75
TRADICIÓN DEL CONCEPTO CREENCIA Y SU RELACIÓN CON LA PEDAGOGÍA Presentado Por: Yuly Paola Abril Forero Blanca Rocío Ortiz Pinzón Yuly Paola Rodríguez Jineth Bermudez María Elvira Oviedo Omaira Torres Luisa Fernanda Forero Guerrero Leidy Pineda Ovalle Nubia Carolina Riaño UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA FACULTAD DE EDUCACIÓN LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR PROYECTO DE GRADO 2007 1

TRADICIÓN DEL CONCEPTO CREENCIA Y SU …biblioteca.usbbog.edu.co:8080/Biblioteca/BDigital/40866.pdfsuficiente para realizar la actividad docente; fenómeno que se presenta con reiterada

Embed Size (px)

Citation preview

  • TRADICIN DEL CONCEPTO CREENCIA Y SU RELACIN CON LA PEDAGOGA

    Presentado Por:

    Yuly Paola Abril Forero Blanca Roco Ortiz Pinzn

    Yuly Paola Rodrguez Jineth Bermudez

    Mara Elvira Oviedo Omaira Torres

    Luisa Fernanda Forero Guerrero Leidy Pineda Ovalle

    Nubia Carolina Riao

    UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA FACULTAD DE EDUCACIN

    LICENCIATURA EN EDUCACIN PREESCOLAR PROYECTO DE GRADO

    2007

    1

  • TRADICIN DEL CONCEPTO CREENCIA Y SU RELACIN CON LA

    PEDAGOGA

    Presentado Por:

    Yuly Paola Abril Forero Blanca Roco Ortiz Pinzn

    Yuly Paola Rodrguez Jineth Bermudez

    Mara Elvira Oviedo Omaira Torres

    Luisa Fernanda Forero Guerrero Leidy Pineda Ovalle

    Nubia Carolina Riao

    Tesis para optar al ttulo de Licenciada en Educacin Preescolar

    Directora: Teresa Arbelez Cardona

    UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA FACULTAD DE EDUCACIN

    LICENCIATURA EN EDUCACIN PREESCOLAR PROYECTO DE GRADO SEPTIEMBRE DE 2007

    2

  • 1 PRESENTACIN El estudio de las creencias en los docentes se ha constituido en un campo de la investigacin educativa como uno de los temas ms controversiales e interesantes que dejan al descubierto un modelo de educacin basado en la experiencia personal del maestro. En este contexto el estudio de las creencias en el quehacer pedaggico, ha ocupado un buen nmero de investigadores en el mbito educativo, consecuencia de lo cual, por ejemplo, se han producido varios trabajos elaborados por estudiantes de preescolar de la Universidad de San Buenaventura que tienen como tema principal las creencias y su influencia en le mbito educativo. En este contexto se ubica esta investigacin, la cual rene las indagaciones de tres grupos de estudiantes que trabajaron en torno de la misma preocupacin, aunque con tres enfoques diferentes, de tal manera que el trabajo que se presenta aqu est conformado por los mismos referentes conceptuales, que se elaboraron por los tres grupos; y posteriormente se presentan las indagaciones particulares de cada grupo en torno al problema especfico que abordaron. La preocupacin principal de esta investigacin recae sobre la creencia y la influencia que pueda llegar a tener sta en el proceso de formacin del ser humano. Se hace importante analizar las creencias y su desarrollo histrico para ver de qu manera han afectado los procesos acadmicos que se llevan en el aula para la formacin del ser humano.

    3

  • 2 ANTECEDENTES Las creencias que tienen los maestros de su accin docente es un aporte valioso para la investigacin ya que stas pueden considerarse como un factor de transformacin en los procesos de calidad y aprendizaje, acciones y proyectos, con el fin de facilitar y ejecutar programas de innovacin en la educacin. La actitud parece tornarse hacia una apertura a nuevas formas de desenvolverse en el aula, la tendencia de las creencias, lleva a pensar que la competencia docente es un aprender sobre la marcha, dado que generalmente se piensa que no se requiere una formacin previa en pedagoga o didctica para desempearse como profesor de una disciplina, es decir, que con el conocimiento de los contenidos de cada profesin es suficiente para realizar la actividad docente; fenmeno que se presenta con reiterada presencia en el mbito de la docencia universitaria.1 Para la investigacin educativa; el trmino creencias surge de la investigacin educativa como una estrategia para poder comprender e interpretar las acciones de los docentes, las cuales permiten explicitar lo que tradicionalmente se ha mantenido implcito con una primera intencin de desarrollar estrategias conducentes a renovar las creencias y lograr cambios duraderos de fondo en la educacin. Las investigaciones sobre las creencias de los maestros indican que para que el cambio sea efectivo y repercuta en las prcticas de enseanza tienen que: partir de cmo el maestro concibe su propia prctica, llevar al maestro a un anlisis crtico de su prctica, que sea partcipe en la toma de decisiones y en la implementacin del cambio, responder al contexto y necesidades particulares del maestro y los alumnos. Considerando esta perspectiva, el acercamiento a este tema se hizo tomando diferentes puntos de vista de algunos autores con relacin a la concepcin de pedagoga y de creencia como puntos de partida para el desarrollo de este proyecto dentro de los cuales encontramos a McLaren, quien afirma que la pedagoga crtica crea en los estudiantes la posibilidad de adquirir nuevos lenguajes y entender la vida diaria2. Por lo tanto la pedagoga crtica se presenta como una propuesta de enseanza que intenta ayudar a los estudiantes a cuestionar y desafiar la dominacin, creencias y prcticas que la generan. Tambin se puede definir como una teora y prctica en la que los estudiantes alcanzan una conciencia crtica. Conocer la ideologa profesional del docente es el punto de partida para pensar cualquier accin de formacin continua que le permita alcanzar una fundamentacin

    1 Itinerario Educativo Revista de la Facultad de Educacin. Nmero 48, UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA Editorial Bonaventuriana, Bogot, D.C., Colombia, JULIO- DICIEMBRE de 2006 Ao XX, Pg.152, 153, 198, 199, 204, 213, 214. 2 Pedagoga Crtica, Peter McLaren, Universidad de Miami en Ohio, 1999

    4

  • terica de su actuacin reflexionando crticamente sobre su manera actual de ensear ciencias y sobre las posibles innovaciones. Una manera de iniciar una aproximacin a este conocimiento es indagar lo que el docente piensa, tambin cmo concibe su enseanza y cmo acta profesionalmente. Por lo tanto se investig sobre qu es pedagoga, en qu se divide la pedagoga, cmo influye sta en la relacin maestro-alumno, qu factores se deben tener en cuenta a la hora de desarrollar una actividad educativa donde se involucre adecuadamente la atencin del estudiante para que ste interacte activamente de una manera crtica y constructiva en el quehacer educativo. En relacin con lo anterior se trabaj enfocndose en la pedagoga motivacional que hace referencia a que el aprendizaje se caracteriza como un proceso cognitivo y motivacional a la vez3 ya que esta es la es la fuerza que nos mueve a realizar actividades. En este contexto es en donde se inscribe esta investigacin, teniendo en cuenta los avances que se revisaron en este apartado.

    3 La motivacin para aprender. Gelb, Michael J.

    5

  • 3 DEFINICIN DEL PROBLEMA Al tener en cuenta estas referencias bibliogrficas surgi la necesidad de indagar y conducir nuestra investigacin hacia los maestros, tanto de la Facultad de Educacin de la Universidad de San Buenaventura como de otros mbitos acadmicos, para dar respuesta a las preguntas problematizadoras; las cuales surgieron a partir de una lectura minuciosa de todos los documentos antecesores acerca de creencia, asimismo se tomaron en cuenta los trabajos ya presentados con anterioridad en los cuales se enfatiz en la creencia en el aula. Consecuencia de esto es que se lleg a las preguntas que guan las tres partes de la investigacin, a saber: Son las creencias las que mueven al maestro en su aula de clase? Qu factores inciden para que lo planeado por el maestro no se lleve a cabo en su ejecucin? Qu es creencia y cmo afectan las actitudes del docente en el desarrollo del proceso educativo en los educandos del Colegio F y Alegra. Garcs Navas? Estas tres preguntas giran en torno de un solo problema, a saber, el de la influencia de las creencias en la prctica docente. Sin embargo, los tres enfoques especficos, correspondientes a los tres cuestionamientos, procuran esclarecer particularmente este problema de investigacin, y es por eso que sta se divide en las tres partes en las que se aborda cada pregunta.

    6

  • 4 JUSTIFICACIN Se considera que las creencias son construccin que se han realizado en un proceso de formacin como sujetos que permiten entender el mundo. Pueden ser consideradas como generadoras de acciones especficas; adems, las creencias hacen parte de la visin del mundo y median los esfuerzos de autocomprensin de nuestras acciones y de las acciones de otros, favoreciendo nuevas posibilidades de accin. De esta manera las creencias son uno de los componentes del conocimiento subjetivo implcito del individuo sobre su enseanza y aprendizaje donde dicho conocimiento esta basado en su experiencia. En consecuencia, el presente trabajo es una contribucin a la generacin del campo de investigacin educativa en creencias que busca favorecer la constitucin de una comunidad de docentes reflexivos, comprometidos con la produccin de conocimiento. El trabajo est desarrollado por iniciativa e inters del grupo; su propsito se centra en la exploracin, reflexin, anlisis, interpretacin y construccin del conocimiento en torno a las relaciones entre las creencias en el quehacer pedaggico, la enseanza-aprendizaje que presentan los docentes en su propia aula de clase. Asimismo para llevar a cabo el proceso de este problema investigativo se parte del reconocimiento de que la prctica docente trabaja en todas las dimensiones del ser y que la pedagoga es un saber reconstructivo prctica-reflexin y terico-prctico. De esta manera la "experiencia" se concibe como el saber que se construye a partir de la reflexin de la prctica. En ese sentido, se parte tambin de la concepcin de lo vivencial-experiencial como una ruta posible de construccin de conocimiento y de formacin de identidad como procesos de subjetivacin.

