3
Nº 232 • Mayo • 2009 Capital Humano 24 DESARROLLO DE LOS RR.HH. Nos ha tocado vivir en un mundo que cambia de forma acelerada, compleja y cada vez más competitiva. Este proceso obliga a las empresas a variar sus estra- tegias no dejando nada al azar, adap- tándose al mercado, generándose en las mismas un clima de incertidumbre, temores y precipitación que requieren un liderazgo no solamente centrado en el negocio sino en las personas. No existe empresa que disfrute per- manentemente de una tranquilidad sin alteraciones o tenga siempre buena suerte. Las organizaciones y las personas se sienten amenazadas por un número mayor de fuerzas que avanzan rápidamente, son imprede- cibles y resultan muy difíciles de con- trolar. Peter Drucker decía “lo único que evoluciona por voluntad propia en una organización es el desorden, la fricción y el bajo rendimiento”. ¿Qué circunstancias influyen en los cambios del entorno? LA GLOBALIZACIÓN Formamos parte de un mundo en el que todo está muy cercano, lo cual conlleva muchísimas oportunidades pero también surgen infinidad de amenazas que debemos gestionar. Formamos parte de una sociedad glo- bal mucho más competitiva y, sobre todo, mucho más próxima. Cuando se produce un acontecimiento en un continente, afecta a los demás, y vi- ceversa, de forma más inmediata que en épocas anteriores. Cuando un país estornuda, el otro se constipa. Varios bancos y compañías de seguros han entrado en situación de quiebra y los gobiernos han teni- do que salir en su auxilio con el fin de comprar sus créditos incobrables intentando equilibrar el mercado fi- nanciero en el que se ha generando una crisis de confianza mundial de in- calculables dimensiones. La Banca en muchos países, entre los que se inclu- ye España, había realizado inversiones en estos fondos, cuyas pérdidas le han generado una falta de tesorería im- portante que condiciona su estrategia de clientes y de productos. Aparecen en el mercado ofertas de captación de depósitos por encima del precio del mercado interbancario y de la infla- ción y como contrapartida se encarece el precio de los préstamos y créditos. Se analizan los riesgos de los clientes de forma más rigurosa y se evita fi- nanciar viviendas por encima del 80 por ciento de su valor de tasación. El valor de las tasaciones desciende, el precio de la vivienda también, pero los consumidores no encuentran financia- ción acorde con sus necesidades, por lo que cae en picado la adquisición de vivienda nueva y de segunda mano. El que quería vender se espera y el que quiere comprar y tiene dinero también porque intuye que los precios seguirán bajando. Todo esto genera una crisis no solo en el sector inmobiliario sino en los vinculados a éste: empresas de cemento, mármol, cerámica, madera, yeso, hierro, transporte, muebles, etc. Las empresas están preocupadas: si crecen no tienen claro si la Banca querrá crecer a su misma velocidad en financiación, si se estancan temen que la Banca pierda su confianza en ellas, si entran en pérdidas tienen cla- ro que la Banca les cerrará la puerta y debido a la bonanza de los últimos años pocas empresas han previsto te- ner líneas de financiación sobrantes. Desgraciadamente no existe una cul- tura de capitalización de las empresas que les permita afrontar esta crisis con una buena reserva de fondos propios. Ha llegado el momento de que los accionistas estén preparados para darle a la empresa parte de lo que en estos últimos años, con todo el me- recimiento pero, probablemente, con falta de previsión, se han llevado. LOS GIGANTES ASIÁTICOS, ¿GRAN AMENAZA O GRAN OPORTUNIDAD? Existen en China e India más de 300 millones de habitantes muy ricos, ¿qué hacen las empresas de otros paí- ses para posicionar sus productos en este segmento que quiere consumir un tipo de producto distinto a los que ellos fabrican? ¿Cómo competir con estos países? ¿Qué inversiones hacen las empresas en diseño, creatividad, e innovación? ¿Y en posicionamiento de marca? En China se han titulado en un año 700.000 ingenieros, en India 500.000 y en Estados Unidos 300.000. Esta- mos hablando de países con los que cabe hacer una reflexión: si no puedes luchar contra ellos, asóciate con ellos. No solamente triunfan los grandes y fuertes, sobre todo obtienen el éxito los ágiles, rápidos, flexibles e imagina- tivos para posicionarse en un merca- do que requiere adaptación, servicio y gestión eficaz. Dando una conferencia a empresarios en una ciudad española de 300.000 habitantes, hice referencia a una frase Supérate ante la adversidad JAIME TOMÁS CAMPÁ, director general de makeateam Indae y consejero de Grupo Inmark 024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 24 024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 24 23/04/2009 14:08:30 23/04/2009 14:08:30

