Tanizaki Junichiro - El Cortador De Cañas

8/12/2019 Tanizaki Junichiro - El Cortador De Cañas

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El cortador de cañas, publicado en 1932, entre Naomi (1924-1925) y El retrato de

Shunkin (1933), es una pequeña obra maestra que sintetiza las preocupaciones temáticas yormales de !aniza"i en la etapa determinante de su carrera# la narraci$n de un desconocido

que aparece como una sombra entre las cañas de la ribera del r%o, en una noc&e decontemplaci$n de la luna llena' un relato dentro de un relato, olcado en los moldesormales de la noela clásica del antiuo *ap$n' una sociedad que se aerra a los +ltimosdestellos de la ciilizaci$n que ue' una &istoria de amor trianular, donde la pasi$n se nutrede renuncias y conniencias



Jun’ichirō Tanizaki

El cortador de cañas



!%tulo oriinal# The Reed Cutter (Ashikari)

*unic&ir ō !anaza"i, 1932

!raducci$n# .ar%a /uisa 0alseiro



¡Qué desdichado soy sin ti, cortando cañas

!a "ida en la #ah$a de Nani%a se me hace cada "e& m's dura*+

ue en un mes de septiembre' yo i%a a+n en "amoto ac%a un tiempoesplndido, y una tarde en realidad acababan de dar las tres sent% de pronto anas de ira al+n sitio /a &ora era aanzada para ir muy le6os, pero los alrededores ya los conoc%a'tiene que &aber, pens, al+n luar oscuro y olidado donde se pueda ir dando un paseo yoler en dos o tres &oras 7ntonces me acord del santuario de .inase, al que ten%aintenci$n de ir y &asta entonces no &ab%a podido 7l santuario de .inase está en el luarque en otro tiempo ocup$ el palacio de recreo del emperador retirado 8otoba 7l primercap%tulo del Ese-o suerior lo describe as%#

u .a6estad restaur$ los palacios de !oba y &ira"a:a y resid%a en ellos&abitualmente, pero más tarde ediic$ una amen%sima residencia en un para6e llamado.inase, a la que ia6aba a menudo para disrutar de las lores y el olla6e en primaera yotoño, y donde se realaba a su anto6o con diersiones que eran muy comentadas /adilatada ista sobre el r%o que se dominaba desde el luar era &ermosa por demás 7n lapoca 8en"yū, u .a6estad conoc$ un certamen de poemas en c&ino y en 6apons, y unade las piezas sobresalientes ue sta#

/a neblina primaeral al pie de la montaña ela el r%o .inase#

;<or qu &an de ser preeribles las tardes de otoño=>2?

/as aler%as y pasarelas cubiertas que &izo construir eran e@tensas, bellas yeleantes /a disposici$n de las rocas en la cascada del montecillo alzado rente al palacio,en el 6ard%n las ramas entrelazadas de los pequeños pinos y los árboles de montañacubiertos de muso, realmente lo conert%an en una mansi$n dina de lorecer silos ysilos Ana ez que estuo acabado el 6ard%n, u .a6estad oreci$ un concierto paramuc&os initados, al trmino del cual el conse6ero medio !ei"a >3? (que entonces era toda%ade ba6o rano) present$ estos ersos#

Bo ene6ecido por sus primeros mil años,

7l 6oen pino de la cumbre 6ura lealtad a mi señor

/as auas que en tiempo de mi señor desiamos por el 6ard%n

Ciscurren sobre mil peñas, mil reinados

Ce ese modo u .a6estad pasaba buena parte de la estaci$n de las lores y de la



estaci$n de las &o6as en el palacio de .inase, acompañado por los sonidos del "oto y de lalauta y ozando de toda clase de entretenimientos

Cesde que &ace muc&os años le% por primera ez El ese-o suerior pensaba yo enel palacio de .inase .e ustaba muc&o el poema del emperador retirado# D/a bruma

primaeral al pie de la montaña ela el r%o .inase# E ;<or qu &an de ser preeribles lastardes de otoño=F .uc&as otras composiciones suyas, como el poema sobre la ba&%a deG"as&i, D/a barca del pescador entra boando en la neblinaF, y DHo soy el nueo uardiánde la islaF, sobre la isla de "i, me ustaban tambin y me en%an a la memoria conrecuencia' pero an&elaba la ista cálida y encantadora del curso alto del r%o .inase queimainaba al recitar ese poema en particular Gntes de conocer la eora%a de la rei$n deIansai no me molest en localizar el luar e@acto, aunque me iuraba que .inase estar%aen los alrededores de Iioto' pero desde &ac%a poco sab%a que el palacio &ab%a estado cercade la diisoria entre las proincias de Hamas&iro y ettsu, a orillas del r%o Hodo y a un"il$metro de la estaci$n de Hamaza"i, y que all% se alzaba toda%a un santuario dedicado alemperador retirado 8otoba 7ra buena &ora para &acer una e@cursi$n al santuario de

.inase <od%a ir directamente a Hamaza"i en el tren de apor, pero a+n ser%a más áciltomar la l%nea elctrica an"yū y cambiar a la l%nea Buea Iei&an .ás a+n# era el d%aquince del octao mes se+n el calendario antiuo, y a la uelta podr%a ozar de la ista dela luna llena desde las orillas del Hodo >4? Jon esa idea me puse en marc&a, solo y sin decird$nde iba, ya que no era un plan aconse6able para llear a mu6eres y niños

Hamaza"i está en la proincia de Hamas&iro, distrito de to"uni, y .inase en la deettsu, distrito de .is&ima !omando la l%nea Buea Iei&an de sa"a a Ōyamaza"i secruza el l%mite de ettsu con Hamas&iro, y lueo &ay que olerlo a cruzar para retroceder&asta el sitio del palacio $lo en otra ocasi$n &ab%a estado yo en Hamaza"i, paseando porlos alrededores de la estaci$n de la l%nea Bacional' esa tarde era la primera ez que me

aenturaba a pie por la carretera de las <roincias ccidentales, en direcci$n al oeste G poca distancia se biurca, y 6unto al ramal derec&o &ay un mo6$n con una inscripci$nantiua que marca el camino de G"utaa:a a Ktami por K"eda <ensando en lasdescripciones de las batallas de Gra"i .uras&ie e K"eda &ōnyūsai en la Cr.nica de

No#una/a, record que aquellos enerales de la poca de los 7stados Jombatientesactuaron en una ran6a de territorio que un%a Ktami, G"utaa:a y Hamaza"i Gntiuamente, pues, aqul tuo que ser el camino principal' la %a sinuosa que yo seu%a a lo laro delHodo ser%a +til para la naeaci$n, pero probablemente poco apropiada para ia6ar portierra, porque atraesaba muc&os luares pantanosos y cañaerales !en%a yo idea, porcierto, de que el transbordador de 7uc&i no quedaba le6os de las %as que me acababan dellear &asta all% oy 7uc&i orma parte del 8ran sa"a, y con la e@pansi$n de Iioto elaño pasado Hamaza"i &a quedado absorbida por la metr$poli' pero debido a su clima lazona comprendida entre Iioto y sa"a no &a corrido la misma suerte que la que se e@tiendede sa"a a Iobe Jomo no parece que de momento ayan a desarrollarse en ella Dciudadesr+sticasF ni Durbanizaciones culturalesF, puede ser que consere toda%a por al+n tiemposu aspecto de páramo Gntiuamente ser%a a+n más in&$spita que a&ora' en El tesoro de los

"asallos leales>5? se dice que el camino estaba inestado de 6abal%es y bandoleros, y toda%a&oy las casitas que bordean la carretera, con sus tec&os de pa6a, parecen cosa de tiemposremotos para la ista acostumbrada a los pueblos de aspecto occidental que se suceden a lolaro de la l%nea an"yū ue aqu% donde ua:ara .ic&izane abraz$ el budismo camino



del destierro DGliido por un castio sin raz$n, se tonsur$ en Hamaza"iF, dice El /ran

ese-o , y aqu% donde compuso el amoso poema que comienza# D/as copas de los árbolesdonde t+ iesF>L? e trata, pues, de un antiqu%simo camino de postas 7s muy posible queHamaza"i uera ya estaci$n de posta cuando se construy$ la capital eian obre aquellascosas iba yo rumiando mientras marc&aba por la carretera y e@aminaba cada una de las

casas, que en la sombra de sus aleros parec%an uardar alo del aire del s&ounato<as un puente sobre un r%o que ten%a que ser el .inase, y lueo de caminar otro

poco abandon la carretera y torc% a la izquierda para llear al sitio del palacio Gll% se alzaa&ora un santuario nacional en memoria de 8otoba, !suc&imi"ado y *unto"u, los tresemperadores que conocieron el mismo tráico destino en la uerra de *ō"yū>M?' pero ni el parque ni los ediicios son particularmente dinos de nota en una rei$n rica en esplndidossantuarios y templos budistas Gun as% me de6 conmoer por cada árbol y cada piedra,recordando lo que antes &e citado del Ese-o suerior y pensando en aquellos cortesanos delos primeros tiempos de la era Iama"ura que celebraban las estaciones con banquetes enaquel mismo luar .e sent al borde del camino para umar un ciarrillo, y despus recorr%

el parque, que no era demasiado e@tenso Gunque no distaba muc&o de la carretera,ormaba como un islote acoedor, apacible y retirado, detrás de un puñado de casas delabranza en cuyos toscos allados lorec%an toda clase de plantas otoñales Bo era posibleque el palacio del emperador retirado 8otoba ocupara un terreno tan reducido' tuo quellear &asta la orilla del r%o .inase, que yo acababa de de6ar atrás er%a all%, sentado en un pabell$n al borde del aua o paseando por el 6ard%n, donde el emperador retirado, oliendola mirada auas arriba, pondr%a en palabras su emoci$n ante la bruma primaeral al pie dela montaña que elaba el r%o .inase

Jierto d%a de erano u .a6estad se traslad$ al pabell$n de pesca del palacio de.inase 7stando all% en compañ%a de alunos 6$enes nobles y cortesanos, mand$ serir

aua &elada, ac&as de arroz r%as y otros man6ares

>N?

Juando empezaron a beber di6o# OPumaraillosa mu6er ue .urasa"i &i"ibuQ u 0istoria de 1en-i es rancamentee@traordinaria 7l &i6o de 8en6i y sus compañeros le aderezan truc&as de un riac&uelocercano y percas del r%o Iatsura ;abr%a &oy quien cocinara as%= An oicial de la uardiallamado ata estaba de sericio al pie de la balaustrada, y oy$ aquellas palabras de u.a6estad 7ntonces la$ en aua r%a un poco de arroz blanco, esparci$ los ranos sobreunas &o6as de bamb+ enano arrancadas de la orilla del lao y se las oreci$ al emperadorretirado OHa entiendoRQ OGl leantarlo se des&aráQ>9? !ampoco esto es pequeño esuerzo,di6o u .a6estad, y despo6ándose de una de sus t+nicas se la real$ al oicial Bo erainrecuente aquella clase de estines

