REVISTA 18 VERANO 2009 - Aras de los olmos...Desde el rincón de la biblioteca como siempre os animamos a que sigáis subiendo a por libros y a estar allí un rato charlando de ellos

de LOSILLA − Verano 2009 página - 1

Nuestra portada

Nuestra portada recoge una vez más,

la celebración de la fiesta Septenaria en honor de Santa Catalina en Losilla

Seguimos igual... 2 Las Fiestas de Pascua 2009 4

Rincón de la biblioteca 6 Fiesta septenaria a Santa Catalina 7 Abel Visiedo: Un hombre singular 11 Agencia Empleo y Desarrollo Local 19 La Muela y los molinos 20 El Pastorcillo (continuación) 24 Nacer con suerte 25 Consejos culinarios 29 Propiedades curativas 30 Soluciones a: Érase una vez... Revista 16 32 Concurso : Érase una vez... 33

EDITA: Asociación Cultural “LOSILLA” DIRIGE Y COORDINA: La Junta Directiva. NOTA: la Asociación Cultural no responde ni se hace partícipe de las opiniones personales que puedan contener los artículos publicados. Depósito Legal: V-1855-2001

Sumario


Seguimos igual... Continuamos inmersos en un túnel sin salida. La luz que algunos analistas quieren poner al final del túnel, es tan pequeña, que no se aprecia a la distancia a la que nos encontramos. Y lo peor de todo, es que nadie intenta cortar de raíz las prácticas que nos han llevado a esta situación: “la especulación”. Los especuladores hicieron su “agosto” antes de la crisis, y seguramente seguirán haciéndolo con ella. La falta de un control severo en la economía de mercado, que establezca los límites hasta los cuales se pueda considerar ética la actuación de quienes dirigen ciertos sectores, nos puede llevar de nuevo a tropezar con la misma piedra. Los especuladores siguen dominando los mercados, como lo llevan haciendo desde que nos incorporamos al mercado liberal. Cuando algo se quiere hundir, se utilizan medios que no deberían permitirse, puesto que detrás de cada sector que se hunde, existen seres humanos, familias enteras que dependen de esa actividad, sean del sector industrial, agrario, construcción o servicios. Nosotros vivimos en un país, en el que la agricultura siempre ha sido la eterna olvidada de todas las Administraciones. Ni en la dictadura, una vez que se acabó el hambre generado por la guerra civil, ni en la democracia, nadie se acordó de ella, y eso que la tierra genera todos los alimentos que el ser humano necesita para vivir. A pesar de ello, ahí está, olvidada por todos. Tenemos las tierras perdidas, porque todo lo que en ellas podríamos producir, no les interesa a los “especuladores”. El trigo y la cebada que siempre fue de lo que más se producía en Losilla, dejó de sembrarse porque desde los años 70, hasta la actualidad, el precio sigue siendo el mismo. Aunque sus derivados hayan multiplicado el precio por 10, o incluso más.

Lo mismo ocurre con el vino, algo para lo que la tierra de Losilla siempre se ha considerado de buena calidad y con garantía de cosecha. Que las viñas se han arrancado, y en la actualidad están en fase de desaparecer, porque generan más gastos que ingresos. Y esta destrucción continuará con los campos de almendros que han venido a sustituir los cereales y el vino, los cuales, una vez que las ayudas que reciben de la Unión Europea no lleguen, pasarán a criar en principio ontinas, y más adelante, maleza de todo tipo. En nuestra querida patria, la agricultura se abandonó por la industria, no por algo, nuestros antepasados decían: “La tierra te dará de comer, pero no te hará rico”. Por eso, fue perdiendo peso paulatinamente a favor de la industria, y posteriormente, esta, también ha ido perdiendo terreno a favor de la


construcción; en este caso por los elevados beneficios especulativos que en torno a ella se han estado generando.

La construcción especulativa se ha adueñado del mercado, tanto que los campos en torno a las ciudades y las zonas naturales de la costa, han sido absorbidos por enormes torres de cemento y ladrillo. Haciéndonos creer que su construcción era necesaria debido al aumento demográfico de la población y a la enorme expansión del turismo como fuente de riqueza.

Pero ahora los cálculos fallan, y existen miles y miles de viviendas construidas esperando alguien que pueda pagar lo que sus propietarios, en la mayoría de los casos las entidades financieras pidan por ellas. Lo mismo ocurre con el turismo que está cayendo y seguramente lo seguirá haciendo durante varios años. Por ello, creo que quienes dirigen y orientan las políticas a llevar a cabo, deben intentar poner los medios necesarios para establecer un mundo más justo y equilibrado, un mundo en el que todo y todos los que formamos parte de el, podamos vivir dignamente, sin estar sometidos a la barbarie que unos pocos siguen imponiéndonos. Ante esta situación tan desalentadora, cada día aparecen más casos de los que aprovechándose de su situación privilegiada, quieren labrarse un porvenir asegurado a costa de los impuestos que pagamos entre todos. Por eso creo que los políticos, han de ponerse de acuerdo en trasmitir a la sociedad una imagen de total transparencia, haciendo de la honradez su principal testigo. Será a partir de entonces, cuando la sociedad no los tendrá catalogados con aquello de “Todos son unos...”. Y seguramente contarán con la confianza de los ciudadanos, cada uno, dentro de la ideología que represente. Ante este panorama tan poco alentador, la Asociación Cultural “Losilla” celebró el pasado Viernes Santo, una Asamblea General, de la que salió la nueva junta directiva. Junta que se marcó como objetivo seguir trabajando por Losilla y sus gentes, como se viene haciendo desde su constitución. Vamos a intentar todos juntos, que la aldea de Losilla siga en la vanguardia en cuanto al fomento y desarrollo de la cultura, a través de su biblioteca, exposiciones, y todas aquellas actividades que puedan llevarse a cabo. Porque siempre hemos sido conscientes que a través de la cultura se consigue la dignidad y la libertad de las personas, y a ello debemos contribuir todos.

En este momento, estamos pendientes de que el Ayuntamiento de Aras de los Olmos, a través de la Diputación Provincial y su programa, “Valencia Provincia Wifi”, se pueda dotar de internet a la aldea de Losilla. De momento están trabajando en ello, y esperamos que en este caso Losilla no quede al margen del progreso. Simeón Rubio


Las fiestas de Pascua 2009

Las fiestas de pascua se repiten cada año de forma monótona. Aunque de momento siguen aportando su objetivo, que no debe ser otro, que todas las personas descendientes de la aldea sigan acudiendo a Losilla para compartir juntos unos días de ocio y reencuentro.

Cierto es, que en las fechas en las que se celebra la Semana Santa, siempre aparecen salpicadas por el mal tiempo, pero ante este hecho climático no cabe más que aplicar el refrán de “Al mal tiempo, buena

cara”, y seguir trabajando para que la gente pueda reunirse en Losilla.

Este año, el calendario fue fiel a sus dichos por aquello de: ”la luna de octubre, siete lunas cubre”. Así tuvimos nieve en abundancia y frío para no olvidarse de la manta, como cada mes de mediados de noviembre. Pero este clima tan poco propicio para la fiesta, si que

facilitó la diversión de los más pequeños, algunos de los cuales pudieron ver la nieve por primera vez.

La organización de las fiestas, vino de la mano de la “Asociación de Serranos”, con la colaboración del Ayuntamiento, SARC, Asociación de jubilados y Asociación Cultural de Losilla. Entre todos nos ofrecieron un programa muy variado, en el que como siempre suele suceder, la participación estuvo en función de lo que en cada acto se ofrecía.

Caben destacar por la alta participación que registran cada año, el chocolate que ofrece la Asociación de Jubilados y las gachas. Gachas que


este año por primera vez se les dio una ubicación totalmente diferente a lo largo de la plaza. Vimos una plaza muy concurrida por el ir y venir de las gentes, que se interesaban por cómo y con qué se elaboran las gachas, llegando algunos a participar directamente.