    7

  • 5 MARCO TERICO GENERAL

    5.1. QU SON LAS CREENCIAS Y CMO SE FORMAN?

    Elaborado por Yuly Paola Abril Forero

    Blanca Roco Ortiz Pinzon Yuly Paola Rodrguez

    Etimolgicamente, creer viene del latn, credere, que significa creer, dar fe (a algo). Una creencia es el sentimiento de certeza sobre el significado de algo. Es una afirmacin personal que consideramos verdadera. Las creencias, que en muchos casos son subconscientes, afectan a la percepcin que tenemos de nosotros mismos, de los dems y de las cosas y situaciones que nos rodean. Muchas personas tienden a pensar que sus creencias son universalmente ciertas y esperan que los dems las compartan. No se dan cuenta que el sistema de creencias y valores es algo exclusivamente personal y en muchos casos muy diferente del de los dems. Nosotros no vivimos la realidad en si, sino una elaboracin mental de la misma. Lo que hace que la vida sea un constante manantial de esperanza y ricas alternativas o una inevitable fuente de sufrimiento. Lo que vivimos tal como lo vivimos, depende ms de la representacin y elaboracin de nuestro mapa mental, que del territorio "real" en s. Por lo tanto el mapa no es el territorio. A travs de nuestro sistema de creencias y valores damos significado y coherencia a nuestro modelo del mundo, al que estamos profundamente vinculados. Cuestionar una de nuestras creencias puede desestabilizar todo el sistema al afectar a aquellas otras que se derivan o estn relacionadas con ella. Esta es la razn por la que somos muy reacios, en muchas ocasiones, a modificar alguna de nuestras creencias Las creencias se forman a partir de ideas que confirmamos o creemos confirmar a travs de nuestras experiencias personales. Cuando una creencia se instala en nosotros de forma slida y consistente, nuestra mente elimina o no tiene en cuenta las experiencias que no casan con ella. Las creencias son una fuerza muy poderosa dentro de nuestra conducta. Es bien sabido que si alguien realmente cree que puede hacer algo, lo har, y si cree que es imposible hacerlo, ningn esfuerzo por grande que ste sea lograr convencerlo de que se puede realizar. Todos tenemos creencias que nos sirven como recursos y tambin creencias que nos limitan. Nuestras creencias pueden moldear, influir e

    8

  • incluso determinar nuestro grado de inteligencia, nuestra salud, nuestra creatividad, la manera en que nos relacionamos e incluso nuestro grado de felicidad y de xito. Son ideas que en un momento determinado llegaron a nosotros y porque si cremos, como el que cree que maana sale el sol. Las creencias se han ido formando, ocupando un espacio, una energa, se han ido materializando dentro de nuestros conceptos ms arraigados. Vienen a partir de lo que nos han dicho, de lo que hemos vivido, son maneras que nosotros creemos tener y ser, y que vienen ms de otras personas, educadores, padres, experiencias de nuestros padres, por los medios de comunicacin o en el momento que algo nos ha sucedido muy fuerte y se ha producido una impregnacin en nuestro consciente o en nuestro inconsciente. Creencias a veces escondidas en nuestro inconsciente, y que estn teniendo una repercusin extraordinaria en nuestras vida, y es difcil acceder a ellas. Las creencias, por otro lado, pueden ser potenciadoras o limitantes. Las primeras nos ayudan y potencian la confianza en nosotros mismos y en nuestras capacidades, permitindonos afrontar con xito situaciones complejas. Las segundas nos restan energa y nos inhabilitan para afrontar determinadas situaciones. Si nos creemos incapaces de aprender o consideramos que ya pasamos el perodo de nuestra vida en el que nos era fcil aprender cosas nuevas, estaremos bloqueando cualquier oportunidad de desarrollar nuevas competencias y habilidades. Tambin puede ocurrir que nos cueste mucho esfuerzo aprender muchas habilidades, porque al adquirirlas fcilmente nos quitaran la razn a nosotros mismos (de esta forma confirmamos nuestra propia creencia). Para conseguir un pleno control de nuestra vida, debemos conocer cules son nuestras creencias esenciales, cambiar aquellas que nos estn limitando y resolver los conflictos que pueden existir entre distintas creencias. Cuando somos capaces de ver nuestras sombras y aceptar nuestras partes somos capaces de poner luz a nuestro camino. Es importante conocer nuestras creencias. Yo creo algo con respecto a lo que oigo, veo, vivo, hago. Yo puedo decir las mismas palabras a muchas personas, y cada una entender cosas distintas, porque cada uno tenemos creencias distintas. La creencia tiene que ver con la educacin, y la primera infancia, donde nos enamoramos de nuestros padres, y hemos credo prcticamente todo lo que ellos nos han dicho. Que yo era buena o mala, que es difcil comunicarse con los dems, que los hombres no lloran, que la enfermedad es sufrimiento y culpa. No slo lo que hemos odo, sino de lo que hemos visto. Cuando se ve materializada la idea, por ejemplo de que el mundo es un lugar peligroso o de que cuesta mucho ganar dinero, porque el padre llega tarde a casa, porque le ve sufrir, le ve preocupado, porque vive la escasez econmica, que al final es escasez energtica, porque ve materializado aquello que se dijo en un momento determinado, inmediatamente se va llevarlo a la vida, va convertirlo en creencia, y como consecuencia va materializarlo.

    9

  • Por eso es tan importante que se tenga conciencia de los pensamientos que se abordan, y del lugar que esos pensamientos estn ocupando en nuestra psique, en nuestro inconsciente. Si se tiene una creencia de "La vida es dura", de alguna forma se esta materializando o buscando en la vida dureza. Yo voy a convertir mi vida en algo difcil, porque debajo hay una creencia. Si tu crees que la vida es dura, tu vida es dura. No te vas a encontrar gente con esta creencia y que su vida sea fcil. Uno va llevando a la prctica lo que cree. Las creencias se han formado en nuestra primera etapa. Si a ti te han dicho de pequeo "tu no vales" y resulta que de mayor te echan de los trabajos, hay debajo una creencia de que no vales o no mereces, y ah est el origen de que nos relacionemos con personas que nos confirman y vienen a ratificar lo que tu has credo.

    10

  • 5.2. ACERCAMIENTO TERICO Elaborado por

    Luisa Fernanda Forero Guerrero, Leidy Pineda Ovalle y Nubia Carolina Riao

    Conceptos

    Tipos de Creencias

    A.G. Thompson (1992:130) considera que las creencias son un tipo de concepciones, pues define a estas como una estructura mental mas general, que encierra creencias,

    significados, conceptos, proposiciones, imgenes mentales y preferencias

    J.P. Ponte (1994) las entiende como verdades personales e intransferibles de cada uno que derivan de la experiencia o la fantasa y que tienen un componente afectivo y de

    valoracin.

    CREENCIAS

    Etimolgicamente viene de la palabra Creer del latn, credere, que significa creer, dar fe (a algo).

    M. Fishbein e I. Ajzen (1975) sealan tres tipos de creencias.

    Creencias descriptivas Son las que provienen de la observacin directa y sobre todo de la experiencia, del contacto personal con los objetos; estas creencias se mantienen con un alto grado de certeza al ser validadas continuamente por la experiencia y suelen tener un peso importante en las actitudes de los individuos.

    Creencias inferenciales Son las que tienen su origen en relaciones previamente aprendidas o en el uso de sistemas formales de codificacin; en cualquier caso, la base de la creencia inferencial es siempre algn tipo de creencia descriptiva.

    Creencias informativas

    Como su nombre indica, provienen de informaciones que proceden del exterior: otras personas, medios de comunicacin social, etc.

    11

  • SISTEMAS DE CREENCIAS

    Una creencia nunca se sostiene con independencia de otras, por ello se suele hablar ms de sistemas de creencias que de creencias aisladas.

    Algunas creencias se relacionan entre s al modo de premisas y conclusin, por lo que puede hablarse de creencias primarias y derivadas. Su relacin es cuasi lgica, distinta de la de los sistemas de conocimientos donde la relacin es de tipo lgico.

    Las creencias se mantienen con diferente grado de conviccin y distinta fuerza. En este sentido cabe hablar de su centralidad psicolgica: las que se sostienen con mayor fuerza son centrales y las dems son perifricas.

    Las creencias suelen mantenerse enclaustradas, sin someterse al contraste con el exterior. El contraste tiene ms de confrontacin defensiva que de apertura para su enriquecimiento o para su modificacin.

    Una creencia puede ser a la vez primaria y perifrica o tambin derivada y central,

    ya que los conceptos de centralidad psicolgica y de relacin cuasi lgica son independientes el uno del otro.

    12

  • PEDAGOGA

    La mayora de los textos definen a la pedagoga como:

    Designa el estudio y la regulacin del proceso de la educacin

    Etimolgicamente pedagoga (del griego: paids =nio, y de agoga=conduccin) equivale a la conduccin del

    nio.

    El arte

    La ciencia

    La

    educacin

    OBJETIVOS DE LA PEDAGOGA

    Segn Johann Friedrich Herbart (filsofo y pedagogo alemn).

    Consiste en el inters multilateral bien equilibrado.

    Un prximo

    Consiste en la formacin del carcter moral.

    Un remoto

    13Esto se obtiene con la instruccin, es decir, con la formacin de un pensamiento coherente y riguroso, por lo que la instruccin tiene valor educativo por si mismo.

  • CREENCIA Y SU RELACIN CON LA

    PEDAGOGA

    Las creencias influyen en la pedagoga en la forma en que:

    Se aprende

    Se ensea Se aplica en los diferentes saberes.

    Las creencias en la pedagoga es entenda como una visin basada en los.

    Conocimientos.

    Surgen a partir de

    Motivaciones

    Experiencias Necesidades del estudiante

    En consecuencia, dos son los temas que nos ocupan en este marco terico: el primero, y de mucha relevancia pues sienta la definicin de lo que se va a entender por creencia en esta investigacin, es la delimitacin que del concepto creencia hace David Hume. En segundo lugar, en esta seccin nos ocuparemos de revisar lo que se ha escrito sobre el pensamiento del docente y sus creencias. La filosofa de este pensador est en buena parte fundamentada en la teora del conocimiento que desarrolla. Con ella, con la teora del conocimiento, de estirpe

