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Monografia
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Introducción:
A diferencia de lo que ocurría hace 100 años, en la sociedad actual resulta bastante fácil para
las personas acceder en cada momento a la información que se les requiere (siempre que
dispongan de las infraestructuras necesarias y tengan las adecuadas competencias digitales; en
este caso: estrategias para la búsqueda, valoración y selección de información).
Del amplio porcentaje de ciudadanos que tienen acceso y manejan la computadora para
navegar en un mundo que aunque sea prácticamente lejano resulta virtualmente cercano, solo
un pequeño grupo tiene las competencias necesarias para discernir con una mirada crítica la
información que encuentran.
No obstante, y también a diferencia de lo que ocurría antes, ahora la sociedad está sometida a
vertiginosos cambios que plantean continuamente nuevas problemáticas, exigiendo a las
personas múltiples competencias procedimentales (iniciativa, creatividad, uso de herramientas
tecnológicas , estrategias de resolución de problemas, trabajo en equipo, entre otras) para
crear el conocimiento preciso que les permita afrontarlas con éxito.
Por ello, hoy en día el rol de los formadores no es tanto “enseñar” conocimientos que tendrán
una vigencia limitada y estarán siempre accesibles, como ayudar a los estudiantes a “aprender
a aprender” de manera autónoma en esta cultura del cambio y promover su desarrollo
cognitivo y personal mediante actividades críticas y aplicativas que, aprovechando la inmensa
información disponible y las potentes herramientas tecnológicas, tengan en cuenta sus
características (formación centrada en el alumno) y les exijan un procesamiento activo
e interdisciplinario de la información para que construyan su propio conocimiento y no se
limiten a realizar una simple recepción pasiva-memorización de la información con el
consecuente peligro que ello implica.
Es pertinente considerar que el/la fonoaudiólogo/a en algún punto deberá llevar a cabo una
tarea pedagógica si quiere que su paciente desarrolle la habilidad o ejercite adecuadamente la
terapia, ya que es un profesional de la salud y/o educación, que realiza la prevención,
evaluación, diagnóstico y tratamiento en diferentes áreas de la comunicación: lenguaje, habla,
voz y audición.
Por esto en este trabajo, parto de la siguiente hipótesis: en la actualidad las personas
encargadas de llevar a cabo la tarea pedagógica, son o deben ser las promotoras de la
construcción del saber por parte del sujeto.
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Desarrollo:
El mundo actual es un mundo surcado por las nuevas tecnologías y por la información, eso
supone un cambio cualitativo para las dimensiones sociales, laborales, familiares y
educativas. Surge la necesidad de preparar trabajadores cualificados, se dan nuevos tipos de
familias y relaciones y por supuesto nuevas formas de alcanzar competencias adecuadas a
las exigencias sociales.
En este siglo “globalizado” las exigencias para con la educación son muy distintas a las de
épocas pasadas, es necesario aprender idiomas, dominar herramientas electrónicas e
informáticas, requiere de una formación con amplias competencias en lo personal, en lo
social y en lo laboral. Es necesario poseer la capacidad de planificar, de supervisar, y de
revisionar la práctica propia con un pensamiento crítico y creativo.
Es evidente que los centros dedicados a la educación deben cambiar para estar a la altura
de las circunstancias, para ser instituciones que respondan a las necesidades y a las personas
que van a vivir en el futuro.
Esta reforma se está viviendo, a veces, con incertidumbre en todas las etapas del sistema
educativo, desde la escolaridad obligatoria donde las reformas se suceden cada vez más
rápidamente, hasta la educación universitaria donde se produce de manera sistemática un
replanteamiento de los objetivos y metodologías de enseñanza.
Como las instituciones educativas están formadas y sostenidas, entre otros actores, por los
docentes es importante delinear un perfil acorde con las necesidades del mundo actual.
Durante un reportaje del diario “El Litoral.com” Enrique Bambozzi manifiesta cuando se le
pregunta:
¿Cuáles son las falencias más notorias que encontrás en el trabajo en el aula?:
-Se habla permanentemente de que los problemas de hoy son, en los jóvenes, la falta de
lectura, la incapacidad para comprender un texto o asociar ideas.
¿Se ven estos problemas en tu trabajo cotidiano?
-La pregunta es muy buena porque yo tengo experiencia de trabajar en la universidad privada
y en la pública […] y esto es pertinente porque también dirijo y trabajo en proyectos de
investigación […] donde justamente el tema es la articulación universidad-escuela media, las
competencias de ingreso y la permanencia en la educación superior […].
