su partida Aseg;n atestiguan otros hombres piadosos queestuvieron all% presentesA, a los profetas !on5s, E4equiel " Daniel, " los llam# por susnombres dicindoles que eran sus se$ores 3firm# que ellos hab%an ido por l, " con losojos bajos, en se$al de reverencia, dej# su cuerpo

    Este hecho da a entender claramente cu5l ser5 el conocimiento en la vida incorruptible,"a que este hombre hall5ndose todav%a en su carne corruptible, reconoci# a los santosprofetas que ciertamente nunca hab%a visto

    XXXVI. " eces las almas que no se conoc#an, se reconocen en su partida al recibir

    casti$os por sus culpas o premios merecidos por sus buenas obras% la muerte de

    &uan y Urso y de 'umor!io y 'steban

    ?on frecuencia suele acontecer que el alma, antes de partir, reconoce tambin a aquellosque, por la semejan4a de las culpas o de los premios, ser5n destinados a una mismamorada

    El venerable anciano Eleuterio de quien he hablado detalladamente en el libroprecedente, afirm# que hab%a tenido en su monasterio un hermano carnal, de nombre!uan, que predijo a la comunidad su propia muerte con catorce d%as de antelaci#n

    ' ?ontaron uno a uno los d%as que iban pasando *res d%as antes de que fuera llamado asalir de su cuerpo, fue atacado por una fiebre 3l llegar la hora de la muerte, recibi# elsacramento del cuerpo " de la sangre del +e$or Despus de convocar a los hermanos,

    les orden# que cantaran ante l los salmos, entonando l mismo una ant%fona que leconcern%a:Abran las puertas de la $usticia y entrar para dar gracias al -eor. "sta es

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    la puerta del -eor& solo los $ustos entran por ellaF-al K, sJ

    / -ientras que los hermanos presentes salmodiaban delante de l, grit# de repente conuna vo4 pausada: )B(rso, venC. Dicho esto dej# su cuerpo, terminando su vida mortal

    os hermanos quedaron asombrados, porque no comprend%an lo que el hermano hab%adicho al morir +u muerte dej# sumido el monasterio en una profunda triste4a

    7 3l cuarto d%a, unos hermanos fueron enviados, por una necesidad urgente, a otromonasterio lejano 3 su llegada, los hermanos encontraron a los monjes de esemonasterio en etrema aflicci#n 3l preguntarles: )1Lu les sucede, para estar tan

    profundamente tristes2., ellos respondieron: )amentamos la desolaci#n de esta casa,porque un hermano cu"a vida llenaba este monasterio, fue sacado de la lu4 de estemundo hace cuatro d%as.

    = os hermanos que hab%an llegado, se informaron mu" interesados acerca de sunombre, " ellos contestaron: )(rso. 3veriguando la hora eacta de su muerte,reconocieron que hab%a salido de su cuerpo en el mismo momento en que !uan, quehab%a muerto en su monasterio, lo hab%a llamado

    H De este hecho se deduce que, siendo igual el mrito de uno " otro, les fue dado vivirjuntos en una misma morada, "a que juntos hab%an salido del cuerpo

    K *ampoco quiero pasar por alto lo que supe a prop#sito de ciertos vecinos m%os,

    cuando a;n viv%a como laico " habitaba en la casa que hab%a heredado de mi padre, aqu%en Roma En las cercan%as viv%a una viuda de nombre Gala Ella ten%a un hijo joven,Eumorfio, " no lejos de all% habitaba un tal Esteban que era a"udante en el ejrcito

    M Eumorfio, que estaba llegando al final de su vida, llam# a su criado " le orden#: )B@er5pido " dile al a"udante Esteban que venga inmediatamente, porque la nave que ha dellevarnos a +icilia va a 4arparC. ?omo el criado, cre"endo que su se$or estaba loco,rehus# obedecerle, aqul insisti# enrgicamente: )@e " trasm%tele lo que te digo, porqueno esto" loco.

    El criado sali# en busca de Esteban 3 mitad del camino se encontr# con unhombre que le pregunt#: )13 d#nde vas2. e contest#: )-i se$or me env%a a buscar ala"udante Esteban. El otro dijo en seguida: )@engo de estar con l, " en este momentoacaba de morir delante m%o. El criado volvi# a su se$or Eumorfio, pero lo encontr# "amuerto 3s%, teniendo en cuenta que aquel hombre se encontr# con el criado a mitad decamino " que ste desde all% desanduvo lo andado, se puede deducir considerando lasdistancias, que Eumorfo " Esteban fueron llamados en el mismo instante

    N EDRO: Es realmente terrible lo que dices ero te pregunto, 1por qu a un alma

    que estaba saliendo de su cuerpo, se le apareci# una nave, " por qu el que estaba pormorir, predijo que ser%a llevado a +icilia2

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    GREGORIO: 3l alma no le hace falta un veh%culo ero no ha" que asombrarse deque un hombre, estando todav%a en su cuerpo, ha"a visto lo que acostumbraba ver en susimaginaciones corporales, d5ndosele a entender as% ad#nde su alma pod%a ser llevadaespiritualmente

    ' 3l afirmar que ser%a llevado a +icilia, 1qu otra cosa se puede pensar sino que en lasislas de esta regi#n, m5s que en otros lugares, los cr5teres abiertos vomitan el fuego delos tormentos2 os entendidos dicen que cada d%a ensanchan sus flancos " se etienden8 mientras que el fin del mundo se aproima, cuanto m5s aumenta el n;mero de loscondenados que han de ser quemados, tanto m5s parecen abrirse aquellos lugares detormentos Dios omnipotente ha querido mostrar esto para correcci#n de los que vivenen este mundo 3s% los esp%ritus de los que no creen, que niegan la eistencia de lostormentos del infierno, ven los lugares de estos tormentos, en los que no quieren creercuando se les habla de ellos

    / ara confirmar la certe4a de que tanto los elegidos como los rprobos, cu"a vidatranscurri# en obras similares, son conducidos a lugares igualmente similares, ser%asuficiente la palabra de la @erdad, aun cuando faltaran los ejemplos Respecto de loselegidos ella dice en el Evangelio:"n la casa de mi (adre hay muchas moradasF/n 7,'J En efecto, si no hubiera disparidad de retribuci#n en la bienaventuran4a eterna, nohabr%a muchas moradas, sino una sola 3s% que ha" muchas moradas en las que los

    buenos go4an separadamente, por categor%as, teniendo cada uno como compa$eros a losque le son iguales en mritos 8 no obstante, es idntico el denario que todos hanrecibido por su trabajo Fcf 0t'N, ssJ, aunque estn distribuidos en muchas moradas

    orque es una la bienaventuran4a que all% reciben, " distinta la calidad de la retribuci#nque han obtenido por obras diferentes

    7 Es lo que dice la @erdad al anunciar el d%a de su juicio: "ntonces dir a loscosechadores& Arranquen primero la ciaa y tenla en mano$os para quemarla F0t /,/NJ os 5ngeles segadores atan la ci4a$a en manojos para quemarla, cuando asocian alos c#mplices con los compa$eros en castigos similares, para que ardan los soberbioscon los soberbios, los lujuriosos con los lujuriosos, los avaros con los avaros, los falacescon los falaces, los envidiosos con los envidiosos, los infieles con los infieles ?uandolos que se asemejan por su culpabilidad, son conducidos a tormentos semejantes por los

    5ngeles que los llevan a los lugares de las penalidades, es como si stos ataran la ci4a$aen manojos para quemarlos

    XXXVII. Los que parecen haber sido sacados de sus cuerpos como por error% la

    llamada y deolucin del mon(e )edro% la muerte y resurreccin de 'steban y la

    isin de un soldado

    EDRO: *u respuesta a mi pregunta me satisface gracias a la lucide4 de tu

    ra4onamiento 1ero c#mo se eplica, por favor, que algunos son sacados de su cuerpocomo por error, de modo que estando e5nimes vuelven en s%, " cada uno de ellos

