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SEMANARIORevolucin Obrerargano de la Unin Obrera Comunista (mlm)
Voz de los Explotados y Oprimidos
La lucha contra el imperialismo es una frase vaca y falsa si no
va ligada indisolublemente a la lucha contra el oportunismo.
Lenin$1.000
23 de Ju l i o de 2014 Ao 16www.revo luc ionobre ra . com
e-ma i l : [email protected] logrevo luc ionobre ra .b
logspo t . com
Co lomb ia Suramr i ca 403
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EDITORIALDesde su creacin en 1948, el Estado de Israel ha
sido
un Estado sionista verdugo y guardin del poder imperia-lista
estadounidense en el Medio Oriente, y a la vez, ha sido la fuerza
organizada dictatorial de las clases reaccio-narias sionistas sobre
las masas trabajadoras rabes y judas al interior de las propias
fronteras de Israel.
El Estado de Israel fue impuesto por el imperialismo en el
territorio ancestral del Pueblo Palestino, causndole desde entonces
destierro, oprobio y persecucin; convir-tindolo en blanco de
innumerables masacres sionistas, tan sanguinarias como la
perpetrada entre el 15 y 17 de septiembre de 1982 cuando
paramilitares fascistas liba-neses al amparo del invasor israel,
ahogaron en sangre a 2.000 palestinos casi todos nios, mujeres y
ancianos- en los campos de refugiados de Sabra y Chatila en Beirut
(Lbano) con el pretexto de exterminar a los terroristas de la
Organizacin para la Liberacin de Palestina OLP; tan brutales como
las carniceras humanas ejecutadas en las llamadas Operacin Plomo
fundido de 2008-2009 y la Operacin Pilar defensivo de 2012.
Luego de la llamada Guerra de los Seis Das de 1967 en la cual el
sionismo israel se anex nuevos territorios de pases rabes, el
Pueblo Palestino fue confinado a Cisjor-dania, El Goln y La Franja
de Gaza, esta ltima, una pequea extensin de aproximadamente 42 por
14 km en su parte ms ancha, donde viven hacinadas 1.800.000
personas, el enjambre humano ms denso del planeta, contra el cual
desde el 8 de julio, de nuevo y con el viejo argumento de lucha
contra el terrorismo del Movimiento de Resistencia Islmico Hamas,
el Estado sionista lanz su poderosa mquina de guerra con un
descomunal ata-que de bombas, misiles, tanques, causando otra
aterra-dora matanza de civiles, muchos de ellos nios, vctimas
preferidas de los sionistas en sus incursiones.
Desde la creacin del Estado de Israel, el Pueblo Pales-tino ha
sido sometido adems a los vejmenes sionistas del control policial,
de la discriminacin racista, del blo-queo por tierra, mar y aire
para aniquilarlo por hambre, ante todo lo cual las declaraciones
humanistas de funcio-narios de la ONU y de gobernantes burgueses
llamando a la paz, son pura palabrera hueca para disimular la
com-plicidad de todos los imperialistas, de los propios
reaccio-narios gobiernos rabes y de toda la burguesa mundial, con
los crmenes imperialistas sionistas contra las masas trabajadoras
de Palestina por exigir el inalienable derecho de los pases
oprimidos a su liberacin, de las colonias a su completa separacin,
y de las naciones a existir como Estados independientes sin
verdugos ni gendarmes impe-rialistas.
Es deber internacionalista de los pueblos, de los obre-ros y
comunistas del mundo, denunciar la desalmada y reaccionaria guerra
imperialista sionista contra el Pue-blo Palestino, sin caer en la
barbaridad de algunos que a nombre de la revolucin llaman a acabar
con los judos, posicin racista, chovinista y diametralmente opuesta
al internacionalismo proletario que reconoce en Israel una sociedad
dividida en clases, y diferencia entre las clases enemigas
reaccionarias cuyo poder se concentra en el Es-tado sionista de
Israel, y las clases trabajadoras cuyos
enemigos no son los trabajadores palestinos, sino sus propios
opresores y explotadores sionistas.
El Pueblo Palestino slo puede confiar en sus propias fuerzas y
en las fuerzas del proletariado y los pueblos del mundo, porque
todos son vctimas de los mismos enemi-gos irreconciliables: los
imperialistas y las clases explota-doras reaccionarias en todos los
pases.
El Pueblo Palestino ni siquiera puede confiar sus des-tinos a
las clases dirigentes y explotadoras en la misma Palestina. Los
estragos corruptos de la faccin burguesa de Al Fatah que gobern
tranzada en alianza con el im-perialismo ruso y los reaccionarios
gobiernos rabes, dio lugar a que el Gobierno en la Franja de Gaza
pasara a ma-nos de la faccin burguesa de Hamas ligada al
fundamen-talismo islmico y ahora aliada a las hordas reaccionarios
del Estado Islmico.
El causante profundo de la muerte, desolacin y los terribles
sufrimientos del Pueblo Palestino, es el imperia-lismo -sistema
mundial de opresin y explotacin de los pueblos del mundo-, del cual
el imperialismo estadouni-dense tiene en el Estado sionista de
Israel, su punta de lanza para ejercer el dominio y la anexin
territorial im-perialista en el Medio Oriente. Sin embargo, la
solucin no es el fundamentalismo islmico cuya poltica tambin se
basa en la subyugacin del pueblo bajo la dictadura de las clases
explotadoras, slo que justificada en la sumi-sin religiosa.
Muchas voces se alzan alrededor del mundo contra la criminal
matanza imperialista sionista en Palestina. En nombre del
proletariado de Colombia los comunistas re-volucionarios se unen a
ellas; pero a diferencia de quienes callan ante los enemigos
antagnicos internos del Pueblo Palestino, conciben su verdadera
emancipacin como la derrota del imperialismo sionista, conjugada
con la derro-ta de las clases explotadoras en los territorios
Palestinos.
Por diversos pases despunta el apoyo a la heroica re-sistencia
del Pueblo Palestino. Tambin en nombre del proletariado de Colombia
los comunistas revolucionarios se solidarizan con su justa lucha y
se unen al sentir ge-neral revolucionario de respaldar la lucha
armada como la forma superior de la lucha poltica de las masas para
derrocar a sus enemigos; aclarando s, que la victoria del Pueblo
Palestino ser conquistada por va de las armas, pero no por el
camino burgus reaccionario de la Yihad Islmica, sino con la guerra
popular de los obreros y cam-pesinos contra la dictadura
imperialista sionista y contra cualquier forma de dictadura
islamista, hasta conquistar un nuevo tipo de Estado, donde sean los
obreros y cam-pesinos armados quienes lo gobiernen todo.
De ah, que ms temprano que tarde, el Pueblo Pales-tino podr
transformar su heroica resistencia avanzan-do a la revolucin
palestina como parte de la Revolucin Proletaria Mundial contra el
imperialismo y todos los re-accionarios, ya no bajo la direccin de
la burguesa sino del proletariado constituido como partido
comunista in-dependiente de las dems clases. La tendencia histrica
principal en la fase imperialista es la revolucin proleta-ria, y
Palestina no es la excepcin.
Contra la matanza imperialista sionista en Palestina:
Transformar la Resistencia en Revolucin!
PROLETARIOS Y PUEBLOS DE PALESTINA E ISRAEL: UNOSCONTRA EL
IMPERIALISMO Y SUS CLASES REACCIONARIAS!
Comit Ejecutivo Unin Obrera Comunista (MLM)Colombia, Julio 18 de
2014
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23 de Julio de 2014 Semanario Revolucin Obrera 3LA CRISIS
ECONMICA Y LAS
INTILES MEDIDAS DE LA BURGUESA
La crisis econmica en Colombia se quiere ocul-tar con falsas
estadsticas de crecimiento econmi-co del DANE, del BANCO DE LA
REPBLICA, de otras entidades y economistas reconocidos; como ha
sido costumbre desde el comienzo de la crisis, la burguesa la
disfraza con mediciones artificiales de la economa en general
velando que contina y sigue agravando la crisis social, agudizando
ms la lucha de clases en la ciudad y en el campo.
En Colombia la cada de la produccin indus-trial, reconocida
oficialmente en 1,9% durante el 2013, ha mantenido su tendencia
durante el 2014, lo cual indica profundizacin de la crisis
econmi-ca, donde este pas est ligado a la economa mun-dial
imperialista como pas capitalista oprimido. A pesar del crecimiento
jalonado por la construccin de obras de infraestructura, ordenadas
por el im-perialismo para ingresar con ms abundancia sus mercancas
y sacar con ms rapidez los recursos naturales que explota, apenas
es un pequeo im-pulso artificial que no detiene la gran cada
general de la produccin.
