Viajar y comerUna de las experiencias que no se pueden desligar cuando se conoce un sitio nuevo es la de probar los platos típicos de esa localidad; “el turismo y la gastronomía van de la mano, mucho más hoy en día que hay regiones o países que mucho de su movimiento turístico gira en torno a su comida. Por ejemplo, Perú en nuestro continente. La gente viaja para comer, la gastronomía es un hecho cultural”, asegura Sumito.

Bellezas venezolanasCuando se le cuestiona acerca de qué parte de nuestro país más le ha impactado, asegura que “he tenido el privilegio de vivir en las tres partes de Venezuela que más amo: Mérida, Caracas y Margarita, no puedo pedir más”; aunque declara que su deuda turística son Canaima y el Delta, el sur de Venezuela que aún no lo conoce.

¿Qué no falta en tu maleta?“Se puede decir que no he deshecho maletas en mucho tiempo, es el tipo de vida que llevo ahora… pero creo que lo nunca saco de mi maleta es la música. Además, una espera en un aeropuerto no es pérdida para mí, yo aprovecho ese tiempo y sigo trabajando en las cosas que quiero llevar adelante”.

Tipo mochileroSe define como un viajero tipo mochilero, “oye si tú me invitas para algún sitio y me ofreces el hotel 5 estrellas claro que te lo acepto, pero si yo salgo a conocer algún sitio me gusta salirme de la ruta normal y descubrir esos rincones”.

ExploradorCuando se encuentra en un país nuevo una de sus formas de acercarse a esa nueva cultura es probar su comida y comprarse un libro de un autor local joven, “eso me sirve para ver de qué van las cosas allí”, asegura, “soy como un niño, en muchos aspectos, me gustan las cosas que me sorprenden”.

Sabores preferidos“No tengo platos preferidos, ni sabores preferidos… la cocina es tan amplia que es monótono quedarse con un solo sabor. Hoy día tengo el gran privilegio de cocinar lo que yo comería, lo que me gusta, suena sencillo, pero muchas veces no es así… y mis ingredientes principales son los vegetales”.

Combinar para ganarVenezuela es famosa por sus parajes naturales impactantes y exuberantes, estamos acostumbrados a pasar de un desierto a una playa paradisiaca sin mayor dificultad, en una realidad como ésta la competencia en ofertas turísticas debe plantearse un eslabón más de servicio.

Sumito nos señala lo que para él debería ser la mayor fortaleza de muchas posadas y pequeños empresarios del sector, “pienso que las ofertas turísticas de posadas deben enfocarse mucho más en el menú, en lo que ofrece a la mesa a sus huéspedes para complacer y ganárselos definitivamente”.

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