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CENTRO DE INVESTIGACION Y MUSEO DE ALTAMIRA MONOGRAFIAS N.° 5 PROYECTO CIENTIFICO-TECNICO ELABORADO PARA LA CONSERVACION DE LAS PINTURAS DE LA CUEVA DE ALTAMIRA EUGENIO VILLAR MINISTERIO DE CULTURA DIRECCION GENERAL DE BELLAS ARTES, ARCHIVOS Y BIBLIOTECAS SANTANDER. 1981

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CENTRO DE INVESTIGACION Y MUSEO DE ALTAMIRA

MONOGRAFIAS

N.° 5

PROYECTO CIENTIFICO-TECNICO ELABORADO PARA LA

CONSERVACION DE LAS PINTURAS DE LA CUEVA DE ALTAMIRA

EUGENIO VILLAR

MINISTERIO DE CULTURA DIRECCION GENERAL DE BELLAS ARTES, ARCHIVOS Y BIBLIOTECAS

S A N T A N D E R . 1981

P R O Y E C T O C I E N T I F I C O - T E C N I C O

E L A B O R A D O P A R A LA

C O N S E R V A C I O N DE L A S P INTURAS

DE LA C U E V A DE A L T A M I R A

CENTRO DE INVESTIGACION Y MUSEO DE ALTAMIRA

MONOGRAFIAS N.° 5

PROYECTO CIENTIFICO-TECNICO ELABORADO PARA LA

CONSERVACION DE LAS PINTURAS DE LA CUEVA DE ALTAMIRA

por

EUGENIO VILLAR DEPARTAMENTO D E FISICA F U N D A M E N T A L

F A C U L T A D D E CIENCIAS

UNIVERSIDAD D E SANTANDER

MINISTERIO DE CULTURA DIRECCION GENERAL DE BELLAS ARTES, ARCHIVOS Y BIBLIOTECAS

S A N T A N D E R . 1981

Depósito Legal: SA. núm. 156-1981 I.S.B.N.: 84-600-2443-1

Manufacturas JEAN, S. A.—Avda. de Parayas, 5—Santandef 1981

I. INTRODUCCION

Una resolución conjunta de cooperac ión entre la D i recc ión General del Patr imonio Ar­tístico, Arch ivos y Museos del Ministerio de Cultura y la Universidad de Santander, encami ­nada a lograr la conservac ión de las pinturas de la Cueva de Al tamira, ha generado la real iza­c ión de este proyecto que permite llevar a cabo las invest igaciones y estudios necesarios p a ­ra este f in.

El plan trazado parte de unos supuestos just i f icados e intenta abordar una programa­c ión de objetivos coherente, con el objeto de l legar a algunas conclus iones a corto, medio y largo plazo.

A h o r a bien, dada la transcedental importancia de este legado histór ico, c reemos que además de realizarse una invest igación inmediata y de elaborar un plan de trabajo a más lar­go plazo, que condujese a tomar dec is iones encaminadas a asegurar la conservac ión de las pinturas, debe l levarse a cabo sobre todo, una invest igación de seguimiento indefinido basa­da en los datos suministrados por un equipo d e control constante.

II. S ITUACION DE PARTIDA Y S U P U E S T O S B A S I C O S

i) En el momento actual se desconoce la cuantía del deterioro sufrido por las pintu­ras de la S a l a de Po l ic romos de la Cueva de Altamira, así como la cuantía de los índices de pel igrosidad de muchos de los numerosos factores que influyen en el mismo.

ii) Las "actuac iones" l levadas a cabo sobre las Cuevas de Al tamira como conse­cuenc ia de la puesta en práct ica de proyectos y dec is iones anteriores no hacen posible el po­seer un conocimiento preciso de las "cond ic iones" ambientales que gobernaban las Cuevas antes de ser descubiertas, cuando deber ía existir una s i tuación de equi l ibr io que condujo a que estas pinturas se conservasen durante aproximadamente quince mil años. ( V é a s e A p é n ­d ice I).

