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¡Que viene el coco! Escrito por Guzmán Urrero Miércoles 11 de Junio de 2008 14:44 A la hora de acostar a sus retoños, muchos padres escogen la definición de miedo que figura en esta nana tan amenazadora: «Duérmete niño mío, / que viene el coco / y se lleva a los niños / que duermen poco». Decimos coco y con esa palabra damos forma a un espectro poderoso, capaz de arruinar la vida a los niños insomnes. El coco es un espantajo, un fantasma que acaso también sepa cocar; esto es, hacer el mismo sonido que producen los monos cuando organizan su jarana selvática. Sin duda, la criatura es repulsiva, a tal extremo que parecer o ser un coco equivale a ser muy feo. Así lo expresa esta cita de Cervantes: «mira cuántas feas cataduras nos hacen cocos». También lo dice Quevedo: «Si la verdad los cuenta, son muy pocos / Los cuerdos que en la corte no se entregan, / Si ardiente al diamantón los hace cocos. / Advierte, cuerdo, si a tu bolsa amagan, / que hay locos que echan cantos y otros locos, / Que recogen los cantos y los pagan». Don Aniceto de Pagés explora filológicamente el término en su diccionario (1904). En su opinión, coco es voz de linaje sánscrito, idioma en el que kapi es lo mismo que mono. Hacer cocos, según Pagés, quiere decir lo siguiente: «Halagar a uno con fiestas o ademanes para persuadirle lo que se quiere». ¿Y qué hay del

Que Viene El Coco

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Lingüística aplicada en el idioma cotidiano

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Que viene el coco!

Escrito por Guzmn Urrero Mircoles 11 de Junio de 2008 14:44

A la hora de acostar a sus retoos, muchos padres escogen la definicin de miedo que figura en esta nana tan amenazadora: Durmete nio mo, / que viene el coco / y se lleva a los nios / que duermen poco.Decimos coco y con esa palabra damos forma a un espectro poderoso, capaz de arruinar la vida a los nios insomnes. El coco es un espantajo, un fantasma que acaso tambin sepa cocar; esto es, hacer el mismo sonido que producen los monos cuando organizan su jarana selvtica. Sin duda, la criatura es repulsiva, a tal extremo que parecer o ser un coco equivale a ser muy feo.As lo expresa esta cita de Cervantes: mira cuntas feas cataduras nos hacen cocos. Tambin lo dice Quevedo: Si la verdad los cuenta, son muy pocos / Los cuerdos que en la corte no se entregan, / Si ardiente al diamantn los hace cocos. / Advierte, cuerdo, si a tu bolsa amagan, / que hay locos que echan cantos y otros locos, / Que recogen los cantos y los pagan.Don Aniceto de Pags explora filolgicamente el trmino en su diccionario (1904). En su opinin, coco es voz de linaje snscrito, idioma en el que kapi es lo mismo que mono. Hacer cocos, segn Pags, quiere decir lo siguiente: Halagar a uno con fiestas o ademanes para persuadirle lo que se quiere. Y qu hay del coco temible? Por fortuna, de l se ocupa Covarrubias (1611): En lenguaje de los nios, vale figura que causa espanto, y ninguna tanto como las que estn a lo oscuro o muestran color negro.El propio Covarrubias distingue este coco afantasmado del coco comestible: Nuez de la india; es fruto de un rbol ndico, muy semejante a la palma; el cual, antes de que le desnuden de su primera corteza: es tan grande como un muy grueso meln, debajo de la primera cscara, la cual es muy cabelluda y de color de castao, se muestra otra muy dura y muy fuerte, horadada con tres agujeros que parecen ojos y boca.La semejanza tiene sentido si se expresa en portugus, pues cco, en esa lengua, significa cabeza. No en vano, dicen las crnicas que los hombres de Vasco de Gama dieron su nombre al fruto del cocotero a finales del siglo XV.Curioso del asunto, Fernndez de Oviedo ampla esta informacin en su Historia General y Natural de las Indias (1535): El nombre que se dio de coco a esa fruta fue porque aquel lugar donde prende, cuando el coco nace, tiene un hoyo o agujero redondo, y encima de aquel otros dos hoyos naturalmente, y los tres vienen a hacer como un gesto de un monillo que parece que coca; y por eso se dice coco.Tomamos esta ltima cita de Garca Remiro, quien asimismo documenta el uso de la voz coco en el Lazarillo: Y acurdome que, estando el negro de mi padrastro trebejando con el mozuelo, como el nio va a mi madre e a m blancos y a l no, hua dl con miedo para mi madre y sealando con el dedo, deca: Madre, coco!. En fin, para que luego digan que el coco slo asusta a los cros.