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PADRE MARÍA-EUGENIO DEL NIÑO JESÚS Carmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie Hoja Informativa - nº 1 - Primer Semestre 2000

PADRE MARÍA-EUGENIO DEL NIÑO JESÚS … · Padre María-Eugenio del Niño Jesús 2 P resentación Nos separan ya quince años, del 7 de Abril de 1985, fecha en la que el arzobispo

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  • PADRE MARÍA-EUGENIO DEL NIÑO JESÚSCarmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie

    Hoja Informativa - nº 1 - Primer Semestre 2000

  • Padre María-Eugenio del Niño Jesús

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    PresentaciónNos separan ya quince años,

    del 7 de Abril de 1985, fecha en laque el arzobispo de Aviñón, con elacuerdo favorable de numerososcardenales y obispos de diferentespaíses, abría la Causa de Canoni-zación del Padre María Eugenio.Han sido años llenos de trabajopara recopilar y estudiar todos susdocumentos escritos: libros, con-ferencias, notas personales, inclu-yendo miles de cartas enviadas amuy distintas personas.

    La Encuesta Diocesana, rea-lizada en la Diócesis de Aviñón,

    Esta hoja informativa se distribuye gratuitamente. Quienes deseen ayudar, con su apor-tación ecónomica, a los gastos de edición y de la causa de beatificación del Padre MaríaEugenio , pueden mandar sus donativos a:

    Postulación 2090 0253 10 0040208435

    Agradecemos a nuestros lectores que nos remitan los nombres y las señas de laspersonas a las que piensen que les agradaría recibir esta hoja informativa o estampascon la oración.

    sobre su vida, virtudes y fama desantidad, se clausuró en Marzo de1994, enviando a Roma toda ladocumentación trabajada que in-cluía las actas del proceso con lasdeclaraciones de todos los testi-gos y la prueba documental con-teniendo los escritos del Siervo deDios; incluyendo también sus li-bros, así como las biografías, estu-dios y artículos escritos sobre él.

    Una vez reunidos todos losdocumentos en Roma, empezó laEtapa Romana. La Congregaciónpara la Causa de los Santos estu-dió su contenido y los autentificó.Posteriormente, la Congregaciónredactó la Positio, síntesis de la vidadel Siervo de Dios en todas sus eta-pas y prueba de cada una de susvirtudes heróicas, partiendo de lostestimonios y documentos que sehabían recogido durante el Proce-so.

  • Carmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie

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    Este documento ha de serestudiado por los Consultores teó-logos y los Cardenales.

    Esperamos que un día el San-to Padre proclamará, con la graciade Dios, el Decreto de las virtu-des heroicas del Padre MaríaEugenio del Niño Jesús, recibien-do entonces el título de Venerable.

    Sirva esta modesta publica-ción para dar a conocer, amplia-mente, la figura y la obra del PadreMaría Eugenio.

    El testimonio de su vida en-tregada por entero al Espíritu San-to, a quien familiarmente llamaba«su Amigo», fue un referente paralos que vivieron con él y le cono-cieron. También lo es ahora, paraaquellos que, sin haberle conoci-do, seguimos caminando tras suspasos y alimentándonos de sus pa-labras.

    Su enseñanza, recogida enmúltiples escritos, no tiene más queuna meta: Dios, nuestra unión conÉl. Al Padre le gustaba decir: «Mimisión es teologal, estoy hechopara conducir las almas a Dios».

    En los umbrales del TercerMilenio, cuando muchos hombresy mujeres han perdido el verdade-ro sentido de la vida y el sentidode la Trascendencia, el Padre MaríaEugenio vuelve a centrarnos en loesencial, en nuestra relación conDios a través de la oración que nosayuda a crecer en su amor y en laentrega a los hermanos. Durantetoda su vida, impregnado por en-tero de la gracia del Carmelo, nose cansó nunca de repetir la im-portancia de la oración para unaauténtica vida cristiana. «Orad parapedir el amor. Esta es la única ora-ción necesaria. Para las personasque amo, sólo puedo pedir elamor».