iii) Existe a lguna información sobre parte de los trabajos c ient í f icos-técnicos real iza­dos anteriormente desde el descubrimiento de la Cueva , que en modo alguno pueden margi ­narse a la hora de elaborar cualquier nuevo proyecto. (Véase Apénd ice II).

iv) Una serie de disposit ivos técn icos e instalaciones que fueron uti l izados por ante­riores Comis iones T é c n i c a s pueden hoy prestar un buen servic io.

v) Nuevos equipos de material c ientí f ico, en per íodo de adquis ic ión , así como otros que se sol ic i ten en un futuro inmediato serán uti l izados ampliamente en el proyecto que se presenta, dependiendo de esto la posibi l idad de realizar el trabajo previsto en los plazos que se señalan.

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vi) Consideraremos a la S a l a de Po l i c romos de las Cuevas de Al tamira (zona rayada de la f igura 1) como un ecosistema abierto (en el sentido te rmodinámico) , con una espec i f ica dinámica interna, capaz de interaccionar con el ambiente exterior y con el resto de la Cueva, a través de flujos de materia y energía .

vii) Se consideran elementos esenc ia les del ecos istema:

a) Los estratos que constituyen a techumbre.

b) La pel ícula po l ic romada asentada en el último estrato.

c) Las superf ic ies laterales y suelo de la S a l a , ya sean artif iciales o naturales.

d) El aire que en todo instante l lena el recinto, caracter izado por una compos ic ión química, contaminantes, vapor de agua, humos, etc.

e) El agua l íquida portadora de sales disueltas, COj , material de arrastre, etc., que im­pregna o c i rcu la por paredes, techo y suelo.

f) L a poblac ión microbiana, bacter io lóg ica y los microorganismos que habitan en el ecos istema.

III. OBJET IVOS G E N E R A L E S DEL P R O Y E C T O

Los objetivos generales del actual proyecto se han establecido a partir de los conoc i ­mientos previos y supuestos básicos ci tados, con el siguiente supuesto ad ic ional : "Admit ire­mos la posibi l idad de definir a partir del actual estado de las pinturas, una gamma de estados de equil ibrio del ecos istema, tal que el co lor de los pol ic romos se halle dentro de pequeñas var iaciones reversibles, y por supuesto compat ib les con la estabi l idad de la superf ic ie pol i ­c roma, tanto desde el punto de vista mecánico como f ís ico -qu ímico" .

Para adquir ir un conocimiento lo más preciso posible de la s i tuación de la dinámica intenra del ecosistema, en las condic iones actuales, es decir , desocupado, deben estudiarse sus "evoluciones naturales" ante los cambios de temperatura que se suceden durante las 24 horas del día y durante la per iodic idad de las estaciones. Esto supone:

1. " Util izar sondas siempre que sea posib le para las medidas de las variables.

2. ° Disponer de un año completo para la medida cont inuada de las variables.

C o n o c i d a la d inámica interna natural de la Sa la , debe estudiarse el comportamiento del ecos is tema frente a diversos órdenes de o c u p a c i ó n humana, bien de un modo directo o bien por s imulación. Adoptaremos el primer método.

Los objetivos generales del Proyecto, reseñados por etapas, ser ían:

P R I M E R A E T A P A . — ( C o n las Cuevas desocupadas y para distintos índ ices de ocu ­p a c i ó n ) .

1. " Establecer la dinámica general interna del ecos is tema a través de una evaluación de los flujos de materia y energía (estudio f ís ico, f ís ico-químico, h idro lógico y b i o l ó g i c o ) .

2. " Estudiar la estabi l idad de la pe l ícu la po l ic romada determinando:

2.1. Las actuales característ icas cromáticas de las pinturas y sus modif icaciones con los factores ambientales, incluidos los b io lóg icos (estudio f ísico, f ísico-químico y b i o l ó g i c o ) .

