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Personificaciones

Trabajo escrito del alumnado de 2ºD

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¡Hola, soy una pelota de tenis! Aunque me apodan “la luciérnaga”, ya que

soy brillante y se me ve en la oscuridad.

Ser una pelota de tenis, tiene sus ventajas y desventajas.

Una de las ventajas es que, al golpearme o lanzarme, parece que estoy en

una “montaña rusa”. Pero al lanzarme o golpearme muchas veces, al final

me mareo y es un poco cansino.

Las desventajas son más abundantes que las ventajas.

Si los chavales juegan conmigo, golpeándome a la pared, me hago daño

cuando me doy. Y cuando juegan a tenis, al golpearme con las redes de las

raquetas, se me quedan las marcas y me despellejo. Y mi piel se queda en

la raqueta.

Otra de las desventajas es que, cuando me caigo en un charco, es lo peor;

y me enfermo.

Y la peor desventaja, cuando boto en el suelo y seguidamente, me golpean

simultáneamente; no tengo tiempo para respirar y me ahogo.

Aún así, ser una pelota de tenis no es tan malo, ya que hay cosas peores.

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Soy un cuaderno, uno de esos que tanto usan hoy en

día los adolescentes. Me resulta un tanto incómodo

que los estudiantes estén abriéndome y cerrándome a

cada instante. Y cuando estos tienen mal humor y me

cierran de golpe, no me siento nada agradecido.

Me llenan de letras, y ello me gusta, pero me parece

un poco cansino. Y cuando arrancan una de mis

queridas hojas, esas queridas hojas que me han

costado la vida, me pongo a llorar, pero siempre hacia

mis adentros. Tampoco me gusta cuando me desnudan

a primeras horas de la mañana, cuando todavía ni

siquiera ha cantado el gallo.

Practicamente, lo más bonito o positivo que puedo

decir de mi servicio es que cuando se terminan mis

páginas (mis queridas páginas, ¡snif!), y, cuando,

están llenas de letras, parezco todo un sabio.

Al fin y al cabo, me agrada saber que gracias a mí

los adolescentes y los no-adolescentes aprenden

mucho: la escritura, la buena presentación, los buenos

cálculos, etc…

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El cuaderno y sus amigas las hojas

Yo soy un cuaderno y en mi viven dos grupos de objetos : las hojas y ,la señora que protege las hojas, la tapa.

Estos dos grupos formado por un montón de folios, algunos mas finos , algunos mas gruesos, conviven todos juntos

unidos por una arandela.

Las persona que me usan, utilizan mas las hojas que los cuadernos, pero no nos tenemos que olvidar de las tapas ,que también son importantes ya que estas dos , una por

delante y una por detrás son las que protegen a las hojas y las que sufren todos los golpes, rayaduras ... .

Normalmente me utilizan para escribir en mi ,deslizando en mis hojas la tinta de mi compañeros de escritura por

ejemplo el bolígrafo, el lápiz, el tipex... ,u otras veces me utilizan para hacer pintadas o expresar sus sentimientos .

Cuando mas me hacen daño es cuando me tiran al suelo , me pisan o me rayan las tapas , pero sin duda cuando mas

me duele es cuando no me utilizan excepto cuando es verano porque yo también necesito vacaciones.

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¡Qué dulce es ser una caja de bombones! Mi interior está hecho de

calorías y azúcares, y mi exterior... mi figura...¡ está cuadrada!

En invierno, descanso en una despensa, acompañada de otros ricos

alimentos. Con la tripa bien llena, a menos que algún goloso me vaya

vaciando a escondidas.

En cambio, en verano, como mi enemigo, el sol, actúa, estoy fresquita en

la nevera. Excepto cuando algún despistado se olvida, me deja a la luz del

sol, y muero poco a poco. Mi interior se derrite lentamente... además mis

pertenencias disminuyen en un abrir y cerrar de ojos. Desaparecen aún

más rápido cuando viene de visita esa tía lejana que todos tienen, a la que

quieren muchísimo, que disfruta diciéndoles lo mucho que han crecido y

comiéndose los bombones, los ricos bombones.

Mi vida también tiene partes amargas, como cuando un bombón de mi

interior se rompe, y se desangra. O cuando se van comiendo todos y solo

quedan uno o dos, los menos ricos o los que peor pinta tienen, los que la

gente no los tiene por favoritos; y los ves como se entristecen, porque no

los aprecian. Aunque no se si es peor que cojan uno de tus dulces y

apetitosos bombones, lo rechupeteen y lo vuelvan a dejar. Y no vamos a

entrar en el tema, pero... RECICLAR. ¿Os suena verdad?

