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MANUEL scos!;z998 1 MUNI LIBROS 5 MUNICIPALIDAD DE LIMA METROPOLITANA SECRETARIA DE EDUCACION YULTURA

Poesía Manuel Scorsa

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Poesía.

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MANUEL

scos!;z998

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MUNI LIBROS 5MUNICIPALIDAD DE LIMA METROPOLITANASECRETARIA DE EDUCACION YULTURA

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Edición : Eduardo Vega PosadaElías Mujica Barreda

Carátula : Carlos González Ramírez© Manuel Scorza© por esta edición, la Municipálidad de Lima Metro-

politanalera. edicion. Lima, Agosto de 1986

Impreso en el Perú

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• MANUEL SCOR.ZATESTIMONIO DE VIDA

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OCTUBRE O427

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Yo nací en Lima; en la Maternidad,'ese hospital pa-ra lagente en donde actualmente las madres pártu-rientas se hacinan hasta el horror. Está ubicada, meacuerdo bien, en la ¿udra catorce del jirón Miró Que-sada. En realidad no he vuelto a pasar por la Materni-dad de Lima, ni creo que haya entrado nunca, aunquenací ahí.

Y ahora veo que verdaderamente no tengo un sitiode nacimiento, porque un hospital no es, pues, un lu-gar de nacimiento. Sé que a mi madre la despacháronmuy rápido de la Maternidad porque necesitaban' lacama para otra parturienta. En ese entonces siquieraera así, porque ahora, sabemos, acomodan a la vez ados o más parturientas en una mismacárna. Sí yonací en la Maternidad de Lima. -

Veo que mi vida está muy relaciónada con las clí-nicas ycon lós hospitales. Y singularmente está rela-cionada con el manicomio "Larco Herrera" de Mag-dalena, en Lima, allí donde encierran a los locos. Estoporeue mi padre conoció a mi madre ahí, en el ma-nicomio. El era obrero y trabajaba en este hospitalpara locos. .-

Mi padre pertenece a un familia numerosa, de mu-chos hermanos que siendoaún pequeños se quedaronlibrados a la sola protección de mi abuela, es'decir ala miseria por más cue mi abuela luchaba heroica-

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mente para darles de comer. Y sabemos muy bienque dar de comer a los hijos es muy difícil en pueblosandinos tan pobres como Matara, en Cajamarca. Miabuelo,el padre de mi padre,se había ido al oriente, alPutumayo en la época del apogeo del caucho, con elsueño de hacer fortuna. Entonces los hijos, golpeadospor el ,hambre que rondaba en el hogar sostenido úni-camente por mi abuela, se fueron desperdigando porel mund6, algunos para no volver y verse nunca más;

Así es como mi padre después de penurias extre-mas, llega a la hacienda cañera Casagrande, en Truji-llo, es decir ya en la costa, para trabajar como obrero.Mi padre había pasado pena¡¡-dades tan extremas, jun-to con sus hermanos que esto los marcó mucho. Yocreo qte la tradición de desgracia que hay en unpueblo, en una familia produce una marca muy pro-funda. Mi padre era, pues,cajamarquino, de Matara.

Mi madre también proviene de- una familia en láque igualmente habían ocurrido grandes y tremendosdramas, -realmente dostoleskanos, que constituyen unaspecto que aún no he tocado en mis libros. Mi ma-dre había llegado a Lima huyendo también de la mise-ria, embarcada-en esas primeras olas de migrantes quellegaban de las provincias hacia la capital.

Entonces se encuentra con mi padre en el manico-mio "Larco Herrera", porque él ya se había traslada-do de Casagrande a Lima. -El entró a trabajar comomecánico ahí en el manicomio. Seguramente habíaaprendido ese oficio en el ingenio azucarero de Casa-grande. Y cuando entra al manicomio ya mi madreestaba ahí, trabajando como ayudante de enfermería,corno una muchacha auxiliar que debía cuidar y aten-der a los locos. 1-

Entonces mis padres se conocen ahí en el manico-

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mio, así se casan, y ahí mismo se establecen, viven eneste lugar de locos Después mi padre pasa a otro ta-ller. Aprende panadería y'se convierte en el sub-jefede la panadería. Ya en esta condición le dan un mejoralojamiento para que viva con mi madre, en una zonaen donde habían tres habitaciones, era una casa divi-dida en tres habifaciones.. dentro del manicomio,pero era un lugar, yo recuerdo, bastante grande, endonde había un palomar que para mí ha sido el palo-mar maravilloso al que yo subía, y ahora estoy pen-sando que quizás ese palomar será después una" "t6rreM futuro" que aparece en uno de mis libros.

Yo me he criado en el hospital "Larco Herrera".Es allí en donde tengo mi primer contacto con la lo-cura. Y qué curioso, antes de llegar al manicomio mipadre estuvo trabajando en el norte del Perú, en unade las haciendas del terrateniente don Víctor LarcoHerrera, cuyo nombre llevará' luego el manicomiocomo un homenajea su donante y favorecedor. DonVíctor Larco era un 1

gran gamonal-del norteque tam-bién regaló el púericultorio "Pérez Arafl íbar" y mu-chas otras obras.

Acoria. El paraíso perdido

Bueno., yo me crié durante algunos años en el mani-comio y 'después mis padres deciden irse a la sierra, alos Andes, entre otras"cosas, creo, porque yo estabaMuy -ma( de salud, sufría de enfermedades bronquia-les muy graves, pefo además nuestra situación econó-mica en Lima empezó a ser muy difícil. Es cuandomi padre decide que mejor nos vamos a la sierra, alpueblo de mi madre, Acobamba, en HuancaveJica, aunas leguas de Huayanay. 'Pero se queda en el camino,

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no. llegamos a Acobamba, sino que mi padre se animóa poner una tienda y panadería en Acoria, a poca dis-tancia del pueblo de mi madre.

Huancavelica es uno de los departamentos másatrasados del Perú; Ahora que están ocurriendo losacontecimientos de Ayacucho el periodismo peruanoempieza a descubrir otro país. Porque evidentementealgunos periodistas resultarían extranjeros si los con-frontamos con la realidad de lo que llamamos el Perúprofundo. Esto se ve bien cuando el Nictálope, el per-sonaje de mi novela Redoble por Rancas, sale de laprisión. Recuerdo que el Nictálope desciende delavión que lo trae del Sepa, la tenebrosa prisión perua-na perdida en medio de la selva, y da los primeros pa-sos ante las cámaras de la televisión que lo esperaban,y se pone a cantara hablar en quechua, esto lo-cuentamuy bien Guillermo Thorndike en una crónica estu-penda En esos mpmentos que había una sintonía to-tal en el Perú, eran los tiempos del gobierno del gene-ral Velasco, el periodismo peruano y mucha gente noentiende en absoluto qué era lo que estaba ocurrien-do. Eran años en que mi obra había sido aceptada porel Estado peruano, no como ocurre hoy con el gobier-no belaundista que es rechazada. El Nictálope hablaen 'medio de la expectativa que había concitado suliberación. Es el héroe de Redoble por Rancas, unhéroe. de'carne y hueso que había sido confinado enprisión por los opresores de-las comunidades indíge-nas..,Y el Nictálope habla en un idioma que la teleaudiencia del Perú, desconcertada por varios minu-tos, no puede entender y no entiende hasta que loslocutores le piden que hable en castellano.

Quienes tenemos sangre india sabemos que esteabismo ha existido siempre. Aunque es cierto que yo

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tampoco hablo quechua En mi infancia entendía elquechua, desgraciadamente nunca llegué a hablarloporque aun' en los departamentos más pobres delPerú hay grandes barreras y mi familia en Acoria sehabía convertido en una familia de pequeños comer-ciantes y eso ya nos diferenciaba de los indios.

Mis padres salieron de Lima con destino a Aco-bamba, la tierra -de mi madre, pero se quedaron enAcoria, un pueblo ubicado en la línea del ferrocarrilentre Huancavelica y Huancayo. Ahí mi padre se con-virtió en un pequeño comerciante. Tenía una pana-dería, la cual le daba ciertos estatus, de modo que yono ten ía contacto con los indios, no tuve la experien-cia que tuvo José María Arguedas, ni pude aprenderel quechua. En esa época yo , ten ía unos siete años. Mipadre como es cajamarquino tampoco habla quechua,mi madre sí.

Ahí en Acoria empecé a ir ala escuela y viví partede mi infancia; Acoria me ha dejado experiencias de-cisivas, y fue para mí la imagen del paraíso. Muchasveces he soñado que llégaba a un lugar perfecto en elmundo .y este lugar era Acoria o, tal vez, mejor unamezcla de Acoria y Acobamba. Si yo, tuviera en estosmomentos otra energía, la energía que tuve en otrosinstantes.de mi vida, yo creo que me iría a Acoria.Cuando en alguno de mis libros hablo de pueblos de -una sola calle por donde nunca pasó la dicha, estabapensando en la larga calle de Acoria. Acoria es en mimemoria un pueblo precioso, por donde pasa un ríomaravilloso. Acoria es uno de los 'pocos lugares endonde puedo decir que fui feliz. Ahí también viví laprimera ocasión

1en que enfrenté a la muerte. Yo esta-

ba en el río, y el río me arrastró. Es un río de aguamuy clara; pero que corre con fuerza. De pronto me

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vi bajo el agua y tengo en el recuerdo una imagen co-mo si hubiera estado encerrado en un cristal y no medaba cuenta de que la muerte me llevaba. Entoncesun borracho, me acuerdo que se llamaba Gonzalo, yque estaba permanentemente ebrio, .que era uno deesos hacendádos arruinados, que son tan pobres quemás parecen mendigos, que ni siquiera tienen una ca-ma para dormir, byéno, este borracho entró al río yme sacó. Cuando recobré el conocimiento me encon-tré caminando sin zapatos sobre piedras. -

A p&rtir de ese instante este borracho que habíasido un, hacendado muy poderoso, tuvo una- actua-ción importante en la vida de mi-padre. Había salvadoa su hijo y lógicamente al haber salvado la vida al hijode un comerciante, ya podía pedir crédito en latien-da de éste. Entondes desde ese momento se convirtió ,

una especie de parásito de la casa. Porque, claro,para mi padre era imposible negarle crédito al' hombreque había salvado a su hijo de una muerte segura. Mipadre y yo nunca hemos hablado de esto porque des-graciadamenteyo no hablé con mi padre lo que debíhaber hablado, un poco debido a queuno no habla en_'el mundo, quizás, con las personas más importantes.Pero ahora veo a don Gonzalo entrando y saliendo,bébiendo, gracias a que tenía un crédito indefinida-mente abierto. En realidad se había salvado él.

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El futuro editor en un puesto de periódicos

Después de un tiempo que para mí es una eterni-'dad, volvimos a Lima. Mi padre había decidido regre-sar a Lima. Intenta una serie de actividades para so-brevivir, hace lo que hace toda la gente pobre parasobrevivir. Creo que ;a eso no puede llamársele nego-cio. Tiene un puesto de periódicos, y ahí es cuandovoy a tener mi primer contacto con la lectura. En elpuesto de periódicos voy a leer los diarios, las revistas,y especialmente una revista que para mí es muy im-

- . portante, y que lo fue también pará la gente de mi ge;neración, me refiero la revista argentina Leoplan;que traía historias, resúmenes de novelas que yo leíaconstantemente.

Era un puesto de periódicos ubicado en el distritode La Victoria. Por ahí cerca me matricularon en uncentro escolar; en ese barrio de gente pobre, y me fuemuy mal. No sé por qué razón una profesora me to- -mó como un caso perdido de estupidez y falta dé in-teligencia, h'ásta el punto de que automáticamente ca-da día qüe yo entraba a clase me daba un palmetazo.Hoy veo las resonancias que este hecho debe habertenido en la- mentalidad de un nifio. Esa especie decornlejo de inferioridad que empecinadamente mequería imponer. No sé que podía haber ocurrido,qué fuerza oculta empujaba a la profesoa para que

- actuara así conmigo. Ni siquiera podía decir que yono sabía la tabla de multiplicar o que era un bruto deremate, porque yo era un niño aplicado y formal, ex-cesivamente formal porque mi padre era muy severo.Bueno, pero el tiempo iba a desméntir , que yo era unidiota. . .

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Esto no quiere decir que en mi infancia todo hayasido tristeza. No, no. Yo, también, de alguna maneraera un privilegiado. Porque ahí donde la profesora meconsideraba un idiota, yo tenía el privilegio de disfru-tar de revistas ansiadas por todos los, niños que eranmuy pobres y no podían darse el lujo de comprarlas.Entonces, en la escuela, por un lado era consideradoun retardado mental por lá profesora, pero por otrolado era adulado y buscado, y había que ser simpáticoconmigo para poder leer Pif-paf. Esto me daba una'enorme situación de privilegio, pues yo disponía deun tremendo stock de revistas que eran ambicionadaspor esos niños para quienes normalmente resultabaninalcanzables. Yo tenía que cuidarme, claro, de mi pa-dre que era muy severo y siempre algunas revistas re-sultaban irremediablemente estropeadas. Eran revistasinaccesibles para esos niños tan pobres. Una revistacomo Billiken, por ejemplo, era muy cara.

Digo esto porque a veces uno tiende a dramatizar.La vida tiene, pues, dos lados. Ni siquiera en la prisiónvamos a decir que todo es negro.

Yo no sé si esta experiencia que viví en mi infanciaen el puesto de periódicos de mi padre, tuvo que verposteriórmente con mi actividad de editor tan discuti-da por los intelectuales del Perú. Con el paso de losaños yo mismo me he asombrado de las ediciones populares que hice, de' esos tirajes masivos, porque en-realidad y esto ya está probado, para ganar dinero nonecesitaba hacer ediciones populares sino más bienediciones caras, esto lo sabe cualquier editor avispado.Pero yo arriesgué publicando centenares de miles delibros en un país donde se decía que al pueblo no leinteresaban los libros. Y es que entonces yo creía, ysigo creyendo, que un proyecto editoriál debe tener

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un objetivo social. No hay que olvidar que yo fui unode los primeros en publicar a José Carlos Mariátegui ya José Matí en el Perú. Los autores que aparecieronen los festivales del libro fueron clásicos peruanos:González Prada, César Vallejo, Mariátegui. Me'sirviómucho, el haber estado en México, deportado por ladictadura del general Odría, porque ahí pude ver lainfluencia inmensa que los libros de José Vasconcelostuvieron en la identificación de los mexicanos con sucultura popular, con sus 'valores nacionales.

Creo que lo que me impulsó lanzar las edicionespopulares fue mi convencimiento de que existía unaterrible calumnia contra el pueblo, contra su capaci-dad y sensibilidad frente al arte y la literatura. Se de-cía que al pueblo no le interesaban los libros1 Y yosabía por mi propia experiencia que no había leídolibros porque no tenía capacidad económica paracomprarlos, pero no porque no me 'interesaran. Yocreo que en América Latina dé poder -venderse libros,se pueden vender millones si los gobiernos hicieranalgo por apoyar estas campañas. Claro que por otrolado vemos que la propia gente de izquierda afirmaqué el pueblo no quiere comprar libros. No es que noquiera, el ¿aso real es que no puede.

¿Qué es la patria?

Hay muchas experiencias de mi infancia que des-pués afloran en mi vida, en mis libros. La infancia escomo un sedimento que permanece en uno. En mili-bro de poesía "Las Imprecaciones", aparece un poe-ma "Patria Tristísima" que de alguna manera es unaalusión a mi visión infantil de la patria, aún cuandoesto no era claro ni explícito. Ese poema es también

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un rechazo, una protesta contra la poesía patrióticaque nos embut'ían y se les sigue embutiendo a los ni-ños en la escuela, "Cuando yo era niño veía al crepús-culo - agitar sus crueles alas sin saber qué buscaba miboca para gemir pero fui llenándome de cuervos, mi-vida fue cubriéndose de liendres, ahora son el dolorde esta tierra quebrada". -

Y es que la patria peruana está tan llena de espinas,de cosas sangrientas y terribles que si quisiéramos aca-riciarla las manos se nos mancharían de sangre y que-daríamos abrumados por el dolor. Por eso me parecéque hasta hoy la poesía patriótica es retórica y falsa,realmente falsa.

Y me pregunto si en algún morrento tuve concien-cia de que pertenecía a un país. Es curioso, pero yono sé hasta qué punto los peruanos sentimos una pa-tria. El hecho de cantar el himno nacional en la escue-la no significa absolutamente nada. Esto de la ideriti-dad con un país va incluso mucho más allá de lo quepodría decir., En Las Imprecaciones hay una crítica demanera aguda. Pero claro yo ya había pasado por unaexperiencia política dura. Ese libro de poesía lo es-cribí cuando tenía venticuatro años. -

Pero ahora veo que en mi infancia más importantesque las vivencias patrióticas fueron las vivencias reli-giosas. Yo estuve interno, y esto casi nadie lo sabe, enel colegio Salesiano de Huancayo. Ahí estudié prime-ro, segundo y tercer año de secundaria. Y me envia-ron a Huancayo porque yo siempre he padecido unasma tenaz y en Lima pasaba enormes dificultadescon mi enfermedad. Mi padre tuvo que hacer tremén-dos esfuerzos para poder mantenerme en ese colegioreligioso que realmente ellos,mispdres, no podíanpagár.La pensión casi - igualaba los ingresos de mi pa-

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dre, para nosotros el colegio resultaba extremada-mente caro. Por eso es que mi madrç me llevó prime-ro para internarme en el colegio nacional "Santa Isa-bel" de Huancayo. Pero cómo sería de aterrador elambiente del internado del colegio Santa Isabel quemi padre no se animó a dejarme. Ya cuando había-mos tomado el tren de regreso a Lima, mi madre to-móuna decisión tremenda y nos bajamos en Jauja.Decidió hipotecar ecoilómicamente a la familia paraque yo pudiera quedarme en el colegio Salesiano de'Huancayo. -

En el colegio Salesiano donde yo estuve ausentede las traumatizantes penurias económicas que pasa-ba mi familia, viví intensamente las experiencias reli-giosas. Yo he sido siempre un buen alumno. Desta-qué mucho en el Salesiano y en el colegio militar"Leoncio Prado" de Lima, donde continué la secun-daria, fui brigadier general y al final salí entre los pri-meros diez cadetes de la promoción. Recuerdo que elpresidente Manuel Prado, a quien describiré despuésen Redoble por Rancas; nos felicitó y entregó el pre-mio. Bueno, en los tiempos del colegio Salesiano yosentía un gran fervoral participar en las actividadesreligiosas. Luego en el colegio militar "Leoncio Pra-do" yo seguía creyendo en Dios. Lo que no recuerdoes cuando perdí la idea de "Dios. Y cuando me hanpreguntado esto yo no he podido responder, no ten-go una respuesta.

En el colegio Salesiano yo era un alumno que habíallegado a ser monaguillo. Ayudaba en la misa y paramí era una experiencia suprema, tanto que me sentíaextraordinariamente- feliz. 'Creo que esos momentoshan sido los de mayor y más intensa' felicidad y comu-ñión con Dios, al poder tener el privilegio de ser mo-

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naguillo, por ejemplo, en una misa cantada oficiadapor tres sacerdotes. Era la felicidad más alta. Estasson referencias eclesiásticas a las que aludo en unode mis libros cuando el administrador de la haciendaRetapata mata a un siervo y hay una misa de tres cu-ras pára evitar que muera el indio abaleado. La expe-riencia de monaguillo y la experiencia terrible del in-fierno que cada noche se repetía cuando nos exhorta-ban a no morir en pecado, constituían las vivenciasreligiosas más intensas. Es-ahí cuando tengo el coñtac-to más fuerte- y enfermizo con la muerte. Sin embargopuedo afirmar que mi estancia en el Salesiano fuemuy feliz como lo fue también mi estancia en el cole-gio militar "Leoncio Prado" de Lima, y fui un alum-no aplicado, tanto que si hubiera optado por la carre-ra militar seguramente que hubiera llegado a generalcomo-muchos de mis compañeros. No sólo era quenosotros, los primeros cadetes de la promoción, tenía-mos el ingresó asegurado a la escuela militar de Cho-rrillos, sino que como por sentido de casta, la forma-ción castrense iba a continuar reproduciendo nuestrasituación de ello. - -

Sin duda habría llegado a general, pero se interpusolaliteratura,los libros me indicaron otro rumbo.

Porque no sólo fui un alumno brillante, el caso esque además -era organizador, asumía responsabilida-des, y fui-invitad' o por el general José del Carmen Ma-rín, que entoncesera coronel,V por el general Mendo-za Rodríguez, que entonces era comandante, fui in-vitado a un almuerzo que entonces, siendo cadetes,.constituía un honor excepcional. En esa époça yoveía las cosas de manera absolutamente nítida, y enesa invitación-el coronel Marín yel cdmandante Men-doza insistieron mucho para que yo ingresara a la es-

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cuela de oficiales del ejército peruano. ' El caso era quea muchos de los mejores alumnos del colegio de. la es-cuela de oficiales, ya no les-interesaba la carrera mili-tar. Sin embargo el colegio "Leoncio Prado" había si-do fundado para ir formando desde casi niños a lasfuturas élites del ejército peruano. Y seguro que elloshasta la fecha no saben que la culpable de que los me-jores alumnos desertaran de la vocación militar fue ysigue siendo la biblioteca. Parece increíble, pero la in-fluencia de la biblioteca fue determinante en mi casoy en el caso de otros alumnos destacados. Porque, porejemplo,, la lectura del libro de Gorki, "Las Universi-dades", açabó por convencerme que la carrera militarno era para mí:Y en el "Leonció Prado"- yo hasta eracastigado por leer demasiado, porque retenía los li-bros de la biblioteca. Entonces me bajaban el puntajepara dejarme sin salidael fin, de semana, pero yo era

-buen tirador, un tirador de élite y como lbs buenos• tiradores estábamos sobrestimados, eso me levantaba

el puntaje y siempre tenía salida. Vivía pues, de algúnmodo, ahí en el colegio militár, una ¿mbivalencia, sin

- embargo no podría decir que fue una experiencia in-,grata. - -

Alguna vez un crítico francés me preguntó si la pre-senciá del mito en mis obras, no era una especie debúsqueda y recuperación de Dios o la creencia reli-giosa que yo ya había perdido. A mí me pareció unaobservación a la cual yo no podía responder fácilmen-te. Porque creo que' la muerte de la creencia en Dios'anunciada de manera prematura'por la filosofía, sólonos ha llevado a-vivir en una soledad metafísica esen-cial. La, frase tremenda de Nietzsche, "Dios ha muer-to' nos deja anonadados. Yo he éstado revisando nomi posición atea, porque no es que yo tenga una posi-

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ción atea, sino que estoy repensando e, problema por-que la matemática, la física contemporánea, me mue-ven a pensar que los argumentos de la filosofía son in-suficientes, como por ejemplo lo que nos dice Kanten la Crítica de la Fazón Pura. Me parece, pues¡ quehay algo válido cuando se dice que el mito es unafor-ma de querer recuperar a Dios.

Autores, Influencias y política

En cuanto a mis primeras lectúras de iniciación, no,de descubrimiento, pues eso había ocurrida en la in-fancia cuando me asomé a las páginas de la revistaLeoplan, puedo decir que empecé a leer a los novelis-tas rusos, luego Balzac, Flaubert. Mi contacto con éstos libros me va a cambiar definitivamente y me vaa 'llevar a la p'olítica IQué extraño! me parece queentre literatura y política hay un vínculo invisible pe-ro muy fuerte.

Eran los años finales del primer gobierno de Ma-nuel Prado Ugarteche y en el colegio militar "LeoncioPrado", pese al rígido control castrense, aparecen lasprimeras células clandestinas del APRA (Alianza Po-pular Revolucionaria Americana) y del Pártido Comu-nista. Yó intégro una de las células clandestinas delAPRA antiimperialista. Y podría decir que frente alofrecimiento de convertirme en un militar de elite in- -gresandb a la Escuela de Oficiales. de Chorrillos, optépor no optar, no elegí nada. Fui a la facultad de Le-tras de la Universidad San Marcos de Lima, en el Par-que Universitario. Ahí me dediqué fundamentalmentea vivir intensos amores imaginarios con algunas mu-chachas hermosas que iban a la universidad. Habíancomenzado a asomar algunos poetas jóvenes. Ahí es-

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taban Francisco Bendezú con su indumentaria decompadrito, Alberto Escobar que ardía de lirismo,Pablo. Macera que ya se inclinaba por la historia peroamaba también la poesía, Rodolfo Milla que era unpersonaje mitológicó.

En estos momentos nos impresionaba la poesía deEielson, la poesía de Martín Adán a quien yo habíaconocido en el manicomio. En esa época yo ten ía 'die-ciocho años y me imaginaba que Martín Adán sentíala necesidad de conversar con alguien de literatura,aun en el manicomio, Martín Adán vestía siempre untraje negro, más o menos bien, y se sentaba en uno delos pequeños parques que hay cerca del pabellón No.2, en ese lugar de paz maravillosa que para mí es el,manicomio, esa especie de poblado en el cual hay ave-nidas. El'parqué estaba cerca de la.panadería dondetrabajaba mi padre y cuando yo pasaba divisaba aMartín Adán sentado, como esperando a alguien, y yme acercaba para escuchar la lectura de sus poemas,muy atento, porque sabía qúe después me iba a pre-guntar mi opinión. El sabía que yo era estudiante.

Después, ahí, en el mismo manicomio conocía unhombre muy humilde, muy bueno, muy afectuoso,que vivía como pidiendo disculpas;-era el poeta ValleGoicochea. Entreví también, en el mismo lugar, , lafigura de Francisco García calderón.

Pero el manicomio es un lugar muy especial. Yo nohe vivido la experiencia como loco, sin embargo esta-ba adentro y reconocí que ni los locos más furiososconstituían peligro alguno para los niños. Los niñostienen el derecho de paso y respeto entre los locos. Esuna cosa que siempre me ha llamado la atención. Lbque me golpeó mucho fue ver el caso de los que mue-ren abandonados por la familia. Recuerdo y eso está en

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esas rayas de locuras que atraviesan mi obra',que te-nía que pasar todas las noches por el mortuorio, ysiempre encontraba un muerto cubierto con una sá-

-bana. Esas ráfagas de locura están presentes no sóloen, mi obra sino también en mi propia persona, en mipropia vida.

Sin embargo, como ya dije antes,no todo era som-brío. Ahí en el manicomio también tuve experienciasmuy gratas. Como mi padre ya era jefe de la panade-ría, yo dipop ía de pan a mi gusto, un pan especial.Y en Navidad, cuando los humildes veían con másclaridad los abismos de la pobreza; yÓ tenía paneto-nes a pesar de que no éramos ricos;

Y cuando tuve esas conversaciones con MartínAdán,- claro yo era muy joven, pero ya había tenidoalgunas lecturas importantes. Había leído a MarcelProust, en una traducción, y me acuerdo que hastaescribí un articu lito titulado "La idea del arte en Mar-cel Proust", artículo que salió en Publicaciones del

- Pueblo que dirigía Carnero Hocke y que después' 'ohe buscado afanosamente orque es bastante exac-to. No entiendo bien cómo en el fragor de la luchapolítica nos dábamos tiempo para hablar de Proust.

Martín Adán era un hombre de una cortesía nota-ble, de una cortesía absolutamente principesca. Mien-tras estaba en el manicomio no bebía, pero a vecessalía' a beber- a la calle y entonces regresaba comple-tamente ebrio, porque él encontraba ahí un lugar depaz. Y sostenía que los locos estaban afuera y que elmanicomio era el lugar perfecto de la auténtica cor--dura. Hoy que -veo lo que es la vida, pienso exacta-mente como Martín Adán, y puedo suscribir su afir-mación, pero la suscribo con la dolorosa melancol íáde que ya he vivido, porque Martín Adán era menor

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que yo cuando afirmaba eso y ahora yo tengo cm-,cuenta y cinco años y siento verdaderamente que loslocos están afuera y los hombres más sensatos en elmnicomio. -

Militancia; del Apra a la Izquierda Revolucionaria

La militancia política eh esa época significaba con-vertirse en un conspirador. Yo había ya estado vincu-lado a la política desde el colegio militar en dondeformaba parte de la célula clandestina del Apra. Ypertenecer, dentro del "L.eon.cio Prado", a una célulapolítica constituía verdaderamenteun riesgo. Eso setomaba como un propósito subversivo y una frontalamenaza contra las fúerzas armadas. Los miembrosde la célula éramos, en potencia, el General que elApra siempre estuvo buscando. Todos en la vida po-demos tenar determinadós caminos pero el hecho esque. no los seguimos, esto lo digo con respecto a la'po-sibilidad que tuve de seguir la carrera militar. Aquítanbién se plantea el problema del azar que tanta - pre-sencia tiene en mi último libro La danza inmóvil. Loque pasa es que somos como los astros, o como losbarcos que el más pequeño cambio de timón los llevaa destinos completamente diferentes al que buscaban.En el 'mar como en la vida, un ligero cambio de rutaes fatal.

Mi experiencia política, que la he mantenido siem-pre y que yo creo queen una forma u otra la manten-dré hasta el final como preocupación especial de vi-da, tiene su origen en las situaciones de abuso, de mi-seria que he visto primero en mi propia familia y lue-go en los pueblos en los que me ha tocado vivir. Situa-ciones de pobreza extrema, de miseria extrema ,, de im-'

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potencia, de injusticia; todo esto me empujó a la deciSión de hacer algo.y de actuar políticamente.

Al Apra ingreso por mediación de un compañerode colegio que, luego fue dirigente muy conocido. Me'refiero a Luis Alvarado. Pero, claro,en el campo de lapolítica peruana , hay tres Luchos Alvarado. En estecaso se trata del famoso corredor de autos, abogado,hijo del aún más famoso Arnaldo Alvardo. Este LuisAlvarado ya era aprista, por su padre y estaba en elcolegio militar, El fue el primero en hablarme. La di-tadura de Manuel Prado ya se tambaleaba, estábamosen el año 1943, pero aun así era muy peligroso, muydelicado hablar dé política en el colegio, pues en esecaso estábamos violando el código militar.

La primera reunión me acuerdo que la tuvimos enel estadio delcolegio. También aprovechábamos lasguardias cuando coincidíamos. Era muy 'peligroso yluego vemos que este trabajo político va a repercutirhasta 19481,cuando la revolución que debía desencadenar el Apra es traicionada por los dirigentes apris-tas. Y en el intento revolucionario-de 1948 justamen-te uno de los objetivos que no se logran ejecutar-es latoma del arsenal del colegio militar "Leoncio Pra-dó".. Este objetivo me fue encomendado a mí porque.yo como ex alumno del colegio militar conocía eLte-'rreno. Y ese era el único lugar del Perú en donde ha-bía novecientos fusiles inermes, que se podía entrary sacarlos. Era muy fácil tomar el colegio militar, esono era, tomar la División Blindada. Nosotros estuvi-mos esperando que llegaran quienes tenían quel darla orden. Estábamos con los compañeros del sector deMagdalena y otros grupos. El operativo lo ten ía quedirigir yo, porque yo conocía cómo era el movimien-to de vigilancia en el interior 'del colegio y del peque-

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ño cuartel adjunto. Era una guarnición rducida, fácilde neutralizar, y luego estaba el par.que de novecien-tos fusiles, Pero la persona que debía dar-la ordennunca llegó. La dirigencia aprista había, pues, traicio-nado el - levantamiento.

Entonces, como decía, mi ingreso al Apra se debióa Luis' Alvarado. Fue un proceso lento. Varias reunio-nes, conversaciones, hasta que me convencí dé la ne-cesidad de una militancia política, pese al riesgo 'quesignificaba activar en el seno de un colegio militar.Constituimos una célula bastante numerosa y traba-jábamos y nos manteníamos en contacto con él par-tido. Pero en eso llegaron las elecciones de 1945 y fueelecto presidente José Luis Bustamante y Rivero conel apoyo del Apray ya, no hubo más problemas declandestinidad sino al contrario el Apra ya era legal ynosotros podíamos hacer casi 'un trabajo abierto.- Mi ruptura con-el APRA está expuesta en un do-cumento que se publicó en 21 diario"El Popular" deMéxico que dirigía Lombardo Toledano. Ese docu-mento apareció el día que Haya de la Torre salió de.su asilo de la embajada de Colombia en, Lima, quehabía durado varios años, y llegó a México. Entoncesyo publiqué ese documento que se titula "Good bye,mister Haya", en el que se expresaba todas las críticasque había ido planteando a lo largo de mi militanciaen el Apra sin ser oído. Esto debe haber sido en 1953.

Las bases de mi militancia en el Apra comenzarona resquebrajarse el año 1948 cuando los dirigentes nollegaron a la hora de la verdad -y nos abandonaron enel puesto de lucha. En 1'948 yo estuve listo en dosoportunidades para tomar las armas. La segunda vezfue el plan para asaltar la Escuela Militar de Chorri-llos, operativo que estaba' a cargo de Guillermo -Car-

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nero Hocke, pero nuevamente la dirigencia traicionael movimiento. -

Este tipo de situaciones resulta frustrante. Yo ha-bía leído libros en los que se analiza el miedo. Dicenque unos tienen miedo antes de la batalla, otros en elmomento de la batalla, y no faltan quienes són estre-mecidos por el miedo después de los hephos. Yo re-cuerdo q'ue me sentía tranquilo yen calma y le digoa Guillermd mostándole el pulso: "No hay miedo,mira" y-él me contesta: "No digas cojude,çes, por fa-vo r''. - -

En 1948, después del golpe de Odría, vino una re-dada y como yo era conocido como dirigente univer-sitario y había publicado en La Tribuna, el vocero delApra,' aunque lo que había publicado eran poemas,fui detenido-y enviado a la prefectura. Ahí tuve miprimer contacto con la prisión y -sufr-í también unodeJos desengaños más duros de mi vida política.

Yo tuve en la prisión ui ataque de asma que mepuso al borde de la muerte. Entre los apristas que,es-tábamos presos habían dos tendencias. Yo me estabamuriendo y el único médico que había ahí, tambiénpreso político aprista,se negó a auxiliarme porque yoera de la tendencia opuesta. Ese fue para mí unodelos golpes más terribles que he' recibido en mi vida.Se me quebró el mundo de la patria unida. Me pare-ció que ya no tenía sentido hacer una revolución. Siun compañero de Partido no había querido ayudarmecuando me - estaba ahogando, qué podía esperar. En-tonces empecé a convertirme en un hombre.solo. Estaexperiencia traumatizante la he recogido después enLa danza in-móvil, en cabeza del- personaje Nicolás. '

Yo entré al Apra porque tenía una visión mito lógi-ca de ese partido, una visión que no correspondía a la

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realidad.-Yo creía que el Apra iba á hacer una revolu-ción. Esa fue la razón por la que ingresé al partido de,Haya de la Torre.

Pero teóricamente podría decir que ten (acierto ni-vel de lecturas marxistas. En Buenos Aires leí El Capi-tal y cierta sequeda&que se nota en mi libro "Las Im-precaciones" esproductq de esa . lectura. Estando en elApra siempre tuve en cuenta la obra y el magisteriode José Carlos Mariátegui, y esto ocurría en la prácti-ca con muchos apristas. Entonces cuando en 1963rompo definitivamente con el Apra ya estaba prepa-rado para un trabajo militante en la izquierda. Y este'es un camino arduo al que más adelante quisiera re-ferirme con detenimiento.

(De Gregorio Martínez y -

Roland Forgues) -

( -

- - -

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(

LAS IMPRECACIONES[1955)

.1

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'A la memoria de José Carlos Mariátegui, encuya vida aprendimos que el mejor trabajoes' e.1 trabajo que realizamos por los demás.

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/

EPISTOLA A . POETAS QUE VEN DRAN

Tal vez mañana los poefas preguntenpor qué no celebramos la gracia de las muchachas;quizá mañana lbs poetas preguntenpor qué nuestros poeinaseran" lrgas avenidas por donde venía la ardiente

- (cólera..

Yo respondo: por todas-partes se oía el llanto,por todas partes nos cercaba un muro de olas-

(negras.¿Iba a ser la poesíauna solitaria columna de rocío?

Ten íá que ser un relámpago perpetuo.

Yo os digo:mientras alguien padezca,la rosa no podrá ser bella;mientras alguien mire el pan con envidia,el trigo no podrá dormir;

• mientras los mendigos lloren de frío en la noche,mi corazón no sonreirá.

• Matad a la tristeza, poetas.Matemos a la tristeza con un palo.Hay cosas más altas •

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que llorar- el amorde tardes perdidas;el rumor de un pueblo que despierta,eso es más bello que el rocío.El metal resplandeciente de su cólera, -eso es más bello que la luna.Un hombre verdaderamente libre,eso es más bello que el diamante.

Porque el hombre ha despertado,y el fuego ha huido de su cárcel dé cenizapara quemar el mundodonde estuvo la tristeza.

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• - EL ARBOL DE LOS GEMIDOS

América, no puedoescribir tú nombre sin morirme.Aunque aprendí de niño no me salen derechos

(los renglones,a cada sílaba tropiezo con cadáveres,detrás de-cada letra encuentro un hombre

- (ardiendo,y ni puedo cerrar la "a"porque alguien grita como si quedara dentro.

Vengo del odio,tengo'hace mucho el corazón pisado,vengo del salto mortal que producen los balazos,me parió lo repentinamente loco,traigo el corazón sudando pumasporque aquí sólo se oye el zumbido de la , pena.

Yo atravesé muchas gargantas,yo crucé estas llanuras con la cara en la mano,yo te conozco,tambaleándome tendí las camas dé mi vida vacía.

¡Cómo no llorar en estos pueblos!Yo tenía dieciocho años,yo vivíaen un pueblo pequeño,

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oyendo-el diálogo de musgo de las tardes,'pero pasó mi patria cojeando.,vinieron los ahogados a pedir más agua,salían de mi boca escarabajos,sordo, oscuro, batracio, desterrado,era-yo quien humeaba en las cocinas.¡Amargas tierras, patrias de ceniza,

no me entra él corazón en un traje de paloma,no me caben los dedos en la mano, ricuando contemplo lo que han hecho en este-

' (pueblo,hasta la vida me queda grande!

Pobre américa,en vano los poetas .'deshojan ruiseñores para hallarte.

No hallarán tu rostro mientras no- se atrevana llamarte por tu nombre, américa mendiga,américa de los encarcelados,américa de los perseguidos,américa de los .parientes pobresnadie te encontrará -si por su boca no desaguaeste nudo de sangre -

, que hace mil años siento en la garganta.

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II

YO SOY EL DESTERRADO

América,a mí también debes oírme.Yo soy el estudiante pobreque tiene un solo traje y muchas penas.Yo-soy el provincianoque no encuentra la puerta er\ las pensiones.Te digo que en las calles,y en las azoteas y en las cocinas,y al fin de cadá día y en mi pecho,algo se está muriendo.

A mí también debes oírme.Yo soy el desterrado, -yo vagué por las calles'hasta que los perros cerraron sus alassobre mi coraz6n.

Acuérdate, acuérdate de mí.Hay días -que no tengo ganasde ponerme los ojos,días en que hasta los pájarosse pudren a la mitad del vuelo.

• Ay, orgullosa, -.a ti no te hablaron de cuartos inmundos,tú no sabes lo que es vivir con una mujer -que zurce su ropa llorando.:

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Porque durante siglos los poetas callaron,y en el silencio sólo se escuchabaun susurro dé abejas que sonaba.Pero un día ya no se pudo más,y el dolor empézó a mancharlo todo:la mañana, -el amor,el papel donde cantábamos.Un día el dolor empezó a gotear désde abajo,daban los puros gritos degarradores,una mano amarguísima derribó mi pecho.Ahora vengo a ti gimiendo,aquí está mi voz encarcelada,aquí estoy yo, debajo de esta frente, derrumbado.

/

/ .

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ALTA ERES, AME RICA

Alta eres, américa,pero qué triste.

Yo estuve en las praderas,viví con piedras y espinas,dormí con desdichadós,sudé bajo la nieveme vendieron en tristísimos mercados.¡Eh tu árbol

sólo he visto madurar gemidos!

Bellaeres,américa,pero qué amarga,qué noche, qué sangre para nosotros.Hay en mi corazón muchas lluvias,largas nieblas, patio amargo;la pura verdad, en estas tierras,uno a veces es tan tristeque con sólo mirar envenena las aguas.

Alta eres, bella eres,pero yo te digo:no pueden ser bellos los -ríóssi la vida es un río que no pasa;jamás serán tiernas las tardesmientras el hombre tenga que enterrar su sombra

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para que no huya agarrándose la cabeza.

Entonces,¿de dónde trajeron los poetas -la guitarra que tocaban?Yo te conozco, -dormí bajo la luna sangrienta,despintaron mis ojos las lluvias,-quedéme al fin m6ribundo:el cruel atardecerme dio su enredadera de pájaros violentos;en salvajes llanuras-destejí con mis manos implacables tinieblas,en las, casas entré y en las vidas,pero jamás vi una sonrisa habitada.

Pregunté por la Alegría.No respondió-nadie -

Pregunté por la Felicidad. - -No respondió nadie. - -

Pregunté por el Hombre.No respondió nadie.

Tu corazón estaba oscuro al fondo de la noche.¿Qué quieren, pues, que cante?Ya se quemó el pez en las sartenes,ya caímos en la trampa. -Por favor;abran las ventanas.Aquí el pájaro no es pájaro sino pena con plumas.

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)YONACI EN ESTA TIERRA

Yo nací en esta tierra,yestoeslomío:la soledad, - -los mendigos,los ríos pobres que se puedan sin agua,la humilde arena que los poetas desdeñan -por eñjoyar al mar.

Esto es lo m (o,y no me cabe en sílabas contadas.Yo no puse nada,yo no me hice el dragón rabioso;es el dolor de muchas bocas,es el dolor de millones de bocasa través de cuyas piedras fui rodando.

no puse nada, 'ni necesito,¡el papel comprende cuando un hombre es

(sincero!Y yo vengo a darle boca,yo-vengo a darle pechoa las ganas de llorarque el musgo guardó bajo las piedras.

Ay, provinciana,sitiados estamos en sordos corredores,' 1.

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sin paz,sin-luz,sin amor,y la verdad, a veces quisiéramosenvolvérnos en un papel

' para que nos confundan y nos lleven lejos.Yyote digo:está mal esohay algo-malo -cuando uno se levanta en la nochey no encuentra la cara en su sitio,y canta lospoetas

-- como perros azotados.

Ay, señores, -no sé lo, que ustedes conozcan, -ni sé si mi poesía como un túnel recorren-con lámparas miedosas,pero yo vivo esta amé rica oscura,conozco gente que tiene que amarrarsepara encontrar su cuerpo al despertar.

Es inútil que me pidan palabras de espuma.También yo tuve pájaros joyeies. -Mirád ahora mi juventud volcada.Ya fui lo que seré, -y todo-ha sido sangre. -Amarga es mi poesía, - -todo ha sido sangre.agrietóse la muchacha queme sonreía,murió la gallina atravesada por su plumas.

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• Es inútil,no queda más blancura

• para cantar en los papéles,muerto estoy, más muerto que ninguno.

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AÑOS QUÉ SE COMIERON LAS ARAÑÁS

Años que se comieron las arañas.No tuve paz,ni donde reclinar la cabeza.Era mi corazón un animalque salía de los hornostiritando;

- los trenes me llevaban, cruzabanlas tinieblas con los ojos hirviendo.

Me acuerdo-de los tristes caseríos,me acuerdó de las puertasdonde me sentaba, cuando niño, a envejecer.

• La guerra me llevóa través de las ciudades, -fuepoco a poco desvistiéndomehasta dejarme 1610 esta américa pateada.

Ay, mujercita, - -la sangre te llenaba la boca, -sola estaba con tus muertos, -con tu traje color despavorido,perdida entre los perros que te aullaban.

Años como ratas ehadas a morir.El vientosalía ardiendo de mi vida. -Ah, si yo- callara estas tristezas,

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la nieve se volvería loca,la serpiente se pondría trajes desgarradores,el río mostraría a todos sus ampollas.Yo anduve por los pueblos recogiendo carne viva,ya no me caben los pies -dentro de los pasos, .tengo frío, -no me abandones,tengo miedo, ven a salvarme.

Yo pasé por tu cara mi pañuelo,como piedra atravesé las vidas,anduve los años, las azoteas, las prisiones,andando llegué a la pálida comarcadonde el pan sólo apárece vestido de fantasma.

\

A 'mí no me engañas, yo sé quién eres:a yerme han venid — las t'ardes,cada piedra qtiiere.qúe cuente sus pisadas,el túnel me muestra hinchado su único ojo,toca el gallo su corneta lastimera.

Ay, madrecitadesde habitaciones vacías, -desde catres solteros,desde trajes gastadós y pálidos deudores,desde domingos sin nadie con quien pasearse,solo, ronco, quemado, mudo, aullando,vengo a comerme estas espinas: -

• los hombres sufren,las aguas sufren, las camas sufren,

- r'-

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AMERICA VUELVE A TU CASA/

América,desde' que nos hás dejado,tu casa no es una casa:sangra la estrella,humean los ríos,hace señas el árbol aterrado,ni mi cuerpo distingo en esta noche.Nos han golpeado hasta sacarnos chispas.¿Qué espers para volver?¿naves a los muertos parpadeandoen las esquinas?.¿no ves que mi cuarto se desangra por la ventana?

Vuelve, América, a tu casa.Yo te quiero libre o morir.Yo mañana seré olvido, y olvidolos reyes y los hijos de los reyes,pero tú serás,siempre tus dedos tejerán lás tardes,yla muchacha sentirá en su bocael vacío -dejado en el aire por la alondra al partir.

Vuelve a tu casa, -levanta mi corazón del polvo,devuélvele la cara al desterrado,derriba el muro que nos separa de la dicha.

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/Yo sé que están tristes las montañas,yo sé que muchos pueblos -caminan temblando sobre la nieve de sus días

(terribles,yo sé que aún nos esperan tinieblas, traiciones,

soledades,- mas no podrán contra este amor.

Estas sombras pasarán.Pueden encanecer las aguas,puedén degollar al dulce lirio,pueden fusilar a los gorriones,pueden quemar los libros condenados,pueden romper mi canto.y arrojarlo a una ciénaga,pueden sacarme una mañana frente a los fusiles,pero no apagarán tu resplandor.

Un día seremos libres.La tierra será libre. -Los poetas no cantarán, como yo, en el destierró.Y ya no habrá más miedo, niinuñecos malos,

- (ni 'penumbra.

Para entonces guardadme lo soñadó.Soñad riomás, no tengáis miedo.Yo os traeré las increíbles cosas que soñabais,la novia traeré al muchacho feo,cantaré hasta que el sapo sea hermoso.Yo, poeta,nombro al puebloheredero universal de la risa y del rocío.

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Camaradas, en esa aurora aguardadmé.Pero si ese día estoy callado y no respondo;si el viento me llama y no respondo;si la tarde me llama y no respondo;si con palomas de amor-el amor me llama y no

(respondo,llámame con tu voz, América,y marchará mi polvo tras tu bandera roja.

(

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/

PATRIA POBRE'

Yo conocí en mi patria sólo rostros vacíos,hombres de mirada prematuramente cana,balnearios de huesodonde antes de tiempo veraneaba la muerte.Yo sólo recuerdo ojos en laniebla.

Así era mi padre:un hombre que miraba la lejaníacomo si él mismo estuviera porvenir;así son los que en mí caminan cuando duermo;así son los hombres, los pueblos, el mar,Yo no conocía el rostro de mi patria.Tuvo que caérseme el corazón a un pozo,Tuve que oírla llorar de miedo en las prisiones,tuve que alzarlo chorreando alaridos.Tuve que vela con su cartel de ciegó en los

(suburbios,para comprender que la patriaera lo que me dolía bajo tantodolor.

Porque no es cierto que en mi patriacrezca una flor de espuma inmóvil,no es cierto que allí el crepúsculocoma en la mano azul de las muchachas.

Yo solo vi pueblos, ojerosos

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sementeras de gritos,• gemidos tan grandes

que ni por las calles más largas podían iíasar.Por eso notengo tardes fulgurantes,ni muchachas risueñas a la orilla de una flor. -Yo apenas recuerdo un país de gente tan pobreque ni siquiera en el ocaso da sombra.

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PATRIA TRISTISIMA

Ay, Perú, patria tristísima.¿De dónde sacaron los poetas sus pájaros"

(trasparentes?Yo sóloveo dolor,-yo, únicamente amargas cocinas,yo, puramente platos vacíos,a mí solamente sálenme espinas,sálenme lobos del pecho abierto.¿En dónde no estuvo la tiranía,la frente arrasada, el pétalo impotente?¡Hasta en las más dulces frutashallé carbones encendidos!

Ay, Perú, patria tristísima..Si yo llamara al padrey al padre padre hasta el padre más antiguo.para que me mostraran la dicha,'toda la felicidad que aquí sonócabría en un pañuelo.Oyeme, patria: .yo como tú estoy hecho con el metal del humillado.En' las sierras se muerden la nieve -hombres amrgos como yo;'

1enlas 'aldeas tropiezan con su, pechohombres heridos como yo;en pueblos pálidos sé buscan entre las cáscaras

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desgraciados como yo.

¡Ah, qué tristeza!Cuando yo era niño,veía al crespúsculo agitar sus cruelesalassin saber que buscaba mi boca para gemir,pero fui llenándome de cuervos,mi vida fue cubriéndose de dientes:ahora soy el dolor de esta tierra quebrada.No me traigan alondras, ni manzanas.No se puede apagar con lalivá mi pueblo ardiendo,no se puede pegar con palomas mi patria rota,ni américa en pedazos, mi amor, mi agonía.

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\ PATRIA TIERNA

La patria es tierna,me dijeron en la infanciá,la patria tiene un río de rápidos diamantes; -en la llanura

- ' el viento acerca a las doncellas

su caballo blanco.

Un día salía buscarte,anduve lobos y marismas,

• pero no hallé la copadonde bebías dulces crepúsculos.Bajo un árbol malvadotemblaba un pueblo miserable,roto de sedse arrastraba & pájaro.

Ay, qué amarga dulzura. -Bella e-ra mi juventud.Yo cantaba: ahora estoy triste,y es por ti, tierra pobre, -es por esos pueblos-de una sola calle 1por'donde nunca caminó la dicha.

• Patria, cómo creíste. • • -Ya se tragó al crepúsculo una araña.Cercado estoy, humeando,

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traigo en mi bolsillo cadáveres,loco, bruto, negro, clamo.Acuérdate del hombre,Acuérdate cuando e1 mar )se quitaba su máscara de olaspara jugar con nosotros en la arena.Yo soy el pobre pobre, el hurnillado.

- Libértate, libértame,'alza mi corazón delfango,quita de mi pecho tu patadeçaballo ronco,imalhaya patria que sólo nos diste rostro.

para que corrieran lágrimas tan largas!

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- EL CORDERO CON ESPINAS

Ay, hermosa,muchas veces, desde lejos, te vi pasar.Ibas tigre,primavera, -interminable,y altísima en la espuma de las banderasera tu esmeralda abrasadora,ay, patria, perdidoentre los mendigos note pude hablar.Tal vez no lo sabesaquí los hombres sufren,odia el metal al metaloide,tinta el mar en su jaula de arena,siento quejarsea los gusanos,desde antes de, nacer oigo a los muertos quejarse.

Y Ay, patria,nos persiguen, nnos destierran,nos ahogan;sin metáfora, -sin versos,sin sílabas,ya no podemos más.

/

Ylo digo no por mí

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sino por estos hombres que tienen que anudarsela corbata aun cuando están desesperados.Lo digo por la muchachaque nadie sacó a bailar.

Oh, íniserias, oh, sartenes,- =humildísimas cucharas, platos mal lavados,aullad por mi boca, hermanas.Yo vine a cantar por vosotras,yo soy la-boca del que no tiene boca. - -¡Alguien tiene qué morder su calaverapara que sepan. que esta tierra sufre!

Y yo sufro, - »

y no pueden las sirenas consolarme.Es inútil que sonría la ddncella que yo amaba.Yo sólo quiero, patria, verte,libre,y que nadie llore en su cuartito, »y que nadie sufra boca abajo,.

- - y que nadiese ahogue si su sopa se derrama: , - ,

Y tú, hormiga;. ».tu, hombrecit, -madre rota, tierra mía,canten pájaramente libres,pues mientras caída, manchada., cerda, mendiga,llores destierros,sangres prisiones, »

y subas cono loca las paredes,.yo no puedo perdonar.¡He de llorar hasta que parezca un hombre

- sentado al fondo del mar! -

-' - 57=

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EL DESTERRADO

Cuando éramos 'niños,ylospadres- -,nos negaban diez centavos de fulgor,a nosotros-nos gustaba desterrarnos a los parques, -para que vieran que hacíamos falta,y caminaran tras su corazónhasta volverse más humildes y pequeños que

(nosotros.

Entonces era hermoso regresar.

Pero un díaparten de verdad los barcos de juguete,cruzamos corredores, vergüenzas, años,y son las tres de la tardey el sol no calienta la miseria.Un iínpresor misteriosoponela palabra Tristezaen la primera plana de todos ¡.os periódicos.

Ay; un día caminando comprendemosque estamos en una cárcel de muros que se

- (alejan...

Y es imposible regresar.

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• PERU,GORRIONDULCISIMO

• Perú, gorrión dulcísimo,montañas, pueblos, rocíos,patria, tierra mía ¿qué está pasndo?Oigo llorar, -triste está el hombre,cojea amargamente la espesura,el esqueleto del mar se pudre en la arena- • - -y nadie lo besa,nadie besa tus mejillas,alma mía ¿qué sucede?

Ay, desgraciadamente,Perú, con asco tu nombre escribo.

• Ya no eres el árbol, de lós relámpagos,no eres ya el.chorro de los guerreros.

Ay, eres ahorael hombrecito cobarde,la pared manchada, la bajeza, el servilismo.Ay, Perú, ¿fuiste torrente para ser pantano?¿en este pozo cayó mi alondra?¿en este cerdo acabó mi toro?¿salieron del cobre los guerreros,domaron ruiseñores,

• imperios implacables, torres erigieron.para que tú, ahora, pordiosera, •

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te arrastrases ante estossapos galoneados?Cantaron los poetas¿para que tú lamieras el culo del obispo impuro?'

, Pariste huracanes¿para ser hoy la mendigá, la reina infame de los

(piojos?-Peruanos,a nuestra tierrael sol llegaba tiritando,tímida- mente sus pies monstruosos lamía;Postradas hoy mirad las ciudades. -Un pueblo ruin -adora al caimán porque se arrastra.Ay, en elPerú, donde se pone el dedo salta pus.

Muérete, madre, pú-drete,vete con los ladrones,pero no te arrastres más,no seas valiente'sólo para romperlela boca al humilde,y destrozarla muñeca de la niña,y carcajearte del novio - -por sus calcetinés rotos.¡Ay, más me valiera no haber salido del polvo

(salvaje, -más me valiera amarme en el lodo'con una sapa!

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YA NO VOY A CANTAR

Ya no voy a cantar, -voy a pudrirme la mano,voy a arrancarme la cara -y arrojarla a una charca,¿para qué voy a cantar? -

Yo me tambaleé mil años en las cavernas;-yo sollócé ante tu espina

hasta que mi corazón salpicó todas las puertas,y aullando te llamé, me mordí los pisos,volqué mi dolor sobre las mesas,para que tu relámpago -vinieraa libertar mi ébrazón mendigo,y tú prefieres lamer la pata que me humilla.

¡Qué te importa lo que un muchachoescriba en el mantel de las pensiones!¡Qué te importa que las cocineras echen más sal

(a lasopapara que sientan todos: lo amargo de sus lágrimas!

Patria, yo te quena,nadie como yo te quería,yo temblabahasta cuando el rocío

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empapaba tu dormida dulzura,pero no volveré a quererte.Me voy.

Yo no tequiero patria si vas a ser gusana.¿Me oyes, piojosa, me escuchas?¿Siempre serás el hombre pobre,la sonrisa deshabitada,el pariente que avergüenza a la familia?¿Eternamente -'llenarás mi amor de estiércol? -¿Siempre mi pecho será una espalda cargada de

(podredumbre?

Pordiosera,no vuelvas a buscarme. -Mietitras el hombreun trapo de nieve pisada, polvo, fango, miedo sea,mientras seas la mujerzuela pintada de los

(generales,no vuelvas a buscarme. -No volveré.'

_Nadie se pondrá tu traje hediondo.Cerradaestá mi puerta.Es inútil. -Estoy lejos.

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USTEDES TIENEN LAS TARDES

Ustedes tienen las tardes, -siembran los hijos, recogen lós besos,maduran las frutas, -pero no tienen patria.

\Cuando un , pueblo cae a lapenumbra sauna,y los hombres se callan, se enfangan, se efflpuercan,y el poeta pregunta y nadie responde;

- y atan a la vergüenza para que flojo siga,y no huyen las letras de los infames libros,y nadie se rompe el corazón llorando,la patria se aleja,se va con los poetas a comer destierros,se pone terribles ropas pobres.

Yyoosdigo:esta perra no es mi patria,éstos no son mis ojos,cambiaron mi cara mientras dormía

Yo, el pobre, el oscuro, el desterrado,yo, el que sobró en la mesa,yo soy el Perú, tenéis que oírme,oídme /hablar desde la'rofundidad,bajad a ver qué larga herida:-

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yo soy-la voz de los que nunca se quejaron,el torosoyque hace siglos -embiste desde el fondo de vuestra sangre.Yo vengo a conmover a,las piedras más roncas,y' las 'prostitutas tienen que emocionarse con mi

(voz,los santos, los traidores,mis propios asesinos han de] ¡orar sobre mi hombro.

• ¡Todos caben en mi canto!

Y yo os digo: •ella no volverá a esta casa,

- jamás comerá vuestro pan malvado,llorad para que vuelva,degollad las columnas,vomitad el mar, subid las lluvias, llamadme,volveré.

• '

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PUEBLOS QUE HE CANTADO

Pueblos que he cantado, -poetas fulgurantes,muchachas, patrias, padres, amigos muy queridos,me dais asco.Me voy,que conste, no me compliquen.

A mí no me vengan con la patria espuma.La patria hiedeahora espantosamente,la patriaes un pozo qué vomita buitres.A mí no me digan que hay visitas.¿Hasta cuándo la patriava a ser el muro donde orinan los gendarmes?Ay, ¿hasta cuándo serás la rameracon la que sólo se acuestan los borrachos?

¡Americanas patrias, quebradas perras, pueblos(infames,

hagan lo que quieran,humillen al héroe,aplaudan al' ladrón,'coronen al asesino, -ríanse de los poetas, ríanse hasta caerse,estábien,, pero no me compliquen!

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Ay, patria, ay enemiga¿con qué me has mojado que no puedo secarme?$e me pasan los días -untando con tristeza los papeles, -mascando tu dolor se me pasa la vida.Ya me apagué, ya no soy nada,no encuentro la palabra que te libre,la voz que te alce, la luz que te limpie. -

¿Qué pasa amor mío, qué sucede?He visto a los pueblos llorar en silencio,,he visto caer luceros podridos,he visto a los hombres cubrirse-de herrumbe.Libé rtate, patria,

- miserable asesina, levántate, te ruego.Yo en vano canto si estás caída,yo no soy nada si tú te callas,yo soy estiércol si tú te apagas,yo soy estiércol si a ti te humillan.

Vuelve, vagabunda.No es verdad lo que dije.Las praderas no pueden olvidarte.Cuando nadie las ve lloran las piedras.Los corderos te extrañan, los borrachos te extrañan,mi corazón te extraña..Saca de mi pecho estas espinasdisipa este mal sueño,enciende la Luz que no termina,dime la Libertad que no acaba.

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LOS ADIOSES• • : [1960]

, '

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VIENTO DEL OLVIDO

Como a todas las muchachas del mundo,también aElla,inventáronlacon sus sueños,los hombres que la amaban.

Y yo la 'amaba.

-Pudo ser para otros un rostro'que el Viento del Olvidoborra a cada instante.Pudo ser, -pero yo la amaba.

Yo veía las cosas más sencillasvolverse misteriosascuando Ella las tocaba.Las estrellas de la noche¿quién sino Ella las sembraba?

Los días de esmeralda,los pájaros tranquilos,los rocíos azules,¡Ella los creaba

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Yo me emocionabacon sólo verla pisar la hieba.¡Ah, si tus ojos me'miraran todavía!

Esta noche no tendría tanta noche.Esta noche la lluvia caería sin mojarme.

Porque la lluvia no empapaa los que se pierdenen el bosque de sus sueños relucientes,y sus días no terminan -

- y son sus noches transparentes.

¿Dónde está ahora?¿En qué ciudad,en qué penumbra,en cuál bosqueno te reconocen las luciérnagas?

Tal vez mientras escribo,estás en un suburbio,sola, iñerme, abandonada...

iAbandonada, no!

En tu ausenciami corazón todas las tar'des muere.

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LA PRISION

¡No puedes salir del jardíndonde mi amor te aprisiona!

Presa estás en mi.Aunque rompas el vaso,seguirá inmóvilla columna perfecta del agua;aunque no quieras siempre lucirásesa corona invisibleque llevá toda mujer que a un poeta amó.

Y cuando ya no creas en estas mentiras,cuando borrado el rostro de nuestra pena,ni tú misma encuentres tus ojos bellísimosen la máscara. que te preparan los años,a la hora en que regatees en los mercados,los jóvenes venados vendrán a tu Recuerdoa beber agua.

Porque puede una mujerrehusar el rocío encendido del más grande amor.pero no puede salir del jardíndonde el amor la encierra.

¿Me oyes?No puedes huir.

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Aunque cruces volando los años,'nopu'edeshuir:yo soy las alas con que huyes de mí.

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ROSA UN1CA'

La hierba crece ahoraen todos los crepúsculos donde antes sonreías.

La hierba o el olvido. Es 'igua.l.Entre mi dolor y tu silencio, -hay una calle por donde te alejas lentamente.

Hay cosas que no digo porque 'ciertas, palabrasson como embarcarse en interminables viajes.Para mi amor siempre tendrás veinte años.Mientras yo cante en tus ojos habrá agua limpia,porque ya para siempremi amor te rodea de cristal.

Puedes morir mil veces. -Inmutable en el canto estás.Puedo olvidarte.Mas olvidada, resplandecerás

' ¿Qué son las luciérnagassino remotas'lucesque extintos amadores antaño encendieron?¿Qué son sino-carbones -de hogueras que. perdurn,tras que sus caras y sus bocas se rompieron?

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Te digo que ni elrrocíocon tu rostro se atreverá. -No envejecerá Iamuchachaque, reclinada en mi sangre,un día miró una rosa hasta volverla eterna.

Ahora la Rosa eterna está. -Yo la distingo única,perfecta, en los jardines.Por montañas.y colladosbúscanla gentíos.Sólo mis ojos que tus ojos vieron,la pueden mirar. - -

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LA CASA VAÇIA

Voy a la casa donde no viviremos• á mirar los muros que no se levantarán.

- Paseo las estancias.y abro las ventanaspara que entre el Tiempo de Ayer envejecido.

• ¡Si vieras!• Entre las buganvillas

cansadamente. jueganlos hijos que jamás tendremos.

Yo los miro. Ellos me miran.Mi corazón humea.Esté es el sitio -donde mi corazón humea.

Y a esta hora,en el balcón, callada,yo sé que tú también te mueresy piensas en mí hasta ensangrentarte.Yo también pienso en ti.,

• Oyerne donde estés: •por esta herida no sale sóló sangre:me salgo yo.

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ELEGIADE LOS DESCONOCIDOS

Ya no nos conocemos, ya no nos entendemos¿qué pasa?

¡Oh, Desconocida!Nuestro amor como los árboles daba pájaros.¿Qué está ¡Sasando?

- Azules éramos, ¿qué ha pasado?El viento del mar desesperadoagita pañuelos de musgo en las esquinas.

Me voy.PaueIo dellorar: mejor me voy.

Al atardecer los pájaros también se van,viajan a las torres buscando picos tiernos.*

A los reptiles, yo.Al fondo del agua a vivir ardiendo.

Porque para esta sed el agua está vacía,vacía está el agua para mi corazón sediento.

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MUSICA LENTA

Para que tú entres, -aveces de tristeza, el corazón se me abre.

Como una puerta tímida,para que tú entres, el corazón se me abre.

Pero tú no vienes,no vuelas más sobre los campos.

En vano mi corazón se asoma.Pasas de largo,como si él vientosoplase sólo para allá

Pasa la mañana y_no viene la tarde.Y el corazón se. me cierra,como una mano sin nadie, el corazón se me cierra.

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SE RENATA

Ibamos a vivir toda la vidá juntos. •,lbamos a morir toda la muerte juntos.Adiós.

No sé si sabes lo que quiere decir adiós.Adiós quiere decir ya no mirarse nunca,vivir entre otras gentes,reírse entre otras cosas,morirse de otras penas.Adiós es separarse, ¿entiendes?, separarse,olvidando, como traje inútil, la juventud.

libamos a hacer tantas cosas juntos!Ahora tenemos otras citas.Estrellas diferentes nos alumbran en noches

(diferentes.La lluvia que te moja me deja seco a rhí.Está bien: adiós.Contra el viento el poeta nada-puede.

A la hora en que parten los adioses,el poeta sólo puede pedirle a las golondrinas -que vuelen sin cesar sobre tu sueño.

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LA LAMPARA

Corno la lámpara olvidadaarde invisible en el día,así mi coraznse ha consumidosin que tú lo vieras.

Mas ya pasaron para ti las mieses,y tardos los años,yo sé que ahoratus ojos buscanlas huellas bermejas de mi pasi6n.

Es tarde:mi corazón calcinadoapenas soporta sus cenizas,y aunque estás cercana,y quiero llamartemudasestán las hoguerasdonde antaño ardieronairadas voces tiernas.Mi tristeza ya no puedeni con el peso del rocío.

Es tarde:la vida se gasta en actos vanos;todo acaba en fantasma.Es tarde:

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LA CITA

Son las siete;la calle está oscura;ya no vendrás. - -

Aunque llegarastodas las tardes

- •a la orilla de esta cita,,y aguardases, inmóvil,las largas horas que en el mundo faltan,no me hallarás,porque esperándote perdí mi juventud.

Y no como el guerreroque las manos mojaen la espuma bermeja de la guerra..1 Varones hermosos que conocí!¡Alexander extraviado en la espesura!¡Gabriel amarrado a los torrentes!¡Eugenio deshojado a la aventura!¡Amaro, que un día solo con tu fusil partiste!¡Os envidio, jóvenes vehementes,

a quienes no bastándoles los crepúsculos,• por mirar llamaradas

incendiaron su propia edad florida!

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Yo, miserablementeperdí mi juventud;aguardando que cumplieras la cita de los parques,gasté los veloces años. -¡Oh, cafés humosos donde fingíleer los diarios de mi feroz melancolía!

Esperándote perdí la juventud,-ymepesa.Son las siete:

• y estoy solo.

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EL MENDIGO-

El Rey,incendiado en oro,sus'imperios galopa,y siente el lev ísirno crujir de las genuflexionesa su paso fulgurante.

• Vasallos, estandartes,escuadras, cánticos, rocíos,le pertenecen.

Todo se le rinde,'-menos el amor de la mujer -

uque, en ese instante,a los heraldos sonríe,desdeñosa.

El Reypercibe entonces su miserable esplendor,y comprende que sólo es un Mendigo

- •. (Resplandeciente.

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- EL REY

No eres nada,vives oscuro,en una ciudad perdida.Pero, de pronto, un día,al despertar, eres Rey.

Arden musicalesremotos países -avasallados por tu valentía.Poderoso monarca:todq lo que tocas es resplandor,y en tu honor cambian los arco iris de plumajes.

/

Y cuando ella sonríe,-brota agua

en la remotainfanciaadonde se asomatu pequeña vidá ansiosa,rapaz distante de todo.

Mas viene el Vientoy lo derriba todo: »cristal roto es tu monarquía;vives en una ciudad malvada;el tiempo sólo significa »-que tus zapatorya no resisten otro invierno.

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Eras Rey,pero ya nb te sonríe Esa Mujer.

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LA SOMBRA

Como el centinelaque en la agreste torrelucha por no rendir los ojos al invencible sueño,yo resisto al olvido.

Pero te me vuelves pequeña;la lluvia moja.las calles de 1943;la lluviarompeel cristal en que te guardami juventud.

¡Miseria de los amantesque locamente sueñaneterna la eternidad!El Día es de espuma,niebla es la carne,humor el ayer.

El país lucientede nuestra juventud hermosa,el tiempo- asoló con sus ejércitos potentes.Marcial acarñpó la hrrumbredonde ardió la rosa.

En la memoria sólo una calle queda

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,

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por donde caminas lentamenteYa casi note mird,y el moribuñdo sol, atardeciendote torna cada día más pequeña.

Pero pasan los años,y a medida que te vuelves más pequeña, -.arrojas una sombra más larga.

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NOCTURNO EN SAN SALVADOR

La noche era bellísima.Yo te quería. -

San Salvador brillaba entre las flores.Yo te quería.

La Felicidad nunca tendrá tus ojos azules.Yo te quería.

Dueña de los Crepúsculos.Yo te quería.

Pastora de la Brisa.Yo te quería.

Ruiseñor Malvado.Yo te quería.

Espuma del Silencio.Yo te quería.

Agua bajo los- Puentes. -Yo te quería.

Olvida los cantos que te escribí.Yo te quería.

Aún ahora,-aunque sea tarde,y una paloma ciegavuele para siempre entre nosotros.

Adiós a las bandadas,adiós al tesoro enterrado en tu infancia,adiós a las Hadas porque las Hadas no existen.

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Ya dije las cosas que dije.Por las que callo ha de crecerme musgo en la voz.

Cuando termine de contar ésta agonía,-. otro hombre se levantará de esta mesa.

.Talvezél no recuerde. ¡¡Pero yo me acuerdo tanto1¡Si supieras cuánto te recuerdo!

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LOS RAPACES

¿Qué hay ahoradebajo de las camisasde los muchachosque, antaño,tras los tigres corríanen su infancia veloz?

¡Rapaces relucientes,partían sin vacilar,veleros rapidísimos,a conquistar países de sedarconfines de esmeralda abrasadora!

Días de plata delirante!¡invencibles flechas libres!La tempestad no-pudo con ' vosotros.

- Envejecieron los vientosantes de cansarlos.¡Seres puros,

vencedores del oso,íntimos amigos de las estrellas de mar!

¿Qué son,qué somos hoy?Con rencorosa mano escribo tu elegía:vi al alba tu hermosura,

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bebí, tu ardiente mediodía,y cerca ya a la noche,los años se-fatigan -y no vuelves a mí los ojos.Mi amor anciano se reclina:en el hombro poderoso de la muerte.

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CREPUSCULO PARA ANA

S610 para alcanzarse escribí este libro,Noche a noche, -en la helada madrigueracavé mi pozo más profundo,para que surgiera, más alta,el agua enamorada de este canto. *

Yoséqueundíalasgentes-querrán saber por qué hay tanto rocío en las

- (praderas,.yo sé que un díairán ansiosas a los campos,seguirán los hilos de los prados,y a través de las florestasllegarán hasta mi pecho,y comprenderán,—lo siento estoy sintiéndolo—,que es mi amor quien platea por ti el mundo en

(las mañanas,y verás esta hoguera.

• Desde ciudades enterradas,desde salones sumergidos, •desde balcones lejanísimo

*

verás este amor, - •y escucharás mi voz -

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-3

ardiendo de hermosura,y comprenderás que sólo por ti he cantado.

Porque sólo por ti estoy cantandó.¡Sólo por ti resplandecemi corazón extraviado!¡Sólo para que me veas,ilumino mi rostro oscurecido!¡Sólo para que en , algún lugar me miresenciendo, con, mis sueños, esta hoguera!

¡El Mudo,El Amargo, -El queSe Quedaba Silencioso,te habla ahora a borbotones,te grita cataratas, inmensidades!No quiero luz del día,ni diamante encendido,no quiero no morir:'escucha mi agonía.

Alguna vez amarás,alguna vezen las lianas de la ternura enredadacomprenderás que cuando el dolor nos llega,es imposible hablar;cuando la vida pesa, ls manos pesan:es imposible escribir.

Mas con los años ,las escamas se nos caen.Y un día, al volver el rostro,

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vernos a lo lejos,como remotos barcos encallados,cosas que creíamos llevar dentro,y rniramosque son musgo los amores más

(ardientes.

¡El hombre enceguecidóno escucha-las campanas silenciosas de la hierba,hasta que encuentra en los caminos,como culebra, su antigua piel, - -y reconoce entre las rujnassu vieja máscaraoxidada,y se detiene a recordar lo que amó,y descubre'agujeros rotosdo eran ojos fulgurantes,porque el tiempo crudelísimoinjuribel Rostro Puro,y los años nos pusieronanteojos de melancolía,con los que se mira la ruina,el otoño,la grosuragrosura de las mujeres!'

¡Oh, cruel máscarasalobreque aguarda agazapadadebajo del rostro del ángel,la tristeza esperando no máspara volcar las aguas del naufragio!

Surge entonces -el Canto inextinguible,cual surge ahora esta voz

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que llora por los días hermosos,,cuando el agua era azul,y no sabíamos que todo lo nacido morirá.

Todo lo que nace ha de morir.¡No digo más porque me entiendes!

Tú sabes que sólo quieroque, en algún lugar, leasesta carta,antes que envejezcan los carterosque te buscana la salida de las iglesias,entre las recién casadas,a la hora del jazmín rendido.

¡Quiero que el rayo demi ternura,traspase con lanza a los que no conozco,y salte noche hirviendoa los ojos de los que abran este libro,y en algún lugar,un día de este mundo,me oigasy te vuelvas,como quien se vuelve extrañadoal sentir detrás el resplandor de un incendio,y comprendas que estoy ardiendo por ti,quemándome .sólo para que veas,desde tan nunca esta luz!

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INDICE

Manuel Scorza : TESTIMONIO DE VIDA .5

LAS IMPRECACIONES (1955) ................... 29

Epístola los poetas que vendrán ................... 33El árbol de los gemidos ........................... 35Yo soy el desterrado .......................... 37Alta eres, América. ............................ 39Yo nací en esta tierra ........................... 41Años que se comieron las arañas ................... 44América vuelve atu casa... .......................47Patria pobre ................................. 50Patria tristísima ............................... 52Patria tierna ................................. 54El cordero con espinas ......................... 56El desterrado ............................... 58

,Perú, gorrión dulcísimo ........................... 59Ya no voy a cantar ...... . ..................... 61Ustedes tienen las tardes ........................ 63Pueblos que he cantado ......................... 65

LOS ADIOSES (1960) ......................... 67/Viento del olvido ........................... .. . 69La prisión .................................. 71Rosa única . .............. .. .... . ....... . .... 73La Casa vacía .......... ... ........... ....... 75Elegía de los desconocidos ....................... 76Música lenta. ............................. . . 77Serenata ................................... 78La Lápara ................................. 79Lacita....................................... 81

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El mendigo. 83Elrey ......................................84La sombra ..................................86Nocturno en San Salvador. ................... .....88Los rapaces ..................................90Crepúsculo pata Ana . . . . ...................... 92

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Esta publicación forma parte de un proyecto editorial desarro-llado por la Municipalidad de Lima Metropolitana, bajo la di-rección y coordinación de la Secretaría de Educación y Cultu-ra. Se

11a precios populares con la finalidad de estimular

el hábito de lectura y contribuir a la formación de bibliotecascomunales y escolares.Hasta el momento se han editado:

1. POEMAS HUMANOSESPAÑA, APARTA DE MI ESTE CALIZDe César Vallejo

2. CUENTOS POPULARESDe Julio Ramón Ribeyro

3. CINCO METROS DE POEMASDe Carlos Oquendo y Amat

4. LAS OCHO HORAS:LECTURAS ESCOGIDAS

5. POESIADe Manuel Scorza

¡

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Este libro fue impreso'por Perugraph Editores S.A.

Fco. Lazo 1537-Lince.Lima-Perú