Supérate ante la adversidadpdfs.wke.es/1/0/0/0/pd0000031000.pdf · Supérate ante la adversidad ... desmotivados, les falta compromiso, viven en la rutina… Ellos no tienen la culpa,

  • Upload
    others

  • View
    5

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Supérate ante la adversidadpdfs.wke.es/1/0/0/0/pd0000031000.pdf · Supérate ante la adversidad ... desmotivados, les falta compromiso, viven en la rutina… Ellos no tienen la culpa,

Nº 232 • Mayo • 2009Capital Humano 24

DESARROLLO DE LOS RR.HH.

Nos ha tocado vivir en un mundo que cambia de forma acelerada, compleja y cada vez más competitiva. Este proceso obliga a las empresas a variar sus estra-tegias no dejando nada al azar, adap-tándose al mercado, generándose en las mismas un clima de incertidumbre, temores y precipitación que requieren un liderazgo no solamente centrado en el negocio sino en las personas.

No existe empresa que disfrute per-manentemente de una tranquilidad sin alteraciones o tenga siempre buena suerte. Las organizaciones y las personas se sienten amenazadas por un número mayor de fuerzas que avanzan rápidamente, son imprede-cibles y resultan muy difíciles de con-trolar. Peter Drucker decía “lo único que evoluciona por voluntad propia en una organización es el desorden, la fricción y el bajo rendimiento”.

¿Qué circunstancias influyen en los cambios del entorno?

LA GLOBALIZACIÓN

Formamos parte de un mundo en el que todo está muy cercano, lo cual conlleva muchísimas oportunidades pero también surgen infinidad de amenazas que debemos gestionar. Formamos parte de una sociedad glo-bal mucho más competitiva y, sobre todo, mucho más próxima. Cuando se produce un acontecimiento en un continente, afecta a los demás, y vi-ceversa, de forma más inmediata que en épocas anteriores.

Cuando un país estornuda, el otro se constipa. Varios bancos y compañías de seguros han entrado en situación

de quiebra y los gobiernos han teni-do que salir en su auxilio con el fin de comprar sus créditos incobrables intentando equilibrar el mercado fi-nanciero en el que se ha generando una crisis de confianza mundial de in-calculables dimensiones. La Banca en muchos países, entre los que se inclu-ye España, había realizado inversiones en estos fondos, cuyas pérdidas le han generado una falta de tesorería im-portante que condiciona su estrategia de clientes y de productos. Aparecen en el mercado ofertas de captación de depósitos por encima del precio del mercado interbancario y de la infla-ción y como contrapartida se encarece el precio de los préstamos y créditos. Se analizan los riesgos de los clientes de forma más rigurosa y se evita fi-nanciar viviendas por encima del 80 por ciento de su valor de tasación. El valor de las tasaciones desciende, el precio de la vivienda también, pero los consumidores no encuentran financia-ción acorde con sus necesidades, por lo que cae en picado la adquisición de vivienda nueva y de segunda mano. El que quería vender se espera y el que quiere comprar y tiene dinero también porque intuye que los precios seguirán bajando. Todo esto genera una crisis no solo en el sector inmobiliario sino en los vinculados a éste: empresas de cemento, mármol, cerámica, madera, yeso, hierro, transporte, muebles, etc.

Las empresas están preocupadas: si crecen no tienen claro si la Banca querrá crecer a su misma velocidad en financiación, si se estancan temen que la Banca pierda su confianza en ellas, si entran en pérdidas tienen cla-ro que la Banca les cerrará la puerta y debido a la bonanza de los últimos

años pocas empresas han previsto te-ner líneas de financiación sobrantes. Desgraciadamente no existe una cul-tura de capitalización de las empresas que les permita afrontar esta crisis con una buena reserva de fondos propios.