Selacionando ese pasa6e con lo que me rodeaba, pens que el lao del pabell$n de pesca ten%a que tener comunicaci$n con el .inase H &acia el sur, probablemente a unoscentenares de metros por detrás del santuario, discurre el r%o Hodo Cesde all% no se e%a, pero en su otra orilla la cumbre del boscoso monte to"o parec%a suspendida encima de m%,como si no nos separase la corriente de un ran r%o Glc la ista a aquella umbr%a montañadel K:as&imizu>1T?, y lueo a la cima del monte !ennō, que se alzaba enrente, al norte delsantuario Juando en%a andando por la carretera no me &ab%a i6ado, pero al mirar entoncesen todas direcciones me di cuenta de que el alle era como la base de un caldero, y los



montes por el norte y por el sur como biombos que delimitaban el cielo 7studiando la posici$n de los montes y los r%os entend% ácilmente por qu en la poca eian se estableci$una barrera de control en Hamaza"i, y por qu ue un punto estratico para todo el que pretendiera inadir Iioto /a llanura de Hamas&iro, que rodea Iioto por el este, y la queorman las proincias de ettsu, Ia:ac&i e Kzumi en torno a sa"a por el oeste, se

contra%an aqu% en un paso estrec&o por el que discurr%a un solo r%o caudaloso Ce modo queIioto y sa"a están unidas por el r%o Hodo, pero tienen dierente clima y cultura, y ladiisoria está a&% 7n sa"a dicen que &ay d%as en que el cielo está claro al oeste deHamaza"i mientras lluee en Iioto, y que en inierno se nota el descenso de la temperaturacuando el tren que a a Iioto pasa por Hamaza"i 7s erdad que las aldeas, con sus muc&os bosquecillos de bamb+, la arquitectura de las casas de labranza, la orma de los árboles y elcolor de la tierra, recuerdan los alrededores de aa, como si la campiña de Iioto se prolonara &asta aqu%

al% de los terrenos del santuario, y cruzando la carretera seu% un sendero &asta elr%o .inase y me encaram a un ribazo 7l peril de los montes sobre el r%o y el aspecto de la

corriente seuramente &abrán cambiado en setecientos años, pero la encantadora ista quese oreci$ a mis o6os en%a a ser la misma que imainaba al leer el poema del emperadorretirado iempre &ab%a pensado que ser%a as% Bo era un paisa6e de belleza deslumbrante, niun escenario randioso con precipicios escarpados o rápidos que &oradasen las peñasJolinas suaes y una corriente mansa, ba6o el elo delicado de la niebla espertina# unescenario amable, reinado y sereno, como de pintura yamato2e* Jada cual e lanaturaleza a su manera, y &abrá quizá quien piense que esa clase de paisa6e no merece unamirada G m%, por el contrario, son esos montes y esos r%os ulares, ni ma6estuosos niincomparables, los que me initan a una dulce ensoñaci$n y me dan anas de quedarme para siempre An panorama as% podrá no sorprender a los o6os ni arrebatar el esp%ritu, perorecibe al ia6ero con sonrisa de amio 7n un primer momento no parece ran cosa, pero permaneced un rato y os sentiris rodeados de un dulce aecto, como en los tibios brazos deuna madre amorosa 7n la soledad del crep+sculo, sobre todo, querr%a uno undirse con esas brumas r%o arriba, que parecen llamarle desde le6os Jomo di6o el emperador retirado8otoba, ;<or qu &an de ser preeribles las tardes de otoño= 7n un atardecer de primaera,con una calima ro6iza tendida al pie de las raciosas colinas, con cerezos en lordiseminados por las riberas, sobre las cimas y en los alles, Ocuánto más cálido ser%a elambienteQ in duda era alo as% lo que e%a el emperador retirado <ero s$lo el &ombre deciudad y de ustos más cultiados sabe apreciar la erdadera eleancia' de no ser por lasensibilidad esttica de los cortesanos, aquel desplieue de inura en lo ular quizá &abr%a parecido carente de inters <lantado en lo alto del ribazo mientras la tarde se ensombrec%aen torno, ol% la ista auas aba6o, y, buscando el sitio del pabell$n de pesca donde elemperador retirado com%a ac&as r%as con sus dinatarios y cortesanos, recorr% con lamirada la orilla derec&a y i que la cubr%a un tupido bosque &asta detrás del santuario !odaaquella anc&a ran6a arbolada &ab%a tenido que ser el solar del palacio de recreo Cesde all%se diisaban el ran r%o Hodo y la entrada en l de las auas del .inase 7n un instante seme aclar$ la estratica situaci$n del palacio .irar%a al Hodo por el sur y al .inase por eleste, y abarcar%a un man%ico y e@tens%simo parque en la lenua de tierra ormada por suconluencia 7n ese caso s%, el emperador retirado podr%a ba6ar embarcado desde us&imi yatracar al pie de la balaustrada del pabell$n de pesca, e ir y enir a su anto6o de all% a lacapital 7so concuerda con el te@to del Ese-o suerior , que dice que u .a6estad en%a a



pasar ran parte de sus d%as en el palacio de .inase .e acord de las suntuosas illas de laclase pudiente que en mi inancia se alzaban a orillas del r%o umida, en as&iba, Kmado,Iomatsu6ima y Iototoi>12? !al ez no sea acertada la comparaci$n, pero cuando elemperador retirado celebraba eleantes banquetes en este palacio, y dec%a# DOPumaraillosa mu6er ue .urasa"i &i"ibuQ ;abr%a &oy quien cocinara as%=F, o# DOHa

entiendoRQ OGl leantarlo se des&aráQF, y recompensaba a su seridor con un realo, ;serás$lo idea m%a que alo de ese comportamiento &ace pensar en los e@quisitos de 7do= 7l r%oumida es soso, pero la ista del ran Hodo, con el tra6%n de los barcos a la sombra de laserdes laderas del to"o, tuo que serir de solaz al emperador retirado y acrecentar suaici$n al luar Cespus, cuando, racasada la conspiraci$n para acabar con el s&ounato,ii$ diecinuee tristes años en la isla de "i, escuc&ando el iento y las olas y recordandosu pasada loria, ser%an el peril de estas colinas y el color de estas auas y los muc&os ysuntuosos este6os celebrados en este palacio lo que más a menudo acudiera a su menteumido en esas rele@iones, aaba mi antas%a dibu6ando isiones de aquellos tiempos, yen lo &ondo de mis o%dos sonaban los ecos de las cuerdas y los ientos, el murmurar de lasauas del lao, y al inal &asta las oces elices de nobles y cortesanos 7ntonces me dicuenta de que empezaba a oscurecer, y cuando saqu el relo6 eran ya las seis 7l d%a &ab%asido tan caluroso que la caminata me &ab%a &ec&o sudar, pero al ponerse el sol sent% el r%ode la brisa de otoño Ce pronto tue &ambre !endr%a que encontrar al+n sitio donde cenarmientras esperaba la salida de la luna Ce6 la orilla y ol% a la carretera

7identemente no era el tipo de pueblo donde buscar un buen restaurante' me bastaba calentarme con alo, y al er las luces de una onda entr, me beb% un cuartillo desa"e y me tom dos cuencos de kitsune udon Gntes de irme le ped% al patr$n que mecalentara una botella de sa"e de .asamune, y proisto de ella ba6 &acia el lec&o del r%o porun camino que se+n el patr$n conduc%a al embarcadero Gl comentarle yo que meapetecer%a embarcarme en el Hodo para contemplar la luna, me &ab%a dic&o# 7n ese caso, 6usto donde termina el pueblo &ay un transbordador que llea a as&imoto, en la orilla deenrente /o llamamos transbordador, pero el r%o es anc&o y en medio &ay un banco dearena e cruza primero de este lado al banco y despus se pasa en otra barcaza al otro lado#mientras tanto podrá usted disrutar de la ista del r%o ay un barrio de diersi$n enas&imoto, añadi$, y por eso el transbordador, que atraca al lado, unciona &asta las diez olas once de la noc&e <uede usted ir y oler todas las eces que quiera y ozar de la ista&asta &artarse Gradecido por su amabilidad emprend% la marc&a, sintiendo el aire rescode la noc&e en mis me6illas acaloradas 7l camino me pareci$ más laro de lo que &ab%adic&o el patr$n, pero cuando lleu al embarcadero i que, eectiamente, en el r%o &ab%a un banco de arena Guas aba6o ten%a su e@tremidad 6usto enrente de m%, pero auas arriba se perd%a en la astedad del crep+sculo, como si no acabara nunca <odr%a no &aber sido unaisla en medio del ran r%o, sino una punta de tierra ormada por la conluencia del Iatsura yel Hodo /o cierto es que el Iizu, el A6i, el Iamo y el Iatsura, todos se 6untan en la zona,donde coneren las auas de cinco proincias# Hamas&iro, Ōmi, Ia:ac&i, Ka y !ambae+n un ie6o libro ilustrado que llea por t%tulo 3na mirada a las orillas del r$o 4odo,&ubo un transbordo llamado el <aso del Uorro un poco más arriba, donde el r%o ten%adoscientos metros de anc&o Gqu% el cauce pod%a ser a+n mayor 7l banco no estaba enmedio del r%o sino muc&o más cerca de la orilla donde yo me encontraba .ientras esperabasentado en el arenal, i ale6arse la barcaza del parpadeo de luces de as&imoto allá enrentey enir boando /os pasa6eros desembarcaron y atraesaron el banco &asta el lado de acá,



donde una seunda barca les esperaba ac%a muc&os años, pens, que no sub%a a untransbordador' pero en comparaci$n con los que recordaba de mi niñez, en anya, !a"eya,utao y Hauc&i>13?, aqul parec%a más distinuido por la interrupci$n del banco de arena7ra tan sorprendente que a+n subsistiera un medio de transporte tan arcaico entre Iioto ysa"a, que me elicit por &aber descubierto una rareza

7n el citado libro 3na mirada a las orillas del r$o 4odo, la ilustraci$ncorrespondiente a as&imoto muestra la luna sobre el monte to"o, acompañada de un:a"a de Iae"i# D.onte to"o# E a la luz de la luna que se elea sobre la cumbre E se enen todas direcciones E las barcas del r%o HodoF, y un &ai"u de Ii"a"u# DO/una llenaQ;Juándo ue ie6o el monte to"o=F >14? Gl ir apro@imándose mi barca al banco de arena, elmonte to"o se eru%a oscuro en un cielo con los +ltimos estiios del arrebol !en%aencima una luna perectamente redonda, iual que en la ilustraci$n, y su tupido manto deárboles era como un terciopelo Juando el barquero nos init$ a pasar al otro lado del banco para subir a la seunda barca, yo le di6e que me embarcar%a más tarde, porque quer%adisrutar all% un rato de la brisa del r%o <isando &ierba bañada de roc%o me acerqu solo a la

punta y me sent en cuclillas entre las cañas del borde Cesde all%, como desde una barca enmitad de la corriente, se dominaba una ista completa de las dos riberas a la luz de la luna.irando auas aba6o ten%a la luna a mi izquierda 7l r%o, a&ora enuelto en una románticaluz azul, parec%a toda%a más anc&o que en el ocaso rases meliluas y sonoras de obrasc&inas que no &ab%a recordado en muc&os años el poema de !u u sobre el lao !un-tin, ersos de !a canci.n del la5d y parte de El acantilado ro-o me inieron a loslabios>15? 7n un anoc&ecer como aqul ser%an muc&as las embarcaciones que surcaran el r%oantiuamente, como dice Iae"i# Dse en en todas direcciones, las barcas del r%o HodoF' pero a&ora no &ab%a a la ista embarcaci$n de ninuna clase, aparte de la barcazaintermitente con sus cinco o seis pasa6eros 0ebiendo a morro de la botella de .asamune,me entreu a los eectos del sa"e y cant# DCe noc&e 6unto al r%o en Vunyan despido a miinitado' E las lores de la lespedeza y las &o6as del arce E suspiran con el ientoF .ientrascantaba se me ocurri$ pensar que la escena de !a canci.n del la5d de <o J&ū-i tuo que producirse all% tambin muc&as eces, 6unto a aquellos cañaerales espesos >1L? 7uc&i yIanza"i no estaban muy le6os r%o aba6o' no pocas cortesanas surcar%an, pues, estas auas,moiendo con prtias sus barquic&uelas entre las cañas 7n el pr$loo al poema DWiendocortesanasF, un erudito del per%odo eian, Ōe-no-.asa&ira, describe la prosperidad ylamenta la licenciosidad de estas riberas#

Iaya se e@tiende sobre la diisoria de tres proincias, Hamas&iro, Ia:ac&i y ettsu,y es uno de los puertos más importantes del pa%s !odo el que ia6e en una u otra direcci$n, procedente del oeste, del este, del sur o del norte, tiene que pasar por aqu% .u6eres 6$enesy ie6as de todo el pa%s se re+nen en este luar para orecer sin recato la enta de susaores Wisitan las aldeas, amarran su barca a las puertas y esperan a los clientes en el r%o/as 6$enes e@tra%an a los &ombres con sus maquilla6es y sus canciones' las ie6as sedisimulan ba6o una sombrilla y &acen señas con la prtiaR OGyQ Cicen que el decorodetrás de unas cortinas de color esmeralda en una alcoba ro6a es otro en todos los aspectos, pero un encuentro de placer sobre las ondas ;no iene a ser lo mismo= Jada ez que paso por aqu% se me escapa un laro suspiro por lo que eo