Si hablamos de amores... nosotras lo vivimos un poco de lejos, lo más

cercano es cuando nos utilizan para conquistar a su media naranja o en

aniversarios. Pero eso no te impide echarle un ojo a ese bote de galletas,

bajo en calorías, depositado en el armario de en frente.

En fin, la vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a

tocar.

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El sacapuntas enamorado

¡No me gusta la vida que tengo como sacapuntas! Y sobre

todo si estas enamorado de un lápiz.

A mi me compraron en una papelería, era muy barata y

de esas de metal. Para mi es imposible que le guste a un

lápiz, porque cada vez que me utilizan para afilar un lápiz

les voy quitando un poco de vida; y por eso ningún lápiz

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quiere pasarse el resto de su vida conmigo, porque sería

muy corta.

Encima de no poder estar con un lápiz mi cuchilla se va

desgastando, y cuando está muy desgastada, en vez de

afilarme me tiran y compran a uno de mis nuevos y

llamativos compañeros. ¡Que dura es my vida!

LA CEBOLLA

Hola, soy la cebolla, esa gran verdura que tiene tantas

vitaminas. Es una gran pena que por solo el sabor tan fuerte

que tengo, nadie quiera estar conmigo.

Yo puedo estar acompañado de otras verduras, pero

porque tapan mi mal sabor y nadie se da cuenta que estoy en

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su comida. Por ejemplo, en ocasiones, cuando me introducen

en la receta de alguna tortilla de patata, nadie se da cuenta

de que me tiene en su boca, y que soy yo quien le da ese

toque tan especial a la tortilla.

Además de esto, tengo buenas vitaminas para la salud. La

vitamina A y la vitamina B2 y ayudo a prevenir la

osteoporosis, que es la enfermedad que disminuye la cantidad

de vitaminas de los huesos.

A todos mis amigos les hago llorar, si no llevan gafas de

bucear puestas, y si por un casual me prueban recién salida

del huerto, ponen caras muy raras como con mi amigo el

limón. Pero también he sido la inspiración de un gran autor y

poeta Miguel Hernández en su poesía “Nanas de la cebolla”.

Me gusto mucho ese poema y extendió mi sabor por toda

España.

Usadme en vuestra dieta, porque tengo un gran valor en

ella, y además, junto con mis amigos y amigas verduras,

¡tengo un sabor estupendo!

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Desde la silla de tu cuarto, o de tu sitio en el colegio, te veo

todos los días.

No sé si estoy enamorada de ti pero sé que tú me necesitas.

Depositas en mi todo lo necesario para el día. Depositas en mi

todas las asignaturas, tus deberes que has realizado con gran

esfuerzo, y me haces guardiana de tus pertenencias, y a veces

me metes cosas sudadas...

Si, soy tu mochila del colegio.

Todas las mañanas me coges, te abrazo, y juntas recorremos el

camino de un duro día.. A veces me maltratas: me usas de

portería, me dejas encima de un charco, me ensucias, me

golpeas… pero no me importa, se que me necesitas, y que no me

abandonarás, porque me necesitas.

Llegará el día, que yo ya viejita, me irás intercambiando, por una

más joven, más ligera, más llamativa, con un nombre especial, mas

moderno de marca… pero estaré contenta por la labor cumplida, y

porque sé que, en el fondo, te dará pena dejarme en casa, y más

tarde en el cubo de la basura.

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Amiga mía, yo me sacrifico por ti, para que aprendas, para que

crezcas,…y como buena amiga, para mi eso es suficiente. El día

que me dejes, simplemente te miraré por última vez, y te diré…

¡Hasta siempre compañera mía!

Hola! ¡Mi vida es maravillosa! Como podéis observar soy un

libro de texto. Sí, lo sé, normalmente los libros de texto no

suelen ser libros muy felices pero mi dueño es una persona

estudiosa, respetuosa y amable y me trata con todo el

cuidado del mundo. Los objetos, somos budistas o hindúes no

lo tengo muy claro lo que se es que tenemos reencarnación

bueno tampoco exactamente… Para los objetos la

reencarnación es pasar a manos de otro dueño y lo que yo se

es que en mi vida anterior fui un libro de texto muy

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desgraciado. Cuando mi actual dueño me acogió, tenia varias

paginas con los bordes rotos, pintada obscenas en otras ¡y no

había nada subrayado! Menos mal que por fin tengo un dueño

como dios manda y espero durarle mucho. Me da mucha pena

por mis compañeros de clase, los otros libros, no son

tratados de la misma manera pero de todos modos soy feliz.

