Upload
others
View
4
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
139
Se observaron irregularidades en los tendidos electricos, con cables sin fijacion, proteccion ni
asilamiento y otros por el suelo. No hay disyuntores ni descarga a tierra por cuanto el riesgo
electrico es alto. Frecuentemente se interrumpe el suministro contando con solo dos
generadores insuficientes para abastecer todo el complejo, a cargo de Gendarmeria.
Existe un pequeño equipo electrogeno en la casa, con problemas en su encendido por cuanto
no se usa. Los extintores estan ubicados fuera de normativa y vencidos.
El riesgo de incendio es elevado dado el recubrimiento en madera de todos los techos.
Asimismo se constato el mal funcionamiento de las estufas que deberan ser revisadas por
personal idoneo con urgencia. No existe un plan de contingencia ante siniestros.
La casa habitacion cuenta con 4 dormitorios de reducidas dimensiones y 10 camas para todo el
personal, anexas al comedor, por tanto se dificulta el descanso. Cuando por razones de servicio
se giran mas agentes, deben turnarse para usar las habitaciones.
Hay tres sanitarios para ambos sexos en regular estado que el propio personal mantiene
limpios y equipados.
140
ACTUACIONES: Todos los trabajos de adecuacion, ampliacion y mantenimiento de la casa
habitacion fueron solicitados en la Actuacion SIGEA 12785-235-2013/2. Por la Disposicion
N° 621/15 (DI RACR) se deja sin efecto la Licitacion Publica N° 38/15 (DI RACR).
Nuevamente en la Actuacion Nro 17600-10-2016 y Nota N° 11/2016 (Sec. Ec. Financ – AD
RIGA) se solicita la realizacion de las obras y se abre una nueva Licitacion de Obras en
Actuacion N° 17600-80-2016. Todo quedo sin efecto.
- Zona Primaria Aduanera – Scanner de Camiones
Todo lo referente a cargas ingresa por el PIA desde Punta Arena y es scaneado. Las
instalaciones son modernas pero un problema serio es la superficie donde se desplaza el camion
scanner, que al ser de tierra se producen hundimientos, debiendo el operador calibrar el equipo
regularmente. La corta longitud del galpón impide el scaneo de las cabinas. Falta la carteleria
precautoria y la demarcacion del area de exclusion radiante.
Se ha propuesto instalar el scanner en el PIA donde se ubica la Balanza de Vialidad
- Deposito Fiscal DEFISA
El precario Deposito Fiscal no cumple con las minimas normativas de higiene y seguridad para
el trabajo. No hay espacio para el desplazamiento de los elevadores ni para el ingreso de los
carretones y el inapropiado estibaje de mercaderias genera riesgo de accidentes.
Frecuentemente se inunda por las lluvias.
141
Presenta alto riesgo de electrocucion e incendios por la inadecuada instalacion electrica, con
cables expuestos, sin fijacion ni aislamiento y con emplames no permitidos.
Los extintores estan en contravencion asi las vias de circulacion que se encuentran bloqueadas
con bultos. El unico sanitario esta en malas condiciones y con perdidas de agua
Se recomienda cerrar este deposito y provisoriamente utilizar uno nuevo, cuyo propietario ya
ha presentado la solicitud de habilitacion y esta demorada.
- Oficina de Balanza de Pesaje
142
Emplazada en un contenedor reciclado como oficina, opera de 08 a 16 hs y de 16 a 02 hs con
un jefe y dos guardas por turno. Las instalaciones son precarias, con reducidos espacios para
desarrollar el trabajo. El unico baño habitualmente esta fuera de servicio.
Presenta gran dificultad el precintado de los camiones en el playon, el cual se realiza a la
intemperie, con escasa ilunimacion e inseguridad por encontrarse en una zona sin vigilancia y
descampada. (en promedio salen e ingresan 120 camiones diarios)
Otros temas relevados de preocupacion son: El traslado sin custodia desde el PIA a la Aduana,
del dinero recudado diariamente (a veces llega a $600 000), la falta de cursos de capacitacion
para los escaneadores, la imposibilidad de recibir asistencia medica de urgencia ya que la
ambulancia del hospital publico demora mas de una hora en llegar y el centro de salud mas
cercano esta en Chile a 10 kms. Solo algunos dias en la semana concurre un enfermero de
gendarmeria al paso con un botiquin basico de atencion.
(* Dr. Juan Sancineti. C. P. Higiene, Seguridad y Ambiente de Trabajo – SUPARA-DGA)
143
5.20- Aduana Puerto Santa Cruz
Para visitar los pasos fronterizos de la región de Río Turbio, nos viene a buscar a Río Gallegos
la administradora de la Aduana de Puerto Santa Cruz, distante a 256 kilómetros de Gallegos
por la RN 3. Tenemos por delante los 261 kilómetros que nos separan de Río Turbio,
atravesando la estepa santacruceña.
La Aduana de Puerto Santa Cruz cuenta con un total de 18 dependientes, entre quienes se
contabilizan los que cubren tareas en los tres pasos aledaños a Río Turbio (cinco personas en
total) y las que se ocupan de las tareas del resguardo de El Calafate y el control de los vuelos
internacionales que eventualmente llegan a allí, la principal localidad turística de la provincia.
La distancia configura un primer problema, sobre todo en invierno, por los traslados que
implica la actividad por extensos recorridos, muchas veces congelados.
Llegamos al mediodía a Río Turbio y luego de un rápido almuerzo, nos dirigimos al primero
de los tres pasos que habremos de recorrer. Por la Ruta 40 vamos hacia el sur, dejamos de lado
la vecina localidad de 28 de Noviembre y por la ruta 293 nos dirigimos a la frontera. A unos
20 kilómetros sobre ripio está nuestro objetivo. La zona es de montañas y colinas bajas, con
valles arbolados por lengas y arroyos, que contrastan favorablemente con la aridez de la meseta
que dejamos atrás.
1. Paso Laurita - Casas Viejas
Llegamos después de poco más de 40 minutos de viaje. El puesto de Gendarmería que controla
el tráfico vecinal fronterizo dirigido a Puerto Natales cuenta con un solo dependiente de
Aduana, cuya habitación (un conteiner acondicionado puesto a un costado del Destacamento
de Gendarmería) se muestra en el siguiente registro fotográfico. En cambio, Migraciones
realiza dos turnos diarios (repostan a las 15 hs.) de dos personas cada uno. En tanto,
Gendarmería tiene destacados 4 integrantes de su fuerza. El horario de trabajo es de 8 a 22
horas y transitan por allí diariamente, nos dicen, unos 45 a 50 autos.
El aduanero destacado en el lugar permanece una semana pernoctando en la casilla, que fue
comprada por los propios aduaneros. Pese a la aislación que se improvisó sobre el tanque de
agua, ésta suele congelarse en invierno por los intensos fríos de la región, lo que ocasiona
rajaduras de cañerías, filtraciones y faltante de suministro. El aduanero relata que no tiene allí
comunicación telefónica salvo por el sistema de mensajería whatsapp.
Detrás del puesto de Gendarmería hay unas viejas construcciones en desuso, necesitadas de
reparaciones para su rehabilitación, pero que bien dispuestas, posibilitarían un amplio espacio
de atención al público y vivienda, en el caso que Aduana pudiera asumir su uso y refacción. El
personal de Gendarmería se ocupa de buscar agua en grandes tanques que cargan en una
estancia de las inmediaciones y de proveerse de leña también con vecinos. No hay otro
suministro. La electricidad proviene de la vecina localidad de 28 de Noviembre, pero se trata
de un solo cable aéreo que suele sufrir las consecuencias del clima de la zona, por lo que los
cortes de luz son recurrentes en épocas de temporales. El gas con el cuentan es a granel cargado
en un zepelín. También cuentan con una antena de comunicación interna por intranet, para
vincularse con las diferentes áreas de la institución.
144
El acceso a la televisión vía Direct TV y al wifi para los celulares es sufragado por los propios
trabajadores para asegurarse ciertas mínimas condiciones de confort en este espacio de
aislamiento, aunque próximo a la localidad de Río Turbio. Aduana monitorea a distancia lo
que aquí sucede a través de cámaras que registran la actividad de verificación. Pero las cámaras
no registran lo que sucede en la noche, pues no está iluminada el área de control. La revisión
de bultos debe realizarse sobre el piso del camino. No hay escáner de equipaje ni de vehículos
Adentro de las oficinas de atención público, encontramos los baños destinados a los pasajeros
inhabilitados. Gendarmería no tiene cómo o no quiere resolver el tema de su limpieza y recurre
al expediente simple de anularlos.
2. Paso Dorotea
A seis kilómetros de Río Turbio o 13 minutos de viaje en auto, se encuentra Dorotea. Pero
haremos ese viaje cuando terminemos una visita a Chile. Entramos al Paso desde Puerto
Natales, a donde nos dirigimos desde Paso Laurita para conocer las instalaciones que allí nomás
y para la misma intensidad de tráfico fronterizo, dispuso Chile. Las atravesamos viniendo desde
Laurita y yendo a Dorotea.
No es objeto de este informe la atención que dispensa el estado chileno a sus pasos de frontera.
Digamos apenas que la diferencia es sideral. Grandes edificaciones con amplias instalaciones,
áreas de vivienda que incluyen estacionamientos, baños públicos funcionando, espacios de
atención a los pasajeros cómodos, equipados y profusamente adornados con motivo de la
reciente fiesta nacional chilena (véase abajo).