Creo que esta experiencia, fue totalmente positiva, a pesar de los inconvenientes que genera el trabajo adicional que representa, porque de esta forma el pueblo participa de principio a fin, dándole mayor ambiente a la fiesta.

Consolidado año tras año, está el desayuno popular que ofrece la mañana del domingo la Asociación Cultural. Cada vez son más los que se acercan a la mesa a tomarse unos buñuelos, una cazalla o unas pastas. Y sobre todo porque sirve de punto de arranque para los preparativos de las gachas.

Los niños participaron efusivamente en “la globo mascletá”, juegos y cuenta cuentos, aunque para la inmensa mayoría, su mejor entretenimiento fue el poder jugar con la nieve.

Esperamos que las fiestas sigan siendo el punto de inflexión en el que todos nos veamos representados, y con ellas se siga contribuyendo al reencuentro entre los que viven en Losilla y los que un día, la tuvieron que abandonar.


El Rincón de la Biblioteca

Desde el rincón de la biblioteca como siempre os animamos a que sigáis subiendo a por libros y a estar allí un rato charlando de ellos o de lo que sea. Como habréis visto hemos hecho un cartel para la biblioteca y del mismo dibujo se han hecho separadores para los libros.

El cartel, lo ha hecho Sergio Mora, que sigue colaborando con nosotros siempre que se lo pedimos. La foto, recoge la entrega del libro a la agraciada en el sorteo celebrado entre todos los que durante el año 2008, participaron en la lectura de libros de la biblioteca. Con ello, intentamos seguir animando a la gente a que participe de la lectura. Hemos leído mucho durante estos meses y entre todo lo leído os recomendamos: -Mil soles esplendidos de Khaled Hosseini

-Levantado del suelo de José Saramago -Trilogía Millenium de Stieg Larsson -Una palabra tuya de Elvira Lindo -Estambul de Orham Pamuk -Viaje al fin del mundo de Hennign Mankell -Arrugas de Paco Roca -El río de la desolación de Javier Reverte -La huésped de Stephenie Meyer -Mitologías de mama de José A. Labordeta -La soledad de los números primos de Paolo Giordano -Primavera con una esquina rota de Mario Benedetti -Saga Crespúsculo (cuatro libros: Crespúsculo, Luna Nueva, Eclipse y Amanecer) de Stephenie Meyer

Animaros a leer, ya sabéis que habrá un premio de un libro entre todos los que se acerquen a la biblioteca a sacarse un libro este año. El verano es muy largo y tiene muchos ratos libres… así que todo el mundo a leer un ratito.

Javier y Laura Mora


Fiesta Septenaria en honor de Santa Catalina en Losilla

Del 18 al 25 de julio, la aldea de Losilla y sus habitantes han

rendido un extraordinario homenaje, a su Excelsa Patrona y protectora Santa Catalina Virgen y Mártir.

Desde el primer momento, todos y cada uno de los que estaban en la aldea, contribuyeron en preparar Losilla para darle la bienvenida a Santa Catalina. El cartel que cuelga de su campanario y el arco de madera y barda, son una pequeña muestra de la ilusión que pusieron todos para preparar el acontecimiento.

Como fue habitual en las ocasiones anteriores, en esta ocasión, los hijos y descendientes de Losilla, tampoco defraudaron. Junto con familiares, amigos y vecinos, acudieron en masa desde puntos muy distantes de la geografía española,

para manifestar la fe que sienten en Santa Catalina. Para pedirle que los siga protegiendo allá en donde se encuentren. Esa fe, que los hijos de Aras y Losilla tienen en su Patrona, y que es imposible poderla expresar con palabras. Para apreciarla, hace falta compartir con todos ellos momentos como los vividos durante estos días, en los que ha estado Santa Catalina con nosotros en Losilla.

La Fe, no solamente se les ve manifestada a través de la oración, la fe, se les aprecia a través del silencio, de la emoción, del trabajo que son capaces de realizar pensando en que Santa Catalina se les tendrá en cuenta. Y en muchos actos más, en los que muy pocas veces reparamos, y que fueron el principal camino de la vida de muchos santos, entre ellos, Santa Catalina Virgen y Mártir. En el trabajo desinteresado que muchas


personas realizan, para tener un mundo más justo, ayudando a los demás cuando lo necesitan, y especialmente, en los momentos difíciles.

El sábado 18, subimos a la ermita para coger a Santa Catalina y llevarla en procesión hasta Losilla. Un trayecto corto, 3´5 kilómetros aproximadamente, pero que se llevó con ilusión, tanto por los más pequeños, como por las personas de más de ochenta años que partici-paron. A su llegada a Losilla,

se fueron incorporando personas más mayores y niños de escasa edad, para a su entrada recibirla con vítores y “dichos” en el arco construido en su honor. Dichos como el que reproducimos y que es una pequeña muestra de los que se pudieron oír.

A Santa Catalina

1.De la ermita vienes hoy, Virgen Santa Catalina, bienvenida seas Reina, a tu aldea de Losilla.

2.De la Muela bajas siempre que te lo pido Señora, tus pasos en el camino consuelo para el que llora.

3.De los cielos vienes Madre, sembrando amor y esperanza: tu espada la protección de nuestra aldea serrana.

4.De las lágrimas consuelo de la lucha fuerte espada eres guía en mi camino Santa Catalina amada.

5.Protege a tu pueblo Madre de la piedra y de las plagas, de la enfermedad del cuerpo, y de la soledad del alma.

6.Y en la muela y en los cielos, en la ermita y en la plaza, sigue siendo Santa Catalina la luz de cada mañana.

Dichos, que hicieron aflorar lágrimas de sentimiento entre los presentes, ya que de alguna manera vienen a evocar momentos difíciles,


sobre todo, por las ausencias de seres queridos que a lo largo de los siete últimos años nos han dejado. La misa y procesión que se celebró el domingo 19, constituyeron la muestra más evidente del sentimiento de todos los losillanos. Todas sus gentes con nuestro cura párroco, y aquellos que vinieron a compartir con nosotros esos momentos de fe, en compañía de la Banda Unión Musical Santa Catalina, llevamos a Santa Catalina por todas las calles de Losilla, para pedirle una vez más, que siga protegiéndola de todo lo malo.

A lo largo de toda la semana que ha permanecido Santa Catalina en Losilla, hemos podido participar de los actos religiosos programados: misas y novena. Misa como la celebrada por los niños, y en la que don Francisco les hizo partícipes de la importancia de la fe en Cristo y en Santa Catalina; la de Renovación de las promesas matrimoniales, de difuntos, etc..

Podemos decir, que nadie en Losilla, ha escapado a la mirada de Santa Catalina: desde niños de escasa edad, hasta personas mayores (algunas en sillas de ruedas), han estado a lo largo de la semana al lado


de su Patrona. Así, hasta despedirla en la mañana del sábado 25, pidiéndole que nos de salud y fuerza para que dentro de siete años, podamos contar una vez más con la presencia de Santa Catalina en la parroquia de Losilla.

Desde estas páginas, quisiera dar las gracias en primer lugar a don Francisco, nuestro cura párroco, por haberse puesto a disposición de la comunidad cristiana de Losilla desde el primer momento para la organización de los actos; a nuestro Alcalde, por el apoyo y la colaboración que nos a brindado; a todos los losillanos que con su participación masiva en los actos programados, han hecho posible que se hayan llevado a cabo con brillantez; y especialmente, a esos hombres y mujeres que han trabajado horas y horas para conseguir que esta semana de estancia de Santa Catalina en Losilla permanezca en la memoria de todos nosotros.

También quisiera hacer una mención especial, a ese grupo reducido que con su trabajo han hecho posible mantener una tradición de muchísimos años: la construcción del arco en honor de Santa Catalina en la entrada de Aras. Arco que siempre ha sido levantado en honor de

Santa Catalina cuando baja a Aras cada siete años por los losillanos. Especialmente quisiera reconocer la labor del señor Miguel Rubio, que con sus ochenta y cuatro años, nos ha dado una demostración de vitalidad y sacrificio por lo cree, ya que desde el primer momento, siempre ha estado al frente de cualquier iniciativa para llevar adelante el trabajo realizado.

