TITULO: ¿CONOCESVERDADERAMENTE A DIOS?

SERIE: AVANZANDO HACIA EL CONOCIMIENTO DEDIOS.

TEMA: CARACTERÍSTICAS DE LAPERSONA QUE CONOCE A DIOS(Daniel 11:32; Daniel 4.26; Daniel 3.14-17)

Ps. Pablo MogollónDiseño. Ana Esther Mogollón

Al hablar de conocer a Diossurgen una serie de preguntas:

¿Sabe usted para qué ha sidocreado? Para conocer a Dios.

¿Sabe cuál es su meta principal enesta vida? La de conocer a Dios.

¿Sabe qué es lo que trae mayor gozo,contentamiento al ser humano?

El conocimiento de Dios."Así dijo Jehová: no se alabe el sabio ensu sabiduría, ni en su valentía se alabe elvaliente, ni el rico se alabe en su riqueza.Mas alábese en esto el que se hubiere de

alabar: en entenderme y conocerme"(Jer. 9: 23ss). ¿Qué le produce deleite alcorazón de Dios? Que el ser humano le

conozca: “6 Porque misericordia quiero, yno sacrificio, y conocimiento de Dios más

que holocaustos.", (Oseas. 6:6).

Muchos se sientensatisfechos pensando enlo que se consigue conla salvación, pero no sedan cuenta que lasalvación nos abre laspuertas al conocimientode Dios:

De todo esto, podemos decir que no haynada que desarrolle tanto el intelecto del serhumano y que magnifique tanto el alma delmismo, como el conocimiento de Dios.

El Señor Jesús dijo: “47 De cierto, de cierto osdigo: El que cree en mí, tiene vida eterna.

Juan 6.47. ¿Y que es la vida eterna? La vidaeterna es el conocimiento de Dios. "Esta es

la vida eterna: que te conozcan a ti, el únicoDios verdadero, y a Jesucristo, a quien has

enviado" (Juan 17:3).

“ ¿Quieres librarte de tu dolor?¿Quieres ahogar tus preocupaciones?Entonces ve y zambúllete en lo másprofundo del mar de la Deidad;piérdete en su inmensidad; y saldrásde allí como levantarte de un lechode descanso, renovado y fortalecido.No conozco nada que sea tanconsolador para el alma, queapacigüe las crecientes olas del dolory la aflicción, que proporcione pazante los vientos de las pruebas, comola ferviente reflexión sobre el tema dela Deidad” (Charles Spurgeón).

Esta debeser tambiénnuestraactitud.Nuestrameta debeser la deconocermejor aDiosmismo.

Ya que sepuede

conocermucho

acerca deDios sintener

muchoconoci -

miento deél.

O podemostener

muchoconoci-miento

acerca dealgún

atributo deDios sin

tenermucho

conoci -miento de

Diosmismo.

La pregunta que surge es¿Conoces a Dios?

Veamos algunascaracterísticas de aquellos que

conocen a Dios..

I. AQUELLOS QUECONOCEN A DIOSSON ÍNTEGROS(Daniel 11.32)

“32 Con lisonjasseducirá a losvioladores delpacto; mas elpueblo que conocea su Dios se esforzaráy actuará.”(Daniel 11.32)

A. RESISTE LAS TENDENCIASANTI-DIOS (Daniel 11.30-31)

“30 Porque vendrán contra él naves deQuitim, y él se contristará, y volverá, y seenojará contra el pacto santo, y harásegún su voluntad; volverá, pues, y seentenderá con los que abandonen elsanto pacto. 31 Y se levantarán de suparte tropas que profanarán el santuario yla fortaleza, y quitarán el continuosacrificio, y pondrán la abominacióndesoladora. (Daniel 11.30-31)

Los que conocen a Dios reaccionan ante lastendencias anti-Dios que se ponen de

manifiesto a su alrededor.

Cuando su Dios está siendo desafiado o nooído, no pueden descansar, sienten que

tienen que hacer algo; la deshonra que seestá haciendo al nombre de Dios los impulsa a

la acción.

Los que conocen a Dios se sienten impulsadosa ponerse firmes frente a las falsas religiones.

Frente al desafío a sercontaminado ritualmente alcomer la comida del palacio,insistió en que se le diera unadieta vegetariana, esto creóconsternación al jefe de loseunucos (Daniel 1: 8-26).

Daniel era un hombre queconocía a Dios: Y teníacoherencia en su vida yera íntegro, recto queagradaba a Dios porencima de todo.

Se nos muestra que quienesconocen a su Dios tienen plenaconciencia de las situaciones en lasque la verdad y el honor de Diosestán por encima de cualquierimposición humana, aunque estosignifique riesgo personal.

Frente a la orden delrey Nabucodonosorde suspender por unmes la práctica de laoración, bajo penade muerte, Daniel fuefiel a su Dios a pesarde la orden. (6: 10 s).