145
Detrás del empleado que hace los trámites migratorios obligados, un cartel de amplias
dimensiones recuerda los derechos de la persona detenida en caso de ser imputada por las
autoridades de alguna contravención o delito.
Se reiteran aquí los comentarios de las reticencias de los argentinos a los controles, cuando no
de su conducta agresiva frente a los empleados públicos y la diferente actitud que asumen
respecto de las autoridades aduaneras chilenas. Adjudican ese respeto a la rigurosidad conocida
de organismos de seguridad de Chile.
Llegamos a Dorotea. Allí trabajan tres personas en Aduanas, 4 en Migraciones (que hacen
turnos de ocho horas) y 7 en Gendarmería. Todos vuelven de noche a Río Turbio. A un hotel,
en el caso de los aduaneros enviados desde Puerto Santa Cruz, a casi quinientos kilómetros de
distancia. Formalmente la jornada diaria es de 14 horas (de 8 a 22 horas), pero suele extenderse
hasta dos horas más en ocasiones, cuando se agolpan los pasajeros que tramitan su ingreso al
territorio nacional.
Muchos gendarmes se encuentran ya radicados en Turbio con sus familias. Entre los aduaneros
nos encontramos dos señoras, que indican que aún para el uso del baño durante el día bajan a
Río Turbio, pues en el paso no hay buenas instalaciones. Una mirada al baño del lugar alcanza
para comprender la decisión. Aquí también el baño de uso público está cerrado.
El espacio de trabajo para las tareas administrativas con el que cuentan es estrecho. Algo más
de un metro de ancho por tres de largo en el que se apiñan tres ventanillas de atención al público
y una puerta de acceso frontal. Detrás cuentan con un espacio más amplio, con una mesa y sus
sillas, un sillón donde tomarse un breve descanso, un dispensador de agua y no mucho más. El
equipamiento corrió por cuenta de los trabajadores.
La revisión de autos y equipajes se realiza afuera, debajo de un breve techo y sobre el piso
pavimentado del paso. Las herramientas para el “fondeo” de autos no son provistas por la
institución. Tampoco hay escáner de equipaje o vehículos.
146
El tráfico es más intenso y eso dificulta que puedan dialogar con nosotros sin interrupciones.
Los residentes de Río Turbio se movilizan regularmente hacia el lado chileno para sus compras
cotidianas, por la diferencia actual de precios y por el hecho de que muchos tienen familia a
ambos lados de la frontera. Además, están los turistas internacionales, que toman este camino
para acceder por tierra a las Torres del Paine, más al norte, pasando por Don Guillermo, nuestra
próxima etapa.
El gas que tiene el puesto para calefacción y cocina es solventado por los que allí trabajan,
igual que el agua de los bidones. El archivo de papeles se realiza de forma muy precaria en una
caballeriza aledaña que tiene Gendarmería. Allí también se depositan las mercaderías que
quedan retenidas.
En el sitio hay dos “binomios”, uno con perro pero sin usarlo. Lleva seis años con el animal y
no quiere dejarlo, pero tampoco quiere pasar a depender de jefes que no conoce y a estar
sometido a traslados compulsivos.
Paso Don Guillermo
Para llegar hasta este paso viajamos desde Río Turbio hacia el norte por la ruta 40. Se encuentra
situado a unos cincuenta kilómetros de esa localidad, en un territorio vasto poblado apenas por
algún casco de estancias ovejeras, casi llegando al Paso.
147
En una hora se completa el viaje, gracias al buen tiempo que nos sigue acompañando.
Este paso permanece, como los otros, habilitado de 8 a 22 en invierno y de 7 a 22 en verano.
El lugar no oferta resguardo ante las inclemencias del tiempo. En verano, la mayor dificultad
es el viento. En invierno, los diez grados bajo cero que suele marcar el termómetro cuando todo
está nevado.
Transitan el Paso, nos dicen, entre 50 y 90 micros con turistas por día, y entre 1000 y 1500
personas, que provienen de El Calafate o de Puerto Natales principalmente, y se dirigen a una
excursión breve en el Parque Nacional Torres del Paine en Chile. Los equipajes se revisan en
el piso, sobre el ripio.
El lugar dispuesto para que duerma la persona de Aduanas en las noches es una habitación
provista por Gendarmería dentro de su destacamento. Es amplia y luce cómoda en relación con
otras que hemos visto, pero la inmediatez del contacto con los gendarmes hace que Aduana
sólo destine hombres para cubrir esta posición. Eso dificulta la revisión personal de mujeres,
la llamada requisa, en un lugar sin otros medios alternativos, como perros o escáneres.
148
Trabajando en ese momento en el Paso encontramos un ex vecino de Capital Federal, que hace
poco más de un año ingresó en Aduana. Es un joven de 23 años, ahora radicado en El Calafate
con su novia. Relata que mando su CV a la página web, un tiempo más tarde lo convocaron
para una serie de entrevistas y al ser admitido, pasó tres meses en la Academia de Aduana,
haciendo un curso. Tiene una carrera en Comercio Exterior por el momento interrumpida y
asegura que no puede usar el uniforme de la repartición en El Calafate, por las agresiones de
los pobladores.
La dotación de Gendarmería habitual es de 5 o 6 personas, que se elevan hasta 8 en temporada.
Además de los espacios de atención público, cuentan con áreas de oficinas administrativas,
dormitorios amplios y hasta un salón de juegos.
Migraciones prepara sus instalaciones detrás del Destacamento de Gendarmería. Prevén sumar
mujeres al servicio que contará con una dotación rotativa de cuatro personas.
También aquí los baños públicos están cerrados. Es por falta de agua. La forma de proveerse
de ella es muy elemental. Un pozo recolecta lo que fluye por una napa superficial y lo colectado
se bombea cada día (cuando hay existencias) a los depósitos del Destacamento. Ese día el
aduanero no había podido bañarse porque toda el agua había sido usada el anterior por los
gendarmes para lavar ropa.
El incremento de personas trabajando en el lugar no anticipa el adecuado abastecimiento de
agua, para lo cual sería necesario realizar una perforación más profunda. El pozo además se
encuentra a pocos metros del vaciadero de basura, la que periódicamente queman y amenaza
contaminar las aguas de la napa.
Hay provisión de electricidad por la red desde diciembre del año pasado. Pero el transformador
colocado “explotó” dos veces, nos dicen, por la sobrecarga de la demanda instalada en el
Destacamento. Antes dependían de un generador. Cuentan con un teléfono semipúblico e
internet por ARSAT, aunque con poca velocidad. El servicio de DirectTV se lo pagan los
trabajadores.
149
El aduanero relata los inconvenientes de trabajar solo, para hacer los trámites administrativos
y la revisión física de los vehículos y pasajeros, lo que lo fuerza a trasladarse dentro y fuera de
la oficina, cuando se juntan un par de micros o varios autos. Eso incrementa los riesgos de
verse expuesto a insultos y amenazas, por parte de pasajeros que no están dispuestos a esperar
largo rato y no aceptan los controles. Cree que falta una persona más, para dividirse tareas, otra
computadora y sumar un posnet para hacer cobranza electrónica y no quedarse con dinero de
la institución toda una semana en esos parajes o viajar con la recaudación solo en su vehículo
centenares de kilómetros expuesto a un asalto (y a un sumario administrativo).
Sabe de planes de mudar el resguardo de Calafate a Turbio, pero no le parece buena idea.
Consultado por sus razones menciona las agresiones que padecen los que residen en Turbio por
parte de los vecinos que los identifican con la Aduana. No es una preocupación individual. La
reiteran varios de sus compañeros en sucesivas conversaciones.
4. Resguardo El Calafate
Para hacer toda ruta asfaltada, retomamos la 40 hasta la provincial 7, llegamos a Esperanza en
el medio de la meseta y volvemos hacia el oeste por la 5, otra ruta provincial. Más de tres horas
de viaje por caminos casi sin tránsito y a alta velocidad. Por la ruta breve serían más de
doscientos kilómetros, pero muchos de ripio.
El viaje nos demora y llegamos a El Calafate cuando la dependencia está cerrada. Funciona
dentro de un local de AFIP. El único aduanero que se encuentra esperándonos, lo hace afuera
de las oficinas porque no tiene llaves. El jefe está de licencia y no se las ha dejado. Los
empleados de AFIP han cerrado el lugar y no quisieron acompañarlo en la espera de nuestra
llegada. El lugar, situado en un área céntrica de El Calafate, a unos cien metros de la costa del
Lago Argentino, parece privilegiado en relación con los demás que vimos.
Pocas tareas reportan en este sitio. Básicamente la atención de bultos que vienen por correo
internacional, adquisiciones minoristas de mercaderías realizadas en el exterior por Internet.
Más allá de eso, el eventual control de algún vuelo proveniente del exterior con turistas
completa las tareas habituales de las tres personas destacadas a esta dependencia.
150
Autopercepción de estrés total
En los diferentes puestos de trabajo que recorrimos, recopilamos siete cuestionarios. La edad
promedio de los que respondieron fue de 40 años y la antigüedad, catorce años.
Fueron 3 mujeres y cuatro hombres. Aquí encontramos a más de la mitad de la población con
niveles de estrés.