    14

  • empirista, busca, en efecto, por un lado, explicar cmo se da el desarrollo cognoscitivo en el ser humano, y adems, por otro lado, argumentar en contra de las teoras metafsicas que, segn su opinin, carecen por completo de cientificidad por estar fundadas en postulados que no tienen referente en la realidad. Es empirista, y cumple con la doble funcin aludida: exponer una teora del conocimiento y ser detractora de la metafsica o el racionalismo (en sentido cartesiano). Para este segundo propsito se vale, como se dijo, de su teora del conocimiento, pues con ella demuestra que todo conocimiento, todo pensamiento se basa en la experiencia, no en especulaciones fuera de los linderos de la realidad perceptible. Sin embargo, ms contundencia tiene, para este segundo propsito, el segundo principio (de los que se anunciaron atrs), a saber: todos los objetos de la razn e investigacin humana pueden dividirse en dos grupos, a saber: relaciones de ideas y cuestiones de hecho4. Este principio aplica, prioritariamente, para la distincin en las ciencias (derivada de las clases de objetos de la razn: relaciones de ideas o cuestiones de hechos) en las que, ya sea en forma simple o compleja, la fuente de material del intelecto es la experiencia e, incluso, las ciencias de mayor abstraccin tiene referentes mediatos en ella, tal es el caso del lgebra, de la aritmtica y la geometra, que pertenecen a la primera clase de ciencias, las de relaciones de ideas, por eso dice [Hume] que todos los objetos de conocimiento son o bien relaciones de ideas [que son, a su turno, elaboraciones correspondientes a impresiones] o relaciones entre hechos. Es de vital importancia conocer los pensamientos de Hume frente ala investigacin: Es cierto que el empirismo, por sus caractersticas, es una teora basada en hechos, lo cual tiene tantas ventajas, con miras a un estudio etnogrfico como ste, como aristas sospechosas. Comencemos por las segundas. En esta medida, con miras a una investigacin que indaga por comportamientos humanos en este caso, la influencia de las creencias de los maestros en su prctica docente, el empirismo, en su faz experimental, positivista ensanchado este concepto, le puede imponer a la investigacin el olvido de su propsito originario en aras de la cientificidad o rigor cientfico, con los parmetros de toda ciencia de hechos. Sin embargo, y con conciencia de este hecho, lo que dejas que aporte el empirismo a sta que es una investigacin cualitativa, no es su preocupacin por lo que entre los modernos avalaron como lo cientfico, sino su carcter y su precepto de observacin y, ampliando esta herramienta en los linderos cualitativos de la etnografa, lo que va del marco terico de Hume a esta investigacin adems del concepto de creencia que se tratar ms adelante, es la primaca de los datos de la experiencia y en esa medida empricos sobre las interpretaciones intencionadas. Investigacin etnogrfica, por ms cualitativa que pretenda ser, entraa un anlisis de los datos observados. 4 Ibd., THN, E1, SB 25 / 50, 47-48, citado por J.L. Tasset, Op. Cit., pg. 74.

    15

  • Lo que va del contexto general de la teora humeana a esta investigacin insistimos, adems de su definicin de creencia es el mtodo:

    la observacin y la experiencia han de ser el nico fundamento seguro para nuestro conocimiento5.

    Cmo define Hume el concepto de creencia? Comienza anticipando que lo que nos hace prever el comportamiento futuro de algo (el conocimiento preventivo) es la mera costumbre, sin asistencia de una certeza, dado que, por causa y efecto, el hombre puede suponer, por costumbre, que el efecto que presencia, semejante a otro que pasado ya experimentado, ha de tener la misma causa que el anterior igual. De otro lado, una causa determinada deduce por costumbre probablemente precipite un efecto tal que, en otra experiencia, describi. En suma, la creencia es el modo de darse la concepcin, no es voluntario, no es deliberativo, pero tiene antes de darse, como se vio atrs, dos opciones tendenciosas: la concepcin o su contrario. Las creencias: son un modo de concebir que no una idea, y nacen de la costumbre. La fuerza de la creencia es determinante: tienen gran influencia en las pasiones y en la imaginacin6. Esto es de relevancia en el contexto de esta investigacin si se considera que, para analizar la ingerencia de las creencias en la actividad docente, se debe tener en cuenta, s, lo que las nutren desde el punto de vista emprico es decir, el contexto objeto que produce creencias, dado que stas tiene un fundamento en la realidad y se consolidan por costumbre, tal como se mostr atrs; pero tambin se debe revisar la dimensin subjetiva de su constitucin. Pasando al texto Acciones y creencias, all se encuentra una primera definicin de creencia que parte de la concepcin que difiere en parte de la que ofrece Hume, pero en algo se encuentra. Dice el texto: el concepto de concepcin alude a todo aquello que en una sociedad es considerado por los sujetos como conocimiento sin detenerse a pensar en su validez la concepcin de los maestros, las creencias, desde la perspectiva de estudio de Reyes, Perafn y Salcedo es, como se anot, pragmtica. En sus antecedentes anotan los autores que, en efecto, las creencias de los maestros tienen dos rasgos destacables:

    [1.] el comportamiento del profesor en el saln de clase est influenciado directamente por su concepcin acerca de la naturaleza de la ciencia y [2.] que existe una relacin entre los cambios de las

    T5 Tasset, Jos Luis. Op. Cit., pg. 57. 6 Ibidem.

    16

  • creencias de los profesores y los cambios en las creencias de los estudiantes7.

    Esto significa, en primer lugar, que las creencias de los maestros tienen influencia epistemolgica en su ejercicio docente, si se tiene en cuenta que uno de los criterios de enseanza est constituido por las creencias que el maestro tiene sobre la ciencia; y en segundo lugar, que las creencias del maestro afecta, de hecho, a los estudiantes, no slo en trminos de la materia que expone, sino tambin en la actitud de los estudiantes. En relacin con el primer rasgo, ms adelante los autores afirman que las creencias sobre la ciencia afecta, no slo el desarrollo en clase de los temas, sino, desde antes, el diseo de los programas y currculos. El concepto de creencia entraa, por sus efectos, el de las acciones que estas creencias proporcionan. De esta manera, hacer un estudio sobre las creencias de los maestros de la USB significa, como consecuencia necesaria, delinear preliminarmente las acciones que se esperan que se modifique. Sobre este particular afirma Gerardo Andrs Perafn:

    La investigacin sobre pensamiento prctico de docentes permite explicitar las relaciones constitutivas de los sujetos []. El pensamiento prctico de los docentes no es una sumatoria de ideas, creencias, constructor; por el contrario, como afirma Bachelard, el pensamiento es una fuerza, un poder []. Explicitar esas concepciones, por lo tanto, significa reconocer colectivamente ese poder8.

    para dar respuesta a esta pregunta que surge por medio de nuestra investigacin basada en las creencias en la pedagoga inclinada a lo epistemolgico; nos basaremos en hume: quien era filsofo, historiador y economista escocs, quien en su pensamiento ejerci una notable influencia en el desarrollo del escepticismo y del empirismo. y tambin en jos ortega y gasset: filsofo y ensayista espaol, famoso por su crtica humanista de la civilizacin contempornea, fue uno de los pensadores ms significativos e influyentes del siglo xx.9 este es un proceso que se ve de manera permanente en el aula, en la docencia, como tal, ya que el docente siempre parte desde supuestos que luego l indaga para comprobar si estos son de utilidad en su que hacer cotidiano, las creencias son la realidad intelectual en la que vivimos; contamos con ellas y no sentimos la necesidad de formularlas explcitamente ni defenderlas.

    7 Ibd., pg. 16. 8 Perafn Echeverry, Gerardo Andrs. Pensamiento docente y prctica pedaggica. Bogot, Editorial Magisterio, 2002; pg. 132. 9 Microsoft Encarta 2006. 1993-2005 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos.

    17

  • PEDAGOGA

    Pedagoga, teora de la enseanza que se impuso a partir del siglo XIX como ciencia de la educacin o didctica experimental, y que actualmente estudia las condiciones de recepcin de los conocimientos, los contenidos y su evaluacin, el papel del educador y del alumno en el proceso educativo y, de forma ms global, los objetivos de este aprendizaje, indisociables de una normativa social y cultural. PEDAGOGAS TRADICIONALES

    En la antigedad la educacin estaba ms enfocada a la formacin general del hombre y del ciudadano (paideia) que a la transmisin y al contenido de los conocimientos en el sentido estricto de la palabra. En este contexto, la dialctica y la mayutica, practicada por Scrates en sus famosos dilogos, eran consideradas tcnicas capaces de hacer progresar el razonamiento y el conocimiento. Igualmente, Platn y Aristteles consideraban que la pedagoga deba ponerse al servicio de fines ticos y polticos.

    Ms tarde, durante la edad media, la pedagoga se asimil a un catecismo bajo la influencia del escolasticismo, cuyos principios fueron expuestos principalmente por san Agustn y santo Toms de Aquino. Los mtodos de educacin, que hacan hincapi en la comunicacin maestro-alumno, se basaban en la transmisin de la fe a travs de una enseanza que giraba principalmente alrededor de la lingstica. Este mtodo, ridiculizado principalmente por Franois Rabelais en Garganta (1534), se basaba en la memorizacin y la imitacin, y permaneci vigente en las escuelas hasta el siglo XVII.

    A LA BSQUEDA DE UNA METODOLOGA Erasmo de Rotterdam, rompiendo con esta concepcin, cuyo aspecto esterilizante y repetitivo haba sido ampliamente denunciado, fue el primero que destac el valor de la afectividad y del juego en el aprendizaje del conocimiento. Con esta reflexin, Juan Amos Comenio fue el primero que present una nueva metodologa de la educacin basada en la unin de la pedagoga con la didctica. Con su proyecto de una didctica magna (instruccin universal) inspirada en principios religiosos y humanistas, Comenio se propuso implantar un sistema de educacin que, por su organizacin en ciclos, permitiera dirigir la progresin moral e intelectual del alumno.

    Sin embargo, hasta el Siglo de las Luces, especialmente con Jean-Jacques Rousseau, no se logr imponer la reflexin sobre la pedagoga. El autor de mile, fijando como premisa la especificidad del nio, concebido no como un pequeo adulto, sino como un ser con necesidades y satisfacciones especficas, asign al pedagogo la misin de

    18

  • observar sus capacidades para intentar favorecer su desarrollo, bajo el lema: dejar crecer. Al mismo tiempo, Rousseau insisti en el objetivo fundamental de la educacin: educar al hombre en potencia.

    EL SIGLO DE LAS LUCES

    Rousseau ejerci una doble influencia: en la vertiente poltica (formacin del ciudadano), inspir los proyectos de reforma de la educacin propuestos durante la Revolucin Francesa por Jean Antoine Condorcet y, en la vertiente metodolgica, propici los estudios de Pestalozzi, que asign al alumno un papel central en el proceso educativo.

    Friedrich Frbel, seguidor de Pestalozzi y creador de los primeros jardines de infancia, identificaba a dios con la naturaleza a travs de una visin metafsica, formulando las grandes lneas de una pedagoga que asignaba un lugar preferente a la espontaneidad y el juego, entendidos como bases de la conciencia en formacin. al mismo tiempo, johann friedrich herbart introdujo la experimentacin en la pedagoga, colaborando en la fundacin de la psicologa infantil.

    PROBLEMTICA MODERNA

    A medida que los sistemas de enseanza fueron difundindose con una fuerza sin precedentes en los pases desarrollados, el papel de la pedagoga fue objeto de nuevas reflexiones, dando lugar a corrientes a veces contrapuestas.

