· quierda. Ahí mismo arranca el ya cono- cido caño de los Molinos. Nosotros se- guiremos ahora...
1
· quierda. Ahí mismo arranca el ya cono- cido caño de los Molinos. Nosotros se- guiremos ahora al lado de tan bucólico cauce por una vereda amena y fresca, a la sombra generosa