  • Padre María-Eugenio del Niño Jesús

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    Enrique a los seis años

    Algunosdatos

    biográficos2 Diciembre 1894-27 Marzo 1967

    Infancia

    Enrique Grialou, nace el 2 deDiciembre de 1894, en Gua, unpueblecito minero, de la región deAveyron, en Francia. Es el tercerode cinco hermanos de una familiahumilde. Su padre es minero. Lafamilia vive pobremente, pero tie-ne muy arraigados los valores deltrabajo, la honestidad y una fe sóli-da. Cada día, para ir a la escuela,Enrique pasa por delante de la igle-sia y el deseo del sacerdocio em-pieza a latir en su corazón.

    La fecha del 18 de Agosto de1904, marca la infancia de Enrique.Su padre muere repentinamentepor un enfriamiento y su madretendrá que trabajar para poder sa-car adelante a sus cinco hijos y pa-gar las deudas pendientes.

    En Junio de 1905, Enrique hacesu Primera Comunión y entoncessiente con fuerza la llamada alsacerdocio. En aquella época, losPadres del Santo Espíritu ofrecíangratuitamente a los chicos queveían motivados, la posibilidad derealizar sus estudios en su escuelade Suse (Italia). Enrique, no que-riendo ser una carga para su ma-dre, aceptará irse con los padresespiritanos a Italia. Con sólo 11años, ya demuestra tener una grandecisión para responder a la llama-da de Dios. Pasará tres años sepa-rado de su familia.

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    Hacia el sacerdocio

    Al no sentirse llamado a con-tinuar con los padres espiritanos,volverá a Francia, entrando en elSeminario Menor de Graves. Enestos años, en los que Enrique esun alumno brillante y excelentecompañero, descubrirá un librito«La rose effeuillée» de SantaTeresita del Niño Jesús.

    Escribe a un amigo diciéndo-le: «Ningún otro libro me ha im-presionado tanto como éste». Apartir de ahora, comienza unaamistad espiritual muy fecunda conSanta Teresita.

    En 1911, entra en el Semina-rio Mayor de Rodez donde hará elbachillerato y los primeros años deteología, pues en 1914 estalla laguerra.

    A pesar de estar en frentesmuy dificiles, saldrá salvo junto consus camaradas, gracias a la protec-ción de Santa Teresita: «la herma-na Teresa desvía, para las balas».

    Una vez acabada la guerra, en1919,con el grado de teniente ycondecorado por su valentía y do-tes de mando, decide volver inme-diatamente al Seminario: «He op-tado por el sacerdocio a fondo».

    El 13 de Diciembre de 1920,durante el retiro de preparaciónal subdiaconado, lee un pequeñolibro sobre la vida de San Juan dela Cruz, prestado por las carmeli-tas. Siente con toda claridad queDios le quiere en el Carmelo.

    Tendrá que vencer fuertesoposiciones,de su director espiri-tual y del obispo, que prefieren quesiga como sacerdote diocesano.

    Pero la más dolorosa para él,será la de su madre, que piensa queperderá a su hijo.Enrique pedirá al-gún signo a Dios y se lo concede-rá.

    El 4 de febrero de 1922 esordenado sacerdote.Exclama: «Soysacerdote, sacerdote para la eter-nidad. Esta palabra me llena de fe-licidad...».

    Al final de su vida, volvera arepetirlo con la fuerza de una ple-nitud realizada. Después de las pri-meras misas en su región, se irá de-finitivamente de allí.

    La oposición de su madre du-rará casi dos años. «Jesús ha que-rido herirme precisamente en mipunto débil».

  • Padre María-Eugenio del Niño Jesús

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    Convento de losCarmelitas en Avon

    (Francia)

    Carmelita

    El 24 de febrero de ese mis-mo año, entra en el noviciado quelos padres carmelitas tienen enAvon. Año de silencio y de estu-dio de los santos del Carmelo, enunas condiciones de vida muy du-ras. Año de intensa oración. «Laoración es como el sol y el centrode todas las ocupaciones del día».También, año de gracias profundas,que ya preparan al Padre MaríaEugenio para su misión.

    La beatificación de Teresa delNiño Jesús marcará el año 1923,cuando hace su primera profesiónreligiosa. La alegría del padre Ma-ría Eugenio es inmensa: «Es uno de

    los días más hermosos de mivida....La glorificación de Teresita esla forma en que mejor concibo laglorificación del mismo Jesús. Meparece que su misión es una efu-sión del amor divino en las almasen la forma que Dios desea paranuestra época.....» A partir de aho-ra, comenzará un apostolado muyactivo: Triduos sobre Santa Teresita(canonizada en 1925), sobre SanJuan de la Cruz (proclamado Doc-tor de la Iglesia en 1926), retiros,conferencias en ambientes diver-sos, parroquias, conventos, etc.Dirigirá la revista «Carmelo» en laque escribe algunos artículos. El 11de Marzo de 1926, hace profesiónsolemne en el convento de Lille.

  • Carmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie

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    Primer edificiode la fundaciónNotre-Dame

    de Vie(Francia)

    Fundador

    La víspera de la fiesta de laAsunción de 1928, recibirá el nom-bramiento como Superior del Co-legio del Petit Castelet, en Tarascon.Cree interrumpir un trabajo apos-tólico en plena expansión. PeroDios conduce y prepara los acon-tecimientos. Én esta época comen-zará a tener contactos con gruposde universitarios y de filósofosmarselleses, que le pedirán una en-señanza sobre la oración. Un añodespués,en Pentecostés, recibirá lavisita de tres jóvenes directoras deun Colegio de Marsella, que bus-can consagrarse a Dios. Les mue-ve el deseo de conocer la doctrinadel Carmelo y de aprender la cien-cia de la contemplación. Ésto co-rresponde a la intuición profun-

    da del padre, que preocupado porla difusión de la doctrinacarmelitana, estaba convencido deque era una espíritualidad, y quepor lo tanto, podía ponerse al al-cance de todo el mundo y vivirseen medio de la gente, adaptada alas necesidades de nuestra época.«Sentía que tenía algo que hacer»y se lo comunicará a su provincial.

    La Providencia parece ratifi-car esta obra. Poco a poco, el pe-queño grupo comenzará a organi-zarse y en 1932, el padre irá a visi-tar una propiedad que le había sidoofrecida para una obra delCarmelo: Notre-Dame de Vie, enVenasque, de la diócesis de Aviñón.Quedará cautivado por la presen-cia mariana del lugar. El padre Ma-ría Eugenio ha afirmado siempreque la verdadera fundadora del Ins-tituto es la Virgen, la Madre de laVida. Este lugar será el desiertodonde los miembros del Institutose formaran a la vida de oración, alcontacto con Dios en la fe y elamor, para después poder comu-nicarla en todos los ambientes.

    De esta forma, el grupo quese extructura, será el gérmen delInstituto Secular Notre-Dame deVie, reconocido por la lglesia en1948, posteriormente a la Consti-tución Apostólica «Provida Mater»de Pío XII.

  • Padre María-Eugenio del Niño Jesús

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    Al servicio de laOrden del Carmelo.

    Después de varios destinos,en Abril de 1937, será elegido Ter-cer Definidor General y deberátrasladarse a Roma, donde residiráhasta 1955, ocupándose de losasuntos de la Orden. Es responsa-ble de los Carmelos de lengua fran-cesa a los que visitará con frecuen-cia. Pero el comienzo de la Segun-da Guerra Mundial, le obligará a vol-ver a Francia, donde estará hastael fin del conflicto. Período de fe-cundidad para su Fundación, de laque se ocupará más de cerca y para

    Con el P. Silverio, general de la Orden en1948

    P. María-Eugenio provincial

  • Carmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie

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    P. María-Eugenio

    el Carmelo francés que se va unifi-cando con su ayuda. Dentro de lalínea de unidad de los conventosde carmelitas, se encargará en1948, de organizar las Federacio-nes de Madres Carmelitas en Fran-cia.

    Una vez finalizada la Guerra,será elegido en 1947 PrimerDefinidor y en 1954, será nombra-do Vicario General de la Orden araíz del fallecimiento del General,Padre Silverio de Santa Teresa.

    A lo largo de todos estos añosen el gobierno de la Orden anima-rá con fuerza las fundaciones mi-sioneras carmelitanas, en espe-cial en Oriente. Acabará su obramaestra «Quiero ver a Dios», po-derosa síntesis de la enseñanza delos santos del Carmelo: Santa Te-resa de Jesús, San Juan de la Cruz ySanta Teresa del Niño Jesús. Estaobra, verdadero tratado de teolo-gía espiritual, ha sido traducida envarios idiomas y difundida todavíaen la actualidad. Ayudará en la pu-blicación íntegra de los Manuscri-tos de Santa Teresita. Viajará a lasmisiones de Oriente para animara los frailes misioneros que en es-tos lugares sufren la guerra y la per-secución. Insistirá en repetir quela oración es el único medio con-tra la expansión del comunismo enesas regiones.