    As, mile Durkheim, al tiempo que afirmaba que la pedagoga era un producto de un determinado momento de la historia, le asign como misin constituir un proyecto susceptible de preparar al nio para la sociedad en la que est llamado a evolucionar. Desde finales del siglo XIX, y a partir de una perspectiva relativista, la pedagoga ha visto sus objetivos cuestionados en el marco de una interrogante que abre el camino a una pluralidad de concepciones pedaggicas, convirtindola, muy a menudo, en un campo de enfrentamientos.

    A pesar del aspecto excesivamente normativo de la educacin escolar, se ha impuesto una corriente que se caracteriza por su constante referencia ideolgica a la espontaneidad. Partiendo del nio, la nueva educacin se presenta como una ampliacin del mtodo cientfico en el campo de la educacin.

    A estos mtodos se les reproch haber olvidado algunas veces las relaciones escuela-sociedad. En diferente medida, los mtodos denominados ocupacionales de John Dewey (intentando hacer de la escuela el lugar de adaptacin a la vida social) o las experiencias de Makarenko en colonias de jvenes delincuentes (sustituyendo las relaciones basadas en la violencia por un aprendizaje de vida en colectividad) se

    19

  • inscribieron dentro de una problemtica que sigue siendo el centro del debate sobre la escuela.

    En estas corrientes se basa la polmica de hoy, en un contexto donde la pedagoga parece atravesar por una crisis. Confrontada a la sospecha (lanzada por algunos psicoanalistas como Octave Mannoni) de perpetuar con sus estructuras la reproduccin de un modelo de poder, la pedagoga ha tenido que adaptarse, desde la dcada de 1960, a las nuevas condiciones derivadas del fenmeno de la escolarizacin masiva. Al mismo tiempo, la crisis social (caracterizada por el aumento del individualismo), la generalizacin de la tcnica e incluso la crisis del concepto de trabajo la obligan a responder a nuevos interrogantes sobre sus objetivos y su papel en la sociedad.10

    Etimolgicamente pedagoga (del griego: paids =nio, y de agoga=conduccin) equivale a la conduccin del nio. En sus orgenes el pedagogo (paidagogos) fue el esclavo que cuidaba de los nios y los acompaaba a la escuela. Mucho ms tarde, en los siglos VII y XVIII, todava se empleaba ese nombre para los preceptores de los hijos de familia acomodada. El tiempo, sin embargo, modific el sentido primitivo. Pedagoga no designa ya el acto de conduccin, sino, en forma mucho ms amplia, el estudio y la regulacin del proceso de la educacin; no es ms la actividad misma o el oficio correspondiente, sino el afn por aceptar su esencia y su direccin. Pero, si gracias a la historia viva de las palabras, pedagoga no tiene en su significado conceptual contemporneo nada que ver con la raz etimolgica, no puede desprenderse totalmente de ella. En el encuentro de dos acepciones, la primitiva y la que gan a lo largo de la historia, se presiente el conflicto de la teora con la prctica, de la ley que traduce el modo de ser propio de un hecho, de un fenmeno o de un proceso, con la norma que seala la manera de cumplir una accin. La mayora de los textos definen a la pedagoga como el arte y la ciencia de la educacin. El concepto se arma sobre tres elementos perfectamente discriminables: el arte, la ciencia y la educacin. Se debe hablar de la importancia de estas tres palabras entre la ciencia el arte y a educacin y, sobre todo, si es exacto hablar de un arte y una ciencia educativos dentro del concepto de la pedagoga. Al hacerlo nos encontraremos con que ms de una vez esa ciencia y ese arte no siempre han sido considerados compatibles y que a menudo, en nombre de una o de otro se ha negado la posibilidad de su pacifica convivencia. 11

    10 Microsoft Encarta 2006. 1993-2005 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos. 11 NASSIF, Ricardo, PEDAGOGA GENERAL, Segunda edicin, EDITORIAL CINCEL KAPELUSZ, Bogot Septiembre de 1983 Paginas 37-40

    20

  • El concepto de pedagoga segn Echeverra afirma que la esta es un Conjunto de mtodos y procedimientos que posibilitan la educacin: de la llamada filosofa de la educacin cuyo objeto es el anlisis de las cuestiones suscitadas por el proceso educativo y que se vale de auxilio que le presentan diversas ciencias (antropologa, sociologa, psicologa, historia, etc.), se derivan generalmente las diversas escuelas o direcciones pedaggicas. En este sistema de Herbart, la pedagoga tiene dos objetivos: un prximo, que consiste en el inters multilateral bien equilibrado; el otro remoto, que es la formacin del carcter moral. Esto se obtiene con la instruccin, es decir, con la formacin de un pensamiento coherente y riguroso, por lo que la instruccin tiene valor educativo por si mismo. Su intelectualismo tico-pedaggico dio una de las ms slidas bases para una serie de realizaciones del siglo XIX en el campo d las instituciones de enseanza y programa de estudio12.

    5.3. TIPOS DE CREENCIAS

    Elaborado por Jineth Bermudez

    Mara Elvira Oviedo Omaira Torres

    Es importante resaltar en nuestra investigacin los tipos y clases de creencias que son manejadas muy comnmente por la sociedad en la que nos desenvolvemos. Existen dos tipos de creencias:

    Creencias globales: Son generalizaciones que hacemos sobre la vida, el mundo, las personas, etc. Reglas Son pautas que rigen nuestro comportamiento.

    Las creencias, por otro lado, pueden ser potenciadoras o limitantes. Las primeras ayudan y potencian la confianza en la persona y sus capacidades, permitiendo afrontar con xito situaciones complejas. Las segundas restan energa y inhabilitan para afrontar determinadas situaciones. Para conseguir un pleno control de la vida, se debe conocer cules son las creencias esenciales, cambiar aquellas que limitan y resolver los conflictos que pueden existir entre distintas creencias. Es importante conocer las creencias que rodean al ser humano, porque cada uno tiene creencias distintas. Clases de Creencias: 12 ECHEVERRI, Leonor, DICCIONARIO DE FILOSOFA ILUSTRADO, Editorial Panamericana, Tercera edicin, Santaf de Bogot 1997, Pagina 431,432

    21

  • Creencias sobre la causa:

    Puedes tener creencias acerca de lo que causa algo. Cul es la causa de que no consiga perder peso? Cul es la causa de que siempre me dejen los hombres? Cul es la causa de que nunca tenga dinero? Cul es la causa de que me echen de los trabajos?

    Creencias sobre el significado: Se pueden tener creencias sobre el significado. Qu significa que tenga una persona cncer? Qu significa que los hombres me dejen? Qu significa que me echen de los trabajos? Qu significa que nunca tenga dinero? Acaso puede significar que no valgo, o que la vida es dura. Que eres una mala persona y mereces castigo o que debes introducir cambios en tu forma de vivir. Lo que t respondas es otra creencia que ests teniendo. Las creencias sobre significado se traducirn en comportamientos congruentes con la creencia. Si tu crees que tus dificultades para dejar de fumar se derivan de la existencia de dos partes no integradas, probablemente trabajars para integrarlas; si crees que significa que eres dbil, quiz no emprendas ninguna accin hacia la integracin.

    Creencias de identidad u origen: Las creencias sobre la identidad engloban causa, significado y lmites Cuando tu cambias tus creencias acerca de tu identidad, te conviertes de algn modo en una persona distinta. Como ejemplo de creencia limitadora sera: No valgo nada, no merezco tener xito o si obtengo lo que quiero perder algo. No es lo mismo creer que no soy capaz de sobresalir en una materia que creer que soy tonto. No es lo mismo decir: No soy capaz de controlarme con la bebida, que decir Soy alcohlico y siempre ser alcohlico. Cualquier cosa que asumamos como parte de nuestra identidad comenzar a ejercer un impacto muy profundo en nosotros. En resumen las creencias pueden ser de significado, de identidad y de causa. Pueden referirse al mundo exterior, incluyendo a las dems personas, o pueden tener que ver con su propio "yo" y su identidad. Las creencias son en gran medida procesos inconscientes de pensamiento organizado. Puesto que son principalmente inconscientes, resultan difciles de identificar Como se puede ver las creencias no solo hacen parte del ser en si, sino tambin forman parte de su diario vivir, familia, sociedad y lo que nos corresponde por ahora la escuela, pues han sido determinantes de las acciones del profesor y de la enseanza y aprendizaje. Las creencias en cuestin varan de acuerdo a las historias formativas

    22

  • especficas y a contextos desde los cuales el profesor las interioriza.13 Debido a ello no basta con tener una teora formal que se presupone progresista para ensearla a los profesores en los cursos de formacin y capacitacin, sino que es necesario estudiar las acciones de enseanza y las interacciones que en general se producen en el aula, as como los sentidos implcitos en ellas, que a su vez aparecen como concepciones o formas de comprensin por parte del profesor. A pesar de la aparente regularidad en los resultados generales, es evidente como de una localidad de otra, o de un grupo a otro, las diferencias saltan a la vista. Las concepciones sobre enseanza y aprendizaje no siempre son las mismas y mucho menos las formas especificas de incidencia, pues los contextos y las historias locales e incluso personales mantiene su presencia en la constitucin de tales creencias. No se debe, perder de vista una cierta impronta idiosincrsica que debe animar a indagar en cada grupo o comunidad por las creencias particulares. De esta manera en le contexto social, configurando por las expectativas de estudiantes, de los profesores, de los padres, y de otras instituciones, proporciona oportunidades o restricciones a la situacin de enseanza. De forma singular, la institucionalizacin del currculo que establece contenidos, criterios metodolgicos y de evaluacin, y los efectos que provoca su socializacin en los mbitos nacionales incide en las prcticas de enseanza. En una misma escuela, a pesar de que los profesores tengan distintas creencias, las prcticas escolares pueden ser similares, aunque estas entren en conflicto con las creencias. Por tanto, en esta lnea se considera que uno de los componentes importantes del pensamiento del profesor son sus creencias y concepciones sobre la tarea profesional, es decir, sobre la enseanza y aprendizaje; la enseanza esta clasificada utilizando las tendencias didcticas en profesor: tradicional, tecnolgico, espontaneista e investigador, utilizando para ello una serie de dimensiones (forma de concebir la metodologa, sentido de la asignatura, concepcin del aprendizaje, papel del alumno, papel del profesor y evaluacin). Desde la tendencia didctica tradicional el profesor es el trasmisor del conocimiento, el alumno se esfuerza por recoger todo aquello que le profesor transmite. La asignatura esta orientada bsicamente a la adquisicin de conceptos, otorgndole una finalidad exclusivamente informativa14. Esta tendencia ha comenzado a modificarse con la incorporacin de la perspectiva constructivista del aprendizaje, en le cual el profesor es dinamizador del aprendizaje. Para que se de aprendizaje es necesario que le alumno otorgue significado a lo que aprende, siendo consiente de su propio proceso de aprendizaje, para ello la actividad se organiza de una manera interna o externa hacia la bsqueda de respuestas a determinados interrogantes. Estos cambios

    13 Jos Ortega y Gasset, Ideas y Creencias, Obras Completas. Madrid: Alianza Editorial, Tomo V, 397, Revista de Occidente, 1983, (Doce tomos). 14 Torner, y Penkonned (1996)

    23

  • en las tendencias didcticas produce en le aula un choque con la expectativas del alumno, cuyas creencias mas fuertemente arraigada es la del profesor como transmisor de conocimientos.

