Upload
lopezcj
View
264
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
1/118
Segunda Serle
Jiilio Dicierribre
O V I E D O
1 9 5 2
Tomo
N
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
2/118
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
3/118
Segunda Serle
Jiilio Dicierribre
O V I E D O
1 9 5 2
Tomo
N
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
4/118
U
ASPECTO DEL DOCTOR AMGELBCO:
SANTO TOMAS
EN
SU CATEDRA
1)
Por
el Profesor Dr.
JULIO
MORROS
S RD
Catedrtico de fa Universidad d e O viedo
Un Ilustre Padre de la iglesia, el Papa Len XJII prociam al
venerado Canto Toms de Aquino, como Patrn principal de los
estudios catlicos.
Nuestro Gobierno, asentado cobre la base del ms firme cato-
licismo,
ha
institu do com o Fiesta Oficial de las U niversidades,
esta fecha del Santo, que riendo
siil
duda con ella consagrar este
da
a
rendir al Doctor Anglico
el
111s firme homenaje de
su
re-
cuerdo.
Y
en este Ao d e Gracia de 1952 ine h a correspondido el alto
honor de evocar en voz alta ante vosotros, en este ac to solemne
que celebramos, algn
aspecto de l a vida del San to de Aquino; y
es por ello, por lo
que
he querido recoger de las mltiples facetas,
tod as inmensas del D oct or Aiiglico, aquella que he considerado
ms preciosa: El Doctor nglico en su Cfedra, corno arquetipo tn-
xirno de los que cumplimos una misin docente .
1) Texto taquigrfico d e la conferencia pronunciada en el Paraninfo de la
Facultad de Veterinaria d e Len, el e marzo de 1952, con cnotivo de la Fes-
tividad de dicho
da
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
5/118
A br um ad o por la labor impuesta tan en disformidad co ni a
de mi personalidad y de mis conocimientos voy sin em-
b ar go a cumplir lleno de orgullo y d e emocin el m and ato enco-
m en dad o co ntan do siempre con vuestra benevolencia y sin olvi-
dar tam poco qu e fu de otro Ilustre M onje Religioso de San Ig-
nacio Baltasar Cracin aquella feliz frase q ue dice qu e lo bu eno
si
es breve es doblem ente bueno.
para mejor consecucin de esta finalidad en materia tan am-
plia y escaso tiem po d e qu e disponeinos perd ona dm e un peq ue-
o inciso para explicaros el po r qu he juzga do q ue esta confe -
rencia deba ser mejor leda qu e n o improvisada recluyndom e a
estas sencillas cuartillas con el buen deseo de recordar a 10s vue-
los del espritu con la autoc rtica reposada y serena del gabinete
de trabajo tod a otra perspectiva qu e no sea la exigida por el te-
ma. T o d o s los que po r de ber de ctedra hemos d e adquirir
l
fin
cua nd o no fu un don inn ato en nosotros
la
capacidad ms me-
nos refinada de la oratoria tenem os propensin por com odid ad
las ms veces a la ora toria libre iriprovisada ; incluso Ia confun-
dimos a veces con un deber qu e ha de acompafiar forzosam ente a
nuestra investidura docente. Pero
l
verdad es que cua ndo senti-
mos la responsabilidad d e los mom entos cuand o querem os de-
cir concretamente to d o aquello qu e es nuestro debe r nuestro
deseo exteriorizar preferimos hacer a nuestras amigas y buenas
consejeras las albas cuartillas po rta do ras del resuinen
y
de la con-
cisin.
Dicha esta justificacin proc urar cumplir mi misin con
la
mayor brevedad posible para qu e as po r lo menos de lo qu e y o
voy a leeros
y
a falta d e bo nd ad del material po r mi apropiado
qued e algo de buen o con
la
cor tedad de
ini
charla y so br e tod o
con lo hermoso de su objetivo.
Cuando en la vida nos encontramos con magnas figuras que
por su personalidad
y
con tenido superan a lo normal las labores
de sntesis de sus O br as y ms an
los
enjuiciamientos crticos
tienen categoras de lo sob reh um an o. si
la
O bra que vamos a
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
6/118
UNIVERSID D E OVIEDO
enjuiciar es ya d e po r s sobrehumana, po rqu e es la O br a de un
Santo, os daris cue nta de la imposibilidad material en q ue yo me
encu entro para q ue pued a hacer un examen siquiera som ero de la
O b ra del Do cto r Anglico.
N o hablem os ya de enjuiciamientos ni de crticas. An simple-
mente colocados en un prisma objetivam ente cientfico, reco rde -
mos que las Ob ra s d e S anto To m s rellenaran las paredes de esta
sala con sus copiosos volmenes; qu n y menos yo, entre todos
los Doctores de esta Universidad, podra realizar en examen o tan
siquiera un recue rdo de sus Ob ras?
Permitidme, pues, que me limite a un slo aspec to del S anto.
Para m, para vosotros,
el
ms pt-ecioso
y
el ms interesante:
El
Santo com o M aestro; el San to coloc ado en su C tedra; el San to
y
Sabio, fre nt e a sus discpulos. Exatninar a San to To ins en este
aspecto
es
el ms bello de los exmenes, p or qu e si herm osa es su
O br a, su didctica, s u pedagoga y hasta su gesto, es una leccin
con stan te para los qu e tenenios sob re nosotro s la gloriosa misin
de la enseanza. Permitidme, pues, qu e me deje imbur po r to d o
el orgullo qu e implica el supo nerm e un com pa ero d e actividades
del San to de Aquino y, en loo r a este historial q ue ta nt o me en-
noblece, sea esta parte suya qu e tan to nos afecta, la qu e merezca
recordacin en este da an te vosotros, si bien el recuerdo pierda
tonalidad y belleza al tener que ser transm itido a travs de mis pa-
labras.
Vamos a examinar al Sa nto de Aquino corno M aestro; vamos
a enjuiciar su O br a co m o Profesor. Sin embargo, las obras d e los
hombres no son un objetivo sin sujeto y sin alma. La obr a de un
hombre y el Santo fu ho m bre antes de ser Santo), es la activi-
da d salida de un ser biolgico
y
de un espritu preado de sensi-
bilidad, y lgico es pues que am bos, ser y espritu del Santo d e
Aquino, merezcan tambin y an tes de nada, nuestra evocacin.
Recordemo s su nacimiento. G ran gloria es para el ho m bre q u e
las ciudades se disputen el honor de haber sid o su cuna; solo ello
ya es
el
juicio loable de to d a una vida; y en San to To m s d e Aqui-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
7/118
no su personalidad fu tan recia y su fama tan grande que tres
ciudades se disputaro n entre s el ho no r d e haber sido cuna del
Ilustre Sa nt o Sin embargo es Aqu ino quien ha reun ido la pro ban -
za mxima para q ue el nacimiento del Sa nt o se haya colo cad o en
aquel bello rincn italiano.
Corran aos del medioevo; eran aos de lucha pe ro a la par
d e grandes formaciones de intelecto; en aquellos aos va a nacer
el San to en una cuna bella por su lugar y en una cuna ilustre p o r
su ascendencia. La cuna de1 San to es cu na de no bl es ; s u pad re
Landolfo de Aquino seor de Rocoseca y de un tercio de Monte-
sangiovandi; su madre Te od ora de Teate hija d e los Condes de
Chisti personas que po r
c
-ra parte representaban un mximo
podero d e ascendencia en la regin maridional d e Italia d o nd e
capitaneaban aquel bando gibelino de tai sonora estela en la His-
toria Italiaiia.
El
ainb iente familiar del San to lo era cristiano y noble; sin em-
bargo la formacin de su espritu culto no se debe precisamente
al ainbiente d e su cuna; fu Dios co n s u providencia el q u e Ie hi-
z o salir de casa de sus padres para q u e desd e muy joven le aco-
giese
el
silencio d e los muros conventuales para q ue olvid ado all
d e tod a vanidad mundana concentrase su corazn en
El
y su in-
telecto en
el
estudio de
las
ciencias y d e las artes. Fu Dios qu ien
pro~ridencialmentehu bo de designar el fu tu ro del Sa nto de Aqui-
no;
y ta nt o es as que en tre las ancd ota s de sri. vida fluctan en
el aire con ms o menos ambientes d e realidad do s fun dam enta -
les q u e qu ere mos recordar. Se dice lo dice as la leyenda q u e es-
tando su madre en cinta ya de
l
un ermitao se le acerc
y
a
la
par qu e recoga con la mano derecha el cue nco lleno d e com ida
qu e la condesa de Chieti le daba al bendecirla p o r la obr a de ca-
ridad la dijo q ue tendra un hijo qu e en la vida entre los h o m -
bres llegara a ser el ms sabio y que despus ocupara co m o pre-
mio de esa vida llena de ciencia y d e bo nda d un lugar en el Cie-
lo. La ot ra ancdota es aquella qu e dice q u e el Canto sien do
nio degluti un papel qu e contena una salutacin anglica; n o
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
8/118
UNIVERSIDAD DE OVIEDO
dice la leyenda ctno lleg a 6 ; solo dice que el papel lleg a sus
manos y qu e siendo d e muy pocos meses lo llev a la boca para
sorberlo en forma tal qu e constituy una especie d e certera pre-
diccin de acompaamientos materiales.
Ciertas o n o ciertas las ancdotas lo exacto es que la tradicibn
divina se haba cumplido; d esde muy joven el nio Tom s de
Aquino se separaba de cuan to en el mundo implicaba vanidades
y
alegras materiales para acordarse solo espiritualmente de Dios y
materialmente d e la ciencia.