    Vuelta a Francia

    Después de la inauguracióndel Colegio Internacional de losCarmelitas en Roma y tras ser ce-lebrado el Capítulo General de1955, volverá a Francia donde ter-minará la organización de las Fe-deraciones de las Carmelitas y cui-dará del crecimiento de su Funda-ción. Entre los años 1955 y 1967,se estructurarán las ramas mascu-linas: laica y sacerdotal, al lado dela rama femenina; las nuevas fun-daciones se multiplican, Filipinas,México, España, Canadá. Al sernombrado Provincial del Sur deFrancia, se dedica con entusiasmoal trabajo de «aggiornamento» dela Orden, después del Concilio Va-ticano II.

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    Santuario de Notre-Dame de Vie dondeestá enterrado elP. María-Eugenio

    Hacia el abrazodel Espíritu Santo

    A pesar de que susfuerzas se debiliten y deque sufra algunos quebran-tos de salud, seguirá reali-zando su ministerio apos-tólico de forma activa. Mul-tiplicará los retiros dirigi-dos a jóvenes, seminaristas,sacerdotes. Continuará eltrabajo de preparaciónpara el Capítulo Generalde la Orden de 1967. Suúltimo retiro lo predicaráa los novicios carmelitas,en Diciembre de 1966. Fi-nalmente, aceptará some-terse a un tratamiento,pero sin éxito. Dice: «Soyfundador por mi sufrimien-to. He sufrido mucho en mivida, es algo necesario parala fecundidad... la Redención pasapor Getsemaní...»

    En efecto, esta identificación aCristo deseada a lo largo de todasu vida y que el padre María-Eugenio expresaba cada año en susmeditaciones del Triduo Pascual, vaa conocerla en su propia persona.Sus últimos días coincidirán con laSemana Santa. Como Santa Teresita,tendrá la muerte de Jesús en laCruz. «La santidad es la fuerza de

    Dios, la debilidad del hom-bre».

    En todo momento seconformará al designio deDios: «Me voy al abrazodel Espíritu Santo» «¡Diosmío, te quiero!¡Jesús tequiero!¡Me parece que teamo perfectamente y queme parezco a tí!Cada mi-nuto que pasa me permi-te amarte más.Dios me loha dado todo...las profun-didades de Dios son elAmor»

    El padre MaríaEugenio fallece el lunes dePascua, 27 de Marzo de1967. Es una delicadeza dela Virgen Madre, a la quetanto amaba. María vino abuscarle en el décimo ani-

    versario de la fiesta que él mismoinstituyó en honor de Notre-Dame de Vie, «para compartir conElla la alegría de la Resurrección».

    Desde entonces, su obra pro-longa su acción. A través del libro«Quiero ver a Dios»,del InstitutoSecular Notre-Dame de Vie y detodas aquellas personas que en suOrden y en la Iglesia le conocie-ron, su carisma continúa vivo en-tre nosotros.

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    RESURRECCION: ¡TRIUNFO DE

    LA VIDA!

    En este tiempo pascual, nosunimos a la alegría que brotaba delcorazón del Padre María Eugenio,cuando en la homilía del domingode Resurrección, en 1965, decíaestas palabras:

    ¿ Qué es la fiesta de Pascua?¿Por qué la Iglesia pone en nues-tros labios el canto repetido delaleluya?. Precisamente para cantarel triunfo de la vida de Dios, eltriunfo pascual. Pues la vida triun-fa en Jesús: Jesús sale del sepulcro,y su alma y su cuerpo son glorifi-cados. Y serán glorificados parasiempre, pues Cristo resucitadoya no vuelve a morir, sino que gozapara siempre de esta vida triunfan-te, desbordante, que invade sucuerpo aún visiblemente. Al igualque en el Tabor, esa vida gloriosadifunde a su alrededor el resplan-dor de su divinidad, de la que nun-ca ha sido despojado, y asegura acada célula de su cuerpo un triun-fo y un esplendor sin igual.

    Santa Teresa de Jesús, que lle-gó a contemplar el cuerpo de Cris-to crucificado, no encontraba pa-labras para expresar la impresiónque esa visión la produjo. Esa mis-ma vida gloriosa de Jesús crucifica-do es la vida de Cristo en la Euca-ristía, bajo las apariencias de pan y

    Cristo Jesús resucitado

  • Padre María-Eugenio del Niño Jesús

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    vino. En el sagrario, aún cuandoexternamente no sea visible suesplendor, está Cristo con idénti-ca vida gloriosa.

