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RESUMEN
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Modelos de organización de la investigación como fuente estratégica de producción de conocimientos.
No hay duda, que los modelos de organizar la investigación ha evolucionado a
través del tiempo, conforme van cambiando la realidad y las necesidades del
entorno, van apareciendo nuevas formas de producir y gestionar conocimientos.
Vessuri (2002), expone algunos de estos modelos comenzando con el que
desarrolla una visión académica de la investigación. Este modelo delega la misión
de acrecentar conocimientos y divulgarlos a una elite de investigadores,
intelectuales y académicos. Tuvo, y todavía tiene fuerte influencia en los países
con poca tradición de investigación, donde los científicos se organizan en elites
con un alto prestigio social.
El segundo modelo expuesto de la gestión de la innovación tecnológica
contrapone al anterior, y su principal orientación es gerenciar proyectos destinados
a obtener nuevos productos y por tanto transfiere al utilizador, sea en la forma de
mercado, la empresa, la función pública o el usuario, la capacidad de juicio sobre
la calidad, eficacia o competitividad.
El proyecto tiene como único propósito satisfacer una demanda. Existen otros
modelos de aparición más reciente denominado modo 2 de producción de
conocimientos y el de la triple hélice.
Con respecto al modo 2 propuesto por Michael Gibbons (1995)
Citado por Vessuri (2002) referente a la producción de conocimiento, se puede
decir que este caracteriza al conocimiento contemporáneo como siendo producido
fundamentalmente en el marco de un trabajo interdisciplinario que tiene lugar con
un contexto de aplicación.. Por otro lado (García, 2002:93) señala los principios
fundamentales que orientan esta propuesta teórica:
1) El conocimiento se produce en una estrecha relación entre productores y
usuarios, lo que establece una sensibilidad especial a las demandas.
2) El enfoque transdisciplinario es fundamental para la investigación, en docencia
se requiere enseñar a trabajar en equipos interdisciplinarios;
3) el conocimiento se rige más por el problema que por la disciplina, siendo objeto
de transferencia hacia nuevos problemas en vez de ser canalizado hacia
publicaciones académicas exclusivamente;
4) el conocimiento asume una mayor responsabilidad social y por tanto se le exige
rendición de cuentas cuando entran en juego otros evaluadores que no son
solamente los pares académicos.
En el modelo de la triple hélice (Etzkowitz & Leydesdorff, 2000 citado por Vessuri
2002), hace énfasis en las relaciones entre la universidad, la industria y el
gobierno, observando entre ellos una nueva lógica, cuyos proponentes
representan como la triple “hélice” para destacar la interdependencia dinámica
entre los extremos.
LA ORGANIZACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN EN INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR
La investigación en los centros de educación superior constituye un proceso de
generación, validación, difusión, transferencia y aplicación de conocimientos. En
este sentido, se intentará visualizar a continuación el posible recorrido del
conocimiento en tales instituciones:
Momento 1. Generación del conocimiento.
En las instituciones de educación superior es generado el conocimiento
denominado científico, por personas, grupos, líneas, centros o institutos de
investigación. Se trata de un conocimiento sistemático, explícito, que debe atender
criterios de demarcación científica y se difunde en encuentros y congresos
científicos, o mediante publicaciones de alcance regional, nacional e internacional.
No obstante, también hay generación cotidiana de caudales de conocimientos
empíricos, más o menos formales, por parte de docentes, estudiantes,
investigadores, etc. Estos conocimientos pueden ser tácitos, y no llegan
necesariamente a ser sistemáticos. Pueden surgir de planes de clase, notas,
diálogos informales, y generalmente tiene recorridos limitados (docente-
estudiantes; proceso de investigación-tesis; ponentes-público). Tal vez sea
necesario organizar jornadas y otras vías (más o menos formales) para
sistematizar y ampliar el radio de alcance de estos conocimientos, fomentar el
intercambio, el interaprendizaje, por diversos medios. Pueden generarse conjuntos
de conocimientos teóricos, prácticos y procedimentales, debidamente sustentados.
Momento 2. Validación y pertinencia.
El conocimiento generado, tanto científico como empírico, tiene que ser sometido
a examen, para determinar su validez científica y su pertinencia social. La validez
científica consiste en dotar al conocimiento de rigurosidad, sistematicidad, y
ponerlo en términos de ser comunicable, confiable, ante diversos auditorios
(comunidades científicas, empresas, organismos públicos, comunidades). La
pertinencia social tiene que ver con el hecho de que sea un conocimiento
significativo, relevante, para los grupos sociales con quienes se comparta.
Momento 3. Difusión implica hacer circular el conocimiento, en la universidad
primero, y en el resto de la sociedad después. Esto puede realizarse mediante
encuentros directos, publicaciones, medios electrónicos. Tiene que ver con la
creación de espacios de encuentro, discusión, debate, reflexión compartida, para
el aprendizaje de todos. Abarca también la creación de revistas, páginas web,
jornadas, comunidades virtuales, y la búsqueda de nuevas formas de comunicar
hallazgos. Puede implicar a mediano plazo la conformación de comunidades de
discusión e intercambio del conocimiento.
Momento 4. Transferencia significa hacer que el conocimiento, generado y
validado en las instituciones de educación superior, pueda ser apropiado por
comunidades, empresas, organizaciones en general. Implica la extensión en todas
sus dimensiones, la negociación, el lobby, los acuerdos, los convenios, en
síntesis, la generación de espacios para que, con otros actores sociales, pueda
reabrirse el ciclo de generación, validación, difusión y transferencia de
conocimientos. La aplicación comprende las acciones sistemáticas desarrolladas
desde la institución, destinadas al abordaje y resolución de problemas vitales para
los diversos sectores de la sociedad. Abarca actividades tales como:
asesoramiento y consulta, cursos y talleres, proyectos, parques tecnológicos,
entre otros.
Programa de Estímulo al Investigador
En 1995, la Universidad de Los Andes, creó un programa interno con exigencias
similares a las del PPI(Programa de Promoción del Investigador), el cual fue
denominado Programa de Estímulo al investigador (PEI), el mismo contiene un
baremo de clasificación de los aspirantes a ingresar o permanecer, de acuerdo a
su productividad en materia de investigación.
El Programa de Estímulo al Investigador (PEI) premia el rendimiento en
Investigación de
Profesores ordinarios, contratados y jubilados de la Universidad de Los Andes,
personal ATO, estudiantes de pre y post grado y personal de apoyo a la
investigación de la Universidad de Los
Andes.
El PEII cuenta con dos (2) categorías:
Innovador (a)
Investigador(a).
La categoría Innovador (a) comprende dos niveles: A y B.
La categoría Investigador (a)
Comprende cuatro niveles: A, B, C y Emérito.
El País no cuenta aún con un registro sistemático, normalizado y actualizado de
datos en el ámbito de la investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación (CT&I),
con información relevante sobre los proyectos de investigación y sus productos,
enfocados hacia el desarrollo de las diferentes áreas de interés nacional que se
enmarcan en los lineamientos del Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e
Innovación 2005-2030 y en el Proyecto Nacional Simón Bolívar. Por ello, el
ONCTI, partiendo de la información contenida en el Programa de Promoción del
Investigador (PPI) y en el proyecto Currículo Vitae de Latinoamérica y El Caribe
(cvlac), está desarrollando el Registro Nacional de Inoovación e Investigación -
RNII