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Dando continuidad a nuestro plan de formar- nos en red como Movimiento Juvenil Salesiano (MJS) presentamos los RECÁRGATE 2015, nuestra preparación en este camino cuares- mal. En este trabajo de equipo deseamos enviar un elemento de apoyo, de nutrición, es éste el es- píritu de los RECÁRGATE: subsidios forma- tivos que buscan fortalecer el camino común que emprendemos rumbo a nuestra Jornada Misionera de Semana Santa. Nuestro MJS es extraordinariamente colorido en sus formas y contenidos, hemos hecho de nuestra diversidad nuestra mayor riqueza, así nos sentimos más cerca del oratorio del cie- lo al cual nos invita Don Bosco. Así construi- mos el Reino de los cielos. Así camina nues- tra Iglesia sumando sus diversas iniciativas, transformando el humilde aporte que da cada cristiano; sus escasos peces y panes; en el milagro de Jesús. Sabemos que cada presencia del MJS de nuestro país ha ido diseñando y se encuentra ejecutando su ca- mino de preparación cuaresmal insertos en sus experiencias eclesiales locales, al ritmo de las comunidades en las que viven con sus particularidades. Este apoyo formativo viene a ser eso: un aporte para nutrir lo que ya desde cada presencia se va ofrendando. La Cuaresma es un tiempo propicio para dejarnos servir por Cristo y así llegar a ser como Él. Esto sucede cuando escuchamos la Palabra de Dios y cuando recibimos los sacramentos, en particular la Eucaristía. En ella nos convertimos en lo que recibi- mos: el cuerpo de Cristo. En él no hay lu- gar para la indiferencia, que tan a menudo parece tener tanto poder en nuestros co- razones. Quien es de Cristo pertenece a un solo cuerpo y en Él no se es indiferente hacia los demás. «Si un miembro sufre, todos sufren con él; y si un miembro es honrado, todos se alegran con él» (1 Co 12,26). Para ello, desde la comisión de animación misio- nera, te proponemos 4 subsidios, que cuentan con toda la flexibilidad necesaria para adaptarlos a los encuentros formativos que deberás organizar en tu grupo para dar respuestas a temas como: liturgia, animación, organización logística, entre otros. Proponemos meditar este año la experiencia del Tes- timonio a través de la cita bíblica “No podemos callar lo que hemos visto y oído” (Hch 4,20) la cual iremos profundizando en cada encuentro y en nuestro Folleto Misionero. Los días de la historia que vamos transitando van de- mandando de nosotros como creyentes dar testimo- nio del camino que vamos recorriendo junto a Jesús, que este testimonio sea nutrido y dado allí entre los más pobres y necesitados, en las periferias que nos recuerda el Papa y han sido misión, desde siempre, de nuestro carisma. “La misión es lo que el amor no puede callar. La Iglesia sigue a Jesucristo por el camino que la lleva a cada hombre, hasta los confines de la tierra (cf. Hch 1,8). Así podemos ver en nuestro prójimo al hermano y a la hermana por quienes Cristo murió y resucitó. Lo que hemos recibido, lo hemos recibido también para ellos. E, igualmente, lo que estos hermanos poseen es un don para la Iglesia y para toda la humanidad.” Estos materiales que proponemos buscan hacer de tus encuentros cuaresmales espacios profundos, ser un complemento que te brinde un hilo conductor en los que, bajo el método de ORA-ACCIÓN, puedas orar, reflexionar y poner en práctica a través de los siguientes planteamientos: Recárgate 1: Fortalezcan sus corazones Recárgate 2: Todos somos discípulos misioneros. Recárgate 3: Testigos en acción Recárgate 4: ¡Señor, Envíame! Recárgate 1

Recargate 2015 "No podemos callar lo que hemos visto y oído" (Hch4,20)

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Subsidio formativo para jóvenes discípulos-misioneros. Movimiento Juvenil Salesiano Venezuela

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  • Dando continuidad a nuestro plan de formar-nos en red como Movimiento Juvenil Salesiano (MJS) presentamos los RECRGATE 2015, nuestra preparacin en este camino cuares-mal.

    En este trabajo de equipo deseamos enviar un elemento de apoyo, de nutricin, es ste el es-pritu de los RECRGATE: subsidios forma-tivos que buscan fortalecer el camino comn que emprendemos rumbo a nuestra Jornada Misionera de Semana Santa.