7n un libro titulado Notas so#re las cortesanas, un descendiente de .asa&ira, Ōe-no-.asausa>1M?, tambin describe las animadas y oluptuosas costumbres locales#

/as aldeas salpican ambas orillas 7n un brazo del r%o a su entrada en la proincia deIa:ac&i &ay un luar llamado 7uc&i Gll% están las &aciendas de G6i:ara"i, perteneciente

al Cepartamento de .edicina, y Ō ba, perteneciente al Cepartamento de /impiezaiuiendo el curso del r%o, en la proincia de ettsu, &ay dos luares llamados Ianza"i yIanis&ima <ortillos y casas se suceden en sus calles Gll% rupos de cantoras naean en barquic&uelas con sus prtias, se acercan a los barcos del r%o e initan a los &ombres acompartir almo&ada y colc&a us oces se alzan sobre el r%o &asta más allá de las nubes, la brisa prolona sus ecos sobre el aua, y no &ay ia6ero que no se olide de su &oarR<escadores y mercaderes 6untan sus barcos proa con tim$n, de tal suerte que no parece&aber aua in duda es el luar más despreocupado del mundo

Ho reol%a aos recuerdos en busca de ramentos de esos te@tos, con la mirada puesta en la desierta supericie del aua que lu%a en silencio ba6o el claro lunar .e iuro

que todo el mundo pensará en el pasado con nostalia <ero a m%, a&ora que eo acercarsela cincuentena, me acomete la tristeza del otoño con una uerza misteriosa que no &abr%a podido imainar en la 6uentud' no loro sacudirme la cono6a cuando eo las &o6as delarrurruz temblar en el iento' y en sidos como aqul y anoc&eceres seme6antes me aectaa+n más la impermanencia de los &ombres, cuyos aanes se desanecen sin de6ar &uella, yse audiza mi añoranza por el mundo alere del pasado Jortesanas amosas mencionadasen las Notas se llamaban Iannon, Byoi, Kncensario y <ao Seal !ambin nos &an lleadolos nombres de otras# <equeña Iannon, Ha"us&i, Huya, Baruto ;C$nde están aquellasmu6eres lotantes= e dice que esco%an nombres de uerra con sabor budista en la creenciade que ender placer se@ual era acci$n dina de un bod&isatta ;Bo ser%a posible que porunos momentos alorasen a la supericie de aquella corriente, como burbu6as del aua, esas

mu6eres que quisieron pasar por aatares de amantab&adra y a las que incluso un sabioenerable rindi$ tributo=

/as casas de cortesanas llenan las márenes norte y sur del r%o en 7uc&i yIatsuramoto 7sas mu6eres se entrean a los deseos de los iandantes' cuando se aote sue@istencia ac%a, dilapidada en riolidades, ;c$mo será su ida siuiente= Gcaso el &abersido cortesanas sea resultado de una ida anterior <or prolonar una e@istencia insustancialcomo el roc%o, realizan actos que el 0uda &a condenado seeramente H si malas son sus propias transresiones, ;no es a+n más eronzoso que arrastren al error a tantos otros= inembaro, muc&as cortesanas &an renacido en la !ierra <ura' y alunas, iiendo entre pescadores que matan seres ios, tuieron especial mrito

!al ez, como escribi$ aiyō, esas mu6eres &ayan renacido en el para%so de Gmida,y all% sonr%an apiadándose de que lo que no cambie nunca, en ninuna poca, sean lasmiserias de la &umanidad>1N?

e+n rumiaba a solas esos pensamientos, en mi mente empezaron a perilarse un par de ersos Bo uera a ser que se me olidaran, saqu el cuaderno de notas y me puse aescribir con un lápiz a la luz de la luna .e apetec%a el sa"e que quedaba' beb% un trao y



escrib%' beb% otro trao y seu% escribiendo, y una ez que apur la +ltima ota tir la botellaal r%o 7n el mismo instante o% cru6ir las cañas cerca de m%, y al olerme i que un &ombreestaba acuclillado en el cañaeral iual que yo, como si uera mi sombra /a sorpresa me&izo ser rosero y le mir i6amente' pero l no re&uy$ mi mirada 7stá esplndida la luna,;erdad=, me di6o a modo de saludo con oz sonora !iene usted muy buen usto /e

conieso que lleo aqu% un buen rato, pero no &e querido turbar su tranquilidad, aunqueoyndole entonar !a canci.n del la5d me &an dado anas de canturrear yo tambin alunacosilla Bo quisiera ser importuno, pero quizá tendr%a usted la entileza de escuc&arme unmomento, di6o Pue un desconocido se lance a &ablar con esa amiliaridad es alo casiinaudito en !o"io, pero +ltimamente yo no s$lo &ab%a de6ado de cuestionar la ranqueza delos &abitantes del Iansai, sino que &asta me &ab%a &ec&o a los usos locales 7s usted muyamable, di6e con naturalidad er%a un placer Xl se leant$ áilmente, y abrindose pasoentre las cañas ino a sentarse a mi lado Cisculpe, ;no le apetecer%a un trao=, di6omientras desenol%a alo que tra%a atado con una cuerda a un bast$n de madera natural Wique en la mano izquierda sosten%a una calabaza, y con la derec&a me orec%a un asito delaca ace un momento tir$ usted su botella, pero a m% toda%a me queda esto, di6omoiendo la calabaza Gcptelo a cambio de escuc&ar mi torpe canto 7star sobrio leestropear%a el placer Bo pasa nada por e@cederse una pizca, con esta brisa r%a que sube delr%o H obliándome a tomar el aso lo llen$ 7l sa"e &izo un oroteo aradable al salir dela calabaza 8racias' lo probar, di6e, y aci el aso Ce qu marca era no lo s, perodespus del .asamune embotellado aquel sa"e suae y r%o, con un aroma sutil de madera,me reresc$ la boca al instante <erm%tame, por aor, otroR y otro, di6o el &ombre,apresurándose a llenar el aso por seunda y tercera ez' y mientras yo me beb%a el tercersa"e empez$ a cantar lentamente una canci$n de 6o/ ō7* Sespiraba mal y se a&oaba,quizá por estar un poco bebido Bi su oz era potente ni se &abr%a podido decir que uera&ermosa, pero era una oz educada, de una sobriedad eleante u mane6o seuro &ac%asospec&ar muc&os años de práctica <ero por encima de todo ue su actitud de serena

abstracci$n lo que me conquist$, el o%rle cantar con toda tranquilidad ante un desconocidoabsoluto y er que al instante se sumer%a en el mundo de la canci$n, a6eno a cualquier otrainquietud <ens entonces que el aprendiza6e art%stico no tiene por qu ser in+til, aunque nose lleue a dominar la tcnica, si sire para alimentar esa disposici$n 7splndido, di6e a&ec&o usted que me sienta como nueo Xl, sin aliento, se &umedeci$ la boca y lueo metendi$ el asito !$mese otro, por aor, di6o /leaba una orra de caza enca6ada &asta lasce6as, y la isera le &ac%a sombra sobre la cara, por lo que me era di%cil distinuir susacciones a la luz de la luna' pero parec%a tener más o menos mi edad, y cubr%a su cuerpoesbelto y menudo con un "imono de diario y un abrio de ia6e ;7s usted de sa"a= preunt, porque le notaba un acento del oeste de Iioto %' teno en el sur de sa"a un pequeño comercio de antiYedades, di6o ;H a&ora uele usted a su casa= Bo, no' esta

noc&e &e salido a er la luna uelo tomar la l%nea elctrica Iei&an, pero este año tue la buena idea de enir dando un rodeo en la Buea Iei&an y cruzar aqu% el r%o .ientras&ablaba sac$ una tabaquera de la a6a y car$ de picadura una pipa ;Puiere usted decir quetodos los años a a al+n sitio a mirar la luna= %, di6o Jall$ un momento para encender la pipa !odos los años oy a mirar la luna al lao ura, pero me alero de que el azar me&aya &ec&o pasar por aqu% esta noc&e y er la luna en medio del r%o e lo debo a usted, porque en realidad &a sido al erle descansar aqu% cuando me &e dado cuenta de lo buenoque era el sitio 7stá la luna e@traordinaria, ;erdad=, ista entre las cañas y con el Hodo a



un lado y a otro Waci$ el rescoldo en un netsu"e, lo utiliz$ para prender otra cara detabaco y di6o# Puizá se le &ayan ocurrido a usted alunos ersos bonitos y me permitaescuc&arlos Bo, en absoluto' son muy malos, nada que ala la pena Sápidamente meuard el cuaderno de notas Bo sea tan modesto, di6o' pero no insisti$, y de pronto, comosi ya no pensara más en ello, declam$ con parsimonia# D/a luna brilla en el r%o, el iento

susurra en los pinos' E ;qu raz$n &ay para esta noc&e lara y clara=F

>2T?

<or cierto, di6e, sies usted de sa"a conocerá bien la eora%a y la &istoria de esta zona ;Cir%a usted quecortesanas como la Cama de 7uc&i circularon en sus barquitas alrededor de este banco dearena= 7so, más que ninuna otra cosa, es lo que yo eo al mirar la luna# isiones deaquellas mu6eres, que lotan aamente ante mi ista 7staba intentando poner en orma de poema lo que sent%a persiuiendo esas sombras, pero no me &a salido lo que quer%a Oeráque a todos se nos ocurren cosas parecidasQ, e@clam$ l Ho estaba pensando 6ustamente lomismo, di6o con sentimiento G m% tambin me en%an isiones del pasado al contemplaresta luna Cebe usted ser de mi edad, di6e asomándome a su rostro erá eecto de los años,;no le parece= 7ste año más que el pasado, y el pasado más que el anteriorR Jon cada añoque pasa yo me &ao más sensible a una tristeza, una desolaci$n en el otoño, unamelancol%a estacional, que no s de d$nde iene ni por qu D<ero el sonido del iento medespiertaF' D.oiendo las persianas de mi puerta sopla el iento de otoñoF# &emos tenidoque llear a esta edad para saborear autnticamente esos poemas antiuos >21? <ero eso noquiere decir que yo aborrezca el otoño por ser triste Juando era 6oen lo que más meustaba era la primaera, y en cambio a&ora me ilusiona más el otoño e+n se &ace unoie6o a lleando a una especie de resinaci$n, una disposici$n a aceptar el propio decliede acuerdo con las leyes de la naturaleza, y se llea a desear una ida tranquila yequilibrada, ;no es erdad= H entonces reconorta más un paisa6e melanc$lico que una istaesplendorosa, y preerimos perdernos en el recuerdo de placeres pasados antes queentrearnos al placer real Cic&o en otras palabras, para una persona 6oen el apeo al pasado no es más que una quimera que no tiene nada que er con el presente, pero para una persona de edad no &ay otra manera de soportar el presente 7l &ombre asinti$ conconicci$n Gs% es, as% es e@actamente Cebe de ser natural que ocurra eso con la edad <eroa m% ya de niño mi padre me obliaba a dar una caminata de oc&o "il$metros o más ba6o laluna, cada año, en la iesta del plenilunio de otoño, y al oler esta ec&a me trae lamemoria de aquel tiempo 7l caso es que mi padre dec%a lo que usted acaba de decir# !+seuramente no entiendes la tristeza de esta noc&e de otoño, me dec%a, pero ya lleará el d%aen que la entiendas ;J$mo es eso= ;!anta aici$n ten%a su padre al plenilunio de otoño= ;H por qu le &ac%a dar esa caminata si era toda%a pequeño= 0ueno, tendr%a seis o siete años la primera ez que me lle$ Ho no entend%a nada Wi%amos los dos en una casa pequeña deun calle6$n, porque mi madre &ab%a muerto &ac%a dos o tres años, y supono que no podr%ade6arme solo Wámonos, &i6o m%o, me di6o, te oy a llear a que eas la luna' y salimoscuando a+n era de d%a 7n aquel entonces no &ab%a trenes elctricos' recuerdo que enac&i"enya tomamos un barco de apor que sub%a por este r%o Cesembarcamos enus&imi, que yo entonces no sab%a que uera us&imi .i padre ec&$ a andar por un dique yyo tras l, y andando andando lleamos por in a un lao G&ora s que eran el dique deura y el lao de ura>22? abr%a una distancia de seis u oc&o "il$metros en cadasentido <ero ;con qu in iban &asta all%=, le interrump% ;$lo por pasear iendo el rele6ode la luna en el lao= % .i padre a eces se paraba en el dique para mirar la supericie dellao y me dec%a# ;Werdad, &i6o m%o, que es una ista muy bonita= H yo, a mi manerainantil, pensaba# %, es una ista muy bonita, y la iba contemplando mientras le seu%a