Me llaman lapicero. Tengo que estar escribiendo todos los días de la semana. Cuando se me acaba la punta el sacapuntas me tiene que sacar y afilar la punta .Puedo tener diferentes colores(amarillo, rojo, verde...) e incluso un color diferente en cada extremo , normalmente el rojo y el azul. En ocasiones,me utilizan como herramienta para el dibujo y para ello tengo que ser especial. Cuando escribo estoy contento y, por otra parte, cada vez que el sacapuntas me saca la punta me quedo pequeño,y me quedo triste.

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Después de escribir durante mucho tiempo me gastan y me quedo muerto. Al final , como no sirvo para nada, me tienen que tirar a la papelera y tendrán que coger otro lápiz que escriba mejor, este afilado y que no se gaste muchas veces .

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LA TAZA

Hola,soy la taza de café que suele usar la gente para

desayunar.Aunque parezca que no,mi vida es muy humillante y

agobiante.Ahora os explico porque.

Mi vida es tan mala,porque todas las mañanas,la gente me llena de

un liquido que suele estar muy caliente y pegajoso.Aunque si te

digo la verdad eso no es lo peor de todo,ya que la gente cuando

quiere beber,me babea toda la parte superior de la cabeza.Y eso

es realmente asqueroso.

Aparte de eso,ya sabéis lo agobiante que es que te estén

agarrando todo el rato,¿no?.Pues a mi siempre me agarran del

mismo brazo,cada vez que quieren beber de mi.

Bueno...Así que como ya os e contado,mi vida es un tremendo

tormento.Así que desde aquí os pido que por favor,que me tratéis

con más respeto cada vez que me uséis.

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El Celofán Orgulloso

Buenas tardes, me presentare, soy el celofán, celo, para mis amigos. Me

gustaría que supieran que me siento orgulloso de mi trabajo pegando lo

que se despega, arreglando lo que se rompe y juntando cosas pero he de

admitir que una profunda pena me corroe el corazón pues por cada vez

que uno algo pierdo una parte de mi propio cuerpo y también de mi vida.

Por este motivo han de saber que busco un sucesor, he arreglado lo del

testamento y solo me queda un milímetro de vida.

Pero a pesar de todo esto seguiré trabando para conseguir la unidad

mundial, no defraudare a mi lema, trabajaré hasta la muerte para

conseguir la unidad mundial. Pero en el momento en el que los fieles

ángeles de dios nuestro señor vengan en busca de mi alma cuyo cuerpo

yace inmóvil y sin vida entre dos hojas de un mundo corrompido por los

siete pecados capitales quiero que sepáis que os perdono todo lo que me

hayáis hecho hoy y en el pasado, así que sin nada mas que decir partiré

hacia el exuberante paraíso que me espera junto con el creador supremo.

(Murió en el mismo instante en que pronunció la última letra pero su hijo

cogió las riendas y continuo con la labor que hasta ahora él había hecho)

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Sí, ese soy yo…el reloj. Soy el que te marca el principio y el final de todas

y cada una de las actividades que haces a lo largo del día. Sé que muchas

veces desearías que descansase y no hiciera mover mis pequeñas agujas,

por ejemplo, en esos momentos en el que cada vez ves mas cerca la hora

de marcharte a casa y otras veces te gustaría que mi velocidad se saltara

los segundos y esos segundos los minutos así hasta que todo acabara de

una vez…

Pues eso, que a mí me ha tocado ser un reloj analógico y eso no me gusta.

Me hace sentir viejo, rustico, apagado, siempre haciendo el movimiento

de agujas intenso y uniforme…!No me gusta! Todos mis amigos son relojes

digitales, con sus cronómetros incluidos, alarmas etc, y yo aquí, con mi

correa vieja y mis dos agujas plateadas. La verdad es que tampoco quiero

ser como ellos, me gustaría ser un reloj de arena, tan serenos y

tranquilos… El problema también es que mi esposa es la pila y cuando

discutimos por puntualidad ella decide dejar de trabajar y eso me supone

el retraso de unos minutos y a veces hasta de horas. Quiero divorciarme

de ella y vivir con mi verdadera amada, la arena. Me gustaría ser un reloj

de arena y así poder disfrutar de la tranquilidad y bienestar y pasarme lo

que me quede de vida con el amor de mi vida

Aunque nosotros seamos muy estrictos a veces nos gustaría parar…!Sí,

eso seria como parar el tiempo! Unas vacaciones no vendrían mal, ¿No?