A todos ellos gracias, y que esa fe en Santa Catalina, nunca nos abandone. Seguramente, con ella, podremos hacer frente mejor a los problemas que a lo largo de la vida se nos vayan presentado.

Simeón Rubio


Abel Visiedo Díaz

Un hombre singular Abel, a sido una de las pocas personas que han destacado por su peculiaridad en la historia de Losilla, de hecho, su ausencia desde hace más de un año, se deja sentir entre

todos nosotros. Igual que me consta que él también se acuerda de su Losilla natal, en su residencia de Titaguas.

Nuestra aldea, y quienes hemos formado parte de ella durante varias décadas atrás, debemos reconocer en Abel una serie de virtudes, y porqué no, también de defectos que los tuvo. Pero hay que reconocer que la ausencia de Abel, supuso mucho en su día en la vida cotidiana de Losilla, tanto para los que residían allí, como para los que llegaban de fuera de visita o para pasar el fin de semana. Abel fue siempre un hombre emprendedor donde los haya habido, sobre todo, en tiempos y situaciones difíciles, siempre supo reaccionar a tiempo.

Así conoceremos un poco la vida de un losillano, que paseó el nombre de su aldea natal por infinidad de puntos de la geografía española. Es posible, que en alguna ocasión no estuviese a la altura de las circunstancias, pero de Abel se habló mucho, y durante muchos años en lugares muy distantes de su tierra. Por eso, y por muchas cosas más se merece nuestro respeto y admiración, pero sobre todo por haber paseado el nombre de Losilla, y sus patronos San José y Santa Catalina rotulados en sus furgonetas, por infinidad de pueblos y carreteras de la geografía española, entre ellas: Teruel, Zaragoza, Castellón, Cuenca y Valencia mayoritariamente. Abel nació en Losilla el 8 de septiembre de 1.929 y desde muy pequeño tuvo que afrontar situaciones difíciles, pues le toco vivir la guerra civil y todos los problemas que sobrevinieron de ella, con tan apenas 7 años. Venía de una familia humilde, como la inmensa mayoría de las familias de la aldea, pero además, padeció la separación de sus padres siendo muy pequeño. Si a las penurias que dejó tras de sí la guerra


civil, le añadimos la falta del cariño de su madre, sin lugar a dudas tuvo que pasarlo bastante mal.

Con tan apenas diez o doce años, como les sucedía a la inmensa mayoría de los niños de Losilla, tubo que ir de pastor e incluso a labrar con los machos. Cuando empezó a ir a labrar, le pasaba como a todos los niños que hacían faenas de mayores, se las tenía que ingeniar como podía para yuncir las caballerías. Y cuenta, que en una ocasión les colocó el yugo al revés, lo que le llevó a tener que soportar las risas y comentarios de todos los que se encontraban con él en el camino.

En su recuerdo, también aparece la tragedia que se vivió en Losilla, cuando finalizada la guerra, a unos niños que estaban jugando con una granada (una de las muchas que se quedaron desperdigadas durante la guerra) les explotó; causando la muerte de uno de ellos y heridas graves a otros. De este suceso se enteró cuando venía de labrar de Las Solanas y al encontrarse en el Escay a la tía Tomasa, que se lo contó. Aún sigue pensando, que de no haber sido porque lo mandaron a labrar, él podía haber estado entre ellos.

Así fue pasando los años de sus niñez, con las penurias propias de la posguerra, hasta que cuando tan apenas contaba 17 años lo mandaron de pastor a Libros, una población situada en el Rincón de Ademuz, en donde lo peor de todo para él al principio, fue el no conocer a nadie. Llegada la edad se incorporó al Servicio Militar Obligatorio en el Regimiento Cartagena 20, con sede en Cartagena; en donde debido a su afición a la música actuó de corneta. Este destino, que en cierta medida podía considerarse privilegiado, le costó recibir alguna que otra bofetada de sus superiores (creo fue un brigada), por interpretar mal alguna nota. De una de ellas, aún conserva la marca en el labio. Que nadie se asombre porque sucedieran estas cosas, durante muchos años la disciplina se mantenía basándose en golpes y algunos dejaron huella. También durante su vida en los


cuarteles, hizo labores de sastre, cosiendo botones, arreglando gorros y todas las prendas que sus compañeros le facilitaban, a cambio se supone, de algún dinero. De vuelta a casa se incorporó de nuevo junto a su padre el tío Juan José, en las labores del campo. La tierra y las borregas, era el único medio de vida que había en Losilla, por eso había que pelear como todo el mundo para ir saliendo adelante. Con la cosecha de la tierra, las cuatro borregas que se tenían y algún que otro jornal, fueron pasando los años dentro de las precariedades que dejó tras de sí la guerra civil y que tanto costó superar. Hasta aquí, puede decirse que la vida de Abel, no fue muy diferente a la de cualquier otra persona que naciese y viviese en Losilla. La única diferencia, podría estar en su gran afición por la música, algo que pudo sucederle a cualquier otro joven de su edad. Fue cuando estaba próximo a los treinta años, cuando empezó a desarrollar su particular forma de ser y empieza a cortar el pelo y afeitar. Por aquel entonces, los hombres acudían a la barbería cada semana a afeitarse, e incluso tenían concertada una iguala con el barbero mediante el “trueque”, en la mayoría de los casos a cambio de trigo o cebada.

Ya cumplidos los 30, cogió el cargo de alguacil, cargo que ejerció durante muchos años, haciendo sonar su corneta y dando lectura del “bando” que le ordenaban las autoridades, o de cualquier otro bando que se le encomendase.

Muchos aún recordamos, cuando llamaba por las noches en la puerta de casa de cualquier vecino para avisar aquello de: “De orden del señor alcalde, que acuda usted mañana a las nueve con azada y canasto a la plaza”. Este aviso, por aquel entonces llevaba consigo trabajar para el Ayuntamiento todo el día, a cambio de nada, ya que entonces las obras públicas se hacían todas en Losilla a “tanda vecino”. Por eso, no era de extrañar, que en algunas casas lo recibiesen mal, cuando llamaba en el ventanico de la puerta. Pero él, cumpliendo con su misión aguantaba la bronca. Estando de alguacil, también ejerció de enterrador. Un trabajo desagradable siempre, pero que lo hacía con entereza y sacrificio, pues las fosas se abrían en tierra y en ocasiones en muy malas condiciones debido al escaso tiempo transcurrido desde anteriores inhumaciones.


Con todos estos oficios, junto a las labores de la tierra y el ganado, compartiendo todo con su afición a los acordeones, fue pasando el tiempo, hasta que un buen día, decide montar una pequeña tienda en su casa, la última que hay en la calle de San José, en lo que se llamaba “La Balsilla”. Allí empezó trayendo para vender de todo aquello que la gente de Losilla en aquella época demandaba: salazones, conservas, aceites, bebidas, especies, etc.. Para ello cogía su macho aparejado con la albarda y el serón de madrugada y se iba hasta Arcos de las Salinas, en donde se subía al autobús de línea “La rápida” en su viaje diario a Teruel. En Teruel compraba lo que podía y de vuelta a Arcos, para coger de nuevo el macho, cargar la compra y emprender andando el camino de regreso a Losilla, ya de noche. Por aquel entonces incluso llegó a comprar naranjas en Losilla a alguno de los vendedores que pasaba por allí, y se fue a venderlas a carga (caballería aparejada con albarda y serón), al Molino, Las Dueñas, Puebla de San Miguel y Sesga, en donde al final las tubo que cambiar por lo que le ofrecieron: un trozo de tocino y un pernil.