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2.2. Las modif icaciones mecánicas en función de los factores c i tados (estudio geo lóg ico y estereofotográf ico) .

3. ° Determinar la estabi l idad estructural del ecosistema (estudio g e o t é c n i c o ) .

S E G U N D A E T A P A . — D e las conclus iones obtenidas en la primera etapa:

4. ° Intentar descr ib i r c laramente los procesos f ís ico-químicos que pueden tener lugar en la superf ic ie po l ic romada.

5. " Establecer a partir de estas conf i rmaciones o hipótesis los límites admisibles en­tre los que puede fluctuar los parámetros ambientales y establecer un s istema de control técnico .

6. ° Real izar una propuesta provisional para visitas públ icas muy reducidas de las Cue­vas durante un corto per íodo de t iempo.

7. " Seguimiento del s istema de medidas de control , realizando las modif icaciones ade­cuadas a la propuesta provisional de visitas en este per íodo de t iempo.

T E R C E R A E T A P A . — ( P l a z o indef inido) .

8. ° Continuar las medidas sistemáticas de control durante otro largo plazo de tiempo, a Cueva cerrada, y abrir las Cuevas de nuevo durante otro breve per íodo de t iempo.

9. ° El seguimiento de los efectos produc idos irían conf i rmando o rechazando hipótesis y del imitando los índices de pel igros idad, y con ello los per íodos de tiempo de Cueva cerrada.

10. Continuar así indefinidamente, modif icando adecuadamente el programa de visi ­tas, y si es necesar io , la d ispos ic ión de la entrada a la Cueva, de acuerdo s iempre con los siguientes criterios que debemos considerar fundamentales:

1. ° Limitar los índices de ocupac ión humana de las Cuevas a valores s iempre inferio­res a los que permitieran las conc lus iones .

2. ° No llevar a cabo jamás "acc iones drást icas" sobre las Cuevas (aun pareciendo que son el resultado de razones evidentes) , ante la posibi l idad de producir s i tuaciones irreversibles.

3 . ° No interrumpir jamás la real ización de medidas sistemáticas de control .

4. ° Considerar que las conclus iones obtenidas pueden tener un carácter provis ional , de modo que sean constantemente revisadas.

IV. P L A N DE T R A B A J O

M A T E R I A L . — S e hará uso de una antigua instalación de medida con sondas y del nue­vo equipo constituido por un s istema de medic ión de temperaturas por radiación, s istema de adquis ic ión de datos y una ca lcu ladora con registro gráf ico.

C o n esta instalación antigua se uti l izarán ahora c i n c o sondas de temperatura, c inco de humedad relativa y dos para la medida de la concent rac ión de C O a .

Con el nuevo disposit ivo de medida podrán util izarse hasta 140 sondas de diversos t ipos.

Por otra parte, s e hará uso de un equipo de meteorología en la parte exterior de la Cueva .

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Habrá que disponer de equipos para determinar la concent rac ión de contaminantes.

S e realizarán medidas de concent rac ión de radon, tanto en el interior de la Sa la como en el resto de la Cueva.

S e hará uso de un espectrofotocolor ímetro para la espec i f icac ión del co lor de las pinturas.

Por último, se realizarán análisis microbianos, así como también análisis químicos , so­bre todo del agua que impregna las paredes, techo y suelo.

PRIMER C I C L O DE M E D I D A S . — E s t e pr imer c ic lo de medidas constará de las s iguien­tes etapas:

A. Medic ión de temperaturas de techos, suelos y paredes, con el termómetro de ra­d iac ión .

B. Medic ión del tono, c lar idad y c roma en el mayor número de puntos posibles del te­cho pol icromado, concentrando las medidas en aquel las zonas de las que se tiene informa­c ión o dudas razonables sobre la magnitud del deterioro. Tanto estas medidas como las de la temperatura del techo, se realizarán procurando la mínima perturbación del ecos istema.

