268
1 TENDENCIAS DE INVESTIGACIÓN TURÍSTICA A PRINCIPIOS DEL SIGLO XXI INTRODUCCIÓN La investigación en turismo es un fenómeno académico reciente de tres déca- das de vida. Esta corta edad es uno de los factores que determinan la limitada atención que se ha puesto al estudio de las condiciones del surgimiento e implicaciones de la actividad turística. Para el surgimiento de este fenómeno tuvieron que conjuntarse infraestruc- turas y equipamientos adecuados para el visitante, leyes que regularan la pre- sencia de turistas en el país visitado, medios de transporte y comunicación que facilitaran los traslados y la oferta de servicios culturales y productos naturales, que motivaran grandes desplazamientos de personas, entre otros. A su vez, el establecimiento de actividades turísticas en cualquier lugar im- plica la aparición de problemáticas ambientales y la disposición de desechos sólidos, la transculturación en las comunidades donde llega el turismo o fenó- menos delictivos o de tipo sexual en esos mismos lugares, entre otras repercu- siones. De ahí la necesidad de investigar tanto las condiciones en las que surge la actividad turística como las implicaciones que la propia práctica genera. Por ello, el presente libro tiene como finalidad última mostrar lo que sobre investigación turística se está realizando en diversas instituciones educativas en el país. En un primer momento se intentó aglutinar trabajos de investiga- ción de algunos profesores de la Escuela Superior de Turismo (EST) del Insti- tuto Politécnico Nacional (IPN), sin embargo, posteriormente se decidió abrir la convocatoria a investigadores de otras instituciones educativas, y

Tendencias de Investigacion Turistica

Embed Size (px)

Citation preview

1

TENDENCIAS DE INVESTIGACIN TURSTICA A PRINCIPIOS DEL SIGLO XXI INTRODUCCIN La investigacin en turismo es un fenmeno acadmico reciente de tres dca- das de vida. Esta corta edad es uno de los factores que determinan la limitada atencin que se ha puesto al estudio de las condiciones del surgimiento e implicaciones de la actividad turstica. Para el surgimiento de este fenmeno tuvieron que conjuntarse infraestructuras y equipamientos adecuados para el visitante, leyes que regularan la pre- sencia de turistas en el pas visitado, medios de transporte y comunicacin que facilitaran los traslados y la oferta de servicios culturales y productos naturales, que motivaran grandes desplazamientos de personas, entre otros. A su vez, el establecimiento de actividades tursticas en cualquier lugar im- plica la aparicin de problemticas ambientales y la disposicin de desechos slidos, la transculturacin en las comunidades donde llega el turismo o fen- menos delictivos o de tipo sexual en esos mismos lugares, entre otras repercu- siones. De ah la necesidad de investigar tanto las condiciones en las que surge la actividad turstica como las implicaciones que la propia prctica genera. Por ello, el presente libro tiene como finalidad ltima mostrar lo que sobre investigacin turstica se est realizando en diversas instituciones educativas en el pas. En un primer momento se intent aglutinar trabajos de investiga- cin de algunos profesores de la Escuela Superior de Turismo (EST) del Instituto Politcnico Nacional (IPN), sin embargo, posteriormente se decidi abrir la convocatoria a investigadores de otras instituciones educativas, y con ello, explorar caminos multidisciplinarios y transdisciplinarios sobre la preocupa- cin del fenmeno turstico. Al trascender nuestra preocupacin al mbito nacional llegamos no slo a repensar la prctica del turismo, sino a reconsiderar las posibilidades reales de la misma, y por supuesto su calidad. De ah que los siguientes pasos fueran: documentar lo que se haba escrito sobre investigacin turstica; escudriar lo que hacan los investigadores de diferentes instituciones pblicas y privadas (qu y quines escriban); conocer la diversidad de propuestas de investigacin en los foros acadmicos, particularmente en los Congresos de Investiga- cin Turstica (CIT); e invitar a diversos investigadores del fenmeno turstico a participar en el proyecto de presentacin de sus investigaciones.

2

Como corolario, deseo apuntar que la idea de esta publicacin naci en enero de 2005; cuando nos dieron a conocer el acervo editorial del IPN, y corroboramos lo limitado de las publicaciones sobre turismo. En marzo del mismo ao, la certidumbre de esa carencia se tradujo en un programa de trabajo de investigacin en la EST, en donde se busc aglutinar intereses de in- vestigacin, compartir experiencias y retroalimentarnos en el oasis de la problemtica que envuelve al turismo. A ese esfuerzo colectivo fueron invita- dos muchos compaeros que, si bien no participan como colaboradores del libro, estuvieron presentes en algunas reuniones, opinando y dando sus pun- tos de vista respecto a las diversas problemticas tratadas. En esas reuniones se visualiz una urdimbre de posibilidades y perspectivas que pudieran enriquecer el proyecto editorial en marcha y con el tiempo se fueron sumando diversos investigadores y proyectos, por lo que, quienes trascendier el proceso aqu se presentan. Se decidi denominar al libro Tendencia s de investigaci n turstic a a prin- cipio s del sigl o XXI porque est implcita la idea de buscar y presentar lo que los investigadores hacen, sus inquietudes, motivaciones, preferencias, intereses, preocupaciones, lneas de investigacin o tendencias de investigacin en Mxico. Se crey que a partir de encontrar esas tendencias se encontrara un camino o un indicador que pudiera sealar el rumbo que tomarn las diferen- tes perspectivas de investigacin, y de esa manera, contribuir a incentivar el inters por investigar el fenmeno turstico. El libro lo conforman nueve trabajos sobre la problemtica turstica. El primero de ellos es de quien suscribe y lleva como ttulo La investigacin turstica en Mxico: tendencias y retos. En l se hace el anlisis de las tenden- cias de investigacin turstica, a la vez que se evalan las metodologas en las que se basan los investigadores para la realizacin de las mismas. La investigacin es un requerimiento bsico para la toma de decisiones tanto en el sector pblico como en el privado, de ah que se proponga una revisin de qu y cmo se ha hecho la investigacin del fenmeno turstico con el fin de revalorar el estado en que se encuentra para as delimitar los retos que los investigadores del sector turstico enfrentarn en el siglo XXI.

3 En este ensayo se hace evidente la razn de la investigacin cientfica, los pasos que ha seguido la atencin a la investigacin turstica, las temticas y tendencias de investigacin, y las debilidades de los procedimientos de investigacin, para llegar finalmente, a las proyecciones a futuro. En este trabajo se puntualizan las caractersticas generales de las investigaciones, se reconocen los factores metodolgicos de forma y fondo de las investigaciones, y las de- bilidades de los trabajos analizados. El segundo trabajo presentado es el de Marcelino Castillo Nechar, denomi- nado El papel del Estado en el discurso y poltica del turismo en el mbito cultural, en el cual se muestra cmo bajo el modo de produccin capitalista actual se comercializa y consume la cultura turstica como una mercanca. El trabajo presenta esta tesis desde el marco de referencia de la globalizacin y modernizacin que se est viviendo en la sociedad actual, nos precisa la dife- rencia entre la poltica de la cultura turstica y el turismo cultural, para finalmente mostrar la situacin del turismo cultural en Mxico. El hilo conductor es el de que la cultura es vista como un recurso social, con un valor de alta rentabilidad en el escenario de la oferta turstica; y que a pesar de los esfuerzos por crear programas que tienen como eje la promocin cultural, en Mxico no se pasa del enfoque mercadolgico convencional y refuncionalizado, en donde la poltica turstica depende del libre albedrode los actores que se encargan de dirigirla y aplicarla. Maribel Lozano Corts realiza un ensayo denominado La construccin social de la seguridad en la actividad turstica; la autora pone a discusin uno de los problemas ms polmicos que envuelven a la prctica turstica: la segu- ridad. Lozano Corts, adems de abordar el contexto social en el que se da la inseguridad, nos adentra en su conceptualizacin, como construccin colec- tiva, en la que participan prestadores de servicios, comunidad anfitriona y turistas. Todo ello en el contexto normativo y social en el que se da el viaje. Este ensayo tiene la cualidad de colocar la problemtica de la inseguridad dentro del contexto de la estructura social y as, hacer evidente que, junto a la prctica turstica, se entrelazan diversos elementos que inciden y son resultado de la situacin de seguridad o inseguridad que viven las comunidades, los turistas, los prestadores de servicio y los gobiernos locales, entre otros actores. El trabajo presentado por Patricia Domnguez Silva y Stphanie Richert se denomina Tecnologas de informacin y

4 comunicacin: una aproximacin al uso del correo electrnico en hoteles de playa en Mxico, en l se hace un interesante anlisis de la capacidad y calidad de respuesta del comercio elec- trnico en algunos hoteles de playa en Mxico. La propuesta de anlisis de Domnguez y Richert resulta muy actual y creativa, ya que, va electrnica, de manera metdica y sistemtica, analizan la capacidad y calidad de respuesta de algunos hoteles de cadena e independientes. En la bsqueda de informacin el mtodo de el cliente misterioso facili- t la obtencin de indicadores que nos hablan de la diferencia en la respuesta de los hoteles de cadena e independientes. Creemos que la incursin en este tipo de investigaciones contribuir a formar y depurar, el marco necesario de refe- rencia que sobre las Tecnologa de Informacin y Comunicacin (TIC) se est construyendo. Las bondades de la tecnologa tendrn que mirarse bajo el fil- tro de metodologas como las que en esta investigacin se utilizan. Magdalena Morales Gonzlez hace una propuesta diferente de cmo ver el turismo en su ensayo titulado Hacia una comprensin del turismo moderno y posmoderno. La autora aborda los elementos conceptuales ms importan- tes de la modernidad y posmodernidad, ubicando la prctica turstica en cada uno de esos procesos econmicos y culturales; proponiendo adems al turis- mo alternativo como la expresin posmoderna del fenmeno que nos ocupa. Ms all de su propuesta de turismo posmoderno, una de las virtudes de Morales Gonzlez es posicionar la discusin del turismo en el contexto de un modelo capitalista de produccin y su trnsito por la modernidad y posmo- dernidad. Esta propuesta representa una respuesta a las exigencias de marcos tericos que fundamenten las bases de la investigacin turstica. El artculo denominado Retos y desafos de la educacin superior y la investigacin turstica en Mxicoes la propuesta de reflexin que Salvador Gmez Nieves hace sobre las condiciones en que se encuentra la educacin de los profesionales del turismo. Frente a las demandas exigidas de la nueva realidad poltica, econmica y social global, el rezago educativo de los profesionales del turismo se hace evidente. En ese sentido, Gmez Nieves se adentra en las circunstancias y contextos que envuelven la formacin de los profesionales del turismo. El autor aborda el contexto empresarial, las transformaciones econmicas, la era de la informacin y el contexto cientfico, para mostrar cmo se desenvuelve la educacin superior e investigacin turstica en