    Nuestro MJS es extraordinariamente colorido en sus formas y contenidos, hemos hecho de nuestra diversidad nuestra mayor riqueza, as nos sentimos ms cerca del oratorio del cie-lo al cual nos invita Don Bosco. As construi-mos el Reino de los cielos. As camina nues-tra Iglesia sumando sus diversas iniciativas, transformando el humilde aporte que da cada cristiano; sus escasos peces y panes; en el milagro de Jess. Sabemos que cada presencia del MJS de nuestro pas ha ido diseando y se encuentra ejecutando su ca-mino de preparacin cuaresmal insertos en sus experiencias eclesiales locales, al ritmo de las comunidades en las que viven con sus particularidades. Este apoyo formativo viene a ser eso: un aporte para nutrir lo que ya desde cada presencia se va ofrendando.

    La Cuaresma es un tiempo propicio para dejarnos servir por Cristo y as llegar a ser como l. Esto sucede cuando escuchamos la Palabra de Dios y cuando recibimos los sacramentos, en particular la Eucarista. En ella nos convertimos en lo que recibi-mos: el cuerpo de Cristo. En l no hay lu-gar para la indiferencia, que tan a menudo parece tener tanto poder en nuestros co-razones. Quien es de Cristo pertenece a un solo cuerpo y en l no se es indiferente hacia los dems. Si un miembro sufre, todos sufren con l; y si un miembro es

    honrado, todos se alegran con l (1 Co 12,26).

    Para ello, desde la comisin de animacin misio-nera, te proponemos 4 subsidios, que cuentan con toda la flexibilidad necesaria para adaptarlos a los encuentros formativos que debers organizar en tu grupo para dar respuestas a temas como: liturgia, animacin, organizacin logstica, entre otros.

    Proponemos meditar este ao la experiencia del Tes-timonio a travs de la cita bblica No podemos callar lo que hemos visto y odo (Hch 4,20) la cual iremos profundizando en cada encuentro y en nuestro Folleto Misionero.

    Los das de la historia que vamos transitando van de-mandando de nosotros como creyentes dar testimo-nio del camino que vamos recorriendo junto a Jess, que este testimonio sea nutrido y dado all entre los ms pobres y necesitados, en las periferias que nos recuerda el Papa y han sido misin, desde siempre, de nuestro carisma.

    La misin es lo que el amor no puede callar. La Iglesia sigue a Jesucristo por el camino que la lleva a cada hombre, hasta los confines de la tierra (cf. Hch 1,8). As podemos ver en nuestro prjimo al hermano y a la hermana por quienes Cristo muri y resucit. Lo que hemos recibido, lo hemos recibido tambin para ellos. E, igualmente, lo que estos hermanos poseen es un don para la Iglesia y para toda la humanidad.

    Estos materiales que proponemos buscan hacer de tus encuentros cuaresmales espacios profundos, ser un complemento que te brinde un hilo conductor en los que, bajo el mtodo de ORA-ACCIN, puedas orar, reflexionar y poner en prctica a travs de los siguientes planteamientos:

    Recrgate 1: Fortalezcan sus corazonesRecrgate 2: Todos somos discpulos misioneros.Recrgate 3: Testigos en accin Recrgate 4: Seor, Envame!

    Recrgate

    1

  • MOTIVACIN:Vivir la Cuaresma en repetidas ocasiones nos invita a recorrer un camino. Hermosamente el Papa Francisco nos motiva este ao 2015 a que iniciemos el recorrido con nuestro corazn como primera parada; el corazn de nuestra Iglesia y el corazn de nuestra propia persona.

    En este primer encuentro nos daremos el es-pacio para degustar el Mensaje del Papa Fran-cisco para la Cuaresma 2015. Nuestro mundo, nuestro pas, cambian de forma vertiginosa y pareciera no haber tiempo para degustar sin embargo, nuestro camino hacia el cielo lleno de paradojas nos invita a meditar en medio de la tormenta, a respirar en la asfixia. En esta Venezuela de convulsiones estas son las pa-labras de su Santidad para emprender nuestra marcha cuaresmal:

    Queridos hermanos y hermanas:La Cuaresma es un tiempo de renovacin para la Iglesia, para las comunidades y para cada creyente. Pero sobre todo es un tiempo de gracia (2 Co 6,2). Dios no nos pide nada que no nos haya dado antes: Nosotros ame-mos a Dios porque l nos am primero (1 Jn 4,19). l no es indiferente a nosotros. Est interesado en cada uno de nosotros, nos conoce por nuestro nombre, nos cuida y nos busca cuando lo deja-mos.

