Upload
others
View
8
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
A Rubén Bonifaz Nuño: As de oros. UNAM.México. 1981. 86 pp .
UN JUEGO DE NAIPESMARCADOS
" A lo mejor le atinas. suerte.y el as de oros de la noche abismasy la cama de amor. Me valgantu barajada estirpe y la implacablellave del orden imprevisto"
los naipes: antiguos sellos emblemáticos que sin embargo se siguen barajando en un juego cambiante y cotidiano. Cada naipe que cae sobre lamesa aparece arrojando un simbolismosiempre fijo pero que siempre. a su vez.viene a modificarlo todo. En 1966 elpoeta publicaba Siete de espadas Sieteversos apretados habían cortado a filocertero cada figura de poema. Si lasuerte estaba echada. todo prefiguraríaen ese libro la aparición. más de quinceaños después. de As de oros. Cartasdistintas. estos dos libros están unidossin embargo por la complicidad de unjuego que continúa. En Siete de espadas las palabras se encabalgan de unmodo ceñido. hermético. obsesivo. Conla madurez de la escritura. el as de orosviene a vencer esa especie de conjurode la forma ("el conjuro de las siete espadas/ nuestras de cada día") y conduce al poema por nuevos caminos dedistinción. El poeta ya anunciaba. enSiete de espadas. la aparición del as deoros como un golpe de suerte:
Quince años de trabajo -mediados porotros dos Iibros- solidificaron en el cielode la página un astro solar. Claridad. renacer del sujeto. nuevo amanecer de las palabras. permiten homologar al As de oros con el sol. Y es justamente una de las metáforas finales del
Entre el azar del juego poético y la necesidad de la métrica . entre la fijeza de lahistoria mitológica y la movilidad dela evocación subjetiva . crece la obrade Rubén Bonifaz Nuño como una manera siempre otra de reescribir lo mismo. (Susurrándonos la clave. el poetaya había titulado De otro modo lo mismo a la recopilación total de su obra) .Modos de escribir. modos de ser. modos de componer. El verso hermético oel transparente acompañan el crecimiento de la primera persona en susavatares de identidad y cambio :
Bonifaz Nuno
poema. la segunda persona femenina. Esun regreso a la memoria del autor a través de la memoria universal del mito:
" Otra vez comienzoel regreso aquél. por las delgadaslargas piernas blancas de Yocasta"
"Amé también los labios purosde la sabiduría ; su juegoilustre de lumbres y palabras.con su interestelar ascensode enlazados cuerpos. de ciudades-eternas fundadas sobre el canto ;(oo .)y he cambiado. Sordo encanecido.una oficina soy. un sueldo ;veinte mil pesos en escombrosy un volkswagen. y la nostalgiade lo que no tuve . y el insomnio.y cáscaras de años devaluados. "
Así. en la peculiar escritura de BonifazNuño. las palabras mismas son como
%%%% %S ss SS$S:s s s
Como un mazo de cartas. la obra de Rubén Bonifaz Nuño despliega para el juego poético sus múltiples figuras. Casicuarenta años separan los sonetos deLa muerte del ángel (1945) de estospoem as reunidos en As de oros (1981).Son años de exploración y conformanuna cadena de recursos divergentesque sedimenta. sin embargo. en laidentidad sólida de la obra.
El jugador tira ahora su As de orossobre la mesa y nos enfrenta con unanueva f igura que se impone y resplandece. Es un naipe con dos marcas: deun lado la modernidad. del otro el clasicismo. Hábil truco aprendido en el juego de la escritura. gracias al cual Bonifaz Nuñó recupera los textos clásicoscomo telón de fondo del libro moderno.Traductor al fin -desde ese cálido paternal ismo que cuida la escritura ajenacon la fidelidad de la propia- el poetareescribe de nuevo sus lecturas antiguas. Hipól ito, Judá . Ciniras. Ulises. Teseo. Isaac. Capaneo. Eneas. Tiestes.Arnn ón. Edipo. se titulan los poemasque dan ap értura a las once partes deAs de oros Sellos mitológicos indelebles se leen. sin embargo. a la luz deotra marca que los borronea y los transforma : la del autor. Así. desde el fondode once dobles. espejea la subjetividadde este libro :
" Alguien que fui me está mirando.y mirándolo estoy. y miroen el que fui que soy. Y claro.multipl icado por espejosde siglos. me alcanzoy me enriquezco"
Endecasílabos y heptasílabos que también dicen. en primera persona. historiasde amor viejas y nuevas. Fedra.Tarnar, Penélope. Yocasta. tejen desdesu lugar en el mito la posibilidad de queaparezca. en el tiempo presente del
39
!II
I Ii
.i I' !i !1
libro la que nos proporciona esa clave.Desglosando el título -que desde latapa era su escudo. sello. marca de naipe- esa operación metafórica nos lodevuelve como resplandor. diseminación. luminosidad poética :
"Y ahora raya al esperarme-oros es triunfo- el as del cielo"
Tamara Kamenszain
: % % $%% $ $
RETORICAY
REFRITO
para Farrel du Bose
Mariano Azuela (1873-1952) y su obraliteraria se han tomado como pretextoy condimento de todos los discursos:estandarte de la Revolución . del Nacionalismo y hasta del México- Contemporaneo: punta que lanza de lanovela-ida -~a\- ,Revol ué ióm-mexicana yahora de la-novela-urbana; de paradigma ejemplificante de lo-bueno-para-elpaís . pasa a receptáculo de calificativosdefinitorios tales como antirevolucionario. Reaccionario. Pequeñoburgués yotros 'tantos. Salvo excepciones muymeritorias - Mendoza. Chumacero. yBlanco-. la valoración de la vida y obradel novelista de Lagos de Moreno seha supeditado al. en momentos. estorboso eje de la Revolución : se le colocaen los extremos de a favor o en contra;se le coloca como sujeto a periodizaciones hoy manidas : pre, re y posrevolucionario. Parece inevitable la reducción de su obra literaria. ya que usualmente se le valora a partir de las tres ocuatro novelas más populares. y de laparte de las memorias del propio novelista donde alude a estas mismas. elresto de la obra parece velar un olvidoeterno. El libro Literatura e ideología : elprimer MarianoAzuela (1896-1918) deJorge Ruffinelli. es el ejemplo más reciente de este tipo de crítica que valoraa la literatura y a la persona de MarianoAzuela en uno de los extremos mencio nados y siguiendo la tónica de la reducción de un universo .