    ¡Misterio divino, impenetra-ble e incomprensible!. Dios ha que-rido esa muerte y ha entregado asu Verbo hecho carne a los ataquesde las fuerzas del infierno para queesta Muerte triunfe sobre la muer-te, y garantizar para siempre eltriunfo de la Vida.

    La Pascua es el nacimiento dela Iglesia y la difusión desbordantede la Vida del Verbo Encarnado, ensu propio cuerpo y en todo su

    Cuerpo Místico. Esta fiesta de Pas-cua es la fiesta central del misteriocristiano y de nuestra liturgia, puesen ella celebramos la expansión dela vida divina hasta el final de lostiempos.

    Este triunfo es el fundamen-to de nuestra fe, pues con él, Jesúsha afirmado de forma manifiesta sudivinidad. Es también el fundamen-to de nuestra esperanza, pues estavida que fluye de Cristo, debe igual-mente inundar cada una de nues-tras almas y todo el Cuerpo Místi-co de Cristo. Y este triunfo es, tam-bién, el fundamento de nuestroamor, pues, en la humanidad rege-nerada, nuestras almas de bautiza-dos están unidas a Cristo y unidasunas con otras por los lazos de lacaridad, que no es otra cosa que lavida triunfante en Cristo Jesús.

    Detengámonos unos mo-mentos para reflexionar sobre estavida desbordante de Cristo.

    Pensemos también en la ale-gría de la Virgen, que contempla eltriunfo de la vida de Dios en suhijo Jesús, cuyo cuerpo muerto yensangrentado ha tenido en susbrazos en el Calvario. ¡Qué alegríapara Ella! Alegría de ver esa vidaen Cristo, alegría de ver que seirradia hacia todas las almas –en

  • Carmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie

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    primer lugar en los apóstoles y dis-cípulos y en María Magdalena- ale-gría al ver ya en esperanza el triun-fo de esa vida en nuestras propiasalmas.

    La Virgen María fue asociadaal sufrimiento de Nuestro Señor.Allí estaba, en el Calvario, de piejunto a la Cruz, uniéndose a laofrenda de Jesús y a su sumisión ala Voluntad de Dios. Y permaneceal lado de Cristo triunfante comolo estuvo junto a Cristo crucifica-do.

    María está realmente unida ala obra de Jesucristo: es cierto queEL es el único mediador, pero Ma-ría participa en la mediación de suHijo.

    Estamos seguros: la vida deCristo nos llega por medio de Ella.Y hoy, de manera especial, Maríase convierte en la Madre de la Vida.Qué alegría para nosotros poderlasaludar así: ¡Madre de la Vida, Nues-tra Señora del a Vida! ¡De la Vidatriunfante de Cristo en su huma-nidad y en nuestras almas!.

    Abrámonos a ese resplandorde la Vida gloriosa de Nuestro Se-ñor. Dejémonos penetrar por esalevadura nueva que transformaránuestra masa humana, nuestra almamanchada por el pecado. Convir-támonos en esa levadura nueva quees Cristo. Y esto no sólo para nues-tra transformación personal. Quetambién nosotros, por nuestra ac-ción, por nuestra oración y pornuestro sufrimiento, merezcamoscomo María ser fuentes de vida, serverdadera levadura que, introduci-da en la masa, transforme el am-biente en el que ha sido colocada;que esta levadura nueva contribu-ya no sólo a hacer estallar la ale-gría pascual, sino también a hacerrealidad el misterio pascual en todala Iglesia de Dios, y de manera es-pecial en todas aquellas personascercanas a nosotros y de las quesomos responsables; que ayude-mos a lograr esa realidad para todala Iglesia de nuestro tiempo y parala Iglesia del futuro.

  • Padre María-Eugenio del Niño Jesús

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    “En verdad, creo que esun santo, ¡Qué ánimo da el pen-sar que Nuestro Señor tiene al-mas tan privilegiadas a su servi-cio!.

    “No conocía al padre María Eugenio del Niño Jesús y les escribo por-que pienso que su libro “Quiero ver a Dios” ha entrado en mi vida como sifuera un regalo, un signo enviado por él. Desde entonces, rezo al padre MaríaEugenio para que interceda por mí, para que llegue a comprender su libro,vivirlo y comunicarlo a los demás”.