    5.4. CREENCIA Y SU RELACIN CON LA PEDAGOGA I

    Elaborado por Abril Forero Yuly Paola

    Ortiz Pinzon Blanca Roco Rodrguez Yuly Paola

    Puede haber ciencia pedaggica cuando frente a nosotros tenemos una diversidad de idiosincrasias, valores, ticas, creencias, culturas etc, que convergen en un aula en la que debemos utilizar los mismos mtodos, procesos y tcnicas para trabajar con el alumno. El hallazgo de la optimizacin de los mecanismos para ensear debemos indagarlos en nuestro interior como docentes. El manejo de los diferentes cdigos comunicacionales debe ser un compromiso que nos conduzca a una tarea diaria de aproximacin. A partir de all, la pedagoga comienza a tener sentido. Remitirnos a los conceptos y a la simple retrica acadmica con respecto a ella, menoscaba los argumentos intelectuales y culturales que emergen de la cotidianidad para el logro de una excelente comunicacin docente-alumno. Cuando ellos comprendan, asimilen, digieran lo que se les a querido transmitir, estar, en consecuencia, imponindose la pedagoga; cualquiera sea el mtodo o la tcnica, incluso hasta las ms primitivas Las creencias en el aula Hasta hace algunas dcadas las investigaciones principalmente se basaban en el estudio de los estilos cognitivos y preceptales de los estudiantes. Estas investigaciones, apoyadas en el constructo hipottico de "estilo de aprendizaje", contribuyeron a la comprensin de las diferentes maneras de reaccionar ante el aprendizaje, pero este modelo de teora no ha contribuido realmente a que los estudiantes adquieran caractersticas que favorezcan su aprendizaje. Muchos investigadores piensan que los estilos de aprendizaje, dado que constituyen variables cognitivas o de personalidad, son bastante estables y poco vulnerables al cambio. Otros modelos tericos de adquisicin de lenguas extranjeras atribuyen un papel esencial a las creencias con las cuales el estudiante aborda el proceso de aprendizaje. Al tratarse de variables con un fuerte peso afectivo, los investigadores afirman son fcilmente moldeadas por los contextos sociales y polticos del aprendizaje. Es por ello, que las creencias resultaran ms vulnerables al cambio mediante la intervencin del docente. Si bien este concepto presenta una nueva dimensin para la

    24

  • investigacin, estudio e interpretacin del comportamiento ante el aprendizaje, no resulta todava muy clara su relacin con el concepto de estilo de aprendizaje. No sabemos hasta qu punto las creencias determinan los diferentes estilos o si es la cultura educativa en la cual el estudiante ha estado inmerso que da como resultado creencias que traen aparejados estilos. As como los profesores vamos a clase con un conjunto de creencias sobre la manera cmo se debe ensear un idioma, la forma cmo aprendimos o preferimos aprender, los alumnos abordan el aprendizaje de idiomas con un "paquete de creencias", producto de su personalidad, cultura, socializacin y experiencias educativas como lo sealbamos anteriormente. El concepto de creencias ha sido principalmente investigado desde la perspectiva del profesor y se refiere a las concepciones, opiniones y saberes sobre la enseanza-aprendizaje con las que el profesor aborda el aula y desarrolla su labor. Numerosos autores (Clark y Peterson, 1986; Clandimin 1986; Meijer 1999 y otros, citado en Cambra et al. 2000) han realizado investigaciones sobre las creencias de los profesores y explican: " las creencias se originan y desarrollan en la experiencia y estn determinadas por los contextos educativos; son eclcticas, desorganizadas, parciales y sin cohesin se distinguen del conocimiento cientfico por su carcter subjetivo, popular y temporal. Son personales particulares y especficas contienen elementos conscientes, inconscientes e improvisados" Desde la ptica del constructivismo las creencias de los estudiantes juegan un rol fundamental en la manera como los estudiantes construyen el conocimiento, ya que stas influyen en la atencin y seleccin estmulos e informacin, separando lo que consideran relevante de lo que no y dotndolo de significado. En nuestra opinin, cuando el alumno expresa su estilo de preferencia de aprendizaje emite juicios basados en sus experiencias anteriores de los aspectos que marcaron su manera aprender y determinaron hbitos de aprendizaje. Estas afirmaciones son presentadas con una gran fuerza afectiva y pretenden imponerse como verdades absolutas y generalizables. Estas creencias son producto, entonces, de su cultura de socializacin y experiencias educativas, y conjuntamente con componente personal, determinan formas de aproximacin al aprendizaje o estilos de aprendizaje. Para referirnos a estas fuerzas subjetivas subyacentes pareciera que no existe an consenso terminolgico. Los diferentes autores se refieren a ellas como mini-teoras o teoras personales, concepciones, opiniones, ideas, pensamientos, representaciones, conocimientos o saberes. En este trabajo se utilizar el concepto de "creencias" para referirse a afirmaciones cognitivas, resultado de la cultura de socializacin y escolarizacin del individuo con un fuerte peso afectivo, personal y subjetivo. Estas opiniones, asunciones e interpretaciones sobre la realidad del aprendizaje de lenguas extranjeras conforman "mini-teoras", no necesariamente estructuradas racionalmente en un

    25

  • corpus terico, que actan como filtro que descrimina, redefine y determina la manera de abordar el conocimiento. El estudio y anlisis de las creencias tiene como objetivo entender cmo actan los alumnos y qu factores influyen negativa o positivamente en el logro de los objetivos de aprendizaje. Abraham-Van (1987, citado en Wenden) expresa que todos los estudiantes poseen a nivel consciente una filosofa de cmo se aprende una lengua. Esta filosofa gua la manera de abordar el aprendizaje de idiomas, ello se manifiesta en el uso de estrategias (algunas observables y otras no) para aprender y comunicarse. Flavell (1979, citado en Williams et al.) se refiere a las creencias como "conocimiento metacognitivo", asunciones o preconceptos que los alumnos poseen sobre si mismos, de los factores que influyen en el aprendizaje, de la naturaleza del mismo y de la enseanza. Los psiclogos cognitivos explican que el "conocimiento metacognitivo" es reflejo o producto de la influencia de las creencias sobre el aprendizaje. El conocimiento metacognitivo se refiere a la capacidad que posee el estudiante para reflexionar sobre la forma cmo se aprende, sus saberes y teoras sobre el proceso de aprendizaje, y a partir de ello la utilizacin, regulacin y administracin de estrategias que contribuyen a organizar y planificar el aprendizaje. Si el conocimiento metacognitivo afecta la forma que poseen los estudiantes de abordar el aprendizaje, conocer y analizar aquello que los alumnos piensan, opinan o creen sobre el aprendizaje resulta de suma importancia para comprender las causas de la conducta de los estudiantes. Wenden (1987) expresa que la conciencia metacognitiva es importante para el aprendizaje eficaz y que el uso de estrategias eficaces depende de la conciencia metacognitiva. El conocimiento metacognitivo es definido como "el proceso que subyace en la utilizacin de estrategias y es esencia de la actividad inteligente". Segn esta autora, los estudiantes poseen creencias explcitas relativas a la manera de aprender una lengua y estas creencias afectan la manera de abordar el aprendizaje. Todo proceso educativo es, en ltimas, la realizacin formativa de la persona, de sus aproximaciones al conocimiento y a la cultura, sus valores, convicciones y prcticas sociales, en fin, desarrollo de la personalidad humana en los individuos para constituirles en seres vitales de se poca, superando tradiciones histricas de modelos pedaggicos que supona que educar era un actuar sobre o lo que Not (1998) ha denominado modelos pedaggicos de heteroestructuracin que parten de una accin formativa externa y un sujeto aprendiz pasivo cuya accin de aprendizaje se limita a recibir saberes y prcticas en un cerebro vaci, anmico que debe ser llenado para su funcionalidad adaptativa al medio social. El modelo pedaggico en la actualidad, ms que un actuar sobre supone una enseabilidad que significa ante todo un entenderse con, (interestructuracin) donde la interaccin pedaggica de un yo del maestro con un t del alumno se funda

    26

  • en la accin cooperativa (comunicativa) constructiva del saber y la cultura, para constituirse en un nosotros renovador y humanista; conducente al auto despliegue de las capacidades de las personas en su educabilidad. Las prcticas pedaggicas de los docentes han sido objeto de estudio por investigadores del campo de la educacin. Se requiere que los estudiantes universitarios tengan, adems de su capacidad tradicional enfrentar la prctica profesional, una requerida vocacin por la teora en la que puedan mirar el aula. Ha sido una tendencia internacional en investigacin educativa tomar como referente el trabajo del docente para procurar su cualificacin, tras un previo conocimiento de lo que efectivamente se lleva a cabo en la prctica. Esta tendencia se da cuenta de la urgencia de volver sobre los temas pedaggicos entendiendo por stos, principalmente, la verificacin pedaggica de las teoras de la enseanza desde: atributos de clases efectivas, espacio, uso de tiempo en varias actividades, organizacin, planeacin de lecciones, organizacin y manejo del saln de clases, manejo de conductas perturbadoras, instruccin y solucin de problemas. Las creencias que tienen los maestros de su accin docente es su aporte valioso para la investigacin ya que estas pueden considerarse factor de transformacin en los procesos de calidad y aprendizaje, acciones y proyectos, con el fin de facilitar y ejecutar programas de innovacin en la educacin superior. Para la investigacin educativa; el termino creencias surge de la investigacin educativa como una estrategia para poder comprender e interpretar las acciones de los docentes, las cuales permiten explicitar lo que tradicionalmente se ha mantenido implcito con una primera intencin de desarrollar estrategias conducentes a renovar las creencias y lograr cambios duraderos de fondo en la educacin. Las investigaciones sobre las creencias de los maestros indican que para que el cambio sea efectivo y repercuta en las prcticas de enseanza tienen que: Partir de cmo el maestro concibe su propia prctica, llevar al maestro a un anlisis crtico de su prctica, que sea participe en la toma de decisiones y en la implementacin del cambio, responder al contexto y necesidades particulares del maestro y los alumnos. Los futuros (as) formadores estn en la posibilidad de construir significados desde su propia experiencia superando barreras cognitivas y epistemolgicas, relacionndose con una diversidad de propuestas y de experiencias. La actitud parece tornarse hacia una apertura a nuevas formas de desenvolverse en el aula, la tendencia de las creencias , lleva a pensar que la competencia docente es un aprender sobre la marcha y que no se requiere una formacin previa en pedagoga o didctica para desempearse como profesor de una disciplina, es decir, que con el conocimiento de los contenidos de cada profesin es suficiente para realizar la