En el año 1965, Abel sufrió uno de los peores golpes materiales que puede sufrir una persona que está girando lo poco que tiene para poder vivir: un robo. Estando ausente, entraron unos gitanos y se llevaron todo lo que pudieron: ropas de vestir, zapatos, lo que les hizo gozo de la tienda y además 4.000 pesetas, las únicas que tenía guardadas para seguir trabajando, incluso creo que llegaron a golpear a su padre. Este fue un duro golpe para él en aquel momento, pero en muy poco tiempo consiguió sobreponerse.

Su afición a la música, que le llegó a temprana edad y que todavía a sus casi ochenta años conserva, le llevó a comprarse una vez la situación se le permitió una acordeón. Acordeón que hacía sonar de oído y que en algunas ocasiones ensordecía, pero que a pesar de todo, nos facilitó a todos los losillanos muchas horas de diversión. En esta faceta como en todas las que emprendió, fue muy persistente, llegando a recibir clases de solfeo, algo para lo que sin duda no estaba preparado y no se llegó a acostumbrar. A pesar de ello, por sus manos pasaron desde una “guerrini”, hasta cualquier otra de las mejores del mercado, llegando a contabilizar la compra de nueve acordeones nuevas.


Entre 1960 y 1963, un buen día aparece Abel con un coche en Losilla, algo poco habitual por aquel entonces: un coche usado con motor de gasolina y la carrocería de madera, “una Rubia”. La compró en Valencia y se la subieron hasta Aras, en Aras se puso al volante dirección a Losilla y entró en la plaza sin novedad, pero al girar hacia la calle de San José, se le hizo estrecha la calle y se dio un golpe contra una piedra grande que había en la esquina enfrente de las escuelas viejas. Pero con suerte, no le pasó nada. A partir de entonces empezó su deambular por las carreteras de la comarca. Cuenta que el primer viaje que hizo por aquellas carreteras fue a la Cuevarruz, y que se quedó sin gasolina a mitad de camino. Así empezó con otro de sus fuertes, “los vehículos de cuatro ruedas”. No mucho después se hizo con otro vehículo, en esta ocasión un furgón de los que utilizaba correos, el cual debido a su capacidad de carga le facilitó su actividad comercial. Pues con el, salía a vender a las fiestas que se celebraban en Santa Catalina, Santa Quiteria, o cualquier otra que tuviera acceso y le permitieran la venta. Así fue pasando el tiempo hasta que cuando tenía 36 años (sobre 1965), se compró una furgoneta nueva, una “SAVA”. Un vehículo nuevo y muy practico con capacidad de carga suficiente para su abastecimiento. El único problema que tenían, era que si se salía de la carretera, no hacía nada más que rascar las cuestas arriba al llevar la tracción trasera. Con este vehículo se defendió bien, llegando incluso a transportar pastas desde Titaguas hasta Gandía y haciendo en muchas ocasiones de “ordinario”.

Por aquel entonces, alquiló la casa de la tía María de Liria, que está situada junto a la fuente de plaza y trasladó la tienda y todo su


negocio de su casa al final de la aldea en “La Balsilla”, hasta su nuevo domicilio, vendiendo la casa de su padre. En ella montó la cafetera que mejor café hizo en toda la comarca durante muchos años, y la nevera que más refrescaba la cerveza. Junto con la tienda y el bar situados en la planta baja, tenía la barbería en el primer piso. Como dato curioso, hay que decir que en una ocasión durante el invierno, tuvieron una visita inesperada en el bar de Abel estando en la plaza: una zorra asomó el hocico a través de la puerta que estaba medio abierta, algo que no le dio muy buen resultado, ya que la atraparon en la calle.

Así fueron pasando aquellos años todavía difíciles para la mayoría de la gente, entre su pasión por las furgonetas, los acordeones, el negocio de la tienda y el bar, y no le debió ir muy mal, porque al cabo de tres años de comprar la primera furgoneta nueva que vemos en la foto, la cambió por otra del mismo modelo pero mejor. En el momento que se encontraba con algo de liquidez, enseguida invertía los beneficios en cambiar de vehículo o acordeón, sin pararse a pensar que las cosas no siempre ruedan bien. Así que cuando cambió la SAVA por una EBRO nueva, tuvo que mal vender esta última al poco tiempo, por no tener liquidez para hacer frente a los pagos, lo que le originó bastantes problemas.

Pero Abel siempre fue dentro de sus aficiones un trabajador nato. Pasó unos meses sin vehículo, y enseguida se hizo con un furgón de segunda mano, lo que le ayudó a recuperar otra vez la alegría y la ilusión junto con el bar y la tienda que nunca la abandonó. Sobre todo a la hora de recoger la recaudación del cajón.

Dejaba el bar y la tienda a cargo de cualquiera que tenía confianza con él, y él salía de buena mañana con su vehículo para aparecer con suerte al mediodía o la noche, cargado con lo que fuese que le pudiese dar algo a ganar: frutas, verduras, etc. Hasta que un buen día le dio por recoger chatarras: algunas las


compraba, otras las recogía de donde estaban abandonadas. Con la chatarra estuvo peleando durante muchos años, incluso

después de jubilarse, siguió saliendo de viaje y recogiendo la que podía para llevarla al montón del Cerrado. Allí se pasaba las horas con el destornillador, el martillo, la motosierra y cualquier otra herramienta que necesitase para separar toda clase de metales: hierro, aluminio, cobre, metal, chapa, etc.. Algo que según él, le reportaba unos mejores precios a la hora de vender el material, lógicamente sin valorar su trabajo.

Lo cierto es, que estando parado no se gana nada, y él con esta actividad extra consiguió mantener su ilusión por conducir. El salir de viaje cada día en la dirección que fuese, comer en cualquier bar y pasarse el día al volante de su furgoneta por las carreteras de la comarca, fue lo que le dio vida durante muchos años, hasta que un día la salud lo abandonó y esto le llevó a tener que abandonar su mayor pasión: el conducir.

Algo a lo que siempre fue fiel Abel a lo largo de su vida, fue a asistir a todas las fiestas que se celebraban en los pueblos de alrededor: Santa Catalina, San Salvador, San Juanico, Santa Quiteria, La Virgen de Tejeda, La Cueva Santa, la Virgen de la Vega, etc. Todas las ocasiones eran buenas para coger la furgoneta y algún pasajero y marcharse de fiesta. En ellas, en algunas ocasiones vendía algún producto, en otras tocaba el acordeón, pero en todas ellas era de sobra conocido y en muchos casos admirado. Todas las fiestas las recorría, durante el día iba a las comidas populares y otros actos, y por las noches en donde tocaba una orquesta, allí estaba Abel disfrutando con su música. Con las fiestas de su aldea, Abel siempre fue un excelente colaborador. Su disposición a colaborar en todo lo que se le pedía, facilitó en muchas ocasiones la labor de quienes estuvimos al frente de la organización de las fiestas de Losilla. Él y su furgoneta siempre estaban dispuestos para ir a recoger leña para las gachas, traer cualquier objeto de donde fuese y ayudar en todo lo que hacía falta.

Otra de las pasiones de las que siempre alardeó, fue la de tener las mejores motosierras que habían en kilómetros alrededor, así como de ser el mejor afilador. Ya podía ser de la marca que fuese: alpina, Sthyl, etc. siempre sus motosierras cortaban más y mejor que ninguna. Al menos él así lo creía.


Cuando se jubiló al cumplir los sesenta y cinco años, tuvo que dejar la casa que tenía alquilada y se compró una pequeñita muy próxima a la que pasó toda su juventud en la calle de San José (la que siempre se conoció como la casa de Abel, aunque en la actualidad tenga otros dueños), en ella vivió hasta que la salud le obligó a marcharse primero a una residencia y posteriormente a casa de sus familiares en Titaguas. Como he dicho en varias ocasiones, sus mayor afición ha sido y

es la música, sobre todo la acordeón, con ella y su música nos acompañó en infinidad de ocasiones, una muestra de ello es la imagen de la foto durante la recogida de las paellas en las fiestas de verano. No puedo decir de qué año, porque fueron muchos los que nos acompañó.