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EL TIPEX ENAMORADO

Una vez, un tipex, se enamoró de una pluma de escribir.Cuando la pluma hacía algo mal, el tipex t enía que borrarlo,aun que a ella le causaba muchisimo dolor. Ella era muy rellena y cuando estaba medianamente nueva, la pluma se fijaba a veces en ella,pero de tanto usarla, fue a delgazando bruscamente por causa de la pluma, ella se sentia f ea y ya la pluma no se fijaba en ella.Eso le causaba mucho dol or y entonces empezó a vomitar tinta blanca sin parar , al de un buen rato de tanto vomitar se quedó sin tinta, fué directa a la basura .

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Hola yo soy segundin y soy un reloj de muñeca y hoy os

contare mi historia.

Ya hace veinte días desde que salí de la relojería recién

adquirido y nuevecito. Aun no sabia lo que me esperaba , ya

que nada mas abrocharme en la muñeca de mi dueño

comenzo mi desdicha .

De aquí a allá de allá qui , atrasa la hora ahora adelantala, pon

la arlarma quita la alarma, para aquí para allá . ¡No paro ni

cuando se va a dormir ! Por que se va a la cama a las 11:30 y

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pone la alarma a la 1 :30 , siempre pito cuando me acabo de

quedar dormido y todo para que me intente apagar y me tire

contra la puerta.

¡Ojala fuera un reloj de pie! .

¿Pero.... como se sentira el?

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Soy un libro de lengua y literatura(2ºESO)

aunque todos me llaman “El libro”. Tengo 263

páginas y estoy lleno de sabiduría, tengo 12

temas y mis ultimas diecisiete páginas que

tengo son de gramática. La gente me suele

mirar constantemente, no se porque, pero me

encanta que me miren, porque a si soy el

centro de atención. Pero frecuentemente la

gente me llena de pequeños dibujitos(a veces

bastante grandes) que me dejan horrible y

nada presentable. Luego también hay otra cosa

que me molesta muchísimo y es que la gente

me mete en la mochila de cualquier forma y se

me arrugan todas las hojas, también cuando

me pasan de hoja me llenan completamente

de arrugas. Aunque vivo mejor que un

cuaderno porque por lo menos a mi no me

arrancan ninguna de mis queridas hojas.

Además todos los lunes y miércoles me prestan

toda la atención durante una hora y los jueves

durante cincuenta minutos, sin contar las horas

que mete la gente en sus casas en estudiarme.

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La ciudad

Es de noche, la ciudad está oscura y fría, el día ha sido

largo pero ella sonreía, el ir i venir de la gente sobre sus

calles la hace palpitar y la llena de vida. Escucha

silenciosa lo que hablamos y observa nuestros

movimientos. Algún día como se enfade, igual, desvelará

nuestros más íntimos secretos, pero no será hoy. Ya

duerme y el cielo la cubre con una manta negra con

puntos blancos (Estrellas) , mañana será otro día y ella

ofrecerá sus calles para que las pisemos y vivamos

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Es duro. Es duro ser un viejo sofá. Es verdad que eres más

cómodo que los sofás más nuevos y modernos, pero ellos

reciben un trato distinto a mí. A ellos los cuidan y limpian, y

los tratan con esmero. Pero a mí… Yo ya no soy moderno. A

mis dueños les da igual cómo me siento cuando, por

ejemplo, ponen sus malolientes pies encima de mi tripa o se

sientan clavándome los codos… No me importa que dos

personas se sienten en mí, ya que soy un sofá de dos plazas,

pero no puedo permitir que cuatro personas se sienten en

mí. Se me debilitan las piernas y aunque intento

mantenerme, ya no soy joven. Solo solicito un poco de

respeto y cuidado, porque aunque no sea tan superficial

como esos sofás tan apagados de ahora, tengo también

sentimientos y soy un mejor sofá. Solo respeto y cuidado…

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Hola, soy las llaves de casa de un chaval de catorce años y la verdad es que

los días de trabajo son agotadores. Imagínate, todos los días levantándote

prontísimo para ir al instituto e al igual que mi amo, dormirte en el pupitre

hasta que un grito de la profesora te desvela de un bonito sueño, ``HA

llegado el verano´´.

Todavía es peor los días de entrenamiento, cuando el caradura de mi amo

me mete con todo lo sudado en la mochila de entrenamiento y se olvida

de que a nosotras las llaves, nos gusta tener una buena higiene. Hay días

en el que su madre le mete algún aperitivo en la mochila y por razones

que me parecen muy poco raras de él, coge los bizcochos y el zumo y se

olvida del plátano, plátano que, con el tiempo, se va deshaciendo y sus

pegajosos restos se empotran contra mi cara.

La verdad, es que me gusta mucho mas el verano, ya que tengo más

tiempo para descansar y relajarme después de tres trimestres agotadores

que espero que no vuelvan nunca.