Decamos antes que la cuna de la nobleza que le vi nacer no
fu precisamente la d e forinacin espiritual de su intelecto y qu e
hubo de ser el slencio monacal el marco do nd e la ciencia del San-
t o huba d e formarse. Habris odo to do s hablar de Montecasino
aquel bello M onasterio d e Italia de la Orden Benedictina; un Mo-
nasterio q ue es t encima de una montaa cubierta de frondosidad
com o para aislar sus propios muros del res to del mundo; se res-
pira en n o solamenta un ambiente d e santidad sin qrxe hasta
el perfume de rboles
y
flores le impregna de una dulzura que in-
vita siempre a meditar. Montecasino siempre bello lo recorda-
ris porque hasta l llegaron un da los horrore s d e la guerra y los
estallidos de granadas tu rbaron aquel silencio que los cielos haban
tendido com o paz bend ita sob re sus techos. Pus en aquel Mo-
nasterio de Montecasino bajo la gua de los Padres Benedictinos
el Santo d e Aquino co menz la formacin intelectual qu e le iba a
hacer el
s
grande Maes tro d e la historia; solo cinco aos tenia
cuando como oblato fu ofrecido por su padr-; dicen q u e si el
ofrecimiento n o era ms qu e una habilidad pofitica de los C ondes
a
cuya poltica gibelina convena tener bajo la influencia de los su-
yos el fo co de la poltica gelfa de aquellas provincias cosa para
el Cond e fcil si un Aquino llegaba un da a ser Abad del Monas-
terio Benedictino. Noso tros
y con nosotros los tratados de la
Iglesia n o lo han cre do as; se han fijado ms bien en los designios
providenciales o quizs en la buena volun tad del padre que pen-
saba ante to d o qu e no haba nada mejor para aflorar el ambiente
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
9/118
REVISTA
DE
LA
ii~telectual el hijo. Lo exacto es que, all comenz la educacin de
Santo Toms; rudiinentaria, es cierto, en un principio; las Escke-
las de los Monasterios, salvo raras excepciones, n o tenan una efica-
cia completa y de ah quiza que en el Monasterio no recibiese ms
qwe las primeras lecciones de religin y gramtica. Pero, sin em-
bargo, lo exacto es que Montecasino
y el Monasterio Benedictino
sirvieron para descubrir un espritu casi sobrenatural que pronie-
ta en la lucha, la existencia
de
un hombre extraordinario.
Por eso, el Abad de los Benedictinos fu el primero que cogi
de Ea mano a aquel mozo, que despuntaba de una rnanera tan ex-
traordinaria, para Ilevrselo a Npoles, ya en Nipoles, todo es
una ascerlso rpido por la escala del saber y de la ciencia, en per-
fecta concordancia con el afianzamiento de
la virtud ya iniciada.
Los Maestros Napolitanos se asombraron del discpulo. Aqul
Maestro Martn,
el
Maestro cuyos manuscritos adornan an hoy
la Biblioteca Casinense, nos habla de las proezas intelectuales de
Santo Torns, cuando estudiaba con l las asignaturas del Tri-
viumv, gramtica, retrica
y
didctica; y el clebre Maestro Pedro
de Ibernia, decia ensefiando al Santo e Cuadrivinm, aritmtica,
geometra, msica
y
astron~mi a, ue .al ensear a Aquino estas
materias, pareca
que
era 6 el que estaba aprendiendo.
Siete anos pasaron eri estos estrrdios; pero una vez ms desig-
nios divinos se trazaban sobre la vida de Tomas de Aquino, en
forma superior a
Ia
voluntad de los que an mejor debian querer-
le. La Orden Benedictina hubiese querido que el Santo permane-
ciese en su seno, pero Toms de Aqurro, en cambio, llev su pre-
dilecc~~acia la Orden Dominica que era la que reuna los mejo-
res de Npoles, Orden de Predicadores en la cual el
S a n t o acab tonIando ingreso. Dicen
que f u
una sugestin de
J u a n de San Julin, el que empuj ya con carcter definitivo
a
To-
rn6s a abrazar la vida religiosa; lo cierto es que, un da luminoso,
como son los das en que el
Cielo de Npoles rotwpe la niebla, los
rayos del sol entrando por las vidrieras del Monasterio Dominico,
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
10/118
UNIVERSID D
DE
OVIEDO
recogan la profesin de Toms de Aquino en la Orden Domini-
cana.
Ya ha nacido el fraile, pero aun no ha nacido el Profesor, nues-
tro compaero a quien hoy recordamos aqu en estas Aulas. Pero,
de su inminente nacimiento como tal, voy a daros a continuaciCrln
somera cuenta.
Es el ao
1252;
estamos en Pars, ese Pars maravil oso que a
los hombres de ciencias y letras nos ha atrado siempre con
la
su-
gestin de sus brazos abiertos a todo el saber, cualquiera que sea
l
persona que demanda su hospitalidad, sin distinguir nacin, cla-
se, ni categora. Esta vez Pars, va a ser la cuna del Profesor que
nace, hoy un fraile dominico, ayer el hijo de unos nobles italianos
y maana un Santo del Cielo.
Por qu fu a Pars Toms de Aquino y por qu va a ser all
donde va a nacer el Profesor nuestro? Tambin es la orden mo-
nstica la que esta vez marca el paso decisivo en su vida; ya vis-
tis que cuando fu a Npoles, fu el Abad de los Benedictinos de
Montecasino quien quiso llevarlo; de Npoles a Pars, es tambin
el General de la Orden el que le lleva. Esta vez,
f u
Juan el Teu-
tnico el que dijo, que las ciencias que Dios le haba imbuido no
eran para depositarlas en srr cerebro, sino para que las desparra-
mase en su enseanza; dicen que fueron sus palabras: ve a Pars
a prepararte para el Magisterio, doctrate en Teologa y cuando
seas maestro no t e olvides de desparramar tu enseanza como
siembra de voleo, en la seguridad de que ninguno de sus granos
dejar de fertilizar en una planta ms grande ms pequea, pero
siempre planta naciente.
Sin
embargo, hay una ley biolgica que dice que todos los
alunibramientos d e animales, de plantas y hasta de cosas, tienen
que tener un matiz de dolor o contrariedad, lo que hace que qui-
z por eso, despus, las obras nacidas de primera vez sean xns
bellas ms queridas.
El
nacimiento de Toms de Aquino como
Profesor va a seguir tambin esta ley, pues su entrada en el Ma-
gisterio tendr igualmente
el
tinte doloroso, antes de dejarlo con-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
11/118
REVIST
DE L
sagrado como el primero de los Maestros del mundo. Pero no nos
anticipemos con este enjrtician-iiento
al
relato de las dems facetas
de esta formacin y juicio del Profesor que tanto nos interesa.
Vamos muy ligeramente a recordarlas ante vosotros.
t El
primer aspecto de Santo Toms como Profesor
es decir
cuando en Pars se le encarga ya de Ia explicacin de las Ctedras
es su sello
de originairdad
frente a sus discpulos. Los que ocupamos
una Ctedra; los que tenemos en la vida este soberbio regalo que
implica el habernos enconlendado la misin de ensear a los de-
ms sabernos muy bien que antes de llegar a esta Ctedra hemos
de poseer un caudal de la ciencia que vamos a explicar; sabemos
muy bien que este caudal no es nuestro que nos lo han suminis-
trado otros que antes han pasado por los escaos de las Ctedras;
sabemos que eso nos obliga a ser
prokundamente aniantes y res-
petuosos con la tradicibn. Pero si solo somos esto si solo s o ~ n o s
un depsito de lo tradicional para exponerlo somos maestros par-
ciales; el maestro tiene que ser adems original tiene que aumen-
tar la tradicin con su propia obra incluso con-ibatirla con el cin-
cel de su propia crtica para destruirla en aquello en qne pueda
estar errnea o separarla frente
a
una evolucin necesaria. San to
Toins de Aquino como Fdaestro super con mucho todo esto;
no hablemos ya de su caudal tradicional vamos al otro a su ori-
ginalidad. No es que aumentase el caudal de tradicin con una
aportacin propia suya; es que adems el Santo de Aquino per-
teneci a ese grupo extraordinario de los Maestros jvenes que al
caer en nledio de campos de polmica sin abrazar ninguno de los
bandos rompe en lanza por la verdad y se enfrenta con todos los
bandos para establecer Ia doctrina primera. La Ctedra de Canto
Toms ya no es la Ctedra de enseanza; era una Ctedra que re-
volucionaba toda la adulteracin filosfica del momento para crear
con valenta unas doctrinas nuevas y de certera concordancia con
la verdad.
La Facultad de Artes de la Universidad de Pars aplauda y se
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
12/118
UNIVERSID D
E
OVIEDO
asombraba ante l a obra del Santo de Aquino.
Y
no nos olvide~nos
de las dificultades del momento.
Aristteles tena en su Filosofa numerosos partidarios pero
incluso los partidarios de la Filosofa pura de Aristteles formaban
un bando adulterado porque le conocan a travs de las doceri-
nas de Averroes de quien por entonces eran co riko s Siger de
Brabant y Boecio de Dacia. Pero flucuaban como bandos contra-
rios aquellos que estaban encasquillados por las ideas plotnicas
ms que platnicas que si bien consagradas por la autoridad de
San Agustn dominaban en forma brusca en los Maestros de la
Facultad de Teologa.
Era entonces cuando se deca que el ser humano no conoca
por la luz de la razn el aprendizaje de la verdad sin6 que cono-
ca en virtud de una iluminacin interior siendo el conocimiento
de carcter afectivo
y
no puramente intelectual. Santo Toms
comprenda bien que las relaciones entre la razn y l a f no esta-
ban delimitadas por esta doctrina pues si bien es cierto que te-
ricamente todos establecan la jndennostrabilidad de los misterios
sin embargo en la prctica sostenan y aun iritentaban probar el
misterio de la Trinidad en forma de hacerla razn
y
motivo de
asertos.
la doctrina de Aristteles que deliiriitaba con precisin los
caminos de la intangibifidad y asignaba a l experiencia su verda-
dera papel la consideraban sumamente peligrosa.
Santo Toms entr valienten-iente por enmedio de esta turba
doctriilal y bajo la inspiracin de los ms puros principios de la
y de sana doctrina de Ia Iglesia repuso la Filosofia Aristotlica
en su punto
y
centr las discusiones filosficas en un extremo
acorde con la verdad.
El xito conio profesor fu enorme; el entusiasmo que desper-
taba entre las masas de estudiantes y entre los compaeros de
claustro ha sido tal que la historia seala su huella; no solamente
en aqul clebre pasaje de obras sabidas de Guillermo de Toco
pasaje que a fuerza d e ser citado ha llegado a ser clsico sin in-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
13/118
2
REVISTA DE LA
cluso en sus propios adversarios que aun qu e adversarios tenan
qu e rendirse ante la sabidura del Canto;
y
as el pro pio Siger d e
Brabrant y Roger Bacon discutindole se rendan an te su verd ad.