Ha llegado el momento de que los accionistas estén preparados para darle a la empresa parte de lo que en estos últimos años, con todo el me-recimiento pero, probablemente, con falta de previsión, se han llevado.

LOS GIGANTES ASIÁTICOS, ¿GRAN AMENAZA O GRAN OPORTUNIDAD?

Existen en China e India más de 300 millones de habitantes muy ricos, ¿qué hacen las empresas de otros paí-ses para posicionar sus productos en este segmento que quiere consumir un tipo de producto distinto a los que ellos fabrican? ¿Cómo competir con estos países? ¿Qué inversiones hacen las empresas en diseño, creatividad, e innovación? ¿Y en posicionamiento de marca?

En China se han titulado en un año 700.000 ingenieros, en India 500.000 y en Estados Unidos 300.000. Esta-mos hablando de países con los que cabe hacer una reflexión: si no puedes luchar contra ellos, asóciate con ellos. No solamente triunfan los grandes y fuertes, sobre todo obtienen el éxito los ágiles, rápidos, flexibles e imagina-tivos para posicionarse en un merca-do que requiere adaptación, servicio y gestión eficaz.

Dando una conferencia a empresarios en una ciudad española de 300.000 habitantes, hice referencia a una frase

Supérate ante la adversidad

JAIME TOMÁS CAMPÁ, director general de makeateam Indae y consejero de Grupo Inmark

024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 24024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 24 23/04/2009 14:08:3023/04/2009 14:08:30

Page 2: Supérate ante la adversidadpdfs.wke.es/1/0/0/0/pd0000031000.pdf · Supérate ante la adversidad ... desmotivados, les falta compromiso, viven en la rutina… Ellos no tienen la culpa,

Nº 232 • Mayo • 2009 25 Capital Humano

de Philip Khottler: “Toda pyme debe innovar como mínimo tres productos por año, para ser competitiva”. Un asistente me preguntó. ¿A ti te que-da claro que estás con empresarios de una ciudad pequeña? Yo le respondí que estaba en una ciudad que forma-ba parte de Europa, que estaba en Eu-ropa y que competía en el mundo. El hecho de estar en cualquier punto de la geografía no nos impedía reflexio-nar sobre la frase de Khottler, en la que creo por convencimiento.

Es necesario que las empresas inno-ven y no de forma esporádica, han de hacerlo con disciplina, analizando el mercado y el cliente. Y a pesar de la crisis que estamos atravesando hay que mirar hacia delante y utilizar el retrovisor solo para aprender de los errores. Ahora nos toca emprender, seguir emprendiendo.

EL CRECIMIENTO DEL SECTOR SERVICIOS

Servicio y atención al cliente es un mo-do de vida, una cultura empresarial, equivale a no bajar nunca la guardia, a no conformarnos, a tener empatía, a pensar siempre en el cliente, a ser felices haciendo felices a los demás.

Ante la globalización, a muchos países les quedan pocos caminos rentables por recorrer y el sector servicios está creciendo en detrimento del primario y secundario. Se trata de un sector muy atomizado en el que prevalecen las empresas que viven de las imitacio-nes y de la falta de creatividad, en mu-chos casos falta diferenciación y, sobre todo, motivación. ¡Hemos llegado a situaciones en las que nos sorprende que nos atiendan de forma excelen-te! Hay también quien confunde el ser simpático con dar un buen servi-cio, con profesionalidad y enfoque al cliente. En algunos sectores como el comercio o el turismo, ni le miran a los ojos, bajan la cabeza y parece que piensen: ¡qué mala suerte, un cliente!

Observo, sobre todo, falta de ilusión en el empleado. La mayoría parece que trabaje porque no tienen más re-

medio. Muchos con experiencia están desmotivados, les falta compromiso, viven en la rutina… Ellos no tienen la culpa, la actitud y la ilusión la de-ben fomentar sus jefes, han de tener objetivos, se han de comprometer y percibir unos ingresos acordes con el valor que aportan. Han de sentirse parte importante de un proyecto de equipo y en el cual el cliente es el rey, su razón de ser.