Los hechos en el sector energtico
No es gratuito que hablen de la venta de Isagen -que es una
empresa rentable-, cuando la cada de la produccin industrial, y con
ella el consu-mo de energa, se seguir manteniendo en el pas.
Ecopetrol por su parte, como la principal empresa nacional,
pretende ser vendida en un 10%, cuan-do est expuesta a la
dependencia y competencia imperialistas, al agotamiento de las
reservas de petrleo y a los bajos resultados del proyecto piloto
STAR promovido por Pacific Rubiales para aumen-tar la recuperacin
del petrleo en los pozos viejos, o de difcil acceso.Buscar nuevos
yacimientos para mantener los mrgenes de ganancia del pasado es un
propsito cada vez ms difcil de alcanzar, sea en Colombia o en el
extranjero. El reporte recien-te de que Ecopetrol en alianza con
Shell encontr petrleo en aguas del Golfo de Mxico, apenas es un
respiro.
El Gobierno sabe que la situacin econmica se agrava, por eso el
recorte de los gastos de inversin y las ventas de empresa del
Estado para asegurar-se recursos, son sus patadas de ahogado.
Lo anterior son ejemplos de cmo las acciones del mismo Estado
muestran la realidad econmi-ca del pas. As como los monopolios
imperialistas quieren hacerse con el botn de las empresas del
Estado, el Gobierno necesita el recurso para paliar los problemas
financieros que se agravan y con los cuales pretende contener el
levantamiento popular.
Por lo anterior, los comunistas y obreros cons-cientes deben
proseguir firmes en el impulso de su poltica de independencia de
clase, que tiene como tarea principal la construccin de un autntico
Partido de la Clase Obrera, pero que no se reduce a esto, sino que
abarca tambin la reestructura-cin ideolgica y poltica del
movimiento sindical, la organizacin independiente y revolucionaria
de las masas en Comits de lucha, la organizacin de los campesinos,
entre otras.
En esta era de la Revolucin Proletaria Mundial, cambi
radicalmente el modo de
abordar El Problema NacionalAl avanzar el capitalismo a su fase
imperialista, cambi la
forma y el contenido del problema nacional, cambi su extensin y
profundidad. La tendencia del capitalismo en los comienzos de su
fase de libre competencia fue a separar las naciones, mien tras que
en su fase monopolista, se ha impuesto la tendencia a unir las
naciones con la internacionalizacin del capital.
El problema nacional, o sea el problema de la independen-cia, la
libertad, la autodeterminacin, el derecho a conformar un Estado
propio de una comunidad estable, histricamente formada, de idioma,
de territorio, de vida econmica y de sicologa, manifestada en la
comunidad de cultura, ese problema no ha existido siempre, ni ha
tenido siempre idntico contenido e idn-ticas reivindicaciones.
La competencia del capitalismo en su primera fase, oblig a la
burguesa a luchar por la conquista del mercado nacional y mundial,
lo cual implicaba la opresin de las naciones compe-tidoras. La
burguesa de la nacin oprimida se levanta en mo-vimiento nacional y
presenta su inters de clase como el inters de todas las clases de
la nacin; por ello, el movimiento nacional de la primera fase, fue
un movimiento de carcter burgus, y en el fondo una lucha de las
clases burguesas nacionales entre s.
Contra la pretensin de la burguesa de presentar sus inte-reses
nacionales como intereses de toda la sociedad, el proleta-riado
tuvo que constituirse en clase independiente en su con-ciencia y en
su organizacin, para luchar no aliado a la burguesa de su nacin,
sino contra la burguesa de todas las naciones. El propio
capitalismo al convertirse en modo mundial de produc-cin, en
sistema mundial de opresin y explotacin, en impe-rialismo, cre
condiciones para el acercamiento de las nacio nes, pero ms que eso,
agudiz la lucha de clases, con lo cual facilit la unin del
proletariado de todas las naciones, y con ella, su lucha contra
toda la burguesa mundial.
El imperialismo dividi al mundo en un puado de pases
im-perialistas y una inmensa mayora de pases oprimidos, y socav los
cimientos de la antigua comunidad econmica, sicolgica y cultural de
los comienzos de las naciones. La ex tensin del vie-jo problema
nacional cambi radicalmente, pues dej de ser el problema interno de
unos Estados, ms especficamente de los grandes Estados de Europa
Oriental (Austria, Hungra, Rusia), y se convirti en un problema mun
dial, en un problema internacio-nal, fundindose con el pro blema
colonial del imperialismo, dando lugar a un solo y nue vo problema:
el de la lucha mundial en las colonias y semicolonias contra la
opresin imperialista. El imperia-lismo no slo rubric el fracaso de
la burguesa para resolver el problema nacional, sino que al
ampliarlo y fundirlo con el colonial, firm su propia derrota como
condicin para resolverlo.
La vieja consigna del movimiento obrero de la primera fase que
exiga el derecho a la autodeterminacin como nacin (consigna adems
envilecida por la socialdemocracia de la II In ternacional que la
redujo a la autodeterminacin formal y ju rdica, cuando no slo
cultural), cambia de extensin y se ampla su interpreta-cin, al
derecho de los pases oprimidos a su liberacin, de las colonias a su
completa separacin, y de las nacio nes a existir como Estados
independientes.
Con el imperialismo cambi la profundidad del viejo pro blema
nacional, pues se convirti en un problema que slo puede ser
resuelto sobre la base del derrocamiento del capital. Esta
condi-cin fue olvidada, eludida y silenciada por el opor tunismo de
la II Internacional. En la nueva Era el problema de la lucha
mun-dial contra el yugo opresor imperialista, es parte del problema
general de la revolucin proletaria, es parte de la lucha
interna-cional del trabajo contra el capital. El nue vo problema
nacional de la fase imperialista es parte del problema de la
Dictadura del Proletariado.
Del Programa para la Revolucin en Colombia
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4 Semanario Revolucin Obrera 23 de Julio de 2014Los taostas
asediados y asesinados
en la guerra contra el puebloEn un lugar apartado entre Charal y
Duitama, correspondien-
te a Santander del Sur, siendo una zona selvtica, una comunidad
taosta se ubic all con fines espirituales y filantrpicos desde el
ao 1992.
Zona rica en roble, donde al momento de llegar a estas tierras
haba problemas de deforestacin, caza indiscriminada de anima-les y
cultivos de amapola. La comunidad taosta de inmediato se opuso, lo
cual despleg una serie de falsas acusaciones y amena-zas por parte
de los explotadores, pero que gan el apoyo de las masas quienes les
vieron como aliados en la regin.
El lugar de aposento tiene el nombre de templo vegetal SAKRO
AKUARIUS, con un rea aproximada de 1000 hectreas legaliza-das ante
el Estado como de su propiedad. Este lugar es reconocido por la
gente de la regin y los seguidores de dicha doctrina quienes estn
ubicados en diferentes pases y viajan a este templo cada que tienen
oportunidad.
All se impuls el cultivo de maz y caa, no sin lucha contra los
explotadores de la riqueza forestal, de los cultivos sicotrpicos y
de la caza indiscriminada de animales, que trataron de aislar a la
comunidad de las masas.
Luego que los campesinos establecieron relaciones de
intercam-bio y beneficios con la comunidad, vino una ofensiva
publicitaria de la prensa burguesa, por medio del peridico
Vanguardia Libe-ral, quien les atac por ms de siete aos,
demostrando al servicio de qu intereses estn quienes proclaman su
imparcialidad y hablan de la libertad de prensa.
Las FARC como parte de los ejrcitos en la guerra contra el
pueblo, que hoy legalizan su despojo en la Habana, trataron de
expropiar tambin a esta comunidad, pero no pudieron,
principal-mente porque el apoyo campesino se mantuvo.En el rgimen
de Uribe fueron los paramilitares que incursionaron pero la
comuni-dad persisti, hasta el 23 de Noviembre de 2004, cuando se
hizo un operativo para desalojarla con ms de 2000 (dos mil)
esbirros del ejrcito con la disculpa de que eran guerrilleros y
bandoleros. Hubo ms o menos 71 personas desaparecidas, entre ellos
dos de sus principales dirigentes, destruccin de la industria
mielera que se mont, con mquinas destruidas que servan para la
produc-cin y que dejaron sin actividad a por lo menos a 600
trabajado-res, y sin beneficio a una poblacin aproximada de 3000
personas que vivan en cooperacin con los taostas. El ataque del
ejrci-to fue letal. Para restablecer el ecosistema destruido se
requieren cerca de diez aos.