B. SON PERSONAS DE ORACIÓN(Daniel 9.3)

“3 Y volví mirostro a Dios elSeñor,buscándole enoración y ruego,en ayuno, cilicioy ceniza”.(Daniel 9.3)

Las personas que conocen aDios, son antes que nada,

personas de oración.

Cuando Daniel supo que elperíodo de la cautividad de Israelestaba por cumplirse, y viendotambién que el pecado delpueblo seguía siendo tal que enlugar de provocar misericordiapodía provocar juicio, se dedicó abuscar el rostro de Dios "enoración y ruego, en ayuno, cilicioy ceniza", y oró por la restauraciónde Jerusalén con tal vehemencia,pasión, y agonía de espíritu comolo que la mayoría de nosotros nohemos conocido jamás.

Si uno conoce aDios, depende deEl y se demuestra através de laoración.

II. LOS QUECONOCEN A DIOSPIENSANGRANDES COSASDE DIOS(Daniel 4.26)

“ 26 Y en cuanto a la orden de dejar en latierra la cepa de las raíces del mismoárbol, significa que tu reino te quedaráfirme, luego que reconozcas que el cielogobierna.” (Daniel 4.26)

Para Daniel, el Dios de Israeles Rey de reyes y Señor deseñores, que "el cielogobierna" y que su reino ha detriunfar a través de la historia..

Para Daniel "el Altísimotiene dominio en el reinode los hombres" (4:25,).

El sabe, y sabe anticipadamente, todaslas cosas; y su conocimiento anticipadoes predeterminación; por lo tanto Éltendrá la última palabra, tanto en lo quese refiere a la historia del mundo comoel destino de cada hombre; su reino y sujusticia han de triunfar finalmente,porque ni hombres ni ángeles podránimpedir el cumplimiento de sus planes.

Estos eran los pensamientosacerca de Dios quellenaban la mente de Daniel

,” 20 Y Daniel habló y dijo: Sea bendito elnombre de Dios de siglos en siglos, porque

suyos son el poder y la sabiduría."(Daniel 2:20ss);

"Ahora, Señor, Dios grande, digno deser temido, que guardas el pacto y la

misericordia con los que te aman yguardan tus mandamientos... 7 Tuya

es, Señor, la justicia, y nuestra laconfusión de rostro, como en el díade hoy lleva todo hombre de Judá,los moradores de Jerusalén, y todoIsrael, los de cerca y los de lejos, en

todas las tierras adonde los hasechado a causa de su rebelión con

que se rebelaron contra ti. “(Daniel 9:4, 7).

Esta es la manera depensar de una personaque conoce a Dios.¿Es así como pensamosnosotros acerca de Dios?

III. LOS QUECONOCEN ADIOS CONFIANEN ÉL(Daniel 3.14-17)

14 Habló Nabucodonosor y les dijo: ¿Es verdad,Sadrac, Mesac y Abed-nego, que vosotros no honráis

a mi dios, ni adoráis la estatua de oro que helevantado? 15 Ahora, pues, ¿estáis dispuestos para

que al oír el son de la bocina, de la flauta, deltamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y detodo instrumento de música, os postréis y adoréis la

estatua que he hecho? Porque si no la adorareis, en lamisma hora seréis echados en medio de un horno de

fuego ardiendo; ¿y qué dios será aquel que os libre demis manos? 16 Sadrac, Mesac y Abed-nego

respondieron al rey Nabucodonosor, diciendo: No esnecesario que te respondamos sobre este asunto. 17

He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnosdel horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos

librará. (Daniel 3.14-17)

Daniel y sus amigos sabíanel riesgo que corrían devivir en el imperiobabilónicoSadrac, Mesac, y Abed-nego,

amigos de Daniel, se negaron aadorar la estatua. Ellos estabantan seguros de su confianza enDios y encaran la situación condecisión y firmeza. No pensaronsi otros tomaban la mismadecisión, estaban seguros de loque a ellos les correspondíahacer, y esto les bastaba.

Ante el edicto deNabucodonosor:"Si no le adorares, en la misma hora seréis echadosen medio de un horno de fuego ardiendo; ¿y quéDios será aquel que os libre del mal?" La respuesta

que dieron fue" 16 Sadrac, Mesac y Abed-negorespondieron al rey Nabucodonosor, diciendo: No esnecesario que te respondamos sobre este asunto. 17

He aquí nuestro Dios a quien servimos puedelibrarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano,oh rey, nos librará. 18 Y si no, sepas, oh rey, que noserviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la

estatua que has levantado”. (Daniel 3.16-18)

Para ellos sea queviviesen o muriesen,

sabían en quien creían.También por medio deeste ejemplo podemos

medir nuestroconocimiento de Dios.

CONCLUSIÓNLa salvación nos abre las puertas paraconocer a Dios. El conocer a Dios es

verdaderamente un deleite. El conocer aDios nos lleva a vivir más cerca de Él y a

conocer sus propósitos.