¿Cuántos comercios son casi idénticos a otros, tiene los mismos o similares productos? No reforman sus estable-cimientos, no son creativos, parecen que no tienen ilusiones. Para atraer al cliente hay que diferenciarse de los demás y no solamente en el precio. ¿Por qué un restaurante está lleno y el que está al lado con precios iguales o más baratos está vacío? Seguro que los clientes tienen una explicación y probablemente llegaremos a la con-clusión de que en uno de los dos exis-te un hecho diferencial determinante que atrae al cliente (servicio, calidad, innovación, carácter, transmisión de ilusión, sentimiento), orientación al cliente, en definitiva, amor.

RÁPIDOS AVANCES TECNOLÓGICOS

Las nuevas tecnologías están modifi-cando la gestión y los procedimientos del management, generándose im-portantes cambios organizacionales. La disponibilidad de poderosas herra-mientas de gestión ayudan a coordi-nar el esfuerzo humano, la necesidad competitiva de que las empresas se adapten a la evolución tecnológica y sean innovadoras además de atracti-vas para captar talento y el acceso a las empresas e influencia de la “gene-ración Einstein” (que ha crecido con el manejo de herramientas de elevada tecnología y con Internet) están forjan-do una revolución a la que podríamos denominar Management Tecnológico.

¿Cuánto tiempo hace que has cambia-do de móvil? ¿Y de portátil? ¿Juegas con la Play o con la Wii? ¿Tienes na-vegador en tu coche? ¿Ya has adquiri-do el iPhone? ¿Todavía tienes agenda de papel? ¿Cuántos minutos al día

utilizas un lápiz, bolígrafo o pluma? ¿Cuántos correos electrónicos recibes al día? ¿Te gusta Windows Vista? No te preocupes… ¡Ya te gustará! Y si no ya sacarán otro al que te tendrás que adaptar. Ante éstas evidencias, ¿qué tecnología utilizaremos dentro de dos años? ¿Qué tecnología utilizabas ha-ce dos años? ¿Nos seguirá parecien-do que ha transcurrido una eternidad cuando miremos hacia atrás?

Las empresas han de adaptarse a los cambios tecnológicos, hay que tra-bajar con herramientas que nos acer-quen a los clientes y a las personas, debemos invertir en tecnología para no perder el ritmo del mercado. La convergencia entre la tecnología y los clientes está creando escenarios total-mente nuevos para los negocios, cada día resulta más difícil influir en unos consumidores tan actualizados, que se mueven de forma independiente y se muestran reacios a toda intromi-sión comercial.

024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 25024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 25 23/04/2009 14:08:3023/04/2009 14:08:30

Page 3: Supérate ante la adversidadpdfs.wke.es/1/0/0/0/pd0000031000.pdf · Supérate ante la adversidad ... desmotivados, les falta compromiso, viven en la rutina… Ellos no tienen la culpa,

Nº 232 • Mayo • 2009Capital Humano 26

Pero en las empresas existen muchas resistencias a los cambios tecnológi-cos, los empleados la ven como una amenaza, como una herramienta compleja y de control, no de optimi-zación de la gestión. Es necesario rea-lizar programas de gestión del cambio enfocados a reforzar las actitudes de las personas ante la innovación tecno-lógica. No se trata de implantarla sin más, hay que saber convencer, explicar su utilidad y nunca imponer. El líder ha de comunicar adecuadamente y ser empático para entender las resisten-cias que se encontrará en el proceso de implantación.

CAMBIOS IMPREVISTOS

Existe un entorno no dominado por las empresas y que influye de forma positiva o negativa en la marcha de las mismas. Es imposible predecir los cambios, por tanto hay que preparar a las organizaciones para que estén atentas a lo que sucede en su entorno y para que sepan virar en la dirección del viento en el momento oportuno.

Existen muchos tipos de cambios del entorno: legislativos, políticos, de las variables macroeconómicas, cambios que afectan a los precios, los provoca-dos por los competidores, la aparición de productos sustitutivos, situaciones conflictivas sectoriales, sucesos nacio-nales o internacionales. Las empresas deben prepararse y anticiparse a to-dos ellos. La previsión de cambios es una de las principales habilidades que debe tener un directivo.