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    declara haber o%do decir que no era l quien deb%a ser llevado2

    ' GREGORIO: ?uando esto sucede, edro, ha" que tener mu" en cuenta que no setrata de un error, sino de un aviso orque la bondad divina, por la gran liberalidad de su

    misericordia, dispone que algunos tambin despus de la muerte vuelvan de repente a sucuerpo, transidos de terror por los tormentos del infierno que por lo menos pudieron ver,mientras que antes no hab%an cre%do en lo que se les dec%a

    / ?ierto monje de Iliria que viv%a conmigo en el monasterio en esta ciudad, me contabalo que hab%a llegado a su conocimiento cuando a;n habitaba en el desierto (n monje denombre edro, oriundo de la regi#n de Iberia, se hab%a reunido con l en un sitio de unavasta soledad llamada Evasa Este monje le hab%a contado que antes de retirarse aldesierto, hab%a muerto a causa de una enfermedad, pero hab%a vuelto en seguida a sucuerpo 3testiguaba haber visto los suplicios del infierno " sus innumerables hogueras

    *ambin cont# que hab%a visto a algunos poderosos de este mundo suspendidos en lasllamas

    7 8a era conducido para ser sumergido all% tambin l Aas% dec%aA, cuando de repenteapareci# un 5ngel con una vestidura resplandeciente, prohibiendo que fuera echado alfuego El 5ngel tambin le dijo: )B+al de aqu% " considera cuidadosamente cu5l habr5 deser tu vida en adelanteC. Despus de estas palabras, sus miembros se recalentaron

    paulatinamente, " se despert# del sue$o de la muerte eterna, dio cuenta de todo lo quehab%a ocurrido a su alrededor, " a partir de entonces se refren# con tantas vigilias "a"unos que, aunque su lengua callara, su modo de vivir mostraba que hab%a visto los

    tormentos del infierno " que los tem%a En efecto, Dios omnipotente con su admirablegenerosidad lo hab%a hecho morir, para que no muriese

    = ero el cora4#n humano es de una gran pesade4 " dure4a, " la simple manifestaci#nde las penas no es igualmente ;til para todos

    El ilustre Esteban que t; has conocido bien, me contaba de s% mismo que, al habersedemorado por un asunto en la ciudad de ?onstantinopla, ca"# enfermo " muri#uscaron un mdico " un perfumista para abrirlo " embalsamarlo, pero ese d%a no

    pudieron encontrarlos, " a la noche siguiente el cuerpo "ac%a insepulto

    H Esteban fue conducido al infierno 3ll% vio muchas cosas de las que antes hab%a o%dohablar sin creerlas 3l ser presentado al jue4 que presid%a la sesi#n, ste no lo admiti#El jue4 dijo: )&o orden traer a ste, sino al herrero Esteban. El volvi# al instante a sucuerpo, " el herrero Esteban que viv%a cerca de l, muri# en aquella misma hora 3s% secomprob# que eran ciertas las palabras que hab%a o%do 3 su ve4, la muerte de aquel otroEsteban las confirm#

    K 8 hace tres a$os, durante la peste que tan cruelmente asol# nuestra ciudad, " en la quese divisaban a simple vista esas flechas que ca"eron del cielo e hirieron a uno tras otro,

    muri# tambin ese primer Esteban, como t; sabes(n soldado, atacado por la peste en nuestra ciudad, lleg# a su fin +ali# de su cuerpo "

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    qued# e5nime, pero en seguida volvi# en s% " cont# lo que le hab%a sucedido

    M 3firmaba Atambin muchos otros se enteraron de elloA que hab%a un puente, debajodel cual corr%a un r%o negro " tenebroso ehalando un vapor de una fetide4 intolerable

    ero al otro lado del puente hab%a unas praderas deliciosas " reverdecientes, adornadasde flores perfumadas, donde se ve%an reunidos grupos de hombres vestidos de blanco+e respiraba un perfume tan agradable e intenso, que su fragancia era suficiente parasaciar a quienes all% paseaban " viv%an

    ?ada uno de ellos ten%a su morada magn%ficamente iluminada 8 all% estabanconstru"endo una casa majestuosa, al parecer con ladrillos de oro, pero no se pudo saber

    para quin era !unto a la orilla del r%o hab%a tambin algunas moradas 3lgunas de ellasfueron alcan4adas por el vapor ftido, a otras, en cambio, no llegaba el hedor que sub%adel r%o

    N El puente mencionado serv%a de prueba +i un injusto quer%a pasarlo, ca%a en el r%otenebroso " maloliente En cambio los justos a quienes no deten%a ninguna culpa,llegaban por l con paso seguro " libre a los lugares amenos

    ?ont# que hab%a visto all% tambin a edro, el jefe del personal eclesi5stico, quehab%a muerto hac%a unos cuatro a$os +e hallaba abajo, en los lugares m5s horribles,encadenado " oprimido por hierros mu" pesados 3l preguntar por qu le pasaba esto,o"# decir lo mismo que tambin nosotros, los que conocimos su comportamiento enesta casa eclesi5stica sabemos " recordamos +e le dijo: )Est5 sufriendo esto, porque

    cuando se le daba la orden de infligir una sanci#n, cumpl%a su servicio, pero aplicandolos golpes m5s por crueldad que por obediencia. &adie que lo ha"a conocido, ignoraque as% fue

    ' *ambin afirmaba que hab%a visto all% a un sacerdote etranjero que al llegar alpuente, lo pas# con tanta seguridad cuanta era la pure4a en que hab%a vivido +eg;natestigu# el soldado, tambin hab%a reconocido en este puente al mencionado Esteban3l querer pasar, hab%a dado un paso en falso, " "a la mitad de su cuerpo ca%a fuera del

    puente, cuando unos hombres espantosos surgieron del r%o " lo tironeaban de las piernashacia abajo, mientras que otros hombres blancos " hermosos empe4aron a tironearlo de

    los bra4os hacia arriba Durante esta lucha en la que los esp%ritus buenos lo tiraban haciaarriba " los malos hacia abajo, el que vio esto volvi# a su cuerpo, " no supo c#motermin# la contienda

    / En este caso que se refiere a la vida de Esteban, se da a entender que en l lospecados de la carne estaban en lucha con sus limosnas El que fue tironeado por laspiernas hacia abajo " por los bra4os hacia arriba, evidentemente hab%a querido hacerlimosnas, pero sin resistir perfectamente a los vicios de la carne que lo tiraban haciaabajo ero lo que en aquel eamen del jue4 invisible, alcan4# en l la victoria, quedaescondido, tanto para nosotros como para el que lo vio " que volvi# a este mundo

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    7 +in embargo consta, como "a dije, que Esteban, despus de haber visto el infierno "haber vuelto a su cuerpo, en modo alguno corrigi# perfectamente su vida, "a quedespus de muchos a$os, al dejar este cuerpo tuvo que luchar entre la vida " la muerteDe aqu% se puede deducir que, el haber tenido ante la vista los suplicios del infierno,

    para unos es a"uda, para otros un testimonio en contra su"o os primeros ven los males

    que deben evitar, " los segundos son castigados tanto m5s cuanto que no quisieronevitar los suplicios del infierno despus de haberlos visto " conocido

    = EDRO: Luisiera preguntarte, 1qu significa el hecho de que en los lugares amenosse vio que una casa era construida con ladrillos de oro2 Resulta totalmente rid%culo creerque en la vida del m5s all5 a;n tenemos necesidad de esta clase de metales

    H GREGORIO: 1Luin, si go4a de su sano juicio, lo va a entender as%2 &o, con lo queall% se ha mostrado, quienquiera sea el destinatario de aquella casa, se da a entender

    claramente el valor de las obras que se hacen aqu% en la tierra uesto que por lagenerosidad de sus limosnas merecer5 el premio de la lu4 eterna, consta con certe4a queest5 edificando su casa con oro 3qu% tengo que agregar un detalle que antes heolvidado: el soldado que hab%a visto esto, contaba que los ladrillos de oro para laconstrucci#n de la casa eran llevados por j#venes " viejos, " por muchachos " ni$as Deesta observaci#n se deduce que los beneficiarios de sus obras de caridad, aqu% en latierra, llegaron a ser los constructores que all% se vieron