5 Mxico. En el ensayo titulado: Formacin profesional del capital humano administra- tivo de empresas hoteleras basada en la gestin de competencia laboral sujeta a certificacinde Gabriela Carranza Ortegn, se muestra la necesidad de identifi- car y analizar los diferentes elementos y circunstancias que se tienen que conside- rar en la formacin profesional de prestadores de servicios en empresas hoteleras. La propuesta invita a reflexionar sobre un modelopara la formacin de competencias laborales en el capital humano de los diferentes puestos administrativos en la industria hotelera, a saber: gerente de restaurante, alimentos, bebidas, y banquetes; gerente de divisin de cuartos; contralor de costos, ge- rente de ventas; gerente de recepcin y gerente de recursos humanos. El anlisis del mercado laboral dentro del rea Metropolitana de la Ciudad de Guadalajara es lo que permite a Ortegn llegar a las conclusiones y recomen- daciones sobre qu hacer para estar dentro de la competencia laboral del capi- tal humano en empresas hoteleras. El trabajo denominado Propuesta terico-metodolgica para la planeacin del turismo sustentable en el parque Iztacchuatl-Popocatepetl, de Irma Luz Ramrez de la O y Maribel Osorio Garca, representa una propuesta para el desarrollo sustentable en el parque natural Izta-Popo. Despus del diagnstico, la sustentabilidad y conservacin del medio ambiente es lo que permea en la propuesta de modelo turstico para la regin. Las autoras aterrizan su propuesta del modelo turstico, denominndola genricamente como turismo alternativo, concretado a partir de los mercados de visitantes identificados, a saber: merca- do gastronmico-recreativo, mercado ecoturstico y mercado de alta montaa. Finalmente, el ensayo presentado por Magdalena Maldonado valos intitulado El ecoturismo en Mxico: una propuesta de la mezcla de mercadotec- niaes una muestra de las posibilidades que tienen los proyectos sustentables en el mejoramiento de sus procedimientos de administracin y difusin. El anlisis de los diferentes elementos que debe atender la mercadotecnia le permite proponer la mezcla de mercadotecnia para dos lugares de estudio ecoturstico: la obser vacin de las mariposas monarca en el estado de Michoacn, y la liberacin de tortugas en el campamento tortuguero de Playa La Gloria en Acapulco. En este trabajo Maldonado valos hace evidentes los diferentes elementos que la mercadotecnia ofrece para analizar

6Tendencias de investigacin turstica a principios del siglo

el mercado y dar a conocer lugares ecotursticos. El presente libro es sin duda, una pequea contribucin respecto a la nece- sidad de la comprensin de la problemtica turstica, sin embargo, en descar- go puedo argumentar que los trabajos aqu presentados pueden ser la base sobre la que otros investigadores reflexionen, comparen, inquieran, y discutan para clarificar y comprender la dimensin de la problemtica turstica. Adems, espero que, al momento de terminar la lectura del libro, al lector le queden satisfechas sus preguntas iniciales y se hayan despertado otras tantas. Para concluir debo hacer patente mi agradecimiento a diversas personas que contribuyeron a la realizacin de la presente publicacin. Mi primer agradecimiento se lo ofrezco a los profesores investigadores que colaboraron en este proyecto y que amablemente dictaminaron y ayudaron elegir y mejorar el trabajo aqu presentado: Dr. David Coronado, Dr. Enrique Alonso Ayala (SNI I),1 Lic. Fernando Prez Torres, Dr. Gerardo G. Snchez Ruiz (SNI I), Mtro. Jess Antonio Machuca R., Mtro. Jorge Ortiz Segura y Bustos, Dr. Ludger Brenner (SNI I), M. en C. Mara Alicia Fonseca Morales, Dra. Mara Antonieta Andrade Vallejo, Dra. Niria Goi vila, M. en C. Norma Josefina Ruz Castillejos, Dr. Ral Valdez M. (SNI I), Dr. Roberto Diego Quintana, Dr. Rosalo Wences Reza (SNI I) (q.e.p.d.), y al Dr. Sergio Tamayo FloresAlatorre (SNI II), mil gracias. Agradezco particularmente el apoyo acadmico y asesora editorial del Dr. Gerardo G. Snchez Ruiz, quien en todo momento me auxili en el proceso de formacin de la presente publicacin. Asimismo ofrezco un agradecimien- to a la licenciada Mara Ins Hernndez Crcamo quien me apoy en el proce- so tcnico de presentacin de la publicacin. Debo agradecer a la anterior directora de la Escuela Superior de Turismo, Licenciada Consuelo Blancarte, y al director en funciones, Licenciado Rober- to Bravo, por las gestiones editoriales, as como al Licenciado Arturo Salcido Beltrn, titular de la Direccin de Publicaciones y de igual manera a esta misma instancia politcnica por la edicin del libro. Finalmente, cabe sealar que este resultado no pudo ser posible sin el apoyo que el Instituto Politcni- co Nacional ofrece a sus docentes investigadores y que estamos asumiendo como una necesidad prioritaria, particularmente agradecemos el apoyo del Dr. Luis Humberto Fabila Castillo, Secretario de Investigacin y Posgrado, quien siempre tuvo fe en este proyecto. Gracias.

XXI

7

DE LA NECESIDAD DE LA INVESTIGACIN A LA DEFINICIN DE UNA LA INVESTIGACIN TURSTICA EN MXICO: TENDENCIAS Y RETOS Maribel Espinosa Castillo1 Introduccin La investigacin es fundamental como parte del conocimiento de los contex- tos y problemas a los que nos enfrentamos en la vida cotidiana. En todos los mbitos de la vida indagar sobre lo que acontece a nuestro derredor nos pue- de dar la pauta para entender, prever y dirigir el curso de ciertas estructuras, acciones, o de la vida personal. As, se recurre al anlisis del contexto que rodea a la morbilidad a fin de ofrecer un diagnstico de salud pblica o se hacen estudios de mercado antes de tomar decisiones comerciales. Las deci- siones que se tomen en ambas circunstancias impactarn en la salud de la poblacin o en la economa de una empresa y en los empleos de quienes viven de ella; la investigacin es, hoy por hoy, fundamental en la toma adecuada de decisiones tanto en el sector pblico como en el privado. Desde este punto de vista, desconocemos a ciencia cierta los caminos que ha tomado la investigacin del mbito turstico en los ltimos aos, no cono- cemos la calidad y rigurosidad del trabajo existente, en consecuencia, no ve- mos definido un camino a seguir en trminos de investigacin ni su incidencia en la esfera social. Pareciera ser que la investigacin que se realiza en este momento se hace en reas o temticas colaterales al turismo y no directamen- te en los problemas y retos que la dinmica enfrenta y el sector exige. Cierto es que la investigacin turstica no alcanza el nivel de profundidad de los anlisis sociolgicos o econmicos desarrollados en esas ciencias, tam- bin es cierto que poco se ha hecho desde la misma. Suponemos que la inves- tigacin realizada en turismo hasta el momento responde al perfil de las universidades e intereses de los investigadores y no se ocupa de las necesida- des del sector productivo, de las exigencias sociales para el aprovechamiento del tiempo libre, del cuidado del ambiente y de los impactos sociales en los que incide.

8 De ah que, en el presente ensayo se intente hacer una recapitulacin, cla- sificacin, categorizacin y anlisis de las investigaciones en el mbito tursti- co que se han hecho en los ltimos cinco aos a fin de concretar un diagnstico sobre el estado en que se encuentra; el grado de vinculacin con el contexto econmico, poltico y social en el que se desenvuelven, y mostrar las tenden- cias que siguen las mismas. Para alcanzar el objetivo se hizo una revisin de algunas investigaciones rea- lizadas en los ltimos aos, investigaciones presentadas en los Congresos de Investigacin Turstica; por ello, los datos estadsticos aqu presentados parten del anlisis de las conferencias y conclusiones presentadas en dichos eventos. La revisin incluy la consideracin de ocho indicadores de contenido y formato en cada una de las investigaciones; de ah surge la caracterizacin del contenido terico y metodolgico de los proyectos de investigacin turstica analizados. Aunado a esto, se incorporaron datos y hechos histricos obteni- dos de fuentes documentales y electrnicas diversas que han abordado el es- tado de la investigacin turstica, junto a la informacin obtenida en el archivo muerto de la Fundacin Miguel Alemn (FMA), a la que agradecemos la aten- cin de facilitrnosla. La razn cientfica de la investigacin

Comprender la naturaleza y poder dar respuestas a las diversas problemti- cas de la sociedad, es parte de la finalidad de la investigacin cientfica. La investigacin cientfica es un proceso en el cual el hombre intenta comprender la naturaleza, utiliza mtodos y tcnicas para obtener informacin fide- digna y objetiva que le permita verificar, corregir o aplicar el conocimiento en nuestro entorno, y por supuesto mejorarlo. El investigador social es el que se dedica a esta tarea; y al trabajo de investigador slo se accede a travs de un largo proceso de formacin, que empieza desde nuestros prime- ros pasos y descubrimientos, pero se afina cuando se decide voluntariamente seguir las huellas de algo desconocido, entrar a la esfera de la racionalidad del bagaje conceptual del objeto de estudio, y estar al tanto de las relaciones establecidas entre nuestro objeto de estudio y su medio (actores sociales que inciden y su entorno), a fin de descubrir nuevos sentidos y relaciones entre ellos. Es decir, somos investigadores cuando decidimos buscar y hallar co- nocimientos nuevos de significativo valor. Al trabajo de investigador se entra

9 fcilmente, si consideramos que: cuando alguien inicia un proceso de investigacin por el motivo que sea siem- pre tiene una base mnima de conocimientos obtenidos en la vida cotidiana, en la escuela o en el campo profesional que le permitir adentrarse en aqul y, conforme avance en la bsqueda, podr acrecentar esa base, a la vez que, ampliar su criterio y discernir ante lo que se le presenta; para de ese modo, poder emitir reflexiones que perturben o revolucionen su campo de estudio: el investigador se hace en forma concomitante con la investigacin (Snchez, 2004). Si bien existen investigadores que pretenden producir novedades, debemos decir que esto no siempre es lo ms importante, es ms relevante la confiabilidad de los resultados de investigacin, ya que aumenta la amplitud y precisin del conocimiento de un objeto de estudio. Kuhn al respecto seala que: Algunos cientficos han alcanzado gran reputacin no por la novedad de sus descubrimientos, sino por la precisin, confiabilidad y amplitud de los mtodos que han desarrollado para determinar de nuevo un tipo de hecho previamente conocido (Snchez, 2004). En los ltimos aos, algunos investigadores han buscado hacer slo estandarizaciones de las problemticas, y otros incorporarse a la dinmica de la oferta y demanda del conocimiento cientfico, perdindose con ello el fin ltimo de la comprensin de la naturaleza y la adquisicin de conocimientos. En ciencias sociales particularmente, mucho del trabajo de investigacin no obedece a problemticas especficas que resuelven alguna dificultad social o enriquezcan o faciliten la vida de los ciudadanos. Ms bien responden a las necesidades de conocimiento del mercado, a las lneas de investigacin prio- ritarias de un gobierno o a los intereses particulares de los cientficos sociales. La poltica gubernamental de hacer eficiente el trabajo acadmico y de inves- tigacin, ha incidido en los cientficos sociales, incorporando dentro del proce- so investigativo, la dimensin de la competencia. As, la comunidad cientfica ahora es uno de los grupos que trabajan con fines y mecanismos sujetos al sistema estructuralfuncionalista de recompensas, en donde en la mayora de las ocasiones se trabaja para cubrir una cantidad de produccin intelectual, as- cender en el escalafn de compensaciones, para mostrarse como propuestas intelectuales, y no para que el trabajo intelectual incida en la sociedad y pro- ponga la solucin de algunos problemas.