asta que pasamos por una mansi$n que parec%a una illa de ente rica Ce dentro lleaba atras de los árboles el sonido del "oto, el samisen y el "o"yū>23? .i padre se detuo aescuc&ar un rato 6unto a la er6a, y despus borde$ la tapia que cerraba la inca Ho le seu%/as notas del "oto y del samisen sonaban cada ez más claras, y se o%an oces dbiles' senotaba que nos estábamos acercando al 6ard%n interior <or all% ya no &ab%a tapia sino un

seto io, y mi padre se asom$ a mirar por un punto donde &ab%a claros en el olla6e <oraluna raz$n se qued$ all% inm$il, as% que yo tambin met% la cara entre las &o6as paramirar 7ra un 6ard%n esplndido, con su csped, su mont%culo artiicial y su estanque, y unaconstrucci$n con una aler%a eleada sobre el aua, al estilo de los pabellones de primaerade otras pocas Gll% &ab%a cinco o seis &ombres y mu6eres <arec%an estar celebrando unaiesta del plenilunio, porque en un e@tremo de la eranda se e%a una mesa con orendas decomida y sa"e y lámparas saradas, y una composici$n de plantas de miscanto y lespedeza7n el luar de &onor una mu6er tocaba el "oto, y otra peinada al estilo &imada y estidacomo una criada antiua tocaba el samisen >24? An &ombre que parec%a un maestro de ranoeleado, o quizá un proesor de artes de adorno, tocaba el "o"yū Cesde nuestroobseratorio no pod%amos erles con claridad 7n cambio ten%amos enrente un biombodorado, y delante de l otra 6oen, tambin peinada al estilo &imada, danzaba moiendoun abanico Ho e%a bien sus moimientos, aunque no distinu%a sus acciones uera porque la electricidad toda%a no &ubiera lleado &asta all% o porque aquella ente preirierauna atm$sera más reinada, la aler%a estaba iluminada con elas, y sus llamas acilantesse rele6aban en la madera pulimentada de columnas y barandillas y en el oro del biombo/a luna brillaba en el estanque, y en la orilla estaba amarrada una barca# el aua proced%adel lao ura, y sin duda se pod%a ir en barca desde all% &asta el lao <ronto acab$ ladanza, y las seridoras sacaron botellas de sa"e G 6uzar por la deerencia de sus modales,la que tocaba el "oto era la señora y las demás sus acompañantes 7stoy &ablando de &acecuarenta años, cuando en las casas ricas de Iioto y sa"a se est%a a las criadas como siueran damas de la corte y se les enseñaba etiqueta, y si el señor de la casa era realmentecultiado tambin recib%an instrucci$n art%stica Gquella illa deb%a de pertenecer a uno deesos ricos, y la mu6er que tocaba el "oto ser%a la señora 6oen de la casa <ero estabasentada del lado de dentro de la aler%a, y las plantas de miscanto y lespedeza no permit%aner bien su cara .i padre prob$ a mirar por otros puntos del seto, aparentemente para erlame6or, pero siempre lo imped%an las plantas <or el peinado, el maquilla6e y el color del"imono se deduc%a que era una mu6er toda%a 6oen u oz era especialmente 6uenil Gesa distancia no pod%amos seuir la conersaci$n, pero su oz sobresal%a por encima de lasdemás, y de ez en cuando nos lleaba a tras del 6ard%n un inal de rase t%pico de sa"a#8sō kai naa9, o 8sō dessharo naa9 7ra una oz llena de matices, bonita, ia y e@presiau dueña daba la impresi$n de estar un poco ac&ispada# de cuando en cuando se ec&aba are%r con una risa ranca, reinada e inocente a la ez <adre, ;esas personas están celebrando

el plenilunio=, preunt %, as% parece, me respondi$ sin apartar la cara del seto <ero ;dequin es esta casa= ;/o sabe usted, padre= G eso s$lo contest$ con un ruñido y siui$mirando sin parpadear a tras del seto, absorto en la iesta <asamos all% un tiempointerminable' toda%a &oy me lo parece .ientras tanto las doncellas se leantaron dos otres eces para espabilar las elas, &ubo otra danza, y o%mos a la señora cantar un solo consu bonita oz, acompañándose con el "oto euimos mirando &asta que por in la iestaacab$ y todos abandonaron la aler%a, y de nueo ue la caminata por el dique Juando locuento as% parecerá que recuerdo con una iidez uera de lo normal alo que sucedi$



cuando yo era niño, pero la realidad, como dec%a &ace un momento, es que todo aquelloocurri$ más de una ez !ambin al año siuiente y al otro me lle$ mi padre en el plenilunio de otoño por el mismo dique, y al pararnos 6unto a la er6a de la mansi$n dellao o%mos el "oto y el samisen /ueo mi padre y yo bordeamos la tapia &asta el seto y nosasomamos al 6ard%n /a aler%a presentaba más o menos el mismo aspecto un año y otro,

con la señora y su reuni$n de m+sicos y doncellas en un banquete consarado a lacontemplaci$n de la luna /o que yo i el primer año se me &a 6untado con lo que i en losaños siuientes, pero cada año era más o menos como le acabo de contar Ha eo, di6e,arrastrado a aquel mundo de recuerdos ;H qu mansi$n era aqulla= u padre tendr%aaluna raz$n para ir all% todos los años ;Saz$n=, di6o el &ombre tras cierto titubeo Boteno inconeniente en decirle la raz$n, pero apenas nos conocemos y temo que ser%a unabuso seuir retenindole entir%a no conocer el resto despus de lo que &e o%do' &able sinreparo .uc&as racias Ha que es usted tan amable, se lo contar Woli$ a sacar lacalabaza ablando de restos, nos queda un poco de sa"e Wamos a acabarlo antes decontinuar .e pas$ el asito, y una ez más el sa"e &izo su aradable oroteo al salir de lacalabaza

7l &ombre reanud$ su relato cuando &ubimos apurado la +ltima ota# .i padre&ablaba de ello en la noc&e del plenilunio del octao mes, se+n %bamos caminando por eldique Bo son cosas para que las entienda un niño, dec%a, pero pronto t+ tambin serásadulto 7scuc&a bien lo que te dio y trata de recordarlo cuando seas mayor !e oy a &ablarcomo a una persona mayor iempre se pon%a serio al decir eso, y &ablaba como si estuieracon un amio de su edad 7n aquellos momentos se reer%a a la señora de la illa como DladamaF, o Dla dama yū» Bo te olides de la dama yū, dec%a casi llorando !e traio aqu%cada año porque quiero que recuerdes c$mo es G esa edad yo no pod%a entender lo quequer%a decir mi padre, pero la curiosidad de un niño es poderosa, y la seriedad de mi padreme induc%a a escuc&arle con tanta atenci$n que lleaba a compartir su estado de ánimo y asentir que aamente le entend%a /a mu6er a la que llamaba la dama yū era &i6a de unaamilia de sa"a apellidada Iosobe !en%a diecisis años cuando se cas$ con unIayu"a:a /a &ab%an escoido por su belleza, pero cuatro o cinco años despus su maridomuri$, de6ándola iuda con eintiuno o eintid$s años oy d%a, por supuesto, no &abr%atenido que seuir iuda toda la ida ni renunciar al mundo, pero esto era al principio de lapoca .ei6i, cuando toda%a se manten%an las costumbres del s&ounato>25? Gdemás, tenoentendido que los mayores de su amilia y de los Iayu"a:a eran muy estrictos' y, sobretodo, le quedaba un &i6o de su diunto marido Gs% que al parecer no pod%a oler a casarse!ambin &e o%do que, &abindola escoido con tanta e@iencia, tanto su suera como sumarido la adoraban, y que lleaba una ida a+n más consentida y realada que cuandoestaba con su amilia Gun despus de eniudar &ac%a e@cursiones de placer con un e6rcitode criadas Jomo era libre de darse ese tipo de lu6os, ista desde uera daba la impresi$n deobernarse a su anto6o, y es muy probable que eectiamente iiera contenta, ozandocomo ozaba de entretenimientos y distracciones continuas Juando mi padre la io por primera ez, la señorita yū ya estaba iuda en las circunstancias que &e dic&o Jreo que lten%a eintisiete años ue antes de que yo naciera y seu%a soltero, y la señorita yūten%a eintid$s ue a comienzos de un erano .i padre &ab%a ido al teatro de Cōtomboricon mis t%os, su &ermana menor y su cuñado' y la señorita yū estaba en el palco detrás del Kba acompañada por una 6oen de quince o diecisis años, as% como dos doncellas y unamu6er mayor que pod%a ser el aya o una obernanta /as tres, detrás de la señorita yū, se



turnaban para abanicarla Wiendo que mi t%a la saludaba, mi padre le preunt$ quin era 7sla iuda Iayu"a:a, le e@plic$' y la 6oen que iba con ella era la pequeña de sus &ermanas,la señorita Iosobe .e atra6o desde la primera ez que la i aquel d%a, dec%a mi padre 7naquella poca tanto los &ombres como las mu6eres se casaban pronto, pero mi padre, a pesarde ser el mayor de los &ermanos, seu%a soltero a los eintisiete años porque no &ab%a

encontrado a nadie que le ustara entre las muc&as oertas de matrimonio que le llo%anencima Ho &e o%do que recuentaba las casas de t y tuo una aorita en ese ambiente, pero para casarse no era eso lo que quer%a 7ra un &ombre de ustos que podr%amos llamarseñoriales, aristocráticos /o suyo no pod%a ser una mu6er actual' ten%a que ser una mu6ertan reinada como esas damas de la corte a las que uno se imaina con una t+nica lara deceremonia y leyendo el 1en-i detrás de las cortinas' no se iba a contentar con una eis&aPuizá se preunte usted de d$nde &ab%a sacado esos ustos un &ombre de la clasemercantil <robablemente la e@plicaci$n está en que incluso en sa"a, en barrios como elde emba, &ab%a casas donde se era muy e@iente con los modales de la seridumbre y seobseraba una etiqueta más propia de la aristocracia de la corte que de un obierno de proincias, y mi padre se &ab%a criado en una casa as% /o cierto es que al er a la señoritayū intuy$ que era lo que durante tanto tiempo &ab%a esperado Bo s c$mo lo intuy$!eno entendido que estaba sentada 6ustamente detrás de l' tal ez uera en el modo detratar a las criadas, en su actitud y sus maneras, donde io esa distinci$n que se espera enlas 6$enes de las me6ores amilias 7n las otora%as la señorita yū tiene las me6illasllenas y la cara redonda de una niña Cec%a mi padre# ay otras mu6eres de rasos tan&ermosos como los suyos, pero su cara tiene alo de indeinido !iene las acciones loso6os, la nariz, la boca borrosas, como eladas por una asa de seda que no de6ara l%neasclaras y marcadas' al mirarla a la cara era como si ante los o6os cayera una sombra brumosa, como si la enoliera una neblina particular 7n los te@tos antiuos se utiliza la palabra r ōtaketa para deinir esa clase de rostro' en eso reside la nobleza de la dama yū,dec%a Bo deb%a altarle raz$n /as personas de rostro inantil no suelen perder ese aspecto,

si no es por estraos de la ida /a señorita yū siempre &a tenido el rescor de una niña,sol%a decir mi t%a' no le &a cambiado nada la cara, desde los quince o los diecisis años&asta mediada la cuarentena Gs% que a mi padre le atra6o de inmediato aquella r ōtaketa