    XXXVIII. *eusdedit, cuya casa se io por reelacin

    que era construida los s+bados

    *ambin viv%a cerca nuestro un hombre piadoso, llamado Deusdedit, que habitualmentese ocupaba en la confecci#n de 4apatos 3lguien vio por revelaci#n que se estabaedificando su casa, pero parec%a que en la construcci#n los obreros trabajaban s#lo loss5bados

    >l entonces se inform# diligentemente acerca de la vida de Deusdedit, " descubri# quede las ganancias de su trabajo de cada d%a, todo lo que le sobraba de sus gastos para elalimento " los vestidos, lo llevaba regularmente los s5bados a la iglesia de san edro "lo daba a los pobres or eso has de concluir que no sin ra4#n, la construcci#n de su casase hac%a en d%a s5bado

    ' EDRO: +obre este particular esto" conforme ero quisiera preguntarte, 1qusentido tiene decir que algunas moradas eran alcan4adas por el vapor ftido, " que encambio otras no pod%an serlo2 18 qu sentido tiene ese puente, " ese r%o2

    / GREGORIO: edro, a partir de las im5genes de las cosas apreciamos las realidadesmorales En efecto, vio a los buenos pasar por un puente hacia los lugares amenos,

    porque es muy angosto el camino que conduce a la vida F0tK,7J, " vio correr el r%oftido, porque aqu% en la tierra la oleada putrefacta de los vicios de la carne corre a

    diario hacia el abismo

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    7 ?iertas moradas eran alcan4adas por los vapores ftidos, pero otras no lo eran enmodo alguno, porque ha" much%simos que hacen gran cantidad de buenas obras, pero,sin embargo, sus pensamientos todav%a se deleitan en los vicios carnales 8 esciertamente justo que all% estn asediados por una neblina nauseabunda, los que aqu%todav%a se deleitan en el hedor carnal or eso el bienaventurado !ob, al ver que este

    deleite carnal anida en la hedionde4, profiere su sentencia acerca del hombre lujurioso "lascivo: -u delicia son los gusanos F/b '7, 'NJ ero quienes liberan totalmente sucora4#n de todo deleite carnal, tienen su morada P seg;n consta con certe4a P fuera delalcance de la bruma hedionda

    = *ambin ha" que tener presente que eist%a a la ve4 el hedor " la neblina, porquecuando el deleite carnal infecta el alma, sin duda la oscurece para que no vea la claridadde la lu4 verdadera 8 cuanto m5s se deleita en las baje4as, tanto m5s ha de sufrir el velosombr%o que impide la vista de las cosas de arriba

    H EDRO: 19emos de pensar que se puede demostrar por la autoridad de la +agradaEscritura, que los pecados de la carne son castigados por la hedionde42

    XXXIX. 'l casti$o de los Sodomitas

    GREGORIO: +%, se puede orque el libro del Gnesis nos lo atestigua eemos que el+e$or hi4o caer fuego " a4ufre sobre los +odomitas Fcf 1n , '7J, para que el fuego

    los encendiera " la fetide4 del a4ufre los matara uesto que hab%an ardido en el amoril%cito de la carne corruptible, perecieron en ese fuego pestilente 3s%, en su castigo, sedar%an cuenta de que por haberse deleitado en su propia fetide4, se hab%an entregado a lamuerte eterna

    EDRO: ?onfieso que de todas mis dudas, "a no me queda ning;n interrogante

    XL. Las almas de al$unos, que toda#a est+n en el cuerpo, en ciertas cosas

    a!lictias que se re!ieren al m+s all+% el (oen Teodoro% la muerte de hrysaurius yde un mon(e de Isauria

    GREGORIO: 9emos de saber tambin que a veces las almas que a;n est5n en suscuerpos, ven algo de los castigos del m5s all5 3 algunos, esto les sirve para suedificaci#n personal, " a otros, para edificaci#n de quienes los escuchan

    ' En efecto, aquel joven de quien Aseg;n recuerdoA "a habl en mis homil%as al pueblo,aquel muchacho mu" inquieto de nombre *eodoro, sigui# a su hermano ingresando a mimonasterio, m5s por necesidad que por su propia voluntad e resultaba mu" fastidiosoque alguien le hablara de la salud de su alma &o solamente no quer%a obrar bien, sino nisiquiera aguantaba o%r hablar de esto 3seguraba jurando, enoj5ndose o burl5ndose, que

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    nunca llegar%a a tomar el h5bito de la vida religiosa

    / ero durante la epidemia que recientemente devor# gran parte de la poblaci#n de estaciudad de Roma, un tumor en la ingle lo llev# al borde de la muerte Durante sus

    ;ltimos momentos, se reunieron los hermanos para proteger su partida mediante laoraci#n 8a ten%a muertas sus etremidades, " solamente en el pecho subsist%a latente unresto del calor vital *odos los hermanos oraban por l tanto m5s insistentemente, cuanto"a lo ve%an alejarse con rapide4

    7 De repente se puso a gritar a los hermanos presentes, " a interrumpir sus oracionescon vo4 fuerte: )B3ljenseC 9e aqu% que he sido entregado a un drag#n para serdevorado ero a causa de la presencia de ustedes no lo puede hacer -i cabe4a "a est5dentro de su boca Ret%rense para que no me atormente por m5s tiempo, sino que haga loque tiene que hacer +i he sido entregado a l para que me devore, 1por qu tengo que

    sufrir esta dilaci#n a causa de ustedes2. Entonces los hermanos le dijeron: )1Lu est5sdiciendo, hermano2 B9a4te la se$al de la santa cru4C. El contest# con grandesclamores: )Luisiera santiguarme, pero no puedo, porque el drag#n me oprime con susescamas.

    = 3l o%r esto, los hermanos se postraron en tierra con l5grimas, " se pusieron a re4arardientemente por la liberaci#n de su alma

    8 he aqu% que de repente el enfermo dio un fuerte grito: )BGracias a DiosC Eldrag#n que me hab%a apresado para devorarme, hu"#

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    ?hr"saurius ten%a que soportar angustiosamente, aunque adivinaban su presencia por lasconfesiones, la palide4 " el estremecimiento de quien era arrastrado 3terrori4ado porestas im5genes horribles, daba vueltas en su lecho de un lado para otro 3costado sobreel lado i4quierdo, no pod%a soportar su vista 3l volverse hacia la pared, tambin all%estaban ellos 3prisionado horrorosamente " desesperado por liberarse, grit# con todas

    sus fuer4as: )B(na tregua, al menos hasta ma$anaC B(na tregua, al menos hastama$anaC. -ientras as% gritaba, su alma fue arrancada de la morada de su carne

    Resulta evidente que no tuvo esta visi#n para bien su"o sino en favor nuestro Ellanos beneficia a nosotros, a quienes la paciencia divina espera con longanimidad orque1de qu le sirvi# a l ver, antes de la muerte, a esos esp%ritus horrendos " haber pedidouna tregua, si esa tregua solicitada no le fue concedida2

    N *ambin est5 todav%a entre nosotros 3tanasio, el sacerdote de Isauria, que cuenta un

    suceso terrible, ocurrido en su tiempo en Iconio 3ll%, seg;n dijo, en un monasteriollamado )de los G5latas., viv%a un monje tenido en gran estima Realmente, se lo ve%ade buenas costumbres " bien dispuesto en todo su modo de actuar, pero como lodemostr# su fin, era mu" diferente de lo que parec%a ser ?uando a"unaba a la vista delos hermanos, acostumbraba comer a escondidas os hermanos ignoraban por completoeste vicio su"o

