Upload
nahuel-federico-krauss
View
9
Download
0
Embed Size (px)
DESCRIPTION
vrvfrvfrv
Citation preview
“...la agonia y la muerte violenta filmada es
asimilada al orgasmo, tanto por la convulsion
agonica de la victima ensartada como por el placer
paroxistico de su vision.”.(Roman Gubern, la
imagen pornográfica y otras perversiones ópticas)
Llegando al final de su enseañanza, Jacques Lacan nos advierte sobre el error en
que caeriamos al considerar la trascendecia un registro respecto de otro. Sin
embargo, la transmisión de su enseñanza no parece escapar, aun teniendo
presente dicha advertencia, a la tentacion de olvidarla y abrazarse al simbolico, al
real, o al imaginario.
Nos vemos asi llevados a mencioanr una primera aclaracion: la imagen, como
elemento mas representativo del imaginario, no puede ser pensada
independientemente del resto de los registros, y cualquier especificidad que se
pretenda delimitar respecto de esta ultima merece ser acompañada de ciertas
puntualizaciones en relacion a aquellos.La supremacia de la imagen en la realidad
moderna, nos exige entonces aclarar el estatuto de la imagen a la que nos
referimos, mas que las condiciones a las que debe su supremacia.
*
Según un dicho popular, no habriamos de impresionarnos al comer desechos, ya
que millones de moscas no pueden equivocarse. En efecto, si caminamos por la
ciudad y nos encontramos con un aglomerado de gente, nuestra curiosidad no
tardara en despertarse. Sea lo que sea, algo para ver debe habitar el centro de
dicha aglomeración y pocos querran perderse, comandados por la inherente
tendencia escoptofilica que habita al humano, dicho espectáculo.
Si entre la gente lograsemos hacernos un lugar, asomarnos al objeto que atrae la
atención de tantos individuos, y encontrarnos con un cadáver, diversas son las
reacciones a la que estariamos expuestos. En efecto, ante dicho objeto, alguien
puede ser impresionado y salir de la aglomeración con la imagen fijada, e invadido
por una angustia irrefrenable. Seguramente encontraremos otros con celulares en
mano, fotografiando el morboso espectáculo que el cadáver ofrece, mientras otros
vomitan y otros, porque no, se erectan..
¿Con que percibimos? Nos preguntamos. Desde Freud, que percepción y conciencia
no coinciden, y que entre ambas, habitan todas las constelaciones respresentativas
que la realidad psiquica entraña.
La realidad psiquica, entonces, determina todas las reacciones a las que ante
diversas impresiones el sujeto esta sometido, y una imagen jamas despertara en
uno lo que despierta en otro. Es decir, por mas que formemos parte de las millones
de moscan que comen del mismo desecho, la mosca humana no comparte la misma
satisfacción que su compañera de mesa.
Ahora bien, mas alla de las diferencias que dividen las reacciones ante una misma
imagen, se constatan en la sociedad moderna dos perversiones opticas, para
utilizar la expresión de Roman Gubern, que abren el juego que nos habilitara cierta
reflexion sobre la especificidad de dichas imagenes.
Tomaremos como puntos de apoyo para transitar el recorrido del presente trabajo,
a la imagen pornografica y la violencia audiovisual. En otros terminos, la imagen
que gime, y la imagen que grita.
*
La develacion nunca es de algo. Lacan, en el seminario 4 hace del velo el ídolo de la
ausencia. Como si con Leibnitz conversase, la necesariedad de que halla algo y no
mas bien nada, sin dejar de ser esa nada la que permite el brillo de lo que en el velo
se proyecta, articula el deseo a la imagen, operación fundamental del cuarto tomo
del seminario.
¿No es clara la necesariedad de que la stripper sostenga su ultima prenda, por
todos los medios, para sostener al erotismo? ¿No respeta a esta logica el suspenso,
que sostiene la tension para no caer en el vértigo que el gore introduce en una
abismal identificación cuya violencia aplasta al percipiens como un gigante a una
insecto?.
En 1968, a partir de la sustitucion del codigo Hays, regulador de la censura en la
industria cinematografica, se habilita la permisividad de incluir imagenes de
exrtema violencia en la pantalla grande. La violencia audiovisual y la pornografia
Hardcore comenzaron a llenar las salas de cine acompañadas de un éxito
inmediato. Entonces, por un lado, analizar la especificidad de dichas imagenes es
objeto del presente trabajo, pero dejar de lado las razones del éxito y la
proliferacion de dicha imagen, no merece ningun descuido.
*
Llegado a este punto, vale preguntarse hasta que punto se nos haria necesaria una
diferenciación radical entre la imagen pornográfica y la snuff, siendo que la una y la
otra dependen de un mismo elemento para que su éxito se realice.
Freud tempranamente observa la concepción sádica del coito entre los padres. El
acto sexual es bajo esa concepción, una mujer violentada por un agente anónimo,
y efectivamente, la imagen pornográfica requiere de este anonimato. Las revistas
pornográficas muestran bien como no hace falta la presencia masculina en la
escena, y que solo un gesto, una mirada de la modelo en cuestión, alcanzan al
voyeur para suponer en ese lugar al goce de la mujer, con el que aquel se identifica
mirandose mirar. Asimismo, las películas snuff también requieren del grito, y
fracasarían del mismo modo que la pornografía si se silenciara el film en cuestión.
Lo que vale remarcar, al menos en los casos comentados hasta ahora, es que la
potencia de la imagen no puede ser reducida simplemente al campo escopico, sino
que el campo de lo invocante debe acompañarla para atribuirle a aquella el
carácter de su desmesura.
Por otro lado, el grito en cuestión, que comanda la identificación del espectador con
la victima, o el goce femenino, es acompañado, en el campo escopico, por una
mostración total de la imagen. Hicimos referencia al velo que erotiza a esta ultima,
e impide el develamiento de su “mas alla...”, que es nada. Las imágenes a las que
hacemos referencia parecen estar anuladas en su funcion de velar la nada, y en la
anulacion de la funcion del velo emerge el grito que captura al sujeto en una
identificacion que lejos esta de contar con la distancia necesaria respecot al
identificado.
Acentuemos, que frued en el proyecto.... da lugar fudnamental al grito del lactante
en su funcion de relacion al Otro:
“Cuando éste(el lactante) emita un grito, evocará el recuerdo del propio grito del
sujeto, y con ello el de sus propias vivencias dolorosas."