Po r eso deciinos que su xito co m o profesor ya era enorme; no
era l M aes tro q ue saba la d octr ina tradicional y simplemente la
enseaba; el sello d e la originalidad de q u e y o os hab laba antes
eri l n o haba sido para aum entar un p oc o la tradicin o para es-
culpirla al m o do corrien te con el cincel d e su sabidura; su origi-
nalidad haba sid o para ce ntrar las doctrinas d e la verdad
y
fu la
lucha e ntr e los telogos
y
los a verroistas
lo
que permiti al San-
t o dar la verdadera medida de su talento
Si
no hubiese otra cosa ya tenamos ante n osotros al gran
maestro; tradicin y originalidad; una inteligencia de alcances ex-
traord inario s q u e le permita ser a la vez maravilloso con feso r del
sabei interior y al pro pio tiem po p oseer una extraordinaria origi-
nalidad. con ste qu e no son juicios mios; en mis mejores co no -
cimientos de la O br a del Santo
y
d e
l a
bibiiografa que he esco-
gido para pod er ten er la osada siquiera sea cum ptiendo un d ebe r
de leeros hoy estas cuartillas he recorrido pginas de bbiigra-
fos y precisamente en aqullas qu e tratar1 d e cerca aI D o c to r
Anglico veo c m o to d o s insisten urna y ot ra vez en la co nc u-
rrencia de estas dos magnficas cualiclades: el enorme conocitnien-
t o y amor a
la
tradicin que mai~ifestabaen cad a instante y la
orig inal idad extra ordinaria q u e fan
l a
verdadera clave del 6xito
d e su enseanza.
Pero el Profesor y el Maestro q u e ya ocu pa el lugar primor-
dial po r esto s do s factores d e tradicin y originalidad tiene qu e
tener an algo ms; ha de ser un
espiritu investigador
Cualquiera de
noso tros que ocup a una Cte dra sabe muy bien que nues tra ml-
sin
rio
termina con decir unas lecciones a los alumnos y menos
con examinarlos y da r nu est ra opitiin en una no ta universitaria;
nuestra misin com o Catedrticos va ms all; hem os d e rob ar ho-
ras al da y a
la
no ch e para inve stiga r e11 los campos de
Pa
ciencia
q ue es nue stra enseanza -aunque n o sea ste ecl se nt ido extric-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
14/118
UNIVERSIDAD DE OVIEDO
1 3
to y al pie de la letra,
el
criterio que sustenta Ortega y Gasset-;
y
tambin aqu el Santo Anglico nos sirve de patrono admirable;
porque Santo Toms es un espritu investigador. En su Ctedra,
utiliza constantemente la observacin y la deduccin para e n l e -
sacar consecuencias; en sus Obras cientficas alternan en 61 de ma-
nera constante, la sntesis y el anlisis; y si examinis sus trabajos
de teologa, encontraris la doctriila enriquecida por multitud de
observaciones, particularmente, en aquel punto de la teora de co-
nocimiento que tanto se disctita en
la
Sor bona
y
en Ia que valien-
temente se aparta de Platn y de Aristteles, precisamente por-
que las teoras de ellos no estn de acuerdo con los resultados
personales en su Obra de experiencia
de investigacin. En nos-
otros, en Ios Catedrticos, amor a la tradicin cientfica s, pero
sumisin absurda nunca;
ello
nos lo ensea el Santo de Aquino al
enfrentarse cual lo
hizo,
con la tradicin e~ rneamente xistente.
Con su espritu eminenteiriente critico, Santo Toms ni acept
ni
rechaz de plano la tradicin cientfica de sus antecesores; la valo-
riz con todos los elementos de su ciencia; bebi en buenas fuen-
tes
y
merced a su diligencia, logra resolver el problema crtico en
la forma que no lo haba hecho ningn conteinporneo. Esto se-
ores, es ser un modelo de profesorado; es un modelo, porque
cuando los
argutnentos analizados se contrastan, adems, como
61
lo hace, con a experiencia, se concluye, cul l terminaba, por in-
corporar algo depurado y correcto a su sntesis, y as la originali-
dad tiene adems una eficacia de tipo prctico.
hemos
finalizado ya
el
anlisis de un Profesor al que acepta-
mos como modelo mximo para nuestro profesorado? An no,
an falta en el profesorado otra cualidad, la pedaggicw.El maestro
y el catedrtico se surten de la ciencia;
y
como decimos, ha de
combatir si hace falta la ciencia contraria y con su investigacin
coi~stante a de aumentarla; pero no nos olvidemos los Catedr-
ticos que, adems de todo esto, estamos para algo ms; estamos
sobre todo para ensefiar. Por eso eri las oposiciones que nos han
dado entrada a nuestras Catedras, se rsos exigi un ejercicio,
a m i
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
15/118
4 REVISTA
DE
L
juicio el ms bello de todos en el que debamos explicar una lec-
cin para ver si sabamos ensear. El Doctor Anglico aqu era
maestro de maestros; por eso decamos antes que era el designio
de Dios destinarle para la enseanza y Dios le dot para ello de
cualidades excepcionales. Era una rara virtud la de Santo Toms
aquella aptitud extraordinaria para la exposicin sistemtica.
i
recorremos sus dos Cummas nos quedamos asombrados; estn
formadas de una arquitectura tan sencilla como grandiosa; y esa
grandiosidad estn tan al alcavce de todas las inteligencias que
cualquier cerebro por medianamente cultivado que est se adap-
tar perfectamente a la letra y a la ciencia que en aquellos libros
se comprenden;
las
cuestiones en la exposicin de Santo Toms se
enlazan de una manera tan magnfica que forman una cadena de
colltinuidad en la que sin darnos cuenta vamos recorriendo toda
la escala de la ciencia de que se trata; sus razonamientos son cla-
rsimos y sobre todo diramos con Rodolfo Enchen que encon-
traremos en la exposicin de Santo Toms esa lgica maravilla
que le haca centrar toda Pa sntesis tomista baada de una sagra-
da armona. Sirva tambin de rbrica certera a todo cuanto digo
que esto no es juicio mo ni siquiera de los que elogiaron la obra
del Santo sino que incluso aqullos que tanto le discutieron y
que queran rebajarle al
nivel
de cualquier otro maestro medieval
no podan menos de rendirse ante estas extraordinarias cualidades
de exposicin
y
de pedagoga.
Claro es que os deca hace un rato que
el
alumbramiento de
personas y obras es siempre doloroso y no quise con ello hacer
una frase; quise con ello anticiparine
a
este pasaje de mi breve di-
sertacin con la que he de presentar tambin la parte de dolor
y
tristeza que acompa a este nacimiento de Toms de Aquino
como Maestro de Maestros.
En definitiva en el medioevo como en la antigedad y como
hoy la envidia ha sido siempre una cualidad humana; y precisa-
mente frente al que triunfa y al que sabe y al que trabaja no de-
ja de existir una pobre envidia que babosea y enturbia su obra
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
16/118
Deca por eso aquel gran poeta germano que se llam Coethe y a
quien tanto hemos ledo deca que no hay mejor consuelo para
la inediocridad que saber que el genio no es inmortal; era aquel
poeta el que dialogando espiritualmente con los hombres de gra?n
valer les deca: por qu lamentarte de tus enemigos; es que po-
drn ser jams tus amigos gentes a quienes sujetos como tu sois
con vuestra simple presencia un reproche eterno? Gran verdad;
ciertamente los triunfos de los hombres que trabajan tienen siem-
pre a su alrededor un coro de murmuradores formado por los
enemigos por los incapaces por aquellos que an saboreando la
nlortalidad del genio mientras el genio vive no pueden ocultar
que constituye para ellos una perfecta acusacin.
Toms de Aquino era
un
genio que naca envuelto en el man-
to de profesor; y aunque aparece revestido de las monsticas t-
nicas de la Orden Dominicana sin embargo su valer era tan gran-
de que enturbiaba los ojos de los dems. Santo Toms no fu una
excepcin a esta triste ley y se vi6 envuelto en sus consecuencias.
Alguien dijo
l
que en su patrocinio por AristteIes era un dia-
lctico exagerado; hubo quien se atrevi a hablar de irrespetuosi-
dad hacia el dogma con su sentir; no faltaba quien apuntaba que
las novedades de su doctrina esa bella originalidad que nosotros
hemos resaltado podra ser peligrosa para una tradicin tan arrai-
gada. Lanzaron los nubarrones
y la
tormenta si bien no lleg a
estallar porque no poda estallar en la cabeza inmaculada sin em-
bargo se present tan peligrosa que fueron los Superiores de La
Orden Dominicana los que creyeron oportuno retirar al dominico
Toins de Aquino de la Universinad Parisina. Es el afio 1272 y
Toms de Aquino deja Pars porque el General de los Dominicos
le ha encomendado la direccin de las Escuelas de la provincia
Romana. Los Dominicos quisieron alejarlo de la tormenta; si no
hubiese vestido los hbitos de monje esta vez las murmuraciones
y la baba de la maledicencia se hubiesen estrellado porque era de
masiado fuerte la personalidad de quien queran combatir. La Es-
cuela de Artes de Pars trat por todos los medios posibles de que
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
17/118
6 REVISTA
DE LA
el gran Maestro volviese a su Ctedra de la Soborna; el triunfo
del Doctor Anglico sobre el Averroismo haba sido tan sensacio-
nal que le llamaban; pero los Don~inicos aban bien que, la niedi-
tacin cristiana no podra ser muy con~patible on tanta turbulen-
cia y Toms de Aquino abandon las aulas de
la
Universidad
Francesa,
Sin embargo, coino se expone en la Fiiosofa Alejaiidrina, hay
una pupila misteriosa que va siernpre en busca de la verdad
y
que
rasgando todas las sombras, acaba por encontrarla. No se en qrre
persona o personas coloc la pupila B Filosofa Alejandrina. Solo
se que, despus de la arrsencia del Santo de Aquino, el clamor por
l
segua siendo tal, que un gran Papa, aquel Papa Urbano
IV
sa-
bedor de la doctrina y del mrito personal del Santo, juzgo y a
conveniente acceder a los deseos de tantos telogos y honibres
de ciencia, que clamaban por
la
vuelta del Santo
a
los estradoo; de
la Ctedra.
El Papa Urbano IV diplomtico adems,
y
altamente inteligen-
te, prepar su vuelta con todos los honores; y celebrndose en
aqael entonces
el
gran Concilio de Lyn que tena por finalidad
unir Ias dos Iglesias, la Griega y la Latina, preparando ya eI gran
retorno de Santo Tonis a Pars,
le
orden que viniese al Concilio
de Lyn. Otra vez, pues, la drilce tierra de Francia se prepara pa-
ra recibir Toms de Aquino. Ya se sabe en la Universidad de Pa-
rs que Toms de Aquino vuelve; va kyn primero, pero va
estar en la Sorbona ms tarde; ya recorren nuevamente los cuer-
pos de los hombres de ciencia unos escalofsios emotivos de tener
cerca al Sabio; la gran poblacin universitaria viste las galas de su
enlocin ms amplia, sabiendo que ante ellos va a estar nuevamen-
te el gran Maestro. Pero sobre Urbano
IV est Dios; su omnipo-
tencia tiene otros designios, y sus designios no quieren que sea la
hermosa tierra de Francia la que escuche las doctrinas nuevas del
Sabio, sino que, el Divino Hacedor, tiene a bien llamarle
a
su la-
do, antes de que se reanuden las golemicas en las ctedras france-
sas.