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    favorable, este es el da de la salvaci#n F4 2oH, 'J

    ' +alom#n dice por su parte: +odo lo que est al alcance de tu mano, realalo con tuspropias fueras, porque no hay obra, ni proyecto, ni ciencia, ni sabidura, en el Abismo

    adonde t irsF5o, NJ 8 David finalmente dice: (orque es eterna su misericordiaF-al K, J

    / De estas sentencias resulta que del modo como cada uno sale de aqu%, as% se presentaen el juicio Debemos creer, sin embargo, que ha" un fuego purificador para ciertasfaltas leves antes del juicio, puesto que la @erdad dice: Al que hable contra el "spritu-anto, no se le perdonar ni en este mundo ni en el futuroF0t', /'0c/, 'J Estasentencia da a entender que ciertas culpas pueden ser perdonadas en este mundo, " otrasen el futuro orque lo que se niega respecto de un punto, por consecuencia l#gica seconcede respecto de otros

    7 ero sin embargo, como "a dije, ha" que creer que esto se puede aplicar a los pecadosleves " m%nimos, como la palabrer%a habitual, la risa inmoderada, o el pecado de las

    preocupaciones por los bienes materiales que dif%cilmente cometen sin cierta culpaquienes saben c#mo evitarla, o tambin alg;n error debido a la ignorancia en un asuntono grave *odas estas faltas siguen pesando, tambin despus de la muerte, sobreaquellos a quienes no les han sido perdonadas mientras que a;n estaban en esta vida

    = ablo al decir que ?risto es el fundamento, agrega: -obre este fundamento se puedeedificar con oro, plata, piedras preciosas, madera, pasto o pa$a& el fuego probar la

    calidad de la obra de cada uno. -i la obra construida sobre el fundamento resiste laprueba, el que la hio recibir la recompensa! si la obra es consumida, se perder. -in

    embargo, su autor se salvar, como quien se libra del fuego F6 2o/, ssJ 3unque estose puede entender pensando en el fuego de la tribulaci#n que tenemos que padecer enesta vida, no obstante, si alguien lo entiende pensando en el fuego de la purificaci#nfutura, tiene que acordarse con diligencia que ablo, cuando dice que uno puede sersalvado por el fuego, no piensa en aquel que edifica sobre este fundamento con hierro,

    bronce o plomo, o sea mediante pecados ma"ores " m5s graves " por eso "aimperdonables, sino con madera, pasto o paja, o sea mediante pecados mu" peque$os "mu" leves que el fuego puede consumir f5cilmente

    H +in embargo, hemos de saber que en el m5s all5 nadie obtendr5 perd#n alguno, ni aunde los m5s m%nimos pecados, si en esta vida no ha merecido alcan4arlo mediante la

    pr5ctica de las buenas obras

    XLII. 'l alma del di+cono )ascasio

    ?uando "o era joven " vest%a ropa secular, o% contar a unos ancianos bien informados

    que ascasio, di5cono de esta sede apost#lica, " autor de libros eminentementeortodoos " luminosos sobre el Esp%ritu +anto, Aque nosotros tenemosA hab%a sido un

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    hombre de admirable santidad, dedicado particularmente a la pr5ctica de las limosnas,amigo de los pobres " menospreciador de s% mismo

    En aquel duelo entre +%maco " oren4o que enardeci# las pasiones de los fieles, leligi# a oren4o como pont%fice 3brumado despus por la unanimidad de todos,

    persisti# en su decisi#n hasta el d%a de su muerte, amando " prefiriendo a aquel a quien

    la Iglesia, en virtud del juicio de los obispos, hab%a recha4ado para presidirla' -uri# en la poca en que +%maco era pont%fice de la sede apost#lica (n poseso por eldemonio, al tocar su dalm5tica colocada sobre el fretro, fue liberado de inmediato

    / -ucho tiempo despus Germ5n, el obispo de ?apua a quien mencion m5s arriba, fuepor prescripci#n mdica, a tomar ba$os en beneficio de su salud en las termas de3ngulus 3l entrar en las termas, encontr# all% al di5cono ascasio que estaba de pie,atendiendo las estufas 3l ver esto, se espant# sobremanera " averigu# qu estabahaciendo all% un hombre tan eimio El le respondi#: )or ninguna otra ra4#n fui

    enviado a este lugar de sufrimiento, sino porque me puse de parte de oren4o contra+%maco ero te ruego que reces al +e$or por m% 8 sabr5s que has sido escuchado, si alvenir la pr#ima ve4 "a no me encuentras.

    7 El hombre del +e$or Germ5n se entreg# con gran fervor a la oraci#n, " al volverdespus de pocos d%as, "a no encontr# a ascasio en aquel lugar uesto que no hab%a

    pecado por malicia, sino por ignorancia, pudo ser purificado de su pecado despus de lamuerte

    = Debemos creer, no obstante, que gracias a su generosidad en las limosnas, pudo

    obtener el perd#n cuando "a no le era posible actuar

    XLIII. La ra/n por la que se aclaran en estos 0ltimos tiempos,

    tantas cosas que antes estaban ocultas, respecto de las almas

    EDRO: Dime, por favor, 1por qu en estos ;ltimos tiempos se aclaran tantos detallesacerca de las almas, cuando antes todo esto estaba oculto2 areciera que mediante

    revelaciones " visiones manifiestas, se nos muestra " abre el mundo que ha de venir

    ' GREGORIO: Es as% orque cuanto m5s se acerca a su fin la generaci#n presente,tanto m5s se hace tangible por su proimidad el mundo futuro " se manifiesta mediantesignos m5s evidentes En este mundo no podemos vernos unos a otros los pensamientos,mientras que en aquel nos vemos mutuamente en nuestros cora4ones 1Lu es entonceseste mundo sino la noche, " qu es el que ha de venir sino el d%a2 ero as% como cuandola noche se acaba " comien4a el d%a, antes de la salida del sol, de alg;n modo lastinieblas se me4clan con la lu4, hasta que los ;ltimos vestigios de la noche que se aleja,se transforman definitivamente en la lu4 del d%a siguiente, as% tambin el fin de este

    mundo se confunde con el principio del siglo futuro, " las ;ltimas tinieblastransparentan resplandores espirituales De aquel mundo futuro "a vislumbramos

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    muchas cosas pero a;n no lo conocemos perfectamente, porque lo vemos como antes dela salida del sol, en una especie de crep;sculo del esp%ritu

    / EDRO: -e gusta lo que dices ero en lo que se refiere a ascasio, ese hombre

    eminente, se me presenta una duda: 1or qu despus de su muerte fue llevado a unlugar de castigo, l cu"as vestiduras al ser tocadas en el fretro por un poseso,epulsaron al esp%ritu maligno2

    7 GREGORIO: En esto debemos reconocer el designio grandioso de Dios omnipotente" sus m;ltiples aspectos or juicio divino sucedi# que ascasio sufriera en secreto,durante alg;n tiempo, la sanci#n de su pecado ero despus de su muerte obr# milagrosa travs de su cuerpo a vista de los hombres, por cuanto antes de morir hab%a hechoobras buenas reconocidas por ellos 3s% los que hab%an visto sus obras, no quedarondecepcionados en su estima por sus limosnas, ni fue dejada sin castigo esa falta, que l

    por no considerarla falta, no la hab%a borrado con sus l5grimas

    = EDRO: o que dices me hace refleionar 3premiado por este caso, me veoobligado a temer no s#lo los pecados que cono4co sino tambin los que no llego aconocer

    H ero acerca de lo que se trat# m5s arriba, sobre los lugares del castigo del infierno, tequiero preguntar: 1D#nde debemos pensar que est5 el infierno2 1En esta tierra o debajode esta tierra2

    XLIV.1*nde hay que creer que est+ el in!ierno2

    GREGORIO: +obre este tema no me atrevo a pronunciar temerariamente ningunasentencia