C. S e real izarán medidas continuas con registro gráf ico de temperaturas d del am­biente, así como de humedad relativa, Hr, y concentrac iones de C O . en los puntos que se indi ­can con números romanos en el croquis de la f igura 2, co locando los tipos de sondas que en el la se indican.

En conex ión con el s istema de adquis ic ión de datos que se espera recibir, se c o l o c a ­rán sondas de 6, Hr y C O a en los puntos del croquis de la f igura 2 que se indican con nú­meros ordinales y en algunos puntos homólogos de la superf icie exterior. Simultáneamente se co locarán sondas en el resto de la Cueva, en los puntos que se indican en la f igura 3.

D. Real i zada la etapa de co locac ión y c o m p r o b a c i ó n del s istema de toma de datos y de todos los disposit ivos se cerrarán las Cuevas , y se real izarán las medidas corres­pondientes.

E. A intervalos de tiempo determinados se realizarán medidas de temperaturas del aire y de las superf ic ies rocosas.

F. También se medirán entonces los índ ices de color en los mismos puntos.

G . F inal izadas las medidas de temperatura y color en los pol icromos, y s in cesar nun­c a de realizar las medidas de 0, Hr y C 0 2 sistemáticas, se realizaría el análisis test de los da ­tos recogidos, al t iempo que comezar ía el registro de datos y toma de muestras necesario para un análisis test de carácter biof ís ico, b io lóg ico , geo lóg ico y químico, tomando nota dia ­riamente del número de personas que entran, tiempo de permanencia , etc.

H. C o n los datos de temperatura, humedad y concent rac ión de C O , registrados, se ad ­quir i rá información entre otros factores de:

a) Los posib les gradientes de temperatura, humedad y concentrac ión de CO a , en la S a l a y en el resto de la Cueva .

b) L a respuesta del microc l ima de la S a l a de Pol ic romos a las f luctuaciones c l imato­lógicas del exterior.

c ) L a respuesta del ecos is tema a la apertura y c ierre intermitente de la puerta de entrada.

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d) Las var iac iones de entalpia del aire de la S a l a de Pol ic romos y del resto de la Cueva .

e) Los pos ib les flujos de aire y agua en el ecos is tema y su pos ib le or igen.

S E G U N D O C I C L O DE M E D I D A S . — C o n los resultados de esta pr imera evaluación obte­nidos del análisis y tratamiento de datos del pr imer c ic lo de medidas, se e laborarán una se­rie de hipótesis en relación a los objetivos que se señalaron en la pr imera etapa.

Un análisis coordinado de estas hipótesis permitirá proyectar un segundo c i c l o de me­didas más ef icaz, destinado a obtener una buena información sobre:

1. ° Dinámica interior del ecos istema.

— Flujo del aire interior: Ve loc idades , d i recc iones , transporte de humedad y de anhídr i ­do carbón ico , di fusión de contaminantes, f luctuaciones del flujo, para diversas s i ­tuaciones y en función de las var iables meteorológicas del exterior de la Cueva .

— Flujo h idro lóg ico : Cauda l de las infi l traciones del agua de l luvia, conocimiento de las posib les f i l traciones, c ic lo de evaporaciones y condensac iones , arrastres desde el exterior, contenido de sulfatos, carbonatos y s i l icatos, contenido de hierro y man­ganeso entre otros.

— Flujo energét ico : Var iac iones de entalpia con los flujos de aire y con el flujo hidro­lóg ico , respuesta del ecos is tema al intercambio térmico.

— Evo luc ión b io lóg ica : Modi f icac ión de las poblac iones microbianas, bacter io lógicas, macrobio lóg icas correspondientes.

2. ° Estabi l idad de la pel ícula po l ic romada.

— Estabi l idad mecánica: Evo luc ión de las malformaciones, tales como depósitos de l i ­mos y arc i l las , acumulac ión de sulfatos y otras sales por arrastre y evaporac ión , cuant ía y datación de los depósitos de carbonato ca lc i co y crecimiento de cristales, desescamación superf ic ial por efectos de sequedad, d isgregaciones granulares, mo­di f icación de las d iac lasas .