    27

  • actividad docente; fenmeno que presenta con reiterada presencia en el mbito de la docencia universitaria. 15 Partiendo de estas creencias es necesario tomar en cuenta las disciplinas: Una disciplina, segn Rafael Florez es: una categora organizadora dentro del conocimiento cientfico; por ms que est inserta en un conjunto cientfico ms amplio, una disciplina tiende, naturalmente, a la autonoma por medio a la delimitacin de sus fronteras, por el lenguaje que se da a s misma, por las tcnicas que tiene que elaborar, y eventualmente por las teoras propias De tal forma debemos de enfatizar sobre las creencias enlazndolo directamente con la interdisciplinariedad como ejercicio profesional, pero, a que nos referimos en si con la interdisciplinariedad; la interdisciplinariedad no es la negacin de las disciplinas, tampoco es un saco para amontonar conocimientos de diferentes reas, quien no domina una disciplina no puede ser un acadmico interdisciplinario, pues la interdisciplinariedad no es un escudo para mercadear la ignorancia. Tampoco puede investigar interdisciplinariamente quien no pueda investigar en alguna disciplina particular. Cuando hablamos de interdisciplinariedad en las ciencias humanas no estamos hablando de lo imposible. Al contrario, cada aspecto de la realidad humana, objeto de estudio de cada disciplina es inseparable de los dems aspectos que constituyen en su conjunto la complejidad del ser humano como totalidad. As, no es posible entender plenamente una dificultad de un alumno para aprender las matemticas si el pedagogo ignora los prejuicios y condicionamientos sico-socio-culturales del alumno respecto de las matemticas, si desconoce la historia de la enseanza de las matemticas, si ignora las motivaciones y expectativas del alumno respecto a su realizacin y desarrollo personal y profesional. Para Gibbons (2001) existen dos modos de produccin de conocimientos que corresponden a dos tipos de interdisciplinariedad: el Modo 1 es el convencional, siguiendo las normas del paradigma vigente en cada disciplina, permite la actividad interdiscisciplinaria mediante la reunin de especialistas que trabajan en grupos institucional y jerrquicamente organizados, cada uno desde su punto de vista disciplinar y bajo las condiciones y canales de acumulacin y de comunicacin institucionales que caracterizan cada comunidad acadmica. Aunque se ocupen del estudio de un problema comn, la mirada de cada investigador est dirigida por su formacin profesional particular.

    15 Itinerario Educativo Revista de la Facultad de Educacin Nmero 48, UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA Editorial Bonaventuriana, Bogot, D.C., Colombia, JULIO- DICIEMBRE de 2006 Ao XX, Pg.152, 153, 198, 199, 204, 213, 214.

    28

  • Mientras que el Modo 2 de produccin de conocimiento se realiza desde el contexto de aplicacin, y desde este contexto especfico y transitorio se construyen las formas de trabajo y las categoras conceptuales. Aunque los investigadores aportan sus experiencias y habilidades, los equipos de trabajo son amplios, horizontales, temporales y heterogneos y el conocimiento que producen como fruto de una intensa interaccin no se subordina a ninguna disciplina acadmica sino a la utilidad social, en la solucin de algn problema ambiental o de salud. Ms all de una actividad interdisciplinaria, se trata ms bien de una produccin transdisciplinaria, sin fronteras ni barreras, como una produccin posmoderna. Ahora bien, en vez de definir modos de produccin de conocimientos como han hecho los epistemlogos desde Tomas Kuhn, preferimos describir cules son los niveles en que la pedagoga puede realizar investigacin interdisciplinaria: Existe un primer nivel, un primer grado de interdisciplinariedad relacionado con el problema que se va a investigar. En el caso del fracaso en el aprendizaje de las matemticas, cuantos campos disciplinares quedaron insertos en este estudio, configuran entre todos una zona comn de indagacin sobre el mismo objeto, una zona de interpretacin complementaria en la que confluyen e intersectan los diferentes puntos de vista disciplinares sobre la misma situacin o experiencia de fracaso escolar. He aqu un primer nivel de interdisciplinariedad ilustrada por el nuevo conocimiento que generara la sntesis interdisciplinar de los diferentes puntos de vista en juego sobre la misma realidad humana, dificultades en el aprendizaje de las matemticas. Un segundo nivel de interdisciplinariedad se genera cuando los investigadores de distintas disciplinas se despojan de su aparataje terico para confluir en el abordaje o solucin de un problema investigativo desde un enfoque metodolgico compartido por todos los investigadores con el propsito de construir el objeto de estudio con categoras y conceptos extrados por los investigadores inmersos en la misma realidad que estn estudiando. Como los investigadores estn armados del mismo enfoque metodolgico e instrumentos similares para captar y construir la realidad, ello les permite desarrollar una actividad de conocimiento interdisciplinar. Es lo que ocurre cuando un psiclogo, un socilogo, un antroplogo y un lingista son convocados a un estudio hermenutico para evaluar la calidad acadmica de una facultad de Educacin, por ejemplo. Un tercer nivel de interdisciplinariedad inducida por la condicin postmoderna rompe con los moldes de las disciplinas, se desestructuran los campos y desaparecen los lmites disciplinares generando nuevos territorios y nuevos mtodos sin las normas convencionales, se amplan los contextos, los intereses se pluralizan, desaparecen los cdigos y los principios regulativos, se configuran nuevos modos hbridos de produccin de conocimiento alrededor del contexto de aplicacin en que se indaga, generndose una produccin de conocimiento transdisciplinaria, no

    29

  • jerarquizada, heterognea y provisional y aplicada a un problema especfico irrepetible.16 La posibilidad de tal transformacin se asocia a la necesidad de modificar, adems de los aspectos curriculares, la organizacin y los modos de gestin. Es importante sealar un rasgo novedoso en esta propuesta de cambio: hasta el momento las estrategias se orientaron a la innovacin curricular, a la formacin docente, a la asistencia de los alumnos, prescindiendo, siempre, del contexto institucional escolar. Ahora, por el contrario, se vuelve la mirada al establecimiento como modelo organizacional, buscando fortalecer y restablecer la responsabilidad institucional por los resultados de la accin educativa. Llevar la atencin hacia la organizacin supone abrir un interesante espacio de reflexin, que permite ubicar a la escuela en la articulacin con el todo social y el sistema educativo, identificando sus mutuas influencias y condicionamientos, considerando las prcticas pedaggicas como prcticas sociales institucionalizadas. En verdad, los enfoques que han primado, en los anteriores ensayos de reforma, han soslayado la dinmica organizativa de las prcticas educativas, percibiendo a los sujetos como componentes que operan individualmente. La propuesta de contextualizar la educacin, por el contrario, implica reconocer que lo social, lo poltico y lo econmico operan como factores condicionantes de las prcticas pedaggicas; que el proceso de enseanza aprendizaje no se da en un vaco social, sino que entraa una situacin de interaccin enmarcada por una multiplicidad de factores, entre los que se incluyen y articulan las historias personales y sociales de los alumnos, de los docentes y de la institucin; y que es a partir de la dinmica de la organizacin donde se materializa el proyecto educativo. Cualquiera sean las caractersticas de las reformas que se proponen sus consecuencias suponen siempre una conversin del personal que se halla involucrado. En esta nueva propuesta, el docente adquiere un papel fundamental en el proceso de mediacin de los saberes y los conocimientos, en tanto se constituye en el responsable de adecuar el proyecto a la realidad de su escuela y de su aula. El maestro se convierte en un agente activo y decisor, traductor y mediatizador de las prescripciones curriculares en su accionar dentro del aula. Por lo tanto, su desempeo profesional debe acomodarse a la nueva situacin que se presenta. En las actuales circunstancias se plantea la descentralizacin de las decisiones curriculares y la reestructuracin del poder, de la autonoma profesional y de los sistemas de control. Estos son aspectos que deben ser tenidos en cuenta cuando se trata de considerar el tema de la implementacin de los cambios en educacin: slo ser posible alcanzar

    16 FLREZ, Ochoa Rafael, INTERDISCIPLINARIEDAD E INVESTIGACIN FORMATIVA EN LA FORMACIN DE PROFESORES, Primer encuentro de facultades de educacin (La interdisciplinariedad en la formacin docente como eje de la investigacin formativa) UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA 21 y 22 de Octubre de 2005.

    30

  • satisfactoriamente los objetivos si, a la vez, se modifica la situacin laboral de los docentes y se presta atencin a las exigencias reales de medios, condiciones previas, procedimientos necesarios, resistencias y tiempos de realizacin que requieren cada uno de los principios planteados. Los cambios pedaggicos no se producen ni por simple voluntarismo de los docentes identificados con ciertos principios, ni por la buena intencin de los planificadores del sistema educativo; implican estrategias de largo alcance y accin continua, y clarificacin de los medios, y los modos de llevar adelante estas innovaciones. La pedagoga y la comunicacin han logrado una ubicacin destacada dentro de la sociedad, a tal punto que resulta imposible pensar la una sin la otra. Con la mediacin del lenguaje el hombre ha ido asegurando el intercambio simblico y la coordinacin de un sin nmero de acciones humanas, en las que ha sido posible configurar mltiples horizontes de sentido. Si los procesos pedaggicos son reconocidos como procesos de comunicacin, entonces, se considera pertinente pensar en las implicaciones y en la construccin de sentido que tiene la comunicacin que circula en ambientes diferentes al escolar, particularmente la proveniente de los medios. Hoy, no se pueden perder de vista las grandes transformaciones en el mbito de lo comunicativo y de lo informativo, las cuales han de ser analizadas e interpretadas en las instituciones educativas, con el propsito de generar una nueva actitud, una nueva forma de ver, de sentir y de relacionar con el propsito de configurar una pedagoga de la imagen, que junto con los desarrollos de la pedagoga del lenguaje verbal, constituya una hacer pedaggico interactivo, dinmico y gil, capaz de incorporar las nuevas formas de percibir la realidad que el mundo actual nos ofrece. De lo contrario, al aumento de la brecha en lo econmico, en los pases del tercer mundo, le adicionamos la brecha en lo simblico que nos pondr ms al margen de los desarrollos del pensamiento y del conocimiento.17 As mismo existen diversas aproximaciones de diferentes autores sobre creencia en la que se destaca: Rockeach (1968) para quin la creencia es una oposicin simple, conciente o inconsciente, inferida de lo que una persona dice o hace, capaz de ser precedida por al frase yo creo que 18Bauch (1994) afirma que una creencia es La informacin que tiene una persona enlazando un objeto con algn atributo esperado, la creencia esta normalmente en interrelacin con una dimensin de probabilidad subjetiva o conocimiento19Dewey (1989) La creencia realiza una afirmacin acerca de una cuestin de hecho, de un principio o una ley, abarca todas las cuestiones sobre las cuales no disponemos de un conocimiento seguro, pero en las que confiamos lo suficiente como para actuar