    (De Bélgica)

    estimoniosT

    Me gustaría felicitar a aque-llos que vivieron con el padreMaría Eugenio, pues el Señor les

    otorgó la dicha de vivir con un santo. No saben la alegría que me produce verla manifestación de Dios en él.

    Hace años conocí a un miembro del Instituto Secular Notre-Dame deVie, fundado por él, que a través de un libro me dió a conocer al padre. Sulectura me impresionó vivamente y sus fotos me mostraban un rostro ra-diante de paz. En aquellas fechas, pasaba por una grave enfermedad, que gra-cias a su intercesión frenó su curso.

    Ya han pasado unos años y en todo momento, sigo confiando en la inter-cesión del padre María-Eugenio para que me ayude en mi caminar espiritual,sintiéndole cerca en las situaciones difíciles.

    Pido mucho al Señor para que el siervo de Dios esté pronto en losaltares y para que su Instituto aumente en vocaciones al servicio de la Igle-sia».

    (P. A de España)

  • Carmelita y Fundador del Instituto Notre-Dame de Vie

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    n acción de gracias...ETrabajo

    Al saber que una persona delequipo de mantenimiento pasabapor dificultades: una grave interven-ción quirúrgica y su mujer en unasituación laboral difícil; empecé apedirle todos los días al padre Ma-ría Eugenio, que su mujer encon-trara un trabajo estable. Ayer hesabido que desde principios deEnero ya tiene un buen trabajo.Desde ahora, continuaré rezandoesta oración en acción de gracias.

    (D.N. Francia)

    Vivienda

    A la vuelta de las JornadasMundiales de la Juventud mi fami-lia y yo buscábamos un piso enmejores condiciones y a nuestroalcance financiero. ¡Todo un desa-fío!. Lo confié al padre MaríaEugenio y fuimos escuchados. El ba-rrio es tranquilo y la parroquia conmucho dinamismo.

    Quería compartirles mi ale-gría por este favor aparentementesencillo, pero tan importante parami familia y para mí.

    (Canadá)

    Apoyo Espiritual

    El padre María-Eugenio es unamigo para mí, un hermano, un pa-dre, mi guía espiritual.

    Desde el cielo, me ayuda entoda mi vida. Sus escritos sobre elEspíritu Santo, la voluntad de Dios,el abandono en sus manos, el com-promiso corresponden a los de-seos de mi corazón. Una vez más.Gracias.

    (Haití)

    Salud

    Antes de la operación de unapersona conocida, le di una reliquiadel padre María Eugenio. Era unaintervención en los pies, durantetodo el tiempo que estuvo en elquirófano, la enferma sujetaba lareliquia en su mano y más tardeme confesó que había notado unapresencia que le había ayudadomucho: «Todo ha salido muy bieny lo que me ha dado me ha ayuda-do mucho, gracias, gracias....»

    (M. C. España)

  • Gáficas Villanueva-PérezPol. Ind. Albal IV

    46470 AlbalTel. 96.127.08.89

    Centro Publicaciones ocdC/ Alboraya, 3346010 ValenciaTel. 96.360.67.57

    NOTRE-DAME DE VIE Cofrentes, 6 - 2ª * 46010 - Valencia

    Oración(Para uso privado)

    Señor Dios Nuestro, te damos graciaspor tu sacerdote

    María-Eugenio del Niño Jesús,que vivió bajo la moción de tu Espíritu Santo.

    Lo has suscitadopara que enseñe a tu pueblo

    cómo penetrar en las profundidades de tu intimidady para que guíe así a los hombres de hoy

    por los caminos de la fe y de la contemplaciónhasta la perfección del amor.

    Haz que su misión dé fruto en tu Iglesia.Te suplicamos nos concedas

    la gracia que te pedimos por su intercesión,y si es tu voluntad,

    dígnate glorificar a tu siervo.por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

    En el santuario de Notre-Dame de Vie, se reza esta oración por todas las personasque se encomiendan al padre María-Eugenio. El día 27 de cada mes se celebra unaEucaristía por aquellos que en el mundo entero se confían a su intercesión.

    Para agradecer, comunicar favores, y pedir oraciones o misas, pueden dirigirse a:

    POSTULATION 84210 - Venasque

    EN ESPAÑA EN FRANCIA

    [email protected]

    Dep. Leg.