— Estabi l idad térmica: Modi f icac ión de las isotermas en función de las modi f icac iones de temperatura y humedad ambientales y de los flujos de aire y energía .

— Estabi l idad h ig roscóp ica : Var iac iones de humectación con los flujos h idro lóg icos generales del ecos istema, con la humedad relativa ambiental y con la temperatura.

— Estabi l idad cromática: Var iac iones absolutas de las coordenadas tr icromáticas con todos los factores indicados y var iac iones relativas entre las distintas zonas con esos mismos factores.

3. ° Estabi l idad estructural del ecos is tema.

C o n el caudal de información que se ha detal lado estar íamos en condic iones de abor­dar la segunda etapa de los objetivos generales del proyecto.

Posiblemente al año de empezar el pr imer c ic lo de medidas podr íamos tener cubierta parte de la pr imera etapa, aunque muchos de los objetivos requieren una serie cont inuada de observaciones y medidas, con las que se podr ían ir perfi lando las conclus iones, ya que para que estas sean práct icamente definitivas se requiere, como venimos d ic iendo una investiga­c ión continua de seguimiento.

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O B S E R V A C I O N E S

— El proyecto elaborado intenta so luc ionar la problemática que creemos más impor­tante, pero precisamente por no ser exhaustivo, obviamente puede experimentar las modif ica­c iones convenientes que imponga la marcha de las investigaciones.

— Por otra parte, en el momento de redactar este proyecto, es evidente que el equipo inicial de trabajo debe ampliarse ante la extensa gama de objetivos que se persigue.

Octubre, 1979.

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•—Entrada a la Cueva. .—Sala de Policromos. .—Resto de la Cueva.

Figura 1

ENTRADA A L A

CUEVA

1—0, Hr, CO a

II.-0, Hr T"—,9, Hr, CO, IV—6, Hr

V.—0, Hr Figura 2

N O T A : El plano de la Cueva

Figura 3

A P E N D I C E I

Resumen de las Comisiones establecidas y Proyectos y Obras realizadas para la conservación de las Cuevas de Altamira.

1879: Marcelino Sanz de Saucuola hace instalar una puerta de madera. Se ilumina con velas.

1880: El Ayuntamiento de Santillana cambia la puerta de madera por una de hierro y nivela la entrada que era muy pendiente.

1908: Se construye el muro de piedra, con puerta, que separa la sala de pinturas del resto, con los 1.000 francos dados por el Príncipe Alberto I de Monaco.

1905: Se cambia la iluminación con velas por la de Acetileno.

1906: Cartailhac y Breuil descubren que el te.ho de policromos es un estrato de 60 a 80 cm. de espesor desprendido del estrato superior, partido en bloques, que aguantan por las presiones laterales mutuas. (Suponen que es muy peligroso).

1910-23: La "Junta de Conservación de la Cueva" del Ayuntamiento de Santillana, apuntala piedras y abre caminos (vocal técnico Hermilio Alcalde del Rio).

1924: La "Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades de la Dirección General de Bellas Artes" aprueba el

PROYECTO CORRAL (Ing. de Caminos Alberto Corral) a petición de Obermaier y Carballo.

— Estudio topográfico. — Se quita tierra, se rellenan las fisuras con cemento, se cubre con portland. — Ventilación para evitar la humedad excesiva. — Construcción de un pilar de 1 m.* de sección. — Se vacia el piso hasta 2,20 m. — Se construye el camino.

Se crea la "Comisión para la Conservación y Restauración de la Cueva de Altamira" para el Proyecto Corral. Se construye un muro ciclópeo de 400 m.' para sustentar el techo en el vestíbulo.

1932: Se sustituye la luz de Acetileno por la Eléctrica.

1941: PROYECTO IÑIGUEZ-BRINGAS.