Creo haber hecho un pequeño recorrido en el recuerdo: Lo que a sido la vida de Abel Visiedo Díaz en Losilla de Aras, la aldea en donde nació.

Como bien dije al principio, sus virtudes y sus defectos cada uno los podrá valorar a su medida, pero la aldea de Losilla siempre tendrá un lugar en su recuerdo para Abel Visiedo, un nombre que siempre a estado ligado a Losilla de Aras, en donde quiera que se haya pronunciado.

Simeón Rubio


Agencia de Empleo y Desarrollo Local Ayuntamiento de Aras de los Olmos

Estimados amigos de Losilla, es para mí un placer contar con vuestra invitación a participar en la revista Cultural de Losilla dándome la posibilidad de escribir unas líneas.

En esta mi primera intervención, quisiera resaltar el trabajo que desde la Asociación Cultural de Losilla se está llevando a cabo desde hace muchos años, para mantener viva la historia y tradiciones de la aldea, ya sea a través de la publicación de esta revista, como de todas las actividades, que se desarrollan al cabo del año. Quisiera también transmitiros, que estoy a vuestra entera disposición para ayudaros en todo aquello en lo que pueda ser de utilidad, así como para manteneros informados de lo que sea relevante para Losilla y para Aras a través de la revista, y de los diferentes medios por los que el Ayuntamiento transmite la información. Actualmente, en lo que respecta a mi área de trabajo, os puedo informar que en relación al programa de Diputación “Suena la Dipu para los mayores”, se ha solicitado una excursión para visitar los edificios más emblemáticos de la Diputación de Valencia para las dos asociaciones de jubilados de Aras y de Losilla, consistente en el transporte, la visita a los edificios y una comida, de la cual estamos a la espera de la contestación. Y también a través del SARC (Servicio de Asistencia y Recursos Culturales de la Diputación) se ha solicitado un Taller para este mes de agosto de “Flores de Media” y una animación infantil para complementar las fiestas de agosto titulado “Fiesta en la calle”. A parte de estas actividades culturales, se pretende solicitar un curso sobre “las variedades de la almendra” para realizar en el primer semestre del año que viene, pero es requisito indispensable que existan quince personas interesadas en realizarlo para poder llevarlo a cabo aquí en Aras, así que si alguna persona cree interesante el curso y desea inscribirse, únicamente debe rellenar una hoja de solicitud de inscripción que facilitamos en el Ayuntamiento. De momento esto es todo, en próximas ediciones les informaré de más cuestiones de interés. Gracias nuevamente por darme la oportunidad de participar en la revista. María José Álvaro González


La Muela y los Molinos

La Muela ya no es la misma. Siempre desde lo alto de las rocas que delimitan su llanura se podían observar todas las tierras de Losilla, incluso la misma aldea. Hoy desde lo alto de esos cinglos, nos observan unos gigantes llamados aerogeneradores.

A mi memoria, llega el recuerdo de cuando la juventud de Losilla se compró el primer “picú”, un “picú” con el cual los domingos y festivos hacían baile por la tarde y noche. Cuando desde lo alto del pico de La Carrasca, en compañía de mi rebaño de ovejas oía la música a la perfección y sentía envidia, envidia sana, de no poder compartir con ellos los momentos de diversión. Pero aquel domingo como muchos otros me tocaba hacer de pastor, de pastor a mis doce o trece años, cuando por entonces, empezaba a sentir el paso hacia la adolescencia.

Hoy desde el mismo lugar en donde tendía la manta para tumbarme, observar y sentirme cerca de todo lo que acontecía en Losilla, han ubicado un molino. Un gigante que no necesita levantar la cabeza para asomarse a la roca y ser visto, pues con su altura puede ser observado desde cualquier rincón de nuestro término. La Muela ha

pasado de ser un punto al que se accedía para observar a distancia, tanto hacia el norte como hacia el sur, a ser observada desde cualquier posición en la que se pueda uno encontrar a muchos kilómetros a la redonda. La Muela dejó ser ella, desde el momento que a alguien se le ocurrió colocar en lo alto de su llanura una antena de televisión, para que llegase la imagen tanto a Losilla como a Aras. Lástima que aquellas personas que hicieron aquello pensando que era lo mejor para el pueblo, no hubiesen pensado que colocando esa misma antena en “La Corona del Ato (llamado Mompedroso), la señal hubiese llegado igual o incluso en mejores condiciones a Aras y a Losilla. Y posiblemente no se hubiese abierto la puerta para actuaciones posteriores.


Es posible que de no haber empezado con aquello, otras cosas hubiesen llegado a lo alto de la Muela para robarle su identidad, pero eso no lo sabremos. Aquello fue lo que abrió la puerta, para que empezasen a subir por el camino que pagamos para mejorar la explotación agrícola de la Muela, la televisión, los telescopios, la telefonía, y ahora los aerogeneradores.

Hasta hace muy poco, el subir a la Muela nos encontrábamos con

la imagen que teníamos de cuando siendo pastores, o en las faenas de labranza, siembra y recolección subíamos andando, o subidos en las caballerías. Pero a alguien, de los que dirigen los destinos de esta Comunidad Autónoma, un buen día se le ocurrió que uno de los pocos espacios naturales que conservaban su riqueza, sobre todo en flora, había que cargárselo. Para ello nada mejor que transformar la Muela en un parque eólico, que NO es lo mismo que un parque natural protegido.

Los seres humanos somos egoístas por naturaleza (eso lo demostramos constante-mente) lo que nos conduce a cometer actos sin pensar más allá que en nosotros mismos. Por ello, no es de extrañar que se nos abrieran los ojos cuando se empezó a comentar que la instalación de los


molinos, nos reportaría unos ingresos en los que jamás hubiésemos pensado obtener de las tierras de la Muela. Para nada nos paramos a pensar en los efectos que la instalación de estos aparatos, puede representar en la vida de los habitantes de Losilla y de Aras en el futuro. De ellos, se dice que es una energía limpia, pero eso no se sabrá hasta que transcurridas varias décadas puedan o no aparecer algún efecto secundario sobre la población. Efecto que sobre el impacto medio ambiental ya se ha producido y es irreversible.

El efecto producido sobre la misma, no se percibe desde Losilla ni desde Aras. Para ver lo que hay en la actualidad sobre la inmensa llanura que la compone, hay que subir y verlo. Y no hacen falta fotografías para comparar lo que había y lo que se puede ver.

Empezaron destrozando todo lo que se les ponía delante, laminaron tierras cargándose toda la flora que contenían, abrieron caminos de más de diez metros de ancho, perforaron rocas y destrozaron todo lo que cogieron a su paso para colocar las zapatas que deberán soportar la presión, que la fuerza del viento ejerza sobre las estructuras de los molinos, y así seguirán hasta que vean cumplido su objetivo. A esa flora, que jamás se podrá recuperar, habrá que añadir el efecto visual que empezamos a padecer desde el momento que colocaron las bases que soportan las aspas. Un

efecto que no podíamos imaginar sería tan alto, pues estábamos acostumbrados a verlos a mucha distancia y ahora los tenemos encima. Pues no los podemos perder de vista, desde ningún rincón de nuestras tierras, a pesar de que los aerogeneradores son más pequeños de los que pretendían colocar.

Al trasformar la Muela en un parque eólico, hay que decir, que lo único que han hecho es destrozar uno de los escasos recursos naturales de los que disponía la Comunidad Valenciana. Posiblemente los que tomaron la decisión de destrozar la Muela, no eran los más indicados para opinar sobre lo que iban ha hacer, pues desde un despacho acristalado en el centro de una ciudad, poco se puede saber de los efectos


que puede producir una decisión que afecta al medio ambiente, un medio ambiente que para conocerlo hay que vivir próximo a él y depender en parte de su conservación.

