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MENSAJE DE LOS HERMANOS DEL

CURSO “AMANECER” 2010. Los hermanos maristas y marianistas del curso AMANECER 2010, al término de nuestra sesión, queremos expresar nuestra alegría y nuestro reconocimiento a Dios y a todos los que han contribuido a hacer de esta oportunidad una experiencia enriquecedora para cada uno de nosotros, en múltiples aspectos. De esta convivencia queremos destacar el ambiente de fraternidad que hemos construido entre todos, con el conocimiento mutuo, la aceptación de nuestros valores y de nuestros límites, de nuestra realidad y de nuestras posibilidades, de lo que hemos realizado en nuestras vidas y de lo que todavía estamos llamados a vivir. Nos hemos hecho más conscientes de que en la vida hay pocas cosas esenciales y bastante banalidad; distinguimos más claramente lo que cuenta, lo que queda tras el paso de los años: Dios, María, la fraternidad, la entrega, el servicio, la amistad, la experiencia de amar y de ser amado. Del resto podemos prescindir fácilmente. Nos sentimos un poco más sabios. La experiencia nos ha enseñado a confiar mucho en Dios y menos en nosotros mismos, en las personas y en las cosas. Hemos experimentado la grandeza del perdón: perdonarnos y perdonar en la convivencia cotidiana, en los roces diarios. Asumimos que no somos imprescindibles para algunos y que el tiempo del protagonismo ha pasado para nosotros. Ahora debemos dejar que el protagonista de nuestras vidas sea Dios, como lo fue en María, en Champagnat, en Chaminade,… De María de la Visitación hemos intuido su disponibilidad para el servicio sencillo, humilde, callado. De Marcelino y Guillermo José nos apremia su celo para responder a las necesidades más lacerantes de los niños y jóvenes de hoy y la visita al Hermitage y a los lugares maristas ha fortalecido este sentimiento. Creemos que Dios sigue teniendo un proyecto para nosotros y un proyecto hermoso, por ser suyo, que hemos de descubrir y hacerlo propio. Y como Él nos conoce, será un proyecto acorde con nuestra situación y con nuestras fuerzas; y donde no lleguemos nosotros allí está Él, que siempre llega y va más allá de nuestros límites.

Aceptamos la llamada a “salir” de nuestra tienda, a buscar, a descubrir esa “tierra nueva” que significa plenitud. Salir de nuestros círculos limitados, de nuestras miras estrechas, de nuestros esquemas superados y abrirnos a la novedad de Dios. Queremos llegar a nuestras comunidades llenos de alegría y optimismo. Queremos ser un hermano mayor para los más jóvenes, animándoles, acogiéndoles, queriéndoles, aunque no siempre les entendamos. Queremos ser un referente claro de vida y espiritualidad maristas/marianistas para los laicos que buscan en nosotros el “agua de la roca” para sus vidas. Queremos ser inspiración para los jóvenes que se sienten atraídos por la vida marista/marianista siendo sencillamente “hermanos” y, en fin, ser signos de la bondad y de la compasión de Dios para cuantos encontremos. Queremos ver la vida como un estallido de esperanza y no como algo que se nos escapa de las manos. Todavía servimos y comprobamos que Dios se sirve de lo poco, de lo insignificante para sus grandes acciones. Queremos participar en la construcción de nuestras comunidades y colaborar en la misión apostólica de nuestros Institutos. Queremos buscar ese puesto en el que todavía podemos ser útiles. Y, a pesar de nuestros años, hacemos un esfuerzo por abrirnos a formas nuevas, a nuevas costumbres, a nuevas ideas. Aceptamos que quienes caminan con nosotros pueden no escuchar la misma canción, ni caminar al ritmo del mismo tambor. Queremos abrir los ojos a la novedad de Dios, a sus sorpresas, a sus llamadas, al hecho cierto de que en todo lo que sucede, lo que nos sucede, podemos descubrir su amorosa presencia. Queremos dejarnos acariciar por Dios y por María. Y queremos dejar constancia de nuestra gratitud a los que han hecho posible nuestra presencia en este curso, a quienes nos han acompañado durante estos dos meses en esta casa de Manziana y a cuantos con sus enseñanzas o con sus ejemplos han logrado que, al final, nuestros rostros se vean iluminados con una sonrisa.

Programa “Amanecer”, para Hermanos mayores, desde el 10 de agosto hasta el 10 de octubre de 2010, en lenguas española y portuguesa.

Manziana – ITALIA

http://www.youtube.com/watch?v=zWmsXXKEKkk

H. Hernán Gómez Osorio - (Secretario Provincial