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Norbert Elias El proceso de la civilización Resumen: Bosquejo de una teoría de la civilización I. La coacción social y la autocoacción: ¿qué tiene que ver con la civilización la organización de la sociedad en estados, la monopolización y centralización de los ingresos y de la violencia física dentro de grandes territorios? El proceso civilizatorio supone una transformación del comportamiento y de la sensibilidad de los humanos en una dirección determinada. Pero en ningún momento ha habido seres humanos individuales que hayan tratado de realizar la “civilización” de modo consciente y racional a través de una serie de medidas que persigan tal objetivo. Es evidente es evidente que la civilización, como la racionalización no es un producto de la ratio humana, no es el resultado de una planificación que prevea a largo término. Sería impensable que la base de la paulatina racionalización se encontrara ya un comportamiento y una planificación racionales que actuarán a lo largo de los siglos. El impensable que el proceso civilizatorio haya sido iniciado por seres humanos capaces de planificar a largo plazo y dominar ordenadamente todos los efectos a corto plazo, ya que estas capacidades presupone un largo proceso civilizatorio. Nada en la historia demuestra que esta transformación se haya llevado a cabo de modo racional, se produce sin un plan previo, sigue un orden particular. Las coacciones sociales externas van convirtiéndose de diversos modos en coacciones internas como la satisfacción de las necesidades humanas pasa poco a poco a realizarse entre los bastidores de la vida social y se carga de sentimiento de vergüenza y como la regulación del conjunto de la vida impulsiva y afectiva va haciéndose más y más universal, igual y estable a través del autodominación continua. Lo que se plantean es el problema General del cambio histórico el cual nuestra planificado racionalmente en su totalidad pero tampoco es un ir y venir arbitrario de figuras desordenadas. Los planes y las acciones, los movimientos emocionales o racionales de los hombres aislados se entrecruzan de modo continuo en relaciones de amistad o enemistad. Esta interrelación fundamental de los planes y acciones de los hombres aislados puede ocasionar cambios y configuraciones que nadie a planeando o creado. De esta interdependencia de los seres humanos se deriva un orden de un tipo muy concreto mas fuerte y coactivo que la voluntad y la razón de los individuos aislados que lo constituyen. Este orden determina la marcha del cambio histórico. Este orden por supuesto no es racional ni irracional, se le ha identificado como el orden de la naturaleza Hegel y otros lo han interpretado como una especie espíritu supraindividual y su idea de una astucia de la razón muestra que Hegel se preocupaba por el hecho de que los planes y las acciones de los hombres son muchas cosas que ninguno de ellos había pretendido en sus acciones. Pero los hábitos mentales que pretenden someternos a alternativas como racional o irracional, como espíritu o naturaleza, son inadecuados. Las leyes peculiares de las manifestaciones de

Norbert Elias

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Norbert EliasEl proceso de la civilizacin