En esta materia, como en todas las que afectan a la conservación de la naturaleza, la cadena de errores se sucede, y cada día son mayores. Las decisiones que afectan a quienes viven del campo, pulmón de la conservación de la naturaleza y del medio ambiente, se toman cada día a mayor distancia, sin tener en cuenta la opinión de quienes han vivido y siguen viviendo de ella, y por lo tanto, quienes mejor conocen sus peculiaridades.

Solamente decir, que con nuestra actitud pasiva, demostrada a lo largo del periodo de exposición de los planes y ejecución de esta obra, al no haber movido un dedo para evitar que se llevase a cabo, hemos hipotecado el paisaje natural de que disponíamos, no solamente para nosotros, si no para todas las generaciones que puedan habitar nuestra aldea. Algo en lo que deberíamos haber pensado antes.

S. Rubio


EL PASTORCILLO

Con su corta edad, va el pastorcillo con su rebaño recorriendo los campos y siempre con el miedo metido en el cuerpo, miedo a estar solo, a perder de vista la aldea, miedo a las serpientes, que salen de vez en cuando y le hacen pegar un brinco, miedo a las tormentas, que lo sorprenden en medio del monte y tiene que salir corriendo con sus borregas hacia el corral mas cercano, y allí dentro, acurrucarse como una res mas, asustado de los rayos y truenos que caen a su alrededor, con toda su fuerza.

Claro, que si el pastorcillo va acompañado de otro pastorcillo, la cosa va mas relajada, pero siempre con el recelo. Recuerda el día que va con otro de su misma edad, y van echando planes de hacia donde van a ir con las borregas: si para La Muela, si para La Canal o para La Covatilla, en fin, van muy contentos. Al llegar a la altura de los corrales, uno se va hacia los corrales del Olmo y el otro hacia los del Mas, al final, han quedado en juntarse en los corrales del Mas, y subir hasta La Muela. Justo cuando acaban los dos de sacar el ganado del corral, se ve venir un coche y este se para en el puente de La Canal, en medio de los dos pastorcillos y allí, los ves a ellos con las borregas en la puerta del corral, mirando a ver que hace el del coche. Como el pastorcillo que esta en el Olmo, para poder juntarse con el otro, tiene que pasar por donde esta el coche, no se atreve, y pasa el tiempo, los dos todos nerviosos, el ganado parado y esperando asustados. Pasa un buen rato (no sabemos el tiempo, los pastorcillos no llevan reloj) y al final, el hombre se sube al coche y se va. Cuando el pastorcillo pasa con su ganado por donde estaba el coche, ve en el suelo una lata de sardinas vacía y unas pieles de naranja…, el hombre se había parado para almorzar, pero ellos se han llevado un buen susto

Por la noche, cuando ya hayan encerrado las borregas se irán camino de casa contentos y tranquilos, porque se hacen compañía. Al pasar por el Reguero, se pararan en los cerezos de la abuela Roja, y subidos en ellos empezaran a comer cerezas, durante unos minutos no se oirá nada, luego, empezaran a oírse unos pequeños ruidos, los perros que acompañan a los pastorcillos gruñirán todos asustados, no pasa nada, los pastorcillos ya se están hartando de comer cerezas y se pueden entretener en tirar los huesos. Después, con la barriga llena se irán para casa y esa noche después de cenar irán a la escuela nocturna. Y aun, les quedará tiempo para jugar un rato en la calle con los mayores a “la banda” o al “capitulé”. Continuará… Javier Mora


“NACER CON SUERTE” por Clemente Mora

¡Cuántas veces habremos escuchado esa frase! Para unos es premonitoria. A otros, sin embrago, les resbala. Los hay que creen que, el hecho , en sí, no implica nada relevante. Existen además, los que la usan como escudo protector a la hora de enfrentarse a la cruda y dura realidad, a los que yo llamo “tortugas”; (por lo del símil). Lo que pretendo contar es una historia original. Desde estas líneas, antes de comenzar el relato, pido humildemente perdón, a cuantos/as puedan acceder a su lectura, por los muchos errores y fallos que a lo largo del mismo encontrarán. No tiene más rigor literario que el de este humilde aprendiz de aprendiz (sirva la redundancia) de contador. ¡Gracias! Los hechos se remontan a finales de la Edad Media, Principio Edad Moderna y son estos: Nacen dos hermanos: Constancio Yuste Manrique y Pantaleón Yuste Manrique; hijos de Constancio Yuste Marco y de Elena Manrique Guijarro, matrimonio de clase media-alta de aquella época de feudalismo español; y, hablando del feudo, el padre ejerce de Señor Feudal. Lugar de nacimiento, el Reino de Valencia, latitud noroeste. Caracteres, distintos; apoyo familiar, el mismo; relación entre ambos, buena; coeficiente intelectual, similar; inquietudes, no compartidas. Bien, pues, hasta aquí, se diría que, casi son “clones”; pero, como veremos, sus respectivas vidas discurrirán por derroteros diferentes. Constancio sigue absorbido por la estela del padre; ¡le encanta el feudalismo y lo que el feudo conlleva! Es un conservador. Pantaleón, sin embargo, se ve salpicado por las gotas de ese líquido de sabor agridulce que produce el riesgo; e imbuido por la inquietud y la ambición, opta por hacerse naviero; ¡ y vive Dios que se le da bien construir barcos...! pareciera haber nacido para aquesto y saber aprovechar la coyuntura. ¡Menuda perspectiva de futuro se abría ante sí...! Constancio, como buen aficionado a la caza mayor, ciervo, jabalí, venado, etc. siempre resultaba invitado a participar en cualquier acontecimiento cinegético que lugar tuviera. Es un tirador de los que nadie querría arrojar el “guante” al suelo; y, hablando de “guante”, también un


excelente cetrero. Viajar es otra de sus aficiones; entre cazar y viajar apenas tiempo le queda para otros menesteres ...; hace grandes travesías (en los barcos de su hermano) sin que un “maravedí” le cueste. Todo ese cúmulo de privilegios de Señor Feudal, hacen que, su patrimonio poco a poco vaya incrementándose; y, como sigue sin recibir aviso del pícaro cü-pi-do... aunque, más de una doncella de alto rango no haría remilgos a su proposición de matrimonio; si se lo pidiese, claro. Tiene algún que otro escarceo, con alguna insinuante dama casada, a la que “Eros” no había sido generoso, sino todo lo contrario, con ella, pero, nada importante; sólo alguna incursión furtiva en ese terreno... para él tan resbaladizo del amor. A pesar de su porte arrogante y jovial, esa seriedad implícita al cargo que ocupa, le resta puntos a la hora de enfrentarse al bello sexo. Parece mentira que, sabedor como es, en cuanto a conocimientos sobre ordenación de terrenos, se refiere, esta parcela amorosa o del amor le resulte desconocida, inexplotable,... Aunque lleve una vida aparentemente licenciosa, ha de atender el trabajo generado por el cargo que ostenta, que no es poco. Entre ordenar las enormes haciendas de príncipes y grandes señores de la época y la escasez de mano de obra especializada para realizar estas tareas de ayudante de Feudal, ha lugar a que, las dependencias se hallen repletas de documentos pendientes de ser despachados. Algo parecido a lo que hoy ocurre en los juzgados españoles (Solo que el motivo es bien distinto). Se ve absolutamente desbordado de trabajo... y no solamente él, sino que, había varias profesiones como la de armador, criador de équidos,... entre otras, que a la par andaban a reventar (valga la expresión) de trabajo... ¡Cuánto ha metamorfoseado España!, pero, en sentido negativo. Hemos pasado de ser la Nación en la que, en sus dominios nunca se ponía el sol, a ver oscuridad en pleno mediodía de verano. A veces, las Señoras, Paradoja e Historia (muy amigas ellas), gustan de estas cosas. Resulta paradójico, ¿no? y ya que hablamos de paradojas: ¿Saben ustedes de algún político español que este en las listas del “racionamiento”, perdón, quería decir del INEM? -Yo, no sé ni siquiera de uno; ¡y miren que hay...! ¿eh?. Que si volaran taparían el sol. ¿Saben ustedes que, posiblemente, España sea el país del mundo que más políticos por metro cuadrado tiene ¿a cuántos tocaremos per cápita,...? Y, tras este largo paréntesis comparativo, seguiré contando cosas de los protagonistas de esta historia.


