Upload
leopoldo-cervantes-ortiz
View
215
Download
3
Embed Size (px)
DESCRIPTION
cuarto volumen
Citation preview
VOCACIÓN DE SEMILLA (1986) Leopoldo Cervantes-Ortiz
Contenido CON LA CIUDAD A CUESTAS Hacia el mar Silencio vociferante… Saturados de naturaleza… Con la ciudad a cuestas… Soleada soledad Gallo (tres apuntes) Sol de marzo… De tierra… Sola queda la tierra… ENCONTRARÉ TUS PASOS No quiero dormir… Te busco en la sílaba milenaria… Dichoso Quevedo… Bofetadas limpias… Una mujer desnuda… Encontraré tus pasos… Abandonar… No es casualidad… TRES NOMBRES María Angélica (1973) María del Pilar (1974) Sandra (1974) VOY Y VENGO Mi calle está llena de sombras… Poesía aleatoria… Voy y vengo… Hoja virgen de papel… Caí del suelo y soy… Atravesar la vida hasta llegar al verso… Pálido cemento… Kilométrica luz agonizante... Tres libreros ocupan mis poetas... Nocturna voz Dedicatoria para un libro de Borges
ESTRELLA DIURNA Llega Jesús Por la luz… En la pira de los días… El hombre equivale a su memoria… Estrella diurna… Mediodía de la vida… Polvo de seres… Si aprendemos a nombrar… Todos volvimos a la vida… Nos visita la muerte…
aquella simple aventura sin vocación de semilla…
ALBERTO CORTEZ
CON LA CIUDAD A CUESTAS
Hacia el mar
Arenas tranquilas: las inquietas.
Mis pasos se aproximan. Voy
en sentido contrario a la marea.
Regreso a la tierra muerta.
Quiere abarcar más territorio
y el corazón te imita sin saberlo:
quiere poblar a solas el silencio
con la pericia de las horas quietas.
Rumor que aumenta con el sol
a cuestas. Gira la mente en ti:
se va el callado tiempo mesurado.
Esquivo el rumbo de tus olas.
Así aparezco entre tus ondas:
pequeño desierto apretujado
por tu feroz ataque que estimula
las ansias de encontrarte.
SILENCIO VOCIFERANTE
la noche campestre obliga a pensar
en el paraíso primigenio
donde la ausencia de luces de artificio
no era motivo para sufrir nostalgia
por la mal llamada civilización
SATURADOS DE NATURALEZA
viben por intuición sin afectarles
el curso de las mareas políticas
Su esencia es primitiva
ligada a la tierra
y en este sentido
son más humanos que nosotros
CON LA CIUDAD A CUESTAS
salí al campo
para escuchar el canto de la tierra
y nutrir mi comprensión de la poesía
El verde y el pardo
se conjugan con la luz solar
para hacerse presentes en las bocas de los hombres
Soleada soledad
SOLEADA SOLEDAD
adormecida. Quedo
atrapado por tu calma:
la luz me seduce.
El silencio grita
con voces que no conozco:
es el canto de la vida
sola. Intruso soy
y en el minuto
en que mi vista paseo
sobre este verde
llega el recuerdo
del paraíso perdido.
La sed se acaba.
Con el viento
que atropella
rejuvenezco y sé
que un sitio como este
es mi destino. Nubes
al alcance de mi mano
dicen con certidumbre
que el cielo está cerca:
se ha juntado con la tierra.
Formo parte de ambos.
FELIZ ARRIBO A LA QUIETUD.
Añoro la candidez del alma
que corresponda al canto
primitivo del día.
Imágenes naturales
se agrupan por bloques:
aquí no hay tiempo.
Lo hemos inventado
con los gemidos austeros
ajenos al azul de arriba:
de allí desciende música
pero el oído es necio.
La pendiente no engaña
a quien por ella baja:
el horizonte nace
de este lado del sol.
Gallo (tres apuntes)
CABEZA GRAVE, ROJA.
Nada escapa a su control:
la gallina infiel
o la tardanza de la aurora
que debe anunciar.
*
PROFETA DE LA MAÑANA,
la proclama con energía.
Tiene éxito:
todo se vuelve luz.
*
ENEMIGO DE LA NOCHE,
sale de ella con un grito.
Nunca deja de pelear:
es la mañana emplumada.
SOL DE MARZO
angosto y bravío
apareces
cuando quiero una noche más larga
NUESTRA PIEL ES DE TIERRA.
por eso cuando el sol golpea más directo
su alegría nos desborda.