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
18/118
UNIVERSID D DE
QVlEDO
s
T o m s d e A quin o ha salido para Francia; est delicado, viejo,
aunqu e n o t iene m s q n e 49 aos; to d a su vida ha s ido una vida
d e ascet ismo y d e t rabajo intelectual; los l t imos ao s habian s ido
d e con tra r iedad ,
y
su. naturaleza extremadamente delicada, estaba
agotada. T o m s d e Aquino hubiese p od id o m uy bien eludir el ;ia-
je q ue le mand em prender Urba no IV; pero n o qu i so d i sgus ta r
al Papa, q u e tena m uy presentes las O br as d e polmica del D o c -
t o r Anglico C on tr a E rrores C r a e ~ o r u m ~Summa con t ra Ce n-
t iles y de seab a vivamen te la presencia d e T om s en el Concil io.
Y e l bu en o d e T o m s d e Aquino, v ie jo en cas i una ed ad mediana
d e vida, en 1274 se po ne en camino, m ientras , co m o decamos, en
los a ires franceses sonaba n victoriosas las t rom pas d e anuncio de
la vuel ta del gran M aestro; ya va en camino, hacia t y n prime ro
y hacia Pars ms tarde; pas por el Castillo de Maenza; all viva
su sob rina Francisca, casada co n el C o nd e Anbal, y
all
va a verla
con tan poca for tuna , que sufre un fuer te go lpe en la cabeza . Fue
este golpe la causa d e s u muerte? Fue la enferm edad ya incu bad a
la q u e revivi ento nce s? Digam os bien, fu e el designio de Dios.
Tomcs d e Aq uino an q uiso despugs del golpe seguir el cam ino y
lo sigui; pero al llegar la Abada Cisterciense d e F os sa nu sv a ya
n o p ud o ms; ll am a sus puer tas y acep t
la
hospita lidad d e los
monjes; T om s d e Aquino se sen ta mori r y quera mori r co m o
haba v iv ido, en t re los muro s d e un convento , ya qu e es ta e ra su
verd ade ra vida espiri tual , pue s s u espritu, an en las ctedra s ya-
risinas, nunca abandon
el
sa b or con ven tual . en la Abada Cis-
terc iense d e Fossanuova, en un d a d e pr imavera, 7 de marzo d e
3274 en t ran do un aroma suave po r las ventanas de una m odes ta
celda, cuan do e l so l com enza ba a apun tar po r el h or izon te , e l
M aestro d e los Maestros dejaba la t ierra para o cup ar u n lugar en-
t re los San tos .
En
su l echo d e m uer te ,
al
rec ibir la Eucarista, dijo estas pala-
bras: Yo te recibo, precio d e redencin d e {ni a lma. Por am or d e
t h e estudiado, he so po rta do vigilias
y
me he fatigado; t e h e p re -
d icado y enseado , Nun ca he d icho nada c on t ra
t.
Tarnpo co pe r-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
19/118
8
REVISTA
DE E
sisto en
m i
opinin obstinadam ente, sino qu e si alguna vez me hu-
b iera y o expresado con er ror sob re es te Sacramento, yo lo s om eto
a
juicio d e la S an ta Iglesia R omana, en cu ya ob ediencia salgo a ho ra
d e este m und o. Fray Reginaldo d e Priverno, el inseparable amigo
com paero del Canto , el qu e ms profund am ente ha son de ad o
esta alma limpia e infantil,
el
q u e recibi la confesin del m aes tro
y amigo moribun do, d i6 testimonio, despus d e su muer te , de
que, lo haba enco ntra do tan limpio e inocente conio un nio d e
cinco afios. Los monjes
de
Fossanuova, a quienes S an to T om s en
su lecho d e muer te haba exp licado el C ant ar de los Cantares ,
qu ed aro n bajo la impresin d e q ue haban presenciado el trns ito
d e un Canto. U n herrnoso relieve de Bernini, qu e aho ra de co ra el
cu ar to m ortuor io , representa bellamente a Sa nto To m s explican-
d o a Ios monjes, qu e escuchan devotam ente , ese e levado can to
del amor.
El
O bis po d e Terrasina asis ti a
sus
exequias
y
un sepulcro de
alabastro, en la iglesia conve ntual, recogi strs restos m orta les. As
meiri6
nuestro M aestro , el nuestro , el de los que hoy som os pro -
fesores y ocerpamos las cte dra s; huelga afiadir con cu an ta raz n
podem os deci r el M aes tro de todos .
He
dicho que asf m uri el M ae stro y no digo bien; los ho m -
bres no mueren cuando LIS
obra s qu eda n. En la vida hum ana,
s u a n d o tras no so tro s dejamos la vivificacin d e nuestra obra , se-
guimos viviendo;
y
las Ob ra s d e Santo Tom s, que, cual os desia ,
presididas por Crarnma Teslgica, (la magna Enciclopedia
d e
doc-
trina en Te ologa ) Ilenarn an es tan tes y e sta nte s e implican la ob ra
cientfica ms valorable, son bastantes para vivificar su persona, si
n o que das e so br e to da s ellas la gran leccin
de
enseanza d e co-
r o
debem os ser los que tenem os sobre nues t ros hom bros
la
dul-
ce carga d e ensear.
C om o d ice Maran , yerran los qu e creen que han da do en e l
c lavo dejndose d e qui jo tismo y buscando el t r iunfo os ten toso d e
la profesin, tal co m o ho y la profesin se practica en to d o el m un-
do; es decir, co m o un oficio q u e se viste de ciencia, con una cien-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
20/118
UNIVERSIDAD
DE OVIEDO
19
cia comprada y prost i tu da po r el o t ro co rru pt or de la propagan-
da.
No;
los q u e a la larga acertar n ah ora con lo siernpre sern los
qu e hayan sabido escoger con am or
y
con desinters el camino
n o d e la ciencia pura. Porqu e el varn digno de su nom bre no vi-
ve para hoy q u e es siem pre circunstancia fugaz; sino para lo
ni
co que jams defra uda qu e es el prestigio d e maana el q u e la
propaganda
n o
p u ed e crear ni des truir . quienes voluntariamen-
te
se
han entregado a esta ilusin pueden decir
y
so lo eilos en las
horas d e desaliento las palabras del poe ta: H oy acaso n o me
comprenden
< < m i s
s ma el alba d e o ro .
Por eso vive seores Sa nto To m s de Aquino y
aslo entien-
den incluso los qu e han qu er id o presentarno s e l recuerdo d e sus
rasgos fsicos.
C ua nd o u n pintor sin tenernos delante nos pinta nada
x5s
q u e
a
no sotro s con nue stros rasgos hace un ret rat o d e la perso-
na fsica; pe ro cu an do
en
sus cua dro s la figura nu nc a est hrar-
fana d e o t r a s cosas del allabiente qu e la rodea es qu e l a r t i s t a
ha considerado que para una definicin plstica completa la per-
sona
en
s n o se revela solamente con
la
rept-oduccin le los ras-
gos de su imagen sino q u e juzga necesario describir la acom paa-
da del perfil escnico d e la o br a. Por eso deciinoc
q u e
no niori-
mos cuando nuestra obra supervive.
si recorris cuad ros qu e recuerden la pe rsona de oms
Aquino no Lo veris pintado a
l
aisiadamente. El clebre i resco
de Sirnil d e Martini en la Capilla d e los Espaoles del claustro
verd e d e Sa nta M ara Novella deFlorencia; la famosa Tabla de
Traini q u e s e conserva en el Seminario
ant igua
Iglesia d e Predi-
cado res d e Pisa; el Bezzoli; la D ispu ta del Sacram ento d e Ra-
fael;
el
cuadro rep uta da ob ra maestra de Francisco de Zurbarn
y
apellidado La Apoteosis de Santo Toms.;
el
clebre fresco
de
Palomino en el C o r o d e San Esteban d e Salamanca; y otros ms
qu e podran citarse y q u e no hago para no fa tigarles obed ecen
t o d o s
a
una misma idea la idea de
q u e
la figura de Sa nto T om s
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
21/118
es un resumen pero el resumen magnfico de la doctrina de sus
lecciones y la ms alta doctrina de la Iglesia.
Ved
t
das las figuras que rodean en la pintura a la imagen del
Santo Anglico; todas tienen un simbolismo tan claro que no de-
jan lugar a duda sobre lo que queran representar aquellos artis-
tas. De la frente de Santo Toms hacen escapar unos rayos con
los cuales tratan de presentarnos la extraordinaria irradiacin de
srr intelecto;
y
de su corazn desprenden un tenue colorido que
simboliza un sentido de amor y de verdad; o si mirarais para el
Ii
bro que tiene en sus manos veris como de 6 se desprenden los
smbolos de las ciencias que ilustrando al viejo y al Nuevo Testa-
mento iluminan a sus padres y doctores guiando a la par a Reyes
y Pontfices.
Y
si nos fijamos en algunos retratos observamos como hace
notar Chestertn que casi todas las pinturas estn generalmente
llenas de pequeos detallec que revelan una imaginacin podero-
sa. A veces la exposicin de los ojos es de mera vaciedad como
si despreocupacin significase una perpetua ausencia mental; otras
se reproduce ms respetuosamente como una expresin pensativa
como alguien arisiando una cosa lejana que no puede ver y
qu e
solo puede vagamente desear. As
s
miris a los ojos de Santo
Toms en el retrato de Chirlandajo apreciaris que mientras los
ojos estn real y completamente apartados de los objetos inme-
diatos que le rodean sin embargo no estan en manera alguna des-
preocupados inucho menos vacos Hay en ellos un fuego de ex-
citacin inmediato una ardiente vigilancia; son vivos y muy ita-
lianos.
El
hombre est pensando acerca de algo
y
algo que ha Ile-
gado a erna crisis no acerca de nada o acerca de alguna cosa o lo
que es peor acerca de todas
las
cosas.
No podemos decir que haya mrzerto quien as es recordado.
6Qu he de deciros yo para enjuiciar esta vida yo cuyoScomeil-
tario por afortunado que fuese apenas sera dbil reflejo de lo
que el Santo fu?
