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Reflexión final A lo largo del año fue importante extrapolar los contenidos trabajados en Didáctica II hacia la práctica. De este modo fui creando diferentes miradas sobre el espacio educativo al cual asistí, estas estaban subjetivadas desde nuestra asignatura, a través del grupo de quinto año científico. Mi postura inicial fue observar el funcionamiento del espacio micro aula, para descubrir fortalezas y debilidades, además de reflexionar sobre las prácticas de mi docente adscriptora y el proceso de aprendizaje de los estudiantes. El diálogo fue la base de la relación docente practicante, este intercambio respetuoso, fluido y amigable, me permitió reformular en algunos casos mis propuestas, crear mayor atino a la hora de proponer ideas hacia el aula, y sobre todo enriquecerme con el aporte de Patricia Alario. También pude descubrir algunas fortalezas y debilidades personales respecto al curso, cosa no menor, el ser consciente de ambas es un gran logro para seguir en este camino. Como dice Paulo Freire “donde hay vida, hay inacabamiento” (“Pedagogía de la Autonomía”, México. Ed. Siglo XXI, 1997). Ser consciente de ello es visualizar como principal aprendizaje que la actividad educativa en el área artística debe ser dinámica; además de proyectar hacia el futuro una actitud docente activa donde la formación, el intercambio interdisciplinar, y objetivos claros permitirán generar nuevas formas de enseñar y de aprender. Agradezco al grupo de estudiantes, a la docente Patricia Alario y al Profesor Michel Prince, por haber compartido estas experiencias durante el año. Nos encontramos pronto, Mariana Morales.

Reflexión final

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Page 1: Reflexión final

Reflexión final

A lo largo del año fue importante extrapolar los contenidos trabajados en

Didáctica II hacia la práctica. De este modo fui creando diferentes miradas

sobre el espacio educativo al cual asistí, estas estaban subjetivadas desde

nuestra asignatura, a través del grupo de quinto año científico.

Mi postura inicial fue observar el funcionamiento del espacio micro aula,

para descubrir fortalezas y debilidades, además de reflexionar sobre las

prácticas de mi docente adscriptora y el proceso de aprendizaje de los

estudiantes. El diálogo fue la base de la relación docente – practicante, este

intercambio respetuoso, fluido y amigable, me permitió reformular en

algunos casos mis propuestas, crear mayor atino a la hora de proponer ideas

hacia el aula, y sobre todo enriquecerme con el aporte de Patricia Alario.

También pude descubrir algunas fortalezas y debilidades personales respecto

al curso, cosa no menor, el ser consciente de ambas es un gran logro para

seguir en este camino.

Como dice Paulo Freire “donde hay vida, hay inacabamiento”

(“Pedagogía de la Autonomía”, México. Ed. Siglo XXI, 1997). Ser

consciente de ello es visualizar como principal aprendizaje que la actividad

educativa en el área artística debe ser dinámica; además de proyectar hacia

el futuro una actitud docente activa donde la formación, el intercambio

interdisciplinar, y objetivos claros permitirán generar nuevas formas de

enseñar y de aprender.

Agradezco al grupo de estudiantes, a la docente Patricia Alario y al Profesor

Michel Prince, por haber compartido estas experiencias durante el año.

Nos encontramos pronto, Mariana Morales.