“La vida es un camino fascinante”

1Septiembre 2009

38 Septiembre 2009

Entrevista » de la A a la Z

Ha transitado los caminos del periodismo, la poesía y la gestión cultural, marcada siempre por las palabras. Aquí, por primera vez en 45 años, Rosa Amelia Alvarado Roca acepta hablar de ella misma en las páginas de Hogar, la revista que fundó en 1964 y que continúa siendo uno de sus más grandes amores.

“La vida es un camino fascinante”

AMELIA - AMORImposible escoger tan solo una pala-bra con esta letra. Es que AMELIA es el nombre de mi madre, que representa la esencia de la ternura y me recuerda a la vez, esa ausencia fresca que duele hacia adentro, pues estoy convencida que la partida de una madre siempre será prematura. ¿Y el AMOR? –con mayúscula- , como lo digo en un poe-ma “el amor tiene algo, yo no se”, sin lo cual la vida carece de sentido y en

mi caso, ha llenado cada minuto de mi trajinar existencial; he amado y he sido amada, es el canto de todos mis poemas y siempre he sostenido que “el amor es un oficio que se ejerce con la yema de los dedos”.

BOHEMIA Hay una etapa de mi vida que no se compra, ni se vende, cuando la vida baila en la palma de la mano, tiempo de vino, amores, amigos, juventud y can-ciones para abrigar el alma. Esa BOHE-MIA donde uno se convierte en el desfa-cedor de todos los entuertos y donde no hay cabida sino para ese minuto fugaz de felicidad.

CASA - CASERONLa vieja CASA familiar es mi refugio, mi bitácora existencial, allí está mi identi-dad, mis recuerdos y de ella proviene mi fortaleza; es una casa que cuenta historias, no es un espectro inanimado, tiene vida, tiene sus misterios y tiene sus grandezas.

DIOSLa búsqueda de DIOS es algo que no termina nunca, pero siempre he creído que no hay que buscarlo en los templos de pan de oro o en oraciones estereo-tipadas, allí no lo he encontrado sino dentro de cada ser humano, en el per-

Coordinación de texto: María Gabriela Gálvez Vera. Producción fotográgica: Gianna Ode y Wendy Salazar. Escenografía: Julio Tomalá

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“Nunca he sido afecta a los reconocimientos, siempre huí de ellos y ahora que me buscan,

me abruman, pues no creo haber hecho nada importante…”

dón y en la humildad, en el amor, en la solidaridad humana, en la inocencia y en el rostro de un niño. Ese es el DIOS ecuménico que me enseñó a conocer Pepe Gómez.

ESCRIBIRSiento que mi vida está ligada a la pala-bra, que ella me lleva de la mano, creo que desde siempre. Escribo porque necesito hablar en voz alta, como un grito que viene desde muy adentro, de hecho, escribo poesía para que ella hable por mí, es mi voz, son muchas voces. ESCRIBIR es un estado de libertad absoluta.

FELICIDAD La FELICIDAD es un espacio metafísico que viene en oleadas, que a veces resulta esquiva o somos muy ciegos para reco-nocerla. Hay que saber que está allí y paladearla, como un buen vino. Con-migo ha jugado al gato y al ratón, pero haciendo un balance final, puedo asegu-rar que ha sido una buena compañera, y hoy, en esta etapa de serenidad en que me encuentro, no pienso dejarla ir.

GUAYAQUILSiento que esta ciudad junto al río es parte de mi misma, aquí están mis raí-ces, mis pasiones y mis querencias, es el lugar de mis encuentros y desencuen-tros, es ese espacio donde moraré por siempre, antes y después de la vida.

HOGARLa revista HOGAR y yo crecimos juntas, nos enamoramos juntas, aprendimos juntas y envejecimos juntas. Es un amor viejo que hoy llega a sus 45 años, para mí, es una razón de vida, es el principio de todo, junto a Hogar soy lo que soy, un ser humano idealista, a veces ilusa, pero convencida que la palabra es un enorme compromiso; creo haberla usa-do responsablemente.

INSOMNIOLas noches pueden ser largas, con silen-cios taladrantes, cuando el INSOMNIO me acosa con frecuencia, como para obligarme a dialogar conmigo misma. Son horas de desvelo, donde la loca de la casa galopa sin detenerse, es el momento para escribir y buscar res-puestas.

JAMASHay palabras que sobrecogen por profundas, yo le temo a la palabra JAMÁS, es demasiado definitiva, es como el fin de todas las cosas, como si no dejara lugar para la esperanza. Es una palabra honda como un pozo, que no tiene colores , ni matices. Me asusta.

LIBERTADHe sido tan libre, que no puedo conce-bir vivir de otro modo. Sin LIBERTAD no se escucha el canto, nos moriríamos de tanto silencio; alguna vez dije, que sin

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Entrevista » de la A a la Z

>> Rosa Amelia Alvarado nació

en Guayaquil y se educó en París,

especializándose en Literatura Francesa y

Filosofía.

>> Es la Directora Fundadora de la revista

Hogar, publicación que este mes cumple

45 años.

>> Desde 1967 a 1972 también ejerció

funciones de producción televisiva en Canal

2, Ecuavisa.

>> Fue integrante del grupo teatral

Guayacanes.