He dejado a Constancio, el Señor Feudal, envuelto en aquél montón de documentos por cursar y darles salida ya que, entre ellos, están los de un príncipe llegado ha poco y quiere construir un feudo, trayendo de cabeza a Constancio amén de todo lo demás. Pasaron unos cuantos meses y, ya con el trabajo bastante adelantado, gracias a su padre, pues, éste, rogó a un amigo suyo, le enviase a alguien que pudiera echarle una mano en el enorme trabajo que tenía su hijo, salió de aquel aprieto y decidió hacer un viaje de placer. Estaba agotado, y su cabeza parecía iba a estallarle. En uno de los barcos de sus hermano, zarpó desde Vigo rumbo a Argentina. Allí conoce a un matrimonio amigo de su padre, de quienes habló a la hora de partir; un rico hacendado con varias e inmensas propiedades que, a lomos de un fermoso y fuerte corcel, tardaría días en recorrer. Fue en estos paseos a caballo, junto a doña Ana Carvajal Cepeda, distinguida señorita hija del matrimonio anfitrión. Esbelta, alta, delgada, cuerpo escultural, casi perfecto; rostro armonioso y bello, ojos verdes, de mirada penetrante y cautivadora que junto a los labios carnosos y sensuales, parecían estar desafiando a quien tuviera las suerte de admirarlos; sus dientes semejaban 32 diamantes incrustados en las mandíbulas de aquella bóveda de su bonita boca; su largo cabello negro, sedoso, ligeramente rizado, cayendo sobre aquellos moldeados hombros... al galope del corcel, tendidos y destellantes a los rayos de aquel sol radiante parecía Atenea a lomos de su Pegaso... Constancio creyó estar viviendo un sueño, del que no le gustaría despertar... tal era su grado de satisfacción alcanzado; pues, en una escala de uno a diez, él estaría en el once; seguro. Verla era para él tan necesario como el aire que respiraba. Parecía, que dentro de aquel sesudo y sobrio cuerpo de Feudal, ¡búúúm! hubiese surgido un enamorado, galante y tierno Constancio, distinto del anterior. Por un momento pensó, si, no sería un hada y no Ana la que sus ojos estaban contemplando. Supo la verdad cuando Ana, con esa ternura y gracia argentina le dijo:

-¿Vos estáis bien, pibe? (y le pasó la mano derecha por delante de los ojos)

Sacudiéndose la cabeza, él dijo: -¿Eh? sí, sí... estoy bien, ¡gracias! -Es que os ví como ausente, pensativo... ¿vos, queréis decirme qué

pensabais, sí? -¡Ah si yo te dijera en qué pensaba...! Respondió con picardía.


-Decidlo ¡por favor! os lo ruego. -Es que... no me atrevo; me da miedo a que... y no quiero.

-Bueno ¿ a ver si yo tengo algo que ver con el pensamiento de este pibito?

-¡Y tanto que tienes que ver, y no sólo que ver, sino que, oír, sentir, querer, amar, respirar, adorar, soñar,... y muchos más verbos que tengan que ver con lo que por ti siento!.

-Ah, y ¿qué es lo que sentís por mí?. -Lo que hasta este momento jamás había sentido, ¡amor, estoy

enamoradísimo de ti! de toda enterita, de la cabeza a las uñas de los pies. Quiero ser tu otro “yo”. Quiero ser la mitad de tu mente y de ese corazoncito que hay dentro de ti y hace que el mío se dispare de lo alterado que está; a ver si uniéndolos, el mío se serena...

Ana, ruborizada y cómo no, sorprendida por la respuesta obtenida, le cogió ambas manos y suavemente las llevó hacia el lado izquierdo de su pecho haciendo una ligera presión y le dijo:

-¿Notáis cómo mi corazón también golpea fuerte? ¿Queréis saber por qué? ahora os lo explico:

-¡Yo, también estoy enamorada de vos! ¡os lo juro! y en prueba de ese mi amor, recibir este beso... Se abrazó sobre Constancio, que pasivamente, se dejaba llevar; cuando notó que aquella bella mujer acercaba sus carnosos y frescos labios hacia los suyos la abrazó con fuerza y los dos se fundieron en aquel su primer e inolvidable beso... A Pantaleón, su negocio le va viento en popa (nunca mejor dicho) “Eólo”, no ataca, (de momento) a sus barcos, cosa que agradece a pesar de su condición de cristiano. Ha construido un astillero en Cádiz, zona de moda y de muchísimo porvenir para este tipo de industria, como ya hiciera en Vigo. (Pontevedra) donde construyó el primero. ¡Y la parte afectiva de este lince de los negocios, cómo estará? ¿Tendrá tanto éxito con el bello sexo...? Pues, parece ser que sí; al igual que allí, aquí, también el triunfo sigue pegado a él como una lapa, ¿será por lo de su profesión?; es que, ¡hay que ver ... lo de este hombre!; la Diosa fortuna, amiga íntima de la madre naturaleza, le regalaron al nacer lo mejor de ambas. Y se dijeron: La primera: “yo le voy a dar suerte, hado, azar, ventura...” La segunda: “yo le dotaré de todo lo necesario para conseguir todo eso” Hele aquí, con ese cuerpo como salido de alguna de las estatuas masculinas esculpidas por Miguel Ángel; esa “labia”; ese saber caer bien a la gente... aunque su sencillez, afabilidad y discreción... (Continuará)


Consejos culinarios (Marielo Fuster)

Hola; desde estas líneas quiero dar unos consejos referentes a las

comidas y los niños. Estos consejos están comprobados. Si después de darlos, les sirve de

algo a alguna persona, estas líneas habrán llegado a buen fin. Digo que están comprobados, por que están realizadas en un colegio

donde comen 150 niños. Los niños son niños, pero no tontos. Y el paladar lo tienen y les gusta

comer bien.

EL QUESO: Tendemos a darles queso de barra, quesitos, quesos de untar en general

quesos grasos que no son recomendados, y para colmo a los niños se les pega en el paladar a gran parte de ellos, y estas texturas no les convencen. Pero eso sí, darles un queso curado o semi curado y verás como no se les hace “bola” como dicen ellos. Y se lo comen mejor.

LENTEJAS: Se las comen y muy bien, lo que hay que tener en cuenta es que sus

paladares están empezando a adaptarse a los sabores y comidas. Entonces, prefieren unas lentejas con un buen sofrito (zanahoria, calabacín, cebolla, pimiento, tomate, ajos, etc) luego lo trituras y lo añades en el caldo de las lentejas, pones las lentejas (si son pardinas mejor, ya que son las mas pequeñas y finas de comer). Luego cuando ya casi estén cocidas añadir unos trocitos de patata, zanahoria, o guisantes pero poco para que vean colores en el plato y les sean mas atractivas visualmente también, no solo marrón.

CREMAS DE VERDURAS: Se las comen mejor si la verdura esta primero un poco sofrita, luego

añadir agua, que cueza, triturar y rectificar punto de sal. A la hora triturar si les gusta, añadir quesito, leche o yema de huevo para que la crema sea más sabrosa y completa.

Y mi trabajo me ha demostrado que acompañada de picatostes se comen la que tú quieras.

Estas son algunas de las sugerencias que creo importantes. Esta claro que esto es como todo; cada niño es un mundo.

Seguiremos dando consejos de este tipo en próximos números.


PROPIEDADES CURATIVAS

Abrimos una nueva sección en la revista que va a tratar sobre las plantas, frutas y verduras y sus propiedades medicinales y vamos a empezar por el ALBARICOQUE

Lo recomendable de este fruto es comerlo recién cogido y bien maduro. Seco es ligeramente laxante, tomándolo en cantidad prudencial.