Lo anterior confirma cmo son de asesinos la burguesa y los
te-rratenientes colombianos, enemigos del pueblo; cmo esta guerra
reaccionaria es por la renta del suelo y contra todo aquel que se
interponga en este gran negocio, de lucro de unos pocos. Ensea
tambin a las masas taostas que el mundo est dividido en clases
sociales y en Colombia todas las masas sufren el yugo de la
opre-sin del capitalismo, incluyendo las minoras, que deben sumarse
a la lucha por la Revolucin Socialista dirigida por el Proletariado
a travs de su Partido Poltico (en construccin actualmente en
Colombia), de los cuales todos los oprimidos y explotados son sus
aliados para derrocar todo el poder del capital en Colombia.
En estos momentos hay alrededor de 500 miembros de la co-munidad
taosta en el Templo, como denuncia un grupo de ellos, asediados por
la Segunda Brigada del Ejrcito que acta en con-tubernio con la
banda de Los Rastrojos, asesinando campesinos y presionado la venta
barata de sus tierras para pasar por el medio un proyecto de
construccin de una carretera.
CORRESPONSAL DE MEDELLIN
Ganancias del 222,9% para el sistema
financiero! Mientras tanto las deudas de las masas
crecen hasta hacerse impagables, ante lo cual el Estado asesino
ejecuta la ley de sus amos los ricos. Es el caso del desposedo
propietario de una vivienda en el barrio San Luis de Pereira, quien
le prendi fue-go para impedir la expropiacin por orden de un
banco.
Mientras el sistema financiero llena sus arcas a costa de
desalojos como esos, eje-cutados por las fuerzas del Estado y que
condenar al expropiado a crcel y mul-ta, se mantienen gravmenes
financieros tan infames como el descuento del 4x1000 para
transacciones, las cuotas de manejo en las tarjetas de los
usuarios, los altos impuestos para prstamos, etc.
Para millones de trabajadores en Co-lombia el aumento de su
salario no fue ms del 4.5% ($30.000!), mientras el pa-rsito capital
financiero del que se bene-fician unos cuantos znganos que no
tra-bajan, gan 222,9% ms en un solo ao (aumento de $4,62
billones!). El yugo ms pesado, ms sanguinario, ms explotador del
capitalismo es el capital financiero y esto lo demuestra en
concreto.
Son los monopolios capitalistas y todo su sistema quienes
condenan a la socie-dad a cruentos tormentos, como los de 6,5
millones de hectreas expoliadas a los campesinos en 25 aos de
guerra, que hoy deambulan en un 96% en la pobre-za e indigencia por
todo el pas, mientras los grandes monopolios como Argos ya
compraron sus tierras a precio de huevo; como los miles de despidos
masivos que aumentan sin que las cifras maquilladas del gobierno
puedan ocultar que el desem-pleo en Colombia es de los ms altos de
la estadstica global1 y que el salario de los obreros est entre los
20 ms miserables del mundo2.
Por esto, acabar con el sistema de explo-tacin asalariada es la
misin de la revolu-cin proletaria, porque mientras exista el
capitalismo, aumentar de forma absoluta la miseria, la
superexplotacin y la expro-piacin para los trabajadores.
1 http://www.cid.unal.edu.co/observatorio/pdfs/boletin11.pdf
2
http://www.portafolio.co/finanzaspersonales/colombialos20paisespeoressalariosdelmundo
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23 de Julio de 2014 Semanario Revolucin Obrera 5
LUCHA DE MASAS
La lucha de los obreros sin estabilidad en Colombia es parte de
la que libra la mayora del proletariado a nivel mundial, pues la
poltica de negar contratos indefinidos e intensificar la explotacin
del trabajo asalariado,es uno de los peores azotes del capitalismo
contra la clase obrera en todos los pases. Es el caso de las
trabajadoras de la em-presa Vestimundo S.A., donde la situacin es
infernal; la intensificacin de la jornada est mediada por la
produc-cin de 1600 prendas en un tiempo irracional, que aumen-tada
en 300 prendas actualmente, lo que es prcticamente imposible de
cumplir, y las compaeras son testigos de cmo el bolsillo del patrn
se llena mientras su salario disminuye y aumenta la fatiga.
Esto debe enfrentarse con la tctica de lucha directa y
re-volucionaria de masas, y los trabajadores temporalesdan ejemplo
de cmo hacerlo organizndose para transformar las condiciones a que
son sometidos, recurriendo a la huelga.
Un ejemplo de la organizacin de los trabajadores sin
estabilidad, es el de los compaeros de Coca-Cola Femsa, quienes han
defendido el derecho al contrato y a la perma-nencia en la empresa
con su propia organizacin y lucha, no con la tctica del
sindicalismo burgus de colaborar con los patronos. Sin embargo hoy
se golpea su resisten-cia con despidos en una de las organizaciones
como lo es Asonaltraindega. As lo denuncia un compaero de la
sub-directiva seccional Bogot:El pasado viernes 11 de julio, en las
instalaciones de Industria Nacional de Gaseosas /Coca Cola Femsa,
Bogot Planta Norte, fueron despedidos tres directivos de la
Organizacin sindical ASONALTRAINDEGA, en lo que va corrido del ao
ya son cinco los directivos despedidos por causa de su labor
sindical. Pero a esta ofensiva responden con un mitin y denuncias
circuladas por todos los medios.
Similar situacin atraviesan los trabajadores de la em-presa G4S,
la ms grande en el mundo de seguridad in-tegrada, la cual cuenta
con ingresos de ms de 200 mil millones de pesos. Este monopolio de
origen israel, ha em-prendido una enconada persecucin sindical,
intentando el soborno de quienes se han organizado; pero,
recibiendo el rechazo enrgico de los trabajadores que luchan con su
organizacin sindical contra la violacin de sus derechos.
De otro lado, la descarga de la crisis sobre los traba-jadores
cierra empresas y los lanza a la calle con sus familias, como en
Michellin en 2013 y hoy en PRODEN-VASES CROWN S.A Barranquilla (que
provee envases me-tlicos) donde en julio cierra y despide a cien
obreros, pero donde stos se tomaron las instalaciones de la empresa
para exigir la continuidad en sus puestos de trabajo.
Esa es la actuacin general del capitalismo imperialista en
crisis econmica: superexplotacin, represin y perse-cucin sindical,
todo con el beneplcito y visto bueno el Estado de los capitalistas,
que proclama legalmente las libertades, mientras ejerce una cruenta
dictadura contra la clase obrera en los hechos.
Aprender de ejemplos de luchaEl movimiento obrero, y en
particular el sindical, debe
aprender de la actitud que trabajadores como los de Se-pecol en
la Guajira, los del transporte masivo en Cali, Pe-reira,
Barranquilla, los de Prodenvases Crown S.A, en fin,del ejemplo de
todos quienes, sin confiar en las prome-sas de los patronos, sin
condolerse de sus chillidos ante la crisis, sin temer a la fuerza
militar del Estado y para-militar, enfrentan la situacin con su
propia movilizacin y lucha.
Mientras el sindicalismo burgus llama a los sindica-tos a
colaborar con los patronos en medio de su crisis, a comprometerse
con el gobierno y la paz de los ricos, para dizque aliviar la
situacin de los trabajadores; cuando in-terviene en los conflictos
llamando a realizar y esperar pasivamente a que prosperen las
querellas jurdicas ante los organismos internacionales
imperialistas del trabajo, de derechos humanos internacionales y
los que velan por los derechos constitucionales en Colombia, un
sector del proletariado agrcola como los obreros de Bucarelia,
ubicada en el corregimiento El Pedral, en Puerto Wilches, ensea al
resto de la clase obrera, cul es el camino.
Desde el pasado 21 de junio y en solidaridad con 25 trabajadores
de campo despedidos por su actividad sin-dical, estn en huelga 80
trabajadores de esta empresa, sealada de estar en manos de los
peores bandidos capi-talistas aliados a la mafia y a los
paramilitares.
En voz de uno de los huelguistas: estamos pidiendo el reintegro
de los compaeros que llevan ms de cuatro meses sin trabajar, (desde
el 17 de febrero) porque les dieron el argumento que no tienen nada
qu hacer, porque no hay dnde y mientras tanto tienen a otros
trabajadores haciendo dos funciones, sabiendo una de las funciones
las pueden cumplir los que estn por fuera. Es claro: los
capita-listas con el argumento de la baja produccin y respaldo del
Estado, despiden, debilitan sindicatos e intensifican la
explotacin, ante lo cual el mejor freno es la huelga.
