ORAR COMO HIJOS DE DIOS

Mt: 6, 9 Ustedes pues oren así: Padre nuestro que estas en los cielos, santificado, sea tu nombre; venga a nosotros tu Reino; hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo.

Danos hoy nuestro pan cotidiano; y perdónanos nuestras deudas, así como nosotros hemos perdonado a nuestros deudores; y no nos dejes caer en tentación, mas líbranos del mal.

Todas estas palabras el Señor nos ha dado como un esquema para la oración, no simplemente para repetir en forma recitada, sino más bien para comprender el deseo, la obra y el actuar de Dios para con nosotros.

*El tema de hoy es orar como hijos de Dios (LEVANTAR LAS MANOS Y PEDIR SABER ORAR COMO HIJOS)

*Toda la discusión entre la ley y la gracia se termina entendiendo la paternidad de Dios para con nosotros.

* Dios es nuestro papá, ES NUESTRO.

¿De quién es Dios? ¿A quién le pertenece Dios?

Hasta que yo no entienda que Dios es mío tampoco entiendo, tampoco entiendo que todo lo que tiene es mío. Los hijos creen que todo lo que tienen su padre es de ellos, hasta los zapatos de sus padres que no les quedan se ponen y tratan de caminar con ellos.

Nosotros no vemos muchas veces a Dios como papá: Ejemplo padre nuestro. Si dices que esa prueba económica te está quitando hasta el alimento estas blasfemando.

Rm: 8, 15 Y ustedes no han recibido un espíritu de esclavos para recaer en el temor; antes bien han recibido un espíritu de hijos adoptivos que nos hace exclamar: Abbá, Padre.

Digan conmigo, yo soy hijo de Dios… Cuando oro como hijo puedo pedir como hijo. Lc 11, 5: Hay una gran diferencia entre un amigo y un hijo, porque amigos tienen

por todos lados pero un papá solo tienes en tu casa. El padre no puede ser como un amigo porque él va a buscar un bien superior que cualquier amigo que tienes, el amigo quiere quedar bien contigo, el padre quiere que tengas una buena vida.