indeinida de la señorita yū, y cuando yo miro la otora%a de la señorita yū pensandoen los ustos de mi padre comprendo que le conquistara !iene, en suma, un alo querecuerda a las damas sutiles de la corte, ese aroma clásico en medio de la 6oialidad que setrasluce en la cara de una muñeca antiua de Kzu"ura 7sa clase de aroma lotaba tambinen el semblante de la señorita yū .i t%a, &ermana menor de mi padre como &e dic&o,&ab%a sido amia suya en la adolescencia, y las dos tuieron el mismo maestro de "oto Cea&% que pudiera inormar a mi padre de todo lo reerente a la educaci$n de la señorita yū,su amilia y su matrimonio !en%a otras &ermanas, una mayor y otra más 6oen, aparte de la

pequeña que la acompañaba aquel d%a en el teatro' pero por ser la preerida de sus padres&ab%a crecido rodeada de mimos y atenciones !al ez uera por ser la más bella de laamilia, pero mi t%a dice que incluso sus propios &ermanos la ten%an por un ser especial ydaban por descontado que el resto del mundo opinara lo mismo iendo Dpersona decarácterF, por decirlo en palabras de mi t%a, la señorita yū no ped%a ese tratamiento, no eraanidosa ni dominante' pero todos se desi%an por atenderla como a una princesa y darletodos los capric&os, de modo que no conociera la menor contrariedad /a amilia entera se&abr%a sacriicado por ella con tal de eitarle los sinsabores de este mundo /a señorita y ū



ten%a la irtud de inspirar esa actitud en todo el que ten%a cerca, ueran padres, &ermanos oamias Juando mi t%a la isitaba de 6oencita, e%a que se la trataba como si uera el tesorode los Iosobe *amás mo%a un dedo, y sus &ermanas la ser%an como criadas H era comosi en todo ello tampoco &ubiera nada de e@traordinario, dec%a mi t%a# la señorita y ū sede6aba mimar con la mayor de las inocencias Gl o%r aquellas cosas, mi padre a+n se sinti$

más atra%do por ella' pero no tuo ocasi$n de erla &asta que mi t%a se enter$ de que iba a participar en un recital de "oto y le di6o# Kr contio si quieres er a la señorita yū 7l d%adel recital la señorita yū se de6$ el cabello suelto por la espalda, se puso una t+nica larade ceremonia e &izo quemar incienso mientras tocaba el 4uya:;* %, toda%a &oy escostumbre obserar esa etiqueta cuando se interpreta una obra con el isto bueno de unmaestro e asta muc&o dinero en eso /os maestros están deseosos de lucir a sus alumnos pudientes, y la señorita yū, que recib%a clases de "oto por entretenerse, lo &ar%a a petici$ndel suyo Jomo &e dic&o antes, yo la &e o%do cantar y conozco la belleza de su oz, y a&ora,cuando pienso en su personalidad y recuerdo aquella oz, comprendo me6or su rado dereinamiento .i padre se emocion$ muc&o el d%a que la oy$ cantar por primera ez /aimaen de la señorita yū estida con una t+nica lara de ceremonia, como 6amás &ab%aesperado erla, conirti$ en realidad la isi$n que acariciaba en sueños orprendido yembelesado, no dar%a crdito a sus o6os /a señorita yū a+n ten%a puesta la t+nica deceremonia cuando mi t%a ue a erla al camerino despus del recital /o de menos era el"oto, le di6o' pero le cones$ que le &ac%a ilusi$n estirse as% aunque s$lo uera una ez inquerer desprenderse de la t+nica, añadi$# H a&ora me an a retratar Juando supo eso, mi padre comprendi$ que la señorita yū ten%a sus mismos ustos, y decidi$ que s$lo ella pod%a ser su esposa /a mu6er que lleaba tanto tiempo esperando, dibu6ando su imaen enel coraz$n, era la señorita yū Juando se sincer$ con mi t%a, ella le maniest$ quecomprend%a sus sentimientos, pero que dada la situaci$n el matrimonio con la señorita yūera imposible Glo se &abr%a podido &acer si no e@istiera el niño, di6o, pero la señorita yūten%a que criar a un &i6o que era el preciado &eredero de la amilia <or nada del mundo pod%a de6ar la casa de los Iayu"a:a y ale6arse de l Gdemás, la señorita yū ten%a unasuera, y un padre que ozaba de buena salud, aunque su madre &ab%a muerto /os mayoresde una y otra amilia le de6aban actuar a sus anc&as por el cariño que le ten%an, porque lesapenaba su situaci$n de iuda 6oen y quer%an ayudarla a aliiar su soledad esobreentend%a que, en correspondencia, esperaban de ella que permaneciera siempre iel ala memoria de su marido /a señorita yū se &ac%a caro, di6o mi t%a G pesar de su tren deida, 6amás &ab%a dado que &ablar e+n mi t%a, era eidente que no ten%a la menorintenci$n de olerse a casar <ero mi padre no quiso darse por encido, y le di6o quesiendo as% no la pretender%a en matrimonio, pero ;no pod%a mi t%a arrelar las cosas paraque se ieran de ez en cuando= $lo con erle la cara se dar%a por contento Gnte esainsistencia a mi t%a se le &ac%a cuesta arriba seuir contrariándole, pero tampoco era ácil loque ped%a, porque ella y la señorita yū &ab%an tenido ran amistad de 6oencitas, perodespus se &ab%an distanciado Cándole ueltas al asunto, por in le propuso casarse con la&ermana pequeña de la señorita yū' ya que aparte de la señorita yū no le apetec%acasarse con nadie, &ar%a bien en optar por la &ermana' con la señorita yū no &ab%a nadaque &acer, y en cambio sus posibilidades con la &ermana pequeña ser%an e@celentes ereer%a a s&izu, la 6oen a la que la señorita yū &ab%a lleado al teatro /a &ermanaintermedia entre la señorita yū y la señorita s&izu ya estaba comprometida, y la señoritas&izu ten%a la edad perecta .i padre recordaba su cara de cuando la io en el teatro, y al parecer la suerencia de mi t%a le &izo rele@ionar# la señorita s&izu no carec%a de



encantos, y, aunque su isonom%a uera distinta de la de la señorita y ū, de todos modoseran &ermanas y la pequeña recordaba en alo a la mayor' la principal ob6eci$n era que a laseñorita s&izu le altaba aquella r ōtaketa de la cara de la señorita yū' quedaba muy pordeba6o de su &ermana' indola sola no se notaba tanto, pero al lado de la señorita yū&ab%a la dierencia de una princesa a una criada' posiblemente 6amás se &abr%a i6ado en la

señorita s&izu si no &ubiera sido &ermana de la señorita yū, pero ya que era &ermanasuya, y por su cuerpo corr%a la misma sanre, tambin le ustaba la señorita s&izu 7so noquer%a decir que le resultara ácil decidirse por ella 7n primer luar, no ser%a &onrado pretenderla por ese motio' además, l estaba resuelto a no ceder en su admiraci$n pura&acia la señorita yū, a tenerla siempre por su esposa espiritual y secreta' 6amás estar%asatisec&o con otra, aunque uera su &ermana pequeña <or otra parte, casándose con la pequeña podr%a er recuentemente a la señorita yū y &ablar con ella, mientras que de otromodo no la oler%a a er sino por casualidad 7sa idea le sum%a en un abatimientoinsoportable Cespus de muc&as acilaciones, inalmente accedi$ a concertar un encuentroormal de pretendiente con la señorita s&izu G decir erdad, seu%a sin querer casarse conella' lo que quer%a era oler a er a la señorita yū, aunque s$lo uera una ez, con el

prete@to de aquel encuentro H lo consiui$, porque la señorita yū acudi$ a todas lasreuniones y conersaciones preliminares Bo ten%a nada me6or que &acer, y en la amiliaIosobe no &ab%a madre para acompañar a la señorita s&izu, que además pasaba unaquincena de cada mes en casa de los Iayu"a:a, de modo que a eces costaba traba6orecordar cuál era su amilia 7ra, pues, natural que la señorita yū prodiara su presencia, ymi padre no &abr%a podido desear nada me6or <uesto que erla era su principal ob6etio,alar$ las conersaciones todo lo que pudo, concertando dos o tres reuniones ormales yde6ando pasar en balde cerca de medio año, con el resultado de que la señorita y ū empez$a &acer isitas recuentes a la casa de mi t%a 7se tiempo tambin le &ab%a dado ocasi$n dec&arlar con mi padre e ir conocindole An d%a le preunt$# ;/e desarada a usted s&izu=.i padre di6o que no 7ntonces acptela por esposa' y la señorita yū le inst$ iamente a

dar el paso Gl parecer ue a+n más e@pl%cita con mi t%a, diciendo que era aquella de sus&ermanas con la que estaba más unida, y que quer%a erla casada con un &ombre como elseñor eribas&i' que ser%a eliz teniendo por &ermano menor a un &ombre as% $lo por loque di6o la señorita yū se acab$ de decidir mi padre, y poco despus s&izu estabacasada %, esto quiere decir que s&izu es mi madre y la señorita y ū mi t%a' pero no es as%de sencillo Ho no s c$mo tom$ mi padre las palabras de la señorita y ū, pero en la noc&ede bodas s&izu le di6o# !e &e aceptado porque s lo que siente mi &ermana Bo podr%amirarle a la cara si me entrease a ti !e rueo que la &aas eliz' a m% no me importa ser tuesposa s$lo de nombre H se ec&$ a llorar

.i padre crey$ estar soñando al o%r a s&izu Gunque estaba secretamente

enamorado de la señorita yū, &asta entonces no &ab%a tenido el menor indicio de que ellaapreciara su amor, y desde lueo 6amás se le &ab%a ocurrido que pudiera corresponderle;J$mo sabes t+ lo que siente tu &ermana=, interro$ a la llorosa s&izu <ara decir esotienes que tener aluna prueba ;!u &ermana te &a &ec&o esa clase de conidencias= Bi ellame dir%a una cosa as% ni yo se lo preuntar%a, pero de todos modos lo s, di6o s&izu <odrá parecer e@traño que s&izu, mi madre, intuyera todo aquello cuando toda%a era unamuc&ac&a sin malicia, pero se e@plica por alo que yo supe despus Gl principio losIosobe &ab%an decidido rec&azar la proposici$n de mi padre por considerar que la



dierencia de edad era e@cesia, y la señorita yū aparentaba estar de acuerdo' pero un d%aque s&izu &ab%a ido a erla le di6o# Ho creo que es un ran partido, pero no soy quin parasostenerlo rente a la opini$n de los demás' al in y al cabo no a a ser mi yerno i a ti note disusta, &izu, ;por qu no les pides t5 que sian &ablando= /ueo interendr yo y searrelará todo s&izu no ten%a una opini$n irme al respecto Bo puede ser malo si t+ le

aloras tanto, di6o i a ti te parece bien, yo &ar lo que t+ dias .e alera o%rte &ablar as%,di6o la señorita yū Ana dierencia de once o doce años no es tan rara obre todo, intuyoque l y yo nos llear%amos bien Ana &ermana que se casa pasa a ser una e@traña, y yo preerir%a que nadie te apartase de m%' pero en este caso pienso que no ser%a as%' más bienser%a anar un &ermano Ha s que as% dic&o parecen razones eo%stas, pero ten por seuroque si es un &ombre bueno para m%, para ti tambin lo será 7scuc&a a tu &ermana mayor y&azme caso en esto i te casaras con aluien que no uera de mi usto, no tendr%a a nadieque me &iciera compañ%a y no podr%a soportar esa soledad, concluy$ Ha &e dic&o que laseñorita yū i%a rodeada de cariño, y no era consciente de su propio eo%smo debido a lamanera en que la &ab%an educado' es probable que en este caso no &iciera sino abusar delaecto de su &ermana predilecta <ero a s&izu le pareci$ detectar otra cosa en su actitud Bormalmente resultaba más encantadora cuanto más eo%sta y menos razonable, pero estaez &ab%a quizá una especie de ardor en su inocencia Gunque la señorita y ū no ueraconsciente, s&izu debi$ de notarlo Jomo seuramente captar%a tambin otras señales# lasmu6eres calladas como ella suelen ser obseradoras aunque no &ablen ea como uere,dicen que la señorita yū recobr$ el color despus de conocer a mi padre, y queaparentemente nada le daba mayor placer que &ablar de l con s&izu Xl le di6o a s&izu#7so son imainaciones tuyas H, temiendo que ella se diera cuenta de c$mo le lat%a elcoraz$n, se &izo el oendido# emos lleado a ser marido y mu6er por un %nculo que ienede una ida anterior' ;as a near que nuestro matrimonio estaba escrito, aunque enalunos aspectos no sea perecto= !u deoci$n a tu &ermana mayor está muy bien, porsupuesto que s%, pero obrar%as en contra de sus deseos si te precipitaras a sacar alsasconclusiones y por esa lealtad absurda &acia ella ueras cruel conmio 7stoy seuro queella no desea nada de eso, y se aliir%a enormemente si lo supiera, di6o