Este sistema y su maquinaria de dominacin funcio-nan
fortaleciendo el poder del capital, no de los derechos de los
desposedos. Es falso que la Constitucin burguesa sea incluyente y
esto lo confirman los miles y miles de obreros hoy despedidos, los
sindicatos hoy asediados, los dirigentes obreros y campesinos
asesinados y amenaza-dos El nico respaldo del movimiento obrero es
su pro-
EL CAPITALISMO INTENSIFICA SU ATAQUE, PERO EL MOVIMIENTO
SINDICAL RESPONDE CON LUCHA
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6 Semanario Revolucin Obrera 23 de Julio de 2014pia lucha y la
unidad por la base, que cuando se hace consciente se vuelve de
acero.
El Estado est presto a autorizar el cierre de plantaciones como
estas y el despido masivo de los obreros, por esto el problema es
de todo el mo-vimientoy hay que enfrentarlo con unidad a nivel
nacional y en medio de la huelga, sumando esta fuerza a la huelga
poltica de masas a nivel na-cional que libra el pueblo colombiano
contra los explotadores. El llamado es a la organizacin de los
obreros sin distingo de contrato, el desarrollo de huelgas en donde
sea posible y de la generali-zacin de las huelgas de solidaridad; a
la iniciativa por parte de los grandes sindicatos como Fecode, Uso,
Sintraelecol, entre otros, para unirse por la base al calor de la
lucha contra la burguesa, no por arriba y para la conciliacin con
el gobierno y los patronos. Solo as la lucha de resistencia ser
parte de la lucha general contra el sistema de ex-plotacin
asalariada.
En Yopal la falta de agua es culpa del capitalismo
Mientras el gobierno central entrega los Llanos Orientales a los
grandes capitalistas para la explo-tacin petrolera indiscriminada y
para los cultivos agroindustriales que se consumen la mayor
canti-dad del agua de la regin, los medios de comuni-cacin al
servicio del capitalismo solo muestran el problema de la falta de
acueducto en Yopal como culpa de unos bandidos funcionarios
regionales, cuando esta es apenas la punta del problema.
Los medios de comunicacin callan la fuerte represin del Esmad
contra la comunidad que se revela justamente contra todos los
proyectos ca-pitalistas que se roban el agua y contra toda la
corrupcin del Estado podrido que los deja sin ningn beneficio
social, mientras su tierra se con-tamina, se vuelve ms desrtica y
aumenta la mi-seria.
Ante esto las masas deben continuar luchando de manera
independiente y revolucionaria, pues ni el gobierno central, ni los
politiqueros, militares, paramilitares o cpulas guerrilleras,
resolvern sus problemas.
Las clases dominantes, sus ejrcitos y Estado solo piensan en los
negocios mientras pasan por encima de los obreros y campesinos,
como lo ha denunciado gente de la comunidad. Por esto las masas
deben seguir presionando con su propia organizacin y lucha y unir
sus reivindicaciones a las generales que pelea el pueblo trabajador
en Colombia. Porque no hay otra manera de obligar a que el Estado
responda y las empresas capitalis-tas respeten a la comunidad y a
los trabajadores.
El capitalismo es un sistema devorador de hombres y destructor
de la naturaleza, por ello hay que acabar con l para suprimir de
raz sus males. Esta es la misin histrica que tiene la cla-se
obrera.
Qu defiende en realidad la ENS en la denuncia al presidente
de
Fesecolda?El 8 de julio fue publicado por la Escuela Nacional
Sindical
(ENS), un artculo en respuesta al presidente de Fesecolda, quien
como vocero de los capitalistas se pronunci el 2 de julio contra
las propuestas de subir los salarios a los traba-jadores por parte
de los candidatos a las pasadas elecciones presidenciales y que
calific de osadas. Propuestas por de-ms demaggicas, pues son
contrarias a las polticas aplica-das por las clases dominantes
durante todos los gobiernos de turno, incluyendo el primer mandato
de Santos, donde por ejemplo se hundi el proyecto de ley que
buscaba por va parlamentaria revivir el anterior sistema de pago de
horas extras, prometido por l pblicamente el 10 de junio en pleno
debate electoral.
La ENS se pronuncia al respecto para propagar su poltica de
conciliacin de clases, criticando a un representante de los
explotadores por exponer sus reales argumentos de no dis-ponerse a
ceder ante el salario, argumentando que deberan aplicar la poltica
que dio xito en los pases europeos, los cuales tienen el menor
nivel de desigualdad entre el salario de los obreros y las
ganancias de los capitalistas. Por dems ran-cios argumentos ahora
cuando Europa se sacude con la peor crisis econmica que haya
sufrido y donde el capital financie-ro es salvado a costa de
millones de despidos, recortes multi-millonarios de beneficios
sociales y rebaja general de salarios.
La ENS calla que es la opresin semicolonial que sufre Co-lombia
como pas capitalista, la que aumenta la brecha entre los pases
imperialistas y los pases oprimidos como ste; no llama por su
nombre al aumento de la cuota de plusvala en Colombia producto de
la superexplotacin del trabajo asala-riado, que se impuso
facilitada por la poltica de conciliacin y concertacin difundidas
por escuelas como esa, que han postrado y reducido al movimiento
sindical a un porcentaje mnimo de los trabajadores en activo.
El salario de los obreros tiene que ser defendido con
in-dependencia de los capitalistas y de manera revolucionaria; esto
es: independiente de los indicadores negativos de su mercado, de la
continuidad de su crisis, de su productividad, de su campaa
electoral, de su poltica laboral, porque a los capitalistas y sus
gobiernos de turno no les interesa sino mantenerlo como fuente de
esclavitud, rebajndolo cada vez que pueden para aumentar sus
abultadas ganancias. Lo que llaman los capitalistas productividad,
no es ms que el au-mento de la plusvala relativa, esto es, de la
intensificacin del grado de explotacin durante la jornada de
trabajo, que desgasta an ms al obrero mientras aumenta las
ganancias de los explotadores.
La fuente de todos los ingresos de la clase obrera es el
sala-rio y por esto debe luchar por mantenerlo valorizado
indepen-dientemente de la crisis econmica de los capitalistas,
porque las consecuencias de este sistema anrquico, no son culpa de
los obreros, que estn sufriendo sus peores consecuencias, siendo
despojados por miles de sus trabajos, incrementando su miseria.
Esta es una denuncia consecuente contra la pol-tica voraz de los
capitalistas.
Lo que hace la ENS por el contrario, es engaar a los
tra-bajadores posando de vocera de los asalariados, clamando a sus
verdaderos amos algo que por la naturaleza este sis-tema no se
puede dar: ceder voluntariamente las ganancias de los explotadores
para hacer ms llevadera la vida de los explotados y as perpetuar el
capitalismo. La nica manera de deshacerse de la ambicin y de todo
el yugo opresor de los expropiadores, es destruyendo
revolucionariamente todo su sistema inhumano, hambreador e injusto,
para sustituirlo por un sistema humano, social y justo para los
trabajadores: el Socialismo.
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23 de Julio de 2014 Semanario Revolucin Obrera 7
Despus de varios das de iniciado el paro, los trabaja-dores de
las empresas GIT masivo y Unimetro, conduc-tores de los buses
articulados, padrones y alimentado-res cansados de los atropellos y
abusos de la empresa y sus funcionarios, tomaron en sus manos las
riendas de su situacin como explotados y oprimidos.
Quizs, por estar agrupados en Sintramasivo, -sindica-to de
industria- e ignorando la importancia de los sindi-catos de base,
inconscientemente dieron la cabida a ellos; tuvieron que crear esta
semana de lucha, seccionales de este sindicato con los trabajadores
de las dos empresas.En cada uno elevando el nivel de lucha han
logrado su-mar a ms trabajadores. Y en medio de un gremio lleno de
hombres, es a una joven mujer a quien los conductores hombres han
designado para que lleve su voz y ponga en alto el papel de la
mujer luchadora, quien se unen hombro a hombro con los varones para
combatir la explotacin.
Estos obreros, aparentemente trabajadores para dos empresas
diferentes, pero que al final sirven a un mismo grupo de
explotadores los grandes capitalistas del mo-nopolio del
transponerte masivo, salieron con valenta a defender sus derechos,
gritaron al unsono La Clase obrera unida, Jams ser vencida!
Y eso son: una clase y en ella se reconocen, como iden-tifican
que el patrn es uno, y que las diferentes empresas que los
contratan no son obstculos para dar la lucha ni alcanzar la unidad
consiente de la clase obrera.El princi-pal enemigo es el patrn
Metrocali, que a diario los repri-me y superexplota, ms aun si han
tomado la decisin de pertenecer al sindicato.