— Reparar los daños ocasionados por un huracán en los edificios exteriores. — Exterminar los hongos generales en la madera que quedó en el hormigón. — Rebajar el suelo. — Instalar un apeo provisional de madera.

Afirma que el hormigón inyectado en las fisuras aumenta la sobrecarga y no suelda. Recuerda el peligro de las filtraciones en el techo. Por O. M . 24-12-41 se crea una Comisión Especial. Se construyen en el fondo de la Sala unos muretes.

!957: PROYECTO GARCIA LORENZO.

— "Coser" los estratos con cepos de hormigón para evitar el "deshojamiento". — Sustituir el apeo provisional de madera por un muro de fábrica.

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— Aislar la cueva del exterior mediante cierre de doble puerta. — Sustituir el alumbrado incandescente por tubos fluorescentes con filtros U. V. — Estudiar las características climáticas de la cueva. — Seguir de cerca los estudios de Lascaux. —< Régimen restrictivo de visitas.

1960-68: Se construyen los 3 grandes pabellones. Se construye el parking.

1976: Se crea la COMISION TECNICA por O. M . 22-1-76.

El material que utiliza es del CSIC, del Patronato de las Cuevas Prehistóricas de la Provincia de Santander, de la Dirección General del P. Artístico y de la Universidad de Madrid.

A P E N D I C E II

Bibliografía más interesante en relación al trabajo realizado por las Comisiones anteriores. —• Informes realizados por Alfredo García Lorenzo y Jesús Endériz García sobre el estado de conservación de la

Cueva de Altamira de fecha de 16-111-1970. — Informe de la Comisión Técnica Investigadora de Altamira de 27-11-1976. — Informe de la Comisión Técnica de 16-IX-1976. —• Informe sobre la reunión conjunta de las Comisiones Técnicas para la conservación de Altamira y Lascaux de

29-1-1977. — Informe de D. J. M." Cabrera Garrido de 23-XI-1977. — Conferencia de D. J. M . a Cabrera Garrido sobre Las Cuevas de Altamira y su Conservación de 1-III-1978. — Nota informativa de D. Eduardo Ripoll Perelló sobre los trabajos de la Comisión Técnica de 6-III-1978. — Programa de trabajo para el estudio de conservación de Altamira propuesto por D. J. M.* Cabrera Garrido de

3-IV-1978. — i Notas sobre la Comisión de Altamira de D. Eduardo Ripoll Perelló de 11-1979. —' Carmen C. González Vázquez, "Población microbiana en la cueva de Altamira, estudio de sus efectos sobre las pin­

turas" (1 de abril de 1976). — Eduardo Porta, "Informe sobre estancia en Altamira de los días 21 a 26 de septiembre de 1976". — José M . a Xarrié Rovira, "Informe sobre la estancia en lascuevas de Altamira, 11, 12 y 13 de octubre de 1976". — Antonio Cendrero, "Estudio geológico, litológico y geoquímico, propuesta de trabajos" (26 de marzo de 1976). — J. Fayos (por encargo de J. Blanco), "Difracción de Rayos-X sobre muestras policristalinas de estalactitas "dobla­

das" de Altamira" (1977). — José M.» Cabrera, "Materiales de pintura en la cueva deAltamira" (presentado al ICOM, 10 de diciembre de 1977). — Jaime Martí (por encargo de J. Blanco), "Informe sobre los estudios realizados en la cueva de Altamira (difracción

de Rayos-X)" (1977). —• F. J. Valle, J. S. Moya y A. Cendrero, "Estudio de la roca soporte de las pinturas rupestres de la cueva de Alta-

mira" (marzo de 1978). — "A comparative study of the microorganism present in the Altamira and La Pasiega Caves". Somaville J. F. Khayyat N .

y Arroyo, V. (International Biodet, Bull. Vol. 14 - n.° 4 - 1978). — José M.* Cabrera, "Evolución material de la cueva de Altamira" (21 de noviembre de 1977).

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