>> Ha publicado 7 libros, entre los que

se destacan los poemarios “Canciones sin

tiempo” (1984), “El silencio de las palabras”

(2003),” Hilaré mi nostalgia” (2005) y “Arena

Blanca” (2007).

>> Es la Predidenta de la Casa de la Cultura

Ecuatoriana, Núcleo del Guayas, desde

agosto de 2008.

>> Ha recibido varias condecoraciones,

entre las que se cuentan la Orden Nacional

“Al Mérito”, otorgada por el gobierno

nacional en el 2006.

>> Se puede acceder a su obra a través de

la página web rosaameliaalvaradoroca.com

libertad el gorrión pierde sus alas, ojalá que ello no suceda nunca.

EL MAR SE ENROSCO A MI CUELLOCuán poderoso es este MAR que viene a la orilla a pescar sus recuerdos, siento que he nacido desde el fondo de sus misterios; el mar me sobrecoge y me subyuga, él conoce mis secretos y yo conozco sus cuitas viejas. Soy la rosa de agua, que renace siempre desde la gran tumba verde del mar.

NOTORIEDADNunca he sido afecta a los reconoci-mientos, siempre huí de ellos y ahora

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Entrevista » de la A a la Z

que me buscan, me abruman, pues no creo haber hecho nada importante, tan solo he tratado de no ser indiferente a la vida y sus complejidades.

OCTAVIO PAZLa influencia de escritores, indudable-mente van marcando huellas en este hermoso oficio de escribir y hay tanta belleza en la poesía de Paz, que siento que su ars poetica ha estado muy cerca de mi quehacer literario; él me enseñó a “soñar en voz alta y cantar hasta que el canto eche raíces” y también a que había que “desenterrar la palabra perdi-da, a soñar hacia dentro y hacia fuera”.

POESIAEl poeta es un payador de las cosas que vienen alma adentro. Mi POESÍA rosa-meliana, como la calificó Ignacio Rueda, cuenta mi vida toda, cantada con sabor a mar, pasión y saudades. Es el silencio de las palabras, con el que fui hilando nostalgias sobre la arena blanca, más allá de la rosa. La poesía ha dado un nuevo sentido a mi vida.

QUO VADIS ROSA AMELIAPienso que he llegado donde no pensé llegar, que hice más de lo que me pro-puse, no creo tener nada pendiente, a lo mejor tan solo escribir un epitafio, a lo mejor simplemente cultivar una rosa blanca.

ROSA BLANCAMe identifico con la ROSA, pues así describo la vida, con su grandeza y su

fragilidad; la ROSA crece hermosa y nos llena de armonías, para luego, doblar la cerviz y volver a la tiera, igual que la vida.

SENTIDO DE HUMORNo me agrada lo innecesariamente solemne, lo abrumadoramente formal, la vida de por sí es demasiado seria, para tomarla en serio. Me gusta reir, a veces hasta de mí misma y me gusta la gente que sabe reir.

TEATROPipo Martínez me hizo partícipe de una pasión: el teatro y es algo que significó una parte importante de mi vida. Con Pipo pude saborear y vivir la magia de recrear la vida sobre un escenario y con él pude conocer una amistad que no muere con la muerte; a Pipo lo extraña-ré toda la vida.

U LA LÁMi vida transitó brevemente por París, pero algo mío se quedó en ella, sin duda, es la ciudad más fascinante del mundo. Fue una etapa que me dio otra perspectiva y otra visión de las cosas, me hizo más profunda, más sensible, París es un espejo lleno de magia, en el que miro mi vida. Aún me emociono con las canciones de la Piaf o de Gilbert Becaud o de Ives Montand.

VIDASi se me diera la oportunidad de volver a vivir, sin duda cometería los mismos errores, si acaso lo fueron, porque en todo caso, creo que mas bien fueron

parte de un aprendizaje. Indudable-mente la vida es un camino fascinan-te, que vale la pena recorrerlo a todo galope, no a media asta y la mía ha sido turbulenta, pero no vacía.

XAVIER Y PANCHOMis hermanos son mi alfa y mi omega, ellos son mi sustento y mi norte; repre-sentan la sangre y la prolongación de mis mayores, sin ellos, nada soy. XAVIER es mi hermano mayor, pero también ha sido el timonel de ésta apasionante nave de la comunicación social. Hemos dis-crepado en muchas cosas y hemos com-partido muchos sueños, algunos se rea-lizaron, otros se quedaron en el camino; creo firmemente que él es un forjador de sueños. PANCHO es un árbol noble, como el guayacán de mi tierra, bajo su sombra siempre me he cobijado.

YO NO QUIEROHay cosas que no me gustan y que no quiero tenerlas cerca: no soporto la vio-lencia, ni la soberbia, ni la gente desleal, ni la mentira. YO NO QUIERO estar don-de se mastique el odio; tengo demasia-da paz en mi corazón, y es una paz que la defiendo con los dientes.

ZAPATERO A TUS ZAPATOSEn este largo caminar, quizás habria querido intentar hacer otras cosas, vie-jos sueños que no se realizaron, como ser pianista y tocar sobre un escenario, o escribir una gran novela, vivir en una buhardilla parisina, pero me conformo con lo que soy y con lo vivido, segura-mente no habría sido eficiente haciendo nada más. Pienso que puedo decir como el poeta: vida, estamos en paz.

“Si se me diera la oportunidad de volver a vivir, sin duda cometería los mismos errores”.

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