Ya
vis
lo
que pensaba de
i
el gran Paga Urba-
no IV.
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
22/118
Pues ms tarde otro Papa Len XIII le proclatii
Patrn p r ~
cibal
e
los estudios catlicos Por eso hoy estamos aqu reunidos; y
por eso hoy me rendira
yo
una vez ms a los pies del gran Papa
para agradecerle esta titulacin que tne ha dado a mi el honor y
el motivo de ocupar estos estrados para leeros estas cuartillas.
Unas cuartillas que tienen que pecar de pobres aln cuando no
fuesen mas frente a
la
magna figura que tenemos que recordar.
Ya est recordada y perdonadme la poca brillantez del recuerdo.
Hemos recordado a nuestro Maestro a un Sabio a un Canto.
Como haca notar el ilustre Grabmann en un bello estudio sobre
la psicologa de Santo Toms resulta iinposible aislar en el Doctor
Anglico el Santo del Sabio. Porque era Sabio por su saber
y
te-
na un carcter abstrado y de meditacin muy acorde con el es-
pritu cientfico; pero a la
vez ela 11ombre fcil para los dernls
afectuoso
y
siempre pronto a servir a todos por eso porque ade-
ms
de Sabio y Maestro era Santo.
MAESTRO digna palabra que lo mismo puede escuchar el ar-
tesano que ensefia un oficio marlual que el que escudria los ms
arduos problemas cientficos. Para ser maestro es cierto que hacen
falta slidos conocimientos de la materia de que se trate. Pero na-
die niegue que con esto solo
no
es suficiente. Para ser maestro
es decir para lograr ser seguido por un ncleo de discipulos con
la lgica proporcin de descontentos y murmriradores es preciso
adems concertar con es gran preparacin ciertas condiciones
que difcilmente se reunen y conlo las que Fray Toms encerraba.
Hay que corregir con dulzura hay que no tener arrogancia hay
que estimular la labor hay que saber condonar
lo
que les arreba-
tan hay que estar al mismo tiempo abierto sin orgullo a las suge-
rencias de los discpulos hacindolas evaporarse habilmente en su
propio provecho cuando son necias o estriles; pero cultivndo-
las y hasta fecundndolas con su aportacin si encierran valor
hay que saber perdonar sus faltas y sobre todo
hay
que saber
olvidar su ingratitud en una palabra
hay
que poseer un don una
templanza y unas virtudes que de modo extraordinario enson-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
23/118
REVISTA DE LA
tra m os reflejados en el M aes tro de Aqrrino. Po r eso, os explicaris
el por q u habiendo tantos do ctos hay tan pocos m aestros. Y p o r
eso, repito, ante profesor tan sum am ente bon dad oso , huinilde,
con las cualidades
y
sem blanzas apu ntad as, tan maravillosas, los
estudiantes gozaban d e rodear y acom paar al Angelico D oc tor .
Veam os un ejemplo -voy a concluir ya-en conformacin d e
c u an to digo, d e los m uch os pasajes q u e se refieren en la historia
d e s u Magisterio:
En cierta ocasin forinaban parte del tribunal de exmenes de
un licenciado q u e aspiiaba al grado de M aestro. Tena ste opi-
niones contrarias
a
las suyas,
y
drrrante ei interrog atorio lo mani-
fest paladinamente con arrogancia
y
hasta con insolencia, no 10-
grando el Canto reducirlo con sus argum entos. Sin em bargo to d o
lo so po rt con admirable paciencia y mansedumbre, como si 6
fuera el examinado
y
el otro el examinador.
A l
regresar
al
conven-
to, sus estudian tes le rod ear on y le dijeron: N o es toferable lo
ocurrido,
y
nos otros protestamos d e ello; porq ue no se trata so
lannernte de vu est ro prestigio persona l an te to da la Univers idad ,
s i n o de
la
verda d, ya qu e era co m pletam ente falso lo q ue el licen-
ciado defenda. Respondi nue stro Santo: N o me ha parecido
o p o rt u n o ni co nven iente hwnrillar
y
confundir a un M aestro n o-
vel delante de todos; pero si os parxe
que
rio he obrado bien, en
la sesin d e tliiaana po dr suplir l o qu e no h e hec ho en la d e
hoy.
Y
efectivamente, al da siguiente, volvieron to d o s al aula
en d on de se celebraba el examen,
y,
tocada
la
misma cue stin , el
examinado repiti lo rrlismo q u e haba dicho el da anterio r, sin
correccin ni modificacin alguna. Entonces, Fray Toms, con
to-
d a calina y dulzura, le hizo ver qu e su opinin estab a en pugna
con los decretos de un Concilio, y poco a poco
lo
redujo a admi-
tir la verdad, co nte nt nd ose c on aadir suavemente: Ahora decs
bien.
Los
admirables
Opscu los de San to Tom s y casi todas sus
Obra.;, han nacido tam bin, precisamente, d e esta benevo lencia
universal; sacrific su vida, la preciosidad
de
u t iempo, con tal de
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
24/118
UNIVERSIDAD
DE OVIEDO 3
responder a todas las consultas que se le hacan; sus labios slo se
movan para rezar a Dios o para ensear a los deins; su intelecto
slo para investigar; por eso a los
9
aos de su vida cuando em-
prendi su retorno a Francia eran los
9
aos de un hombre vie-
jo;
pero benditos fueron porque ellos le unieron
a
Dios.
Pocos muy pocos podrn hacer lo que la inteligencia de San-
to Toms realiz puesto que
a
muy pocos sern dados su capa-
cidad y su genio. Pero en manos de todo hombre de estudio est
el trabajador tanto como Santo Toms y con el espritu de Santo
Toms. Cada cual en su pequea parcela en una actividad espe-
cializada en una tarea general de formacin puede y debe pro-
ponerse trabajar mucho
y
bien con espritu
y
con mtodo con
afn desinteresado
y
con rigor cientfico.
A
nadie ha de pedirse
otra cosa puesto que Djos pone lo dems. Sin eimbargo lo que
cada uno debe pones por s puede
y
debe exigirse en cualquier
actividad humana mucho ms si es de tan noble estirpe como la
del estudio.
Mi lectura ha terminado. Agradezco vuestra presencia y la
atencin con que me habis escuchado. Perdonadme la hipoteca
de vuestro tiempo y pesdonadine todos mis defectos y
todos
mis
errores. Ved simplemetlte en
mi
disertasi611
el
gustoso
cumpli-
miento de un deber
y
sobre todo mi emocional cooperacin de
rendicin en un hornenqe recordatorio
al
Maestro Santo.
Si
am-
bos objetivos quedan cumplidos creedme
que anotar este da
con eniocidil en mi biografa universitaria la cual hoy
s
que
nunca y despus de evocar al gran Maestro puede deciros que
no considerar jams como la historia de un catedrtico sino que
siempre y desde hoy hecho este recuerdo tiene que ser estimada
como la historia del ms modesto de sus discpulos.
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
25/118
MIGUEL
MBRCOC ABAD
Profesor Adjunto de l Facul tad
de
J eterinaria de L e6n
Ea palabra taxidermia deriva de dos voces griegas que signifi-
can preparacin y piel; es pues e arte de rest itui r
a
los animales,
despojados de sus vsceras y msculos, una apariencia vital, no
consesvaiido
ms que la piel
qirc
recabra su crserpo, haciendo f i
gurar a estos animafes bajo sus formas naturales en los rnuceoc
2001;01cos.
BOITARD dice, la palabra taxiderinia significa, hablando c on
propiedad, preparacin de pieles; d e crierte que si en la poca e n
q u e fu it~ventada,un disector trrvo la idea de apiicarla a su
pro-
fesin, indudablemente frx bien acogida por ios naturalistas, sus-
ti tuyendo la de rellenado. Actualincnte designa
el
arte
de
disponer
en orden natural l a s pieles de 10s animales, con extelisin
CCII-
servarlas, montarlas
y
darlas apariencia d e vicia, conservando n-
cainente aquellas par tes del cuerpo imprescindibies para dicho fin
utilizando diversos procedimientos que impedirn cri corrupridn
y des t ruccin .
Si bien es cierto qu e
el
hombre primitivo posea conocimier?-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
26/118
6 REVISTA
DE
L
t o s
m i s
o me nos perfec tos, qu e le p erm itieron utilizar las pieles;
d e los m amferos para protegerse co ntra e1 fro, rio resulta equ iv s-
ca do pencar
en
la
re la t iva
modern idad d e es te a rte , pues to qu e su
origen n o se rera3onta ~ 6 sll del siglo XVIII en
su
mitad poste-
rjor, debido pria~cipaitneltea qu e los n aturalistas d e la antige-
dad
y de la Edad Media,
n o
parecan preo cup arse d e conservar la
piel q u e haba sido despojada de los animales.
Coelcretanienac hacia el
aiao
U7 ueron realizados los prime-
ros ensayos de taxidermia, practicndose el despojado de la piel,
para
d r
pocter icrmente a u n cuerpo artificial
la
semejanza con el
q u e posea
el
animal, Injcindose los tra ba jo s
con
pjaros y mam-
fe ros
pequefios,.
utilizando procedim ientos q u e siguen de actrxali-
dad
o
ligeramente modificados. Los grandes mamferos fueron
preparados algo
ms
tarde; as en el afio 1820 DELALANDE rea-
liz
p r ~riedio
e
u n a
aronadrrra metlica el m on taje d e un a jirafa.
O tr o s coano P O R T M A N utilizaban para
dicho
fin
un a rmazn de
madera, como tambin realizaba
co n
arcilla un m od elo del in-
dividuo, para te ner conctari temen te ante s las form as del mismo.
I-Iacia el 385 fueron realizados montajes conservando el esquele-
to, para aos l h s
tarde susti tu irle p or o tr o d e madera sob re e l
cual se perfilaba el animal. Otros ensayaron el modelado del cuer-
po animal
ea
arcilla; se haca rpidarnei~teun molde, sobre
e
ual
era t i i a d a una prueba en pasta d e car tn, y cobre es te car tn
mo-
delado era coIocada la piel.