De tierra:
somos campo fugado.
En nuestro cuerpo
quiere florecer el paraíso.
La hierba nos desea.
Quiere invadir con su frescura
el asfalto de la memoria
que nos engaña
con el espejismo citadino.
¿Será que el cuerpo quiere adelantar
el regreso a su lugar de origen?
SOLA QUEDA LA TIERRA.
Las casas otros las habitan después.
Nunca faltan habitantes para ellas.
Ruidos de niños de hombres de amantes
que pelean rebotan en sus paredes.
Las paredes son oídos sordos
que albergan los ruidos humanos.
La vida hace mucho ruido en nuestras bocas.
Somos conductores diapasones de la vida.
Transmitimos el sonido
pero nunca el nuestro.
¿Qué impronta dejamos en la tierra o en las casas?
Las plantas nacen solas y así permanecen.
Los animales se aman entre sí
pero nunca a nosotros.
¿Tiene razón la religión
cuando dice que somos peregrinos en la tierra?
¿No somos más bien sus habitantes fortuitos?
Nuestros hijos aman la tierra también.
Al ser adultos aprendemos a mirarla:
cómo vive cómo permite que la pisemos en silencio.
Qué sola vive la tierra.
Será por eso que nos regala de vez en cuando algunos frutos.
Los paisajes son frutos visuales de la tierra.
Por eso nos nutren con su poesía antigua.
La tierra es un inmenso poema solitario
y nosotros sus torpes lectores.
Tejupan, Oaxaca
ENCONTRARÉ TUS PASOS
NO QUIERO DORMIR
con esta boca seca
de tanto repetir
e inventar nombres
No quiero dormir
sin antes visitar
las grutas sentimentales
del corazón descarnado:
víscera que siento latir
pero que no demuestra
sus dotes para el naufragio
No quiero dormir
sin encontrar
la luminosidad de la noche
la lucidez que caracteriza
al cielo sin sol
cuya ausencia temporal
produzca claridad en la memoria
No ya no quiero dormir
con las mismas mujeres
poblando el sueño
abandonándome en laberintos interminables
con el vértigo poseedor de la añoranza
No
Quiero cerrar los ojos
sólo si es para enfrentarlos
con la otra realidad
la que se despeña
sin sollozos madura
a fuerza de batallar con los espejos
con los caminos no transitados
más que con la intención del pensamiento
Quiero dormir a solas
con mi conciencia contemplándose a sí misma
en las aguas del amor
para que valga el sueño
y el despertar no sea
la inmersión fortuita en el fango cotidiano
de esta ciudad que sufro
y me sufre a la vez
con mi neurosis pretérita añeja
marchita
TE BUSCO EN LA SÍLABA MILENARIA
Sé que a tu vida me es imposible entrar
por eso te atrapo en la palabra
sin que lo sepas y te enoje la verdad:
Ya no amo tu presencia corporal
sino el efluvio de relámpagos sensoriales
que me provoca visitar tu nombre
ese montón de letras
en que te has convertido
DICHOSO QUEVEDO:
él era polvo enamorado.
Yo sólo soy polvo.
BOFETADAS LIMPIAS
los amores fallidos
no dejan cicatrices
UNA MUJER DESNUDA
es un pedazo de eternidad
que a través del ojo
de la cerradura
nos deja ciegos
con su grosera brillantez
ENCONTRARÉ TUS PASOS
en el latir de esta ciudad irredenta
Buscaré tus ojos
entre la multitud enajenada
que no observa más que su camino nublado
Trataré de hallarte
en la soledad sudorosa de los camiones llenos
de rostros ansiosos por llegar a una calle
Inventaré una historia
en la que ambos giremos ajenos
al devenir del desastre que se acerca
Pintaré tu rostro
con estos labios
que anhelan gritar consignas de liberación
con esta boca que proclama emocionada
la realidad del hombre nuevo
que nace en la cruz
Amaré tu sendero
como el clamor eterno
de las almas dormidas
que palpitan en los pechos humanos
Creeré que también me buscas
en las heladas horas del insomnio
cuando hace falta un recuerdo
para tejer la noche
porque como la vida
se nos va dilapidada
por nuestras manos necias
Oh amiga sin nombre
hoy que te he buscado
entre el viento y la lluvia
he de decirte que el amor
a veces es más bello
cuando fabrica locuras
de las que no queremos arrepentirnos
14 de julio, 1986
ABANDONAR
tu
cauce cárcel
es
comprender callado rebelarse a solas
la vaciedad del verso contra la noche
fría
nombre fuego
es
promover mañanas sujetarse mudo
entre la ciega noche ante el caudal de sombras
ruta beso
es
recibir el eco derramar la vida
de las heladas horas entre las manos yertas
NO ES CASUALIDAD
que el lugar del beso
sea también el de la palabra:
ella es un beso que le damos
al viento.
El beso y la palabra
pueden definirnos fácilmente:
para besar hay que hablar primero
y el encuentro que produce el beso
estimula las palabras que lo expliquen:
la palabra poética que nombre al beso
al eterno sitio del encuentro
entre un hombre y una mujer.
TRES NOMBRES
María Angélica (1973)
AMANECÍAN LOS SENTIDOS.
Los labios deletreaban torpemente
la palabra mágica del sentimiento.
Tus piernas adolescentes
al brillo del sol
adquirían un color que bañaba
de insensatez al cerebro.
Eras el inicio de la peregrinación
hacia los mares de la ausencia,
el dulce anticipo del goce fugaz,
la inquieta meditación a deshoras
que colocó a la infancia en su lugar.
María del Pilar (1974)
TRAÍAS EN LAS COSTUMBRES
un romanticismo anacrónico
que te acomodaba plenamente.
Tu palidez acrecentaba
ese aire de inaccesible imagen virginal.
Al hablarte despertaba el gorrión de tus sueños.
llegabas a la vida
con unos anteojos redondos
que te mostraban el mundo como un jardín
plagado de flores perpetuas.
Nunca se unieron nuestros labios
pero tu trenza castaña
y tu estatura menuda
hoy te devuelven a mi vida.
Sandra (1974)
VESTÍAS DE AZUL.
En el inicio de tu juventud
aparecían destellos de serenidad.
Mirabas con sigilo
la vida particular que te acechaba.
En ti se daban cita
el rumor inesperado,
la excitación escolar
y el enojo infantil
en un instante.
Morena tu faz,
en tus mejillas aparecía
el anuncio de caricias irrealizables
y tu sonrisa,
plena de presagios
que mis ojos no verían cumplirse,
inundaba el júbilo del mediodía.
VOY Y VENGO
MI CALLE ESTÁ LLENA DE SOMBRAS
Yo soy una de ellas
Hay días en que muero
y la oscuridad
en vez de ser total
se transfigura en un océano
de voces distantes
que deletrean el poema de la luz:
amanece.
POESÍA ALEATORIA
ven a capturar mis insomnios
dales de tu casualidad iluminadora
oblígalos a producir
fantasmas de palabras
nuevos teoremas
azules horizontes
en fin
no me abandones
VOY Y VENGO
por la orilla de mi vida:
vivo y muero.
HOJA VIRGEN DE PAPEL
no quiero mancharte
con la loca ineptitud
de mi conciencia
CAÍ DEL SUELO Y SOY
pasajero del interior de la tierra
viajo en tercera clase y siento
los pasos de la injusticia
que maltratan al corazón
ATRAVESAR LA VIDA PARA LLEGAR AL VERSO
vaciar en el instante
la escasa eternidad que se percibe
Sacarle jugo al día
para beberlo en una imagen
en una calle poblada de besos
de amantes que provocan envidia
al paso de los puritanos
PÁLIDO CEMENTO:
dura es tu esencia
suave tu color.
Eres la imagen de mi vida.
KILOMÉTRICA LUZ AGONIZANTE
no mueras hoy así
sin darte tiempo para luchar contra la noche
siente que ella es el germen de la muerte
que obliga a los seres a navegar con los ojos cerrados
porque al abrirlos no hay diferencia
las dimensiones se estrechan
se unen trágicamente
Quiero vivir contigo
acariciarte con mi pupila
en los seres que habitan el mundo
Verte atravesar la lluvia
para abandonarme en los cristales multicolores
que prefiguran la variedad de la vida
TRES LIBREROS OCUPAN MIS POETAS:
su palabra humana
es la exclamación que se levanta
cual débil eco de la otra
la voz que nutre su asombro
bocas amigas que ponen en mi lengua
los nombres del mundo
NOCTURNA VOZ DEL SUEÑO
me cantas una canción
que la memoria al despertar
transfigura en prismas de colores cambiantes
gemas naturales
copos de agua
copas de nieve iluminada por un sol azulado
y a su lado la luna extraviada
vuelve a comenzar
el canto de la eterna noche
Siempre el mismo
visita los pliegues de la almohada
con modulaciones prestadas
por curvas femeninas
que no me hacen despertar
más que en el invierno caliente
época feliz que inventa mi loca ansiedad
Dedicatoria para un libro de Borges
SI DE LO POCO QUE ES EL HOMBRE
lo único que queda es la poesía,
hazme un favor:
escucha la voz de la vida
a través de estos versos.