Pero es el diario sufrir, el que forja el duro cuero, y quin
dijo miedo!, cuando hay que defender lo que bien ganado se tiene:
el salario.
A las 8 de la maana estaban citados los ms valientes, los
decididos, los que pararon; algunos con sus familias y as lo
hicieron. La solidaridad no se hizo esperar; un destacamento pequeo
de trabajadores de industria de la caa se hizo presente. Se
esperaba la presencia de traba-jadores de Aim, empresa que
terceriza ante el Metrocali a los trabajadores del aseo, pero estos
estaban ante Aim exigiendo su pago.
La voz de los explotados y oprimidos estaba all, no solo tomando
nota a sus gestos y palabras, intentando llenar sus mentes y
corazones de conciencia revoluciona-ria, sino tambin, sus bocas con
los gritos que claman: Adelante clase obrera adelante con valor hay
que romper las cadenas, de este sistema opresor!; y se hizo suya
esta consigna.
El camino era corto, pero por el sol abrazador, no ha-ba afn en
llegar; lo importante era hacerse escuchar. Y vaya que haba voces,
poco ms de cien obreros mar-chaban por las calles, por las mismas
que a diario re-corren en los vehculos para llevar y traer ms
obreros. Este da llevaban un clamor, una queja; muchas quejas
Concentracin frente a la estacin San Bosco
que liberaban de sus gargantas: Abajo la persecucin laboral de
Metracali!Abajo los Salarios de hambre en metro Cali! Viva la justa
lucha de los Trabajadores de metro Cali! Contra los salarios de
hambre y la superexplotacion en Metrocali; organizacin, movilizacin
y lucha!
Cada grito tuvo su eco y respuesta positiva del pueblo; todo
aquel que preguntaba daba la razn a los obreros luchadores, algunos
exigan,Que paren todos!, y aunque estos aguerridos marchantes
tambin lo exigan, saban que muchos compaeros no lo hacan por miedo.
El pa-trn infunda miedo con sus esbirros, como la mayora no tienen
contrato a trmino fijo los aterrorizan con perder el puesto.
El terror es sistemtico y de eso se cansaron; se cansa-ron de
jornadas laborales que comprometen al trabajador a estar disponible
hasta doce horas al da; se cansaron de tener prohibido descansos
para tomar agua y comer el algo en jornada con turnos de ms de 4
horas seguidas; se cansaron de los acosos y las amenazas del seor
Oscar Marino; se cansaron de rogar que les cancelen los salarios
atrasados; que no paguen las vacaciones y las primas. Se cansaron
de tener que correr con la cuenta de la EPS que debera cancelar el
patrn. Se cansaron de que los capita-listas no consignen el dinero
de las pensiones y las cesan-tas; estn cansados de las promesas de
pago a cuotas, como si ellos trabajaran a cuotas Y han dicho!:el
paro no se levanta hasta que no le cumplan a todos!
Bast que este destacamento de trabajadores se toma-ra las
calles, para que llegaran mensajes anunciando que ya haban pagado,
intentando desmovilizarlos; cosa que no lograron porque ya tienen
experiencia y se han pro-puesto esta vez, que hasta que no cancelen
todo lo que adeudan al 100%, el paro no se levanta.
El recorrido culmin en la plazoleta Jairo Varela, a los pies del
alcalde Rodrigo Guerrero con furiosos gritos, exi-giendo la
presencia de este cmplice de la explotacin en Metrocali para que
responda tambin por los salarios bien ganados de estos obreros.
Fue un buen inicio la alianza para la lucha de entre los
trabajadores de dos empresas que cumplen una misma funcin, para los
mismos explotadores como Vctor Raul-Martnez, dueo de gran parte del
sistema de transporte masivo en Bogot, con inversiones en el mismo
negocio en centro Amrica y que ahora quiere aparece como el
salva-dor de la crisis econmica que atraviesan los dueos de GIT
masivo. Capitalistas como estos encuentran en el Es-tado, el mejor
aliado para actuar contra la clase obrera.
Hacia all deben enfilar sus fuerzas los explotados del monopolio
del transporte; contra el Estado de los capita-listas y sus
instituciones, organizados desde abajo, con-fiando en las fuerzas
de la clase obrera, educando y orga-nizando a las bases; haciendo a
un lado la confianza en la politiquera, practicando el sindicalismo
independiente y revolucionario. Luchando por contratacin directa,
por estabilidad laboral, por mejores salarios. Sindicatos que
contribuyan en la construccin de las federaciones sindi-cales que
den vida a una autentica Central Sindical Re-volucionaria; una que
haga frente a la dispersin de las luchas, que mantiene el
sindicalismo burgus, el mismo que hoy se compromete a ayudar al
gobierno antiobrero, dictador y terrorista de Santos.
Marcharon obstaculizando el carril del MIO
Trabajadores del Sistema de Transporte Masivo
en Cali se Toman las Calles
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8 Semanario Revolucin Obrera 23 de Julio de 2014
ASISTIENDO A LA ASAMBLEA DE LA ASOCIACIN DE
MEDIANOS Y PEQUEOS AGRICULTORES DEL TOLIMA
El lunes 14 de julio distribuidores de Revolucin Obrera se
hicieron presentes en la asamblea de la Asociacin de medianos y
pequeos agricultores, Asoagrarias del Tolima. El recibimiento de la
prensa fue muy motivador; la mayora de los presentes la adquirieron
junto con los folletos que se llevaron, entre ellos, Sobre las
negocia-ciones de paz Cabe agradecer a los compaeros por la
invitacin y el afectuoso reconocimiento a la labor de la
prensa.
La asamblea trascurri exitosamente, con actuacin muy diligente
de sus asistentes y concrecin en los asun-tos; se resalta la forma
correcta como se trataron las con-tradicciones y la calidad de las
intervenciones; lo que re-flej independencia de clase y conciencia
sobre el carcter del Estado.
Cuando finaliz el evento, los compaeros nos permi-tieron conocer
ms sobre su historia y grado de organi-zacin. Supimos que su
asociacin ha logrado permane-cer firme y con tendencia al alza
durante los ltimos 38 aos (fundada el 8 marzo de 1976). Tambin
supimos que cuentan con 400 afiliados y con una capacidad de
influen-cia y movilizacin que pusieron a prueba en el anterior Paro
Campesino del 2013, donde movilizaron alrededor de 7000 personas
entre Cajamarca, Ibagu y sus alrededo-res. En dicho Paro rompieron
la pasividad de las carpas y cambuches, movilizando sus fuerzas
hacia las calles y ca-rreteras, logrando bloquear la va La lnea
(carretera entre Ibagu y Armenia, paso obligado de Cali o
Buenaventura a Bogot) durante 5das, pero como no es de extraar los
medios burgueses y reaccionarios no hicieron cubrimien-to de los
hechos. De paso, los compaeros denunciaron que durante el Paro
varios dirigentes fueron perseguidos y acorralados por las fuerzas
represivas oficiales del Estado y les dispararon a matar, por lo
que se vieron obligados a tirarse por un despeadero resultando
heridos y hos-pitalizados por varios das. En este ltimo Paro de
2014 los compaeros desafortunadamente decidieron no parti-cipar
pues a pesar de su excelente actuacin, en el ante-rior se sintieron
discriminados, por decirlo en sus propias palabras, por los
dirigentes de otras organizaciones.
Un muestra de su buena organizacin es que cuentan con su propia
sede, un lote que piensan destinarlo para una granja experimental,
y un mercado campesino. Entre todas sus luchas, se destaca
especialmente la toma de obras pblicas, exigiendo el mejoramiento
de las vas, la toma de la catedral en 1986, donde lograron con la
movi-lizacin tumbar un decreto que los obligaba a entrar sus
prodcutos a partir de ciertas zonas solo en zorras; la toma de las
oficinas de El Tiempo, donde lograron una negocia-
cin sin retaliaciones y la liberacin de varios compae-ros,
algunos retenidos con anterioridad. Un importante logro es que han
luchado con xito contra las mafias que queran imponerse en el
mercado, poniendo dos muer-tos de su movimiento, que este peridico
se hace vocero de su reivindicacin por parte de los campesinos,
como: Alexander Giral asesinado por el cartel del tomate y Jess
Antonio Beltrn Martneza manos del cartel del cilantro. Lucha
exitosa por cuanto impidieron con su movilizacin y organizacin
tener tal vez la nica plaza sin intervencin de mafias en el
pas.