QUENTIN realiz el m ei~sa je nodeIanda en arcilla
el
cuerpo,
pe ro ~ ec u br r l m odelo con papel encolado sobre la arcilla, apli-
a n d o despas la piel, m to do que fu abando nado por defec tuo-
so, utilizndose eantonces el rellenado de el cuerp o animal con bo -
i r a a algodn. TERRIER en 3894 utiliz
el
yeso de modelar para
el molitaje de 10s grand es m amferos, proced imien to q u e fu pos
t e r i o r i ~ e n t emejorado con modificaciones, el cua l con sis te en si-
4ileta.r sobre
i n de r
el
cu er po del atlimal, ob te ne r uria arm adu ra
di:
hber~o , omo t ambin una tela metlica eny esa da so br e Ia q ue
s e ~ p l c a aposteriorlalente la pie1
del
individuo.
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
27/118
UNIVERSIDAD
DE
CPVIEDO 7
Con esto tratamos de dar en conjunto, la serie de transforli~a-
ciones experimentadas por este arte, hasta obtener los datos pre-
cisos que nos pern-iitieran determinar
la
exactitud anatniica
de\
anirnal preparado. El taxidermista ha de ser
ra2 i
naturalista, un bis-
logo prevenido, trn iisdividuo que reuna ciertas cualidades artstl-
cas
y
de destreza, que, en definitiva, sealan acdiferensia
q u e
exis-
te entre los que en el ao 1750 rellenaban de paja el cuerpo de los
anifnales
y
los
q u e en
nuestros das preparan stos, kracidndoles
adoptar la actitud que
ms
les caracteriza; existiendo el mismo
abismo de separacin que,
el
q u e hay entre el barbero
d e
los
si-.
gloc
XV
y XVI
y
el cirujano modernci.
No querernos extexidernos
ms: ea1
este aspecto histrico de la
taxidermia, por lo que habiendo expuesto ligeramente
Ea
evola-
cin que sufrid este arte en el correr de I s c tietnpoc, vanaoc
a
dar
unas orientaciones para todos aqullos q u e en nuestra profcci6n
quieran dedicarse a tan interesante
y
pedaggico asunto.
Las aves, los mamferos
y los
arniinales acuticos se disecan
ge-
neralmente: primero, incidiendo .a
pie
para separarla del tronco,
dejando
solamente en ella
la cabeza y
Las
patas; despus
se
I i l~p ian
todas Pas sustancias carnosas adheridas, e igualmente los huecos de
las extremidades
y a
caja craneana; pero antes
de
seguir es nece-
sario definir lo que
e n
taxidel-jnia se
entiende
por greservatvoi,
es decir
las
sustancias qu e en
pacta ,
polvo o Iquido,
inrpedirni
que se pudran las pieles y sean a t a c a d a s por la polilla. E- acta h a c e
poco tiempo todos los presei-vativoc
q u e se
empleaban eran
a ha--
se de arsnico, pero c o m o este producto es altamente i~enetloso,
es muy convenien
te
tomar algunas precauciones para crn empleo.
Existen numerosas frmulas que n o VainOs a exponer en este tra-
bajo, pero s alguna
de
aqullas
q u e a
nosotros nos
h a
d a d o
excc-
lentes resultados.
Jabn blanco.. . . . . . . . . . . . . . . 3 000 grs.
Acjdo aresenioso. . . . . . . . . . . . a * 5
arbonato potsico..
25
Alcanfor
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
5
Blanco de Meudon. . . . . . . . . . . .
1,500
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
28/118
REVISTA
DE L
Preservativo en polvo.
Arsnico en polvo. . . . . . . . . . .
400 grs.
Acido br ico .
. . . . . . . . . . . .
100
Co rno precauciones a tonlar cu an do sean uti lizados estos pre-
servativos: no sern cogidos can la man o nunca pr oc ura nd o qu e
no contacten con her ida aiguna pues son al tamente venenosos.
O t r o preservativo q ue tiene la ventaja sob re el anter ior
de
n o
ser ven enoso es el borax q u e se utiliza en polvo o en soluci n ca-
tu rada
y
con el cual se obtienen resultados halagadores.
par ^ los peces se ut i l izar5 coino l quido conservador el si
guiente:
Salicilato sdico.
. . . . . . . . . . . . .
10 gss.
Ace ta to sdlso . . . . . . . . . . . . - m 5
Alumbre . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 0
Alcohol. . 100
Agua dest i lada. .
. . . . . . - . . . . .
1.000
Aldenido fri.maico
a
40 vol . . . . . >>
si bien para los peces marinos es imprescindible cam biar
el
agua
desti lada p or agua d e mar.
Esto s preservativos adem s d e su funcin principal con traen
los tejidos y cierran su s poros; en el caso d e
q u e
x piel se manten-
ga cier to tiem po sin motitar se precisa colocar en algunas pa rtes
bor ra o a lgodn con el fin de qu e conserve sus formas para en
el
nnomc-nto de ser colocacin eatlitar o espolvorear toda fa piel con el
preservativo enlazan do segu idam ente los alan-rbres q u e sirvan de
arnladerra rellenando
s ta y
f inalmente cosie i~do a incisin
y CO
Ioc ando los ojo s artificiales.
Estas son en poca s palabras detalladas las operac iones nece-
sarias para
?a taxiderinia de un arsiinai; nosotros soIamente quisi-
ram os trata r en este tr ab ajo la preparacin y conservasisjn d e aves
para en ulteriores publicaciones acog indo nos a la beiievolencia
de esta revista seguir exp on iend o to d o lo corscerniente
a
la pre-
paracin y coi~servacin e ariirndles y algunos d e sus produc tos
corno
10s
huevos
auriqne
solamente sea
en
ligeras orientaciones
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
29/118
UNIVERSIDAD
DE OVIEDO
PREPARACTON CONSERVACIBN DE AVES
Para pr oc ed er al mon taje d e un ave es necesario cerciorarse en
primer lugar d e
s
ia corrrepci6n no la ha despojado d e la plumas
d e
la
epidermis
y
si ciertas par tes co m o el vientre proxim idades
del ano el pico los ojos y
la
parte supe rior de cuello no han su-
f r ido a l te rac in . Por lo qu e debe r p rocede rse a su n o n ta je cuun-
d a la cabeza el pi so Ias ex tre m idad es c o m o ash m ism o las plurnras
gran des d e las alas estn conapletas y en perfec to es tad o d e in te -
gridad esto es cu an do existen com pletas las partes ms caracte-
rsticas.
C na n do en e l cu rso d e operaciones c inegticas nos hagamos
con algn ejemplar q u e po s cualquier circunstancia tengam os que
prepararlo ha y qu e evitar q u e Ias plumas se manchen d e sangre
para lo cual se espolvorea la herida co n yeso hacindo se seguida-
men te un o o varios tapones de a lgod6n
y
colocndoles en los
agujeros hechos p o r
el
piorno se vuelve a espolvorear
y
c ua ndo
la sangre se hay a resta ad o se colocan las plumas en
su
posicin
natural.
Si
el t i e n ~ p o uese excesivamente ca luroso y se temiera
p o r la n o con serva cin del ejemplag; se colo car ste en una caja
metlica ver tin do se en
ella
y
en el pico del a ve una s gotas d e aci-
d o fknico.
Se registrar5 e l pico para extraer cuan tos cuerp os extrao s
contenga introdrnciendoIe estopa o algodn despus de bien es-
polvoreados con yeso
o
talco. Esta operacin se hace indicpensa-
ble en las aves de
ragifia
pu est o q u e devuelven 10s alimentos en
el m om ento d e la mu er te
y
aun despus;
se
in t rod uce tambin a l-
godn
en los orificios nasales para evitar el olor f tid o q u e exalan
ordinar iamente cuid and o bien de n o a l te rar es te rgano q u e re -
sulta caracterstico en muchas especies.
En algu no s aniraales es imprescindible tam bin colo car algo d n
en l ano con e l fin d e impedir el escape d e excrementos .
Seguidaniente abriend o los prpados se tornar6 no ta del co -
Por de los ojos; as mismo se m ed ir el largo del animal de sd e el
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
30/118
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
31/118
UNIVERSIDAD
DE
OVIEDO
i
Colocada eI ave de espalda sobre una
mesa
con
la
cabeza situada
hacia la mano izquierda y
la
cola
a la
derecha; con el indice
y
el
pulgar de
la
mano izquierda
se
desvan las plumas
de
anodo
que
se
descubra la piel en una recta que partiendo Aei esfago siga
la
extremidad del externn
y
terrnine en los pricieroc mwscuios
del
abdomen; entonces se practica con el escalpelo Ia
incisin
hacia la
horquilla de este hueco
y
se prolonga siguiendo la Iinea descubierta
hasta
el
vientre. La ligera presin que hacen
1 1;
dedos
de
B
m a n o
izquierda colocados cobre la piel separa los labios de la 3ncEsi;l;
se coge ttno
de
los bordes con las pinzas
y
con
la
otra mano
y
el
mango del escalpelo se despega la piel de los mscrrlos
segG~s
va levantando con las pinzas.
A
medida
q u e se
va separando
la piel
conviene ir espolvorendola con borax yeso
a
serrn con el fin de
q u e vaya secando 2 porcin de piel desprendida.
Cuando se ha desprendido lo nns posible debajo
de
ala se
aplicar tambin yeso o serrin con el mismo propsito que ante-
riormente
y
una
vez
llegado al arranque del
ala
de
un
costado se
cambia la posicin del animal
y
se continGa despegando del otro
lado hacta llegar a la otra ala. Seguidainente sern seccionados
los
hmeros cerca
d e
su cabeza con los m~cchaIos Pos tendones q u e
adhieren todava al cuerpo. Se despega la piel del cwelio
y
se cor-
ta ste lo ms cerca posible del cuerpo; se separa en-stoonces
la
piel
del cuerpo bajndola hasta Ba cola descubrieildo Ioc m.eiscnPos y
lomo
y
cuando una parte del abdonien
q u e d a
descubierta
e igual-
mente la articulacin fgniuro-tibia1 se corta esta articralaciin con
el escalpelo o las cizallas.
As
pues desprendidas las alas el cuello
y
las patas la piel
sc
lamente queda adherida
al
dorso
y
partes inferiores del cuerpo;
se baja suavemente siii tirar mucho
d e
ella separandola de los
ai-isculos con el marsgo del escalpelo. Llgace por fin a la regiia
caudal y se desuella hasta cerca de su extremdzd pero de modo
que no se dscubra la insercin de
las
plumas gahdes
de
la cola;
se corta dejando parte de ella en Ia piel
y el
cuerpo
q u e d a com-
pletamen te desprendido.