10 Bourdieu al reflexionar sobre la pro- duccin cientfica que: seala

El mundo cientfico propone un sistema de recompensas que cumple unas funciones y unas funciones tiles, por no decir necesarias [...] para el funcionamiento del conjun- to. [...] El estructural funcionalismo revela de esa manera su verdad de finalismo de los colectivos: la comunidad cientfica es uno de esos colectivos que realizan sus fines a travs de unos mecanismos sin sujeto orientados hacia unos fines favorables a los sujetos o, por lo menos a los mejores de ellos (Bourdieu, 2003). De ah que mucha de la investigacin realizada sea en funcin de los pun- tos que se van a obtener, el beneficio econmico que se va a lograr, o la perspectiva intelectual que se pretende adquirir pese a que mucha de la inves- tigacin realizada pasa por el tamiz de la evaluacin econmica, del costo- beneficio, de la inversin productiva y del impacto social y ambiental. La investigacin turstica realizada hasta el momento, adems de estar inserta en esta institucionalizacin de la produccin cientfica, adolece de otros males que inciden de manera directa en la tarea de la investigacin: la falta de un marco terico propio; investigadores con limitada formacin en investiga- cin, sin mtodo y rigurosidad cientfica; currculas y alumnos con una escasa formacin e inters por la investigacin; apoyo institucional condicionado y recursos econmicos limitados para la investigacin; contados encuentros de intercambio acadmico; escasos eventos y espacios de difusin de la investi- gacin; adems de materiales bibliogrficos limitados con poca difusin; etc. Al respecto de la investigacin y reflexionando tambin sobre la teora del turismo Rodrguez Woog seala: La carencia de marcos tericos de referencia para el desarrollo de investigaciones sobre el fenmeno del turismo y sus diversas manifestaciones, tiene como conse- cuencia el que los trabajos en esta rea no trasciendan, tanto al conjunto del conoci- miento sobre los procesos sociales, como a las diferentes instancias pblicas y privadas responsables de la conduccin del turismo (Rodrguez, 1989). El afn de depurar los marcos tericos del turismo no tiene que ver con considerar al turismo como una ciencia sino dirigir

11 la investigacin con mto- dos y tcnicas que le den certidumbre y credibilidad. El mismo autor es ms puntual al precisar que: Debe quedar muy claro que no se pretende hacer del turismo una ciencia, sino que por el contrario, establecer que no lo es, y probablemente no lo ser, pero que s puede generarse la explicacin y previsin cientfica del Turismo. As mismo se plantearn bases que permiten ubicar a lo turstico, como un objeto delimitado en el marco de la generacin de conocimiento cientfico (Rodrguez, 1989). Esta bsqueda no se ha logrado, entre otras cosas, por la falta de espacios e instituciones que formen a los investigadores con una actitud crtica y con un bagaje terico para conducir investigaciones de distinguida calidad; al igual que por la falta de una tradicin en trabajos indagatorios de quienes se involucran en el trabajo intelectual. Con sus salvedades, es difcil hablar de grupos o escuelas donde se investigue el fenmeno turstico con sistematiza- cin, razonamiento y objetividad. Un aspecto importante es que, en la forma- cin de los licenciados y profesionales del turismo no se ha ofrecido un bagaje terico que los conduzca por la reflexin metodolgica de la actividad del turismo y sus implicaciones sociales. Lo que se ha ofrecido en muchas escue- las que imparten la carrera de turismo, es un bagaje tcnico y operativo (del cmo hacer tal cosa), que responde a las exigencias de la industria turstica, pero no se logra avanzar sobre una actitud crtica del por qu se hace tal cosa, de tal manera y sus repercusiones. De ah que, Hiernaux seale que: es la carencia de una visin real integral de la formacin del turismo, que representa tambin uno de los problemas ms graves para la formacin de los investigadores (Hiernaux, en Monterroso y Zizumbo, 2000). Si desde la formacin de los profesionales en turismo se tienen problemas, es comprensible que los investigadores del turismo sean pocos; y ms bien sean profesionistas de otras ciencias y disciplinas los que se dediquen al anlisis de la dinmica turstica. En este mismo sentido, los recursos destinados a la investigacin turstica, son prcticamente inexistentes. El apoyo gubernamental a la investigacin, representado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologa (Conacyt) es prcticamente nulo. La investigacin turstica no ha tenido los apoyos que otras disciplinas de las ciencias sociales han tenido. Prcticamente no existen proyectos de in- vestigacin turstica financiados

12 por el Conacyt; existen proyectos que de manera colateral obtienen conclusiones que caen en el turismo, o proyectos que desde un rea prioritaria como el medio ambiente intentan aterrizar en el anlisis turstico, pero son pocos los proyectos visualizados desde la proble- mtica turstica en general.2 Desde los aos 2001 y 2002, dentro de los congresos de investigacin turstica, el Conacyt explicit las prioridades de investigacin que podran ser apoyadas con recursos econmicos. Sus prioridades de investigacin se cen- tran en estudios sobre: alimentos; salud; desarrollo social, urbano, industrial; y recursos naturales y medio ambiente. As, los proyectos prioritarios para Conacyt son aquellos que identifican problemticas especficas, a las que se tiene que dar una solucin, y son cuantificables los beneficiarios y usuarios de dicho procesos de investigacin.3 Requisitos congruentes con una poltica gubernamental para distribuir los recursos pblicos, sin embargo, en el turis- mo, al no tener una tradicin de investigacin y al conocerse ms la relacin entre empresas privadas con usuarios, como una relacin de compra-venta de servicios, no se visualiza la necesidad de conocer las condiciones y procesos en la decisin de ofrecer un servicio turstico; y ms an, no se conocen y visualizan los impactos sociales que generan dichos procesos. De esa manera, en la investigacin turstica se han presentado infinidad de carencias que deben reconocerse y atenderse. Por tanto, la investigacin se debe realizar de acuerdo al inters profesional, acadmico y personal, pero debe responder a una problemtica social, donde se incluyan las necesidades de comunidades, el sector gubernamental y por supuesto empresarios, pero con el claro tamiz de la bsqueda de la verdad. Antecedentes La investigacin en torno a la dinmica turstica es muy reciente, si bien el fenmeno turstico de oferta de servicios de alojamiento y esparcimiento para viajeros en Mxico se increment desde principios de siglo XX, y sus estudios fueron impulsados por los pioneros de la planificacin en Mxico, fue hasta la dcada de los setenta, cuando se generaliza la necesidad de estudiar los im- pactos generados por el turismo. De ese modo, desde la dcada de los ochenta, han existido diversas ac- ciones relativas a la investigacin de lo que pasa en el sector; ellas se han combinado con las relativas a la

13 promocin y capacitacin de los prestadores de servicios tursticos. Es el caso del programa de Investigacin Aplicada y Desarrollo Experimental (sic),4 el anteproyecto de Convenio de para el Programa de Educacin y Capacitacin Turstica,5 la creacin del Instituto Mexicano de Investigaciones Tursticas (IMIT), el Centro de Capacitacin Turstica (Cicatur), el Centro Internacional de Estudios en Turismo (Ciest),6 y el Centro de Estudios Superiores en Turismo (Cestur),7 ins- tituciones que buscaban comprender el fenmeno turstico, pero que han limitado su hacer atendiendo slo las necesidades de la industria turstica. He aqu uno de los problemas de la investigacin turstica, no se pudo ir ms all de los estudios de mercado. La necesidad de comprender la dimensin de esta nueva dinmica condujo a algunos profesionales a la realizacin de diversos eventos en la bsqueda de razonamientos que ayudarn a visualizar el fenmeno en los mbitos, econ- mico, cultural, histrico, espacial y ambiental. Dentro de algunos de esos even- tos realizados se encuentran el Primer Congreso Interamericano Extraordinario de Turismo (Brasil, 1972),8 la Segunda Reunin Mundial de Turismo(Mxi- co, 1982),9 y el Coloquio Teora y Praxis Social del Espacio Turstico (UAMMxico, 1987),10 entre otros. La realizacin de estos eventos fue enterrando muchos aos donde el turismo, para el sector pblico, la sociedad o los em- presarios, no era ms que una actividad lucrativa, una estrategia comercial o una moda. Con este tipo de eventos, en la dcada de los 80 se puede observar una preocupacin por comprender parte del fenmeno turstico; sus elementos, comportamiento, ventajas e impactos; en general, conocer el fenmeno y su papel dentro de la sociedad en la que se presenta. En ese camino, muchas son las instituciones que han dado espacios al anlisis y difusin de la investiga- cin, sin embargo, han sido las universidades quienes en mayor medida han abierto foros para su anlisis y discusin. Adems, esos esfuerzos se vieron fortalecidos con las acciones de la Funda- cin Miguel Alemn (FMA) en la dcada de los noventa, cuando busc fomentar y premiar a las instituciones pblicas, empresas privadas y personalidades que hubieran participado en el fortalecimiento de la dinmica turstica, desde sus respectivos mbitos e instituciones; de tal manera que en 1989 comenz a otor- gar el Premio a la Excelencia Turstica; premio que ha sido motor y que anima a la presentacin de investigaciones relevantes sobre la problemtica turstica. Coordinacin