Las personas esperamos que los acon-tecimientos sean previsibles y que res-peten claramente las reglas de causa-efecto, pero debemos saber convivir en un contexto de incertidumbre y la reacción de los clientes ante nuestras propuestas son una fuente de titubeos. Los cambios tecnológicos también lo son, así como las capacidades internas en cuanto a actitudes, habilidades y ex-periencias ante una nueva estrategia a emprender generada por el entorno.

Si no se está atento al entorno surgen las situaciones que los empresarios ca-

lificamos, como adversidades, crisis, amenazas y, como excusa, mala suerte.

MAYOR EXIGENCIA DEL MERCADO

El cliente está cada vez más formado y dispone de más información, por tan-to es mucho más exigente. El gran re-to de las empresas es adaptarse a sus requerimientos con rapidez y eficacia. Han de estar preparadas para dar una respuesta a las demandas, se deben mover velozmente e innovar en base a los movimientos del mercado ge-nerados por las necesidades y gustos del cliente. Una empresa deber ser: flexible, polivalente, proactiva y veloz.

Los terremotos arrancan grandes ro-bles, pero no arrancan a los juncos que cimbrean con el viento. No se puede ser pequeño con un diseño de roble: el valor diferencial de las empresas pequeñas y medianas ha de ser la fle-xibilidad y la adaptación. Estas son las principales consideraciones para com-petir en un mercado exigente y veloz.

EL MERCADO DE TRABAJO

Las empresas están obligadas a ser innovadoras y a tener capacidad de generar valor añadido y por lo tanto deben realizar un gran esfuerzo de cambio. Y las personas que trabajan en una empresa líder deben tener las siguientes características: ser y estar formados permanentemente, tener capacidad e ilusión para desarrollarse, crecer al ritmo que marca el mercado, ser capaces de cooperar y trabajar en equipo, saber compartir conocimientos, ser auto críticos, estar comprometidos, sentirse parte importante del proyecto empresarial y estar motivados.

Los trabajadores nacidos entre los años 80 y 90 pueden ayudar a las compañías a conocer y entender su mercado, pero las empresas también deben esforzarse para entenderlos a ellos. Se trata de una generación acos-tumbrada a utilizar la información y a quienes los largos y complejos proce-sos de trabajo de las generaciones an-teriores aburren solemnemente. Son

personas que han crecido con un alto grado de libertad en su entorno so-cial y familiar, y lo intentan encontrar en la empresa. Son inteligentes y se auto motivan si se les permite actuar con libertad, por lo que aportan un gran valor añadido. Debemos tratarles como adultos y permitirles que sean ellos los que se marquen los límites, debemos darles espacio para la inno-vación y la creatividad, sin encorsetar-los con excesivas reglas.

Las personas motivadas que hacen lo que desean porque disfrutan, porque se sienten felices, porque encuentran sentido a su vida, pueden adaptarse con mayor facilidad a los cambios y a las transiciones del entorno.

¿CÓMO PODEMOS SUPERARNOS ANTE LA ADVERSIDAD?

Debemos contemplar la situación ac-tual como una oportunidad para co-nocernos a nosotros mismos, conocer nuestro entorno, aprender, adquirir ex-periencia y posicionarnos cuando pase la tormenta. Es el momento de crecer, de emprender y de estar preparados para afrontar un camino diferente, desconocido, retador y apasionante, porque las cosas nunca más serán co-mo eran antes, la forma de concebir la empresa será diferente y las exigencias del mercado también.

Después del estrepitoso fracaso social que estamos viviendo ha llegado el momento de reinventarnos, de des-cubrirnos y de aplicar una filosofía de gestión centrada en las personas y los clientes, satisfaciendo sus expectativas de forma ética y coherente.

Y ante este futuro que nos observa, sobre todo, hay que tener una acti-tud positiva, ser optimistas y estar preparados, de forma profesional y social para afrontar los nuevos retos que nos esperan. No triunfará el más fuerte sino el que mejor se adapte a los cambios.

Sobre todo, el gran triunfador será el que sea capaz de anticiparse e inven-tar el cambio.

024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 26024_s_Desarrollo RRHH_232.indd 26 23/04/2009 14:08:3123/04/2009 14:08:31