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
32/118
3%
REVISTA DE
LA
N os qu eda n icamente I impia r las par tes q u e se hayan qu eda -
d o ader idas a la piel, para o cual se com ienza p o r las pa tas , em -
pujndolas hacia
el
in ter ior , has ta d escu br i r
enter mente
la tibia;
co n el escalpelo se limpia el huec o, sep ara nd o escr t ipulosam ente
hasta las par tculas ms pequ eas. Co nse gu ido esto, se aplica el
preservat ivo l hueso: s i e l e jemplar es pequef io con a lgo dn , y si
es gran de con es top a u ot ra m ater ia anloga, se guarnece la t ib ia
rod en do la del mater ial de st in ad o a rel leno, a fin de r eemplazar
las carnes quitadas y
dar al muslo
su
grueso riatural; f inalmente se
t i ra de
Ia
pata hacia afuera para llevar el hueso a
su
posicin ordi-
nar ia. En la regin caudal , po r me dio del escalpelo, se qu ita to d a
la grasa d e los ma sculos hasta dejar des nu do s lo s Kuesecil los q u e
Pa forman; se aplica prese rva tivo con la b rocha , se in t ro du ce
u
p o c o d e e s t o p a p ic ad a y se lleva la cola a
su
natural posicin.
Las alas so n dificiles d e limpiar; si el av e es pe qu e a, la opera -
c in se reduce
a
limpiar
el
hrmero;
se
descubre e l cbi to
y
r ad io
q u e sin violencia p ue de n salir , se limpian y aplica preservativo en
tod as par tes , te rmin and o p o r t i rar del a la hacia fuera
y
colocar los
huesos en su posici6n pr imit iva.
Tenernos ya sep arado el t ro nc o fa l tnd ono s solam ente , para e l
des po jo com ple to , el cuello
y
la cabeza, que se efecta
del
m o d o
siguiente: con la m ano izquierda se coge la extrem idad sup er ior
del cuello,
y
con la dere cha se pr oc ur a sepa rar la piel, revolvien-
dola, sacudindola,
ectir5ndcala
l igeratnente
y
d e s p r e ~ d i n d o l a on
1,s uas hasta d esc ub rir co n precau cin los hu eso s del crneo.
Llegando a la cavida d de la oreja, es p reciso despren derla levan-
t a n d o
la
especie d e bo lsi t a q u e form a su anembrana, y arrancar
sias ext rem ida de s d e la cavidad d e Ios hu eso s en qu e est adher i-
da, n o cor ta nd o con escalpe lo o t ijeras , s ino arrancn dola p o r me-
dio d e las pinzas.
Se co i~ t inGaa piel hacia Los ojos, s e c o rt a La nle m bra na q u e su -
jeta ei p i r p ad o a l r ededo r d e las cav idades de los huesos q u e for-
man las rbi tas , cuid and o d e no c or t ar los prpado s , q u e desfigu-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
33/118
UNIVERSIDAD
E OVIEDO 33
rar an al individuo , ni reventar e l glo bo del ojo, po rq ue s u h u m o r
Ii2anchara la cabeza
y
el cuerpo del animal.
Llegado al nacim iento del pico se qu i tan los ojos de sus rbi-
tas, se litnpian s tas perfec tamente , se a r rancan los m ~ s c u l o s
mem branas q u e envuelven el c r in so , e igua l tnente las par tes car-
nosas de las mandbulas , de jan do los hue sos desn udo s.
Si el av e es peq ue a se cor ta la pa rte infer ior d e Ia cabeza, pa-
ra extraer con rns faci l idad el cerebro, pero si es grande no hay
ms qu e agrandar su fic ien tem ei~ te agujero occipita 'i, para extra er
y l impiar perfectamente la caja craneana. Con esto se ha realizado
el de spo jo c o m p l e t o
y
nos que da un t a r c onve n i e n te m e n t e d e p r e-
servat ivo to da s las par tes sin excepcin, inter ior del crneo, rbi-
t a s y mand bulas, co lno as mism o el interio r d e la piel.
Se rellena el crieo con estopa picada, o viruta de madera de
la qu e se emplea para embalar obje tos de licados ,
y
con a lgodn
las rbi ta s d e los ojos, y se vuelve
la
piel hacia fuera, es de cir se
coloca en su posicin natural .
Las operaciones descri tas hay que realizarlas con alguna rapi-
dez; d e lo contrar io, c o m o la piel en el crneo es m u y delgada y
seca, se co nt ra e pr on to , s iendo mu y difcil, s i n o I inposible, colo-
carla en su posicicn natural
s n
romperla; p o r esta causa aconseja-
mos humedecerl a en uno de 30s siguientes bafios:
A g z a . . 1 l i t r o A g u a . . 1 l i t ro
Alumbre. . 1 gr. A lum bre 50 grc.
Sal marina. .
PO
Ni t r a t o po t s it o 2 5
Sal marina 50
o t a rnb i i~ ued e hum edecerse con agua sola , p r imeram ente du -
rari te cuarenta y o ch o horas se sumerge en agua fra ; a es te tiem-
po se ret ir a p asndose a o t r o ba o
de
agua caliente, a fin d e co-
municarla un calor n o excesivo, pasando en seguida a un t e rc e ro
con
el
agua lo ms fra posible.
Es ind ud ab le q u e la piel as pre pa rad a falta rellenarla, q u e es la
operacin principal , pues de ella de pe nde r
l
esbel tez y la gracia,
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
34/118
REVISTA DE L A
es dec ir la vida que nos ofrecen algunos ejemplares perf ecta-
mente montados.
Co loca da la piel so br e su do rso, se comienza por separar las
plumas de los bordes d e l incisin y con una brocha se aplica
preservativo en el crn eo y en to d o el cuello; se tom a con unas
pinzas una porcin de estopa o el material que utilicemos para re-
lleno el algodn se utiliza rara vez, ya q ue com o es mu y com pac -
to, difcilmente es atravesado p or el alambre q u e a travs del cue-
llo debe llegar al crneo).
Una vez colocada la estopa en el crneo se ahueca, abriendo
y
cerr an do las piiizas, hasta q ue se guarnece t o d o el interior d e la
cabeza, conocindo se po r la palpacin; se sigue in tro du cie nd o una
segunda y hasta una tercera o cuarta porcin de estopa hasta que
el crneo y el cuello quede n rellenados suficientemente; es nece-
sario tener siempre presente que, el dimetro del cuello aumenta a
medida qu e se aproxima
al
cuerpo, p o r cuya razn es conveniente
realizar el rellenado cuida dosam ente , con el fin d e que n o se alar-
gue demasiado el cuello, falta q u e com eten la m ayor par te d e los
principiantes.
Seguidam etite se pasa a una operacin indispensable, pues de
ella depen der q ue las alas pued an colocarre en buen a acti tud
cu an do el ejemplar qu ed e mon tado. Si el ave es grand e se cogen
con los dedos, y si pequea con las pinzas, los do s hm eros; se ti-
ra de ellos hacia el interior de la piel, y con una aguja se pasa un
hilo fuerte entre el radio y el cbito, se unen y anudan los cabo s
de m od o qu e las alas queden a una distancia d e a
5
mm . en las
especies pequeas, de a
8
mm , para aqullas cu yo tama o sea
como el de la alondra
y
as sucesivam ente.
Se pasar enton ces a rellenar el cuerpo; por medio de las pin-
zas se coge una buena cantidad del material y se coloca en la par-
te d e la piel q u e de be forma r el pecho, cuan do
el
relleno cubre
perfectamente esta pa rte
y
llega al principio del cuello se ahueca
con las pinzas ab rindolas, cerrndolas y volvindolas en to d o s los
sentidos, repartiendo el material y procurand o q u e guarnezca ms
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
35/118
UNIVERSIDAD
DE OVIE O
la piel q u e el ce n tro del cu erp o. Co locad a la primera porcin se
con tina con una segunda y des pu s una tercera para sucesiva-
men te rellenar to d o s los hu ecos y da r al ejemplar sus form as na-
turales cu id an do de q u e ningn pliegue o arruga qu ed e sin relle-
nar.
Ei
ejemplar de be recobrar su tam ao natural y el m atehal
utilizado en el rellenado n o ha d e qu ed ar tan ap iad o qrre ofrezca
ms resistencia la palpacin q u e la de una esponja.
C u a n d o
l a
piel se ha conservado del modo indicado anterior-
men te y se tr at a de tnontarla definitivamente se extra e
el
relleno
del cu erp o se hrrmedece y vuelve a colocar el sitio que ocup
teniendo cuidado de no mojar las plunas
y
crrando la piel est
llena se pasa a los huesos de las extremidades envolvindolas en
estopa hmeda.
Si se trata
de
montar un ave con las alas extendidas
se
preci-
sa realizar alguna modificacin a las ope raciones citadas d e lo cual
se cuidan poco B niayor parte de los preparadores. Se to m a un
tro zo d e alambre se forma con l izn r n e d i ~ rculo
y
cada una
de sus puntas se hace penetrar eri eI hueso del antebrazo y para
ms solidez se les ha ce salir p o r la articralacin d e los b ~ m e r o s
los cbitos do nd e se curvan en form a de corchete; se tom a esto-
pa larga
y
se grrarnece perfectam ente t o d o el hu eso del an tebr azo
y el alam bre en to d a su longitrid da nd o con la esto pa vraeltas al-
red edor a fin
de
que quede bien sujeto. Hay qu e tener presente
que en este caso Iac alas
no
deben estar atadas. Por este mtodo
se extiend en ms o njeno s las alas segn sea necesario ab rien do
o cerrando ei medio crculo de alambre cuy os do s extrem os re-
emplazan las frinciones de los hrneros.
C u an d o el ave est colocada d e espalda el alambre transversai
de la cabeza de b e pasar so bre el alambre de las alas es dec ir s-
te no pasar entre el dorso y el crculo sino entr e ste y j piel
del vientre pues si pasase por arriba no pod ran exte nde rse las
alas ms o menos regn nuestro deseo.
Disp uesta el ave para ser m ontada se prepara el alambre q u e
ha de constituir el esqu eleto del animal y la lo ngitu d del mismo
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
36/118
6
REVISTA
DE L A
necesariamente, ha de variar, segn el oficio a qu e se dest ine.
El
transversal deber; ser una cu ar ta pa rte ms Largo q u e el ave, to -
m an do la m edida de sd e la putlta del pico a la regin caudal; se e n -
dereza lo mejor posible
y
por med io d e una
l ima
o piedra de
afi-
lar se aguzan sus extr em os. Los d e Ias extrem idades inferiores han
d e exc eder a lgo
S U longitud, sor ob jeto d e qu e en el cu erp o pue-
dan torcerse, e jg~aaln~enten los de d o s para fijar la pieza en una
peana u o t ro obje to .