    Cada uno de nosotros le interesa; su amor le impide ser indiferente a lo que nos sucede.

    Dios est atento a lo que nos sucede, y una de nuestras primeras indiferencias a resolver es nuestra indiferencia hacia Dios, para ello nuestra primera experiencia ser colocar-nos en sintona con Dios, testimoniar la presencia de Dios.

    Reunidos en nuestro grupo iniciaremos el encuentro ponindonos en presencia del Seor diciendo:

    En el nombre del Padredel Hijo y del Espritu Santo

    Hacer la seal de la cruz implica ponernos en la pre-sencia de la cruz, de la cruz que contemplamos, me-ditamos, vivimos y anunciamos.

    Te proponemos tomar esta cruz de papel y respon-der en el brazo izquierdo: Cmo te visualizas para la vivencia de tu camino cuaresmal? (tus metas, re-tos, temores, experiencias a sanar, dificultades, es-peranzas) Y en el brazo derecho: Qu deseas or al culminar la cuaresma? (or de tu corazn, de tu accin misionera, de tu comunidad, de tu familia).

    Recrgate 1Fortalezcan sus cora

    zones

    2

  • EN GRUPOLeer en voz alta

    Cuando el pueblo de Dios se convierte a su amor, encuentra las respuestas a las preguntas que la historia le plantea continuamente. Uno de los desa-fos ms urgentes sobre los que quiero detenerme en este Mensaje es el de la globalizacin de la in-diferencia.

    La indiferencia hacia el prjimo y hacia Dios es una tentacin real tambin para los cristianos. Por eso, necesitamos or en cada Cuaresma el grito de los profetas que levantan su voz y nos despiertan.

    Tomaremos un papel bond o una hoja para la si-guiente actividad:

    3

    Ante esta realidad Dios nos da una respuesta en las palabras del Papa que vienen a ser un blsa-mo cuaresmal:

    Dios no es indiferente al mundo, sino que lo ama hasta el punto de dar a su Hijo por la salvacin de cada hombre. En la encarnacin, en la vida terrena, en la muerte y resurreccin del Hijo de Dios, se abre definitivamente la puerta entre Dios y el hombre, entre el cielo y la tierra.

    Y la Iglesia es como la mano que tiene abier-ta esta puerta mediante la proclamacin de la Palabra, la celebracin de los sacramentos, el testimonio de la fe que acta por la caridad (cf. Ga 5,6). Sin embargo, el mundo tiende a ce-rrarse en s mismo y a cerrar la puerta a travs

    de la cual Dios entra en el mundo y el mundo en l. As, la mano, que es la Iglesia, nunca debe sorprenderse si es re-chazada, aplastada o herida.

    El pueblo de Dios, por tanto, tiene necesidad de renovacin, para no ser indiferente y para no cerrarse en s mis-

    mo. Querra proponerles tres pasajes para meditar

    acerca de esta renova-cin.

    EN LA IGLESIA:Continuaremos la lectura del Mensaje del Papa haciendo una profunda oracin con el texto: LECTOR 1: La caridad de Dios que rompe esa cerrazn mortal en s mismos de la in-diferencia, nos la ofrece la Iglesia con sus enseanzas y, sobre todo, con su testimonio. Sin embargo, slo se puede testimoniar lo que antes se ha experimentado. El cristiano es aquel que permite que Dios lo revista de su bondad y misericordia, que lo revista de Cristo, para llegar a ser como l, siervo de Dios y de los hombres.

    Haciendo silencio, de forma personal pensa-remos: Cules son los gritos de nuestro pueblo? Cules son sus nece-sidades? Trataremos de colocarles nombres puntuales y los compar-tiremos en voz alta. Lue-go, escogeremos el que ms se repita o llega-remos al consenso del ms destacado entre todos y lo colocaremos en el formato que tene-mos a continuacin:

  • TODOS: Si un miembro sufre, todos sufren con l.

    LECTOR 2: La Iglesia es communio sanctorum porque en ella participan los santos, pero a su vez porque es comunin de cosas santas: el amor de Dios que se nos revel en Cristo y to-dos sus dones. Entre estos est tambin la res-puesta de cuantos se dejan tocar por ese amor. En esta comunin de los santos y en esta parti-cipacin en las cosas santas, nadie posee slo para s mismo, sino que lo que tiene es para todos.