    3lgunos han pensado que el infierno se encuentra en un lugar determinado sobre latierra, " otros consideran que est5 debajo de la tierra ero aqu% se presenta un problema:si se lo llama )infierno. porque est5 en lo inferior, entonces el infierno debe ser, con

    respecto a la tierra, lo que la tierra es con respecto al cielo *al ve4 por eso dice elsalmista: -acaste mi alma del infierno inferior F-al M=, /J arecer%a entonces que elinfierno superior ser%a la tierra, " el infierno inferior estar%a debajo de la tierra

    ' *ambin la palabra de !uan concuerda con esta interpretaci#n ?uando afirma que vioun libro sellado con siete sellosFAp=, J, " que nadie, ni en el cielo ni en la tierra nideba$o de ella, era capa de abrir el libro ni de romper sus sellos FAp =, / ssJ, agreg#: 7

    yo me puse a llorar FAp =, 7J ero seguidamente dice que el libro ser5 abierto por elLe#n de la tribu de /udFAp =, =J

    / ?on este libro, 1qu otra cosa se se$ala sino la +agrada Escritura, que ha sido abierta;nicamente por nuestro +e$or2 >l, al hacerse hombre, ha revelado por su muerte,

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    resurrecci#n " ascensi#n todos los misterios que en ella estaban encerrados 8 nadie enel cielo, ni siquiera los 5ngeles, ni nadie en la tierra, ni el hombre que vive en el cuerpo,ni nadie debajo de la tierra ha sido encontrado digno, porque ni las almas que "a hansalido del cuerpo, con la ;nica ecepci#n del +e$or, han podido aclararnos los secretosde la palabra divina Entonces, cuando se nos dice que nadie debajo de la tierra ha sido

    encontrado digno de abrir el libro, no veo ning;n impedimento para creer que elinfierno se halla debajo de la tierra

    XLV. 'n lagehena,1hay un !ue$o 0nico o hay !ue$os diersos2

    EDRO: Dime, por favor: 19a" que creer que en el infierno eiste un ;nico fuego, obien, debemos pensar que ha" preparados tantos fuegos cuantas son las diferentes clasesde pecados2

    ' GREGORIO: En el infierno ha" un ;nico fuego, pero no tortura del mismo modo atodos los pecadores orque cada uno eperimenta el castigo de acuerdo a las eigenciasde su pecado Es como en este mundo: aqu% ha" mucha gente bajo el mismo sol, " sinembargo, ellos no sienten igualmente el ardor de ese ;nico sol, porque uno se acaloram5s " otro menos del mismo modo en el m5s all5 un mismo fuego no causa una mismaclase de quemadura, porque lo que aqu% en la tierra est5 condicionado por la diversidadde los cuerpos, all5 lo est5 por la diversidad de los pecados 3s%, no tendr5n un fuegodiferente " no obstante, cada uno ser5 quemado de un modo diferente

    XLVI. Si los que son destinados al incendio de la gehena

    arden eternamente

    EDRO: (na pregunta, si me permites: 1odemos decir que aquellos que han sidoarrojados una ve4 all%, se abrasar5n para siempre2

    GREGORIO: ?onsta con absoluta certe4a que, as% como no tiene fin la felicidad de losbuenos, tampoco tendr5n fin los tormentos de los malos uesto que la @erdad dice:

    "stos irn al castigo eterno, y los $ustos a la vida eternaF0t'=, 7HJ, " siendo ver%dicolo que promete, sin ninguna duda, no ser5 falso aquello con lo que Dios amena4#

    ' EDRO: ero si alguien dijera: Dios 1ha amena4ado a los pecadores con una penaeterna, para impedirles que cometan pecados2

    GREGORIO: +i es falso aquello con lo que ha amena4ado para apartarlos de lainjusticia, tambin es falso lo que ha prometido para ehortarlos a la justicia ero,1quin ser5 tan insensato para atreverse a decir esto2 8 si ha amena4ado con algo que nointentaba cumplir, cuando queremos aseverar que es misericordioso, nos vemosobligados a afirmar que es fala4 ero decir esto es un sacrilegio

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    / EDRO: Luisiera saber c#mo puede ser justo castigar infinitamente una falta finita

    GREGORIO: +e dir%a esto con ra4#n si el jue4 riguroso no ju4gara los cora4ones de los

    hombres, sino sus actos +i los malvados faltaron durante un tiempo limitado, es porquetuvieron una vida limitada, "a que, si hubieran podido, ciertamente hubieran queridovivir sin fin, para poder pecar sin fin Demuestran que desean vivir siempre en el

    pecado, quienes durante su vida nunca dejan de pecar ?orresponde sin duda a la granjusticia del que ju4ga, el hecho de que nunca les falte el suplicio a quienes en esta tierranunca quisieron estar eentos de pecado

    7 EDRO: ero ning;n hombre justo se alimenta de la crueldad, " si el servidor quefalta es entregado al castigo por su se$or justo, es para que se corrija de su maldadEvidentemente, es castigado con el fin de que se enmiende ero los malvados que han

    sido entregados al fuego de la gehena, si no pueden llegar a corregirse, 1con qu finhabr5n de arder para siempre2

    = GREGORIO: Dios omnipotente, por ser compasivo, no se alimenta del tormentoinfligido a los miserables ero por ser justo, nunca jam5s se cansa de vindicar lasiniquidades *odos los malvados que han sido enviados al suplicio eterno, ciertamenteson castigados por su iniquidad no obstante arden con miras a un objetivo: que todoslos justos vean en Dios las alegr%as que reciben, " en los condenados, los tormentos delos que se han librado 3s% han de reconocerse por siempre como deudores de la graciadivina, tanto m5s cuanto pueden ver c#mo son castigados por siempre las maldades que

    ellos con la gracia de Dios han podido superar

    H EDRO: 18 c#mo son santos, quienes no re4an por sus enemigos a los que ven arderas%, puesto que se ha dicho: 89ren por sus enemigos:F0t=, 77J2

    K GREGORIO: Ellos re4an por sus enemigos durante el tiempo en que puedenconvertir sus cora4ones a una penitencia provechosa " salvarlos mediante estaconversi#n 1orque, qu otra cosa ha" que pedir en la oraci#n por los enemigos, sino loque dice el 3p#stol: +eniendo en cuenta que ;ios puede concederles la conversi#n y

    llevarlos al conocimiento de la verdad, librndolos de la trampa del demonio que lostiene cautivos al servicio de su voluntad F4 +m', '=ssJ2 18 c#mo se va a re4ar entoncespor aquellos, que "a de ning;n modo pueden convertirse de la iniquidad a las obras dela justicia2

    M &o se re4a por los hombres condenados al fuego eterno por la misma ra4#n por laque, en el tiempo presente, no se re4a por el diablo ni por sus 5ngeles destinados alsuplicio eterno18 cu5l es la ra4#n por la que en el tiempo presente los hombres santosno re4an por los difuntos infieles e imp%os, sino porque saben que "a han sidodestinados al suplicio eterno " quieren evitar que su oraci#n care4ca de mrito ante la

    mirada de aquel jue4 justo2

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    +i ahora, los justos que todav%a viven, no tienen ninguna compasi#n de los injustosmuertos " condenados, cuando ellos mismos se reconocen a;n susceptibles de ser

    ju4gados a prop#sito de su propia carne, cuanto m5s severamente van a mirar lostormentos de los malvados en aquel momento, cuando, "a libres de todo vicio decorrupci#n, se adherir5n m5s %ntima " estrechamente al que es la justicia or el hecho

    de que se adhieren al just%simo jue4, la fuer4a de la severidad absorbe de tal modo susesp%ritus, que no sienten ninguna complacencia por lo que se aparta Apor m%nimo queseaA de esa norma interior

    XLVII. 1mo se puede decir que el alma es inmortal, si consta

    que es casti$ada con la muerte2

    EDRO: &o tengo nada que contestar a un argumento tan claro ero ahora, otracuesti#n ocupa mi mente 1?#mo se puede decir que el alma es inmortal, cuandosabemos que debe morir en el fuego eterno2