<ero t+ te &as casado conmio porque quer%as ser &ermano de mi &ermana, ;no escierto= 7lla misma se lo &a o%do decir a la tuya, y as% me enter yo tambin ;Bo es erdadque &as tenido muc&as ocasiones de &acer una ran boda, pero nunca te ust$ nadie= $lo por mi &ermana querr%a casarse un &ombre tan e@iente con una tonta como yo, di6o .i padre aac&$ la cabeza sin saber qu responder .i &ermana, prosiui$ s&izu, no cabr%aen s% de aler%a si yo le di6era una sola palabra de lo que de eras sientes, pero eso s$loserir%a para crear resera por ambas partes, as% que de m% no saldrá' pero t+ no me debesesconder nada si no quieres que piense mal de ti Jomprendo Bo sab%a que te casaras pensando todo eso Bunca olidar tu bondad, di6o mi padre H llorando continu$# Ce todosmodos, para m% es s$lo una &ermana, y al maren de lo que t+ &aas por los dos no puedo pensar en ella de ninuna otra manera G ella y a m% s$lo nos &ar%as surir uardándole esaidelidad a ultranza <ara ti no puede ser aradable, pero si no me aborreces, ;no puedessituar la deoci$n a tu &ermana en ser mi esposa y deponer esa actitud distante=onrmosla los dos como a nuestra &ermana mayor, di6o .uy mala tendr%a que ser yo paraaborrecerte o encontrar nada desaradable, le respondi$ s&izu iempre &e seuido a mi&ermana en todo' si ella te quiere, yo tambin 7n el ondo no deber%a &aberte aceptado, porque &ao mal en apropiarme del &ombre al que quiere mi &ermana' pero tambin &e



pensado que de no ser as% el decoro os &abr%a impedido mantener uestro trato, y me &ecasado contio con la esperanza de que me admitas como una &ermana menor .i padredi6o# ;7s que pretendes sepultarte en ida por ella= Cudo que sea la clase de mu6er capaz de permitir alo seme6ante en una &ermana ;Bo estás calumniando a una persona pura einocente= 7lla contest$# .e disusta que lo interpretes as% Jlaro que quiero proteer la

inocencia de mi &ermana i ella a a conserarse casta por idelidad a mi cuñado, yo lo&ar en atenci$n a ella Bo ser la +nica que se sepulte ;Gcaso no &ace ella iual= !+ quizáno sepas que mi &ermana &a tenido desde que naci$ un carácter y una belleza que la &aceser querida por todos, y la amilia entera se &a desiido por proteerla, como si cuidara dela &i6a de un emperador' pero a&ora que te &a conocido está atada por relas odiosas Ho,que lo s, me atraer%a una maldici$n si te apartara de ella i ella me oyera dir%a que soyrid%cula, as% que con%o en que no me delates Bo &ace alta que nadie se entere' yo pienso&acer lo que debo para estar en paz conmio misma i una persona nacida para la elicidady la buena ortuna como es mi &ermana no puede &acer su oluntad en este mundo, yo nosiniico nada Cesde el primer momento decid% unirme a ti con la intenci$n de &acerla máseliz !e rueo que t+ tomes la misma resoluci$n y le seas iel, aunque a los o6os de losdemás nos comportemos como marido y mu6er i no eres capaz de &acer ese esuerzo, seráque no quieres a mi &ermana ni la mitad que yo Cesde el momento en que oy$ eso, mi padre tuo la idea i6a de que si s&izu estaba dispuesta a sacriicarse &asta ese punto, lcomo &ombre no pod%a ser menos 8racias, le di6o !e admiro por todo lo que &as dic&o .ierdadero deseo siempre &a sido iir como un iudo mientras tu &ermana se mantenaiuda i te &e &ablado as% s$lo &a sido por pensar que ser%a cruel de6arte iir como unamon6a, pero a&ora que eo la piedad de tus intenciones no encuentro palabras para e@presarmi ratitud i estás tan decidida, ;yo qu puedo ob6etar= Gunque parezca despiadado, laerdad es que yo tambin lo preiero as% Ceber%a &aber sido yo el que te lo &ubiera pedido, pero no ten%a derec&o a &acerlo Bo dir nada más sino que acepto tu enorme bondadCiciendo eso tom$ las manos de s&izu y se las lle$ reerentemente a la rente !oda lanoc&e la pasaron en ela conersando

Gs% pues, para el mundo mi padre y s&izu ormaban una pare6a bien aenida que 6amás discut%a por nada, pero en realidad no &ac%an ida marital, y la señorita yū inorabasus otos de idelidad Gl er que se lleaban tan bien, estaba muy satisec&a consiomisma, y ante el resto de la amilia se elicitaba de que se &ubiera seuido su conse6o G partir de entonces ella y la pare6a se isitaron casi a diario, y los eribas&i la acompañabansiempre al teatro y en sus ia6es !eno entendido que a menudo se intercambiabaninitaciones para estar uera una o dos noc&es 7n esas ocasiones la señorita yū y loscasados dorm%an 6untos en la misma &abitaci$n <oco a poco ino a ser sa su costumbre,de modo que aunque no salieran de ia6e la señorita y ū les initaba a quedarse en su casa,o ellos en la suya .uc&o tiempo despus, mi padre me contaba con nostalia que cuandolleaba la &ora de retirarse la señorita yū dec%a# Jalintame los pies, &izu, para ques&izu se metiera en la cama con ella Jalentarle los pies a la señorita yū era su cometido porque s&izu era muy calurosa, mientras que a la señorita yū se le quedaban los pies tanr%os que no pod%a dormir /a señorita yū dec%a# e lo &e pedido a una de las criadas desdeque te casaste, &izu, pero no es iual' y estando acostumbrada a ti, con calentadores y botellas de aua caliente no me basta Bo altaba más, respond%a s&izu' yo eno a estarcontio para poderte ayudar como antes H de buen rado se tumbaba 6unto a su &ermana&asta que sta se dorm%a o dec%a# Ha está bien .e &an contado muc&as otras &istorias de la



ida mimada de la señorita yū 7n casa ten%a tres o cuatro criadas a su sericio Jada ezque se laaba las manos, una criada le ert%a el aua y otra estaba al lado con la toalla, ycuando e@tend%a las manos mo6adas la criada de la toalla se las secaba cuidadosamente us propias manos no las utilizaba casi nunca, ni para ponerse una media ni para laarse en el baño %, pueden parecer e@traaancias en una persona nacida en la clase mercantil,

incluso en aquella poca' pero al entrearla a la amilia Iayu"a:a su padre lo &ab%a de6ado bien claro# Ho &e educado de esa manera a mi &i6a, y a&ora no se le puede pedir que cambiede costumbres i de eras la quieren, tendrán que permitir que sia &aciendo aquello a loque está acostumbrada H as% ue, dicen, como conser$ sus &ábitos de randeza aundespus de estar casada y tener un &i6o .i padre sol%a decir que ir a er a la señorita y ūera como isitar a una dama de la corte en sus aposentos <robablemente l lo e%a as%debido a sus propios ustos, pero dec%a que en las &abitaciones de la señorita yū no &ab%anada que no uera dino de un palacio y no estuiera adornado al estilo de la corte# desde eltoallero &asta el orinal, todo era laca y madera encerada 7n el paso de la antecámara, enluar de una sencilla puerta corredera ten%a un bastidor de colar ropa, con una t+nicadierente para cada d%a H, aunque en su cuarto no &ab%a estrado, la señorita yū sereclinaba en un apoyabrazos Juando no ten%a otra cosa que &acer se entreten%a perumandode áloe una t+nica, o comparando dierentes inciensos con sus doncellas, o 6uando a lanzarabanicos o al /o Jomo e@i%a eleancia incluso en los 6ueos pero no era muy e@perta enel /o, 6uaba a las cinco en raya para utilizar su tablero aorito, que era una pieza de lacadel silo VW con un dibu6o de lores otoñales ac%a las tres colaciones diarias en una bande6a propia de una casa de muñecas, y com%a en cuencos de laca Juando ten%a sed se leacercaba respetuosamente una doncella con la tetera sobre una peana, y cuando le apetec%aumar se sentaba a su lado una doncella para llenarle una pipa lara y encenderla <or lasnoc&es dorm%a detrás de un biombo ba6o decorado al estilo de I ōrin>2M?' si al despertarse porla mañana &ac%a r%o, mandaba e@tender en el suelo papel encerado y traer aua caliente yse laaba la cara all% mismo con 6arro y 6oaina Jomo era as% para todo, los ia6esresultaban laboriosos iempre ten%a que llear por lo menos una criada' s&izu se ocupabade esto y de lo otro, y &asta mi padre ten%a que colaborar Jarar con el equipa6e de laseñorita yū, estirla, darle masa6es# cada cual ten%a asinada su tarea para que no le altasede nada 7n esa poca el niño ya estaba destetado y coniado a los cuidados de un aya /aseñorita yū no le lleaba consio casi nunca <ero una tarde que &ab%an ido a Hos&ino para er las lores, la señorita yū se que6$ de tener los pec&os &inc&ados, y tan prontocomo llearon al &otel le pidi$ a s&izu que le sacara la lec&e Windolas en acci$n, mi padre di6o riendo# e te da muy bien 7stoy acostumbrada a beberle la lec&e, di6o s&izu.e lo &a pedido más de una ez desde que naci$ a6ime, porque al niño le amamanta lanodriza ;G qu sabe=, preunt$ mi padre Ho no recuerdo a qu sab%a cuando era pequeña, pero a&ora le encuentro un sabor curiosamente dulce ;Puieres probarla=, di6o s&izu 7nuna taza recoi$ alunas otas que ca%an del pez$n y se la pas$ a mi padre Xl tom$ unsorbo %, está dulce, di6o iniendo indierencia <ens$ que s&izu le &ab%a orecido lalec&e con aluna intenci$n' se sonro6$ y le dieron anas de salir corriendo An ustoe@traño, di6o, y la señorita yū rio aleremente cuando mi padre sali$ a la terraza Cespusde aquello s&izu empez$ a astarle toda clase de bromas' quizá le diert%a erle inc$modoo azarado Curante el d%a lo normal era que tuieran ente alrededor, pero en las rarasocasiones en que estaban los tres solos s&izu se leantaba de pronto y les de6aba 6untoslaro rato, para reaparecer cuando mi padre ya empezaba a ponerse nerioso i se sentaban 6untos, siempre le &ac%a sentarse al lado de la señorita yū i 6uaban a las cartas o a otra



cosa, se empeñaba en que l 6uase contra la señorita yū y la tuiera enrente i laseñorita yū le ped%a ayuda para liarse la a6a, s&izu llamaba a mi padre con la e@cusa deque era me6or la uerza de un &ombre' si &ab%a que ayudar a la señorita y ū a calzarse unoszapatos nueos, s&izu dec%a que los broc&es estaban muy duros y mi padre ten%a que ec&aruna mano' y siempre ella disrutaba indole pasar un mal rato 7ran bromas sin duda

inocentes' mi padre sab%a que no &ab%a maldad ni intenci$n de burla 7s posible que s&izuobrara a impulsos de su enerosidad# quizá pensara que actuando de ese modo contribu%a aromper el &ielo entre mi padre y la señorita yū, y a que la presi$n de las circunstancias lesempu6aran por in a abrir sus corazones <arec%a estar esperando un aumento de esa presi$n,un paso en also