    TODOS: Si un miembro sufre, todos sufren con l

    LECTOR 1: Y puesto que estamos unidos en Dios, podemos hacer algo tambin por quie-nes estn lejos, por aquellos a quienes nunca podramos llegar slo con nuestras fuerzas, porque con ellos y por ellos rezamos a Dios para que todos nos abramos a su obra de sal-vacin.

    TODOS: Si un miembro sufre, todos sufren con l

    LECTOR 2: Lo que hemos dicho para la Igle-sia universal es necesario traducirlo en la vida de las parroquias y comunidades. En estas realidades eclesiales se tiene la ex-periencia de que formamos parte de un solo cuerpo? Un cuerpo que recibe y comparte lo que Dios quiere donar? Un cuerpo que conoce a sus miembros ms dbiles, pobres y pequeos, y se hace cargo de ellos? O nos refugiamos en un amor universal que se compromete con los que estn lejos en el mundo, pero olvida al Lzaro sentado de-lante de su propia puerta cerrada? (cf. Lc 16,19-31).

    TODOS: Si un miembro sufre, todos sufren con l

    LECTOR 1: Para recibir y hacer fruc-tificar plenamente lo que Dios nos da es preciso su-perar los confines de la Iglesia visible en dos direcciones.

    En primer lugar, unindonos a la Iglesia del cielo en la oracin. Cuando la Iglesia terrenal ora, se ins-taura una comunin de servicio y de bien mutuos que llega ante Dios. Junto con los santos, que en-contraron su plenitud en Dios, formamos parte de la comunin en la cual el amor vence la indiferencia.

    Por otra parte, toda comunidad cristiana est lla-mada a cruzar el umbral que la pone en relacin con la sociedad que la rodea, con los pobres y los alejados. La Iglesia por naturaleza es misionera, no debe quedarse replegada en s misma, sino que es enviada a todos los hombres.

    TODOS: Seor, que los lugares en los que se ma-nifiesta la Iglesia, en particular nuestras parroquias y nuestras comunidades, lleguen a ser islas de miseri-cordia en medio del mar de la indiferencia.Permanecemos en silencio y de forma espontanea compartimos en voz alta la frase o palabra que nos ha quedado resonando en nuestra mente y corazn.

    EN EL MUNDO: Meditar este mensaje cuaresmal de forma personal y con nuestro grupo nos apa a salir al encuentro con nuestro prjimo. Eres t el que har vida cada pala-bra que hemos meditado para lo que te proponemos retomes tu cruz y puedas completarla a la luz de la invitacin que nos hace el Papa Francisco:

    Tambin como individuos tenemos la tentacin de la indiferencia. Estamos saturados de noticias e imge-nes tremendas que nos narran el sufrimiento humano y, al mismo tiempo, sentimos toda nuestra incapacidad para intervenir. Qu podemos hacer para no dejarnos absorber por esta espiral de horror y de impotencia?

    En primer lugar, podemos orar en la comunin de la Iglesia terrenal y celestial. No olvidemos la fuerza de la oracin de tantas personas. 4

  • En segundo lugar, podemos ayudar con gestos de caridad, lle-gando tanto a las personas cercanas como a las lejanas, gra-cias a los numerosos organismos de caridad de la Iglesia.

    Y, en tercer lugar, el sufrimiento del otro constituye un llamado a la conversin, porque la necesi-dad del hermano me recuerda la fragilidad de mi vida, mi depen-dencia de Dios y de los herma-nos. Si pedimos humildemente la gracia de Dios y aceptamos los lmites de nuestras posibilidades, confiaremos en las infinitas posi-bilidades que nos reserva el amor de Dios. Y podremos resistir a la tentacin diablica que nos hace creer que nosotros solos podemos

    salvar al mundo y a nosotros mis-mos.

    CONCLUSINSugerimos colocar el ltimo fragmento del

    Mensaje en una hojita a modo de carta para ser entregada a cada participante del encuentro,

    proyectarla o colocarla en un papel bond para ser leda por todos.

    Tener un corazn misericordioso no significa tener un corazn dbil. Quien desea ser misericordioso necesita

    Elabora una frase que ser

    tu oracin diaria de

    esta cuaresma.

    1

    2

    Plantate un gesto de cari-dad que hars durante estos

    40 das.