    17 Ponencia presentada en el I Encuentro Nacional sobre Alfabetizacin Visual 2000 Lectura y lectores de pantallas. 13 Feria del Libro de Bogot 18 Rockeach (1968) la investigacin de la enseanza, citado en Gallego Pagina 297 19 Bauch (1994) la investigacin de la enseanza, citado en Gallego Pagina 298-299

    31

  • de acuerdo con ellas, y tambin cuestiones que ahora aceptamos como indudablemente verdaderas, como conocimiento pero que pueden ser cuestionada en el futuro. Se trata de una idea que la persona a heredado de otros y que acepta por que es una idea comn, pero no por que haya examinado la cuestin, no por que su mente haya tomado una parte activa en el logro y plasmacin de la creencia20. Para concluir cabe aclarar que este paso permiti la comprensin de los textos analizados dentro de los cuales fue posible identificar las ideas y los hilos conductores que relacionan la pedagoga y las creencias que tienen los docentes en su quehacer. PEDAGOGA CRTICA Durante el pasado mes de septiembre, Michael Apple y Peter McLaren, dos de los ms importantes representantes de la Pedagoga Crtica norteamericana, participaron en el VI Congreso Internacional de Investigacin en Educacin Pedaggica organizado por el IDEP en la ciudad de Bogot. Eleducador.com tuvo la oportunidad de hablar con ellos y estos fueron algunos de los temas desarrollados: Pedagoga crtica, investigacin y capitalismo La pedagoga crtica es una propuesta de enseanza que intenta ayudar a los estudiantes a cuestionar y desafiar la dominacin, creencias y prcticas que la generan. Tambin se puede definir como una teora y prctica en la que los estudiantes alcanzan una conciencia crtica. En palabras de McLaren, la pedagoga crtica crea en los estudiantes la posibilidad de adquirir nuevos lenguajes y entender la vida diaria. Para ellos, la construccin de una pedagoga crtica, aunque resulta difcil de establecer, debe considerarse como el mtodo ms efectivo para lograr ciudadanos con pensamiento crtico y forjadores de una democracia real motivados a construir una sociedad ms justa. As mismo, sus crticas ms duras se dirigen al sistema econmico y poltico que influyen de manera negativa en la educacin de su pas. Segn McLaren, existen diferentes enfoques de pedagoga crtica, entre ellos, feminista, radical, humanista, descolonizador y revolucionario, este ltimo con el que se siente identificado gracias a la tendencia socialista que pregona. Asegura adems, que la pedagoga crtica debe ser plural, nunca neutral, es decir, se est a favor o en contra del capitalismo. Para l, la pedagoga revolucionaria es un trmino que abarca todos los aspectos precisos para una mejor educacin. Para estos dos pedagogos, es importante entender el papel de la pedagoga crtica en un mundo que se encuentra golpeado por Estados Unidos y el militarismo. Adems, afirman que las fallas del 20 Dewey (1989) la investigacin de la enseanza, citado en Gallego Pagina 299

    32

    http://www.idep.edu.co/

  • sistema educativo actual se desprenden del campo econmico, poltico y social que rige en la mayora de pases. Apple asegura que la educacin es poltica en distintas formas, y para explicarlas enumera seis puntos: 1) acta como un dispositivo de clasificacin (depende de dnde vivas, el contexto), 2) los colegios reproducen las diferencias de clase y de raza, 3) para que haya un conocimiento oficial se deja de lado lo popular, 4) histricamente el currculo oculto refuerza las identidades de clase, 5]) dinero y poder y 6) la poltica de la voz. Aclara que en Estados Unidos existen 22 cuerpos polticamente dispuestos, como una especie de concejo, que deciden cules libros de texto escolar se pueden usar y cules no. Eso quiere decir que el estado es quien regula lo que est incluido dentro del conocimiento oficial y la vida cultural. En el mbito econmico ambos autores se muestran resistentes al sistema capitalista; segn McLaren si aumenta el capitalismo, las posibilidades de ser subjetivos y crticos disminuye, lo que implica seguir bajo un grupo dominante que no le interesa una educacin de calidad para las clases menos favorecidas. Apple ejemplifica la relacin de la economa con la educacin a travs de las prcticas neoliberales que ven a las escuelas conectadas a un mercado global capitalista en donde necesitan ser transformadas y competitivas, afirma que las escuelas se asemejan a las fbricas. Luego explica que el capitalismo no ha cambiado su cortejo con el imperialismo; por tanto lo califica como un sistema sin alma, sin humanidad y que no est al servicio de la comunidad sino de la rentabilidad. Por otra parte, Apple hace una fuerte crtica a los neo conservadores quienes pretenden dominar al maestro a travs de un conocimiento legitimo. Es decir, un conocimiento oficial que slo emite valores y creencias que le convienen a la clase dominante y que, por supuesto, deja de lado el conocimiento popular que es imprescindible en la educacin. Esta serie de afirmaciones inciden en el mbito social porque no dan rienda suelta al multiculturalismo. McLaren asegura que el conocimiento puede y debe ser auto reflexivo en el cual maestros y estudiantes pueden intervenir. En el libro Escuelas Democrticas Michael Apple testifica la existencia de 4 escuelas que estn logrando una verdadera educacin democrtica. Entre ellas, nombra el caso de una escuela de Porto Alegre (Brasil) en donde una alianza de activistas de clase media cre un currculo antirracial y multicultural. Para redefinir la educacin, McLaren sugiere una economa que favorezca lo local, no se puede negar la posibilidad de las utopas concretas de lo que el mundo debera ser, as como afirma Freire, la educacin, en verdad, necesita tanto de formacin tcnica, cientfica y personal como de sueos y utopas. Los docentes tienen que tomar accin directa, no quedarse pasivos ante la posibilidad de una nueva educacin, resulta indispensable volverse crtico, subjetivo y aprender de los estudiantes.

    33

  • Las escuelas tambin tienen que ensear valores, cmo ser ciudadanos crticos y reducir un conocimiento factual con unas pruebas objetivas. McLaren distingue 4 relaciones que deben tener presente los docentes: 1) el individuo y su actividad productiva, 2) el individuo y el producto de esa actividad productiva, 3) el individuo y otras personas (sus propios intereses) y 4) el individuo y la especie (lo que significa ser humano). Apple propone 4 reglas para la investigacin crtica: Decir la verdad. El maestro debe tomar conciencia de lo que est pasando en la educacin, debe entender que en el mundo actual la educacin reproduce la inequidad. Iluminar los espacios de accin. Los maestros estn llamados no slo a denunciar lo negativo sino a generar espacios de discusin y dilogo en los que se tenga en cuenta la clase trabajadora. Definicin de la investigacin, los docentes deberan actuar como secretarios de los movimientos sociales. Mantener las tradiciones de pensamiento, reconstruir la memoria; la tarea de la investigacin crtica es contar las historias. Finalmente en su libro Como Dios manda. Mercados, niveles, religin y desigualdad, expresa la importancia de retomar la perspectiva de raza como elemento central de anlisis de la poltica educativa entendida como una construccin, un conjunto de relaciones enteramente sociales ; as mismo, considera que es importante hacer pblicos los desafos actuales, y para ello los medios de comunicacin y la red se convierten en vehculos eficaces para dar a conocer el trabajo realizado desde la pedagoga crtica, lo que permitira el aporte de soluciones y alternativas a la situacin de la educacin. CURRCULO Apple apoya algunos aspectos de la escuela humanista en donde los nios son activos y reciben un trato muy cordial por parte de los maestros quienes practican el dialogo pero no necesariamente con sentido critico. Por esa razn se convierte en un currculo dbil con dificultades para manejar los problemas de la poltica en cuanto a las relaciones de clase y de gnero y adems, no est relacionado orgnicamente a los movimientos sociales que estn tratando de transformar la educacin. Estoy de acuerdo con un currculo activo, tenemos que or la voz de los estudiantes y mantener dilogos a diferencia de los currculos basados en los puntajes; cuando

    34

    http://www.eleducador.com/pragma/documenta/documentos/84754/informacion/index.html#_ftn2#_ftn2

  • hay educacin humanista en las escuelas de clase trabajadora hay muchos ms aspectos que evaluar como la cooperacin, el dialogo con los otros, y el hacer pblico lo personal21. Del mismo modo, Apple asegura que se necesita una pedagoga crtica, un currculo ms reflexivo, debe existir un proceso crtico democrtico donde participen los ms pobres. El estado tendra que aprender lo qu pasa arriba y lo que pasa abajo, el currculo debe estar conectado con lo local de manera muy poderosa y que las finalidades siempre estn sujetas a una revisin crtica a escala local y nacional, eso es lo que ms se acerca al proceso acertado para la redefinicin de la escuela.

    5.5. CREENCIA Y SU RELACIN CON LA PEDAGOGA II

    Elaborado por Luisa Fernanda Forero Guerrero,

    Leidy Pineda Ovalle y Nubia Carolina Riao

    La importancia de conocer la relacin existente ente creencia y pedagoga radica en que las creencias influyen en la forma en que se aprende, se ensea y se aplica en los diferentes saberes; a su vez, la forma de aprender y utilizar los saberes configura las creencias. Aunque las creencias y pedagoga forman un crculo que a veces es difcil de romper, se puede intentar quebrar por algn lado: se ha constatado que los cambios en las prcticas de la clase pueden modificar las creencias tanto del profesorado como del alumnado. Segn E. Pehkonen y G. Torner (1996) las creencias pueden tener un poderoso impacto en la forma en que los alumnos aprenden y utilizan los saberes y, por tanto, pueden ser un obstculo al aprendizaje. Los alumnos que tienen unas creencias rgidas y negativas de su aprendizaje, as fcilmente se convertirn en aprendices pasivos, que cuando aprenden enfatizan la memoria sobre la comprensin. Por tanto es de vital importancia saber que estas creencias en los (as) estudiantes son entendidas como su visin de sus conocimientos, surgen a partir de sus: motivaciones, experiencias, conocimientos y necesidades como estudiante. Sin embargo, la motivacin y las necesidades de un alumno no siempre estn conectadas con sus creencias. Estas creencias se comparten de forma ms o menos explcita en distintos mbitos de socializacin, adems de la escuela: en la familia, en los grupos de iguales, entre los compaeros, en los medios de comunicacin social, etc. En estos espacios las creencias dominantes desde el punto de vista de su frecuencia o de su centralidad psicolgica, pueden entrar en conflicto con otras.