Realizado e st o se cog e la pata
del
ave,
y
por m ed io de t a l ad ro
d e hie rro se practica un orificio, en la pa rte inferior d e ayugila,
aproximadamente
del mismo grueso que el alambre. Se introduce
el alambre po r e ste agujero
y
se
le
va haciendo deslizar por de-
tr s del tarso basta el taBSn. Llegado zqu se end ere za la articula -
cin se con tina introd ucien do, hacindole pasar p or to d a
la
t -
bia, y se pmsenta nuevamente rodendola
de
es topa
para
darle su
grues o natural. Se pasa d esp u s a La o tr a pata, tra tn do la de1 mis-
mo modo .
El
alam bre transversal se coloca r del mo do siguiente: se do-
bla a los dos tercios de sur longitud, de manera que forme
ran
ani-
Ilo po r m edio d e una vuelta en espiral; se coge po r el ex trem o ms
c o r t o
y
se int roduce por
el
cuello, dndole vereltac con los dedos.
Llegado al crneo, se hace q u e la pu nta qu e anticipadam ente
se
le
ha hecho qu e agujere el hueso, ap oy and o la cabeza con la mario
izquierda,
y
d a n d o vueltas al alannbre co n la derec ha hasta cons e-
guir q u e salga un poc o por encima. Este a lambre de be ser pro -
porcionado, de modo que el cabo superior salga por
la
cabeza al-
gunas lneas, que el anillo quede situado hacia el alto del esternn,
y
q u e el extre m o inferior, despu s de hab er atrav esad o la regin
caudal, salga al exterior en medio de las plumas grandes
de
la co-
la, a las cuales tiene q u e qu ed ar en igual longitud.
Antes d e pasar el ca bo inferior po r la regin caudal, se coge n
los extremos de los alambres de las extremidades inferiores y se
les pasa por
el
anillo transversal; con unas pinzas se cogen los dos
c a b o s
y
el anillo y se les tue rc e jun tos, en espiral cerr ada pa ra
A
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
37/118
UNIVERSIDAD
DE
OVIEDO
37
jarlos slidanaente. Se to m a e l~ to n c e s l inferior del transversal
y
se encurva mas o m eno s hacia el pech o para traer su pu nta
la
regin caudal
y
hacerla salir del m od o qu e acaba m os de indicar.
Si
el ave que
ce
monta debiera tener la col abierta se precisa
qu e el extremo del alambre pueda servir de pu nt o d e apoyo para
lo cual se do bl a era an ch o anillo o m ejor an hace r un a horquilla
aad iendo o t r o pedazo de alambre
al
transversal cerca d e Ia re-
gin candal form and o d os brazos qu e se apar tan ms o manos
segn sea necesario
Para da r al transversal la posicin deb ida se apoya fuertetrien-
t e encima leva ntan do p o r el con trario el alannbre d e las extremi-
dad es inferiores a in de desprenderlo de9 cuerpo; por este medio
se da al t rabajo to da la coiidez qu e se desee. C o m o en toda s las
especies la regin cauda l de be qu ed ar pe rfec tam en te rellenada
ins
q u e
el resto
del
cuerpo estarido
el
transversal bien fijo
y
apo-
yado falta todava colocdr m ucha estop a o
el
material de q u e se
tra te en
el
abd om en. De spus se desvan las d o s extremidades del
medio del cuerpo y do bl nd ola s hacia los lados se acaba d e relle-
nar y se hace la co rt ura.
Esta Gltima
operacibn
debe practicarse sin que deje sefial algu-
na po r lo qu e vamos a detallarla: Se t o m a
una
aguja enhebrada
con un hilo de
u n a
consistencia proporcionada al grueso y dureza
de la piel pud indo se com enz ar indist intamente po r un sit io o
por o t ro se separan ?as plumas y se intr od uc e la aguja po r deb ajo
de la
piel
Se tira del
hilo
cuy o cab o e st i fijo po r
u n
nud o hecho
anticipadamente se coge la otra orilla y se cose del interior al ex-
terior tirando
del hilo
para unir los dos labios de a incisin del
mejor m o d o posible sin estro pe ar la piel;
s
vuelve a la primera
orilla de sp u s a la otra y as ciixcesivamente hasta terminar Final-
mente se termina el niontaje colocando el ejemplar sobre el sopor -
te q ue deseemos
y
alisando las plumas desordenadas qu e con el
barriizado del pico y ext~en:idacicc inferiores. mediante un barniz
irrcoloro queda r6 conclwdca.
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
38/118
Estudio geoespeleol0gico d e las formaciones hipQgeas
e Fja eu la da (Santa Margarita, Mallorca)
P R
JOSE
M. TI-IOMAS CASAJUANA
En las fo rm as tabulares, con sti tuda s p o r molasas miocnicas,
q ue integran consid erab le pa rte del suelo d e las islas Baleares, se
desarrolla un a bidrolo ga crstica rnrty notab le.
C ua nd o estud iam os las cavernas de l W de Menorca 7), nos
referimos al especial t ipo d e Karst pr op io d e las molasas, q u e ia
d ad o lugar a tan in teresa ntes formaciones, co m o so11 las cuevas de
Parella. Asimismo s e ab ren en las molasas, las clebres cuev as del
Drac
y
dels Ham s, en la vecina isla d e M allorca.
Pero hasta la fecha, to da s las cavernas conocidas estaban si tua-
das a poca distancia d e la l nea d e costa; su gnesis y evolucin
indicaba la existencia d e arroy os hipgeos, d e los q u e solo se co-
noca s u porci n terminal, pe ro qu e hacan presu m ir la existencia
de redes d e co nd uc to s acu fe ros y colec tores q ue drenaban
l a s
t a -
blas miocnisas,
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
39/118
REVISTA
E L
El nteres de los fenmenos crsticos que han dado origen a
este trabajo, radica en que, por vez primera, se estudian las for-
maciones correspondientes a la zona inedia de los arroyos subte-
rrneos, en las rnolasas de las Baleares.
El
descubrinsiento de l a cueva de Sa Teulada, que nos
frr
co-
municado por nuestro buen arnigo
D.
Rarnn Compte Porta, de
Palma de Mallorca, tuvo lugar de la curiosa forr-isa
q u e
vamos
a
relatar:
Con ocasin de abrir I ~ I equeno hoyo, para plantar un Srbol,
apareci en e1 predio de Ca Z'eulada, un pequeo orificio d e cinco
por diez centmetros, por el que salia una dbil co rr ie ~~ tee aire.
Debido a que en Mallorca la ~xplotacl6 n turstica de las cuevas
del Drac, Art, Campanet-, Gnova, etc., resuiIta ran magnlfico ne-
gocio, pocos sern los terratenientes mallorquines que no sueen
con descubrir, en sus propiedades, algurta gran caverna; s l pues,
e propietario,
D.
Jernimo Moll, se apresur a abrir
un
pozo sI
lado
de9
referido agujero, y efectivamente, a los dos Irletros esca-
sos, comunic con tan sistema de galeras retculadas de varios
centenares d e metros de longitud.
El
anterior descubrimiento motivcji nuestra expedicihn q u e clcr
pIic6
la
parte conocida de la caverna, infornlndonos dwante la
misma de
Ia
existencia,
e n
las proximdades,
de
una
sima
y
de una
pequea cueva, las cuales fueron asimismo topografiadas y estu-
diadas.
El presente trabajo se refiere pues a este conjunto de cavida-
des, muy interesantes desde el punto de vista espeIeornorfolgico,
y cuya exploracin fu efectuada en agosto de
1951,
por los que
suscriben, con la valiosa colaboraci6n de los espelelogos, compa-
fieros del G r ~ ~ p oe Exploraciones Subterrneas
(C.
E. S.)del
C.
M.
Barce onGs, res. Arturo Brusotto
y
Fernando
Te rm e s
quieries,
desde estas lneas, agradeceinos su ayuda. Asin~ismo,110ses grato
manifestar nuestro agradeciiniento al entusiasta periodista
D. Ra-
m n Cornpte Porta, al propietario de la cueva de Ca Teulada se-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
40/118
UNIVERSIDAD
DE OVIEDO
4
or Jernimo Moll y al de la sima de Ca Teulada, Sr. Juan Jos
PascuaI, por su desinteresada ayuda y colaboracin.
CARACTERES CEOMORFOLOGICOS
DE
LA PLATAFORMA
ESTRUCTURAL MIOCENICA DE MALLORCA.-SITUACION
TOPOGRAFlCA
DE
SA TEULADA
Los sedimentos del Miceno marino cubren cerca de la mitad
de la
srrperficie de la isla, ocupando la llanura central, desde la
f a -
lla que los limita al NW. con la Sierra Norte, hasta la cordillera de
Levante, que contornean por el SE. En fa parte central de la Isla,
se elevan sobre dicha llanura los relieves n-nesozoiros
y
neozoicos
plegados, de Randa y Cineu Fig. 1).
Sibecion
de
a s suews r c
5
Tciuilada
( 9
hl~( nb) n
< s\u
e & ioiccm.
s arhrnoms
Fig
1
La plataforina vindoboniense, en gran parte recubierta por de-
psitos cuaternarios, esta constituda principalmente por calizas y
rnolasac en bancos horizontales o casi horizontales, cruzados por
redes de diaclasac, que se desenvuelven segn las direcciones
N. S.
E.-VV. sistema principal),
y
N45E y N45W sistema en as-
pa).
travs de estos sistemas de diaclsas se verifica la absorcin
bidrica a los conductos acuferoc, 10s cuales se han establecida, se-
7/25/2019 Revista Ciencies Oviedo Termes 1952
41/118
2
REVISTA DE
1 A
g n las directr ices crea das p o r la interseccin d e las diaclasas con
los planos de estratif icacin.
U na re d f luvial epgea, for m ada p o r peqtreos arr oy os rarn-
blas), q u e no preser itan circulacin vis ible ms qu e d esp u s d e las
gra nd es lluvias, ha disecado la platafo rm a estrrrctural, co rt an d o en
par te las redes d e co nd uc tos acuferos h ipgeos , los cuales han
en tra do en su fase de fosi lizacin p o r quimiolitognesis .
EI
pred io d e a Teulada se encuen t r a a unos 4 kms. al E. d e la
pob lacin d e Sta . Margar i ta, en la p ar te NE. d e Mallorca, y a u n o s
ktns. de la baha de Alcudia.
San ta M argari ta e s t s i tuada sob re la ca r r e te ra d e La Puebla a
Ar t , y d esde e lla, po r caminos car re teros , se