<ero la ida siui$ discurriendo tranquilamente para los dos, &asta que un d%a &uboun incidente entre s&izu y la señorita yū .i padre, sin saber nada, ue a isitar a laseñorita yū, y en cuanto que ella le io se apart$ de su ista ocultando las lárimas 7ra la primera ez que ocurr%a alo as% ;ucede alo=, preunt$ mi padre a s&izu e &aenterado, di6o s&izu emos lleado a un punto en el que &ab%a que decir alo, y se lo &e

dic&o <ero s&izu no añadi$ nada más' no e@plic$ c$mo se &ab%a oriinado aquellasituaci$n, y por lo tanto mi padre no entendi$ bien qu era lo que &ab%a &ec&o<robablemente s&izu io lleada la &ora de conesar la erdad# su &ermana se sentir%aaeronzada y les ec&ar%a una reprimenda cuando supiera que no eran realmente marido ymu6er, pero al cabo de tanto tiempo se de6ar%a encer por el cariño que les ten%a s&izuobserar%a a su &ermana atentamente y escoer%a el momento apropiado para diriir laconersaci$n &acia el tema ab%a reconocer los estados de ánimo y ser oportuna, y, quizá porque se tomaba las cosas un poco demasiado en serio, recordaba en cierto modo a esaseis&as ya mayores que son e@pertas en concitar oluntades /o cierto es que parec%anacida para dedicarse en cuerpo y alma a la señorita yū Bo &ay nada en el mundo que me&aa más eliz que poder ayudar a mi &ermana, dec%a' no s por qu me pasa, pero cuandole eo la cara me olido de m% 7s erdad que se la podr%a acusar de enredadora, pero tantola señorita yū como mi padre comprend%an que actuaba as% por cariño desinteresado &aciasu &ermana, y s$lo pod%an estarle aradecidos Gl principio la señorita yū se qued$at$nita Bo ten%a la menor idea de &aber ocasionado seme6ante crimen .e &ace temblar porla ida utura, di6o estremecida <ero pod%an anular su pacto, añadi$, y suplic$ que iierancomo un matrimonio de erdad Bo lo &acemos porque nos lo &ayas pedido t+, replic$s&izu &innosu"e y yo estamos &aciendo lo que nosotros queremos !+ no tienes queinquietarte, pase lo que pase e &ec&o mal en &ablar /o me6or será que no te des porenterada Ha que no estaban dispuestos a entrar en raz$n, la señorita yū se abstuo duranteun tiempo de isitar a la pare6a' pero tampoco pod%a &acer nada que les de6ara en mal luar, puesto que toda la parentela sab%a lo unidos que estaban <ronto olieron a erse, y el plande s&izu acab$ saliendo bien %' si pudiramos asomarnos al coraz$n de la señorita y ū,descubrir%amos tal ez que en su interior alo se &ab%a calmado, como si se &ubieranalo6ado las ataduras que ella misma se &ab%a impuesto <robablemente no uera capaz decondenar la idelidad de su &ermana Cesde entonces se oli$ a maniestar sumananimidad innata, y de6$ que la pare6a &iciera lo que quisiera Joniaba en sudiscreci$n, y, reconociera o no su solicitud, lle$ a aceptarla sin resistencia ue porentonces cuando mi padre la empez$ a llamar la dama y ū An d%a que estaban &ablandode ella, s&izu le pidi$ que de6ara de nombrarla como la &ermana mayor de los dos, y lentonces opt$ por llamarla la dama yū, pensando que era el apelatio que me6or le



cuadraba Bo tard$ en llamarla as% a todas &oras, y cuando se le escap$ en presencia de laseñorita yū ella di6o que le ustaba, y que esperaba que la llamaran as% entre los dos Hañadi$# Ho aradezco que todo el mundo me trate tan bien, pero usted debe entender queme educaron para no esperar menos iempre estoy de buen &umor si los demás me &acenmuc&o caso /e oy a dar alunos e6emplos de los capric&os de niña de la señorita y ū

Ana ez le puso a mi padre una mano delante de la nariz y le di6o# Puiero que no respire&asta que dia Ha .i padre lo intent$ &asta que no pudo más y de6$ escapar un poco deaire OG+n no &e dic&o HaQ, e@clam$ la señorita yū enadada' y de a&% pas$ a cerrarle loslabios con los dedos o taparle la boca con una tira doblada de cresp$n ro6o Cec%a mi padreque en aquellos momentos se le pon%a la cara de una niña pequeña y parec%a incre%ble queuera una mu6er de más einte años tras eces le dec%a# Bo me mire' 6unte las manos ysintese bien, con los o6os ba6os' y pro&ibindole re%rse le &ac%a cosquillas deba6o delment$n y en los costados, o dec%a# Bo se puede decir Gy, y le pellizcaba por todas partes /eencantaban esas traesuras Bo se puede usted dormir, dec%a, aunque yo me duerma i leentra sueño, auántese y no de6e de mirarme a la cara mientras duermo e dorm%atranquilamente, y, cuando mi padre tambin empezaba a cabecear, ella se despertaba y lesoplaba en la ore6a o le &ac%a cosquillas en la cara con un papel retorcido para espabilarle.i padre dec%a que la señorita yū &ab%a nacido para las tablas' en sus ideas y en sus estos&ab%a una teatralidad espontánea, que realzaba su personalidad alere y acrecentaba suencanto, sin artiicio y sin aectaci$n' y la mayor dierencia entre s&izu y la señorita y ūera que s&izu no ten%a ese lado teatral $lo la señorita yū pod%a sentirse en su elementotocando el "oto con una t+nica lara de ceremonia, o sentada tras una cortina de t+nicas y bebiendo sa"e de la copa de laca que le ser%a una doncella

Jlaro está que si la relaci$n entre los tres pudo desarrollarse as% ue racias a losesuerzos de s&izu, y porque la señorita yū pasaba muc&o tiempo en casa de loseribas&i, donde &ab%a más intimidad que en casa de los Iayu"a:a s&izu e6ercitaba suinenio de muc&as maneras ;Bo te parece que es un asto in+til llearse de ia6e a unacriada=, di6o un d%a Bo ec&arás en alta nada tenindome a m% Ce esa manera pudieron irlos tres solos a los santuarios de Kse y Ioto&ira s&izu, estida con sencillez como unadoncella, &ac%a instalar su lec&o en la antecámara /os tres adaptaban sus relaciones para laocasi$n y pon%an cuidado en las $rmulas de tratamiento Juando se alo6aban en un &otel,lo más sencillo &abr%a sido que la señorita yū y mi padre se condu6eran como marido ymu6er' pero, como la señorita yū tend%a al papel de ran señora, mi padre in%a ser sumayordomo o su administrador, o un artista acoido a su protecci$n Ce ia6e, tanto lcomo s&izu la llamaban eñora Xse era uno de los 6ueos aoritos de la señorita y ū Bo beb%a muc&o, pero con un poco de sa"e en la cena se ol%a muy osada, y se re%a acarca6adas aunque &asta entonces se &ubiera mostrado seria y tranquila <ero aqu% debodecir alo en deensa tanto de la señorita yū como de mi padre# aunque su relaci$n llearatan le6os, ninuno de los dos la lle$ &asta el inal e podr%a decir, por supuesto, que paraentonces ya daba lo mismo, y no basta para e@cusarles' pero yo quiero creer a mi padre, queun d%a le di6o a s&izu# G estas alturas ya no se trata de quedar bien ante ti, pero te 6uro portodos los dioses y budas que te somos ieles aunque durmamos el uno al lado del otro G lome6or no es lo que t+ quieres, pero tanto la dama yū como yo temer%amos por nuestraalma si te &umillásemos &asta ese punto Gs% que, en in, nos abstenemos por el bien denuestra conciencia euramente era as%, pero es l$ico pensar que otro elemento ser%a eltemor a lo que pudiera ocurrir si la señorita yū se quedara encinta 7n cualquier caso, la



castidad se puede interpretar en sentido amplio o estrec&o' tal ez no pueda yo decir que laseñorita yū uera inmaculada G este respecto me acuerdo de que mi padre ten%a en raneneraci$n un 6ueo de ropa suya de inierno que uardaba en una ca6a de madera de paulonia, con el r$tulo Kncienso de Gloe caliraiado por ella misma Ana ez me enseñ$ loque conten%a acando del ondo una lara camisa de estilo Hūzen, me la tendi$ diciendo#

/a señorita yū lleaba esto 6unto a la piel .ira qu cresp$n tan rueso Ho lo tom Bo se parec%a en nada al te6ido de a&ora# el cresp$n de entonces era muy runcido y de &ilorueso' era pesado como una cota de malla <esa, ;erdad=, di6o mi padre Ha lo creo, di6eyo' y l asinti$ como satisec&o de mi respuesta 7l cresp$n no tiene que ser blando, di6o' elerdadero alor de la tela está en esas arruas que le dan peso e siente muc&o me6or lasuaidad de la piel de una mu6er al tocarla 6unto a esas arruas ruesas 7l cresp$n parecetener más cuerpo y ser más bonito, y más aradable al tacto, cuanto más tersa es la piel dela persona que lo llea /a señorita yū ten%a las manos y los pies delicados, y esadelicadeza se apreciaba toda%a me6or al lado de este cresp$n Glz$ la camisa entre lasmanos Bo s c$mo pod%a con tanto peso, di6o dando un suspiro, y rot$ la me6illa contra la prenda como si abrazara a su dueña

7ntonces ya ser%a usted muy crecido cuando su padre le enseñ$ la camisa, di6e yo,que &asta ese momento &ab%a escuc&ado el relato en silencio Ci%cilmente pod%a entendereso un c&iquillo Bo, no tendr%a más de diez años <ero mi padre me &ablaba como a unadulto Ho entonces no lo entend%, por supuesto' pero uard sus palabras, y al madurar ui poco a poco islumbrando el sentido Jomprendo 7ntonces perm%tame una preunta# si larelaci$n de su padre con la señorita yū ue como usted dice, ;usted de quin es &i6o=0uena preunta Bo puedo acabar mi &istoria sin dec%rselo' le rueo que escuc&e un pocomás 7l curioso amor que &e descrito entre mi padre y la señorita yū no dur$ muc&otiempo' s$lo tres o cuatro años, comenzando cuando ella ten%a eintitrs o einticuatro Hten%a eintisiete, si no me equioco, cuando a6ime, el &i6o que le de6$ su diunto marido,muri$ de un sarampi$n complicado con pulmon%a /a muerte del niño aect$ a lascircunstancias de la señorita yū, y por lo tanto a la ida entera de mi padre ac%a yaal+n tiempo que la e@cesia recuencia con que la señorita yū isitaba a su &ermana y sucuñado &ab%a empezado a suscitar comentarios' no entre los Iosobe, que no dec%an nada,sino entre su suera y otros de la amilia Iayu"a:a, y &ab%a quien no se e@plicaba laactitud de s&izu <or muc&a &abilidad que pusiera en su papel, era natural que antes odespus la ente empezara a mirarla con e@trañeza /a mu6er de eribas&i se pasa de buena,dec%an, y el cariño entre &ermanas tiene sus l%mites Juando las &abladur%as empezaron aser molestas, mi t%a, que &ab%a adiinado la erdad, ue la +nica persona que se preocup$ por los tres Gl principio la amilia Iayu"a:a no &ab%a &ec&o caso de los rumores, pero almorir a6ime incluso ellos criticaron a la señorita yū por neliencia Bo se puede nearque en eso &izo mal Ho no creo que su amor a su &i6o &ubiera disminuido, pero &ac%atiempo que ten%a la costumbre de de6arle al cuidado del aya Cicen que estuo medio d%aapartada de la cabecera, y ue en esas &oras cuando el niño contra6o la pulmon%a /aseñorita yū ue importante para la amilia mientras ii$ el niño, pero una ez muertoRSecientemente &ab%a &abido rumores poco aradables, y toda%a era muy 6oen' quizá ser%alo me6or reinterarla a los suyos antes de que se complicaran las cosas, pensaron ;uamilia la acoer%a de nueo= Gl cabo de arduas neociaciones sobre se y otros asuntos,las dos amilias coninieron la manera de borrar amiablemente a la señorita yū delreistro amiliar de los Iayu"a:a sin per6uicio para nadie, y la señorita yū oli$ 6unto a



los Iosobe u &ermano mayor, a&ora 6ee de amilia, no la recibi$ mal' al in y al cabo&ab%a sido la aorita de sus padres, y l estaba molesto por lo que &ab%an &ec&o losIayu"a:a' pero ya no era iual que en ida de los padres, y ella tuo que notar ciertaresera s&izu la anim$ a irse a su casa si no se sent%a a usto con los Iosobe, pero el&ermano se opuso, señalando que &ab%a que ser discreto mientras persistieran las