    ' GREGORIO: uesto que ha" dos modos de hablar de la vida, tambin ha" queentender la muerte de dos modos orque una cosa es vivir en Dios, " otra vivir comoseres creados o tambin: una cosa es vivir como bienaventurados, " otra, vivir en ra4#nde nuestra esencia or eso el alma es mortal e inmortal: mortal, porque puede perder lavida de la bienaventuran4a, inmortal, porque nunca deja de vivir en ra4#n de su esenciani puede perder la vida de su naturale4a, ni siquiera condenada a la muerte perpetua3ll%, pierde el estado de la bienaventuran4a " no pierde el ser 3s% se ve siempre

    obligada a sufrir una muerte sin muerte, una privaci#n sin privaci#n, " un fin sin fin, encuanto para ella la muerte resulta ser inmortal, la privaci#n inagotable, " el fin infinito

    / EDRO: 3nte esta ineplicable sentencia de condenaci#n, 1quin al llegar a lamuerte, cualquiera ha"a sido su conducta, no se sentir5 invadido de terror2 orque,incluso sabiendo lo que ha hecho, todav%a no sabe con qu agude4a ser5n ju4gados susactos

    XLVIII. Un hombre santo que se aterrori/ al lle$ar a la muerte

    GREGORIO: Es como t; dices ero muchas veces "a s#lo el miedo purifica lasalmas de los justos de sus faltas m%nimas en el momento de su partida ?omo "o,tambin t; lo has o%do contar con frecuencia respecto de cierto hombre que era un santo3l llegar a la hora de la muerte, se sinti# invadido por un temor tremendo, pero despusde su muerte se apareci# a sus disc%pulos con una vestidura blanca, " les hi4o saber concu5nto honor hab%a sido recibido

    XLIX. "l$unos, al morir, son alentados por una reelacin a no tener miedo% los

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    mon(es "ntonio, M-rulo y &uan

    3 veces, sin embargo, Dios omnipotente alienta previamente con determinadasrevelaciones a las almas de los temerosos, para que no tengan ning;n miedo en el

    momento de la muerte

    ' En el monasterio viv%a conmigo un tal hermano 3ntonio, que diariamente con muchasl5grimas suspiraba por las alegr%as de la patria celestial Estudiaba con mucha aplicaci#n" con gran fervor los tetos de la sagrada Escritura &o buscaba en ella los conceptos dela erudici#n, sino el llanto de la compunci#n Ecitada as%, su alma se enardec%adespreciando las cosas de aqu% abajo, para volar mediante la contemplaci#n hacia lasregiones de la patria celestial

    / En una visi#n nocturna se le dijo: )Brep5rate a partir, porque as% lo manda el +e$orC.3l objetar que no ten%a los medios para el viaje, o"# de inmediato la respuesta: )+i terefieres a tus pecados, te han sido perdonados. O"# esto por primera ve4, " se qued#temblando de miedo a noche siguiente fue advertido de nuevo con las mismas

    palabras uego, al cabo de cinco d%as fue arrebatado por la fiebre, " mientras todos loshermanos lloraban " re4aban, muri#

    7 Otro hermano del mismo monasterio, de nombre -rulo, estaba enteramenteentregado a las l5grimas " a las limosnas ?asi nunca interrump%a su salmodia, eceptocuando alimentaba su cuerpo o entregaba sus miembros al sue$o En una visi#nnocturna se le apareci# una corona de flores blancas, que desde el cielo descend%a sobre

    su cabe4a ronto ca"# enfermo " muri# en gran pa4 " alegr%a de esp%ritu

    = !unto a su sepulcro, catorce a$os m5s tarde, edro, que actualmente es el superior delmonasterio, quiso preparar su propia sepultura 3firma que del sepulcro de -ruloeman# una fragancia tan deliciosa, como si all% hubieran sido concentrados los aromasde todas las flores De este modo result# patente la veracidad de lo que aquel hab%a vistoen su visi#n nocturna

    H En el monasterio viv%a tambin otro hermano, de nombre !uan, un joven dotado deecelentes cualidades, mu" por encima de su edad por su inteligencia " humildad, su

    seriedad " delicade4a 3 causa de una enfermedad le lleg# la hora de su muerte En unavisi#n nocturna se le apareci# un anciano que, toc5ndolo con una vara, le dijo:)Bev5ntateC or esta enfermedad no vas a morir ero mantente preparado, porque "ano te quedar5s aqu% durante mucho tiempo. Entonces l, despus de haber sidodesahuciado por los mdicos, se cur# de inmediato " recuper# sus fuer4as ?ont# lo quehab%a visto " se entreg#, durante dos a$os, al servicio de Dios comport5ndose, comoantes dije, mu" por encima de su edad

    K 9ace tres a$os muri# un hermano " lo enterramos en el cementerio del monasteriouego todos nos retiramos del lugar " !uan, seg;n cont# despus, p5lido " tembloroso,

    permaneci# all% 3l alejarnos nosotros, fue llamado desde el sepulcro por el hermanoque hab%a muerto +u fin, que no tard# en llegar, confirm# pronto lo que hab%a dicho:die4 d%as despus fue abatido por la fiebre " liberado de su carne

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    L. Si los sue3os deben ser tenidos en cuenta, y cu+ntas clases

    de sue3os eisten

    EDRO: Luisiera saber si ha" que tener en cuenta lo que se ve en las visionesnocturnas

    ' GREGORIO: 9a" que tener presente, edro, que las im5genes de los sue$os llegan alalma de seis maneras 3lgunas veces los sue$os se originan por el est#mago, lleno ovac%o otras por una ilusi#n, o por una reflei#n " una ilusi#n o tambin por unarevelaci#n, o por una reflei#n " una revelaci#n as dos primeras clases quemencionamos, todos las conocemos por eperiencia 8 las otras cuatro, las encontramos

    en las p5ginas de la +agrada Escritura

    / +i los sue$os no fueran producidos com;nmente por el enemigo oculto mediante unailusi#n, seguramente el sabio no dir%a: Los sueos han e%traviado a muchos quecayeron por esperar en ellos F-i /7, KJ o tambin:

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    fin al alma por medio de una sola mentira

    LI. 'l hombre a quien se le prometi en sue3os una lar$a ida,

    y que al poco tiempo muri

    3lgo as%, sin ninguna duda, le sucedi# hace poco a uno de nuestros amigos El prestabaa los sue$os una atenci#n ecesiva or un sue$o vio que se le promet%a una vida mu"

    prolongada Despus de haber reunido mucho dinero para cubrir los gastos de una vidadispendiosa, muri# tan repentinamente que dej# todo intacto, sin llevar consigo ni lam5s m%nima ganancia provechosa

    LII. 1's enta(oso para las almas que sus cuerpos sean sepultados

    en una i$lesia2

    EDRO: Recuerdo a quien te refieres ero te ruego que terminemos lo que hemosempe4ado 19emos de pensar que ser5 de alg;n provecho para las almas, si sus cuerposhan sido sepultados en las iglesias2

    ' GREGORIO: ara los muertos que no se sienten oprimidos por pecados graves, lasepultura en una iglesia es ;til porque sus familiares, cada ve4 que se re;nen en esoslugares sagrados, al ver sus sepulcros, se acuerdan de ellos " dirigen por ellos susoraciones al +e$or ero respecto de los que tienen pecados graves, la sepultura de suscuerpos en las iglesias no les merece ninguna absoluci#n, sino m5s bien les aumenta elcastigo

    *odo esto se eplica mejor, si mencionamos brevemente algunos ejemplos recientes

    LIII. Una reli$iosa enterrada en la i$lesia del m+rtir san Loren/o,

    y que apareci medio quemada

    El venerable

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    de las llamas, como si all% la mujer hubiera sido reducida a ceni4as por un fuegomaterial