Relevamiento de Higiene, Seguridad y Ambiente de Trabajo – 28 y 29/09/16*
- Paso Fronterizo Laurita: En la frontera con Chile (Casas Viejas) a 20 km de Rio Turbio
por camino de asfalto y ripio, peligroso de transitar con las fuertes nevadas. Solo un
aduanero es girado por semana atendiendo TVF y equipaje.
La casilla dormitorio es de gran precariedad, sin aislamiento térmico, es insegura y con
mínimas condiciones de habitabilidad; hay un solo sanitario que con frecuencia no
funciona. El agua es provista por un tanque llenado regularmente, pero que se congela en
invierno.
0
20
40
60
80
100
120
1 2 3 4 5 6 7 8
Niveles de estrés total P. Sta. Cruz
151
Recibe electricidad de la red pública, con un cableado expuesto y sin protección y es habitual
el corte el suministro por las nevadas y los fuertes vientos. No tienen generador. En la zona la
comunicación es deficiente, solo funciona bien WhatsApp.
La Aduanas no tiene oficina propia, funciona en el edificio de gendarmeria en un reducido
espacio, con precarios muebles y faltantes de elementos de escritorio (impresora). Los propios
agentes mantienen la limpieza y el orden y se pagan el servicio de DirecTV. No cuenta el paso
con scanners, fosa de revision ni tinglado para el control vehicular; se trabaja a la intemperie.
Entre otras deficiencias, por falta de agua gendarmería clausura los baños públicos, por tanto
los usuarios tienen que llegar hasta Rio Turbio para hacer uso de sanitarios. En invierno la
recarga de zeppelín de gas es discontinua, debiéndose calefaccionar con una ruinosa
salamandra, lindante a equipos informáticos vetustos y con riesgo de accidentes eléctricos.
152
- Paso fronterizo Dorotea:
En este ubicado a 6 Km de Rio Turbio Paso trabajan semanalmente tres aduaneros turnándose
en jornadas diarias de 14 horas pero suele extenderse por la demanda de pasajeros que tramitan
su ingreso al territorio nacional. Se realiza el control de TVF en autos particulares, equipajes y
colectivos. Todos vuelven de noche a Río Turbio.
Como ya fue mencionado la revisión de autos y equipajes se realiza debajo de un breve techo
sin cerramientos y sobre el piso pavimentado, que en invierno con los fuertes vientos y nevadas
se dificulta la tarea. El paso no tiene fosa ni scanner y las herramientas para el “fondeo” no son
provistas por la institución.
El edificio que pertenece a Gendarmería está en general buen estado de conservación, con
reducidos espacios de trabajo para las tareas administrativas. Hay un solo sanitario para Aduana
y Migraciones, en mal estado que se inunda por perdidas de los sanitarios y con frecuencia se
obstruye el drenaje cloacal. Se observó además la ventana rota que impide su cierre.
En la oficina de la aduana hay insuficiente espacio y faltan estanterías para la guarda de
documentación y elementos de control. Asimismo hay irregularidades en las conexiones
eléctricas, con empalmes precarios y sin protección. Respecto al suministro eléctrico es
habitual que se interrumpa el servicio, particularmente en época invernal, por problemas en el
tendido del único cable que conecta la red al complejo.
153
Otro de los problemas que se identificaron es la falta de agua, la cual proviene de un estanque
ubicado a más de 300 metros que se llena con las lluvias y nevadas y por diferencia de altura
alimenta el tanque del edificio. En muchas ocasiones se corta el suministro porque se congelan
las cañerías o no hay suficiente reserva de agua. Los sanitarios para el público están
habitualmente clausurados por Gendarmería.
Las mercaderías secuestradas son depositadas en instalaciones que presta Gendarmería en un
edifico anexo. Es insuficiente e inadecuado ese lugar, que se encuentra desbordado y sin
posibilidad de realizar un estibaje seguro y ordenado, por no contar con estanterías. Se ha
encontrado documentación y expedientes arrumbados que pertenecían a la Aduana de Rio
Gallegos, que deben ser retirados.
154
- Paso Fronterizo Don Guillermo:
A 50 km de Rio Turbio, gran parte del camino es de ripio y peligroso, el paso trabaja todo el
año. Un solo aduanero es girado por semana para la atención de vehículos particulares y micros
de turistas. La aduana no posee oficina propia, se atiende a través de una ventana sobre un
escritorio deteriorado en un rincón del edificio de gendarmería, lindante a Migraciones.
El lugar no oferta ningún resguardo ante las inclemencias del tiempo, debiendo trabajar los
aduaneros a la intemperie, con fuertes vientos en verano y temperaturas bajo cero y nevadas en
invierno. El resguardo no cuenta con scanner ni fosa para fondeo. En oportunidades el personal
de aduanas es agredido por los turistas con motivo de las demoras en los controles; al terminar
la jornada algunos ocultan su uniforme para evitar malos momentos.
La casa de Gendarmería está en buen estado general y es confortable. El dormitorio para los
aduaneros es una habitación que da al comedor principal del destacamento donde se instaló
una mesa de ping pong, por tanto, el descanso es dificultoso por el movimiento del personal.
La energía eléctrica es a través de red pública pero frecuentemente saltan las llaves térmicas
por sobrecarga; existe un generador pequeño solo emergencia. Respecto a los baños la aduana
tiene uno asignado en regular estado y con desperfectos de funcionamiento habituales.
Es critica la falta de agua por la elemental forma de proveerse de ella, como se ya fue detallado.
155
Los sanitarios públicos están clausurados como en la mayoría de los pasos fronterizos a cargo
de Gendarmería. El pozo de la toma de agua se encuentra a pocos metros del vaciadero de
basura que periódicamente se quema, constituyendo un foco de contaminación de las napas.
(* Dr. Juan Sancineti. C. P. Higiene, Seguridad y Ambiente de Trabajo – SUPARA-DGA)
Informe sobre Aduana de San Juan
Escala obligada camino de Mendoza por las reparaciones que inhabilitan su aeropuerto por tres
meses, en San Juan nos espera el delegado local, un mendocino gustoso del pretexto que le
brindamos para reunirse con su familia fuera del fin de semana.
Los 165 kilómetros que separan ambas capitales provinciales teóricamente deberían recorrerse
en poco más de dos horas, pero la intensificación del tránsito causada por el desplazamiento de
la terminal aérea operativa, extiende el viaje un sesenta por ciento. Tiempo suficiente para
adentrarse en algunas características del servicio aduanero sanjuanino.
Los 29 agentes de la repartición atienden una operatoria concentrada en algunos rubros de
exportación (vino a granel y envasado controlado en la aduana domiciliaria de Peñaflor); aceite
y olivas a granel; cal y cemento con destino a Chile que se controla en una planta del
departamento Sarmiento, camino a Mendoza, en la que los camiones son controlados sin
escáner; concentrados minerales producidos en la mina Barrick verificados en la planta de la
empresa Prosegur en San Juan y el tránsito turístico. Como en otros lugares del país, las playas
de estacionamiento y maniobra de los camiones a controlar no están pavimentadas, lo que en
el clima seco de la provincia implica continua exposición al polvo del suelo.
Respecto del turismo, el control se concentra en dos lugares. Por un lado, el aeropuerto
Sarmiento de la capital provincial que tiene habitualmente unos pocos vuelos semanales y está
equipado con un escáner para equipajes. Por otro, el paso internacional de Agua Negra, a unos
390 kilómetros de la sede de la Aduana en San Juan.
En un caso, los servicios de contralor se prestan dentro del horario habitual de trabajo. En el
otro, implican guardias semanales en la altura (Agua Negra con sus 4780 metros sobre el nivel
del mar es el más elevado de los pasos internacionales con Chile e incluso, uno de los altos del
mundo).
156
Las guardias son cubiertas por dos empleados, reforzados los fines de semana con otro guarda.
No pudimos verificar las condiciones en las que se desempeñan y pernoctan estos trabajadores.
Sin embargo, la mera referencia de la altitud indica que el servicio requiere de esfuerzo de
adaptación cada vez que se sube, similar al indicado por los trabajadores para el caso Jama, en
Jujuy.
Para las próximas temporadas se espera duplicar la dotación por el mayor flujo esperado de
vehículos (unos 400 por día, según calculan). Esta vía de conexión sólo puede utilizarse de
noviembre a marzo (si las condiciones meteorológicas lo permiten, la temporada se extiende a
abril o mayo), y el horario en que está habilitado el cruce es de 7 a 17.
Las cifras disponibles indican un progresivo incremento del tránsito de pasajeros y vehículos
por ese paso, pese a que permanece intransitable gran parte del año. Según la información de
la Aduana chilena, en 2013 pasaron por allí 9.798 vehículos con 33.436 personas (1.532
personas más que las registradas en la temporada 2008-2009).
5.21- Aduana de Mendoza
Sistema Cristo Redentor
En la Aduana de Mendoza nos reciben los delegados del Sindicato. Son tres, debido al alto
número de trabajadores que revistan en esta dependencia. 192 en total, de los que alrededor de
60, nos dicen, tienen diversas dificultades objetivas para desempeñarse en el paso fronterizo.
El resto, según comentan, se ve forzado a “subir”, dos veces por mes.
El Paso Cristo Redentor, que para la Aduana conforma el Sistema Cristo Redentor, constituye
la conexión de mayor nivel de tránsito entre Argentina y Chile y es la única completamente
pavimentada. Vincula las ciudades de Mendoza, en la República Argentina, con Santiago de
Chile y Valparaíso, a través del Túnel Internacional Cristo Redentor, de 3,04 kilómetros de
longitud, ubicado a 3.185 m.s.n.m. y cuya habilitación se produjo en mayo de 1980.