.& . Jorge Ruffinelli: Literatura e ideologla: elprimer Mariano Azuela (1896-1918). Preml6Editora.México 1982. pp. 118.
En ciertos ámbitos culturales. académicos y periodísticos. la crítica litera ria ha comenzado a vest ir un ropajemuy de moda en América Latina : lalectura -política-de-Ios-textos. Aunquedesde siempre la ideología está entodo y todo es ideología. parece quehay como una consigna de escribir de ysobre política e ideología en las obrasliterarias. más aún si estas se encuen tran cercanas a periodos de una Revolución o de una Crisis Polít ica. tan frecuentes en nuestros parajes. Pese a lasmuchas y sensatas racional izacionesque pueden justificar esta conducta.comienza a resultar agotador observar
.cómo del anál isis de la ars poetica sepasa al análisis de la ars política. Pero loagotante no es el simple camb io de lopoético por lo político. sino que la consigna ha crecido como una epidemia de"ideologitis" con su consecuente retóri ca. Esto lleva a observar cómo el objetivo del análisis literario ideologizante termina por sesgar las lecturas y por hacerdel ejercicio de la crítica literaria unapráctica de las parcializaciones. Yellibrode Ruffinelli también es un buen ejem plo de este tipo de crítica.
En Literatura e ideología el autor sefija como meta la demostración de quela ideología es algo omnipresente quese filtra y aparece por todas partes.Para llegar a ella concentra su atenciónen los lugares predecibles : las -
condiciones-de-clase. las-condiciones-históricas y las-influencias-socio-culturales que se convierten en los-ele mentos-condicionantes de la " producción intelectual" del artista. Parala demostración in situ de que tal fenómeno es real. procede al análisisde las novelas que Mariano Azuela escribe hasta 1918. (Si se quiere se puede invertir el orden : de la lectura de lasnovelas descubre cómo se manifiestala omnipresencia de la ideología . El orden no altera el producto.) De su análisis. el crítico rescata del novelista algunas ideas. pasajes. argumentos. aclaraciones y recuerdos provinientes de lasmemorias y de las novelas aunque .cabe aclarar. dicho procedimiento noaporta nada novedoso.
Desde los títulos del libro y de loscapítulos se revela la ambición de hacer un trabajo crítico riguroso dondegana la opulencia -yen momentos elornamento. La organización del librodescubre una pretendida dosificación
40
del material expuesto. En los siete capítulos. la concl usión y el anexo Ruffinell i expone lo que podr ía verse comola trayectoria ideológica del novel istade la Revolución . Uno a uno los capítulos son : "Azuela : literatura e ideología", presentación introductoria del ensayo; " La herencia del natura lismo".análisis de María Luisa (190 7) y sus resonancias naturalistas ; " El novelistacomo crítico social" , donde se revisaLos fracasados (190 7); " El espacio rural" o la lectura de Mala yerba (19091y. de pesadita. de Sin amor (19 12): " Elnarrador parcial y apasionado " dondese vent ila a Andrés Pérez. maderista(1911 ) y a Los caciques (191 61; " Pueblo desatado. raza irredenta" atiende aLos de abajo (191 5) y se acompañ a del"Excursus: cuatro versiones en parale-lo" , donde se compara la versión deAzuela de la toma de Zacatecas. frentea otras versiones. un corrido y dos cró nicas mil itares; " El tr iunfo de los derro tados" es un comentario a Las tribulaciones de una fam ilia decent e (19 181.a Las moscas (1918) y, un poco másrapidito , a Domit ilo quiere ser diputado(1918) ; las " Conclusiones" , obvio. sonuna recapitulación global. El " Anexo"es un comentario crít ico en torno al li bro de Stanley Robe, Mariano Azuelaand (he Mexican Underdogs (1979).
El crít ico trueca el rigor por la habiíidad. Esto com ienza a manifestarsedesde el cap ítulo de presentac ión ," Azuela: literatura e ideología" . Aquí.en seis páginas, logra resolver el esquema típico del planteamiento de unainvestigación seria. académ ica si sequiere. Los pun tos que trata son: alPresentación de Mar iano Azuela y suépoca para justif icar el por qué de suempleo como ejemplo : b) Explicaciónde la vinculación de literatura e ideología. tema a investigar: e) Presentacióny precisión de su concepto de ideología. para lo cual se vale del amparo dela cita y la paráfrasis de André Prevost.Luis Villoro y M ichael Lowy: d) Justifi·cación de por qué circunscribe su ensayo a las fechas de lo que él llama " elprimer Mariano Azuela" y; e) Presentación del it inerario por donde viajará suinvestigación . Sin embargo. la presen tación del crítico deja ver que su pretensión tiene lim itaciones: la seriedad y
el rigor adquieren el tono y el tratamiento del trabajo escolar común enun fin de cursos -lo que implica tarn-