Estos compaeros han vivido y conocen de cerca el bu-rocratismo,
la corrupcin, el arribismo y la discriminacin de los jefes de las
Centrales sindicales en Colombia, a las que decidieron renunciar
pues se sentan usados cuando los necesitaban, pero discriminados
cuando no combina-ban con la etiqueta, o cuando en los eventos, sus
viticos eran de almuerzos de mil pesos, hoteles humildes y
reti-rados, mientras esos dirigentes viaticaban hasta con sus
amantes y se emborrachaban con los recursos comunes.
Los compaeros son un ejemplo de lucha, independen-cia y firmeza;
son la prueba de que s hay con quien; de que el pueblo organizado
es muy firme. La longevidad y vigorosidad de su organizacin son una
prueba de que el problema no es que el pueblo no quiera luchar,
sino que el proletariado no cuenta con su destacamento de
vanguar-dia: el partido poltico de la clase obrera, contrario a los
politiqueros que representan los intereses de las clases
dominantes, engaando al pueblo como lo han hecho con los
campesinos; un Partido iluminado por un Programa revolucionario,
que exprese los intereses de los obreros y campesinos; por todo
ello este Partido debe ser indepen-diente de las clases dominantes,
del Estado, de sus par-tidos burgueses y pequeo burgueses. Una
organizacin as es la nica que puede garantizar realmente la alianza
obrero campesina para la lucha y avanzar en la prepara-cin de la
Huelga poltica de masas en todo el pas, con la participacin de un
sector mayoritario de los obreros y campesinos, como la nica
solucin para resolver todos los problemas inmediatos de las masas y
avanzar hacia la transformacin social y poltica.
Es falso lo que dicen algunos revolucionarios, que no hay con
quien luchar; hay miles de campesinos que estn dispuestos y muchos
ms de proletarios en las ciudades para unirlos, organizarlos,
orientarlos y dirigirlos en la lucha por sus reivindicaciones
inmediatas y futuras; los campesinos han sido ejemplo de ello, lo
que han encon-trado por parte de algunos dirigentes es la
discriminacin como asi lo denunciaron estos compaeros.
El llamado es a que sigan desarrollando su organiza-cin, a que
estrechen lazos de unidad con la clase obrera y a que aporten un
granito de arena a la construccin del Partido Comunista
Revolucionario de Colombia, pues son los sindicatos, asociaciones,
comits y dems formas or-ganizativas de nuestra clase, los futuros
soviets del Esta-do Socialista, que como rganos de direccin
administren y ejecuten la dictadura del Proletariado. Es a
continuar con la movilizacin y lucha que son las nicas armas
efec-tivas para debilitar y arrancar sus derechos a este Estado de
los explotadores; a no dejarse desmovilizar por las di-recciones
oportunistas, politiqueras y entreguistas, y por el contrario a
desarrollar su influencia en las masas y en las bases para seguir
enfrentndose a este Estado de los explotadores en alianza con los
obreros de la ciudad.
Por la construccin del Partido del Proletariadomarxista
leninista maosta en Colombia!
Viva la Alianza obrero-campesina!Distribuidor de Ibagu
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23 de Julio de 2014 Semanario Revolucin Obrera 9
El pasado 16 de julio en la playa de Gaza, la Marina del Estado
genocida de Israel masacr con sus misiles a cuatro nios que se
encontraban jugando junto con otros doce compaeritos, que
resultaron gravemente heridos despus de que sus cuatro amigos
quedaran destrozados sobre la arena. Estas muertes a manos del
Estado sionista de Israel hacen parte de su poltica de agresin
contra el pueblo Palestino, que en esta nueva ofensiva terrorista
iniciada el 8 de julio y denominada operacin Margen Protector, al
cierre de este nmero ha dejado ms de 5800 palestinos muertos un
poco ms del 75% de ellos eran civiles- y ms de 3300 he-ridos. Del
total de asesinados en este genocidio contra el pueblo palestino
una gran parte fueron nios, muje-res y ancianos, lo que configura
de lejos una masacre financiada principalmente por el imperialismo
yanqui que en compaa de otras potencias auspici y financi la
creacin del Estado de Israel en 1948 en la Palesti-na histrica,
para constituir una plataforma desde la cual pudieran dominar
militarmente el Medio Oriente. La ONU como organizacin defensora de
los burgueses derechos humanos, fue la encargada de crear dicho
Estado, justificndose en la tragedia sufrida por el pue-blo de
Israel bajo el nazismo alemn. Una canallada propia de los
imperialistas que se escudaron en la tra-gedia de un pueblo para
crear un Estado ttere y reac-cionario a costa de desplazar y
condenar a una brutal represin al pueblo palestino.
Este nuevo genocidio se configura como una nueva agresin dentro
de la poltica de acabar con Gaza, ba-sados ideolgicamente en las
reaccionarias ideas sio-nistas de Israel, pero principalmente en
los intereses econmicos y polticos del imperialismo
estadouniden-se. Para destruir la sociedad Palestina no basta con
acorralarlos y confinarlos en un reducido pedazo de tierra. Con la
excusa de combatir el terrorismo de la resistencia palestina, el
imperialismo estadounidense Israel y su perro guardin, no han
cesado sus brutales ataques contra los hospitales, centrales
elctricas, de agua, tneles, plataforma urbana, museos, archivos,
escuelas, mercadostodo en la lnea de consolidar por medio de su
brutalidad militar el poder imperialista en la regin.
Para que no quede duda de la paternidad estadouni-dense sobre el
Estado de Israel, basta recordar que el genocida primer ministro
israel, Benjamin Netanyahu, vivi y estudi en los Estados Unidos,
convirtindose en el ttere de los gringos para controlar esta regin.
El actual Ministro de relaciones Exteriores, Avigdor Lie-berman,
encarna el ala ms de derecha del gobierno israel, reconocido por
sus posturas racistas y anti-ra-bes, y es el encargado de liderar
esta nueva agresin contra Palestina. Sus intereses desde siempre
han sido apoderarse de la Franja de Gaza, pues simboliza el ala ms
radical del sionismo.
Ante este crimen contra un pueblo que no posee ni siquiera un
ejrcito organizado y que ha encontrado en
Hamas una tctica de ataques que no le causan el ma-yor dao a
Israel, las masas populares del mundo se han pronunciado en contra
del genocidio que se est cometiendo en territorio Palestino. En
Colombia se han realizado mtines de rechazo a esta cobarde agresin
en Bogot y Cali, en los cuales luchadores han condenado la agresin
imperialista. Valerosos actos que le hacen saber a los
imperialistas estadounidenses y a su perro de presa en el Medio
Oriente, Israel, que los palestinos no estn solos; que sus cobardes
ataques no son justi-ficados por la gran mayora de las masas a
nivel mun-dial, que no tragan entero de su tal lucha contra el
terrorismo, pues con esta excusa han invadido y sub-yugado pueblos,
pases y naciones enteras, escondien-do sus verdaderos intereses
capitalistas de apropiarse de territorios y fuentes de riqueza
naturales.
Israel invadi Cisjordania y Gaza, por lo tanto se tra-ta de
territorio palestino ocupado: no se trata de un lu-gar comn, ni en
disputa como afirman los asesinos expropiadores. Los asentamientos
israelitas en estos territorios, son de ms de 460.000 colonos
invasores y que Israel irnicamente ha llamado asentamientos,
velando con este trmino que se trata de poblacin is-raelita que
este Estado ha transferido a territorio ocu-pado mediante el
sacrificio de miles de palestinos. Se trata de tierras regadas con
sangre palestina. Israel justifica un muro que ayuda a arrinconar a
los Pales-tinos con la excusa leguleya de que es para proteger sus
asentamientos, que si nos trasladamos al mbito de la formalidad
democrtica burguesa, son producto de una agresin de ocupacin, lo
cual ante lo que pro-claman los organismos imperialistas como la
ONU, la agresin, los asentamientos, y por supuesto el muro, son
ilegales. Sin embargo, la ley burguesa es un con-junto de normas y
leyes que garantizan la igualdad solo en el papel, en la
formalidad; y en los hechos, como en este caso, es sirviente de los
intereses del capital imperialista que somete a la tortura,
desalojo, muerte, hambre y terror a un pueblo inocente.
Esta agresin solo podr ser detenida en la medida que como parte
del Movimiento Comunista Internacio-nal, los marxistas leninistas
maostas agrupen y orga-nicen las fuerzas revolucionarias de la
sociedad para li-brar una verdadera guerra popular contra la
burguesa israel y los imperialistas de todo tipo; que haga
retro-ceder a los reaccionarios en su afn de conquistar nue-vos
mercados y fuentes de materias primasa costa de la muerte de
millones de personas a nivel mundial. Solo la Revolucin Proletaria
Mundial podr detener esta carni-cera humana, porquederrocara el
poder poltico de los parsitos burgueses, terratenientes e
imperialistas y con l la explotacin y la opresin, instaurando en su
lugar la Dictadura del Proletariado, nica capaz de estable-cer la
solidaridad y cooperacin de todos los pueblos del mundo, porque la
ganancia no estar al mando.