Este cruce se encuentra sobre el eje horizontal más relevante – comercialmente- de la Argentina
y Chile. Sobre el que se organizan las ciudades, centros de consumo y de producción más
significativas de ambos países. Este eje comprende Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, San Luis
y Mendoza, por el lado argentino. Estos cinco puntos representan más del 60% de la población
argentina y más del 50% del PBI nacional.
Del lado chileno se encuentra la V Región de Valparaíso y a la región metropolitana de
Santiago. Estas dos regiones reúnen casi el 50% de la población y más del 50% del PBI chileno.
Unos 2000 vehículos diarios lo circulan18.
18 En el primer bimestre de 2015, según datos de la AFIP, ingresaron al país por este Paso 58.014 vehículos particulares y
egresaron 55.556, en tanto que vehículos colectivos fueron 2.673 de ingreso y 2.674 de salida. Según informa la Aduana
chilena en 2013 fueron 570.356 vehículos y 1.721.606 personas las que transitaron este paso.
157
1. Complejo Fronterizo Los Libertadores
El Sistema comprende tres lugares diferenciados ubicados en distintos puntos del recorrido. El
Complejo Fronterizo Los Libertadores, situado del lado chileno, es el punto de contralor de la
salida de turismo. Localizado a más de doscientos kilómetros de la ciudad de Mendoza, a 3.149
metros de altura, cumple horarios diferenciados en invierno y verano. En el primer caso, del 1º
de junio al 30 de setiembre, atiende de 8 a 20 horas (doce horas de jornada habitual), que en
verano abarcan las 24 horas, en cuyo caso la atención al público se realiza en dos turnos de
doce horas cada uno.
Visitamos el lugar en momentos en que una dotación de seis trabajadores aduaneros se
desempeñaba en las instalaciones. En el mismo lugar se desempeñan trabajadores de
Migraciones, que no pernoctan allí y tienen turnos de ocho horas. Durante el día son, en
temporada baja, ocho trabajadores por turno diurno, a los que se adicionan otros cinco
nocturnos para temporada alta.
La imagen copiada más abajo fue tomada el 18 de octubre de este año a las 13 horas. La
presencia de nieve en las inmediaciones, hace que los pisos del complejo estén parcialmente
embarrados por el agua del deshielo. En esas condiciones deben revisarse los vehículos.
Además, disponen de una sala comedor de unos 30 metros cuadrados en la que hay un televisor,
cuya señal contratan los propios trabajadores de su bolsillo, para contar con algún elemento de
recreación. La sala también es interna y sólo está iluminada con luz artificial. Las
comunicaciones personales son difíciles pues no tienen línea telefónica directa argentina y
deben adquirir línea celular chilena para hacer comunicaciones internacionales o viajar 50
kilómetros hasta la primera localidad nacional para poder comunicarse con sus familias. No
disponen de Internet. La falta de comunicación acentúa el aislamiento en un lugar remoto de la
montaña y la dependencia de los vínculos internos en el grupo de trabajadores.
158
Los trabajadores señalan que no tiene infraestructura adecuada para el desempeño de sus tareas.
Permanecen sentados al menos 9 de las 12 horas de su jornada habitual de trabajo en sillas
incómodas. Las instalaciones eléctricas y los equipos computacionales de los que disponen
tampoco están en condiciones (opinan que “están atados con alambres”) y tampoco disponen
de elementos para revisar los vehículos, excepto los que ellos mismos se proveen.
Nosotros subimos por una ruta despejada porque el paso estaba cerrado del lado chileno a causa
de malas condiciones climáticas. El flujo de pasajeros comenzó a normalizarse cuando
estábamos en Libertadores. Sin ser muy intenso, imposibilitó el diálogo con el personal, que
no podía distraerse 15 minutos de sus tareas para conversar con nosotros, por las colas que
enseguida se formaron. Al retirarnos, personal chileno controlaba a los pasajeros en espera con
un perro entrenado para detectar estupefacientes.
Un tema destacable es que no hay ningún mecanismo consolidado de atención de emergencias
médicas, ni de los trabajadores ni de las personas en tránsito. No hay más que un botiquín
elemental. Tampoco capacidad para asistir en el lugar a pasajeros en problemas. La evacuación
de personas en emergencias sanitarias se hace por vía terrestre con equipos apenas dotados de
equipamiento básico. Si bien el lugar no es extremadamente elevado, no se realizan controles
periódicos de salud para verificar la capacidad de los trabajadores para desempeñarse en esas
condiciones climáticas19. En su opinión, eso ocurre porque a las autoridades del organismo “no
les importa nada, ningún tema personal”.
19 Según informa Gendarmería Nacional, en ese paso la amplitud térmica es la siguiente: Temperatura extrema en
verano: 22º a 24º. Temperatura extrema en invierno: -20 a -25
159
A la inversa, perciben un exceso de presión sobre sus desempeños, y no se consideran
respaldados por el organismo. Señalan la violencia psicológica a la que se ven sometidos por
turistas remisos a aceptar las normativas vigentes y poco tolerantes con las largas esperas en
lugares que rebosan por el exceso de personas.
Las instalaciones son relativamente modernas, pero parecen haber sido planeadas para un flujo
muy inferior de pasajeros y sin tener precaución de dotar de mínimos parámetros de confort
para las personas que allí trabajan, las que deben trascurrir una semana, en condiciones
habituales, sin poder salir del complejo, cuando no deben permanecer más tiempo, bloqueados
por las malas condiciones climáticas o los cierres del camino por aludes, roturas de puentes o
caídas de piedras en el camino.
2. ACI Horcones
La revisión de los turistas a la entrada de nuestro país se realiza en Horcones, un área de control
integrado, donde realizan también sus actividades organismos chilenos. Se trata básicamente
de un gran galpón al que ingresan los vehículos, que son atendidos en ocho puntos de contralor.
El lugar tiene una aislación térmica parcialmente desprendida por debajo de su techumbre de
chapa y múltiples aberturas al exterior que lo mantienen ventilado y con baja temperatura aun
en el día. Se comunica mediante un túnel con una edificación en la que tienen sus dormitorios,
cocina y salón comedor los trabajadores. Todo el complejo es relativamente nuevo (se edificó
en el año 92) aunque ha sido refaccionado en estos meses, pues tenía filtraciones de líquidos
cloacales desde el piso superior, donde se aloja el personal chileno, al inferior.
El personal de aduanas dispone de ocho dormitorios colectivos, habilitados para tres ocupantes
cada uno, aunque desde el gremio remarcan que eso es por decisión sindical, pues las
autoridades de la institución pretenderían colocar cuatro personas por habitación. Antes
disponían además de un salón de juegos, pero ahora se destinó a dormitorios del personal de la
PDI chilena. Señalan que las condiciones edilicias se deterioraron desde que la Gendarmería
se hizo cargo de su mantenimiento.
160
Los trabajadores abonan por su comida unos 1100 pesos semanales, que se descuentan de sus
viáticos (reciben un 50 por ciento diario pues el organismo provee el alojamiento). En
temporada alta, parte del de los destacados en cada turno deben pernoctar por su cuenta en Los
Penitentes, varios kilómetros más abajo. Dicen los trabajadores que los traslados fuera del
complejo, dispuestos por ellos, no son cubiertos en caso de accidentes por la ART.
Consultados por sus condiciones de trabajo, unánimemente señalan la presión mediática a las
que se hallan sometidos, (se les imputan las demoras que deben soportar quienes transitan el
paso) y el ritmo de trabajo excesivo debido a la falta de personal. No resulta una apreciación
caprichosa. El control de un vehículo demora un mínimo de cinco minutos, si no se presentan
dificultades. Las instalaciones actuales posibilitan el control simultáneo de ocho vehículos,
lo que arroja una cifra óptima de 96 autos por hora, sin mediar pausas de descanso o
demoras.
Así, el centro debe operar al menos 21 horas diarias de forma plena y sin interrupciones para
atender el flujo vehicular existente. En verano se habilitan otros seis puntos de contralor, pero
a la intemperie, lo que limita su uso a las horas diurnas y con buenas condiciones
climatológicas. A los procedimientos habituales de contralor de los vehículos deben
adicionarse los operativos dispuestos judicialmente, que movilizan y ocupan parte de un
personal que no sobra.
En invierno la jornada de doce horas se convierte en teórica, pues deben verificarse todos los
vehículos que hayan ingresado al punto de control, más allá de los horarios formales de
atención. En casos extremos, entre la finalización de una jornada y el comienzo de otra, no
median más de seis horas en las cuales deben alimentarse, higienizarse y dormir.
El recurso de sustancias psicoactivas puede tornarse habitual en estas condiciones,
mínimamente para poder conciliar el sueño.
Esta intensidad del trabajo limita la eficacia de los controles. No tiene asidero fisiológico la
demanda de atención plena y adecuada concentración de personas condenadas a trabajar
jornadas de doce horas en esas condiciones, por períodos de siete a doce días y con un fin
de semana libre al mes.
161
De esta forma, el personal se abstiene de realizar revisiones en profundidad, presionado por la
acumulación de vehículos que están forzados a controlar y por las exigencias de los pasajeros
que les reprochan las demoras y los insultan cuando imponen las tasas aduaneras
correspondientes.