Lo que nosotros estamos investigando parte de la pregunta acerca de cuáles son las causas de
que muchos alumnos fracasen en el ingreso a la educación superior. Partimos de una premisa
común: de que la realidad es compleja y que no hay una causa única.
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Pero, a la hora de focalizar nuestra unidad de análisis, lo que vemos es lo siguiente: que la
política educativa focaliza el éxito de sí misma a través de los contenidos. Tenemos todavía
una política educativa concentrada en la cuestión de los contenidos, que sería como una
traducción posmoderna del Enciclopedismo […] En algunos estudios se sostiene que hay que
poner los problemas educativos en relación con el ausentismo, la falta de autoridad, la
indisciplina, los edificios escolares, etcétera. Y no aparece como un problema de primer lugar
el de los contenidos. Lo que planteamos nosotros, como grupo de investigación, es que las
culturas institucionales deberían generar otro tipo de competencias, más allá de la cuestión de
los contenidos.
Nuestra tesis es justamente que el ingreso a la universidad lo definen competencias que no
pasan exclusivamente por los contenidos disciplinares, pero que gravitan en el ingreso: se
trata de las competencias genéricas y las competencias específicas […] pero los contenidos no
son “el” tema central.
La calidad tiene que ver con generar dispositivos que se vinculen con -y recuperen- las
culturas juveniles: hoy, algo ausente en las prácticas es pensar los contenidos para los
alumnos que no se comunican telefónicamente, sino vía blog […] es decir, lo que para mí fue
objeto de estudio, para ellos es parte de su mundo de la vida cotidiana, de su entorno de vida
[…] El problema, muchas veces, es que faltan recursos: para aprender Geografía los chicos
van a Google Earth, y al otro día el profesor despliega el mapa en el aula con el que me
enseñaron a mí, hay una no-correspondencia […]
Muy probablemente, ese docente tenga problemas de indisciplina porque no usa el código
para comunicarse con los alumnos […] Los alumnos pueden tener déficits en Lengua y
Matemática, pero si nosotros ponemos eso al lado de cómo hoy los alumnos decodifican
lenguajes digitales o virtuales, las cosas no están tan mal […] yo digo que tenemos docentes
analfabetos con chicos informatizados.”1
En momentos de cambio como los que estamos viviendo (y que previsiblemente serán
cambios continuos) no está de más tener fundamentos sólidos, principios educativos a los
que aferrarse, una formación básica profunda desde la que abordar con sensatez los desafíos
sociales y educativos que los nuevos tiempos están planteando a la escuela y a la educación
en general.
Paulo Freire es una de esas fuentes a la que podemos y debemos acercarnos en busca de
principios educativos desde los que abordar la reflexión y la acción transformadora de la
educación y de los docentes en su formación. Y no como una opción más, sino que sus
1 http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2009/06/07/educacion/EDUC-03.html
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aportes son clave para los nuevos retos educativos actuales y los que se avecinan, a los que
no se puede hacer frente más que desde una actitud dialógica, tanto de las propias
relaciones de los centros educativos con su entorno (familias, barrio, ciudad, etc.) en un
proceso de transformación de las escuelas, como del propio proceso de aprendizaje que se
lleva a cabo dentro y fuera de las aulas.
Para afrontar estos retos, Freire es una referencia obligada y a pesar de que hay quien sigue
pensando que este autor tuvo su razón de ser en los años 60 y 70 del siglo pasado, pero que
en la actualidad ha sido superado por nuevos aportes de autores más recientes, la realidad
confirma la vigencia de las ideas de brasilero.
Él es, sin duda, uno de los pedagogos más importantes del siglo XX y nos deja un legado de
ideas y prácticas que todavía no han sido ni estudiadas con la profundidad que se merecen,
ni han impregnado la práctica profesional como el paso de los años irá haciendo. Freire fue
una persona adelantada a su tiempo, y seguirá siendo novedoso para nosotros por muchos
años.
Es oportuno mencionar las ideas fuerza que han marcado el pensamiento de Freire y que
siguen siendo de gran actualidad:
1. La educación no es ajena a la realidad sociopolítica:
Crea una pedagogía global que relaciona educación, política, imperialismo y liberación, y
que gran parte de los educadores todavía deben descubrir2.