    / ?on este suceso se da a entender con claridad que aquellos, cu"os pecados no han

    sido perdonados, no encuentran en los lugares sagrados ninguna a"uda para evitar eljuicio

    LIV. 'l entierro del patricio Valeriano

    !uan, el -agn%fico, subprefecto en nuestra ciudad " cu"a veracidad " seriedadconocemos, me ha contado que en la ciudad de rescia hab%a muerto el patricio@aleriano El obispo de la ciudad, habiendo recibido el precio conveniente, le concedi#

    un lugar en la iglesia para la sepultura@aleriano vivi# mu" ligera " fr%volamente hasta en su m5s avan4ada edad, sin

    preocuparse de poner l%mite a sus vicios

    ' En la misma noche de su sepultura, el bienaventurado m5rtir

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    estridentemente os sacristanes, aterrori4ados, volvieron a sus camas

    / 3 la ma$ana, cuando abrieron el sepulcro en el que @alentino hab%a sido puesto, noencontraron su cuerpo uscaron fuera de la iglesia el lugar adonde podr%a haber sido

    arrojado " lo encontraron en otro sepulcro con los pies a;n atados, tal como hab%a sidoretirado de la iglesia

    7 De este suceso, edro, has de sacar la conclusi#n de que quienes son oprimidos porpecados graves, si hacen que se los entierre en un lugar sagrado, deben esperar queser5n ju4gados adem5s por su presunci#n, sabiendo que los lugares sagrados no losliberan, sino m5s bien los acusan de su pecado de temeridad

    LVI. 'l cuerpo de un tintorero enterrado en la i$lesia, y despu-sno encontrado

    9e aqu% lo que tambin ocurri# en nuestra ciudad &umerosos tintoreros que habitanaqu% son testigos de ello 9abiendo muerto el presidente de su corporaci#n, fuesepultado por su mujer en la iglesia del bienaventurado m5rtir !enaro, junto a la puertade san oren4o ero durante la noche, despus del entierro, el sacrist5n o"# gritar alesp%ritu del difunto: )B-e quemoC B-e quemoC. Durante mucho tiempo profiri# estosgritos El sacrist5n se lo comunic# a su esposa

    ' Ella envi# a algunos hombres de su oficio a la iglesia, para que se cercioraranminuciosamente acerca del asunto Luer%a saber en qu estado se hallaba el cuerpo en elsepulcro, de donde hab%an salido tales gritos 3brieron el sepulcro " encontraron losvestidos intactos Estos siguen siendo conservados hasta el momento presente en laiglesia, para que sirvan de testimonio del suceso ero en cuanto a su cuerpo, no

    pudieron encontrarlo de ninguna manera, como si no hubiera sido depositado en esesepulcro

    / De este hecho, se puede deducir el grado del escarmiento con que fue condenada el

    alma de este hombre, cu"a misma carne fue arrojada de la iglesia or consiguiente,1para qu son ;tiles los lugares sagrados a los ah% enterrados, cuando por disposici#ndivina los indignos son arrojados de all%2

    LVII. Lo que puede ayudar a liberar a las almas despu-s

    de la muerte% el sacerdote de entumcellae a quien el esp#ritu

    de un hombre le pidi que lo ayudara despu-s de su muerte

    con la sa$rada hostia% el alma del mon(e &usto

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    EDRO: Entonces, 1qu es lo que podr%a a"udar efica4mente a las almas de losmuertos2

    ' GREGORIO: +i las culpas despus de la muerte no son imperdonables, la sagrada

    ofrenda de la hostia salv%fica suele a"udar mucho a las almas, tambin despus de lamuerte, a tal punto que no pocas veces las mismas almas de los difuntos parecen pediresto mismo

    / El obispo

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    (n monje, de nombre !usto, que hab%a estudiado medicina, sol%a atenderme condiligencia " velarme en mis constantes enfermedades, cuando "o viv%a en el monasterio

    ?a"# enfermo " lleg# a su fin Durante su enfermedad lo atend%a su propio hermano, denombre ?opioso, que a;n actualmente, aqu% en la ciudad de Roma, se gana la vidaejerciendo el arte de la medicina

    !usto, d5ndose cuenta de que llegaba a su fin, confi# a su hermano ?opioso que ten%aescondidas tres monedas de oro o cual, evidentemente, no pod%a quedar oculto a loshermanos 3veriguando minuciosamente " revisando todos sus medicamentos,encontraron las tres monedas de oro escondidas entre sus remedios

    N El hecho me fue comunicado en seguida, " no pude tolerar con moderaci#n un maltan grave en un hermano, que hab%a vivido en comunidad con nosotros orque la Reglade nuestro monasterio fue siempre que todos los hermanos vivieran comunitariamente a

    tal punto, que nadie tuviera el derecho de poseer algo en propiedad

    Entonces, invadido por una gran triste4a, me puse a pensar qu medidas deb%a tomar quesirvieran de epiaci#n al moribundo " de ejemplo a los hermanos

    9ice llamar a recioso, el prior del monasterio, " le dije: 0B@eC BLue ninguno de loshermanos se acerque al moribundo, ni ste reciba de ninguno de ellos palabra alguna deconsueloC 8 cuando al llegar el momento de la muerte reclame la presencia de loshermanos, que su hermano ?opioso le diga que, por las monedas que guardaba a

    escondidas, es abominado de sus hermanos 3s% al menos frente a la muerte, laamargura causada por su culpa traspasar5 su alma " ser5 purificado del pecado que hacometido 8 cuando ha"a muerto, que no lo entierren con los hermanos, sino hagan unafosa en cualquier parte del estercolero, arr#jenlo all%, tiren sobre l las tres monedas deoro que ha dejado, " clamen todos juntos: )BLudese contigo tu dinero para tu

    perdici#nC. uego, c;branlo con tierra6

    ' De este modo, ambas medidas resultar%an provechosas: una para el moribundo " laotra para los hermanos vivos a aqul la amargura de la muerte lo har%a arrepentirse desu culpa, " la condena tan severa de la avaricia impedir%a a stos ser arrastrados al

    pecado

    / 3s% se hi4o ?uando este monje lleg# al borde de la muerte " ansiosamente trat# deencomendarse a los hermanos " ninguno de ellos se dign# acerc5rsele " hablarle, suhermano ?opioso le eplic# por qu hab%a sido abominado de todos De inmediatodeplor# profundamente su falta, " con esta triste4a dej# esta vida

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    considerando con profundo dolor sus suplicios, empec a buscar un remedio que lolibrara de ellos Entonces llam otra ve4 a recioso, el prior de nuestro monasterio, " ledije con triste4a: )8a hace tiempo que aquel hermano que falleci#, es atormentado por elfuego e debemos un servicio de caridad " a"udarlo en lo posible a que se salve @e,entonces, " ha4 que, a partir de ho" durante treinta d%as seguidos, se ofre4ca por l el

    sacrificio Lue no pase ning;n d%a sin que se inmole la hostia salv%fica para que seaabsuelto. recioso se retir# en seguida " obedeci#

    = &osotros, mientras tanto, nos ocupamos de otros asuntos, sin contar los d%as quepasaron (na noche, el hermano que hab%a fallecido, se apareci# a su hermano ?opiosoen una visi#n 3l verlo, ste le pregunt#: )1Lu pasa, hermano2 1?#mo est5s2. 8 l lerespondi#: )9asta este momento estuve mal, pero ahora "a esto" bien, porque ho" recib%la comuni#n.