INTERNACIONALATRS LA AGRESIN IMPERIALISTA SOBRE PALESTINA
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10 Semanario Revolucin Obrera 23 de Julio de 2014
En Marzo la Pennsula de Crimea fue anexionada a Ru-sia y en
Donetsk y Lugansk se realizaron referendos el 4 de mayo, donde ms
del 90% de la poblacin aprob la separacin de Ucrania; luego de
ello, el 26 de junio, fue declarada la creacin de la Unin de las
Repblicas Popu-lares de Donetsk y Lugansk como un estado de
derecho, democrtico, confederal, segn el texto aprobado por los
Parlamentos de los 2 Estados constituidos; una lucha que fue
causada por la accin de los imperialistas de Estados Unidos y la
Unin Europea, quien en una abierta intro-misin provocaron una
desestabilizacin que culmin con la imposicin de un gobierno ttere
de sus intereses, y en abierta contradiccin con el imperialismo
ruso. La ola de persecucin y muerte contra todo lo que vaya en
contra de EU y la Unin Europea se desencaden y ello motiv una
movilizacin en todos los rdenes provocando que hoy se viva una
guerra que deja cerca de 500 civiles muertos y ms de 1300 heridos
segn las cifras que los medios de comunicacin registran en 3 meses
de combates entre el ejrcito de Ucrania y las fuerzas que luchan
por indepen-dizarse y crear Repblicas autnomas. Una suma que ha
crecido por el asesinato miserable de 295 personas que viajaban en
el avin de Malaysia Airlines y que todo indica que fue derribado
mediante un impacto de misil.
Un enjambre de contradicciones hay en lo que sucede en Ucrania.
De una parte los imperialistas imponen una guerra en un pas
oprimido producto de sus intereses ex-pansionistas tanto de control
territorial como de fuertes apetitos econmicos; las garras de los
reaccionarios se clavan en esta zona para disputarse regiones, y en
este caso, para pelearle a los rusos una parte de su influencia.
Por otro lado las masas al verse envueltas en esta disputa, buscan
el camino de la lucha revolucionaria, y creando de 2 Repblicas
Autnomas con claro inters de avan-zar por la senda ya conocida de
la revolucin proletaria y exigiendo, no solo la independencia del
reaccionario go-bierno central, sino el desarrollo de medidas
econmicas, polticas y sociales que lleven a un poder verdaderamente
de las masas armadas. Como otro factor, este camino se da en medio
de una unidad obligada con sectores demo-crtico-burgueses,
liberales, conservadores, y de falsa iz-quierda que ante la
exigencia de las masas se vuelven un palo en la rueda del camino
revolucionario surgido espon-tneamente del clamor popular. Y el
otro, el ms compli-cado, la ausencia de una vanguardia
revolucionaria, del Partido Poltico de la Clase Obrera, que sea
capaz de po-nerla como clase, no solo al frente de la lucha, sino
como vanguardia consciente que garantice un Programa y una Tctica
acertadas.
En varios pases del mundo esta lucha ha generado un importante
movimiento de apoyo a las masas que com-baten contra la opresin,
contra la el fascismo y por una verdadera liberacin. Sin embargo,
ninguno de los facto-res mencionados puede dejarse de lado, so pena
de caer en una valoracin equivocada de la situacin y sobre todo de
las perspectivas.
Entre los imperialistas, definitiva y categricamente no hay el
menos malo. Todos son enemigos acrrimos de la lucha de las masas y
por ningn motivo puede hacerse una alianza con alguno de ellos; ni
tcita ni expresa. No es extrao que los imperialistas rusos metan
las manos,
pero sobre todo sus armas en diversas regiones para po-ner la
cua que aprete a sus contradictores, sobre todo a la Unin Europea y
a los yanquis. Fue eso mismo lo que hicieron en Georgia para azuzar
y apoyar la indepen-dencia de Osetia del Sur en las dcadas 80 y 90
del siglo pasado; y todo para qu? Para poner all un gobierno t-tere
sobre regiones que otrora estuvieron fraternalmente unidas en la
antigua y revolucionaria Unin Sovitica. Y no debe caber duda
alguna, esa es la intencin ahora en Ucrania, as lo hicieron en la
Pennsula de Crimea y es lo mismo en el resto del territorio.
La participacin de sectores de derecha en las fuerzas que luchan
contra los gringos y la Unin Europea no solo es un hecho, sino que
es ampliamente peligroso, situa-cin que tienen que enfrentar en las
propias estructuras de la Unin de Repblicas Populares, donde, en
lugar de empujar hacia la revolucin, se dedican a hacer lobbies con
la prensa rusa y poner todo tipo de talanqueras para lo que exigen
las masas; son las fichas del imperialismo ruso en las fuerzas
revolucionarias. Con ellos, la lucha por la direccin es absoluta y
al final, es a muerte.
La opresin genera resistencia, es una verdad de apu-o confirmada
por miles en la historia de la humanidad; pero tambin es cierto que
no es suficiente con la rebelda para garantizar una direccin
revolucionaria. Las masas en Ucrania estn llevando a cabo una
proeza al levantarse contra la opresiny alzarse en armas contra el
fascismo y toda la poltica del gobierno ttere que han impuesto los
Estados Unidos y la Unin Europea; pero, lamentable-mente las masas
de ese pas no cuentan con una fuerte direccin revolucionaria; no
est el Partido Poltico de la Clase Obrera, nica organizacin capaz
de garantizar una correcta, firme y permanente direccin a la lucha
de las masas por el poder poltico. Y esa realidad, es tan
lamen-table como cierta; lo que hace que la construccin de ese
destacamento se convierta en la tarea ms importante de los
comunistas revolucionario hoy. Avanzar en la cons-truccin de ese
Partido en medio de la Guerra es sin duda el mayor aporte que
pueden y deben hacer los comunistas a esta entramada situacin que
se vive hoy en Ucrania.
De ah, que para la lucha en Ucrania, la tarea principal por la
que debemos empujar los comunistas y revolucio-narios en todo el
mundo no es el impulso de un frente antifascista, que de hecho ya
est caminando sin la parti-cipacin de los marxistas leninistas
maostas. Un frente, es una alianza de clases donde la direccin la
gana quien est mejor preparado con un claro Programa y una tcti-ca,
acompaado de una mejor organizacin, es decir con un Partido
cohesionado y capaz de imponer los intereses de la clase a la que
represente. Luchar con independencia de clase es una obligacin de
los comunistas en cualquier parte del mundo, so pena de terminar
llevando a las ma-sas a convertirse en simples instrumentos de
otras clases que no estn interesadas en una lucha frontal y
decidida contra el capitalismo imperialista; y esa obligada
respon-sabilidad en Ucrania se concreta en avanzar en la
cons-truccin del Partido. Sobre la base de esta tarea principal,
desarrollar todo el trabajo posible en apoyo a la lucha del pueblo
ucraniano contra el imperialismo, contra el capi-talismo y por el
triunfo de la Revolucin Proletaria en las condiciones concretas de
ese pas.
F u e r a I m p e r i a l i s t a s d e U c r a n i aSe necesita
con urgencia construir el Partido para la Revolucin
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23 de Julio de 2014 Semanario Revolucin Obrera 11
Continuando con nuestro en-cuentro con un grupo comunista de
base en Venezuela Por qu no se habla de la revolucin en la India,
de los maostas o de las guerras popu-lares en Turqua o Filipinas
dentro de los autodenominados comunis-tas en ambos lados de la
frontera?
Ignorar y omitir procesos revolu-cionarios, algunos de ellos con
ms de 4 dcadas, no constituye una violacin al principio del
Internacio-nalismo Proletario? Los compaeros J. y G. nunca
encontraron respuesta a sus inquietudes al respecto de las Guerras
Populares. Su Partido no est articulado con otras corrientes
internacionales que apoyan estos procesos as en las palabras
aparez-can ante los ojos del blog Odio de Clase del Estado Espaol
como re-volucionarios. El internacionalismo que promueven los
dirigentes co-munistas en Venezuela se limita a Partidos como el
Socialista de Chile, encabezado por Michelle Bachelet, o el Partido
de los Trabajadores de Brasil, dirigido por Dilma Ruosseff,
organizaciones que como el PSUV han renunciado al papel de
van-guardia de la revolucin proletaria para rebajarse al nivel de
un Partido de reformas burguesas, renegando de los fundamentos
marxistas y la violencia revolucionaria para inte-grarse al Estado
como funcionarios y administradores de los negocios de la burguesa.