2. Aprendizaje dialógico:
El aprendizaje dialógico “nadie ignora todo, nadie sabe todo” que nos plantea es mucho
más que un aprendizaje significativo. Es una acción global que permite a los sujetos
descubrirse a sí mismos y tomar conciencia del mundo que les rodea3.
La unidad dialéctica entre aprender-enseñar, introduce una perspectiva sociocrítica en el
proceso de conocer y hace de la comunicación entre sujetos el instrumento para la
apropiación de un conocimiento activo y crítico.
3. Revolución cultural:
Dice Freire que “toda revolución, si es auténtica, es necesariamente una revolución
cultural”4.
La liberación de un país exige su liberación cultural, para entender lo que está sucediendo,
descubrir el origen del problema, y ser capaz de organizarse para buscar respuestas.
2 Freire, P. La naturaleza política de la educación. Barcelona: Paidós, 19903 Freire Pedagogía del Oprimido, pg. 105.4 Freire Pedagogía del Oprimido, pg. 237.
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4. Creencia en la persona:
Nadie es analfabeto para siempre y todos somos alfabetizandos, somos personas que
estamos en continua formación, estamos en movimiento, estamos andando, estamos
aprendiendo.
5. El poder del amor:
Otro aspecto a destacar es su insistencia, sin ninguna vergüenza, en la importancia del
poder del amor. El amor es la característica esencial para el diálogo, por eso se tiene que
dar siempre entre iguales, y no en relaciones de dominación
6. Educación bancaria y educación liberadora:
Entiende por educación bancaria aquella en el que el profesor es el que sabe y los alumnos
tienen que aprender lo que no saben. Negando la educación como proceso de búsqueda.
La educación liberadora la entiende cómo educar al hombre en libertad, y por tanto exige la
creación de personas responsables. Nadie tiene el saber total y nadie es un ignorante
absoluto. Todos aprendemos de todos si estamos abiertos a ello.
Los conocimientos nuevos, deben llevar a hacerse preguntas (educación problematizadora).
Educación con el educando y no para el educando.
Educandos y educadores se distancian del mundo para analizarlo mejor, y posteriormente
volver a él. Se trata de una pedagogía que nos invita a analizar y transformar el mundo.
7. Concientización-acción:
Para Freire alfabetizar es concientizar, crear y recrear colectivamente lecturas del mundo. Y
concientización es aprender a reflexionar, junto con los demás, acerca del mundo tal como
es experimentado.
8. La palabra:
Se requiere una filosofía de la educación que piense desde el oprimido y no para el
oprimido. Una educación encaminada a romper la cultura del silencio, una educación
concebida como una acción cultural dirigida al cambio, a través de la concienciación de las
personas, cuyo primer alcance es lograr que las personas aprendan a pronunciar sus propias
palabras y no a repetir las palabras de otros.
Por medio de la comunicación legítima, a través del diálogo, el individuo se transforma en
sujeto constructor de su propia historia.
Junto a Freire, otro autor, Otto Friedrich Bollnow profundiza sobre la tarea que debe llevar
a cabo el docente y dice que debe partir del compromiso con lo que enseña, tiene que abrir
la esfera íntima de su alma a sus alumnos como único camino posible para establecer el
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encuentro. Esto no significa hablar de sí mismo y de su vida interior, sino trasmitir aquello
que se encuentra tan unido a su interioridad que descubre su propio sentir al hablar de ello.
Leopold Prohaska, principal exponente de la pedagogía del encuentro, coincide con esta
apreciación de la tarea docente “Solamente tiene valor para la formación del carácter una
decisión tomada por el propio sujeto”5, acompañando por detrás al educando para dejar que él
construya y modele su destino, es decir que su misión consiste en ayudar con todo su saber y
su poder a los padres en su deber educativo primordial.
El punto de partida es el reconocimiento en el hombre de una dimensión que trasciende lo
físico y lo psíquico, es el espacio neumatológico donde se halla el perfeccionamiento y la
integración.
Fritz Marz, en su pedagogía existencial, dice que el docente debe conducir al discípulo hacia
donde vaya su propia conciencia. “El educador puede definirse como un ser que está junto a
otro en el camino; el educador es esencialmente indicador y compañero de camino”6.
Señalando lo digno de ser imitado. Ayudando a la formación de la personalidad.
El educador cumple su tarea cuando logra que el discípulo escuche la voz de su conciencia,
siendo el único método válido para lograrlo el amor y para ello el camino a seguir es
fidelidad a la realidad, encuentro con los valores y apertura al mundo.