El organismo tampoco capacita a su personal para manejar de manera adecuada esas
situaciones de conflicto con los turistas, de manera que se puedan proteger de la agresión
inmerecida y presten atención cordial y respetuosa a los pasajeros.
Por lo demás, los trabajadores no cuentan con instrumentos modernos de contralor provistos
por el organismo ni equipamiento informático actualizado. Las fosas existentes para la revisión
de los vehículos no están operativas, pero además no cuentan con personal suficiente para
utilizarlas. Mientras estamos en el lugar se produce un corte del suministro eléctrico que dura
más de media hora.
En ese tiempo se interrumpe también la escasa calefacción disponible en las oficinas existentes
en la parte superior del complejo y por supuesto, el acceso a las bases de datos informatizadas.
En un costado se está preparando un área específica de control de ómnibus de pasajeros, con
un escáner de equipaje.
162
Hablamos con un joven soltero que está haciendo sus primeros años en la aduana. Procede de
una provincia alejada y tiene antecedentes familiares en el organismo. Cumple un cronograma
de doce días seguidos de servicio con dos de descanso por quincena. Alquila una vivienda en
Uspallata, a 80 kilómetros de distancia, con otro compañero. Salir a bailar un fin de semana
implica viajar hasta Mendoza por una ruta de montaña (otros 120 kilómetros) y no siempre lo
permite su cansancio. Se pregunta si tiene sentido lo que hace. “¿De qué sirve ganar más si no
lo podés disfrutar?”, se cuestiona. Señala que falta personal.
3. ACI Uspallata
Otro cierre temporal del paso, debido a las malas condiciones climáticas en la altura, nos
permite recorrer el complejo de control de cargas ubicado en Uspallata y conversar sin
presiones con el personal. En esa zona, sin embargo, el tiempo es benigno, con sol y sin viento.
Sin embargo, la primera queja de todos los entrevistados es el polvo, en especial en la “barrera”,
el punto donde acceden los camiones al complejo, situado sobre la ruta. Allí se la pasan
“respirando tierra”, dicen. Indican además que el sitio carece de climatización, por lo que cada
uno debe llevarse en las noches su calefactor.
163
Como prueba de sus dichos, dos personas tuvieron que limpiar durante veinte minutos una sala
que nos habilitaron para las entrevistas individuales, removiendo una impresionante cantidad
de polvo acumulado sobre todas las superficies, en un lugar sin ventanas abiertas.
El complejo es relativamente moderno y, visto de fuera, adecuado a sus funciones. No es la
opinión de quienes allí trabajan cotidianamente. En primer lugar, unánimemente reprochan el
polvo debido a la falta de pavimento de la playa de operaciones. Luego, señalan la ausencia de
iluminación externa adecuada en un lugar que debe operar muchas veces de noche y en el que
deben revisarse cargas. Agregan que el predio no está cerrado (se está haciendo el alambrado
perimetral), por lo que no hay seguridad suficiente. Por último, indican que no está adaptado a
personas con discapacidad.
Esta observación última es significativa. Ningún lugar visitado en toda la recorrida está
adaptado a personas con discapacidad, ni trabajadores ni transeúntes. ¿La Aduana discrimina?
Muchas de las personas que aquí trabajan se encuentran radicadas en forma permanente en la
localidad de Uspallata, un poblado que registró un acelerado crecimiento poblacional en los
primeros años de este siglo y que supera los once mil habitantes. Ubicada en las inmediaciones
del Cerro y Parque Provincial Aconcagua, la zona se beneficia del flujo de visitantes de esos
atractivos naturales, unos 80.000 en la temporada 2014/2015 según el gobierno de Mendoza.
164
Sin embargo, para el grueso de los entrevistados (nueve en total), muchos nacidos en Mendoza,
el poblado no cuenta con servicios suficientes y adecuados, por lo que deben emprender el
descenso a la capital provincial para la mayoría de los tratamientos médicos o para acceder a
alguna actividad recreativa.
La queja principal es otra. “Quiero tener una vida normal”, dice uno. Otro dice que están
“trabajando en automático”, haciendo una tarea “repetitiva” día tras día, en muy extensas
jornadas de trabajo, que a veces implican 20 horas seguidas. El exceso de tiempo de trabajo y
su intensidad son los dos factores más señalados. Esto opera como obstáculo incluso para
acceder a servicios disponibles en la ciudad de Mendoza, por los tiempos de traslado.
“GC: Reside acá en Uspallata?
T: No. Bajo a Mendoza cuando tengo el fin de semana libre y si estoy acá trabajando. Ya no
me lo aguanto como antes, que bajaba y subía, bajaba y subía. Y ahora no. Ya no me lo
aguanto.
GC: Entonces contrataste un lugar para quedarte.
T: Si. Alquilé un lugar, un monoambiente. Pero mi casa, mi familia, todo lo tengo abajo. Mis
amigos. Mi familia... Me casé, me separé, por esto mismo.
GC: ¿Por el trabajo?
T: Por el trabajo.
GC: ¿Por qué?
T: Y, porque les pedí un poco más de tiempo, viste, por ahí hacer menos horas, no tantas horas
al día, no hacer doce horas todos los días, o por ahí bajar una semana al mes a Mendoza para
estar con mi señora, con mi ex. Y no (...)
Lo que es el trabajo en sí muy..., imaginate que pasan mil, mil doscientos, mil cuatrocientos
camiones todos los días. Ya se te hace muy monótono. Por ahí si tuvieras un poquito más de
aire, entendés, para salir un poco más afuera, en el sentido viste, de tener un poco más de
espacio....Hay compañeros míos que le han dado el pase y están abajo en Mendoza y te dicen
esto es otra cosa, es otra vida. Podés hacer vida. Salís a las siete de la tarde o salís a las cuatro
de la tarde si no querés hacer servicio, lo que sea. Pero tenés la tarde libre.”
El testimonio de este trabajador no es exclusivo. Muchos de los que completaron los
cuestionarios entregados para que autoevalúen la frecuencia en que enfrentaban diversas
situaciones generadoras de estrés, anotaron al final sus comentarios.
“El cansancio que me provoca el trabajo me desmotiva laboralmente”.
“Los servicios extraordinarios no son optativos (...) La carga laboral semanal es ilógica”.
165
“Otra situación de estrés que se vive habitualmente es el hecho de no poder planificar algo
fuera del organismo, en la vida personal y familiar, debido a que los superiores disponen de
tu tiempo sin aviso ni consulta...”.
“No se tiene en cuenta la disponibilidad de hacer o no hacer servicios extraordinarios”.
Autopercepción de estrés total
En Mendoza recopilamos 20 cuestionarios, de los cuales dos no pudieron procesarse por estar
incompletos. La edad promedio de los trabajadores fue 38 años y la permanencia media en el
organismo, de 11 años. En este caso, fue bajo el índice de femineidad de la población laboral.
Sólo tres mujeres entre veinte personas.
Entre los cuestionarios analizados, solo siete no presentaron niveles de estrés (menos del
cuarenta por ciento). Otros cinco, mostraron niveles intermedios de estrés y seis (un tercio del
total) presentaron un estadio pleno de estrés.
Relevamiento de Higiene, Seguridad y Ambiente de Trabajo – 17 al 20/10/16*
- Complejo Fronterizo Los Libertadores: Atravesando el túnel internacional con Chile y
a 3.200 metros de altura se encuentra el control integrado de la aduana, habilitado en
invierno de 8 a 20 hs y en verano las 24 horas (en 2 turnos de 12 hs. cada uno) con un
incesante y creciente flujo de usuarios. La rigurosidad del clima (temperaturas de menos
15 a 20 °C, vientos y nevadas) y la superficie resbalosa a causa de los deshielos, como
ya fue mencionado, genera riesgo de accidentes y dificulta la revisión de vehículos en
el exterior del complejo. La institución no provee en la actualidad el calzado ni la ropa
adecuada para las tareas de control como tampoco elementos necesarios de trabajo.
0
20
40
60
80
100
120
140
160
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20
Niveles de estrés total Mendoza
166
Se han construido 12 cabinas exteriores nuevas que se pretenden inaugurar en noviembre, con
atención las 24 hs (en 2 turnos de 12 hs cada uno) para control documental de argentinos y
chilenos que egresan del país. Esta situación agravará aún más la falta de personal que sube a
frontera y la insuficiente infraestructura actual. Para acceder a los sanitarios el aduanero deberá
abandonar el puesto de control e ingresar al complejo.
En el interior del complejo, las instalaciones asignadas a la aduana son deficientes y con
espacios reducidos; se trabaja “codo a codo” con el personal de Migraciones que supera
ampliamente en cantidad a los aduaneros. Entre las dificultades para cumplir las tareas el
aduanero permanece sentado largas jornadas (12 hs.) en sillas incomodas que no cumplen con
normas ergonómicas, mostradores de atención inadecuados, equipamiento informático
desactualizado y problemas de conectividad.
Hay solo un sanitario que se comparte con los otros organismos de Argentina y en malas
condiciones y se observa falta de mantenimiento e higiene en el sector. Nos refieren la
presencia de roedores por los techos.
Los agentes para pernoctar durante la semana que permanecen girados o para tomar un
descanso entre turnos, solo disponen de 3 casillas metálicas instaladas precariamente en la
planta baja del complejo, sin vista al exterior y que se inunda habitualmente con los deshielos.
En su interior contienen 4 camas tipo cuchetas superpuestas (las superiores inutilizables ya que
solo quedan a 60 cms del techo y con luminarias expuestas), con muy reducido espacio para
circular y ausencia de roperos.