    21 Como Dios manda. Mercados, niveles, religin y desigualdad,Apple

    35

  • Dicho esto las creencias juegan un papel de indicador de aspectos que no son directamente observables. En el caso del alumnado, nos permiten, por ejemplo, hacer inferencias sobre su experiencia escolar anterior de enseanza/aprendizaje. Por tanto si se quieren introducir cambios profundos en la las distintas cases dirigidas a el alumnado se ha de tener en cuenta pues que las creencias de profesores y alumnos actan como una fuerza de inercia. Jos Ortega y Gasset Es una idea, y se convierte en creencia por el modo afectivo de concebirla, en su origen la creencia es una creacin de la mente y tienen una relacin con la realidad, realidad se ofrece a los individuos en una gran variedad de perspectivas singulares. Cada una de ellas es una forma de realidad y, al mismo tiempo, forma una posibilidad de conocimiento de lo real. Una perspectiva supone siempre la combinacin de un nivel ontolgico y epistemolgico y la realidad equivaldra a la suma de las perspectivas posibles en que se presenta y segn las que puede analizarse. Siguiendo la formulacin de creencia de Ortega y Gasset, dice La creencia es certidumbre en que nos encontramos, sin saber como ni por donde hemos entrado en ella.... No llegamos a ellas tras una faena de entendimiento, sino que operan ya en nuestro fondo cuando nos ponemos a pensar sobre algo22 Ortega nos dice que las creencias son los supuestos bsicos de nuestras argumentaciones y de nuestra conducta, es decir que de ellas se derivan la gran mayora de pensamientos estructurados que luego pasan a ser ideas y de esta manera que las creencias son el inicio de nuestras acciones y lo que las rige y estas nunca desaparecen de la vida de cada sujeto sino que por el contrario son las que integran y conforman su mundo.

    En Ortega la creencia y lo vital se convierte en un primer principio de su filosofa, pues el fundamento de todo es la vida como realidad radical, la cual consiste en un quehacer y ste se hace posible, debido a las creencias. Los textos que confirman estas afirmaciones son abundantes en la obra de Ortega. El siguiente puede servir de sntesis, por tal motivo la creencia segn este personaje no slo se reduce a hacer posible el quehacer, sino que, al consistir ese quehacer en un contar con las cosas, este contar con es una forma de conocimiento.

    Debido a las creencias, las cosas con las que contamos en nuestro quehacer, adquieren una forma determinada y un sentido, hacindose de esta manera posible para nosotros. No debe olvidarse que la forma de realidad del mundo exterior, es una realidad bsicamente lo creencial y esto es una forma de conocimiento; conocimiento que se podra llamar tambin creencial, que difiere en su funcionamiento del 22 ORTEGA Y GASSET, J.: 1976, Ideas y creencias. 8a Coleccin Austral, Edicin

    36

  • conocimiento formal estrictamente racional o el de las ideas. Por consiguiente en este sentido saber y creer son cosas diferentes.

    Este es un proceso que se ve de manera permanente en el aula, en la docencia, como tal, ya que el docente siempre parte desde supuestos que luego l indaga para comprobar si estos son de utilidad en su que hacer cotidiano, las creencias son la realidad intelectual en la que vivimos; contamos con ellas y no sentimos la necesidad de formularlas explcitamente ni defenderlas.

    Hume

    Es as, que el conocimiento de los hechos es imposible, aunque admita que en la prctica las personas tienen que pensar en trminos de causa y efecto, y que deben asumir la validez de sus percepciones para no enloquecer. Tambin admita la posibilidad de conocimiento sobre las relaciones entre las ideas, como las relaciones entre los nmeros en matemticas. Su escptico planteamiento tambin negaba la existencia de la sustancia espiritual defendida por Berkeley y de la sustancia material defendida por Locke. Yendo an ms lejos, Hume negaba la existencia de una identidad del yo, argumentando que como las personas no tienen una percepcin constante de s mismas como entidades diferentes, no son ms que un conjunto o coleccin de diferentes percepciones

    La creencia, segn Hume, es una idea fuerte y vivaz, derivada de una impresin presente relacionada y asociada con ella. Propiamente es un sentimiento natural, no sometido al poder del entendimiento. Este sentimiento nace de una situacin particular en que la mente se halla. Como sentimiento no puede ser definido, pero puede ser descrito como una concepcin ms viva, ms intensa y fuerte que la que acompaa las puras funciones de la imaginacin.La creencia, por tanto, se debe a una mayor vivacidad y fuerza de las impresiones. Hume, por esta razn, nos habla de idea vivaz: ...la impresin presente... puede infundir vivacidad a la idea y, consiguientemente, producir la creencia o asentimiento9 e igualmente nos define la creencia como una idea fuerte y vivaz. Sentimiento e idea son los conceptos que entran en la definicin que Hume da de la creencia. Aunque tericamente son dos conceptos distintos, pues la idea pertenece a la esfera racional mientras que el sentimiento se ubica ms bien en lo afectivo, sin embargo, cuando Hume habla de las creencias, no se trata de cualquier idea. Para l toda idea es una plida copia o representacin de las cosas. Este tipo comn de idea no podra convertirse en creencia, pues para ello se requiere, como se ha indicado anteriormente, fuerza y vivacidad en la idea, infundida en una situacin particular de una impresin presente. Esta fuerza y vivacidad en la prctica hace que la idea se confunda con un sentimiento.

    37

  • A pesar de la diferencia que establecen tanto Hume como Ortega entre idea y creencia, en cambio, para los dos viene siendo lo mismo en cuanto a su origen y contenido. Ambos admiten que idea y creencia son representaciones e interpretaciones de la realidad y para ambos la creencia genticamente es una idea, la cual para Hume se convierte en creencia por el modo afectivo de concebirla. En Ortega, para que una idea llegue a ser creencia necesita un largo proceso de consolidacin. Tanto para Hume como para Ortega, en su origen la creencia es una creacin de la mente. Tienen una relacin con la realidad: para Hume una creencia representa la realidad, mientras que para Ortega de hecho la creencia es nuestra realidad, dndose as una mayor identificacin con ella. Hay un elemento comn de gran importancia en Ortega y Hume con respecto a la creencia: para los dos la creencia es una forma de conocimiento, que tiene como finalidad darle un sentido gnoseolgico al mundo exterior. Hume interpreta la creencia estrictamente dentro del orden epistemolgico. Segn el profesor Rbade, dicha interpretacin humeana de la creencia hay que entenderla no como un dinamismo apririco o espontneo de nuestro conocer. Es una situacin de asentamiento sensitivo que resulta de un largo proceso acumulativo de la experiencia, canalizado a travs de la asociacin causal y de la costumbre. Una idea, una impresin y la relacin estrecha entre ambos constituyen los elementos de una creencia. En cambio, para Ortega la creencia es lo que hace posible el quehacer vital. Genticamente la creencia surge como resultado de una situacin trgica del hombre, es una situacin de naufragio. El hombre se encuentra frente a una realidad que es un caos, un enigma, a la que por necesidad de sobrevivencia tiene que darle un sentido, un orden, es decir, una interpretacin. Para ello el hombre parte de unas convicciones bsicas, en las que se encuentra desde que es arrojado a la vida. Estas convicciones son las creencias, que constituyen el suelo y el estrato de su vida. Creencias que l personalmente no las crea, sino que se encuentra con ellas y dentro de ellas se mueve, vive y es. En Ortega no es la relacin causal la fuente de la creencia, como lo es en Hume, sino la situacin vital del hombre. Son dos planos distintos en los que se hace una interpretacin distinta de la creencia en ambos filsofos. Dentro de estas diferencias fundamentales, que separan filosficamente a ambos pensadores, se tiene que entender las coincidencias y discrepancias sobre los conceptos de creencia en Ortega y Hume. Mientras en Hume la razn se supedita a la experiencia como fuente de todo conocimiento y en ella obtiene su certeza o probabilidad, en Ortega la razn se supedita a la vida. En Hume toda clase de conocimiento hay que ensamblarlo en el marco de la experiencia. En Ortega todo conocimiento hay que ensamblarlo en la plataforma de la vida. Dado que ortega define las creencias como convicciones, que no siempre son conscientes, con las que contamos y las que nos permiten actuar y movernos dentro del mundo, l ser tomado como referencia de nuestra investigacin, ya que en el aula

    38

  • los docentes realizan su ejercicio desde la percepcin que cada uno tiene de la educacin y la pedagoga segn su propia experiencia. Para cada docente la idea primaria de docencia no es la misma y de acuerdo a ella es que idealizan su ejercicio. Estas creencias influyen en la docencia segn la importancia que le sea dada por el sujeto que la construye en su pensamiento, si esta creencia tiene un significado importante en un sujeto, l pasa a hacerla parte de sus pensamientos de una manera ms concreta y estructurada. Teniendo en cuenta que las creencias no pertenecen nicamente a un mbito religioso asumimos as mismo que stas hacen parte de la cotidianidad en las aulas de clase, no solamente tomando al docente como sujeto, sino tambin al educando, siendo juntos parte de un proceso pedaggico continuo en el que en cada momento les surgen nuevos interrogantes acerca de la realidad en la que estn presentes. Ortega nos dice que las creencias son los supuestos bsicos de nuestras argumentaciones y de nuestra conducta, es decir que de ellas se derivan la gran mayora de pensamientos estructurados que luego pasan a ser ideas y de esta manera que las creencias son el inicio de nuestras acciones y lo que las rige y estas nunca desaparecen de la vida de cada sujeto sino que por el contrario son las que integran y conforman su mundo. Para ortega las ideas y las creencias se encuentran siempre en un carril paralelo en el que una apoya a la otra. Es decir que de los pensamientos ms simples se pasa a los ms estructurados, de lo emprico a lo cientfico. Este es un proceso que se ve de manera permanente en el aula, en la docencia, como tal, ya que el docente siempre parte desde supuestos que luego l indaga para comprobar si estos son de utilidad en su que hacer cotidiano, las creencias son la realidad intelectual en la que vivimos; contamos con ellas y no sentimos la necesidad de formularlas explcitamente ni defenderlas.

    39