Víctor García Hoz, en su concepción educativa, enuncia la tarea docente diciendo que su
función está en el estímulo a la actividad de los estudiantes, que son el principal agente de la
educación.
La relación entre el que enseña y el que aprende es la comunicación objetiva donde ambos
enfrentan juntos el proceso de conocer. La acción es orientadora hacia el educando.
El maestro es el depositario de la verdad, pero la más alta verdad está en la fe, y la fe proviene
de oír, por eso el maestro a través de la palabra debe lograr que se enfrente el espíritu con la
realidad y luego dejar que el alumno pueda comprender esa realidad.
El docente debe actuar como estímulo, como orientador y después, realizar un control del
trabajo del alumno.
Él considera que es necesario llegar a una educación “total” de la persona, y sostiene que los
cambios tecnológicos que está sufriendo la sociedad, repercuten directamente sobre la
educación y nos advierte del peligro de caer en un reduccionismo cientificista dejando a un
lado la dimensión humana de la educación.
5 Prohaska, Leopold: Pedagogia del Encuentro. Ed Herder, Barcelona 19706 Marz, Fritz: Dos ensayos de pedagogía existencial. Ed. Heder, Barcelona 1965, pag 28/29.
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Partiendo del análisis del proceso de formación de la identidad, concluye que existe un
movimiento dual en la persona que lo lleva, por un lado, al conocimiento de su propio ser
(individuación) y, por otro, al encuentro con los otros (socialización).
El descubrimiento de la educación personalizada supone una nueva manera de entender la
educación y el nacimiento de un estilo diferente de ejercer la docencia abierto a la dimensión
más humana de la persona.
Para ello resulta vital reconocer la visión antropológica del autor; su concepción de la persona
como un ser libre y responsable y orientado hacia un sentido vital que se refleja en su
proyecto existencial.
De su educación personalizada se deduce la importancia de presentar los valores como algo
realmente ligado a la vida de los educandos y no como una mera enumeración de actitudes
deseables porque revelan un abismo entre lo que se enseña y la vida real.
En nuestro país Enrique Bambozi sostiene que el docente trabaja con la palabra a los fines de
la enseñanza y la palabra cobra sentido para el alumno (el docente dialogador).
Reflexiona sobre el ejercicio profesional como pedagogo y sobre el campo de la pedagogía,
reconociéndola como dialogante, comprometida con los problemas educativos existentes, con
docentes y alumnos reales, en contextos variados.
A partir de allí se proponen ofrecer una herramienta que posibilite ejercer una vigilancia sobre
lo que enseñamos para introducir una mirada latinoamericana en el conocimiento.
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Conclusión:
Para concluir y considerando la postura de los principales pedagogos, toda persona que se
dedique a la educación de niños y jóvenes en nuestros días deberá, sin ninguna duda, incluir
en su tarea:
Respeto hacia el educando y su saber. Todos nosotros sabemos algo, todos nosotros
ignoramos algo.
El reconocimiento de la realidad del educando como punto de partida y principio en el
proceso de enseñanza-aprendizaje.
La importancia del diálogo como recurso pedagógico. Enseñar exige saber escuchar.
La ciencia y la tecnología deben estar al servicio de la humanización del hombre.
Creer en el cambio social, en la capacidad transformadora del hombre, en una cultura
responsable, creadora de personas libres.
Considerar la importancia de la palabra, que hace al hombre, hombre; y que lleva al proceso
dialógico, y éste conlleva un proceso de escucha.
Entonces el rol del docente es contribuir al crecimiento de las personas entregando
sus conocimientos a las nuevas generaciones y promoviendo el desarrollo integral
incluyendo sus dimensiones biológicas, afectivas, emocionales, etc.
Además debe ser consciente de la labor social que tiene al educar, saber las necesidades
y características de los estudiantes, manejar estrategias y uso de las evaluaciones ya que
este es un proceso.
No cabe duda que hoy el docente debe acompañar el proceso de los estudiantes, hacerlo en
un marco de respeto y de valoración a los otros respetando los derechos individuales
y sociales.
Formar niños, jóvenes y profesionales altamente comprometidos y responsables con su
labor, construir espacios abiertos de aprendizaje, promover el aprendizaje a través de
la investigación, desarrollar valores en nuestros alumnos.
Es basada en estos fundamentos teóricos que confirmo la hipótesis de que en la
actualidad el educador debe ser la persona que promueva en el alumno la adquisición
de capacidades necesarias para construir su propio conocimiento, a través del cual,
podrá delinear su proyecto de vida.