2
Muñeca muerta Author(s): Liliana Ramírez Source: Letras Femeninas, Vol. 22, No. 1/2 (PRIMAVERA-OTOÑO 1996), p. 291 Published by: Asociacion Internacional de Literatura y Cultura Femenina Hispanica Stable URL: http://www.jstor.org/stable/23021218 . Accessed: 17/06/2014 02:36 Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at . http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp . JSTOR is a not-for-profit service that helps scholars, researchers, and students discover, use, and build upon a wide range of content in a trusted digital archive. We use information technology and tools to increase productivity and facilitate new forms of scholarship. For more information about JSTOR, please contact [email protected]. . Asociacion Internacional de Literatura y Cultura Femenina Hispanica is collaborating with JSTOR to digitize, preserve and extend access to Letras Femeninas. http://www.jstor.org This content downloaded from 195.78.108.40 on Tue, 17 Jun 2014 02:36:18 AM All use subject to JSTOR Terms and Conditions

Muñeca muerta

Embed Size (px)

Citation preview

Muñeca muertaAuthor(s): Liliana RamírezSource: Letras Femeninas, Vol. 22, No. 1/2 (PRIMAVERA-OTOÑO 1996), p. 291Published by: Asociacion Internacional de Literatura y Cultura Femenina HispanicaStable URL: http://www.jstor.org/stable/23021218 .

Accessed: 17/06/2014 02:36

Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at .http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp

.JSTOR is a not-for-profit service that helps scholars, researchers, and students discover, use, and build upon a wide range ofcontent in a trusted digital archive. We use information technology and tools to increase productivity and facilitate new formsof scholarship. For more information about JSTOR, please contact [email protected].

.

Asociacion Internacional de Literatura y Cultura Femenina Hispanica is collaborating with JSTOR to digitize,preserve and extend access to Letras Femeninas.

http://www.jstor.org

This content downloaded from 195.78.108.40 on Tue, 17 Jun 2014 02:36:18 AMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions

Resenas

Muneca muerta

Liliana Ramirez Colombia

Tia Teresa esta triste. Solo se despierta a llorar. Tiene los ojos hinchados, hinchados y ya la luna cafe casi no se le ve. Se ha puesto amarilla como el carton y yo creo que es porque a su pieza no le ha

entrado en todo el dia ni una gotica de sol. Parece que no viera ni

oyera. No le importa que el telefono no deje de sonar y la sala este

llena de gentes y de flores. jMi prima Mariana es muy mala! Hacerle

esto a la tia, jsolo por una muneca muerta!

Yo no vi a la Juanita meciendose en el estanque de lavar la ropa. Dicen que se veia muy bonita con sus ojos casi abiertos, la falda como

un globo y su pelo suelto y largo, regado por toda el agua. Nadie sabe

como atardecio ahi.

Mariana se levanto de la siesta y comenzo a buscarla. No estaba

en su pieza con los otros munecos, ni en el cuarto de costura de tia

Teresa, ni en la cocina. Siguio buscando en la sala del televisor, en el

comedor, en el patio. Oyo el goteo en el estanque, vio el agua

cayendo, cayendo y se asomo. Entonces, comenzo a llorar.

Nadie la pudo consolar. No valieron los Mariana ten este bombon; si quieres vamos ahora mismo a ver los payasos; te prometo que manana mismo te conseguimos otra igual a Juanita, con el mismo

vestido y todo; pero nina, si tienes un centenar de munecas mas.

No. Ella no quiso comer y no dejo de llorar hasta que se quedo dormida. Tia Teresa estuvo a su lado la noche entera, haciendole

cosquillitas en la cabeza. Cuando me sacaron del cuarto, estaban

todavia recostadas a lo media luna.

Esta manana, nadie tuvo tiempo de darse cuenta de que Mariana

no estaba en su cama. No nos habiamos terminado de despertar

siquiera, cuando llego el hombre del lago con que la muneca estaba

alia. Nadie alcanzo a prohibirme que saliera corriendo a verla, cuando

ya la habia encontrado. Mariana estaba alia en el medio. Se mecia

blanca, blanca, con su camisa de dormir hasta el talon, su pelo sin

trenzas y sus brazos extendidos, como recibiendo a Dios.

This content downloaded from 195.78.108.40 on Tue, 17 Jun 2014 02:36:18 AMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions