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Por las Diócesis: Caguas 2311

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Page 1: Por las Diócesis: Caguas 2311

18:ev 5 al 11 de junio de 2011 por las diócesis CAGUAS

En la celebración de los 25 años de fun-dación de nuestra parroquia queremos agra-decer a todos los sacerdotes y laicos que han dejado sus huellas y su legado en este trayec-to histórico. Muchas personas recuerdan los orígenes de nuestra comunidad de fe desde la década de los treinta del siglo veinte (1939). El sacerdote español, Padre Mariano Olalla, trabajó y celebraba misa una vez al mes en la capilla de madera, en los terrenos de José Dones y que más tarde logró comprar, con la ayuda de la comunidad una cuerda de terre-no. Se construyó la capilla en hormigón y zinc al lado del río Emajaguas; conocida después como la Capilla Vieja al otro lado del río. En el 1946 llegan los Sacerdotes Redentoristas a nuestro barrio. Urge la necesidad de otro te-rreno más amplio y accesible. En 1955 Ramón Rodríguez Colón, dona el terreno y constru-yen la Capilla Sagrado Corazón inaugurada en el 1957.

Muchos sacerdotes, muy conocidos aún por las comunidades, fueron grandes colabo-radores y evangelizadores: en la década del 50 al 60 Padre Enrique, Padre Reinaldo, Pa-dre René, Padre Jaime, Padre Daniel Forrest (Tomás) y Padre Martín Deely. Padre Daniel (Tomás) construyó el primer salón parroquial detrás de la capilla. En la década del 60, Pa-dre Gerardo Campbell inició los retiros de la Renovación Carismática católica a nivel de San Lorenzo y ha sido de gran bendición a los fieles. Del 1975 al 1985 colaboraron Padre Al-

fredo Rodríguez y Padre Juan Rosario.

El 1 de abril de 1986 el entonces Obispo de la Diócesis de Caguas, Monseñor Enrique Hernández Rivera, funda la Parroquia Sagra-do Corazón y Los Doce Apóstoles, incluyen-do geográficamente los barrios de Quebrada Arenas y Espino. Nombró primer párroco a Padre Jorge Rosario Del Valle, hijo natural de este barrio. Este con mucho empeño, dedica-ción y sacrificio realizó las construcciones necesarias para el bien y progreso de la pa-rroquia con la excelente ayuda, cooperación y compromiso de la comunidad. Reconstruyó y reinauguró el templo parroquial el 18 de octu-bre de 1987.

Además, construyó la casa parroquial, el salón parroquial, el edifico del Pre-Seminario, los salones de catequesis y evangelización. La Capilla de San José en Quebrada Arenas se remodeló y se construyeron tres nuevas capillas: San Francisco de Asís, Santa Rosa de Lima y María Madre de la Iglesia. Dio con-tinuidad a las diferentes pastorales ya esta-blecidas con los diferentes servidores y laicos comprometidos. Además, inició el Movimiento Juan XXIII en la parroquia y por ende en la diócesis.

A través de los años, como fruto del Espí-ritu Santo en Espino, han surgido vocaciones a la vida sacerdotal y se han consagrado gran número de religiosas. En noviembre de 1991 el Sr. Efraín Del Valle fue ordenado Diácono Permanente. El 1 de mayo de 1993 llega el segundo párroco de la Parroquia, Padre

Luis Antonio Rivera Cruz. Dándole continuidad a los legados de otros co-hermanos; recons-truyendo la Ermita Nuestra Señora del Rosario en el 1996 y logrando que el 24 de octubre de 1996 los restos de Padre Jorge descansen en la misma. Encaminó el Plan de Pastoral Diocesano con los equipos zonales y creó el Consejo de Pastoral Parroquial. Además lo que era el pre-seminario lo convirtió en casa de Retiros. El 4 de mayo de 2002 incorporó las capillas de Quebrada Honda y Cayaguás a la parroquia y el 5 de octubre de 2003 inaugura el Centro Carlos Manuel Rodríguez en el kilo-metro 7. Contando la parroquia con 10 zonas y estas sectorizadas cumpliendo con la etapa de la sectorización de nuestro Plan de Pasto-ral.

La Pastoral parroquial está distribuida en diferentes ministerios y movimientos: Cate-quistas y sus coordinadores, Catecumenado Juvenil, Equipo Pre-bautismal, Equipo de Di-námica Matrimonial, Ministros Extraordina-rios de la Comunión, Pastoral Juvenil, Cursi-llistas, Renovación Carismática, Apostolado de la Cruz, Movimiento Juan XXIII, Movimiento La Piedra, Sociedad de Vicentinos, Coordina-dores zonales y equipos zonales, Ministerios de música, Servidores del Altar, Lectores, Mo-nitores y Equipo de Liturgia parroquial. Seis años de Adoración Eucarística Perpetua en todas las capillas de la parroquia los siete días a la semana. Las devociones en nuestra parroquia han sido muy marcadas: el rezo del Santo Rosario, la Novena del Perpetuo Soco-rro, el Vía Crucis, novenarios de difuntos, Fies-tas de Cruz y al Sagrado Corazón, entre otras.

Para fortalecer la fe y la cultura celebra-mos diferentes tradiciones y costumbres que enriquecen nuestra espiritualidad comunita-ria. Entre ellas está la celebración de la fiesta de Reyes, la puertorriqueñidad con la fiesta de nuestra Patrona Nuestra Señora de la Di-

vina Providencia, misa con trovadores, dianas de resurrección, baile de la amistad y el amor, fiesta de Madres y Padres y trullas por secto-res entre otros. Se adquirió un nuevo terreno para estacionamiento detrás de la casa de retiros y se remodelaron el templo parroquial y las capillas. Dentro del Plan Diocesano de Pastoral se suscitó en el 2010 el Equipo pa-rroquial de las pequeñas comunidades (Equi-po Alégrate) y se han comenzado a formar los animadores hacia el lanzamiento de las comunidades que será el presente y futuro de nuestra parroquia y nuestra diócesis.

El 1 de agosto de 2010 fue nombrado por nuestro obispo Padre Rubén el tercer pá-rroco de nuestra parroquia, Padre Boris Espi-noza Pérez. La parroquia le dio su bienvenida y ha comenzado a darle seguimiento al Plan de Pastoral Diocesano y a todas las pastorales ya establecidas en el corto tiempo de nombra-miento que lleva hasta el momento. Su sen-tir es con la ayuda de Dios lograr encaminar el Plan Diocesano de Pastoral y hacerlo una realidad en las comunidades. Para el mes de febrero nuestro pastor y obispo Padre Rubén nos ha enviado el seminarista Jaime Silva González para trabajar y colaborar en nuestra parroquia. Hemos visto con mucha luz del es-píritu la inspiración de nuestro obispo porque nuestro pastor tiene los “ojos fijos en Jesús”.

Unidos con fe y esperanza damos gracias y gloria a Dios por estos 25 años; vivamos la experiencia de nuestro Plan Diocesano de Pastoral siendo una sola familia en el amor y la solidaridad, llenos del Espíritu Santo, guiados por la Palabra de Vida, renovan-do nuestras vidas, nuestras familias, todas las comunidades de nuestra parroquia, sin excluir a nadie, extendiendo el reino de vida, justicia, verdad y amor.