14

Aos despus, la fundacin reconsider el papel de las universidades y su compromiso con el turismo y decidi abrir la convocatoria al trabajo de las universidades; de tal manera que en el ao 2000 el comit de turismo de la FMA busc renovar y ampliar sus objetivos11 e incentivar y premiar la investigacin en el mbito turstico. Concomitante al trabajo de la FMA, se comenzaron a organizar los congre- sos de investigacin turstica; el primero en 1987, teniendo como sede la Uni- versidad de Guadalajara, y el segundo, en 1989, auspiciado por la Universidad de Baja California. A partir del tercer Congreso en 2001, efectuado en Acapulco, y hasta el sptimo en 2005 celebrado en Guadalajara, el Cestur,12 ha sido la plataforma de convocatoria y respaldo para reunir a investigadores del turismo, quienes en coordinacin con alguna universidad reciben el Con- greso en sus instalaciones. La dinmica generada en los ltimos cinco aos ha permitido que personas que antes se encontraban aisladas haciendo investigacin, ahora inicien en- cuentros, intercambios y trabajos acadmicos y profesionales de mayor pro- fundidad y trascendencia. Esos intercambios debern fortalecer las perspectivas sobre el turismo, unificar criterios sobre su conceptualizacin, redefinir metodologas y tcnicas para el anlisis del fenmeno turstico y dar credibili- dad y certidumbre al trabajo realizado. De esta manera, muchas son las instituciones que han ofrecido espacios y dedicado tiempo para la discusin del fenmeno turstico, sin embargo, han sido pocos los esfuerzos de los investigadores frente a la naturaleza del fen- meno. El estado de Mxico la investigacin turstica en

Como se mencion, el trabajo de investigacin en el rea del turismo es limi- tado, son bsicamente las universidades las que se encargan de hacer el traba- jo intelectual de anlisis, crtico, racional y objetivo sobre el fenmeno turstico. Ms bien se ha hecho mucho trabajo descriptivo que marca las tendencias sobre la ocupacin hotelera y restaurantera. No en todas las universidades del pas se conoce el trabajo de investiga- cin turstica, de hecho en muy pocas universidades se imparte la carrera, y slo en algunas, donde se imparte la carrera se desarrolla trabajo de investiga- cin. En algunas universidades pblicas estatales se imparte la

15 licenciatura en turismo o administracin de los servicios al turismo (hotelera, restaurantes o empresas tursticas sustentables), y es en ellas donde se han realizado el ma- yor nmero de investigaciones. En la mayora de las escuelas que imparten la carrera en turismo, su funcin prioritaria ha sido la docencia o transmisin de conocimientos diseados para la industria turstica, muchas de ellas en el mbito tcnico. De las instituciones educativas que imparten la carrera a nivel licenciatura, que se dedican a hacer investigacin y de las que en los ltimos aos se observa un trabajo constante, sobresalen: La Universidad de Guadalajara (UAG), la Universidad Autnoma del Estado de Mxico (UAEM) y el Instituto Politcnico Nacional (IPN); instituciones donde se imparte la carrera de turismo a nivel licenciatura, que cuentan con una planta docente que conoce la problemtica turstica, y donde parece, se est poniendo atencin, tiempo y recursos mnimos a la investigacin. Concomitante a ello, slo en contadas universidades se imparten estudios de posgrado, lugares donde por definicin se realiza investigacin y donde todava no se ha podido incorporar la investigacin como eje fundamental en la formacin de profesionales del turismo. Entre las universidades que impar- ten posgrados en turismo se encuentran: el IPN, la Universidad Autnoma de Aguascalientes (UAA), UAEM, y la Universidad Autnoma de Guerrero (Uagro).13 Respecto a estos centros de estudio, un elemento interesante a destacar es que, la investigacin que se realiza en las universidades depende del carcter de la escuela y la latitud de su localizacin; es decir, en algunas escuelas loca- lizadas en estados con destinos tursticos de playa, estn dedicando ms tiem- po a investigaciones en infraestr uctura hotelera, y oferta de ser vicios estandarizados; mientras que en escuelas localizadas en grandes ciudades, el turismo sustentable y turismo temtico son vertientes muy recurrentes. Por su parte, las escuelas privadas que imparten alguna licenciatura o curso relacionado con el turismo se han sumado al trabajo de investigacin; si bien mucho de lo elaborado se encuentra vinculado a los estudios de mercado y a la filosofa de la empresa que los patrocina, resulta interesante que aqullas abran espacios para que sus profesores-investigadores dediquen tiempo a la investiga- cin turstica. Entre esas instituciones se encuentran: la Universidad La Salle Cancn, la Universidad de las Amricas de Puebla y la Universidad Anhuac, entre otras. De ah que parte de la investigacin realizada hasta el

16 momento responda al carcter pblico o privado de las universidades. Es sobresaliente tambien que dentro de las instituciones que realizan investigacin se encuentren colegios e institutos, que si bien no imparten en sus estructuras institucionales la carrera de turismo, s hacen investigacin desde sus mbitos de estudio. Es de destacar que sus investigadores observan al turismo como factor que impacta en sus respectivas reas de trabajo: la geo- grafa, la economa, la sociologa, etc. Entre las instituciones que realizan trabajo intelectual vinculado al turismo se encuentran: el Instituto de Geogra- fa de la UNAM, el Colegio de la Frontera Norte, el Colegio de la Frontera Sur y el Colegio Mexiquense. Esta diversidad de instituciones que hacen trabajo de investigacin turstica, se ejemplifica en el siguiente cuadro, donde se puede observar el carcter de las instituciones a las que pertenecen investigadores de 124 estudios ana- lizados. CUADRO 1. Instituciones que realizaron investigacin turstica (absolutos )*

No Instituci 1 Universidades y escuelas 2 Universidades y escuelas 3 Universidades, institutos y colegios 4 Instituciones Total

200 200 200 9 3 32 2 2 3 0 1 2 3 1 4 2 8 0 37

200 200 Tota 19 27 90 4 4 15 3 4 10 3 29 1 36 9 124

Muchos de estos profesionales hacen anlisis desde sus respectivas disci- plinas y no cargan con el peso de la operatividad del turismo y sus problemas de definicin terica; los profesionales del turismo saben que adems de los problemas tericos metodolgicos del rea, la investigacin debe responder a las necesidades de la industria y a los impactos de su presencia; de ah la gran responsabilidad de asumir una actitud crtica y responder a las necesidades productivas y sociales. Al respecto de los profesionales que hacen anlisis sobre el fenmeno tu- rstico cabe sealar algunos datos respecto a la formacin de los investigado- res de las presentaciones de

17 investigacin analizadas en este trabajo. De las presentaciones estudiadas 55% de los investigadores sealaron poseer el grado de maestra, en diversas reas de las ciencias sociales; 25% cuenta slo con licenciatura, muchos de ellos indicaron ser egresados de una carrera vin- culada con el turismo: administracin turstica o en turismo; y slo el 20 por ciento indic que posea el grado de doctor generalmente vinculado a diver- sas reas de las ciencias sociales y no al turismo. Cabe sealar que si bien la mayora de los investigadores estn formados en ciencias y disciplinas ajenas al turismo, casi todos ofrecen sus servicios en una institucin de educacin superior donde se forma a profesionales del turismo. Por otro lado, el papel de la Sectur en relacin a la investigacin turstica se encuentra enmarcada por la informacin bsica que emite eventualmente so- bre: los estudios de mercado: visitantes, balanza turstica, empleos, ocupa- cin hotelera, entre otros; ello independientemente de los estudios estratgicos

y coyunturales que la propia Secretara requiere para impulsar sus progra- mas.14 Sin embargo, ms all de que la Sectur promueva la investigacin den- tro de la Secretara o contrate especialistas para que la realicen, las investigaciones gubernamentales tendrn la ventaja de un anlisis administra- tivo y quiz poltico as como la desventaja de la parcialidad de quienes la rea- licen. Concomitante a ello, desde el 2001, el Cestur ha venido impulsando la convocatoria al Congreso de Investigacin Turstica; accin significativa des- de el punto de vista de la poltica turstica de la Secretara de Turismo, que afortunadamente, como se seal en su VII realizacin se esperar a que en el futur o el for o sea com pletam ent e dirigid o por investigadore s y acadmico s. En ese sentido, cabe destacar que las investigaciones presentadas en el Congreso; del 2001 al 2005 se incrementaron en ms de 100%, pasaron de 14 en 2001 a 36 en 2005 lo cual es trascendente ya que muestra el gran inters por trabajar en la investigacin del fenmeno turstico. Estos datos adems de mostrar el trabajo y preferencias de investigacin de docentes e investigadores, nos mues- tran la sinergia cultural de trabajo, reflexin, crtica y difusin que se est gestando en torno a la problemtica turstica en nuestro pas (vase cuadro 1). Tendencias investigacin de

18 Para nuestro estudio, reconsideraremos lo que seala Marx respecto al anli- sis de las categoras concretas y abstractas. Dice que el estudio de la realidad inicia con la comprensin de las categoras concretas, las que tenemos a la vista, luego, la realidad se analiza en su interioridad, hasta conocerla en su parte abstracta y compleja; posteriormente se reconsideran las categoras abs- tractas y se retorna a compararlas con la realidad concreta. Es decir, el anli- sis inicia con la inquietud que mueve al investigador, y es en el proceso de anlisis y sntesis donde se concluye. En ese sentido, lo que los investigadores han analizado es lo que da la pauta para conocer las categoras concretas y abstractas que conducen a otras nuevas investigaciones. Las tendencias de investigacin se entienden como la recurrencia de las inquietudes o preferencias de los investigadores del rea turstica, a su vez, dependern, en gran medida, del contexto acadmico del investigador y de la escuela en la que se han venido formando. En la intencin de caminar por esa brecha, a continuacin se mostrarn las tendencias encontradas en las investigaciones analizadas; y luego algunos indicadores metodolgicos que fueron abordados por los investigadores de los proyectos analizados, para finalmente concluir sobre los retos de la inves- tigacin turstica. En un primer momento de anlisis, se consideraron 124 presentaciones de investigacin, correspondientes a los ltimos cinco aos de los congre- sos de investigacin turstica. Este primer anlisis limitadamente consider slo las temticas que sus ttulos sugeran. De ah el siguiente cuadro sobre las tendencias de investigacin turstica (vase cuadro 2). Del anlisis de la evolucin cuantitativa y cualitativa de las 124 investiga- ciones analizadas se encontraron siete temticas sobresalientes, siendo dos de ellas las de mayor recurrencia. De las dos tendencias ms sobresalientes, una se encuentra vinculada al anlisis de espacios y planeacin de proyectos tursticos, y otra relacionada con el cuidado y conservacin del ambiente, el ecoturismo y la sustentabilidad; ambas les corresponden 22.4 y 18.4% res- pectivamente del total de proyectos analizados. Cabe apuntar que la temtica sobre el anlisis de espacios y planeacin de proyectos tursticos, fue la nica que se present de manera sobresaliente durante los cinco aos en los que se revis la prctica de investigacin. Esta tendencia de investigacin corres- ponde a una tradicin de estudios sobre planeacin para el desarrollo de espa- cios tursticos que entidades municipales, estatales y