167
Se constata además la falta de intimidad para la convivencia que padecen los trabajadores de
ambos sexos, reflejando el desinterés institucional por las condiciones de habitabilidad y
salubridad, en este crítico punto de control.
Entre otros temas que afectan el desempeño laboral, es de preocupacion la carencia de
asistencia medica e imposibilidad de realizar una evacuacion rapida en casos de urgencias, la
falta de servicio de limpieza y recoleccion de residuos, el constante aumento de turistas que
presionan y destratan a los aduaneros por las demoras en ser atendidos (en temporada alta
circulan mas de 1500 vehiculos diarios) y la escases de personal (se quiere elevar la dotacion
a 26 personas pero no hay infraestructura)
- Complejo ACI Horcones: Se realiza en este complejo la revisión de los transportes que
ingresan al país. En estos últimos años ha crecido exponencialmente el flujo de
vehículos por la diferencia de precios del lado chileno, así el 80% de los 40 colectivos
(en promedio) y más de 1500 autos de turistas que circulan diariamente, traen
mercaderías autorizadas y cerca de la mitad no declara con exactitud las compras
realizadas o intenta ingresar mercaderías prohibidas.
Esta situación genera grandes demoras en los controles ya que implica una revisión
exhaustiva, el labrado de infracciones y actas de interdicción, cobro de derechos y
multas, etc.
168
Los controles se realizan dentro de un gran galpón con deficiencias de seguridad, térmicas y
de ventilación, creando un ambiente viciado por la combustión de los automóviles y micros
que no detienen los motores durante el control y el mal funcionamiento de los extractores. El
personal con frecuencia sufre problemas respiratorios e irritación ocular y refieren carencia de
barbijos, guantes anti corte (con riesgo de accidentes ya que los turistas no advierten si traen
elementos cortantes o punzantes) ni otros elementos de protección personal.
Se constata en la inspección la falta de instrumental de trabajo apropiado, las fosas de revisión
vehicular no operativas, el equipamiento informático inadecuado y la ocurrencia de frecuentes
cortes de suministro eléctrico que paralizan la tarea. Solo hay un sanitario en la planta superior
junto a las oficinas, compartido con los demás organismos
La sobre exigencia de trabajo en un clima laboral hostil, por el mal trato que reciben de los
pasajeros por demoras, cobro de impuestos, etc, afecta la eficacia de los controles y genera
agotamiento psíquico, físico, stress y negativismo a los aduaneros, que llegan a trabajar durante
dos semanas seguidas con solo un fin de semana libre. Si bien hay deficiencia de personal
también es notoria la inadecuada organización del trabajo en este crítico punto fronterizo
- Casa Habitación en Horcones: Recientemente remodelada y con un proyecto de
construir un nuevo edificio, se accede a través de un túnel a los dormitorios, salón
comedor, cocina y sanitarios. En el piso superior se alojan los trabajadores chilenos.
169
La aduana dispone de 8 dormitorios para 3 ocupantes cada uno, con baños independientes y en
buenas condiciones. En temporada alta las instalaciones son insuficientes debiendo el personal
de refuerzo pernoctar por su cuenta en algún alojamiento alejado del complejo.
Se constata descuido, desorden y falta de mantenimiento general de las instalaciones, con
residuos a la intemperie fuera de los contenedores y mercaderías de secuestro dispersas en el
exterior. No hay señalización de circulación ni de advertencia de riesgo, con materiales
desechables arrumbados en el piso. En el interior el salón comedor es confortable, se halla
prolijo y bien calefaccionado, con buena iluminación. No así la cocina que presenta vajilla,
utensilios y batería de cocina deteriorados y con evidente falta de limpieza.
ACI – Complejo Uspallata
Con una dotación de 15 aduaneros en el día y 7 u 8 por la noche se realiza el control las 24
horas de todos los camiones que ingresan y salen de y hacia Chile (en promedio circulan
diariamente de 1000 a 1400 vehículos). El edificio es moderno y amplio, bien iluminado y
ventilado, con sanitarios para ambos sexos y con adecuados muebles de oficinas.
170
Los controles de documentacion y precintos en el ingreso y egreso de la zona primaria aduanera
se realizan desde dos casillas precarias, sin calefaccion ni refrigeracion, en los extremos del
playon de tierra de operaciones, en condiciones adversas por la polvareda que continuamente
se levanta con los vientos y el barrial que se forma con las lluvias y los deshielos. Durante la
noche falta iluminacion en el predio y hay inseguridad por no estar completo el alambrado
perimetral.
La inadecuada ubicacion de las casillas ademas, genera alto riesgo de accidente vial por el
desplazamiento de los transportes sobre una superficie irregular y resbaladiza. No cuentan con
ningun tipo de barreras de contencion.
171
Si bien el complejo se encuentra en obras con un importante proyecto de ampliacion y
modernizacion (para diciembre de 2017) que mejoraran la actividad de contralor, las actuales
condiciones de trabajo, con jornadas que se extienden en ocaciones a mas de 20 horas seguidas,
afectan la salud y calidad de vida de los trabajadores.
Con un criterio de selectividad se scanean los camiones y de presentar irregularidades o
presuntas infracciones se procede a la revision de las cargas en la darsena.
El galpón para revisión de mercaderías es moderno, pero con insuficiente espacio y un pequeño
deposito que no cubre las necesidades operativas. Se constató fallas en los sistemas de apertura
de los portones de acceso, que en más de una ocasión se desprendieron generando riesgo de
accidentes.
172
El complejo cuenta con dos escáneres de camiones, uno adecuadamente emplazado en un
galpón, con radio de exclusión radiante delimitada y cartelería de precaución y otro a la
intemperie, sobre piso de tierra y sin ningún área de restricción; no cumple las mínimas
normativas de seguridad.
(* Dr. Juan Sancineti. C. P. Higiene, Seguridad y Ambiente de Trabajo – SUPARA-DGA)
173
DOCUMENTO SOBRE ESCANERES: Los aparatos básicamente utilizan rayos x para
producir imágenes por contraste, que reflejan la capacidad diferencial de los objetos, según su
estructura material, de ser atravesados por la radiación utilizada. Cuando se descubrieron los
rayos x, rápidamente la medicina los adoptó como forma de “ver” el esqueleto humano sin
producir intervenciones quirúrgicas. El conocimiento previo de la anatomía y la diferenciación
sencilla entre tejidos blandos y duros (óseos), permitió rápidamente asimilarlos a su uso
diagnóstico.
A medida que se incrementa la complejidad de los materiales examinados, se dificulta la
capacidad de reconocer las diferentes materias que se pueden visualizar. Como señala una
empresa dedica al entrenamiento de personal especializado: “Los escáneres de rayos X se
utilizan en todo el mundo para inspeccionar el equipaje y la carga en busca de artículos
prohibidos cultos, sin embargo, los escáneres no pueden identificar imágenes sospechosas sin
operarios formados y capacitados para ello.”20
En gran medida, el aprendizaje deviene de la práctica profesional acumulada, mediante la
comprobación directa de aquello que genera una imagen sospechosa en el aparato. Por su
supuesto, la capacidad de aprender de la experiencia a discriminar entre imágenes sospechosas
y aquellas que no lo son, es característica de cada individuo.
El organismo no aprovecha los expertos que se van formando espontáneamente como recurso
para la capacitación del resto del personal afectado a la tarea de controlar bultos, vehículos y
contenedores con esta tecnología. Crear un banco de buenas prácticas y distinguir a los mejores
expertos propios como capacitadores, parece una forma sistémica de alentar un aprendizaje
colectivo que redunde en una mejora de la cultura organizacional.
Esto es más grave en el caso de narcotráfico, pues según surge de informes oficiales de acuerdo
a lo publicado por la prensa argentina, los escáneres “no tienen capacidad para discernir entre
"sustancias orgánicas o inorgánicas"21. Siendo este un tema de alta sensibilidad política y que
genera un elevado grado de exposición involuntaria a la sospecha penal del personal aduanero
afectado, la capacitación debería extremarse, así como debería resguardarse al personal
mediante un protocolo de actuación que permita certificar el apego a la normativa vigente, en
cada uno de los pasos que vaya dando.
En el playón de verificación de camiones ubicado en Río Gallegos, quien habitualmente opera
el escáner, confiesa no haber recibido ninguna capacitación específica para esa tarea y consultar
en caso de duda, al superior inmediato. Algo que no lo tranquiliza demasiado, por las
consecuencias legales que puede implicar habilitar el paso de una mercadería prohibida.
Otro trabajador, en el Paso Integrado Austral (PIA), también dependiente de la Aduana de Río
Gallegos, nos relata su método de aprendizaje, tomado a su vez de un capacitador. Cada imagen
que no se identifica en el escáner, verificarla directamente y tomar fotografías de ambas
imágenes, para conformar, de a poco, un catálogo propio de representaciones de bultos y
sustancias.
20 http://www.sgsgroup.com.ar/es-ES/Public-Sector/Monitoring-Services/Scanning-Services/Scanner-Training-
Services.aspx
21 http://www.lanacion.com.ar/1599569-los-escaneres-de-los-puertos-no-detectan-drogas
174
6. Temas recurrentes observados
1- Lugares inadecuados para las actividades que se desempeñan. Muchos edificios en
los que se cumplen tareas no pertenecen al organismo, no fueron diseñados
especialmente para las funciones que deben cumplir o quedaron rezagados para el
volumen actual de tráfico de personas y mercaderías. Los funcionarios o personal de
Aduanas no pueden por iniciativa propia repararlos, equiparlos o adecuarlos para una
mejor funcionalidad.