    3

    Seala qu fragilidad per-sonal debes de superar

    durante esta cuaresma.

    5

  • un corazn fuerte, firme, cerrado al tentador, pero abierto a Dios. Un corazn que se deje impregnar por el Espritu y guiar por los caminos del amor que nos llevan a los hermanos y hermanas. En definitiva, un corazn pobre, que conoce sus propias pobrezas y lo da todo por el otro.

    Por esto, queridos hermanos y her-manas, deseo orar con ustedes a Cristo en esta Cuaresma: Fac cor nostrum secundum Cor tuum: Haz nuestro corazn semejante al tuyo (Splica de las Letanas al Sagrado Corazn de Jess). De ese modo tendremos un corazn fuerte y mise-ricordioso, vigilante y generoso, que no se deje encerrar en s mismo y no caiga en el vrtigo de la globali-zacin de la indiferencia.

    Con este deseo, aseguro mi oracin para que todo creyente y toda comu-nidad eclesial recorra provechosa-mente el itinerario cuaresmal, y les pido que recen por m. Que el Seor los bendiga y la Virgen los guarde.

    Papa Francisco

    Rezamos todos juntos: Dios te salve Mara

    Por esto, queridos hermanos y her-manas, deseo orar con ustedes a Cristo en esta Cuaresma: Fac cor nostrum secundum Cor tuum: Haz nuestro corazn semejante al tuyo (Splica de las Letanas al Sagrado Corazn de Jess). De ese modo tendremos un corazn fuerte y mi-sericordioso, vigilante y generoso, que no se deje encerrar en s mismo y no caiga en el vrtigo de la globali-zacin de la indiferencia.

    Con este deseo, aseguro mi oracin para que todo creyente y toda comu-nidad eclesial recorra provechosa-mente el itinerario cuaresmal, y les pido que recen por m. Que el Seor los bendiga y la Virgen los guarde.

    Papa Francisco

    Rezamos todos juntos: Dios te salve Mara

    6

  • Recrgate 2Todos somos discpu

    los

    misioneros(EG 120, 127, 128, 12

    9)

    MOTIVACIN: El Santo Padre Francisco escribe la Exhorta-cin Apostlica Evangelii Gaudium para ayu-darnos en nuestra Evangelizacin, nos ani-ma a renovar nuestro encuentro con Jess, a comprometernos y a arriesgarnos por l y su Reino en nuestro trabajo pastoral.

    Creemos que la profundizacin de algunos numerales de la Exhortacin nos puede ser-vir para prepararnos a nuestro trabajo pasto-ral como misioneros que testifican la Palabra de Dios en esta Semana Santa 2015.

    El Papa nos invita a vivir este tiempo de Cuaresma con alegra, porque el recorrer este camino encuentra su sentido en la vi-vencia de la venidera Pascua. Somos jve-nes salesianos, la alegra es nuestra cdula de identidad.

    Palabras de nuestro Santo Padre Francisco, EG 120:

    En virtud del Bautismo recibido, cada miembro del Pueblo de Dios se ha conver-tido en discpulo misionero (cf. Mt 28,19). Cada uno de los bautizados, cualquiera que sea su funcin en la Iglesia y el grado de ilustracin de su fe, es un agente evan-gelizador, y sera inadecuado pensar en un esquema de evangelizacin llevado ade-lante por actores calificados donde el resto del pueblo fiel sea slo receptivo de sus acciones. La nueva evangelizacin debe implicar un nuevo protagonismo de cada uno de los bautizados. Esta conviccin se convierte en un llamado dirigido a cada

    cristiano, para que nadie postergue su compromiso con la evangelizacin, pues si uno de verdad ha he-cho una experiencia del amor de Dios que lo salva, no necesita mucho tiempo de preparacin para salir a anunciarlo, no puede esperar que le den muchos cursos o largas instrucciones. Todo cristiano es mi-sionero en la medida en que se ha encontrado con el amor de Dios en Cristo Jess; ya no decimos que somos discpulos y misioneros, sino que somos siempre discpulos misioneros. Si no nos conven-cemos, miremos a los primeros discpulos, quienes inmediatamente despus de conocer la mirada de Jess, salan a proclamarlo gozosos: Hemos en-contrado al Mesas! (Jn 1,41). La samaritana, ape-nas sali de su dilogo con Jess, se convirti en misionera, y muchos samaritanos creyeron en Jess por la palabra de la mujer (Jn 4,39). Tambin san Pablo, a partir de su encuentro con Jesucristo, en-seguida se puso a predicar que Jess era el Hijo de Dios (Hch 9,20). A qu esperamos nosotros?