19 federales han requerido para planear reas, centros y ciudades tursticas. La segunda tendencia sobrepa- sa los estudios de la estructura urbana para el desarrollo turstico y busca dirigir la prctica turstica sobre principios de conservacin y aprovechamien- to sustentable de los recursos. El discurso poltico de la sustentabilidad a nivel mundial fue el camino para fortalecer las prcticas tursticas en reas naturales; con ello, el nacimiento del ecoturismo o del turismo sustentable fueron definiendo las prcticas tursticas del siglo XXI. Las otras tendencias de investigacin, creemos de menor relevancia, nos mostraron algunas de las preocupaciones de una buena parte de los investiga- dores. La tercera tendencia est vinculada con los proyectos de educacin y formacin de recursos humanos, a la que le hemos denominado sobre currcula y capacitacin, a la que correspondi 9.6% del total de las investigaciones. Esta problemtica de investigacin se encuentra estrechamente vinculada con la for- macin de los licenciados y graduados en turismo. Lo limitado de este tipo de reflexiones es preocupante debido a que el trabajo por mejorar la educacin y formacin de los profesionales del turismo repercutir en la formacin de recur- sos humanos dedicados a la investigacin en el rea. Sin embargo, con optimis- mo se observa dentro de esta tendencia que se reconoce la necesidad de desarrollar una doble tarea en la organizacin curricular: por un lado, mejorar la calidad profesional de acuerdo a los requerimientos sociales y econmicos regionales, y por otro, incorporar contenidos y habilidades que permitan mo- vilidad laboral en un contexto de mercado global.15 Ahora bien, los proyec- tos relacionados con la capacitacin de los profesionales y prestadores de servicios fueron mnimos, solamente encontramos un proyecto que expresa- mente hablaba sobre capacitacin; dato sobresaliente si consideramos las exi- gencias que el sector productivo ha manifestado respecto al tema. La cuarta tendencia dentro de las investigaciones analizadas, a la que le corresponde 9.6%, tiene que ver con lo realizado por las universidades en trminos de investigacin durante 2003, stas presentaron una evaluacin sobre sus recursos, tanto materiales como humanos, con los que trabajaban y reafirmaron sus objetivos y propsitos. Dentro de ellos los propsitos por desarrollar tareas de investigacin fueron de los ms interesantes, por todo lo que ello implica. Hasta el momento nos quedamos en la presuncin de que despus de ese diagnstico, algunas universidades han creado programas y estrategias para aminorar la problemtica de la investigacin

20 en sus respecti- vas unidades. La quinta tendencia tiene que ver con la direccin y administracin de em- presas tursticas, a la que le correspondi 8.8%. En esta investigacin se espera- ba que fueran este tipo de proyectos los que sobresalieran, tales como los tradicionales estudios de mercado, necesarios para la creacin de empresas tu- rsticas o para la toma de decisiones. Creemos que si esta tendencia no fue creciente, no se debe a que no se estn realizando estudios, sino a que los que los realizan se enfocan en darlos a conocer a su comprador o promotor, en la lgica del anlisis para incrementar la venta de un servicio, no para conocer la problemtica y contexto de la misma. La sexta tendencia corresponde a los proyectos relacionados con la polti- ca, reglamentacin y normatividad turstica, a la que le correspondi 8.0%; temtica importantsima y poco tratada en el contexto actual donde la polti- ca pblica define las prioridades de desarrollo turstico, y en esa medida, enfrenta los conflictos e intereses de los actores del sector. En esa lgica e importancia, los profesionales del turismo al interesarse ms en la dinmica empresarial que en las polticas pblicas, parece que dejan la direccin del

sector en manos de los polticos profesionales que poco saben de la proble- mtica que envuelve al fenmeno turstico. La sptima tendencia es la que hemos agrupado en la categora de investi- gaciones de diversa vinculacin social, a la que le corresponde 22.4% del total de investigaciones analizadas. Las temticas sobre las condiciones y de- rechos laborales y sociales de los prestadores de servicios tursticos; la con- ceptualizacin, teora y metodologa turstica; el patrimonio turstico (arqueologa, gastronoma, herbolaria, msica); estrategias de neocomercia- lizacin o marketin g; nuevos segmentos de mercado turstico (turismo reli- gioso, de pensionados, estudiantes, sexual); y, seguridad y turismo; fueron reas poco tratadas, pero consideradas por los investigadores. En esta breve muestra se pueden observar los sectores a los que se est atendiendo en trminos de investigacin. Podemos decir que siguen siendo los proyectos tursticos con una perspectiva sustentable, y el estudio de los espacios para la oferta y consumo turstico los que prevalecen. De esa mane- ra, se ha mantenido la tendencia del estudio de los recursos naturales y cultu- rales para la oferta turstica y no se ha abundado lo suficiente en los impactos que genera la actividad turstica; en ese sentido, ha privado ms el estudio para la creacin de

21 productos y eficientizacin de servicios tursticos, desatendiendo la problemtica social que el turismo implica y que afecta directa- mente en la sociedad. La investigacin realizada responde directamente a una dinmica del capi- tal, que como fenmeno social se encuentra vinculado a la oferta de produc- tos y servicios. En ese sentido, la investigacin turstica nace en el seno mismo de un proceso de produccin y responde, en primera instancia, a las exigencias de uno de los sectores de la produccin, pero no se interesa en los impac- tos que la dinmica genera. Definir las tendencias de investigacin en cada universidad o centro de estudio, ayudara a precisar sus lneas de investigacin. Y es que, de acuerdo a la misin de cada centro de estudio y al reconocimiento de sus oportunida- des y condiciones, las lneas o programas de investigacin se irn construyen- do y mostrando como la esencia misma de las instituciones. Las lneas de investigacin, lejos de lo que muchas autoridades universitarias consideran, no se crean o designan por reunin o memorndum, se forman a partir del trabajo real y concreto de los investigadores. En las universidades y centros de estudio por ms que se sealen 10 o 15 lneas de investigacin, si nadie trabaja en ellas, salen sobrando. El trabajo permanente sobre una problemtica especfica u objeto de es- tudio propicia la especializacin del investigador, el mejoramiento de la calidad del trabajo acadmico, y por tanto, la posibilidad de crear una escue- la o lnea de investigacin de calidad, sea esta para el sector privado o p- blico. Por ello, es necesario apostarle a la investigacin no nicamente para especializarse sobre una lnea o temtica y conocer la realidad de la misma, sino para comprender su naturaleza y poder sugerir alternativas objetivas en la toma de decisiones que impactarn en la economa, el ambiente o la cul- tura; pero adems, para afianzar el carcter profesional de aquellos a los que est educando. Metodologa investigaciones de las

Como ya se dijo, el conocer los procedimientos metodolgicos seguidos en la investigacin resulta fundamental en razn a que es la planeacin, metdica, controlada y sistemtica de la investigacin, lo que nos llevar a la compren- sin de la naturaleza del fenmeno turstico, y en ese sentido, nos permitir dar propuestas o alternativas de accin a los problemas. En los procedimien- tos metodolgicos, si bien son

22 distintos en cada proyecto y diversa la profun- didad de anlisis, hay elementos bsicos que son convencionales en la realizacin y presentacin de las investigaciones; de esos elementos hablare- mos a continuacin. Antes, cabe sealar que, una primera delimitacin nos llev a considerar 124 presentaciones durante los cinco aos analizados, sin embargo, se tuvo que volver a definir la muestra de estudio, con criterios especficos basados en el contenido de las ponencias, as se obtuvieron 78 investigaciones a ser analizadas. Los criterios especficos para la eleccin de las presentaciones de los congresos de investigacin fueron los siguientes: se determin incluir slo aquellas presentaciones de investigaciones que cubrieran el requisito de haber nacido de proyectos de investigacin con resultados definitivos; que se presentaron exprofeso como investigaciones de pares, no como ponencias magistrales o presentaciones de instituciones vinculadas con el turismo, y slo trabajos de nacionales que analizaran la problemtica turstica nacional o extraterritorial. No se consideraron presentaciones que eran informacin o evaluacin de las instituciones educativas a las que representaban los investigadores; aquellas que eran, en su momento, protocolos de investigacin, programas de trabajo, o investigaciones que estaban en proceso. Se excluyeron tambin las presentacio- nes que slo eran datos aislados, cuadros o grficas estadsticas que se presenta- ron sin mayor argumentacin por escrito; no se consideraron inventarios tursticos; ni investigaciones de despachos privados.16 Despus de la delimitacin del univer- so de proyectos iniciales, compuesto por 124 presentaciones, la muestra de estu- dio qued en 78 presentaciones delimitadas como se muestra en el cuadro tres. Vale la pena precisar que en la primera delimitacin ya se haban considerado las caractersticas para elegir las investigaciones, sin embargo, es hasta la lectura pormenorizada de cada uno de las presentaciones que se identific que, a pesar de guardar el formato determinado por la institucin organizado- ra, no cumplan con nuestros criterios para ser analizadas como presentacio- nes de investigacin. Entonces, de las 78 investigaciones seleccionadas se realiz una revisin de contenido y forma. Por elementos de contenido se consider: identificar la problemtica a la que atendieran las investigaciones; la precisin del manejo de objetivos e hiptesis; el trabajo de anlisis terico y de campo realizado; y que la metodologa explicara la manera de abordar el estudio. La revisin de for- ma consider que la investigacin deba

23 mostrar una estructura mnima de introduccin, desarrollo y conclusiones; especificar las fuentes de informa- cin utilizadas, y evidenciar las mismas en un aparato crtico que fundamen- tara la investigacin. Es destacable sealar que la definicin de las caractersticas de forma, a analizar en los proyectos, no consider que cuando se convoc a los congre- sos, los organizadores definieron los elementos y el orden que deben cubrir las presentaciones; en ese sentido, la definicin de estos elementos no permi- ti ver con claridad la forma y estructura en que los investigadores presentan sus trabajos. Sin embargo, lo positivo es que, al definir un lineamiento en la presentacin de los resultados de investigacin, se estaba homogeneizando una estructura de presentacin entre los investigadores que deseaban partici- par en dichos eventos. De tal manera que, el primer elemento que se analiz fue la congruencia entre el ttulo del artculo y su contenido. El ttulo de todo documento suele ser el primer acercamiento de la obra con el lector, el ttulo debe quedar muy claro y expresar el contenido o propuesta del autor; el ttulo representa la promesa de conocimientos que el lector adquirir al concluir la lectura, de ah su importancia. En relacin al contenido podemos decir que es importante la atencin a la diversidad de la problemtica turstica, esta sera nuestra aspira- cin; sin embargo hay reas preferentes por los investigadores que son ms atendidas que otras, de ah parte de nuestras carencias. En ese sentido, en el anlisis realizado se observ que 81% de las presentaciones tuvieron una correspondencia entre el ttulo y el contenido y argumentacin del trabajo; lamentable es que el restante 19% no haca corresponder el ttulo con el con- tenido, y en muchos casos era poco claro y disperso. Respecto a la naturaleza de las reflexiones de los investigadores encontramos que 40% de los investigadores se inclin por una problemtica terico acadmica; 34% atendi una problemtica turstica social, cultural o ambien- tal; 17% prefiri trabajar sobre problemticas econmico-empresariales; y el restante 9% se interes por temticas relacionadas con la poltica turstica y de gestin gubernamental. Observamos as que las investigaciones entorno a los marcos tericos y de referenciasiguen siendo las ms recurrentes, conti- nuando las que tienen que ver con el impacto del turismo en la sociedad y en el ambiente. Esto necesariamente se encuentra vinculado con la formacin y preparacin de los recursos humanos que se dedican al trabajo intelectual, son todava pocos los investigadores que han transitado del dficit del cono- cimiento