Al comparar la teora revolucionaria con las prctica partidaria que
defiende el proceso reformista del Estado burgus bajo el gobierno
chavista, hemos sido muy crticos. Pero no hemos sido los nicos, por
el contrario la coartacin de la democracia y el maltrato por parte
de los dirigentes intermedios que actan autoritariamente son motivo
permanente de malestar en la base. El resultado ha sido el
aislamiento y las expulsiones arbitrarias de muchos revolucionarios
y la promocin de aquellos cuadros que se caracterizan por la
disciplina ciega sin crtica., dicen los compaeros.
No es serio considerar un Partido como revolucionario cuando
pisotea el Centralismo Democrtico y el In-ternacionalismo
Proletario. Sin em-bargo aun hay personas que consi-deran que en
Venezuela realmente hay una revolucin. Pero como si
faltaran pruebas de ello, los compa-eros contaron algunos casos
par-ticulares de camaradas, como para no creer: S, las expulsiones
han sido muchas, muchas ms las deserciones, porque una vez que se
identifican los problemticos se les prohbe movilizarse fuera del
regional sin autorizacin, reunirse o comunicarse de cualquier
manera con otras clulas o compaeros de otras organizaciones por
considerarlo: actividad no orgnica. Tal situacin nos re-cuerda la
denuncia de los marxis-tas leninistas de los 70s contra la
camarilla revisionista del Partido Comunista Colombiano cuando se
converta el centralismo en garrote disciplinario para preservar sus
posiciones burocrticas y estimulaba la prctica del democraterismo
en la base convirtiendo la discusin interna en charlatanera sin
principios En un Partido de corte burgus, la vida organizativa se
hace un cerco tedioso y paralizante. Y en una de-mocracia con
libertades amplias en comparacin con sus vecinos, don-de el propio
gobierno chavista pro-mueve la instruccin militar en po-lgono, es
el Partido Comunista el gendarme de sus propias bases cas-tigando
con expulsin los militantes que participan en una actividad
re-volucionaria legal!
Si en el PCV llueve, no escampa en el PSUV. Oigamos un poco lo
que claman sus militantes: Luego, aunque ya son muchos milagros
juntos y tan grandes; pedira crear un Partido Revolucionario porque
el PSUV no lo es. No es muy revolucionario servir de loro y repetir
consignas que
van hacindose vacas. Por supuesto este Partido no utilizara
propagandsticamente la figura de Chvez, Bolvar, Zamora, Simn
Rodrguez. Usara sus ideas y adems le echara un ojo a las ideas
marxistas, que es bueno recordar, se tiraron en el cesto de la
basura desde hace ya mucho tiempo. escribe Claudio Do-minguez, en
el artculo Dividimos al PSUV o lo abandonamos? En la pgina Aporrea.
En los meses pa-sados la Corriente Marxista de este Partido exigi
dejar de hablar tanto de milicias y armarlas efectivamen-te en vez
de arrumar en los canto-nes los fusiles mientras matan
revo-lucionarios en las calles.
No conviene a los comunistas y socialistas del siglo XXI
permitir el pensamiento crtico marxista, el armamento del pueblo ni
la propa-gacin entre las clulas del marxis-mo, porque pone en
riesgo su in-fluencia basada en ideas obsoletas y dbiles como las
de Bolvar. Por-que para todo aquel que comprenda mnimamente el
marxismo, que lee, fcil es identificar en pocas pgi-nas si su
organizacin es marxista o slo finge serlo. Por esto no pue-den
pasar de incautos compaeros como los de Odio de Clase, que por
algunas palabras y declaraciones li-brescas de este tipo de
partidos, los confunden con organizaciones au-tnticamente
revolucionarias. Sin embargo, si queda duda, habra que preguntarles
a los seores del PSV o del PSUV su postura acerca del Partido
Comunista de la India (M) y las guerras populares alrededor del
mundo, la dictadura del proletaria-do y la violencia
revolucionaria.
En las Bases Revolucionarias Venezolanasla Rebelin est al Rojo
Vivo
Ese Partido [El PSV], se hace el de la vista gorda frente a las
contradicciones internas, ataca a los camaradas de base y se le
desprestigia al ser crticos, titubea frente a la situacin poltica
nacional y no tiene firmeza revolucionaria frente al reformismo
recalcitrante del Gobierno Nacional, no es en realidad la
vanguardia de la clase obrera ni mucho menos representa sus
intereses, se burocratiza en las instituciones del Estado, tiene
relaciones internacionales con partidos revisionistas como el de
Chile y Colombia, no menciona ni combate el revisionismo en ninguno
de sus documentos, no se propone la Revolucin Proletaria ni la
Dictadura del Proletariado, solo persigue reformas dentro del marco
del Estado burgus y se ofrece como opcin revolucionaria frente a la
ineficiencia del gobierno actual.
Militante de Base
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12 Semanario Revolucin Obrera 23 de Julio de 2014
CONSTRUYENDO EL PARTIDO
Bono de Apoyo$20.00
0Reserve por adelantado estos dos importantes documentos que
estn en proceso de edicin
El Primero, la cuarta edicin del Programa para la Revo-lucin en
Colombia. El segundo, una parte importante de la lucha de lineas en
el Movimiento Comunista en Colombia, que empuja el trabajo hacia la
Construccin del Partido del Proletariado en este pas.
Esa que me acogi como un nio deformado por el revisionismo y el
machismo, y que con camaradera dialctica ha tratado de ensearme y
redireccionarme, pero yo como mal hijo he sido lerdo y
vacilante.
Esa madre firme como ninguno, que ha renunciado a su vida, a su
familia, a las aspiraciones pequeo burguesas que muchos de nosotros
no hemos podido renunciar,
Esa madre que no ha credo en ese concepto de familia pequeo
burguesa perfecta que nos vende el sistema, pero si cree en una
familia ms amplia y elevada: la familia de los obreros y
campesinos.
Esa madre que duerme en el piso cobijada apenas por la sombra de
un rbol para acompaar a los indgenas, a los campesinos y a los
obreros. Esa madre que en la huelga, en el mitin o en la marcha,
toma la iniciativa en el trabajo y al frente pone el
Para mi Madre Poltica: una Rosa RojaA nuestra rosa roja
La siguiente es una valoracin y reconocimiento por parte de un
unionista de base, a las valiosas mujeres militantes de esta
organizacin, que cual roca firme de este proceso de construccin del
Partido de la Clase Obrera en Colombia, son invaluables. En estos
mo-mentos esta organizacin desarrolla el Segundo Mo
vimiento contra las Manifestaciones de Opresin a la Mujer en
nuestras filas y encuentra en este reconoci-miento una magnfica
ocasin para llevar a las masas esta campaa, avivar la lucha y
contribuir a deste-rrar las manifestaciones de machismo en el seno
de la Unin.
pecho, a su vez siendo la ltima a la hora de la comida y el
descanso. Con apenas pestaazos de sueo, duchada por alguna
llovizna, primera en la fila, sigue la lucha al otro da, mientras
muchos de nosotros si acaso sacrificamos una hora a la semana para
jugar a ser unionista.
Esa madre que, s, es verdad, a veces se pasa por alto la
organizacin; a veces improvisa; a veces no logra concretar su
trabajo. S, a veces, algunas son esas mismas veces, que por nuestra
poca diligencia la deja sola o la retrasa; algunas veces que
nosotros no la acompaamos y no aguantamos su ritmo, y que no
tenemos la capacidad de concretar su trabajo; algunas veces que se
nos olvida que hay especializaciones y que nadie lo puede ser en
todo. Algunas veces que no vemos su mpetu como una invitacin para
acompaarla y cubrir sus lados flojos. Pero a veces, solo a veces,
la crtica es justa.
Querida y amada por nuestra clase, inquebrantable por el
derrotismo de los intelectuales y por los ataques, muchas veces
justos, de los que no tenemos su ritmo; si que nuestra rosa roja
trabajando y estudiando por refinarse.
Una rosa roja tan liviana, pero incansable y firme, pesa ms que
muchos intelectuales juntos.
Sin estas rosas de roca no estaramos donde estamos, ni podramos
seguir, ni construir Partido; no podramos ni mereceramos dirigir
una nueva sociedad.
Para mi madre poltica: una rosa roja