    Motivacin reflexiva:El encuentro con Jess me lleva a contarles a todos lo que he visto y he odo para que tambin ellos se encuentren con l.

    Tengamos en cuenta dos cosas muy importantes: el encuentro personal y sanador con Jess me lleva a salir de mi mismo y a compartir con los otros mi ex-periencia.

    Ms all de mis limitaciones, o de cmo yo sea y cual sea mi historia, como bautizado estoy llamado a ser discpulo misionero. Soy protagonista y responsable de llevar la Palabra a mi cultura, a mi realidad. Es el Espritu Santo el que me asiste en esta tarea. La gente de mi barrio, de mi entorno, del lugar donde hago mi-sin tiene sed de Dios, le buscan, yo puedo llevarles el mensaje, yo soy hoy los ojos, las manos, los pies y el corazn de Jess para los dems.7

  • Cada misionero va a escribir:

    1. Su experiencia de encuentro con Jess:Qu persona o personas te ayudaron? Qu actividades, acciones, palabras, experiencias te ayudaron?__________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

    2.Cmo te sientes desde ese momento? En qu ha cambiado tu vida? Qu quisieras comunicarle a otros jvenes en la calle, en la parroquia, en las visitas a las familias?___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

    AccinDurante esta Cuaresma y Semana Santa, saldremos a la calle a compartir nuestras historias de encuentro con Jess para con-tagiar a otros nuestra alegra de haber sido encontrados y enviados por Jess a una mi-sin: que todos le conozcan y sepan que l les ama.

    8

  • Recrgate 3Denles ustedes de co

    mer

    (Mc 6, 37; EG 49, 188)

    Cmo podemos ser ms fieles a su seguimiento?_________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

    Lo primero, dejarnos afectar ms y ms por el sufri-miento de quienes no saben lo que es vivir con pan y dignidad. Lo segundo, comprometernos en pequeas iniciativas, concretas, modestas, que nos ensean a compartir y nos identifican ms con el estilo de Jess.

    Qu podemos hacer ante el hambre, las tristezas, las preocupaciones, los dolores de las personas que nos rodean? puedo yo, hacer algo?

    __________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

    Divididos en grupos leer este pasaje del Evangelio.

    Palabras de nuestro Santo Padre Francisco, EG 49: Salgamos, salgamos a ofrecer a todos la vida de Jesucristo. Repito aqu para toda la Iglesia lo que muchas veces he dicho a los sacerdotes y laicos de Buenos Aires: prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el en-cierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades. No quiero una Iglesia preocupa-da por ser el centro y que termine clausurada en una maraa de obsesiones y procedimien-tos. Si algo debe inquietarnos santamente y preocupar nuestra conciencia, es que tantos hermanos nuestros vivan sin la fuerza, la luz y el consuelo de la amistad con Jesucristo, sin una comunidad de fe que los contenga, sin un horizonte de sentido y de vida.

    Ms que el temor a equivocarnos, espero que nos mueva el temor a encerrarnos en las es-tructuras que nos dan una falsa contencin, en las normas que nos vuelven jueces im-placables, en las costumbres donde nos sen-timos tranquilos, mientras afuera hay una multitud hambrienta y Jess nos repite sin cansarse: Denles ustedes de comer! (Mc 6,37).

    Motivacin reflexivaEn un mundo donde mueren de hambre cada ao millones de personas, los cristia-nos slo podemos vivir avergonzados, no podemos decir que tenemos alma cristiana.No hemos de olvidar algo muy importante: si vivimos de espaldas a los necesitados del mundo y de nuestra Venezuela, perde-mos nuestra identidad cristiana, no somos fieles seguidores de Jess.

    9

  • El pasaje del Evangelio me seala, que soy yo el que tiene que darles de comer, el que algo puede hacer para aliviar el dolor y las preocupa-ciones

    Soy yo el que algo puede hacer siendo solidario, siendo fraterno, ayudando a nios y ancianos, cuidando la naturaleza, compartiendo

    Qu puedo hacer yo? Hacer una lista con aque-llas cosas que hara Jess, en esta realidad que vivimos y que yo tambin puedo hacer porque soy cristiano.

    ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

    Accin: Durante esta Cuaresma y Sema-na Santa, antes de sentarnos a la mesa nos propondremos hacer de este momento un momento de compartir, de encuentro, de des-canso. Vamos a compartir el pan, nos vamos a nutrir con el alimento, pero tambin nos va-mos a nutrir con el dilogo, la amistad y la fraternidad de aquellos con quienes compar-timos mesa y pan.

    Al terminar la comida daremos gracias a Dios por lo recibido, pediremos perdn por las ve-ces en que no somos solidarios y tomamos conciencia de nuestra responsabilidad ante los hambrientos de la tierra.

    Y saliendo Jess vi una grande multitud, y tuvo compasin de ellos, porque eran como ovejas que no tenan pastor; y les comenz a ensear muchas cosas.Mc. 6, 35-43Se haba hecho tarde. Los discpulos se le acerca-ron y le dijeron: Estamos en un lugar despoblado y ya se ha hecho tarde; despide a la gente para que vayan a las aldeas y a los pueblos ms cercanos y se compren algo de comer. Jess les contes-t: Denles ustedes de comer. Ellos dijeron: Y quieres que vayamos nosotros a comprar doscien-tos denarios de pan para drselo? Jess les dijo: Cuntos panes tienen ustedes? Vayan a ver. Volvieron y le dijeron: Hay cinco, y adems hay dos pescados. Entonces les dijo que hicieran sentar a la gente en grupos sobre el pasto verde. Se acomo-daron en grupos de cien y de cincuenta. Tom Jess los cinco panes y los dos pescados, levant los ojos al cielo, pronunci la bendicin, parti los panes y los iba dando a los discpulos para que se los sirvieran a la gente. Asimismo reparti los dos pescados en-tre todos. Comieron todos hasta saciarse; incluso se llenaron doce canastos con los pedazos de pan, sin contar lo que sobr de los pescados.

    Reflexionar esta pregunta: Qu necesidades, pre-ocupaciones, tienen nuestros vecinos, la gente que nos rodea, nuestras familias. Salimos a la calle, ob-servamos, leemos el peridico, noticias digitales?Hacemos una lista de necesidades, preocupaciones, dolores._____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________ 10

  • Recrgate 4Seor, Envame! Motivacin:

    El Padre Vclav Klement sdb, Consejero para las Misiones, a propsito de la Jornada Misio-nera Salesiana ( JMS ) 2015, cuyo lema es: Seor , envame! Nos anima a redescubrir el espritu misionero de nuestro Padre a tra-vs del conocimiento de muchas historias de vocaciones de misioneros salesianos. Qu metas queremos lograr este ao? En primer lugar queremos afirmar que nosotros somos los primeros destinatarios de la Jornada Mi-sionera Salesiana. En este momento reflexio-naremos sobre la espiritualidad misionera sa-lesiana.

    Palabras del Rector Mayor: Yo concluyo dando a los misioneros estas consignas. La primera, los quiero con una gran familiaridad con la Palabra de Dios. Porque si tienen en las manos la Palabra de Dios pueden tener la mente en Dios y la mirada de Dios para contemplar el mundo como Dios lo contem-pla. La segunda, un gran amor a la Eucaris-ta... Y la tercera, un servicio generoso a los ms pobres.

    Ver: La vocacin misione-ra es una larga historia de amor entre Dios que llama y el apstol que responde. Es siempre Dios el que eli-

    ge. Y el hombre nunca es tan grande como cuando dice s al Dios que pasa y llama. Eso lo podemos apreciar en la vida de los santos, cada uno fue llamado por Dios y generosamente fue cumpliendo su volun-tad.

    La actividad misionera no se basa directa-mente en capacidades humanas. El sujeto protagonista de toda la misin de la Igle-sia es el Espritu Santo: l llama, ilumina, gua, da fuerzas y eficacia. El misionero es enviado a entrar en especial sintona con el Espritu del Seor.

    Para comprender esas historias de amor compar-tiremos algunas vidas de Santos Misioneros que pueden ser para nosotros, ejemplo de fe y amor. Se sugiere dos metodologas: a) Trabajo en grupos: cada grupo con una biografa; y se explica breve-mente a los dems; b) Galera: exponer la vida de los santos en afiches o dramatizados y dar tiempo a

    que puedan leerlas.