24 existente, a la obtencin y construccin de conocimientos nuevos. La claridad de los alcances de la investigacin se encuentra expresada en las hiptesis y objetivos de investigacin. Al definir los supuestos de la inves- tigacin estamos precisando los elementos causales de nuestra problemtica, sin olvidar que hay otras condicionantes en el problema, ello ayuda a hacer ms precisa y objetiva la interrelacin efecto-causa del problema; a su vez la buena definicin de los objetivos nos permite definir el camino y los pasos a seguir para el buen trmino de la investigacin. Por esa circunstancia, las hiptesis y/u objetivos son un requisito para la presentacin de investigacio- nes en cualquier evento acadmico; pese a lo cual, en nuestro estudio, 14% de los proyectos analizados no explicitaron los objetivos y/o hiptesis de su inves- tigacin. El identificar el carcter de las investigaciones, si eran tericas o conside- raban trabajo de campo, fue algo sobresaliente ya que 64% correspondi a investigaciones terico, documental, y estadsticas; y el restante 36% correspondi a trabajos que incluan la obtencin de informacin en campo. Esto es importante debido a que, por la naturaleza del turismo, por lo poco que se ha investigado, y lo limitado de las publicaciones, el que se haga la investigacin de campo implica que, de alguna manera, se estn formando las bases, se estn conformando las metodologas particulares, se estn analizando las estructuras tericas y aprendiendo los procedimientos de investigacin; con los trabajos de campo se estn verificando los supuestos tericos y tratando de explicar la rea- lidad observada. La investigacin de campo conducir necesariamente a mejores anlisis respecto de la problemtica turstica. Cabe sealar que en algunas de las conferencias tericas analizadas, la estruc- turacin de las mismas, ms bien parecan los apuntes de alguna clase, que la exposicin de resultados sobresalientes de investigacin; en muchas no hubo un desenvolvimiento de las ideas que explicaran el problema, que se dijo, se iba a abordar al inicio, y en otros casos, la informacin contena datos diversos referen- tes al problema analizado. Vinculado con lo anterior, el elemento que al parecer sera el ms indicado para apreciar la madurez en el manejo de los temas, es la eleccin y coloca- cin de citas y notas. Recurdese que stas dan certidumbre sobre la objetivi- dad en el manejo de los temas de estudio, permiten crear consensos sobre las perspectivas analizadas, ya que se dan las fuentes de donde nacen sus afirma- ciones, y ayudan a comprender los contextos y circunstancias en los que se dan los fenmenos analizados. El aparato crtico, como se le denomina, es la serie

25 de referencias a las fuentes e ideas utilizadas que aclaran los argumentos que se dan al analizar un problema de estudio. Al respecto es preocupante que buena parte de los investigadores, no consideren necesario dar los crditos a los autores de las estructuras tericas de las que parten sus anlisis, 31% no consider importante expresar sus fuentes utilizadas, 6% incluy un mnimo de referencias (dos o tres referencias en los textos), y slo 63% de las presen- taciones revisadas mostr un aparato crtico consistente y diverso. Dentro de los elementos que consideramos importantes, la metodologa fue fundamental, ya que nos permiti introducirnos a la manera de cmo se realiz la investigacin y qu procedimientos, mtodos y tcnicas utiliz el investigador para elaborar su trabajo. Este apartado es importante porque nos habla de los procedimientos de anlisis y sntesis que se ejecutaron en las re- flexiones y resultados de la investigacin. En nuestro estudio encontramos que las referencias a los procedimientos de investigacin fueron mnimas, generales y, en la mayora de los casos, la presentacin misma de las argumentaciones e ideas de la presentacin rebas lo que se manifestaba como proceso metodolgico. As, 59%, explicit el proceso metodolgico que se llev a cabo, 29%, no explicitaba la metodologa, y el restante 12% explicaba slo parte del procedi- miento metodolgico. Preocupante fue el hecho de que, en algunos de los tra- bajos, se manifestara expresamente que el carcter del trabajo era bsicamente interpretativo, que se realiz a partir de la experiencia personal y de interpreta- cin de datos, es decir, el buscar informacin fidedigna y objetivano fue el sustento de la investigacin. En ese mismo sentido, el anlisis de la forma de la presentacin fue el momento para corroborar que se guardan las formas de presentacin de resul- tados que en otros eventos y foros ya se realizan; a saber se busc corroborar que los trabajos consideraran una estructura mnima de introduccin, desa- rrollo y conclusiones, elementos fundamentales de toda presentacin oral o escrita. De las presentaciones analizadas la mayora, 69%, contena las partes esenciales de todo trabajo de investigacin, sin embargo, 26% un porcentaje significativo, cubri este punto, en parte debido a que, o mostraban slo la introduccin o slo incluan las conclusiones, de tal suerte que el trabajo ado- leci de alguna de las partes; y el restante 5% desenvolvi su temtica expositiva sin aclarar ninguno de los puntos, lo que en algunos casos condujo a confusiones sobre la problemtica analizada. Al finalizar las presentaciones se explicitaban las fuentes de informacin y consultas realizadas para el proyecto, al respecto se encontr que 87% mani- festaban su bibliografa,

26 hemerografa o documentos en lnea consultados; 3% mostr su bibliografa en parte; y 10% restante no consider importante incluir sus fuentes de informacin. El criterio de la inclusin de las referen- cias no debe ser un mero convencionalismo, las consultas son la herramienta que nos permiten ubicarnos objetivamente en el anlisis del objeto de estudio y su marco de referencia, adems, la lectura de las perspectivas de otros espe- cialistas contribuyen a depurar las subjetividades del investigador. Las biblio- grafas que se presentaron en general debieron aclarar el camino terico que sigui el investigador para llegar a esos resultados. Respecto al porcentaje de trabajos que s incluyeron bibliografa se encon- traron dos tendencias; por un lado, muchos trabajos mostraron una mnima bibliografa, slo cinco o seis referencias, evidentemente insuficientes para el anlisis de cualquier problemtica; y por otro, presentaciones que indicaban dos o tres cuartillas de referencias bibliogrficas para una presentacin de 15 cuartillas solicitadas para un Congreso, lo cual resulta excesivo. Las expresio- nes ms graves en torno a la bibliografa fueron aquellas que mostraban 68 o 164 referencias bibliogrficas en presentaciones escritas para las 15 cuartillas solicitadas. Cierto es que en la investigacin se usan una cantidad enorme de referencias, sin embargo, no se van a referenciar todas, sino slo aquellas que sustentan la presentacin en un Congreso. Lo preocupante es que la desproporcionalidad de las referencias, nos habla del cuidado o descuido del investigador en la presenta- cin de resultados en este tipo de eventos; ni son slo tres referencias las que sustentan la presentacin de las investigaciones, ni debe colocarse la biblio- grafa leda durante toda la investigacin soporte de la conferencia, que pudo ser de tres o cuatro aos. En esa tesitura, una buena cantidad de proyectos incluy trabajo de campo, como entrevistas a funcionarios, turistas o prestadores de servicios. En las conferencias por escrito no se encontr la referencia bibliogrfica respec- tiva a las entrevistas realizadas. Ms all de la necesaria colocacin de una referencia bibliogrfica se debe precisar la importancia de una bibliografa actualizada y completa que contenga las referencias del documento o medio utilizado para obtener la informacin de campo y de primera mano. En torno al evento acadmico mismo, comparado con otros eventos de las ciencias sociales, resulta extrao que en los foros de anlisis del fenmeno turstico se presenten gran

27 cantidad de protocolos de investigacin; de hecho los congresos deban ser eventos para presentar proyectos concluidos y resultados sobresalientes de investigacin. Cierto es que genera inquietud saber qu se pretende investigar?, sin embargo, la promesa de una investigacin no nos ayuda a afirmar qu se est investigando, si se est en proceso, y mientras no se tengan resultados mnimos relevantes, es difcil confirmar innovaciones o aportaciones al anlisis de la problemtica turstica. Dentro de los procedimientos de investigacin nos pudimos dar cuenta que es mucho el camino por recorrer, que requerimos refrendar los pasos de la in- vestigacin cientfica y profundizar en las reflexiones que el turismo nos presen- ta da a da, en la bsqueda de resultados relevantes y objetivos. El papel de las universidades en este camino es fundamental, pues ellas sern las encargadas de formar en los investigadores los caminos metodolgicos adecuados para en- contrar y mostrar de manera objetiva lo que pasa en este sector. Proyecciones a futuro Sin pretender reescribir el diagnstico de la investigacin turstica, podemos decir que, del anlisis realizado, encontramos que ha sido poco el trabajo de investigacin en torno al sector, que el apoyo gubernamental a la investigacin es limitado, que los investigadores del fenmeno turstico son en su ma- yora de otras reas de estudio, que se han trabajado prioritariamente siete tendencias de investigacin y que el trabajo metodolgico seguido requiere de mayor precisin y disciplina. Con ello, Qu proyecciones tendremos a futuro respecto a la investigacin del fenmeno turstico? A partir de lo encontrado en este estudio sabemos que las tendencias de investigacin continuarn vinculadas con el anlisis y planeacin de los espa- cios tursticos y sobre estudios del medio ambiente, ecoturismo y sustentabilidad, sin embargo, ser necesario trabajar sobre otras reas que tienen que ver con el desarrollo de la sociedad: la globalizacin econmica, el desarrollo de tecnologas y el impacto de stas en la sociedad y la naturaleza. En el mundo globalizado de hoy, la actividad turstica juega un papel fun- damental, no nicamente se han incrementado las actividades de servicios, donde participan las actividades tursticas, sino que con ello se han desarrollo otros productos y servicios tursticos, nacionales e internacionales, que han