&abladur%as 7n opini$n de s&izu su &ermano quizá sab%a la erdad, y una raz$n paracreerlo es que cosa de un año despus el &ermano inst$ a la señorita yū a oler a casarse7l pretendiente era un abricante de sa"e de us&imi llamado .iyazu 7ra muc&o mayorque la señorita yū, pero sol%a isitar a los Iayu"a:a y &ac%a tiempo que conoc%a su particular carácter !en%a prisas por concertar la boda, porque &ab%a eniudadorecientemente Gl parecer &izo una proposici$n muy enerosa# si la señorita yū acced%a acasarse, no la llear%a al almacn de us&imi' ampliar%a la illa que pose%a en el lao ura,construir%a a su usto un pabell$n al estilo de las casas de t, y la instalar%a all% /a señoritayū ozar%a del mayor de los respetos y iir%a a+n con mayor lu6o que cuando estaba conlos Iayu"a:a 7l &ermano, entusiasmado, la anim$ a dar el s% /a buena suerte teacompaña, dec%a Jasarte con l y de6ar en eidencia a todos los que &ablan de ti, ;no es lome6or= Kncluso &abl$ con s&izu y mi padre para que le plantearan la cuesti$n con tacto yla conencieran, acallando as% los rumores i mi padre &ubiera estado resuelto a llear suamor &asta el in, en ese punto no &abr%a tenido otra salida que suicidarse con la señoritayū Ce &ec&o teno entendido que más de una ez tom$ esa resoluci$n, pero la presenciade s&izu le imped%a ponerla en práctica 7n una palabra, le parec%a mal de6ar sola as&izu, y no quer%a que muriera con l y la señorita yū !ambin s&izu tuo miedo dequedarse sola /leadme con osotros, le suplicaba' no soportar%a quedarme uera al inal.e dicen que ue la +nica ez que se mostr$ celosa tro actor que debilit$ a+n más ladeterminaci$n de mi padre ue la compasi$n por la señorita yū Ana persona como elladeb%a conserarse siempre lozana e inocente, serida por una multitud de doncellas yiiendo con esplendor' permitir la muerte de aluien as% ser%a cruel 7sa idea inluy$ en lmás que ninuna otra cosa, dec%a Joni$ sus sentimientos a la señorita y ū Wale usteddemasiado para acompañarme en la muerte Ana mu6er cualquiera podr%a morir por amor, pero usted &a sido aorecida con abundancia de ortuna y cualidades Cesperdiciarlas ser%aimpropio de su nobleza Gs% que, por aor, áyase a iir a esa mansi$n del lao ura,tras sus tabiques y biombos deslumbrantes Ho ser más eliz imainándola a&% quemuriendo con usted /o dio porque s que no a a pensar que mi coraz$n &aya cambiadoni que me d miedo morir <recisamente porque esas ideas mezquinas no se le ocurrir%an 6amás le puedo &ablar con toda conianza Asted naci$ con la randeza de ánimo capaz derenunciar con una sonrisa a un &ombre como yo /a señorita y ū, que escuc&aba ensilencio las palabras de mi padre, de6$ caer una lárima' pero en seuida alz$ el rostro sinde6arse abatir %, creo que tiene usted raz$n, di6o aámoslo as% Bo parec%a en absolutodescompuesta, ni pretendi$ buscar e@cusas .i padre dec%a que nunca la &ab%a isto tannoble y distinuida como en aquel momento

Gs% que poco despus la señorita yū se oli$ a casar en us&imi' pero al parecer.iyazu era un iidor y se &ab%a casado con ella por capric&o Cicen que se aburri$ de ellaen seuida, y que rara ez aparec%a por la illa <or otra parte, no a&orraba nin+n asto enaquella casa donde ten%a entronizada a su esposa como quien tiene un ob6eto de alor enuna itrina, y de esa manera la señorita yū siui$ iiendo como antes, en un mundocalcado de las ilustraciones del 1en-i R5stico>2N? 7n sa"a, por el contrario, la amilia



Iosobe y la amilia de mi padre inieron a menos desde entonces, y, como &e dic&o antes,cuando muri$ mi madre &ab%amos lleado al punto de iir en una casa de ecindad de uncalle6$n %, la madre a la que me reiero es s&izu s&izu me tra6o al mundo .i padre,despus de decir adi$s a la señorita yū, considerando las penalidades que durante tantotiempo &ab%a soportado s&izu y sintiendo una enorme ternura &acia la &ermana pequeña

de la señorita yū, consum$ su matrimonio Cic&o esto el &ombre se call$, como si le&ubiera cansado &ablar tanto rato, y sac$ de la a6a su tabaquera

8racias por esa &istoria apasionante G&ora comprendo por qu su padre le lleabade niño 6unto a la illa del lao ura <ero si no me equioco dec%a usted que desdeentonces a all% todos los años a contemplar la luna 7s más, creo recordar que esta mismanoc&e se diri%a &acia all% %, repuso l, a&ora reemprender el camino !oda%a &oy, si meacerco a la illa en el plenilunio de otoño y miro a tras del seto, la señorita yū estarátocando el "oto y sus doncellas danzarán para ella 7s e@traño, pens, y di6e en oz alta# /aseñorita yū deberá tener ya cerca de oc&enta años, ;no=' pero s$lo me respondi$ elmurmurar del iento en la maleza Ha no i las cañas que cubr%an la orilla H el &ombre

&ab%a desaparecido, como si se &ubiera disuelto en el claro lunar



*ABKJKS Ō !GBKUGIK (1NNL-19L5), noelista, autor dramático y ensayista,

naci$ en !o"io, *ap$n, el 24 de 6ulio de 1NNL ue un muc&ac&o brillante que tanto en laescuela secundaria como en la preparatoria se distinui$ por sus altas caliicaciones ueadmitido en la Aniersidad Kmperial de !o"io en 19TN como estudiante, simultaneando susestudios con los inicios de su actiidad literaria y con una ida desordenada y bo&emia, enla que al reinamiento de la 6uentud dorada de la capital se mezclaban los inlu6os de suslecturas# 7dar Gllan <oe, J&arles 0audelaire u scar Zilde Gbandon$ sus estudios en19T9, pero pronto obtendr%a la ama con la obra Shisei (7l tatuador), publicada en 191TKnsatisec&o de las tendencias literarias de su poca, representadas por el naturalismo, busc$la &ermosura del arte autntico Setrat$ audaz y man%icamente el mundo de los sentidosal describir en una orma perecta aunque meta$rica el deseo carnal, naciendo as% lo que sedenomin$ la Daromática y uertemente e@citante literatura de *unic&ir ō !aniza"iF a

menudo criticada como anormal y pr$@ima al sadismo y al masoquismo



Notas

>1? <oema an$nimo, n[ 54T del Shūi <akashū (colecci$n compilada a comienzos delsilo VK) DGs&i"ariF, el t%tulo oriinal del relato, es una palabra tomada de ese poemainiica Dcortar cañasF o Dcortador de cañasF, con la connotaci$n de Ddesdic&adoF,DlastimosoF Bani:a es un nombre antiuo de sa"a \\

>2? /a tradici$n que airma que las tardes me6ores son las de otoño (y los me6oresamaneceres los de primaera) tiene su orien en el !i#ro de la almohada de ei &ōnaon,a comienzos del silo VK \\

>3? u6i:ara !ei"a, 11L2-1241 \\

>4? 7l mes octao ca%a mediado el otoño /a luna llena de ese mes se consideraba lamás bella del año, y era costumbre &acer iestas protocolarias de contemplaci$n de la lunaen la noc&e del quince, la noc&e del plenilunio \\

>5? (6anadehon) Chū shin/ura, una obra popular de t%teres y "abu"i del silo VWKKK\\

>L? Ōka/ami, una narraci$n &ist$rica del silo VKK, reiere la condena al destierro de

ua:ara .ic&izane (N45-9T3) en el año 9T1 por su rial pol%tico u6i:ara &i&ei \\

>M? /os nobles de la corte partidarios del emperador retirado 8otoba racasaron en elintento de derrocar el s&ounato en 1221 8otoba ue desterrado a "i, !suc&imi"ado y*unto"u a ado \\

>N? 8otoba recrea deliberadamente la escena inicial de DJlaellinasF (Tokonatsu) enla 0istoria de 1en-i \\

>9? 7l soldado y 8otoba aluden a un pasa6e del cap%tulo D7l árbol de retamaF(0ahaki/i) de la 0istoria de 1en-i# Dla mota de escarc&a se des&ará al leantarla de la &o6ade bamb+F \\

>1T? 7n el monte to"o se encuentra el santuario de K:as&imizu de ac&iman \\

>11? 4amato2e, las pinturas de los per%odos eian y Iama"ura sobre temas 6aponeses,a dierencia del kara2e, pinturas al estilo c&ino y sobre temas c&inos \\

>12? as&iba, Kmado, Iomatsu6ima y Iototoi son zonas de !o"io \\



>13? /uares asimismo de la rei$n de !o"io \\

>14? Iaa:a Iae"i, 1MLN-1N43' 7nomoto Ii"a"u, 1LL1-1MTM \\

>15? /os poetas son !u u (M12-MMT' Dubiendo al <abell$n de Hūe&-yanF)' <o J&ū-

i (MM2-N4L) y u &i& (o u !un-po, 1T3M-11T1) \\>1L? !a canci.n del la5d &abla de una antiua cortesana de la capital a la que el poeta

&a isto en una barca, acompañándose con el la+d mientras canta la &istoria de su ida \\

>1M? .asa&ira, 952-1T12' su bisnieto .asausa, 1T41-1111 \\

>1N? aiyō (111N-119T), clebre clrio poeta, es el Dsabio enerableF al que antes se&a aludido \\

>19? Ana obra del teatro nō escrita por Iomparu Uenc&i"u (14T5-14LN) 7n la parte

más amosa, un mensa6ero busca a Ioō, la amada del emperador, en aano, al oeste deIioto, ba6o la luna llena /a encuentra siuiendo el sonido de su "oto \\

>2T? Wersos del clrio poeta sūan J&ūe&, de la poca !an (tambin conocidocomo Hun-c&ia !a-s&i&) \\

>21? u6i:ara !os&iyu"i, 6okinshū 1L9#

Jon mis o6os no eo claramente que &a enido el otoño <ero el sonido del ientome despierta /a princesa Bu"ada, =an>yō shū 4NN# .ientras te espero lanuidezco deamor# .oiendo las persianas de mi puerta sopla el iento de otoño

\\

>22? 7l lao ura, de unos quince "il$metros de per%metro, estaba al sur de Iiotoue desecado entre 1933 y 1939 \\

>23? 7l "o"yū es un iol%n c&ino parecido al samisen, pero tocado con arco \\

>24? 7l estilo &imada era corriente entre las mu6eres solteras y las eis&as \\

>25? 7l per%odo .ei6i comenz$ con la restauraci$n de 1NLN \\

>2L? Jomposici$n de Hamada Ienyō (1M5M-1N1M), basada en la obra de teatro nō delmismo nombre de Ueami (13L3-1443) \\

>2M? Ce ata I ōrin (1L5N-1M1L), pintor amoso por la audacia de sus composicionesy su rico colorido \\



>2N? 3na ?alsa =urasaki y un 1en-i r5stico (1829), obra escrita por Rūtei Tanehiko(1!8"#18$2) e i%ustra&a con 'ran encanto por ta'aa *unisa&a (1!8+#18+$) --

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Tanizaki Junichiro - El Cortador De Cañas