Esta dificultad es más notoria en los espacios operativos donde se realiza el control
directo de la mercadería, los vehículos y las personas que procuran salir o ingresar a
territorio nacional. En muchos casos se trata de lugares que brindan escasa cobertura
ante los factores climáticos, en zonas donde temperaturas extremas, vientos y lluvias se
trasforman en exigencias agregadas al desempeño laboral. Por lo demás, el intenso y
creciente flujo hace que los trabajadores deban cumplir sus extensas jornadas de pie y
con dificultades para atender sus necesidades fisiológicas. Tales son los casos que
reportan espontáneamente trabajadores de los pasos fronterizos de La Quiaca, Puerto
Iguazú, Posadas, Mendoza o Paso de los Libres.
2- Personal insuficiente. Sobrecarga horaria del personal existente. El grueso de los
trabajadores operativos se expone a largas jornadas laborales, ambicionando los
ingresos extraordinarios que les reportan, sin reparar en las consecuencias de mediano
plazo para su salud. La sobrecarga laboral dificulta además el acceso a los servicios de
salud; en muchos casos, en especial en áreas de frontera, muy distante, escaso y privado.
El organismo no realiza controles periódicos de salud a sus integrantes, en particular de
aquellos expuestos a condiciones ambientales extremas. Esos controles deberían ser
útiles para prevenir posibles enfermedades y para determinar si los trabajadores no se
ponen en riesgo al realizar determinadas tareas.
Una situación que destaca en este sentido es la del personal de la Aduana de Jujuy, parte
del cual una vez al mes debe prestar servicios por una semana en Paso de Jama, situado
a 4.200 metros sobre el nivel del mar, lo que supone un traslado de 349 kilómetros
desde Jujuy y un ascenso de 2940 metros22, que los obliga a periódicas adaptaciones a
la altura, para trabajar en un ambiente enormemente seco, con 30 grados de amplitud
térmica entre el día y la noche y con extremos en invierno de 23 grados bajo cero de
temperatura. Este mismo paso reportaba en 2007 el tránsito anual de 150 mil personas,
las que ascendieron en 2011 a 350 mil. Un flujo que impone un trabajo intenso y sin
interrupciones para el descanso, que dura las 15 horas diarias que permanece abierto
(de 8 a 23 horas). Un caso similar, aunque con menor flujo de tránsito por el momento,
es el del paso de Aguas Negras en San Juan.
22 San Salvador de Jujuy se encuentra a una altura media de 1.259 metros sobre el nivel del mar.
175
3- Equipamiento exiguo e inadecuado. Informatización insuficiente de procesos
administrativos. Multiplicidad disfuncional de sistemas de recopilación y
procesamiento de la información recabada. No existe una red informática interna
unificada. Tampoco una red de comunicaciones. Los medios de control no invasivo son
insuficientes y el proceso de su reparación o reposición en caso de desperfectos de
artefactos de contralor, es muy lento y engorroso. En muchos casos las instalaciones
eléctricas son obsoletas y precarias y no cumplen con los parámetros mínimos de
seguridad exigidos por el mismo Estado para su habilitación. El mismo suministro
continuo de energía eléctrica no está asegurado en todos los casos, lo que hace que
muchas veces los equipos queden fuera de servicio. Algunas dependencias cuentan con
equipos generadores de respaldo en caso de interrupciones, pero son de poca potencia
y padecen los mismos inconvenientes de falta de mantenimiento y refacciones que el
resto de los equipos de la institución.
4- Problemas habitacionales. La organización no facilita el acceso a la vivienda
adecuada al personal ni su traslado, en caso de ser exigido por razones operativas. Por
caso, en Salvador Mazza (Salta) personal asignado desde Buenos Aires debió
permanecer seis meses alquilando una habitación de hotel hasta lograr la contratación
particular de una vivienda. En la misma localidad, cumplir tareas en Misión La Paz23
(a 156 kilómetros de distancia y 3 horas 22 minutos de viaje sin tráfico) supone hacer
el recorrido en vehículo propio y pernoctar por una semana en un deteriorado refugio
perteneciente a la institución.
La oferta de vivienda en muchas localidades de frontera es escasa y además cara. Eso
dificulta el acceso a residencias adecuadas, sobre todo en el caso de personas que no
tienen asegurado un tiempo mínimo de residencia, como son los aduaneros.
5- Ropa de trabajo inadecuada. El organismo no provee a su personal operativo de
uniformes adecuados para las características climáticas de los lugares en los que se
desempeñan. Idéntico para el invierno en La Quiaca, que en Iguazú o el Paso Integrado
Austral. Lo que se provee es además escaso. Gran parte de las tareas que se realizan de
control de vehículos y mercaderías deben cumplirse a la intemperie en sitios de
ambientes exigentes, con grandes amplitudes térmicas en el día y según las estaciones.
Como el mismo personal realiza muchas veces las tareas de contralor y las de registro
informático de los datos recabados, alterna ambientes externos extremos e internos
climatizados de manera permanente, sometiéndose a estrés térmico.
23 Misión La Paz – Pozo Hondo. El Paso Fronterizo Misión La Paz - Pozo Hondo se encuentra cercano a la localidad de
Misión La Paz, provincia de Salta, comunicando la República Argentina con Paraguay. Desde el lado argentino se accede a
través de la Ruta Provincial Nº 54 y Ruta Nacional Nº 86, hasta la localidad de Misión La Paz (Ar) - Pozo Hondo (Py).
Las Autoridades de control en Argentina son Gendarmería Nacional Argentina, a cargo de seguridad, control migratorio y
fitozoosanitario por funciones delegadas, y la Dirección General de Aduanas. El horario de atención al público es de 24 hs. y
se encuentran habilitadas todas las categorías Migratorias. En cuanto a las operatorias Aduaneras se encuentran todas
habilitadas incluyendo TVF y excepcionalmente Régimen de Equipajes. (Información del Gobierno de Salta)
http://internacionalsalta.gob.ar/index.php/gestion/pasosfronterizos/pfparaguay/misionlapaz)
176
6- Instrumentos de control. Equipamiento insuficiente Tampoco cuentan todos los sitios
con herramental básico y suficiente provisto por el organismo. En muchos casos, el
personal trabaja munido de sus propias herramientas. Por ejemplo, el personal de pasos
fronterizos carece de espejos de inspección vehicular24. Muchos de los pasos tampoco
disponen de fosas para la revisión de los fondos de los vehículos. Ver al respecto lo que
prescribe sobre la infraestructura y el equipamiento instrumental, la normativa de 2004
para el servicio de Aduanas de Perú, dictada por la Superintendencia Nacional de
Aduanas y Tributaria (SUNAT) de Perú25, organismo equivalente a la AFIP argentina.
7- Estrés crónico. La insuficiencia de recursos técnicos, las falencias edilicias, la
sobrecarga de trabajo y las exigencias burocráticas, las responsabilidades legales
inherentes a la tarea, la inevitable comparación con las capacidades y recursos de otras
agencias públicas con las que se comparten espacios de trabajo por realizarse tareas
convergentes o con las agencias homólogas de los países limítrofes con las que se
comparten ámbitos de trabajo y tareas, junto a la percepción de estar bajo una
permanente sospecha, afectan a parte del personal que se encuentra en una situación de
estrés crónico que afecta su salud.
8- Cansancio moral. Para una organización cuyo deber ser consiste en controlar e impedir
el tráfico ilegal de mercancías, ser espectador pasivo de las severas erosiones que
impone a su accionar la realidad estructural de la frontera, genera un cansancio moral
que inevitablemente relativiza su compromiso con la tarea asignada por la política
pública que encarna.
Esta situación se reitera en los diferentes puntos, pero es más notoria en aquellas zonas
en las que existen poblaciones fronterizas importantes, de un lado u otro del límite. En
las inmediaciones de La Quiaca, por ejemplo, los antiguos senderos entre Yavi (capital
colonial de La Puna) y Tarija (Bolivia), pueden ser recorridos en vehículos con doble
tracción y motocicletas, sorteando cualquier control fronterizo. Lo mismo sucede a 300
metros del Paso Internacional de La Quiaca, en este caso a pie, según consta en
denuncias periodísticas26 sobre tráfico de personas con el objeto de trata.
9- Presión de la opinión pública. En diferentes tareas y en distintos lugares del país, los
aduaneros reportan ser víctimas de agresión por parte del público. En algunos casos,
reportan escenas de violencia en los controles, ya sea porque los responsabilizan por
las demoras, sea porque las personas que salen o ingresan al país, en especial
connacionales, rechazan los controles y les adjudican el carácter de maniobras
intencionales motivadas por intereses corruptos.
24 http://espejosparainspeccionvehicular.com/productos.html 25 http://www.sunat.gob.pe/legislacion/procedim/pcontrab/instructivo/ipcf-it.02.00.01.htm 26 http://www.investigacionesfopea.com/trata-personas-jujuy/#32
177
En otros reportan ser agredidos por vecinos de las localidades donde residen, por el
hecho de ser reconocidos fuera del ámbito de trabajo por personas a las que fiscalizaron.