    Juzgar: Luego del compartir, se puede pedir a los presentes que escriban y/o digan con cul se identifican, o cul les llam ms la atencin y por qu.

    Actuar: Despus de ver testi-monios de vida tan ricos en la fe, es necesario preguntarse: cmo estamos viviendo nuestro ser mi-sioneros? Cul es esa espiritua-

    lidad que los motiv a ser misione-ros?

    A continuacin, algunos rasgos de nues-tra espiritualidad misionera, hagamos el

    esfuerzo de revisar nuestra vida a la luz de ellos leyndolos en nuestro encuentro:

    1 Como misioneros nos sentimos fuertemente radicados en la potencia del Espritu Santo. Estamos convencidos de que l es el que ha hecho misionera a toda la Familia Salesiana. Desde nuestro fundador, hasta los salesianos y salesianas que hoy somos y conocemos.

    2 Nos caracteriza la centralidad de Cristo-Buen Pastor que exige de nosotros una peculiar actitud pe-daggica-pastoral, y que nos ayuda a privilegiar las relaciones con los destinatarios mediante la bondad dialogante, como haca Jess.11

  • 3 El compromiso educativo como misin: realzamos los aspectos educativos con la estra-tegia de Don Bosco, el canto, el juego, lo que in-teresa a los jvenes. Esto nos invita a tomar en serio tantos elementos de maduracin humana, que ayudan con realismo en los caminos de la evangelizacin. Esto requiere adems la facilidad de convivencia con la gente, la austeridad de vida, el sentido formativo, el clima de simpata en la sen-cillez. Educamos Evangelizando y Evangelizamos educando.

    4 La concrecin eclesial sita a cada uno de nosotros en el corazn de la Iglesia, por eso el mi-sionero vive la obra en la Iglesia y por la Iglesia, so-bre todo en la delicada etapa de su edificacin. La convencida adhesin al magisterio del Papa y de los Pastores es para nosotros una fuerte herencia espi-ritual que se debe hacer crecer en toda Iglesia local.

    5 La alegra de la laboriosidad nos recuerda a que hemos nacido en la Colina de las Bienaventu-ranzas juveniles y que la alegra es una nota carac-terstica de nuestra espiritualidad.

    La caracterstica de toda vida misionera autntica es la alegra interior que viene de la fe.

    6 La dimensin mariana: toda la misin salesia-na se considera como participacin de la misin de la maternidad eclesial de Mara, invocada como Auxilia-dora.

    Con Mara imploramos al Espritu Santo para obtener fuerza y nimo para cumplir el mandato misionero.

    Mara es el modelo de ese amor materno del cual de-bemos estar animados todos losmisioneros.

    (Don Egidio Vigan, ACG 336 1991).

    Escribe a continuacin en modo de oracin, tres de los rasgos en los que debes crecer y comprtelo con el gru-po, para que te ayuden a caminar en la trama de Dios. Para finalizar, hacemos juntos la oracin de la Jornada Misionera Salesiana 2015.

    OracinDios Padre, te damos gracias

    porque has confiado a tu Iglesia el Evangelio de Cristo,

    porque has suscitado en el corazn de Don Bosco la pasin misionera,

    porque has llamado a miles de Salesianos a llevar el Evangelio a todo el mundo,

    porque ayudas tambin hoy a los hijos de Don Bosco a acoger la llamada misionera.

    Seor Jess, aydanos a salir cada da de nosotros mismos, de la

    cerrazn de nuestros ambientes,a despertar el ardor misionero en el corazn de todos los miembros de la Familia Salesia-

    na, a responder con entusiasmo a la llamada

    misionera,a formar grupos misioneros juveniles en las

    obras salesianas.Espritu Santo, asiste

    a todos los discpulos de Jess en el testimo-nio y en la evangelizacin,

    a los misioneros salesianos en sus dificulta-des y crisis,

    a todos nosotros, para que con el corazn apostlico de Don Bosco,

    podamos extender el reino de Dios hasta los ltimos confines del mundo.

    Amn 12

  • Animacin misioneraMovimiento

    Juvenil SalesianoVenezuela

    2015

    envanos tus sugerencias

    y comentarios a

    [email protected]

    Bibliografa

    Exhortacin Apostlica Evangelii Gaudium, Santo

    Padre Francisco.

    Pastoral juvenil a la luz de la Evangelii Gaudium, F

    abio Attard SDB.

    El camino abierto por Jess, Jos Antonio Pagola.