    H ?opioso fue en seguida a informar a los hermanos del monasterio os hermanoscontaron cuidadosamente los d%as, " ese era el d%a en que por trigsima ve4 se hab%areali4ado la oblaci#n por !usto ?opioso no sab%a lo que los hermanos hab%an hecho porel difunto " los hermanos ignoraban lo que ?opioso hab%a visto respecto de l En unmismo e idntico instante, ?opioso se enter# de lo que hab%an hecho los hermanos, "ellos se enteraron de lo que l hab%a visto, " as%, ante la coincidencia de la visi#n " delsacrificio, se hi4o patente que el hermano difunto se hab%a liberado del suplicio gracias ala hostia salv%fica

    K EDRO: BEs del todo admirable lo que esto" o"endo, " me alegro de todo cora4#nC

    LVIII. La ida y el tr+nsito del obispo asio

    GREGORIO: ?on el fin de que no pongamos en duda las palabras pronunciadas por losmuertos, stas son confirmadas por los hechos de los vivientes

    ?asio, un hombre de vida venerable " obispo de &arni, ten%a por costumbre ofrecer aDios diariamente el sacrificio, " a la ve4 se inmolaba con l5grimas durante el misteriode ese sacrificio -ediante una visi#n de uno de sus presb%teros recibi# del +e$or la

    siguiente orden: )9a4 lo que est5s haciendo, " trabaja en lo que est5s trabajando Lueno descanse tu pie, " que no descanse tu mano En la fiesta de los 3p#stoles vendr5sjunto a m%, " "o te dar tu recompensa.

    ' 3l cabo de siete a$os, en la fiesta de los 3p#stoles, despus de haber celebrado lamisa solemne " recibido el misterio de la santa comuni#n, sali# de su cuerpo

    LIX. 'l prisionero de $uerra cuyas cadenas se desataban

    a la hora de la oblacin% y el marinero Varaca salado del nau!ra$io por la hostia

    sal#!ica

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    *ambin o%mos hablar de un hombre que hab%a sido llevado cautivo por los enemigos "atado con cadenas +u mujer ten%a por costumbre, en determinados d%as, ofrecer por l elsacrificio Despus de mucho tiempo volvi# junto a ella " le cont#, en qu d%as se lehab%an desatado sus cadenas, " ella se dio cuenta de que eran los mismos d%as en quehab%a ofrecido el sacrificio por l

    Este hecho se ve confirmado con toda seguridad por otro an5logo, ocurrido hace sietea$os

    ' 3gat#n, el obispo de alermo, Aas% me lo han atestiguado " siguen atestigu5ndolomuchos feligreses " hombres piadososA cuando recibi# de parte de mi predecesor, defeli4 memoria, la orden de presentarse en Roma, tuvo que soportar un violento temporal,de modo que se preguntaba si podr%a escapar del peligro tan grande de las olas (no delos marineros, de nombre @araca, actualmente integrado en el clero de la Iglesia dealermo, dirig%a la canoa detr5s de la nave 3l romperse el cable de la canoa, elmarinero con su embarcaci#n desapareci# de repente entre las crestas de las olas a

    nave, presidida por el obispo, lleg# por fin, despus de muchos peligros " gravementeaveriada por el oleaje, a la isla de (stica

    / 3l tercer d%a, el obispo, al no ver aparecer en el mar por ninguna parte a su marinero,que hab%a sido arrastrado con su embarcaci#n, se afligi# mucho, cre"endo que hab%amuerto ?omo un deber de caridad, quiso hacer por el muerto, lo ;nico que le era

    posible, es decir, dio la orden que se ofreciera a Dios omnipotente, por la absoluci#n desu alma, el sacrificio de la v%ctima salv%fica Despus de haber ofrecido el sacrificio "restaurado la nave, volvi# a Italia 3l llegar al puerto de Roma, el obispo encontr# all% almarinero que daba por muerto +e alegr# por un go4o tan inesperado " le pregunt# c#mo

    hab%a podido vivir, durante tantos d%as, en medio de aquel mar tan peligroso

    7 Entonces l cont# que cuantas veces hab%a sido sacudida por las olas de aquellatempestad la canoa que guiaba, siempre hab%a flotado en sta llena de agua, " cuantasveces ella se hab%a dado vuelta de arriba para abajo, l se hab%a sentado en la quilla 8agreg# de qu manera la misericordia divina lo hab%a salvado mientras hac%a esoincesantemente, d%a " noche, con sus fuer4as "a agotadas por el hambre " la fatiga

    = Dio entonces la eplicaci#n que sigue afirmando hasta ho": )Estaba luchando en

    medio de las olas, desfalleciente, cuando de repente mi cabe4a se sinti# pesada, " "a nosab%a si el sue$o me hab%a vencido o si estaba despierto 8 he aqu% que, mientras meencontraba en medio del mar, alguien se me apareci# " me trajo un pan para comer3penas lo com%, recobr mis fuer4as 8 despus, no lejos, pas# un nav%o que me rescat#del peligro de las olas " me condujo a tierra.

    3l o%r esto, el obispo averigu# el d%a, " se enter# que era el mismo d%a en que elpresb%tero, en la isla de (stica, inmol# por l a Dios omnipotente la hostia de laoblaci#n sagrada

    H EDRO: o que me est5s narrando, lo supe "o tambin cuando me hallaba en +icilia

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    GREGORIO: ?reo que esto sucede tan notoriamente a los vivientes que lo ignoran, paramostrar a todos los que hacen la oblaci#n " lo ignoran, que si las culpas no fueranimperdonables, la v%ctima de la sagrada oblaci#n puede ser ;til para absolver incluso alos muertos ero ha" que saber que estas v%ctimas sagradas pueden beneficiar

    ;nicamente a aquellos difuntos que, durante su vida, merecieron ser a"udados tambindespus de su muerte, por las buenas obras que otros hacen por ellos aqu% en la tierra

    LX. 'l poder misterioso de la #ctima sal#!ica

    &o obstante debemos pensar que el camino m5s seguro es hacer uno mismo en esta vidael bien que se podr%a esperar para s% de la benevolencia de los dem5s, despus de lamuerte Evidentemente ha" ma"or felicidad en partir de aqu% libre, que en suspirar porla libertad despus de haber dejado las cadenas or eso debemos despreciar de todocora4#n el mundo presente, por lo menos al ver que va pasando, e inmolar a Dios conl5grimas nuestros sacrificios de cada d%a, " cada d%a inmolar las hostias de su carne " desu sangre

    ' Esta v%ctima salva al alma de la muerte eterna de una manera incomparable, porquerenueva para nosotros en el misterio la muerte del (nignito, quien aunque despus deresucitar, no muere ms, porque la muerte ya no tiene poder sobre l FmH,J, sinembargo, viviendo en s% mismo de un modo inmortal e incorruptible, es inmolado pornoPsotros de nuevo en este misterio de la oblaci#n sagrada 3qu%, entonces, se consume

    su cuerpo, se parte su carne para la salvaci#n del pueblo, " se derrama su sangre no "apor las manos de los infieles, sino en la boca de los fieles

    / ensemos, por eso, cu5l debe ser para nosotros este sacrificio que, para nuestraabsoluci#n, siempre imita la asi#n del 9ijo unignito orque, 1quin de entre losfieles puede dudar de que a la hora precisa de la inmolaci#n, a la vo4 del sacerdote, seabren los cielos, est5n presentes en el misterio de !esucristo los coros de los 5ngeles, seune lo %nfimo con lo supremo, se junta lo terreno con lo celestial, " se funden en uno lovisible " lo invisible2

    LXI. 4ace !alta a!li$ir el cora/n durante los santos misterios

    y i$ilar el esp#ritu despu-s de la compuncin

    ero es necesario, cuando hacemos esto, que nos inmolemos a nosotros mismos a Diosmediante la contrici#n del cora4#n, porque cuando celebramos los misterios de laasi#n del +e$or, debemos imitar lo que hacemos Entonces ser5 una verdadera hostiaofrecida a Dios por nosotros, si hace de nosotros mismos una hostia

    ' ero tenemos que esfor4arnos, tambin despus de los tiempos de la oraci#n, por

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    mantener el esp%ritu en su gravedad " en su vigor, en cuanto podemos hacerlo con lagracia de Dios, no sea que pensamientos fluctuantes lo debilite, que una ligere4ainsensata se deslice dentro del alma, " que sta pierda el mrito de la compunci#n por lanegligencia de esos pensamientos fluctuantes