28 ampliado los mercados existentes y generado economas de gran escala. Los impactos, econmicos, sociales, culturales y ambientales de esos desarrollos estn a nuestra vista y disponibles al escrutinio de los investigadores. En ese sentido, el desarrollo tecnolgico ha impactado en todas las esferas de la sociedad, y el turismo no es la excepcin. La aplicacin de nuevas tecno- logas para la elaboracin de productos y oferta de servicios abre un mundo de posibilidades para el estudio del fenmeno. Con el desarrollo de la tecnologa se da por sentado que su aplicacin en la oferta de servicios tursticos repercute positivamente en el funcionamiento de la empresa; sin embargo, no en todos los casos es necesaria la incorpora- cin de tecnologas nuevas. La tecnologa, sin duda, agiliza los procesos en la empresa, abarata los costos, disminuye el gasto corriente, etctera, pero eso depende del tipo y tamao de los establecimientos, el mercado turstico al que atiende, su posibilidad de acceso a la tecnologa, su productividad, etctera. Se tiene que estar conciente del uso de las tecnologas, sus beneficios, y seguro de que la empresa lo requiere.17 Finalmente, las temticas sobre los impactos del turismo en la cultura, el espacio pblico, los empleos, la calidad de vida, el ambiente, etctera, debe- rn ser un foco de atencin de muchos profesionales y acadmicos. Sin duda son escenarios que otros profesionales de las ciencias sociales ocupan, pero que los profesionales del turismo se vern obligados a abordar. Particularizan- do sobre estos temas podemos decir que los viajantes no slo son sujetos con derechos y prerrogativas: al estar en un pas ajeno, su presencia, incide en la aparicin de delitos, que pueden ir desde el robo de una maleta, hasta conflic- tos internacionales y temas de seguridad nacional e internacional que hoy son poco documentados.18 Los contados estudios sobre las condiciones laborales de los empleados tursticos son prcticamente desconocidos. La temporalidad de la contrata- cin (slo en temporada alta), los bajos salarios o las propinas supletorias de salario, la imposibilidad de adquisicin de derechos sociales, el desplazamien- to de la fuerza de trabajo, el impacto en el cambio de saberes productivos, etctera, son slo alguno de los posibles escenarios de anlisis. Como estos estudios hay otros de primer orden y urgencia a tratar. As, el

29 investigador del fenmeno turstico deber observar el escenario de la proble- mtica turstica con mltiples actores: los turistas, los prestadores de servi- cios, las comunidades y entidades gubernamentales, sus interacciones y problemticas reales, ms all de los estudios mercadolgicos o sistmicos del turismo. El futuro de la investigacin turstica lo marcarn los profesiona- les del turismo en la medida en que se preparen y asciendan a la profundidad de anlisis crtico y objetivo; y que apliquen procedimientos de investigacin cientfica, con toda la dificultad que ello implica. Conclusiones Las tendencias de investigacin turstica analizadas en los proyectos estudia- dos muestran que la problemtica ambiental y de ordenamiento del uso del espacio turstico son las reas de estudio preferentes de los investigadores. stas junto con la tendencia de saber qu pasa con respecto a la currcula de los profesionales del turismo, fueron las tendencias ms recurrentes. Como ya se seal, es en las universidades y los centros de investigacin pblicos donde se desarrolla fundamentalmente la investigacin, y son profe- sionales, de otras disciplinas, quienes en mayor medida se dedican a esa tarea. Por otro lado, el trabajo cientfico en torno al fenmeno turstico es limita- do y padece de muchos males. Lo que se hace en trminos de investigacin previo a los programas pblicos, la creacin de empresas o la evaluacin de los impactos en el medio, es insuficiente respecto a las necesidades y el cam- po de trabajo que ofrece el impacto del turismo. En la revisin de las ponencias seleccionadas para el anlisis, las presenta- ciones de investigacin cubran los requisitos formales para ser presentadas en los congresos, sin embargo, salvo afortunadas excepciones, pocas presen- taban una posicin crtica respecto a la problemtica tratada; y otras tantas aterrizaban en investigaciones que mostraban la diversidad de la problemti- ca turstica actual en lo econmico, poltico, social y ambiental. Asimismo los trabajos de campo son muy recurrentes, sin embargo, no se ha llegado al pun- to de conformar estructuras tericas que permitan trascender la parcialidad de los casos de estudio. De acuerdo a las investigaciones analizadas, el incremento en el nmero de proyectos, muestra el inters por comprender la realidad turstica, todos ellos esfuerzos individuales; y slo en los ltimos aos se observa una mayor dis- posicin profesional

30 y trabajo metodolgico por conocer la realidad del fen- meno. Los profesionales del turismo, cada vez van ahondando ms en la problemtica y su relacin con la estructura social y su impacto, sin embargo, sabemos que no es suficiente. Es evidente que se adolece de muchos males de ndole terico, tcnico, metodolgico y financiero, pero se debe tener presente que el comienzo de una trayectoria investigativa individual, una escuela de pensamiento institucional, un marco terico o una tradicin de investigacin en un centro de estudio slo se construye investigando de manera constante y objetiva, aun con esas carencias. Considerando todos stos elementos, podemos decir que, en los ltimos aos se observa una sinergia de esfuerzos de investigacin del fenmeno tu- rstico, que inicia con el reconocimiento de la problemtica y contina con los trabajos presentados en los Congresos de Investigacin Turstica y en otros eventos. Concomitante a esta problemtica, el reto ser insertarse en nuevos cami- nos de investigacin. Que se sigan haciendo estudios ambientales y de plani- ficacin del espacio, pero que se vinculen con la realidad cambiante. Se requiere analizar al fenmeno turstico desde un mundo globalizado, donde las nuevas tecnologas modifican los procesos y productos tursticos, donde las relacio- nes laborales han dejado a trs las conquistas sindicales, donde el cambio climtico mundial impacta en las reas naturales y los espacios ecotursticos, donde los conflictos blicos destruyen el patrimonio cultural de la humanidad a visitar y donde la posmodernidad matiza de forma especial la cultura del esparcimiento y la recreacin en el siglo XXI. En esa perspectiva, hay que vincular la investigacin del fenmeno turstico con el sector, ver sus necesidades y cubrirlas en trminos de investigacin. La calidad en los productos y servicios tursticos ser resultado de la buena administracin y toma de decisiones; y por supuesto, stas slo sern exitosas cuando se tenga un conocimiento amplio del sector en el que se trabaja. Del total de las empresas tursticas en Mxico, 90% es micro, pequea y mediana empresas; esta gama de pequeas industrias son las que se veran beneficia- das con la investigacin vinculada a las necesidades empresariales. As, la investigacin del fenmeno turstico, en la sociedad y en las empre- sas del sector en lo particular, permitir conocer la realidad del turismo y la sociedad, es decir, conocer no slo lo que pasa con los turistas, sino conocer la responsabilidad de las entidades gubernamentales, el beneficio de los po- bladores

31 locales, el compromiso social de los prestadores de servicios y em- presarios, y el impacto social en la estructura de valores, cultura nacional, y medio ambiente. El reto es enorme y se hace necesario ser conciente de ello. Slo reconociendo objetivamente nuestras debilidades podremos hacer bri- llar nuestras fortalezas. EL PAPEL DEL ESTADO EN EL DISCURSO Y POLTICA DEL TURISMO EN EL MBITO CULTURAL Introduccin Existen algunas propuestas analticas y denunciantes de lo que implica la po- ltica turstica en el mbito cultural, pero sta no se ha examinado todava desde la perspectiva de la Escuela Crtica, y eso es justamente lo que preten- demos realizar. Por otro lado, es necesario puntualizar la idea de que el pro- blema principal que afronta el turismo no es su manejo y orientacin como negocio, sino la interpretacin y operacin de una realidad que en el discurso, en el modelo y en sus polticas est resultando marginadora de las masas, alienante en las relaciones tursticas y poco sustentable para el desarrollo integral de los destinos tursticos. En el discurso oficial es comn escuchar que el turismo contribuye de manera significativa al desarrollo nacional en todos sus campos, entre ellos el cultural. Sin embarg o, el modelo convencional desvalora las facetas socioculturales del turismo por su criterio estandarizado, masificado y consumista. Turismo-cultura es una relacin que implica mucho ms que instrumentar programas de promocin, inversin o propaganda; implica un esfuerzo por reconvertir desde lo terico, normativo, educativo, medioam- biental, sustentable, cualitativo hasta lo tnico, tal prctica. En este sentido, estudiar la relacin turismo-cultura, implica reflexionar crticamente, no slo la problemtica que plantea el anlisis de aspectos como el tiempo libre, la sociedad de consumo, las tendencias culturales y sociales de la prctica, motivos y gustos en la eleccin de determinados destinos tursticos, sino tambin el papel del Estado, sus polticas y modelo de conduccin que impactan la vida comunitaria, igualmente la condicin contextual de la activi- dad referida a la globalizacin y modernizacin del turismo y las prcticas cultu- rales, entre otros, para poder precisar el objeto de estudio en esta orientacin. Hoy, en la abundante bibliografa respecto a la manifestacin moderna de los viajes concebidos como turismo malentendido por cierto, se han for- mulado visiones reducidas de la relacin

32 que tiene el turismo con la cultura, la sociologa o la antropologa. Esto se debe a que el concepto de turismo se ha supeditado al anlisis de lenguajes especializados que encapsulan la reali- dad sin cuestionar las categoras, los trminos, las metodologas y la realidad misma, para poder hacer una reconstruccin crtica y reflexiva de objetos de estudio que puedan llamarse turism o cultura l o cultur a turstic a, desde el m- bito de las ciencias sociales. Es cierto, el turismo en sus mltiples manifesta- ciones no es un fenmeno de fcil comprensin. Es extremadamente complejo y opera de mltiples formas y bajo las ms diversas circunstancias, pero ello no implica que se deban copiar sintaxis y semnticas para entenderlo; al con- trario, su condicin posibilita un acercamiento crtico-reflexivo con sentidos y significados nuevos. La mercanca turism o y el papel del Estado Entre las numerosas concepciones del turismo, destacan aquellas de proyec- cin econmica que conciben a ste como la industri a de los viaje s por exce- lenci a (McIntosh, 1999 y Ortuo, 1966). Otras concepciones provienen de la antropologa y sociologa al identificar al turismo como un fenmeno social, como parte de una cultura moderna donde el principal foco de atraccin son las relaciones entre culturas y subculturas (Echtner-Jamal, 1997); y otras ms provienen de la geografa y lo conciben como un elemento mvil que trans- forma los espacios fsicos. Una concepcin tradicional es la que concibe al turismo como un fen- meno social que consiste en el desplazamiento voluntario y temporal de indivi- duos o grupos de personas que, fundamentalmente por motivos de recreacin, descanso o salud, se trasladan de su lugar de residencia habitual a otro, en el que no se ejerce ninguna actividad lucrativa ni remunerativa, generando mltiples interrelaciones de importancia social, econmica y cultural (De la Torre, 1980). Boulln, por su parte interpreta al turismo moderno como un gran negocio, ya que posee una caracterstica claramente determinada: ser un fenmeno social que naci y creci espontneamente impulsado por una actividad privada que encontr, a travs de la prestacin de servicios, una forma lucrativa de ampliar su rea de operacin (Boulln, 1984). De igual forma, Hiernaux concibe al turismo como un proceso societario y no tanto una gama de actividades econ- micas o condiciones sobre pernocta y aprovechamiento del tiempo libre (Hiernaux, 2001). A la luz de estos autores representativos en la investigacin del turismo, con-