Este fruto es una fuente de vitaminas: A (contiene en gran cantidad) B�, B�, C, P y PP; y también en minerales: sodio, potasio, calcio, magnesio, manganeso, fósforo, azufre, cloro, hierro, aluminio y cobre

El poder energético del albaricoque es muy bajo: 42 calorías por cada 100 gramos. Tiene predominio de sales alcalinas. No debe comerse junto con líquidos abundantes. PROPIEDADES:

Antianémico. Muy nutritivo cuando esta completamente maduro. Muy digestible, excepto para ciertos dispépticos. Regenerador tisular y nervioso (equilibrante nervioso). Aumenta las reacciones naturales de defensa. Aperitivo y refrescante. Astringente (en estado fresco). Laxante ( en estado seco). Esta por tanto indicado en: Estados depresivos. Astenia física e intelectual. Anemia. Nerviosismo. Insomnio. Inapetencias. Convalecencias. Diarrea, estreñimiento.

A los niños con problemas de raquitismo, retraso del crecimiento, y también los adolescentes y personas de edad.

Según Mességue, la almendrilla amarga del albaricoque puede utilizarse como vermífugo, pero en pequeñas dosis pues, al igual que sucede con la almendra amarga, posee una sustancia muy toxica. Los albaricoques NO DEBEN COMERLOS:

Enfermos del hígado (y si lo hacen con mucha moderación). Enfermos de estomago delicado (y si lo hacen maduros y sin piel).


Enfermos de herpes, aftas bucales e irritaciones de la boca(encías, amígdalas, etc..) Los propensos a tener piedras en el riñón (litiasis oxálica), por el alto contenido de acido oxálico (14 miligramos por cada 100 gramos)

PREPARACIÓN Y CONSERVACIÓN: Hay diversos procedimientos de conservación: jugo, compota,

confitura, mermelada. La forma mas simple consiste en deshuesar y dejar secar los albaricoques. Los orejones, o albaricoques secos, son un alimento muy nutritivo con casi las mismas cualidades del albaricoque fresco. Pero como recomendábamos al principio, hay que procurar comerlo recién cogido del árbol y bien maduro.

Baños de asiento de albaricoques contra las hemorroides: 100 gramos de albaricoques troceados por litro de agua

Carmen Rubio

LAS TIERRAS PERTENECEN A SUS DUEÑOS ,PERO EL PAISAJE ES DE QUIEN SABE APRECIARLO.

Upton Sinclair TELEGRAMA CELESTIAL A LUGARES CONFLICTIVOS .

NO DISPARAR DONDE HAYA NIÑOS STOP EN LA GLORIA NO NECESITAMOS MAS ANGELES

Gloria Fuertes

ACERTIJOS

Di un nombre de varón que no tenga las letras de CARLOS ((No valen diminutivos)

Di un nombre de varón que tenga todas las vocales Si aciertas los dos y nos envías la solución tienes un libro de regalo. Envíos a: Asociación Cultural “Losilla” Plaza de la Iglesia, 19 (46179 - LOSILLA DE ARAS - Valencia)


Érase una vez... (Soluciones)

Soluciones al concurso sobre cine publicado en la revista nº 16 verano 2008. Estas son las películas a las que pertenecen las frases publicadas: Yo mando en casa pero mi mujer toma las decisiones. “Poderosa Afrodita” Bueno, Nadie es perfecto. “Con faldas y a lo loco” Realmente lo siento, no quiero ser emperador. “El gran dictador” Siempre nos quedara Paris. “Casablanca” Realmente querida, no me importa. “Lo que el viento se llevó” Tócala otra vez Sam. “Casablanca” Yo no soy mala, es que me han dibujado así. “Quién engaño a Roger Rabbit” La vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar. “Forrest Gump” Buenos días..., y por si no volvemos a vernos: Buenos días, buenas tardes y buenas noches. “El Show de Truman” Lo malo de llorar cuando uno pica la cebolla no es el simple hecho de llorar, sino que a veces uno empieza y ya no puede parar. “Como agua para chocolate” Me gustaría charlar algo más contigo, pero hoy tengo cena con un viejo amigo. “El Silencio de los corderos” Amar significa no tener que decir nunca lo siento. ”Love Store” Más madera!!!!!. “Los hermanos Marx en el Oeste” Este es el comienzo de una gran amistad. “Casablanca” Si te abrazo más fuerte nos vamos a dar la espalda. “Un día en las carreras” ¿Quién es más tonto, el que secuestra a un tonto, o el tonto que se deja secuestrar por un tonto?. “HormigaZ” ¡Hasta el infinito y más allá!. “Toy Store” Tú me diste estas emociones, pero no me dijiste como usarlas. “Frankenstein”


La verdad está ahí fuera. “Expediente X” Houston, tenemos un problema. “Apolo 13” Soy tu peor pesadilla. “Rambo” Tonto es el que hace tonterías. “Forrest Gump” Hasta la vista baby. “Terminador II” No voy a hacerte daño Wendy, solo voy a arrancarte tu jodida cabeza. “El Resplandor” Soy el rey del mundo. “Titanic” Ya está mi padre dándole cuerda al reloj. No cree en Dios, pero si en los relojes. Si se le para es que le llegó la hora. “Libertarias” A dios pongo por testigo que nunca mas volveré a pasar hambre. “Lo que el viento se llevó” No me va a creer pero la primera vez que la vi. me dije “mi prima .......... terminara por jugar al tute conmigo”. “Viridiana” La parte contratante de la primera parte. “Una noche en la ópera”

El ganador del concurso, ha sido Toni Debón. Enhorabuena y gracias por participar. Venga.

Érase una vez…

Como todos sabéis en Losilla hay y ha habido siempre una gran afición al teatro, lo mismo para estar arriba del escenario como para disfrutarlo desde abajo. Por eso, esta vez, el concurso “Érase una vez…” va ha ir sobre el teatro en Losilla. Ahí van las preguntas:

1.- En los años cincuenta se hizo en Losilla la obra Madre Alegría de Luis Fernández de Sevilla y Rafael Sepúlveda. Esta obra gusto mucho e incluso se volvió a hacer tiempo después. ¿Nos podríais decir quién hizo el papel de Madre Alegría? 2.- ¿Con qué obra se estreno “La Única” como grupo de teatro?


3.- Esta misma obra ya se quiso hacer en los años sesenta, pero el día que había que hacerla se fue la luz y no se llego a interpretar. De directora teníamos a la maestra que estaba entonces ¿Sabéis como se llamaba? 4.- Entre todas las obras que hizo el grupo de teatro “La Única” solo una de ellas era un monologo. Dicho monologo se llamaba Requiebros y era de los hermanos Álvarez Quintero. ¿Nos podéis decir quien lo interpreto y los diferentes sitios donde actuó? 5.- Una de las obras que mas han gustado y con la que mas disfrutamos haciéndola fue “El caso de la mujer asesinadita” ¿Sabéis el nombre del autor o autores? 6.- En una de las obras a una de las actrices se le levanto la falda y causo gran revuelo y divertimiento ¿Qué actriz era y cual era el titulo de la obra? 7.- En todos estos años, ¿quienes nos hicieron de directores a lo largo de todos los años con teatro en la aldea?

8.- ¿Quiénes hacían de beatas en “La zapatera prodigiosa” de García-Lorca? 9.- En una de las obras, cuando estaban casi en el final empezó a llover muy fuerte y la obra siguió adelante; el publico fue a resguardarse en los portales. En el final de la obra salían dos monjitas que solo les dio tiempo a asomar la cabeza. ¿Quiénes eran? 10.- La ultima obra que hizo el grupo “La Única” fue de Darío Fo ¿Nos decís el título?

Y estas han sido todas las preguntas, ¡animaros a contestarlas! ya sabéis que habrá un libro como premio para el ganador. ¡Suerte a todos!

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REVISTA 18 VERANO 2009 - Aras de los olmos...Desde el rincón de la biblioteca como siempre os animamos a que sigáis subiendo a por libros y a estar allí un rato charlando de ellos