Resumen: Bosquejo de una teora de la civilizacin

I. La coaccin social y la autocoaccin:qu tiene que ver con la civilizacin la organizacin de la sociedad en estados, la monopolizacin y centralizacin de los ingresos y de la violencia fsica dentro de grandes territorios?El proceso civilizatorio supone una transformacin del comportamiento y de la sensibilidad de los humanos en una direccin determinada. Pero en ningn momento ha habido seres humanos individuales que hayan tratado de realizar la civilizacin de modo consciente y racional a travs de una serie de medidas que persigan tal objetivo. Es evidente es evidente que la civilizacin, como la racionalizacin no es un producto de la ratio humana, no es el resultado de una planificacin que prevea a largo trmino. Sera impensable que la base de la paulatina racionalizacin se encontrara ya un comportamiento y una planificacin racionales que actuarn a lo largo de los siglos. El impensable que el proceso civilizatorio haya sido iniciado por seres humanos capaces de planificar a largo plazo y dominar ordenadamente todos los efectos a corto plazo, ya que estas capacidades presupone un largo proceso civilizatorio.Nada en la historia demuestra que esta transformacin se haya llevado a cabo de modo racional, se produce sin un plan previo, sigue un orden particular. Las coacciones sociales externas van convirtindose de diversos modos en coacciones internas como la satisfaccin de las necesidades humanas pasa poco a poco a realizarse entre los bastidores de la vida social y se carga de sentimiento de vergenza y como la regulacin del conjunto de la vida impulsiva y afectiva va hacindose ms y ms universal, igual y estable a travs del autodominacin continua. Lo que se plantean es el problema General del cambio histrico el cual nuestra planificado racionalmente en su totalidad pero tampoco es un ir y venir arbitrario de figuras desordenadas.Los planes y las acciones, los movimientos emocionales o racionales de los hombres aislados se entrecruzan de modo continuo en relaciones de amistad o enemistad. Esta interrelacin fundamental de los planes y acciones de los hombres aislados puede ocasionar cambios y configuraciones que nadie a planeando o creado. De esta interdependencia de los seres humanos se deriva un orden de un tipo muy concreto mas fuerte y coactivo que la voluntad y la razn de los individuos aislados que lo constituyen. Este orden determina la marcha del cambio histrico.Este orden por supuesto no es racional ni irracional, se le ha identificado como el orden de la naturaleza Hegel y otros lo han interpretado como una especie espritu supraindividual y su idea de una astucia de la razn muestra que Hegel se preocupaba por el hecho de que los planes y las acciones de los hombres son muchas cosas que ninguno de ellos haba pretendido en sus acciones. Pero los hbitos mentales que pretenden someternos a alternativas como racional o irracional, como espritu o naturaleza, son inadecuados. Las leyes peculiares de las manifestaciones de la interdependencia social no son idnticas a las leyes del espritu del pensamiento o la planificacin individuales ni a las leyes de eso que llamamos naturaleza, si bien es cierto que todas estas dimensiones de la realidad estn unidas entre s y no son funcionalmente separables. Pero la referencia General a las leyes peculiares de las interrelaciones sirven poco para incrementar la comprensin de tales manifestaciones, es una referencia vaca si no se muestra los mecanismos concretos en la interrelacin y tomando como ejemplos cambio histrico determinado.En el captulo tres se intenta mostrar el tipo de entramado y la dependencia mutua o interdependencia de individuos que puso en marcha el proceso de feudalizacin mostrando igualmente el proceso por el que la coaccin emanar de situaciones competitivas pblica a enfrentarse a una serie Seores feudales y el crculo de los competidores va reduciendose lentamente, hasta que se crea la posicin de monopolio de uno de ellos y se llega a la constitucin de un estado absoluto. Toda esta reorganizacin de las relaciones humanas tiene una influencia directa en la consecucin de ese cambio de las costumbres humanas cuyo resultado provisional es nuestra forma civilizada de comportamiento y de sensibilidad. La consideracin de estos mecanismos de interrelacin sigue teniendo importancia en sentido General para la comprensin del proceso civilizatorio: slo una vez que se ha observado el grado de necesidad con el que una determinada estructura social, una forma concreta de entramado social, a causa de sus tensiones internas, acaba por transformarse y por convertirse en otra forma de entramado, puede llegar a comprenderse cmo se produjeron aquellas transformaciones de las costumbres humanas, aquellos cambios en la modelacin de los aparatos psquicos que se observan siempre en la historia de la humanidad, desde los tiempos ms primitivos hasta los actuales. Y solamente entonces puede comprenderse tambin que, en la base del cambio de las costumbres psquicas en el sentido de una civilizacin, hay una direccin y un orden determinado, aunque no hayan sido planificados por seres humanos aislados y establecidos por medio de medidas racionales. La civilizacin no es racional o irracional, se pone y mantiene en marcha por medio de la Dinmica propia de una red de relaciones por medio de cambios especficos en la forma en que los hombres estn acostumbrados a vivir. Podemos, sin embargo, hacer de ella algo ms racional, que funcione mejor en el sentido de nuestras necesidades y objetivos. En correspondencia con el proceso civilizatorio, el juego ciego de los mecanismos de interrelacin va abriendo poco a poco un campo mayor de maniobras para las intervenciones planificadas en la red de interrelaciones y en las costumbres psquicas, intervenciones que se hacen en funcin del conocimiento de estas leyes no planificadas Qu transformacin especfica en su forma de vivir modela el aparato psquico de los seres humanos en el sentido de una civilizacin? Desde los tiempos mas primitivos de la historia occidental hasta la actualidad han venido diferencindose progresivamente las funciones sociales como consecuencia del aumento de la presin de la competencia social. Cuanto mas se diferencian las funcionas tanto mayor es su cantidad asi como la de los individuos de los qe dependen continuamente los dems para la realizacin de los actos mas simples y cotidianos. Hay que ajustar el comportamiento de un numero creciente de individuos, organizar mejor y mas rgidamente la red de acciones de modo que la accin individual llegue a cumplir as su funcin social. Vindose el individuoo obligado a organizar su cto de modo cada vez mas diferenciado, regular y estable. Con la caracterstica de que esta transformacin del aparato psquico en el pcso civilizatorio es que de desde pequeos se va inculcando a los individuos esta regulacin cada vez mas diferenciada y estable del comportamiento, como algo automatico con autocoaccin de las que no pueden liberarse.