Tanto en Posadas, como en Paso de los Libres, Río Gallegos o Mendoza se sienten
pertenecientes a una institución que la sociedad sospecha de corrupta, a diferencia de la
AFIP y ese desprestigio agrega una presión más, que desvaloriza su lugar de trabajo.
10- Insuficiente capacitación. Los trabajadores de la Aduana se quejan de la insuficiente
capacitación que tienen, sobre todo en áreas críticas y de la desprotección legal a la que
están expuestos. Respecto de la primera cuestión, la introducción de escáneres de
vehículos en especial, sin la debida formación previa de los operadores los confronta
con la amenaza de dar paso inadecuadamente a vehículos que tendrían que haber
detenido. Mediante la acumulación individual de experiencia y la consulta horizontal
con otros trabajadores, el personal solventa a su costo esta falencia institucional.
En forma paralela, al no estar establecidos protocolos de actuación, su intervención en
cada caso puede ser objeto de observaciones judiciales frente a las cuales no tienen
ninguna protección y a las que deben responder por su cuenta y a su costo.
Resultados convergentes
Las conclusiones a las que arribamos como fruto de nuestra observación directa y de nuestra
escucha de los comentarios que realizaron los trabajadores que entrevistamos en todo el país,
son a su vez convergentes con los resultados que arrojan los cuestionarios autoadministrados,
tanto en la serie de preguntas estandarizadas por la OIT-OMS, como en el conjunto adicional
que nosotros incorporamos.
178
7. Síntesis final
La precariedad de las condiciones de trabajo es notoria. En la mayoría de los casos se trata de
situaciones fácilmente prevenibles, que no han sido solucionadas por falta de presupuesto,
trabas burocráticas o simple desidia de las autoridades. En muchos centros de trabajo la falta
de personal es evidente y constatable con comparaciones realizadas en centros de trabajo
equivalentes e incluso con la dotación de personal de otras agencias estatales que actúan en los
mismos lugares.
En todos los centros de trabajo las personas entrevistadas han manifestado un alto compromiso
afectivo y sentido de pertenencia con la Aduana, hecho que en muchos casos atenúa las
condiciones negativas de trabajo, aunque en sentido contrario la falta de reconocimiento de
dicho compromiso configura un factor negativo.
El alto nivel de estrés de las tareas parece potenciado por circunstancias prevenibles y
acumuladas durante años (conflictos constantes con pasajeros y despachantes de aduana, riesgo
de imputación penal e incluso detención carcelaria en casos de tráfico de drogas, falta de
personal, separación de la comunidad y la familia para trabajadores en áreas de frontera,
instalaciones y equipamiento inadecuados, horarios excesivos, tareas y ambientes de trabajo
insalubres e inseguros, etc.).
En la mayoría de los centros de trabajo existe una conciencia colectiva sobre las malas
condiciones de trabajo, en muchos casos con daños emocionales o familiares-comunitarios,
que por definición no pueden ser compensados económicamente.
Destacan los siguientes aspectos:
1. Sobrecarga laboral e intensificación del trabajo
La sobrecarga laboral a la que están expuestos los aduaneros parece corresponder a una cierta
tradición, naturalizada entre los trabajadores, que la tienen incorporada al paisaje de sus vidas
como se evidencia en varios relatos de episodios familiares que fuimos recogiendo en
diferentes lugares, Ir a ver al padre al trabajo, para tener algún contacto con él, por ejemplo,
como nos relató quien estaba terminando su jornada en Puerto Iguazú.
Esta premisa de vivir en el trabajo y para el trabajo, tiene un efecto silencioso pero devastador
en la salud psíquica y física de los afectados. Progresivamente se instalan hipertensiones,
trastornos en el sueño, aislamiento, deterioro de los vínculos familiares y sociales, trastornos
de la alimentación, entre otros factores de riesgo e indicadores de estrés crónico.
Esto para muchos ahora entra en crisis, por la intensificación del trabajo que produce el
paulatino incremento del flujo fronterizo a medida que se afianza el turismo y el comercio
internacional. Ese mayor número de vehículos, mercaderías y personas en tránsito, no tiene
correspondencia con la ampliación del plantel de personal de la Aduana. El resultado es mayor
presión sobre los que se encuentran trabajando. Una población envejecida con muchas horas
semanales de labor, trabajando a un ritmo cada vez mayor, con permanente exigencia de
concentración en tareas complejas que pueden tener consecuencias penales para el agente. Es
un combo que pocos desearían para sí.
179
2. Violencia sobre los aduaneros
Otro elemento que destaca en lo que señalan los aduaneros consultados, además del mayor
volumen de trabajo, es la violencia del trato de los pasajeros argentinos contra los aduaneros.
Muchos de quienes transitan por las fronteras hacia países vecinos o regresando de ellos,
repudian activamente cualquier medida de control y la asocian en su imaginario a la corrupción
estatal.
En las localidades de frontera además la convivencia entre los controlados y los controladores
conlleva la posibilidad de represalias, como las que registramos en Orán, Posadas o El Calafate.
Si bien sólo en un caso registramos comentarios de violencia física directa, el acoso no es
menos intimidación. En algunos trabajadores el reflejo defensivo que adoptan frente a esta
presión comunitaria desfavorable es el aislamiento social.
Más allá de los episodios extremos, la protesta frente el accionar de los controles aduaneros es
muy frecuente y el organismo no capacita al personal para lidiar con ese malestar.
3. Lugares y equipamiento inadecuados
Los espacios en los que se desenvuelve la actividad, en especial en pasos de frontera, son casi
sin excepción inadecuados ya sea porque no han sido construidos para las funciones que
actualmente cumplen, porque no tienen el mantenimiento adecuado o porque están
sobrepasados por el volumen de tránsito actual.
La dependencia de administradores pertenecientes a otros organismos agrega una dificultad
adicional a la hora de reparar los ámbitos de trabajo para remediar el deterioro producido por
el uso, el accionar de los elementos o el paso del tiempo. Como verificamos en los pasos
cordilleranos de Santa Cruz, hasta la habilitación del servicio de baños públicos para los
transeúntes se perturba por las restricciones que impone la administración fáctica encomendada
a agencias de seguridad.
Del mismo modo, este divorcio entre los que deben desarrollar su actividad profesional y
quienes administran los espacios en los que ella se desenvuelve, obstaculiza el diseño y la
construcción de instalaciones adecuadas para el uso aduanero, como pudimos verificar, entre
otros lugares, en el CoTeCar de Paso de los Libres.
El equipamiento inadecuado resalta para los trabajadores como un elemento muy significativo
de frustración profesional (ver ítem Tecnología de los cuestionarios), además de impedir un
desempeño eficiente. La pertenencia funcional a la Administración Federal de Ingresos
Públicos no se traduce en una equiparación de los recursos disponibles y, al contrario, genera
el sentimiento de estar desconsiderados por las autoridades de la AFIP.
Si bien la AFIP contempla en su estructura dependencias relacionadas al control de gestión e
infraestructura edilicia y un servicio médico propio, no cuenta con un Servicio de Higiene y
Seguridad del Trabajo ni un Servicio de Medicina Laboral formalmente constituido como exige
la legislación vigente (Ley 19.587 y Ley 24,557, Decretos 351/79 y 1338/96 y Res. SRT
905/2015).
180
Esta situación particular genera deficiencias en los controles sobre los edificios por ausencia
de un plan coordinado y sistemático de saneamiento y mejoras de las instalaciones y ámbitos
de trabajo, acorde a las posibilidades presupuestarias del organismo. Respecto a las funciones
referidas a medicina laboral que desarrolla el servicio médico, son inadecuadas ya que no
realiza controles periódicos de salud ni programas de prevención de enfermedades, necesarios
para cuidar la salud de los trabajadores.
4. Estructura de los ingresos
La estructura de los ingresos que perciben los aduaneros incentiva su sometimiento a un
régimen discrecional de servicios extraordinarios. Pero además el mismo no es voluntario, pues
la institución cuenta con mecanismos formales e informales para exigirlos y, eventualmente,
sancionar al trabajador que desista de ellos.
En especial esto es grave en el mediano y largo plazo para la salud de los afectados porque
muchas veces no es factible respetar las doce horas de descanso obligatorio entre jornada y
jornada, aunque mas no sea porque se pernocta en el mismo lugar de trabajo durante siete días
corridos o más.
Los mecanismos informales de sanción a quienes se desligan de las obligaciones impuestas de
cumplir servicios extraordinarios se potencian por la ausencia de instancias controladas de
calificación de los trabajadores y de un sistema de promoción en la institución que no sea
discrecional.
5. Ausencia de capacitación y de protocolos de actuación
Aduana no capacita de manera sistemática y continua a su personal pese a que el universo de
mercancías que forma parte del tráfico internacional está en permanente evolución, del mismo
modo que las estratagemas de quienes procuran eludir la fiscalización estatal, en especial en
casos de narcotráfico.
Así la responsabilidad final de saber qué se está controlando y cómo debe ser controlado resulta
privatizada en la persona del agente que realiza cada control individual, cuando debería ser ese
accionar la expresión institucional del organismo público y contar con el respaldo de una
cadena de responsables.
Esto se evidencia claramente en las consecuencias de la ausencia de protocolos de actuación a
los que atenerse para cumplimentar adecuadamente la función asignada. En caso de
requerimiento judicial el organismo no tiene pre establecido cuál es la tarea que exige en
concreto en cada caso ni cómo debe cumplimentarse satisfactoriamente.