¡Salud!
ESTRELLA DIURNA
Llega Jesús
LLEGA JESÚS A LA CIUDAD.
La capital del pacto abre sus brazos
para engullírselo
con su sonrisa de pecado.
Llora por ella mientras cruza
el atrio de su templo luminoso.
Ha de morir crucificado
ante la insensatez de sus hermanos.
Pero entre ellos hay gritos de jolgorio:
el hosanna habita en muchas bocas
donde la esperanza quiso nacer
como anuncio del Reino
que ha de brotar de su cuerpo destrozado.
No hubo comprensión ni compromiso.
El olvido acribilló aquellas palmas
que se movían a la luz del sol
para convertirlas en instrumentos de tortura.
Por un instante
aquel borrico se detiene:
Jesús recibe en vida
el honor de Ungido que merece.
Este preludio anuncio presentación
del rey de reyes
a pesar del rumor de sangre que se acercaba
nos anticipa el fulgor de su venida
la final y definitiva
cuando todas las razas de la tierra
tengan que contemplar su dominio
mientras el afán de juicio se consuma
Hoy alegremos nuestras mentes:
Jesús viene a cumplir su cometido
Las palmas de los pobres galileos
en relevo de siglos
han llegado a nuestras manos
POR LA LUZ QUE ME OBLIGAS A PORTAR
por el cauce ofrecido a mis antojos
por la paz que preside el horizonte
—abandono la vida negligente
Y apresado en tu luz que inunda todo
indignado por ver mi necedad
suplicante al saberme conquistado
—me sumerjo en las mieles de tu gracia
Es en vano negar mi realidad
sólo en ella comprendo tu justicia
y aunque el valle malvado es mi delicia
—tu futuro anticipa la verdad
EN LA PIRA DE LOS DÍAS
se consume nuestra vida
lenta lumbre avivada
por el viento del tiempo
EL HOMBRE EQUIVALE A SU MEMORIA.
La vida es una sucesión de tiempos fragmentados
que el sol se encarga de iluminar
hasta en la noche
ESTRELLA DIURNA
la novedad
es arquitecto de la dicha
MEDIODÍA DE LA VIDA:
¿llegas solo
o hay que salir a conquistarte?
POLVO DE SERES HAY EN EL MUNDO
Las almas no se mueven a gusto en los cuerpos
son más rápidas que ellos
y la ilusión de vivir
no es más que la persecución obsesiva
del silencio
con su guadaña de tedios
SI APRENDEMOS A NOMBRAR
lo que de nosotros permanece
con el paso del tiempo
algo habremos avanzado
en el interminable ejercicio
de darle un nombre
a nuestra identidad de tierra
El polvo
—que nos define con mágica exactitud—
es una multitud de espacios detenidos
entre los dedos del azar:
la vida se difunde
entre las dimensiones del ocio metafísico
y la eternidad nos malacostumbra
sembrando en la conciencia
frutos que no hemos de ver
El egoísmo del tiempo
es más fino con nuestra existencia:
los ciclos van y vienen
nos engañan
y un buen día
entre uno y otro
a mitad de la noche
caemos presos en el calabozo del olvido
—otra palabra apócrifa—:
fuimos hechos para él
y el recuerdo
es la mayor ilusión
de nuestra piel de barro
TODOS VOLVIMOS A LA VIDA.
Estuvo frente a nosotros
abierta de par en par
la angosta puerta de la muerte.
Apenas se cerró
nuestros ojos se abrieron
y la siguieron viendo abierta.
La vida es otra
con la sombra de la muerte
a cuestas:
la saboreamos durante un minuto
e
t
e
r
n
o
NOS VISITA LA MUERTE Y CAMBIA TODO:
nada es igual después de verla
después de oír sus pasos
Nos murmura al oído
el gastado cuento de la brevedad de la vida
pero sólo hasta que ella lo narra
lo entendemos
Ella no puede oírnos:
es sorda
pero ojalá también fuese muda
Habla con su guadaña
y no admite interrupciones