33 viene sealar que a pesar de la amplia gama de concepciones del turismo ningu- na nos precisa el sentido que el mismo adquiere en los procesos de acumulacin capitalista ni la naturaleza que tiene ese fenmeno en el manejo que de l hace el Estado. Podemos consentir en que el turismo es un entramado complejo de relaciones y actividades econmicas, sociales y culturales, administrativas, po- lticas y legales que trascienden las fronteras nacionales; en que es un modo de vida y una dinmica social, pero en todo ello permea una naturaleza velada de mercanca. Es decir, no es que en s mismo el Estado lo presente como mercan- ca, sino que se le trata como tal. Cuando Marx distingue que los valores de uso, contienen la riqueza mate- rial de la sociedad y que su consumo implica la consideracin de un valor de cambio, l descubre que los valores de uso son producto del trabajo y en ello reside su transformacin en mercancas. La mercanca se toma de entrada como un objeto de utilidad (valor de uso) que contiene valor (valor de cam- bio). El valor de cambio se considera entonces en su aspecto ms inmediato como una simple relacin (Mathias-Salama, 1986). La contradiccin que existe entre el valor de uso y el valor de cambio explica el movimiento de la mercanca y permite fundar el concepto de valor. Empero, no deja de haber voces que han replanteado la fuerza de trabajo para corregir las formas inicia- les de estudiar los valores en cuestin: si bien la fuerza de trabajo es una mercanca, el trabajador no lo es (Harvey, 1990). La posicin de Harvey deja fuera el anlisis de concebir al hombre mismo como mercanca, incluso no considera al trabajo como el acto de autopro- duccin de la especie humana, ms bien, concibe con cierta autonoma los procesos de socializacin e instruccin que forman la capacidad de trabajo del sujeto quien, con libre albedro, decide venderla a quienes, sin mayor crtica a las condiciones, intereses, deseos y capacidad de inversin y produc- cin deciden comprarla. Mathias y Salama no dejan de llamar la atencin al respecto, cuando sea- lan que el hecho de que el salario no remunera el trabajo efectuado sino la capacidad de reproducir la propia fuerza de trabajo, no se comprende de un modo inmediato (Mathias-Salama, 1986). Por ello, es importante recalcar que las relaciones de produccin estn fetichizadas, por una pseudo relacin de igualdad entre el asalariado y el patrn, pero que en realidad bajo la lgica de los mecanismos de extraccin de la plusvala dicha igualdad queda camuflada. De ah que aseveren los autores que la mutacin del hombre en mercanca revele la dominacin del capital. Algo similar ocurre con el turismo. Aqu no preguntamos

34 cules son los valores de uso y de cambio del turismo si acaso existen, puede el turismo concebirse, a la luz de estos planteamientos, como una mercanca capaz de generar valor? Si partimos de la idea convencional de que el turismo es un servicio que ofrece un conjunto de empresas y organizaciones individuales que se combi- nan para realizar y ofrecer viajes (Cooper, 1996), ciertamente estaramos des- echando el supuesto de que fuese entendido como una mercanca en el sentido marxista del trmino; empero, la naturaleza del turismo no slo tiene que ver con un conjunto de mercancas que se comercializan y se ponen a disposicin o al servicio de los turistas, sino con que es una mercanca en s mismo. Si nos remitimos al surgimiento de los desplazamientos que han sido cata- logados como turismo, en el fondo subyace el tema de los viajes. Pero estos viajes en las distintas pocas que resean los historiadores del turismo han asumido distintas funciones y carcter. Algunos con motivo del perfecciona- miento (modos de produccin esclavista y feudalista) por parte de los nobles; en el mundo helnico para disfrutar de las aguas curativas y presenciar com- petencias olmpicas; en el siglo VIII a. C. se llevaban a cabo con fines de inter- cambio comercial entre las distintas ciudades del imperio romano y del antiguo imperio chino (De la Torre, 1980). Sin embargo, al modificarse las sociedades y sus formas de organizacin y modos de produccin, los motivos de los viajes cambian. Con el capitalismo y la industrializacin el turismo es un fenmeno que surge como resultado de las fuerzas productivas. Trabajo, tiempo libre y ocio, sern las categoras que los socilogos y antroplogos van a resaltar con respectzo a ese movimiento ma- sivo de personas que, en vacaciones y das festivos, se desplazan a diversos lugares consumiendo productos, servicios, mercancas y valores tradiciona- les. La relacin que guarda el turismo con el modo de produccin capitalista es la venta de la fuerza de trabajo de los servidores y animadores tursticos como mercanca para la produccin de plusvala y la generacin del capital. Mientras que el no trabaj o, producto de los derechos laborales de los traba- jadores se incrementaba, comprende actividades diferentes a las productivas tales como descansar, divertirse, viajar por placer, desarrollarse personalmen- te, entre otras actividades recreativas, el trabaj o en el turismo se entiende como el desempeo de ciertas actividades y servicios que los prestadores tursticos ponen en prctica para el turista, que paga para satisfacer sus nece- sidades de esparcimiento, recreacin, alojamiento, alimentacin, comunica- cin, transportacin, venta de artculos y

35 manufacturas diversas, entre otros. He aqu la venta de la fuerza de trabajo como mercanca. Aunque ya existe una amplia clasificacin de servicios de consumo tursti- cos diferencindolos de los que no lo son, como los servicios llamados de consumo bsicos (alojamiento, alimentacin y transporte) (Figuerola, 1985), ambos servicios se constituyen en actividades econmicas que el turista encadena conformando un proceso productivo. De tal suerte que los valores de uso y de cambio en el turismo vienen dados por este tratamiento econmico que de las actividades en cuestin se establecen como mercancas La elabora- cin-consumo de los servicios o actividades tursticas, para la satisfaccin del turista, es el binomio que contempla un valor de uso y un valor de cambio, con lo cual a la actividad o fenmeno en s se le puede concebir como una mercanca de la cual los inversionistas y el Estado tratan de sacar el mximo beneficio con el mnimo esfuerzo. En el caso del alojamiento, el inmueble-hotel es la mercanca que se vende repetidamente al usar el turista las habitaciones, en los servicios de transpor- tacin la mercanca es el avin, el barco, el autobs, el tren. Bajo este concep- to, el consumo turstico, es un tipo particular de consumo de varias mercancas que son producidas por distintos sectores y comercializadas para su uso en el subsector turstico. Pero este consumo, en s, caracteriza las relaciones mer- cantiles donde el turismo adquiere una connotacin de mercanca en lo gene- ral. El turismo es un negocio que no depende slo del tipo y calidad de servicio o actividad que se preste o d, sino de aquellas mercancas que en su trata- miento y consumo le imprimen este carcter al turismo en general. Histricamente el comportamiento del mercado turstico reporta distintos procesos productivos, definidos por las condiciones y el manejo que se hace de la oferta y la demanda. En ciertos momentos el mercado turstico es heliotrpico, en otros culturalista, y otros ms se inclina por el reencuentro con la naturaleza, slo por mencionar algunos. El Estado en los pases subdesarrollados se convierte en el promotor y difusor de las relaciones mercantiles, elemento necesario para esa difusin, pero las relaciones mercantiles se manifiestan incompletas y especficas a la vez debido a que el modo de produccin no ha surgido de las entraas de la sociedad, sino que ha sido lanzado desde el exterior dando lugar a este subdesarrollo. La difusin de las relaciones mercantiles en los pases subdesarrollados inclui- dos aquellos que estn ms industrializados se alimenta de la desestructuracin de las relaciones de produccin no capitalistas que ella misma provoca en

36 un tiempo extremadamente breve. () Ni la subindustrializacin o la falsa in- dustrializacin, ni el dualismo tecnolgico califican el subdesarrollo; es este proceso lo que lo caracteriza (MathiasSalama, 1986). Ahora bien, cmo se da la intervencin del Estado con respecto al turis- mo, a las contradicciones y crisis que puede presentar en su desarrollo? El Estado, no es un sustituto de las contradicciones (crisis), sino que hay un vnculo orgnico que une al Estado con el capital, siendo su forma de existen- cia el rgimen poltico el que acta, y a travs de ste establece polticas para su conduccin y operacin. Globalizacin, Modernizacin y Poltica Cultural El marco de la globalizacin y la modernizacin constituye un contexto para el anlisis poltico y sociolgico desde el cual explicar la dinmica actual (Beck, 1998; Castell, 1997; Urry-Lash, 1997; Robertson, 1996) de los denominados proyecto s de desarroll o cultura l en las que estn inmersas, desde hace ms de una dcada, amplias zonas de la cultura nacional. Estamos ante un fenmeno reciente que est generando una nueva concepcin de la cultura, basado en la capacidad que tiene sta de potenciar su economa mediante la revalorizacin de sus recursos productivos, de su potencialidad natural y cultural hasta aho- ra infrautilizado (paisajes, arquitectura popular, fiestas y rituales, artesanas, gastronoma, etctera). Tal concepcin de la cultura, es fruto de un proceso de globalizacin eco- nmica y resultado inmediato de la posicin de marcos geopolticos y discur- sos hegemnicos de los cuales se deriva en concreto la poltica turstica cultural tanto a nivel nacional como internacional. El proceso, en sntesis, persigue la intensificacin capitalista de la oferta de la cultura y el diseo de un nuevo modelo de mundo cultural, no centrado exclusivamente en los ves- tigios arqueolgicos, sino basado en la diversificacin de actividades socioculturales con resultados econmicos. Por ejemplo, la Organizacin Mundial del Turismo (OMT), a travs de la Carta del Turismo Cultural, ha establecido que el turismo denominado cultu- ral es originado por el deseo de visitar y conocer las diversas manifestaciones de los patrimonios histrico-artsticos de las diferentes regiones y pases que integran el planeta. Textualmente seala: El turismo cultural es aquella for- ma de turismo que tiene por objeto, entre otros fines, el conocimiento de mo- numentos y sitios histricoartsticos. Ejerce un efecto realmente positivo sobre stos en

37 tanto y en cuanto contribuye para satisfacer sus propios fines a su mantenimiento y proteccin. Esta forma de turismo justifica, de hecho, los esfuerzos que tal mantenimiento y proteccin exigen de la comunidad huma- na, debido a los beneficios socio-culturales y econmicos que comporta para toda la poblacin implicada. (Icomos, 1976). En ese sentido, otras definiciones de turismo cultural han girado en torno a ...los movimientos de personas hacia atracciones culturales especficas como sitios histricopatrimoniales y/o manifestaciones artsticas y culturales fuera de su lugar normal de residencia (Richards, 1994). As, se incentiva la espe- cializacin de industrias culturales en determinadas zonas consideradas de alta rentabilidad, al tiempo que se desalienta en otras reas la continuidad de una prctica turstica cultural tradicional y poco competitiva. Cabe sealar que la concepcin genrica respecto a la riqueza turstica que existe en determinado lugar es considerada como patrimonio turstico, enten- diendo ste como ...el formado por los bienes y testimonios culturales que han seleccionado los grupos dominant