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La palabra vigilia viene del verbo "velar", "estar despierto". Una vigilia es un tiempo de vela, una tarde o noche de oracin, de espera, de preparacin ante un acontecimiento. La tarde-noche, como la madrugada, tienen un atractivo especial que introducen y facilitan la oracin. Jess mismo pasaba las noches en oracin, o se levantaba al amanecer.

PENTECOSTSLa Iglesia celebra tres vigilias fundamentales: La de Pascua, la de Navidad y la de Pentecosts. Adems se va extendiendo en muchos lugares la costumbre de celebrar la Vigilia de la Inmaculada. Lo fundamental de la Vigilia es la escucha de la Palabra de Dios, la meditacin personal y la oracin compartida durante un tiempo prolongado y en ambiente de recogimiento y silencio. De esta manera el pueblo cristiano se prepara para celebrar los acontecimientos ms singulares de nuestra salvacin. En la oracin nos abrimos para acoger la palabra y la accin de Dios, y para disponernos a secundar lo que l nos pide.

La vigilia de Pentecosts es la culminacin del tiempo pascual. Jess resucitado nos entrega su Espritu y la Iglesia naciente inicia una nueva etapa continuando la obra emprendida por su Seor.

Pentecosts no es una fiesta aislada. La Pascua dura cincuenta das. Pentecosts es tiempo de plenitud, de tomar conciencia de lo que somos por la fuerza del Espritu. En este tiempo, Mara tiene tambin un sitio. Ella estaba all, reunida con los Apstoles asistiendo al nacimiento de la Iglesia. Ella sigue presente entre nosotros a lo largo de su desarrollo histrico. CMO LOGRAMOS ESTO? Despertando la sorpresa de la llegada del Espritu en Pentecosts a nuestros corazones, reconociendo en comunidad su llegada, que renueva y nos da vida.

INVOCAR Y RECIBIR AL ESPRITU DE NUESTRAS VIDAS, NUESTRO AMIGO- Deca el Papa Francisco en el Pentecosts pasado:La Iglesia est siempre llamada a ser capaz de sorprender anunciando a todos que Jesucristo ha vencido la muerte, que los brazos de Dios estn siempre abiertos, que su paciencia est siempre all, esperndonos, para curarnos, para perdonarnos. Precisamente para esta misin Jess resucitado ha donado su Espritu a la Iglesia.

La Iglesia est siempre llamada a ser capaz de sorprender anunciando a todos que Jesucristo ha vencido la muerte, Lo nuevo, lo innovador y creativo, despierta la sorpresa en el corazn de los que creen; quienes atentos esperamos su venida. Todos ellos perseveraban en la oracin, con un mismo espritu (He 1,14).

Retomar este versculo de la lectura de Pentecosts, es traer a nuestra presencia lo sucedido en aquel momento, y hacer fiesta: fiesta porque all naci la iglesia. Sin el Espritu no puede haber fiesta, por eso nos unimos en oracin e invocamos su presencia, unidos como hermanos.

Nos dice el papa Francisco: El Espritu Santo nos ensea el camino; nos recuerda y nos explica las palabras de Jess; nos hace orar y decir Padre a Dios, nos hace hablar a los hombres en el dilogo fraterno y nos hace hablar en la profeca.